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  • Autor
  • Año de publicación 2019
  • Idioma Español
  • Publicado por Universidad del Valle, Centro de Estudios de Género, Mujer y Sociedad
Citación recomendada (normas APA)
Martha Patricia Meza, "Poemas", -:Universidad del Valle, Centro de Estudios de Género, Mujer y Sociedad, 2019. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3716404/), el día 2025-07-09.

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Imagen de apoyo de  Lengua rosa afuera, gata ciega

Lengua rosa afuera, gata ciega

Por: María Paz Guerrero | Fecha: 2022

Himpar editores inaugura su colección de poesía con el nuevo libro de María Paz Guerrero, una de las voces más audaces de la poesía colombiana contemporánea. Este libro no es la excepción a las búsquedas de Guerrero: es experimental, está lleno de humor desgarrador y combina la exploración de lo animal con el habla popular y la materialidad de la carne y la lengua.    "Además todos tenemos miedo    de que el examen diga    por la misma frialdad que tú me das    metástasis    te repetiste    como las stories de tus conocidos    por el feed de tu muro    que me hace de ansiedad enloquecer    un basurero    una brisa glacial    de bolsas y bolsas en cada anochecer y bolsas bolsas    bolsas un resplandor bolsas de plástico sin luz ni fuego [...]" .
  • Temas:
  • Poesía

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Lengua rosa afuera, gata ciega

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Imagen de apoyo de  Boletín Militar: órgano del Ministerio de Guerra y del Ejército - Año VI Serie III Tomo I N. 17

Boletín Militar: órgano del Ministerio de Guerra y del Ejército - Año VI Serie III Tomo I N. 17

Por: | Fecha: 26/04/1902

ERIE I!I-70.Jf() I flircctor ad h norcm F. J. VA.,RGARA ~ l. uut.:Nl dt.- Jn •-·llic:ro Licmuro de v riu S c1~d11d i •uUfi,·ot. ____::::;::::;;~ O fi e i a 1 - - DECRE fER 2 r Dl~ .. 1 02 AflRIL 9) por el cual e aceptan una r nuncia y .t; celar n in u · i lente uno s nombra­miento El ví"ct"jll·esirünt~ e 1 Rt'jJiíbhca, t.J/Cargado dd Por/, 1 Ji;j e ulr ·o, l>J!CR ,. se y pu blíq u e ogotá á d 1902. J UEL I\1 El iinistro de uerra, 1 RlS !DE ,. RNJ\• ~oBZ TO.fO 1- 3 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Militar de Colombia '- 514 _J ECRETO NUMERO 626 E 1902 (A RlL 9) por el cual se hacen unos nombramientos .El T'"'icepreúdenle de la RepiÍblica, encargado dtl Poder .Ejecutivo, DRCRXTA Artícul único. l ácen e lo iguientes nombramiento para la ección 5.1\ del ini terio de Guerra : Pa1 a re . Lui E. González José Joaquín Gonzá- Jez Tomá Hurtado ixto Duart , Juan ya, Jo é A. Reyes, Dio­nisia Buitra o, Ignacio Cla ijo icolás Montoya alustiano u­tiérrez, erardo árdenas, ] a uín Pulido T., lv!arco A. abecha, Ramón Enci o, íctor . f n ca Alejandro Díaz M., Juan Rodríguez dro a tañeda, rmenegildo il"a, ntonio Cama-ho, I aac armi nto, Ricardo uñoz, I idoro Vargas, Joselín E. Pardo amilo andón, Dem trio Mart(nez ., Bernardo Cadena icardo R~año .. lpiano Gue ara y evero onzález. \../Omunfquese y publíque Dado en Bogotá á 9 de bril de rgo2. JO E A UEL RROQUI E1 Ministro de uerra, ARISTTDEs FERNJ(:NDE& DECRETO U E O 638 DE 1902 (ABRIL 15) or e l cual e hace un non1bramicnto El Vlupresiden/e de la Repúbh'ca encargado del .Poder Ejecutivo, EC ET.A t·t{ ulo único. ómbrase yudante farmaceuta del Dr. To-má arzón, l{édi o d 1 Ej r ito que comanda el G neral Ramón onzálcz Val ncia al r. amón González a imilado á Teniente ra los efecto fi cal Comuní uese y pu líquese. Dado en Bogotá á 15 de Abril de xgo2. J E M UEL MARROQUI El Mini tro de Guerra, ARI lJDE(FERN.ÁNDEZ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Milita¡· de Colombia '- 515-' DECRETO "{Th¡fERO 639 Dl! rgo2 (ABRIL 1 5) el cual e confiere un ascenso y se dispone la organizaci6n de una Divisi6e .El Vi'ceprtsidenle de la Repúblz'ca, tncargado del Poder .E.fecuttvo, DXCRETA Art. I. 0 Asciéndese á General de División al de Brigada Sr. ancisco Camacho B., y autorízasele para organizar una División la Provincia de Oriente del Departamento de Boyacá, de la al será él su Comandante general. §. Dése cuenta de este ascenso al Honorable Senado en sus óxima sesiones, para los efectos constitucionales. Art. 2.0 ómbrase Jefe de E tado 1v1ayor de la expresada tvi ión al General Gregorio Beltrán. Art. 3. 