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La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 173

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  • Año de publicación 29/10/1870
  • Idioma Español
Descripción
Citación recomendada (normas APA)
"La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 158", -:-, 1870. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3687395/), el día 2025-10-27.

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Imagen de apoyo de  Podcast: "Rock al Parque: la música"

Podcast: "Rock al Parque: la música"

Por: Red Distrital de Bibliotecas Públicas. BibloRed (Bogotá. CO) | Fecha: 2019

Podcast que recopila testimonios del público asistente al ciclo de charlas "Libertad Sublime" realizadas en las Bibliotecas Públicas de BibloRed. Dan cuenta de la experiencia musical relacionada al Festival Rock al Parque. Los participantes relatan sus vivencias: donde compraban los discos, los primeros conciertos a los que asistieron, como se difundían los nuevos exponentes del rock colombiano en los medios públicos, la relación de los rockeros con seguidores de otros géneros musicales y la influencia que tuvo esa música en un momento en sus vidas.
  • Temas:
  • Rock (Música)
  • Música

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Podcast: "Rock al Parque: la música"

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Imagen de apoyo de  La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 75

La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 75

Por: | Fecha: 11/05/1870

• Política-Literatura-N oticias-Filosofía-Relijion-Artes i oficios-Instruccion pública - Bibliografía. :Medicina-Variedades-Revista de la ciudad-Revista de los Estados-De Europa i mercantil. Se publica los mi rtes, miércoles, viérnes i sábados, i cl mismo dia. se lleva. a las casas de los suscrito res de la cu,pital i se remite a los de fuera. por los coneos res­pectivos. Los lúnes i juéves se publico.rá si es neceso.rio. Valor del trimestre, tres fuertes. Valor del semestre, cinco fuertes sesenta centavos. Valor del año, diez fuertes. Valor del número suelto, diez centavos. TRIMESTRE 11. AÑO l.-Bogotá, 11 de mayo de 1870. LA ILUSTRACION. No lo hemos dicho todo. No hai sociedad sin majistratura. En las Repúblicas la majistratura tiene oríjen en la voluntad popular; pero es necesario que esa voluntad popular se esprese verdaderamente. Si esa espresion es mentira, ¿ cuál es la au­toridad del majistrado? 1 donde el majistrado carece de autoridad, ¿ qué proteccion podrá brindar al ciudadano, herido en la integridad de sus derechos? ¿ Cuál es el prestijio de un maji~t~ado in­truso; de un estafador de una poslClOn que nadie le ha conferido? Cómo! ¿ hombres que en premio de un elito, deberian estar expiándolo severamen­te, léjos de esto, ocuparán el solio del po?er sociaJ en los diversos ramos de la espreslOn de la voluntad popular; i los hombres hon­rados que conocen tamaña perfidia, se cree' rán obliaados a respetar i a obedecer a seme­Jantes u~urpadores ? ¿ Es esto la Repú~Jic.a ? En verdad que si esa fuera la Repubhca c ualquier cosa seria preferibl~. . Comprendemos que en el SIstema republi­cano pueden ocurrir ciertas aberraciones mortificantes: por ejemplo, que las masas ?opulares, por simpatía en unos .cas?s., por antipatía en otros, confiera el eJercIcIo del poder público a hombres quizá desposeidos de las necesarias cualidades personales para desempeñar con tino i dignidad sus deberes de ,lejisladores, jueces o gobernantes. Na~a es mas posible; i por desgracia, no faltan eJem­plos de casos en que entre el Cris!o i ~l ho­micida Barrabás, el pueblo, mal lOsplI'ado, pida la libertad del malo i exija el sacrificio del justo. Pero.en estos casos, raros P?r mas que se exajere, basta poner a los oJos del pueblo el error que ha cometido i él se m?s­t rará solícito en repararlo. Véase lo que hiZO Aténas con los matadores de Sócrates i lo que hizo Roma con los que inmolaron a Cé­sar. 1 la razon es mui obvia: El pueblo no es sino el hombre múltiplo; i el hombre, múltiplo o único, jamas votará a ciencia cierta, p,or la consumacion de su pro­pio infortunio. El quiere siempre lo mejor; i si se equivoca de vez en cuando, jamas de­ja de reconocer su erro.r i de por:er los ~e­dios adecuados para evitarlo en lo sucesIvo. Por otra parte, todo sistema tiene sus pe­lio'"- ros', i la democracia no está esenta fdi e. los defectos que caracterizan nuestra insu cien-c ia o falibilidad. Peores defectos conocemos e n los sistemas monárquicos u oligárquicos; j en tre males posibles, siempre nos decidire· mos por los ménos ocurrentes i de menores . ¡mensiones. El mal de la democracia está en sus abu­sos ; en tanto que en los demas sistemas po­lít icos ellos mismos son el abuso por esce­, e l cia. .Jea como se fuere, el dia de un error po­pular, lo lamentaremos; pero, en &uma, quien lo ha cometido es quien tiene el derecho de enmendarlo; i esto es algo, i mucho para nosotros. Pero, ¿ será eso lo mismo que sufrir la do· minacion de personas que se han investido a sí mismas con los atavíos del poder público; 1 que en vez del castigo. que merece tamaño delito, gobiernen la SOCiedad como puede ha­cI.: r\o i de la única manera que lo hará siem­pre aquel que no esperó a ser elejido, con-vencido hasta la evidencia de que no merecia serlo? ¿ Hai sociedad donde tal~s cosa.s su?edan ? ¿ Qué es, pues, la SOCiedad, I cu~l es su objeto? No es ciertamente proporcIOnarse los hombres la seguridad en todos senti.dos? ¿ 1 qué seguridad puede haber para nadie en un pais en que los aparentes encargados de dar esa seguridad, estén en los puestos pú­blicos por haberla atropellado, usurpándose el mas grande i el mas grave de los derechos de un pueblo? ¿ Podrá ser buen lejislador quien se ha he-cho lejislador pisoteando las leyes? . ¿ Podrá gobernar honradamente qUIen se haya hecho gobernante burlándose de los go· bernantes lejítimos ? ¿ Podrá ad.ministrar justicia qu}e~ se .haya hecho juez vlOlandt) el derecho publtco I des­conociendo esa misma justicia que lo conde­nará eternamente? Estos son delirios. El que debe su sér a las tinieblas, no puede esparcir mas luz que la que hai en las recónditas honduras qy, las mas profundas cavernas. El olmo no da peras ni los buitres pale>­mas. Esto es viejo, i mas que viejo eterno. 