La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 82
•
Política-Litel'atura-N oticias-Filosofía-Relijion-Artes i of1.cios-Instruccion pública- Bibliografía.
Medicina-Variedades-Revista de la ciudad-Revista de los Estados-De Europa i mercantil.
Se- publica los mú,rtes, miércoles, viél'nes i sú,bados,
i el mismo dia se lleva a las casas de los suscritores de
la capital i se remi~e a los de fuera per los correos respectivos.
Los lúnes i juéves se publicará si es necesario.
Valor del trimestre, tres fuer tes.
Valor del semestre, cinco fuertes sesenta centavos.
Valor del año, diez fuertes.
Valol' del número suelto, diez centavos.
TRIMESTRE 11. AÑO l.-Bogotá, 24: de mayo de 1870.
Obsequio.
Tenemos el gusto de acompañar al presen.
te número de La Ilust1·acion, el cuaderno
que contiene el discurso pronunciado por el
señor canónigo doctor Antonio María Amézquita,
con motivo de las honras fúnebres a
la memoria del Ilustrísimo Prelado doctor
JUAN MANUEL GARCIA TEJADA, Obispo de
Pasto.
-En lo sucesivo recibirán grátis los suscritores
a La Ilustr·acion el Boletin Industrial
de la casa de los señores Nicolas Pe'
reira Gamba i compañía, publicacion impor.
tantísima para el comercio, las artes, la inDustria,
la agricultura, etc, etc.
En nuestro lUg'ar.
Nuestra mision no es servir a ningun interes
personal ni de círculo. Deseamos el bien
del pais, i para servirlo echamos mano del
único medio de que usan los hombres de
bien-la verdad.
Por eso al condenar los fraudes elecciona·
rios como contrarios al porvenir de las insti·
tuciones populares, no nos hemos encarado
con persona ninguna, sino contra los hechos
i con hechos; haciendo ver, que el hecho
abuso, trae consigo el hecho descrédito; i
el hecho descrédito, el hecho reaccion contra
el sistema o hecho desacreditado. Para esto,
¿ qué nos importan los hombres?
Para nosotros, en el homQre culpable hai
siempre dos cosas mui distinguibles precisamente
porque son distintas: la culpa, cosa
ma.la, odiosa, repugnante: el hombre, sér
interesante i digno por lo mismo de nuestro
intereso
Otra cosa, es apasionar las cuestiones i herir
donde no es, donde no debe ser.
Siernpre hai esperanza en mate1"ia de discusion,
de correjir al que yerra, impugnando
el error i respetando al que lo comete.
Tal es nuestro sistema.
Por el contrario, cuando se hace el bien,
nos fijamos en su autor i. lo personalizamos;
procediendo de un modo diverso del anterior;
i eso, porque los términos son distintos: el
mal i el biem.
Afeando el mal en abstracto, no obligamos
a su autor a i[tteresarse en su defensa; porque
una vez que no se le ha sonrojado enrostrándosele,
tampoco se le obliga a apersonarse
para justificarlo por cualesq ujera medios. En
esta materia, no querelllos quitar a nadie la
.ocasion de decir: ese no soi yo.
Tratándose del bien, sucede lo contrario.
Apersonándolo, su autor recibe en ello la recompensa
que merece; i los demas se sien·
ten estimulados a imitarlo, con indecibles
ventajas para el progreso moral de los hombres
en las vías de las acciones benéficas.
Está, pues, dada la razon de nuestro dicho;
porque es necesario que la malevolencia de
ciertas almas que viven de la hiel del ·odio,
no tengan ooasion para clavarnos sus colmi.
Ilos de crótalo.
Es, pues, en cumplimiento ~e nuestro sistema
que vamos ahora a ~ecl~· .unas pocas
palabras en obsequio de la )llStICH\, la cual se
qebe a todo el que hace el bien, sea qu!en
fuere; i de cuya regla no hacen escepclon
1GS funcionarios públicos.
De propósito no hemos querido ser de los
primeros ~n hablar del Mensaje presidencial
del 16 del presente sobre instruccion pública;
porque deseábamos que la sociedad lo juzgara
ántes que nosotros, no porque seamos de
los que bogan con el viento que sopla, sino
porque así, nuestro concepto se hallará anticipadamente
justificado.
Nosotros no somos de esos espíritus que
saborean la ocasion de censurar: por el contrario,
llenamos siempre ese deber, impreso
cindible a veces, haciendo para ello un soberano
esfuerzo.
Pero cuando se trata de aprobar, de aplaudir
una buena accion, un acto de patriotismo
o de acierto en el sentido de la buena voluntad
i del talento, sentimos el mas vivo placer
en hacer justicia, por mas que esa justicia sea
un encomio.
Todo hombre tiene derecho a que se le
aplauda el bien que hace; i si ese hombre
es un servidor público, con mayor razon, teniendo,
como tiene los mayores medios para
continuar por la vía del bien social, i habiendo
el deber de estimularlo en ese sentido, ha·
ciéndole comprender que no falta quien sepa
estimar i hacer justicia a sus buenos procedimientos.
Digámoslo, pues, de una vez.
El Mensaje presidencial del-lB del prese).lte
sobre instruccion pública, es una pieza
altamente honrosa para el ciudadano Presidente
i para su ministerio. En ella se ve la
franqueza del hombl·e probo i práctico a la
vez, que mui distinto del medicastro embaucador,
que engaña al paciente con fábulas
dictadas por un sórdido' interes, pOI' el con·
trario, pone valerosamente. el dedo sobre la
úlcera, por mas que el enfermo se crispe i
exhale alaridos.
En ese Mensaje hai grandes verdades; i
verdades que revestidas con el sello de una
elevada autoridad, deben llamar la mas seria
atencion de nuestros lejisladores, para que
no desmayen en la brillante labor de consagrar
a la inst~uccion .popular la mas preferente
atencion 1 el destinO de los mas cuan·
tiosos elementos posibles.
Triste es por cierto, reconocer con el ciudadano
Presidente, que en nuestro pais las
mayorías sociales son una especie de testigo
actuaria en la evolucion política de nuestra
decantada democracia.
Siete años ha que nosotros dijimos tambien
en un libro, ( Ciencia social) que entre
nosotros, no hui Constitucion, ni código civil,
ni de proceder, ni ma:s cód.igo de n~d~, que
el capricho, el despotismo 1 la. antOjadIza esplotacion,
para las. cuatro q~lOtas partes de
nuestros compatnotas. j Cuanto no hemos
de celebrar hallarnos hoi de acuerdo con los
hombres que nos gobiernan, .cuando nosotros
apénas señalamos el hecho 1 a~ora lo seña·
lan tambien los hombres que tienen los medios
de hacerlo eliminar!
¿ 1 cuál es la ca~s~ ~e esa dep.l,orable. situacion
de esa tnsllsuna ontoloJla social?
LA lGN¿RANC[A! Esas tinieblas del alma, en
cuyo fondo mujen todos los horrores del in·
fierno ...• La u;:urpacion, la esplotacion, el
despotismo, el c.epo i ~l ~arro.te.' ~pesar , d.e
la Constitucion, 1 del codlgo CIVil, I del codl-
0"0 penal i del diablo i de Dios mismo ••••
b Sí! e~tre esas tinieblas del alma no ve·
jentnn sino mónstruos.
1 hai que parar miéntes en un hecho de la
Se pub}i~an remitidos i avisos, a un preeio sumamente
modlco, que se arreglará con los editores. Todo
lo de interes j eneral se inserta grátis.
