",\?l))IJ'1-- REPUBLICA i COLOMBIA
GACETA CONSTITUCIONAL
No.16 BogotA, D.E .. martes 5 de marzo de 1991
ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE
HORACIO SERPA URIBE
PRESIDENTES: ALVARO GOMEZ HURTADO
ANTONIO JOSE NAVARRO WOLFF
SECRETAIIO CENERAL:
RELATOa,
JACOBO PEREZ ESCOBAR
ALVARO LEON CAJIAO
Justicia para el cumplimiento de la ley
"Cancelaci6n irrevocable de los privilegios ilegltimos de los Congresistas".
RAIMUNDO EMILI ANI ROMAN
(Pagina 2)
Esta es la Constituyente del Consenso
"Si bien esta Asamblea es heterogenea en su composici6n politica,
podra ser homogenea en sus prop6sitos nacionalistas".
GUILLERMO PLAZAS ALCID .
~ I ~~~
~ Se trata de sacar la Constituci6n de
su actual condici6n de letra muerta
"Reforma democnitica al regimen de estado de sitio".
Jost M. ORTl.Z SARMIENTO
(Pagina 6)
Vivimos los momentos mas dolorosos y
dificiles de nuestra historia
"Como ya nos hemos echado bala durante varias decadas, con resultados conocidos,
vale la pena sentarse a echar lengua".
JA!MF. CASTRO
(Pagin~ 8)
IMPRENT A NACIONAL
EdlclOn de 1 2 p~ginas
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Pagina 2
GACETA CONSTlTUC10NAL
Justicia para el cumplimiento de la ley
"Cancelaci6n irrevocable de los privilegios ilegftimos de los Congresistas".
Seiio",s Presidentes
y Delegatarios:
Me mueve a tomar la palabra en este
debale d temor de que la reiteraci6n superficial
aqur escuchada de que el origen de nuestros
males radica en la vetustez de nuestra Carta
Magna, pueda conducimos, si de algUn ".'0-
do no se rectifica, a un error de dtagn6sUco
sobre sus verdaderas causas, haciendo nugatorios
nuestros esfuerzos por lIevamos a reformas
infundadas 0 haciendonos creer que deben
consistir en su sistematica destrucci6n vandalica.
La Constituci6n de 1886, como 10 evidencia su
perdurabilidad, es una obra maestra de nuestra
cultura poUtica, porque rio fue la daboraci6n
de ce",bros alucinados fuera de la realidad,
sino, por eI contrario, eI fruto de su observaci6n
atenta y patri6tica, para la debida y correcta
formulaci6n de los ordenamientos juridico-
potrticos Cjue debfan moldearla.
Fue asr como consagrola unidad potrtica de la
Republica ante los ",sultados ruinosos de un
federalismo ap6crifo que, a la inver>a de uno
autentico, que busca la unidad de Ia diversidad,
habla desmembrado 10 que debra estar unido,
con su adehala luctuosa de conmociones, desOrdenes
y guerras, y eI debilitamiento melanc61ico
de sus fuerzas vitales por el desgarramiento
de los territorios y los lugareflismos
consiguientes, faltos de horizontes, visi6n y
grandeza. Sin embargo, busc6 satisfacer los anhelos
regionales, a traves de la dinamica centrl:
fuga de una amplia descentralizaci6n administrativa.
Y fue asr tambien como, ante la anarqura reinante
por debilidad de la autoridad ejecutiva.
estructur6 una democracia de orden, basada
en la fortaleza del Presidente, porque Botrvar
habla experimentado, y asr !los 10 habla·enseiiado,
que "en las Republicas eI Ejecutivo debe
ser el mas fuene, porque todo conspira contra
el, en tanto que en las Monarquras el mas fuene
debe ser el Legislativo, porque todo conspira
en favor del Monarca", y porque, ademas, "nada
es tan peligroso con respecto al pueblo, como
la debilidad del Ejecutivo".
Asr mismo, inspirada en las doctrinas cristianas,
no en las exageradas de la Revoluci6n
Francesa que condujeron alterror, reconoci6 a
los ciudadanos sus derechos naturales de vida,
honra, bienes, Habeas Corpus, libenades de
conciencia, pensamiento, CU llOS, iniciativ3, trabajo,
prensa y garantras sociales de ellos derivadas,
dentro del bien comun para el perfeccionamiento
de la persona y no para perjuicio
RAIMUNDO EMILIANI ROMAN
ajeno, y estableci6 en forma clara los deberes
del Estado, como eI de la educaci6n publica y
supervigilancia de la privada.
Sus disposiciones al respecto son concreci6n de
cultura humanista y cristiana que deben enorgullecer
al pueblo colombia no, y mas hoy,
cuando autoridades mundiales, ante eI oscurantismo
de muchos parses barbaros y aun de
los que se tildan de civilizados, han venido a
propagar bajo la expesi6n tautol6gica de de",chos
humanos, porque todo derecho es humano,
los mismos derechos de nuestra Constituci6n
de 1886, y algunos otros que a la postre no
son sino sus derivados, de modo que cuando
escuchamos la algazara de su tardro descubrimiento
adquirimos conciencia de que, esta que
despectivamente se califica de vetusta y obsoleta
Constituci6n, desde la fecha de su establecimiento
en eI siglo pasado, nos habla colocado a
la van guardia de la civilizaci6n de Ia humanidad.
Para completar eI retablo de sus grandes realizaciones,
esa misma Constituci6n cumpli6 con
la obra de caridad de darle paz a la conciencia
",ligiosa del pars, hondamente conturbada de
mucho tiempo atras, por el sectarismo de un
esprritu irreligioso que habra perseguido at c1ero
cat61ico aun en sus personas, y de tal modo
habla abjurado de su doctrina, que impuS9 en
las escuelas textos de estudio reflidos con su
moral, con escandalo justificado de los padres
de familia. Por eso ella comienza, dice Nuiiez
en articulo sobre la libenad religiosa, ~mvocando
el nombre de Dios, tontamente desterrado
de nuestros documentos publicos, por infatuaci6n
0 ignorancia. Verific6se luego, continua,
10 que en la Torre de Babel: confusi6n, no de
lenguas pero sr de ideas, se preftri6 la raWn,
como si eUa fuera infalible y obra nuesua".
Carenada de este modo la destartalada nave
del Estado, asumi61a contextura y solidez que
Ie daban el duro casco de su unidad, su recia y
flexible arboladura de derechos fundamentales
y paz religiosa, y eI cenero tim6n de la
autoridad presidencial como gura impenurbable.
La transformaci6n del pals fue radical. De la
secuencia epileptica de convulsiones, dCsOrdenes
y guerras que habran caracterizado el modo
de hacer la polrtica del siglo pasado, Se pas6
hasta el aiio 1930 por un largo periodo de paz,
tranquilidad y progreso que s610 interrumpi6
la injustificada guerra de los mil dras, que fue la
ultima de aquella violenta modalidad. En el
ano de 1930 el Partido Conservador entreg6
un pars en paz, que, segun expresi6n del Doctor
Laureano G6mez, podra ser recorrido por
una persona sola en [oda la extensi6n de su
territorio, sin peligro de su integridad personal.
Durante el nuevo ~men se rompi6 \a eonem-.
dia entre los partidos tradiciona1ea, especial.
mente por eI funesto ensayo de los gobiernos
de partido, y comenz6 una epoca de disconlia
potrtica, que degener6 en violencia de esc ca.
racter. Pero en mec\io de ella, el Estado eonl6
con las palancas de poder de que 10 habfa dotado
la Constituci6n de 1886 para que Ia vida
ciudadana pudiera seguir 5U ritmo habiiual, sin
que \a beligerancia de \a contienda a1canzara
gravedad alterante del orden. Hubo vioiencia,
pero no guerra.
EI Partido liberal, a pesar de que habfa basado
5U potrtica de oposici6n en una acerba y eonstante
critica a la Constituci6n de 1886, vaJor6
5U sabidurla y eficacia ante las mponsabilidades
del Gobierno, y cuando Ueg6 el momenta
hist6rico de satisfacer su deseo de destruirla,
lejos de eso, la ratific6 en su estructura, e insert6
en ella sus imponantes reformas para darIes
asr. estabilidad.
En medio de \a tempestad, pues; Ia nave del
Estado pudo seguir la navegaci6n de su propia
hi5tOria, sin que eI golpe del 13 de junio Uegara
tampoco a romper su estructura.
La concordia partidi5ta renaci6 con el Frente
Nacional, trayendo paz y tranquilidad que,
desgraciadamente, no lIegaron a consolidarse,
porque en eI niundo apareci6 diseminado en
muchos parses, eI aciago fen6meno de los movimientos
de Iiberaci6n nacional, que recurrle·
ron a la subversi6n armada para Ia implantaci6n
de ideologfas ajenas a nuesua uaclici6n
democratica, y posteriormente, hizo irrupci6n
otro no menos aJarrnante, eI del oarcotrafico.
Todos esos fen6menos tienen su propia genesis,
totalmente ajena a Ia Gonstituci6n de 1886.
Por el conuario, los gobiernos han podido luchar
contra eUos con las parancas de poder y
resistencia que les ha conferido esa inagotable
Constituci6n. Y yo no tengo ducia, ninguna
duda, de que haciendo buen usa de elias, especialmente
de las tan criticadas del estado de
sitio sobre situaciones uansitorias, no estari
lejano el dra en que hayan de desaparecer de Ia
esccna nacional, renaciendo la concordia y eI
progreso, porque como 10 decfa eI senor Rafael
Nunez con su sabiduria de m6sofo y soci610go:
"para contemplar las evoluciones hist6ricas, como
para contemplar eI desplazamiento sideral
de los planctas, se requieren instrumentos de
largo aJcance".
Pero si en medio de esta tremenda tormenta en
que nos debatimos, en VeZ de utilizar la s6lida
estructura que al Estado Ie dio la ConstituciOn
de 1886, nos dcdicamos a la tarea insensata de
revivir los mismos vicios y defectos que ella
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
5*_*1991
imacIic6 predlamente para salvarlo, como eI
~IIO de.!pna forma de federalisaID
ap6crifo que mengOe Ia fortaleza de Ili uniI
dIId nacionaI, 0 eI debiliwniento 0 restriccion
del ejercicio de Ia autoridad de que hoy dispone
eI Presidente, 0 Ia enumeraci6n de derechos
llimitados y aun desnaturaJizados de los ciudacIanos
para relevarlos de los deberes de solidaridad
social, 0 el renacimiento de la discordia
reIigiosa que enceguece los cerebros y desata
Iu pasiones, no estarfamos haciendo otra rosa
que dlvar Ia tumba donde serfa sepultado a
corto pIazo el orden democritico y civilizado
del que hoy, a pesar de tantas vicisitudes, sin
embargo, gozamos.
