ESTADO DE ANTIOQUIA. ==NUEVA GRANADA.
Trimestre 6 o )
vale 1 O reales. ~ ~lede.lliu, de enero de t8a7. NL\mero 71 ..
vale un real.
-gz¡-e¡¡¡¡¡¡¡;a;m;;;:~=l:lóm!l=-;am:lllllll ___ ::;.m:a;¡¡¡;;;:¡¡¡a¡~'.l., rle su sm'rle. Pero sus ideas, sus hábitos i sus pre- Por eso pasaremos solo en ·ápida revista los
ocupaciones mismas lo obligahan a h;1c1:r mal uso rasgos mas prominentes de nuestras nue\as i-nsdcJ
sufrajin universal, que si es la salvacion, pue- Litu,.ioncs, los hechos mas ~"'otubles del cuerpo lede
srl' tambien el Yencno poderoso que quebran- jislativo, manifestando de ptlHe::rcneia, de qué maLa
i matn las sociedades. Pero hemos J:cho mal. n<'l'a ha cumplido 'la sagn1t·o d~l Con·
greso na~iona\,L•omn G_<~bernado¡· del ::socor:~·o,
como Diputado a la Lt>jtslatura de esa pro.nncia
i con o soldado cuando llUbn neeestdad
de 'defender a mano armada las insli~uciones
patrins, tenia muchos títulos pJra .mPrecer la
o·ralitud i el aprecio de sus concmdadnnos.
Nosotros que lo contábamos en el número d.e
los rna. eminuntes defensores de las doclnuas
liberales i en el número tambirn de los
pro lectores de "El_ Pueblo," ~eploram~>s sinceramente
ln pérdtla de c~e beln·pubJtcano! '
'/ - ~
.fio. Lo obligaban, lo obligaron a murho mas- a En la Constilucion de este de!Jian dC'clarm·.c
abdicár su soberanía- a ceder su derecho de su· FOl'IDAl.\lE,·TALES E mnEVOCADLE3 las garnntlas confrajio
a malas jenles- a sacerdotes enemigos de la eedidas n los granadinos en el arlieulo 5.o u e la
democracia, a legos intrigantes, a ricos egoístas, Constitueion úe21 de mayo de 1855.Esa era la obli-
' a gamoonks de parroquia. Porque aquí, estos son gacion. El cumplimiento de ella \amos a \Crlo.
sin duda, i no el pueblo núsmo, quien la sufra- A los gran:1dinos ..,e garantizó.
gado · ' La libertad indh idual que no l'econoce mas Ji-
En tales circunstancias, el sufrajio habló; pero miles que IR libertad de otro.
su voz fué fatal para la 'República. Su voz fué una La seguridad personal; el no ser preso, deteniscntencia
por la cual se declaró,que el partido con- do, an·csla~o ni f(gnfinado sino por rnotivo pw·asen
ador seria en adelante dueño de lodo, domi- mente cnmmal. ¡_
nadar de Lodo. EJ no ser juzgado ni '}Jenado sino a virtud i en.
Pero detengámonos un poco: digam1s lo que conformjúad de leyes p'reexiste1~tes.
era enlónces para el pueblo sencillo i relijioso,ese Lu inviolabilidad 'l:e la propiedad, no pudiendo
partido. 11 · J · d d 11 ·
E'•¡ aparecia ante los OJ. os de la mul tilud como e consecuencia ser es puJa 0 e e a ~mo '{lfJ.1~
vía de contribucion jeneral. EL PUEBLO. • el márlit' sublime de la época. l\Iúrtir por las pre- La libertad de industria i de tral,ajo .con .las
..,.,....,..._.,~WVVVWV'ooWVVVVOJV'oVVVVVVVV>~'~'VVVVVVVV'o. tendidas persecuciones del gobierno contra su cul- ?'estr·icciones que las leyes estable.zcao.