Los editores, N rcOLAS PONTON 1 C~
NUMERO 82.
mas espantosa veracidad i es,que como dice
Rousseau, "las naciones viven en los cam'
pos "; precisamente allí en donde no viven
la Constitucion ni los códigos oficiales, i en
donde si vi ven el cepo, i el garrote i la rapiña.
Hai escepciones i eso tambien es verdad ;
pero en jeneral, los gamonales rurales son
tan autocráticos como el Czar de Rusia, como
los Nerones i Calígulas de la Roma de
Popea i de Mesalina. 1 esto, porqué? porque
nuestro pueblo, en su gran mayoría rural, no
es sino una triste masa de sordo-mudos; de
pobres máquinas que creen que los gamo·
nales son por derecho divino, sus amos i
señores naturales!
De aquí, todas las patrañas, todas las supercherías,
todos los escamoteos elecciona·
rios i todas las cosas peores, que siente i con·
siente una masa infeliz de hombres que Dios
hizo libres, i que en vez de linchar o lapidar
a todas esas chusmas de cernícalos, de sanguijuelas,
de vampiros, de tinterillos de toda.
estofa, parásitos de las tinieblas. que la esplotan
' atormentándola i enseñándola la práctica
del crÍmen, cree que es así como se vive
i se debe vivir en este mundo; i que Dios hi·
zo la humanidad por el tipo de una bestia de
carga.
Por eso hemos dicho poco ha: luz i mas
luz! como el único medio de que los pueblos
se hagan ciudadanos i de que los ciudadanos
no vivan como ménos que los esclavos: como
estúpidos instrumentos de intereses que
no son los suyos. M. M. M.
--_.. - +-~~---
Cnestion importante.
En uno de los números anteriores de La
Ilustracion publicamos un artículo, referente
a la cuestion canal, tomado de Los Andes,
periódico que redacta en Guayaquil uno de
nuestros mas disti nguidos compatriotas. Como
creemos hacer un servicio al pai:s, reproduciendo
todo lo que dé luz en tan importante
asunto, hoi insertamos otro artículo
del mismo periódico, cuyos cálculos i apreciaciones
no dudamos serán leidos con interes.
Para mayor circulacion de todo lo que
se publique con referencia a tan interesante
negociado, hemos resuelto envia~ grátis
nuestro periódico a los honorables miembros
del Congreso, a donde se discuta el Tratado.
El articulo dice así:
Dos palabras mas
SOBRE EL CAYAL IYTEROCEÁNICO.
En el tratado sobre construcoion del canal del
Darien, celebrado entre Colombia i los Estados
Unidos de América, hai que distinguir dos cosas
que jamas han debido confundirse.
Rai que distinguir lo que es en él un verdadero
p acto úztemaúonal, de lo que es un simple contrato
civil.
Es deoir : hai que diatinguir lo que es la oura
de dos gobiernos o sea de dos soberanos, de lo que
es el oompromiso de dos particulares que se asocian
para la realizacion de una empresa industriaL
Examinado el tratado bajo este segundo punto
de vi ta, se enouentra que Colombia, propietario
de un terreno precioso, i 109 Estados "G nidos, po·
deroso capitalista. convienen en aplicar el terrena
del uno i el capital de otro a la construccion de un
canal que una las aguas del Atlántico con las del
Pacifico.
El costo de la obra se Estima apro..:imadamen.
te en 100 millones de pesos, a los cuales afiadimo
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
326
nosotros 50 millones, por intereses del capital
gradualmente desembolsado en el curso de los
trabajos. Costo total: 150 millones.
Uno de los negociadores del tratado por parte
de Colombia, ha calculado que el movimientu del
canal desde cl primer año de servicio será de 5
millones de toneladas, 500 millones de pesos en
mercancías, i 100,000 pasajeros.
El mismo negociador fija hipotéticamente el
dereoho que habrá de cobrarse por tonelada, en 1
peso; i el impuesto aa valol'cm sobre las mercancías,
en 3 por 100.
Adoptando estos cálculos i suponiendo que el
derecho sobre los pasajeros sea de 10 pesos por
persona, tendremos que los productos anuales del
canal, serán:
Por toneladas ________ . ______ $
Por derecho aa valol'em. ______ _
Por pasajeros. ______________ _
5.000,000
15.000,000
1.000,000
Producto totaL ___ $ 21.000,000*
Los gastos correlativos pueden computarse así:
Intereses sobre 150 millones al 8
por 100 _____________________ $ 12.000,000
Parte correspondiente a Colombia 1.450,000
Administracion i direccion ... _ _ _ 1.500,000
Conservacion._ _ _ __ _ _ _ _ _ __ _ _ _ 1.500,000
Imprevistos. ____ . ____ ._ _ _ __ _ _ _ 550,000
Gasto totaL ___ $ 17.000,000
GOMPAIl.ACION.
Total producto anuaL _____ . __ $ 21.000,000
Total gasto anuaL ____________ 17.000,000
I
Superávit a favor de los E. U. __ $ 4.000,000
Este superávit en 38 años hace la suma de 152
millones.
Lo que quiere decir que a los 38 años de servicio
del canal, quedará amortizado el capital
empleado en su construccion, con todos sus intereses.
Quiere decir tambien que en los 62 años restantes
de la duracion del contrato, el empresario Estados
Unidos embolsará, adema s de los cuatro millones
de superávit ordinario, los 12 millones de
la partida de intereses ya suprimida j por todo,
16 millones de pesos anuales .....
De mallera que al término de la duracion del
contrato, las utilidades líquidas obtenidas por
ámbas partes serin como sigue:
.;:. Prescindimos del derecho sobre metales i piedras
preciosa~.
** No hacemos cuenta de las utilidades que derivarún
los Estados Unidos de las 200,000 héctaras de tienas
baldias que se les conceden gratuitamente.
FOLLETIN.
Ib~ J;WQ,t~ gN! g~ Wt\\VU@ttNJ@
O
AMOR E RODIA
[ CO~TINUACION. ]
-Aun eslais aquí en pié, esclamó, como unos hombt'es
que no tienen nada que vengar, nada que castigar!
Yo era 'lO jefe indigno de vos, lo sé i lo confieso en
alta voz; pero se os ha devuelto vuestro verdadero
jefe; Virjilio está a vuestra cabeza ..... ¿ qué oguarc1ais,
pues, nobles hijos de Espartaco, todos esclavos como él
uespues de dos mil años? ¿ lIai en el cielo una paciencia
igual a la del hombre? ¿ Es posible que una nacion
tolere uno~ padecimientos de veinte siglos i halle en la
tierra la eternidad del infierno? Partamos todos! forj
emos armas de hierro de nuestros arados, derribemos
In. puerta de los arsenales, sublevemos la campiña rolllann.
al grito de libertad!
-Sí! sí! csclamaron los desmontadores palmoteando.
-Sé que al principio nos tratarán como bandidos,
prosiguió Jedeon. Estúpidos! cstraITan que hayn. bandidos
en las Lagunas Pontinas! Pero cuando los gobiernos
dejttn una campiñn. inculta i proscriben el trabajo,
¿ qué quieren que se hagan los hnbitantes de esa campiITa?
¿ no se ven obligados a hacerso bandidos? Si
se rompe el arado de los labrudores, estos tomarún el
pulíal! Seamos victoriosos, i los que nos llnman bandidos
nos saludarán con el nombre de héroes!
Estallaron frenéticos aplausos en las orillas del lago,
i el mismo Virjilio pareció conmovido por las palabras
de Jedeon, a quien dijo alargándole In mano:
-Jedeon, lo quc eapresais tan bien, yo lo pienso, i
maITana al despuntar el dio ......