0 Autorízase al Comandante general de la misma Di­i6n para hacer los nombramientos de Jefes y Oficiales some­. ndolos á la aprobación del Ministerio de Guerra. Comuníquese y publíquese. Dado en Bogotá, á 15 de bril de 1902. JO E fANUEL MARROQUIN El Ministro de Guerra, ARI TIDXS F JtNÁND•z DECRETO NUMERO 6 o DE 1902 (ABRIL I 5) _ por el cual se hace un nombramiento El Vi'cepruide-nl d1 la Rcpiíblka, encargado del Poder Ejecutivo, DECRET.~ Artículo único. ómbrase omisario Pagador de la Jefatura :i,~iJ y Militar de Zipaquirá al r. Eugenio xuevara B. Comuníquese y publíquese. Dado en Bogotá á 15 de bril de 1902. JO E ~ UEL M RR QUIN El Ministro de Guerra, ARrsTIDES DECRETO UMER 654 DE cgo2 (ABRIL 2 I) por el cual se llama ' un Jefe al sen icio. activo Y se le destina Y se hace una promoct6n El Vkepresüienle de la Rep1íblr'ca, e11cargado del Poder .Ejuutivo, DECRETA Art. 1 .o Llámase al servicio activo al G~neral Luis Urdaneta, y destínasele á prestar sus servicios como pnmer Ayudante gene- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. oletín Militar de Colombia \.._ 5I6 -' ral del uartel general de la oluJJma de 7h¡uendama que comand­el General Pio uinto 1\mpudia. rt. 2.0 romuéve e al Teniente oronel Benjamb J. Fcrrc del puc to de 2.0 Jefe del Batallón Junín de la olumna Alati . Camargo, al uerpo de Inválido con la antigüedad de 31 de zo tlltimo. Dado en ogotá, á 2 1 de bril de J ELM l )..finistro d Guerra E RET 55 E 1902 ( llRIL 21) por el u~\l se llam l se rvicio a c tt •o ñ un J cf e y ~ e 1 co1 fierc una autorizad r El Viupre id~nlt de la R,'JJiíbll'ca encargado del Poder Ejeculwo, RWl A acti o al r. 'en ral Be­at- a orcrani7at· una Divi utiérrez para hacer lo · par ivi ión, QUI 11 El ini tro de uerra A 1 -tCR 'T' ~u rE E 1902 (AB IL 21) l or ·1 cual e hace un nombramiento n interinidad E1 Viúj)residenle de la R(públu 1 tncar ado dd Poder liju11/hJo ~ '1 A único. EL RR QUI 1 Ministro e uerr , Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín DECRET ilitar le Colombia '- 517 _/ U !{ERO 657 D 1902 (ABRIL 21 >r el cual se llama al servicio activo á ' 'arios Jefe y Oficiales y se les destma .El Vz'upt esid~11/e d1 la R~príblica, ,,uargade~ del Poner E:¡'uul/vl), E CRETA Artículo único. Lláma e al er icio activo á los siguiente Je­~ s y ficiale.:>, y destínaseles al Ejército que comanda 1 en ral ~amón González V lencia, en los pue tos que e te Jefe le desig- : argento 1ayores rancisco A. alazar, afael ilva G., \.mbro io uár z y Lui F. Cé\margo · Capitán elisario Rodrí­uez · T niente afael I ría Galindo, y ubtenientes J. de D. 1acfa ) J. ]. Galindo. Comuníquese y publíquese. Dado en Boo-otá á 21 de bril de 1902. J EM EL MARROQUIN El d:ini tro de Guerra, ARtsTID.ES FER ÁNDEZ === E di toria] - TURA C MP A nadie e oculta ue la guerr que ha deva tado á Ja Repú­blica, convirtiéndola en un inmenso o ario, por su duración, por la intensidad de la contienda y por haber abrazado el área entera del paí , por así decir, regi tra en u anale campañas ue desde el punto de vi ta de lo ufrimientos afrontados y de los acto de abneg ci6n y de heroísmo cump1ido , no desdicen de las má nom­bradas de la uerra magna. El Ejército que tale pruebas de arrojo y patt·iotismo h dado en cas1 tres años de continuo ata11ar, ha merecí o bien de la Pa­tria; p ¡·o su tarea no ha concluído aún y de pué de la lucha con­tra lo pertur adores del reposo úblico n vez de regresar á u hogare t ndrá que emprender otra lucha, si m no brillante más ~enéfica, ual es la de coadyu ar al r tableci'?i nto del pr?greso y de 1 industria herido e muerte por inju ttfica le rebelión._ En efecto la vías de comunicación, bandonadas por anos entero yacen en lamentable e tado; y vencidos los rebeldes como por lo pronto no ería político ni prud nt licenciar las Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Iilitar de Colon1bi t '- 518 __, huestes sal va doras de la República · para hacer fecundos Jos bra zos que todavía es preciso secuestrar al trabajo y á la industri lo natural será emplearlos en mejorar los camino y re tablecerlo:.. á u estado normal, y aun en llevar á buen término alguna ob~ pública de real importancia para el país. odemo afirmar que tanto el Excmo. r. Vtcepresidente como el actual Ministro