Por:
|
Fecha:
14/03/2019
Foto. Harrym Ramírez
Temporada Nacional de Conciertos Banco de la República 2019
MANUELA WANUMEN JIMÉNEZ
violín (Colombia)
Leonardo Cáceres, piano
Óscar Moyano, guitarra
Jueves 28 de marzo de 2019 · 7:00 p.m.
Manizales, Auditorio del Centro Cultural del Banco de la República
Cód. PULEP: HYJ598
Jueves 11 de abril de 2019 · 7:30 p.m.
Bogotá, Sala de Conciertos de la Biblioteca Luis Ángel Arango
Cód. PULEP: HXW120
SERIE DE LOS JÓVENES INTÉRPRETES
TOME NOTA
Los conciertos iniciarán exactamente a la hora indicada en los avisos de prensa y en
el programa de mano. Llegar con media hora de antelación le permitirá ingresar al
concierto con tranquilidad y disfrutarlo en su totalidad.
Si al momento de llegar al concierto éste ya ha iniciado, el personal del auditorio
le indicará el momento adecuado para ingresar a la sala de acuerdo con las
recomendaciones dadas por los artistas que están en escena. Tenga en cuenta que
en algunos conciertos, debido al programa y a los requerimientos de los artistas, no
estará permitido el ingreso a la sala una vez el concierto haya iniciado.
Agradecemos se abstenga de consumir comidas y bebidas, o fumar durante el
concierto con el fin de garantizar un ambiente adecuado tanto para el público como
para los artistas.
Un ambiente silencioso es propicio para disfrutar la música. Durante el transcurso
del concierto, por favor mantenga apagados sus equipos electrónicos, incluyendo
teléfonos celulares, buscapersonas y alarmas de reloj.
Por respeto a los derechos de autor de los compositores e intérpretes, no está
permitido realizar grabaciones de audio o video ni tomar fotografías durante el
concierto.
Los artistas interesados en presentar una propuesta de concierto pueden visitar el
siguiente enlace www.banrepcultural.org/servicios/como-presentar-su-propuesta-artistica
en el que encontrarán información pormenorizada acerca de este proceso.
Si desea recibir información sobre la actividad cultural del Banco de la República
ingrese al siguiente enlace www.banrepcultural.org/servicios/listas-de-correo y
suscríbase a las listas de correo de su preferencia.
Para remitir al Banco de la República sus solicitudes de información, peticiones,
quejas, reclamos, sugerencias, felicitaciones o denuncias de actos de corrupción,
puede ingresar al siguiente enlace https://atencionalciudadano.banrep.gov.co/
siac/ess.do, escribir al correo electrónico [email protected],
comunicarse a la línea gratuita nacional 01 8000 911745, o acercarse a los puntos de
atención dispuestos para esto en las diferentes oficinas del Banco de la República a
nivel nacional.
SÍGANOS EN
Sala de Conciertos @Banrepcultural Banrepcultural Banrepcultural
Luis Ángel Arango
1
Foto: Harrym Ramírez
Manuela Wanumen Jiménez, violín
Manuela Wanumen nació en Bogotá en el año 2000. Inició sus estudios de violín a
los cinco años y en el 2007 entró a la Fundación UniMúsica. En el 2009 se trasladó a
Italia, en donde recibió clases con Nadia Lazaruk y actuó en el Museo Napoleónico de
Roma y en la Embajada de Rumania. A finales del 2010 regresó a Bogotá y entró a la
cátedra de violín de Fabio Santana. En el 2013 fue invitada a actuar como solista en el
concierto didáctico del lanzamiento del programa 40x40 de la Orquesta Filarmónica
de Bogotá que se realizó en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán. Entre el 2013 y el 2015
fue concertino de la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil de UniMúsica. A partir del
2015, recibió clases de teoría en el estudio privado de Alena Krasútskaya y de violín
con Richard Biaggini; posteriormente estudió con Juan Carlos Higuita.
Ha recibido clases magistrales de violín con Kia Hui-Tan, Simon Bernardini,
Andrew Zaplatinsky, Wonji Kim, Sean Wang, Andrey Baranov, Lynn Chang, Emma
Steele, Alexis Cárdenas y Corrado Rossi; de música de cámara con Roeland Jagers
(del Cuarteto Rubens), Sheldon Person (de la Sinfónica de Houston), Brittany
Kotheimer, Jay Jeong, Carlos Vargas y Álvaro Birtrán (del Cuarteto Latinoamericano).