-Cómo mañana! interrumpió Jedeon. Nada de
mañana! 1I1añana es el enemigo de todas las grandes
empresas! MaITana es el frio glacial que hiela el ardor
de la víspern.! mañana es la reflexion que mota el entusiosmo!
El minuto presente es nuestro, cojárnosle n.l
vuelo, como el único que nos pertenece. i Venid, hermanos
mios, ciñamos nuestros l'ifiones, sigamos al sol que
no se para nuncn. cnondo sale, i partamos!
Los desmontadores brincnban cOUJO los carneros de
la Biblia, sicut arietes, 0.1 oir las palabras de Jedeon, i
yn. la tropa operaba un movimiento de marcha del lado
¡je las montaílas, (luando Virjilio, que parecia dominado
LA ILUSTRACION.
LOS ESTADOS UNIDOS:
16 millones anuales en 62 años __ $ 992.000,000
COLOMBIA:
1.450,000 pesos anuales en 100
años ___ 0 _______ • ____ • ______ 145.000,000
Diferencia a favor de los E. U. __ 847.000,000
Como Colombia una vez cumplido el término
del contrato, asume la posesion exclusiva del canal,
se puede decir que los 847 millones que reciben
de más los Estados U nidos es el precio que
aquella paga por la obra que solo costó 150 millones.
Pero sea como quiera, el hecho que queremos
señalar es este:
Que los Estados U nidos, como empresario del
canal, quedan indemnizados con usura de todos
sus desembolsos i servicios, con las utilidades pecuniarias
que derivan del mismo canal.
Establecido este hecho, pasemos a examinar el
tratado en su parte diplomática, es decir, en lo
que constituye, como hemos dicho :in tes, un pacto
de carácter esencialmente internaoional.
Aquí nos encontramos con dos naciones, una de
las cuales (Colombia) concede a la otra (Estados
Unidos) los siguientes privilejios :
Exencion del derecho de toneladas para sus
buques de guerra j
Paso libre por el canal para su comercio, escua,
dras, ejércitos- i municiones, aun estando en guerra
con otra potencia j
Clausura del canal a la bandera de toda Nacion
que se halle en guerra con la Union americana j
Establecimiento de arsenales i diqucs para el
servicio de su armada, en los puertos que queden
a ámbos estremos del canal.
Estas concesiones que, como se ve, importan
enormes ventajas militares i comerciales para los
Estados U nidos, i el ahorro para su tesoro de las
considerables cantidades que sin ellas tendria que
pagar por el paso de sus buques de guerra: estas
concesiones, que sujetan a Colombia a pérdidas
pecuniarias de gran monta, i la atan fatalmente al
carro de las guerras internacionales de los Estados
Unidos j estas concesiones son, por añadidura
permanentes e z1·revocables. ***
I en campen sacian de ellas ¿ qué dan, qué conceden
por su parte los Estados U nidos?
00000000000.
Los partidarios del tratado dirán que en cambio
de las ventajas concedidas & los Estados Unidos,
estos se constituyen garantes de la inviolabilidad
del canal i de la soberanía de Colombia
sobre el territorio que lo contiene.
*** Así al ménos lo declara, respecto de las tres primeras,
el artículo 21 del tratado.
por un pensamiento desconocido, hizo un ademan i
detuvo a los primeros.
Jedeon miró n. Virjilio con un aire interrogativo.
-Escuchad, amigo mio, le dijo Virjilio llev{\ndole
n.pnrte, vos eslais en mi pensamiento como yo estoi en
el vuestro. As!, no creais que vengo aqui a proponeros
largos retardos, pero tengo un deber sagrado que cumplir,
como vn.is a juzgar vos mismo.
-Veamos cual es, uijo Jodeon con trémula voz.
-Lady Slumley estil. en In. villa, prosiguió Yirjilic,
tengo que arreglar con ella n.lgunas cuentas de moyordornillo
ántes de mi murcha. Como veis, es coso. indispensable.
Ademas, la urbanidau no me permite partir
así bruscamente sin decir un r espetuoso ndios aUlla
mujcr a quien creo hnber servido con fidelidad, i que
siempre me 1In. prodigado tanta bondad. Llenado estc
deber, parto como jefe o como soldado ele una empresn.
qua pondrá bajo la. proteccion de Dios.
Virjllio dió algunos pasos hÍtcia el kiosco del lago
como pnrn tomar el camino de ln. villa.
J edeon buscn.bn. palabras, i sus U,bios, secos por In
fiebre, se cerraban convulsivamente e impedian la emision
de la voz: un esfuerzo supremo le permitió estt'nder
la mano bácia Virjilio i decirle:
-No! esinútil.. .... quedaos! ......
Virjilio mir6 a Jedeon con unn. e presion que ningun
pintor seria capnz de traducir en el lienzo.
-Como! Es inútil! repiti6. ¿ Quereis que un mayordomo
tenga el n.ire de escaparse de una casn. sin n.rreglar
sus cucntas?
-Eh! elijo bruscamente Jedeon: lady, tumley no
hace cnso de esos usos comunes, pues tiene otros cuid,,dos
que el de arreglor cuentas con su mayordomo! ~o
os inquieteis, querido Yirjilio, pues yo me encargo de
ju. tificaros con ella, si algun dia tuviéseis llecesidad
de justificacicn ...... Venid, veniu .. ... . esn honradas
jentes nos ob8er"nn de léjos con inquietud. PLLrcce que
tenemos secrelos pura ellos; i no uebemos inspirarles
desconfianza ,\1 principio de nuestra emprc9a. ::lus pies
n.rden como si estuviesen sobre l¡¡·a2ns ...... dad la seilal
de mnl'cun, i vercis con que tl'ilSporte os responden.
-Amigos mios, vamos a pt\rtir !
Un grito de n.lcgrin responuió a estns pnlabras.
-Jedeon, dijo Yirjilio con voz suplicante, os conjuro
que ?le deis una horn. j no os pido mas que Imn. hora, i
partImos.
-ViljiJio, respondió .Tedeon mas ahrmn..lo aun por
esas instancias tnn misteriosas i c],U'ns n. 11. vez, los
desmontadorcs no os conceuen un lIlinuto, su llupucieucia
rcsponde por mí.
Pero nosotros replicarémos que, con eso i todo.
los Estados Unidos no hacen mas que constituirse
guardiantes de sus propios privilejios.
I añadir6mos que esos privilejios, léjos de
guardar relacion o consonancia alguna con la apetecida
garantía, contrarian abiertamentc el objeto
de esta, que no cs ni puede ser otro que el de im.
pedir que el canal in terocéauico sea convertido en
teatro, bas o medio de oyeraciones bélica/!.
Para penetrarse de lo exorbitante, irregular
i gratuito de las concesiones quc estamos examinando,
basta fijar la atencion en el artículo 25 del
mismo tratado.
Por ese artículo, Colombia i los Estado!! U nidal;
se comprometen mútuamente a hacer todos los
esfuerzos pOoibles, para obtener de las demas na,
ciones la garantía de la neutralidad del canal i de
la soberanía de Colombia.
¿ I qué se ofrece a esas otras naciones en pago
o en corretlpondencia del servicio que se les exije ?
Se ofrece ___ -Pero no i esto merece trascribirse
literalmente.