Nuestros problemas de fondo, pues, no estAn
II1II. radican en otra parte, y es necesario detectarIos
para dam adecuado tratamiento, especiaImente
por esta Constituyente. Y consisten,
en slntesis, en Ia grave amenaza de que el pals
que .ubsiste en medio de tantas difICultades, de
repente se de.plome aquejado de septicemia
pneralizada, provocando una debacle inenanab/
e.
GACETA CONSTITUCIONAL
En efecto, bajo la inlluencia de ideas y practicas
malsanas, eI bien comun ha sido sUSliluido por
e1 bien particular. Y la politica, que lodo 10
inlluye, ha dejado de ser una actividad noble y
auslera de servicio publico, para convertirse en
un Moloch insaciable que exige gajes, preben<
las, burocracia. contralos, resoluciones, negocios,
en nombre de merilos e1eclOrales 0 exigencias
de partido, para seguir conquistando
mayorfas. Es el gobierno espurio del dientelismo,
que haciendose adjudicata rio de insulas
Baratarias de la adminislraci6n, ha desalojado
al gobierno constilucional, y se ha apoderado
de los recunos que el Estado tiene dedicados a
la satisfaceion de las necesidades basicas de la
sociedad, dejando aI pueblo en abandono total.
No es de utraitar que ese pueblo fruslrado e
indignado, mire con simpallas los movimienlos
subversivos que ofrecen un cambio radical de
siluaci6n aunque sea con las armas.
Tenemos un Estado desfaleado y en quiebra,
IOtalmenle en quiebra, gobernando a una democracia
sin vinudes, cuyas mayorfas amorfas
y venales 10 sostienen, constiluyc!ndose en el
azote del pueblo.
Pagina 3
Alii reside Ia causa principal de 10 que se llama
la ineficacia del Estado, con olros fotiches que
Ie tmptden el aprovechamiento de la colaboraci6n
colosal de la actividad privada, que no
puede seguir siendo eSlupidamente rechazada
con dano general de la sociedad.
Fuera de un cambio en la orientaci6n de la
politica, esta claro 10 que aqul real mente necesitamos
hacer: justicia para el cumplimiento de
la ley, gran fiscal , censor publico, educaci6n
moral con hisloria patria, cfvica, religi6n cristiana,
responsabilidad familiar, dignidad de
Irabajo, dignidad de los empleados publicos,
planeaci6n econ6mica, cancelaci6n irrevocable
de los privilegios ilegltimos de los congresistas,
y en fin, olras iniciativas que aqul se han expueslo
y que son convenientes por cuanto propenden
a eSlos mismos fines y a mejorar nuesIra
democracia.
Dejariamos asl de desempenar, como algunos
10 pretenden, eI lriste papel de Er6slrato, de
pasar a la historia simplemenle por haber destruido
un lemplo de nuestra cultura polftica.
Esta es la Constituyente del Consenso
"Si bien esta Asamblea es heterogenea en su composici6n politica,
podra ser homogenea en sus prop6sitos nacionalistas".
Acertada decision la de la Asamblea Na:
ional Constiluyente de escuchar a sus miem)
ros, a declO de conocer sus criterios globales
!n relacion con la Reforma Constilucional que
if! tramita. Durante varios dias, los Delegata;
05 que asi 10 han querido, han expresado con
!ntera libenad sus ideas respeclO de las tareas
lue debe cumplir esta Asamblea. Cada quien
13 levantado su voz. Todas las intervenciones
lan sitlo brillantes e ilustradas. Unas de impe:
able cone academico, otras de emotiva e10-
:urncia. Estas de penelrante enfoque especiali!
ado. Aquellas de aguda y atinada critica. Y en
~Deral oponunas y sugerentes. La ausencia de
>riginalidad, tanlo en los lemas como en las
Jropuestas, dice muy a las daras que en e1
Derecho Publico Colombiano "nada nuevo hay
:>ajo elsol". Y eso tiene a nueslro entender, dos
;xplicaciones: una, de tiempo alris se observa
~n e1 pals crecienle inle .. !s academico y publico
IXIr eslaS malerias; y dos, porque los colombianos,
desde siempre, estamos en Irance de Reforma.
Para nosolros se ha hecho mas intportante
reformar la norma que acatarla. Esta actitud
es una constanle de nueslra hisloria politica,
se puede afirmar sin exageracion que en el
Congreso Nacional siempre hay en lramile mas
de un AClo Legislativo. Esta circunstancia ha
mOlivado, que eslOs Ie mas, de suyo propios de
especialislas, provechosamente hayan lrascendido
a la opini6n publica, a Iraves de seminarios,
mesas redondas, talleres, debales, entrevistas,
conferencias y publicaciones especializa-
GUILLERMO PLAZAS ALeJO
das. A eslo habria que agregar las 1.500 mesas
de Irabajo que como labor preparaloria de esta
Asamblea auspici6 el gobierno.
ESla Asamblea Nacional Consliluyenle pasara
a la hisloria polilica y jurldica de Colombia,
como la Consliluyenle del Consenso. Consens<>
que se impone pordos razones fundamentales:
por la nolo ria ausencia de mayorias absolutas
capaces de suslentar la intransigencia de partido,
y por la ostensible carencia de exclusividades
en lemas y propueslas, al menos en male ria
doclrinaria. Se observa originalidad en asunlos
facticos como la sugerencia de revocar el mandalo
al aClual Congreso. Pero en aspectos ideo-
16gicos y doclrinarios, y probablememe lecnicos
y cienllficos, la mayoria de las iniciativas
conocidas lienen un denominador comun, 10
cual fuerza y facilita el Consenso. Afonunada
casualidad polltica que garamiza una reforma
de caracler nacional. Se puede afirmar, emonces,
que si bien esta Asamblea es heterogenea
en su composici6n politica, podra ser homogenea
en sus prop6silOS nacionalistas.
Y pensar que hemos derramado tanta sangre
para conduir, que "en 10 fundamental", estamos
de acuerdo.
La Constituyente: Excepcional opcion de paz
Me cuenlo entre los colombianos que piensan
que con la acmal Conslituci6n se puede gobernar
el pais, ~i hay real voluntad de hacerlo. Es
mas, participo del crilerio de que el [allo de la
honorable Corle Suprema deJusticia respeclo
del DecrelO 1926 de 1990, fue oslensiblemenle
violalOrio de la misma carta, por las razones
brillantemente expueslas en su salvamento de .
vot9·
Generalmente se admile que en maleria constilucional
todo cambio fundamental implica una
ruptura del orden jurldico existente. La raz6n
polflica para la viabilidad jurldica de eSla
Asamblea Nacional Consliluyeme se explica,
enlonces, por la necesidad de crear un mecanismo
inSlitucional id6neo, en el cual pudiera
darse efectivamenle la paz. Si la ConSliluci6n
es un Paclo Social, como tamas veces se
dicho y aceplado, en la formaci6n yexpediuull
de una Nueva Carta, con Ia participaci6n volunlaria
y aCliva de las fuerzas en conflicto, se
darla la excepcional circunstancia, la coyuntura
ur-ica, de poder expedir una Ley Fundamental,
con el concurso y acatamienlo de todas
las fuerzas sociales que constituiria garantia y
sopone de legitimidad. La paz en estas condiciones
estaria alcanzada, y la conquista de la
paz constituiria la justificaci6n politica,juridica
e hisl6rica de la exislencia y acci6n de la Asamblea
Nacional Consliluyente.
Esta Asamblea tiene, pues, su origen en la urgencia
del pueblo colombiano de aleanzar la
paz. Y si al lermino de sus tareas no se han
sentado las bases de una paz real, efectiva y
estable, dolorosamente lendriamos que aceptar
desde ahora, que eI pueblo colombiano eS!3
condenado, en 10 que se refiere a la conquista
de la paz, a comparlir el fruslranle destino de
Sisifo.
La presencia en esta Asamblea Nacional Constiluyente
de Alianza Democr;\tica M-19, del
EjercilO Popular de Liberaci6n , y del Partido
Revolucionario de los Trabajadores, demuesIra
que cuando hay voluntad, la paz si es posible.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Pagma 2 GACETA CONSTITUCIONAL Mana 5 de _ de 11191
Justicia para el cumplimiento de la ley
"Cancelaci6n irrevocable de los privilegios ilegitimos de los Congresistas".
ScnolTS ~sidentes
y Ddegatarios:
Me mueve a tomar Ia palabra en este
debate el temor de que la reiteraci6n superficial
aqul escuchada de que eI origen de nuestrOS
males radica en la vetustez de nuestra Carta
Magna. pueda conducimos. si de algUn modo
no se rectifica, a un error de diagn6stico
sabre sus verdaderas causas, haciendo nugatonos
nuestrOS esfuenos por Uevamos a reformas
infundadas 0 ha~ndonos creer que deben
consiltir en su sistematica destrucci6n vandalica.
La Constituci6n de 1886, como 10 evidencia su
perdurabilidad, es una obra maestra de nuestra
cultura pol/tica, porque no fue la elaboraci6n
de cerebros alucinados fuera de la realidad,
sino, por el contrario, el fruto de su observaci6n
atenta y patri6tica, para Ia debida y correcta
formulaci6n de los ordenamientos juridiea-
pollticos que deblan moldearla.
fue asl como consagr6 Ia unidad pol/tica de la
Rep6b1ica ante los resultados ruinosos de un
federa1ismo ap6crifo que, a la inversa de uno
au~ntico, que busca la unidad de la divenidad,
habla desmembrado 10 que debra estar unido,
con IU adehala luctuosa de conmociones, des6rdenes
y guerras, y d debilitamiento melanc6lico
de sus fuenas vitales por d desgarramiento
de los territorios y los lugarerusmos
consiguientes, faltos de horizontes, visiOn y
grandeza. Sin embargo, busc6 satisfacer los anhelos
regionales, a traV" de la dinamica ccntrlfuga
de una amplia descentralizaci6n administrativa.
Y fue asl tambitn como, ante la anarqula reinante
por debilidad de la autoridad ejecutiva,
estructur6 una democracia de orden, basada
en la fonaleza del Presidente, porque Bolivar
habla experimentado, y asl !los 10 habla ensenado,
que "en las Republicas el Ejecutivo debe
ser el mas fuene, porque todo conspira contra
tl, en tanto que en las Monarqulas el mas fuene
debe ser el Legislativo, porque todo conspira
en favor del Monarca", y porque, ademas, "nada
es tan peligroso con respecto al pueblo, como
la debilidad del Ejecutivo".
