• EL REN'ACIMIENTO
Año I-Serie I
DIRECTOR
PEDRO JOSE GOMEZ C.
Dirección cablegráfica: RENACIMIEN.
Para suscripciones entenderse con los Sres. J. N'
Paniagua y c.', Agmcia del Petlodjsfflf1)' Cmtro de
Anu,.ciadores~P¡azuela de Sa,. Carlos.
Número suelto ................................... $ 1 .. .
Número atrasado.............................. ..... 1 SO
Para anuncios, arreglos particulares.
Remitidos, columna ............................... So .. .
No se devuelven originales.
La correspondencia debe rotularse al Director.
Oficina: Pasaje Hernández, piso bajo, número 30.
Contratado un aviso por determinado número de
veces, se hará ef ecti vo el valor de ellas aunque se
ordene su suspensión.
,
OANAL DE PANAMA
II
El colaborador de El Correo
.Nacional estima que, conforme
á la negociación pendiente,
Colombia les da á los Estados
Unidos una renta anual de
$ 1.25°,000, que a13por 100, son
la renta de un capital de cuarenta
y medio millones de pesos.
Para llegar á esos 'resultados
hace los siguientes cálculos:
" H La zona de terreno por donde
dehe pasar el Danal. Esa zona, tal
como la desean los Estados U nidos.
con una extensi6n de 6 mil·las á cada
lado. 6 sea 10 kil6metros, representará
un área total de 1,600 kilómetros
cuadrados; 80 kilómetros de
Océano á Océano por 20 de ancho.
i Cuánto vale esta zona r Los mis·
mos Estados U nidos han ofrecido por
las posesiones danesas en las Antillas,
que son t.res peñones estériles, que
por todo miden 300 kilómetros cuadrados,
5.000,090 de 9ólares ;-Ia zona
de Panamá está incomparablemente
mejor situarla, es toda deterreno útil y
casi plano. Suponem<'ls que puede estimarse
en la misma proporción,
cuando menos, en que los Estados
U nidos han estimado los peñones de
Dinamarca, y en este concepto valen
los 1,600 kil6metros cuadrados oe Pa~
namá 27.000,000 de pesos; pero para
proceder con liheralirlad, estimémoslos
en ¡:;ólo 20.000,000. Como se ha
tratado de fijar en una suma anual la
indemnización que deBen dar á Colombia
los Estados Unidos, tomamos
para estos cálculos la ren~a q~e al 3
por 100 anual darían esos 20.000.000,
y tendremos para este concepto que
.Colombia da por año .... $ 600;000:' .
Las cosas valen lo que dan por
ellas. No basta que el dueño estime
una. propiedad territorial
en enorme valor, si no hay oferta
que corresponda á"ese avalúo.
.¿Fuera de los Estados Ul1idos '
hay quien compre la zona que'
ellos piden para el Canal? Si
hay otro compra90r, ¿ cuánto
-ofrece por ella ?
Es sabido que la Compañía
nueva del Canal de Panamá se
:reconoce incapaz de terminárlo,
y que el Gobierno de Colombia
no ha recibido propuesta para
conclufrlo sino de los Estados
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Oficina, Pasaje Her~ández, piso bajo, número 30
República de Colombia-Bogotá, jueves 5 de Marzo de 19°3
Unidos. Sólo ellos proponen que
se les ceda la zona, y no la toman
por suma fija, sino mediante
ciertas compensaciones por
todas las ventajas que derivan
de la negociación.
, Es probable que las islas ~anesas,
por las cuales han ofrecldo
cinco millones de pesos, encontraran
otros compradores, Inglaterra,
Francia ó Alemania, por
ejemplo, porque entre esas islas
está la de San Thomas, cuya
abrigada y profunda bahía se ha
hecho punto de escala de varias
líneas de navegación; y para los
Estados U nidos tienen la excepcional
ventaja de estar cerca de
Puerto Rico y á distancia relativamente
corta de La Florida
y de las bocas del Misisipí, á
lo que se agrega que el Canal
interocéanico le dará grande importancia
como estación naval.
