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El Católico - N. 7

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  • Año de publicación 01/11/1864
  • Idioma Español
Descripción
Citación recomendada (normas APA)
"El Católico - N. 75", -:-, 1864. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3687973/), el día 2025-08-10.

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El Católico - N. 77

Por: | Fecha: 22/11/1864

:EL1 CA ~Ot;IOO. AÑO II. Bogota., 22 de no.,-iembre de 1864, NUMERO '77. ==~==================~====================~==============~==========- 1 (/}IJ. '(P(/)[l)[l(f) (/)~ ~~ mision que lo coloca cntl·e Dios i la humanidad. 1 Pet·o las instituciones actuales ponen tt'&bas al R~DAC!~VENANCIO ORTIZ. cumplimiento estricto de sus deberes, luego no son Cuando oímos hablar con tanta ft·ecuencia de respetables ni pueden ser •·espetadas. civilizacion i de cultura nuestra pobre tierra; Por esa parte, pues, está probado que no hacemos cuando hiel'e a cada instante nuesta·os oídos lapa- un pueblo culto. laüra progreso como co 'iecuencia de la destt·uccion Pero aun queda pot· examinar si cultivamos las dnJ Catolicismo, naturalmente nos preguntamos ciencias i las artes. qué significan estas palabt·as con que se conmueve Cuando nuestt·os padres diet·on su glol'ioso grito al pueblo i se lo obliga a dea·ramat• su jenerosa de independencia, una de las cosas que se propu-t~ ngre ; i despues de meditar algnn tanto, hemos ._ sieron fué abrir de pat• en pat· las puet'tas de Ja e mpa·endido el engaño envueltQ en esas palabras Patl'ia a los conocimientos humanos, cuya importa­que como la de libet·tad se ·han querido hacer sa- cion a nuesta·o suelo estaba. prohibida por el som­ct ·amentalt>s i constituirlas en bandera de constan- brío i desconfiado Gobierno peninsulaa·. Algo de tes rev0luciones. latin, teolojía, i derecho civil, era todo lo que se Llámnse culto un pueblo que tiene instituciones enseñaba en los cole,iios : e\ liberal Virey Espeleta respetabl.es i respetadas, i que cultiva las ciencias consiguió que se fundara tambien la enseñanza de i artes. Al ménos esta es la defiuicion que de tal Ja medicina, i se estendió hasta permilh· i aun palabm dá el Diccionario de la lengua, 1 así la fomentat· la enseüanza de las ciencias esactas. 1 entiende tambien el buen sentido. - Pero era tan poco lo que podía adelantarse con un Vamos a examinat· si la idea que tal palab~·a sistema de Gobkmo tan ¡·estl'ictivo como el que representa, puede hermanat·se con el empeno se babia establecido en las colonias, que Jos bom­funesto que hoi se muestra de dar en tierra con la bres que algo habian podido aprendea·, lo debinn Relijion. mas bien a sus esfuerzos particulares i a su talen- Es respetable la virtud, porque ella hace la feli· to, que n los medios que lns autoridades les pro­cidad del individuo que la pmctica i contt·ibuye pot·cionaban. La luz entt·aba por estrechas rendijas pot· estension a la de los sé1·es que lo rodean. al país i no podía difundit·se sino con dificultades. Desde que cada uno inspira confianza justa a los El anhelo de sabea· era grande, i ese anhelo fo­demas con quienes v·:v. n sociedad, esa i nt las ideas de libertad. Así f é.q lo-que tiene n elemento de fé licidad. La v t1d es es- mas empeño se puso, una vez realizada la emanci­, peta Ole pot• que asegura con verdaderas garantías pacion política de Colombia, fué en la d!fusion de los derechos individuales, i las instituciones de Jos conocimientos ciei\tHicos e . industdales. Se todo pueblo deben basat·se en el respeto por la dictaa·on disposiciones para fomentar i difundír las vh·tud, porque de otra manera no sedtn respetables escuelas ga·atuitas ; se dió ensanche a la enseñanza ni r·e~petadas. Pero entre nosoti'Os hoi la vil·tud secundaa·ia que se daba en los colejios que mante­' está considerada como cdmen, luego no hacemos nia la Nacion ; se autol'izó al Poder Ejecutivo pa-un pueblo culto. ra que enviara algunos jóvenes a E\wopa, c~n el La virtud está considea·ada como crfmen, sí ; fin de que aprendieran allá algunas ciencias i a1·tes i la prueba es e hecho. Es virtuosa una persona i volv.iet·an a enseñadas en la República ; se pm­que no hat mal a nadie, que respeta sus compi'O- curó fomentar la a gl'icu\tura, i este fué uno de ios misos, que teme a Dios i lo ama, i que pm· ese te:- objetos con que se contrató el funesto ernprés.tito . mor de su justicia i ese nmot• a sus pel'fecciones, (jUe estaremos pagando aun quien sabe si por crucifirn su carne i so consagra a la oracion, al siglos. ~a da se consiguió sin embargo, gt·acias "a puntual cumplimiento de todos sus debea·es i a la Jas constant-es revoluciones que han hechadesobre pa·áctica de la caridad que es el amor al v~·ójimo~ el país una mortaja. Pero siquilwa se mant vo la Las monjas han dado ejemplos heróicos de "irtud, instl'Uccion a .cierta altura que daba a Ja ~acion i sin embargo . han sido anancadas de sus casas algun bt·illo. con violencia, i las instituciones actuales las Hoi nada existe. Colejios particulares hai,razon la semilla del escep­tisismo, se lo priva de su únic<;> consuelo, pero léjos de hacel'lo mej~a·, se lo dept·ava~ ¿ &ení esto hac~rlo feliz? ¿Qué gana el proletmio con .QUe lo persuadl,\n de que Jesucl'isto no es Dios? El, po1· rudo qt\e sea, ha sido form,ado en la creencia cris­tiana : si a pes~r de ella ha sido, p01· ejemplo, ladron, ¿qué será cuando deje de creer ? No -po­d• ·án variaa,se sus hábit~s, pet•o se harán peo1·es sus co.stumbres. Se quitará siempre el SO!l\bl·ero cuando pase por frente del templo, pero ya no tend•·á temo1• de roba•·se la custodia, ¿De qué medio se valdrán los reformadores pa­• ·a hacer mejot· al pueblo cuando hayan consegui­do descatolizal'lo '! ¡ Oh 1 Bien sabemos que le dicen j ia estado indispuesto en su paseo d~ A vosott·as, que léjos de pt·eocuparos de vuestras vm·ano, pero, completamente restablecido, regresó propias galas en los dias de regocijo comun, habeis a la ciudad etea·na, que lo recibió con un júbilo consagrado todo vuestro injenio i todas vuestras indecible. Allí le fué pt·esentada la nota en que gmcias solo a prepat·ar las limosnas que debian el señor Arzobispo le comunica la fórmula con que enj\1gat· tantas lágl'imas. jm·ó en Cartajena, i aunque el Santo Padre nada A vosotras, que os babeis apat·tado con adora- . babia resuelto, se creia que impat·tiria su apt·oba· ble bondad de todos los sitios en que imperaba el cion a tal fót·mula, no obstante que la cree inútil entusiasmo i la alegn'a, para sen•h· el puesto hu­segun se refiere, por el conocimiento que tiene del ' mil de pet·o santificado por sus fines de « vende-espíritu de nuestt·os liberales. doa·as de la caridad. >> -La sagrada Congregacion del Indice, ha pro- A vosotras, en fin, niñus hecbicet·as, a quienes hibido últimamente las obras siguientes : el Altísimo prodigó n manos llenas los encantos fí- La Divina Comedia de Dante-Cuadro sinop- sicos i los del alma, a vosotras i a vuestras madres tico por Luis Mansini. tan virtuosas como vosotras, i a vuestros herma- Moises, Jesus i Mahoma, por el baron de Or· nos i vuestros amigos i a todos los que han servido bach, con la adicion a la Vida de Jesus de Ernesto con buena voluntad en la empt·esa de socort·et· a Renan. Jos pobres con Jos productos del Bazar de setiem- Los Miserables de Víctor Hugo. bre, os dá las mas íntimas, sinceras i pro~undas Las Memo1·ias del Diablo pot· Federico Soulie, gracias a nombre de la« Sociedad de Beneficencia ¡ las demas obras semejantes del mismo autor. de Santiago, >l vuestra humilde servidora i amiga. Fanny i Daniel (estudios) por Ernesto Fei- ANTONIA. SÁLAS DEERuÁzuniz. deau id. Santiago, setiembre 20 de 1864. >) Catalina de Obermeyre (estudio) id. , En la misma ciudad, i a e:tfuerzos de la mis- De Champfleury, Los Campesinos de Molin- ma Sociedad, se han fundado establecimientos cf¿ar; Las a·venturas de la señorita Margarita; destinados a proporcionar alimentos a las personas El Realismo icl. · indijentes. ¡ Qué contraste ! En aquella República De Enrique Murget·-Escenas ele la Bohem'ia ; en que impera deveras la libertad i se cosecha el 1 Escenas de la vida de juventud; El Pais lati'!lo fruto de los sacrificios hechos para conquistar la id. independencia,seestablecen asilos para los indijen- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL CATÓLICO. 229 tes, i en la noeva Colombia, se destt·uyen esos asilos i las casas donde se daba de comer a los po­bt ·es. Pero tambien es cier·to que algunos que el otl'O dia eran de los pobres que acaso necesitaban esos asilos, hoi son personas de pró, ricas, i están fan altas, que no alcanzan a oír los gritos que el hambt·e art·anca a las multitudes desheredadas. -El impuesto sobre los perros de uno i ott·o sexo en InglatEwa·a, ha producido en el año que terminó con el mes de junio ultimo, la suma de 1. 