Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
NU?tl. 2.~
1oyacá
------
REVISTA QUINCENAL
TuN.JA, S.Iu~.r.Ell.B:Uil 17 Dl!l 1909.
·rt,r; Pio V.Elet Malo.-Mwr de rrdarcióu: Roberto
VnlfJilS Tamayo.-Gonzalo Var~as Torn·s.-Ozías $.
'•tbi,,-J, A lf'jandr o Rui~ - Jorge Wills Pradilla.
CO~DlCWNLS:
Su~cripcióu .luna serie d\! 6 nl:m\:roS ..••••. $ 30 -
Número ~uelto • •• . . • . • • . • . . • • • . .. . • . . .. . 5 -
RemitiJos, págo l't~ ... . ............. .. ........ 200 -
Anuncios, la pal .. bra.................. . . . .. 00 50
Cuando estos se insertaren más de nn.1 ver., se hará una
1 .1 de un 10 °¡0 .
1\uuncius que bC apart•JIO de' .. fotma ordinaria, prectos
:nc-:on;~lcs
• - .. J>agc. ant1Cip"1dus. ~
1 ~1 corre vor-rlenc1:t debe dirigirse a .. r. St1iot Di,·cctoT importado di ectam ..
te }' á p recios tnnr ' .. ~otrnto3.
Almacén
!\IOL()l:R \S P.\ R.\. MARCOS DE CV \
droc;, 1 (.: ti '\tOS, &. e<>~ilos n10UerntJS, p1~eios ll1Ó•II< O
.tc.< ban d•· ll•·gar.
AGU.Jr\~-, l'AR:\. I\.1,\QUIN"\. 00-:\TESTrC.\
$ ;!
Almacén de Novedades.
rAliLO E. CARDI!:-li\S l\cosl \
..................... ··························••••t••••·•········-····· -············- .......... ·~·
IIJ S l"ORIA D~ TUNJA.- EN VOLUl\IEX
de 3 50 páginas y 8 fotograbados. De venta en L~
l' " i6n Comercial Boyacensc, Sixto S. Ama!'; l '•trill
r Compañfa, Urbano Agudelo )' en el BallCO d·· Bv
y acá.
·········. ········· ...
B \j \RON LAS LETRAS.- POR 1· ~T<
l· milio Barrera i\1. ha •·esudto bajarles á los prcci ~
ck s us mercandas. ·
Tunj.~. Septiembre Je r909
... ····-····················· ·········:··················,·· ....... -·· ····-·····················
BUF , ' (j, Jh.,NITO Y b .. \RATO.-\'ICEN'Tl
· \ . Orteg-a. M pon<· al st:n:icio del públiro su tallt•t el•'
t·dabartcnn } .. al .. dnría, y ofrece á sn numeras;¡ riente.
In. PU!ltt:alidad y esml."'ro ~n toc!a obra qu<:: se le· confit•.
. c~J.c de San 1gnncto, baJOS de la casa d,•) St•tim
rancrcdo Crv:nálcl.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
'l:;~IE l.
~" ...... ····•···································· ...................................................... ..
BOY ACA LITERARIO
REVISTA QUJNCENAL.
'-··········· ·•·· ··"··· ····· ·········· ··············· ...... ...... .. .. , .... .. .. .
()OLOMl)IA -TUN.TA, ~EPTimMDR'E 1'7 DÉ 1909 .
.• , ......... ,"·········· ·······•·••J••••··· · ... ........ ...... . ··•··· ······· ·· ····· ·········
BOYAOA LITERARIO.
E:1 verdaderamente desconsolador lo que pasa entre
nosotros en el campo del periodismo. Notoria es la
falta de publicaciones e11 esta región de Colombia que
tiene por oapital la ciudad llamada-y á fuerza de repetirlo
se ha hecho l11gai· común-La Atenas Americana.
A qué obedece aste triste fenómeno·?
Hemos llegado á pensar-y quizt\ estemos en Jo
derto-que acaso la misma proximidad nuéstra á aquel
()entro de cultura intelectual nos perjudique, tal como
sucede á las plantas sembradas ba¡o un árbol frondoso
que les roba la luz, el aire y la sa vía. Cómo se explica,
si nó, el que en regiones apartadas, como Antioquia,
Cauca, &c. &c. haya número tan considerable de publicaciones,
en tanto que Boyacá ocupa el último lugar en
la estadística de la prensa, documento éste que tenemos
á la vist&?
