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Colección institucional

Histórico de conciertos del Banco de la República - OPUS

En esta colección encontrarás información sobre conciertos desde 1966, incluyendo datos sobre artistas, programas de mano y obras interpretadas,.documentando la historia de la programación musical de la Sala de Conciertos de la Biblioteca Luis Ángel Arango, inaugurada en 1966.

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    • 15 de Julio de 2019
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Urpi Barco

Por: | Fecha: 2022

"Urpi, que en lengua quechua significa ‘paloma’, es hoy en día una de las cantantes y compositoras más reconocidas en el campo de las nuevas músicas colombianas y del ‘jazz’ latinoamericano. Nació en Bogotá, pero vivió gran parte de su infancia en Medellín y Cali. En esta última ciudad inició sus estudios artísticos en el Conservatorio Antonio María Valencia y la Escuela de Teatro de Bellas Artes. Es Maestra en Artes Musicales de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, con Máster en Interpretación en ‘jazz’ y música moderna del Conservatori Liceu de Barcelona (España). En 2018 fue la ganadora de la beca ‘Residencias Musicales’ del Instituto Distrital de las Arte - IDARTES con su proyecto ‘La voz como instrumento musical, improvisación y exploración sonora’, que le permitió realizar la preparación vocal y musical de su tercer trabajo discográfico como solista en la ciudad de New York. Allí tuvo la oportunidad de recibir clases con Sofia Rei, Barbara Maier y Sofia Ribeiro, y de participar en el retiro de improvisación vocal McFerrin Circlesongs, bajo la tutoría de los más destacados maestros de improvisación a nivel internacional, entre ellos, el reconocido músico Bobby McFerrin. Con más de veinte años de experiencia en el escenario, cuenta con tres producciones discográficas como solista: ‘Sueños’ (2012), disco ganador del Premio Peña de Mujeres Vol. 6 de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño; ‘Retrato’ (2016); ‘Manglares’ (2020), premiado por Ibermúsicas, y más de siete producciones con diferentes agrupaciones colombianas como el dueto Urpi Barco y Lucho Hermida (2019), Eirrükü Ensamble (2018), Eyelé (2011), Comadre Araña (2007), y las producciones musicales para niñas y niños de Teatro Comunidad. Ha realizado numerosas colaboraciones para diferentes agrupaciones musicales y ha compartido escenario y discos con Rosa Passos (Brasil), Marta Gómez y Claudia Gómez (Colombia), Sofia Ribeiro (Portugal), Georgina Hassan (Argentina), entre otros. Urpi se ha interesado por la interpretación, investigación y recopilación del repertorio de las costas colombianas, principalmente, encontrando en estas sonoridades el pilar para su proyecto creativo que mezcla elementos del ‘jazz’, las músicas del mundo y la exploración vocal. Ha realizado giras por nueve países representando a Colombia en festivales destacados a nivel internacional como el Festival Castillo de Ainsa, Pirineos Sur y Festival Sonna en España, Festival de Jazz de Polanco en México, Bolivia ‘Festijazz’ Internacional, Circuito de Jazz Colombia (Pastojazz, Medejazz, Ajazzgo), Jazz al Parque, Festival Internacional de Jazz del Teatro Libre, Festival Centro 2017, Festival Universitario de Jazz en Manizales, así como en las salas de siete centros culturales del Banco de la República, entre otros eventos. Desde 2010 Urpi se ha desempeñado como docente de canto popular en la Escuela de Artes y Música de la Universidad Sergio Arboleda, espacio académico en el que también fue coordinadora del área de canto e investigadora de la voz. En 2019 realizó junto al equipo de investigación de esta universidad la publicación del libro Sensaciones, ‘imágenes y metáforas en la enseñanza del canto’. Ha realizado talleres de voz e improvisación en diversas escuelas a nivel nacional e internacional como Ceu Voz (Ciudad de México), Conservatorio Plurinacional de Música (La Paz, Bolivia), Festival Titiricuenca Casa de la Cultura (Ecuador), Pasto Jazz y La Casa del Teatro (Colombia), entre otros espacios. En 2019 fue asesora vocal y tallerista en el 11° Gran Encuentro de Chelistas ‘Mi chelo, mi voz’ de la Universidad de los Andes. En este concierto, Urpi actúa junto con César Medina (saxofones alto y soprano, y coros), Luis Felipe Rey Sampedro (piano), Manuela María Jiménez (bombardino), Pável Zuzaeta (trompeta), Nicolás Torres Nieto (bajo eléctrico), Estefanía Lambuley Murcia (percusión y voces) y Enrique Narváez (batería). "

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Urpi Barco

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Programa de mano - Urpi Barco, cantante (Colombia)

