TRIMESTRE X. AÑO 1II.-Bogotá, 4 de junio de 1872. NUMERO 484.
1 L 11
,ª)])Wrnm.'il'rn~@Llª§.-Se publica los mártes, juéves i} ffi~WlJ~'il' &,. . .rr~~~~&IT!¡. -Los lect9res h!ll!arán en { Wrn.rnS2lil@¡¡j.-Valor del t!imestre r1o~fltertes cuarenta centavoI.
silbados i el mismo dia Be llevaalBs casas de IOB Buscritores de la ca- e~te per¡ódICo: .Poll:ICII - Rel!JI~n-Llte.raturll .-. Hechos dlverso~- Valor de.l ano 09n derecho a. un ltbr~ .de ~rlm~ ocho fuertes . . Número
pita\. Los de fuera lo recibirán por los correoS respectivos oon toda F¡}oso~a-ArteB 1 o~C1os-Instrucclon públ¡ca-Blbltografía-Me~JCma 8uelto Velnte. centavo l. Se publ~c~n remltld?s 1 .o.Yl~OS, a. un preCIO auma-esactitud
pues confiamos en la honradez del Gobierno de 111 Union i -Variedades-RevIstas de los Estados-De la CIUdad-ComercIal-De mcnta módIco. Para todo dlrlJlrse al Editor 1 AJente Jeneral,
, en el celo de todos sus 8ubalternoll. América-De Europa-De Asia-Da Africa, elc. etc. NIOOUS POIlTOIf.
Nuestra idea.
Es un hecho fuera de toda
duda que en nuestro pais existe
una eonsideraule porcion de
hombres que por situacion, por
preocupacion, por ambicion o
por desesperacion, espía sin
cesar una ocasion, cualquiera
que ella sea, para turbar el
órden público.
Esto lo sabe todo el mundo.
Estos hombres no son personas
aisladas: son grupos,
círculos mas o ménos numerosos,
ligados por condiciones
idénticas, que a un momento
daelo se aprestan paraemprendel'
cualquier evolucion que
tenga por objeto proporcionarles
un vuelco político en el
cual fundan e~peranzas mas o
ménos personales.
Esto tambien lo sabe todo el
mundo.
I esos hombres, no solo es·
tán en contínuo asecho contra
el órden público, sino que impulsados
por motivos puramente
personales, están dotados
de la enerjía que esa clase
de impulso comunica siempre
a los que obran en asunto propio
individual.
De esto tiene una larga i
mui dolorosa esperiencia nuestra
sociedad.
Entre tanto, ¿ qué hace esa
sociedad, de contínuo amenazada
por tan peligrosos elementos
de perturbacion i de
malestar constante?
Es necerario crear una
FUERZA DE EQUILIBRIO SOCIAL
capaz de neutralizar i de mantener
en respeto a la falanje de
los perturbadores de profesion.
Como esto~ individuos, casi
en su totalidad, son personas
que nada tienen que conservar
ni que perder; porque, como
ya lo hemos insinuado en otra
ocasion, un comerciante, un
hacendado, un acreditado profesor,
un artesano de clientela
etc, jamas pensarán en vivir
de desórdenes; es claro i mui
evidente que el elemento compensatorio
que ha ele orgarnizarse
para anular la accion tenaz
de los enemigos del reposo
público, debe componerse de
los datos contrarios a los que
se trata de reducir a la im potencia.
Quiere d ~cir, que al dar 01'·
ganizacion a la potencia que ha
de aniquilar de hecho la fatal
tendencia de los malos ciudadanos,
se ha de componer esa
fuerza de los hombres mas honrados
e independientes que haya
en el pais ; pOl'q ue así como
aquellos obran siempre con la
perseverancia i enerjía de
quien lo hace en cosa propia,
así estos son tambien los que
tienen un constante i personal
interes en q U'3 la sociedad no
pierda su normalidad padfica
i legal, única con que ellos pueden
vivir i conservar i aumentar
sus haberes de toda especie.
Quiere decir aún, que eso
que en el editorial de nuestro
número anterior hemos llamaelo
Qué hace? Esperar que los
Majistrados encargados de
cumplir unas leyes ql¿e permi-ten
conspi?'ar, provean como SOCIEDAD DE LA PAZ,
puedan a la conservacion del debe com ponerse de cuanto haórden
público. ya de mas independiente i ho-
Es cierto que la gran mayo- norable en las diversas capas
rí, ele la N acion es pacífica de la entidad !'tocial.
natural i necesariamente. Una v,;z que hemos demos-
Ocupada esa gran mayoría trado que hai de hecho una espacífica
en las labores de los pecie de corporacion, una escampos,
en las tareas de los pecie de sociedait anónima para
talleres, en las faenas del co- esplotar el desól'den ;
mercio o en los cuidaclosi dili- N ada es mas natural i benéjenclas
profesionales, cada cual fico que crearle otra corporaatiende
al éxito de lo que le cior;, en inverso sentido.
atañe personalmente; i la gran I como esta última corpol'acuestion
de la seguridad comun cion tiene en mira la defensa
queda a merced de los que ele los intereses de la gran maocupados
contín ua i tenazmen - yoría pacífica de la sociedad,
te en hallar una coyuntura es Cl !I'O que no puede ménos
cualquiera para sembrar la de go?:ar de una simpatía i de
discordia civil, viven sin nin- una influencia igual a la grangun
obstáculo capaz de hacer- deza i moralidad del objeLo
los abjurar su profesion de ha- que entl'a~a.
cer degollar al pueblo para Hasta hoi, entre n~50tros la
crearse ventajas de cualquier paz no cuenta con mas apoyos
clase. directos que los que puede
Es, pues, necesario ideal' un darle un Gobierno, el cual ·temedio
de ca1'ácter permanente ñido casi siempre con alguno
i bastantemente respetable, así de los colores de la política jepor
su personal, como por la neral, lirpita su~ influjos, no a
elevada mira de su existencia, toda la sociedaJ, sino al corto
que sea un baluarte contra las número de sus respectivos afieternas
maquinaciones de los lia.dos.
que no duermen espiando a Esta situacion no es la mas
qué horas se da un asalto a la aparente para luchar con el
s?ciedad inerme i desaperci- elemento perturbador, el cual
bIda. se engruesa, de ordinario, con
..,
los descontentos que todo Go- do por todos los delirios de ahora se le ha considerado :
bierno se crea, cada" ez que no todas las iras, de todas las zo- por el de las soluciones que
sathface una exijencia inuebi- zobras i de todas las mas proporciona la fuerza física.
da, o debida pero de imposible odiosas inquietudes, resolver Supongamos que de aquÍ a
satisfaccion. alguna cosa sin novecientas uno, dos o tres años el partido
Ahora pasaremos a conside- noventai nueve probabilidades conservador toma la revancha
rar esta cuestion de la paz pú- contra una, de resultar con al- de 1860 i recupera a balazos
blica bajo otro aspecto que el gun enormísimo desproposito? lo que a balazos ha perdido.
que siempre le hemos recono- I si esto se dice de un hom- Qué sucederia ?
cido. bre, ¿ qué no podrá i deberá Que al cabo de cierto tiem-
Dejando a un lado los gru- decirse de muchos hombres, po, el partido liberal volveria
pos i círculos bocldnclwros, a de un partido, de varios par- a tomar de la misma manera,
quienes debemos considerar co- tidos encolerizados i asidos de a balazos, posesion del poder
mo enemi,qos de todo el mundo j los cabellos como irritadas que a balazos hubiera perdi.
porque ellos no son sino ami- Mejeras? do.