No es quo nos falten esctitores de buena talla, ni
que seamos poco amantes de la lectura; es que como l!l
Prensa Capitolina nos llega fre sca, muchas yaces con
horas apenas de retraso, nos contentamos con lo que
nos llega de la Capital.
Como consecuencia de lo apuntado, vienen otros
hechos que hay qne tener en cuenta, sütuiera se::t para
aminora¡· un tantg el cw:go do atraso ep la materia, que
se no:1 hace á los boyacon~s.
Sucede, por ejemplo, que so forma una empresa
<:ou mil saoriüoio.s do tiempo y de dinero; pues bien:
el prim er número se agota pronto, por aquel espíritu
de noveleria que nos caracteriza á los colombianos, y
luégo el entusiasmo de loh lectores va decayendo, y en
los números sucesivos disminuye progresivamenta la
venta dul periódico, por má'> selecto que sea su material.
Llega necesariamente el momento de la bancarrota, y
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
-18-
Jos pocos suscript ores quo haya, pierden s u díne~v.óo
entran en justísima desconfianza para lo suco!lh·o, ~
aquí el que cada voz sea más oxiguo el númoro do c!'11l'
tos, y cada voz más efímera la vida do nuestras cm prosas
periodísticas.
Ahora bien: si os una publicación de índolo Jitorarin,
qué de esooJJos no encuentra en su ruta, flohro todo
en este tiempo en quo la política absorbe la atonción do
chicos y grandes. Todo Jo que no sea candont.e y sensacional,
es mirado con indiferencia por el Piibli<'o: do
aquí que hayamos entrado con desconfianza á Jnhorar
en el campo del periodismo literario. Este escollo gra''
ísimo do la poJitjca y el temor de dejar dofrnudndos
á los favorecedores de nuestra Revista, debieron haber-nos
hecho detener; con todo, h emos resue1to afrontarlo
y vencer Jo s demás inconvenientes arriba enumerados.
Al efecto, hemos fundado m•estra empresa Robre
bases más sólidas; cada uno de nosotros se compromete
á responder por la edición de un número, de
suerte que siendo seis, queda asegurada la publicación
de la serie; hemos celebrado, además, un contrato con
nuestros editores, en el cual nos comprometemos poi"
documento y bajo multa á hacel" editar la serio complota
de seis. núm-eros. Este documento debe renovara&
aT principiar cada serie, y así no hay riesgo de que los
suscriptores pierdan el dinero que anticipen. Por otra
parte, hemos resuelto publicar Jo más selecto que podamos,
y en cuanto esté á nuestro alcance, producciones
inéditas; hemos solici tado colaboración de nuestros
mejores poetas y prosistas, no sólo boyacenses sino d&
Bogotá y otros centros intelectuales, y ya hem os tenido
el honor de algunas respuestas favorables, por lo cual
no dudamos, si se tiene en cnenta el corto tiempo trascurrido
desde tmestra soJicitud, que los demás no deiar
án defraudadas nuestras esperanzas.
Para te-rminar, réstanos decir que aunque nuestra
Revista es de índole Jiteraria en su mayol" parto, no
descuidaremos las secciones científica, inlol"mativa deJ
oxtorior y del interior &c. &c. y á título de información
solamente, abriremos también una sección política. En
una palabra, no ahorraremos esfuerzo para mejorar d&
día en día las páginas d e lectura que ofrecemos hoy á
nuestros compatriotas, y principalmente á Jos Boyacenses.
--o--
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
19 - -
LOS REYES.
1 la y en la alcoba una camita negra con colgadur as mil.5
blan<·ils que las a las de los pichones.
En aquella camita solloza un hi ft o ehtrc los a hogos dé
la fitbrc, tal .,.e:z: en los comien:z:os de su agonía.
Bella es su carita p;\hda, que sombreo. un rizo de ca-helios
rubios aplastado por el sudor. .
Es triste que Jo¡ chogeles sufran: el ddlor háce bien en
rendir á los hombres ¡al fin son hombres! Pero ~orturar
un cuerpecito blando y un alma pura que se alimentan del
calor y l(IS arrullos, romo tórtolols en su nido, bajo las amorosas
alas de la madre, es algo así como uua crueldad de la
N,Llll raleza.
