\ RE PUBLICA DE COLOMBIA r
ANALBS OH LA ASAMBLEA NACIONAL
Serie V Bogotá, Abril 27 de 1907 ~ Número 12
I
Págs.
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to importante y reservado, pedía se constituyera
la Asamblea en sesión secreta, á lo cual accedió.
Eran las dos de la tarde.
IV
Acta de la sesi6n del día 2:¿ de Abril de 1907 ........... ................ .
Acta de IR .esi6n del día 23 de Abril de 1907 ..................... .. 89 A la;; cinco y treiuta y cinco minutos ~e reanu
Proyecto de ley" por ¡" cnal Re conceden varh. (lOnsioneq
TOBíAS V ALENZUELA legios de ensefianza secundaria.
República de Colombia-Asamblea Nacional Oonstituyente
y Legislativa-Secretarta-Abril ~3
de 1907.
En la sesióll de la fe..cha se dio primer debate al
anterior proyecto, y fue aprobado, pasando en co
misión á los honorabl os Diputados Rui:t, Piñeros
y Blanco, con veinticuatro horas de término.
Rueda A.
RELACIDN DE DEBATES
DEL DÍA 11 DE ARBIL DE 1907
" En época pasada se suscitó una lucha forrni
dable en el paí~, más bien que pO!' ue partido político,
por un grupo fanático de ese partido que ata
cando el sentimiento religioso suscitó la tormenta:
trató ese grupo de establecer y propagar en el
Cauca la ensefianza laica y obligatl)ria, inacepta ble
para la conciencia pública, en eon traposición á
la cristiana y libre dada en escuelas privadas cous
tituidas y pagadas por IO del error. ¡ Cuán- que los papeles parecían cambiados, yesos liberales
tos absurdos en las creencias religiosas! ¡Cuántas contradictorios eran apenas consecuentes con el
abominaciones en el culto á sus deidades! Fue pre- principio absoluto aUIl de todos los organismos: el
cÍaa la venida de Cristo para que otras verdades pl'incipio de conservación y progreso que es el
iluminaran la razón humana; Plldo pues decir El: principio de la vida.
'~o sqy la luz del mnJ;tdo,' y agre~al': 'Soy el ca, " ¿Y qué sucede ahora? No se necesita que ha
mmo, la vel'dad y la VIda, I el .caullno q':l8 debe I'~ yamos vivido más que los veinticinco años últimos;
correr el hombre p~ra l~egar a sus sublimes destl- que hayamoH conocido las catástrofes de las gue
nos, la vel'~ad_q~le llumI~a la mente, humana, el nas de 76, 85, 95 Y 99. Basta ver lo que sucedió
fec,ur:do prInCIpIO de la VIda Ilatural, Ultelectual y en esas épocas para calcular lo que puede seguir
relIgIOsa. pasando en Colombia. Dijo antbs un honorable Di-
"Si se trata de buscar remedio á lo!'! odios poli putado que de Colombia pretendieron hace,. una
ticos, ¿dónde lo encontra:emos~ ¿Serán las leyes escuela, que ojalá hubiésemos seg,uido en ella. Pero
hum,;.nafl las qu~ velJgan a (:l~rvll' de ~anacea para en esa escuela se nos enseñaba ¡ideología y muy
~nfrenar las paSIones de ~artld~, que a nada ~e su poca práctica de la vida. Hemos pecado por poetas,
Jetan? Cl'~O que el remedIO es~~ en el est~dl~, _en por idealist.as y por filósofos, y no hemos ido á la
la ace~taClón, en l~ prop~ga~lOn de los prmc.lpIOs realidad de las cosas. Nos apartamos de ese camiy.
máXImas e:vangélIcoB. S. CrIsto ~n sus doctrInas, no desde el año de 1850, y pOl' la elección del Ge
SIempre su~hmes! condena t.odo OdIO y manda ~mar lleral López cambió ell'umbo de la política entre
á los enemIgos; SI podemos perdonar, por la VIrtud nosotros_ Soplaron los vientos do la revolución
dA e~a máxima, á los ql1~ ofel1den _ nuestro amor francesa, y de Francia, que ha sido nuestra segunP:
OPlO, ¿no podremos deJa~ .de odIar al que no da patda por la intelectualidad, cuyas doctrinas
plens~ como nosotros en pohtlCa? 90 ?cluyo, pues, repercutieron en toda la América del Sur, surgiededUCIendo
que en las vel'dades Cl'lstlanas se halla ron los filósofos socialistas y sus escritos vinieron
el remedio que busI:amos." á encender nuestro cerebro.