gos de sí mismos, que es por i Por eso es que hai jentes 1 tras esa evolucion vendria
para quienes velan i trabajan; que no quieren la paz. Ellos otra de su adversario; i otra
i no considerando, en los con- saben mui bien en donde está contra este; i otra mas contra
ceptos que vamos a flmitir,sino su valer, su fuerza i su con ve- aquel.. ....
a los pm·tidos políticos dignos menCla; en donde les aprieta Pero entónces, cuando aca-de
este nombre, hai que ob$er- el zapato. barÍamos? .. JAMAS!
var que -Con la paz, dicen sin pro- Cierto es que una solucion
Las verdaderas soluciones nunciarlo, la sociedad podrá pacífica es mas lenta en sus
sociales, aquellas que pueden distinguir lo blanco de lo ne- resultados; pero es mas segu·
aspirar a establecerse i a fun- gro, lo verdadero de lo absur- ra, i sobre todo, mas SOLIDA.
dar un porvenir, son do, la luz de las tinieblas; i Cierto es tambien que un
Las que se obtienen en me- seremos condenados irremisi- pa1,tido conquistador no abdi·
dio de la paz i de la mesurada blemente. Bulla pues, gritos, cará jamas sus conquistas anmaceraeion
de los hechos de algazara, estruendos i tempes- te fórmulas leg.ales. .
cada escuela social. tades i terremotos i volcanes i Pero eso es SI se qmere des·
.Por eso es,-que algunos de los el infierno mismo si es nece- poseerlo, no por los resultados
afiliados en la bocltinchomanía sario, para que no se oiga na- de una masticacion un tanto
profesional,apénas empiezan a da, ni se entienda nada, ni se lenta pero imparcial i lójica
ver los malos efectos que una comprenda cosa ninguna; ni de las ideas, sinopJ'e.~cindiendQ
pacífica elaboracion de ideas siquiera que nosotros somos d~ ese medio, i apelando a me·
va haciendo resaltar contra unos bribones...... ras formalidades legales.
ellos por doquieta, con graví- . 1 esto tambien es mui natu- Sobre todo, las soluciones
simo daño de su preponde- ral; porque el bien como el materiales tienen el mui grave
rancia, mal, tienen su lójica. incon veniente de las retaliacio-
Buscan cualquier pretesto Pero esa no es la conducta nes, que jamas pueden faltar
para poner en conmocion los de los hombres honrados; de cuando tienen siempre a la
ánimos i hacer que la paz, si los que pretendiendo que la vista el ejemplo mismo que
no se turba, se ponga·en in mi- razon, la verdad i la justicia las motiva.
nente peligro de. desaparecer. los favorecen, desean que los Entre tanto, el pais qua su.
I todo esto es demasiado ló- principios de cada cual sean fre esos vendavales, suda san-
JICO. discutidos de la única manera gre, suda honor, víctima de
E hombre obra porque como es posible toda verdade- U;obiernos tiránicosroR NEOE-pIensa.
ra discusion: en medio del SIDAD; porque
Cuanto mejor pueda pensar silencio de las pasiones i del El que adquiere con la fuer-otro
tanto obrará mejor. r~cojimiento de las intelijen- za, no puede conservar sino
Esto es incuestionable. Clas. con la fuerza; i la fuerza es
¿ I cuándo es que un hom- En todo esto concedemos LA tan elástica como las circuns.
bre obra mejor? BU ENA FE a los partidos po- tancias que la ponen en ae-
Cuando piensa mejor. Es líticos , que hacia ,aparecer al :tstuto diplomático
tado uecee idad ninguna, i i mi pobre J enny --No, dijo con r esolucion el duque de San como un excelente sefior, fmnco i cordial, a
h(l pasado Lantas ugQnbs, hustu hn.ce cuatro Andrés; Gabriel me ha dado 81> palabra, i quien no habia logrado contaminar el fre·
años 'lue l:t encoutré, cuando ya se elevaba es incr>paz de faltar a ella; Jcnoveva le ama cuente trato con las C6rles de Europa.
por si misma! ...... Poro volvamos ¡, nuestro 1 mas de lo que yo la juzg'lba capaz, i él 1ft Parecia el rostro do un honrado comer-asunto
...... ¿ Dónde estábamos? corresponde, estoi seguro; lo de Jenny fué ciante holaudes.
-Eu el Café Nuevo, contestó el diplomá- un verdade.·o capricho, que pasó paro. síem· La puerta del pequeño salonvolvió all.brir-tico
sonriendo. pl'e: en :Madrid, oe portara mi señor sobrino se, i entónceq no fué el rublo Frank quien
~l Ah, sí, ya recuedo! lo h~bi .. couclui- de otro modo que en Paris, o nos veremos apareció en ellu, sino la dominaute figura del
do ele tomar café, 1 lem un por,odleo cuando las caras; el coude de Castellote se casará portero de estrados, porque en 111 embujada
hend pronunciur delaute ,le mí el nombre de oou la duquesa de Sámo.no i olvidará a Jen- francesa jamas se faltaba a la mas ríjida
J~mny. Erau Santelices i el periodiat:¡, que ny, ¡ oh, si! debe olvidl1rlo.. etiqueta..
habl~bl1n de ella, i decian quo no vendria, --Deseo que suceda todo o. vuestro gusto, -Et señor dou Demetrio de Santelices,
temll1'os:t de las facciones, i porque se 1" h:I" querido Luis. ¿ Quereis decididamente que dijo el criado cou voz eonora, inclinándose
cian me.iores PI'oposiciones para el teatro de vuestra Jenny aparezca en M:tdrid? delanto del empl'e8ttrio, que ptlsalia el dintel
Coven·Gardeut de L(¡ndl'es. , --Con todo mi cora~ou, CárloB¡ dijo el du· , nrton, se·gl·ilrí, se amenazó desamas
Sabogal,. estraJc el. tnlllo~ que n'ajarlo i echnl'ln ahajo, i por Hn se
pcs::tba ca~orce l!bl'as, l lo esl l~'Jlé, ) violó mi domicilio i se penctrÓ a las
arranqué ,In efllsloll de ':lllgre I !illl . pieZ'ls de mi h"hilaciun donde eslaba
dolor del paciente. E, te, ilc,;pncs dc ,'n("et-rna mi -eflOra ; i delanle rle clla
la operacion, se p:'~senló ~ la multi- la soldadesca se cch6 s"bre mi equitud
nllrn erosa, scnalanilo, a, m,1S de p:tje, arrebHó parte de él, i se lo llcdos
mil p.crsonas el brazo i el costado, 110 cousigu ..
puntos de la uperacion, sill raslro uin·
guno ni asomos ele sall"re, i sill de,;fallecimicllto
ni maleslar (le parte del
operado. El pucblo tesligo oc csto, se
entusiaslIló, sc lIenÓ.de admiracion.
i eu Sil injéll uo alborolo, hubo algn·
nos que tomaron el tumor cnonne i
lo IIcvaron en pl'ocesion pUl' l"s calle"
de la cill'lad. La oper«cion hauia sido
hecha entre las d.iez i las once de
la mañana i el operado permallecio
todo ese dia i la mayor partc de la
noche sil) lIovedad alarmante; peru
al dia sigúiente, a la hOI'a de empezar
mí practica ante el publico; el enfermo
apareció lIlue,·to, i con un cuchillo
hundido hasta el cabo, en el cos-
Cerróse esla, i quedaron Bolos et embllj;,·
dor i ellatalista, COmo decio. aquel.
-Salud i bueuo. ventura, señor conde,
esclamó fro.nornente Snnlelices, con sumo
desenfado, dejando sobre un sillon BU sombrero.
-i Oh! i oh! amigo mio, buenos dias, dijo
el embajador apretando cordialmente entre
sus manos las del empresario; ¡ c6mo va?
