REPUBLICA DE COLOMBIA.- DEPARTAMENrro DE ANTIOQ,UIA
-,~~
CONDICIONES l Er~ NACIO:-J'án los :ntere-sados
eou el infrascrito Editor y
Administradt r,
E'l'ELBEltTO ~IUÑOZ.
~~
Mec1ellin, Marzo 8 de 1890- _{_ Número 1.·
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en suB manos la noblA bandera á cuya somlJra vi- Somos de aque1los que no quieren que vuelva
ve Colombia la vida tranquila del progreso rspa- la ne;ra época en que . "todo lo que perdió la aurador
y fecundo. toridad del Gobierno y de los J neces, lo ganó con
El Poder Ejecutivo nacional lo ejercen, en su usura la demao·ogia criminal y turbulenta"; no
calidad de Presidente Constitn•;ionul y ele Desig- queremos, no, qne vuelva In época en que, abolida
nado para reemplazarlo, los Excmos. Dr. Núiíez la 1)ena ele muerte pronunciadn por el J~ez, suby
Dr. Holguín, lo que sigrúfica qne las dos más sista la qne impongan individual y colectivarnen[
l}tas personalidades del Partido narional son te inrnorales canelillos"- ni que "vuelvan las sa.quienes
Jlevan en alto l:llJandera ntimientos religiosos, el sistema de educacwn
el impubo.; á los miembros del partido, seguirlo deberá tener por principio primero la divina ensin
vacilar. seí1anza cristiana, por ser ella el alma r.nater de
El partido que gobierna no puede tener comí- la civilización del mundo;" y lo e· eemos con tanto
tées políticos. La razón es evidente. mayor razón cuanto que, confiados en su sinceri-
Poner {¡, los miembros del Partido nacional en dad y patriotismo y llenos de esneranzas, n<;> veel
caso, que puede muy fácil llegar, de dudar en- mos en él desde hace tiempo, sino el "mimstro
tre la política del Gobierno ó la de los comitées, leal de una convicción y de una volición irresises
poco prudente cuando no sea peligroso, y ello tibies. ''
es lo claro. Somos de los que creen con el sabio esta-
Si los miembros Gel Partido nacional adoptan dista ue " se debe consagrar el -principio de
pol 1ca e e o )ler o, e na ,. a..,~rzr~~Ñ"''f~,~.....,.,.,.,.,T'mM'~'~', ,_~'l'l"fl'ñ'e~a.- cter'4C5ñgl'eSó ~n · la mate-que
los comitées son innecesarios. Si adoptan la ria (la Reforma constitucional), de modo que la.
política de los comitées, se ponen en puesto muy soberanía nacional no a parezca subordinada á
poco distante clel ele los rebeldes. una especie de derecho feudal que no tiene ac-
Por eso nosotros ni queremos ni aceptamos tnalmente razón de existir".
SEÑORr•:S Ann.AIIA1lf GARCÍA. J ULÜN CooK B,lYER
1
P~~·a nuestrot~arti1dto otra d
1
iretcci,ón que la qutl im- Miembros activos de un partido doctrinario
DELro A I . & a & a_· -M 7 lt' ' pnman nues tos a os conc nc ores que es cm en cuya base principal es la autoridad, con ella es-
. SAZA • ' • eue zn, el poder. tarémod en todo tie>mpo y á todo evento.
Agradezco muchísimo prueLu de adhesión al Por ~iscjp]~na, por patriütisrn~~ por miedo, Se nos llamru:tí. serviles. Está bi.en. Pref0riré-
Gobierno que tantos y tan distinguidos ciudada- por terrible Imed? al cynel y sangne.r;to pasado, mos en toc1o caso ser siervos del Gobierno y de
nos me dan e 1 t l d 1 . . ,. · es por lo que vemmos a. formar al p1e de la ban- las leyes, á ser esclavos dAl radicalismo, á quien
' . n e .. : egmm~ e v~mt:seis con dera nacional, símlJolo hoy de la de nuestro pRr- se le quieren abrir las puel·tas del poder, divl-motivo
de la ~~a:wion de Et Oonsütuczoncd. El tido. Si todos los miembros del Partido nacional, cliendo nuestras tilas.
no~~re del penodwo y los telegramas que he sin faltar uno s6lo, dijera corno nosotros, nuestro Patriótico silencio n.os hemos impuesto en
rec1~1~? me fu~rzan á creer que es órgano de G~bierno sel'Ía tan ft~er~e! tan 1~o~ero~o, quepo- presencia de errores y clesaciertos de nuestros
oposiClOn. Sentiré m~~ho que así sea, tanto por ~na te_ne:·~e c_om,o qmmerwo clehno)a ~ele~ ~e una G-obiernos soccionales, que han rayado en temelu.
s personas qne lo dmgen como porque no veo Iestamacw~ rac11cal. Todo el. que de pie~t1g10, to- rarios por l•> claros y lo absurdos. No queremos,
nada que J·ustifi ue la ·ft d h fl . . . do el que de apoyo eficaz y cierto al Gobierno na- por ahora ejereer dereeho c1e censura. / .
un , q . ac 1 u 08 1
' 11 ~ fHquiei;t cional, lo fortifica, lo hace formidable no sólo co- Ese es nuestro deber y lo cumplirémos como
. acto de plesencla de nuestros am1gos poh- \mo poder legal sino como poder político 6 de par- mejor lo entendamos, sia qne nos inqniPten las
tiCos. ticlo. Estar con el Gobierno e.5 estar muy lejos del iras de los que nos gritur:m serviles adul:.ldores
Causa de desaliento para el patriotismo sería radic::tlismo colombiano. Esl·ar Hll la oposición, del poder.