Esto pien5a, sin lograr expresarlo, la madre de aquel
nmo. Su espíritu ha perdido t odas las nocione~ ele la vida:
En aquella alma aspantada combaten la esperanza y el
temor, como punto de un eje en que gira el munrlo.
Arde mezquina hll. en un vaso, que ronda, volando,
apasionada mariposa. Es blanca como las colgaduras de
la camita y como el rostro del ángel moribundo.
El aleteo tenue de la mariposa traza sombr as m uy sútilcs
en la almohada.
El silencio es profundo: un siléncio h enchido de calladas
l11grimas. Fuéra se oyen ri5as y cánticos y voces infantiles.
Es la noche en que :os ls mío, se había de olvidar Dios? Cánta como
los pichoncitos, arrúllame como .las tórtolas .. • •. •.... . • ..
lJame muchos besos ¡muchos! _Niñín de mi alma, cómeme a
bocados, que no me duele. Así, rto dejes de mirarme: tienes
los ojos más grandes y la uariz más afilada .... ¡Ah, qué
sudor tan triste! Míra, esta noche vienen los Reyes .. . . Los
Reyes Magos ¿sabes? Uno de ellos es un negro granuezo, pero
no espanta: es tan alto, que llega á los balcones, y va sacándo
juguetes muy bonitos de un saco que trae sobre el tahallo.
¡Mañana verás cuántas cosas te trajeron! Van á visitar á un
niño tan hermoso como tú, pero más pequeño. Una estrella
muy brillante, con un rabo de luz como la cola de un pavo
real- ·¿te acuerdas de aquél con el que tú jugabas?- le5 va enseñando
el camil;o. V'a mucha gente con ello~ ¡medio pu~bfo'(
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
-20-
~ás todavía! Los otros dos Ueyes son viejos~ muy fonna~<:;"•
con unas barhas blancas que les Ile:.:an aqm ... r tamh•cn
dan juguetes: ¡qué cosas tan bo1~itas dan! Cuanc~o pa-.en 1~or
aquí te envolveré en tu manuta y te asomare al b.llcon:
verás cómo el negro me pregunta: •·¿De quién es ese niiio
tan bonito y tan rubio?" Y yo le di~o: ··~L·:s mín! ¡Es mi
alma!" Y él, entO•lces, verás cómo saca un gran puñ.1tlo <1.:
juguetes y me los da, diciendo: "Tór.1a, para tu niiio porque:
es muy guapo y muy bueno." ¿Te has sonreído? ¡Qué
bermosura! Mi niño se va á poner bueno ..•. ¿Vcnlad t¡uc
sí, verdad que sí? ¿Qué miras? ¿La maripos-a? ¿La mariposa?
~La quieres? ...• Le gusta mucho la luz: como á tí, mi vida.
Es blanca como un copito de nieve, .....• ¡Trae bucnqs
noticias! ¡Ay, Jesús, que se ha quumado! iPohrecita! tPícara.
luz que le abrasó las alast
El mn.o sigue inmóvil, con Id cara más páhda, los ojos.
más grandes y la n;uiz más afilada. E~ rizo de los cal•ello9
J:ubios, cayendo sobre la frente perlarla. de sudor, parece que
se endurece y que se enfría.
Gime la cri•tura agonizante, y atÍn parece sonreír, que
ni la muerte puede borrll,r con. s-us fealdades las hermosuras
angélic~ de !:a. infaocia.
La maripO!>a flota con las alas tronchadas en el lago de
accite de aquel vaso. TampocE> pudo la muerte borrar a'
luel contE>rno blanco y aéreo q~ aurasó la llama.
Allá afuera se alzan cada vez más fuertes, más alegres,
las cánticos y las risas ....
El niño volvió su cabecita hacia la fuz, movió siJ6o labiO&
Duchas veces, como si los labios también se le hultieran enQurecido
y enfriado, y, al fin, con voz ronca y apagada dijo:
- iVieneflt
-¿Que dices, mi a lma?
-Los Reyes Magos. ,
-Tcdavía no: más tarde.
-Vienen .... Los veo yo. El negro. l1:1ma .... ¿Para
mí? Me da la estrella: tque grande! No cáhrá en los zapat:
os .•..•.
-¡ Mírame! ¡J esusl ¿Qué tiene mi niño? Hijo .... Corazón
mío ¿no ves la luz?
