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Por: Nidia Delgado | Fecha: 12/08/1870

Política-Literatura-N oticias-Filosofía-Relijion-Artes i oficios-Instruccion pública - Bibliografía. Meclicina-Variedades-Revista de la ciudad-Revista de los Estados-De Europa i mercantil. Se publicn. los mártes, miércoles, viérnes i sábados, el mismo dio. se lleva a 1l1s casas de los susCI'itores de lá capital i se remite a Jos de fuera por los correos res­(¡ lectivos. Los lúues i juéves se publicará si es necesario. Valor del trimestrc, tres fuertes. Valor del semestre, cinco fuertes sesenta centavos. Valor del año, diez fuertes. Valor del número suelto, di&z centavoS. rrRIMESTRE 111. AÑO l.-Bogotá, 12 de agosto de 1870. LA ILUSTRACION. Espliquémonos. La sociedad es ung especie de esfera con un centro comun, que es EL DERECHO. Ahí .converjen los que mas diverjen, todos. Ca­da hombre es un radio que parte del centro i tiene en el centro su punto de contacto comun con los que mas diverjen de él mis­mo. Dicho se está.: ese punto de contacto comun es el centro de la esfera: es EL Dr:­J: tECHO; en cuyo acatamiento i en cuyo leal servicio está el bien sccial, el bien de todos. Cuando nosotros proponemos ligar a los conservadores patriotas, con los liberales patriotas, cualquiera podria comprender que pretendemos la cándida quimera de hacer Iusion de ideas, en vez de fusion de ' concur-sos pe1·sonales. Lo que buscamos no es la identificacion de los diversos, sino la armonizacjon de lo diferente. No aspiramos al absurdo de hacer la pri­ma de la sesta en el instrumento, ni vice­versa; sino a poner acordes ámbas cuerdas, conservando la una su grave i lleno tañido, i la otra su son fino i atiplado. No es mas. J esto, es tan fácil en la música como en la sociedad. Un verdadero conservador no es sino un hombre que dice: Primero el ónlen q~e la libertad. Un verdadero liberal no es sino un hom­bre que dice: Primero la libe1·tad que el órden. Para poner de acuerdo a esos sujetos, bas­ta analizar la aparente contradicion que los tiene separados. Prescindimos en nuestros análisis de toda esa larga historia de mútuos agravios, por que con penosos recuerdos, con quejas i re­criminaoiones, no es posible dar un paso en ·e l exámen de la naturaleza de cosa alguna en el mundo. Sin serenidad de ánimo no es posible ati­nar con la verdad ni con la mentira. En­tónces no se razona sino que se disputa; i una. dispnta es el exordio de una batahola. La cuestion política, no solo entre noso­tros sino en todo el mundo civilizado, puede reasumirse en la sencillez de una fórmula gramatical: El substantivo i El adjetivo. La libertad, elemento esencial del progre­so humano, es el substantiuo. El órden, o sea la regularizacion de ese progreso humano, es el verdadero adjetivo, De aquí, la frase entera, completa: PROGRESO REGULAR, REGULARIZADO. Progresal' en qué 7 En todo. Regularizar qué? El progreso de la huma­nidad. El progreso, regularizado o no, puede existir p01' si solo, como el substantivo en la omcion. Pero la regularizacion supone siempre algo qué ordenar. qué regulariza¡·. Es, pues, primero el rrogre~o que el órden; i en esta parte, el lema Je nuestro estandar­te nac ional, Libe1·tad i ó1-den, colocando pri­mer~ lo que es primero, i en segundo térmi­no lo-que es posterior, está en admirable armonía con la cronolojia que la ontolojl -de los seres establece lójicamente ; Libertad i ór-den. Acaso gran parte de las luchas políticas del mundo, no tengan otro oríjen que haber querido los hombres trastornar el órden na­tural de colocacion en que Dios ha puesto las cosas en el admirable encadenamiento de su portentosa creacion : Primero la libertad, con que todo se crea. Despues el órden con que todo se ordena, Bien. Pasando las cosas de -esa manera, no hai para qué intentar la obra imposible de que el ébano se convierta en marfil ni el marfil en ébano. El arte de la filosofía PI)­lítica no consiste en cambiar la esencia de las cosas, porque esto es un desvarío, sino en ponerlas en una conveniente armonía. Que el liberal sea tan liberal como lo quiera. Que el conservador sea tan consérvador como le parezca. ¿ Qué mal puede haber en esto? No son tambien diferentes las flores, las frutas, las hojas, las ramas i el tronco de un mismo árbol, i sinemb:!rgo coexisten sin choque i en la mas perfecta armonía, cons­pirando en ó1·den a un mismo fin. que es la existencia, utilidad i bellezas del árbol? Pues ese árbol es la patria. J tanto contribuyen al bien de la patria los que se desvelan por su progreso, como los que se desviven porque ese progreso no sea frustra neo, a fuerza de irregularidad. No pretendamos, pues, violentar la natu­raleza del hombre, porque eso seria dar coces contra el aguijan. Pero templemos el in;;trumento, llevando cada cuerda a un tono único. Basta echar una mirada sobre la prodi­jiosa variedad de d~ferencias que pueblan el universo, hasta no hallar iguales dos pétalos de una misma rosa; i fijarnos luego en la in­comparable armonía que reina en esa divina obra de EL SAIUO