qne cuando acá todos nos hemos sometido ~us- p~.n· justa que ella. quiera mostl'ars~ y por com~- El penacho blanco que el gran Rey mostraba
tosos á la. voz autorizada del Sr. Dr. Núñez, "allá ~Ic~a Y cul~a ql:e sea, es.p~ner~e allac~oJ~~l !·ad1- para qne lo siguieran los que quisieran andar el
se preten{ia por algunos im , · . cahsmo. Contra el Gobierno van, el J mucahsmo camino c1el honot y de la gloria, es para nosotros
.· . pone~ sus 0 P 1.01_ü~Jes que lo quiere mal y la oposición que no lo quiere la bandera de la Regeneración levantada. por
pnvadas aun á nesgo de pt'Odumr una divi::srón tan mal-pero van contra él.. Con el Gc>bierno va- nuestros Gobernantes y por su inmortal canelillo.
deplorabl~ en .nuestras filas. mos los que le damos nuestro apoyo, délJil tal vez Con ella llegarémos á la cima que 61 busca desde
En m1 cahda.d de J ele del Gobierno yo no pero leal y eficaz. iQnién vrr por la buena senda~ a u e en 1880 decía: "Disipemos las tinieblas anpued?
consentir hoy en que la dirección de la Los qu~ v~n dán;:tose lado co1~ el raclica}ismocou- tes de que se convierta.n en eterna noche."
política pase de Cartarrena á Madellín. En todo tra el (;tob1erno, o los que de frente vemmos al la-l
. t 5
· • . do c1e este~ cago me a Ien n. y me amrna en el cumphrmen- L ·a · 1 · ·
to de mis altos debere 1 1 , dh . , os J?Urti os p1erc en. la memoria. SI a~í no
s, e apoyo Y a a ~s10n fuera, como podría exphcai'Se el que hoy ex1stan
en ese Departamento de tantos buenos pa.tnotas. en m1est1·o bando hombres qne no califiquen bien
Amigo affmo. (Fdo.) ios actos de nuestros golJernantes.
, Por buena fortuna los 1moblos sí gnnrc1an me-
CARLOS HOLGUIN. moría de sus sacrificws y de sn martirio-ellos sí.
Es auténtico.-José JJlaría Henao J. saben qnó efemérides gloriosas deben perdurar
.EL N A O ION AL
NUESTRA BANDERA
Bajo la hábil dirección del más (l'rande hom~
we c}e estos últimos tiempos, en nue~tra historia
ms¡nrado po~· la Providencia, luchó y alcanzó vi¿
tona el Partido nacional.
Ni vieja ni oscura es la histol'ia. de 1885 á
1890. ~
.El Par~ido nacional está en el Poder; lo que
qmere decir que es hoy el Gobierno quien IJeva
en SLl h1storia y cuáles bonal' con su propia sangre.
Venimos, pues, {¡, ponernos franca y resueltamente
della.do de los Gobü~rYJ.os nacional y del
Departamento.
N o traemos pretensjones. - Sonws el grano de
arena, que las corrientes v los vientos de la opinión
convertirán en montaña.
Somos de la "innumerable legión de peregrinos
que con ánimo sereno seg-uirá sin vncilar el
cl:rroter?" que .nos__ Sflñaló 'tJf Profeta, y Dios me·
cllante, 'no vacilaremos por enormes que á veces
parezcan las .dilicult&c1es de la peregrinación, ni
ha de encontrarnos el conductor rindienclo culto
á los idolos pnganos. "
LA EVOLUCION.
Tal es el nombre que, {¡,nuestro juicio, merece
el extraño acontecimiento político verificado
en esta capital en la pres~nte semana, con gran
sorpresa y general disgusto c1e los ciuda·"anos.
Hoy, cuando la paz y la tranquilidad más nro
fundas extienden su benéfica influencia JlOr todo
el país, haciendo despertar por todas partes empresas
de progreso y de mejoramiento social ;
cuando hasta los incansables enemigos del orden
y la libertad parecen haber renunciado á todo
conato de fuerza contra las instituciones, apresttínél.
ose para la lncha pacHica de las ideas ; cuando
las pocas antipatrióticas é imprudentes voces
discorc1antes qn~ se habían levantado en el seno
de nuestro gran partido; se han apagado, volviendo
cuerdamente al buen camino y hablando
en sentido amistoso y conciliador ; y cuando la
causa nacional, conuucida sabiamente por el 1 Jefe
de la Regeneración y por el eminente ciudadano
que rige hoy los destinos de la Patria, camina
viento en popa á su consolidación y definitivo
1
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
EL NACIONAL
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vedeccionamiento, hé aquí que algunos de nuestros
hombres políticos del Departamento, no
contentos con tan esplén sabido nunca porque nailie ha
tenido la previsión de hacérselo saber, que la más efímera
de las cualidalles de la mujer es la hermosura.
La causa nacional se está ampliando y se está
consolidanc1o ; el Gobierno nacional es el Jefe
natural y legítimo de este gtan movimiento ; sería,
en consecuencia, más que una deslealtad cusi
una traición: que todos los miembros del partido
no le prestáramos decidido apoyo, sin entrar
en necias y raquiticas suspicacias y reticencias,
sin ambajes ni rodeos, sin condiciones y distingos,
frutos de una falsa independencia y de una
tonta y suprema presunción de altivez y de carácter.