-¡Es la estrella! ...•..
Y alzando su cabecita enmarañada y fría, que cayó inerte,
se fué el niño con los Reyes Magos, á jugar con los sole~
y las estrellas, .• _ • ••
JOSfÍJ NOGALES
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
-21-
A MI MADRE
¡Oh celest~s alegrías
De anis año!\ más hermosos!
¡Oh rec,•erclos venturosos
De mis infantiks días!
T11lccln~ las armcnías,
Lc.·s ensoeiios, los fulgores,
T .as mariposas, las Rores
Y la benclecicla calma
Con que se extasió mi alma
D~ mi vida en los albores.
Ya sobre mi cora:tón
El tiempo con mano aleve
Va aglomerando la nieve
Que marchita la ilusión.
Quiero entrar al panteón
De las dichas idwes,
Gozar las pritna't'erales
Horao; del alma inocente,
Y sentir sobre mi frente
l.os ósculos maternales.
Con delicia y amargura,
Del recuerdo á los reflejos,
l\liro allá !ejos, ¡muy lejos!
Una faz toda ternura.
Hay infinita dultura
En la límpida mirarla,
Y la sién inmaculada
Lumbre celeste ilumina ....
¿Quién es est<~. peregr;oa
Aparición adorada?
(brláita)
¡Qué feliz era el hoga~
Por tí trocado en edén,
Do l<>s fanales del biét~
Nunca dejaste apag:arl
Allí jamás puoo er~trar
Ninguna pasión mezquina,
Porque uí con luz divina
Las almas iluminabas,
Y con tu ejemplo ense ñabas
La evangélica doctrina.
En mis ensueños aún miro
Tu cariñoso semblante,
V escucho tu voz amar,te
Y tu angu~tioso suspiro.
Y reverendo y admiro
Tu espiritu grande y fuerte,
A quien no arrancó la suerte
Ni una queja, ni un reproche,
Y radioso entró en la noche
Sin rumores, de la muerte.
Cuando el espectro llegó
Al triste lecho de abrojos,
Y tú ~rraste los ojos,
Y tu alma al Cielo subió,
Algo en mi ser se apagó
Para nunca más lucir.
¡Acababan de morir
En mi corazón la calma,
Llls venturas en mi alma,
La luz en mí porvenir!
¡Ay, eres tú, madre míal Entonces dolor profundo
Tú, cuya hendita imagen, Sentí, pero no sabía
Sin qut: los años la ultrajen, Lo que es perder, madre mía,
Llevo en mi alma noche y día. Amor tan grande en el mundo.
Tú. que fuiste mi alegría, En ese amor sin segundo
Mi esperanza y mi consuelo, Hallamos en nuestro duelo,
Y que al irte para el Cielo Grnto, inefable consuelo,
Sin ,•er mi amar:!a aflicción, ¡Que Dios á la madre hizo
Cubriste mi corazón De aromas de paraíso
C(ln densas somhras de duelo! Y resplandores de cielo!
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
De la madre el coratón
Es fuente nunca extinguida
De ternura sin medida,
De suprema abnegación;
Es la viviente oración
Que al trono de l>ioo alcanza;
Es el puerto de bonanza
2:d
Sin temphtades ni brumas,
Do en nido de blancas plumas
Se r~fugia la EsperanzC\.
Oh! Si no hubieras parti-io
Tan pronto, marlre adorada,
Hoy guardaras tú la entrada
De mi humilde hogar querido;
Tú el orgullo hubieras ~c..lo
Y el encanto de mis lares,.
Néctar grato en mis pesares.
Firme apoyo en mis caídas,
Tibio beso en mis heridas,
'Huésped santo en mis altares!
¡Con qué delicia le \'Íera
Posar, llena de ternura,
Tu boca en la frente pUta
De mi dulce compa•icr.t!
¡Qué inmenso placer sintiera
Viencio á mis hijitos bellos
Resar tus blancos cabellos
Y darte estrechos abrazos,
Mientras tú, madre, en tus.
hrazos
Los adurmierac; ;, ellos!
¡Vano ensuci\o ti el a lll < ~r!
Te fuiste y no tornar.is,
Pero en el Cielo serás
Nuestro escudo protec tor;
Ante el trono dd Seiior
Surgirt.n tus oraciones,
Y venturas y perdones
Vendrán sobre nuestros día!':.