1 no hai que falsear nuestros conceptos con la absurda pretension de suponer que en la materia que tratamos tenemos intereses de bandería. En esta grave cosa, nuestra bandera es la República; los principios de la democracia,que no son ciertamente lo mis­mo que una audaz i pésima rapiña. Para nosotros, lo mismo es 'que triunfe Alpha que Omega. con tal de que triunfe verdaderamente; es decir, que sea el pueblo quien hace cualquier cosa. N osotros no tenemos partido sino doctri­na, en cuestiones de principios, de justici~ i de patria. Atacamos el fraude i el ~rror SlO preguntar por los nom~res ?e sus autor~s. Ni aquí estamos dlsc~tl.endo cuestlOn.es políticas; porque la opmlOn que consIs­ta en alzarse alguno con el derecho públi­co, no tiene mas ni mejor argumento posible que el código penal i la sancion inexorable de los hombres de bien_ Para nosotros, en elecciones, bien podre­mos tener un canditato ; pero en fin de fines, triunf~ quien triunfare; siempre que triunfe verdaderamente; es decir, por el voto real i efectivo de la voluntad popular. Porque siendo como somos rep,ublicanos sinceros, pensamos como hombres I obramos como ciudadanos; acatando en la mayoría social el dogma indeclinable de los gobiernos populares. Obras son amores! Los hombres que desprecian al pueblo hasta burlarse de é l en su presencia, fa lsifi­cándole su voludtad para escamotade sus dineros, podrán ser cualquier cosa, pero no son patriotas, ni conocen mas República que lo. que existe entre los piratas. Lo repetimos: El que roba destinos roba sueldos ; i el que roba sueldos roba plata ; i quien roba plata es tan ladran como J éstas. 1 donde tales ha­zañas den títulos para el gobierno, allí no hai República, ni democracia, sino cueva de Rolando. 1 poco importan los nombres pro. pios i las caretas políticas. Todo es lo mis­mo; porque todos los ladrones son iguales ; i Se publican remitidos i avisos, a. un precio suma­mente m6dico, que se arreglará con los editores. Todo lo de interes j eneral se inserto. grátis. Los editores, NICOLAS PONTON 1 C~ NUMERO 75. ni es posible soportarlos ni dejar de llamarlos como se llaman. Nunca lo diremos bastante; pero jamas nos cansaremos de repetirlo: Para nosotros, nuestros adversarios, nues­tros enemigos políticos, no son los conserva­dores ni los liberales, son todos los que a ta­can las instituciones republicanas, los que procuran desacreditar la democracia, i los peores, aquellos sin duda, que afrentan la. causa de la libertad, cometiendo el gran c río men de tomar su gran nombre para deshon-rarla. 1\1. M. M. • La señora LIBORIA BORDA DE CANTILLO ha muerto. Lloremos i consolémonos ! Lloremos los que estábamos unidos a ella por los lazos de la sangre; los que fuimos sus amigos; los que vivimos en esta sociedad de que ella formab:l parte i en cuyo cielo brillan ya tan pocos astros de virtud acendrada. Lloremos, sí ; pero consolémonos! Su vida tan hermosa, fué una sola aspiracion hácla Dios i estuvo consagrada totalmente a la fa­milia modelo. Despues de una vida tan hermosa, su muerte no podia dejar de ser dulce i bella ' dulce i bella como la de los justos que se aduermen en el Señor, i cuyas almas dejan al partir, sobre sus mismos despojos, un rayo de la inmortalidad; algo como un presenti­miento de la dicha eternal que los espera. Hai cadáveres ante los cuales la duda re­trocede, la impiedad calla, i el alma cristIana se inunda en consuelos i esperanzas dulcíSI­mas. 1 de este número es el de la señora de CANTILLO para todos los que se han acercado a su féretro; para todos los que en vida con templaron en su rostro apacible los reflejos del brillo interior que embellecia su alma La señora BORDA DE CANTILLO, que fué en su primera juventud una de las bellezas mas notables de Bogotá: habia. dado la mano de esposa al doctor Manuel Antonio del Can­tillo, ciudadano venerable por sus altas dotes intelectuales i por sus virtudes públicas 1 privadas Sobrevivió a su esposo, i tambien a su di­cha, sosteniéndose tan solo por el amor a su hijos, que le fué retribuido con us.~ ra ; . por­que ciertamente, el amor de sus hiJOS ha te­n ido un carácter si no excepcional, al ménos poco comun. , . Dichosa en su hogar domestico que em­bellecía con su presencia, alegraba con gu carácter espansivo i jovial, i hermoseaba con sus virtudes, vivió t ranquilamente, hasta que una muerte dulce i largo tiempo esperada, vino a abrirle las puertas del mundo de los santos. L loremos los que la hemos perdido. Pero consolémonos ! porque es bella la suerte de los que mueren en el S eñor! J. J. B. Un contratiempo. Segun comunicaciones recibidas por el señor Gobernador de Cundinamarca, proce· dentes d el Tolima, el rio l\1agdalena acaba de variar de cauce en el punto conocido con el nombre de "La Vuelta de la .Madre de Dios." El rio forma ba en dicho punto un grande arco cuya cuerda ha tomado ahora en su curso, dejando en seco el recodo que á ntes recorria.. Se asegura. que un vapor que Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 298 estaba arriba del SitiO de tal novedad, ha quedado encerrado; porque el nuevo cauce del rio en el punto Je la variacion actual, contiene saltos i arrecifes que lo hacen com­pletamente innavegable. Es posible que posteriormente i con me­jores informes, demos conocimiento al públi­co del suceso que aquí apénas enunciamos ahora. No creemos, no obstante, que lo ocurrido pueda causar obstáculos sérios al comercio, ni ménos perjudicar en lo mas leve la pro­yectada via de Bogotá al Magdalena, en pun­to a lo relacionado entre la subida de los cargamentos hasta donde llegue el camino que está en obra. REVISTA DE LOS ESTADOS. Antioquia. El Boletzn Oficial de este Estado, de fecha 23 del pasado, trae varios documentos importantes, entre ellos el decreto que organiza la empresa te­legráfica en el Estado, varios informes sobre ca­minos, el estado de las operaciones de la Casa de moneda, el descubrimiento de una mina i el nom­bramiento de Síndico-tesorero del Hospital de Caridad de Marinilla, hecho en el estimable señor Vicente Ramírez Hóyos. Como se vé, todos los trabajos del Estado tienden al adelanto i por con­siguiente al progreRo. Bendigamos, pues, la paz ue que disfrutan los antioqueños i trabajemos para que ella se cimente de una manera estable en el l'esto de la República, Unámonos todos los hom­bres honrados i trabajemos para anular a los sempiternos trastornadores del órden. Que nos sirva de ejemplo, para huir de las revoluciones, el estado de postracion en que se encucntran Es. paña, Méjico i Venezuela. i Solo escombros i rui­Das: he aquí lo que producen las revoluciones! Bolívar. Por el último correo de la Costa, llegado a esta ciudad el 5 del presente, recibimos el perió­dico oficial del Estado, cuyas fechas alcanzan has· ta ellO del mes en curso. Nos ha sido mui satis­factorio el ver que la mayor parte de dicho perió­dico se consagra a dar cuenta de la instruccion pública, compra de útiles para las escuelas i rep'!