Por:
Jairo Fernando Orjuela Segura
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Fecha:
2019
Con la publicación de los estándares curriculares en algunas áreas y particularmente en matemáticas, se genera un cambio de concepciones hacia las prácticas educativas, que traen consigo cambios a nivel evaluativo que centran la atención hacia las características propias de los estudiantes y sus entornos, así como en las particularidades propias a nivel del aprendizaje en cada uno de ellos.
Por ello a nivel mundial, se han empezado a gestionar investigaciones que lleven a generar juicios de valor cada vez más objetivos frente al desarrollo de competencias matemáticas y, aunque no hay un modelo de evaluación generalizado, en Estados Unidos se desarrolló el modelo de valoración que describe por medio de tres categorías: Implementación de la práctica evaluativa, relevancia conceptual y enriquecimiento del aprendizaje de las matemáticas, y seis criterios: Coherencia, equidad, apertura, inferencias, matemáticas y aprendizaje, una herramienta de análisis frente a las prácticas que se están generando para emitir los juicios de valor frente a los aprendizajes de los estudiantes.
Con ese modelo de valoración se hace una investigación en el Colegio Kennedy IED, en donde se encontraron múltiples aspectos que se deben optimizar, para generar procesos de evaluación que permitan evidenciar el desarrollo de competencias.