" Las naciones (dice el artículo 25) que por
tratados con las partes contratalJtes se comprometan
a conceder la garantía de la neutralidad del
canal i dc la soberanía del territorio, TAL COMO SE
IIA ESPIl.ESADO ÁNTES 1 CONCEDIDO POR LOS ESTADOS
UNIDOS DE AMÉRICA, serán eximidas del derecho de
tonelaje i walesqltiera OtTOS sobre sus bw]ues de
guerra que pasen por el can~l, ya sea en el todo,
o en la parte que se esprese en. el tratado respectivo.
"
Es decir, que por el mismo, idéntico servicio
que prestan los Estados U nidos, las demas naciones
solo tendrían derecho a la menor de las ventajas
concedidas a aquella r
Es decir que, para las demas naciones, ]os Estados
Unidos consideran suficiente compensacioD
de la garantía, una exencion de carácter puramente
pecuniario!
Un tratado plural de garantía supone necesariamente
una estricta igualdad de condiciones o
ventajas para los garantes.
I en el caso presente,no solo no existe esa igualdad,
sino que tampoco se la podria establecer sto
incurrir en nn inmenso absurdo, dado que hubiera
de tomarse por norma lo concedido a los Estados
Unidos.
Pues en verdad ¿ qué vendna a ser de la neu·
tralidad i aun de la utilidad del canal, cuanQ.o todas
o las principales naciones tuvieran igual derecho
para usar de él en sus guerras, i para cerrarlo
a las banderas de sus respectivos enemigos?
Esta sola refleccion forma la demostracion mas
acabada de lo odioso e injustificable de las concesiones
obsequiadas a los Estados U nidos.
-En nombre del cielo! repuso Virjilio: acordadmp
un solo illstn.nle, lo absolntamenle necesario pura decir
tnl adios ......
-l'\i aun ese instante! dijo Jedeon con ordn. irritacion;
porque eso instantc puede cambiarlo todo; porque
ese instante puede romper vuestra resolncion i
desviaros de vuestra. obra, qne en este momento es la
obra de todos. VÍljilio, vos no os perleneceis yo., perteneceis
a nosotros como la cn.ber;a al cuerpo.
-Pues hien, Jedeon! dijo Virjilío con lono resuelto;
si me negtl.is el minuto ue despedida que os pido, lo
abandono todo, i maiiana entro en el convento de los
camandulenses de 'rivoli.
-No, Virjilio, replicó Jedeon con voz estridente pero
contenida; no, no entrareis mauana en el convento de
los camandulen es ...... ¿ sabeis por qué?
-No, respondió Yirjilio con aire de asombro.
-Pues bien; voi n deciros lo que vos sabeis, Yirji-lio;
quedareis en el mundo, porque n.mais a esa mujer
i porque clla os ama: hé ahí por qué abi:muonais a los
tru b'lj lldorcs !
Viljilio, aterrado por este apóstrofe inesperado, i no
habieudo jamas manchado sus labios con una mentira,
bajó los ojos i se quedó inmóvil. Solo sus labios se
njilaban, como si recitase una plegaria mental para
pedir el socorro de Dios en aquel grave momento.
En semt'jante situaeion un hombre de mundo, un
hombre civilizndo habrin. presentado un buen aspccto
e inventado nlgunn. supercberltl oportunn. poro. rolspouuer
a J edeon; pero Virjilio, despues de un silencio
bastante largo:que decia mas que una confidencin. detallada,
confesó su nmor por lady Stumley, porque temi:1.
que, obstin6.ndose en cnllar, dejase libre campo n. suposiciones
calumniosos.
Jedeon e cuchó la confesion dc Virjilio como el criminal
escucha su sentencia de muerte.
~Pues bien, le dijo con la voz loco. de la desesperacion;
uespues de esa confesion, ya no os aconsejo que
no veais a lady tumley, os lo ordeuo..... i Esa mujer
cs mi hcrDlllna!
Esto filé como un cnmbio de golpes mOl·tales entro
esos dos rivales imposibles. A su vez YiIjilio quedó
aniquilado.
Los desmontndores, persuadidos de que Vhjilio i
Jedeon disontían entre si un plan de campañn, respetaron
su conversacion, i se habilln sentado a orillo. del
lago dondc cantabau a media voz la cantinela de AIbailO:
Fior di Roma, fio)' d' am01·e.
La orquesta de los pinos melodiosos acompauaba
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
P ero aú n no lo hemos dicho todo. F áltanos seíialar
la suprema de esas concesiones, o sea el coronamiento
de ellas.
Hemos dicho que de estender dichas concesiones
a l as demas p ot encias, se seguiria un inmenso
absurd o. Pues b ien : ahora debemos ag rcgar, que
aun cuando tal a bsurdo no se s ig uiese, Colombia
no podria hacerlas esten siva s a otros gobiernos,
porq ue los E s tados nidos las han obtenido con
el caráct er de ESCLUSIYAS, a mas de permanentes e
irreL'ocablcs !
De manera que en d efinitiva lo que resulta es:
que el Gobierno americano, sin sacrificio alguno
de su parte, sin compcnsacion alguna para Colomb
ia, se hace ca-soberano d el cana l, e impide que
las potencias europeas p rest en a aquella la garantía
que pudiera serle n ecesaria contra él mismo I
Reasumamos.
El G obierno americano, como empresario del
canal, deriva de él cnormes ganancias pecuniarias
que le ind~mnizan con exceso de todos sns gastos
i servicios.
-El G obierno americano, como n acion, obtiene
v entajas políticas que nada le cuestan, ventajas
que lo igualan en prerogativas con el soberano
del canal.
Si el tratado se aprueba i el Gobiemo americano,
segun se presume, traspasa a una compañía
particular sus o bligaciones i derechos como empresario,
quedá.ndose solo con las ventajas políticas
como nacion j entónces se verá. en toda su
claridad la triste decepcion que se encierra en ese
i nconsulto pacto.
Quiera Dios que no llegue ese caso!
Venezuela.
Llegó boi el correo trayendo periódicos de Cará.
cas hasta el 12 del mes de abril. La guerra
continúa i el Congreso sigue ocupá.ndose de la paz,
habiendo nombrado una comision de su seno para
que de acuerdo con el Poder Ejeoutivo, escojite
los medios de poner t é¡'mino a la. lucha armada.
El primer designado, señor jeneral Estévan
Palá cios, se encargó del Poder Ejecutivo, nombrando
para servir los Ministerios a los señores:
Domingo Holavarría, para el Interior.
Miguel Aristiguieta, para Hacie.nda.
Doctor Hilarion Antich, para Relaciones Ex-teriores.
Anjel D. Rámos, para crédito público.
Doctor Anjel Fermin Ramírez, para Fomento.
r jeneral José Donato Austria, para Guerra i
Marina.
estas dulces palabras, i la persiana del kiosco se abri6
para. escuchar ese concierto de la campiffa.
En una s\lledad no hai ruido lijero; la persiana,
aunque abierla Mn precaucion, trajo simultáneamente
las miradas de Virjilio i Jedeon; un rostro femenino
bri1l6 como el sol levante en la ventana del kiosco, i el
mismo grito de sorpresa sali6 de dos pechos, o mejor
dicho, de dos corazones. Los dos hombres habian nombrado
a Débora sin pronunciar su nombre.
Débora hizo con la mano una señal imperceptible, i
Jedeon i Virjilio se miraron como para preguntarse a
cual de los dos se dirijia aquella llamada. Su indecision
fué comprendida, porque se repiti6 la seña, i esa
vez con dos designaciones precisas, pues se les decia a
los dos: Venid.