Asl mismo, inspirada en las doctrinas cristianas,
no en las exageradas de la Revoluci6n
Francesa que condujeron al terror, reconoci6 a
los ciudadanos sus derechos naturales de vida,
honra, bienes, Habeas Corpus, libenades de
conciencia, pensamiento, cultos, iniciativa, trabajo,
prensa y garanllas sociales de ellos deri vadas,
dentro del bien comun para el perfeccionam'ento
de la persona y no para peljuicio
RAIMUNDO EMILIANI ROMAN
ajeno, y estableci6 en forma clara los deberes
del Estado, como el de la educaci6n publica y
su pervigilancia de la privada.
Sus disposiciones al respecto son concreci6n de
cultura humanista y cristiana que deben enorgullecer
al pueblo colombiano, y mas hoy,
cuando autoridades mundiales, ante el oscurantismo
de muchos palses barbaros y aun de
los que se tildan de civi1izados, han venido a
propagar bajo la expesi6n tautol6gica de derechos
humanos, porque todo derecho es hurnano,
los mismos derechos de nuestra Constituci6n
de 1886, y algunos otros que a la postre no
son sino sus derivados, de modo que cuando
escuchamos la algazara de su tardIo descubrimiento
adquirimos conciencia de que, esta que
despectivamente se calilica de verusta y obsoleta
Constituci6n, desde la fecha de su establecimiento
en el siglo pasado, nos habla colocado a
la vanguardia de la civi1izaci6n de la hurnanidad.
Para completar el retablo de sus grandes realizaciones,
esa misma Constituci6n cumpli6 con
la obra de caridad de darle paz a la conciencia
religiosa del pals, hondamente conturbada de
mucho tiempo atras, por el sectarismo de un
esplritu irreligioso que habla peneguido al clero
cat61ico aun en sus penonas, y de tal modo
habla abjurado de su doctrina, que impuSQ en
las escuelas textos de estudio renidos con su
moral, con esdndalo justilicado de los padres
de familia. Por eso eUa comienza, dice Nunez
en articulo sobre la libenad religiosa, rmvocando
el nombre de Dios, tontamente desterrado
de nuestros documentos publicos, por infatuaci6n
0 ignorancia. Verilic6se luego, continua,
10 que en la Torre de Babel: confusi6n, no de
lenguas pero 51 de ideas, se preliri6 la raz6n,
como si ella fuera infalible y obra nuestra".
Carenada de este modo Ia des!3nalada nave
del Estado, asumi61a contextura y solidez que
Ie daban el duro casco de su unidad, su reda y
flexible arboladura de derechos fundamentales
y paz religiosa, y el cenero tim6n de la
autoridad presidencial como gula impenurbable.
La transformaci6n del pals fue radical. De la
secuencia epiltptica de convulsiones, des6rdenes
y guerras que hablan caracterizado eI modo
de hacer la poHtica del siglo pasado, se pas6
hasta el ano 1930 por un largo periodo de paz,
tranquilidad y progreso que 5610 interrumpi6
la injustilicada guerra de 105 mil dlas, que fue la
ultima de aquella violenta modalidad. En el
ano de 1930 el Partido Conservador entreg6
un pals en paz, que, segun expresi6n del Doctor
Laureano G6mez, podia ser recorrido por
una persona sola en toda la extensi6n de su
terri to rio, sin peligro de su integridad personal.
Durante el nuevo rtgimen se rompi6laconeordia
entre los partidos tradicionales, especialmente
por el funesto ensayo de los gobiernos
de partido, y comenz6 una tpoca de discordia
pol/tica, que degener6 en violencia de esc caracter.
Pero en medio de ella, el Estado cont6
con las pa1ancas de poder de que 10 habla dotado
la Constituci6n de 1886 para que Ia vida
ciudadana pudiera seguir su ritmo habitUal, sin
que Ia beligerancia de Ia contienda alcanzara
gravedad alterante del orden. Hubo violencia,
pero no guerra.
EI Partido Liberal, a pesar de que habla basado
su poHtica de oposici6n en una a~rba y constante
mtica a la Constituci6n de 1886, valor6
su sabidurla y elicacia ante las ITSponsabilidades
del Gobierno, y cuando Ueg6 el momenta
hist6rico de satisfacer su deseo de destruirla,
lejos de eso, la ratilic6 en su estructura, e insert6
en ella sus imponantes reformas para darles
asl estabilidad.
En medio de la tempestad, pues, la nave del
Estado pudo seguir la navegaci6n de su propia
historia, sin que el golpe dell 3 de junio Uegara
tampoco a romper su estructura.
La concordia partidista renaci6 con el Frente
Nacional, trayendo paz y tranquilidad que,
desgraciadamen!e, no Uegaron a consolidane,
porque en el niundo apareci6 diseminado en
muchos palses, el aciago fen6meno de los movimientos
de liberaci6n nacional, que rerurrieron
a Ia subveni6n armada para Ia implantaci6n
de ideologlas ajenas a nuestra tradici6n
democratica, y p05teriormen!e, hizo irrupci6n
otro no menos a1armante, el del narcotralico.
Todos esos fen6menos tienen su propia gtnesis,
totalmente ajena a la Constituci6n de 1886.
Por el contrario, los gobiernos han podido luchar
contra eUos con las palancas de poder y
resistencia que les ha conferido esa inagotable
Constiruci6n. Y yo no !engo duda, ninguna
duda, de que haciendo buen uso de elias, especialmente
de las tan criticadas del estado de
sitio sobre situaciones transitorias, no estara
lejano el dla en que hayan de desaparecer de la
esccna nacional, renaciendo la concordia y el
progreso, porque como 10 decla el senor Rafael
Nunez con su sabiduria de f116sofo y soci610go:
"para contemplar las evoluciones hist6ricas, como
para contemplar eI desplazamiento sideral
de los planetas, se requieren instrumentos de
largo alcance".
Pero si en medio de esta tremenda tormenta en
que nos debatimos, en vez de utilizar la s6lida"
estructura que al Estado Ie dio la Constituci6n
de 1886, nos dedicamos a la tarea insensata de
revivir los mismos vicios y defectos que ella
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
lIuus!lde mano de 1991
erradic6 precisamente para salvarlo, como el
eslablecimienlo de alguna forma de federalis·
mo ap6crifo que mengile la fonaleza de Ili uni·
dad nacional, 0 el debiJilamienlO 0 re.lricci6n
del ejercicio de la aUloridad de que hoy di.pone
el Presidenle, 0 la enumeraci6n de derecho.
ilimilados y aun de.naluralizado. de los ciuda·
dano. para relevarlo. de 10. debere. de solida·
ridad social, 0 eI renacimiento de la discordia
religiosa que enceguece los cerebro, y desala
las pasiones, no e.larfamos haciendo otra cosa
que cavar Ia lumba donde .erfa sepullado a
cono plazo el orden demoeralico y civilizado
del que hoy, a pesar de lanlaS vici,itudes, .in
embargo, gozamos.
Nue51ros problemas de fondo. pues. no e.~n
aIll. radican en otra pane. y es necesario delee'
larlos pam darles adecuado tralamiento, espe·
cia1meme por eSla Con.tiluyeme. Y consisten,
en .fnte.i" en Ia grave amenaza de que el pals
que ,ub.iste en medio de lanlaS dificullades, de
repente se desplome aquejado de septicemia
generalizada, provoeando una debacle inena·
rrable.
GACETA CONSTITUCIONAL
En efeclO, bajo la inOuencia de idea. y practicas
malsanas, el bien comun ha .ido .ustituido por
el bien particular. Y la polltica, que todo 10
inOuye, ha dejado de ser una actividad noble y
austera de servicio publico. para convertirse en
un Moloeh in5aciable que exige gaje •. preben.
da •• buroeracia. contratos. resoluciones, negocio
•. en nombre de meritos e1ectorales 0 exi·
gendas de partido. para .eguir conqui.tando
mayorla •. E. eI gobierno e.purio del c1ienteli •.
mo, que haciendo.e adjudicalario de In.ula.
Baralaria. de la admini.traci6n, ha desalojado
al gobierno constitucional. y se ha apoderado
de 10. recunos que el Eslado tiene dedicados a
la satisfacci6n de las necesidades basicas de la
sociedad, dejando al pueblo en abandono total.
No eo de extrailar que ese pueblo frustrado e
indignado, mire con simpatlas los movimient05
subversiv05 que ofrecen un cambio radical de
5iluaci6n aunque sea con las armas.
Tenem05 un ESlado desfalcado y en quicbra.
lotalmente en quiebra, gobernando a una de.
moeracia sin vinude., cuyas mayorlas amorfas
y venales 10 sostienen, constituyend05e en el
azole del pueblo.
Pagina 3
Alii reside la causa principal de 10 que se llama
la ineficacia del ESlado, con otros feliches que
Ie Implden el aprovechamiento de la colabora.
ci6n colosal d~ la actividad privada, que no
puede 5egUir slendo estupidamente rechazada
Con dano general de la sociedad.
Fuera de un cambio en la orientaci6n de la
polltica, esra claro 10 que aqul realmente nece.
5llamo. hacer: justicia para el cumplimiento de
la ley. gran fiscal. censor publico. educaci6n
~oral con hi.toria patria, cfvica. religi6n cri ••
tlana. responsabilidad familiar, dignidad de
trabajo, dignidad de los empleado. public05,
planeaci6n econ6mica, cancelad6n irrevocable
de 10. privilegi05 iJegftimo. de 10. congre.isw,
y en fin, otras iniciativas que aqul se han ex.
pueno y que son conveniente. por cuanto propenden
a e5tos mi.m05 fine5 y a mejorar nue5'
tra demoeracia.
Dejarfamos asl de desempenar, como algunos
10 pretenden, el triste papel de Er6strato, de
pasar a la hinoria simplemente por haber de5'
truido un templo de nuestra cultura polftica.
Esta es la Constituyente del Consenso
"Si bien esta Asamblea es heterogenea en su composici6n poHtica,
podra ser homogenea en sus prop6sitos nacionalistas".
Senore5 de la Pre5idencia
Seiioras y Senore5 Delegatarios:
ACerlada decisi6n 10 de la Asamblea Na·
cional Constituyente cJ.e escuchar a sus miem·
bros, a efecto de conoeer sus criterios globales
en relaci6n con la Reforma Constitucional que
se tramila. Durante varios dlas. los Delegata·
rios que asi 10 han querido. han expresado con
entera libertad sus ideas respeclO de las tareas
que debe cumplir eSla Asamblea. Cada quien
ha le1lllOtado su voz. Todas las intervenciones
han sido brillames e ilustradas. Unas de impe·
cable corte acadt'mico, otras de emotiva e1ocuencia.
