Por:
Juan de Dios Nañez C.
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Fecha:
2018
Una de las principales limitantes para la producción de carne y leche en el Valle cálido del Alto Magdalena es la baja disponibilidad de forrajes, tanto en cantidad como en su calidad nutricional, condición, asociada principalmente a la irregular distribución de las lluvias y altos valores de evapotranspiración que originan el déficit de humedad característico de la región, haciendo del agua el factor más limitante para la producción de forrajes. Culturalmente, la siembra y utilización de solo gramíneas como alimento básico del ganado hace que los bajos contenidos de nutrientes principalmente proteína, unido a las bajas digestibilidades de los carbohidratos estructurales, reduzcan drásticamente el consumo voluntario, generando un desbalance de nutrientes, los cuales, no cubren los requerimientos nutricionales para una producción bovina eficiente. Una de las estrategias para contribuir a solucionar esta problemática, es el establecimiento y manejo de Sistemas Silvopastoríles multiestrato, integrados por praderas de gramíneas y leguminosas herbáceas, con arbustos para ramoneo y árboles que aportan sombra y leña, logrando en conjunto una alta producción y calidad de la biomasa forrajera que permite sistemas de producción bovina económica y ambientalmente viables.