Por:
Yubar Fundación Universitaria San Mateo https://orcid.org Portilla Benítez
|
Fecha:
2019
Las condiciones de cada época en la historia han variado a través de los siglos. En la actualidad un gran número de diseñadores y artistas han visto en el diseño una herramienta eficaz para transformar y mejorar el mundo por el del gusto del arte social. Así, transmiten y concientizan las mentes de los espectadores en la sociedad. Las inconformidades que rodean el entorno están a la orden del día. Asimismo, los artistas y diseñadores plasman las situaciones tan significativas que afectan al hombre con gran variedad de técnicas. Relacionan su comportamiento y vinculación a una comunidad tan diversa en pensamientos, valores y cultura. Por la encrucijada de la Revolución Industrial, en el siglo XIX varios artistas de manera directa manifestaron sus opiniones mediante carteles y foros entre los mismos, para levantar sus voces de críticas a las inconformidades de la época. El activismo se definió como una acción directa y sostenida para incitar y provocar a la sociedad. El cartel social y el activismo gráfico tienen como función generar nuevos hábitos, pensamientos y reflexiones. Su diferencia es en que el cartel social da a entender su mensaje por medio de un diseño alusivo, una imagen impactante y un texto como explicación a lo que se quiere dar entender, difundiéndose en los muros de las ciudades. Por su parte, el activismo gráfico se da a difundir por medio de una imagen que genere sentimiento, conciencia y doble sentido de lo que se hace hoy en día. Sin embargo, en realidad revelan los malos hábitos o pensamientos a lo que la sociedad cree que sí está haciendo bien, según el diario vivir.