Por: | Fecha: 17/05/2022

Temporada Nacional de Conciertos Banco de la República 2022 Foto: Pablo Mier MÚSICA Y MÚSICOS DE LATINOAMÉRICA Y DEL MUNDO URPI BARCO (Colombia) cantante Miércoles 25 de mayo de 2022 · 7:30 p.m. Bogotá, Sala de Conciertos de la Biblioteca Luis Ángel Arango PULEP: KDG627 Jueves 17 de noviembre de 2022 · 7:00 p.m. Popayán, Templo San José PULEP: NRE882 TOME NOTA Los conciertos iniciarán exactamente a la hora indicada en los avisos de prensa y en el programa de mano. Llegar con media hora de antelación le permitirá ingresar al concierto con tranquilidad y disfrutarlo en su totalidad. Si al momento de llegar al concierto este ya ha iniciado, el personal del auditorio le indicará el momento adecuado para ingresar a la sala de acuerdo con las recomendaciones dadas por los artistas que están en escena. Tenga en cuenta que en algunos conciertos, debido al programa y a los requerimientos de los artistas, no estará permitido el ingreso a la sala una vez el concierto haya iniciado. Agradecemos se abstenga de consumir comidas y bebidas, o fumar durante el concierto con el fin de garantizar un ambiente adecuado tanto para el público como para los artistas. Un ambiente silencioso es propicio para disfrutar la música. Durante el transcurso del concierto, por favor mantenga apagados sus equipos electrónicos, incluyendo teléfonos celulares y alarmas de reloj. Por respeto a los derechos de autor de los compositores e intérpretes, no está permitido realizar grabaciones de audio o video ni tomar fotografías durante el concierto. Los artistas interesados en presentar una propuesta de concierto pueden visitar el enlace www.banrepcultural.org/servicios/como-presentar-su-propuesta-artistica en el que encontrarán información pormenorizada acerca de este proceso. Si desea recibir información sobre la actividad cultural del Banco de la República ingrese a www.banrepcultural.org/servicios/listas-de-correo y suscríbase a las listas de correo de su preferencia. Para remitir al Banco de la República sus solicitudes de información, peticiones, quejas, reclamos, sugerencias, felicitaciones o denuncias de actos de corrupción, puede ingresar al siguiente enlace www.banrep.gov.co/atencion-ciudadano o acercarse a los puntos de atención dispuestos para esto en las diferentes oficinas del Banco de la República a nivel nacional. SÍGANOS EN Sala de Conciertos @Banrepcultural Banrepcultural Banrepcultural Luis Ángel Arango 1 EL RETORNO DE LO EFÍMERO La música se desvanece tan pronto como nace, es la suerte de la desdichada música. Leonardo da Vinci El año 2022 trae la oportunidad de volver a disfrutar la experiencia de la música en vivo en los diferentes espacios culturales del Banco de la República, y también la reapertura de uno de los escenarios más emblemáticos para la música de cámara en el país, nuestra Sala de Conciertos. Este momento, tan esperado por los amantes de la música luego de dos años, pone de manifiesto la inmanente necesidad humana de crear, compartir y deleitarse con el arte de los sonidos que, aunque se desvanezcan tan pronto como nacen, rondan nuestro inconsciente para ser recreados una y otra vez, y colmar de diversas sensaciones nuestros sentidos. La pandemia ha traído consigo valiosos aprendizajes que son el resultado de retarnos como individuos y como sociedad, así como de encontrar nuevas maneras de comunicarnos y de mantenernos en contacto por diferentes medios. Pero esta coyuntura también nos ha hecho aún más conscientes del valor del presente y, especialmente en lo que respecta a la experiencia de la música, de la maravillosa conexión in situ entre intérprete, compositor y público; una sinergia perfecta que no ha podido ser replicada por ningún medio digital. Este año, en el que se cumplen cincuenta y seis años de labor musical en el Banco de la República, se celebra el presente, la capacidad creativa del ser humano y el espíritu resiliente que nos ha acompañado. Con la participación de artistas nacionales como la pianista Laura Lambuley y las cantantes Betty Garcés y Urpi Barco, y de ensambles como La Sociedad y el cuarteto de guitarras Atemporánea rendimos homenaje al talento colombiano. Con las actuaciones de talentosas mujeres como la pianista lituana Muza Rubackyte, la arpista alemana Margret Köll, la cantante norteamericana Tierney Sutton y la cantante portuguesa Sofia Ribeiro celebramos no solo la diversidad de manifestaciones musicales sino la oportunidad de volver a compartir en nuestros escenarios con artistas de excelente nivel, provenientes de otras latitudes. Volveremos también a escuchar el órgano de nuestra Sala de Conciertos con el alemán Vincent Heitzer; y a disfrutar de las obras de cuatro jóvenes compositores y de más de veinte músicos que se presentan en el marco de la Serie de los Jóvenes Intérpretes, programa que por más de treinta 2 y cinco años ha servido de plataforma para impulsar la carrera de músicos colombianos. Esta Temporada ofrece experiencias inolvidables, como el reestreno— ahora en vivo y en interpretación del violonchelista colombiano Santiago Cañón-Valencia— de La ruta de la mariposa, obra comisionada por el Banco de la República en 2019 al compositor colombiano Damián Ponce de León. Asimismo, se estrenará la obra comisionada a Rodolfo Acosta, intérprete, improvisador, docente y gestor colombiano; con esta, el Banco completa un total de diecinueve obras que hacen parte de uno de sus proyectos de mayor envergadura, el encargo de obras a creadores colombianos. Los conciertos retrospectivos de Amparo Ángel, Moisès Bertran y Guillermo Rendón, que suman más de cincuenta recitales en vivo en la Sala de Conciertos, son una oportunidad más para celebrar la vida y la obra de aquellos compositores que han dejado y siguen dejando huella en la historia de las músicas colombianas. Volver a disfrutar de la música en vivo es retomar un ritual; regresar a la Sala de conciertos, para muchos, es retornar a su hogar, que ahora nos sorprende con nuevas luces luego de su remodelación. Para quienes visitan por primera vez este recinto es la oportunidad para vivir una programación de primer nivel en un espacio idóneo. Los invitamos a este retorno de lo efímero, a la experiencia de la música en vivo. Sección de Música Subgerencia Cultural Banco de la República 3 ACERCA DE LA INTÉRPRETE Su voz nos guía por la bella aventura de transformar la música colombiana sobre un lienzo contemporáneo de factura impecable. Miguel Camacho Castaño (Radio Nacional de Colombia) Urpi, que en lengua quechua significa ‘paloma’, es hoy en día una de las cantantes y compositoras más reconocidas en el campo de las nuevas músicas colombianas y del jazz latinoamericano. Nació en Bogotá, pero vivió gran parte de su infancia en Medellín y Cali. En esta última ciudad inició sus estudios artísticos en el Conservatorio Antonio María Valencia y la Escuela de Teatro de Bellas Artes. Es Maestra en Artes Musicales de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, con Máster en Interpretación en jazz y música moderna del