­racion de los cdificios en que ellas están. Se conoce que los empleados del Estado de Bolívar, cum· plen con uno de sus mas sagrados deberes: ins­truir a la juventud. Ojalá que en todos los pue­blos de la República se haga lo mismo, pues la demasiada ignorancia ha sido la causa de muchas de las desgracias que han aflijido a nuestra patria. -Tambien recibimos varias hojas sueltas sobre FOLLETIN. ~~ JJ~~U~ ~~ t;~ W~1fU~~NJ@ O AmOR E ROMA. [ CONTINUACION. ] --Aguardo. un instnnte; tu ama. está a.l tocndor, i tenemos tiempo pnro. dnr alguna cosa de ti a este már­mol que se parece a tus carnes. -Acabad, seüor conde, i dejadme salir. -Quiero hacerte un regalo, bella criatura ..... . -Gracias ántes de recibirlo. -¿ Has visto jamas oro tnn redondo como el de este bolsillo? ER tuyo si me entregas solamente tu hechice­ro pié para una Amarilis que va o. snlir de este trozo de mármol. -¿ I despues del pié? -Ah! los escultores son ambiciosos! -Buenos dias, sellor conde. -Un momento .... .. escucha. ~ -Talormi persiguió o. Ruzzarinll. que huln., i como sus labios se inclinasen sobre la roaada mejilla de la jóven, recibió en medio de la cnra lo. marca de los mas rústicos dedos que hayan cojido el citiso i el serpolio sobre los ribazos del Anio. El falso escultor se par6 como herido de un rayo, i oyó uno. carcajada melodiosa que regocijaba los ecos de lo. basta i sonora escalera. Se apareció Barbone i halló a. su nmo consultando un espejo sobre los estrngos de un rayo femenino. -:\1e parece que conozco a esa muchacha, dijo Dar­bone coloc(Lndose de nuevo delante del trozo de mármol. - Yo -conozco sus dos manos, dijo Talormi con unn. falsa risa ; i no tiene ninguna, zurda ...... En fin, el uma. me consolará de la cripda. En el oficio de escultor est{t uno es puesto a estos percances ...... En Florencia, me ha contndo Bartolini, que un dia una campesinn rnbia. i dulce de Empoli le habia arrojado a la cabeza el busto de 1\1. Demidoff. Yo soi flun mas dichoso que Bnrtolini, pues me he librndo del busto. -¿ Quereis, monseñor, que C01'1'n tras esn gazeln? -No, Barbone, ya no pienso en ella, era unn oca-sion i nnda mas. La vida de un hombre ue mi temple es una perpetua cnza de mujeres. Nosotros no tenemos como 108 sultanes harenes por mayor; solo los tenemos en detnlle. LA IL los de~órdenes de Larica, que ya han calmado, i una manifestacion de los habitantes del distrito de Momil, en que ofrecen sus servicios al Gober­nador de la provincia, para el caso de que se in­tente trastornar el órden público. Segun se dice en una de dichas hojas, todos los desórdenes que han ocurrido, los ha motivado el ardor de los par· tidarios de la candidatura del gran jeneral Mos· quera, perú esto se desmiente en otra publicacion en que se asegura que los mosqueristas lo que han hecho es trabajar conforme a las leyes, sin que hayan tenido en mira trastornar el órden. -Igualmente hemos leido una hoja del señor n. K. Drake, ajente de la Compañía del Dique de Cartajena, en la que manifiesta quc "el pro­yecto de apertura es practicable i lucrativo, como se prueba por el interes que han tomado en él los que tienen mas conocimiento de su practicabili­dad i mas actitud para juzgar de su prospecto.'" Ayudar, pues, para que esta grande obra se lleve a efecto, una vez que es practicable, útil i proveo chosa. -Segun lo manifiesta el importa.nte periódico que con el título de La Palestra, se publica cn Mompos, aquella ciudad va a recibir gran incre­mento, pues el Consejo municipal se manifiesta dominado de cierto espíritu de progreso, que ha­cia mucho tiempo no se Dotaba. Dicha Corpora­cion "publica todos sus actos i esto es suficiente garantía de la rectitud de sus miras i honradez de propósitos que la animan." Nos complacemos al referir estos hechos, porque ellos demuestran que ya se van olvidando los odios de partido i se trata de algo prove':Jhoso. Ese es nuestro anhelo, i con tal fin hemos fundado La llustracion. Escitamosj pues, a todos los amantes del progreso, sin distin­cion de colores políticos, para que nos comuniquen todas las noticias que den a conocer que la paz es la única salvacion de la República i que con ella se irán olvidando cada dia mas nuestros funestos rencores. Las columnas de este periódico están destinadas, de pr,eferencia a esta clase de publica­ciones. -El 22 del pasado el fuego devoró en Mompos unas trece casas del barrio llamado de abajo, en­tre ellas una que pertene3Ía a la señora Nicolasa Gutiérrez de Piñéres, quien logró salvar apénas unos pocos muebles. ~l incendiQ tuvo lugar por descuido en una cocma. -Para la reparacion del templo de San Fran­cisco se están acopiando los materinles activamen­te, i se espera con fundamento que siendo esa obra de mucho menor magnitud que la de la termina­cion de la iglesia matriz, ella será fclizmente lleva­da a tórmino. -Varias damas han tenido la filantrópica idea de hacer partícipes a los desvalidos de su sexo dc Habin trnscurrido poco tiempo, cunndo entró Clelia en el taller. -Buenos dias, conde Talormi, dijo; dispensnd que no os haya respondido en seguida, pues hni mucho trabajo en los talleres. He tenido veintiseis sesiones en cnsa de Bezzi, pn¡'a las estatuas de la Relijion i lo. Libertad. En seguida preciso me ha sido descansnr, pues especialmente la Libertad me hnbia fatigado mu-cho ...... Mirad, tenia esta actitud ...... magnifica .....• con un pcptU7It mui pesndo ...... Calla! vuestro crindo ha desaparecido! Queria confiarle mi capo. de tercio-pelo i mi sombrero ...... Perdonnd, señor conde, ya que os tomais la molestia ...... Este terciopelo teme el polvo de mármol.. .... Ha llegado ayer de Palmira ...... no de la ciudnd de Zenobia; es el nombre de una famoso. modista parisiense o. quien no ha conocido nuncn. 