SEMANARIO DE LA PROVINCIA DE CARrrAGENi\.
SEMESTRE 1. ~ CARTAGENA, JUEVES 25 DE JULIO DE 183D. NUMERO 2G.
Este periódico saldra -todos los jueves: la recepcion de las suscnClOnes y venta de los números sueltos están á cargo del tesorero de renl:1s prov incHl.les Sr. J u:m
Antonio Calvo. La suseridon por semestre vale CUATRO PESOS, pagaderos adelantados; y cada número suelLo REAL 1 MF.Dlo.=El precio de la iusercion lle los aviso's
ó articulos de interes privado, será de un peso h asta doce l'englones, y un real mas por cada tres renglones dé los que excedan de aquel número, y la lnüad .
par cada vez (lue se repita, siempre que se advierta al . mpo d8 la eDll'~ •
DECRETOS DEL CONCEJO MUNICIPAL
DEL CANTON DE CARTAGENA.
tREANDO ALGUNAS ESCUELAS PnIMARJAS;
El Concejo Municipal del canton de Cartagena,
En ejercicio de la atribucion 6 .a del artículo
171 de la ley org~nica de provincias,
que Je faculta para acordar 10 conveniente
psra el establecimiento de escuelas,
DECH ET.<\.
Al'llculo 1. Se crea úna escuela primari~
en cada una de las parroquias de Bocachica,
Santa Rosa y Turbane. Cada preceptor gozara
del sueldo mensual de diez y seis pe
sos, pagaderos de Jos fondos respectivo'i.
Art. 2. La construccion de Jos edificios
para dichas p.scuelas se ha ra en el terreno
mas a propósito del comun de la. parroquia .
y por medio del trabajo personal subsidiario
en los términos prevenidos por la ley; pudicnuose
erogar de las rentas del distrito
correspondiente Jos gastos muy indisp.ensa·
bIes para llevar a efecto la obra. .
Dado en Cartagcna a 16 de Junio de 1839.
- El csidente del Concejo, Jitan Antonio
Calvo.-El ecre tari , Luis Maria de Ochoa.
G fetun política. CH~. llgelJfl 18 d· Junio
de 1839.- Ej ... cúte"e . pu. 1 (101358. - Francisco
de Porras.- El secretan, , Luis Maria de OcllOa.
Es copla . Carlagena 25 de Junio de 1839.
El secretario, Oc1"oa.
•
SOBRE LA CONSTRUCCION y REPARACION DE CAJllINOS
y PUENTES.
El Concejo JI/umeipal del canton de Carta{fC1la)
En vista del cuadro del estado de) canton
presentado por la gefetura: política, en el
cual manifiesta la imp() lbilidad de conservar
transitables los caWlUOS:
Usando de la- atrlbucion 6.a del artículo
l de la ley organica de provincias, que le
faculta, en ejercicio de las atribuciones de
los concejos comunales, para acordar lo cooveniente
acerca de la apertura y constante
Teparacion de los caminos;
DECRETA.
Art. 1. .A. mas del 8erv~cio personal sub.
sidiario qoe se empleara conforme a la ley
organica de provincias .en la apertura y re
paracioD de los caminos y construccion de
puentes de los distritos parroquiales del canton,
se destinan los sobrantes de las respec·
tivas rentas p4lra los gastos que sean indis·
pensables en dichas obras.
Art. 2. Los fondos de cada parroquia so·
lo se emplearan en los caminos ó puentes
que se abran ó construyan en ella. '
Dado en Carlagena a 16 de Junio de 1839 .
....... El pre idente del Conct';o, Juan Antomo
Calvo.- El secretario, Luis M. Ochoa.
Gefetura política. Cartagena 18 d~ Junio
de 1839.- Ejecútese y publique"e - Francis
eo de Porras.- El secretario, LUls Jllaria de
Oc}¡,oa.
Es copia. Cartagcna 25 de Junio de 1839.
El secretario, Ochoa.
