TBUI• 8° t
'WAL 10 a8.j Jllebtllin, 2~ be enero bt 1856. ; 1'f1JB• 88
{ TA.LZ :1. REAL.
CANDIDATO ni podido tener otro fundamento, ni otro
1
sigan su direccion, obedeciéndole.
objeto, .que el de dar~~ hom~re! por tantas ;Pero como la fuerza publica no tiene otro
DE contraneda.des. combatido, el amm. o bastan- objeto que. el de protejer, se sigue que aque-
.. EL PUEBLO" te para restsbr, para perseverar 1 aun para llos que viOlan los derechos ajenos quedan
PA.B.A.PRESlDENTE DE LA REPÚBLICA EN EL PRÓCSlMO combatir. Todas las SP.ctas filosóficas i reli- SUJAtos al poder público. '
PERíODO CONSTITUCIONAL, ji.osas que el mun.do ha visto apare~er i mo- Ahora bien. Ese poder concentrado en u-
EL ESCL.&RECIDO UIUDA.D&IWO r1r, no hat. perecido en el mayor numero de na.sola mano, en _una sola corporacion, en
t?(]§J~~ ~&S)~Q' casos, t~nt? a manos de la no" edad o de los un solo Jugar, ~er1a totalmente ineficaz, por
\Ü~ >.../ • -- '-' ~ ~ JJ descubnm1entos, cuanto porque el hombre cuanto no habr1a medios bastantes ni tiem-
~ OH. HAN UEL IIURILLO TORO. oR\ ·vió que des pues de discurrir sobre ellas o de po suficiente para ejercerl respecto a cada
~W:JilJ\§J)r~@(!j)A_G!)'¿J adoptarlas para .sí, no le ofrecian, desean- c~so .. Lu.ego. es forzoso que el poder se di-so,
esperanza n1 consuelo. Buscad en este vlda % dzstnbuya entte los grupos para que
(9E L p U E B 1 O 1(}) solo rasgo la causa de tantas revoluciones pueda llenar su objeto.
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0 \.:::::::,.¡____ relijiosas, políticas, filo~ófic~s i so~iales en De aquí nace para nosotros, la necesidad
cuyos brazos se ha mecido 1 embriagado el de dar desarroiJo a la ecsistencia del distrito
J6ede!/t/~, fl4 ele en~() ele ,-J'56.. mundo en la larga serie de siglos que ha vi- i estender el límite de sus atribuciones.
V vido. . . . . Por. eso CJ'eemos que el mejor medio de
A.UOS a decir algo mas acBrca del lHa~erwh~mo _I .fatalismo er_¡_.moral. org~n1zar el país, seria el ~e dar al Gobier-dere?
h.o de _Jos ~istr~tos para proveer a su Ate1srno 1 po~Ite1smo en ~ehJIOn. no Jeneral,el derecho d~ fiJar por medio .de
adminlstrac10n 1 meJora. En uno de nues-¡ Uerecho d1V1~o en polltica. . . las mayor~aslas reglas Jenerales que habwn
tros números anteriores, ecsami nando la ~azas, clases 1 fueros en la organizaciOn de fundar. 1 h_a~er efect~ va ]a igualdad u e ]os
ideas del ilustrado jóven Ricardo Vanegas, socwl. . dere.chos Jn~Jvlduales 1 de los procedimien-
·demostramos 0 al ménos nos esforzamos en ¿Por qué ~a ca1do o .bambolea lodo esto? tos; 1 confenr a cada grupo. el poder bastan-demostrar,
que puesto que hai intereses de No l~ sa.bel~ 1 Pues b1~11. . le. para atender a las necesidades de sus
grupo, el cuidado de ellos debe encomen- . Esa fabriC~ 1n~ensa vwo a tierra por.que mtembros, cuyo poder debiera tambien ejerdarse
al grupo; ¡ agregamos que ,, puesto m el que ,s~ Igua.lo a l9s brul?s ~~sconocwn- cers,e en cada grupo, por medio de las ma-que
todos los individuos que constituyen es- do ~~. espiritu, DI el que supnnn? la t~espon- yortas. , .
te no estarian siempre uná.nitnes acerca de sah1hd~d negan~o el ,llhr~ albedrw! ni el que De ~qu1 deduCimos 1as siguientes canse-la
manera de resolver las cuestiones refe- rechazo ~ pros.lttuycrla 1d~a de Dws neg~tn- cuenetas. .
rentes a sus intereses, era lo mas justo estar do su ~cs1stenc~a o supoménd?lo ~eneb1do La neces1dad de prolejer, envuelve el de-la
voh:r tad del mayor nú ero ••. de paswnes, nt ~,que- se considoro ese lavo r_e,cho de usar deJa fu c··za P ra protejer; en-
. <.:o!Do el pecho de haberse manifestado por de~de. que. confino ~_los reye.s el derecho de tJendase qu~ lluma~os fuerza, no solo las
Jndtvtduos 1 órganos caracterizados del par- senor10, m. el que. VIO la sociedad deseo m,- b~yonetas, smo tambJP-n todo el tren de Gotido
radical, que no hai completa uniformi- puesta arbitrarla 1 confu~amente, ~n.ese cu- b1~rno que comprende a los funcionarios púdad
en este punto, ha sido puesto por un mu~o d.e grupos antagomstns, envidiOs?s y bhcos de tod~ clase.
periódico de la capital, al sen·icio de los in- envtlecidos, que se llamaron reyes, pnnc1- L~ p~oteccwn no puede ser efectiva sino
tereses de un partido, i com-o la diverjr.n- p~s, sacerdotes, n.~bl~s .o peche!·os; rorque se dJstnbuye el pode1' de impartirla entre
cía en este negocio puP.de i debe, a medida runguno de ellos v1o m vislumbro, J~cwmos, los grupos.