Conservatori Liceu de Barcelona (España). En 2018 fue la ganadora de la beca ‘Residencias Musicales’ del Instituto Distrital de las Arte - IDARTES con su proyecto La voz como instrumento musical, improvisación y exploración sonora, que le permitió realizar la preparación vocal y musical de su tercer trabajo discográfico como solista en la ciudad de New York. Allí tuvo la oportunidad de recibir clases con Sofia Rei, Barbara Maier y Sofia Ribeiro, y de participar en el retiro de improvisación vocal McFerrin Circlesongs, bajo la tutoría de los más destacados maestros de improvisación a nivel internacional, entre ellos, el reconocido músico Bobby McFerrin. Con más de veinte años de experiencia en el escenario, cuenta con tres producciones discográficas como solista: Sueños (2012), disco ganador del Premio Peña de Mujeres Vol. 6 de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño; Retrato (2016); Manglares (2020), premiado por Ibermúsicas, y más de siete producciones con diferentes agrupaciones colombianas como el dueto Urpi Barco y Lucho Hermida (2019), Eirrükü Ensamble (2018), Eyelé (2011), Comadre Araña (2007), y las producciones musicales para niñas y niños de Teatro Comunidad. Ha realizado numerosas colaboraciones para diferentes agrupaciones musicales y ha compartido escenario y discos con Rosa Passos (Brasil), Marta Gómez y Claudia Gómez (Colombia), Sofia Ribeiro (Portugal), Georgina Hassan (Argentina), entre otros. Urpi se ha interesado por la interpretación, investigación y recopilación del repertorio de las costas colombianas, principalmente, encontrando en Foto: Pablo Mier 4 estas sonoridades el pilar para su proyecto creativo que mezcla elementos del jazz, las músicas del mundo y la exploración vocal. Ha realizado giras por nueve países representando a Colombia en festivales destacados a nivel internacional como el Festival Castillo de Ainsa, Pirineos Sur y Festival Sonna en España, Festival de Jazz de Polanco en México, Bolivia ‘Festijazz’ Internacional, Circuito de Jazz Colombia (Pastojazz, Medejazz, Ajazzgo), Jazz al Parque, Festival Internacional de Jazz del Teatro Libre, Festival Centro 2017, Festival Universitario de Jazz en Manizales, así como en las salas de siete centros culturales del Banco de la República, entre otros eventos. Desde 2010 Urpi se ha desempeñado como docente de canto popular en la Escuela de Artes y Música de la Universidad Sergio Arboleda, espacio académico en el que también fue coordinadora del área de canto e investigadora de la voz. En 2019 realizó junto al equipo de investigación de esta universidad la publicación del libro Sensaciones, imágenes y metáforas en la enseñanza del canto. Ha realizado talleres de voz e improvisación en diversas escuelas a nivel nacional e internacional como Ceu Voz (Ciudad de México), Conservatorio Plurinacional de Música (La Paz, Bolivia), Festival Titiricuenca Casa de la Cultura (Ecuador), Pasto Jazz y La Casa del Teatro (Colombia), entre otros espacios. En 2019 fue asesora vocal y tallerista en el 11° Gran Encuentro de Chelistas ‘Mi chelo, mi voz’ de la Universidad de los Andes. En este concierto, Urpi actúa junto con César Medina (saxofones alto y soprano, y coros), Luis Felipe Rey Sampedro (piano), Manuela María Jiménez (bombardino), Pável Zuzaeta (trompeta), Nicolás Torres Nieto (bajo eléctrico), Estefanía Lambuley Murcia (percusión y voces) y Enrique Narváez (batería). Conozca más acerca de Urpi Barco urpibarco.com/ www.youtube.com/user/urpibarco www.facebook.com/urpibarcoq www.instagram.com/accounts/login/?next=/urpibarco/ open.spotify.com/artist/4jWELqo1U6aj7Njs9QSjd6 La realización del concierto en Popayán cuenta con el apoyo de 5 PROGRAMA Sueño (2013) LUIS FERNANDO HERMIDA (n. 1982) Libélula (2012) Olor a café (2014) URPI BARCO (n. 1985) PEDRO JACKSON (n. 1980) Candelario (1988) URPI BARCO MISAEL TORRES (n. 1952) Macondo (2015) URPI BARCO JAVIER MONTOYA (n. 1955) Arreglo de Luis Felipe Rey (n. 1981) Ramito de laurel (2016) URPI BARCO No hieren (2017) LUIS FERNANDO HERMIDA Cantos de boga (s. f.) TRADICIONAL Arrópame que tengo frío (s. f.) TRADICIONAL Arreglo de Luis Felipe Rey Wave (1967) ANTÔNIO CARLOS JOBIM (1927-1994) Aigua (2020) URPI BARCO NICOLÁS TORRES (n. 1990) Martín pescador (2019) Qué bonito tá mi niño (s. f.) Ronca canalete (s. f.) TRADICIONAL El roble y el ciprés (2019) URPI BARCO NICOLÁS TORRES 6 NOTAS AL PROGRAMA Urpi Barco en sus propias palabras «Mis primeros recuerdos musicales reposan en la casa de mis padres. Papá y mamá eran actores y titiriteros. Ha de ser por eso que la casa estaba llena de canciones de Mercedes Sosa, Pablo Milanés y Joan Manuel Serrat; además, sonaban los programas de jazz y música de la nueva era que transmitía la emisora Javeriana Estéreo. Cuando presentaban sus obras, íbamos de viaje por Colombia. Viene a mi cabeza un viaje a Buenaventura y a Tumaco — tendría yo tal vez seis años— en el que mi madre recopilaba cantos y rondas tradicionales de las comunidades. ¡Fueron días enteros escuchando música de marimba de chonta! Crecí entre Bogotá, las montañas de Santa Elena en Antioquia, Taganga y Cali. Desde muy temprana edad, a fuerza de las circunstancias, logré mimetizarme con algunos aspectos particulares de los diferentes lugares donde viví: asimilé los distintos acentos del lenguaje, aprendí a comer de lo que hubiese y, especialmente, me familiaricé con músicas fabulosas. Mi madre siempre estaba cantando. Recuerdo que era capaz de acompañar con su tambora cualquier canción de Violeta Parra o Totó la Momposina. Así que de mi memoria más profunda surgen canciones como Aguacero e’ mayo, Yo vide el tigre y Soledad. Cuando era apenas una niña de cinco años mi madre me enseñó —con su tambora— a cantar y a tocar cumbias, bullerengues, currulaos y chalupas. Recién cumplí quince años ingresé a Teatro Comunidad, el grupo de teatro de mis padres. Allí toqué guitarra, canté, actué y, más adelante, comencé a componer música para los montajes. Aprendí, sin premeditarlo, todos los tejemanejes de la autogestión, la importancia del profesionalismo y lo que significa vivir de un proyecto artístico independiente en Colombia». Voces «A los doce años descubrí la voz de Ella Fitzgerald. Fue en Santa Elena, en la casa de un gran amigo de la familia. Él era profesor de matemáticas y melómano. Tenía un tocadiscos —no recuerdo que nadie más cercano a mí tuviera uno de esos aparatos maravillosos—. Un día, buscando entre su colección, encontré unos discos de jazz clásico. Allí estaba esa voz que me sigue acompañando. Esto 7 fue por los mismos días en que estudiaba bachillerato artístico en la Escuela de Bellas Artes de Cali. La clase que más disfrutaba era la de música. Aprendí a tocar guitarra solo para poder acompañarme en las canciones de Silvio Rodríguez. Quién fuera, del cubano, era una de mis favoritas. La fiebre del pop y del rock en español me tuvo ocupada por un tiempo hasta que apareció en la casa un disco crucial: María Sabina, del grupo del mismo nombre dirigido por Beatriz Castaño. Fue mi primera aproximación al