SOBRE COl'lSl'flUCCION y REFACCION DE
CE~l EN'IERJ05.
El G(Jnccjo Municipal del canton de Cartagena,
En' virtud de la autoriz . . e tenida n
el iDCiso G.o del 31'lículo 171 de l:l ley orga.
nica de pro~inciasJ
DECRETA.
Artículo único. En aquellas parroquias
del canton en que no haya ccmentel'io<¡, 'Y
en las que exi .... tan estos edificios y necesiten
de refilccion, 5f'" proccdera a hacer las cornpeterltes
con¡;lrueiones ó reparaciones; a cU 4
yo fin se de~ti n la cantidad que fuere ne
ce~arla, d('duciéndose antes l08 gastos decre~
tados t-Jara cada parroquia.
Dado en Cart:lgcna a 17 de Junio de 1839.
- I~ I presidente del Concejo, Juan Antonio
Calvo.- El sec.retario, LULS M. de Ochoa
Geft'tura política. Cartagen 18 d· JlInio
ele 1839.- Ejecútese y publíquesc .. - Fmllcisco
de Porras.- El secretarío, Luis Jl1arta de
Ochoa.
Es copia .. Cartagena 25 de .Junio de 1839.
El secl'etario, Ocnoa.
LEY SOBRE REFORMAS JUDICIALES.
Esta ley que acaba de sancionarse con
lieoe ciertamente reformas de suma importancia
en ~l ramo judicial: los tribu ·
nates un, tarios, la creacion de jueces le
trados de circuito, pagados por el tesoro
nacional: la diminucion de los derechos
señalados a éstos; y la considerable rer
duccion de los de portes de correos para
la remision de autos, que son las principales
que comprende dicha ley, nos parecen
de interés vital por la tendencia
que e.lt~s tienen a facilitar la mas pronta
y espedita administl'acion de justicia.
Sin embargo, creemós que se h n deja.
do muchos males v embarazos sin reme
diar y remover, sfn duda por el apresu·
ramiento con que nuestros legisladores
han querido adelantar sus pasos en el
('ampo ue las reformas judiciales.
Ya en otra oC\lsion hemos tenido la o·
portunidad de manifestar muy eslensamen
te n nestro conee plO sobre los el i ferentes
puntos que Juzgamos susceptibles
de refol'mas útiles v provechosas en el
vasto ramo de justiria: entonces h t mos
d~mostrad() con razones muy podel'osas, a nUtstl'o mo lo de en lendel', que pal'a
el acierto cri los fallos ue los ll'ibuu tes
se hace indispensable que cada una de
las plazas de los ministros jueces se halle
muy bien dotada; v e. ta m ~d ida no parece
q le exija elet tesoro publico grandes
erogaciones en un bien combinado
sistema de u ni tarios: con la supresion
de la reJa toría, como se ha hecho, y con
lét reduccion del n\ímero de los ministroS"
j ut'ces a s.olo dos, habría podido dotarse
a cada uno de éitos coo la renta anual
de 2.700 pesos, que fué la fipda por el
Cons jo eJe ESlndo en su proyecto, y
que nosotros ere 'mos suficien te m ¡cn tras
las rentas nacionales progresa-o y salen de
tos comprometimientos en que se hallan.
La fatal ioterv('ocioo ' de escrilnnol¡ en
los negocios judici inuiferencia pollLica de casi todos
nucstros compatriotas; ni las que
emanan, desgraciadameol de las adver·
sas pasiones que afectau á muchos de
ellos., califichn~olos de ominosos. a las li
bertades pú bJicas y a los sanos pl'inci píos
tle justicia y hurnani ad, han b¡.\st,,<.!o para
arredral'01e, ni hacerme de~i ~ tir del
indicado propósito, que me parece nob{e y
generoso, por cuanto se dirige a defen
der a muchas infortunadr.ls vlctimas de
un régimen opresivo, que toJos Jos hom
bres impat'ciales rOllslüt¡ran como una
grande aberracion en un pueblo nlOl'ige
rado y republi '300, que aspira a gOZ~il'
de toda la suma de libertad posible en
una sociedad Lign constituída.