El valor de las islas danesas
no está en relación con su tamaño
ni con la calidad de sus tierras:
proviene de su situación,
de las condiciones de sus puertos
y de otras circunstancias que
las hacen de tal manera diferentes
de la zoná istmeña, que no
son en manera alguna adoptables
como punto de c9mparación
para fijar el valor de aquélla.
Si el Canal no se abre por
el Istmo de Panama, ¿ valdrá la ·
zona por donde se proyecta hacerlo
los veinte millones de dólares
"en que, con liberalidad,"
la estima el colaborador de El
Gorreo Nacional? Con toda
seguridad no los vale, porque no
se ceden sino baldíos que han
permanecido eriales, no obstante
las inmensas sumas que en
áquella región privilegiada han
gastado la Compañía del Ferrocarril,
'la del Canal y las de vapores.
La agricultura, acaso por
la escasez· de población, no prospera
por aquel lado entre el Atl.
ántico y el Pacífico; no hay minas,
ni empresas de importancia,
fuera de las de transporte y
excavación; luego no hay fundamento
para sostener que abandonadas
éstas ó una de ellas, alcance
esa zona un valor que no
ha .podido hasta ahora darle la
obra más gigantesca que han
acometido los hombres, porque
. es muy superior á la realizada
en Suez.
El valor de la faj4 que Colombia
les cede á los Estados U nidos
proviene de que en ella está
excavada la tercera parte del Canal;
de que la Empresa tiene numerosos
edificios para oficinas,
depósito_s, habitaciones y llOspitales,
excavadoras, dragas, otras
máquinas, herramientas, materiales
y muchos útiles; los planos
de la obra, el cálculo de los
..
gastos y un ferrocarril aux.iliar,
que vale como una decena de
millones de dólares; pero todo
esto, inclusive la tierra misma,
perderá gran parte de su valor,
acaso todo, si Colombia, por exi-
- gencias excesivas, no aprovecha
la principal ventaja que para la
ejecución'de la obra la favorece:
poseer la parte más angosta del
Istmo americano. Est~ es su
fuerza en la negociación, porque
todos los bienes muebles que
acabamos de mencionar, corresponden
á la Compañía nueva del
Canal, y sólo por coincidencia
de situación contribuyen á. darle
preponderancia para la vía
interocéanica á la comarca en
que están radicados.
Si se suspendiera definitivamente
la Empresa del Canal por
·Panamá, los 16,000 kilómetros'
cuadrados que piden los Estados
Unidos, para la apertura y
término de la obra, salvo en la
parte apropiada y cultivada, tendrían
un precio aproximado ó
poco mayor al de las. demás tierras
baldías de esa región. El
que hoy tienen, si es más alto,
proviene, sin duda, de la espectitíva
en que se está respecto á
la realización de aquélla; pero
como es aún contingente, está
muy lejos ese precio de los veinte
millones de pesos que 'le asigna
el colaborador de El Gorreo Nacional.
Al presente, no entra al Teso~
ro Nacional suma alguna por
producto ó renta de los 1,600
kilómetros cuadrados de la zona,
y lo propio continuará sucedierido
si el Canal no es excavado '
por ella; de consiguiente, no serfa
acertado proceder en la negociación
en el su puesto erróneo
de .que Colombia da una renta
anual de $ 900,000 por ese con ...
cepto.. ,
Queda en ' pie, como baluarte
inexpugnable, el gran valor ',de
la zona, por ser la parte más angosta
del ~stmo americano, y,
por lo mismo, la más apropiada
y ecol.1ómica para la construcción
del Canal. El Gobierno de
los Estados Unidos la necesita,
Colombia la posee. Para cederle
el uso, debe estudiar el negocio
por todos sus aspectos; pero no
nos parece que convenga dislocar
la base muy sólida de las
justas exigencias, alegando pérdidas
que no sería posible comprobar.