Adicionalmente, participó como becaria en el Summer String Academy de Indiana
University (Estados Unidos) del 2015, en el Sewanee Summer Music Festival
(Estados Unidos) del 2016 y en el Festival Internacional de Música de Esmeraldas
(Ecuador) del 2017; este mismo año fue seleccionada para participar en la Orquesta
Binacional Colombo-Francesa durante las Temporadas Cruzadas del Año Colombia-
Francia. En el 2018 hizo parte del III Festival Internacional de Cuartetos de Cuerda
organizado por el Cuarteto Q-Arte. Actualmente es estudiante de cuarto semestre
del Conservatorio de la Universidad Nacional de Colombia en la cátedra de violín
con Juan Carlos Higuita y en la cátedra de música de cámara con Liz Ángela García.
2
Leonardo Cáceres, piano
Docente de piano, pianista acompañante y corepetidor de la Escuela de Música de la
Fundación Universitaria Juan N. Corpas. Realizó sus primeros estudios en la Escuela
Superior de Música de su ciudad natal, Tunja, con Jorge Zorro Sánchez. A los doce
años fue merecedor del Premio Nacional de Colcultura y solista con la Orquesta
Sinfónica Nacional bajo la dirección de Jaime León. Fue merecedor del Premio
Nacional de Piano en el 1984. Después de cuatro años de estudios con Pilar Leyva,
viajó a la Unión Soviética como ganador del Primer Premio Nacional Convenio
ICETEX-URSS en 1988. Terminó sus estudios como profesor de piano, solista y
música de cámara en el Conservatorio Tchaikovsky de Moscú, con N. Suslova, Galina
Miceroba y Tatiana Golik. Representó a Colombia en el VIII Festival de Música
Contemporánea (Quito, Ecuador). Desde su regreso a Colombia ha llevado a cabo
una extensa labor como docente y acompañante en diferentes salas tanto en el ámbito
nacional como en el internacional.
Óscar Moyano, guitarra
Inició sus estudios de música a los diez años en la Academia de Música Germinal de
Chía (Cundinamarca), donde tomó clases de teoría musical y guitarra. A los catorce
años, comenzó sus estudios de guitarra clásica con Juan Felipe Naranjo en la academia
Wayno, con quien se preparó para el ingreso a los cursos básicos del Conservatorio
de Música de la Universidad Nacional de Colombia. Allí estudió con Sonia Díaz,
Alexander Parra y Gabriela Aedo. En el 2013 entró al programa de música con
énfasis en interpretación de guitarra del Conservatorio de la Universidad Nacional
de Colombia, bajo la tutoría de Irene Gómez con quien estudió hasta concluir su
carrera en el 2018. Ha participado en conciertos, festivales, clases magistrales y
concursos, tanto como solista como en diferentes agrupaciones. Sus mayores áreas
de experiencia están en la interpretación musical en vivo, la enseñanza musical, y la
composición y grabación de música y audio en estudio.
El concierto en Manizales cuenta con el apoyo de
3
PROGRAMA
Partita No. 2 en re menor
para violín solo, BWV 1004
(1717-1723)
Allemanda
Courante
Sarabande
Gigue
Chaconne
JOHANN SEBASTIAN BACH
(1685-1750)
Despasillo, por favor (2006) LUIS CARLOS SABOYA (n. 1980)
Para violín y guitarra
INTERMEDIO
Capriccio No. 13 en si bemol mayor
‘La risa del diablo’ de 24 capriccios
para violín solo, Op. 1 (c. 1805)
Capriccio No. 16 en sol menor
de 24 capriccios para violín solo, Op. 1
(c. 1805)
NICCOLÒ PAGANINI
(1782-1840)
Sonata para violín No. 1 en la menor, Op. 105
(1851)
Mit leidenschaftlichem Ausdruck
Allegretto
Lebhaft
ROBERT SCHUMANN
(1810-1856)
Para violín y piano
CONCIERTO No. 15
4
NOTAS AL PROGRAMA
El concierto de hoy es un vaivén de muchas cosas: lo popular y lo académico, los
tiempos lentos y rápidos, la expresividad y el virtuosismo, el sentimiento y la técnica,
el instrumento solo y con acompañamiento. Manuela Wanumen escogió de forma
inteligente un repertorio equilibrado entre obras de distintas épocas, cada una con
sus exigencias particulares, pero todas ellas con grandes complejidades. Interpretar las
obras de Johann Sebastian Bach siempre generará algo de frustración entre los solistas
más autocríticos, inclusive entre los mundialmente conocidos, pues su música no es
de este mundo. A pesar de que la obra de hoy encuentra sus raíces en danzas europeas
de carácter popular que fueron luego estilizadas entre los compositores doctos, lograr
sostener el discurso musical y sobrevivir a la larga y exigente Ciaconna del final no
es tarea sencilla. El pasillo de Luis Carlos Saboya será un descanso para sus dedos y
mente, pero dejará ver el fondo de su alma, su expresividad y su colombianidad. Luego
del intermedio, bajará al Hades para emular primero la risa del diablo, viejo amigo
de Paganini, y después interpretar endiabladamente el Capriccio No. 16. Finalmente,
cerrará con una larga sonata de Schumann en la que hay un íntimo diálogo con el
piano que la acompaña.