jazz colombiano. Cuando decidí que me dedicaría definitivamente al oficio musical, empecé a cursar el programa de músicas colombianas de la Academia Luis A. Calvo y, después, el programa de Artes Musicales de la ASAB. Allí me encontré de una forma más académica con las prácticas sonoras andinas, llaneras y brasileñas; el canto lírico y, en general, un espectro muy amplio de la música latinoamericana. Descubrir a la cantante mexicana Lila Downs me hizo dar cuenta —además de las posibilidades de algunos aspectos formales como el registro y los colores— de que había formas inusuales de reinventarse las músicas raizales y populares. El disco Border fue una gran influencia, hasta el punto de que tres piezas incluidas allí —entre ellas La llorona— fueron el eje central de mi trabajo de grado. Mientras asistía a la universidad hice parte de Comadre Araña, una banda dirigida por el bajista Juan Sebastián Monsalve. Allí, en una especie de laboratorio, exploramos músicas tradicionales colombianas, especialmente las del Pacífico y el Caribe colombianos. De esos años recuerdo haber participado dos veces en el Festival de Bullerengue en Puerto Escondido, Córdoba. Esto fue el preámbulo de mi búsqueda como creadora de canciones, que se consolidó en discos como Sueños (2012), Retrato (2016) y Manglares (2020)». Otras búsquedas «El recuerdo de las músicas escuchadas en mi niñez despertó un gran amor por los sonidos cubanos. Decidí emprender un viaje iniciático a la isla en la búsqueda de conciertos, libros y discos. Fui en dos ocasiones. En una de ellas llevé a Bogotá dos discos que me abrieron perspectivas sonoras y fueron referentes en la composición desde la poesía: Art Bembe de Gema y Pavel, y Yusa de la compositora e instrumentista del mismo nombre. En ese momento, más o menos en 2010, comencé Eyelé, una agrupación influenciada por este nuevo sonido cubano. Un par de años después me alejé de este sonido ‘potente’ para concentrarme en algo más íntimo. Entonces surgió el disco Sueños, en el que salen a relucir otras influencias como Antônio Carlos Jobim, Esperanza Spalding, Lara Bello y Mayra Caridad Valdés. 8 En este momento, la improvisación se vuelve una especie de ‘obsesión’ para mi vida. En Colombia no existían muchas escuelas o cantantes de jazz que pudieran guiarme, así que empecé a estudiar por cuenta propia y, también, a tomar talleres con diferentes maestros que iban de paso por la capital bogotana. En 2018 viajé a New York, ciudad donde tuve la oportunidad de conocer y tomar talleres con Bobby McFerrin, mi mayor referente en el mundo vocal. ¡Fue un momento muy emocionante! Sirvió esto de prólogo para la aventura sonora que viví durante un par de años en Barcelona». Las canciones «Hace diez años estrené Sueños, mi primer disco como solista. Para celebrar tan especial ocasión, hoy interpretaremos un repertorio que incluye algunas de las canciones que aparecen tanto en Sueños como en Retrato, y Canciones con la Orquesta Universal, Manglares y Palpitar, este último, proyecto de voz y bajo que grabé en 2020 junto con Nicolás Torres, y en el que aparece Aigua. Influenciado profundamente por el simbolismo de Macondo, el presente universo sonoro recoge tonadas que escuché durante mis entrañables viajes al Pacífico colombiano como cantos de boga y romances del río Atrato. Asimismo, contiene otras de autoría propia —o en colaboración con Nicolás Torres y Luis Fernando Hermida— en las que resuenan ritmos variopintos como el bambuco, la cumbia, el currulao y el porro. Del disco Sueños se desprenden Sueño —compuesta en aire de bambuco por Luis Fernando Hermida, especialmente para aquel disco— y Qué bonito tá mi niño, un currulao tradicional del Pacífico colombiano que aprendí como un villancico negro en las calles de Buenaventura. De Retrato, retomamos la tambora Ramito de laurel y Candelario. De esta última, quiero subrayar que su letra fue escrita por el director y dramaturgo Misael Torres, a quien se la escuché entonar cuando era niña. De ella también hay que decir que hace parte del repertorio de cuentos de Esmeralda Quintana, mi madre. Cuenta la historia de un niño que se pierde en un pueblo del Pacífico colombiano y regresa —el día del cumpleaños de su progenitora— a entregarle un peine de diamantes. La melodía estuvo por mucho tiempo en mi memoria hasta que decidí hacer una versión interpretada originalmente con la compañía de Andrés Rotmistrovsky y Marcelo Wolosky. Este es, sin duda, un homenaje a mi mamá, y a los actores y las actrices de teatro que han estado cerca de mi crecimiento. 9 De Canciones con la Orquesta Universal escogimos No hieren, otra pieza escrita por Luis Fernando Hermida, quien, a ritmo de paseo-son interiorano, tuvo la agudeza de conservar los elementos tradicionales del vallenato clásico que, a su vez, se conjugan con giros armónicos y espacios para la improvisación. Varias fueron las canciones de Manglares que nos resultaron apropiadas para esta celebración, como es el caso de Macondo, que hizo parte del montaje Macondo, el cuento que se llevó el viento de Teatro Comunidad, ganador en 2016 de la Beca de Creación Rayuela del Ministerio de Cultura. Los versos fueron escritos por Javier Montoya, director y dramaturgo de la obra. El arreglo para quinteto lo hizo el pianista Felipe Rey. Por su parte, Martín pescador y El roble y el ciprés son dos canciones creadas junto con Nicolás Torres. La primera es un porro en homenaje al campesinado y a los pescadores que, por causa de las diferentes formas de violencia, han tenido que desarraigarse de sus costumbres y tradiciones. La segunda es una chalupa inspirada en el poema al matrimonio, incluido en El profeta, el famoso libro del poeta libanés Gibran Khalil. Del universo sonoro del Pacífico colombiano —que es una de las columnas cervicales de Manglares— adaptamos un Canto de boga, Arrópame que tengo frío —romance tradicional del río Atrato que le escuché a Claudia Gómez, una de mis grandes referencias vocales—, y Ronca canalete, esta última arreglada por Melissa Pinto, pianista y compositora cartagenera con quien compartimos visiones similares del jazz colombiano. Finalmente, la influencia brasileña está presente en Wave, emblemática composición de Antônio Carlos Jobim; nos dimos la libertad de hacer un drástico cambio de métrica, evocando ritmos a 6/8 como el bambuco y la chacarera». Audiciones recomendadas Urpi Barco y Lucho Hermida. (2019). Canciones con la Orquesta Universal. Edición de los autores. Urpi Barco y Nico Torres Project. (s. f.). Palpitar. Edición de los autores. Urpi Barco. (2012). Sueños. Fundación Gilberto Alzate Avendaño. Urpi Barco. (2016). Retrato. Edición de la autora. Urpi Barco (2022). Manglares. Edición de la autora. 10 Betty Garcés, soprano (Colombia) · Foto. Cristóbal de la Cuadra TEMPORADA NACIONAL DE CONCIERTOS Banco de la República 2022 Consulte toda la programación en www.banrepcultural.org/actividad-musical
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Imagen de apoyo de  Programa de mano - Juan Pablo Cosme, piano (Colombia)