._;/('6erle/!t7,, -/. 0 de ene;ro- r~ -/cf'S7.
Hablando de la federaclon, dijimos en nuestro
editorial del númer·o 23:
• ·Tal sistema, si se pi· olea perfere el centt~alismo
,pt'O\' Ín~ial que es su mas perf~cto anlagon.Istt:; es
decir, la que proclamando la mc1epend~nc:a de la
proviuciH, arrebatara sus dereebos al dtstnto, sus
derechos al individuo, su soberanía a ámbos; la
tfue adoptara como medios de gobierno los consejos
del principio represivo i tet:rorist~; la q~e .. aumenlal'a
las desigualdades sociales 1 restnuJtera.
la acdon individual, seria la federacion bas-tar-
·da ·" ... . ....... .
"En algunas ·de las provincias ella seria la]
cComo la hemos indicado últimamente. Ninguno
de aquéllos derechos que hoi el gobierno jeneral
uo. garantizfl, subsistiría: de uno en uno ellos
küw desapareciendo, quedando solo como estériles
adornos de pájinal:i de pasndos códigos; i bajo
el influjo de eicrtas lendenc.ias, de cil..!rtas <.loelrinas
Í ue ciel'LOS l.wrnlJrcs, azolados por e\ principio
antisocial, por el p1·i~cipiu conser\'ador, volarian
.a colocarse en el número de los hermosos, pero
üc.ios j desvanecidos sueños.''
Des pues que csc1 íhimos esns Jfncas pasaron al.
gunos meses, durante lo~ cuales el partido conservador
trabajaba si u dcseanso por destruir uquí
)a-'':· rma dt'mocrritica d~ gobierno, i por obtener
¡)ara AnLioquia una lei que la hiciera Estallo soberano,
una leí que dcjánuola abandonada a su
propia suerte, le diera plenos derechos para goberuarse
por si sola.
La lei se obtuvo. El 11 de junio de 18t>6, el eon·
greso granadino decretó la independencia, o sea
Ja federacion de Antioquia; decretó que en esta
tierra infortunada se hiciera un ensaso de la nue..!'
va forma de gobierno, ensayo cuyas consecuencias
conocemos ya.
Un pueblo nuevo, Heno de elementos de riqueza
i de progreso; w pueblo mol'al i lauorioso, 1 ero
ignorante; un purl>lo lleno de necesidades i de asJ:>
iraciones, un fJUl'blo preocupado, pero jeneroso,
era el que iba a disponer con toda libertad de sus
iucru.1s propias, el que iba a lanzarse en la nue~
•.a \'Ía que se le preparaba para bu.scar la mejvra
lo 1 sus ministros; márlir por el destierro de sus El respeto del d.!imicilio .
amigo¡;;, los maestros de sus hijos -los jesuitas; La libertad de e Jtos. -·~
mártir por las dolencias que a mano m·rrwda eje- La libertad absoluta de ]a prensa.
cutaha en el Sur la servidllmbre rescalada contra La l.:iberlad de enseñanza.
sus antiguos opresores. Él aparccia tambicn co- El derecho de reunirse pública o privadamente
mo el famoso def~nsot· del órden i de la propie~ para di-scutil' !o que se quiera.
dad, defensor del órden i de la propiedatl, porque La igualdad de todos los dt~rechos individuales.
se imajinalJa monstruos espaPtosos- porque finjia A los antioqueños se garantizan los mismos de-sentir
los ma~es del comunit_1lo i de la anarquía, rec.hos, mas con un pero tal que todos ellos viepara
atararlos en seguida. Él, ensangrentando el nena destruirse i a ser del to~o ilusorios.