El honorable Diputado Restrepo dijo:
" Sr. Pl'el'lidente, honorables colegas:
" No quería tomar parte en el presente debate, por
temor de fatigar vuestl'a atención, ya cansada
quizá.
" Mis ideas á este respecto están consignada::!, con
las de mis colegas, en el informe de la Comisión,
bien conocido de la Asamblea y del público todo y
de una parte del pa.ís tal vez; pero es necesari.o que
en este momento solemoe en que la Asamblea Nacional,
como que se incorpora á meditar en su pro
pio fundamento moral, demos nosotros la razón de
nuestro dicho como nos lo han jndicado los honorables
Diputados que me han precedido en la pa
labra.
" Es el momento de ilustrar y explicar nuestro
voto, ya que individuos del partido á que tengo el
honor de pertenecer han hablado en este asunto,
ante lo::; cuales me inclino respetuoso, y cuya voz
me ha lleoado de regocijo, puesto que todos procuramos
satisfacer el mismo anhelo de votar el pro
yécto y conservar con él la tr'lnquilidad de que actualmente
goza la República, ~n uha tregua que
podemos llamar Tregua de Dios.
" Mis palabras deben tomarse como de un liberal
convencido de la vieja escuela colombiana, pues he
sido liberal, lo soy hoy día y lo seguiré siendo
"Nuestra juventud, arrastrada por la elocuencia
de aquellos hombres' eminentes, fascinada por
aquel estupor, torció la mano recta del General
López y desbarató esas ideas.
" La palabra monopolio vino á ser entonces 8i ~
nónima de horror; las contribuciones, enemigas
del pueblo; el ejército, tiranía.
" ¿Y cómo se llamaron las palizas solemnes y
soberanas encabezadas por la misma autoridad? Se
llamaron retozos democráticos_ El DI', Francisco
Eustaquio Alvarez, mi maestro en Dereého Civil
español, me contaba, después, que él habia sido un
hombre de autoridad, pero que sobre él pesaba el
inocente delito de haber sido de los garroteros de
Cali; y entonces fue cuando se dijo por primera
vez desde el solio presidencial: 'Gobernaré con los
míos, con razón y sin ella_' En Colombia dejaron
esa tradición Bolívar, Santander y Márquez, y la
proclamación de ese principio fue funesta, nos
desconcertó, y á la República. le faltaron sus cimientos,
y desde entonces nuestra lucha fue la de
Sísifo: subir al ápice de la montaña, caer, volver á
subir para caer de nuevo. Esa doctrina, que tomó
forma en el Gobierno, se trocó en irrespeto al principio
de autoridad, y sólo la índole bonísima de este
pueblo que no tiene rival, no!;! ha salvado de ser
un pueblo de salteadores; pasa una guerra civil, y
quedan expeditos los caminos hasta para cargamento
de oro, sin que nadie sea atacado.
" Las doctrinas que se predicaban en ese entonces
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
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dividieron al mismo partido liberal, y los libet'ales
de la vieja escuela no quisieron seguir las teorías
de extrangis y declararon que sus maestros eran
Camilo Torres y Santander, próceres y fundadores
de la República.
" Estas modernas teorías de desgobierno trajeron
todas aquellas guerras de que todos hemos sido tes
tigos. Yo no fui jamás revolucionario, ni en la gue
rra de 1899, en cuyo tiempo escribía á mis amigos
q~e la t~ansacción estaba hecha; que el mismo
VIcepreSIdente Marroquín y el Presidente Sandemente
ofrecían el medio de obtener participación
en el Gobierno, y que esa transacción era mejol'
que una . apelación á las armas. Y aún recuerdo,
estremecIdo, el momento en que volviendo á la Patria,
~~spués de esa lucha de tres afiotl, supe en La
MartImca el desastre de Panamá y vi á 10 lejo~ to
das las cosas remotas ó mediatas que á esto dE:'sa~
tre nos llevaba. Los panamefios, cansados de n11e8
tro eterno desgobierno, haHta haciendo, si se quiere,
U.B.O de su d~recho, ?uscaron el apoyo de una na·
ClOn extranJera, baJO cuya bandera cobijaron su
separación, y me dije: volvamos en nosotros' me
di~emos en el porvenir, ¿es posible seguir esta' vida?
VIllO lué~o el actual Presidente de la Ropública;
muchos lIberales lo temían--yo uno de ellos. El
General Reyes en el Poder; la espada de Enciso, el
hombre de las cargas de huracán" para nosotros,
que acabábamos de ser vencidos y con lágrimas
aún en los ojo::!. Por ott'a parte el Dr. Vélez, un
h.ombre d~ luz, un viejo pastor; y en esa alterna
tlva, los lIberales, obedeciendo las órdenes de nues·
tro Direstorio, nos abstuvimos en la lucha, El Ge
neral Reyes tialió triunfante, Mal afio para nos ·
otros, y nos quedamos en expectativa. Pero el Ge
neral. Reyes ~ino á este recinto y pronunció su
formIdable dIscurso al tomar posesión de la Presi
denda.