Partiendo de los enunciados fundamen"
tl)S no puedo menos qu opinar, con la
franqueza dignidad propias de un hom
bre lilJre, que las penas impu stas en
los afios ' de 30 a 33, pOl' autoridades es·
trafias al pode.' judicial, fucron proscrip
ciones inconslituciouaJcs ó ilegales, sienÚO
ImS vitl1perabJes las que iuurieroll
lesíon a la amuistía y otras p .. eciosas garan
tias esti puladas en los convenios o capilulaciones
que tanto influyeron en el
dichoso triunfo de los que sostenían el
goblerno legItimo y constitucional: que
tales antecedentes, asl como las consideracione~
debidas a multitud ue familias.
granadinas, que hace largo tiempo sufren
la mas completa horfandad, y tambien la
oblig3('ion de aliviar la suerte de un gran
número de seres desgr:aciados que han
estado V estan reducidos a la mendicidad
cn paises estr'angeros etc., debieron ha ber
influido ya, en el animo de nuestros go.
bernantes, para es tenderles una mano
socorredora, poniendo al mismo tiempo
término a los dec1't~los de circans tanClaS a que hemos aludido. Si se hubiera a·
doptado tan noble linea de coo<.lucla se
habrian vindicado en gran parte y de un
modo glorioso pa~a nuestro gobierno,_ los
sanos prillclplOS, asi como Jos derechos
y las leyes que sufrieron detrimento en
la mencionada época, esparciéndese, en consecu
encia, un bálsamo consolador sobre
multitud ue granadinos, que si IJien
es ciert.o se estraviaron de la senda dt)
los deberes sociales, por error Ó pOl'
depravaeion t es igualmente cierto qua
estan gimiendo, hace ocho aüos, bf\jo el
peso del infortunio, no en vú'lad de {eyeg
que, ¡Jifen algunos, fué nf'cesario iufringir,
smo en j'ae,"za de las paslones buenasv
y malas, nobles é innobles de sus adver~
sarios pol'itjcos.
En los pl'eceueotes pensalnientos he
bus<]uejado rápí da mo'nte algunos de los
acerbos males que aquejan, ha largo
Uempo, a un gt'an numero de mls conciudadaoos,
con esdlOdalo de la libertad,
con detl'imen o de las leves con enorme
Jesion de los santos principios de ju ticia
y filaotropia, ue !)on las mas robustas
palancas de la hermosa ca u sa de la civi·
lizacion. Réstame indicar algunas de (as
medidas que, en mi concepto, pueden
convenir para promover la dism i lucioa
de 10i referidos males, aliviando la sucI'la
de multitud de vlctim ,ls de una f'l'oscrip:..
cion cuya excesIva duracion s oprobiosa.
para una nacion que aspira a ser gober·
naua por leyes suIJia5 o jus tJS y no por
el capricho de sus m .. mdatari os, que son
las siguientes:-
l . (';) Que lqs camaras na 'ionales espiJan
en sus próximas sesiones ll03 ley de am·
nlstia a favol' de tooos los e:pu "ados etc.
que fueron eceptuados por Id Convencion
granadina en su ley de L8 de Marzo de
183~
2. ca Que espicJa tnmbien la proxima le;.
gisJatlll'a . un decreto disponiendo la reznsc:
rzpclO/t en la lista militar de todos los
gl'anadmos de nacemlent(J '1/ por naturallZacio1l
que en los años de 30 a 33 fueron.
despoj ados de sus grJdos milit , que no son
naturales de la . r ueva Granada, por n()
permi til'io el 31'ticulo 175 de la cons~¡.\
tucion .