país en 18o1 pat·a combatir la leí de redencion ~1. El rtículo H de nucstr ,; nslitucion, colode
censos i para · C< al e 11 ahn · tte cadu dcsplles de ta lis n e g·arantlds dice-: es-su
querida patria, se presentaba en tln como el tos derechos tienen por límite el derecho de otro
litliador fir:me i denonado, como el amigo sineero i lo qne exijan la subsistencia i seguridad del Esde
ese pueblo,como el incansable combatiente de tado." Quedan pues, a merced de la Jei que se
la impiedad, del desórden, de la anarquía, del li- hace en el mismo año, que se reforma en el otro ..
bel'linaje i la opresion. - que se deroga cuando se quiera. Siendo así ¿te-
Con lodos esos títulos, razon tenia el pueblo pa- nemos garantías verdader·as, garantías constitura
esperar n1ucho de aquel partido. Pensaba en ciona]Ps, que son las únicas positivas? ¿Siendo
su funesto enwtño, que el partido conservador a asi te·ndrá algun valor esa Coostituci.on monstru0,
cuyas manos se hahia confiado el engrandecirnien- la Couslitucion de los 107 artículos? Nó.
lo de J nti,oq·uia independiente era un coloso, era
el jenio santo de la humanidad, el único llamado Porque mañana con el preleslo de que todas i
a salval'la, a arreglarlo todo, a mejorarlo lodo, a cada una de esi'\s libertades son perniciosas al deestirpar
el mal ¡ procurar¡ conservar el bien. recho de tercero, son contrarias a la subsisten~
c1a i seguriJad del Estado, puede una Le.Jíslatura
En su funesto engnfio se babia formado mil ri- compuesla de ignontntes, de fanáticos, de m~th·a-sueñas
i hermosas esperanzas. Dcslumhníbase al dos~ espedir leyes que definiendo a su arbitrio,
pensar en la magnificencia de lo que el partido aquel úereeho i aquella subsistencia i srg.uri dad,
dominante baria para coostituiri arreglar el nue- señalen límites a las gamnlías individuales: leyes
vo Estado. Hoi sus esperanzas están burladas; su que condenen la herejía, que eslaf111ezcan el san~
desl'onhmto lo maniücsta así. l la venda medio to tribunal, que admitan un solo culto:· ley.es que
apar ada de sus ojos, mostrándole lo tri&tc de su monopolizen las industrias: qne establezcan ·cla ..
ilusion, l.e deja vc1· que eL mártir subLime se ha sPs privilejiadas i clases esclavas: le) es que autocom
·erlido en el gl'an hipócrita de es tus tiempos, rizen a un esbirro del podcr'para )'iolar el domii
en ridículo pigmeo rl coloso omnipolenle. cilio i apoderarse de la propiedad ajena: ley<:'s que
Los deseos que manifestamos en el pl'imcro de pongan en manos del clero o de los jesuitas la
los a~ápiles que al principio. de este artículo.l~e- enseñanza: leyes que autorizen a un Prefeclo o
mos tnsE'rla,do,_ no se eumpllt'ron. L~s condiCIO- un jendanna para disolver M balazos las reunion<:!
S que a~II senalamos como nccesanas para que nes pacíficas de ciudadanos, que discuten sobre
la federacwo n?s aproYechara? no se h.AVVVVVVVV..vvvvVv""" ""'"""""
gan una renln, con lo cual se dcstru~ e enteramente
la igualdad i se hace que el pais en vez de andar
áuia adelante vtlel\'a par·a a tras muchos afíos,
i pierda mucbas de las gloriosa.s conquistas que
hiciera con inmensos sacrificio~
La de fusiles, ( e~e es el nombre mas cómodo)
po-r la cual se obliga a lodOJi..los individuos que
sean calificados eomo pudier.tes,a comprar fusil,
i mantenerlo limpio i arreglado i devolverlo alGobierno
el dia que se le-ecsija. Lei que ''iola escandalosamente
la propiedad, porque no se despoja
al ciudadano de la cantidad, valor del fusil, por
via de cont'ribua:i..un .feneral. , .ci que viola con
·descaro la libertad humana, porq.ue sin reque··
rirlo el Jel'echo de tercero, nos obliga a disponer
de nucs! al iuel'ü pam cutUpl'i:ll' cosas que no queremos,
que no necesitamos .. Leí que nos hace depositarios
de fusiles, nos obliga a limpiarlos, conservarlos
i devolverlos, i a pagar nosotros por el
depósito en vez de que por él se nos pagara. Sí,
. porque eso, bien visto, no es vender el arma si no
dada en depósito. ,i en fin, que obliga al millo
·nario a contribuir "'n suma igual a la que pagan
zapatero, el herrero, el jornalero, el pobre qne
gana ~pénas lo suficiente para mantener con hambt
·e una existencia inl'ort nad . Oh! Si eso es la
igualdad de las democracia·, maldita sea la igualtlad!