EslaS de penetrame enfoque especiali·
zado. Aquellas de aguda y atinada cdtica. Y en
general oportunas y sugerentes. La ausencia de
originalidad. lanto en los temas como en las
propueslaS, dice muy a las c1aras que en eI
Derecho Publico Colombiano "nada nuevo hay
bajo el sol". Y eso tiene a nuestro entender, dos
explicaciones: una, de tiempo atras se observa
en eI pais creciente imeres acadt'mico y publico
por eslaS materias; y dos. porque los colombia·
nos. desde siempre, eSlamOS en trance de Re·
forma. Para nosotros se ha hecho mas impor·
tante reformar la norma que acatarla. Esta actio
IUd es una constante de nuestra historia politi·
ca, se puede afirmar sin exageraci6n que en el
Congreso Nacional siempre hay en tramite mas
de un Acto Legislativo. Esta circunstancia ha
motivado, que eslOs temas, de suyo propios de
especialislaS, provechosamente hayan traseen·
dido a la opini6n publica. a traves de semina·
rios, mesas redondas, talleres, debates, entre·
vistas, conferencias y publicaciones especializa·
GUILLERMO PLAZAS ALCI[)
da •. A e5to habrla que agregar las 1.500 mesas
de trabajo que como labor preparatoria de esta
Asamblea auspici6 el gobierno.
Esta Asamblea Nacional Conslituyente pasa .. !
a la historia polltica y jurfdica de Colombia,
como la Constituyente del Consenso. Consens<>
que se impone por dos razones fundamentales:
por la nOloria ausencia de mayorias absolulas
capaces de sustentar la intransigencia de parti·
do. y por la ostensible carencia de exclusivida·
des en ternas y propueslaS, al menos en materia
doetrinaria. Se observa originalidad en asuntos
facticos como la sugerencia de revocar el man·
dato al actual Congreso. Pero en aspectos ideo·
16gicos y doetrinarios, y probable mente tecni·
cos y cientificos, Ia mayorla de las iniciativas
conocidas tienen un denominador comun, 10
cual fuerza y facilita el Consenso. Afortunada
casuaJidad polltica que garantiza una reforma
de caracter nacional. Se puede afirmar, enton·
ces, que si bien esta Asamblea eo heterogenea
en su composici6n polltica, podra ser homoge·
nea en sus prop6sitos nacionalislaS.
Y pensar que hemos derramado tanta sangre
para concluir, que "en 10 fundamental". esta·
mos de acuerdo.
La Constituyente: Exceptional option de paz
Me cuento entre los colombianos que piensan
que con la actual CODStituci6n se puede gober·
nar el pais, si hay real voluntad de hacerlo. Es
mas, participo del criterio de que el fallo de la
honorable Corte Suprema de Justicia respecto
del Decreto 1926 de 1990, fue ostensiblemente
violatorio de la misma carta, por las razones
brillantemente expuestas en su salvamento de
voto.
~neralmente se admite que en materia con5ti.
tucionaltodo cambio fundamental implica una
ruptura del orden jurfdico existeme. La raz6n
politica para la viabilidad jurldica de C5ta
Asamblca Nacional Constituyeme se cxplica,
entonces. por la necesidad de crear un mcca.
nismo institucional id6neo, en el cual pudiera
darse efectivamente la paz. Si la Constituci6n
es un Pacto Social. como tantas veces Sf
dicho y aceptado, en la formaci6n yexpediclon
de una Nueva Carta, con I. participaci6n yo.
luntaria y activa de las fuerzas en conflicto, se
daria la excepcional circunstancia, la coyumu.
ra urica. de poder expedir una Ley Funda·
mental, con el concurso y acalamiento de tadas
las fuerzas sociales que constituirfa garanlla y
soporte de legitimidad. La paz en esLas condi·
ciones estarfa alcanzada, y la conquisla de la
paz constituida la justificaci6n politica,juddica
e hist6rica de la existencia y acci6n de la Asam·
blea Nacional Constituyente.
Esta Asamblea tiene, pues. su origen en la ur·
gencia del pueblo colombiano de alcanzar la
paz. Y si aI termino de sus tareas no se han
sentado las bases de una paz real. efectiva y
estable, dolorosamente tenddamos que acep·
tar desde ahora, que el pueblo colombiano esra
condenado. en 10 que se refiere a la conquista
de la paz, a com partir eI frustrante destino de
Sisifo.
La presencia en esta Asamblea Nacional Cons·
titu yente de Alianza Democratica M·19, del
Ejercito Popular de Liberaci6n. y del Partido
Revolucionario de los Tra bajadores, demues·
lra que ruanda hay I'oluntad. la paz si es po·
sible.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Pagina 4 GACETA CONSTlTUCIONAL
QuieraOiosquelasorganizacionesguerrilleras mi companero de f6rmula Senatorial. y hoy
que aun estan por fuera de esta Asamble. Na- Emb"jador en Hungrl •. brillante inteleetual.
cional Constituyente. den los pasos neeesarios a que siempre luch6 por la paz con coraje y hofin
de que se puedan incorporar a ella en for- . nestidad. Colombianos como Alberto Rojas
rna definitiva. Aquf siempre seran bienvenidas. Puyo enaltecen nuestra nacionalidad.
si con ello Colombia consolida la paz. Oebe
quedar claro que eI Gobierno ha heeho. y ahora
mismo esta haciendo. 10 que Ie resulta posible
en aras de la paz.
La paz supone decidida voluntad de parte y
parte. Y sobre todo. de buena fe. Sin buena fe.
resulta inutil toda gesti6n.
Se supone que la guerrilla es colombiana. Si
eslO es asf. entonces. esta guerrilla tiene deberes
(reme al pafs. La destrucci6n sistematica
que la insurgencia viene haciendo de la riqueza
nacional. es un crimen de lesa patria, que mas
parece la acci6n punitiva de un Estado ajeno y
enemigo de Colombia. que la campana a1truista
de unos compatriotas por mejorar las condiciones
de vida de nuestro pueblo. Los darios
materiales que la terca acci6n subversiva Ie esta
causando a la naci6n son gigantescos. Y frente
a esta acUtud vandalica. la Republica no puede
callar, como tampoco puede callar esta Asamblea
Nacional Constituyeme.
Muy largo y cargado de complejidades es eI
camino reeorrido desde la primera Comisi6n
de Paz sugerida y presidida por eI serior Ex
presidente Carlos L1eras Restrepo, durante la
administraci6n Turbay Ayala. pasando por los
gobiemos de Belisario Betancur y Virgilio Barco.
hasta las gestiones que adelanta eI Presidente
cesar Gaviria Trujillo. En este accidentado
proceso se han registrado altemativamente
momemos de optimismo, de confusi6n. de pesimismo,
y de fracasa. Pero eI proceso se reinicia,
una y otra Y~Z, con renovada esperanza,
como hoy aconteee, siempre con eI anhelo de
que por fin se logre concretar una paz estable.
que resulte digna para el Estado y decorosa
para la guerrilla.
Estas alianzas e1ectorales de Liberales can la
Uni6n Patri6tica se inspiraron en el prop6sito
de crear espacios polfticos que facilitaran a la
izquierda subversiva e1transito de la lucha armada
a la lucha constitucional. En otras palabras.
cambiar la confrontaci6n de las armas por
la confrontaci6n de las ideas. "Cambiar la crltica
de las armas por eI arma de la crltica".
Este proceso supon!a. naturalmente. eI gradual
desmonte del aparato subversivo de las FARC
especlficamente, las cuales al iniciarse eI proceso
de paz contaban can 23 frentes guerrilleros.
Infortunadamente pronto se verific6 que las
FARC estaban ampliando decididamente su
aparato subversivo en todo el pals. Y simultaneamente
se desencaden6 por fuerzas paramilitares
y terroristas una acci6n de exterminio
sistematico contra la dirigencia y militancia de
la Uni6n Patri6tica en la mas espectacular y
sangrienta escalada violatoria de los derechos
humanos que conozca la Republica.
Como era de suponer, estos dos hechos dieron
aI traste con el proceso de paz que con tanto
entusiasmo habra impulsado el Presidente Belisario
Betancur.
En estos acontedmientos. como resulta facil
observar. falt6 real voluntad de paz. y Ia ausencia
de buena fe y lealtad en eI proceso. se dio
por partida doble. En condusi6n. estas a1ianzas
e1eetorales que tanto interes y optimismo suscitaron
en los sectores democraticos aI comienzo.
pronto perdieron atractivo y perspectiva polltica.
pues a la hora de la verdad y por los motivos
expresados. a nada practico condujeron. Otra
frustraci6n mas para el pals. Y la certeza de que
sin buena fe y sin honradez entre las partes. a
nada positivo se puede lIegar en las negOOacioProbablemente
la experiencia mas excitante y _ nes de paz.
cargada de enserianzas de mi vida poUtica. fue
la a1ianza electoral con la Uni6n Patri6tica en
los comicio$ de 1986. y si bien en el pafs esta
experiencia poHtica no era deltodo novedosa.
por la epoca y circunstancias en que se dio.
suscitO las mas disfmiles reacciones: desde la '
encendida con dena, hasta la entusiasta exaltaci6n.
Eo el Huila, mi departamento. el movimiento
de la Convergencia Liberal y la Uni6n Paui6tica
convinieron una alianza electoral a nivel de
Senado de la Republica y Camara de Representantes.
unica mente. Esta alianza de inmediato
encontr6 eco nacional. Y en una camparia relativamente
corta. la izquierda conquist6 cerca
de quince curulcs. hecho ~ste sin antecedentes
en la historia polrtica del pafs.
FortaJecer el Ealado, compromilo
de Ja Aamblea Nacional Conatituyente
Como Constituyente nos corresponde dOlar a
Colombia de una Ley Fundamental que modemice
el Estado, y 10 haga eficiente. Esta debe
ser nuestra primera preocupaci6n. La debilidad
del Estado a todos perjudica y a nadie favorece,
excepto a los depredadores de la sociedad y
violadores sistematicos de la Ley. La debilidad
que hoy caracteriza _I Estado es agobi_nte. Na'
turalmente. este mal no es de ahora. ni ha aparecido
subitamente. La dolencia viene de muy
atras. Su debilitamiento en todas sus esferas e
instancias, es el fruto de un largo proceso de
desgaste institucional. poHtico y etico, que ha
comprometido gravemente su legitimidad.