Programa de mano - Juan Pablo Cosme, piano (Colombia)

Por: | Fecha: 17/05/2022

Foto: Paula Castro Temporada Nacional de Conciertos Banco de la República 2022 JUAN PABLO COSME (Colombia) piano Jueves 26 de mayo de 2022 · 6:30 p.m. Bogotá, Sala de Conciertos de la Biblioteca Luis Ángel Arango PULEP: YKZ285 SERIE DE LOS JÓVENES INTÉRPRETES TOME NOTA Los conciertos iniciarán exactamente a la hora indicada en los avisos de prensa y en el programa de mano. Llegar con media hora de antelación le permitirá ingresar al concierto con tranquilidad y disfrutarlo en su totalidad. Si al momento de llegar al concierto este ya ha iniciado, el personal del auditorio le indicará el momento adecuado para ingresar a la sala de acuerdo con las recomendaciones dadas por los artistas que están en escena. Tenga en cuenta que en algunos conciertos, debido al programa y a los requerimientos de los artistas, no estará permitido el ingreso a la sala una vez el concierto haya iniciado. Agradecemos se abstenga de consumir comidas y bebidas, o fumar durante el concierto con el fin de garantizar un ambiente adecuado tanto para el público como para los artistas. Un ambiente silencioso es propicio para disfrutar la música. Durante el transcurso del concierto, por favor mantenga apagados sus equipos electrónicos, incluyendo teléfonos celulares y alarmas de reloj. Por respeto a los derechos de autor de los compositores e intérpretes, no está permitido realizar grabaciones de audio o video ni tomar fotografías durante el concierto. Los artistas interesados en presentar una propuesta de concierto pueden visitar el enlace www.banrepcultural.org/servicios/como-presentar-su-propuesta-artistica en el que encontrarán información pormenorizada acerca de este proceso. Si desea recibir información sobre la actividad cultural del Banco de la República ingrese a www.banrepcultural.org/servicios/listas-de-correo y suscríbase a las listas de correo de su preferencia. Para remitir al Banco de la República sus solicitudes de información, peticiones, quejas, reclamos, sugerencias, felicitaciones o denuncias de actos de corrupción, puede ingresar al siguiente enlace www.banrep.gov.co/atencion-ciudadano o acercarse a los puntos de atención dispuestos para esto en las diferentes oficinas del Banco de la República a nivel nacional. SÍGANOS EN Sala de Conciertos @Banrepcultural Banrepcultural Banrepcultural Luis Ángel Arango 1 ACERCA DEL INTÉRPRETE Juan Pablo Cosme, piano Juan Pablo es Magíster en Interpretación y Pedagogía Instrumental y pianista de la Universidad Nacional de Colombia, estudios que realizó bajo la dirección de William Mac McClure. A lo largo de su trayectoria musical se ha presentado como solista, músico de cámara, músico de orquesta y pianista acompañante en diversos escenarios en Colombia y Estados Unidos. Fue seleccionado para ser parte de la Serie de los Jóvenes Intérpretes del Banco de la República en 2021. En 2019, fue ganador del concurso de solistas de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Música de la Universidad Nacional de Colombia, obtuvo el primer puesto en la categoría de Jóvenes Intérpretes del VI Festival Concurso Pianissimo, y el segundo premio del VI Concurso de Música Iberoamericana para Piano ‘Luis Carlos Figueroa’, donde obtuvo también mención de honor a la mejor interpretación. Ese mismo año participó en festivales nacionales e internacionales tales como el Cartagena Festival Internacional de Música, Sewanee Music Festival, el festival del Brevard Music Center, en donde participó en la serie de conciertos y clases de verano, y en el VIII Festival Internacional de Piano en Ibagué. Ha ofrecido recitales en auditorios en Estados Unidos, como Guerry Hall, Sercy Hall y Art Gallery, y en Colombia en el auditorio Teresa Cuervo Borda del Museo Nacional de Colombia, los auditorios León de Greiff, Olav Roots y Guillermo Uribe Holguín de la Universidad Nacional de Colombia, Centro Cultural del Banco de la República en Ibagué y en escenarios de Villa de Leyva, Cali, Medellín, Cartagena y la región de Urabá. Foto: Paula Castro 2 Ha colaborado como pianista de orquesta en la Orquesta Supernova, formada para el XIII Cartagena Festival Internacional de Música y en Cumberland Orchestra en Estados Unidos. Participó como pianista acompañante en The Art of Singing: Technique, Movement and Text, escuela de canto internacional llevada a cabo en la Universidad Nacional de Colombia en 2016. Actualmente se desempeña como docente de música de cámara y piano en la Escuela de Música de Cámara de Bogotá (EMCB) y en la Academia Allegreto, institución enfocada en la enseñanza con la metodología Suzuki para la formación a temprana edad. 3 Capricho en fa sostenido menor de Ocho piezas para piano, Op. 76 No. 1 (1871) Capricho en re menor de Fantasías para piano, Op. 116 No. 1 (1892) JOHANNES BRAHMS (1833-1897) Carnaval de Viena, Op. 26 (1839) Allegro Romanze Scherzino Intermezzo Finale ROBERT SCHUMANN (1810-1856) INTERMEDIO Tema y variaciones (1946) Tema: Andante Andantino Allegretto Allegro Maggiore Presto agitato Con bravura JAIME LEÓN (1921-2015) Suite de danzas criollas, Op. 15 (1946) Adagietto pianissimo Allegro rustico Allegretto cantabile Calmo e poetico Scherzando-Cosa: Presto ed energico ALBERTO GINASTERA (1916-1983) Allegro de concierto, Op. 46 (1903) ENRIQUE GRANADOS (1867-1916) PROGRAMA 4 NOTAS AL PROGRAMA Por Ellie Anne Duque Brahms Johannes Brahms (1833-1897) vivió una época de grandes controversias musicales en Alemania, protagonizadas, primordialmente, por músicos de dos bandos: el de aquellos que consideraban que la música debía entenderse en términos literarios y el de quienes creían que la música podía darse en términos absolutos y autorreferenciados. Los músicos que se apegaron a uno u otro bando terminaron por producir, cada uno por su lado, obras maravillosas que en su conjunto ofrecen una excelente visión panorámica de la música en la segunda mitad del siglo xix. Los compositores interesados en escribir obras musicales descriptivas compusieron óperas, poemas sinfónicos y toda suerte de piezas sueltas con títulos descriptivos. Los compositores interesados en trabajar la música desde su lenguaje abstracto continuaron con la composición de sinfonías, sonatas, conciertos con solista y música de cámara, de acuerdo con la tradición clásica y la beethoveniana. Sobra decir que ninguno se inhibió de componer música descriptiva o música absoluta, pero se mantuvieron la mayor parte del tiempo en una tendencia u otra. Brahms, por ejemplo, no incursionó en el mundo de la ópera o el poema sinfónico, pero escribió innumerables canciones, obras corales y oberturas. Tal vez, la razón por la cual compuso sus cuatro sinfonías —relativamente tarde en su vida— fue el deseo de evadir la controversia sobre la sinfonía programática (aquella basada en un texto literario). Los valores estéticos de Brahms quedaron plasmados de manera contundente en su música de cámara con cuerda. De su imaginación surgieron sonatas para violín y piano, chelo y piano, tríos, cuartetos, quintetos y sextetos, en los que el piano tiene un papel tan protagónico como los demás instrumentos participantes; y en sus obras para piano solo manifestó plenamente el dominio que tuvo sobre el instrumento. Brahms se dio a conocer al mundo musical como pianista concertista. A los catorce años empezó a realizar giras de concierto, y jamás abandonó su amor por el teclado. Sus composiciones para el piano abarcan una amplia gama del repertorio del siglo xix: sonatas, conciertos, variaciones, piano a cuatro manos, danzas y piezas varias. Dentro de este conjunto de piezas se agrupan 5 treinta obras correspondientes a los Opus 76, 79, 116, 117, 118 y 119, en las que dio rienda suelta al profundo lirismo que siempre le inspiró. Los títulos de estas obras denotan su carácter poético e íntimo; predominan los caprichos, intermedios, rapsodias, fantasías, romanzas y baladas. Son obras muy libres en cuanto a lo formal, y complejas en lo tocante a su ejecución. Las ocho piezas del Opus 76 incluyen tres caprichos y tres intermezzi. El Opus 116 tiene el título general de Fantasías y consta de siete piezas. Schumann Siguiendo la usanza de la primera mitad del siglo xix, Robert Schumann (1810-1856) experimentó con todas las formas de la composición y con una gran cantidad de combinaciones instrumentales, y aunque sus conciertos son tan famosos como sus sinfonías, el conocimiento íntimo y verdadero del estilo de Schumann proviene del estudio de su obra de cámara, sus canciones y sus composiciones para piano solo. En estos tres ámbitos, da rienda suelta a sus ideas más originales y románticas, si bien en el caso de la música de cámara se muestra apegado a la tradición clásica y en especial a los aportes de Beethoven. Schumann llevó la noción de la pieza descriptiva, inspirada en danzas o estados de ánimo, a planos formales concretos, y armó obras contundentes a partir de la suma de miniaturas descriptivas. Tal es el caso de las conocidas Escenas infantiles que congregan trece obras sueltas, cada una con su título descriptivo: De países y gentes extranjeras, Historia curiosa, Ensueño, etc. Muchas otras de sus obras breves ofrecen una oportunidad única de expresión, en ocasiones más exitosa que la contenida en las grandes formas clásicas, como la sonata, el concierto y la sinfonía. Sus ciclos de canciones y piezas para piano resultan un tejido fascinante de instantes sorprendentes. En esta gran variedad anímica radica el éxito de muchas de sus obras para piano, tales como las Variaciones Abegg, el Álbum para la juventud, Hojas de álbum, Carnaval, Escenas infantiles, Kreisleriana, Papillons, Novelletten y Davidsbündlertänze. En medio de las más difíciles piruetas pianísticas, Schumann logra captar un instante preciso del sentimiento humano. A veces lo describe literariamente (como en Carnaval), y otras veces es un ejercicio desprovisto de imágenes reales, pero siempre cercanas al poder evocador de la música. La experiencia de Schumann con la composición de lieder (canciones) tuvo mucho que ver con esta forma de componer y con las ansias de asociar el mundo real con el mundo sonoro intangible; y en esta forma de ver la música radica uno de sus grandes aportes al estilo musical romántico. 