11\ reina Zenobia, por su desgracia ...... I bien, seüor con-de, ¿ qué obra. IDneslra quereis hncer de mi? -Yo. eRló, hecha, señora, respondi6 Talormi; todo cincel debe caer de las manos o. vuestros pies. Vos desnlentnis al artista. Con vos soln, Proxitéles habria economizado cuarenta. i nueve atenieusas. Vos teneis el monopolio de todns In~ beldndes; vos humillnis el Olimpo de las estatuns griegns; vos sois la tres Grn-cins ...... Dejad oaer esos velos absurdos, pedid un nltor, i Romn. hecha pogllnn otra. vez, os adornrá. -Esn si que se llama galnnteria itoliana! dijo Cle­lia. riendo. Petrnrca i :lIetastasio hnn siuo vencidos ..... Verdaderamente, conue Tnlormi, sois digno de vuestra reputacion, pues no hoi quien os escedn en gnlanterlo.. Si cortais el mirmol como las fl·ases obsequiosas, Pmxitéles queu!lr(~ eclipsndo; agotareis todo lo que quedn. de Carrnra, de I?llrco i Saval'Czza, i todas las mujeres rasgarán el velo del pudor en este tnller ..... . Es tan dulc~ el ser inmortal! i n las bellns no les gus­ta morir! -Es divina! esclam6 Talormi estasiado. ;, Cómo he podido tener la estupidez de creer que vivia cuando no os con ocia ? De qué nadn acabo de salir! Hoi princi­pio mi vid:L, i si Pigmalion, mi ml\Cstro, cSlUvie e en mi lugnr, no serin su mtirmol el que él amn.ria. -Vamos, oonLle Talormi, me parece que el principio :le nuestras relaoiones es dcmasinLlo vivo. Detengúmo­nos i hablemos mas frin.mente. ""os sois arti ta, i yo soi moLlelo; entremos en el sentimiento puro de nues­tra profesion...... ¿ de quó se tratn. ? -~e tratn, seiIorn., de hacer uun. obra ·érin. ..... . -l\Iui bien! conde 'l'alormi, yo aLloro el arte sério. -Aquí teneis un trozo de mlÍrmol del mas hermoSO grano, que me ha costnuo cinco mil escudos. Quiel'o los beneficios de que solo gozan en el hospital de esta ciudad los individuos del sexo fuertc. Con tal fin se han congregado en J un ta con el nombre de " Hermanas hospitalarias " i se ocupan en la for­macion del reglamento de la sociedad. Cauea. El dia 22 de abril último apareció cn Cali el número 1.0 de un elegante e ¡lustrado periódico, titulado: Los Principios, de grandes dimensiones i con cinco columnas por pájina: su editor·em­presario el señor Jaime II urtado. Felicitamos al Cauca por ia aparicion de L08 Principios, i deseamos al periódico larga vida. El injeniero americano Mr. Griffen con (juicn se habia contratado cl trazado i mensura de una parte del camino de Buenaventura, del Trapiche al Puerto, se ha marchado para Antioquia SiD ha­ber dado entero cumplimiento a su compromiso. La obra por lo demas en jeneral marcha con len­titud por la escas~z de varios elementos necesarios para el trabajo i por 108 fuertes obstáculos que presentan las formidables rocas llamadas el Lim­bo, el Infiernito i el Caiman. Habiendo en el Cau­ca un injeniero tan hábil i tan patriota como el señor Liborio Vergara, nada mas natural que se le llame a la direccion del camino como lo acon­seja Los Princip~'os, i por lo demas, confiamos en que el Superintendente, señor Conto, activará los trabajos, buscando i suministrando los elementos que faltan. El camino de Buenaventura cs una gran necesidad no solamente para el Cauca sino para toda la República, i debe concluirse pronto, pronto. El Hospital de Caridad de Cali, obra de Frai Juan Cuesta, está refaccionándose, gracias a los esfuerzos del distinguido ciudadano señor doctor Manuel María Buenaventura. -En la Gaceta Ofic'ial de Popayan, fecha 2:> del pasado, se encucntra un dec:reto sobre policía, por el cual se prohibe que en toda la poblacion i medio kilómetro fuera de ella, se tenga fábrica o depósito de pólvora. Esta medida se ha tomado en atencion a las contínuas descargas eléctricas que 8ufren algunos pueblos del Estado. -En el mismo periódico encontramos la Dota del señor Ministro de Colombia en Paris, en la cual da parte de haber comprado varias obras de matemáticas, que para el Colejio l\Iayor,le fueron encargadas. La direccion jeneral de iustruccion pública da las gracias al señor doctor Tórres Cai­cedo, por el acierto con que ha desempeñado la comision que se le confió, lo mismo, que por la. donacion dc varios libros que hace, i que a la ver­dad son mui interesantes. -Tambien se encuentra eD el mismo número, la relacion del estado de caja i cartera de la ad-estrner de él una estatun ..... que llamaré filosófica ..... . Esto tiene relncion con una historia cuyos enojo~os pormenores quiero ahorraros ..... . -I esa. estatua filos6fica. ¿ qué debe representar. pregunt6 Clelio.. Talormi tom6 un aire de grnvedad i dijo: -Representará. una Yénus saliendo del mar. -¿ VesLidn ? -Una Vénus vestida L ..... ¿ Pensais en lo que deci;:, señora.? ...... Estaria. indecente. Las mujeres que sa.len del a.guo. en troje de nato.cion insultan el pudor. Un poeta. romano ha dicho hnblando de las tres Grncio.s: Están desnuda8, están decentes, nud:e, decentes ...... Per-donad, seüorn, esta citn Intin!l. Poned un pnr de medias i ligas rojns a la. Yénus de :lIédicis, i será. intolernble: lo. policln. la. mo.ndnrá. poner en la. cárcel por ntentado oontro. las buenns costumbres. -A propósito de cá.rcel, dijo Clelia con admirnble destreza, ¿ snbeis que está en un co.lnbozo mi tenderita, la judla Débora? Estn noticia me ha trastornado ente­rnmente, i no he dormido en toda. la. noche...... mui pálida. debo estnr ¿ no es verdad? -Estais fresca. como el albérchigo de Tibur bajo el roclo; sobre los lnbios tcneis dos Hnens de coral que no revelan ningun insomnio; teneis uuos ojos límpidos que no deben al sueüo ningun ntraso ...... Sinembn.rgo, tom:uó parte eu el interés que os in pir:L esa. judlo.. -Es mi ncreedora, conde 'fnlormi. -En jenernl solo se interes!I uno por sus deudore~ .lijo Talormi riendo. -Le debo uno. manteleta alba.nE'sn i un cnrton de filigrunns de Jénovo.. :\lirad, conde Tnlormi, mirad este roseton estrellndo que me sirve de broche ..... i. Qu,; 09 Farece esta joya.-: -Es mui distinguida. --)le la ha vendido Débora, i nun está. por pngar ... Pl!ro veo que esto no os interesa ...... no hablemos ma~ uc ello, i volvamos a la I'énus filosóficn ..... . - ~I, bella Clelia, i cuento con vos pnro. hacer es .. obrn -Conde Talormi, dijo Clelia bajo.ndo los ojos. hall debiuo decÍl'os sin duda, que yo solo sirvo de modelo para las estremidades. -Pero, bello. Clelia, cuando se trato. de unn. Vén1lls saliendo del mar, h.LS estremidades hn.cen un papel mui insignificante en In. obra, i permitireis nI cincel ciego el ser mas ambicioso. -Es imposible, conuc Tnlormi! dijo Clelin le.an­tú'ndose con trislezn; mi resolueion no dato. de hoi -¿ Con que no quereis ser inmortal, divina CleJ.io. ~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. .ninistracion jeneral dol Tesoro del Estado i algu­Das otras di posicioncs, que dan a conocer la bue­; la marcha del Gobierno. --El dia del pasado, celebró el señor doctor Francisco Anionio Quintana, cura de San José de Tadó, la gran festividad de Nuestra Señora do los Dolores, con una magnifica funcion relijiosa, cos­teada en su rua yor parte con sus propios recursos. Felicitamos al señor doctor Quintana, por su de­" ocion a l\Iaría Santísima, i deseamos encuentre imitadores. ~eilores RedactQres de Ln Ilu tracion. Buga, abril 7 de 1870. En el número 111 de El Liberal se ha publicado en In eccion" Interior," i en la pn:·te corrll pondien­to; al EstAdo del Cltuca, un escrito fechado en esta ciud ,~d i firlllado bajo el seudoniwo " Licinio." X o es posiLle leerlo sin sentirse funestamente in­dignado pOI' tanta falsedad, tanta calumnia i tanta