maldita la democracia1
¿ Cmílcs son en Anlioquia nuestras ¡:rar.antías
conslllucionales? ¿En Jónde están? Si hai alguno
Lan imbécil que las encuentre, que las vea,
que las sienta, muéstrelas i nos daremos por nmcidos.
Ahora en cuanto a poder del individuo, en cuanto
a poder de las secciones, en cuanto a descentralizacion,
en cuanto a sobei'anía ¿qué tenemos?
Nada.
El sufragante perdió su soberanía, el distl'ilo
]a perdió la m bien, el Cabildo es una burla.
lA MUJER TUERA DEL MATRIMONIO.
Los poetas de todos los tiempos han comparad0
a lils mujeres con lils flores: esta compnrncion
lla veuido a ser vulgar, per'o ha q11cdado siempre
verdatlern. Las flores. lJ ijas de la Aurora, solo "ivcn
miéntras las acarician el rocío de la nocheí los
besos amorosos del aura lllnlinal: Ull ravo de sol
ardiente, un soplo de cierzo frio marchítan pai·
siempre su belleza. Dcspues que pasan para las
mujeres, tlores con al m ·t corno las llama un poeLa,
las horas fujitivas de la juventud, pcr 'u muelas
por el amor, iluminadas por el entusiasmo; despues
que Jos pesares, los desengaños o el matrimonio,
que es !al vez un dcscngano mas, les hao
arrebatado la juventud, la inocencia i la alegría
¿qué queda de estas bellas i frájiles criaturas?
La mujer desde sus primeros años busca el matrimonio
con esa necesidad instintiva con c¡ue la
debilidad busca el ~1 yo de la fuerza, i el corazon
el amor i la dicha. No discutimos las ven laJas sociales
de esta instiLncion, tan encomiada po1· lodos
io.s noralistas; mas, como está organizada hoi,
paréccnos prvdncir un órdcn social estrafío, que
consiste en que la dicha pública pueda ser el resullado
de una inmensa acumulacion de dcsgraeias
pndiculllres.
-Niña, (le die, una q-qe pertenece al gremio a
otra que su pira por entrar en él) no bai quien soporte
estos muchachos; no me dcjau donnil', ni
lugar para pcinnnne. I Cúrlos que de soltero parecia
tan galante, lan tierno, al ora tiene un hu·
mor ..... ¡ Qné diehosa que era yo de so llera!
Todas las tardes les hacl'l1 esta advertencia las
casadas a las soltcrns. Tiempo penlido: el matrimonio
es un mi~lcrio: Eva por salisfacet· una curiosidad
renunció el· paraiso: esta traLlicion nunca
ha sido olvidada por el bello sexo.
No encontrar en el marido la tcrnur i las cua-lidades_
del amante, es la eterna dese ·pcracion de
las mUJeres casndas.