Do) ya fin, Sres. editores, a este pe~
queño esfuerzo en favor de la libertad v
de las le es, en que he omitido muchovs
argum e nlo~ irrefa>agables : arreglarlos no
svlamcnte a las actuales ley es fund.lmen",
tules, sino a la cooslilucion polltica que
regia 11 algunos de los años arriba citddos,
por no dar mucha estension a este
articulo, cu ° laudable designlo parecedl
tal vez absurdo a muchos que llO eSlén
persuadIdos de que es muy hunroso de~
tender a los desgra " i(1(jos y cumplir con
el deber sagrado que, como he dicho ,
afl'iba, esta prescrito en uno de- los ar~
ticulos del cad ígo polltico granadino, que
es el de velar en la conservaClOll de ta¡
ltbertades ptibltcas.
Soy de VV " Sres. ~dilorcs, con sentimientos
ud mayor respeto, afeclhimQ
servidor Q. B. S. M.
UN VIEJO REPUBLICANO::
~
CODIGO DE INSTl\UCCION PUBLICA'.
Habiendo quedado entre los negocios
pendientes para las próximas sesiones le.'
gisl:Uivas las " objeciones hechas por el
Poder ejecutivo a este importante código,
¿ por qué 110 se publ~can~ .para promover: ,
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
, .
SEl\'IANA.PLIO DE LA PROVINCIA DE CAH.TAGENA.l
'-
la disCllsion publica y que los diJ)utados
lleven al Congreso nn juicio ya madura.
mente formado en materia de tanto intercs?
MISCELANEAS.
CONTRA. LUS DESAFJOS.
Estando persuadidos de que bay muchos
poseidos de muy falsas y absurdas ideas re
lativamente a la barbara practica de los desa·
fíos, hemos jnzgado convenicnte somoter a la
eonsideracion de nuestros lectores los siguientes
pensamientos de algunos publicistas célo
hres, en que con sobradísima razon se corn
bale un uso tan abomiuable.
DE LA MORAL UNIVERSAL DE HOY.BACH.
JI La ociosidad de los nobles y de los miJi·
tares, su pasion al juego, su líbertinage, y
sobre todo su impe tuosa vanidad, son tam
bien las causas de sus frecuentes disputas y
contiendas, que muchas veces terminan en
!angrientos duelc1s.
» El hODor entre muchos de nuestros mili.
tares modernos, no es la justa estirnacion de
~í mismo confirmada por los otros, la cual
solamente puede fundarse en la cOlJcicncia
que la "irtud inspira; bino que este fútil ho·
nor es el temor de verse despreciado, por-
. que s:1ben que lo merecen. Uh duelo no pro
bara jamas que uno no lerlga l'azón ni hOll or: .
lln duelo solamente prueba impaciencia, vanidad
y atolondramiento; cualidades muy
contrarias a la fortaleza, a la veruadera gran deza
de alma, y a la humanidad. El hombre
de honor es el que mercce ser honrado. ¿Qué
tiene de han rosa UDa accion, bra de la fla ·
queza y crueldau? Los famows capitanes de
Grecia y de Roma, tan v alic' ntes y honrados
como pueden serlo nue tros militáres modernos,
soportaban un insullo y no pretendian
lavarle con la sangre de sus conciudacla-
.Dos .•... ~ .......
" En los siglos barbaros de la Europa, la
religioD y la política 'probaban igualmente
Jos desafíos, mirandose el rcsultado como un
ju' cio del cielo encargado de manifestarse en
ca llra del culpado. En vano despues las le.