106,547 pesos, 50 centavos. Es lo imico que aquí no se ha ga·avado nun, i no sabemos por qué es ese desprecio a la interesantE' raza canina, tan numerosa en esta ciudad. --Con fechas 28 i 30 de julio último, escriben de la Habana dos de las Reverendas Madt·es Car­melitlls de esta ciudad, i ilnn pormenores cm·iosos acerca del viaje que han hecho. i de Jos motivos po1· qué se sepal·aron. 1 Cea·ca de ocho meses perrnaneciet•on en Puerto Rico, donde fueron ta·atadas con una cordialidad que no clvidan. Monseñot• Ba•·ily les escribió que ' agu:u·daa·an allí hasta que él dispusiera lo que de­biao hacer ; i en efecto, dispuso que unas siguie­ran pat·a España, i ota·as paa·a la Habana, en razon de que Jos recursos no eran suficientes para la traslacion de todas a Eua·opa. El 22 de abl'il marcharon siete paa·a la Penínsu- 1 la, produciendo en todas aquella sepaa·acion, un 1 doloa· que pintan con los colores mas vivos, pero que sufl'ieron resignadas i apoyadas en su fé. Las 1 otl·as marcharon paa·a la Isla, el t 5 de mayo en , un vapor, cuyo Ca pitan les aderezó un camarote a donde no dejaba enb·aa· otros homba·es que el Ca-cuerdan a los que las han pea·seguido, para pea·do­nal'los, para compadecet·los i pat·a a·ogat· a Dios por ellos. -El último coa-reo del Norte trajo cartas de Ci:t­cuta en que avisan que las RR. MM. Clarisas de · íunja, llegaa·on s':l novedad el dia t.o del corrien­te a San Antonio del 'Tácbira donde fue1'on reci­bidas de una manera espléndida ; i que el dia 3 continuaron su marcha para Mamcaibo. -Al fin ha quedado comprobado que lo que anunciamos desde nuesta·os primel'Os números, erá realidad : los liberales están unificados en prin­cipios con la Rusia. El doctor Pa·óspea·o Pea·eira Gamba lo ba dicho bajo su firma en un artículo que rejistra '((El Tiempo)) número 360, i en ese escrito notable, despues de manifestar que el Im- · perio ruso es la esperanza de la Europa liberal, i el destinado indudablemente por· la Providencia para desta·uit· a Roma, Fa·ancia i España, que son los escollos del proga·eso, añade, que toda reden­cion necesita una víctima i «víctima pot· víctimR, esclama, mas vale que lo sea Polonia, país de fanatismo i de ta·adiciones nobiliarias, que la Italia liberal o los Estados Unidos del Norte. »-Esto, dicho por uno de los miembros mas distinguidos del partido gólgota, de ese partido que tanto ha hablado de las garantías de la vida humana, del ódio a la tiranía, de la abolicion del cadalso etc, muesta·a en toda su desnudez al partido Ubea·al i enseña al mundo lo que debe esperar·se de hombres que no tienen mas principio fijo qu.e--Ja destruccion de la Relijion civilizadot•a que fundó Dios mi&mo con su palabra i con su rnuet·te divinas. pellan i el Médico, tratándolas siempre con un ¡·espeto que rayó en veneracion. Llegadas al puer­to, el Gobernado a· de la Isla envió su pt•opia lancha, espléndidmente adornada, para recibidas, i en la UNA OBSERVAClON playa estaba él mismo COU los Cabildos eelesiásti- SOBRE LA PUBLICACION DE MR. RENAN. coi secular i un jentío inmenso que las victoa·eaba " No hai mal que por bien no venga.'' . i alababa al mismo tiempo a la Inmaculada Vil'jen ADA~ro vuLGAR. que sirvió de Santuaa·jo al Sér Eterno. Llegado " Conviene que haya herejías para que hubiemn al convento do de se las espernba, nuestra fé solidar." las monjas españolas echaron a vuelo las campa- I,A TAP.& DEE CÓNGOLo. nas, descubl'iea·on la Majestad, cantaron un solero- Mucho és el daño que causan las publicaciones ne Te Deum. i lul'go las condujeron a las celdas impías poa·que corrompen la fé del pueblo sencillo que les tenian dispuestas, con abundante provision e ignorante, pol' lo cual deben pa·ohibirse i depues de ropa intel'iot• i hábitos. t•efutarse, aunque los libres pensadores de " La Hacen las monjas una cul'iosa descr·ipcion de su Opinion" nos apliquen el cuentecito del Jeneral nuevn i espléndida mo&·ada, i del lujo de ICis fiestas que mandaba afusilaa• españoles i despues qtre les ¡·elijiosas que han visto ; i dán noticia de sus - siguiemn la causa. "El talento no se hereda.'' hermanas a quienes el Jeneral de la Orden recibió Hé aquí· un grande aforismo a que se debe ag1·egar en Cádiz i acompañó hasta Consuegra donde está este ota·o: "Los educandos de la sociedad demo­el convento en que las alojaron. Las Jentes del craticn no pueden saber lójica ni cosa que lo valga." noble i hospitalario pueblo español, tambien hicie- I en efecto, ¿a quién qne tenga nociones de las a·on a las pobres monjas desterradas, ovaciones reglas del raciocinio le ocurre que haya pal'idad dignas de su vit·tud. Poa· eso dicen las que escl'i- euta·e el cuento de ser juzgados despues de fusila­ben : gu­lar están creyendo que todo eso del N u evo Testa­mento son cuentos i mer.tiras; muchcs están pet·­suadidos de que no hubo tal Jesucristo, ni tales 1 . Apóstoles; i pot· consiguiente que en cuanto a eso de la pena del fuego no hai cuidado. Pero ahora viene el maestro Renan a desengaüarlos, enseñán­doles que sí hubo Jesucristo; que sí hubo Apósto­les, i po1· consiguiente, que en esto del infierno ya no estamos mui segm·os. 1 como creido esto, las esplicacioues que él dá para evita•· esa infemal consecuencia, no satisfacen, ui pueden satisfacer a nadie que tenga buen uso de razon; se sigue que el maestro les mete el clavo i se Jo deja aden­tro, porque no se lo puede sacar. Puestos en este- estado, como la ballena con el arpon adentro, no le hace que se yayan con la zoga; ella se les enredat•á· pot• ahí en algun tifo u otra cosa que los detengn, i entónces se acabó la fue1·za filosófica que no dependia sino de bruta­lidad. Ent1'ftn en juicio; se componen con Dios i siguen bien. Así es que, nosott·os creemos que l\fr. Renan ha echado un jarro de agua pura sobre mas de cuatt·o de esos que estaban mui c~mtentos creyendo que _todo aquello et·a mentit·a. El les ha traido la Bue­na Nueva sin querel'lo : 1 los que no se habían persuadido de la verdad de la historia evanjélira leyendo-los autol·es relijiosos, vienen a persuadirse en el libro de un impío .. ~ t !ll!f~ lJJ l.1t rJJ Il® D :S:~~ «La Restau1·acion >) de Antioquia tomó de la « Gaceta de :Francia )) el siguiente cm·ioso docu­ ·mento, que reproducimos con placea·, ya que uues­. tro cof1·ade «·El Símbolo )) incluyó eu sus colum­nas la representacion que el Cong1·eso de Manilas dirijió al Santo Padre. Bueno es que se s('pa qne cuando los enemigos de la Iglesia se reunen pam destruil·Ja, los hijos fieles se reunen pat·a de­fenderla. CONGRESO CATOLICO. 1 1: 1J1anílas, 29 de agosto. El Con9reso cat~ico ha abierto hoi su segunda se· sion. EI numero de las personas que han correspondi­do al llamamiento del comité de organizacion es mui constderable. La :r~n1on cuenta mas de J ,000 miembros venidos de todos los puntos de la Béljica, de la Francia ,.. de la Inglaterra, de la Alemania de la Hungría, de España, de Portugal i de la Italia. :rodás las notabilidades del partido católico belga toman parte en esta solemnidad, que recibe un cárncter mui particular de importancia por consecuencia de la pre­se. nte situacion del país. El continjente de la Francia es ménos notable que en el último año ; pero se aguar­da mailana a Monseñor Dupanlouv, i este ilustre Prelado debe tomar el ri1iércoles la palabra en la sesion je.nerat. Urjido por la pronta salida del correo, no tengo tiempo de enviar hoi muchos detalles: Jos enviaré e-n otra carta. Así, al presente me limitaré a hacer una relacion sucinta de la primera srsion. Hoi a las .diez de la mañana los miembros del Con­greso se reunieron en la Catedral de Saint-Rambert, donde se celebró una misa solemne por su Em. ef Cardenal de Malinas, para atraer las bendiciones del Cielo sobre los tl·abajos de la reunion. Con~luida esta ceremonia relijiosa, los miembros de la Asamblea 1 fueron en cuerpo al local del pequeño Seminario dio- 1 ces¿¡ no, Juo-ar de las sesiones del Congreso. A 1 entrar f.:­en este ediffcio se hizo una verdade1·a ovacion al señor Dechamps, el eminente orador católico del ¡larla- 1 mento belga. La sesion ha sido abierta con un discurso del Cílr­denai- Arzobispo, interrumpido por numerosos aplau­sos. Cuando el Prelado invocó Ja bendícion que Su Santidad Pío IX se ha dignado conceder a los tra­bajos del Congrc.;o, un grito inmenso i unánime de "Viva Pio IX ! Viva el Papa-reí ! '' salió de toda~ las bocas. I,a reunion procedió en st>guida al nombramiento de sus o11ciales i la presidencia ha sido confiada, como f'l af10 pasado, al señor Baron de Gerlach, Presidente de la Corte de C'asacion. Instalado en sus funciones, . este eminente majistrado ha pronunciado un largo i notable discurso sobre la sítuacion jeneral del Cato­licismo en los diferentes países de Europa, i partiru- ~ larmente en Béljica. . U. recilJirá in extenso este cliscurso, en los diarios belgas de mañan~. No obstante, voi a trascribir un fragmento Onde · sino con beneficios. Un hombre para quien el mundo parecia demasiado estrecho i de quien Pio VII había ' tenido mucho que sentir, en la época de su nwyor fortuna, despues precipitado del trono i cautivo, reprochaba amargan)ente á sus vencedores los malos 1 tratamientos que le hacían soportar en su roca, en medio del océano. Ninguna potencia reclamaba en su favot·: solo Pio VII se 1·esolvió a hablar en favor del grande infortunio de Napoleon I, i lo hizo,como vosotros lo sabeis. en los términos mas fuertes i mas · conm\'Ovedmres. Solo la Relijion, señores, puede ele- 1 _ var tan alto las almas. ,, ¡ La sesion íué terminada votaudose una manifesta­cion de adhcsion aJ. S()berano Pontífice. Ella ha sido Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL CATOLICO. 