Pero la sociedad ha hecho del mntrimonio para
ell~s una necesidad fatal: por no tomarse el trabajo
de prep;:u·arlas para 11m· al' u.na e.·islcncia independi~
nle i ba ta:·sc a sí mismas, cuando por
desgrae!a o r.or e< m~t "l' no puedan refu.tiJcro privado, su amigo i a
veces su tormento. Las mujeres campesinas i parroquiales,
con tal de estnr bien enfardeladas en
telas de colores fucrtrs i chiHones; lle 1as de cintas~
de alhn_¡as de OJ'O, de ambescos relumbrosos;
con tal de verse con vistosos caclmmbos, i carrillos
roJOS i redondos, no piden mas al espejo, i se drclaran
por sí i ante sí conquist.\L. oras. La toilette
de una mnjcr elegante es ta!'ca ma labúriosa que
la de un Ministro ue Hacienda de una nacion en
bancarrota Si el e ·pejo de una de estas 1uvien1 rl
don Je Ja palabra ¡qué de cos· s no referiría ! En
~OLLETIN en el catcci:HnO la leche espirilnal de la doctrina; con- lni.lrrnol, el cobre, el oro i la plata: sembraba por do-
~ • ducíalo mas larde a la me~a de la ellcari~Lía, para cír- quiera, sobr<' In colina i en el nllle,-un pensamiento, un
~"'"'"'N"""w""""vv""'"~"""""wvo.vwvvwv..~~ cuncidarlo en el enl!ljelio, por segunda wz. recuerdo: veinte vet:es por din obligaba al pa ojero a ha-
1 cuando el cntolici.:mo habia refrendado nl hombre cer ciertos j!? los i ademanes ante la itn<\jcn de la Divi-
E PAPADO así con el sello de Dio!:, iba usurpándole poco a poco i a nidad, veinte veces repulida. En fin, estaba ahí, sierllpre
· • mediua que marchaba, cada minuto de _u.cxistencia. Le presente, en la casa i fnera de la casa, aliado del ho-
.THADUCJDO DE "LA l'ROFESJO,T DE FE DEL SIGLO XIX" seiialaha los dia_ de trabajo; lo fijaba los intervalos gar, cerca de la cnhcccra. sobre la ciudad, i sobre la.
ESCUITA POR MIL EuJENIO PELLETAN· ue de:scanso; le hacia sonar las horas desde lo alto de altura mas elevada en que la estatua de Crbto pudieJa
Iglesia; se levantaba con él por la mafwna; rezaba con ra colocarse.
El mnndo de la edad ;¡edia e-e habiu acabado. Ya se él al despertar; se scnlnlHl a In mesa al lJdo suyo; po- ~ l'ero eso es todü? No. El Catolicismo confbcaba el
había oido la palabra de Lutero. La impren la llevó esa nía sobro la almohada !a cabeza al mi~mo tiempo que alma humana con lodos :sns pemamienlos. f:t era el únipalabra
de nacion a nacion. La mitad de Europa SüCLI- él; le indicaba los días de ayuno; le pesaba el alimen- co que Silbia, predicaba, mediwba, escnuia, i tenia por
di6 el catolicismo. Cuando Jos libros eran casi de~eDno- lo; len;a como e11 lu mano Lodos los sentidos del cuer- medio de los libros, la coll!hJencia de los si.; us ya pacidos
se necc itaba ausolutamcnle que hubiera un intér- po, para medir· sus palpit<•ciones; et·n su compaüet·o in- sados. Solo él podía enscf¡¡¡r, i etLeñaba, sin contratliprc_
te entre el eranjelio i los creyentes; pero cuando d separable de de qne eritroba a la Yida hasta L¡uc salia cion, la grarmilica, la juri ·prudencia, la filosofía, la fíjemo
de Gutemberg hrzo caer el libro bajo el dominio de ella; i 110 abaa comparacion hizo nl punto 1 como si no le bastara conducir aJ hora por hora• tuosas captaciones de la música; las deslumbraba con
que su e_píritu condenara el eomentario. La multitud se toJos los hotnbr·es a la alvacion, hacin que cada uno las radinntes i espléndidns bellezas de los adornos de su::;
dijo a si misma: "mi conciencia interpreta la dorlriua sit'\'iera para la edificacion comun de los dema:;. Tenia templos; las :::tterraba, las dominalm con el lírismo grande
Jesu con. mas fidehdad que la lgk~ia." D~~~e e:.e siempre una palabra pública su·pcn::a en lo mnsallo del dioso de su arquitecturn; flnalmente, entraba en (ll\tt:.