6 Carnaval de Viena es una obra descriptiva dividida en cinco grandes secciones que la convierten en una amalgama de sonata con trozo descriptivo, en este caso, de estados anímicos en medio del bullicio y el alborozo del carnaval. Se trata de una obra técnicamente difícil, en especial en sus movimientos externos rápidos, enfáticos y vivaces. En medio de la gran sonoridad del Allegro inicial se escuchan ecos de la Marsellesa, por entonces prohibida en Viena, que nos recuerda que todo vale en carnaval. Entre tanta euforia hay momentos más tranquilos, pero fugaces, como el de la Romanze. El ambiente lúdico retorna en el Scherzino, que, junto con el Intermezzo, sirven de abrebocas para el gran final. La obra data de su visita a Viena en 1839 y antecede a los años de composición intensa de canciones. Schumann dirigió importantes entidades musicales, fue director orquestal, crítico y fundador de la revista musical Neue Zeitschrift für Musik, que aún sobrevive. León El compositor cartagenero Jaime León Ferro (1921-2015) combinó con éxito tres importantes facetas musicales: la de pianista, director y compositor. Se inició tempranamente en la música en el conservatorio en Bogotá, junto a la profesora de piano Lucía Pérez. Su buen desempeño en el instrumento motivó al célebre pianista chileno Claudio Arrau a recomendarle que saliera del país para adquirir una completa formación musical. La familia León había vivido en San Francisco (California, Estados Unidos) cuando el compositor tenía cinco años, y con motivo de los estudios musicales del hijo, se trasladó nuevamente a este país, en esta ocasión a Manhattan, por la cercanía a The Institute for the Musical Art y The Juilliard School, en donde el joven músico adelantaría sus estudios. Al finalizar los estudios de piano, Jaime León encontró su verdadera vocación musical a raíz de la observación del trabajo de Arturo Toscanini: la dirección orquestal. La experiencia orquestal de León en Estados Unidos gravitó en torno al teatro en todas sus manifestaciones musicales: ópera, ballet y comedia musical. Su ascenso en el mundo orquestal fue rápido y bien trabajado. A la buena usanza de las mejores escuelas de dirección, León fue repetidor y vocal coach. Allí cosechó los frutos de su formación en piano, haciendo reducciones, transportando, leyendo a primera vista, etc., y, en general, haciendo gala de su talento y formación. Al tiempo que se formaba como director, dominaba el oficio de compositor junto a Vittorio Giannini y Bernard Wagner. De Carl Friedberg heredó una de las más sólidas escuelas de piano alemana. Su 7 primer trabajo estable con la ópera fue con la Dallas Civic Opera Company, en donde actuó como repetidor de figuras tan relevantes como Maria Callas y Tereza Berganza, mientras que se empapaba de la esencia de lo dramático a través del trabajo de Franco Zefirelli, el director escénico. El contacto con el ballet llegaría con The Atlanta City Ballet Company. Más tarde fue director asistente del American Ballet Theatre en una gira de seis meses que lo llevó a trabajar con todas las orquestas de Centro y Sur América. Su profesionalismo y dedicación fueron bien remunerados: fue nombrado director musical de la compañía. Jaime León mantuvo fuertes lazos con las instituciones musicales colombianas, siempre vinculado a sus orquestas y agrupaciones. Tiene una larga lista de obras musicales orquestales, para el piano y para la voz. En los conjuntos de variaciones que escribió logró expresar algunas de sus mejores ideas musicales. En ellas transmite nociones diversas sobre el ritmo, con un uso atractivo de la síncopa, que se entreteje con giros inspirados en un gran acervo de repertorio que abarca desde las músicas del Caribe hasta el jazz, pasando por aires de la región Andina colombiana. La gran experiencia de León como director de la orquesta del American Ballet Theatre le permitió desarrollar una concepción del ritmo viva y aplicable siempre a un movimiento corporal explícito o tácito, evocado o sugerido. Tema y variaciones data de 1946 y fue escrita por León en Nueva York. Se trata de un ejercicio pianístico sobrio y de gran proyección técnica. El tema, en fa sostenido menor, es seguido por seis variaciones que van creciendo en dificultad y velocidad. Al Andante del tema siguen las variaciones Andantino, Allegretto, Allegro, Maggiore, Presto agitato y Con bravura. Ginastera La trayectoria artística de Alberto Ginastera (1916-1983) es una visión condensada de la historia y la problemática musical latinoamericana del siglo xx. En sus primos años fue receptor pasivo de las formas musicales europeas; de 1930 a 1945 combinó la búsqueda de su expresión personal con la de una estética musical auténticamente argentina. Con la madurez musical, su estilo se tornó cada día más innovador, sugestivo y de carácter internacional. Estancia, Panambí, el Fausto criollo y las Pampeanas fueron obras orquestales que sirvieron de modelo para mucha música latinoamericana de tendencia nacionalista, en donde prima la elaboración de danzas y canciones tradicionales. 8 La etapa más nacionalista de la obra de Ginastera, en la que hay cierta fidelidad a los ritmos y algunos elementos melódicos de la tradición argentina, culmina con la primera de las Pampeanas, una rapsodia para violín y piano. El mismo compositor describió esta época como la de su ‘nacionalismo objetivo’. En los temas musicales empleados hay elementos aun tonales inspirados en la música criolla. Sin embargo, a partir de la tercera Pampeana, el compositor incursiona en el ámbito de lo atonal y lo dodecafónico sin perder de vista la referencia tradicional, lo que Ginastera llamaría su etapa de ‘nacionalismo subjetivo’. Sus composiciones, de técnicas contemporáneas, parten del trabajo con la música tradicional argentina y conservan de ella una gran energía rítmica, un lirismo cautivador y un ambiente misterioso que el mismo compositor describe como ‘alucinante’. Si en las Danzas argentinas, Op. 2, Ginastera se basó en aires específicos como la zamba, la chacarera y la milonga, en las Suite de danzas criollas, Op. 15 los referentes del compositor son abstractos y señalan hacia el mundo evocador y rítmico. Están concebidas dentro de un marco armónico disonante que alterna, a veces, con el ambiente plano de una escala modal. Pero desde la primera danza idealizada, el discurso es disonante (con acordes que se ejecutan con la palma de la mano), y el ritmo sincopado y vivo cobra una vida casi independiente. Los movimientos lentos ofrecen un vívido contraste con los episodios rítmicos y construyen el rico mundo personal, evocador y alucinante que es tan característico del compositor. La impronta latinoamericana se reconoce en el juego entre compases de 3/4 y 6/8 que se escucha en varias ocasiones a lo largo de las Danzas. Esta obra surgió en 1946, mientras Ginastera estuvo residenciado en Nueva York, gracias a una beca Guggenheim. Granados Destacadísimo pianista y compositor, Enrique Granados (1867-1916) se convenció de la necesidad de hacer una escuela musical de corte nacionalista español, de acuerdo con los preceptos de Felipe Pedrell, quien instó a unas cuantas generaciones de músicos españoles y latinoamericanos a crear un estilo propio a partir de materias primas musicales tradicionales. Para Granados, el mundo español lo conformó principalmente el mundo de la ‘manolería’ de Madrid, aunque también se escuchan en su música motivos de su Cataluña nativa y los hechizos de la música andaluza. El nombre de Enrique Granados y Campiña cobró fama luego de la composición de las Danzas españolas, Op. 37 en 1892, si bien su gran habilidad 9 pianística ya era un hecho reconocido. Son doce obras de gran destreza técnica y riqueza descriptiva. En estas examina un amplio espectro de la música tradicional española, y aunque respeta las formas sencillas para este tipo de pieza de carácter, no sacrifica su personalidad musical enfática y elegante. En Allegro de concierto, Op. 46 se concentra toda la bravura presente en las Danzas, combinada con un despliegue técnico que se inspira en la escuela pianística de Liszt y un uso imaginativo de la forma sonata. La obra fue escrita para participar en un concurso de composición citado por el Conservatorio Real de Madrid en 1903, donde se hizo acreedora del primer premio (el segundo fue adjudicado a Manuel de Falla), precisamente por el uso acertado de las técnicas pianísticas y el dominio de las formas académicas. La referencia española es sutil y la obra es una de las favoritas entre la producción de Granados por su brillo y expresividad. Ellie Anne Duque. Musicóloga de las universidades de Indiana y UCLA. Profesora titular y emérita, e investigadora de la Universidad Nacional de Colombia. Allí se desempeñó como directora de la Dirección de Investigación, del Instituto de Investigaciones Estéticas del Conservatorio de Música y de la Dirección de Divulgación Cultural. Durante ocho años fue editora de la revista ‘Ensayos. Historia y teoría del arte’, una publicación periódica indexada del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Facultad de Artes de la Universidad Nacional. Sus investigaciones se centran en la música colombiana de los siglos xix y xx. Betty Garcés, soprano (Colombia) · Foto. Cristóbal de la Cuadra TEMPORADA NACIONAL DE CONCIERTOS Banco de la República 2022 Consulte toda la programación en www.banrepcultural.org/actividad-musical Compre sus boletas en línea
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Programa de mano - Juan Pablo Cosme, piano (Colombia)