que la cuestion se adelante, sepurar mas ¡ Ufl punto de ~escanso en el fondo n1 al tra- Las mayorías determinan de derecho el
mas a cada cual, así como dos líneas que ves de es.os sistemas.. . modo con10 el Gobierno jeneral i el seccio-concurren
en un punto se apartan tanto mas Pues bien .. Esa ~er1a la sue~te q.ue ~a~r1a nal, deber~ prestar esa proteccion.
cuanto se prolongan a mayor distancia del ~le ?orr.er elimperi? de las mi nonas; I si tal ~s entidades. na?ional i secciona] son a
vértice comun, hemos creido de nuestro deber Inslltucw~ no hab1a. de poder mantenerse, un t1empo depo.s1!ar1as de un voder, e insinsistir
sobre esta materia; ya para demos-- las may~rwsse e~evana~ fo~zosamente al~~; trumentos administrativos.
trar que la causa de la diverjencia es ima- lo que h1en anahzado sigmfica que. en ulh- ~~Sl=---
jinaria, ya para impedir que con perjuicio mo resulta~o. solo las mayo1·las tienen el TEATRO.
de nuestro crédito i de los intereses comu- derecho detmperar.
nes. se esplote un incidente que vino en mal ¿Por qué pues q~iere hacerse creer que el El domingo 20 del corriente tuvo Juo-ar
hora a turbar nuestra armonia. dogtna de las mayonas,no es el dogma del de- en el teatro de esta ciudad Ja representacion
? de la 2. n parte de " El zapatero i el 'reí "
~esd~ luego comenzamos por rechazar la reeho . , drama de don José Zorrilla. Sentimos que la nue:
arht!raria distincion que se ha tenido la pre- _Pr?sJgamos ahora SI, con nuestro asunto va compañía de aficionados haya heeho su detensiOn
de hacer entre la mayoría i el dere- princ1pul. . . . úut con ~emrjante drama, que nos parece detescho.
Par_a nosotros, las mayorías imperan . ¿Son. los gob.Iernos meras entldades adm1- table, como toLlas las producciones dramáticas
l 1 d ? que eonuct>mos de este autor. No nos tomamos
porque tienen el derecho de imperar, i son mstr.,a1lvas o ~Jer?en rea ment~ a gun P? er. e.l trallajo de Jeet· esta composicion, para autó-
~ue~os de ese derecho no solo porque ló- ¿Sor~ lo~ d1stntos parroqu~~les, secc10n~s rtzar nuestro. ase.rto con una critica séria, pues
JI Ca 1 justamente les compete, sino porque son d~ terr!tor10 ?readas p_ara f~c1~1tar la admt- nuestra conc1eneta no está por ahora tan r·ecar-
1as ó.nicas que pueden apoderarse de él, de- n~stra910n o tienen ecs1stenCia 1 derechos pro- gada de pecados, que merezca penitencia se me-
~ d l · · ? janle. Encontramos en esta pieza desnalur·aliza-
Ien ero 1 VIndicarlo. 1 aunque en jeneral no pws · . . da la historia, haciendo a todo un don Pedro el
es del hecho de donde debe deducirse el de- Para responder a Jo primero dirémos, a cru~l desafiar al labriego Pascual a batirse en reto
recho del que obra, no puede negarse que, te- riesgo ,de ~epetirnos, lo que nos p~rece ha- singular. En esos tiempos de jerarquías perfecnidas
en cuenta la condicion moral del ho,-n- ber ~nllncJado en mas d.e u.na ocas10n. Los tament~ defini.das i fanáticamente respetadas, los
bre, i la sabiduría que ha dictado ]as )e1res Gob1e. rnos,son los depositariOs de la fuerza nobles 1 especmlmente los reyes retaban a hom-
J , bl bres de posicion idéntica, se batian con sus va-de
su ecsistencia, todo hecho que forzosa- pu Ica. . res, pero con villanos nunca.
mente ha de triunfar debe considerarse co- Veamos ahora qué carácter les da la c1r- . ~o ha.i qu~ buscar en esta ~l&lhadada compomo
forzosamente jus'to, a ménos que sen- cunstancia de tener tal depósito en sus ma- swton m paswnes Yerdaderas 1 sentidas, ni pin-temos
el principio corruptor i desconsolador nos. tur·a pro.funda. de costumb~es, ni. intrigas que
d aterreu 1 domtnen la alencwn, nt fin social ni
e Hobbes i proclamernos la soberanía del El hecho del depósito trae consigo, deci- cosa ninguna. Solo se encuentr·an en eJJa ver:sos
mal. Ve~ a~¡uí lo que no haremos. mos noso~ros, la fa~ultad de usar de él; lu~- armon~osos a veces e ins~stanciaJe_s siempre,
Las c1encws todas, sea que tengan su fun- go el Gobierno haCiendo uso de la fuerza pu- adulacwnes al pue~l? e~panol, cuehrlladas i peda
mento en el mundo físico, sea que se li- blica que le está confic:da tiene i debe tener loteras d~ tabcrn~ 1 fanfarronadas de. ~al gusto.
· d 1 'd · 1 d ' l · d' Pero s1 en la pieza todo nos parecw falso in- mttel a es~nvo ver cons1 erac10nes pu~a- e_ po e~ bastante para ha.cer que os. 1n 1- sustancial ¡ desatinado, la representacion oc; fu~
mente relatrvas ~ lo moral, no han tentdvnrados por amhicion fJrofUitda i pasiones
ardientes: han los rebajado enL1·e el poeta i los
·actores, al nivel de guapetones de taberna, jac~
taneiosos i desulmadt•s, con sombrero ladeado,
e~cup1endo por el colmillo, diC'ienJo ternos i e-
. .cbando bravatas. Palabras i m o\ ilnientos todo
nos J.lareció inverosímil, ecsnJerado, sin dign'idad
i si"n me:;ura. Esa caminadera en sentido imerso
de los inlNIOcl.ltores, formandu líneas ¡.mmle·
las, i miranuo uuos ¡.>ara un lado i olrus para el
coutr·ar·io, rJO nos parece natural: en el mundo
reyrs i súbditos, nobles i villanos tratan sus a~
suntos i arreg-lan sus querellas sentados o parauo~
UOCIS en frente de Otl'OS, O paseándose sin
uar~e lcl espalda.