de Guerra ~e hallan animados de las me-·­jor ;s intenciones en el particular, y están re ueltos á emplear: como zapadores buena parte e los batallones que hoy forman ef lucido Ejército nacional, para conclu{r Ja carretera de Cambao, adelantar la calzada del Ferrocarril del orle, y tal vez mejor r el camino de Hon a, cuyo trazo de Ville a en adelante e supre­mamente absurdo, como odos lo saben. En ninguna de estas obra se trata de gastos 6 erogacione que demanden oro, como compra de rieles, locomotora , &c., err mercados extranjero , ni de poner al servicio de empresas parti­culares los soldados de la República; nó : e l ánimo del Gobiern es simplemente utilizar los brazo de los abnegados lidiadores delll rden y la Legitimidad en . ien del país, en preparar el terreno para que cuando lleguen mejores día en materia económica, la locomotora pueda arrancar fácil y rápidamente de las márgenes del agdalena, y, cruzando la abana, penetre en lo valles y' montaña de o y acá y antander. E te de eo del upremo Gobierno no entraña favoritismo con 1 respecto á los Departamentos nombrados, porque el Cauca podrá hacer lo mismo en su vía férrea de Buena entura · Antioquia ha continuado con éxito la carrilera de Puerto Berrío, y en la Costa se aplicará el esfuerzo de lo zapadores á la obra que crean de mayor importancia sus habitante . Creemos que no habrá quien no apruebe y aplauda esta reso­lución del Gobierno ni quien le niegue su apoyo y concurso, porque si en su día son fecunda las sangrienta lides del Ejército, después de la victoria que asegura la paz e llegado el momento de aco­meter e as campañas incruenta , en la cuales se vence á la a­tu raleza para asegurar el repo o y biene tar de todos los ciuda­dano. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. NU L Boletín MiJitar de Colotnbia '- 519 _) Doctrinal- R .. L PR L e ARACIO L AL C0~1 ATE POR EL RAL D A(~OlUR 'F c,mclu_ye Para en eñar á las patrulla á que desempeñen esta impor­tante misión e pued emplear el procedimiento quP ya e ha pro­ue to para cerciorar e del servicio de lo exploradores durante l marcha es cir, enviar algunos solda lo fuer e la po ición, con orden de tr tar de insinuar e die tt·amente, ya sobre los flan­cos ya sobr las r taguardia e e tapo ición. La fuerza de una atrulla n puede determinarse d una ma­n ra invariable porque depende del terreno. 1 jefe de compa­ñf toca fijar u efectivo, conformándose á las indicad nes que re­ulten del reconocimiento de lo flanco . lguna veces la obser­ci6n de los flanco puede hacer e de referenc·a de la posición misma, por ejemplo : de lo alto de un campanario, &c. ero en t. do caso im ortante e coger para este objeto soldados que no t ·ngan otra funciones qué de empeñar, ino la o servadores. 124-La tropas ue están aloja en cuartele , deb n ejer-itarse en la manera de ocupar é to defen ivamente, in icando siempre el lado de don e s era al adversario. En cada partí-a de e ha er un jefe respon ble. Hay que explicar en ué itios ,. levantarían sigui ndo 1 dir cción upue ta del ataque, barri­~ adas en la alida , ~ se e tablecerían nueva . i en la paredes que rodean 1 cuartel hay a pill ras, se añade al · jercicio prece­dente, la defens d e ta paredes, p r familiarizar 1 Id do con 1 manera de obrar d trá de una aspi11 r y d poner una pared Jn e tado de defen a. 125-PA TICUI.J\RlDADE PARA .L ATAQUE Y ¡.A DEF ·, \. DE LO BA­JtR ·e AI.DEAS, &c.- i l ldad n conoc los cami­nos recorri os ; i al emr de la instrucción y al · 1 r á ella no recorr muchas vece un kilómetro inútil para li rar l un ob tá­culo, sino que por e l contrario, da una vuelta de un kil6metro pa ar por él ; i e ujeta á poner en práctica l lo qu s n~e ­ña en 1 in trucción de la gimna ia entonce los hombr y los Je­fes llegarán á la mejor preparación po ible_ para de truír los ?bs­tácul . Ya no uedará por dar á noc r mo alguna prácttcas, como por jempl d ejar la cad n d 1 lado de _acá d 1_ arranco (del arroyo 6 del fos de la trincher ), 1 ara e ntmuar d1 parando sobre el ene nirimero un or ·ani m o cilante d · !n cción formado esencial­' ll nte por cuatro e feras metálica entre la cuale altan chi pas r ducidas por una corriente induci a que e engendra cada vez ue se quiere transmitir una cñal ; ntonce vibran las e feras 3c ndo lugar á onda electro-magnética que atraviesan 1 pacio · llegan al t·eceptOI·, colocado á un di tancia tal ue las onda , al ocar la ant na de éste, con en·an 1 can i a de movimiento ne­ ·aria para e.