231 enviada inmediatamente por el telégt~afo al Cardenal Antonelli, para que sea trasmitida a Su Santidad. FRANCISCO LENORMAr\T. EL GAMONAL DE PUEBLO. F.n t\n pel'iódicó ft'fl.nc~s, consagntdo como el nuestro, a la defensa de la causa católica, se lee una ocunenda que tiene mucha analojía t!on lo (fUC suele sucedet· entre nosotros, i que po1· eso nos ha pm·ecido digna de ~er ¡·ept·oducida. Refiét·ese que en un lugat·ejo de aquel impmtan­tc imperio, había un zapatero que pasaba pm· el 1 hombre mas capaz i con quien se consultaba todo, sieni!o sus juicios fallos sin apelacior~. El, dice el historiado•·, era el oráculo de la p~noquia, i aun su mismo CUl·a, aunque conocía bien el alcance del sabct· del maestro, se veia obligado por respeto a la opinion pt1blica, a fiojit· que lo consultaba algunas veces. Así, tenia la seguridad de set· obe­decido pot• sus feligt·eses. Cuando en la cuarr.sma o en el acl viento, algun p•·edicadot· estt·aordinario llt>gaba aiH, el Cura le aconsejaba que ántes de dar principio a sus tareas, hiciem una visita al maestro Jacobo pat·a qbtener su poderoso sufrajio, sin el cual et·a seguro que la Iglesia estaria desierta, i nádie oil'ia la palaba·a de ' Dios. Naturalmente, no todos los Sacea·dotes querian sometea·se a una humillacion tal, i uno de estos pudo asegut·m·se pot• sí mismo de que tenia que pasat· pot· ella si quel'ia hacer el bien a las almas. Vió, en efecto, en su primer sea·mon al mae~tro · Jacobo, solo al pié del púlpito, i en Jos siguientes 1 dias nadie hubo que pudiera escucha•·Jo, p01·que el maestl·o, al salia· de la Iglesia, habia dicho: '~ Este predicadot· no sabe nada ; se conoce que no 1 ha estudiado; es un ignomnte., El pobre padl'e se decidió a pasar bajo las hor­cas caudinas, i fué a ver al zapatet·o para sabet· a qué atenerse respecto de su ciencia i pam ensayar el medio de ganal'lo. El marstro lo recibió con una zurda galar.teda, pel'O en fin, lo recibió bien, i el pa·edicador poa· su pm·te, procuró lisonjearlo, diciéndole que debia tener una erudicion notable cuando tanta influen· cia eje1·cia sobre el espil'itual pueblo fa·ances. A lo ménos, le añadió tocándole el hombro, la gran reputacion de que gozais, me hace c1·eer que algo útil sacaré de tt·atar con vos.- Al fin de una ho1·a, el astuto Sacerdote babia ganado tan bien In con­fianza del mentor de la panoquia, que acabó pot• confcsat·le que hacia dit:z años era poseedor de un libro de que juzgaba no babel· otro ejemplar que el que él posein, i que a ese liba·o debia toda su ~iencia. :.._" 1\fostrádmelo, poa· Dios, mi quel'ido amigo, le dijo el p••edicado•·· Entre jentes como nosotros no debe ocultarse esejénero de tesoros." -"Sois el primero con quien voi a tener tal condescendencia, t·espondió el maestro, lisonjeado por los cumplimientos del padre, i fué a buscat· el libro en un armario que tenia cerrado con doble llave.- Era un volúmen descabalado de una tt·a­duccion f¡·ancesa de Tertuliano. El pt·edicadot· se mot·dió los labios para perma-necer sério, i le dijo :-" No me sorprende vues· l tra J=icncia : conozco esta ob1·a, i os ruego que m a- \ liana vais a mi sennon, f me juzgueis sin parcia­lidad." Pi·ometiólo el inaesb·o; i cuando el pad1·e salió, mU&·mm·ó entre dientes : -- « Siemp1·e son lo mis­mo; ni oh·los, nada ignot·an; pet·o ya vet·emos.» 1~1 predicadol' no dijo nada al Cura del descu ~ b1·imie~to que habia hecho, i al día siguiente cuan­do subió al púlpito, vió al maestro Jacóbo sentado ; en frente, i notó que tenia un auditol'io conside­rable. Et·a que nuest1·o hol't:lbre babia convocado a los vecinos como a un iurado en que debía fallaL'­se sin ápelácion sobre el mél'ito del o¡·adót• sagt·ado. El se1·mon fué un tejido de citas de Tertuliano que el z;apate•·o oía con ·un . gozo i~Hlecible, sor­pa ·endiéndose de que se hiciet'EH\ ntgunas que no estaban en su libro que sabia casi de memol'ia. Cuando el Padre bajó de la cáte_da·a sagt·ada, to· dos los oyentes siguieron al zapatero cuya tienda se llenó, i en aquel dia no se habló de otra cosa en la pat·t·oquia que de la elocuencia del predica·· do•· que tuvo en Jo sucesivo tantos oyentes, cuan­tos podia contener el templo, i cojió un f¡·uto abundante de sus sel'Inones. El mismo zapatero, vino al fin a echarse a los piés del misionero, con­fesando su ignorancia i su ot·gullo i pa·ometiendo dejat· de desviat· el espíl'itu de los vec.inos a quie­nes dia·ijia en todo confot·me a sus mtereses o a sus caprichos. El Padre lo levantó diciéndole : () i luego, llena de admirable confo1·midad, esclamaba tranquilamen­te: «¡,Si de mano de Dios hemos recibido los bienes, por qué no recibimos los males '? » 1 cuan­do el oleaje de mil penas reunidas paa·ecia sumer­Jirla en un mar de amarguras, anebatado su espíti­tu en alas del amot· divino,i de una firme confianza repetia con aquel héroe de la resignacion : « Yo sé que vive mi Redentot· i que he de resucitar de la tierl'a, i en mi p1·opia came veré a mi Dios : esta es la esperanza que está depositada en mi pecho >) • • • • ¡ Afljida señora, probada fuiste en el crisol de la ~dversidad : muriendo, descansas­te ! . . . . Qué la tierra que recibió tus restos te sit·va deblando lecho> i que fu alma, por los mé­ritos de Nuestro Señor Jesucristo, i en premio de tus virtude.s obtenga el descanso eterno r •••••• Respetando las lágrimas de su élesconsolada hija, no intentamos enjugadas: que Jlore, porque el llanto del amor filial, mejor que las gotas del rocío de la mañana, reft·esca Jas flores que él sem­bró sobre la tumba materna •.•. pet·o que su lloJ'o to endulce el recuerdo. de que llenó, pal'a con su madre los deberes de cal'iñosa hija, como en idéntica ocasion, los de tierna esposa, haciendo cuanto debia i podia hacer por el alivio de perso­nas tan queridas ..... Que ella nos permita mez­clar a las suyas nuestt·as lágrimas, acompa.Qal'la en su dolor i en su oracion ferviente a Dios po1· el descanso del alma de su madre i nuestra sentida amiga......... R.M.G. SEÑOR REDACTOR DE (s señores que í han tenido Ja bondad de visitarlo en esta capital ; ~ i les pide SllS órdenes pat·a el Cauca, sintiendo no r hacerlo personalmente pül' falta de tiempo. i - ·-. - En 1á tienda -del señor Venancio Ot,.tiz, segunda calle del Comet·cio, número 66, está de venta a la l'Ústica i por doce reales cada ejempfar, un cua- ' derno titulado : " Cuadros nacionales-Obra pós· : turna de la señora l\1. Josefa Acevedo de Gómez.'" t Esta brillante produccion de una señora grana· dina, merece bien ser leida por todo el que se goce ! en las Yerdadet'éls glorias nacionales. I.MPRENTA CONSTITUCTONAL ___ P_O_R_ N -IC_O_L_A_S_P_O_NT_ O_N_ . ~ -:--~·.' -;-- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ALCANCE AL CATOLlCO N.o 77. SEÑOR EDITOR DE H EL COMERCIO.'' En el número ~3 de &u periódico, en la H ~evis­ta interior,'' se encuentran ~nos acqpite~, en Jos cuales •·efiere U. los i1;1formes q\le se te han dado, aceren de la couducta que ha 9l;>&~cya~9 el señor docUH' Marcelino Gqtiénez Salgar, como Vi~ario, Gobea·nadóa• d~l Obispado. - No dudo que un ~cenda·adq Ratl'iot{~ll}o, hay(J. sido el que ha movido a U. a escrjbh· Q~ una ma­nea ·a tan fuerte, para vitup~rar los pl'Ocedimieutos del setioa· Vicario, po1· JUzgados ser obra de las mezquinas pasiones de partido, mas bien que por cumplir con sus sagrados deberes. · U. mjsmo confiesa que el sen-or Gqtiérrez, es homba·e de un caráctc1· dulce i de finos modales, i yo añadiré, que nada ha hecho hasta ahora, como "\-'icado, que pueda hacerle desmer·ecer de esa opinion, que tanto U. como otros han foa·mado de él, p-ues tan solo es un justo homenaje al ver­dade• ·.o mérito1 que siempre lleva el manto de la modesti::.. · Lo que ha causado a U. mayor alarma es que se haya sometido a juicio a los Sacel'dotes que presta1·on e) juramento, que prevenia la leí de 23 de abril de 1863, lo que me es mui estraño; pues no puedo convencerme que U. _ignoa·e que la Igle­sia, como sociedad perfecta, tiene leyes, ¡ que los P1·elados son las autori-dades a quienes toca haeel'las cumplir e imponer las penas, en su caso, a los transgt·eso¡·es. Los Sacerdotes que se pt·estaron a hacer tal ju· rnmento, se hicieron t·eos de un delito definido de ?nt~mauo por la Iglesia i corroborado, aunque mdu·ectamente, con la autoi·idad de Nuestt·o San .. tísimo Padre Pío IX. Aparte de estas auto1·ídades hui- otra-s docisrones, ya de Romanos Pontífices ya de univet•sidades como la de Soa·bona, que co~ noble aLuegacion, i con