Siempre es esa manecita de que habla el poela inglés
en Macbeth (t!lis little hand), la que tiene tan gran poder
para ajitar los hombres mas fuertes. Jedeon i VÍl~ilio
bajaron lo. cabeza i obedecieron como unos niños.
Al entrar en el kiosco, hallaron a Débora neglijentemente
apoyada contra 10. ventana, e inclinaudo háeio.
abras su cabeza i cnbellera que jugueteaba con las
brisas del lago. Débora di6 seguridad a su voz i les
dijo sonriendo tristemente:
-He oido gritos del lado del lago, i he venido aquí
por curiosidad. TO creía presenciar una escena de
oonspiracion o. campo raso en mis dominios. ¿ Con que
quereis comprometer aun a lady Stumley el dio. siguiente
0.1 fallo de su causa ?
-Nosotros no conspiro.mos, respondi6 Jed eon ; emigramos
con todos esos honrados trablljadores, porque
yo. no es soportable la viuo. aqui.
- ¿ 1 tnmbien vos partís ? pregunt6 Débc.ro. a Virjilio
con trémula 'foz.
VÍl~ilio, sin mirar a 10.j6ven, respondi6 con un signo
de cabeza nfirmativo.
-Ibo. a decir o.dios a milady, cuando llegasteis, dijo
ViI~ilio sin levnntar la. vi sto .
-Jedeon, dijo Déborn conteniendo las lú,grimas que
empañaban ya el esmalte de sus ojos, r etirate un instante
ahí sobrll la primero. grado. de la escalera, pues
tengo dos palabras que decir en seCI'eto a mi mayordomo.
Jedeon vooiló, pero uno. mirada severo. de lady tumley
le dió el aliento de un momento de re~ignncion ; di6
algunos pasos, i sin cenar la puerto. del kIOSCO, se qued6
sobre lo. grado. contiguo. al Umbl'o.l.
- Vil~ilio, dijo Débora mandándole aeercars~, tened
a bien esplicaros, pues no os comprendo. Decldme el
motivo que ha podido operar un cambio tan súbito en
LA !LUSTRACION.
Los cuatro primeros son miembros d el Congreso.
S e confirma de 1\1aracaibo la derrota sufrida
p or G uzman Blanco en t erritorio de B arquisimeto.
E ste habia espedido ya booos por dos i medio millones
de pesos, pag aderos ( ?uando t~ iunfe) con
la mitad de los d erechos de lmportaclOn.
El j efe civil d el Zulia h:1. esp edido un indulto
para todos los comprometidos en los movimien tos
revoluciooarioE' de aq u el Estado, ordenando su
inmediata libertad i la pub l icacion d el proceso
sobre la coospiracion que d ebia est all ar ellO de
abril, i que fracasó por v ijilancia de la a utoridad.
(De « La Empresa)) de 6 del presente. )
La revolucion de Cuba,
su PASADO, su PRESENTE 1 su FUTURO.
(ConLinuacion. )
D espues de la batalla de las Tunas, i para di simular
a los ojos elel enemigo nu estra falta absoluta de
pertrechos, mul tipliqué los ataques, i en la F e, Santa
Clora, Platanal, etc, se r epitieron las escenas de va-
101' h eróico de que en las Tunas se dieron tan brill antes
pruebas.
A la par que r edoblaba mi accion sobre el enemigo,
habia nombrado varias comisiones cien tíficas
que investigaran los medios, que no podian ménos
de existir en aquella rica Antilla, para fabri car el
elemento que t anta falta nos hacia, la pólvora j i
des pues de la batalla de San Jo e, cuando ya hacia
olgun ti empo que está bamos consumiendo únicamente
la pólvora i los fulmin antes que se sacaban de
las cÁ.psulas de Spencer, que aun quedaban, r ecibí la
noticia de una de esas comi iones de que ya se hab.ia
fabricado la primer libra de poi vara cubann, de la
cual me mandaban una mu¡,stra.
Dí órden, pues, de que se fabricase una g ran remesa
de ella, i prepareme a salir hacia occidente
llevando este ausilio por el que ya hacia ti empo que
clamaba el jeneral Cavada: mas al llegar a J ag ueyes,
tuve que detenerme por un doble motivo.
Se me presentó un individuo llamado Tejada, solicitando
ingreSAr en el servicio j pero con la es presa
condicion que babia de ser en mi propia escolta,
mostrándose tan interesado en ello, que infund iéndome
sospechas lo hice arrestar, i rejistrado, se le
encontró un afilado puñal i un savo-conducto del capitan
jeneral de la Isla, para que ~e le permitiera el
trá.nsito i se le ausiliase por todas las poblacione!!
guarnecidas por los españoles.-AI interrogatorio que
se le hizo, contestó que su intencion era cumplir la
comision que se le habia confiado de mntar a Quesada
i a Céspedes, por lo cual le habia ofrecido el
Gobierno español 30,000 pesos; i a cuyo efect,., habia
muchos hombres pagados i mucho dinero reunido
entre los comerciantes de la Habana.
Al mismo tiempo recibí parte oficial d el C. comandante
militar de Najasa de babel' dl'scubierto
una gran conspiracion entre los prisioneros espafioles
que residian en aquella fortaleza, i solicitando mi
presenoia en aquel lugar por ser cosa de mucha gravedad
j posé, pues, a Naj~sa e hice instruir sumaria
vuestro. conducto. i en vuestra alma ...... Hablad, Virj ilio,
no me causeis el mortal pesar de haber sido tan
bondadoso. hácia vos .... ..
--Milady, respondi6 Virjilio esforzando la. voz en
eada sila'ba, jnmas me olvidaré de vuestras bondades ;
el Ia.brador de Albano no será jamas ingrato h'lcia
lady Stumley.
-Estais hoi demasiado respetuoso, . ~ilio, i no
teneis razon para ello, puesto que sabeis e no existe
ya lady Stumley. Yo soi de condicion igual a la vuestra,
soi Débora la judía, la hija de un mercader del
Ghetto.
-Adios! adios, milady! esclam6 Virjilio prorrumpiendo
súbitamente en copioso llanto. Adios para
siempre !
1 se lanz6 fuera del kiosco con sobrehumana ajilidad.
Déboro. tendi6 las manos paro. detenerle, i lanzando un
grito sordo i lamentable se desmay6.
J edeon vi6 a Virjilio pasar como un rayo por su lado,
i le siguió al vuelo hasta la orilla del lo.go donde estaban
aguardando los trabajndores.
-Amigos mios, esclam6 Virjilio con la exaltacion
del delirio, no me vitupereis a lgunas lágrimas que doi
al partir o. esta campiña en que he nacido. uestros
abuelos lloraban tambien cuando abandonnban el pais
natal. Pasado este momento de escusable debilidad,
estoi enteramente a vuestra disposicion ; seguid lo.
huello. de mis pi es, i vamos doude está la libertad del
hombre i del cristiano !
Jedeon quiso estrechar 10. mano de Virjilio; pero
este r etir6 la suyo. con una repugnancia mui evideate
i añadi6:
- Hijos de 10. cnmpiña. romo na, vosotros sois cr istianos
i piauosos; n í, pongámonos todos bajo la proteccion
de Dios i de 1\'uestra Señoro. de Albano, i principiemos
nuestr o. snnto. empresa por un acto santo!
Yirj ilio se puso a la cnbeza de los.trnbajadores i los
condujo bajo el gr upo de los altos pIDOS que sirven de
cúpula móvil a 10. capilla de 1\'uestrn ~ejjora de _\lbano.