Y aquí es preciso que hablemos con clarida<1:
ya qne fuimos siempre los más suspicaces y desconfiados,
y los más amigos de poner trabas y
rémoras, lo cual fué cansa del fracaso de muchas
empresas y hasta de campaña-s gloriosas; ya qne
fuimos los únicos consen·adores de Co~ombia,
que no cesámos ele oponer inconvenientes á la
política regeneradora desde su iniciación 11or los
hombres de elevadísimo talento y clara Yisión
política que hoy están en el poder merecidamente;
ya que desconfiánws siempre de la Reg eneración,
por lo cual alguHos de los hombres de El
Gonstit~tcional, han llegado has ta llamarse ellos
mismos ueófitos (1e la causa, y que nuestra fe no
Yino á tomar verdadera forma sino después de
que se di6 el último cañonazo de la Humareda ;
y ya que, por cualesquiera motivos, nuestra hoja
de servicios en la gloriosa y sangrienta lucha
q ne dió el tri nnfo á los defensores de la buena
causa, se quedó en blanco; en una palabra, )7 a
que la Regener..¡ción nada nos debe, ó mejor dicho,
ya que no hemos servido para nada, sepamos
siquiera ser leales y disciplinados, no pon·
gamos trabas á la marcha progresiva del partido,
y secundemos, en lugar ele con1batir. á esos hombres
de fe inquebrantLico,
al par que nuestras miras amplias y elevadas.
Sin haber sufrido aún contratiempos ni desengaños
en la carrera pública ; sin compromisos
personales políticos de ninguna especie; sin que
tengatnvs tmliiV'itt1:rt , " , .L •
les odios, bajas rivu1iclac1es y__.oe1iosas recriminaciones
; y con repugnancia por toclu lo que es pequeño
y rastrero, mientras que nos arrastra irresistiblemente
todo lo grande, no enlodarémos
nunca el sacerdocio del periodista, ni usarémos
en manera alguna l~lleuguaje vulgar y soez ele los
despech:ldos y maldicientes.
Soldados, oscuros si se quiere, pero siempre
leales y decididos de la Regeneración, que es la
cansa de la Patria, á ella dedicamos los esfuerzos
de nuestra inteligencia, así como le hemos dedicado
siempre toda la vehemencia de nuestros más
altos sentimientos.
Marw l. o de 1890.
La mujer hermosa tle solemnidad, si adquiero tal vez esa
educación de adorno que sirvo p>l:'a brillar en los salones,
la música, el uaile y alguno que otro icliomu, no posee ninguno
de los couocimiontos necesarios al eultivo clel coraz ón,
al llomi ni o y dirección de las pasiones, :i la práctica de las
obligaciones y de las virt1Hles (lomésticas qtto la mujer na·
ce destinada á necesitar, para sor colocarla en la snprema
dignidad de HJadre de fa milia, :i r¡no vino á elevarla Josu·
cristo, y por la cual influye tau directa y podorosament,e en
la¡¡ costulllbres de las sociedadc::J moderna~. La casa, su go·
biorno, su orden, su economía, su decoro, SLl honra: éste os
imperio de la mujer; y desde el sauto trono del hogar Lon·
raclo da á la patria hijos preparados para ser sabio8 ú va·
lientes, y á la sociedad hijas dignas de la clase y de la religión
en quo nacen. La muj e r herwo sa 1le Holemni c!ad, .Xar·
ciso-bembm. qnc no se ha ocnpado más qne 1ie la admira·
ciún de sí mi;:;ma, satisfecha de reinar e.n el círcnlc en qne
vive, snele tener toda la altivoíl, la impertineneia y el el(clusivismo
de las roinns de nacimi ento y rlo dereelJO 1livino,
que sc!lo conocen ele SllS vasallos á los qno vienen á ha cer·
las adnladoras y servilos zalema s, teni é ndose por dignas
de tod os los rosp&tos y con veneidas de qn · t otlo se lo merocen.
Cuando yo no be podido esquivar el ser presentado á
nna do estas hermosuras do primer orden, di primissimo
ca1'te/to y á pe1jettct t•icenda, he tenido mucha cuenta do
mostrarme lo más admirarlo, lo más absorto. lo m:is encan
tado dl· sn hormosnra, y be podido yo mi smo su ulbnm pa·
ra librarme do qne me lo envíen y salvarme cuánto ante~
de la tiranía de la belleza sobemna, á c¡u:on generalmente
no he vuelto á ver por cansa del asídue trabajo con que estoy
obligu.do á g-anarl'l.lo la vida, vor lo huraño de mi carácter,
por mi escaso instinto social, oto; en estos casos me guío
por la regla contraria á la de los casos de honra, y os q no
nada me importa qnedar wal con tal de salir bien-y yo
oreo que salgo bien cuando me puedo salir de cualquier
modo del círculo de la influencia de nna rnnjer de única suprema
é indisputable hermosnra- y se la recomiendo para
modelo á los pintores y escultores mis amigos.
Y vamos á mis jol'Obados.
PALIQUE
'I'al es el nombre quo hemos escogido para designar e lita
sección de crónica tnennda y bre~e, qno viene á reemplazar
las gacetillas, poipour1·is, y polirmfeas ile otros periórlioos.
Aquí será el lugar de las bienvenidas, las felicitnci&nes,
los sal nitos, los duelos y rlem:í.s asuntos de carácter personal
y local; aquí contestarérnos brevemente lo qne merozca
contestarse; aquí colocarémos nnestras gnerrillas de infantería
ligora; aqní hallará amplio acomodo todo lo f}ne no
quepa en otras secciones; este es el camaranchón para dopG·
sit.ar todo lo que no esté claramente clasificado. Aquí es,
por último, el gallinero, en donde está. trepada la claque para
aplandir ó para silbar.
Queremos que, sin la problem{ttioa veracidad y sin la
tradicional acritnrl del Cr·onicón de La Reforma, se le parezca
en lo hnenn. Con tal fin, solicitamos desde ahora, de
nuestros amigos, indicaciones útiles, dfltC1s y notidas ciertas
y oportnnas, .v sobre todo muchoo aojo para ol buen servicio
del ''Pali~Jue . "
Una vez por todas.-Al pres r ntarnos a! servicio de la.