desprecio de inminentes .peligros, condenó esta clase de jm·amentos, unién­dose a los ciento cuaa·euta Obispos franceses, que suscribieron una manifestacion que tenia poa· títu­lo: ~' Esposioion de principios sobt·e la constitu­cion civil del Clero," la cual tenia poi· objeto re­clamar Ja jurisdiccion esencial a la Iglesia, el de­recho de fijar la disciplina, de instituir Obispos i de conferirles podel·es ; de todo lo cual se veia Ía Iglesia ente1·amente despojada por las prescl'ipcio­nes de los nuews decretos. Lamentábase tambien de la supresion de tantos conventos, i de aquellos ·incalificables dec•·etos que cerraban las puertas de los asilos consagrados a la piedad, que pretendian anular las promE>sas hechas a .Dios, i destruh· unas bnl'l'el·as que no ha levantado la mano del hombre. Los Obispos concluyen diciendo que se consultase al Papa, sin el cual no debe trataa·se nada que ten­ga impoa·tancia para. la Iglesia. Así hé;\blaba la igle- _sia de Francia, colocada en idénticas circunstanci(ls a la nuestra, i' su "EqJOsicion de principios," pasó a la categorfa de sentencia. Aparte de estas aut:ol'idades, digo a U. hai ota·as razones de mayoa· estima, de las cu11les se deduce la culpabilidad en que ·bao incurrido algunos Sacerdotes, al p1·estar el juramento en cuestion. Todos saben que en el dia d_e nuestm ordenacion hacemqs una solemne pl·omesa de sumision i obe­diencia a los lejíN~nos Prelados. Esta sumision i o.bedienria mira principal i esclusivamente al Go­biemo de la Iglesia, en cuyos cánones i dis.posicio· nes están mas instl'Uidos los Prelados, por razon de su ministerio, que los domas Sacel'dote~. El · faltar a esta obediencia, así prometida, es incurrh· en u_a pet·jurio. "''.Es caer en el orgullo i abando­nar ta vercla~ ·dice San Ainbrósio; es hacerse í·eo del del.ito de insubordibacian; para con aquella di­vina aQtoridad, que dijó ' a los ·A'pósl:oles, 1 en per­sona de ellos, a · su'S sucesores. Quien a vosotros oye, a mi me oye : i quien a vosotros desprecia, a mí me desprecia. 1 ~í que a mí me desprecia; desprecia a aquel quemé envió. 1 el Apóstol qué di~e: I EL mismo (Jesuct•isto) dió a unosciertamen'· te el apostolado, a "otros el don de profecíá, a otr()s hizo evanjelistas i a otros pastores i docto­res, para la consuma~ion de los santos, enZa obra del ministerio, pa·ta la edificacion del cuer­po de Cristo. . . •.. Pata que no seamos ya ni· ños fluctuantes i nos de}emas traet en rededor de · todo viento de doctrina." 1 si no debieramos obedecer a los Prelados, a quienes Jesncri~to puso por Obispos, para gober­nar la Iglesia de Dios, para que· como Pastores, cuiden de nuestl·a salud espiritual, i nos eóseñen como doctores a distinguir el error de Ja verdád, para que no seamos pá1·vulos fluctuante¡:;, i -nos dejemos atl'aet· en rededor de tQdo viento de doc• trina ¿ q~é significado podrían tenea· aqueUas pala-bras de la ve1·dad eterna ? · Para restablecer el órden tm·bado en la Iglesi-a, en vh'tud de las leyes civiles, pa1·a absolver ·anno· cen~e o castigat· al culpable, son indispensables ·las formalidades de un juicio, sin Jo cual la Iglesia, no podl'ia_..s!erciorarse de la verdad 'de los hechos. Por esta razon el señor Vicat·io, ha sometido a· iui­cio a los sindicados de inobediencia, no· par·a ejer­ce• · un acto de venganza, sino para cumplir con las dispo~iciones de la Iglesia, de las que és su lejítim~ guardta · - No son los dect·etos dellt.usTnísuto s'EÑOR NI­Ño, los que el señor Gutiérrez ta·aia de hacer re­'' ivh·, ni tampoco hacer mérito, para~ pot· este enojoso camino subir al solio del Episcopado, sino l1acer positiva la autoridad de fa Iglesia, cont~ni­da en los cánones; que f}quel ILus'Í'nE.l>oNTÍFICE, principió a poner en ejecucion, i qua el señor Gutiérrez, .co~o su sucesor en la jprisdiccioh espiritual, tiene la impresc~ndible o~1ígacion de llevar a ~u término. Lalglesia .po es, señor Editor, como las Repú­blicas: sus Prelados no pueden dat· indultos en el dia de su advenimiento al poder. Si esto estuviera en sus facultades, estoi mui seguro que ·el señor Gutiérrez, que tieue un corazon bondadoso, que síente como P•·elado los sufl'imientos del Clero habria es.pedido un ind\1lto jeneral, no sot'o e~ favor de los Sacerdotes, sino tambien de todos 1os fieles de la :Qjó~esis, que hubieran h)éurridó en algunas censuras. · · · , U. dice que no bai diferenci,a enta·e el jurame.Qto que prestaron algunos Sacerdotes, en \'irtud de la Jei de 23 de abril áe , 63, i el que han hecho el Ilustrísimo señm· AI'Zobisp<_>, '?trós señores Obispos j _ Preladqs, i últimamente ~J seño.r Gutiérrez, co"mo Vicario Gobernador de la Diócesis. Yo sí ~ncúentro una gl·an dispai:~da'd. Aquel ~st~ba pr.9hlbjdo por ~et· ~bsoluto : este es permitido i líc1to p'ór seL· condi~i) que el Clero, como corporacion, esté afiliado en No he gua1·dado el órden debido al contestar los ningun pat·tido poHtico. Si se le ba visto al lado acápites de su Revista, por evitar el tocat· otros de Jos Imperios, tambien ha estado en el seno de puntos que no hacen a mi objeto. P<>m cometería las Bepublicas, combatiendo en aquellos Jos a bu- un acto de injusticia, si no dijera a U, que E'Xé\miné sos del Poder., i cultivando en estas los principios en Pamplona lo que hubiera de cit:~rto, arerra de de verdadera libertad, para que, bastat·deados, no lé\s instrucciones p~noquiales del señor Presbítero hagan su ruina. Jamas se ha adherido a los Go- José Antonio Femández, i pel'sonas imparciales i biel'Dos, sino para hacer la felicidad de las Nacio- de veracidad, me as<>guraron se&· un ht'tho fU1" lo mfsmn- no JllO U. dice. Esta es una aseveracion que carece atribuin\ estd manifestacion a un deseo de adulat· de fundamento. Si fuera cierta, esté U. segul'O al señot• Gutiél'rez, puPs creo no habrá ohidado, que yo seria uno de los primeros, en denunciarlo a que cuando fuimos compaf1eros de. destierro en ' la Nacioa; pues así como no quie~·o el desdot·o de Venezuela, E'n el año de 1861, hablamos al gunns la Iglesia, támpoco quiero Ja ruina de mi Patria. ,·eces sobt·e este delicado asunto. l~as opinion •s 1' ~oncluyc U. escitando a las autoridades de que entónces emití, hacen hoi parte de esta rnani · Pamplona, para que presten a los Sacerdotes sorne- festacion. ti dos a juicio, la proteccion que les dispensan las Quedo de U, señot· Edito&·, su atento servidor, leyes i que hagan se les .levanten las cens,uras. No JEsus MAníA. MALDONADO. dudo que aquellas autondades, no se baran sordas , a su invitacHm, si encontraren que el Prelado co- Cacota de Velazco, 20 de octubre de 1 &64. mete hechos punibles, i que ataquen la sobe•·anfa ========e=:-============ nacional. Pero como esto último, no puede ni aun A ~TUN11JO suponerse, porque las leyes que rijen a la Iglesia, 11 tJ • en nada dañan la supt·ema soberanía de la Nacion, .·• tiene U. que su invitacion no pasará de set· un B I O G RAFIA. celo patriótico. Mas, supóngase U. que las autol'i- Como un monumento de gratitud, de gloria nacio-dades intimat·an al Prelado la absolucion de las nal, i de honor para el Catolicismo en jeneral i para censuras, :. se c¡·ee que él obedecería esta intima- la iglesia granadina en particular, se trata de publicar " la biografía del ínclito mártir i confesor de la fé EL cion? Nó, i mil veces nó. Pues estoi persuadido, ILUSTlUSUio SE ÑOR DOCTOR Lms NIÑo, seguida de que primero se sujetaría a cuantas penas se le qui- todas sus luminosas cartas Pastorales i deinas docu­sieran imponer, ántes que faltar a la fé, a la dig- m~ntos relativos a la vida del santo Obispo. La obra ni dad de Prelado, i a la confianza que la Iglesia ha en edicion esmerada i constante de mas de 1 oo Jlájinas, depositado en él. Tampoco habria Sacerdotes que irá acompañada del retrato de la ilustre victima. Para aceptaran esa clase de absoluciones, pues la ver- hacer frente a Jos gastos se reciben suscriciones en las d 1 d h a.J·encias de "El Conservador" i de" La Caridad" ac sea ic a, para honor de la Iglesia i del Clero d t D. ' . ) S d h al bajo precio de UD fuerte que se consigmrrá a] re· e es a Iocesis : os acer otes que se an creido cibir el libro, bastando por ahora el aviso ; para los culpables, no ha sido necesario -mas llamamiento no suscritores el precio será de dos pesos de a s aéci­ni mas apremio, que leer la Pastoral del señor m os. Los que quieran que se les remita empastado o Vicario; en la cual declat·a cuáles son las iglesias en media pasta lo avisarán i en tal caso se numentará hábile& de la Diócesis, i viendo que quedaban es- el valor de aquella operacion. Se suplica a los seño- j cluidas algunas, los Curas Rectores de estas, i al- res Ajentes de .Jos peri_ódicos enunciados se sirvan dar 1 gunos otros Sacerdotes, ocurrie1·on inmediatamen- oportuno aviso de los susct:itores a la obra para llevar-la a efecto. 1 te a SUJetarse a la autoridad de la Iglesia, repre- --~ ____ ¡ Sentada en el Prelado. IMPRENTA CONSTITUCIONAL-P e R NICOLAS PONTON. e== Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.