Partita No. 2 en re menor para violín solo, BWV 1004
Las sonatas y partitas para violín solo de Johann Sebastian Bach (1685-1750) datan
del denominado periodo de Köthen (1717-1723), importante en la producción de
música de cámara del renombrado compositor alemán. Son una serie de obras que
consolidan ese punto en la historia del violín en el que el instrumento empieza a
ser tenido en cuenta por sus capacidades como solista, y ya no como un mero
acompañante. Hay lugares de desencuentro en la musicología histórica acerca de
las primeras obras escritas en el Barroco para violín solo, pero la indicación en puño
y letra de Bach de que sus sonatas y partitas debían tocarse ‘senza cembalo’ o ‘senza
basse’ demuestra que fueron concebidas para sonar sin acompañamiento alguno. En
ese sentido, y de acuerdo con la etapa en la que Bach se encontraba al momento de su
escritura, pueden apreciarse como el impulso inicial de la figura del violinista como
solista. Además de ser musicalmente ricas y complejas, al mejor estilo de Bach, son
también retadoras en el aspecto técnico, lo que muestra la intención del compositor
por mejorar el nivel de los músicos a su disposición en la corte del príncipe Leopoldo
de Anhalt-Köthen (Wolf y Emery). Así, estas piezas son didácticas y pedagógicas en
un estilo avanzado, pero no por ello pierden su calidad musical.
Para diciembre de 1717 las obligaciones de Bach con su anterior empleador,
el duque Guillermo de Sajonia-Weimar, habían llegado a un infeliz término: Bach
quería ser maestro de capilla –la posición de mayor prestigio para un músico en ese
entonces– y el duque negociaba este puesto con otros interesados. Al enterarse de que
5
el príncipe Leopoldo tenía la voluntad de otorgarle el honor de dirigir la música de su
corte, Bach solicitó insistentemente y quizás en términos no adecuados la terminación
de su anterior contrato, algo que desató la furia del duque, quien lo encarceló por un
mes antes de dejarlo partir.
Instalado en Köthen, Bach continuó con su incansable rutina de componer
música con distintos fines y para distintos formatos. Si bien las obras vocales de
inspiración religiosa y de alabanza, como los corales y las cantatas, fueron una
constante en aquellos años, la música de cámara también ocupó un lugar importante
para la inventiva de Bach. Con músicos a su disposición y estudiantes ávidos de
mejorar su técnica, el maestro de capilla escribió obras para pequeños ensambles
y piezas para solistas. De su lustro en Köthen quedaron producciones que son
consideradas hitos de la música de cámara como los Conciertos de Brandenburgo,
la primera parte de El clave bien temperado, algunas piezas para laúd, las suites para
violonchelo, y las sonatas y partitas para violín.
La partita escogida por Manuela Wanumen para el concierto de hoy está
conformada por cinco partes. Las cuatro primeras son típicas de la tradición de
ese entonces en la forma de suite (partita y suite pueden tomarse como términos
similares): danzas contrastantes inspiradas en construcciones melódicas, rítmicas y
armónicas de distintas regiones de Europa. Allemanda (alemana), Courante (italiana
o francesa), Sarabande (española) y Gigue (inglesa) se alternan en un vaivén lento-rápido.
La última parte, Chaconne o Ciaccona, incluye ambas características en relación
con los contrastes de tempo. Es el movimiento más largo y exigente de la obra.
Entre los instrumentistas causa terror su dificultad técnica, y entre los musicólogos,
confusión. No es claro si Bach escribió la Ciaccona como parte de la partita o más
bien la adaptó, pues parece ser más apropiada para tocarse en laúd (Altschuler, 2005,
p. 79). También se ha sugerido que la escribió a la memoria de su esposa María
Bárbara, quien murió en julio de 1720, el año al que se asocia la composición de la
serie de sonatas y partitas (Wolf y Emery).