·citarle. Esta excitaci 5n mo ifica el tado de cierta ustancia pul \'erulenta (colusor ), 1 u al por. Yirtud de su cambio tático. cien·a el circuito de un relevador muy en iu1e qu go­i rna otro circuito donde e halla un a.pat·ato Mor e· é te funcio­: 1 pue como de ordinario, y or con io-uient , gra a n u cinta a señales producida or e l i tema o cilante. e comprende, pue sin esfue¡-z u i 1 onda ncuentra bstáculo que la rompan ó at(;>núen ante de lle ar á la antena de estación co1-re p ndient la recepción n tendrá lugar 6 e - riftcará de un modo inci rt , y d ahí la nec idad de dar á 1 an-ena elevacion xtra ¡·din ria qu dlficultan u mpl o n cam-aña, no tanto por 1 trabaj de obtener a alturas, como p r el lanco que pre entan la ant nas la cual s s con ierten í n tránsfuga denunciador de la itua• ión e la tt·o a~ con lo con­siguiente peligro para é ta y para lo aparato . Meditan o Pilsudsky en la u re ión d la ant na , pensó que sien o lo s6Jid xcel nte onductor de toda 'i' ración, debieran erl a imi m d la vibración léctri a. y lU , por tanto podría é ta transmitir e por la ti rra "11 lugar d hac do por 1 ire, sorteándo . í 1 inconveni nte de 1 vi íuilidad e la anl - nas y tambjén el de la so pre a lu de pachos. En este encillo principio stá ba a 1 i ma 1 il ud ky, realizado últimamente á fav r d placas cnl rradas y disposiciones e detalle que no ca en en un om ro extracto de la confer n.cia. Telegrafía ópllca por los rayos ullravzolelns - El fundamento cien­tífico de la teleo-rafía ópitca por el heliógrafo no puede er má elemental: un esp0ejo que recibe lo rayos olares y los refleja n dirección conveniente con intermitencias que producen de tellos TOKO I-34 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. de B letin Milit r de Colom L 530 _.! o lo LA ~IE ALU GIA sta ciencia durante Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Bol tín Mili ar de Col mbi a '- 531 _) a r a multiplicarla. Gracias al in igne ~~Ioi san e han reducido a l 0 / 0 las impurezas del aluminio y su aleación con 1 manganeso y ~ tung en? acaba de producir J J:arHnio, cuya con tante espe-fica dan tdea de la xcelente rest tcncia qu alcanza : ARTI '"IO Laminado ...... . . . ............ . undido en molde de arena en idad 3 2.89 ocficiente de fr ctura por ex· tensión (JC"~$. porn.0 2) 37 12 Alargamiento poriOO 10 á 12 5 á Estas cualidades le dan un empl o muy apropiado para plan­ha y iga laminada y le indican especialmente ara toda obra e carretería, ya que u ligereza permitirá mayor velocidad y eco­omía de fuerza tractora factores am o de inapreciable valor á ausa de las 9Tandes masas que debe mover la guerra moderna. Aparte estas nuevas aplicaciones del alumini ca e seña­ir la que recientemente se le ha dado como agente reductor por u grande afinidad con el oxígeno : uesto en presencia de com­ue tos oxigenados es un precioso elemento para obtener ciertos 'letal muy difícile de ai lar ha ta ahor . i el campo de us plicaciones está limitado aún por el precio que alcanza menor ada día merced á la producción lcctrolítica, aquéllas han de ir ·xtendiéndose cuando a aratado por los continuos progr o de la :lectro-metalurgia pueda competir con 1 hierro y sus imilares. LA I~ 'DUSTRI liiLIT AR Armas.)' trplosz1,os-E1 avance !n las po trimería del igl Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Militar de Colombia '- 532 -' cione endurecí as, los explosi os al interior y las cargas exterio­re d e mayot· efecto proyectante, bien pronto se reconoció la vulnerabilidad de las planchas Harvey obligando á mejorar Jos proce imientos e u fabricación, que el conferenciante reseñó, detenién o e á describir el adoptado por Krupp y que con i te, sumariamente, en cementar las plancha , no por el carbón, como hacía Harvey, sino or el ga~ del alumbrado, que ced su carbo­no á la plancha, reviamente calentada y la va carburando de modo gradual y perfecto. Las planchas así mejoradas han venido á restablecer el per­dido equilibrio ntre las armas ofensiva y defensiva, inclinando la alanza d 1 lado de é la. Para restablecer lo aJores se ha pedido al añón un nuevo fu rzo y Gathmann acaba d darl . Catiór¿ Galhm nn-La tendencia que Jo informa es lleS por ntre bo ues, por camino horribles h cía Chune-Popuhu.x, ell aldea que se encuentra cerca de uno e lo principal d sfiladeros del Ar­gonne. Llegué aHí extenuado. e no hizo acampar n un sem rado de remolachas. or la primer vez de mi ·id e.