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El Católico - N. 77

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El Católico - N. 78

Por: | Fecha: 29/11/1864

AÑO Il. BogotA. 29 de nO'Yiembre de 1864l NUMEJRO '78. ~~ ~!lt (/}.Jl r;p~[¡flrtJ(/,)~ ~~ 1 de impostor, sosteniendo que no podfao ba&tar loa REDACTOR, VENANCIO ORTIZ. 1 seis dias de 'l.Ue habla el ~léne!ISt par~ In Cl'eaciOUj ~-------=-----,------------~- - 1 que era uu disparate deGII' que el pnnuw diti Cl'eó La histol'ia i Id tradicio11, siempt·e la histtlt'ia, 1 Dios la luz, cu~·~du hasta el cu;~!·to ct•eó el tJOl 1 t>S el_ maesti'O que ensei1n a la hurn : \1~idad lo gue l·fLl~nte. de la .lu.z .1 ~ecu?~i.~do1· del JOI'.r~e.n d~ los Ve• , ha stdo 1 Jo que deue es peral' que sera. Sob1·e esta 1 J~tales q~e, ~p(u ece~ ca ead~~ ~~ t(!a ~e• dm. Que 1 cnst>ilanza reposan todos los conocimienttJ<.; con 1 sJend.o e~feaaea la tle•·•~a, auadteron, no pudo ssJ' ¡ que se adoma la i1\te1ijencia de \os ga·andes hom- l t~da 11~?nda.da por el ?•luv_io! ni el . ar~a con lu3 ~~~ i brcs, i nndie, sin dat· clereL·ho a que lo llamen loco, l c~unenswne.:. l~~e le ~a ~o.!ses, ~1~bna ba3tad? pu .. ! se atrcvcl'i" a dudat' de }t)s heehos que retlere la l 1 ~ ~onten~a to,io~ .lo:s set es lle8tlll~dos n ~ontmuaa· { histm·ia con rel.tcio11 a los varonC"s prh·ilejlados l ~lvtendu 1 prl)paganclose: que en Armenw, donde <1 i cuyos nombres mencionn. Sabemos pot• ella lú 1 el refiere qu.e se <..lduvu es:t arca, no hai olhHS para J ~ que fuer·on Séne~a. PI a ton, LieUI'JO, etc1 i lo que 1 que la paloma echada, fuea·a, hul>ie,ra podido vol vet• '¡~· ~ 1 ''.Í<'l'Utaron .rsos mdnstruos -con Ugura humana que 1 co~l. un 1''~ 1~ 0 .de este arb~l t•n ~~.pie?= .. ljllt1 las d!­parecc naeJ<'I'on solo para haeet• sen tia• ltor't'OI'. El 1 fet t:. ~ltes 1 azas que puebl,w h01 _la tteata, uo huu ' .· nomba·e de li'l'l~deguuda, PI de Luis XI, el de F.nri- 1 P.Odido. de~~ende¡• de, la Cauu:umma a que perten~ .. 11 1 i que YJ 11, t:omo los dl• Nerou, Cnlígula ¡ Diocle- 1 Cla la t.amtlta de N..>e: que. e.l monto uctutll t!e In l ciano, han llt:'gado hasta nosotr·os cat·gados de 1 po~lacwn de.l globo, denunc_tit uu Ot'IJen mas. esten.- maldiciones, pcll' !a historia f por la trauicion. Sin j dso<)J1 .m'1.\~•uaent1 ~,g·ut~l'~lues ~~ tdesl~n~uo Jd>o .r 1 cl historia· -~ ~~ r estas UOS fuentes, llDdt·es en 1 tul o X V-v 15, hubla aquel de una dudad llama- i 1! ll\s .r<•laciones hechas pot· esos liu•·os, i nada con-¡ d~ de los libros; i Berocio en su apolojía de Poli· j• siguieron po1·que las ciencias cuyo continjenté se b10t t·e~cre que Sisutro, personaje antediluviano, ~1i habia invocado, vinie1·on a conlirmal' ~sas rela- ~scond1ó en Sispari~ las ca•·tas i escl'itos que tcuia; ciones. ji e_l seño&· Champollion ~ncontró en el museo de 1 Ellos negaron que Moisés hubiera podido escrJ- ~ntigüedades ejipcias de. Turin, una acta cuya !1 bir el Peutnteuco, pot·que la escritut·a, dijet·on, fecha se remo~1l? a d~s_s1glos ántes de la época en fué invencion postel'ior a él, porque no hubiera que pudo esci'Jbll' Mo1ses. hablndo de él mismo en tet·cea·a pet·sona i pot·que La objecion de que este habló de sí mismo en no se concibe qur siendo escrito•· inspimdo de Dios, tercera persona, se halló que podia hacerse a m u· se ostentaa·a tan sobet·bio, que !'e llamara a sí mis- chos ot1·os escritores antiguos como Josefo hido .. mo como se llama hombre divino. riador de la guerru de los judío!J. ' _Alegaron de falsedad en Ja a·elacion de este rs· En fin, el oeñor Eichom vino a ponet• el sello cnto¡· sagt·ado, pmcurando hacerlo apat·ecet· eo con su esquisita ca·udicion a las pruebas de lu nu .. contradiccion con .. la cronolojía . de los hechos. tenticidad de los libros de Moi~és, concluyendo "' ~1a~la de ten~plo, d1;ea·on, ~n una epoca en qu~ los c?n aseve•·a1· que,, con m·t·~glo n la historin, no po· JUdtos no teman templo; 1 en el Deute1·ouom1o se dm dudaa·se que el habm escrito el Pentateuco. refieren palabl'as di,chas poa· él mas all_cí del Jot·- f . A Jas acusaciónes de igno•·c\ucia i de imposhll'fl, ' dan que ntlll(;a paso. Lo acusaron de 1gnorante i 1 vmo tambien a responder Ju ciencia pura con ven .. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. .cel' n Jos que las hncian, de ignorantes e mpos­tores. La llngülsUea probó que la pnlabm dia, en hebreo yom, significa un tiempo dete1·minado cual­quiera, i no precisamente el tiempo trascurrido de la salida a la puesta del -sol; i un exámen deteni­- do, hecho por ui1 mi(>mbro distinguido de la fecúl· tad de ciencias físicas de Paris, probó que las pa­labras mar1ana i tarde usadas en el Jénesis, tienen en ese escJ•ito un sentido poético; i no deben to• maJ'Se en el que nosotros les damos hoi : que esas ' palabras signifirnn ?'evolucion, mezcla, confusion, t que de consiguiente puede concluirse, hecha nbstracclon del pode•: de Dios, que los seis dias de que habla el Jénesis al describil· la creacion, §011 sefs épocas distintas. · La objecion relativa a la creacion de la luz cuando no hahla sido aun creado el sol, fué des­¡ t¡ulda poa· Fa·esnel i otros físicos que probaron que el principio luminoso existe en todos los cuet·pos i i que el sol no es mas que el simple motoa·: pu-l¡ do, pues, la luz existrr ántes de que hubiera sol, 1 ~ como e~1ste tu'tificial por la uoche en el hemisferio 1 no nlumbl'ado poa' él. 1 1: Ber~elfo se encargó de examina•· si la .1ennina­clon de las plantas babl'la podido tenea· lugm· sin Ja ac ton de aquel planeta, i concluyó que esa ac­r cion lnmedinta les habr·ia sido nociva. 1.. De Férussac, en el Boletín univea·sal de las cfen- 11\1 cJns, dijo lo siguiente :-" El órden de las crea-clones contndas en el Jénesis, se acuHda perfec­tamente con el óa·deo en que se hallan los restos 1 fó!!lles de div~t·sas castas de animales. La vida 1 tmlmal se desenvolvió pl'imero en el seno de los ma.t·es¡ despues en los ait·es ; los reptiles tenesta·es . ~1 't'!nfel'On despues, los cuadrúpedos en seguida, i 11 el hombre en tlu. » - ~ ! La geogm~sia, poa· boca del señor Rosct, respon-l ll .den la objeclon hecha al diluvio, que (< la gmn­de J'evoluclon pl'Dclucida po1· ti teneno diluviano, :~1 ha 61do jenernL )> 1 tan cierto es el fenómeno re­! erfdo pot' la Biblia o este respecto, que entre noso-tl'OS, a la altura de nuestm sabana, se han hallado ohm·a restos de animales indudablemente ontidilu- 1 .1·1: vrarws. De manea·a que no enreció de a·azon el Ba­ron Cuvl~1·, cuando d.r,p!uró que el terreno diluvia­no ,se vuelve a. encontrar con todos los cmactéres que le son pi'Opios, en los países mas lejanos. en Fra-nela, Inglaterra, Siberia, las Indias orientales J en América, La anécdota de las conchas colora­dne a.da·ede por los peregrinos en las mas altas cumbres de las montañas, es propia de los enciclo­pedista~, merece t·isu. La objecion nacida de las dimensiones del arca, que ó resuelta por el Vice-almirante Thevenaa·d qua dijo : a Si el hecho ha sucedido con un at·ca cuyas dimensiones se declaran en el Jénesis al ca­pitulo VII, el simple cálculo que se acaba de vet· ( en sus memo!'fas relativas a la marina) atestigua contl'tl Porfirio, Apeles discípulo de .Marcion, i con­ra llll escéptico moderno, que este navio ea·a un tero o mas ga•ande de lo que se necesitaba paa·a contener la familia de Noé,los animales i víveres.J> Aquello de que en Armenia no hni olivos, i que dg consiguiente la paloma que soltó Noé del arca, no pudo volvet' a ella con un ramo de oliva en el plco, lo contestó Estt·abou, natural de Capadocia, Umftrofe de A1•menia, diciendo que toda aquella ••ejfon abundaba en fl'Utos i árboles cultivados, vléudosc entre estos aun Jos que siempre conser-i~" nn el verdor, de cuyo número son Jos olivos. 1 Pllnio que designó fa zona templada para la cultu­ra deJa oliva, dice tambien de esta manera que In At·menia, situada en In zona espresadn, es a pa·o­pósito pm·a aquel cultivo, aunque hoi no tenga 1 lugar. El tel'l'itol'io en que está situada la Villa de Leiva entre nosotros, fué, st>gun la tradicion, mui , fern, i hoi es estéril. ¿ Qué de raro tiene, pues, 1 qur. hoi no sea la Armenia lo que era ántcs del diluvio ? No ca·einn los filósofos anticl'istianos que Noé i su familia bubil'ron repoblado la tit>ITa ; fundados en planisferios imajinarios o mentidos,asegumbnn 1 ron todo el aplomo necesal'io que el globo era mas anliguo de Jo que decía la Biblia, i que In pobla­cion 1 p 1 oa· su 1 nfume 1 . 