Jes religiosas y civiles han intentado abolir
esto U'>0 5 b ' rbaros é in humanos. Hoy día,
-en o a la Europa, el hombre que se bale
en UjJ. desafio se espone' a morir en un cadalso,
J 1 ( uc rehusa batirse se le erel; o se le con
.síd ra como cobarde y debhonrado. Para
pros ribir enteramente los uesarios habría
con vf'f' -do mpezar por ~cctifi 4; a la opülÍon
nacional, tlcclarando in/ame a cUllh¡uiera que
coro" fe 'e 3cmelaute d<:li to_ La declaracion
de infamia y la degmdacLOn de todo nobl~ que
llUbIeJ'e reñ ido en un desafio, habflan cnusado
mayor impresion que el temor de la mller
te, Impotente para un militar . Fábio decia
que nguel que no puede su/nt ltnll injurza~ es
mas coharde que el que /wye d la vista del ene ·
,l12l"gO. Todo el mundo sabe el pasage de Temistodes,
contra quien habiendo levan tado
el bastan Euribiades en un consejo de guerra,
Temístocles, tranquilo y superior a este
ultrage t se contentó con decirle: Dame, pero
escucha. Los llue pretenden que el espl
ritu militar se conserva por medio de los de.
safIos, lean la historia griega y romana y ve"
l'an en ella que aqut'llos guerreros, valientes
y temibles a sus euemigos, no tenian la loeu
ra de asesinarse los unos a los otros por geslos
ó palabras ........ »
REFLEXIONES DE J. J. ROUS5E.\U.
» No confundais el nombre sagrado de ho'nor
con esa prcocupacion feroz que coloca a
todas las ",irtudes en )a punta de una espada
'Y que no sirve sino para que haya bravos
perversos. ¿ En qué consiste semejante pI'eo ·
cupacion? En]a opinion mas barbara y es·
trav gante que puede haber abrazado el es·
piritu humano, a saber: que todos los debe·
:res soc'ales se suplen por la valentía; que
un hombre deja de ser picaro, abominable y
calumniador, ó que es civilizado, humaDO y
dec,ente por el simple he~,h o de que sepa bao
tirse; que la mentira se cambía en verdad,
que el robo se legitíma, que ~a perfidia , e~
probidad, y que es laudable la ln6.d~ltdad lOwediataménte
que todo esto se sostiene con
el hierro en la mano; que una afrenta se repara
siempre bien con un tiro de espada J
que nunca se tiene la culpa de un choque
con otro hombre con tal de que se le mate ..•
) ¿ Los ht.ilubres mas valientes de la aotigüe.
dad vengaron j~mas injOl'ias personales por
medio de combates particulares? ¿ Envió jamas
César un cartel a Caton, () Pompeyo a
Cé5ar pCi>r tan tos ultrages recIprocos? ¿ El
mas grande de los capitanes de la. Grecia se
deshonró por haberse dejado amenazar con
un bastan? Para otros tiempos, otras costumbre.
s: yo lo sé.; ¿ y todas las costumbres
son por ventura buenas? ¿ No se osara in·
vestigar si los usos .de ciertos tiempos son los
que exige el sólido hunor? No, este honor
no puede variar; él no depeD~e de llls pr~o cupaciones,
no puede pasar Dl renacer; tle
ne su fuente eterna en el coruon del hom
bre justo y en la inaltenble regla de sus deberes.
Si los pu blo mas ilustrados, valientes
'Y virtuosos sobre la tierra no han cono·
eido el desafio, .no se puede considerar como
una institucion de honor, sino como una mo
da horrorosa y bárbara, digna de su feroz
origt n. ¿ ltesta averiguar si cuando se trata
ue su vtda ó de la de otrQ, el hombre honrauo
-debe arreglarse a la moda, y si enlon·
ces no habria mas bien verdadero valen' en
desentenderse de ella que no observarla?
¿ Q.ué baria el que quisi-ese observar tal moda
en pai es dando reina un uso contrario? .•
)) El hombre rcctQ, cuya vida es sin mancl13,
que no- dió .lamas ;igno alguno de robtrdla,
se dcnrgara a manchar sus manos con
un homicidio, y esto le sera mas bonroso.