momento el nnple \ego, libre ya de \a tutela rclljlOva,-e catnpannrio, para gritar a\ viento lodos los dramas· in- por todas las puerl<.s de Slt s~l' al mismo tiempo; yenh\'
z.o sacer 1 \e de ~U !Jropia creencia. 'De e a manera ne- ümos U.e todas 1\.\s fnm\\ia~. Cu\.\ndo lo::. hombres narian :)aba con sn pensah\·ento; q lena con su voluntad: _nl>~agnba
la nece idad de nn arbHram.cnto \'ivo entre el Cri to el\a hi.\blaua; hablab, cnan1lO . e rn.:a\ an; cuanuo e'ltl'a- ba en su · :\as\s· ~ vumcrlia dentro de ~u conclCncta.
i el cristiano,cs decir, el pt•tm:ipio müno de la. teocn:tcia_ ban los muertos al cementerio, hablaba; i cuamlo \o:; ll8i. tenia al hombre entero, la ato en lo fi~ico COlhO en
Sobre todos nqnellos c.uy,,s frentes .:e habian bailado condeuodo. subinn al carln\so tambien hablabn, para q:JC lo e·piritua1, envue\to en una. reu tle creencins i de -prñcen
las ag11as d~l bautismo, tenia la lgle::.ia católica has- el choque i el rechazo perpetuos de lodos sobre cadn ticas, red tan gnnde 1 de tej\do tan a prelado i fino, que
ta enluncc::;, i en toda ·u pleuiltH.l, el poder doméstico, el uno i de catla uno sobre totlo , viniesen a rcperc.utir in- en ninguna parte había una ecsislencia hmnana tan propoder
mor·¡:d, el poder intelectual, el poder pol:ílico, el deflnidamente en todas las cont:iencias la voz del sacer- fundamente oculta a us miradas, que pudrera e caparse
poder ciYil. Hecibia el niüo a la hora do su nacimiento dote. de su influJo.
i lo marcaba con S'l sello; le daba nn segundo padre, un Consideraba el mundo como un gran claustro abier- Formaba la conviccion en cada hombre, i tambien en
padre e.spiritual.-el padrino;-le daba nn nuevo nombro, to en que escribía a cada pa o i en verslculo.s, sus pen- cada pueblo lo que hoi llamarnos la opinion; P?Seia es-
tü nombre de no santo protector, para recordarle sin ce- samientos de salvacion. ffarcaba con su signo las pie- clusivamenlc un jstema de propnganda orgamzado en
sar que la relijion era la ftnnilia de lo.·familia: le ensc- dras del camino, lan calles, la pu rta del mercader, Europa; 1 '11Ía lo qnc pudieramo llamar hoi e_l monopo.{]
aba de de la infancia a balbuciar la suplica devota; lo las tablas del navío, el collar de la mujer, la armadu- polio de las idea:;¡ reYisaba toda palabra cscnta que putomuba
de los brazos do la nodriza, pura hacerle beber ru dE:! soldado, la monedo, la ruuralli1, el sepulcro, el diera llegur hasta el lector; borraba de la pájina toda
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
•
esa edad de d-iez i oetl¡o a veinte nños, de que ha- dondez tentadoras. La ni1a no tiene mas atrae- dos, critica a todo el mundo. Si alguna jóven Yiblamos,
es que la muJer interroga el espejo con in- cion que su tig·ura; las mujeres de que hablamos ve bajo su dependencia cada momento In regala
ieliJencia i ansieuad, para saber qué puesto le to- agregan a esla la elegancia ln: salvo al~. unas muJ·cres muí dist1·I rrllÍU<•s, 1 , . ·1