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Juan Pablo Cosme

Por: | Fecha: 2022

"Juan Pablo es Magíster en Interpretación y Pedagogía Instrumental y pianista de la Universidad Nacional de Colombia, estudios que realizó bajo la dirección de William Mac McClure. A lo largo de su trayectoria musical se ha presentado como solista, músico de cámara, músico de orquesta y pianista acompañante en diversos escenarios en Colombia y Estados Unidos. Fue seleccionado para ser parte de la Serie de los Jóvenes Intérpretes del Banco de la República en 2021. En 2019, fue ganador del concurso de solistas de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Música de la Universidad Nacional de Colombia, obtuvo el primer puesto en la categoría de Jóvenes Intérpretes del VI Festival Concurso Pianissimo, y el segundo premio del VI Concurso de Música Iberoamericana para Piano ‘Luis Carlos Figueroa’, donde obtuvo también mención de honor a la mejor interpretación. Ese mismo año participó en festivales nacionales e internacionales tales como el Cartagena Festival Internacional de Música, Sewanee Music Festival, el festival del Brevard Music Center, en donde participó en la serie de conciertos y clases de verano, y en el VIII Festival Internacional de Piano en Ibagué. Ha ofrecido recitales en auditorios en Estados Unidos, como Guerry Hall, Sercy Hall y Art Gallery, y en Colombia en el auditorio Teresa Cuervo Borda del Museo Nacional de Colombia, los auditorios León de Greiff, Olav Roots y Guillermo Uribe Holguín de la Universidad Nacional de Colombia, Centro Cultural del Banco de la República en Ibagué y en escenarios de Villa de Leyva, Cali, Medellín, Cartagena y la región de Urabá. Ha colaborado como pianista de orquesta en la Orquesta Supernova, formada para el XIII Cartagena Festival Internacional de Música y en Cumberland Orchestra en Estados Unidos. Participó como pianista acompañante en The Art of Singing: Technique, Movement and Text, escuela de canto internacional llevada a cabo en la Universidad Nacional de Colombia en 2016. Actualmente se desempeña como docente de música de cámara y piano en la Escuela de Música de Cámara de Bogotá (EMCB) y en la Academia Allegreto, institución enfocada en la enseñanza con la metodología Suzuki para la formación a temprana edad."