"Ya desde el Magdalena habia puesto telegra
~as en sentido conciliador, y dijimos: entre la
VIda y la muerte y los principios políticos que de
ben embargamos, ¿qué debemos hacer? Yo hablo
siemp~~ como liberal, y no tengo aquí más repre ·
seutaclOn. que la de los vecinos de Caldas, y ni ten ·
go cola DI soy cola de nadie, Como liberal digo al
General Reyes: venga esa mano, recordando una
copla de Espronceda y la condición radical de mi
mi carácter:
Corazones partidos
Yo no los quiero;
Cuando yo doy el mío
Lo doy entero,
"y el General Reyes me tiene á su servicio. No
no le 8~rvo, estoy sirviendo á la República con él;
y segUIré su bandera apoyando su Gobierno,
" Allá á lo lejos, en las montafias en donde vivo
en las plazas donde me reúno y en las calles po~'
d.onde transito, he sido eco viviente de esta polí·
tIca de concordia, de conmiseración para con la
Patria que ha implantado el Sr, General Reyes.
Qué ¿esa política no tiene asperezas? Las tendrá'
vista á lo lejos presenta su contorno. Si se acerca;
si se toma la lente y se aplica á la más bella flor, á
la más hermosa, pu~de perturbar nuestra visión
un algo que no concuerda con nuestros modos (le
ser. ¿Debemos pues Reguir adela.nte, ó retroceder?
El partido liberal que se ha. agrupado alrededor
de la bandera enarbolada por el General Reyes
¿debe abandonar ese camino todo, porque se posponga
por dos afio s la <;onvocatoria del Congreso?
¿Debe esta posposición del Oongreso ser sanciona
da por la opinión nacional? Hay entre todos los
documentos relativos á este asunto, y así lo espe·
raba yo, más firmas de liberales que de conserva·
dores; es que aquí en esta Asamblea, en donde
estamos nosotroR en la condición de trel-l partidos
en tres grupos, form¡mdo uno solo todo, la unidad
en la variedad,
" Queremos la paz y tranquilidad; es necesaria
una tregua en este momento, de»puéfl de lo ocu
nido (:on Pa.namá, (:uando aún se experimentan
las (;onsecueneias de los yerro)! de la última guerra
que causó tanto~ trastornos; nu\!stl'O~ votos quedau
así explicado,>; los liberales como liberales, los
nacionalista.s Gomo na.eionaliHtas, los ccJl1servado·
res históricos, como conservadores históricos, todos
como ciudadanos colomhianosj el bien de la Patria
pOl' sobre todos lo,.; partidos.
"Recordando)o que decía el DI', Lozano refe ·
rente á Escipión, debemoH decit' ahora: en un día
como éRte, cuando tenemos para la República una
tregua de Dios, podamo,; volver á nueHtros hogares
COll la concionGÍa tranquila, porque hemos eje·
cutado un acto bueno, Esta explicación se la de ·
bemos á nuestros compatriotas, á nueEltl'os copar·
tidarios y nos la debemos á nosotros mismos.
"Es uecesal,io que Re Repa que el Gobierno ac tual
dirige las acciones humanas en el centro de
la mente de sus facultades, dentro de las facultades
constitucionales y en cumplimiento de los de
beres que la misma Constitución le impone, y en
ese sentido un Gobierno fuerte que se hace res·
petar y no Ele hace temer, es un .Gobierno que
sabe hacerse amal'. Ese Gohiel'llo mel'ece respeto,
y de seguro que el Congreso de mañana, elegido
en elección popular, ratificará nuestro voto, lo que
será una satisfacción para los que votamos este
proyecto, y lo será para el primer mandatario de
la República. Tengamo::l dos afios de tregua, y duo
rante ese tiempo habrá mayores beneficios pa-ra la
República de los que ya tiene adquiridos.
"Como el alud que baja de las montafias, la
fuerza impulsiva que lleva el Gobierno del Gene·
ral Reyes He multiplica y crece p3¡l'Il. hacerse tI'ans·
paren te y deslumbradora al llegar al valle. Está á
nuestro alcance esa inconmovible mole que jamás
la pasión, y mucho menos]a pasión de la guerra,
p.odrá conmover.
"He dicho."
IMPRENTA NACIONAL
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Citación recomendada (normas APA)
"Anales de la Asamblea Nacional -Serie V N. 13", -:-, 1907. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/2094480/), el día 2025-11-06.