O ( ' l • (.l O.j ( p et:l.mentc descncantaJa, renuncia a ser muré"r todas sus \'Ctliaja , es i de he se!' un verdadero a1··· que Lienen la conciencia de su 1 1érito, i contra · · b t .,.r 1 · 1 1 1 1 tista. A fucJ' de a ·isatla 1 aec con frccueneia re- las cuales son impotentes los afios, de las demas 1 se com·wrte en ea a. i.,o es a pie<. ac CJUe a le-d
- , . . . va a la Iglesia sino el deseo de dar alauna ocupa- ,.~· .::!tn cot1C.Ienzu'la .l,, s··tt cttet·po l'On'o tltl tema :sencdlo, 1 acaso qurza
~ lfiJCn a sus ICI 01• 1 s . v ,' ~l 'd d porque nb lo compreuJen, i qt1e sin miramientos vulnemtercses
de la ~asa, sosliCoen con llll. cm. a 05 ren nuestra honrfl, que es el único patrimonio que teneafeduosos
le~ VCJCZ Jolorosa .de sus p_ad.t es, llen:n mos. Con el objeto de rcwhnnr csle in ullo hago e,_ta pu'\'
oto consulttvo en los negoctns domcsltcos, g~zan bliracion Pueda ser que mis llo abrir una
den esta ciudad el dia 1. 0 de fd>rero prúcsimo,
siempre que para enlónces cuente con un número
suOcicute de alumnos. En é1la se euseñarcín
lns materias si~uienles: LECTURA, ESCRIT ·n., ARIT~!
ETlCA, GR.\)1 \TIQA , JniQ)lA.S FnA:\CES E 1\GLÉS l TE.\EDCRÍA
DE LlOROS POR PAHTJOA DOBLE.
sas, caslas i puras en la j u ven tul~ on ~as gn? 11 ~- 11/edel:in, 26 de cl·iciembre de 18t>G.
van oJ celibato con enl1~reza, rcs1gnacton 1 dl~Dl-dad.
\irtud sianificn fuerza. Las que han sido,
frívolas i eoquelns er.,su mozedad no ~aben que
hace¡· con !.1 edad m~dura, se ecsasperan contra
el muudo i se entregan a la estéril profesion de
beatas. "
Mi jóvenes amigM:-Tcngan UU.la bondad df} manífe.
t.urme a conliouacion uc e:ta nota, si están sntisfcehos de
l,)s ofrecimientos CJIH híce al pMJlico en mi hoja suelta del
próximo pa. ado oovicrnbre, esto es: si han obtenido los conot:
imicnto ruúsico' en el tiempo qur lo. fijé.
Soi de U U. cordial amigo i fiel senidor.
Loren~o Marque~.
La lci del progreso i ~e 1a JUSticia_ impone a In
SOf~iedaJ graves deberes que cumplu· respecto a , R. LORENzo niARQUEZ.
las muJCrt's. El hombre no necesita que se le S?~lenga,
la fuerza se ampnru a sí misma; la .delHII~
dad es la que requiere uua gran protcccwn. St
no ha de ser pa1·a pl'olejer al déhil, no sabemos
gue la societlad sinct para maldita la cosa. Cumple
pues, a esla dar a las m IJeres una educa~~ion
séria, variad¿¡ i sustancial, para que sus cualidades
activas encuentren ejercicio, i puedan llevar
fuera del mntrimonio una vida laboriosa, indepen-
Nuestro aprcciatlo amigo:-Tenemos el gu to de contestar
a U. satisfactoJ'iamenlc la preguntas que nos hace. pue no
so' amente no hemo hallado cxajeracion en us ofrecimientos
~tnó que ánte pot' e periencia propi.a c.:recmos pueda U.
trasladar eso · conocimientos aun en ménos ticntpo del que
U. ha inr.licmlo. Le atlvertimos para su satisfaccion que te-nemos
plAcer en dar este paso •
Somos de U. atentos seniJorc .