La . Ii. nla electoral Conve rgencia Li beral ), A este respeClo. haec 29 anos, el serior DelegaUno6n
Patri6tica resu1l6lriunrantc en el Huila, tario Alberto Zalamea, en la edici6n numero 49
y 10 pacllldo sc tumpli6 1ealmenlc por las dos de la Nueva Prensa. del 4 de abril de 1962,
partes. visionariamente escribfa:
Aquf debo destacar ante el pals, la rectitud /Dimisi6n del Estado? No es posible disimular
moral y poHtica del doctor Alberto Rojas Puyo, una sc!lsaci6n de alarma ante la decisi6n gu-
Mane. 5 de mano d. 1991
be~amental-anunc!ada el martel puatic)- ere
facilltar armas a los campesinos. para que purdan
defendene de la viofmda-
Lo primero que salta a Ia vista es 1a dimisi6n del
Estado. En ~n JlaIs civilizado. los panicu1ares
no 5<' hacen Jusuaa por mano propia; esa miS16n
mcumbe a las fuerzas del orden.
La I.ucha efectiva co?ts:a 1a vioJenda requeria
u~ mcremem? conSIderable del presupuesto
mibtar. EI regunen del Frecte Nacional no ha
sido capaz de proveer esos fondos: tampoco los
uene pa~ educaa6n. para vivienda. para segundad
social. Descansa tranquiJo. en 1a certidumbre
de que a1g1in dla saldran de Ia Alianza
para el Progreso. Entre tanto hay que esperar.
Pero la violencia no espera, y entonces se necesita
hacer a1go que permita disimular Ia inoperanda
oficial. La Sociedad de Agricultores de
Colombia habla propu~sto esta medida. y aI
hacerlo estaba criticando dicha inoperancia. EI
regimen del Frente Nacional, con absoluta insensibiJidad
moral, acepta Ia propuesta. Admite
con ello que es impotente para garantizar Ia
seguridad de los ciudadanos. y que ellos deben
valene por sf mismos.
Se dice que las armas no se entregad.n sino a
vedno. honorables, avalados por Ia SAC. Es
una garantia. pero insuficiente: una vez que
salen de los anenaJes militares. no se puede
saber en que manos caem. A un campesino
los bandoleros -mas numerosos- se las quitan
facilmente. Desjlues leeremos en la Gran Prensa
que son armas checas 0 cubanas.
Si el Gobierno del serior Alberto Ueras -adamado
como artifice de la paz social y polfticaha
crefdo necesario dar este paso, es porque no
quedaba otro reeurso. Argumento supremo
que nosotros mismos no podrfamos rechazar.
Pero esta daro que. cuando se adoptan medidas
como estas, es porque se avecina Ia cawtrofe".
Como se podra observar, eI problema de Ia
fragilidad del Estado, no es asunto nuevo entre
nosotros, aunque en realidad ahora se ha profundizado.
EI Estado es incapaz de proteger a
las personas residentes en Colombia en su vida,
honra y bienes. Es mas. dada la tremenda crisis
que hoy confronta la fuerza publica, el Estado
no esta en capacidad de protegene ni el
mismo.
A fin de que el Estado que vamos a diseiiar en
la Nueva Constituci6n. a mas de fragi! no nos
vaya a resultar simplemente dedamador. conviene
en que en la Nueva Carta queden daramente
sustentados los principios en que deban
inspirarse las Leyes que consagren los deberes
tributarios de los ciuda~anos. Aqu! 10 ha dicho
el serior Delegatario Alfonso Palacio Rudas:
"toda decisi6n del Estado implica una operaci6n
fiscal". 0 sea que en todos los casos eI
asunto se resuelve con dinero.
La tributaci6n justa y oportuna es la mayor
manifestaci6n de una sociedad realmente solidaria.
Es nec~sario crear desde el hogar y Ja
escuela una concieoci. tributaria. La solidez
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Martel 5 de manu d. 1991
del utado y de SUI I nstitucion •• depende en
mumo de sus rccunDS. EI utado indigente
nada bueno puede nacer. y e.~ expuesto a
soportar indefenso Ia adversidad de todo g~neroo
Gran parte del txito de 10. Estados Unidos.
yen general de 10. palses desarrollados. estriba
en .u disciplina tributaria.
A los colombianol de noy no. caracteriza. hay
que deorlo con entera franqueza. una generalizada
tendencia aI fraude. a la evasi6n. y e.to se
acepta como algo normal.
Yo soy del criterio de que deben severiza ... las
normas relativas a la evasi6n fiscal. ute tema,
naturalmente. resulta antip~tico y poco atractiyo.
pero es de fundamental importancia en Ia
vida de la Republica. EI dinero que no se Ie
paga aI utado en la cantidad y en la oportunidad
en que corre.ponde hacerlo. e. el mismo
dinero que Ie hace falta a otros..condudadano.
para satisfacer sus nece.idade. esenciales. La
evasi6n fiscal e. un crimen contra el pueblo.
SegUn ha trascendido a la opini6n publica. en
estudio que est~ en marcha en Impue.tos Nacionale
•• el poreentaje de evasi6n por concepto
dellmpuesto aI Valor Agregado (IVA). e. del
'6%. dfra alarmante. Para otro. rubros. como
el impue.to a Ia renta. el e.tudio alln es~ lIev1ndo.
e a cabo. pero se sospecha que la. cifra.
est1n por end rna de Ia dtada anteriormente.
La prioridad Ia tieueD 101 ............
Algunos Delegatarios. en venemenlej y brillantes
intervenciones. nos nan bablado de los derechos
de los trabajadores. y de las garantlas
que deben tener los sindicatos. Todo esto es~
muy bien. y su planteamiento 10 encontramos
correcto. Pero no podemos perder de vista en
ninglln momenlO. que el compromiso primordial
de esta Asamblea Nadonal Constituyente
es con tada Ia Naci6n. pero muy principalmente
con aquellos compatriotas que se hallan por
debajo de los niveles mJnimos de subsistencia.
en Ia pobreza absoluta. cuyo numero asciende
a Ia tereera parte del pueblo colombiano. que
no ~enen trabajo. y por 10 mismo no cuentan
con Ia protecci6n sindical. ni tienen acceso aI
techo. oi a Ia salud. ni a Ia eduaci6n. ni a Ia
recreaci6n. Son los desprotegidos y postergados.
Para enos los derechos humanos son una
ficd6n. una simple quimera. u con esta masa
de compatriotas nuestro mayor compromiso.
Porque aparte de ser asunto de elemental justicia.
estos sectores sociaIes. por sus precarias
condiciones de vida. constituyen levadura de
delito. mosto subversivo. fermento de de.bordaroientos
·sociaIes. La que hemos vivido. y 10
que estamos vivien do. demuestra que no esta-
. mos especulando.
NUelItru dn:eIelI:
Gbetoe de ipominia y de oprobio
Tambien quiero Damar especialmente Ia atend6n
de Ia Asamhlea Nacional Constituyente en
tomo de la situaci6n carcelaria. En gran medida
es angustiosa y vergonzosa. Son ghetos de
ignominia y de oprobio. abandonados de toda
sensibilidad cristiana. Los centros carcelarios
que puedan estar fuera de esta clasificaci6n son
GACETA CONSTITUCIONAL
muy pocos. EI Estado ha fracasado en su polltica
peniteneiaria. porque sus circdes son fragiles.
inseguras. surtidores inagotables de violaci6n
de los derechos humanos. y activos multiplicadore.
de las conduclaS antisociales. Son
autenticas escuelas del crimen. donde se generan
factores negativos para el Individuo. para
la Familia. y para la Sodedad.
En poca. institueiones se da un mayor divorcio
entre la teorla y la practica. entre la Ley y la
realidad. que en nuestras drceles. La debida
atenci6n a este problema no puede escapar a
esta Asamblea Naeional Constituyente. pues
quer~mo.lo 0 no. en 10. centros peniteneiarios
se ge.ta y de.arrolla gran parte de nuestra tragedia
social. E.te faseinante tema tendda que
ser objeto de las i1ustradas deliberaeiones de la
Comi.i6n Quinta de e.ta Asamblea.
II !staclo Democr6tico y de Derecbo
Deseo una reforma constitucional en la que se
e.tructure un utado que garantice la exi.tencia
de la democracia partieipativa. representativa
y de consenso. en la que sean compatibles
la justicia. la Iibertad.la seguridad y la paz. Una
democracia en Ia que opere un Congreso laborioso
y tticamente diafano. que constituya pulm6n
crltico y moral de la naci6n. y donde exi.stan
partidos politicos organizados. responsables
ante eI utado. ante el pueblo. y ante .us
propios aftliados. partidos que sean voceros
confaables de la opiniOn publica porque Ia interprOlan
y representan verazmente. Una democracia
pluralista en 10 politico. en 10 social.
en 10 econ6rnico. en 10 etnico. en 10 religioso y
en 10 cultural. en Ia que se garantice Ia Iibertad
de prensa. y se pueda ejereer con fundamentos
constitucionales y legales. Ia oposici6n al gobiemo.
y el derecho de replica. Un utado con
un gobierno fuerte pero controlado. y con
unoa jueces bien seleccionados. hien remunerados.
respetados. acatados. decorosamente
asistidos. Un utado. en fin. en el que el maestro
ensefle. el policla vigile. eI alumno estudie. y
eI trabajador Iabore. Un utado donde eI ciudadano
sea Iibre pero responsable. Un utado
en eI que eI ciudadano simult1neamente ejerza
sw derechos y cumpla sw deberes. Todo esto
es 10 que yo entiendo como utado democratico
y de Derecho. donde Ia Ley expresa Ia voluntad
general. y e. de obligatorio cumplimiento para
gobemantes y gobemados.
La lecci6n hislllrica de 101 nueYOi tiempoa
EI colosal fracaso del comunismo en 10 poUtico.
en 10 econ6mico. en 10 social. en 10 cultural y en
10 etico. es la m~ grande lecci6n hist6rica de
nuestro tiempo.
Pagina 5
va era hisl6rica. EI entusiasmo fue universal.
La esperanza generalizada. Los humildes
creyeron lIegada su hora redentora. La Revoluci6n
transform6 la ~ poca . En gran parte se
modific6 1a concepci6n de la vida. del mundo y
del hombre. En muchos palses se eclips6 la
noci6n de Dios. Los conceptos de democraeia.
justicia. libertad. seguridad y paz adquirieron
nuevas connotaciones. form as y significados.
Pero todo esto apenas alcanz6 70 anos. muy
significativos en la vida de un pals. pero muy
pocos para eI calendario universal.
(Que sucedi6?
Lo que tenia que suceder, porque eI Poder
corrompe. pero eI Poder absoluto. corrompe
absolutamente. como tantas veces 10 ha demoslrado
la historia. esa desdenada Maestra de los
pueblos.
En la URSS primero. y luego en los palses satelites.
el partido comunista. eI solo. se convirti6
en Estado y en Gobierno al mismo tiempo.