por escelencia, para com­prender en esa leccion infinita, que El órden no consiste en una violenta mo· notonía de formas, figuras, colores o tama­ños, sino en la concordancia de todo lo diferente, haciéndolo con verjer a un fin único. Este es todo el arte del verdadero hombre de Estado. Lo demas es, reventar las cuerdas en fuerza de no saber ponerlas acordes. Esta es la política que saben los salvajes, que I:omo dice Montesc¡uieu, cortan el árbol para. aprovechar sus frutos, en vez de des­prenderlos sencilla i delicadamente. Volvamos va nuestra primera imájen : Una circulÚerencia, la sociedad. Radios diverjente., los hombres, con su diversa edad, educacion i medios de obrar diferentes. En la educacion se incluyen sus diferen­cias en usos, costumbre, -ideas, profe'io­nes, etc. La sociedad es como un ejército. En él hui hombre de todas edude', complexiones i razas' con di tintas iJea, con diversas fuerza personale,,: con di~ere~t~ carácter i con dIstinta:> creenctas I Opl11lOne sobre cuanto conslituye el uni\'ers Adema, uno on de infiinteria, otros d caballería, otros de artilleria. Pero todos, apesar d· su inmensa varie­dad, conspiran al mismo fin. Se publican remitidos i avisos, a un precio suma­mente módico, que so arreglará con los editores. Todo lo de interes j eneral se inserta grátis. Los editores, NICOLAS PONTON 1 C~ NUMERO 128. Al bien por la victoria. 1 todos, el uno abriendo sendas en el en­marañado bosque; el otro tras de las quie­bras del terreno, asestando golpes certeros medio oculto en las zanjas; esotro barriendo al enemigo al estampido del cañon; este acu­chillándolo en la llanura al escape de su fo­goso caballo; i aquel consumando la derrota del enemigo cargándolo a la bayoneta con el empuje del despeñado alud. ¿ 1 hai otra cosa que lucha i victoria en la consecucion del bien público? Despues de un triunfo militar i ántes de ese triunfo bélico, ¿ significan algo, o han significado algo bs variadísimas diferencias que existen en la composicion del ejército? ¿ Qué importa que los hombres tengan sus lados - diverjentes, si conspiran a un mismo fin, concurriendo a un centro comun que es el bien social? Lo que entre nosotros se ha llamado hasta ahora con un nombre utópico fusion de par­tidos, o sea la conversion de los liberales en conservadores, o de los conservadores en li­berales, equivale a evocar la májia para con­vertir a los hombres en mujeres o a las mu­jeres en hombres. Esto no puede pasar del delirio de un cerebro enfermo. Hai, no obs­tan te, en ese deseo una buena idea, i un patriotismo, que no por ser erróneo en sus medios deja de ser la espresion de un cora­zon jeneroso. Otros mas resueltos i ménos avisados, no sabiendo que sea posible acordar o armoni­zar las diferencias, creen que la mejor doc­trina consiste en destruir, no lo que no es armonizable,sino lo que ellos no saben poner en armonía. I semejantes a los niños que no saben cómo es que se hace bailar un muñe­co, entran en un furibundo enojo i acaban por estrellarlo contra el suelo, arrojándosele incontinenti ellos mismos encim1. a patalear sobre el despedazado juguete, como poseidos por un acceso epiléptico, 1, con perdon del público, ¿ no serán estos casi todos nuestros políticos? ¿ I será esto error, o espíritu de cucañero egoismo ? Quizás ámbas cosas. Empiezan por decir, que la cosa, que la armonía social no es po ible. Por qué? Por­que los partidos son diferentes l Ah! con que lo dife1-ente no puede armonizars~! ¿ Qué es, pues, lo que es capaz de armoOl­zarse en este mundo, lo idéntico? Acabá­ramos! Estos señores llaman armónico lo mono­tono; i dejándose de mas di~currirJ declaran de hecho i de derecho, que el bambuco i el t01-bellino son mejores ouras de mú ica que La J.Yorma o La Lucía de Lamennoor. 1 si­ga la danza! Pero ¿ quién será capaz de convencer al que tiene inleres en que no lo cont:enzan 1 ¿ Convendra jamas un iman mahometano en que el Coran es un libro macarrónico, p ra quedar él mismo peor todavía que el libro susodicho? Hai no ob:>tante, una parte na i deprco­cupada en toda sociedad; í a e p rle sane i dc-preocupada es a la que no"otro:. pe­lamos. Porque e a los CT 110::1 i no a lo:. n lero:. quienes nos imporl per uadir, f]l!e on sieol­pre los gallos quielle:. alen perdiendo en todas las riñas, es decir, EL l'L"CnLo.-... Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 510 EXTERIOR. EUROPA. Entre los acontecimientos que mas ocupan actualmente la atencion pública en Europa, tene· mos noticias para comunicar a los lectores de La ILustracioJ1. de dos muí importantes: la guerra entre Francia i Prusia i la a bdicacion formal de la ex-Reina de España, doña Isabel 11. Acerca de la primero, no podemos todaví~ dar seguridades sobre su csactitud, por no haberla visto en ningun documen to público u oficial,aunque parece que ha llegado a Bogotá garantizada por algunas firmas mui respetables; pero en cuanto a la segunda, s1 podemos asegurar que tuvo lugar en Paris el dia 25 de junio último, en presencia de todos los miembros de la familia real de España, de los grandes, dignidades i hombres públicos, escepto el marido de doña Isabel, don Francisco de Asis, quien no pensó fuera necesaria ~u presencia en aquella solemnidad. Despues de hecha su formal declaracion cn un discurso, doña Isabel leyó el manifiesto dirijido. a los españoles, en el cual traza brevemente. la hIS· toria de su reinado i comunica su determinacion espontánea, de ceder todos los derechos que le asisten i la autoridad real a su hijo don Alfonso, príncipe de Astúrias. Terminada esta lectura leyó su abdicacion, que fué firmada por los asistentes. El Cuerpo Lejislativo de Francia recibió una peticion suscrita por los miembros de la familia de Orleans, a fin de que se revoque la medida de escepcion que los mantiene desterrados de la pa· tria. En el Senado, se trataba de pedÍ!' al Gobierno algnnas esplicaciones sobre la índole de un tra­tado entre Francia i España, lo que dió motivo a algunas interpelaciones i aun a discusiones acalo· radas. -A la lei de los timbres, sucedió la de la su· presion de la publicidad en las ejecuciones capi. tales. Ya no presenciará el pueblo franees esos horribles espectáculos. --Una causa célebre se está iniciando ahora mismo en Francia a la Sociedad Internacional, en su calidad de Sociedad Secreta. Esta sociedad de obreros se estableció en 1863, po rece que con el objeto de fortalecer un pacto de federacion uni­versal entre todas las sociedades obreras, pacto que debia tener o tiene ciertas bases políticas. Del proceso indicado resulta que hoi cuenta con 811,729 asociados en Francia, Suiza, Inglaterra, Alemania, Austria i España. -La cuestion de indemnizacion a los Senado­res ha llegado últimamente a su término, despues de haber comprometido por algunos momentos el crédito futuro del Tesoro nacional i aun su mis­ma estabilidad, con la. aceptacion de una pérfida [CO)lTINUACION. ] Fuí al armario, abrí el cajon, busqué su doble fondo, le hallé, no sin algun trabajo; le abri i encontré un legajo de papeles atados con cinta roja. Guardé aquel legajo i la cartera i salí. Una hora despues un eclesiástico se encerraba con Pablo. VIII. Pas6 aquella noche horrible. Al amanecer el mismo eclesiástic@ que habia Ilusi-liado a Pablo acompaffaba a. la pobre Ines. Su madre habia muerto. Pablo habia muerto tambien. Ines iba a la casa del eclesiástico a vivir en compa­ffía de una hermana de aquel buen sacerdote i de dos sobrinas suyas hijas de su hermana. Yo le habia propuesto esto al padre Moráles, que así se llamaba, i no habia tenido inconveniente. Un convento nos habia parecido a entrambos dema­siado. Ines resignadn. a la voluntad de Dios, pero despeda­zada por el dolor, habia dado su últimiJ beso a su ma­dre muerta, i habia seguido al padre Moráles. Apé~as habia desaparecido mi carretela, que los conducla, pararon a la puerta dos carros fúnebres. Gabriela i Pablo fueron puestos en ellos. Salcedo i yo les acompalIamos al cercano cementerio de San Isidro, i no salimos de él hasta que los ataudes estuvieron en los nichos. Sobre una de las piedras negras del un nicho debia escd birse : GABRlELA. Sobre la del otro: PABLO. Salcedo i. yo nos metimos e~ otro de mis carruajes que yo habla mandado traer 1 nos volvimos n Madrid rompiendo la densa niebla de una mallana de enero. Dejé a Salcedo en su casa, i mandé que me llevasen a la mia. LA ILUSTRACION. enmi~nd a introducida por M. Mathieu al proyec· to presentado por el Gobierno. Dicha enmienda fué desenmascarada por M. Martel, a cuya habi­lidad debe el Gabinete la resolucion satisfactoria e imprevista de aquel negot}i::tdo. EL INOENDIO DE ELDEu};'.-El 8 de mayo, en el momento que la poblacion de Elbeuf esperaba el resultado de la votacion del plebiscito, resonó un grito de alarma: era que acababa de declararse . un incendio en uno de los establecimientos de lH. Jermau Roze. N o obstante la actividad que se desplegó para combatirlo, el fuego tómó incremento i se comu· nicó a la fábrica ocupada por lH. Fleury Desma· res, dependiente de los establecimientos de la se· ñora viuda Chenneviere, situados a 6 metros de distancia. Los progresos fuel'on terribles, i en el espacio de una hora las llamas Be estendieron a seis establecimientos, que cubrian un espacio de trein ta hectáras. No habia entónces bastantes bomberos ni sufi· ciente material. Amenazada la ciudad, pidieron socorros a Ruan, que por tren rápido envió una parte de sus bomberos con muchas bombas. l!.:n· tónces a la una de la mañana, limitaron el fucgo para resguardar lad casas inmediatas i lo restante de la hermosa fábl"Íca. Toda la poblacion estuvo en pié toda la noche, i solo al amanecer pudieron dominar el incendio. Cerca de 2,000 piezas de paño, de laa cuales la mayor parte pertenecen a M. Fleury Desmares, humean todavía en el JIonton de escombros. Un bombero ha salido herido gravemente, i otros han recibido contusiones. La pérdida se calcula en 3 millones de francos. La Inglaterra está de duelo. El 27 de junio murió en Lóndres lord Clarendon. El Gabinete ha sufrido las siguientes modifica­ciones: lord