Por:
|
Fecha:
13/02/2023
BANG ON A CAN ALL-STARS
(Estados Unidos)
Música contemporánea
Jueves 23 de febrero de 2023 · 7:30 p.m.
Bogotá, Sala de Conciertos de la
Biblioteca Luis Ángel Arango
Foto: Peter Serling · PULEP: QEW934
Temporada Nacional de Conciertos Banco de la República 2023
SERIE PROFESIONAL
David Lang, Michael Gordon, Julia Wolfe. Bang on a Can All-Star • Foto: Peter Serling
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SUBGERENTE CULTURAL
Ángela María Pérez Mejía
JEFE ASESOR SECCIÓN DE MÚSICA
Julián Navarro González
EQUIPO ADMINISTRATIVO Y DE PRODUCCIÓN SECCIÓN DE MÚSICA
Sara García Álvarez Programación
Catalina Gómez Valencia Procesos académicos y producción general
Ana Beatriz Sayago Díaz Producción técnica y logística Sala de Conciertos
Jeimmy Guaqueta Calderón Producción y logística
María Angélica Múnera Gestión derechos de autor y producción
Gerardo Rodríguez y Felix Carrillo Romero Procesos administrativos
Sección de Música Procesos editoriales
Conferencia de Julia Wolfe,
Michael Gordon y David Lang
Viernes 24 de enero de 2023,
1:00 a 5:00 p.m.
1
ACERCA DEL ENSAMBLE
Bang on a Can All-Stars
Ken Thomson, clarinetes y ukelele; Arlen Hlusko, violonchelo, ukelele y voz;
Mark Stewart, guitarra eléctrica, ukelele y voz; Robert Black, contrabajo,
ukelele y voz; Vicky Chow, piano, teclado, ukelele y voz, y David Cosssin,
percusión y ukelele.
Formado en 1992, el ensamble Bang on a Can All-Stars es reconocido en el
mundo por sus presentaciones ultradinámicas en directo y sus grabaciones de
la música más innovadora. Este conjunto de seis integrantes cruza libremente
los límites entre la música clásica, el jazz, el rock, la música del mundo y la
experimental, y ha forjado una identidad propia que desafía las categorías,
llevando la música a territorios inexplorados. Con presentaciones realizadas
cada año alrededor de los Estados Unidos y en el ámbito internacional, Bang
on a Can All-Stars ha transformado la definición de lo que es hoy la música
de concierto. Como agrupación, ha colaborado estrechamente y de una forma
sin precedentes con algunos de los músicos más importantes e inspiradores de
nuestro tiempo como Steve Reich, Ornette Coleman, Meredith Monk, George
Lewis, Louis Andriessen, Terry Riley, entre muchos otros. De sus proyectos
recientes cabe destacar In C, una nueva colaboración de danza con Sasha Waltz
Foto: Peter Serling
2
y otros artistas invitados, basada en el clásico minimalista de Terry Riley;
Flower Power de Julia Wolfe para Bang on a Can All-Stars y orquesta, estrenada
con la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles; Can Dance, un nuevo concierto
multimedia de colaboraciones entre compositores, cineastas y coreógrafos;
interpretaciones del arreglo de Music for Airports de Brian Eno, una de las
obras favoritas del grupo; Road Trip, un concierto envolvente y visualmente
impresionante compuesto a modo de colaboración entre los fundadores de
Bang on a Can: Michael Gordon, David Lang y Julia Wolfe; además de las
grabaciones y presentaciones en gira de las innovadoras obras Steel Hammer y
Anthracite Fields de Wolfe, siendo esta última ganadora del premio Pulitzer de
Música. Con un enorme repertorio de obras escritas específicamente para la
instrumentación y el estilo de interpretación característicos del grupo, Bang
on a Can All-Stars ha creado su propia identidad, convirtiéndose en único
en su género. La agrupación ha grabado para Sony, Universal y Nonesuch, y
actualmente publica sus trabajos bajo el sello Cantaloupe Music.