En tánto que nos envías
Tus besos y bendiciones[
·PIO VELEZ MALO
EN EL CAMPOSANTO.
-A la cara memoria de mi Pndr~-
i Cuantas veces, á los postreros rayos del sol, abandonando
las concurridas calles de mi ciudad natal para ir pasos hacía los ejidos que la pintoresca reina de la sabana
extiende por el noroeste como un manto de esmeraldas t
De la Avenida de la República, en dirección d~ Orien~e á
Ocaso, tvmé e1 camino que conduce del antiguo COI'\vento de
San Diego al Camposanto: á la izquierda, aleg:es grupos de
niños interrumpían con inocente trisca la severidad del Parque
del Centenario; los locos, á la derec-ha. miraban desdeel
tramo oc cidental con las pupilas dilatadas el cementerio
<.iCá, el Panóptico al Norte, y sus ojos extraviados se perdían
en la inmensa llanura ó en el infinito azul que empezaba á
oscurec-er el crepúsculo.
Una arboleda de eucaliptus prepara para la meditación
el espíritu. Luégo, tras severa y elegante portada, tras un callejoncito
de reluciente macadán, adornado á derecha é izquierda
de macetas de claveles, segunda portezue la enrejada~
' 'aquí acal'an los rielito~ drl impío }' aot1Í r· po::-an 1 , !aliga-
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
-23-
doc; en la lucha," son las palabras con que se me invita á penetrar
en el pequerio r-:cinto donde yacen, cubiertos de
toscas piedms, los hijos de Albión y los que nacieron en las
orillas del Rhin: la yedra \'a tejiendo un velo á sus losas y el
tiempo otro a su memoria, Camino de su vivienda pasa con
l a aijada en la mano, al lento y pesado andar Je su carro, el
viejo Lucas que, con piadoso escrúpulo, se santigua ante la
puerta del cementerio protestante .....
El ruido acompasado de las victorias, el destemplado
campanilleo de los tranvías, y el murmullo sordo de la ciudad
lejana, contrastan con la majestad elocuentemente silenciosa
de las tumbas ...
Los roji7.0S fulgores del sol se estrellan en el frontispicio
del cementerio católico, ;¡ van á perderse entre el verde de
las siemprevivas ....•••
Grandiosa alegoría, contraste sublime el que hiere entonces
con verdad aterradora, llena de sublimidad cristiana,
el alma del que, preocupado con las pequP. iieces de la tierra,
alza con ciificultad los ojos á las grandezas del cielo! El
Titmpo-1:1 más indt-finihle de las cosas finitas-ante las puertas
de la Eternidad-la más incomprensible de los seres inmutables
·~thí e:;tá, ahí mira el paulatino fin de su reinado, ahí, desde
el vet usto cornisón de la portada, está dando cada día
despedidas eternas á los que hombres ayer, cadáveres hoy,
polvo mariana, no le veran m ás ... él con el último ser des•
aparecerá ¡>ara siempre de Jet tierra ... . ..
El vie n to se llev:1ba en sus alas los despojos de las coronas
marchitas y pensé: "al dejar la prisión que las encierra,
qué encontrarán las almas 1"
Un grito, escapado tal vez de las tumbas, quizá salido
dd fondo dd corazón, hi r ió mi oído con algo que me hizo
le\·antar los ojos al cielo y recha1ar para el espíritu el desastroso
fin de la materia.
Una mano invisible trazaba sobre el dintel del templo sagrado
de los que fueron: ''Espero la resurrección de los
muertos" ... Era la Fe que escribía en letra!> de oro el destino
que al alma, finita sí pero inmortal, aguarda al emprender el
vi"je de donde nadie ha \'uelto.
Inmenso sudario fingían los últimos fulgores dt:l crepúsc
ulo, al besar con cariñosa despedida el mármol de las tumbas.
Me interno lué~o cautelosamente en Jos fúnebres corredores;
me parece oír murmullo de \'<>ces y el ruido amortif,!
uado de sollo:~:os lejanos: eran las últimas plegarias que por
l os muertos queridos se elevaban al cielo en la brisa callada
de la tarde ... Leo nombres, fechas, epitafios, pero en vano bus<:
o á todos los que ayer ccmpartían conmigo los cortos pla·
ceres del mundo ó las desdichas inurncntbles de la \'i(la:
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
...