N u estros jóvenes actores han adquirido la costumiJre,
cuando estan solos en la e~cena, de encararse
con el público para tlirijirle sus monólogos
desde el bot de del escen¡nio, a guisa de
diJ .. Hllado pmvineial que se Llirij.e al p1·esidente, o
de tribuno polílico que arenga al pueblo soberano.
Eslo no es así: todo individuo que, en el
arrebato de uoa pasion o de un se11timiento cualquiera
habla cou~igo mismo, es porque está solo
i dirije sus palahras en desórden a cualquiet·
parte sin pretender arengnrle a nadie.
A nuestro públit.;o le caen rnui en gracia i aplaude
que es un gusto las fanfarronadas i los
bravatas diehas con ecsajeracion i arrogancia.
Los actores dehen deslleñar estas O\ ariones de
:rnala Jei, i buscar los af)lausos i las simpatías
t.Je la Jeule sensata que no aumira sino lo que es
.natural, sendllo i vrrllauero.
La antigua compaílía de aficionados se ha dividido
en dos, que trabajan cada una por su cuenta:
ignoramos los motivos de se1~1ejaute cisma.
Lo que sí sabemos es, que fracdonandose, ambas
tompañías se han debilitado, quedando esCi:
lsas de buenos papeles, eon gran~ perJuicio del
público, a oombre del cual pl'otestamos contra
)a di\'ision, aconsejando a los poderes beJijerantes
echen prliilos a la mar en oose_quio 'de lu
union i la fraternidad.
Es de nolarse la predileccion que nuestto pú·
blico tiene por los dramas: la comedia, aun la
de Breton, del saleroso i picarezco Br·eton, Je da
sueño. Es que al público de por acá no le gus-
1a reírse: a los antioqueños, sit'rnpt·e eesnjera·
dos, solo los sacuden escenas \"iolentas i wtsiones
homiduas. Amigos de sensaciones fuerles,
1al vez para buscar couln1sle con la prosa eterna
i la monotonía cuotidiana de nuestl'a vida,
tienen marcada predileccion por el dmma pavoroso
i romántico de Dumas i Víctor Hugo.
La roncul'l'eneia a la última representacion fué
numerosa; no habria mén:Js de othoeientas o
mil · per ·onas:· decidi<..lamente en eslü ciudad hai
aficion por el teatro. Con guslo rimos allí algunas
familias ricas, que uasta ft hora <.lesd r. fio~
as ~ reca.Jcilranles, habian brillado por su au#!
iencta. Notase aqurJ como en Bogotá, que · Jos
pobres son los que sostienen el teaL¡·o. La economía
es una vü·Lud en los pobres, í un yicio
asaz de mal gusto en los ricos. Los horn brrs
o pulen tos,_ pot· el .sol~ hecho de serlo, despiertan.
la ammadverswn 1 las antipatías del prole-
1at'Jsmo desamparado. Los ricos ilustrados de
otras partes, comprendiendo bien esta Yerdad,
procm·a~l hacer aceptar su bienestar, i tlbsol-
ver su opuleneia, dando con sn lujo trabajo a
los pobt·cs, fomentando ]as diversiones tullas
promoviendo todo linaje de consumos i gastan~
do el dinero con mono inlelijente i librral.
. Con el estímqlo que unu concurreneia casi
Sl.emp•·e nurnerosa presenta a Jos aetorrs, j pndrendv
ser el te_;:t~ro entr·e nosotros objeto de una
~>sp~culacwn ~;en a, creemos a n ut•stros JÓverl(•s
afieJ<.~nadoti en. el debel' de r.ntrt'garse a esttH.lios
ronc1_en~ud~s 1 de pt·ocurarse m ujet·e~ Vt>rdaderas,
sJlashal.La gazmoñería i el afeetalll) purHauis-
. fl10 de rJU~~lras co!'tumbres oponen a esto ~ravisi.
rnos ohsta~ulos, lo ~ilht>mns; pem con tenazidad
1 constan(·¡a todo se cons!guc. ll:n los paises cutlos
el teatro es _para las mujeres de talento un&
rurrra luaal1v; , de~lun¡!Jradora, e~pl ~ udida ~
llueven sobre ellas aplau~o~ i flor •'s) i lo que'
tJS fHnte para la elecdon de Alcalde i vo- presentase a reclamar su inscrí¡.>cion: in(h.idacales
del Cabildo, se ejecutat·on bajo el imperio blemenlc se ~ontaba con ellos pat·a que \'Otasen
de la fuerza que el Prcfedo del Circuito señor segun el querer del Prefecto (2). Dado esle paAbraham
Garcia trajo de MedeiJin, para ahogar so, i seguro él de que los liberales eslúbamos
la \'oluutad de los ciuuadanos liberales, que for· resueltos a trabajar en las elecciones de empleaman
la mayoría de los habitantes del distrito, dos del distrito, determinó ir a :Medellin a traer
i hacet· triunh1r a lodo trance, las candidaturas fuerza armada para llevar al cabo su plan. (3)
conservadoras. Este hecho, se consumó al fin, Varios conservadores de notH negaron que tal fuede
una manera alturnenlc escandalosa, i nosotros ra el ohjeto de su 'iaje, i trataban de calumfallariamos
a nue:;tros dt>Lleres de pHtriolaF- si no n.ia.t.)..les a los que lo ase\'eralJan; algunos de edenuncjaramo~
al público la serie de atentados llos fueron sin eml)argo hasta el Llano de l\1on~
vergouzosos que lo prepararon, acompañaron i tafia a recibir con música al sefior Prefecto a su
siguierfecto, que no los hayan presencia- tratamos ) la tropa llegó a esta pll-)za el día 21
do·; hedws que se resistirán tal vez a creer las del mismo mes, trayendo una cnrga de fusiles,
personas que 1cngan el peor conce¡.>to del carác- i fué aumentaJa aquí llamándose al servicio a alter
e inslinLos del jóven Ahraham Gcucia; pel'o no gunas personas de la confianza del Prefecto, a
importa: sobre la realidud de ellos podrán uecla- las que él íenia cuidado de dar ántes o des-.