Regeneración naciona 1, cn,vos principios viene sosteniendo,
en torla su )Jureza el Gobierno central, homos velarlo primero
y li111piado cnir'ladosnlJionte nnestrns annns, á usanza
(le los ca hall eros antiguos. Pelearémos, si fuere preciso; pe·
ro siempre con 1:1 e.:;pafla tersa · y bruñida, con la mano enguantada
y con el traje de etiqneta, como lws dnelistas del
tiempo de Luis XV.
El insnlto y la oont.nmelia no figuran en n11ostra armería:
sabernos cuánto respeto se mereoe el públioo y ouál es
la misi6n do la prensa entre las gentes cultas.
Tal es nuestro programa, salvas las contingencias imprevistas
de la l u oLa, en las que procederémos discrocionalmente;
pero sin olvidar, en todo caso, qne somos soldados
rle una gran cansa. "Ptlrtenezco á la Gul\rdia imperial", fué
lo que contestó un oficial francés á cierto camarada qne le
proponía una acci.ón indigna. .
Recomcncla.mos, muy especialmente á Jos polennstas
atrabiliarios, y á los espírit119 obcecados que toman siempre
el rábano por las hojas, los artículos que ha t.raíllo La Nación,
en estos últimos tiempos, bajo el título de Refm·mc~
const ·itucional, en cuyas plumadas maestras se descnbre el
i 1 nstro anter. Así es oomo se discutou los intereses de la
Patria: con serenidrtd, con e.levaciór. do miras, con claridad
<'lo forma en c¡ne se trasluce la rectitnrl rle propósitos. Por
desgracia, así no escriben sino los hombros de ánimo sereno,
ele wiras elevarlas y ele limpias intenciones, qne saben
contestar á b diatriba desatental'h .V violenta, como 'l'emístocles
al General espartano: "hiere poro escucha." Son m ny
pocos.
Un médico m1is.-El joven Doctor l\rignel V. ele la Ro·
che, inscrito ya en el Cuerpo médico del País, rlespué~ de
ce?ncienzndos y rigurosos estudios, bien acreditados on lncidtl
examen de grado, en que el ilnstraclo 00nsejo de la Facultad
le confirió, en la Capital ue la República, el Diplom~
correspondiente, ba vuelto á esta cimlad. Auguran ul nnevo
medico carrera afor~nnada, el nombre que hereda, sus pro·
ios lentos,~.. su consagración y otras prendas
:NoslteiJtH..b,i.mnl'l Ante e neófi~yapretamos
fnerteuJente la rnano del amigo.
Folletín.-Oon nna bien escrita narración, do reoiento
data, por D . José Zl:lrrilla, abriraos esta sección que siempre
escogerémos con particular esmero. Sioncl0 el autor de
Don Jtwn Tenorio, por sobre sn hiriente polémica en quintillas
con el Jatache vm·acntzano, tan popular en Hispano·
Am érica, omitimos recomendaciones superfluas.
Proourarén1os tener siempre mny bien servido el ''l!'o·
lletín" de El Nacional, .v al efecto, lll nestros estantes, los do
.nuestros amigos, y nuestras b11enas relaciones literarias que
qne de día en día inímos ensa11chandB¡ y sobre todo, las Libreríús
de Manuel José y do Benjamín siempre tan bieu
provistas, darán selecta lectura para mucho tiempo.
Garantizamos la moralidad y el l.Jnen gusto literario,
porqne, -francamente, en estos dos puntos somos por extremo
esowpulosos.
Estos aso m brau y oon'tri::;tan ¡Í sns pa1lrea clesde que al
salir del seno materno preseutan á sus ojo s arrnella defor111e
desviacicín de la línea uatnral de su espin¡¡zo. No por esto
la madre deja de amar aqnolla mnnstrtllllSa prenda do su
amor conyugal; pero ama y acaricia con tristeza á aqnél sér
á qnion está segnra do que no han de vor con simpdía sus
bennnnos, y :i qnien cuanto más crezca más objeto de moü
va á ser entro los niños sus comp aül'ro~, ele desdén pam con
homhres ,v de tl e~ntnor para con las mnjt:~rei!. Por mnoho cariüu
con qno sus padre;; y su familia le traten, por mucha
oonsideración que 1:0:1s maestrc;¡s oblignon á tenerle á sus condiscípulos,
por discreta y Lion edneada qne sea la sociedad
f}ne frecnonte, niño, colegial ú hombre, rw puede ménos do
apercibirbo de la prim e ra mirarla de extrañeza ó de compa·
si ón (¡un ecLa sohrc su joroba todo aqnel, hombre ó mujer,
á quien es presentado¡ ostQ e:: o! caso rle que no baya teniilo
qlle soportar la perpétna Lefa fle muchachos rle mala índole
y ele gentes maledneadas. I;a tristeza que á su~ pa<
lres ha iufundido su curvatnra rlorsal, se trasmite natoralmeute
á sn alma, er ete entre el cariTio in<,x-cnsable de sus
padres y el respeto forzado de los ex:traiíos; pero si la !lilacota
de l os rnalcriachs, la brutalidad de los fuertes y ol orgnllo
do los bien hechos le lmn revu elto coutínuamente la
bilis y lwn excitado on él las malas pasiones, oon cardona·
los HU sn joroba y heridas en sn amor propio, la primitiva
trist.eza va convirtiéndose poco á poco en amarga melanoo·
lía, on roconcentra<1a ira y en perpétoa sed de venganza.