Al\{ levantando de nuevo lo. voz, dijo:
"":'Todos los que entren conmigo en esta capillo. serán
dignos de segui rme, i ar rojaremos léjos de nosotros a
los que no entren.
- Entraremos todos! gri taron los trabaj adores.
- i. 1 ol'areis c~n migo 1 añadi6 Virjilio
_ 'í! r espondl6 la tropa.
- ' De rodillas sobre la piedra ?
- ·'í!
-Venid ! dijo Virjilio mira ndo a Jedeon ; veremas
si todos or an de rodillos i cantan el $UÓ tll/ll!ll'rre&jtlium.
327
sobre el h echo que se me denunciaba, r esultando que
el comandante Troyano, capitan Cuadrado I lodos
los oficiales i soldados pri ion eros de guerra en aquel
lugar, i otros do la República, tenian formado un
plan para evadirse, lIevándo.e planos i apuntes minuciooos
sol>re nuelótl'as posiciones, fortalezas i gual' niciones.
Tomnndo en considerncion entonces que aquellos
bom bres habian sido perdonados bajo su prome~a de
honor,de no tomar otra vez armas contra Cuba, i con
la e presa condicion de que cada uno respondia p or
todos, i todos por cada uno :-que ya habian ántes
faltado a su juramento i se les habia perdonado por
segunda vez In vida :-que en vano amenazaba yo II
cada poso 1\ Valmaseda, Letona, Goyeneche, etc, etc,
con r epresalias que nunca llevaba a efecto, porque a
m i conciencia r epugnaba verter sangre de 110mbres
desarmados i vencidos :- que las crueldades i desafueros
de todo jénero se sucedian en la Hnbann.
P uerto Príncipe, Bayamo, Santiago i donde quiera
q ue dominaba el español j-convencido de que cuanto
yo h iciera por regularizar la guerra con enemigo
tan irl'aciona l, ser in infructuoso,-comuniqué al ciud
adano Presiden te de la R epública mi proposicion
tantas veces suspend id a , i se castiga e a los conspir
ad ores, lo cual orijino un decreto de la Cnmara de
Represen tantes, condenando a muerte a todos los
p ris ioneros de g uerra existen tes en el territorio de
la República, i a cua ntos se tomasen en lo sucesivo.En
cumplimiento ele lo cual ( 10 de octubre de 1869)
fu eron pasados por las armas los 670 jefes, oficinles i
soldados e~pañoles a q ue me r efer ia.
Empero, la falta absoluta de ausiJios de nuestros
h ermanos del estranjero, i la fr ia ldad que se nota en
la prensa americana, cuando tanta alharaca hacian
nues tros contrarios soure su próxima oampaña de in vi
erno, ten ia apocados los ánimos de algunos i entril>tecidos
e indignados los masj aunque yo que conocía
los recursos del enemigo, i algo sabia de las cosas
d el exterior, n i t emia de aquellos ni me asombraba
de e taS.-D ecíame Cavada q ue apénas contaba con
armas para la octava parte de su ¡ente.-Mármol
que tenia bien di ciplinados m uchos rejimientos sin
armas, i en el mismo Camagüey daba lá tima ver
aquellos brillantes cuerpos de li nea en sus cuarteles
de in struccion, man iobrando con fu iles de madera
con la precísion de un cuprpo de zuavo!', i prolong
arse si n n ecesid ad, una g uerra r uinosa que podia
terminarse brevemente, si se lograra hacer publicar
la situacion de nuestro pais i se daba el jira conveni
ente a nuestras operaCiones.
D eterminé, pues, sali r de la I sla, con este objeto i
al efecto cité a una junta de j efes del ejército (15 de
diciembre de 1869 ) a quienes comuniqué mi propósito
que recibieron pr imero con desagrado, pero al
cual suscribieron luego que me hube es plicado con
d etencion sobre sus inmensas ventajas. Aprobólo el
C. Cárlos Man uel de Céspedes, i despucs de haher
entregado yo el mando al jeneral T. C. Jarcian, i
r emitido pliego de instrucciones a toclos los jefes de
operaciones par a su gohierno durante mi ausencia,
el C. Presidente de la R epública me confió la import
ante mision que me ha traido a este pais, autorizándome
con los poderes q ue h e tenido el bonor de
mostr a r a u stedes.
( Concluirá. )
Todos los t rabajador es se precipitaron dentro de J
capilla, i arrodillándose 1\ la italiana, entonaron el
himno santo.
Ter minada la oracion, Virjilio sali6 el primer o, i
mostrando a J edeon apoyado contra un pino dijo :
- Ahl está uno que no h a entrado! Que se aleje,
pues su presencia nos acarrearía desgracia!
J edeon quiso decir a1gunaR palabras paro. justificarse;
pero los gritos de los trabajadores cnbrieron la voz
del j 6ven israelita que, r echazado de todos, se halló
0.1 punto solo i err ante por el desierto como Cain m 1'cado
en la frente por el dedo ele Dios.
En el kiosco, Débora abri6 penosamente sus ojos o.
la luz ; se levant6 como unl\ agonizante o.poyándoee en
las hojas de la persiana, i echó miradas tristes h~cir..
el lago.
El raisaj e tenia uno. melancolia profunda, pues ya
no habio. alli cá.nticos, gritos, grucia. ni amor : pat·
todas part es se habia estinguido la vida.
Un rayo de sol penetr6 por entre ?no. nube ~e invie~no
ilumin6 a 10 léjos un monte erIzado de lIernos Clpr~
ses i sauces, i Débora reconoci6 tt;Jui distinta~ente
la tropa de los trabajadores i a su Jefe soberbiO que
marchaba a lo. cabeza desplegando su fajo. f:ncl!.rnada,
como ~Ioisés en el desierto cuando guiaba a los hebreo!!
hácia los campos de promision.
Débora fué lo. que hizo mentalmente esa comparacioD,
sacondo de ella una especie de alivio, si es que a1gun'
cosa puede aliviar dolores tan grandes.
...
El regalo de la jndia.
y ARIA veces en la vida, el golpe de la fotalida. '{
que nos derribn, se combina felizmente con el soplo de
la Providencia que nos levanta. Débora, apoyado. s{) brc
el balcon elel kiosco i pensando en el leji81ador de I{)B
hebreo!!, volvi6 la cabe2a. al oir ruido de pa808, i vió
en la. calle de íirboles a su jardinero i un j óven criado
a quien reconoci6 en seguida: era un enviado d p)
eartlennl anta cala, el I!lULl entregó a. Débor el bI-llete
siguiente: #
"El cardenal Santa caln liene el honor i la suml\
satisfaccion de anunciar a lady tumley que Su Sanl1-
do.d recibirá el :lloisés de nuestro gran e;cultor que 1n
querido dar un hern.ano al :lIoi sé q d ~" n I' j- :rQ 1'1
nl/coll.
( C'071;· ... /uarJ.)
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
328
Senado de :Plenipoten«?i~rios.. ,
Dia 19.-8e dió lectura a las variaCIOnes IDhoducidas
por la Cámara de Represent~ntes al proyecto
de decreto que hoce ciertas conce~lOnt!s al ~stado de
Panamá, i el ciudadano l\1 e ncl~za propuso I se apre;>hó
: que se pl'escindiera de la f~r?Jula reglamenta~la
de pasar el proyecto a una com.lslOn ~on sus variaciones,
i se tomaran en conslderaclOn, las cuales
fueron aprobadas por el Senado. . .