J. de D. Escobar.-S. !lfasso.
diente i digna. Por diez establecimientos de cnse- SRA. MARTA MORENO.
nauza para hombre~, se encuentra en el país uno
de mujeres. ; No es esto .el ep;oismo brutal de la
fuerza, que SOlO tiene pi'e\'lSÍOl1CS 1v CUidado.s para
sí misma? 1 esas preocupaciones estrechas 1 mez(
lUinas! que arrojan nna especir de disfavor so])
re la mujer que quict'e vivil· )<>elevarse pur medio
de su talento i enerjía, deben ser _ince.~ant~mcn
te combatidas por todo hombre de mtchJencw
JI.Iedcllin. 26 de diciembre de 1856.
Mi mui respetada soi1ora: ·
Ten9a la boor.lad de man ifcsinrmc' a continuacion de esta,
i Ja Srita su hija ha obtenido los conocimiento mú ir?
S. que ofrecí en uua hoj n suelta que U. ~ió, i si los ha rec.:
JbH!o en el tiempo que :pedí para tal empresa.
Soi de U. mui atento 1 respetuoso servir.lor q. b. s. p.Lorcnzo
Alargue~.
¡ uc corazon. Sn. LoREtxz.o MARQ 'Ez
iJieclcllin> 27 de diciembre de 185G.
_Mi .~espetado Sr;- Tengo el gu to de contestar a U. que
mt _mna. ha obtentdo los conocimientos gue U. ofreció, en
el bcmpo fijado en su hoja que dió al publico.
Quedo de U. atenta servidora.
ll!arta Moreno.
A los alumnos no se les enscñ• rú simultincamente
todas las materias, sino sucesivamente segun
la aplicacioo i el apron'chnn ienlo de cada
uno. Cada padre intlicará cual de los dos id!omas
cstran,]eros quiere que su hijo estudie primero.
Ln escuela estará alJierla desde lns ·7 basta las
9 de la mariana; des<:e la 10 hastn las 12 del dia,
i desde las :5 hasta lis ñ de la tarde.
Cada alumno pagari mensualmente cu.\TRO PIE·
ZAS DE 8 DECIMOS.
El Director t>frcce a ]os padres de fnmilia, que
lo honren confiándole la educacion de sus hijos,
hncer todos los esfuerzo. po~iblcs no solo para
que los ninos se instruyan, sino lambicn para inculcarles
sentínlientos morales, i pura hacerles
adquirir i praclicar los modales usados entre personas
cultas.
A LOS GOí ERGlANTBS.
Hace ya algÚn os meses que se ene u entra en
nuestro poder unJ caJa con esta marca S. & C. ps.
núm. 3215. Con este moli\'O avisamos al público
en los periódicos de esta capital, danllO not!cia
de la existeoc:ia de dicha caja en nuestro poder, ,
para que el dueño ocurriera a reclamarla. A pesar
de esto~ niugu11 indi\!Juo se ha prcsentodo a
pedirla como suya. Para eYitar los perjuicios Que
pudiera ocnsionrirscJe al poseedor p·>r la inacdon
de las merrancías que contuviera uiclw caJa, hemos
resuelto abrirla en presencia de testigos, haciendo
que rtan; mas la creencia de
qlle yo procedía de nwla fe, es de todo punto ofenslva a
mi reputacion de hombre honratlo que aspiro a merecer,
j para lo cuallrato de aju tar mis acciones a los preceptos
de la morill ~ocia!.
Pnra .dc::ov
Citación recomendada (normas APA)
"El Pueblo - N. 71", -:-, 1857. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3684536/), el día 2025-12-19.
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