Otra opci6n polltica distinta de la suya no era
posible. La oposici6n no exisUa. y la sola crltica.
asl fuera academica. se calificaba como conducta
antipatria. EI Gobierno era 10 que dijera eI
partido. EI parlamento aprobaha 10 que ordenaha
eI partido. Y 10. juece. fallaban seglln 10
decidiera eI partido. La economla. naturalmente.
10 que determinara el partido. iY quitn
era d partido? Bueno. 10 que el partido dijera.
EI poder era vertical. hermetico. homogeneo e
inapelable. No emlla Iibertad sino para abedeeer
y callar. La opini6n publica tampoco exis!
Ia. No habla .ino una verdad.1a verdad oflCial.
la incontrovertible verdad del Gobiemo. EI Estado
no admitla confrontacione •. Toda Ia
URSS. un pais continente. fue aislado del mundo.
Era diffeil entrar a los extranjeros. y casi
imposible salir a los Sovitticos. exeepto. daro.
.i se era del Gobierno. En esta forma se cre6
una potencia mundial en eI orden politico y
militar. pero endavada en un pal. tercermundista.
valga decir. subdesarrollado. en 10 econ6mico.
comercial y.tecnol6gico.
INadie podia creerlol
Cuando en aras de Ia glasnost -1a transparencia
informativa- el pueblo de Ia URSS empez6
a conocer poco i poco la realidad de su pals. y
del resto del mundo.1a sorpresa fue inmensa.
,Quien podia creer. por ejemplo. que en Ia
patria del Gran Lenin. ese genial y esforzado
ap6stol de la pobreda universal. en la Republica
Federativa Socialista de Rusia. hubiesen m~
de cincucnta millones de personas. por debajo
de los niveles minimos de subsistencia?
EI Estado Marxista-Leninista. se derrumb6 solo.
sin que nadie 10 motivara. a causa de su
pro pia ineficiencia. La falta de libertad 10 asfixi6.
La ausencia de crftica 10 agot6. La carencia
de opciones 10 limit6. EI dogmatismo 10 esteriliz6.
EI monopolio del poder 10 corrompi6. La
dictadura 10 deshumaniz6. Y la confrontaci6n
con Ia realidad 10 derrot6.
Y iquien podia creer. en via de ejemplo. que el
desastre ecol6gico de I. URSS fuese de dimensiones
incalculables. dado que el suelo. las
aguas y eI aire eran de exclusivo dominio y uso
del Estado?
Y , quien pudiera creer. que en el primer pals
socialista del mundo. donde se condenaba la
explotaci6n del hombre por el hombre. hubiesen
millones de ninos en la orfandad?
En 1917. con la Revoluci6n Bolchevique. se
pens6 que la humanidad ingresaba a una nue-
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Pa~ 6 ---------------------------- Manes ,; d~ marzo dt 199,
lor~' se
rstoc. r'"
pa ex-ier
-
~qui~11 ~01J Imagmar. '1u~ c!l un pal\ desarrr.
l1ado cultural \ "len,! Icam(;:"nte. 'como h:t
L . hm >ea Impreaecil>le no solo 'u pI e,enre
\ )u futuro. )1nc tambien ~u pasado. por
wanto que I. hlSl"rid soneuca a partir de j 91 i
ha Sldo sen,iblemente ra!sead"
ESlas insolitas realidades que hoy vive la URSS.
no tienen sino una explicacion: la ralta de libertad.
La ralta de pluralismo. La falta de oposicion.
La ralta de crftica. La carencia de opcio·
nes poUticas. economicas y culturales. Y en una
palabra. la ralta de democracia. Y la lIamada
Perestroika, 0 reestructuraci6n, es eI inmenso
esfuerzo que desde 1985 viene haciendo el
pueblo sovietico. una vel que comprendio su
realidad )' se resolvio a rectificarla. superando
para ello muchfsimos obsLiculos de diversa fn·
dole. a fin de conquistar la libertad. Ia democracia.
elrospeto a la Ley y a la dignidad de la
persona humana. en una lenta y diflcil marcha
haci. eI Estado de derecho. hacia el Estado con
bases hum.nfsticas.
iHabra calculado la humanidad. y la propia
URSS. el clevado pretio que en los diferentes
ordeMS tendra que pagar el pueblo sovietico. y
por cu~nto tiempo. a causa de los errores y de
los horrores a que 10 condujeron los pontlfices
de Ia dictadura del proletariado?
[I E'l.do l.-qule' UI} efieieme adrninLllr _
ri6Tt , rerf)[mas 1;Ju~ Iii exp n~hn.a. hie"1l no
v pllede em"'j.a p "I,) e!,j Co!um I \' b
~1t=ilIplesu E~tado. SIn!"' 'lu v t".ac n~ ;:!".afi 'HIlt .. ,
en un a - "burocrafl;t vctmp,ra" \" e: desgrei1'1 n! io m
Jo~ administrarlme. La corrUp la arma • creyendo en un futuro de
Itbertad. dignldad ) democracia para todos.
para continuar la defen a de un., oplntones
lOn la fuena de la; Idea,) para no negarno' la
Irrepelibl- po"bilid.rl de parllClpar en c;t<· hi,I(,
n "evenw. f renll ai, UJI el Pdr, cnlern Ilene
gl atlde, cxpee (;111\" e,perando que re,ucl,.
I> P''' II) tnl·"O al" I I. ,fa para lugl .. rlc 10-
printJpal(.' tnohlc.:n,a} gilt' \I\imo~ I(h olnm·
Jost M. ORTIZ SARMtENTO
bianos. Entre estos. llaman particulannente la
atencion los relacionados con eI Congreso. el
Estado de Sitio. los Derechos H umanos. lasFuerlas
"rmadas ) la Justicia. Temas estos
irente a los cuales esta Asamblea tiene que pronunClarse
con claridad. con decision. con hechos
que abran las pue.-tas de manera defimti·
va al futuro que todos esperamos. que haga de
la nueva ConstituciOn cI pacto de paz que ambiciona
la patria para avanzarde manera irrever·
sible al desarrollo y progreso de Colombia.
Setiores Constituyentes. La disc usion sobre eI
articulo 121 de la Constitucion aClual. en esta
Asamblea tiene un doble lmeres: el primero
deriva del hecho de qU( en muchos aspectos.
esa pequena norma ha sido ) puede seguir
~ i endo. la ConsUtuCl6n real mente , igcntc y cl
-segundo wnmlC en que cllratamicnlo que se
M a OIro~ tema' daves. tale, como Justicia.
rongrc"l. Fuerlas Atm,da>. detcl minara en
ultima,,, "' pO\lble ."'p,·ral J. practica colomhian.
cl, 0 lbernal , "' ESlado de Silio. 0 si pOL
cI conltano eI btacl, d, StllO sera definitivamente
('on\tIlU( IOnltli,acio, En C.!ile ullimo caso
no quedara mas remedio que convocar a otra
Constituyente. tarde 0 temprano.
Una Constitucion que prevea que el gabinete
ministerial pueda estar pennanenternente Iegislando.
juzgando a civiles a traves de las Fuerzas
Annadas. suspendiendo penonerias juridlcas.
censurando la prensa 0 prohibiendo huelgas
y manifestaciones. confiesa con eIlo su des·
confLAnza tanto en la pobIacion como en las
instituciones estatales, asf como su incapacidad
para lograr resolver de manera adecuada las
causas sociales. poUticas v economicas que generan
estas expresiones populares. En tal caso
mas que permitir la suspension cronica de garantfas
constitucionales por parte del Ejecutivo.
lo adecuado serfa atender las razones de esa
desconfianla v de esa tncapacidad.
Como es de lodos conocido.la ac(ual Constitucion
Colombian'a preve dos c,ento, en 10 cua· ..
Ie. puede declara .. e el Estado de Sitio: la guerra
exterior), la conmocion interna. En cual·
quiera de 10' dos casos la declaracion de guerra
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
W-S etc autorizarla a\ Senad" ,
_ til ' cl .8[11 I q~, ordll,,1 he' la -:.r·
r .. nm) Intc:no-" mu('ho~ lral,J.dl~~
han ntoodid n d l ~turbio IIllernn de ta e
prorYCl~n q' e , .. emeJen a las produrida
ptJr una guerra externa Erl la practica, ~ir
embargo el tsradn de Silio ha ,ido declarado
en Colomb.. r pertu rb3Clone, sociale. qu
no lIcnen (SiU caracterfsticas: manifestacione.:.
e,Iud,amil." ap-ilaci6n polilic-d, espedalmen·
Ie entre 1965 \ 1975, una huelgadelos emplea·
dos del Seguro Social entre 1976 l 19820 el
repudiable asesinato del Ministro de J usticia en
1984, que dio lugar al Estado de Sitio que aun
hoy nos rige. La pr~ctica del regimen politico
ha ido relatiyiu,ndo este conceplo de conmo·
d6n interior. EI Congreso de la Republica, al
que compelena dedarar la responsabilidad gubernamental
por haber dedarado el Estado de
Sitio sin que se reunieran las condiciones para
eUo, nunca se ha pronundado en contra de la
imposici6n del Estado de Silio en tales eyentos.
Esta desyalorizaci6n del concepto de conmoci6n
interior, como equiYalenle en su grayedad
aI de guerra externa, ha sido uno de los medios
a trav~s de los cuales en Colombia se ha hecho
posible que se mantenga durante perlodos prolongados
en Estado de Sitio, asumiendo de esta
manera eI Ejecutiyo la caracterlstica de legislador
permanente y abarcando cada Vel lemas
mas amplios: aumento de penas, tipilicaci6n de
delitos, modilicaci6n de c6digos de procedimiento
0 cambio de la eSlructura orpnica de la
rama jurisdiccional, de e5la manera 10 que eS
excepcional se ha conyertido en norma y 10
normal en excepcional. manifestando en la
pnctica la existencia de dos Constituciones en
Colombia: la formal que muy pocos conocen y
nadie aplica y la realmente exislente, generada
de la aplicaci6n permanente del Estado de Sitio,
por 10 merlos en 34 de los ultimos 41 anos
ha vivido Colombia bajo e1 regimen de excepci6n.
1.ograr superar la tentaci6n simplista de maquillar
eI Estado de Sitio es un reto que tenemos,
diflcil pero no imposible de lograr, para 10
• cual debemos entender eI Estado de Sitio como
algo que no debe existir en una verdadera democracia
m~ que para hacer frente a momentos
muy especiales en los que el Gobierno no
pueda realmente garantizar Ia seguridad de la
pobiaci6n y de las instituciones por Olro de los
medios que Ie brillda la democracia.
, Para que nos sirve incorporar a la Carta Magna
una serie amplia de derechos y garandas
ciudadanas, si de manera permanente se van a
ver suspendidas por la declaratoria del estado
de emergencia>, I
largo de nueSlra vivenCla particular y de la d.