·perimentaba el pes r e que no me gu tasen las remolachas. i m hubiera en­contrado 6. mano con un alimento an y so re todo abundante Lo sol ado iejo ue sta an con no otro oportaban na­turalmente; Ja fatiga mucho mejor ue lo voluntarios. Una de la razone principales ra qu los reclutas se compo!"lían, n su ~a. or part , de j6 enes ha ituado á un i ~ sed ntana y tranqutla, n tanto u nuestro e marada pertenectan n general~ clas me­nos acomodadas y par cían co tum~rados á una 1 él: ~e rudos trab jo · pero también había otro mot1vo: 1 soldado v1 JO cono­ce 1 valor de todo · á cada para a, aun cuando no di pong_a ino de poco minut , uerme · cuenta con un oco más de t1. mpo, ncien e fuego para hacer café 6 opa y ara calen ar e s1 hac.e frío. eber comer, d rmir hacer provi ión de fu t·za conomt- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Militar ele Colornbia '- 538 -- zarJa almacenarlas, por decirlo así hé ahí u grande, su con tan­te preocupación. abe ue po rá llegar un dí en que habrá que soportar fatig-a enormes, q e lo vívere pueden faltar, y que, cuan­do se ga tan tantas fuerzas, hay que re ararlas sin cesar, para po­der tenet· la má uina en estado de er icío. L fatiga de la mar­cha, peno o oficio , el peso del mor·ral, el frío de la noche, las vi­gilia , el alimento, con frecuencia scaso á veces ninguno son al­guno de lo ufrimiento o euros y sin gloria del oldado. Es más difícil aportar esto trabajo. que la fatigas y peligr de un día de batalla. qucl día hicimos en tres paradas, de la cinco de la maña­na á la siete d la noche una marcha monótona, penosa. El país que atravesábamos e magnífico, pero el e tado de fatiga en que comenzábamos á ncontrarno nos impedía disfrutar del placer de comtemplar e os hermo os lugares. Acampa m s n anc urt, en el flanco de una colina. Pero el des­enl ce se apro ima. o ac rcamos al nernigo, ó para hablar con má ex ctitu , 1 nemigo acerca á no otros. El 30 de Agosto, á las tres de la mañana .. c.l jamo á Rancourt y vamos temprano á tomar posición cerca de F.emilly, sobre las colinas que dominan el Meus . nuestro píe , 1 río; más leja inmensas praderas ; á derecha y á izquierda, colina on osque. Una batería de artille­da insta} á nuestro lado, y arma dos puentes olantes para dar paso al -ejército. Ignoraba 1 Cuerpo de Ingenieros, cuan­do hizo 1 vantar por lo artilleros os do malos pasos que consu­mieron tanto iempo y trabajo que á al unos centenares de me­tros abaj , n re az ille y R milly h bía un puente magnífico, el d 1 ferrocarril que ocult a un codo del Meuse? Lo que hay de cierto es que el Cu rpo de Ingenieros no pen ó ni en utilí:¿arlo para que pasasen las tropa , ni en destruírlo cuando los pru ianos lle­garon para aprovecharse de él. La ord n d tumbarlo fue dada, 5Ín embargo, por el Cuartel general· pero e t orden no e cumplió, bien porque los prusianos se hubie en apoder-ado ya de él, bien porque falta~ n lo medio , 6 ien p01·que n fue e ino la d pera cuando lograron des ubdrlo. ea omo fu re hacia las i te lo pu ntes de barca están termina o y 1 esfile comienza. Llegado lo primer , debemos atravesar el do los últimos, llevado ino in damente de 1 an­guardi á la xlrema retaguardia. quel día de e n amo . Cuando digo desean amos, quiero ~impl mente decir ue permanecemos en el sitio. Apenas hemos parado cuando m toca la fatiga de la leña. Voy como á un kiló­metro de i tancia á cort r un fagote de abedul y á recoger un poco d J ña. mi regreso, me designan, con al unos camaradas, para 1 tarea del an. Bajam s á R emilly, a nde habían llegado carros de la Intendencia y ca a uno de nosot•-os carg6 cinco ó seis panes de á cuatro li ra . Eran malo , ecos, y había que scoger entre el montón a ue11os que aún se pudieran comer, pero si uiera era an; h cía eis días ue no ten( mos sino izcocho. Como yo Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Bo~etín lilitar de Colombia '- 539 _./ :> mira con aire indif r nt : lo , amarada, me dijo un oldado vi jo y lléva todo lo má que ue as. íd, cuando dan .1 solda o pan como é te, e o quiere d cir que al otro día no ha-rá.'' El con ejo me pareció bueno y lo seguí: recogí una uena .arg . Lle o el pan y como hallo ue he d empeñado mi con tino-en­e n lo oficio aco el cuerp para e itar otro , y me apro, .. ~cho le la vecinda del • feu e p ra mudarme JI to o ; esto e muy ,rato cuan o uno duerme en l suelo y n e ambia nunca le vesti o . Despué del baño un comí a .