Las perfecciones l]llt1 á. Slt cuerpo negó Dios suelen estar
oorupen sadas con la lucidwt. del ontenclirniento, la rectitnd
rlo s1t j ttioio y la perspiGtlidad de su inteligencia; y estllllia
y cultiva sn espíriLu, y so prepara á contr.11restar la
fuerza con la destrt1za, la agresión con la previsión, y á doruinar
con la inteli gencia el atrevimiento de la sandez y de
la mala crianza, y á devolver befa por befo, escarnio por
escarnio, aooptan,lo par enemiga tr aidora á la sociedad, á
q ni en no va á pocler tenor por ::t~niga sincera. Los médico¡¡
higienistas sttclen aconsej a r á su familia cuando es mnohacbo,
y á él cuando llega á hombre, los rjer0icios corporales
y la. gimnasia para rolmstecer, ya que no para enderezar, su
mal acoyunturado cuerpo; y sus piernas y brazos desmesu-
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Rcprorlucirémos en otro número y poT creerlo do público
interés, el luminoso informe qne dieron á. la .A.callemia de
Medicina los señores Drs. Pérez y Znleta sobre esa enfermedad,
tan común en ciertos animales, que se -distingue con
el nombre de ca1·b ón . L'l respetable Üol'pornoión me ucionada,
de cuyo periódico tomamos esa pieza, aproh•í las opiniones
de los hábiles profesoros Y por nuestm parte, ya que
los Anales de la Academia de .llledioina de Medellín tienen
una circulación relativamente lllliJ redncida, qneremos contribuir
á popularizar conocimientos de tanta importancia en
la Economía rural, tomándolos de fuentes antorizadal¡.
Además sabemos qne nuestro amigo el joven D. Francisco
Jaramillo de Villa, que hace algnuos días llegó de
Europa á e~ta cindad, estuvo allá haciendo estudios en el
Laboratorio de l\Ir Pasteur, sobre las inoculaciones preventivas
contra dicha enfermedad. •renemos el mayor gusto en
recomendarlo á los bacenrlados del Departam ento como persoua
apt:;. en la materia, y le lleseamos por lo mismo, mucha
y provechosa labor.
Don J{nJi.no Gutiéncz, nno de los más distingnidos repre·
sentantes de la colonia antioqneña on la CupiLal de la República,
joven servidor y prosélito convencido ele la Regeneración
y del Partido nacional, antioqaeño de los que,
gracias á un criterio político amplio y ciont.ífico , se han
emanciparlo de las estrechas preocupaciones de terruño, y
alcanzan á mirar alto y lejos, adolece bace algún tiempo,
en esa Capital, de sensible qnebrantaruiento de salu1l, ren dido
el cuerpo, ya que no PI espíritll, á la actividad cle su vi
·da. Su delicadeza le ha hecha insistir más de nna \·ez en separarse,
siquiera con licencia, de la Dirección General de
Correos y 'l'elégrafos que desempeña dignamente; pero el
·Supremo Gobierno, que estima sus servicios e u lo f1 ne valen,
ba iusistirlo á su vez en rehnsársela. Ro clamamos al Cielo
el restablecimiento pronto do esas fuerzas tan necesaria¡¡ en
el servicio inteligente y fecnncto do la Patria.
SemlJianzas meclcllinen;·e -<,-Desde N l:eva York nos ha
ofrecido sn valiosa colabnr::tci6n, y esperamos será nnestto
nporler, D .José Luis Híos, ol espiritual y atildado crítico,
t]IHl anda, deseufadado ,v certero, los ca111inos de Alberto
Millánrl, sPglÍo coneepto autorizado, y que tn\'O In onlere~
m, clesr.onoci!la eutre nosntms, y por lo mismo calificada de
profanacióu por espíritns a.is ú la
hogncm.
Ultirnamcnte ha escrito una set·ie ele perfile¡¡ ó retratos,
con el título qne encahe1a estas líneas, coloución aún inétlita,
do qne daré111os alguuas JUtHl~trns.
También puiJ!icaré1nOs sus Entrevistas.
Hay, ¡nt(lB, abund 1on y de sn espinazo, lo llah
una cloble ventaja ele longitud y de respiracilíu en una sala
oe armao, á más ele la .fascinaoióo r¡uc ejeroe nn joro\:.atlo
sobre sn ar1vMsario en el teneno de un duelo, de lo cual
adnciré clespt<és nn ejemplo al complotar estas reflexiones
.co n un relato.
¿Dónde bay tormouto, ni entre los del infierno ,v pnrgatorio
del Dante, como el •¡uo del.Jo snfrir nu corazón noble,
.generoso, tierno y etHllllera•lo colococlo entre las costillas y
~! estemon de un jorol9a!lo1
Porque yo quiero snponer q!le nna mnjer hermosa, joven
y bu o na p>1eda aceptar el amor de uno ele estos mal
contornados i11di\·idnos dtl nuestra raza¡ pero mientra s el
jorobatlo con.f)nist¡l y merece este amor, y despnés cuatHlo
pasa á ser su mujer legítima., ¿tillé infierno de dn1las, qn0
cráter de iras no clebe do snrgir y ele fennentar en aquella
alma encerrada en aqnel cnerpo, ocasión de las dmlr1s, los
sarcasmos y hs osar!Jas de todo¡¡ 1fls incapnceos tlc ereer en
]a lealtad y en la dicha de aq•1el1a unii.Íu de la hormosnra
con la deforrnid!HH
Y una mujer, hermosa ó fea, al cn1za1; las cnlles ó los
salones del brazo o acompañada do un jorobado rnatido,
j,OÓrlJO no ha do comprouder, de adi1•iuur, casi ele leer los
pensamientos de todos los circnnstantes, los anhelos do los
ltOmiJres y los hastíos de las rniljorcs? Y cólllo puede encon·
trarse en tal situación un iufcliz jorobado sin desear sentir
en sn diestra un Wigo ó un florete para cnstign.r aquellos
libertinos dest1os, aquellas injuriosas suposiciones y aqnellas
observaciones infames, hechas á media voz detrás do la
,¡eda del clac ó del paisaje del altanico~
Y una noble y santa mujer hermosa, qne por razo.nes de
íaruilitl, por salvar la honra de su parlre, por accidente pos terior
sobrevenido al hombre que eligió por esposo, ó por
amor vordatiero y leal al alma clll·iTiostL y grande aprisionada
por Dios en uquella corcova¡]a IHnnanidad, ¡cómo arrostrará
en el salón y en la cnllo la gencn l malediecllCi!on por espírit11 de partida, aún
sin conocer ni ol origiual ni la traclucoirín.