1 1·.o, nop podEia t 1 1nber de 1 srecndido de : ~ aque a so a a m aa. ero • u er, en ns at'tas a ·.1 'ltna P1·incesa de Alemania, edicileeiclo la dist incion de • t'res grandes famili:1s primitivas, de t1'PS primeros 1 jefes de la especie humnna, precisamente el mismo número que Moisés ha fijndo en su historia ? En cuanto a la edad del mundo, que los filóso- 1 f.Js enciclopedistas hacian subir a quince mil aüos, fundándose en los zodiacos de Esné i de Denclernk, i en los eclipses de sol i de luna que Diójenes Laea·­cio mencionaba, t~tmbien se encargó 1a ciencia de ponerla en su vea·dadera data. Los señot·es Cham­pollion i Let1·onne, descifraron, el uno por el nlfn­beto fonético i el ot1·o pot· la ciencia de antigüe- . dadcs gl'iegas, los espresados zodiacos, i encon­traron que enm posteriores a \a existencia de Tiberio, Clnudio, Neron i Domiceano, estando escrito eu el de Esné el nomba·e de Antonio Pío; de manea·a que no solo no tienen la edad que se les atribuía, sino que son postel'ior~s ni estableci­miento del Cristianismo. Respecto de los erlipses, los mas antiguos monumentos astronómicos co­nocidos entre los e,Jipcios, se averiguó ser los mencionados pOi' Hiparco' i Tolomeo, i segun ellos, el mas antiguo eclipse se observó en- Babilo­nia 721 aiios ántes de Jesucristo. Quedó destrui­da asf la fabulosa edad del mun<.lo i vindicada la obra de Moises, probado que es cierto que "si la poca ciencia conduce a la impiedad, la mucha ciencia conduce al Cl'istiunismo," i finalmente, 1 pa·obado que los escritos de Moisés fuea·on ins­pirados 1101' Dios, pol'que era imposible que un hombre conociera en aquella época todas las cien­cias, pam fundm· en ellas un relato mentiroso: ese hombre habría sido un prodijio inconcebible. Qué historia bai, pues, mas digna de fé? ¿Cuál mas respetable? I esa historia es Ja base de todos los libms santos que se enlazan enta·e sí de una manea·u. admirable. Todos eJios componen una sola obra que se llama Biblia : el libro po'r esce­lencía, i todos ellos han sido anulizados i compro­bados de la misma manera. La critica i la cien- ; cia les han puesto sus respectivos sellos, i nadie 1 puede dudar de su relato. , .. En esa historia consta que la venida de Jesu· cristo estaba anunciada muchos siglos ántes de tenet· Jugar, con todas las circunstancias que se -- -------- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ~l. EL CATO L 1 C O. 235 t vet•ificarot'\ en ÉL. Estaba EL pintado rasgo pot· det•a igualdad~ no a ;s: ~~:~;a~ mentida que es J, . rasgo en esas profecfas hechas pl'imet'O pot· Jos la única qne pt'I'H'tican nuestt·os hombt•es de hoi : .l. Patt'iat·cas desde Moisés, i d spues pot· los que se todo para los mios i solo para los mios. Haremos Jlamai'On propiamente profetas o videntes. ))e mas sensible nuestl·o pensamiento con un ejemplo. ' manet·a que, es tan itTacional dudat· de los hechos Supong amos que llega a nuest1·o t'értil suelo uno de Cl'isto, compt·obados solo así ante los ojos de In de esos hombres que, ahogados por el despotismo 1 filosofía, como seria dudar de los hechos <.le Nnpo- <.le las mona1'quíns, vienen a buséar en estas Repú­leon Bonapat·te. blicas Jos goces de la libertad, de la igualdadt de Ahora bien: Jesucristo probó con sus hechos ia fraternidad. A su entt·ada tropieza cou un com.. ~ milagrosos que era verdaderamente Dios ·: esos pat* iota que le dice: ''Amigo, aquí puede U. se1• .. 'i hechos no puedenr·evoearse a duda r·ncionalmente, lo·qne quier·a, pol'que no hai uistinclones sociales: j lurgo el escepticismo no tiene :1sidero. todos son iguales, i los estr·aujel'os gozamos de 1 .h;suciUSTo-Dios estableció su Jglt>sia, la esta- esenciones que nos colocan en unn sHuaclon mui i bleció perfectamente independiente del poue1· tem- ventajosa con t· clarion a los hijos del pafs. Podemos ' poral, i le confió el gohiemo ele las almas, luego enriljuecerno~ pronto sin gran tJ•abajo, pot·que to .... las disposiciones civiles que atacan la libertad e do no" favor·ece, i ni aun en las contiendas polí- j independencia de la Jgle~ia que Je·ueristo Dios es- ticas mus encamizndas, tenemos qoe temet• ; nadie i tr.bleció, son \'ercladeramentc implas, contrarias se mete <'OU no ,· otl'os; la novC'Irría, Jas pt•eocupa .. l¡ al clet·echo mas pl'fcioso de la humanidnd, i por• ciones i el espír·itu de cstrar·jel'ismo nos fav01·ecen. l consrcuencin, tir·ánicas en el grado mus alto que TNio aqur es bdlu en la nutur·aleza 1 todo tiende al .~ puede tene1· la tiranía. progreso mate1·inl, i no hai otra casa que nos sirva 11 s 1 Esn Iglesia, en virtud de la potestad que reci- de estorho pn1·a nue1:tros goces, que el mafclito fa, bió de Dios su fundador, estableció las cor1Jor·a- untismo J'elijio so . El l'oma lismo es lo único que ciones monásticas que el gobierno actual ha supri~ se opone en cstu tiel'l'a al planteamiento de la vet· .. '¡ ! mit.lo.-Esa Iglesia que, como creacion de Dios, ~adera Hepúbliea.' 1 El homb:·e lleno de é:stas ideas, es columna i fundamento de la ve1·dad, ha dec a- entra i se instala en nuestra ciudad donde empieza le rado sagrados los bienes drstinados al culto i a la a esperímental' que su paisano no 1-o ha enganado 1 subsistencia do los mioistJ·os de ese_ culto; i el en nada. En todo le va a las mil maravillas, i por ·~ gobiel'llo actual ha usurpado esos bienes.-~sa lo mi mot desec1ndo ver al fin sin ningun estol'l>Ot 11 Iglesia reposa sobre el principio de autoridad, la Repúblien como él la éomprencle, se pone decl- [" • porque así . quiso Dios qne fuera, pue , to que nada didamente al lado de los que combaten el CRtoli"' lá ,, puede haber supel'iot' ni aun igual a Dios; i el ci mo, i les aynda con todas st1s fue1·zus a la ustin- ~ ~ gobirmo aetué\l combate i niega esa autol'iclad.-- don ~le la Iglesia que nosotros llamamos con razon, ~sa Iglesia defiende i propaga el principio de nni- nacionnl. dad, porqne no hni mas que un Dios; el rebaño no De repente el hombre se siente it la rectitud de conciencin.'' En efecto .• esta es In Iglesia rntólica, hija de Dios, i tnn combatida pOl' Jos que se llamau liberalrs, amantes del proga·rso, E.~mfgos del puehlo. Esta ·es la Iglesht qu-e se qulra·e desternll' de aquí,pnm sus­tJtult• ln no snbemos qué monstruosa creacion del ~ mercantilismo yonket>. E~ta es In ,·erdacl. l Jo pror ·j : es que a nuestro pueblo le 'iene de molde lo que i el ubate Gaume dice lwblando de Italin. «Quitad­l a le sus flestns rel!jfosug, el lujo de sus templos, i i e< este pueblo caerú prontamente en el sensualismo. , , ce po1·qne In '·Jntcidad de su sangre, 1a movilidnd ~ ce de su caráctet•, fll ralot· de su tempet·amE>nto, el ~ · e nrdoa· de su irnajinncfon, los encantos i las rique-cc 7.tHl del Sllflo que habita, la bellt-zn del ciclo ''bajo que respiJ•n, no drjan sobre este punto nin- l "gunn duda ul obsen·adm· reflexi·> Se quiere, pues, matos· al pueblo gnmadino física 1 1 morolmente quitándole su fé. No permita Dios que tal cosa se consiga ¡ r. • 1 LA FIESTA ng LA CONCEPCION. Se acei'Clt el u in mas gnmde del ai'lo para los ca· tólicos de este país: el día en que deb<'mos saluda•· una ''ez mas o la hermosa estrella •que guia nues'" tros pasos hác!R el cielo en medio de las tinieblas con que las molas pnsimws quiereh oscureC'eJ'nos t: la sendn. Marío, que segun In bella espref'ion del l . Abate Gaume «puede confundh· n Dios i al hom- , , bt•e en un solo aba·azo, diciéndoles a entrambos : · 1 Hijos mios ;n María defensora deJa pureza de las 1 vít·Jepcs, guardian de In tranquilidad de las fami­lias, objeto del mas tiemo culto para todos los 1 pueblos católfcns; Mm·ía, no Jo dudemos, salvará 1 nuestrn fé i nuesta·a pata·ia, i tal vez, mas taa·de 1 o mas tempr·&no, llamaa·á n su regazo u los hijos ~ ~ ingratos que hoi le ''uelven la espalda; pot·que •; tambJen son sus hijost redimidos con la sanga·e del calvnl'io ·¡ señalndos con la cruz, -los que hoi qule~ ren bacea·la descendea· mas bajo que las mas poba·es mujel'es. Bogotá, se colocó bajo su santa proteccion, f f; si ella no nos abnndona, si nos hacemos dignos de su nmor; sus mismos enemigos caerán de rodillas nnte su altat· i el hacha que tenian apt·estada pa1·a der•rlbnl'lo se les caea·á de las manos. Ella, en cuyo regazo durmió nuestro snlvadoa· el suei1o de los niños ; puede sohi ahogat• los odios que nos matan. Se acea·ca su din : C!.'ando el año pasado Jo safu­dabamos ; solo pudimos enconu-aa· voces de duel~; quisimos entonar una canchm, i nuestt·a garganta exhaló un grito de angustia; queriamos cantar pero solo pudimos jemir. Hoi es pa·eciso hacer una mnnlfestaclon tan ruidosa como sea posible de nuestra fé, e$ preciso ostenta a·, a pesar de nuestra mfse¡·Ja, las galas que nos quedaron de mejoa·es tiempos: nuestros enemigos se han atrevido a conhu· victoria; bagámosles ver cuan pocos son. Ojalá no nos limitáramos a esas manifestaciones que los hombres sin fé pueden imitar sin esfuerzo. Una luz 1 una bandera son un signo bién equívoco 1 En la cnsa del cristiano son una muestt·a de fé : en la casa del indifet·ente i del impío son un ho­menaje rendido a la fé del pueblo. Pero es preciso que vamos httst:t donde los neo('l'istianos no pue­dan seguirnos: que vnmos f'n ta·op<'l, en multitud al t>-ié del altat·, a In mesa donde se come el pan divino que alimenta lns almas : allí fortalerrre­mos nuE>stra fé para las tempestades que nos agmw­dan, i podremo!' deC'ir a nuestros enemigos: Yenid, conladnos si podeis, i drspues, si os atreveis, se- 1 guid rnntando ·victoria. · - -.. LOS TALEl\TOS MEDIAl\OS. Babia en el prado, a or·illas de uu camino, una pobre planta nacida a In sombra de un annyan i medio oculta entre la yrrhél, cuya pequeña flo•· no carecía ni d,e gracia ui de aroma ; pero la pobre florecita se moria sin qu<.' llegara hasta ella un rayo de sol, i sin que el ro<'Ío la alrnnzarn de otro modo que pnsnndo al tranz de In grama CJUC In E'll\'olvia. Los pasaj<'t'OS percibinn de vez en cmHH.lo el moma de la flol', aspil·ahan el nit·e i segninn su rnmino, i la pobre jemia por recibir Ja luz del dia i el t·orío de la aurora. Un día, ciet·to transrunte aficionado a íJures quizo std.>rr de donde le venia el per·fume que Ji onJeaba ~u dTfato; se detuvo, descubl'io In flore- 1 citn, arrancó la yerba que la ahogaba. go 1, drsde aquel día, el sol la tostaba cuando le enviaba desde el zenit sus ravos abt·asadores, el viento del verano la C'ubria ·de polvo, i si la lluvia fecundaba el campo, los pie~t de las bestias la salpicaban de lodo; pero no es l'SO 1 lo pe r: un asqueroso gusano que dormin enroscado al rededua· del tallo ; al sentit· la luz i el calor despertó, se desarrolló i empezó a devorar tallo, miz i plnnta basta que destruyó la flor. ' Como esa flor son los talentos medianos : si a sus primeros esfuerzos a·esponde el -silencio, si se amontona sobre ellos el desprecio ; palidecen, se marchitan i mueren. Los jenios son raros, los , tHientos medianos, estimulados pot· una pnlabra 1 lisonjera, por una sonl'isn benévoln, cuando no ha-gan otra coso, refleja1·nn i difundit·án In luz que irradia de los \'erdadet·os jénios, producirán Jo que puedan. Hai horas en que falta el sol, i la luz de las bujías hace un gran bien. 1 Pea·o guaa·daos de ensalzados como el caminan- ' te a la florecita de nuestro ctacnto: guardaos de 1 hacel'los que se juzguen soles siendo bujías : la envidia, la crítira, el insulto Jos matarán, i si esto no basta, todos tenemos como la flor alt·ededor de su tallo, envuelto alrededot· del corazon un feo gu­snno: la sobea·bia. 1 cuando la soberbia i la igno­rancia llegan a darse un abt·azo alrededor de una alma jó\'en, de su monstruoso matrimonio nace la impiedad, la demagojin, la audacia que no conoce nada respetable, nada saga·ado. ACUSACION. En el númea·o 17 .s del «Diario oficial )) corres­pondiente al 19 de este mes, hemos visto In acusa­cion intentada ante el Procurador de lá Nacion por un Presbítero Rafael Ruiz de Bananquilla Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL CATOLICO. 237 contra el señor Ai'Zohispo,, por habet• infl'injido, \m mentfs, si afirmo que en Francia nada puede dice, el artículo a.o de la lei de 17 de mayo úitimo set• ft·ances si no es franco. (nsuras están impuestas . t1empo les per~enece, 1 no~ot.'·os solo d('bemos pen­por los ránones del Con<'Hio de Tt·ento (Cap. J 1 ¡ sm·. en la etenndad. El cnst1ano, el Sacerdote, ~! ses. 22 ), mueho ménos nos sorprende al ver que 1 Ob1spo, que_ salen del t~n:plo; qt~e ponen. el pte firma titulándose tmnbien (( prime¡· párt·oco de la 1 en los negoc1os de su p:lls 1 ?e~ su tl<'mpo, ".wlan la igh.>sia de San Roc¡ue, por la voluntad de Dios i e1rt.racla d~ nn terreno prolnb1d~. He aqm lo que del pueblo.» Esto lo dke todo: clérigo que se fir- se nos repJte o_nstantr~1ente ; 1 nosotros r~spon­ma así, nos hnre su npolojia. dem~ que ha b1e?do sJ.do colocada po•· DIOs la El s<>ñm· Pt·Prurnoo1• tu\'o el lmcn juirio de en- Iglesw sobre la tletTa, 1 no en otro planeta, no . ·viar In acusacion del Pr ·bítero Ruiz a'l Procurador podemos dClr nuest1·a dimision absoluta de las dt-1 Estado de Bolíva¡· para que allí se averigüen cosas de la tie.na. Respondemos- que los destinos los hechos. ' temporales de la Relijion están lig~dos a Jos del mundo, i que nada nos hará jamas aceptar el de­cr<' to de destierro i la sc>nteucia de pt·osct·ipcion que se nos notifica. Respondemos en fin que en r tanto que no se nos reforme la o1·ncion domilJicat, •. 1 FRACl iENTO en tanto que no se nos despoje de nuestro Pater, conser\'art•mos el derecho i el dehe1· de apreciar D'E UN SERMON PRfiNll~CIADO EN NANTES POR EL las COSas de nuestro paÍS i de nuestro tiempo, en :SEÑOR OBISPO DE POJTIEBS, CON MOTIVO DE LA TRAS- SUS reJélciones de conveniencia j l conf01·mes al ó1·den divino, son a. mismo tiempo seno de la sociedad cl'istíana Las instituciones i lazos tendidos a las multitudes, son palabras sono- los p1ineipios de .que el restablecimiento habia si-ms de que se ha suprimid-o la realidad por mil do .deelat-ado imposible. En pat'ticulal', cuaódo la. medios de C()rop¡·esion i represion. En definitiva, Iglesia se intehoga.hoi i se compaa·a con las t'OSf\S el finjimiento, que no sii!nta ni a la majestad de de este tiempo, cree senti.r -en sí misma ·una vita­. Ja Iglesia, ui a su conciencia, ni aJ¡·espeto que ella lidad, una fecundidad, una fuerza de espansion i tiene a los hombres i a Jos pueblos, no sienta tam· una ¡·iqut>za de porvenit·,- que no se percibe en poro al carácter frances. La Bretaña no me dará ninguna otra pat·te. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 238 RL CATOLICO. 1 Imposibilidades'? Ah! lo que podria creal'las 1 -aquí abajo en provecho del mal, es esa facilidad 1 de los buenos pa1·a creal'las i exajerárselas, esa disposicion que muestran a dudar de sí mismos i del valot· de sus pt·incip ios, esa p1·ontitud en ¡•en-dh · las armas al enemigo de Dios i de la Iglesia : ¿qué digo? es el afan con que se apt·esut·an a pt·o­clamar el triunfo de ese enemiO'o cuando aun está léjos de set· definitivo. Quiero 0 dccil'lo mui alto, hermanos mios : hoi mas que nunca, la principal fuet•za de los malos es la debilidad de los buenos, i el nervio del reinado de Sntan entre nosotros es la enervacion del Cl'istianismo en los cristianos. Si me fuese tlado introducir aquí a la persona ado­r: lble del Salvador Jesus, i preguntarle como al pi'Ofeta : ¿ cuál<'s son esas hel'idas de que estais cubierto, esos golpes que os tienen agobiado? ; su 1·espuesta no se hRI'ia esperar: Ai 1 diría, es en la ca.sa de mis amigos que he sido malt1·atado así; de mis amigos que no se han atrevido a nada pa1·a defenderme i que se han hecho voluutai·iamente los cómplices de mis ad\·ers¡u·ios. Es preciso no (jStrellarse coutra lns imposibilida­des, decís vosotros; i yo os respondo qne la lucha del Cl'istiano t•on la imposibilidad es una lucha P!'escrita, una iu~ha necesflt'ia .••. ¿Por qué de­CIS pues cada dta : Padre nuestro que estás en los cielo~, santificado sea tu nombre, venga a nos el tu reino, hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo? Sob1·e la tiei·a·a como en el cielo· pero esto es imposible; sí, imposible, i sinembat': go, estamos obligados a tl'nbajru·, cada uno segun sus fu~¡·za~, pOI' obt~ne1· para ese imposible toda . ~a reah~acwn que est en nuestt'o pode.I'. Una sola Jenea·acwn no lo nace todo, i la et(~t·nidad será el e?mplemcnto del tiempo. Nuestl'Os padres los an­tiguos galos, tentan tal fé en la ,·ida futura, que era frecuente entre ellos remitir la conclusion de los negocios para el otro mundo, i p•·estar plata conylazo pa1·a des pues de la muerte. Lo que ellos hacwn como paganos, sepamos nosotros hacerlo como cristianos ; aun un esfuerzo ; lo que nosotros cornenc3mos, otl'Os lo continuarán, i ei desenlace fi.nal lo acabará. Emiliano i sus Nanteses, por eJemplo_, se esta·ellaron con el imposible, perecie­ron eu una lucha c.on el ím~osible; pero despues de. ellos, oti'OS campeones tomaron entre manos la m1sm~ causa, i he aquí que el enemigo siempre renaciente co~ que la cristiandad ha bat~llad<> du­rante doce sigl?s, toca pot· fin a sti agonía .. El mal se ha repr~ductd.o de~de entónees i se reproduci:·á hasta el fm lHl.JO m JI foa·mns di versas : vencerlo flnteram_ente acá en la tierra, destmil'lo completa­mente 1 plantat· sobre sus ruinas