Granwille, Negocios Extranjeros; lord Kimberley, Colonias; lord Halifax del sello privado. No ha dejado de causar mucha animacion i en· tusiasmo en )a capital del Reino Unido, i sobre todo en Arlington-Street, residencia de la Como pañia eléctrica, la terminucion de la famosa línea de la India. Desde Sumla, en Himaloya, cambió el Virei un telégrama con el Presidente de los Estados Unidos. La distancia recorrida por el mensaje es de 13,500 kilómetrol:l siguiendo los cables, i el tiempo de la trasmision del despacho de Sumla a Washington fué solamente de cua· renta minutos. Las últimas noticias de Prusia se reducen a la grave enfermedad del canciller de la Confedera­cion, Mr. Bismark, motivada por el suicidio de un miembro mui querido de su familia; i a la ac· titud que el Gobierno i el pueblo quieren tomar CAPITULO QUI TO. UNA HISTORIA ESTRAonDINARIA. 1. Cuando me encontré en mi gabinete, 11.1 lado de 1:1. chimenea, me pareció un suelio todo lo que me habia sucedido aquella noche, empezando por la misteriosa. dama del Teatro Real. i concluyendo por el entierro de aquellos dos sé res, de los cuales podia decir que apénas habia. estado en contacto. Pero hai contactos que como el de las ortigas punzan. El contacto con aquellos dos séres muertos me habia punzado el alma. Me dolia fuerte i pesadamente la cabeza, como cuan­do se despierta de una horrible pesadilla. Mis muebles, mis libros, mis armas, mis cuadros, hasta el fuego de la chimenea tenian para mí un color estraffo. Las colgaduras de damasco rojo de los balcones, trasparentando la débil luz de un dia triste i nublado, influian en mí de una. manera penosa. N o habia dormido ni un solo momento a.quella noche. Yo necesito dormir diez horas, no sé por qué. Cuando duermo ménos me duelo la cabeza. 1 sinembargo no tenin. suello. Ni la cabeza me dolia. Porque lo que yo sen tia en la cabeza no era. dolor. Era vaguedad. Em como si hubiese tenido dentro de la cabeza hu­mo acre i denso. 'Aquello era una fiebre leve que me permitia estar fuera de la cama, pero que dnba n. todo lo que me ro­deabA, a.laire que respiraba, al oigarro que fumabA, un color indefinible, UDa temperntura ardiente, un sabor amargo. r en medio de esto sentía en el cornzon ..... . Yo quisiern. que un fisi610go me dijese por qué el corazon nos duele o nos hace senlir una fruiciou divina, cuando sufrimos o gozamos con el recuel'do de unn. mujer. Yo recordllba apesar de todo a In. Dama de noche. Yo la veia a traves dol velo sangriento i lúgubre que habiun estendido sobre mi almn. los aconteoimien· tos un teriores. I un pensamiento vago me decia qlle pntre nquellos aconteeimientos i la Dama de noclte habia una relaoion inmediata. Era, vlctimn. de un fen6meno singulnr. Sentia un vivo deseo de conocer el contenido de los papeles que componian ellegnjo que tenia. junto a mi, con respecto a la Francia en una próxima guerra. Los periódicos aseguran quc el reí Guillet'mo nI> desea semejante guerra, pero que necesita hacer creer al pueblo que la desea para no perder un ápice de su popularidad. Por su parte, Bismark. que comprende demasiado bien lo inconveniente de la tal guerrá, se vió obligado a confesar que ca neoesario hacerla o abandonar el poder. Entre estas dos opiniones fluctúan los ánimos; pero lo cierto es, que todos los dias va haciéndose mas necesaria aquella ape)abre un velador, i aunque queria, no podia. estender la mano para tomar aquel legajo. Habia una resistencia misteriosa que se oponía a. mi voluutad. Se estableci6 una. lucha. entre mi voluntad i aquella resistencia incomprensi ble. Al fin i despues de un violento i doloroso esfuerzo, nsí el legajo, i desaté con las manos crispadas su cinta roja. Al desa.tarle, algunos papeles cayeron al suelo. Al recojerlos encontré entre ellos una hoja de marfil, en que habia una admirable miniatura. Un papel envuelto en que habia un rizo de cabellos rubios. II. Al ver a la mujer a quien aquella miniatura repre­sentaba sentí un estremecimiento de frio. Aquella mujer era la Dama de noche. El retrnto tenia un admirable parecido i estada mag­n1ficamente ejecutado. La misma edad vaga en aquel semblante, las mag­nificas trenzas rubias, los mismos ojos espresivos i dulces, las meji1lns pálidas ..... . I el mismo traje con que yo la habia visto la noche anterior, con la ola diferencia ele que las rosas, las perlas i los encnje , en vez de ser negros eran blnncos. Aquel busto inmóvil parecia vivo. Tal em mi fascinacion, o tal la maestría. con que estaba heoho el retrato. ¿ I c6mo aquel retrato eslaba o habia cslado en poder del negro difunto? Los papeles que tenia delante de mi debian declr­mela, i yo reourrí con IÍnsia a .\quellos pnpeles. Pero lÍntes de leerlos i por uno de e os movimientos sin objeto del pen amiento, tomé un papel, puse sobre él el marfil, seffa16 con un h~piz sobre el papel la esten­sion del marfil, i IJnmé n. mi ayudn de cámarn., ouidan­do ál1tes do cubrir el retrato para que no le viese. -Al momento, le dije, vete a cnsa de mi joyero, que, cueste lo que cueste, tenga. hecho para la noche un murco de oro i brillahtes para un retmto del tama­ño quo va marendo en ese papeL Mi nyudn de oámnl'a salió, i yo me puse a. ordenar los pliegos d.cllegDjo que cstaban numerados. lII. A la cabeza de la primera pájinn se' veiau los vesLi­jios de un sello de armns timbrado, que para borrarle, para destruirle, se habia bruñido con un objeto duro. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. A S 1 A . JapOn .-Segun una correspondencia ele Na· gasaki, dice El Oon'co de Ultramar, parece Ber oierto que ban sido perseguidos i 'asesinados los cristianos de las provincias del interior. Cartas de Yokobama dicen que el representante frances, in· formado de esto::! hechos, ha dirijido al Gobierno japones su primera en que pide la repal'ueion de aquellos. Pero no babiendo producido niDgU::l re~ultado esta medida diplomática, le ha enviado a Yedo otra en que mas enérjioamente hace aquel l'ecl:llllo; i en esta vez el Gobierno dclMikado res· pondió favorablemente i prometió dirijir a todas laB provincias las órdenes neoesarias para que ce· Ileu COlas atroces persecuciones contra los cristia· nos. El 1\Iini"tro franccs esperaba al nuevo co­mandante de la division naval francesa, a fin de etJviar UD buque de guerra a Nagasaki para que haga cumplir estas órdenes. -Por cartas dirijidas a personas de esta oiu­dad,. Bogotá, se asegura, que cn Pekin han sido asesInados muohos estranjeros, entre los cuales se cuentan los embajadores de varias Naciones. AMERICA. Ven::zuela.-Un oomerciante de esta plaza, que aoaba de llegar de Maracaibo, noticia, que a su salida de aquel puerto, se acababa de saber haber ocupado a Barquisimeto el jeneral José l\1arÍu. Hernn.ndez, quien en com binacion oon otra parte del ejército al mando del jeneral Galan se­guia inmediatamente Eobre Valencia, cuya oi~dad habia sido evacuada por el jeneral Guzrn~n Blan­co, quien ha reconcent¡'ado sus fuerzas en Carácas. (De "La Idea" de San Cristóval.) PerÚ.-Ceroa al puerto de Supé acaeció hace poco tiempo una terrible catástrofe. El vapor " Ecuad~r," que llcvaba a remolque la chata Ohancay 1 a bordo 26 pasajeros de cubierta nau­fragó despues de haber reventado sus cald~ras a uy;ta distancia de seis millas de aquel puel'to. Su c?mandante, mandó tripular todas las embarca­~ Iones de que disponia, i aunque con muchas di­ncul tades lop;ró llegar al costado del buque justa­mente cuando iba a hundirse del todo. Salvó 19 persona~, la mayor parte heridas i pero no pudo salvar Dlnguno de los efectos con que iba cargado aquel vapor. . -El Gobierno de Inglaterra ha invitado al del ~erú p~ra. una série de exposiciones de objetos de lDdustna.1 ~e~las artes que tendrá lugar en Lón­dres a. p.l'lnClplOS .del año venidero. Dícese que la exposlClon marítIma de Nápoles tamLien le ha enviado su invitacion i i para el efecto ha nombra­do e} Gobierno peruano oomi~ionados a los seño­l'es J arter, actual director de la Escuela de artes Juan Pardo de Zela oapitan de marina. ' Era, pues, imposible percibir los cuarteles de aquel ~scudo. Pero en su parte superior quedaban los vestijios de una corona. Era sin embargo imposible determinar si aquella era corona l:ea l, o cOI'o~a de duque, conde, marqués, o baron. DebnJ o de este timbre destruido casi se leian en le­trlls grueslls : ::'IHS RECUERDOS. Luego a manem de cita, este lema píadoso : Ji'iat voluntas D ei. I?es~~les en una letra muí igual, muí caracterizada i mu ~ leJ~b~e aunque mui menuda, se leían cn 1'englones roUI pl'OXlmos los unos a los otros lo siguiente' " 1? de setiembre de 18...... . Hoi he empezado a vivir. Hace muc~o tiempo que mi vid~ em una especie de maras~o. baJo. el cual se revolvll~ el remordimiento. El CIelo, la tIerra, el mar, no eran para mis sentidos mas que el vaslo espaoio de mi tumba. Nada me coumovia. Vivi,a orgá.u.icm~ente porque ero. necesario vivir. ¿ QUIén. hllbIa SIdo yo? ¿ quién em? No me lmportabll.. l~ei o esclavo, caballero o mendigo, todo era igual. Siempre un hombre. ?lénos que un homb'·e. Un ol'ganismo con neoesidades materiales. t Cuál em mi patria? El mundo. . EI lugar donde un hombre nace es su cuna su po.- trll\ no. ' . Yo era, pues, un sér que vivia, pero que ni scntia ni pensll.ba. P?rquo no encontraba nada en qué pensar s6riamenle. NI ~un en los medios de satisfacer mis uecesidades materiales, porque yo era rico, mui rico. En otro tiempo, la vi 'la de uua montuña la sombra Jo una se~va de cedros, e.ll'eltí.mpngo de la' tempestad, el mar bOJo lo. luna, In ml1·o.da dc una mujer, la' lúgri­mas do un desdIChado. lo. luoha dcl elefunte COIl el tigre. la de un buque con las olus, mo hacia n cantar como a un pí.jal·o. Rocitaba versos de memoria o los escl'ibi:"\. De pUM teni:~ la pl\ciencia de volverlos o. recitar o Jo volverflls 1\ leel·. Luego lo. vanidad de imprimirlos. Despues los ojos de las mujeres, sus h~grimas, sus LA ILUSTRACION. - El nuevo Gobierno ecle5iástieo de Puno de­r ogó el auto de entredioho, que se habia fulmina­do con fucha 26 de mayo último i i se cree que igual cosa sucederá en Lampa. Bolivia.