-24-
"lEn dónde, en dónde e~l.m los que conmig"
se aventuraron en la lid tr~:mcnda?
Dejando voy por la escarpada senda.
uno tras otro al deudo y al amigo l"'
Y luégo las tumbas anónimas .•.. un bost1uecillo de cru.
ces y ro!lales: am duermen los hijos dd pueblo, los que cant~
con ternfsima dulzura el elegantísimo Gray, las quizá frustradas
glorias de la patria~
"fCuánta perla ge11til, rica y lo?ana
de puro brtllo y esplendor sereno,
vedada siempre á la codicia humana
guarda la mar en Sll profundo scnot"
El ruido de una flor que era desprendida c:nidadosamente
de su tallo, me distrajo de la meditación que embargaba
mi espíritu: la hija del sepulturero, la graciosa pequeñita
Luda, arrancaba del sudo-quizá de la tumba de su madr~.
de los sepulcros acaso de niñas ;nocentes y pohres como
élla -campestres ftorecitas para la Virgen de la capilla. l>espués
se alejó, y las brisas de la tarde me rrajerCMl con el
aroma raro de las rosas del cementerio-"las flores dt! muerto.
o,, huelen á flores''- e l eoo doliente de sus cantares~
"No sé lo que tienen, madre,
las flores del camposanto,
que cuando las mece el viento
parece que están llorando."
Y parecía, en verdad, que lloraban sobre la tierra las ffOk
res; y porqué?
"Porque nacen en tierra que empal-'aron
las lágrimas amargas;
porqu~ viven oyendo despedidas
tan tristes y tan largas ...... !"
Con el toque de de las Piadosas, como se dice en Anda..
lucía, de las A11etna1las, como ap.-endí en el hogar, me
anum:ió la hora de regreso la cRmpnna que, oculta entre los.
brazos de un ciprés, como la arai>a que expía su presa, iba tejiendo
su red interminable de horas y de días, de semanas y
de meses, de años y de siglos ••• _ ..... .
Giró sobre sus go:alleS el inmenso port6n, ¡:h¡rriaron las.
rodajas de las verjas laterales, y cuando pensando en la ma.
teria dije: "qué solos ¡;e quedan los muertos", la robusta feheredada
de mis mayores me interrumpió C\)n el cristiano
y pM ende sublime pensamiento de Argensola:
"Ciego 1 Es la tierra el centro de las almas?"
Los bronces del Camposanto doblaban resignado!', los.
del Panóptico llorosos, los del Asilo taciturnos, y recordaban
á la Ciudad, que empezaba el descanso del día, sus crímenes
sus locuras y la muerte ...... -JORGE WILLS PRADILLA..
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
-25-
NOSTALGIA
( Pnrn ¡, SoiPr i111 !.. O)
Hoy que vivo de eJla lejos,
hoy quo vivo del recuerdo de un amor sin es]>eramr.lt,
quiero enviarle mis estrofas,
de amargura saturadas,
como las inquietas ondas de ese mar que Muerto llaman;
y que sepa cuánto sufro,
-.uánto sulro por su au~~n <: Jil que es tan lar~&Y que lllt: ma\ atmósferas, una trasparente, otra l uminosa y otra
de fuego; y no faltaron quienes l o s u pusieran un gran
fooo eléctrico. Hoy mismo, después de prolijas olisorvaoiones
astronómicas, parece que se desconoce la naturaleza
de su esfera; pero dada la elevadísima temperatura
del astro, que es de 6.000 á 8.000 grados, no
puede suponerse que sea sólida, sino líquida y aun completamente
gaseosa; bien que su peso especüico, que es
como cuatro veces infe_rior al de nuestro planeta, no lo
os al del carbón mineral. El espectroscopio ha dado á
conocer que en el Sol bay, entre otros minerales, hierro,
cobre, níkel, magnesio, manganeso, cobalto, cromo,
calcio, bario, sodio, potasio, títano, helio y otros.