Siempre dispuesto a servir a la patl'ia, a prot
'ger al débil, a observar los mas peligrosos
df!beres y a defender eo todo encuentro, jus
to y bonesto, lo stra que este delito
es mas comun en las altas clases de lo que
'se imagina ordinariam~nte, y que . es mas
grande la criminalidad que resulta de 8SU,
práctica de lo que comunmente se piensa. El
autor esperimentara un dulcisimo consuelo, si
consigue presentar solemnemente esta consi
deracion a la conciencia de aquellas personas
a quienes es dado prohibir ests impía cos·
tumbre. Y si en efecto tienen, como esta
fuertemente dispuesto a cree" esta f3cultad;
y permite~ sin embargo que semejante plaga
continúe en' sus devastaciones, ellas entonces
son las respon sables de este delito y de tot:las
sus consecuencias."
POESIA.
" Tenemos el grato placer oe insertar la siguiente
poesia, que por una dichosa casualidad ha He.!.
gado á nuestras manos: ~ella y ~tH~sófica procl~ccion
de una ~mal>le y lInda seoontn, csc~arcclda
poe~sa entalana, bonor y gloria del sexo hermoso.-
UN BESO MATERNAL.!,
l.
i. Qué valen las ('arielas,
Los aLrazos y besos,
Si no son prodigados
Por maternal afecto?
Es la amistad efímera,
El amor pasagero,
Humo fugaz la gloria,
y el porvenir illcierto,
¡Ay! solo ~s posiLivo
El cariño materno.
l Buscais arnistad firme;
Afecto vndadcro,
y en el amor y gloria-Un
porvenir de afectos?
Pues Lien, lo hallar~is solo
En el materno pecho.
11.
i Felices los qu e han sentido
Su tierno rostro oprimido
Por el labio materoal!
¡Dichosos lo's que han ~ido
y al. canto se han adormido
De aquella voz celeslial!
Tú no puedes compren.der
La dicha de poseer
Lo clue tienes, niño, ahora;
Lo que vale esa muger
Oue rie con tu placer,
y que si tú lloras llora;
Que nla siempre a lu lado
Con solicito cuidado,
y tu querer ndi,ina
Su ~roor desinteresado,
Tan dulce, tan sosegado
Como el aura matntina.
~ino, eu.ando la razon
Alumbre tu corazon,
y veas como es del>ido,
R ccuerda con lJué ilusion,Con
qué delirio y pasion
Esa lllUgCf ' te ha querido.
Besa el polvo (fue piso,
y la cuna que n1(~('ió
Con un aran tan prolijo;
Resreta lo qttc toco,
Lo que te dijo y maild6:
¡ Mucho deLe hacer un bijo !
Al:z.a su lúnguido brazo,
Forma con el tuvo un lazo
y no lo sueltes Jamas;
Dirige su tardo p~so,
No andes en amarla escaso,
i 1\ unca cual ella amaras!
111-
i OL! si Dios por su clemencia
Mi madre me devolviera
y bendccirmc pudiera ••••••
Llamarme hij 'l una vez!
Por ,'crme contra su pecho
E~trechada ton ternura,
i Dios mio! por téll vcntura
¿Qué 110 (:tu'ja despues? ...
Diera mi amor en la tierra,
Belleza si la tuviera,
Mi di('ba, mi vida entera
Por UD beso maternal,
Ma~s que el esqueleto fuera
Que de la huesa se alzara
El que tierno me besara
Con su boca sepulcral. ,
Yo sé bien que este cariüo
No seria fria, inerle,
Que mas alla de la muerte
Llevan las madres su amor.
Un ueso fuera de fuego,
y de la gloria un desteJlo,
-Ardiente, célico, bello
Cual la gracia del Señor. •
J OS'EF" MASSANES.'
(El Guardia Nacional de Barcelona.)¡
Con este n.O concluye el primer semestreJ
Imprenta de 10.5 herederQs ~.e J. A. Ca1'!.o.~
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Citación recomendada (normas APA)
"Semanario de la Provincia de Cartagena - Semestre 1 N. 26", -:-, 1839. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3684212/), el día 2025-05-01.