mnll:'dicencia como contiene; i se vacila acerca de lo qUE' causa mas indignacion en ese cscrito, o i la 1l1ala fe i la pCI'versidad de un cobarde! que se oculta tras ('1 seudónilllO, para tratar de infundit· sospechas al Gobiel'llo jl'lIeral, contra los conservadorl's de este municipio, o si la maldad del espiritu de partido cuando se estravía, o si E'I odio injustificable contra una poblacion o al ruénos contra un circulo de ciuda­, lanos notables de tlJla, tan solo porque esa poblacion o e ' e círculo no ha adruirado a Licinio a quien tanto ha enfurecido la popularidad de Perdomo; pues él, que se nos deja conocer en su escrito como no natu­ral ele Buga, al decir" 103' bugueños, que en su ma­yor parte son noveleros," no puede esplicarse cómo esa noveleda 110 lo ha asediado rodeándolo, siquiera como a Perdomo, de esa popularidad, vergonzo a en su opinion, entre mendigos i valctudinarios. j Ver­gonzosa la popularidau que brindan los desvalidos a quien, con ciencia i sin ella, los cura i alivia de bal­<. le! ; I Licinio blasona de contarse en el número de los que sostienen los derechos del pueblo i su soberanía! ¡ Cómo no repetir aquí: "1 siempre están las pala­bras en contradiccion con los hechos; i los labios son siempre disfraz para el corazon !" Pero como no todos los que ese escrito lean pueden estar informados de lo quo; Licinio refiere i aprecia a su modo i segun su sen ti)', forzoso nos es refutarlo bien a pesar nuestro, tanto mas, cuanto que para ello tendremos que prescindir de la moderacion en el lenguaje, porque si el nos hiere i nos calumnia gra­tuitamente ¿ pOI' qué nos ha de ser censurable alguna acritud al defenderno", cuando es este apénas uno de los pocos recursos coercitivos que quedan contra aquellos que entienden por libertad de imprenta, li­bertad i derecho para difamar? Consecuente Licinio con el espíritu que 10 guiaba al escribir su revista, deja coner su pluma desde las orimeras lineas de ella, no con el objeto de referir lo que ha pasado aquí con motivo de la permanencia de Perdomo (que saria lo que algunos pudieran creer) sino con el de calumniar a los eonservadores de este municipio, contra los que dE'seara ver ya puestas en práctica las medidas mas liberales de re- -A ese- precio, no; yo no tengo el valor de otras mujeres. -Clelia, repuso Talormi esforzándo e en retenerla, todulas resoluciones se rompen cuando ha llegado la hon. Olvidaos en interes de la santidad del arte; sed mi iuspiraciou, brillad corno la. estrella en su radiante desnudez, deja.d que os lean como el poema vivo de la hermosura humana; permitid al mármol el traducir linea por linea el deslumbrante marfil de vuestro cuer­po divino! Talormi, deslumbrado por el. encanto de Clelia, habia caido a sus pies. La jóven esperimenlaba una emocion que lo. pasma­ba, porque no esperaba hallarla en semejante entrevis­ta. Preciso es tambien decir que en ese momento Talormi no era el odioso personaje que conocemos; era el jóven mas seductor i amable, i sus conmovidas pala­bras vibraban en el corazon de Clelia. como la lira de las siete voces del modo jónico. Con todo, digamos luego en honor de la jóven, que permaneci6 fiel o. su mision ante un peligro tan poco sospechado. -No, dijo con uno. voz bastante enérjica aun; no, conde Talormi; dejadme part:r ..... Yo no os conocia ... sois un hombre mui peligroso ...... Adios, conde Talor-mi ..... . -¿ 1 me dejais, bella Clelia, quitando todo. esperan­za. o. mi cincel de artista? -No, conde Talormi ...... espero volver a veros ...... pero tengo un deber que cumplir ...... Un hombre poJ e­roso me ha prometido hacer abrir la puerta de lo. ci r cel a la. pobre Débora ..... i ese hombre me está aguardando. -Clelia, dijo Talormi escitado por los dos demonios dc la lujurio. i de los celos, ese hombre se jacto. de un poder que no tiene; ese hombre os ha mentido; solo yo pUNlo hacer abril' la puerta de esa cárcel. Clelio. mir6 o. Talormi, e hizo maravillosamente el papel de admirada. --Si, yo solo, prosiguió Talormi, i voi a probároslo. Aqui el diplomálico era vencido por unn. mujer en uno. escena en que se confundian los sentimientos ver­daderos i los flllsos. Tlllormi abrió una caja, i sacaudo uno. hoja impresa, dijo: -Ahi teneis uno. 6rden del supremo poder inquisito­ria!.. .... el nombre del pteso está en blanco, vos le llenareis. Despues, haced que monseñor Pacifico pongo. debajo su firma, i se abrirlÍ lo. puerto. d('1 calabozo. 1 como Clelia alargnba neglijentemente la mano paro. cojer la. hoja, Talormi añadió sonriendo' pres!on; i por lo cual él "cree de su deber escribir esas líneas para q'Je el Gobierno i la Nacion obren de la manera conveniente para precaver nuevo~ tras­tornos en la psz pliLlica:" estHs son ~us palaLraq ! Pue bien, veamos Iijeramente que pasó en esta po­blacion durante la permanencia en ella del il1compa­ble m~dic(), a fin de examinar si el alarmante grito de" alerta" dauo por Licinio,puede tener algun fun­damento' referiremos imparcialmente i, si Licinio lo quiere: le citaremos testig~s para él irrecusabl~s, puesto que son hombres que tienen que estar ma~ 111- teresados que él en la con~ervacion del órden, como el mui estimable señor Inocencio Cucalon, act ual Jefe municipal que, a su c9rúcter de empleado prin­cipal del municipio, reune las circunstancias de ser rico propietario,que tendría mucho quP. perdel'; refe­riremos, pues, imparcial i brevemente lo que suce­dió aquí, i todo hombre sensato i desapasionado juz­gará si Licinio obedeció a un temor de hombre de partido ju tamente alarmado, o si se dE'jó llevar, como sucede mui frecuentemente, en cierta clase de liberales, por el deseo ne vel' declarada en AsalD­blea una parte del pais i pescar en rio revuelto. Pocos, mui pocos, de los que leen nuestros perió­dicoll, ignoraran en la ReplÍblica lo que ha sucedido ('n todas las pob!aciones visitadas por Perdomo: baste ~aber que en algunas de ellas la permanencia de ese nuevo Hipócrates (segun el decir s'ltírico de Lici­nio) afecta hasta los trabajos agrícolas de Jos cam pos circunvecinos, como sucedió aqui, lo que confesarnos sin sentirnos avergonzado~ de ello, pues los pobrps i sencillos habitantes de los campos dejaban ~U!l queha­ceres por huscar ese hombre que, con ciencia o sin ella, los alivia i cura mas que muchos Hipócrate8 an­tiguos, de los qUtl han visitado la patria del primer . Galeno; ni tampoco nos avergonzamos de decir que, $in pertenecer al comun de los sencillos campebinos, fuimos de los que formaron en la cola de aduladores (cultura i suavidad del lenguaje de Licinio) que 1'0- c1eaba a Perdomo, deseando ver dE' cerca lo que podia ser cierto en los hechos que de él se )·efp.rian; vimos allí a Licinio i a algunos otros liberales a quienes, aunquCl conservadores como somos, no hacemo~ la injuria de suponerlos, como Licinio, fáciles de ser enganchados, si llegara el caso, por esa palanca mé­dica; vimos, en fin, lo que se ha viHo por todos en todo, los lugares: una multitud, parte de curiosos, pero casi en su totalidad de enfermos, hombres i mujeres, que acudian los unos por saber lo que podia i debia creerse únicamente; i los otros, que eran Jos mas, dispuestos quizá sin saberlo a aumentar con sus relaciones exajeradas por el agradecimiento i la gra­titud la nombradía de su bienhechor. Esto ha pasado en Palmira, en Otavalo, en Quito, en Paicol, en el Pital i pasa actualmente en CartagOj i preguntamos ¿ cuál de los escritores o simples cro­nistas que se han ocupado en este negocio, ha dado significacion política el movimiento que Perdomo imprime a los enfermos i valetudinarios? ¿ O cree Licinio que los hberales del sur del Estado i los del Tolima son menos aviliados que el, cuando los últi­mos principalmente no ~e alarmaron en una reunion de cinco mil únfermos en Paicol? i O crce que solo los consp.rvadores del municipio de Buga tenemos entendede¡'as capaCES de hacernos .er un ejército en -Pero cuando hayais puesto en libertad a vuestra acreedora ¿ os acordareis de yuestro escultor? -Quiero ser inmortal a todo trance, respondió Clelia presentando su frente al falso escultor. 1 atando con prontitud las cintas de su sombrero, iba a salir del taller cuando la detuvo Talormi diciendo: --E~cuchad bien esto, Clelia: Cuando esté firmada 1.0. órden, el ayudo. de cámara del cardenal Santa Scala llevará uno. silla de posta cerca de la cárcel, al estremo de lo. via GiLÍlia, cerca del puente San Anjelo ...... --Es evidente, interrumpi6 Clelia, que nadie puede desconfiar del ayuda oe cámara. del cardenal Santa Scala; pues es uno de nuesM'OS amigos. -Por eso le elijo a él, prosiguió Talormi. Virjilio de Albano, que es tambien uno de vuestros amigos, estará en lo. silla de posta i recibirá o. vuestro. judía ... i que Dios los acompañe! -A si se hará todo, dijo Clell~ saltando de alegria. Hasta mui luego, cond-c Talormi; sois encantador ; hasta la visto. ! Talormi lIam6 n Barbcne, i le dijo: -Es preciso que conduzcas a Déborn a la front era. -Como ! esclamó Barbone, Como, eseelentisimo ! ¿ sal vais a esa j udia ? -1. -Dios mio ! monseñor se hace judio! -Barbone, te be dicho mucbas veces que eres un imbécil. Rai dos mod03 de salvar : el que salva i el que pierd e. ••• Un mandato sobre Torlonia, IPOR antifrasis se llamo. en itali ;\Oo B uon Governo al tri bunal que ti ene Sl! residencia en la. p¡a=za JIadama. • HU fué donde hnbia ido Pacífico o. trabajar con algu­nos altos per sonajes de su part ido. Una parodia de alguacil fué llo anunciarle que uno. mu ier solicitaba hablarle confidencialmente. :Ea monseño\' dejó caer su pluma. sobre su pupitre, i pid i6 algunas señas sobre aquella solicitant e. Le respondieron: Es jóven i rúbia, i esttÍ vestido. con aran ,listincion: esta es lo. tercel' visita que bace o. ]);/1 GOL'erno. Pide el permiso de ha blnr al procu­raJo\' fi5c¡\I, a los jueces, a los asesores, a todo el mundo : ha, ta ahorJl no lo. hemos introducido, pero hoi sabe que monseñor Paoífic o estú, aquí, i ha. dicbo en tono Je am e naz~ .. ~I e han de hacer pedaz.os si me niegan la entrada: .. -Deci, lla que entr e, JJJ o I'¡¡clfico. i añadió ap ar!" Es Clelia. un peloton de mendigos, i un caudillo en un hombre apto $010 para hacer con su empirismo la de se~ p era ­don de muchos que se creen verdaderos i u n tiguo~ Hipócrates? Pero sea de f'sto 10 que fu p. re, la per ­manencia de Perdomo ¡.n Buga, que fué mucho m é ~ nos ruidosa que la qu e el mismo hizo E' n Palm lrll, I nada, nada en compnracinn de las que hiciera e n Ca­) julo i P aiuol, dió motivo sufi ciente para qUH alarma­do en estremo ('1 Iiberali mo de Licin io form ulara ('1 denuneio siguiente al Gobierno i a la Nacion: " Exis­te (en Buga ) por desgracia un cí rculo a rbitra r io. _ . _ Los hombres de este ci rculo viol ento no dE'scan'an en la tarea de trastornar la situaríon uctual, uunque sea recibiendo un desengaño mas en sus de-afortuna­d. as rebeliones . ..•.. P orque se esto. en la falsa cn·en­cla 1 uniéipio que, mUl léjos de e ~ ­tal' pensando en tramas revolucionarias apoyadas ell el Cristo milagroso, se esfuerzan en cimentar la paz de que gozamos, dando desarrollo a empre~a ~ indus­triales que proporcionen ocupacion i bienestar a la clase pobre. Le nombra riamos los conservadores que comprometen IIUS capitales en empresas de añ il, en esplotaciones de quina, en el ensanche de sus inje­nios de azúcar, en el establecimiento de cebas i crias de ganado vacuno, en el aumento tIe sus yeguad as -1 bien; dijo la. j6ven cerrando la puerta.; os haceis invisible, monseñor, tiene uno que hacer el sitio de una ciudadela para veros. Pacifico se levant6, i besando la mano de Clelia, le design6 un sillon i se sent6 a su lado. -La poUtica os absorbe, ¿ no es verdad? prosiguió la j6ven; la polHica os divierte o. los hombres ? ..... a mí me fastidia. mortalmente ...... -Clelia, dijo Pacifico con gravedad, en este momen­to tenemos deberes 8érios que cumplir. --Callad! replic6 Clella! i no tomeis ese tono solem­ne conmigo. ¿ Por venturo. pueden las mujeres ser nun­ca engo.fio.das por los hombres i tomar su gravedad como coso. séria? Los vemos o. todos hacer en particutar cosas tan estravagantes, que cuando despues se toman en público esas actitudes augustos, nos hacen llorar de risa. 1 vos mismo, seBor Pacifico, cuando os veo r epan­tigado en alguna parte, en una ceremonia pública, i pienso en todas vuestras estravagancias infantiles, me muerdo los labies paro. contener la risa. Si las mujeres fuesen indiscretas, como se pretende, no quedaría en pié una solo. reputacion formal. - ¿ Con que venis a vi itarme par a ecbarme esas fiores? dijo Pacifico sonriendo. -Sí señor ; i estoi furioso. contra vos. Ya no hai tertuli~ de música en mi casa; mi piano estú. mudo ; mis par tituras se van p o~liendo o.ma~i~lentas. El otro dia me han enviado el tno de E rnanr , 1 no éramo, ID,,!,j que dos para cantarlo .... .. no~ faltaba un ¿arll~ .. : Hemos anouardado hasta me,lia noche ...... i Pacífico no pa r eció, Nos han dicho que andabais mui afann,lo en perseguir a. los judíos como Faraon. Vamos, ¿ e_ cierto eso ? -Della CleJia, os digo que tengo graves debere,¡ q e lleuar . -Vuestr o primer deber es ser mi humildlsimo se rn­dor i desempeñar vuestro. parte en el trio de Ernar,! I j Dios mio, qué deslicbada 'oi! ..... j Cuantas jóvenes en mi lugar se vengarían con placer! ...... j Pero Vl', Pacifico, me conoceis, i por eso abus is de mi afec to I Clelia tomó su paiíuelo de batista. i se enjugó dtq lágrimas que no derrilmaba. Pacifico, vis iblemente conmovido. tom6 con tern 1'a la mano de Clelio. i le dijo; Vamos, mi hermosa CleJia, poneos de buen humor, j estais t..ln lindo. cuando 09 poneis :-.le:;re! Agu rdad algunos dias aun : dej~d arreglnr Duc"tro, negocic!' rollticos, i ,le .pues ya can aremos tO lo, los trios q ,. quern.i~ { Conl nuar.