Despasillo, por favor
Luis Carlos Saboya (n. 1980) hace parte de la generación joven de compositores
colombianos activos en la actualidad que no son fáciles de clasificar estilísticamente.
Con su música nos invita a desprendernos de esa acartonada costumbre que tenemos
heredada de Europa de hacer una taxonomía de las cosas para poder hablar de ellas
con propiedad. ¿Acaso hay que clasificar todo para entenderlo? Quizás no, y menos en
un momento tan especial en la contemporaneidad colombiana de la música, con tanto
diálogo entre nuestras tradiciones (entre ellas mismas) y otras venidas del extranjero.
Esto no quiere decir que nuestros compositores sean inmunes al estudio crítico de su
obra. De hecho, lo merecen, pero este no es el espacio para ello, y quien escribe no es
el experto.
6
La biografía de Saboya es una pista para crear un discurso inteligible sobre su
música. Y se puede hacer de forma sencilla, sin entrar en las particularidades de sus
composiciones o su análisis formal. Desde pequeño estuvo expuesto a las músicas
tradicionales de los Andes colombianos. Esto significa que es conocedor del
pasillo, el bambuco y la guabina (entre otros aires de la región). Estudió las músicas
académicas de conservatorio en Tunja y en la Universidad Nacional de Colombia,
para luego especializarse en composición en Barcelona. Con el Trío Instrumental
Palos y Cuerdas –junto con sus dos hermanos en la bandola y la guitarra– ha
explorado músicas de distintos compositores colombianos, ha hecho sus propios
arreglos y ha estrenado obras originales. En formato de cuarteto (violín, vibráfono
y contrabajo), con músicos del extranjero, se animó a incluir armonías jazzísticas en
sus composiciones.
Por las razones anteriores, la música de Saboya suena un poco a Colombia y un
poco al mundo. El diálogo entre el violín y la guitarra en la pieza de hoy presenta una
conducción de voces muy clara, en la que el violín resalta lleno de melancolía en la
primera parte –con guiños que nos recuerdan el lirismo de los tangos de Piazzolla,
para contrastar con la jovialidad de los pasillos rápidos en la que le sucede. Mientras
tanto, la guitarra acompaña con armonías cargadas de color y la inconfundible
acentuación.
Capriccios Nos. 13 y 16 de 24 capriccios para violín solo, Op. 1
Quién más podría encarnar aquello que Bach predijo con sus piezas para violín como
el gran solista si no Niccolò Paganini (1782-1840). La libertad que se le empezó a
otorgar al instrumento en el Barroco puede verse materializada décadas más tarde
en Paganini como un prototípico músico romántico emancipado: de las cortes
europeas posteriores a la Revolución Francesa era asesor o invitado, y no empleado;
a sus conciertos en extensas giras por Europa se debía pagar por la entrada, lo que
representaba un ingreso económico constante; sus composiciones eran vendidas
por casas editoriales; logró administrar su propio negocio de compra y venta de
instrumentos durante sus últimos años de vida; inclusive se emancipó de Dios al no
aceptar los santos óleos en su lecho de muerte (quizás este hecho alimentó el popular
mito de su pacto con el diablo, lo que lo había convertido en el violinista más virtuoso
de todos los tiempos). Su irreverencia era tal que muchos de sus contemporáneos
despreciaban su tendencia a no seguir al pie de la letra las partituras de otros
compositores (Neil). Paganini era entonces un intérprete libre. Y como compositor
se permitió, también, antojos a su gusto.
Paganini compuso para un tipo de violinistas que no existía en su tiempo. Cambió
la postura del cuerpo para sostener el violín, experimentó con distintos tipos de arcos,
hizo uso de la scordatura (afinaciones no convencionales) y exprimió la técnica de
ambas manos al máximo (Neil). Cuando se publicaron sus 24 capriccios para violín
solo, estos fueron juzgados como imposibles de tocar, y la crítica los consideró como
7
un ejercicio ególatra que únicamente buscaba reforzar su histrionismo y pirotecnia
musical (Perry, 2004, p. 208). La historia ha probado lo contrario, pues estos capriccios
son en la actualidad piezas obligadas entre todos los violinistas de conservatorio, son
requisito en concursos y son material de grabación en todo el mundo.