Olros compalflotas.
Senores Constituyentes:
La democratizad 6n del pals exige, como uno
de los principales componentes una reforma
democr~tica al regimen de Estado de Sitio. De
nada vale promulgar una carta de derechos
pr6diga en bondades y prolija en ardculos, si
dejamos intacto, 0 sola mente maquillamos, dicho
r~gimen . Si esto ultimo acontece, estaremos
cayendo en un constitucionalismo demag6gico
y engailO5O. Pensar que distinguiendo
entre situaciones leves. graves y gravlsimas de
turbaci6n del orden publico podrla lograrse un
uso mas racional del Estado de Sitio en Colombia,
es perder de vista que esta soli5ticaci6n es
m~s propia de las dictaduras que de la. democracias.
La aspiraci6n de las mayorfas nacionales e. que
esta Asamblea restrinja aI maximo el uso del
r~gimen de excepci6n. Si eI cancter seriamente
excepcional del Estado de Sitio se asume en
profundidad, no debe ewtir inconveniente alguno
para concretar una norma constitucional
realmente innovadora que fortalezca bajo su
imperio los poderes de polida del Ejecutivo
pero que prohlba 5U poder legislador.
Contrariamente a Ia creencia de que el Estado
de Sitio debe convertir aI Ejecutivo en un legislador
extraordinario,lo cual ha demostrado en
eI pal. ser poco elicaz adem~ de arbitrario, los
poderes de emergencia se concretan regularmente
en la suspensi6n de unos cuantos derechos
Msicos: aqueUos derechos cuya vigencia
impide durante un corto tiempo eI control de
un orden gravemente perturbado. Se lrata de
situaciones casi incontenibles, generalmente
subiw, como una imurrea:i6n, un amolinamiento
0 una conspiraci6n. 1.0 que procede en
tales casoo no es dicw icyes para juzgar a los
~esponsables 0 para regular Atuaciones fUlOras.
EI disturbio baiicamente se contiene mediante
medidas de poIida que recaen de ordinario,
en primer termino, sobre los derechos
de reuni6n y de circulaci6n. Su duraci6n no
podr'> ser superior aI tiempo necesario para
restablecer la calma, maximo 3 dlas. EI resto de
situaciones que corresponden a manifestaciones
grdVes pero recurrentes de delincuencia y
que causan zoIobra pero no amenazan inminentemente)
a paralizaci6n 0 la desintegraci6n
de lasociedad, no son susceptibles de ser enfrentadas
con medidas de emergencia sino con
dispositivos de largo plazo, que por consiguiente
escapan a la naturaleza del regimen de excepci6n
y que tienen que ser atendidas con los
mecanismos ordinarios del Estado, De hecho
er Colomb" lo que ha ocurrido '" eso: desp~
i:a"" buena pdnc de io, m~~msm{l., orama l
ai Eje( .it \... u. Jas
ea· r.' 1 n
ies E. re5~t:.arl(
EI verdadero poder Instrumental dt. "",do de
Sltio, en ,'e, d, I. pOlestad del EjCCllti"O ' ,_
legislar debloria ser el poder de poilcia, me.
diante ei eual, en situaC1one~ tealmente f:xcepdon
ales y transitorias, pudieran suspenderse
unos pocos dereehos cuidadosamente seiialados
en la Constitud6n, cuya vigencia fuest restituida
tan pronto como fuera posible. EI resto
de atribuciones es un espejism,o que no solamente
no rt suelve los verdaderos probkmas,
sino que perviertt imperceptiblemente eI ejercicio
del poder y que contribuyt a socabar_las
bases de la convivena..
Por el contrario la Constiluci6n que vamos a
elaborar debe acercar el poder a sus verdaderos
dueilos: la comunidad. garantizando Ia
convivena. nacional y desmilitarizando Ia vida
ciudadana.
Porque tfectivamente, seiiores Constituyentes,
no bastarla plasmar en el ardcu\o 121 una regulaci6n
acorde a su naturaleza excepcional.
Para que ella realmente opere se requiere robustecer
los medios democnticos de desenvolvimiento
de Ia sociedad colombiana. EI cancter
excepcional del estado de sitio no estriba solamente
en su duraci6n, sino en Ia restricci6n de
derechos que en su nombre It haec. Si en Ia
Constituci6n se reducen de manera pennaneno
te garandas judiciales, como parece hacer el
proyecto del Gobiemo en aras de Ia lueha contra
el narcotnflCo Gueces y sumarios secretoa,
investigaci6n penal dirigida por eI Ejecutivo en
vel de los jueces, inveni6n de Ia presunci6n de
inocencia), se convertin defmitivamente en ordinario
uno de los aspectos principales de Ia
pnctica de estado de sitio que hemos padecido
en estos anos. Si Ia reforma del Congreso se
limita a hacerlo mas eliciente. con descuido de
Ia sintonla que deba tener con Ia mayona de Ia
poblaci6n, no tendran ninglin signifICado importante
el hecho de que se k asigne Ia deliberaci6n
sobre los fen6menos cr6nicos que actualmente
lrata el Ejecutivo por medio del estado
de sruo.
Y si las fuerzas armadas no son materia de una
redelinici6n democratica de sus objetivos y
practicas en relaci6n con Ia pobIacion, poca
tra5cendencia trendrn eI que la nueva norma
sobre estarlo de sitio diga 10 que diga.
EI pals necesita que las fuerzas armadas abandonen
la doctrina de la ~guridad nacional ajena
a nuestros principio; nacionalistas y retomen
un sentido acorde con nuestra tradici6n
boli\'ariana, ademas deben recuperar su funci6n
constitucional de defensa de la soberama
nacional, alejandose de las responsabilidades
de orden publico y de policfa que err6neamente
se les ha ido asignando. que recuperen la
relaci6tl armonica con la comunidad \' dism ·nu
yan SU tamano a las proporciones necesanas.
para asumir la defens" del pais de cualquier
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
~na8
agrni6n faranea. ~ r.qui~r~ ad.m~s 10 limita·
ci6n dd fu~ro militar a los delitos .slrictam. nl~
mililMn taI~ como: 10 d.~rci6n y la insubor·
dinaci6n. igualm~nl~ ~ requi~re su d~pura.
ci6n y ~tructuraci6n d~mocratica retirando
~I lervicio o los ogenl~ estatales comprometi.
dos CD vioIaci6n d~ los d~recltos humonos y las
pranllas ciucladanas. u poUtica de defema
nacional y d~ orden publico debe diKutirse
cirmocralicamente entre todas las fuernu vivas
del pals. u polida tiene qu~ recuperar su pa'
pel ~ f~na dvica. desmilitarizando sli fun·
cionamimto y orpnicidad y adscribiendola de
nllftO aI MiDiat.erio d~ Gobiemo.
Mucha Ie ha hablado ad de las reformas qu~
neasita Ia administraci6n de justicia en Colom·
bia. Compartimos estajusta aspiraci6n. pero es
neusario diKutir que tipo d~ fonalecimiento
de Ia justicia es eI que se quiere para hacer
frmle a Ia crisiI de derechos humanos y la
IilUa06n ~ impunidad. Una estrategia democmica
de mocIernizaci6n judicial no debe fun·
... eo peligroeas medidas autoritariu. tilles
_ las juriJdiccionrs ~ exccpci6n. las Jeres * ilia poIida. Ia creaci6n de grandes detectiws
_ d ,iIcaJ GeneraJ 0 los Jueus sin ros-tro.
sino CD eI fonaJecimiento practico ~ la
auIODOIDIa judicial, mediante criterios ordina·
GACETA CONSTITUCIONAL
rios y no ~xcepciona1es, e5tfucturando un cuer·
po civil de investigaci6n a su servicio y dOlando
a la Rama de amplios recursos financieros y
teenicos que esta pueda manejar aut6noma·
mente. EI verdadero revolc6n aI sistema judi·
cial colombiano no consiste simplemente en
pasar del sistema inquisitivo alsistema acusatorio,
sino en d~miJitarizar la investigaci6n judi.
ciaI.
EI fonalecimiento de Ia justicia ordinaria y de
las entidades civiles de investipd6n, la pros·
cripci6n de las jurisdicciones especiales.1a limi·
taci6n drutica del cstado de sitio y la reestruc·
turaci6n democritica de las fuernu armadas
son algunos puntos esendales que necesitan
consagrarse para que la situad6n de derecltos
humanos mejore sustancialmente y para que la
Asamblea Constituyente no ~ convierta en el
patrocinador de una r~tructuraci6n autorita·
ria del regimen poUtico colombiano.
Gran parte de Ia "debilidad" del cstado colom·
biano reside en su incapacidad para distanciar·
se de los intere~ de los sectores dominantes a
fm de IJevar a cabo poUticas favorables a las
grande! mayorlas. All, debido a su debil capa'
cidad de mediaci6n social y poHtica, el regimen
poUtico ha recurrido crecientemente a las me;
Mona 5 de IIIInO de 1991
didas de excepci6n y aI tratamiento be1ico del
conllicto social. Loa resultados cstjo a Ia vilta:
profundizaci6n de la crisis de legitimiclad, au.
mento de Ia exclusi6n social y poUtica, creaci6n
de marcos legaJ~ y politicos que favorecen los
atropellos oficiales. Por eso el remedio de la
modernizaci6n autoritaria puede resultar
agravando la crisis colombiana. De alii Ia im.
portanda de impulsar refQ,nDas constituciona.
les que posibiliten un pacto de ampliaci6n democritica
y permitan encontrar saJidas democ~
ticas a Ia actual violencia.
Seiiores Constituyentes:
Los colombianos esperan que asl como en Ia
vieja canci6n del maestro Escalona "el toro deja
su huella en ellodo en forma de coraz6n", esta
Asamblea deje su huella en Ia historia de C0-
lombia como la Constituyente de la vicla, de la
paz y ~ Ia reconstrucci6n de la unidad nacionaI.
EI pueblo colombiano nos ha planteado
este reto. jAhora, nosotros tenemosla pa1abral
Mucha! gracias.
Febrero 22 de 1991.
Vivimos los momentos mas dolorosos y
dificiles de nuestra historia
"Como ya nos hemos echado bella durante varias decadas, con resultados conocidos,
vale Ia pena sentarse a echar lengua".
V ivimos crftico periodo de verclaMra
"perra oaaviana". II orden p6b1ico,Ia convimKia
ria sepridad ciudadana no Ie habIan
YiIto WI aIJ.eradoe como ahara ni las manifesta·
ciooes de Ia vioImcia tuvieron antes tales repercuaiones
CD Ia vida poIflica, econ6mica y
-aJ del pals. SimulUncamente, nunca Ie ha·
IlIaD cIesarroIIado WI numerous y diaImiIcs
atratepa, t.kticas y procedimienlOl para con·
sepir Ia paz.