-Por cartas particulares se sabe quc un ajente del S,.. Piper, recomendado para la co­lonizacion de ciertos territorios divididos entrc Perú i Bolivia, salió para Alemania a fiu de ha­cer los arreglos convenientes para dar priucipio a la r ea lizacion de cse importante proyecto de co1onizacion en los desiertos fronterizos. -Un deoreto do1 señor Presidente, de fecha 1.0 de julio, convoca a las CállJaras constituciona­les para su reunion ordiaria el G de agosto en la ciudad de la Paz. -Se pensaba en la oonstruccion de una vía ca­rretera entre esta oiudad i la provincia de Yen­gas, atravesando los pueblos de Corozco Chuli­mani e Trupam. Eate trabajo será de ru~i fecun­dos resultados para el comercio boliviano. lVIéj~co.-En me~io de las ~jitaciones que han prodUCIdo la revoluclOn de Gualnas, la de Jalisco i la de H,iCl Grande, i apesar de los escesos cometidos contra las propiedades de particulares, el Con­greso cerrÓ sus sesiones a principios de junio, En su mensaje, dice J uárez a aquel Cuerpo, que los trastornos ~e San Luis i Zacatecas habian que­dado reduCl?os ~l t~mor, ya COlDun en aquel pais, del vandal.aJ~ cJerCldo por unas pocas partidas que reCOrl'lan los campos i las ciudades. A esta penosísima bituacion dcl Estado, hanse agregado causaR. de otra especie, que mantenian en la consternaClon a los infelices mejicanos. Los temblores condtantes i las súbitas erupciones de los. volcanes, han oausado graves daños. En OaJaca, un espantoso tel'l'emoto derribó la ter­cera parte de lo~ edificios de la ciudad, perecien­do entre las rumas 103 personas i quedando 53 heridas. En ~ia~utl~ vinieron al suelo la mayor parte de las Jgleslas 1 muchas casas i pero el ma­yor daño lo ha recibido oon la obstruccion de los caminos, motivada por el desprendimiento de mu­chos peñasoos rodados desde la oumbre de las montañas. Casi al mismo tiempo se avisaba de la costa del Pacífico, que el volcan Potchula amena­zaba una erupciono -El ejército fué aumentado por resolucion del Congreso oon 20,000 hombres i pero jeneral. mente se cree que sern. imposible llevar a efecto esta medida por exijir nueve millones para su presupuesto, oantidad igual a la mitad de las rentas públicas. REVISTA DE LOS ESTADOS. Doyacá. Por una lei nacional, este Estado ha recibido un beneficio en la cesion del monasterio de la Conc:lpcion, situado en la ciudad de Tunja, cesion suspir~s, ~us qllejas o sus sonrisa't! me han sido de todo punto IndIferentes. El ~ar, .las nubes, el ro.yo, las fieras, se han revuel­to a ml~ pl~S, hl}n pas~.do sob~e mi cabeza, han atro­n. ado mIS oldos,. han rUJldo a m~ lado, sin conmoverme, BID que o. BU VIstO. hayo. corndo mi pensamiento en bu~ca de una ~rase poética, sin que mi corazon haya latIdo de entuslIlsmo o de miedo. Yo el'n. nn cadáver viviente. Todo lo que me rodeabo. me po.recin. uno. sucesion de sombras falsas. Me hn.bin. reducido al o.islamiento. Mis criados me creian mudo. Mi paseo era siempre a la. orilla del mar, por lo. par­te de la C?sto. mas bravia i solitaria, alli donde las olas rom plan eternamente produciendo un eterno lamento. Roi he recobrado la vido.. Roi vivo. Hoi amo. La mujer o. quien amo no me engañará, no me cau-sará celos, no me matará. el alma. Porquc ~o. mujer que yo amo ea un recuerdo. Una mUjer muerto.. Una ~ujer que el mar ha arrojado a mis piés i que yo he vlslo sepultar. . Sinembo.rgo, 0.1 dejo.rla en su tumba me he estreme- CIdo. Siento un no sé qutS terrible en mi co.bezo., No puedo escribir mas. Continuaré otro dia." IY. Al llegar o. este punto de mi lecturo. me detuve como el o.lltor decia haberse detenido. ' ¿ Serian aquel~as memo.rins las ~emorias del negro mllerlo por una Inconcebible fatall<.Idd o. mis manos! ~n.tre lo. fisonomla de un hombre i ~us acciones, su nchvldau, su pensamiento, su almo., hni una relativi­dad pel"fecta. Yo procuré recordar los rasgos fison6micos del afri­cano, i me pal'ccio. ver bullir bnjo cllo' tod.l la melan­colia. toda la de espel a"; n, tod,) In. c:icentricid d que se reyelabnn en las liDl'a< que a~nb b. d leer. 1 habia mlemas una e,tl.lÜ, rcl¡¡cion nlt" el e tndo en que ,;0 habin cncontrnc.lo d homure (¡llO h bin (scri­to aquellas memorioso j el e,lado (n quo me encootr b yo úotes de conoccr o. la J) a de noc/,e. Aquel hombre, amante de una mucrta, so me h uin hecho .impiÍlico. 