Fueron aprobados en tercer debate los sl&,ulen~es
proyectos: 1.° el de decreto que ordena la. reIDSCl'lpcion
en la lista milital' al Subteniente Lorenzo Cacharama:
2.° el de decreto que restituye 81 Coman·
dante Andrus Villareal al goce ~e s~ pe.nsion .: 3.°. el
de decreto que dispone la pubhcaclOn 1 cfistr~buclOn
de ciertos actos del Congreso que deben pubhcarse j
i 4.° el de decreto que exime del pago de derechos
de importacion ciertos objetos.
Continuo el segundo debate del pr?y~cto,?e decreto
por el cual se ex,mera al señor Fl~vl~ IlDZOIl de
ciertos CArgos i se concede una autonzaclOn .0.1 P.ode~
Ejecutivo, el cual, despues de una lar~~ dlscus!on I
varias modificaciones, pasó a un.a COlUISlon a .~Irtu~
de proposicion hecha por el Ciudadano CUllea, 1
aprobado por el Senado. .
A las tres de la tarcle se levantó la seslOn.
Dia 20.-Continuó el segundo deba~e d,ol proyecto
de lei sobre el canal interoceánico, I fue aprobado
el artículo 26. El ciudadano Martin propuso i fué
aprobado, que se reconsiderase .el art~culo .12, el cual
se tomó nuevamente en conslderaCl fiscal de las minas de esmeraldas.
Fueron aprobados en primer debate los siguientes
proyectos: 1.0 el de decreto en que se declara ,que
la pension de que disfruta el Coronel ~radu,a~o Gregorio
Trujillo, tiene eL carácter de ah.menucla: pasó
en comision para seaundo debate al ciudadano Verbel:
2.° el de decreto aprobatorio de un contrato ~elebrado
entre el Director jeneral de Corre~s I la
Compañía de navegacion por vapor en el PacIfico:
pasó 'en comision al ciudadano Vengoe?~ea : 3.° el_ d~
decreto que exime de cierta responsa:b!l1dad ~l seno!
.rosé l\ial'Ía Obando E: pasó en comlSlon al Cluda~~no
Pereira; i 4.° el de decreto por el cual se auslha
al señor Pedro Vera con la suma de 1,000 pesos p~ra
la construccion de unas máquinas: pasó en com1-
_ion a los ciudadanos 1\:1ontoya i Restrepo L, 1\:1.
Pasó en seguudo debate el proyecto de de?reto
adicional al de 17 de mayo de 1869, sobre pens.lOnes
a los militares de la Independencia.
Pasó a tercer debate el proyecto do decreto que
manda inscribir en la lista militar de la Independencia
al Capitan José Rodríguez.
Se aprobó en segundo debate i pasó. a t.ercero el
proyecto de lei adicional a la de 3 de JunIO de 68,
orgánica del Crédito nadollal.
Pasó a tercer debate el proyecto de decreto f~mentando
el hospital establecido en la ciudad de CI·
paquirá.
Cámara de B.epresentantes.
Dia 19.-Se dió cuenta con el informe de la comil>
ion de infraccion de Constitucion i leyes, sobre el
denuncio que trece Representa.ntes presentaron a la
Cámara contra el Presidente de la República, señor
jeneral Sántos Gutiérrez, i tres de sus Secretarios,
por mala inversion de los caudales públicos. La co·
mision ooncluye proponiendo, que se declare no ha·
ber luaal' a formular acusacioll ante el Senado de
Plenip~tenciarios contra los funcionariol! denunciados
COIIIO violadores de las leyes.
El ciudadano Viana propuso inmediatamente .. qu~
se suspendiose la discusion hasta el 25 del que r~Je, I
que se pablicase el informe ju~t.o con el d~nu~~lO en
el Diario Oficial. Esta prop06lclOn, cuya JllstlCIa reaalta
i que fué bien defendida por .su aut?r, la com:
batieron los ciudadanos Largacha I Rodl'lgllE'z. ~ue
defendida, ademas del ciudadano Viana, por los CIUdadanos
Martínez Martínez,Ochoa, Palau i Restrepo.
Es de advertirse que el informe resultó so hab~a
presentado desde' hace un mes i que nunca 8~ h~bla
puesto al órden del dia, ni se habia indicado sll}ulera
que estuviese sobre la mesa. Circunstancia que se
hizo notar i que, era una razon mas par~ al?lazal' ~l
exámen de un nl'gocio grave, que no habla ~Ido pOSI'
ble estudiar con la e5c!'Upulo~idad que merece. Al fin
la proposicion del ciudadano Viana se aprobó.
Continuó el segundo debate del proyflcto que reforOla
la tarifa de aduanas, i el ciudadano Castro
Viola llropllSO se suspendiese la discusion de una modincacion
del ciudadano Gómez al nrtírulo 1,° pam
que se considerase otro artículo en reemplazo de
aquel; por lo cual hubo de susp euderse el d ~ bato por
mas ele una hora, para da1' tiempo a que el Secret~rio
pudiese dejar con~tancia en el libro de proposIciones
de la muí es tensa del ciudadano Representante
ya citudo. '
El ciudadano Castro Viola hace en su modifieacion
una reforma completa i grave en la c1asificacio~ ue
los articulos sometIdos al pago de derecho:! de 10lportacion'
estableciendo cuatro clases de artículos
gravados' fuera de los que SA declaran libres. El
autor de' esta reforma la sostuvo, i la combatió el
ciudadano Corráll's. El señor Secretario de Hacienda
quedó con la palabra.
Se levantó la sesion a las tres de la tarde. .
Dia 20.-Se Ill'esenió por el c~ud~dano Pereml un
pl'oyecto de "lei sobra renunctas I ~aca~t~s de los
Senadores i Representautes." Las dISpO~IC10UOS de
dicho proyecto son las siguientes:
LA ILUSTRACION.
" 1. o Cnrresponde al Senado de Plenipoteucia.
rios i a la Cámara de Representantes en su respectivo
caso i en receso de las Lejislatul'as de los Estados
o cu'olldo estas no hayan resuelto otra cosa,
adn'1itir las renuncias de sus propio~ miembros,"
"2, o Cada Cámara tambien es competente para
declarar la vacante en los casos especificados en. los
artículos 46 i su parágrafo, 81 i el 8~ en referen(;)a a
los 32 i 33 de la Constitucion." . .
Fueron aprobados en tercer uebate lo~ Slgll~entes
prúyectos de ,decreto: e.1 que declara pensl?n ali~en:
ticia la que disfruta hOI el coronel GregorlO TruJIlIo,
que exime de cier,ta responsnbilidad. para con el Tesoro
al señor Jose MarIa Obando; I que manda dar
un ausilio de 1,000 pesos al señor Pedro Vera, para
ir a los Estados Unidos de Norte América a pedir
i venuer las patentes de unas máquinas de su invencion.
Continuó la discusion del proyecto sobre aduanas,
de los señores Farías i Barreneche, aceptarlo por la
Cámara con preferencia a las demas que estaban en
curso.
Se negaron las modificaciones propue.~tas por lo~
ciudadanos Castro Viola i Gómez suceSIvamente j 1
el proyecto se aprobó con lijeras mo(li~cacione~ BUpresivas
que en nada aHeran lo su~tanclal. ~u dlscusion
fué todavia laraa i animada, sosteDlendo las
modificaciones en el s~ntido de una rebaja notable en
la tarifa los ciudadanos Castro Viola, Gómez i Silvestre.
'El ciudadano Restrepo manifestó que en
fuerza de lo que habi~ oido en la d.iscusion p~blica i
del estudio mas detemelo que babia becho oel proyecto,
se habia persuadido de su cnnven.íencia i que
recojia las observaciones que en la seslon antellor
habia espuesto en contra de aquel.