¿ Haí algo de nuevo? ¡ Nuestros amigos están
bueno~? ¿ Siguen constaotes en su buen pl'Op6si~
0 ?
-Mis amigos jamas varian, señor conde:
son, como vos deCÍS, uoas excelentes jontes.
-¡ Oh! 8Í, mui excelentes; creed que los
estimo mucho, mi querido Santelices. ¡Oh!
cuando me despida de la vida que llevo, cou·
t1'l> mi gusto, en ninguna pInte me est:1blece·
ré mas que en Madrid: cl·eedme.
-Quiero creeros, selior conde.
- iOh ! vos siempre sois malicioso, mi buen
amigo, i no teneis raZO(l para tratarme asi ;
bieu sabeis que amo a EspalIa, i 'que la miro
como verdadera hermana de la Francia.
-Lo mismo dice el señor embajador in·
glés; tambieu nos estima mucho i de~ea
nuestra prosperidad, i por cortesía, se le debe
creer igul\lmente. Ahor .. hablemos de otra
cosa, amigo mio.
Podifl decirse que aquellas dos palabras,
amigo mio, anojadas al rostro del emblljador,
h~bian hecho que aquel se contrajera mo·
mentáne ... mente de despecbo; pero el lijero
movimiento desagl'adable que se pudo not",r
en sus faccione s, :ies'lpareci6 enteramente
coo 1" mas fraocn de las sonrisas.
-Hablemos de lo que gusleis, querido
I:lantelicea.
-Sin que mi 'lisita os cause ninguu jéne-
1'0 de molestia, sellor conde.
- i Oh! no: nada tengo que hacer en lodo.
la mañ"na, podeis hablar francamente.
-i Como al subir he visto 105 caballos en
el coche! ......
-Es que en este momenlo acabo de llegar
de mi paseo de mañona; os estimo mucho,
qnerido, i os trato con franqueza: oreed que
si tuviera una'ocupacion os lo diria.
-Bien: siendo así, me alegro; pero de
todos mOllo1 seré breve. Se trula. de J enuy.
Este i airas varios insulto, menudo,
i gl'oseros de que no hago caso,
,un los agravio, que se me hall hech()
ell ia culta capital efe llna ~ilcioll qlle
se ert;c civilizarla; i eso< agravios sc
'nu ball inferido preci~Gme(Jlc pOI' los
<.file lilas uuligacioll tenian de mostrarse
cultos i bcnevolos, sinó conmigo,
a lo méllos CUIl el Plleulo; ~~ll todo
caso de lIlu~1 ral'!';C moderarlos, pmdelltes
i dignos por su pro.pio clecoro
Jos ductores i sabios, los estudiantes
que a"pir,w a serlo, i las autoridades
i Inajislrarlo,; qlle representando la
lei i Ja moralidad publico, son en todas
partes el e~pejo en quc se refl eja
-¿ '.Codnvia, amigo Sautctices'¡ B,en Fabeis
que no quiere velllO": :.ycr 08 he enseña.do
su misma cnrt,,; teme o. !:ts ......
-Lo sé, pero se b., anuoeiado en el peri6-
dioo de mi amigo Jutiun Galindo, i debemos
hocel' todos los esfuerzos posibles para Con
srguir que venga.
E! rosll'o del embnjador se contrajo otro.
vez lijernmente :11 oir la plltabra debemos,
pero se domin6 t.mbi en.
- ¿ Traeis Duevas ofertas que hacerla?
V· oamos.
-No, sellor conde, no es posible! me sostengo
en las últimas condiciones, porque he
liraJo mis cuentas, i aunqué en todas taa
funciones 8e llene completamenle el teatro,
con dIficultad eacaré mas que lo ofrecido.
-Pues en ese Cl\so ......
-Peeo traigo unn. nueva I\rma para cou-moverl:
1, que CI'CO hIt de hacer mas efecto
que un aumento de dinero.
-¿ Una llUeVo. arma? No 08 comprendo,
querido S"ntelices.
-Mirad.
-¡ Una. carla!
-Esactamente.
-¿ Para Jconoy?
-Púru Jenoy ['uokar, señor embajador;
esto para ella ijerIÍ. IOIl" eficaz que uu poco de
oro. Adivinad quien la h" esc rito.
-Es imposible: podeis decido.
--A vos soi deudo,' de tan buena idea, se-fior
conde, pueslo que po!' vos sope CUAnto se
habilln am»dQ J enny Punker i Gabriel do
San Andrés.
-¿Será esa CI1rta det cDnde de Castaliote!
--Ni mo.a ni ménos; él mismo me la ha
dado.
-¡.I es pa.ra Jonny?
-Para Jenny Punkor, os lo repito; mirad
el sobre.
·Et emb:tjador la eojió i ley6 en aquel.
-¿ 1 bien? dijo.
-Me interesa. mucho que osa co.rta llegue
pronto i seguramente a Dlo.nos de Jenny; sé
que hoi por la mañana despnchais un correo
al ministro de rebciones es(,rnnjoras i e5I'e~
1'0 de vos este ffl'lor. . Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
LA ILUS~RACION. 267
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la sociedad misma, i el modelo que uno de sus libros, ni conocer nada
la educa i la eüifica. de esa sabidlll'Ía i sn ciencia; yo,
Debe tenerse presenle que el examen
cada I"hito, o la a IIl0psía dd
cuerpo de Sabogal, 110 se hizo como
debia hacel·,e, el mismo dia que apareció
él mucrto; sino tres (¡¡as cle~pues.
POI' el resultado de ese rCcallOcimiento,
los doctores, con los e,ludiantcs
i las 311toridaclcs, han fallado
en cOIIII'u mia, decludndome charlatan,
impostor i estafador del pueblo;
charlatan, como si a todo c¡"uj¡1ll0, i
aun a 1 mas sabio i hábil 110 le sucediera
varias vece~ que se le muere el
paciente, 1 esos leñores médicos i ¡¡Us
discípulos han dccidido dogm;ilicamente,
no solo lllle yo soi cj¡arlalal~
e impo,lor, sino insignc tramposo I
embustero, que engaño al público
cuanuo le hablo de los secrelos <¡ue
tengo, por(lue en concepto de ellos
no poseo sustancia alglHla, ni medio,
ni rCCllrSO nin¡;uno intelectual
pura haccl' opcracioncs qnirllrjicas
sin efLl~ion de ~angre, i sin ni111)1I110
c1elosincovenicutesquc producen aun
tiempo mismo estas tre,; condiciones
de torla gl'ave operacion quirúrjica;
la !temorl'l!jia, rL dolol' i lit in{lt1macion.
Pues bien: yo, cn nombre de Dios
i en testill1oni¿ de la verdad, afirmo
en mi couciellr.ia pura i tranqllila
ante ese Señol' de toda lllz i de loda
vcrdad, i a!inu,o en lll'eSencia de los
hombres que tengo Sllstancia.i quc
me hacen ca?az ele p¡'acl ie ,u' las operaciones
mas ,érias de la cir\1jia, sin
producir hemorrajia, ni dolor, ni inflam,
lcion, ni sllpuracion; sin producir
hCl1lorrajia, a11llllue rasgue i
diyida los gl'llesos 1'3505 arteria les i
venosos, alln'lue separe en pedazos
distir.tos, esos vasos, cort;\ndolos en
todo su calibre; sin producil' dolor
aunque hiera hls pal'les mas scnsibles
del 5islem~ nervioso; i sin pl'o,lueir
illflnmacion Ili acarrear sllpllracion,
aunque dilar~re los tejido, mas irritables
i mas delieauos del oJ'¡;anismo.