U nanto á lo purameuto literario, ya tendrétuoB ocasión do
decir algo.
Administración Dei13,rtamcutal.-U nifieado co-n la Po.
Huésped dibtiJlfi'Uiuo.-Fué para esta oindad elt'oven
D. José Vicente Concha, hij; del esclareoidó oit.!aa o de
imperecedera memoria, qne flev6 Rll mismo n!Ju br . 'El
jo en Concha, por su intel!gencia~ luslraét · rácter
y virtnde., es ornato de la sociedad bogotana,.. · eoece
de coraz1ín al Partido naciollal qne se ufana de o· lltarlo en
sns filas. Desgraciadamente fué muy corta su permanencia.
en :M:eclellín, de rlorHle partió hace pocos días á la Caoital
de la República. Anhelamos q11e haya llegado al boga~ sia
contratiotnpo a lgnno.
Don Abraham García.-Está entro uosotros hace poco
tiempo, do vnelta de su viaje á Europa. Gel-abramos cordialmente
su regreso. Soldar o convencido, inteligente y
acti ~o de los principios con be dores, fué, con la olara visi,)
n política que lo distingue, da los primeros en entrar
de lleno, sin reservas, sutilezas, ni desconfianzas en la Reg{
meraoión y en el movimiento lento poro científico y certero
quo la dirigía. l~l Partido nacional, y Antioqn·ia espQ·
cialmente, no deben o! vi dar cuáuto lo deben.
La jnventnd, que siempre le ha rnoreci!lo simpatías y
distinciones y r¡ne no tieue sino admiración, sentimientos
elevados y criterio generoso, uo bastardeado por emulaciones
innobles sí sabe cnárto vale esto ciudadano. Por
eso lo aprecia. y lo quiero. Recil~a nuestro saludo afectuoso
y el ofrecimiento ~ue lo hacemos de estas oolumnns.
"Directorio.-m. Lo que sirve para DIRIGIR en algunas
ciencias ó negocios; y así hay directorio espiritual, di·
recturio de navegación y otros". (Diociouario de la Academia
Española).
DISCIPLINA Y LEALTAD
Con gusto reproducimos el siguiente juiciosa
artieulo de La, Voz del Szó1· periódico que se publica
ell .Mauizalts.
líticu uacioual, inspirado en elevados propósitos, leal ú los DespnéR qne hablara el eminente Dr. Núñez, falLaba
principios, ro1leado de prestigio, popular Y querido par· qne lnulara el ilu~;Lre Dr. Ilolgu(n, los clos hombres más
r¡ue se halla libro do las perniciosas sugestiones do círculo notabl es do la polítioa actual, para acentuar el estado
y de las iuflnencias do intereses privados, el actnal Go- do la cncstión de Reform¡¡ constituuional.
uierno de Antioquia, formarlo de personal excelente y pre-
~idído pot el Sr. Bote ro Urib(}, sigue 811 ClHSO regular y EJn el artíunlo que en se~nitln reproducimos, tornado
fecumltJ en servicio del Departamento. Jl.fncho huono de he- do La Nación, se ve ~ las ola ras la pluma del Dr. Ho1·
mos c~perar de esta bien con&ti cuída admiuistraoíón, que, gnín y el acen,lt·ado patriotismo, exento de orgullo per-identificarla
en nuee.tro progra•na, merece nuestras simpa· sonal, de mezquina ambición, ele móviles oonltos, con que
tius y P.uestro apoyo, si pocp valioso, dcsintt1resado y deci- ha procedido en el asunto de Reforma Con titucional.
dido. Los hombres todos de buot a Yoluntad deben agrupar- NosoLros que, quizá por nnestros pocos aloanuea, no
so con entn~iasmo en torno del popularGobernau..te, Y con- hemos hallado otra objeción á la Subdivisión te1·ritorial
tribuír, carla cual en su ptnesto, á que las rectas intenciones que razones de apaciguamiento y de trar:~qnilidad de las
qne lo animan, encuentren por donde quiera campo propi- conciencias qne en esta tierra de los escrúpulos se per·
cio para Sil benéfico desarrollo, eH provecho de Antioquia turban por nada, deRearíamos que se. afront u·a la e u es-y
de la Patria común. tión con toda la energía que demanda el progreso, siempre
Sccrotn.da tlo: .Httt.'imlll, Co.n_~~~4e-lara.mttt:b1~f-!l1 Ll-·t.lCu· -7'-~W>JI'Ol!""r'-~ ~t'tl fle >t!bs~nn-te·llata
¡¡eparación del disti 11 guido joven D. José ()af}uín Hoyos manera de pensar, nos complace ver el profundo respeto
el Sr. Gobernador ha llamado á reemplazarlo en ose im~ que nuestros gobernantes tienen por la opinión y aun
portante Despacho, al no mooo3 c\igno i:ir. D. Rafael Gi- por el capricho de los pueblos, siquiera esté en reducida
raldo y Viana, joven también, que lleva sangre y apellido minoría, ouanuo Re trata de .haoer un cambio oo las ins-iln
8tres, y que, on posesión de relevantes merecimientos titnciones patrias.
personales, será, como el actual encargado del D.espacho Prueba esto qne estamos muy lejos de la tiranía y que
do Gobierno y Guerra, un oolauorallor utilísimo en la Ad- Colombia será .;iompre libre.
tuini straeión.