Los 24 capriccios fueron compuestos hacia 1805, cuando el joven Paganinni
contaba con veintidós o veintitrés años de edad y trabajaba como concertino en
la orquesta del Principado de Lucca y Piombino, un estado napoleónico asignado
a Elisa Bonaparte, hermana del emperador. En su primera edición, quince años
más tarde, aparecen dedicados ‘a todos los artistas’ (alli artisti), lo que sugiere que
fueron pensados como un ejercicio compositivo más que como piezas de ocasión.
De hecho, parece que Paganini nunca los tocó en público. Aquí la palabra capriccio
(capricho) toma sentido en el ámbito musical y lingüístico, pues estas piezas no solo
no comprenden una estructura o forma única, sino que surgen de su antojo por
componer.
Sonata para violín No. 1 en la menor, Op. 105
De los tres compositores europeos en el programa de hoy, Robert Schumann (1810-
1856) es el más cercano a nuestro tiempo. A pesar de ser reconocido por algunos
de sus contemporáneos como un compositor romántico, etiqueta que él rechazaba
categóricamente, sigue siendo considerado en nuestros días como uno de los mayores
exponentes del Romanticismo. Como un agudo crítico musical, fundador, editor y
posterior colaborador de la revista Neue Zeitschrift für Musik, Schumann se sentía más
cómodo pensándose como un neorromántico, un continuador de una tradición que
encontraba sus raíces en el propio Bach. Aquí, Schumann rehúye de las clasificaciones
históricas de los estilos musicales y propone una forma distinta de entender la
evolución del lenguaje musical académico europeo (o quizás solo alemán). Tal vez por
haber nacido en el seno de un hogar donde la actividad literaria era fundamental, y por
haberse sumergido con intensidad en las letras –en especial la poesía–, buscó reconocer
el carácter poético y expresivo de Bach, más allá de su música vocal. Fue partícipe de la
generación de compositores que, liderados por Mendelssohn, rescataron la música de
Bach, latente por más de cincuenta años y casi relegada al olvido. Schumann descubrió
a Bach a temprana edad y utilizó su obra para pulir su propio estilo de componer
estudiándolo con el más fino detalle. Se inspiró en él para escribir famosas fugas y
trabajó en acompañamientos para algunas de sus composiciones para instrumento
solista, entre ellas las sonatas y partitas para violín (Daverio y Sams).
Una de las características de la música de Schumann es un cierto rechazo (aunque
con algunas excepciones) al virtuosismo, considerando que el desarrollo técnico no
debía ser un fin en sí mismo, sino un medio para embellecer y sublimar la música.
Pero, como buen romántico, es decir, al reconocer la importancia de la expresividad
de los sentimientos, podía darse el gusto de caer en contradicciones. Cuando era
joven y vivía en Heidelberg, hacia 1830, y aún no había decidido dedicarse de lleno
8
a la música, conoció al virtuoso Paganini y cayó rendido ante sus pies. Dicen que el
encuentro fue definitivo para Schumann en la decisión de no seguir estudiando leyes
para darle gusto a su familia. Veinte años después, cuando trabajaba en la primera
sonata para violín, escribía acompañamientos para los 24 capriccios (Daverio y Sams).
La sonata para violín que escucharemos hoy fue escrita, a diferencia de las obras
de los dos anteriores compositores mencionados, en el periodo más maduro de su
vida, cuando ejerció como director musical municipal en Düsseldorf entre 1850 y
1854. Estos fueron años de mucha actividad componiendo en varios géneros, tanto de
música sacra como profana, vocal e instrumental, orquestal y de cámara. Es también
el ocaso de su vida cuando luchaba contra las fuertes depresiones que lo aquejaban
desde joven, los ataques de nervios, el reumatismo, y el agotamiento físico. Un intento
de suicidio al arrojarse a las aguas del Rin y varias estancias en clínicas de reposo
marcan este periodo. Pero su sonata no refleja la inestabilidad mental y la enfermedad.
Es en cambio, como toda su música, una lúcida reacción a la naturaleza no artística
del pasado inmediato, cuando la música de mayor aceptación era grandilocuente y
espectacular.
Referencias
Altschuler, E. Were Bach’s Toccata and Fugue BWV565 and the Ciaccona from
BWV1004 Lute Pieces? The Musical Times, Vol. 146, No. 1893 (Winter, 2005).
Daverio, J. y Sams, E. “Robert Schumann”. Grove Music Online (2001).
Consultado el 27 de enero de 2019. Disponible en: https://doi.org/10.1093/
gmo/9781561592630.article.40704
Neill, E. “Nicolò Paganini”. Grove Music Online. Consultado el 27 de enero de 2019.