Si; tcngo preparaciunes, llliag propias,
sacada'i de las \'irtudes i propiedades
de ciertas planlas (Ille 5011 lln
tesoro en elreino vejeta 1, que me Ila n
el pod el' de operar quirúrjicaml'llle,
con h{;mostáticos, flllestético'i i anliflojisticos,
snpel'iol·e.i a lo, qne posee
actuallllente b ciencia europea, que
cs mas que la ciencia ele los señores
médicos inc,.edlllo~ de mi patria; i
excito ~ todos estos i 105 reto formalmente,
a que delante de testigus imparciales
i con Ins solcmnidades del
caso, ocurran a yermc practicill' esas
operaciones, a yerme motilar el ClH'rpo
humano cn las cstl'emidacles su·
periores c inferiorcs, i aun en Orga.
nos mas (lelicndos, sin hemol'l'ajia
ninguna, absolntamente sin efl1~l~n
de sallgre, "in dolor del paciente 1 <¡lll
ill/lalllacion ni supuracion subsecuentcs.
1 yo, humilde como ~oi, io;nOl'ante
como soi, sin haber abicrlo lIunca
-i Ya! ¡ Quereis que et corrco llcve lo.
cRrta a Jenny!
Ajit6 uu cordon de. seda i oro, 0:16se el
sonido de uua campamlla de plata, 1 en el
mismo momenl o ,'pareci6 et rubio Frank a
h puerta del pequeño salon.
-Tomad, l!'rank, ¡J'jo el diplomático; lle·
vad es'" carta ,,1 selior secretario de la embaj.
da: que se maude a Pal'is por el correo
que saldl'& 11 las dooe, recomendando se entregue
a la misma persolla que dIce el sobre,
marchad.
El cl'Íado ~Icman se inclin6 i obedeció.
_¡ Eatuis contento do mi, querido San telices'!
dijo con bondadoso acento el conde
franees.
-Enteramente satisfecho, seilor; sois un
buen amigo en todas ocasiones, i os 10 repit.o,
podeis contar siempre conmig.o,
-Os devuelvo vuestras m,smas pa.labras
con respecto a mi, dijo tendiéndole lo. m~no.
Santeliees se puso en pié.
-¡ Os marchais?
-Con vuestro permiso, señor conde; &0-
lamente os suplioal'é, qnc si os ~s posible
recomend eis mi carta.
-Creed 'que teudré un placer en hacerlo
asl, i casi os doi un" seguridad de que J en·
oy canlill'á eu vneslro teatro.
-Gracias, señor; esa csper~nza me sostendrá.
Demcttio de SlIotelices correspondi6 a la
franca sonrisa que rodaba por los labios del
embajador, salud6 i sali6. . '"
El conde d~j6 pasar cuatro mlDutos 1 aJlt6
la campanilla de nuevo.
Ffllnk o pareció.
-No recibo" nadie mns; decidto as\'
-¡Ni alseño" conde de Castellotel
_¡ Qué dccls, Frack'/ ¡ Dónde est á el señor
conde 1
-En la actualidad habla con el seilor se·
oretario de la embajada, i me h" mandado
anunciaroS su visila.
-Para él si estoi, pero solamentc para. él,
¡ cntendeis, Frr.nk? , . . .
El criado aleman se IDc]¡nÓ 1 s1\116.
El embajador 1\rrojó otra mirad" sobre el
ospejQ de cuerpo entcro, para. observ!1r su
llbonomía,
pobre hombre del pueblo, desafío a
,us cmincneias científicas, a sus señ()
rí~s los ilu,tres sabios de Bogota,
a que "clIgan a Illlccr, en cOlllpeten·
eia cOllmigo operaciones dificiles i
peligrosas, a "cr quien las pl'3ctica i
ejecuta con mejor éxito [lara el pacicnte.
E'as son las verdades, esos son los
doc!.lmento~ i los testimonios i, los
hecho, po,;itivos que yo llevaré a la
Europa si\hia, para fine ella, por me·
dio üe los qllílllicllS, de los medicos i
d~ lo, lIatlll'ali,tas verdaderamente
compelentes, haga el exámen científico
de es~s plantas, i anali;cindolas
averigiie qnímicamcnte i descubra
cuáles son los principios activos de
esas admirables sustancias que tienen
esas portenlnsas propiedades; para
que la Ellrop~, repl'esentante actual
dcl espíritu cicntifico, las prcsente a
la cicneia i las dé en patrimonio a la
hl1l11anidad, quc de derecho es el ver·
rlac1em d!lcño de tocla verdad ciclllínea,
tle todo descubrimicnto eulas
cicllcias i artes, i de tedo prugreso en
la familia hum3na, Yo, sin las operaciones
previas que 11';3 la ciruj ia i
sill aparatos de ninguna especie; sin
ligar arterias ni venas, aun en sus
mas gruesos ramos, sin pinzas ni torniqueles,
sin 5!ltU.-aS ni vendajes, sin
cataplasll1~s ni c:lutf!rio, ni cosas semejantes;
yo, li.a i llanamente, am·
[Hito la pierna i el muslo pOlo cualqniel
·a parte, el anlebrazo i el brazo
a eualquie"a altura, i estraigo tumores
i quistes i escilTo, i e;,Cl'eeencias
de cualquiera cspecie, ya estén en
el auello o en la cabeza o el} la cara,
ya e,;tén en los miembros i esh'emidados
supcriores e inferiores, i aunquc
estén en lv.- eavielarles mas pro·
fundas elel cuerpo. Yo, con solo. dar
a oler una plallta, produzco instan·
tillleamellte hemorl'ajins nazales activisinlas
i copiosas, capaces de quital'
la ~ida en pocus momentos a un in·
dividuo; i con solo aplicarle de cierta
mdnel'a In misma planta, le contengo
de súbito esa helllorrajia amenazanora.
Yo, i lo digo humildemente,
hago cstas i otras cosas mas en
cirlljia i en me¡licina, i tengo sec
rel-tffl---d e que ~l"O qme rO - 31f':tT-huc-c
alal·de ni menciul\ .iquiera ; pero
que en Europa, donde los verdaderos
sabio, no se burlarán de mi, tencll'e
el honor, i puetlo decir la gloria, de
pre-elltar ell humilde ofrenda a la
ciencia i a la huma1lidad, para bien
de esta i gloria i adelanto de aquella.
¿ Soi yo un cstafador qne especula
CUII la miseria i la credulidad del pueblo
?-Apelo a los doscietos mil i mas
enfermos a quienes he I'ecetado i asislido
personalmenle, para que digan i
deelal'en COIl precision, a quién le he
pedirlo o le he recibido alguna suma
pOI' las operaciones, recetas, medicinas,
3'Sislencia i consejos que he teni-rr"
bia cambiado enteramente.
La espresion de bondad que ahora respi·
raban sus ojos, el conjunto do sus fl\coiones,
DO era la mansa honradez de un mercader
de Amsterdam, DO era la Datural espresion
de hombrla de bien que se dostoca de los
rostros de los bueDos hombres que forman
la respetable clase del comorcio eu Holanda.
El rostro del embajador fraDces, hermoso
aún, respiraba la benevolencia de un padre,
el cariño siempre ceremonioso de un tutor
de nuestros dias, i sus fiDos labios cstaban
dispuestos" formar la risa mas complaciente.
N o se disponia a aparecer franco, leal,
sin pretensiones, ~omo delante de Demetrio
de SaDtelices, sino amaille, pero en el terreo
no de su posicioD, deliaado i aristó~rata en
todo. seguu su clase, como se le con ocia en
el mundo.
Poco tiempo esper6; la voz del portero de
estrados se volvi6 a oir.