í. \ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • ctc. etc. etc; i si todo esto no fuera bastante para convencerlo de calumniador, recurririamos al dicho de las principales autoridades i de los liberales de buena fe de este municipio. ¿ Pero podemos creer 'lUnado al Hospital de Caridad un ariete hidráu­lico con sus correspondientes tubos de plomo. La .J unta ha visto con satisfaccion este obsequio. Magdalena. Habiéndose insertado en La Union h"beral,perió­dico que se publica en Santamarta, uu remitido en que se le hacen varios cargoE1 graves sobre rendi­miento de cuentas, a los Sres. Vicente S. Mestre i .J uan B. Paba,dichos Sres. han dado una hoja ~uel­ta contestando esos cargos de una manera satisfac­toria; i como comprobante, agregan a última hora, que han recibido el auto de la Oficina jeneral de Cuentas, referente a la de enero del presente año, i no se les ha hecho observacion alguna respecto a la liquidacion censurada cn el artículo de La Unwn liberal. No estará por demas advertir que la cen­sura se ha hecho bajo del anónimo, que es la ma­nera como los cobardes insultan a los hombres honrados. llanamá. El 28 de marzo en la noche, como a laa diez, tuvo lugar una reyerta entre varios individuos, paisanos i soldados del batallon "Pichincha nú­mero 8.°" que dió por resultado lamentable, la muerte de .José Toribio Sántos, conocido con el sobrenombre de .Juan Varita. Los soldados habian salido, como dia de fiesta, a dar su acostumbrado paseo, i se hallaban en una de las tiendas del edificio llamado el "Taller," divirtiéndose, cuando llegaron esos individuos, entre ellos Sántos, i tomaron parte en aquella di. version, que por cierto concluyó, como concluyen frecuentemente las de su éspecie, a garrotazos. En medio del alboroto se dieron gritos de "viva el señor Guardia," l. muera el Presidente del Es· tOldo," " vivan los conservadores," de parte de los últimos i i de " viva el Presidente jeneral Correo. so,·' :'el partido Lberal" i el "batallon Pichincha," de parte de los soldados. El .Jefe de la policía acudió al lugar del d.esór­den, i con su ayuda i la del señor comandante del batallon, todo quedó en calma, regresando los sol. dadoó a su cuartel. Los contrarios no parecieron i solo apareció Sántos, muerto. Lo acontecido esa noche, no pasó de una simple riüa, aislada, que tuvo fin tan luego que pudo ser percibida de la alltoridad : efecto de una causa que todos conocemos. -Los señores Eduardo de la Guardia i .Juan N. Vejarano, a quienes el Gobierno del Estado ha hecho salir de la República, se embarcaron el 2D de marzo a bordo del vapor americano " Colo­- a do II con destino a San Francisco. Suponemos ~ue este destieno durará. miéntras la Asamblea del Estado no disponga que sea levantado. - La paz se conserva inalterable en el departa­mento de ChirÍllui, apesar dc haber algunos espío ntus inquietos quc estltn l!.Costumbrados a medrar a la son1bra de los trastornos. -La viruela sigue haciendo estragos: hace ya como quince meses o mas que este pueblo sufre los efectos de ese cruel azote. Los casos de muer­te causados por él no han escaseado por desgracia. llace mucha falta que el ciudadano Presidente se hago cargo personalmente de haccr ,"enir a csta cabecera el virus vacuno. Santander. La Gaceta del Estado, de fecha 28 del pasado abril, se contrae de preferencia a la publicacion de circulares sobre mejoras de vías públicas, informes sobre casas de educacion i formacion de una colo­nía en el camino al puerto de Santander. Esto es mui satisfaotorio, para los amantes de la paz i el progreso. --En el mismo número, encontramos las notas que el Secretario jeneral del Estado de Santander, ha dirijido al señor doctor Vicente de La Roche, acompañándole el decreto espedido por la Asam­blea lejíslativa, en que lo felicita por su consagra­cion en favor de las mejoras industriales del país. El señor de La Roche contesta al señor Secre­tario, con una brillante nota, de la cual tomamos los siguientes acápites : l. Señor; hai dias en la existencia del ciudadano pacifico i laborioso, que pueden llamarse justamente grandes, porque en eilos goza mas que un conquis­tador. Ni el triste jeruido de las víctimas, ni la pér­dida de un compañero de armas aflije su corazon en esos momentos. " Los honores que me prodiga la Asamblea lejisla­tiva, me han proporcionado estos goces; pero mi hu­mildad no me dejará levantar mi frente orgullosa, porque nada merezco i porque el orgullo es hijo del egoismo, i yo, señol", no Boi vil egoista. " La dulce conviccion del sentir i pensar, que es la vida, i que se reputa como el primer bien del hombre, nada vale al frente de la palabra santa honor. Por eso no se ha equivocado el señor Secretario, al decir­me que la Asamblea leji~lativa me ha dado" el tes­timonio mas smcero i la 'Única recompensa:, que yo sabré estimar." Tolima. Este Estado marcha en paz i trata de organi • zarse de la manera mas conveniente a juzgar por todas las resoluciones que hallamos en El Oonsti­tucional. Una de sus disposiciones mas importan­tes es la que organiza la Secretal ia jeneral del Estado. Que se cumplan todas las órdenes del Gobierno es lo que importa i pues si únicamente se quedan escritas, nada se conseguirá. sino perder el tiempo. CAMARAS LEJISLATIVAS. Senado de l'lenipotenciarios. Dia 6.--Pasó en tercer debate el proyecto de lei que ruanda reiotegrar a ciertos capitalizados el 3 por 100. Pasó en segundo debate el proyecto de decreto sobre honores a la memoria del Jenerall\farcelo Bui­traao, i pension a su familia. Continuo el segundo debate del proyecto de lei por la cual se fija el pié de fuerza para el próximo año, i quedó pendiente la ruodincacion del ciudada­no Rojas G. al artículo 1.0 La morlificacion consiste en 500 hombres en vez de 1,000. A las doce uel dia continuó el debate sobre el ca­nal, quedando pendiente el de pié de fuerza. Dia 6, (nocturna ).