·celent . Un hombre d nu stra e cuadra habí comprad al pas r por un pueblo, un ,.. n o y un conejo · se 1 confió á un sol a experto, hábil coci­ere u conte tab al noml:>r polaco d Dombrowski qUl n se ncargó de pl·epat·arlos. _ greg6 un pedaz e carne, much{ ima -al cocinó tod con lentitu , y nos sirvió un plato á su modo, que r comiend en todo tiempo, pero sobre to cuand hayái pa ado ci días in comer otra e a ue bizcoch co 6 acompañado de un pedazo de carne medi cruda; a u llo e taba · ui ito. Des­pués de comer, e cdbí do 6 tre carta ue pu e en 1 correo en envilly. y ue llegaron un año de pué . Como á la cu tr no interrumpen inopinadamente en nue tro corto descanso· nos hacen tomar con pr teza la arma y se nos loca en tira re , en lo cam o q e limitan l camino que si- ·ue el ejército. Una noticia iniestra s e paree entr nosotro : se ice ue un Cuerpo de Ejército acaba de ser sorprendido y diez­u ado por los pru iano · ocultos n lo bo u e . E ci rto. El 5. 0 cuer o acaba le ufrir en eaumont un terri- 1 le de e la ro. La tropa el General de "ailly habían llegado á Beaumont rante la noche del 2 al 30, de pués d una marcha de la más penosa por camino horri l ente enlodado ; la r t guardia no llegó al campamento ino á J s cinco d la mañana; l oldados taban e ·tenuado . El General juzgó nece ario concederles lar­o repo o y decidió, contrariando Ja órd ne d 1 uartel g·encral, que no se levantada el campamento il o hasta ien a anzada la mañana. El Afari cal partió muy temprano de Raucourt para tras­ladarse á Mouz6n dio una vuelta y a 6 á las si te y media á Beau-mont. ml rado al ncontt·ar allí durmi n 1 $.0 cuerpo ue egún su in tl·ucciones, debía dejar á B .aumont ntre la s~is y las siete par atra ve ar el Me u , hiz llamar al . en~ral Fatll '· ue aún estaba aco tad . L~ de pertaron, y el fanscal 1 cen ~r-6 que no hubi s d':l.do umpli iento á u órd ne . ~ 1 en ral h1zo pre-ente la fatiga de 1 tr pa, y aseguró ue e levantad 1 campo á la nueve. m dio uía la tr pa ocupaban todav(a 1 po icione en dond e habían fijado d 1 mod más incauto a\ sur Y al nor­t d~J pu blo. En v z i ,cupar ó por lo meno guardar las al­tur~ s, l hubiera ido 1 má' l m ntal en materia de ruden­cia, los regimientos taban acantonados en un e p cio e trecho, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Militar cit Colombia '-- 540 _,1 comprendido entr el 1euse y el Yoncq. arroyo que va á arro-­jarse en el río, en Mouzon,. al pie de las colinas que lo dominan por todas partes y que están cubi t·tas de bosques muy tupidos, en donde sólo los caminos son practicables. El Estado Mayor almorzaba tranquilamente en ca a del 1- • calde, sordo á las advertencias repetidas que las gentes del país ; venían á darle sin cesar, de la aproximación del nemigo. Los ofi- . ciales de distinta graduación estaban sentados todos á la mesa ó se paseaban por el pueblo conversando y fumando. Los soldado_ preparaban la comida y como las recientes lluvias habían engra­sado y oxidado los fu iles los habían desmontado, los seca an y limpiaban las piezas en torno de los fuegos del vivac. Los caño­nes no estaban atalajados lo caballos se habían llevado á beber: en fin, el campamento francé staba entregado á la mayor con­fianza, cuando fue de improviso inundado de granadas y cubierto de metralla. · La artillería bá' ara, que se había in talddo tranquilamentt" cerca de la quinta de la Petit-Foret, á cuatrocientos 1netros, aca­baba de romper los fuegos. Habiendo Ileg~do sin ruido por entre los bosques, la columna bávara en{a or en de permanecer oculta, y de no obrar antes de que lo otros cuerpos hu íeran desembocado del bosque or otros caminos, para emprender el ataque general ; pero la partida le pareció tan hermosa, que sin perar un instante la Ile ada de la demás columnas, des 1 .g' alguno tiradores en los bo ques y dis­puso sus- baterías de 'anguardia de manera de aprovecharse in­mediatamente