rar· intinidad de tesbig·os intachables, muchas pues del llamamienlo, la investidura de comisapersonas
caracterizadas qne los han presenciado. ríos de policía, para guardar no se sabe qué a ...
Por mas que se crea improb<1ble que un jóven, pariencias (4).
de regula!' educacion, J¡e~ya sido capaz qe resol- Complel[tda así la guardia pretoriana, el disverse
a pisoteJr las le~' es i la moral, constituyén- lrito fué mirado como en estado de camparla,
dose en jefe de un llilltdo político, para privar a .por tolla per::;ona de :::;eotido comun. El Prefec ...
los ciudadanos no pertenecientes a este del uere- lo a la cabeza de su tropa, hacia paseos mili
cho de sufrajio; por mas que se crea imposible tares por la plaza i calles, a tambor batiente i
que él haya llevado su cin ismo político ha~;ta va- caballero sob?·e un. macho; mas como quien trata
e se de todos los medios qut' le daba ~u autori- de hacerse lemiLle a -una poblacion tnerme.
dad para hacerse Alealde de Sopetran, contra el i pacífica, que como quien recorre un campo de
querer de la mayoría de sus lwiJitrlllles; es ne- batalla, despues del triunfo, para. recojer los
~~esai'Ío creerlo, pu(·sto que los ht!ciJOs se. han e- muertos, heridos i contusos.
Jecutado a la faz de un puehlo entero, 1 con la El :sábado 2·.2 del pasado, víspera de las últinolot
·iedad necesaria, para que no puedan dudar ruas votaciones, muchos liberales del pueblo, que
de ellos, Jos eseéplitos mas consumados, los lt'abajalJan con buen suceso en las elecciones !.-:!pirrónicos
m a estra,·ngantcs . mndo a sus coparlidarios a tomar sus cédulas, re ....
Forzoso es confesnr desd luego, que el señot· cibieron órden de presenta1·se a las cinco de Ja
Ahrahdm García observó al principio, eu el desem- !.arde eu el Despacho de la Prefectura pal'a que
pt>ño de su destino, una conducta moderada i s&guieseo a Jesempeñar una comisión en I..iboricircunspec.
ta, que se granjeó las simpalias i es- na, qu1! Jista de esta pinza algo mas de cinco
li,mr~cion persom~l de muchos liL t~ rales, i en cam- leguas. Tambien fue citado para el mismo obbio,
como et·;, natur·al, le acarreó tambicn iujus- Jelo eJ seño-1· Francisco Meri, Presidente de una
las censuras de parte de hls eonservadores ra- de las Ulesas electorales i pue!:tlo en po~esion de
biosos. Es verdad t¡ue uno da sus primrros pa- :-;u ueslino de jur·ado por d &rfior Prefecto; i auusos
fue el de promover la ejecucion de las ca- que espreso a este el impediweuto legal que te ..
ducas disposiciones de policía <:ontra los vagos; uia pata ir a Ja comision, no le fné admitida
pero miéntras lo hizo sin mostrar en ello mi- su escusa.
ras de partido, i sin frustrar, como fruslró des- Los señores Luis Loaisa i Pet.ho Gomez fueron
pues a Jos sumariados lo3 medios de defensa, reducidos a prision por el seíwr Prefecto en la
tlejando de concurrir a la oficina parc-1 que ~e p~- misma fecha. Bespecto del primero no se ha
snse e~Lérilmente el krmino que le~ concedía pullido exhibir ni un preLesto siyuiel'il deducido
para crear las pruebas que deuian desyanecer los ue alguua disposicion legal, Por lo que hace a
s~lpuest os cargos; mi é uLra~ no se abaud~nó,_de- Gótuez. la boleta de su prision dice •· que está
cunos, a estos actos de verdadera prevancacwn, ÜH.hciado en un sumdrio que se le signe por prónosotros
no veiamos en el Prefecto, tÜ queria- vocucion a riíia ''. Pero es derna~iado sal.nJo,
mos ver otra rosa, que un empleado conserva- que aunque la rii1a se hubiera ,·erificado, P.l
dor jenuiuo, obrando en el terreno de sus con- provocador no UJerecia peni:l corpOJ·al, i eu convicciouet\.