511 hecha con el objeto de que so establezca en él UDa casa de instruccion o de beneficencia. -Rise abierto una escuela de niños en Sora­ci, rejentada pOI' una señorita i lo que ha more­cido tanto al Jefe departamental del centro como !11 señor Seoretario jencral mui honrosoe concep· tos, accrca de las esperanzas que prometo para lo futuro, este hecho, quizá. el único que como cjem­p10 pucde citarse en el Estado. Participamos tarubien de sus ideas. Crecrnos que en esa edad impresionable de la vida,el espíritu del hombre se forma ruojor para la virtud i para los deberes so­oia1es bajo la dulce iniciacion de la mujer, que bajo !a fél'u.la de un pedagogo casi siempre hura­ño e lDconslderado. Santander. El periódico oficial de este Estado, trae los in­formes de los señorcs Directores de las casas de educacion en los depar amentos de V élez i García Rovira, los que ciertamente inspiran confianza cn el buen éxito de aquellos establecimientos a quc dedica sus principales cuidados el Gobierno del Estado. -Sa bid o es que la navegacion del rio Carare ~aria grande impulso al comercio de Santander i 1 con este propósito ha invitado la Secretaria jc­ne~ a! n:.las personas o compañías que deseen el pnvl1eJlO para navegarlo, desde su confluencia con el Magdalena habtn "Los Rotes" o hasta el puerto de "San Fernando, " a que le dirijan sus propuestas, las que serán recibidas hasta el 30 de s~ti~~bre próximo. Ese dia se adjudicará el pri­vl1eJIo al que prescnte mayores ventajas. Entre los doce oapítulos que contienen las bases d.e dicho priviJejio, enoo~tramos que el empresa­no harn. los gastos de la canalizacion del rio i los de. c?n~~rvacion d.e la obra durante el tiempo del pnvIleJlO j que dJOho empresario tendrá derecho de percibir del Gobierno de la Union dos mil pe­sos a.nuales, durantc cinco años, dcsde que por el GobIerno del Estado se le ponga en posesion del privilejio en los términos ostab1ecidos por la lei d? 21 de junio último i que asegurará tambien dICho empresario con hipotcca a satisfaocion del señor Presidente del Estado la cantidad de tres mil peso.s para responder al 'pago de una multa ?stabl.eClda en una de las bases de dicho privile­JlO; J, finalmente, quc cualesquiera dudas que oourran en la ' intelijencia del contrato, las aclara­rá el señor Presidente del Estado de acuerdo con el empresario, i en caso de discordancia los Jueces i Tribunales del Estado son compet~ntes para decidir la controversia. -Tambien se conocdió licencia al señor Ra· mon Gómez G. para construir un puente de cali­c~ nto i maderas sobre el río Lenguaraco, conce­dIéndole el cobro de ciertos derechos de peaje i Yo comprendia aquellos amores. Yo me creia capaz de ellos. Seguí, pues, leyendo con el mayor intereso V. " La luna de los tr6picos es mili brillante. Me paseaba yo solo a lo largo de las rocas inundado por aquella luz tranquila, oyendo el eterno i melancó­lico quejido dol mar. Mi alma. reposaba en su tumba ambulo.nte. i gozaba ni sufrio.. Estaba alli, en medio de la noche, vagando entre aquellas rocas, porque alU la soledad, o lo que es l'J mis~o ~a eter.nidad, me rodeaba por todas parles. i\li VIda fislCa ero. alU mas fácil. La brisa era. fresca, impregnada de las sales mal'i­nas, i refrescaba mi frente, me hacia sentir UIlQ 'indo­lente delicÍt\. De improviso la brisa se convirti6 en viento. Algunos momentos despues el viento en hurncan. i\le fué preciso abandonar las roclls de lo. playa i subIr a otras mayorel:! para que no me alcanzo.sen 1:1,< olas. ucesiyamente el océano irritado. hirviente hinchún­dose mas i mas, me fué desalojando de mi p¿sicion. Al fin tom6 ~siento en !n. puntn de unn roca, a donde el mar no podll!. llegar 8100 en un catacli mo. Cuando In voI~nt d de Dios permitiese que el mar se Ira ga I'a a la ti erra. Unn cerrazon densa. compacta, habia tornado O!!cur aquelln noche tan clara poco ánt . Lo. luna h bia dt>jddo de alumbrar al mar i a la tie­r~ a. para e tender su dudos luz sobre la. p rte supe­rlOr uo aquel loldo de nube, negra . nelúmpo.g~~ de lum~rantc" como si 1 infierno se asomn.e de tiempo en hempo con un fragor e panto (J p rIl .contcmpl~l' al mar 4~le ruji como pudier o rojir un m~llon de llgre h mbrlCnto_. '\'Cnian a encontrarme en mI trono c Icáreo, dc~de donde miraba yo ir.lp i­ble la lempe~lnd. El ~urnc n. ps"aba .iI ando por le fi nco d roca. 1 me ob le b n irme U picas va DO el' IllTeb lh o 1; < Ilu, 1 C i !lo tOlTent s obre mi c beUlo. , n l' • C. l 011'0 hel'lan i 1'0 vi n herir 1 pun ue 1 s roe clrcunvl'cin \ o e,t b en peligro. En un gr n peligro. (Con!; uar') Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 512 reservándose el Gobierno el uso gratuito do dioha coustruccion para el servioio públioo. -Con feoha 11 de julio dirijió el señor Secre­tario jeneral una nota mui honro.sa al señor Pre­sidente de la Sociedad de San VlCente de Paul, oon motivo del resultado que tuvieron los exáme­nes de la Esouela elemental de primeras letras e industrial, que dirije dicha Sociedad en el Soco­rro. Esta importantísima asooiaoion, no solo atien­de a las necesidades materiales del pobre, sino que ha querido oural1 el pauperismo, dedicando sus desvelos i sus cuidados al espíritu, de donde jene­ralmente nacen los grandes males que tan espan­tosamente uos presenta la indijencia. Debe· mos, pues, a la 'Sociedad de San Vicente de Paul, establecida en el Socorro, un sincero ho­menaje. -El señOI' Presidente de la Compañía del ca­mino de San Buenaventura, presentó con fecha 10 de julio último, a los señores accionistas, el presupuesto de rentas i gastos para el trimestre que principiaba en esa fecha. El de gastos as­ciende a la suma de :$ 17,993, i el de rentas a $ 10,000, que con una existencia antcrior de $ 9,447-28 se cubre el primero i queda un so· ¡n'ante de $ 1,454-28 centavos. CAmaRAS LEJISLATIVAS. Senado de Plenipotenciarios. Dia 28.