Conozca más acerca de Bang on a Can All-Stars
www. bangonacan.org/
Bang on a Can
Bang on a Can
@bangonacan
Este concierto se realiza en colaboracion con
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PROGRAMA
Road Trip
Road Trip (2017)
Violin/Brooklyn
Triple A
Wind in my Hair
Interstate
Plains
We are Driving
Under the Stars
Moose Unseen
Arrival
MICHAEL GORDON (n. 1956) /
DAVID LANG (n. 1957) /
JULIA WOLFE (n. 1958)
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NOTAS AL PROGRAMA
Por Jaime Ramírez
¿Qué ocurre cuando se sobrepasan los límites? Bajo diferentes contextos,
esta pregunta puede tener respuestas diametralmente opuestas, con lógicas
igualmente paradójicas. En muchos casos, la idea de ‘sobrepasar’ queda
asociada de forma directa a contravenciones determinadas por afrentas
sociales y políticas que en el infortunio arraigan temores, odios y todo tipo
de perversiones; de una u otra manera, prevenciones desmedidas pueden
sesgar formas de construir positivamente nuevas alternativas derivadas de los
puentes que se generan entre opuestos. En el arte, no siempre se debe pensar
en los problemas de transgredir las fronteras, sobre todo cuando estas limitan
terrenos tan etéreos como las emociones mismas. Particularmente, la música
desconoce límites concretos; puede invadir, transgredir y expandirse con
subliminal efectividad, pero asimismo logra absorber, envolver y transformar
tanto individuos como generaciones completas.
La música tiene un poder especial que invade y domina voluntades; desde
ella se generan conexiones y se encuentran mundos distantes. La fascinación
que ejerce sobre el ser humano nos invita a reconocer indudablemente nuestra
unidad cultural con pasiones compartidas a través de los siglos y a través de
universos tanto fantásticos como reales. La presencia de la música nos rodea
e impregna fácilmente cada momento de nuestra vida, en especial mediante
las diversas confluencias que puede generar. De todos los elementos de
construcción musical, el más visceral es el ritmo; sobretodo, cuando este surge
orgánicamente desde uno de sus componentes más básicos: el pulso.
La palabra ‘pulso’ está tan arraigada en nuestra naturaleza que a
veces su importancia como fundamento de construcción artística pasa
desapercibida. Desde el punto de vista fisiológico, la ausencia de pulso
puede indicar sencillamente la ausencia de la vida misma; de igual forma,
en el desenvolvimiento de las artes temporales —como la música— el pulso
permite el surgimiento orgánico de una obra. El pulso en la música es, desde
diversas perspectivas, la base fundamental a partir de la cual se asientan todos
los demás elementos de construcción musical. ¡Sin pulso no hay vida! ¡Sin
pulso no hay música!
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El concierto que hoy nos convoca hace evidentes estos dos elementos: las
confluencias generadas desde la música como un recorrido que sobrepasa las
fronteras y la importancia del pulso como generador vital de una propuesta
musical.
Road Trip1 (Viaje)2 es una obra cíclica que conmemora y celebra los más
de treinta años de ininterrumpida actividad artística de Michael Gordon
(n. 1956), David Lang (n. 1957) y Julia Wolfe (n. 1958), quienes, a través
de Bang on a Can, han generado una iniciativa que resuena constantemente
para promulgar diversas propuestas creativas de las más aventuradas maneras.
Desde cierto punto de vista, para sus fundadores y directores, Bang on a Can
ha sido un viaje compartido y Road Trip surge como esta composición también
compartida que celebra semejante travesía. Sobre su obra, los artistas dicen:
Hace 35 años, tres jóvenes compositores, Michael Gordon, David Lang y Julia
Wolfe iniciaron juntos una travesía, y ellos la llamaron ‘Bang on a Can’. Después de
cientos de miles de millas y centenares de obras nuevas, grabaciones, producciones,
maratones, y festivales de verano, ellos siguen siendo los mejores amigos —juntos
en el camino, compartiendo el viaje. La versión eléctrica Bang on a Can All-
Stars aumenta su poder. Road Trip nos lleva por un sendero a campo traviesa —
celebrando la libertad y misterio del camino abierto. Camino en el campo, camino
rural, carretera, superautopista. Destino desconocido. Tal vez incluso incognoscible3.