el estancTarte si~mpre. inviolable del nombre, del ¡·eino ¡ d~ la leJ de Dws, es un triunfo definitivo que no será concedido a ningu~o de nosotros, pero que cada uno debe por lo menos ambicionar con esperanza contra la espenmza misma. Sí, con esperanza contra la misma esperanza· porque ~e~o decido a esos cristianos pusilánimes: 1 a eso~ cnstmnos que se hacen esclavos de la pu­puland~ d; adoradores del buen éxito, i que se desconci~rtan P?'' el menot· progreso del mal. Ah ! son tan lmpt'eswnables t ¡ pluuuiese a Dios que las angustias de lapi'Ueba final no los alcanzaran! ¿ 1 e~ta prueba está próxima? ¿.está remota? Yo no. me at1·~v? a conjetun1r nada a este t·egpecto~ pm que. parttc1po de la impresion de Bossuet cuan .. do deCJa: ''Tiemblo poniendó las manos sobre el ponenir!' Pet·o lo que es ciedo, es que a medida que este mundo se aproxime a su fin, los malva­dos i Jos seductores tendrán mas -ventaja : no se encontt·ará casi fé sob1·e la tie¡·a·a ; es decir, la fé habt·á desaparecido casi completamente de todas '[ las institucioaws tenenas. Los creyentes mismos se att·everán apénas a t hacet· una os~entacion pública i social de su creen- l cia. La cision, la separacion, el divorcio de las so- 1 { ciedades con Dios, dado po · San Pablo como un signo pa·ecursor del fin, irü cousumüudose de dia t en día. La Iglesia, sociedad sin duda siempre vi­sible, quedará mas i mas reducida a proporciones simplemente individuales i domésticas. A ella que ued en su pl'iucipio: ''me cncuenti'O en uu sitio es. 1 trecho,dejadme un espacio doude pueda habitar"; se le disputará el terreun pulm'J u palmo : se 'en\ opt·imida, estrechada por das partes; tanto como los siglos la habían engrandecido, será el empeüo que se tomarn- - ese rn;: 1 canso eterno del alma del seúoa· Pombo, si es que despues de 600 aúos de ocultaciou, su venel'tlblc. las imperfecciones de la came, pi'Opias de toda ilmíjtm ; i en la misma fecha acosturnbt·aban 1 criatura, por justificada que sea, ·le han retaa·dado nuesta·os antepasados su bit· hasta la antigua capilla, el feliz momento de ents·m· en tll seno del Dios de a s·eudir culto a la Madre de los homba·es, I.Jajo · 1 la misea·icordia. Haya oído Dios tantos i tan fer· . aquella célebre advocaciou. . vi entes l'llegos 1 i q•1e nuesta·o amigo,cada vez mas 1 ¡ Raa·a coiucideucin ! Cualquiera hubiese f!J'ei- , sentido, yazga _en perpetuo ~escanso 1 ; do qu~ era el doctor Mejía q~ien, .no contento ('Oll= · 'El lujo de la Iglesia i el lujo de la muea1:e i el anmH'IEU' poa· carte~es la cootm~acwn de los ta-aba­dolol' habian adomado el templo de la Candelal'ia jos, lo hada tambaen poa· med1-> de cohetes en la- f éon sus sencillas i conmovedo•·as galas. Una esco- 1 cima del cerro. . 1 jidísima orquesta, compuesta de nuestros mas 1 Los sujetos de qu,c se , compema la Cl:ll'nbana 1 a·eoomha·ados as·tistás · llenaba con sus ecos el \ e1·an los señor~·s Jose Mana Sampea· A.,.. Teodor~ ámbito del templo. El ;acrificio de la misa repetido Valenzueln, Salvnuo: Camach_o lL,_ Francisco E.- . sin intetTupcion desde las seis de la mañana hasta ¡ Alvarez, Auíbal. G~hudo, Jose Maa·1a V~rgara V., las doce del dia, se ofrecía por el descanso del Manuel Pornl>o 1 Silvestre C. E-scaHou. Ya se ha f finado, repitiendo a Dios este ruego: Dale, señor, 1 dicho que enln muc·hos ma~ los dtadus p ~H·_a el f el descanso eterno ! Lttzca para él la luz eterna! 1 paseo ; pero solo concurneron estos ocho. No l La fiesta expiatoa·ia ei·a ofrerida poa· la relijiosa 1 1 ('Hreceria de iutea·~s ~na descripdou, por conchm i amante familia del ilustre muerto. que fuese, de los anctdentes del ascen:u de estos .Muí pocos años hace que la sociedad de Bogotá Ol'ho amigos a la cumbre del Gua<..lalupe ;. i l¡uizá 1 contaba~ no con orgullo, sino con íntima satisfac- de t' sa descripcion pudieran desprenth.·rsc algunas­! cion, entt·e sus miemba·os al señor Lino de Pomho. ot1·as coincidencias ~·aras. La felicidad de la via·tud no inspira ot·gullo sino Los ti' a bajos del Tt'mplu i Cs·uz .monumenfal h~n alegría : poa· eso decimos que no era con orgullo continuado desde el J 2 d~l pró_x~n.w pasa~lo, s~n que poseíamos el iuapt·ecinble don de la vida de iuteJ'I'Upcion, a pesar dt'l tuerte JUVJeruo ; 1 contt-aquel sabio. modesto, cristiano ve•·dat·ea·o i senci- ll\Hll'án de la misma manera. l llo, cos·azon siempre juvenil i afectuoso. ((Poeas Bogotá, 25 de octuba·e de 1864. i vueltas ha dado el sol desde ese día,» i ya no 1108 1 queda del señor Pombo sino un puñado de pere- BUE~ REGALO DE: AÑO NUEVO. 1 cederas-pero venea·andas cenizas! Anselmo Pinetla se promete rifa•· entre sus ami- __ _ _.._,... ... - gos un adet·ezo de oro del mejor gusto, i t1·abajó RARA COJNCIDENCIA. nws acab-ado, con 73 brillantes i 28 rubíes, esmai- Sabeu nuesti'Os lectores que t>l seiioa· doctor mdo en '' erde, montado eu París-, i que segun el :Fen~nndo A. M@jía tnvo que suspender, por Jas avalúo hecho pot· el intelijeute joyt'I'O ~riloa· A. · ,. ~ ¡1 ciJ·cuustanc·ias en que se ha hallado el país, las Schimith, ' ' ale Ja suma de Dos t~IIL cUATROCt ENTOS t úbt·as del Te.mplo i Cruz rnonumental emprendi- PEsos FUERTES ( ~ ~,400 fuertes.) das por él en la cima · del cerro denominado de La rifa se harael t8 de ene1·o pa·óximo por me- Guadalupe ; i ya sabrán tambien que, sin drsis- dio eJe 500 fichas, de las que la última que se saque • ti1· ni por un momento de su loable i cristiana em- de In ul'lln se1·á la premiada; i será presenl'iada pot· f ·l presa,. ha determinaoletns, f 1 setiembre fo anunció así pot• medio de avisos pueden ocmrir a la oficina de los seiwres Pereil·a impresos, (t.) que se fijaban a las 12 del di a en las Gamba, Ca macho Roldan i C.~ ultozauo de la esquinas, a tiempo que se veia la detonacion de Cateds·al, quienes responden a los que las compren 1 voladot·es en la misma ch:.na del ceuo. El doetoa· de su val01·, caso de que la rifa uo se lleve a rubo. l\fedj~a . sos·pt·e1ndido~ n 1 ~- p~~ien,d1o adivinat· quied' n Cnda bo•eta vale$ 5- fuet·tes, zJagaderos en moneda f pu 1era ser e que ce euraam ast a continuacion e de talla '1nayor. . . las o.hras, (pues no podía figua·aa·se otra cosa ) Para que d aderezo pueda se¡· coDOCHio 1 ap¡·c-asestó un anteojo i apénas pudo divis:ll' unos ciado p-o 1• las seüo¡·as o cabaJie¡·os que quiet·au \ cuantos bultos, sin distinguil' las personas. Salió tomat• boletas, mi señot·a Teresa Herrera d-e l?arra a la calle, en don.de no habíamos tenido el gusto ¡ el seño r Diego Uribe han tenido la bondad de de verl9' pot· mas de ta·es nños; i averiguando el convenir en tenedo en sus respetivos tienda i al­hecho, vino a sabea· que, de vados amigos que se macen, a la vista de los que lo deseen, la pril era r babian propuesto ascender-al Guadalnpe, poa· gozat· desde esta fecha ha~ta el tS. de diciembl'c, i e\ I de aquel magnifi.co. punto de visti\, ocho lo habian segundo del 18 de diciemb~·e en adehmte, h~sta vel'ificado el referido día 8, i estando en la eirna el dia de la rifa. La seño-ra HerJ•et· ocupa la t1eu- -! ar•·ojaa·oD, como a las 1.2 del din, ho•·a en que se da númes·o 1 os de la 2. ~ calle real, i ef seum· estaban fijando los avisos del docto1· l\Iejrh, los Ut·ibe el almacen número 21, frente a la fonda de voladoa·es de fJUe, con aquel fin se habian pt·ovisto. la ce Rosa Blanca.>> Al mismo tiempo, tal vez, en qne Jos ocho Algunos amigos llnios han tomado ya boletas amigos estarian aco-rdá-ndose del Sacerdote autor para ellos ¡ sus familias, i creo veudn pronto las 1 de las obt·as cuyos cimientos estaban -viendo, i aun que fa\ tan por eoloca1·. El aderezo es una finca de. \ dudosos algunos de eUos de si existi-a, p-ues no se pl'imea·a clase, que favorecea·á al que le toque con . babia vuelto a tener noticias suyas, éf anuuciai.Ja un capfta\ u-0 despreciable, o con una joya del 1 · que desde aquella fecha continual'ia su empt·esa. mejor gusto. Creo que ninguml seiíorita, sobre ¡ Es el dia 8 rle setiembre que la Jo·lesia celeb1·a todo, dejas·á de compraa· una boleta. ! Ja festividad de N. S. de Guadalupe~ c-on motivo Borrotá, 18 de noviembre de 1864. 1 (t) L · · · · e · Ansehno Pineda. os avtsos se smprumeron en la tipografía de El L Mosa1.eo, que dirije el señor Benito Gaitan ; i el que 1 ~~~~~~~~ - ~ --- ~-- ~ -~~ ~~~--:- --~ 1 lós fiJÓ en la~ esquinas fué el s~ñor 'fiburcio Garzon. 1 11\IPRENTA. CONSTITUCIO'NAL-POR NICOLAS PO'NT(}N • 1 1 ----·-- --- -·- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.

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El Católico - N. 78

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