de la ventaja e la sorpresa. ¡ Había podido llegar á una distancia de no otros de 400 metros y ituarse Como en Wissembourg, como en cien encuentros de esta guerra funesta ni una patrulla, ni una vanguardia, ni un centinela avanzado ara vigilar por el Ejército. Un desorden increi le, una confusión indescriptible, se apode­ra de esos hombres desarmados, en este imprevisto ataque. Los oficiales buscan por toda partes sus tropa , los oldados se pre­guntan d6nde stán su oficiale . Poco á oco in embargo, la calma renace, los soldados re­montan apri a su fu iles ; los oficiales, ya {.n sangre fría, los jun­tan y lanzan á Jo primeros que están listo sobre la artill ría ene­miga, que á cau a de u roxímidad, sufre rápidamente grandes pérdidas1 y ve 1· ducir el número de sus Ayudantes á tres por pieza . Se enganchan Jos cañones; las baterías francesas toman posición y atacan á los al manes en marcha, enviándoles granada á los bosques· pero sin cesar llegan al enemigo refuerzo , y cuando á la una el cuerpo francé , ya completam nte unido, se dispone á un a taque vigoroso, los alemane llaman á sus batallones de reserva que coronan las alturas, quedando á la defensiva bajo los bosques. Nuestros oldado , acogido or fuegos por compañía y á discre­ción, se ven diezmados y obligados á retroceder. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Bo etín ilitar e Colombia '- 541 _J Entr la una y las do , una ivi ión ínte ra refuerza á los pru­ianos. Desem.boca á la d _r cha aquell u ya taba empeña­a y coloca cmcuenta canone n batería · nuestro tirador , co­cados á oo ó 700 metro di un n á los artil! ros. En alento­ado por e te é.·ito se lan?an á la car a y llegan ha ta cincuenta )a os de lo cañonc , pero un fu go continu lo detiene, una carga 1 bayoneta Jo r chaza; uelven n d sorden. es ué de sto 1ay que e acuar á .Beaumont de u a odera 1 nemigo. Durante este tlempo lo aleman s om tetan u movimiento. onlz?z-a11 Variedades "L~JE A LA EPUB IC E L M IA E T 18~3 POR )1. • fOL EN ( fr;lían á cada m tan­te. Mucho debí felicitarme de la calma que remaba en es s altu­ras cuando pasé por ellas, porqu según relato de los habitantes, cuando el páramo se pone bravo lo mayore peligros amenazan Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Militar de Colombia '- 542 ..J al Yiajero ; un iento cargado de vapores helados sopla con \·iolen­cia ; tinieblas profundas envuelv n la tierra, y las huellas del ca­mino desaparecen. Los pájaros que engañados con la apariencia de un día hermoso, han intentado atravt;sarlo, caen sin movimien­to. El viajero trata de buscar abrigo bajo los arbolitos desmirr.ia­dos que á Jas veces crecen en estos desiertos, pero su follaj húme­do lo obliga á ir á otra parte. Debilitado por la fatiga y el ham­bre, apurando inútilmente á sus mulas transidas de frío, _s e sienta para recuperar su fuerzas agotadas. i une to reposo . En breve SLJ estómago siente la mi ma opresión que en el mar ; su sangre paraliza ; sus nervios e cri pan; su labios e abren como para sonreír y expira con e .. #presión de alegría. Las mulas, no oyendo ya la voz de su patrón perman cen en el itio se acuestan y mueren. ada presenta aspecto más sinie tro que el páramo de Cerinza. Vi to desde a ajo, u ft-ente arrugada está comúnmente oculta por las nubes, y cuando se atra ·iesa por rar za el cielo se muestra sere­no. Algunas fuentes de aguas cárdenas y heladas no muy potables se escapan de sus est 'riles flanco y no esparcen nunca Ja fertili­dad que más abajo desarrollan. Bal a:, fangosa ~ , llenas de juncos y de otras 1 lantas acuática , tapizan el fondo de los valles. A falta de i ento algunas garzas blancas on las únicas que turban su inmovilidad. La tierra no produc sino una ) erba muy fina: fo animales la comen con delicia. Una ola planta, de porte bastante alto, resiste á lo huracanes y al frío merced al pelo espeso de que está nvuelta : es 1 trail ejón (espcltlia frade.-,..