En este viaje, el recorrido está marcado por nueve momentos
caracterizados por imágenes que acompañarán cada propuesta sonora. Si bien
la obra es un esfuerzo colaborativo y compartido, cada compositor desarrolló
individualmente tres de las ‘estaciones’ dentro del recorrido. A partir de este
punto, la obra podría ser considerada un breve mapa de la ruta para el viaje que
estaremos prontos a iniciar. La travesía inicia con Violin/Brooklyn, compuesto
por Michael Gordon, caracterizado por una infusión de energía rítmica sobre
la cual cada instrumento del ensamble va sumando diversos detalles hasta
desembocar en una densa masa sonora que prepara la entrada de las voces. A
manera de bienvenida, el texto marcará la ruta a tomar en este viaje:
1 Road Trip fue comisionada por BAM para The Next Wave Festival 2017 y por Stephen A. Block,
Robert Braun & Joan Friedman, Leslie Lassiter, Raulee Marcus, New Music USA, Maria & Robert
A. Skirnick, Jane y Richard Stewart, con apoyo adicional de Jerry Eberhardt and Phil Hettema.
2 La traducción literal de ‘road trip’ es ‘viaje por tierra’, es decir, el recorrido por un camino. Para este
concierto, la idea de recorrer las distancias por tierra, con sus expectativas, trayectos y tiempos
prolongados, hacen parte fundamental del viaje por el cual los artistas llevan a su audiencia.
3 La referencia para este concierto fue generosamente proporcionada por el ensamble Bang on a
Can. Para acceder a mayor información sobre las obras y sus artistas, por favor acceder al sitio
oficial del ensamble: https://bangonacan.org
6
We can drive all night and be somewhere tomorrow, it doesn’t matter where we’re going
(…) keep going we’ll arrive when we get there.
(Podemos manejar toda la noche y estar mañana en algún lugar, no importa a
dónde vamos (…) sigue adelante, llegaremos cuando estemos allá).
Triple A,4 por David Lang, inicia con un interesante contrapunto entre el
piano y el violonchelo que de forma gradual absorbe a los demás miembros
del ensamble para desembocar en una ‘enjambrada filigrana’ de ideas
melódicas; progresivamente, mediante gestos cortos y bien definidos, se logra
desenvolver una delicada línea fluida y en apariencia interminable sobre la
cual el violonchelo cobra particular lirismo. El desfase de cada instrumento
alcanza un último momento de sincronía que presagia un pronto final antes
de una rápida desintegración del enjambre melódico que caracterizó esta
etapa del recorrido. Posteriormente, Wind in my Hair, por Julia Wolfe, retoma
el protagonismo del violonchelo expuesto desde el movimiento anterior; el
violonchelo está soportado por terrazas instrumentales que comparten algunas
células melódicas para generar un eco del cual se desprenden progresivas
transformaciones5.
La familiaridad generada por la pulsación de las células repetidas se funde
con diversos elementos nuevos a medida que avanzamos en este viaje; en
Intersate (Interestatal), de Lang, diferentes combinaciones instrumentales
mantienen el mismo material que se transforma orgánicamente: el viaje sigue
siendo el mismo, pero está en constante evolución hasta llevarnos a nuestra
siguiente parada. En Plains (Llanuras), de Wolfe, la masa sonora aumenta
progresivamente su intensidad tanto rítmica como textural para desembocar
en destellos de funk con un groove muy especial que, después de superar
momentos de aparente entropía, catalizan un éxtasis sonoro.