-S. E. cl seBor conde de Castellote, dijo.
Entr6 Gabriet de San Andrés.
El embajador so puso en pié i dió dos pasos
hácia él.
-¡ Vos por aqu[, mi querido enemigo?
dijo tendiéndole 1 .. mano.
E! j6ven lo coji6 las dos, i se las estrechó
con viveza.
-Seguramente no creeis, sefior conde, que
yo 10 ho.yll sido nunca, ni que pueda serlo,
le dijo; dispensadme si he hecho algo que os
lo biciera creer.
El embajador le aprct6 las manos con espresiono
-Bien sabeis cu,nto os estimo, San Andrés;
si Dios algun dia me con~ede un hijo,
solo desearé que se os parezca.
El conde le dió gracias con una mirada i
continu6 :
-He Tisto a.l señor de Santelices cuando
entr6 i le he vislo salir; ademas, e.taba ha):>
lauclo cou MI'. de Florvil1e cuando le han
llevado un~ carta do vuestra parte.
-Es cierto, le h.e mandado una ~on Frank.
- ¿ Para. remitir a Francia?
-S[: a Jenny Punker.
- ¡ I esa ,cana os la ha (raido el señor
Santelices?
-En efecto ...... ¿ C61M sabejs; ......
do la gloria de dispcnsarles, prodigillldolos
al pucblo solo pOI' amOr a la
humanidad i al pueblo dc que hago
parte, i en homenaje i gratitud a Dios
cjue me ha favorecido con la posibili·
dad de hacer el bien a mis semcjantes.
Interpelo solemnemente a todos
i a cada uno de esos doscientos mil i
mas seres racionales que se me han
presentado enfermos, para que depongan
ante Dios, dicicnrlo si yo los
he def,'audaelo alguna vez, si les he
ganado o pedido plata o bienes de alguna
especie, si les he desfalcado ell
lo mas minimo su haber i Sil propietIacl,
si les he exijido algo por mis servicios;
o si por el contrario, muchísimas
veces he gastado en ellos mis
pl·opios· medicamenlos, mis sustancias
i preparaciones mas especia les;
i si ademas,aunql\.e 110 quisiera dceirlo
a'1ui ni en ninguna parte, que digan
si !lO es verclad que muchas YCces
despucs de hacer la operacion o
el remedio al inclijente, lc doi de mi
bolsillo para que vaya a procurarse
el sustentCl que le cs neccsario.
Soi yo un clwrlalan importor? Se
puede concebir por torios que un hombre
sea capaz de fascinar i engañar a
una poblacion ruda i estúpida, i luego
volar a doscientas o trc scicnsas legnas
a engañar otra poblacion igualmellte
ciega e ignorante? Pero ¿ cómo
engañal' a doscientos milcnf~rmos
i a medio millon de asist.entes Cine se
suceden en continuidad, dil.llc1ose tocos
ellos mutua i reciprocamente testimonio
rle lo '1ne ven i palpan, ele lo
que reciben i ~ienten, de lo qne esperimentan
i oh.p.rvall con atencion i
arlmil'acion? Seria infl"itamente mas
maravilloso quc todos los milagros
que hiciera el taumaturgo mas pl'Odijioso
i fuerte, el hecho inconcebible
dl1 que doscientos mil enfenl1,0s i quinienlos.
mil asistentes, estllvieran 1'01'
nueve años de seguida, dej;inc1ose en·
gañar i fascinar, quedando siempre
lelos i estúpidos sin Ilegal' jamas a la
verdad, i que ademas, dos u tres millones
de oyen les, siendo seres I'acionales
i pensantes, cstuviel'an por todo
este tiempo en la incertidumbre i en
la duda, accrca dc la verdadtl'a naturaleza
de un hecho tan t'¡jcil de verificar
j comprobar, reduciendolo a sus
CT1hmel'as-cmrdtcio!les ; i todo esto
pOI' la obl'a o el prestijio de un pobrc
hombre o pOI' la obra de cllalquier
jenio por inmenso ljne fuera!!!
No hai remedio: o ~lignel Perdomo
NeÍt'u es un chal'latan, embaucarlor i
ladron publico, es un fu 11 e 1'0 infamc,
o es lln hombl'e que merece el respelo
i la' especial consideracion ¡Je los
otros homhres. El es, o un maleehor
público, o un benefactor de In humanidad.
No hai medio entre estos do"
e3ll-emos, porque lo que hace Perdomo
cs demasiado gl'ave i esencial
por su naturaleza mi'm,1. Si es un
impostor, estafadol' del pueblo i Icnto
envenenauol' dc Ja salud publica,
él es \111 criminal, i pro!.dndose que
es tal, debe caSli"al'selc inmcdiatamente,
i cchár;ele riel seno de la ~o·
ciedatl i lejos de lo; hombres. Pero siTiO
es e,o, sin l) un hombre sinccro i vcraz,
amante de la humanidad i servidor
del pueblo, el espiritu i la concietlcia
nacional e-taran illfalilJlemcnte ell
fnvor de eHe hombrc, i elltoll ces la
accion i la Opillioll \1Il,inimc .Ie torios,
debell protejer a e.,e hombre i e.c(ldarlo
contra las malas pasiones; i los
doctores i sabios i los mue5!rllS de la
juventnd i los apósloles de b verdad i
profesoros de la ciencia, i las autori·
dades mas que nadie, las autoridades
qLle representan el rlrdcll i el derecho
humano, la majcstad i la alta
dignidad rie toda asocinci,," de sel'c~
racionales i moralc'i, las autoridades
cn vez c:'e pcrsegl1irJ~ i de ultl'ajarlo,
como lo hieieron en BogOlá, deben,
con 105 doctores, respetar ell el algo
mas de lo que se respela CII un hornbl'e:
o ullas (uerzas llulll/'ales desconu cidas
husta ahora en lu ciencia, o Iln espe·
cial {aval' del cielo, acordado por Dios a
un pobre i /ulIllilde !tombre del pueblo.
MIGUEL PEnDO~lO NEmA.
dolores del hombre encalleco el alma de
los médicos /wsta R1cerlos indiferentes,
frios, duros quizá con los desventurados
.que poneo en sus 1ll:l.00S su vida i sus es·
peranzas. V éselos de ordioario acercarse
al lecho del uolor con una cara glacial o
adusta f no pocas veces COII Ulaneras
secas, bruscas, inci\'iles; tomar el pulso,
hacer .los o trcs preguntas, casi siem ·
pre domo Je carrera, escribir ulla receta
i retirllrse con airo espetado.
"868.-Desgraciaebmonte la medicina,
lJue no cs pul' su naturaleza sino ulla
ciencia dc frateruidud ido bellevolencia;
ciencia que deberia ser de vocacion co·
rno el sacerdocio, se abraz:l con frecuenoia
como se abraza tambien, no pocas
veces, el ministerio sagrado, con miras
puramente lucrativas; i cuando el médico
pierde el oorazon del hombre entre
los c:'llculos del negociante, ~dios humanidad!
ndios bondad I adios bellcza
moral de la mas noble do las profe.iones!
Ent6uces si se piensa en el alivio del
cnfermo, en su restablecimiento complc.
to, no es por satisfacor esa di\'ina nspira.
cion del alma que se cxtasía en la son ·
l'isa del que ha llorado, en la segum
ealma del que ha tem blado por su vida:
entónces se piensa on todo eso con la
Serrezucla, 30 de mayo de 1872. esperanza de una boga que dé dinero, de
\
una clicotela que dé dinero, de un nom-bre
qne valga dinero ____ No es que se
desea el bien de la humanidad, sino el !'otografía.