1\:t:uy dig~10 de Aplauso es el perseverante propósito del La opinión de los Srs. Drs. Núñez y Holgoín, e~, por
Sr. Gobernador de rodearse t\o jovenes, pertenecientes á lo vi sto, qae se refo1:me la Constitución y se difiera la
una generación nueva, que no tiene los resortes gastaJos, y snbdivigióu para ounndo sea exigida imperiosamente por
que cuentn con la actividad, la frescura intelectual y el vi - laR ueeesiriaJes de la administravión.
gor propios de los años juveniles. Los partidarios de la. subdivisión nos conformamos,
Como el Dr. Berrío, el actual .Tefe Departamental Ita por espíritol de disciplina, con asta o¡.¡inión, y abrigamos
comprenrliclo bien la importancia de la juventud en los la esp erau zu. de quo, á la sombra de la paz, el progreso
puestos públicos. de los ¡)neblos exigirá dentro do poco tiempo la llnbdi-
Damns l::t euhorabuena al meritorio agraciado. vi:>i6n .
en n-uestrn sociedad pretensiosa y vanal, descreida. y S1tpers·
ticiosa, fi~ol6fica y flamenca, l1ay miles do imbéciles que se
crerán oon ll¡n·ecbo de CJ'i~irso en jueces de sus más íntimos
sentin,ientos y peto, y he conocido
á. más de dos que han hecl.to temlrlar lÍ. nHÍS de dos Hércnles,
y arrodi liarse á más tle dos A u ti no os temidos de los hombres
y queridos do las m~1jeres. -Aún vive tal vez uno perteneciente
á una de las rn:is ilu~tn's familias de g~¡Htña, tan
prcveniilo contra los neeio J los fltrevidos, qne ni C;írdenas:
ni Valieras, ni 1\fonrenl, ni Jnlíán Hornea, ni ninguno do
lod q no por los aiios de 42 al 4 7 nos precio\ ha m os de tira·
dores ele pistula, pndimo~, nó avontnj'ltlc, siot) ignularle en
seguridad ni destreza; y hé aC)_nÍ para prueba sn tiro do
nput's!ll.: colocaua sobre la barra \·ertical un dnro; snl.Jre él
dos pioz¡¡s do dos onartos; solne ellas otro tluro, y sobre
ésto ottas dils ;-iezas l1asta sei:; dnros; y afinando Sll:l tiros
por cuartos de bala, levantahn todos los duros ¡;in tocar ú
Jos cnartos q u o lol:l sostenían. Esto jorobado llevaba el apellido
do la casa de 11., y :sobrina 6 cercana purieuta. suya
debe ser una dtlllucsa tau o.,;pléudida como IHw :¡a moza.
Pero por ochánnolas ele observarlor he divagado apartrindoUle
de mi intento, que era nn episodio de la historia
(le! jorol!ttdo conde de N., qne c¡uodará para el siguiente
número.
II
Conían para mí tranquila y alegremente los días de J unio
de 1846. Enlretenían y abreviaban sus horas los ame·
nos ostndios históricos de mí mall1adado poema da Granada,
y disLmían mis noches los pan1. mt llll(I\'O.~ entonces esprotacnlos
do mi existencia. ·Trabajaba
durante el día en nna. obra i!e mi gusto, por mí ere
gida é imagiuada, y no forzada ni itupuesta por editor m
01upresario; y esparc1a mi ánimo desde el anochecer á la
media noohe vagandfl por aqnellos t<>atros y jarfoiinl's, que
constituyen el paraíl'lo de los tontos para exp!otar sus bol ·
silltJS 1 pero en los cuales ha habido siempre un fondo de arto
y de poeéa, en que se apoya el mundo fantistieo de ilusión
qne hrota y fermenta en la atmósfera de la capital de
l!'rancia. Entonces como ahora, sobre el cieno soci&l v las
tiniol.Jlas del vicio, so alcanzaba allí á ver el resplandor
llel arto~' la luz de la cioncin; porque París es como una
arca rle doble fondo, como nn infierno bajo nn paraíso, en
donde el t(.)nto entierra \'ergonzoHamente sn pasado y su
porvenir, Sil vida y su 1linero en b orgía rle un inmenso lupanar;
pero el hom hre inteligento, ÍloJagen y semejanza de
Dio~, extrae de aq11ol caos, á la luz de la e8peranza f}Jte
alun!ln·a sus vigilias, sn nombre pnro y las creaciones encantac!
orns, y los beneficios humanitarios del progreso de
la ciencia v del arte.
IIallíat;Je venido rccomenrlado de Rtll'lleanx, por amigos
valiosos do mi padre, nu español etuigrarlo, mozo .v rioo, calave
ra y carlista, á quien su padre, amigo del mio (,v como
él adberidCI en cuerp¡¡ y alma. al primer D. Carlos Pretentliente
y segunrlo Carlos V de K·paíia), pasaba fuertes mesadas,
para qne en ltl omigrarirío so taantuviern. y no pensara
en volver á Navarra, sn pattia, donrle galantPos extremados
y Ii valHlados políticas le habían hecho héroe de extra.
marias fechorías v de mal olvidados desafueros. Llam:\ hase
Fermín (sin apellído en osto relato); tenía. el grado do coronel
en el disnolto ejército absolutista, vointinue\'e años,
un cnerpo robusto y un bolsillo reploto; con lo cnalllo\raba
consigo el tesoro inagotable de la aloaria do la juventud y
la osadía farfantflna del militar rico. Su padre era un opu·
lento uacon(lado, v él un buen mozo, con lodo!' los defect 'C:
y las prctousiooes· 1le nn chico n:d criado, un poco arlolaut!!
do con las mnjor,",:; y un algo más atrevido con los hombres,
pero de un corazón excoleote y de una arrogancia ca-
( Oonfinttará.)