Casi de la misma manera que un movimiento lento y cantábile en una
sinfonía, We are Driving (Estamos manejando) surge como articulación
central de nuestro viaje. Sobre textos que parecen narrar diversas partes
de nuestro recorrido, considerablemente largo y lleno de contrastes, este
momento se caracteriza por su intimidad. A medida que la narración avanza,
el clarinete bajo y el violonchelo se entrelazan con líricas líneas melódicas
que parecen preparar la caída de la noche en nuestra travesía. Under de Stars
4 Alusión a AAA, i.e., American Automobile Association: https://www.aaa.com
5 Un año después de la composición de Road Trip, en 2018, el material de este movimiento fue
reelaborado por Wolfe como un concierto para violonchelo y orquesta bajo el mismo nombre
Wind in my Hair. Para acceder a información sobre la obra ver https://juliawolfemusic.com/
music/wind-in-my-hair /
7
(Bajo las estrellas), de Wolfe, recrea el encuentro de nuestro grupo de viajeros
reunidos en torno a una hoguera bajo el firmamento nocturno. Una familia
de ukeleles con diversas afinaciones desenvuelve un extenso patrón rítmico
cuya repetición no es tan evidente. La entrada de la voz unifica el discurso, a
manera de sección central del movimiento, que marca el paso hacia un final
caracterizado por el empleo de glissandos enajenados y entretejidos; un final
que se extingue psicodélicamente de manera cada vez más lejana.
En tanto que nos acercamos al final de nuestra travesía, Moose Unseen
(Alce invisible), de Gordon, genera un contraste sonoro muy marcado con
respecto al movimiento anterior. Claramente, este despertar está lleno de
energía expansiva y avasallante; con una pulsación llena de detalles rítmicos,
resurgen evocaciones de movimientos anteriores en terrazas sonoras que se
superponen. El movimiento final, Arrival (Llegada), también de Gordon,
marca el feliz final de nuestra travesía. Desde un solo de violonchelo que
es heredado gradualmente por los demás instrumentos del ensamble, se
diferencian de forma progresiva dos tipos de material que sostienen la obra:
un material germinal y una pulsación sobre notas repetidas. Los materiales se
disipan lentamente y a la par la obra nos lleva a un punto de reposo final para
terminar nuestro recorrido.
Volviendo a nuestros interrogantes iniciales: ¿qué pasa cuando se
sobrepasan los límites?, ¿se transgreden fronteras? Tal vez, en lugar de
‘transgredir’ se trascienden para ser absorbidas por la vida misma. Desde
nuestro recorrido, avanzando por la constante pulsación vital de la música,
nuestra experiencia se fundamenta en la absorción e incorporación de
influencias y memorias compartidas. En ocasiones, el arte no requiere
procesos de abstracción de la vida cotidiana para transportar a sus audiencias
fuera de sí. Por el contrario, en otras ocasiones profundamente expresivas, el
arte invade la cotidianidad para revalorar las conexiones de la audiencia con
su entorno. El recorrido de Road Trip llega a su fin, solo para volver a empezar
en la travesía que sigue con cada uno de nosotros.
8
Jaime Ramírez Actualmente está vinculado a la Universidad Javeriana
y la Universidad Nacional de Colombia; junto a su labor docente ha
mantenido una intensa actividad como contrabajista dentro y fuera del
país. Adicionalmente, desde 2012, se vinculó a la Sección de Música de
la Subgerencia Cultural del Banco de la República para desarrollar di-versos
proyectos artísticos.
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Foto: Peter Serling
Foto: Aline Muller
Cristian Guerrero
(Colombia)
flauta
Domingo 5 de febrero de 2023
11:00 am
Édmar Castañeda (Colombia)
arpa llanera y Grégoire Maret
(Suiza/Estados Unidos) armónica
Domingo 12 de marzo de 2023
11:00 am
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Jonathan Leibovitz (Israel), clarinete • Foto: Kaupo Kikkas
TEMPORADA NACIONAL
DE CONCIERTOS
Banco de la República 2023
Fuente:
Biblioteca Virtual Banco de la República
Tipo de contenido:
Programas de mano