Se diaIop Y Ie negocia, 0 Ie ofrtC~ diaJopr y
nepiar. Dincta.mente 0 a trave. de comisiones
de!ignadas por las "partes" en conflicto. 0
por intermedio de voceros de esas mismas par.
tes 0 de terceros que ofrecen sus buenos ofi·
cios. Inclusive, a trave. de comunicados de
prema. Tambien Ie expiden medidas que mas
pareeen un indulto que no Ie atreve a decir su
nombre porque Ie van modificando de acuer·
do con las necesiclades del momento y los inte·
reses de sus presuntos beneficiarios. ~ crean
instrumentos excepcionales, con identico prop6sito:
servir de escenario para Ia reconcilia·
ci6n nacional.
A pesor de tan loables esfuCTZOS, nunca se ha·
bra combatido tanto ni tan intemamente. Por
C10 vivimos los momentos m ~ dolorosos y din·
ciles de nuestra hinoria. ~gura m en te nos falt6
clariclad y no supimos a tiempo que era euCla·
JAIME CASTaO
mente 10 que busdbamoL Perdimos valiosas
oponunidades. Nos faltaron voluntad y deci·
si6n. Casi siempre lIepmos tarde. De ahf que
hayamos Irnninado atrapados en la ambigile·
clad yen las arenas movedizas de la confuoon:
anhelamos Ia paz pero hacemas la guerra.
E1 ya casi cr6nico reto subvenivo que afronta·
mos obedece. ante todo, a problemas funcla·
mentalmente poUticos, y requiere, por tanto.
¥lluciones prioritariamente poUticas.
E1 Maestro Echandra sentenciaba: "Ia gente se
entiende echando bala 0 echando lengua". C0-
mo ya nos hemos echado bala durante varias
decadas, con r~ultados conocidos. vale Ia pena
sentarse a echar lengua.
u guerrilla, que persigue eI poder sin escro·
pulos ni reservas. con eI solo Umite de su propia
moral revolucionaria, debe aceptar que no al·
canzara su prop6sito ultimo: la implantaci6n
de un regimen politico, econ6mico y social dis·
tinto del que prefiere la imnen .. mayona de
los colombianos. Us razones para que asl 10
asuma son multiples y de distinto orden.
En la Olra orilla. los partidarios de la soluci6n
militar, deben haberse conveneido, igualmen·
te, de que Ia victoria nunca estuvo ni cstan de
su \ado. No por limitaciones estrategicas, tXtj.
cas 0 presupuestilles de nuestras fuerus arma·
das y cuerpos de sepridad. Mucha menos por
limitaciones persona1es de sus miembros. Sen·
cilIamente por razones estructura1es vincula·
das aI origen. naturaleza y aIcances del con·
nieto.
EI General VaJencia Tovar advierte que elsostenido
agravarniento de nuestras situaciones
de insepridad se debe a que persistimas "en Ia
idea de combatir los grupos en armas con las
armas, dentro de Ia noci6n simplista de que Ie
trata de una confrontaciOn belica, desestiman·
do las leeciones de tantos aDos. Dentro ~ este
criterio se ha dejado la soluci6n a las Fuerus
Armadas, olvidando que un conflicto de natu·
raleza poUtica, social. tCon6mica e ideol6gica.
no puede solucionarse por eI uso solitario de Ia
fuerza ".
Por razones que no cs del caso analilar ahora,
no hemos podido derrotar militarmente a la
subversi6n ni conservar la paz. Acaba de decir·
10 Alfonso L6pez Michelsen: "Entre nosolrOS
las armas no han conseguido preservar el or·
den". I ndependientemente de la estralegia
empleada -de mano tend ida, de pulso firme 0
de los do!- los efectivos de la guerrilla y eI
numero de sus frentes han crecido notoria·
mente y mejorado su implantaci6n regional.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
AWl aundo en diftnaJ oponunidade. las
Fuenu Anaadu ban deamantclado algunas
de Iu orpniaac:ionea guenilleru y recuperado
lot terTilOrioe por ~ dominados, IU victoria
110 ba lido cleftnitiva porque bien pronto Ia
IUbftni6n rnpareu, regada como maneha de
ete IObre Ia ~fla nacional, golpeando
con talco arrojo Y deciaiOn, que cn:a drsconcierto
y jultifada alarma.
No" ........ illldblcloaal
Ante uNaciones como las que erea la eacalada
IUbftraiva de las 61tinw aemanas, los panidarioI
a ultranzl de Ia IOluci6n de fuerza, podrlan
IOlicitar que a la respuesta miJitar se sume
Ia IUprai6n de lot den:chOi y garandas que
a IU juicio Iimiten Ia acci6n de 101 cuerpos armadOi.
All el utado obtendria 101 resultadOi
que no ba pocIido alcanur a lra~1 de 101 mediOi
autorizadOi por eI ordenamiento jurldico
ordinario. De tal modo Ie abriria pa~ntesis
indefinido en el tiempo aI ~gimen con.titucionaI
y democrjtico que nOi gobiema y Ie legitimarfan
101 enfrentamientOi con la poblaci6n
civil, las detenciones masivas: Ia tonura, 101
allanamientos indiscriminados, Ia violaci6n de
los dem'. derechos humanOl, las desapariciones.
Pero como quienes aconsejan e.trategia parecida
no pueden garantizar que de esa manera
logremos relOnante victoria militar ~ntre
otras razones porque nueslra rcalidad geopoUtica
no es igual a Ia que vivian 101 ~ del
Cono Sur, cuando en elloue aplic61a f6rmulaIa
idea no ha becho carrera entre nOSOlJ'Ol. Por
eUo no existen grupos de opini6n ni organizaciones
que defiendan eI sacriflCio de nuestro
estado democrjtico y de nueslras formas pluralistas,
a cambio de un pmunto triunfo miIitar
IObre Ia lfIIerriUa.
Va. _ ~ para la"la poUlica
Si el conflicto no es meramente poIicivo ni militar
y si no ae ha logrado ni lograri superar
mediante IOluciones de fuerza -puesto que,
• como 10 escribi6 alguien que toma asiento entre
nOlOtros, "esta guerra no se acaba con el
exterm'inio de los insurgentes ni la daudicaci6n
del ejercito"- vale Ia pena in.istir en la conveniencia
y necesidad de darle una nueva oponunidad
a las propuestas poUticas, a menos, claro
esta, que queramos prolongar indefinidamente
eI enfrentamiento armado. Los renuentes a
una paz negociada deberlan recordar Ia observaci6n
de advenidos analistas de este tipo de
confrontaciones: ruando eI Estado 00 gana Ia
guerra, la pierde, y cuando Ia guerrilla no Ia
pierde, Ia gaoa.
Celebro por ello que eI Gobiemo y la Coordinadora
Guerrillera hayan dccidido dialogar.
Conviene tambien que cesen las hostilidades y
el terrorismo. La opini6n publica espera que se
silencie eI eco de los fusiles y terminen 10. atentados,
aun cuando asl no se haya convenido
previa ni formalmente. Con raz6n alguien anot6
que no se pueden mezdar eI dialogo y las
armas, pue. se corre eI alto riesgo de que estas
terminen convenidas en el argumento decisivo.
GACETA CONSTITUCIONAL
La AambJea CoJUtituyente,
uaa apo_ poT Ia paz
Con nue.tras decisiones debemo. poner de
p,resente Ia volu.ntad, el prop6.ito y la inten-
06n de paz conSlgnado. en Ia primera declaraci6n
publica de la Asaroblea. Desde luego, sin
desbordar eI u~ de nuestras atribucione. puramente
normallvas y de caracter constitucional,
lo que ocurriria si, por ejemplo, pretendieaemos
asumir el manejo del orden publico
asunto de Ia exdusiva competencia del eo:
bierno.
En esta tribuna Ie han analizado practicamente
todas las dccisiones que puede y debe adoptar
la Asamblea como decisiva contribuci6n suya aI
logro de la paz. La primera aparece en eI Reg1amento
~a. aprobado. Mediante eUa, se asegura
la partlopaa6n en nuestros tra~OI, con
den:cho a VOl y voto Y sin limite en el tiempo
para efectOi de su incorporaci6n, de representantes
de las organizaciones guerrilleras que
efectivamente se vinculen a un proceso de paz
y se desmovilicen.
Las otras determinaciones que con el mismo
fin debemOi tomar, Ie pueden mumir en cin-co
cap/tuIOl: .
PRiMERO
Democntiru Ia ricla poUlica
delaNKi6a
Tenemos un siltema democrjtico mtringido.
Sus limitaciones Ie deben, UDal veces, at tambien
escaso grado de desarrollo econ6mico y
social que hemOi aleanuelo, y otras, a carmciaa
institucionales.
Para ampliar aun mb el regimen que con tanto
esfueno hemos construido y mejorado, es necesario
crear espaciOi y canales que perrnitan
panicipar W1idamente en Ia vida publica a las
penonas y organizaciones que tengan v0caci6n
democrjtica.
5610 si distribuimos las oponunidades que los
.istemas politicos deben poner a disposici6n de
los ciudaclanos, y .i colocamOi en iguatdad de
condiciones a todo. 101 interetados en Ia competici6n
democrjtica, nadie tendra que expresane
a lraves del abstencionismo, eI cuestionamiento
hostil, el paro dvico 0 Ia protesta armada.
Para lograrlo, no es necetario arudir a los
extremos que contiene uno de los proyectos
IOmetidos a nuestra consideraci6n y en eI que
se reglamentan las mU disfmiles dases de votaciones.
En primer lugar, las relativas a Ia elecci6n de
funcionarios e integraci6n de corporaciones
pubticas. Tambien las que permiten revocar eI
maodato de algunos e1egidos.
Luego, los referendo. que se conyoquen para
derogar una ley, una ordenanza depanamental
0 un acuerdo municipal; decidir Ia suene de
un proyecto de ley; pronunciaise sobre iniciativas
que se IOmetan a estudio de las Asambleas 0
de los Concejos; y conYertir en reforma constiwcional
~n proyecto de acto legislatiYo.
P~gina 9
Tambien, para dccidir Ia COnY0C3toria de una
Asamblea Constituyente, auscultar el sentimiento
ciudadano sobre un tema de lrascendencia
nacional 0 resolyer asuntos de caricter
regional y local.
Por ultimo, para ratificar 0 n:chazar las reformas
que restrinjan 10. derecho, que la Nueva
Constituci6n consagre.
Tanta.' el~ciones -