Empero; las cosas variaron despues becuencia no dellia ser reducido u prision, eon ·
notablemente, i durante los días de las votacio- furwe al Código de vrocedimtenlo criminal. No
nes para Goll~rnador i miembros de la Lejisla- (:uuleulu e1 Prefecto con privar n Gumez de su
tura nacional, los csbinos del ~eñor Prefecto a- Jiberlad, le Lizo poner una pt•sada cadena al
menazaba11 a nombre c)e este con sumarios de pié~ i por la. uodJC lo hacia pl>ner adetnas en
vagancia ~ Jos cindad_anós que no volaral~ por uu cepo denli'O del calabozo. A vssla de es e
los candidatos del parttdo conset'vador. Vanos e- martirio gratuito e innecesario, in1erido a un
leclores fuerou llamados a volar por los comisa- ciudadano que no era reo Je un delilo att·oz,.
rios de policía de órden de la autoridad, i con- ¿quién se au·e\'erá a afirmar que su prision fué
currieron en erecto a, Lleposital'· eu!as urnas e- decretada por ignorancia, max;.irne si se aliende
leotorales, no la esprdioü de su ' ·oluntnd, sino a que tanto ella como la de Lmüsa se Hev(¡llos.
votos ar'rancaclos por nquel emple~do i sus s9- roo a efecto en dus individuos de que el st>ñor
lícitos ajenlcs elecf!ionarios. El primero llego, Prefecto necesitaba librarse, porque estaban tl'aen
L.ts votaciones del m¡eve de diciembre, habla el bCJjando cou tezon i buen resultado en fclo les ha cum- che en el mencionado sitio, i por qué era nece-
El sefiot· Pr·efecto i sus ajentes quitaban las plido su promesa pun1ualmente, pues ha tení- Síior Prefecto del 22 del pasado. despues en Sopetran con los comisarios improde
1a resistencia que dicho elcrtor hacia para Hahiemlo sabido el Prefecto que en la tarde viStldos? Si había criminales ¿por qué no los trarlarla.-
A otm que desobed(.•ció la ÓI'Cicn de en- de este dia Vs; ( 5') al maltratamiento de obra in- la plaza. Cuando estallan cerca dell:entro de esta, darse. Las cosas tuvieron este felíz tét·mino port
·eri<.Ja por Manut>l Antonio Sevillano a Víctor To- los soldados que habian permanecido en ,\ ~wr- que nosotros, juzgando por lo que el Prefecto
vnn, por· que .solicitó le devolviese a un elector tel, hicieron fuego. con lo cual se dispu·saron había hecho lo que seria capaz de hacer; no
liberal la crdula que le había arrebatado; a otros los mas tímidos; pero vientlo el Prefecto que los quisimos que nuestros copartidarios se espu ..
act0s semejantes de violenda, eJecutados por demas permanecían reunidos i pl? rsistian en diri sieran a, te!ler que er.npeñar un.a lucha sangrien ..
partieu\ares en aqut>l dia funesto para la líber- jirs ! al local, donde los ¡·espec.livos presidentes ta con el 1 sus esbirros (8.) El se había mostad,
í mas aun para lll. reputacion del señdr Pre- de los jurados es taban uando cédulas, -~e din- lrado capaz de toao para aar el lríunro a su part'ccto;
todo esto, decimos, ern, por sí solo, mui jió a loR electores i los citó pnra la consabida tido, i nosotros tuvimos la suficiente abnegacion
snficit~nte para prodneil· en el ánimo de los elec·· comision, de Liborina. No bastandole esta coac- patriótica para prescindir dd uso de nue~tros de-
1Mrs tímidos i sencillos la idea de que era un cion, tomó los que pudo alcanzar, i fué colocan- reehos politicos porque asi era necesario en ob·
dt>lito votar por los eandidatos liberales, i un dolos de trecho en trecho, con órden de no mo- sequio de la humanidad. Sí: prescindimos del
debet· imprescindible hacerlo por los del ban- verse por que los necesitaba TPspt>ctivarrwnte en triunfo, porque no lo quisirnoE manchado con sahdo
conservador; so pena de es ponerse en caso el lugar en que los colocaba ( ya se Jeja vet·..... erre de nuestros hermanos. Tenemos sobrada fé
contrario a consectH'ncias drsagradables. para poncl'los en la altemativa de desobedecer- en los principios i estamos convencidos de quo
Aunque st>a invirtiendo el órden eronolÓJÍCo lo i tener por ello que it· a la drcel, o renun- la suerte del partido Jibe¡·al, i con ella el por ...
de los hechos, nú podemos ménos de referir en ciar al uerer.ho de reeibir sns cédulns .) Los tlue venir de la Repúulic~, no dependerá jamas de
e~te Jngnr, que a Herrr~enejildo Gui.ll.en, indul- pudieron e~~apar de .rsta me~idet estrat~j~ca en - lo que suceda en t,res ~ cualr~ pro,incias, quo
tado del delito de rebeltoi1, a coudtcwn de su- traron reumdos al recmlo del JUrado; mas cuan- · se hallan en una sttuacwn east tan desgracia·
frir algunos mt>ses de destierro en Liborina, sr do estaban reclamando sus cédulns, la puerta rla eomo la nuestra. ménos dependerá por cier)
e prornelió por el Prefecto, quA no lo enviaria de este fué invadida pot· varios soldados qut>, con to de lo que, respecto a elecciones, haya ocura
su dt>stino, si votaba con los ronservadorf's: bayoneta calada i m doble flla, se presenta- l'ido i pueda ocurril' en el distrito de Sopetran.
aceptó tan jenerosa ofet'ta, i habiendo cnmpli- ran sin objeto ostensible pero con el fin sin dn- La ccto i su Secretario, señor Pio Quin- la tropa, en la esquina de la plaza que dá sa- mos a los heehos JJreclaros del nuestro.
to Uribe, en una de las esquinas de cgta pla- !ida para el Llano de Montaña, i los condujo a la Segun dejarnos indicado, nosotros abandonazá;
de cuvo hecho pueden dar te:;timonio mu- drcel en medio de bayonetas, con el preleslo de mos a nuestros contrnri1JS el campo de las cenos
individuos de ambos partidos. Pero lo que que los necesitaba para una ronda. Antonio José lecciones, dt'sde el 22 de diciembt·e por la no-:
1nas aturde es, que a José Mar' a Cl V;lllos, que Escovar i J B. Menéndez que iban con los elec- che ett 4ue llegamos a conveneüruos de que ese
halla en el mismo caso que Maletrl, i a quien tores pregunt;.~ron al Prefecto "sí cou ellos t~m- ra peligruao continuar trabajando, i dejarnos por
. se hizo la misma propuest:t que a este, se le l:>ien se entendía la citacion hecha" i nquel con-¡ consiguiente que el señor Prefecto i su círculo
persigue con encarnizamiento por que no qui- lestó que no. EntónePs Est.:ovar le replicó: ~,a rt>cojiPran pacíficamente el fl'uto de sus fatigas.