Tenemos á la vista los grandes guarismos que, aproximativamente
dan á conocer las dimensiones del Sol,
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
-27-
su peso, ¡¡u densidad, su distancia á todof! Jo"' pl an c t:u<~
pero no"' abstenemos dG exponerlos, por no hacer demas
iado fastidioso este esúrito. Rc¡¡pecto á su volumen
sólo anotaremos que, s uponiendo á la Tierra colocada
en ol centro dol Sol, con la Luna á In dil:tanoiu corresp
ondie nte, (76.800 Jo guas) todavía quedarían m tíK
de 300.000 kilómetros des de este satélite ó la Sllp
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
~ao-
SUELTOS - l>OR LA V fE];\ CIUDAD.-Mucho nos entristecert
~~;iertos ó\Ctus rlc harharíe, tale'! como la destrucción ele monumentos
histórico", ;\ los cuales tiO se les concede el valor
que realmente tienen ya por su anti{!liedad, ya por su mérito
artfstico. En flo~otá, por ejemplo, Un!l ntarto despiadada
pintó churrig-uerescamente el magnífico artc!lonado del
templo de la Tercera¡ aquí, por fortuna, se hal1 salvado tres
valiosas obras de arte: el blasdn de la famila Ladrón de Guevara,
esculpido en la portada del Convento de Clarisas; la
portada de la Catedral y el attesoMdo de la Capilla del
Carmen, este último á pesar de la moderniT.ación de dicha
Capilla. Hay, empero, mucho que lamentar, como la decapitación
del pobre llfono de la Pila, ~monunJt:nto, yá que
no artístico, por lo menos histórico-el blanquimento de las
portadas de piedra que existen en muchas ca .. as y que ostentan
los t:scudos nol•iliarios de nuestros abuelo~. E~ko último
es, sinembargo, remediable, y pedimos que se dicten
p0r quien corresponda las medidas del caso, á fin de obli:!
élr á los dueños de casas í. que desenlutcarr las portadas y
ha2:an retocar por un cantero hábil, los maltrechos blasones,
En todo país civilizado se respetr la no.
che estuvier on en una casa de la Carrera 4!' de donde salieron
á eso de las J y media a. m , en coche; se dirigieron
hacia Las Nieves, y al lle~ar á la t>squina de la casa del Sr.
M . A . Caro, se desmontaron; el coche siguió y dios se '}Uedaron
en dicha esquina en actitud de molestia; á poco se
oyó un disparo, y con intervalo de algunos segando5, otro.
Cuando acudió la policía, Faraco yacía a~onizante, y á 1 ,l
metros de distancia, su matador, completamente muerto.
Tánto Barbosa R. como Faraco habían sido músicos
de la Banda de esta Ciudadr y el primero habla hecho va·
rías intentonas de suicidio.
Lamtntamos la aterradora frccuencia . de estos hecho~
inmorales.
•'
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
-32 ___.
DE AMBOS MUNDOS
- Tar bk ricltfll de agua y aire se desalÓ sobre la cill ..
~ad de l'anamá e11 la noche del ro de Julio último, que hizo
~:undir el pánico en los habitantes, hasta que un aguacero
tC'rrendal desbarato la tromba, con lo cual ~e conjuró el grave
peli ~ro en que estuvo aquella ch1dad.
- Violtttlos /ltumrolos han ocurrido últimamente en el stlr
oe Méjico, desde Maxaba hasta el puerto de Acapulco, que
fue destruído en parte A causa de una enorme ola de maTea,
sufrió tambi¿n considerable daño la ciudad de Acapulco.
Muchos muertos y heridos y pérdidas conside1ables con la
destrucción de los e&ficios, han producido el pánico en
'aquella región.
-El foco dictrico mtÍs potmle del mundo lo lleva el
l\corazado norte-americano Comucticut. Su intensidad es de
t 80 millones de bujlas y alumbra hasta diez millas de distancia.
-La ptodttcciJil de oro en todo el mundo, durante el
año de 1908, alcar.zó á la suma de 409 millones de vesos,
que es la mayor alcanzada hasta hoy.
-La curlte de caballo, según lo apunta una revista extranjera,
es muy apetecida por los [>arislenses. En 1908 se
-sacrific.aron para el consumo 50.000 caballos en París.
• -Las t~u/ores perlas del mundo proceden de la isla
Thoursday, al Norte de Australia. Hace poco tiempo se re-cibió
en Londres una de estas perlas, que se estima en
$ rs.oooo.
-Un médico italia11o ha de3cubierto que las zanahorias
son un buen antiséptico Intestinal, y que curan varias formas
de desórdenes de los órganos digestivos.