Disponible en: https://doi.org/10.1093/gmo/9781561592630.article.40008
Perry, J. “Paganini’s Quest: The Twenty-four Capricci per violino solo, Op. 1”.
19th-Century Music, Vol. 27, No. 3 (Spring 2004).
Wolf, C. y Emery, W. “Johann Sebastian Bach”. Grove Music Online. Consultado el 27 de
enero de 2019. Disponible en: https://doi.org/10.1093/gmo/9781561592630.
article.6002278195
Esteban Bernal Carrasquilla es guitarrista clásico y magíster en
relaciones internacionales de la Pontificia Universidad Javeriana.
Conduce programas radiales en Javeriana Estéreo y UN Radio, en los que
presenta hallazgos de sus investigaciones acerca de la música y la historia
de los pueblos afrodescendientes de los Estados Unidos. Actualmente
cursa un postgrado en Estudios Estadounidenses en la Universidad de
Heidelberg (Alemania).
Próximos conciertos en Manizales
Auditorio del Centro Cultural del Banco de la República
Foto. David Castañeda
PÁRAMO
quinteto de jazz (Colombia)
URPI BARCO, jazz (Colombia)
Miércoles 19 de junio de 2019 · 7:00 p.m.
CRISTIAN DEL REAL, piano (Colombia)
Miércoles 21 de agosto de 2019 · 7:00 p.m.
GUSTAVO ADOLFO NIÑO, guitarra (Colombia)
Miércoles 4 de septiembre de 2019 · 7:00 p.m.
PÁRAMO, quinteto de jazz (Colombia)
Martes 8 de octubre de 2019 · 7:00 p.m.
Cód. PULEP: XEA716. IFP763. HJI802. OLS648
HANSJÖRG ALBRECHT, órgano (Alemania)
Domingo 14 de abril de 2019 · 11:00 a.m.
JUAN PABLO CEDIEL QUINTETO
jazz (Colombia)
Domingo 5 de mayo de 2019 · 11:00 a.m.
Este concierto también se presentará
en Bucaramanga y Cúcuta
ANA MARÍA RUGE, soprano (Colombia)
Miércoles 15 de mayo de 2019 · 7:30 p.m.
PÁRAMO, quinteto de jazz (Colombia)
Domingo 19 de mayo de 2019 · 11:00 a.m.
Este concierto también se presentará en
Barranquilla, Manizales, Pasto y Villavicencio
OSCARYVAN GARZON TRÍO
jazz (Colombia)
Domingo 26 de mayo de 2019 · 11:00 a.m.
PAUL BROCK BAND
música tradicional irlandesa (Irlanda)
Domingo 16 de junio de 2019 · 11:00 a.m.
Este concierto también se presentará en
Bucaramanga, Cúcuta y Pasto
Cód. PULEP: VGW197. ZVW301. WZY642. ADF704. RXM248. QGI573.
JUAN MANUEL MOLANO, guitarra
Jueves 25 de abril de 2019 · 7:30 p.m.
Este concierto también se presentará en Villavicencio
ELVIS DÍAZ, arpa llanera
Domingo 28 de abril de 2019 · 11:00 a.m.
Este concierto también se presentará en Ipiales
JONATHAN ROSERO, saxofón
Jueves 9 de mayo de 2019 · 7:30 p.m.
Este concierto también se presentará en Popayán
LOS TAITAS, trío de jazz
Jueves 16 de mayo de 2019 · 7:30 p.m.
Este concierto también se presentará en
Barranquilla, Cartagena y Santa Marta
COLORÍN COLORADO
música tradicional colombiana
Jueves 23 de mayo de 2019 · 7:30 p.m.
Este concierto también se presentará en Armenia y Cali
CORRIENTES
nueva música colombiana
Jueves 30 de mayo de 2019 · 7:30 p.m.
Este concierto también se presentará en Montería y Sincelejo
Cód. PULEP: ZZP911. ZDC824. TAG250. HQF982. OTA770. XYA267.
SERIE DE LOS
JÓVENES INTÉRPRETES
SERIE PROFESIONAL $6.000
$10.000
HANSJÖRG ALBRECHT - Foto: Florian Wagner
JUAN MANUEL MOLANO - Foto: Daniel Molano
Si desea recibir información sobre la actividad cultural del
Banco de la República ingrese al siguiente enlace
www.banrepcultural.org/servicios/listas-de-correo
y suscríbase a la lista de correos.
Boletas disponibles en
Próximos conciertos en Bogotá