so aceptarla. El señor Prefecto, para cumplir nosotros no nos rila U. porque eonocemos nues- En declo: al pr·acticarse el escrutinio de las voen
la persona de Cevallos la requisiLOI'ia de que tros derecho~; la vejacion es solo pal'a estos in- taciones del dia sig·ujl'nte, ningun voto liberal se
ántes hablamos, improvisó de comisat'io a Pe- felices que no los conoceu''. Un momento des- rncontró en las urnHs electorales que turbage la
dro l\Jontoya en. la plaza de esta villa, i sio pre- pues los esp~esacl?s Esrs de ChagnR!ar, Miran-
Sénnos P~.~mitida la mi~ma inversion ~el ór- mente ny trahnjar. mas en lag ele~~cion<:s ";. ll lo
1
da, Rodeo, Cunalfalso, Ciruelos, Peña.blanca, Laden
cronoiO]JvO parn refrnr otro het'ho 1m por- que replicó t>l Prefecto "yo necesno es La Jl·n :e ¡) umho, Guayabal, Aburrl .Prefeeto 1 sus !'ot~
.ciR os, el primen> por .supuesta vagancia, i e! J impudencia jnaudila ! ! Lu:s criuüualc.:; lf<.: e~a uo- uado:;, t del riesgo ~u e corria.! s; pt ete11diaiJ ·Q-Digitalizado
por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
tar, no solamente no lo hicieron, sino que m
aun se presentaron a reclamar sus cédulas, lo
que habt'ia convenido para evitar que los ajentes
de la autoridad hiciesen sufragar eon ellas
a electores de su bando, que ya lo hubiesen hecho
con las suyas (9). El número de sus votos
no fué, sin embargo, de consideretcion: i a pesar
de que el Prefecto puso en juego todos sus
medios de accion para hacerlo crecer, trasladando
para ello su cuartel jeneral al edificio en que
los Jurados electorales egtaban ejerciendo sus funciones:
apesar de que algunas electores timidos,
entr·e los cuales figul'an individuos ántes conser-
vadores i comprometidos al fin a Yotar por nuestros
candidatos, lo hicieron a favo1· de 1 os del
l>ando opuesto aconseJados por nosotros, para
que no quedasen en riesgo de ser perseguidos
mas ta1·de, (1 O) a pesar, en fin, de que las elecciones
se celebraron en no dia de inmenso con-·
'?Urso, de que se hizo votar a labriegos infelices,
preparándolos de antemano pa1·a el engaño
con sendas libaciones al dios de los beodos,
i de que varios desconoeidos sufragaron con nombres
i cédulas pertenecientes a otras personas.
..... el bando del Prefecto consiguió reunir en
su favor ¡apénas trescientos cineuenta votos!
. Véase por este resultado, cual es la popularidad
de que gozan en Sopetran los pretendidos
apóstoles de la moral i los ,qt"a·rdianes de
la let. Véase en consecuencia, que si el alcalde
i miembros del Cabildo, elej~dos bajo tales
auspicios, llegan a ejercer sus funciones porque
se revoque Ja resolucion de la finada cnrporacion
municipal que dedal'Ó nulas las votac; 1es; no
hAbrá en este distrito en el corriente una
administracion municipal i políliea naci .. · .fe la
lei ni de la voluntad del pueblo, sino 1 a au~
ori~ad intrusa i de hecho, procedente de un oríJen
tmpuro.
Si así sucediere, por desgracia, nosotros que
ya dimos una prueba efectiva de amor a la paz,
!1arémos l?s mayores esf~erz?s para que semeJante
autondad sea obedectda 1 respetada; i coadyuvarémos
aquellos de sus actos que estimemos
ajustados a la lei (11.;) pe1·o en cambio serémos
tambien los mas celosos defensores de las garantías
públicas e individuales, reuniendo nues·
tros esfuerzos a Jos de los agraviados para reclamar
contra cualquier procedimiento injusto,
de que sean objeto, i recabar de los tribunales
la debida reparadon. Al O-bservar esta conducta,
no trabajarémos por cierto para nuestro provecho
personal sino por el bien público: porque
queremos como verdaderos liberales que las garantías
que otorga a todos los granadinos la Constituc:
ion de la República, sean una realidad, especialmente
para los infelices proletarios que son
los primeros que caen bajo los golpes arLitrarios
de los tiranuelos de pueblo, de los manrlll·
rines sin pudor. No aspiramos a los puestos pú·
blicos ni los necesitamos; i sean cuales fueren
]os ciudadanos colocados en ellos, llámense conservadores
o Jiber datos posible,.
~o hacemos mento en el d~ la _lDJerencía opresiva, que de
acuerdo con el _Prefecto, ejercieron en las elecciones los
alcaldes de variOs otros disiqots.
Protestamos tarnhien, que la conducta observada
por el seño1· Gal'cia en las elecciones no ha
sido parte a menguar el buen con~Ppto en que
lo tenemos en su carácter de hombre privado
i la esti~acion personal, que en fuerza de ello:
ha merec1do de nosotros. Los que hemos sido
favorecidos con sus reladones de amistad, asi
como los que no las han tenido con él estamos
léjos de ahr!g~r algun sentimiento de r~ncor por
Jos acontecumentos que en el presente escrito
se refieren; pues .a.l CCJntrario sentimos frofundamenle
que un JOVen de las dotes de señor
García haya arruinado su naciente repntacion i
puesto ~n punto final a su carrera pública, abandonandose
como un loco furioso a perpretar
hechos que podemos llamar de SALVAJISMO POLíTICO.