· on ) · · us flo­res amarilla , colocadas a1 r mate de un tallo negro tienen un brilio siniestr omo la luz de una antorcha funeraria. La cru­ces que han colocado sobre las tumbas de los viajero muertos al atrav e ar el páramo, con tribuyen también al a pecto lúgubre qut: presentan los campo cu iertos de frajlej6n. p esar d los peligros que el hombre corre con frecuencia en e tas alturas, la mi eria y la a idez de la ganancia le hac n atravesarlas continuamente. i iene d países calientes se le e cargado de látano y de frutas suculentas; si llega de países fríos, se le encuentra encorvado bajo 1 pe o e costale de harina y en ocasione cargando con trabajo e as enorme tinaja de barro en la que se fermenta la chicha. Una ganancia bien módica le U - va á mirar con indif ren ia esas fatiga y la pn acione á que está sujeto en esas regiones e tériles · se creerá que un pe6n no gane si uiera inco franco por ll var un fardo de setenta y cin­co libras desde anta Rosa hasta el Socorro? Hay tres días de marcha. Pero él obtiene en esos viajes la única utilidad que am­biciona: vende el excedente de s s co echa , y con la ganancia con eguida se alimenta durante un mes. También se irven de mu­las para recorr r e te penoso trayecto. Lo caminos son tan malo que es mucho m jor valerse de carguero . ta planta produce una e celente trementina. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Mili ar de Colon1bia '- 543 _/ intel ig nt h a on tr u ído in , la familia La itu i6n d ba tante Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Boletín Militar de Colombia \..__ 544 ...J desolado aspecto del páramo, se iente alguna pena al pensar que estos campos estuvieron sembrados en otro tiempo por un pueblo infeliz, que gime quizás lejos de las tierras de que él es único y le­gítimo dueño. Por otro lado, pensando en la barbarie en que de­bió vivir ~e complace uno en pasearse sin temor en esos be11os bosques, animados de tiempo en tiempo por el mugir de lo gana­dos. Hoy se encuentra allí, aun cuando muy lejos de todo pue lo, la civilización, costumbres apacibles y hábitos á que un europeo no es extraño. Después de despedirme de este retiro encantador, en el cual hubiera pasado de buena gana varios meses, entré pronto n e] camino de Guacha por donde se baja al acorro. Los habitantes del país lo consideran como obra del diablo; con el dedo me seña­laron la morada de este espíritu malo, pex-o no vi nada. El Guacha no es ino una roca de exten!>ión inmen a, en donde las lluvia y los terremotos han formado huecos enormes · es, por tanto, impo­sible hacer uso de los caballos. Entré, pues, á pie: no me pasó nada, en lo que anduve muy afortunado porque de ordinario e pierden algunos caballos en el trán ito. e puede formar idea de los ries­gos que se corren, por la osamentas que se encuentran regada por todo el cammo, y no tarda uno en conv ncerse de ello ,. ¡ ndo el infinito número de ct·uce plantadas al pie del precipicio como en itio en donde ya se con~idera uno fuera de peligro. Cuando nos encontrámos allí, todavía no acabaron nue tras penas; era preci o continuar á pie, porque el camino aun ue ya no tan inclinado, co­rre por el Jecho de un río, de manera que uno va por entre 1 agua. Llegué sano y salvo á Ventagorda, casa muy pequeña. Allí no hospedámos doce per onas á la vez. El 1.0 de Julio ya estaba fuera de lo páramos; l país era menos horrible, el clima más suave y el cielo menos triste. Ya no había el temor del frío, para levantarse antes de amane­cer; partímos, pues, muy temprano. En pocas horas llegámos á Elísano · estábamos en tierras del Socorro. Un cambio bien agra­dable nos impresiona a á medida que avanzábamos en esta Pro­vincia : todas las casas estaban techadas con teja ; por lo general se notaba holgura en las casas de los habitantes, y, cosa bien sin­gular y grata en las regiones Irías, toda las gentes nos acogían con bondad; la bella naturaleza tropical alegraba de nuevo la vis­ta, pQrque siempre hay placer en volver á ver el plátano y el na­ranjo · por desdicha los caminos estaban tan enlodados que no se podía andar sino con la mayor prudencia para no dar una caída verdaderame11te peligrosa. atiendo del EH ano, seguí por el cur­so del Pienta, río que riega todo el valle de Charalá, y antes de ano­checer entré á esta ciudad · me sorprendió la regularidad de su calles y casas, y volví á ver con placer esa loca alegría que reina en los lugares cálidos. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.

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Boletín Militar: órgano del Ministerio de Guerra y del Ejército - Año VI Serie III Tomo I N. 17

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