1
1
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
\
\
4
i:tE .:~r:. "'COMERCIO
•¡ : ... .::o su vida, queremos advertir
que '•'l~· e de sus columnas, para tener
á nu. :l'Tie nte de las fluctuaciones del
IDf'i"~
d.'<' S !'• ·. e Le ·1dre¡:¡ y oarras de oro.-Al fin se ha
con ·enGHio el crw• •rcio de ¡ne entre estos dos valores no
dc·be haber dift eh algun y el precio de ambas ha sido
g:., •lc
Las Lr·hns . ~obre Nf!W-, •rk tienen un premio de 2 °z 0 sobro lail inglt!~nt<>:ru. a .. ¡ ;, cuQ.llcia 'lan.Lra..el E.s.t.ad.o v_cuotra los . ~ _ ., ""- r 1
particulares, y que los delitos y culpas que por tales ~m¡;;ed:di~o;'s~se~c~oi="-T-==-=~~-=:..:--. ______ ,_
meten deben ser prevPnidos y reprimidos; .- · ESTEREOSCOPIOS
8.• Que el artículo constitucional transitorio K confiere al Go-biet
·no "la facultad de preven¡r y reprimir los abusos de la prenso, Con vistas de la exposición de 89 &.• &. b van de,
mientras no se expida la ley de imprenta", y no habiéndola expedido
el Cuarpo Legislativo, el Gobierno no puede dejar de cumplir con Eugenio Prieto.
este deber claro y terminan te.
4.o Que PI juicio de controversias entre particulares correS[Jl1Dde
al Poder Judicial, mientras que la con~ennción riel orden socinl y
de la paz pública está especialmente encOJlJendolh al Gobierno;
5. 0 Qne la equidad y C<'lnvenieucia de la le¡:¡islación de imprenta
estriban principalmente en la exacta definición de deberes y derechos
y en la justa distribución de responsabilidad.
DECRE'XA:
I.- P1·eliminar.
Arto 1.• Los delitos y culpas que se comel~n por medio de la
prensa, se dividen en dos clases:
1.• Delitos y culpas .contra la socied'i!d; y
2.• Delitos y culpas contra los particulares.
Art, 2.• La intervención del Gobierno co111o asunto de alta poliera,
en la regulación del ejercicio da la prensa, se refiere á las publicaciones
subversivas y la re sponsabi.lidad J?l•rsooal de Jos impresores;
sin perjuicio de que por la vfa judicial se exija á los autor;s _la responsabilidad
qnP pueda corresponderle~, co~ arreglo al_Cor!J_g~ Penal
y leyes coruplementanaa, en conson nncta cou las dtsposwwneG
de este Decreto relacionadas con la materia.
Art, 39 La represión de las publicaciones oft•usivas y el castigo
de sus autores, correspopde, cerno el juzgamiento de cuale sq uiera
delitos comunes, al Poder Judicial.
li.-IJe l11J pt1blicacionea &ubvet·&ivas,
Art. 49 Constituye dE"IiLo de imprenta contra las sociedad cual·
quiera de los actos contenidos en lo< grupos 6ignieolE's:
¡,o Atacar las fuerz a obligatoria u<> las msLituciones 6 las leyes,
ó provocar n desobedecerlas; 6 tratar de jnotificar ~ctos q ne h\ti leyes
califican de dPiitos 6 Pxcitar á comet~l'los;
2~ Atacar Ja Religión Católica:
· 3.• Desconoc Pr ú ofender la dignidad y prt>rrogativas de cualquiera
autoridad eo el ordt'n ci1·il ó el ecl~siástico; atacar las Corporaciones
depositarias del pode1· público 6 las Ordenes religiosas reconocidas
por el E8tado;
4-.c Atacar la iustituci6o militar:
5.o 1'omar el nombre y reprPseotacióu del pueblo: combatir la
leaítima organizacióu de la propieriad; crncitar una clases sociales
co"'n otras, 6 concertar coalisiones con el mi smo oe,ieto;
6.o Atacar la inviE>lab;iiúad de In cosa juzgarla, ó coartar con
amenazas 6 dicterios la libertad de los Juece s, ~hgistrados y fu~:cionarios
públicos encargados de rersegni1· lo~ delítt•s;
7.• Publicar noticias falsas de las que pued " resultar alarma 6
peligro para el ordeu público, 6 grave daño á los intereses ó crédito
tlel Estado; _
S.• Anticiparse á publico!', Rin cocnpetentA permiao, actGs civiles;
hacer revelaciones que comprometan los intereses de la Re]'ública ó
perturben una negociación diplomaLica;
9.• lmpngnar directo 6 indirectamente la moneda legal, ó. propl'DdH
á su dfpl'ecíación;
10.• Ofender la deceneia pública con escritos obscenos 6 noticias
escandalosas.
( C~»ntinu a1'1t.)
AVISOS
AGENCIA UTIL
Federico .A.Ivarez Uscátegui ejerce permanentemente
el oficio de correo de la ciudad, para lo que se le encuentl
·a á cualesquiera heras del día y de la noche en la casa
MERINOS
y pañolones de fleco de seda de diferentes preúios y calidades.
E~tgcnio Pt'ieto.
JABONES
De lechuga y mil flores y polvos de velouti-ue y de
arro,z dando
Eugenio Prúto.
T. U. S.
Cigarrillos "La Legitimidad", introducido~ por 'l'. U, S.,
de venta eu el almacén ele
Eugenio Pt·ieto.
ME~clellín, Marzo 1,• de 1890.
Calle de Colombia, números 53 y 55. 3-1
MARGO A. MOLINA G.
SASTRE. MEDELLIN. CALLE DE AYACUCHO, NS. 172 Y 174
(Á UNA CUADRAD& J.A PLAZA l'lliNO!PAL)
Surtido completo :le J?afios de invierno y de Y~r~no.
-Precios sin competencJa.-PunLnaltdad y actlVJcl:t
Citación recomendada (normas APA)
"El Nacional: semanario de política, literatura y variedades - N. 1", -:-, 1890. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3682265/), el día 2025-07-16.