El ilustre i profundo pensador sellor bien de nuestro bolsillo; i sobre todo, de
doctor Manuel María Madiedo, publicó nuestra vanidad, que Jesea eclipsar a los
en 1868, en la imgrenta del Beñor José demas, para crear un monopolio perso·
Benito Gaitan, una obra de gl'an mérito, nal que nos dé a ganar mas dinero i que
que lleva por titulo; "TRATADO DE evite a csos demas ganar ese dinero que
Cr:Í'rICA JENlmAL o ARTE DE DIRlJ¡¡¡ EL cncanta, qne 'seduce i que sioembargo,
ENTENDl:.IIENTO El( LA INVESTIGACION DE no har:'l jamas un "erdadero médi00 del
LA VERDAD." 1I1ma de un mercenario. De aqnÍ esas
Para dar a luz ese libro, que honra a maneras inciviles, bruscas, brutales de
nuestra patria, costeó una gran parte nn ciertos médicos descorazonados: ese odio
distinguido profesor de medicina i ciru· implacable, insano, indcceute de unos
jiu, que quedó admirado cuando lo oyó médicos contra otros. Qué e,candalo ~
leer en borrador, i que siendo amante de Hombres de Un::l misma profcsion, de
la difusion de las luces i viendo que el una misma escuela, j cómo se miran, có·
doctor lIfadicdo no tenia recursos para mo se tiran, cómo se desacreditan des.
publicarlo, se cntllsiasmó i lo hizo impri· pedaz:'lndose como hambrientos lobos! , .
mil' en el acto. Qué vanidad! qué falta de fraterniuad !
Esa obra,r¡uo todavía no e8 bien cono· qué envidia tan infame! 1 todo esto,
cida en la H.epública i fuera de ella, ape- ¿ cómo esplicarlo en una pl'ofesion tan
sal' de cstar casi agotada su primera edi· ilustrada en si misma i tan sublime por
cion, oOntiene rasgos tan bien delinea· su destino? Ya lo hemos insinuado: es
dos, que al leerlos i ver lo que suoede, que cuando el médico no lo es por 1'0·
no se puede negar el espíritu profético eaoion como el sacerdote, su númen no
de tan fecuudo esoritor. '" es la verdad sillo la avaricia; i nada
Por el manifiesto que antecede, se vé simpático, santo, digno, tolerable eiquie·
claramente la manera como ha sido tra- ra, es capaz de abortar uu sentimiento
tado el señor dootor Miguel Perdomo tan árido i tan egoista.
Neira, debido, en nuestro concepto, "86!J.-El doctor A detesta al docprincipalmente,
a la envidia i ambician tor B i al doctor e, hasta al doctor Z,
de unos pocos. porque todos esos otros doctoros no dc-
Pues bien: ahora oigamos al seüor jan que el doctor A sea el único rnédi·
doctor Madiedo, como se cspresa, cn la co,de fama, de clicntes, es decir, de jen.
obra que dejamos citada, en su oapitulo tes que don honra i, sobro todo, dinero!
XXI, qne trata sobre CRíTIC.~ MÉDIOA, ¿ Por qué no lo homos de decir? E~b.
pájinas 297 i :¿98, párrafos 867 a 870: es, por desgracia la jeneralidad j pero
"867.-Ddsgraciadamente, el hábito hai tambien algunas mui honorables i
de la cootcmplacion de los frecuentes jenerosas escepoiones, hombrcs de voca.,
Igu,1 cosa ba sucedido con 011'1\ de
sus obras, qlle lleva por titulo: "CIE! su mano 1 eso es raltar a pundonor no me permite consenlir en que decidle que despache el oorreo una hora n.u-lo
que me babeis ofrecido, querido conde. vol vais a apasionaros de ella, aqul, delante les, si es posible.
--Perdonadme: ese Santolices i Julian Ga- de vuestn familia. Salió el rubio aleman.
lindo me comprometieron, ;;" .. , .-.Como gusteis, pero he tomado mi reso- El embajador, con natural coqueterla, dió
-N o, no sois franco, San Andrés, i lo que lucion: si viene, os ofl'czco mouerarme: si UDa mirada al e.pejo i salIó a su vez.
yo voi a hacer es malo; vueslro tio es un no viene me suicido, o voi a reunirme con Un momento despues subia a su coche.
excelente sujeto, lo cODfieso, aunque no esté JenDya L611dres. Los lacayos esperaban BUS órdeues som-con
él en la mejor armonia; la señora du- ___ ¡ Qué dccls? ¿ Seriais loco hasta ese brero en mallo.
quesa de Simano os adora, me consta, i vos estremo? ---A palacio, les dijo, por fin.
sois uu ingrato acordándoos mas de JenDY, ---Bien sabeis que ncostumbro a hacer lo --·A palacio, repitió nno de ellos al coche-a
quien ya debeis considerar aomo muerta que ofrezco. ro.
para vos, El embajador pareció reflexionar un me- Et bello carrunj.e parti6 al punto.
-Por Dios, querido conde, calmaos; Jen- mento.
ny hace mucho tiempo que me es indiferente, -.-Vendri1, dijo, vendrií, ya que de lal mo- III.
desde que romp[ con ellA, COII)O habreis oido do cstais resl2e1l0, pero jur:1dme ser prudcu- Jl:XOVIlVA DE SA!< A:mnJís.
de~ir; amo a mi prima Jenoveva, i creo que te. Cuatro dias babian pasado desde la mnua-todo
acabará en que alguno se IIp.mariÍ un -·-Os 10 juro. na que vimos aparecer eu el Café Nuevo j
dia duque de San Andrés i conde de Caste· ---Bien: adem:t9 de vucstra carta, escribi- eu la embajada de 1!rancia a algunos de los
Hote. ré a Jenny por mi parte; bien eabeis cuanto prinoipales personajes que hnn de fi"ur"r cn
-Eso es hablar razonablemente, mi que· me quiere i me respeta: no duueis que me nuestro libro. "
rido amigo; está bieu: si me ofreceis esa obedecerá. Emn las once ele la mañana.
seguridad, vuestra carta lIegarn. a su destino. ---Lo creo as\. Adios, conde; fio on vos Poco. veranos se habia. notado en :'IIadritl
i casi os diré que Jenny Punker aparecerá ¡ (}omo si fuérnis mi padre; en Paris i en ~fa- tan granrle calor: In. :J.tmGsfera estaba pesaeu
Madrid. drid hnbeis adquil'ldo para m[ los derechos da i bochol"Dosa, i los millnrr,s ele lranseun-
~-¡ Vendrá? ¡ Creeis que vendrlÍ., señor 1 de tal. Reservad eSla visita de 1:1. du'l¡uesa tes de las calles, i los ociosos de 1" Puertrt
dijo Gabriel de San Andrés, brillándolo los Jeuoveva i de la duquesa. Maria Amalia. del Sol i de los e,he:'.
vuestra querida: 08 virtUOSa i altiva como de csta. . se b¡¡ülldo. (~01IIII"((lf,í )
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
que ya lo hemos dicho, no! complace'
mos en repetirlo: la sociedad deberia
hacerae un santo deber, un gran honor
de tomar bajo BU especial proteccion la
existencia de estos hombres jenerosos
que tanto la sirven, la honrau i la ejem·
plarizan. J'
Despues de lo que ha sucedido en
Bogotá, con el señor doctor PordonlO,
dígaseoos si lo que antecede no es un~
fotografía e5acta, que exhibe a 103 ému
108 del doctor Perdomo i eleva a éste
como lo mercce.