-El esperanto. Se asegura que el número de personas
que leen y escriben esta lengua universal, pasa de un
millón y forma más de cien sociedades ó circulos destinados
al cultivo del idioma.
-El millontuio neoyorquino Walter Cristy posée un
automóvil de carrera, cuyo motor de gasolina produce una
fuerza de 130 caballos de vapor, y con el cual se ha. obteni·
do una velo.-:idad de más de 6o millas por hora,
-La telefoto~rajta. El Profesor Hans Knud9en, ingeniero
danés, ha sido el inventor de un pr.:>cedimiento admirable,
por medio del cual se pueden trasmitir, aun á largas
distancias, fotografias por medio de las ondas etérea;. Los
aparatos correspondientes son de tan fácil manejo, que hasta
un simple afrdonado puede hacer una trasmisión.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
:> •
(' 1.0.\!BI.\.
Diroctor: PIO VELEZ Mf.LO
~1 ~· ~ \ IJE R~D.\CUOX :
J.!,'lll.h ,·o \' ,\,:t: ldT.I \1.1 ro -Gn:\Z.ILO Y .IR3.1S T •RRES.
01.1.~s S. Ut:Dio J .. \ttJ.I';ono fi¡;tz.
Jor.<.n: Wll,l.:l l'r..IDILL.I
Tunjn, OctubrJ 15 dJ H)09
CONDICIONES
Rn~~r:IJción t\ 1111~1 ~cri" tlo ~ci:~ númcrcs ..... $ 30 -
:\uulCl'•l \!t t:trcn mú:~ uc uua wz, se h"d
1111:1 rcb••Ja uo un o.lic.: po1· cieLito .
• \11UllCh.l3 11110 ~O ~ pullCD UC la forma Ol'UÍO:'li'Í:l,
prCcÍUS CUUI CIICIOU:dC:!.
19-l:'agos :.llltidpa.tos "'(in
L:. corrc.punJcnd.l tlcuc llirign·so :¡,¡. Sdíor Dircd<.:r
tic JJo\'.IC.I LtTJ:Il.lllll>.
'1\:l,·;;ramu,: " 13QY.\C.ILIT.''
I.l .Umiui,trauor,
E.M!LlO DJ..RRER.l .M.
TU~JA-DIPRLNT.I DEL DfP.\RUllESTO
Atlmor., J, AvtUno Vo.rgas
1\
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Ac<'U:l dt' 1;cg1r 1.n r, n:¡.lt-t<~ n.rti.lo. n·r·1a ll·r.t
nc.n·tb 1 (, s:•ti-.f ,c .. i:'IIJ el 1 111 b n .. (j,, .Jo gu.;t1, :c tml.t
y ~ f tn;.,.r:d),\1 he:.
De\' nt 1 en l. n LTn;"n Cc,m• rLÍ tl Bny:t(( nst, ~·xto S.
Annr, 1\arilio f.: Com¡ afll.t, L'rl;;cno A,;ud, lcJ) c·n <..1
B,mco c.k B oyac:í .
El Ba nco ele Goyacá
tiene para arrc•Hbr ,. r·o ~ lo··,.l.:s c."•mo1!o ., bien sitn:t·
clo• }' batnlos, ¡. ropÍ•}S p •. •. l f¡f f orio (, r•- •ra ll tLit.tt·i·•ll .
D :• i.~ir.;c al E · a '):c.:i.lli n.o ¡car.t ol.tcn~r tlcl di.;'·
POR ESTO
E;\.11 10 D.\KI~C:;.,, l\1. h .1 re sudto b :~j ulc..:s a los prc·
cios d~.: sus nH.:rca.n :!as.
'lt111ja , O .. tuJ..¡¡·c cit.: 1 :o9.
PREfv'HOS PARA filÑOS
;;c,,htn d: llegar muy b1ratos al almacl:n de pa.pdcr 'a
) qlti;Jcalll'r.a dc.: Si:.\t) S. Am .. 1r.
LECT URA ESCOGIDA
amena y variada, encontrar,\ Ud. en varias colecciones
de obras <:~tranjeras, en pastas de tela, grabados finos,
é difl!rentcs precios, al alcance de todos, e n el almacén
de Sebas ti~n Agudclo (1.' Calle Re al -Tunj<~).
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Citación recomendada (normas APA)
"Boyacá Literario: revista quincenal - N. 2", -:-, 1909. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3683721/), el día 2025-10-27.