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José Miguel Rico, violín (Colombia) - Foto 1

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José Miguel Rico, violín (Colombia) - Foto 3

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Reseña concierto José Miguel Rico: Antiguos sonidos, jóvenes voces

Por: Daniela Peña Jaramillo | Fecha: 2022

Antiguos sonidos, jóvenes voces Por Daniela Peña Jaramillo* La Serie de los jóvenes intérpretes del Banco de la República tiene muchas facetas; podríamos decir que es uno de los escenarios más anhelados por los estudiantes de diferentes programas de música en el país, pero también tendríamos que agregar que, injusta y lamentablemente, es un espacio cuya importancia debería ser mucho mayor y que podría albergar muchos más espectadores de los que normalmente encontramos en la Sala. Se trata de un lugar que tendría que ser ansiado, no solo por quién añora actuar en este escenario, sino por un público mucho más amplio. Las razones de la poca asistencia pueden ser muchas: el clima, el transporte, el horario, la falta de un nombre taquillero en el programa. Todas estas pueden ser válidas, pero ¿qué tal si pensamos en aquella persona que, en 1766, no se sintió suficientemente motivada para asistir al recital del pequeño Wolfgang junto a su hermana Nanerl, simplemente porque eran jóvenes, poco conocidos y, tal vez, la nieve se había encargado de entorpecer los caminos de la ciudad? En Bogotá no hay nieve, pero tenemos la lluvia; sin embargo, esta no debería ser una excusa para desaprovechar estos encuentros, estos lugares en donde jóvenes como el violinista José Miguel Rico deciden enfrentarse a aquellos compositores que escribieron la historia de la música con su obra y la regalaron a un público atemporal para que doscientos, trescientos, cuatrocientos años después, pudiera seguir disfrutando de ella. En ocasiones no nos damos cuenta, no logramos apreciar lo poderoso que es ver a jóvenes debutantes interpretando música que se escribió hace cientos de años; reviviendo lo que otros compusieron para sus contemporáneos. Música que, tal vez, nunca pensaron que sobreviviría al paso del tiempo, ni que se convertiría en una llave para entender lo que, entonces, solía ser un presente ordinario, pero que luego se transformaría en un pasado maravilloso, lleno de misterios que solo la música lograría develar. Damos por sentado que un joven elija enfrentarse a la música del pasado para compartirla con el público en una de las salas de concierto más importantes del país; que, como José Miguel Rico, no se amedrante frente a lo que impone releer y hacer vivas piezas del calibre que pudimos escuchar el jueves 5 de mayo en la Sala de Conciertos de la Biblioteca Luis Ángel Arango en Bogotá. El público fue íntimo y cálido; amigos, familiares, colegas, todos celebramos la manera como el intérprete se enfrentó a los grandes nombres de la historia de la música y los compartió con el público, desde un inmenso respeto por la Sala, por la música y por quienes estábamos escuchándola. El violinista se atrevió a dialogar con figuras como Niccolò Paganini, Piotr Ilich Tchaikovsky, Wolfgang Amadeus Mozart y Camille Saint-Saëns: se atrevió a leer, no solo diferentes épocas de la historia, sino las diferentes edades con que contaban los compositores al momento de escribir estas piezas; se atrevió a traducir los diferentes estados de madurez técnica, musical, espiritual y emocional de estos personajes. Pero, sobre todo, se atrevió a ser él y cerró, no como se esperaría, con la ‘pirotecnia paganiana’, sino con un bambuco del colombiano ‘Lucas’ Saboya, que recogió toda la emoción que se había acumulado a lo largo del concierto. El concierto comenzó con los 38 años de Tchaikovsky y la manera en que tradujo los diferentes estados de la melancolía que deja el abandono de un lugar querido, una melancolía que solo puede entender quien lleva ya algunas décadas en el mundo y con varios sufrimientos a cuestas, como es el caso de este internacional ruso. Después, la primera década del pequeño Wolfgang y la libertad sin límites que solo un niño puede expresar; las cadencias inconclusas, el instrumento solista que se vuelve acompañante, todo, sin ningún tipo de inhibición o de imposición técnica. Luego del intermedio, lo que todos esperaban: la juventud de Paganini; sus veinte años y la sensación de infinitud que los acompaña; el despliegue técnico y la teatralidad a la cual poco se resisten y que, sin quererlo, quieren calcar. José Miguel no copió ningún movimiento, no emuló o buscó imitar. Tocó a su manera y eligió los entornos sonoros y técnicos adecuados para hacerlo; no quiso ser Paganini, pero respetó su música, así como este hizo con la música de Johann Sebastian Bach en su Capricho en si menor. Finalmente, la festividad ibérica y los aires de zarzuela que Saint-Saëns logró capturar en la Introducción y rondó caprichoso; con un aura decimonónica y folclórica que iría organizando el escenario para el El arenoso, ese bambuco que, tocado en piano y violín recordó a los grandes salones del XIX en donde este ritmo era interpretado por ensambles que buscaban dialogar con el antiguo continente. Un diálogo que José Miguel Rico recuperó, revitalizó y presentó a su público; un diálogo atemporal entre la infancia, la madurez y la juventud de la música, sus creadores y sus nuevas voces, que nos invita a visitar y ser parte de estos espacios que albergan siglos y siglos de sonidos e historias. Reseña acerca del concierto que ofreció el joven violinista José Miguel Rico (Colombia) el jueves 5 de mayo en la Sala de Conciertos de la Biblioteca Luis Ángel Arango en Bogotá como parte de la Temporada Nacional de Conciertos 2022. * Daniela Peña Jaramillo es egresada de la Pontificia Universidad Javeriana, en donde cursó el énfasis de interpretación de guitarra clásica bajo la dirección de César Augusto Quevedo. En 2015 terminó sus estudios en el énfasis de investigación de la Maestría en Estudios Musicales de la Universidad Central, dentro de cuyo marco ha recibido clases de laúd renacentista con Daniel Zuluaga, Sam Chapman, Ariel Abramovich y Hopkinson Smith. Actualmente participa continuamente con el Ensamble Barroco de Bogotá y es candidata al título de Doctora en Historia del Arte y Musicología del Departamento de Arte y Musicología de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) con una tesis sobre las intabulaciones para laúd del primer libro de Vincenzo Galilei.

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Reseña concierto José Miguel Rico: Antiguos sonidos, jóvenes voces

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Diego Oyola Quinteto, jazz (Colombia) - Foto 1

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Diego Oyola Quinteto, jazz (Colombia) - Foto 2

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