Se levantó la sesion, habiendo quedado con la
palabra para proponer, el ciudadano José J oaquin
Castro.
Dia 20 (nocturna).-Se aprobó en primer debate
el proyecto de decreto que ordena se pague de preferencia
lu pension que disfruta!llo~ jóvenes a~umnos
de la Universidad, Manuel T. 1 LUIS Urchurtl.
Se aprobaron las variaciones del Senado al proyecto
de lei sobre ausilio a la carretera que 5e está
construyendo ele este Estado al rio Magdalena. La
variacion principal consiste, en que los 50,000 pesos
anuales que se dan se tomen de las 10 unidad.es de los
Jerechos de importacion que han estado aplicadas al
pago de la deuda l\lackintosb, i !lo de.l product.o de
la renta de salinas, como lo dlspoma el proyecto
orijinal.
Se aprobó en primer debate el proyecto que m~nda
liquidar i reconocer un crédito a favor del senor
Cárlos Saenz.
Se suspendió en segundo debate,. b~ta el 23, ~l
proyecto por el cual sc señala un, e~1 ficlO para h.abltacion
del President.e de la Repubhca. (La antigua
Casa de Correos).
Se aplobaron en segundo debate los siguientes
proyectos: por el que se ceden unos terrenos a la
ciudad de Antioquiaj i el que ordena s.e reconozc~ un
crédito de 7·50 pesos a favor del Hospital de Candad
de la ciudad de Honda. ...... ... ..... ..
La esperanza.
DEDICADOS A LA SEÑORITA C. U.
Por qué tant.o penar? Por qué me abruma
La negra bruma que me oculta el bien?
¿ Por qué es mi vida de constante llanto?
¿ Por qué el encanto
Es tan cruel para mí con su desden ?
¿ Ese será del hombre BU destino?
¿ Ese el camino que nos ha trazado
La inflexible verdad de ser mortales?
¿ O scrá que los males
Para el hombre jamas habrán pasado?
i O es que la vida i el dolor se hermanan
1 siempre manan el pesar los dos ?
¿ O la vida en el hombre es un dehto .
Que sicmpre esté maldito
A hallar el infortunio siero pre en pos? - - -
Queremos, necios, aurnentnr las penas
Tan 8010 apénas se divisa el mal,
1 nuestras quejas por el ail'e vuelan
1 nos desvelan
La mas pequeña, la mcnor seña.!.
1 pronto, entónces, con afan )u.zgllmos
Que nunca hallamos el menor SOSiego,
Que solo hai penas i desdichas sumas
1 cual espumas
Que son mui s, . el
nacional, i el que pone en comUDlcaClon Ell dlstnto
del Colejio con la ciudad de La l\1esa, asegurando
que el que se llama Camino de Esealante, no es sino
una senda, la cual por ahora no tomamos mayor
empeño en negar, pues esto era 10 que el doctor Zal·
dúo. se habia propuesto desde tiempo atras impidiendo
a sus arrendatarios que desmontasen i compusiesen
el camino, i todo el mundo sabe que en los climas
calientes el crecimiento de la vejetacion es tan pronto,
que si no se tiene el cuidado de destruir el monte
por 10 ménos cada seis meses, los c.aminos se o?struyen,
i por consiguiento se acaban, 1. esto tamb¡e~ es
lo que habia sut:edido con el. camIDo en cuestJo?:
Ahora preO'untamo~ ¿ en el tiempo que transcurl'lo
desde que ~I doctor Zaldúa privó el camino hasta el
dio. en que se verifico la última inspeccion ocular que
fué como año i medio de t:ompleto abandono, que se
podria juzgar del camino? pues que estaba intransitable,
que fué 10 mismo que dijeron los miembros de
la inspeccion ocular, i eao mismo hubiera dicho cualesquiera
otro, i es sin duda mejor dar vuelta por un
camino abierto i compuesto, i e te fué el motivo porque
algunos propietarios del distrito del Colejio, de
acuerdo con la municipalidad, emprendieron la composicion
que tanto ha mortificado al doctor Zaldúa,
porque obraban en intereses enteramente opuestos .
A este re~pecto dice el doctor Zaldúa que el Síndico
municipal del distrito del Colejio, Sr. Jo~é Manuel
U maña, quiso convertir lo que él llama senda o camino
de Escalantc en camino coruunal, lo que nos pone
en el caso de preguntar al doctor Zaldúa lo que repetidas
veces bemos hecho i hasta ahora no nos ha
contestado: ¿ si conoce otro camino que no sea el de
Escalante que ponga en comunicacion mas inmediata
los distritos de TenR, Bojacá, Mosquera i Funza con
los del Colejio i Vio.ta? o quiere obligar n los ajentes
de las autoridades que residen en estos pueblos cuando
ocurra alguna dilijencia urjente tntre estos em.
pleado~, a que den una inmen~a vuelta basta la ciudad
de La Mesa? lo mi 'mo que a todos los habitantes de
estos pueblos que tienen comercio mútuo gravándoles
mucho mas el trabajo de sus vehículos de trasporte?
Todo esto como otra vez lo hemos dit:ho, está demostrado
en ~l mapa que recientemente se ha levantado
del camino carretero al Iagdalena.
Mucho se empeñó el doctor Zaldúa en asegurar
que solo los señores ~os~ Mauuel l!?Ja.ña, como Sin:
dico munici po.I del (hstnto del ColeJlo I Manuel J ose
Tovor son los que han hecho abrir i componer el
camino de E~calnnte i tambien los únicos que pasan
con sus récuas, i tenemos que decir que esto no es
cierto i pasamos a referir algunos becbos. El señor
Gabriel Hernández que manejó la hacienda de Tena
alaunos años, bacia que los arrendatarios abriesen
el"'camino como comisionado por el alcalde de Tena,
para que iJRgasen en este trabajo el servicio personal
subsidiario i no impedia que los hacendados del
Colejio pa;asen con sus part.idas i demas productos
de sus haCiendas, ni a ninguna otra per ona cualquiera
que fuese su clase ,i condicion, con_cargas o
sin ellas. El señor Leon Vargas Calvo, dueno de la
hacienda de 'rrujillo, en el distrito del Colejio, tenia
contratas a venta de miel con varios individuos que
tiencn sus propiedades en la sabana, pasaban todas
las semanas con numerosas partidas de mulas en
los años de ]857 a 1860, i de estas no viven léjos
Ivs señores Hernández vecinos de Funza que 10
pueden declarar. En époc~s mas . atrasada~, C,~ondo
eran dU('ño de la refenda hacIenda de TruJlllo,
los s"ilO~es Rudecindo i Rufino Umaña, tuvieron
contratas a sacar las mieles por largas épocas,
primero con el suñor Maurioio Rizo, que e!1tónces
tenia neO'ocio de mulas en la sabana, 1 post~
riOflllt'lItc ~on el señor Domingo Lema, i ámbos
'
Citación recomendada (normas APA)
"La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 82", -:-, 1870. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3687319/), el día 2025-07-18.
¡Disfruta más de la BDB!
Explora contenidos digitales de forma gratuita, crea tus propias colecciones, colabora y comparte con otros.
Selecciona las Colecciones en las que vas a añadir el contenido
Para consultar los contenidos añadidos busca la opción
Tus colecciones en el menú principal o en
Mi perfil.
Mis colecciones
Cargando colecciones
Compartir este contenido
La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 82