Lo hemos considerado únicamente en su
calidad de empleado, i creemos hacer un serv~
cio al público i a los buenos pl'incipios, denuncwndo
los actos escandalosos de que él se ha hecho
responsable. Tal es el obJeto de la presente
publicacion. (12.)
Sopetran, enero~ 6 de 1856.
S. Y.itla.-1. B. Menéndez.-A.ntoni(l J. Escovar.-
A nd·tes Lara.-Alanuel Hernrtnde.z. -José
María Madr-id -Francisco TTespalacios
(l.) El señor Abraham Garcia, en conversacion particular
con algunos liberáles, se quejó de que ''ciertos conserv~
dores le. ~ensurasen sus relar.ioncs con aquellos i quiSiesen
apetlldarlo pasado, negándole asi el nobilisirno título
de. conservador." Él añadió, " que no habia aceptado
el destwo pa!a protejcr a determinado bando político ni
para perseguir a los que no profesasen sus misruas opinio~
es, i JlOr ~ltimo que la persona que creyera lo contrano
lo conor1a mui poco i le hacia un ag1·avio positivo."
En el presente e crito se verá que el señor García
se ha hecho conocer demasiado, i se verá tambien cuanta
blfena fé encerraban las palabras suyas que dejamos indiCadas.
__( 2) Cualqui~ra que haya leido las disposiciones que
fiJen en matena de elecciones se convencerá fácilmente
de que aq tellas inscripciones, ademas de irregulares por
haberse hecho _sin observarse l~s formalidades que la ordenanza
pre ·cr1be, fueron tambten estemporáneas. Adviertase
que los j uratios que se indican eran esencialmente
conservadores.
( ~ ) El artlcl;ll? 110 de la ordenanza que arregla las eleccw~
es muntctpales establece "que el dia en que ellas
se venfiq~en n.o podrá haber en el lugar ni a media legua_
~e du;tanc1a t1:opa a'rma:~a, sino son los cuerpos d ~
poluta o la guardia que extJa la custodia de los presos
parque u otro objeto en que la guardia sea de no tori~
necesidad. Mas adelante se verá que esta necesidad notoria
existia en .realidad para el_ Prefecto i su circulo, pue-s era
necesariO poner presos 1 custodiar a los potres labriogos
que viniesen al lugar con el fin de votar por los candidatos
liberales.
t 4 ) Algunos conservadores de esta vilJa se mostraron
mui satisfechos de que entre el Dr. Jiraldo i el señor Abraham
tiarcía hubieran encontrado una conva (son sus palabras)
para eludir la prohibicion de tener fuerza armada
en esta plaza durante las votaciones, contenida en la ordenanza
de la materia. Dificil es creer I.JUe un empleado
de la .categorla del señor Jiraldo se prestara a entrar
en tan dtabólrco plan; por honor suyo supondremos mas
bien, que, para conseguir el envio de la tropa el Prefec to
lo convenció de que en Sopetran había estallado una
revolucion.
( 5 ) El que dudare de esto puede ver la declaracion de
Jesus Oquendo que se haya en la informacion que a solicitud
d:}l Procurador municipal de este distrito se levantó
para apoyar la resolucion del Cabildo del mismo
declarando nulas las votaciones de que nos ocupamos. '
( 6 ) Este Jose López es uno de los individuos de la
escolta que sin-ió para asesinar a Nepomuceno Dias i cuatro
hijos en la plaza de San-Jerónimo e~ 14 de agosto
de 1851. Era de teme1·se pues un atentado de su parte.
tanto mas cuanto que se hallaba beodo cuando el Prefecto
lo enroló en el piquete de que hemos hablado.
( 7 ) Preguntado aquella misma noche el Juc1z de Circuito
por el señor .Menénd1~Z acerca de lo afirmado por
el ~refecto ~ontestó sustancialmente lo que sigue: que no
habla reqnendo a aq1,1el empleado especialmente para la
captura de determinados reo; en los dias do las el ecciones,
í que no se habian librado otras providencias en su
despacho que las requisitorias jenerales que se e. piden
en ciertas épocas para la aprehension de reos ausentes.
( 8) Un conservador de nota manife tó a unode nosotros
que "ellos_ estaban resueltos a rono, i que si los libe
« rales no hub1eramos levantado el campo i hubiera ocur<<
rido algun disgusto el dia de la votacion, habría cor
« rido mucha sungre; que habían rodado las cabezas
« de los mejores liberales; i por último, que la vida de
« Antonio José Escovar estuvo pendiente de un hilo". Aunque
esta confesion nos relova de producir pruebas no deJaremos
de noticiar al público de las que hemos recojido.
( 9) Las cédu!as que no se habían repartido hasta las
oeho de la manana del día 23 de dir.iembre quedaroo·a
disposicion de los Señores Pio quinto Uribe (Secretario de
la Prefectura ) i Joaquín l\1eza, ambos conservadores notables,
como que eran los individuos q11e debian continuar
distribuyendolas, conforme el artlculo 26 de la ordenanza
de la materia.
( 10) Uno de los primeros actos del alcalde interino
fué n_ornbrar co~i~arios a varios i!ldividuos que habían
trabaJado con dec1s10n en las eleccwnes a favot del partido
liberal.