Pena nos da el manifestar a la Nacioo,
que en la culta capital de la Re,
pública, haya "tenido euemigos el doctor
Perdomo, cuando desde las ciudades
mas populosas del Ecuador hasta los pue·
blos mas iosignifioantes de Colombia, se
ha reconocido el mérito de este médicocirujano,
i no en vista de lo que s E llA.
DICHO, sino en presencia de 10S HE·
CHOS.
A cualquier pais, verdaderamente ci·
vilizado, a donde vaya el señol' doctor
Perdomo, es seguro que será rodcado
de todos los h,)mbres sabios, para io·
vestigar los secretos que posee, i de es·
te modo conseguir grandes adelantos en
la bella como importante ciencia medio
ca. Solo aquÍ, en Bogotá, ha habido cn·
vidiosos! Vergüenza i oprobio para
ell08! Honor i gloria para el médicocirujano
de los pobres!
Bogotá, 1.0 de junio de 1872. N. P.
Al publiCO,
l!L SEÑOR MIGUEL PERDOMO NElRA,
~Llegi> a la capital nn llOmb,e raro
en la epoca presellle, ejercitanuo la verdade·
ra caridad humanilaria.
Ese hombre procura el hien de todo desg,'
aciado: da medicamento., 531ud i plata a
los enfermos pobres: a todas horas t"abaja
en beneficio dc la humanidad ,in exiji!' retd·
bucion.
, ,Ese hombre entra a la capital de la nepu·
blica, sin aunncial'sc sabio; no fija cartuJo·
neo para llamar la atencion social, pues es
nioderado i bumilde; nada vauidoso nada
C.1tuo.
Abre las pllertas de sn casa para todas las
clases" sin escepcioll," i sirve con gusto a todo
el que 10 nece,ita,
Elevado por sus virtudes, i sahio pd,ctica'
niente en medicina i cirujía (sin iumortali·
lOr) arrastra en pos de sus pasus la opio ion
jeneral i la multitud desgraciada; pe,'o tambien
por desgracia se atrae el odio, la exa·
cerbacion i el rencor de algunos de los mé
dlcos tic la capital, que celo lOS de su profe·
• ion i envidiasos de la ciencia del jeniu de la
ca .. idad, le hacen una gu~rt'a apasionada i
le declaran la pe,'seeucio~ mas desen frenada,
c~yos hechos, no eran cono"idos en esta República,
ni creíbles, en nin~lInd de los pai¡,es
aun en los ménos civilizados.
Olvidandose esto, s.jiores de los princi.
p'ios de civilidad, se exhiben, por de.pre.ti.
Jiarlo, escribiendo ridiculeces i niñerias,
ajenas del hombre sensato; e igno,'ando que
la carta fundamental de este pais ga .. anti ..
l. libertad de profesion a cada ciudadano,
éxijeo del .e¡jor Gobernador que pongan a
e.te grande hombre en certamen público, al
mismo tiempo que lo califican de ignorante,
antes de conocel'lo.
I Si es UD ignorante, por que los .Iarma,
por qué se ponen celozos i por qué lIoma la
.tencion pública 1 por qué razon i cun qué
derecho solicitan un desatino del se¡jo,' Go ,
bernador 1 I por que pretenuen coa .. ta,' la li·
bertad legal del rad,'e de los pohres 1 El Go·
bierno ha debido dar ga,'anlias a un hijo de
la po tri. que ali.ia a la humanidad: el Gobierno
debió atraer con dllllllra a ese ciuda·
dano estl'aordinario que tanto conmue"e la
sociedad; asi daba cumplimiento a la lei i
podia examinar la verdad del .aber o de la
ignorancia del benefactor del Plleblo.
I Nu es el pueblu quien co .... e a las urnas i
le fatiga por ele{3f a los puestos puhlicos "
los empleados que constituyenel pueblo? ¿no
es el pueblo qllien cuntrihuye con el slldor
de su frente para poner renta i mantener de
$U bolsillo a los miembros de ese mismo Go·
bierno? I Por qué .. azon esos empleados bus,
can el pueblo como soberano para que los
eleve a lns puestos pi,blicos i los defienda en
la gue .. ra,de la amhic,on i p .. etension de otros
aspirantes ? U1timamente : ¿ por que ese Go·
bierno insulta i uesueña al bienhechor de ese
!nismo pueblo? I Po,' qué se armaren en oc·
titud amenazante las fuerzas colombianas, las
del Estado, los .eñores Gobernador i Alcalde
para precipitar al amigo de la caridad, al
pueelo i a los iaváiidos que buscaban su salud?
. Esmui triste ea un pais ue libertad i órden,
tao tos atentados i tanlo miedo a la muchedumbre
invalida i desarmada.
¡ Por qué razon se separó de esta capital
el senor doctor V il/'gas Réyes a poco, dias
de.pues del13 de mayo para el est .. anjero 1
porque sin duda el que la debe la tent e.
El bienhechor uel pueblo se llama
l\IIGUEl PERDOMO NEIR.4, i p~u'a el ¡para
todos, se piden garau ti.. de conJ'.Il'millad
con la lei ; i sin pedirlas política ,ino pal'licularmente,
pues aun cuando el señor Pero
domo no busca cuestiones públic:ls. 111 se~
guiri! el pueblo en todos caso,; i se le s" pli,
ta al Gobi~rno que obre con cortlu,'a para
sacar ventap. del hom~re estraordinaril1.
Bugot., junio f.o de 1872. EL PUEBLO.
(Hoja suelta.)
Socieaad de San Vz'cmte de PaulEmpieza
esta benéfica asociacion a ocu·
parse de los preliminares para el Esta·
blecimiento del Bazar que anualmente
exhibe para socorrer a los pobres oon su
producto: a cOllünuacioD publicamos la
nota dirijida por la comision orgnnizado.
ra de dichos trabajos al señor Presiden·
te de la misma sociedad:
Bogotá, 12 de mayo de 1872.
S.,¡OI' Pre"iden!e d. la Sociedad de San Vicen'
te de Pa"t.
Teogo la satisfaccion de pooer ea conocinlier.
to de I1sted, que la comisiun del Bazar,
noml,..ada por el Consejo, tuvo Sil pL"ÍUlera
sesiun el sabado 4 de los corrientes por la
noche; dia i hora seÍlal:tdus para las reuniones
semanales, que dehen tener lugar basta
la celebracioo del Balar.
Eo C!:I3 primel'a sr:~¡on, la comision se ocupo
en el nomhramiento de las comisiones
particula,'es qoe van a espresarse, escojiendo
para desempt:iiadas, a muchas personas qne
nu pertenecen a noestra S'Jciedau, pe,'o que
pueden ¡H'cslar servicios importantes.
1.' Para las seüIl,'as: señuras doña Magdalena
Sanlamada de Mier, doña Carolina ElTers
de Pizano i seilOrita doña Leonor Restrepo.
2.' Para el clero: señores doctores Seve,'o
(ja"CÍa, Elllojio Tamayo i Domingo Vargas.
3.' Para el comercio: seiiores uon nuperto
Reslrepu, don Juan ndgard, don Luis Maria
U,'ihe, don Ricardo Silva i don Ignacio Medrana.
Ó.' Para los empleados: señores don Es·
teban Cueoca. don José "lada C"'o i don An.
tonio Accvedo.
5,' Para los colejios de hombres: seilo,'es
dun Wenceslao I\'lontenegro, don !\upertu
Ferl'eil'a i don NjcoJas Tanco Pal'Ís.
6,' Para los colejios d~ señorilas: señoritas
doi,a J eSlls Uamirez Mun toya, do"a Ma·
ría de J esus Mo,'eno i doña J uaoa Cill'de,
nas.