-Continuó el segundo debate del proyecto de lei sobre pié ,le fuerza, i el ciudadano Rójas G. propuso la suspension de dicho proyecto hasta la sesion de matlaua.Dicha pro pos ion dio Jugar a una larga discusiou en que tomaron parte, el señor Secretario de Hacienda i los Senadores Pereira i Rójas G, sin haberse podido resolver nada por haber llegado la hora. Dia 7. - Continuó el segundo debate del pro­yecto de lei sobre pie de fuerza, en cnya discusion tomaron parte los seiiores Secretarios ,le Hacienda, i de Relaciones Exteriores encargado ri el despacho de Guerra, los Senadores Arosemena, Rójas E, Quija­no, Vengoechea, Herran, Rójas G. i Pereira. La ba­rra rstuvo sumamente concurrida, i sobreslllieron, en esta discusion,el discurso del ciudadano Rojas G. i el del sefior Secretario de lo Interior, por las mani­festaciones, que hizo de republicanismo i confianza nacional que abriga la actual aclruillistrncion. El ciudadano Palau propuso í se aprobó lo siguien­te: l. Continúe en la presente sesion el proyecto de lei sobre pié de fuerza, i para sl'guir el do escavacion del canal, destínanse las sesione~ diurnas de los dias lúncs, miércoles i viérnes, c¡llcdando los demas dias, i las nocturnas para el despacho de los otros nego­cio~." Fué negada la modificacion del ciudadano Rójas G, de redudl· el pié de fuerza ha ta I?OO hombres por votaeioll nominal, i aprobado el artl,culo 1.0 del proyecto. A las 3~ de la tarde se levanto la sesion. Cámara de Representantes. Dia 6.-Se aprobó en segundo debato el proyecto por el cual se abre un crédito Jejislativo, de 10,000 pesos, para emplearlos eh los trabajos del camino al Meta. En primer debate fueron aprobados los siguiontes proyectos: el de créditos adicionales al presupuesto en curso, para los gastos que ocasiona la próroga de las sesiunes del Congreso; el que destina un edificio (la antigua casa de correos), para habitacion clp,1 Presidente de la República: sobre re:luccion dc in­dios ~alvajes; sobre concesiones especiales en materia de aduanas; el que concede tierras baldías a 108 pobla­dores de los territorios de San Martin i Casan are ; i el que exime al señor Jo~é María abando (hijo) de cip.rta rcspon-abilidad para con el 'resoro. Se negó en el mismo debate i por spgunda vez, el proyecto que ordenaba la dcvolucion de cierta canti­dad de dinero al señor Joaquin Rizo. Se aprobaron las variaciones del Senado al pro­yecto "sobre apertura de Boca - grande en la bahía de Cart~jena." Se aprobó en sE'gundo debate i pasó a tercero el proyecto sobre adjudicacion de tierras baldias a la compañía del camino de la Buenaventura. En el mismo debate se negó uu proyecto que re­conocia los servicios prestados a la industria del pais por los señores doctor Manucl Vicente de la Roche, Juan Jo~é Obeso i Manuel Atuesta; habiéndose ne­gado ántes una modificacion del ciudadano Pizarro al artículo 1,° que consistia en agregar el nombre del señor Mam6rto Montoya, por sus trabajos para la estraccion del opio. Se abrió el segundo debate del proyecto sobre ins­trtlccion pública, sobre el cual presentó el ciudadano Holguin un brillante informe, que la Cámara mandó publicar a propuesta de los ciudadanos Restrepo i Corráles. Sin que pudiera votarse ninguno de los ar­tículos del proyecto se levantó la sesion i se convocó para la nocturna. Dia 6, (nocturna).--Tuvieron primer debate i se aprobaron los dos proyectos de lei que van a espre­sar~ e: el que proroga el plazo para la conversion de la~ libranzas antioqueñas; i el que adiciona i refor­ma las leyes orgánicas de la Oficina jeneral de Cllen­tas, propuesto por el ciudadano Viana. Se aprobó en segundo debate i pasó a tercero el proyecto de decreto que releva al Estado de Bolhoar del pago de derechos de importacion, por los monu­me~ to~ que ha pedido a Europa para depositar las cemzas de los señores Juan José ~ieto i Jnan Antonio de la Espríella. Se consideró el informe del ciudadano Pardo, re­lativo 1\ una reclamacion del señor Ramon Soto, pa­ra que se le pague el valor de unos caballos tomados por el Presidentejeneral Gutiérrez, pa7·a el servicio público, con motivo de 108 8UCe80S del 1 O de octubre de 1868. La comision proponia que se pasara el espe­diente al Poder Ejecutivo, para que entrando en ar­reglos con el señor Soto, reconociera i mandara pagar lo que juzgara conveniente. Atacaron esta proposicion los ciudadanos Viana, Holguin, Botero i Pereira Gamba, i la defendieron su autor i el ciudadano Icaza . Desplles de un detenido debate se aprobó lo dis­puesto por el ciudadano Corráles, de que se snspen­diera la discusion i se pidieran ioformes al Poder Ejecntivo sobre varios hechos relacionados con este negocio. Dia 7.-Fueron aprobados en tercera lectura los proyectos sigllientes: que exhonera al Estado de Bolívar del pago de derechos de importacion por los monumentos en honor a la memoria de los señores Nieto i Espriella j de adjudieacion de tierras baldías a la compañía del camino de la Buenaventllra; i el qUé abre un crédito al Poder Ejecntivo, de 10,000 Ilesos, para el camino al Meta. Comenzó el segundo debate del proyecto sobre instruccion pública, i se aprobó la modificacion de la cornision a cargo del ciudadano Holguin, por la cual se dispone que el Rector de la Universidad sea nombrado por el Congreso; modificaciol1 que fué combatida por el ciudadano Pereira G. i sostenida por su autor. Estando presrnte el señor Secretario ue Guerra,se suspendió la discusion del proyecto anteríor i se con­tinuó la del de presupuestos. El señor Secretario ci­tado manifestó en nombre del Porler Ejecutivo, que aceptaba las modificaciones del ciudadano Pereira al Qppartamento de Guerra, a lo cual contestó el 5(>­ñor Pereira en términos satisfactorios para el Go­bierno. Las modificaciones flle¡:gn aceptadas. El ciudadano J..argacha propuso un crédito por 60,000 pesos para pagar al Estado del Cauca los gas­tos hechos en la guerra que en 1865 tuvo lngar en dicho E -tado ; guerra o revolucion que fué pU!"amen­te local, como lo reconoció el mismo Gobierno de ese E tado; pero que sinembargo de eso ha preten­dido en dos ocasiones que se le paguen por la T acion aqllellos /;a to ~. El ciudadano Viana comlJatió dicho crédito, i ''lo Camara lo negó. Termllló)a discusion del proyecto, pero no pudo cerrarso el debate; habiéndose pasado aquel a la co­mision del ramo, conforme a lo que dispone el Re­glamento. 1\elacion de la relreta para el juéves 12 de mayo. ARTILLERíA. 1~ Preludio i Aria de "Ernani ll •• J. Yerdi. 2~ Valses: 1 Los P ensamientos".. J. Lalmer. 3~ Polka: La "Primavera', _ .•• D.lIlarti. ZAPADORES. . 1 ~ Duo de "Ernani"............ J. Verdi. 2~ Valses: "Recuerrlos de Lóodres" Lanner. 3': Polk.\: ,. Elena". __ • _ •.....• P. Giorza. Bogotá,l1 do mayo de 1870. El Directol· de las Banda. Oayeta71o Pereira. l!\lPRENTA DE N. PONTON 1 COllPA~ÍA. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.

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