.. _ ..
"Estudios de Legislación
y Derecho Civil"
POR FltANCISCO JosÉ URRUTIA
Abo~aao de los Tribunales del Eculldor
Así se intitula una obra magistral que
'_ está escribiendo el Dr. Urrutia, de la cual
hemQs recibido el primer tomo, con honro-
Número 22
sa dédicatoria que agradecemos cordial.
mente. El tomo está dividido en dos partes:
la primera es una preciosa monografía jurídica
sobre la proleccifm dada á la mujer
en casi todas las naciones conocidas, desde
la más re~ota antigüedad hasta nuestros
días, en los pueblos orientales, la China,
los hebreos, los griegos, los lacedemonios,
los romanos, los cristianos, los germanos,
los francos, los sajones, la Edad Media, España,
la Revolución Ftancesa, el ~ódigo de
Napoleón, el italiano, el alemán y los Es.
tados Unidos, viéndose;} la mujer salir poco
á poco desde el estado de repugnante ab.
yección, en la que se le d~sputaba hal>ta 1 .. ,
cualidad de ente racional, y era tenida por
cosa que podla ser vendida por su padre,
por su marido y hasta por su tutor, y llegar.
en mérito de los adelantos de la civilización,
á ser la compañera del hombre, con
derechos propios, y casi su rival por lo
que aspira á conseguir en los ramos civiles ~
. y politícos.
En este profundo estudio no se sabe qué
admirar más, si la laboriosidad benedictina
para entresacar de esas oscuras legislacio.
nes lo puramente necesario al objeto que
se propone el autor, ó su amplio y c1arísi.
mo criterio para comparar su. dispo~icione5,
Ó el método seguido, ó la erudici6n
poco común 'que revela, sin pretenderlo, en
toda la obra. La segunda parte está desti.
n~da al examen de las disposiciones del CÓ.
digo Civil del Ecuador sobre la Autoridad
madial, dtrech,s del manaD en los bie.ms de la
mujer,y la separación de bienes por la termina ...
ció" de la sociedad conyugal, En catorce capítulos
examina y compara con otros códigos
las disposiciones del ecuatoriano, sirviendo
cuanto dice para el nuéstro, pues son iguales
estos dos Códigos, con sólo las ,meren.
cias irtdispensahles para cada nacionalidad;
de manera que el estudio de la obra puede
servirnos de grande utilidad á los colom.
bianos.
El lector de este libro se encuentrá verdaderamente
contrariado al ver otro capr.
tul o llamado Mi/al, destinado á examinar
una ley que acaba de expedir el CongresQ
Liberal del Ecuador, sc>bre matrimonio civil,
en la cual se retrocede en el camino de la
civilización, declarando el matrimonio diso_
luble por' sentencia del Juez laico, que deja
á la mujer sin amparo', á los hijos abando.
nados, en fin, á la sociedad conmovida por
su base. Según esa inconsulta ley, el ma.
trimQnio se .disuelve en abscluto, ó se suspende
'por diez años. Los esposos no pue.
den arreglar sus dilicrepancias, pues la mu.
jer queda impedida para contraer nuevas
nupcia.s. No recibe sus bienes sino merma.
dos á favor del esposo, y aunque sin víncu_
los con éste, no puede disponer de lo súyo
sin9 con licencia de ese marido que ya no
existe;, y á él corresponde también el US¡¡ ..
fructo de ellos. Con sobra de razón obser.'
v~ · el autor, "que esa especie de confisca_
, ción impuesta ca.ntra la mujer- en favor del
marido, es un resto de las antiguas iniqui.'
dades consignadas eq 10!i códigos, cllan
Citación recomendada (normas APA)
"El Renacimiento - N. 22", -:-, 1903. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3690853/), el día 2025-10-24.