7,' Para los agricultores: seiJores don Justino
Valenznela, don FClix Rojas, don Rica,,·
do Carra.quilla, don Juan A, M3I'roquio,don
Albe,-to U .. rlanela, don Jase M .. 'ia Hernandez,
don Martiniano Araos i don Enrique
Soto mayor.
8.' Pa,'a los artesanos: señores don F,'.n·
ciscu Olaya, doo J ose [J. Cam.cho, ,Ion Pascual
Castillo, don Rafael 'fallÍas i don Paso
coal !\odríguez,
9.' P .. 'a pintores, litografos, impreso,'es
etc: seño"es don J osé Maria Samper, don
Cel es tino M .. "liuez i don Daui"\ Ayala.
Oportllnamente se nombrará la comision
que deba correr con la admiuistracion i a .... e·
S lu del Bazar.
Nu concluiré esta nota sin manirestar a usted,
que la comilion abdg1 halagüeñas espe"
anzas de que el lIaza .. de este año sera una
de los mas beneficiosos pa,'a la sociedad,
tanto po"que hai verdadero enlusiasmo en las
personas con quienes se ha tocado para ello,
ennJO porqup. concnrl'f'n actualmente circunstancias
particula,'es que facilitan nuestra
tarea.
La comision del Bazar ha creido qne debe
introduci,'se .Iguna alteracion en la practica
ohservarla hasta hui, tratando de sustituil' :ulículos
de llljo, dil'icilcs ele realizar i co.toso.
para los donantes,con olros de ul ilidad jener" I
que todos r!led!!n ,'egalar i 'In" todus pueoen
compl'ar. La comi ... iull se propone hacct'ltn Halar
de tal n1turaleza, que a vuelta de pocos
dias no quede rezago alguno, o que si acaso
qucdan, puedan sel'vir pa¡'a nuestros esta ..
hlecimientos ue "cneflcencia.
Con el favur dc Dio, i con la coopcracion
de todos los miemhrus de la sociedad, el
Bazar co, , dándole representacion en los grbndel
cuerpos dC'1 Estndo,
E,:". t,'atado d.> P"z ve"tljoso para el error i
lJerl!lrlOSO p;Ha la,cauba dp In verdnd, fué, como
deb~a e'perarse, ""probado por la Santa S.de.
El Sumo Ponlifice lnocrncio X, espiclió un Derreto
anulando i rr?robando las paces de Mun.tl>
r celebradas entre la Casa de Austria i los
h;relrs de In¡(iatena. Holanda. Suecia i Alen,a •
~Ha, 'PO\"- tt'u er aJglln~~üJnes pcrjudirialt'f,
, ofens,vas a la AUlortdad tle la Iglesia Romana.
Desde enlónces acá el protestantismo ha predo.
JnllHldo en la mayor parte de la Iriislacion de
los puc:h tos, ea los códig-os i consti tuc iones de
las Iln(,.lOn~s. ~'ite preduminio del protestantismo
ell las ¡n..¡[ tfIlClone..¡ humanas sirve para E"splicar'
tle un~. malwra asertiva el carácter turbulento.
~ue 8.11ta ronstltnt<'llH'nle las n¡u·iones modernas
I de un mudo espt'C'jq! Ins rt>púhlirus que cum:
prende P$tp vasto i !Jprmoso COlllincnte. Con:sis.
te pue.~, el mal estar dr estos paises católicos en
que SIendo el erl'O! de su y" instable i en gran
m~.n (' ra turbulC'lll(SlIllO, se les 'luiere lejis lar, i
1• .IISI~ en efee\o con leyes del lodo opuestas 01
esplrttu del Cat.Jli.risnJO, i rejirlos con ,có,digos i
~s tatulos contam'"ado. por el error, v,ciados
pnr la herej la.
, De aqul procede que los e.plritus irreOexiyo.
, detestable~ que desventuradamente dirijen
nt1~st)'os f1:ohIPrno~,c c)endnse grandE'spolít icoI
9u,erprt.plantear sistemas insensato", o por me.
J Ilr d(,Plr, nmolrlar tOlltameme las sociedades.
que viven de la verdad a otrAS que infelizmente
se h~II .1n cn.bArgadas por error I se •• tadas E'n la
sOlllhr~ de la, ~lIerte. Alhagados, esto'" ptl! ttico.
fement,rlos. U'"C mente por el adelanto i felioi.
~ad tempural. que brilla fu;!aznrente bajo la
Jnfluencl~ de esta luz momentállra; i que no
será mprllo para conseguir la felicidad eterna.
I COI~ estE'. tpson oclt'iionan el quebranto i destrurc,
on nllserable de estas jóvenes, bellas i
rlc qs nacft'\nps.
En cuanlu • la existencia del prole,t.aotismo
cotejada con el Ser i durarion de la Iglesia ca.
tólica, es ~flmpra; i si se quiere, ninguna. El
prot.'tantISIPO so lo data desde la Dieta de Spi.
ra, e~ ¡f.eir comprende un e'pacio de ti~mpo de
t!,e~cl e ntos.cuarer.ta años ? miéf)tr~s que la Iglesia
perrgrlll8 en e~te dl~curso I mudanza de
las cosos i de los tiempos mil o~hueientos sett'nta
i doc; allos: i, sr remontan hasta Adam
H ¿ ... La l§!l~sia. caU)I':ca, dice San Agustin e~
el Srrmoo XXIX sob re el Salmo (,XVllI ha
existido en la tierra desde el principio deljéne.
ro humano. Riendo su~ primicias el Sallto A beJ
sarrificado en testimonio de la sangre del futu~
ro Mediador que habia de ser derrnmada por
su malvado h~rmano I P"'que desde el princi.
pio so dijo aquello: habrá dos en "na carne'
misterio ¡(rande, que espl icitudole San Pablo'
dice: yo di!i0 en C,.ülo i la Iglesia." •
No pundré términ0 a esta publit'acion sin ad.
vertlr ántrs que. al impugnar el prole{> talltismo
no ha sido mi (1"illlo. ni he pretendido confutar
un!" en po~ de otro los prrorr~ i ót'/jrip~ todos
rf't i.lprf' ndido ... ell él, i qUf' constituyen su de,.
vc·¡tlJrada l' is tencia modal ¡privativa dpl ier al
lado de la esencia positiva i real drl Catolicis.
mo ~ sino pr~~PlltarJe ÚlliCaUlE"nte ba :~; un punto
de vi!;t" jellérico, comprensivo, lacónico i enteramellte
nue>ro; evitnndo, h"sla donde me ha
a yudado mi posibilidad, la difusion i derrotero
de otras publicaciones eruditas i redentes que
me han I'recedido:,las cuales publ!caciones por
lo demaSIado próll(as apénas condeoza el púo
bliro R leerlas, cuando ya se haslIa, cAnsase ¡
concluyE' por deiarlns, haciéndose tan sola cargo
de su ohjl'to sin adelantar un ápice ~u el Irrre.
no de los disertaciones relljius.s. Si mis anIaga.
nistas en rt"1i¡ioll me honran COII sostenerme la
lid, entraré, ayudado uel Alllsimo i bajo l. ejida
omnipotenllsima de la Vlrjell Madre a defender
particlllal'11lP'nte cada una de las verdades reveIflda~
por Dios a la santa, romana Ig lesia, i 'mi~
'el'ablelllenle inpugnadas por el protestantismo.
Sinelllbargo, no rtejaré ahora dp escribir tan
solo d .. s palabras sobre ell;bre extimen de lo.
señores protestantes: dos palabras i habré
concluido.
(Concluird.)
TIPOGRAflA DI; NI OLAS ONTON 1 C~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Citación recomendada (normas APA)
"La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 484", -:-, 1872. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3687512/), el día 2025-10-10.