. ( l l) Poco probable creemos en verdad que las autoridades
~onservadoras respeten las garantías individual,
es: Prueba lo. sino el hecho sig1liente. La víspera de las
u_l~mas votacwnes el Prefecto puso en la cártel a díspoSlclOn
del alcalde a Zefe.-ino Valderrama sin fórmula de
juicio. Como el supuesto reo se creyese ilegalmente preso,
tuvo a bien a~ojerse a la lei de partida: el PrefC!cto,
en vez de sumar1arlo por la fuga, lo hizo por el delito
de desobediencia. Traído mas tarde a la vista el sumaríl)
por el alcalde interino condenó al reo a sufrir cinco
dias de trabajos forzados e11 las calles de esta pobla-
~(;))~
SEÑORES DIPUTADOS.
. Cuando ~eunido con mis compañeros de comisw~
_ecsammamos la solieitud del señor Pascual
~uherrez de Lara acerca de una quila en la canlH.
lad que debe pagar como rematador de la renta
de lieo~es dest,ilados en la estínguida provincia
de ~edelhn, c~et como ellos que tal peticíon flcberta
s~r a1·cbiVada, s.eguramente porque no tuve
el ttempo 1~ece~ano para ecsamina1· prolijamente
la cuestwn t porque preo•~upaba mi animo
~n!l desicion idéntica de la Lejislatura en la solicitud
delrematador d'e derechos provinciales de
peaje ~eñ?r Joaq~ain Posada Arango.
. Al sigUiente dta de haber tenido una conferenCJ~
~on Jos, seüores Diputados miembros de la com1s10n
cr~1 .d~ber pedir ci~,·~os datos i posteriormente
sohcJ te otrus que 'Vlllieron al tiempo que
tuv~ q~e hacer uso de la licencia que me concedJste1s
para sepa~::}rme de la Lejislatura. Al \'O)ver.,
a ocnpa~ un ~~lento h~ sido informado de que
la Corporacwn fi.JO los objetos de que debe ocu·
p.arse en estos clias con esclusion de los demas;
pe!'~ a pesar. de esto he determinado pt·esentaros
0:1 mforme 1 el del resto de la comision de que
dt~ero, para que les deis el curso que a bien tengals.
El señor Gutiérrez de Lara funda su solicitud
en dos razone:s principales.
. 1 a Que, n~ ha encontrado de parte de las autoridades
publtcas la cooperacion que debieran prest~~
le para per.seguir el c_ont:ah.an.do i 2n Que por
rdzon de la le1 de 4 de JUillo ulttmo sobre arbitrios
él l~ene que sufrir m~a competencia de parle
de l~s Introductore~ de hcot·es esll·anjeros, competencia
gue la provmcia debiera, pero que no
puede evtlurle.
, ~a primera razon aparece de los documentos
ult1mamente creadús. A varios contrabandistas fe¡
han sido devueltos sus licores i ellos contra lo dispuesto
en el artículo 37 de la ordenanza de 16 de
enero de 1854 han podido hacer· uso de esos licores
i ~~merciar con ellos perjudicando derechos
adgmndos pot· el rematado•·, i en que por consigmente
no lo han sostenido las autoridades i funcionarios
de Ja pmvincia.
La 2° razon es incontestable. Inconstitucionalmente
Jejisló el Congreso sobre materias reservadas
~ Ja pro.vin?ia; pero el hecho es que esa lei
por w~onstllUcJ.unal que se~, se:á aplicada pot•
l~s Tnbunales 1 Juzgados 1 sera una autorizacwn
para que los comerciantes introduzcan licocores
estranjeros. Ahora bten; ni sefior Gutiérrez
de Lara se le venllió entre otras cosas el derecho
csclusivo de eornerciar con esos licores conforme
al artículo 37 ya citado: la provincia no puede
sostenerlo en ese de1·echo; luego es preeiso que
haga un arreglo con el rematador. Se dirá acaso
que entónces todos los asenlistas tienen derecho
~ara pedil' una quita; pero es preciso que se ahenda.
a que eJ del antiguo canlon de San-Rosa
compro cuando era libre el eomercio con licores
e~tranjeros, i que respecto de él no hai estípula·
c~o_n alterada por· la lei de arhilrios ni responsabJiulad
alguna de parle de la provincia sobre este
punto. 1 daclo caso de que hubiera otros rematadores
que pudiesen hacer con justicia una redamacion
análoga entónces lo justo seria atendel'l~
s a todos i no cerrar los puertos a toda reclamaciOn.
. P~r estas razones me atrevo a proponeros }()
s1gmente:
Autorísase al Consejo provincial para que haga
con el señor Pascual Guliérrez de Lara un arreglo
por razon del perJuicio que ha sufrido en
el remate de la renta de licorrs destilados que
se le hizo en 21 de abril de ~854.
SEÑORES DIPUTAoos.-He'rmeneJ-ildo Bote1·o.
• ~@)~
AGRICULTURA.
A e_ste importantísimo ramo de riqueza pública, que hasta
bol ha s1tio de:,;cuidauo en Antwquia, por la prefereacia
que se ha dado a la esplotacion de las 1ninas, le IJa llegado
su turno a benetitio dell1bre cullivo del tabaco. Un
cálculo basado en la espenencia, i formado por un celebre
agrónomo natural de la isb de Cuba, demuestra tle
u~a manera e:videute, que una pequeña área de tierra, depicada
al cultt\'O del taoaco, hace neo en poco tiempo a un
veguero que sea laborwso e intelij ente; i siendo ya incue tionaote
que nuestros tenenos producen este arttculo COBa bundancHt,
esperamos que nuc tro agricultore 1ij en en el su ¿ttencion,
st quieren salir de ese esta Llo de pu tracion en que
se encuentran. El culti vo del tabaco es cn cillo, como lo
es su maoipultacion, i nv e neeesita de otro mae tr , que
~e un tra~a d o sob1:e la materia que se trabaj a en eSlll
1 ~1pre~ta, 1 que mm pronto se dará a la venta, a un preCIO
lllUI moder ado.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Citación recomendada (normas APA)
"El Pueblo - N. 33", -:-, 1856. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3684498/), el día 2025-09-16.