-Fué considerado en pl'imer debate, a virtud de P"oposicion del ciudadano Herrera, i pasó a segundo el proyecto de decreto por el cual se dIS­pone la reinscripcion de ciertos militares. Se aprobaron en tercer debate, i el Senado quiso que fueran actos lejislativos de la Union los siguien­tes proyectos: el de decreto que autoriza al Poder Ejecutivo pal'a conceder un privilejio ; el que autori­za al Poder Ejecutivo para hacel' un convcnio, con los señores Nicolas Caicedo, .N. Santamaría i l\Ia­uuel n. Peña, sobro derecho:! de agrimensura; el que concede privilejio para la navegncion por vapol' delrio Cauca; el de pension a la ~eñora Teresa N a­riño; el de decr'.lto por el cual se hacen concesiones a los que se establezcan en territorio de la antigua ciudad de la Plata; el que hace una cesio n a la Mu­nicipalidad de Buga: el de decreto por el cllal se condona al distritu dEl Barichara el capital ele.~ 320 i sus intereses que adeuda al fondo de bienes desa­mortizados : el de decreto sobre honores a la memo­ria del ciudádano jeneral J. H_ Lopez ; el de conce­: siones especiales pn materia de aduanas; i el do loi orgánica de la instruceion primaria a cargo del Go­bierno de la U nion. Al discutirse en tercel' debate el proyecto de de­creto relati vo a los militares da la independencia, el ciudadano Ferro propuso i fué aprobado, que volvie­ra este proyecto a segundo debate, pero no se pudo continuar el debate sobre este proyecto, por ser llegada la hora para tratar obre el proyecto de lei de callal . interoceánico, cuya discusion SAubrió es­tando presentes los ciudadanos diputados Viana i Restrepo, nombrados por la Camara de Reprt:~en­ ·tantes para so tener sus I'esoluciones, las cuales fue­ron nprobadas por el Senado des pues de discutidas. A las tres de la tarde se levantó la sesion. Dia 28 (nocturna.-Tuvieron tercer debate i el Senado manifestó su voluntad que fueran actos lejis­lativos de la Union los siguientes proyectos: el de decreto por el cual se ausilia a los pobl'es CJue sofrie­ron en los incendios ocurridos en el distrito parro­quial del Espinal en 18G9 ; i el de lei sobre presu­puesto nacional para la vijeneia económica de 1870 a 1871. Se abrió el segundo debate del proyecto de lei adicional a la orgánica de la oficina jeneral de Cuen­tas, el cual pasó a tercer debate. Fué igualmente aprobado en segundo debate i pasó a tercero coe! las variaeiolles introducidas por ]a comision, el proyecto de l ei sobre e$tablecimien­to de un jurado de aduana, i que bace otras refor­mas en este ramo. A las nueve de la noche terminó la sesion. Dia 29.-El Senado aprobó en tercer debatA los siguientes proyectos; el c/e lei adicional a la orgá­nica de la oficina jeneral de Cuentas; el de lei olJl'e establecimiento de un Jurado de aduanas, i que hace otras reformas en E'ste ramo. Se abrió el oegundo debate del proyecto de de­creto por el cual $8 dispone la rein scripcion do cier­tos mIlitares, i fué aprobado pasando a t('rcero. La comision a cargo del ciudadano jeneml Herran, a que pasaron las objeciones hechas por el Podt'r Ejecutivo al proyecto de d(,cl'eto ndicionallll de 17 de mayo de 60, sobre pensiones a los militares de la mdependencia, propone que el Senado declare fun­dadas en parte las observaciones bechas por el Podpr Ejecutivo, lo cual fué aprobado i comunicado a la honorable Cámara de Representantes. Se dio cuenta de haber accedido la Cámam de Rl'presentantes a las vnriacionCI< introducidas por el Senado en los proyecto~ de lei or¡:nínica de la ius­truccion primaria a cargo del Gobierno de la nion; i el de decreto que autoriza al Poder Ejecutivo pnra conceder pl'Jvilejio para la navega<:ion por vapol' del rio Cauca. Con lo cual se levantó la sesion. Cámara de ltepresentantes. Dia 28.-Se consideraron las variaciones del Se­nado al proyecto de leí adicional a la de Crédito LA ILUSTRAOION. nacional, i se aprobaron todas. Se n,Probó ademas, un artículo nuevO propuesto por el Ciudadano Mar­tínez, relati vo a los acreedores prendario" Continuo el debate dol proyecto do decl'eto que senala testos para ciertfls enseíía~zas, !. vol vió a ha­blal' el ciudadano Senador EzeqUiel ROJas. Se lovantó la sesion quedando COIl la palabra dicho orad (Ir. Dia 28 (nocturna).-Despues de habersc ~cu~ado la Cámara de alauno:! otros asuntos, contll1uo el debate dd [Jroy:cLo sobre Refialamiento de testos, que ya la mayoría parece tenia resuelto votarlo en esa sesion. En efecto, despues de haber hablado el ciudadano Senador Rójas Garrido, discurso que ha merecido las mas sev('ras calificaciones, porque no fué otra cosa que una burla con la que se pretendió poner en ridículo a los cuatro Representantes que habian combatido con brío i valentía el proyecto; la Cámara se declaró suficientemente instruida ~obre la materia i cerró con csto la discusion, sellando al mismo tiempo los labios de los Rl'presl'ntantes in­sultados e impidiéndoles el uso del lejHimo del'l~cho de defensa. Se proce>dió a la votacion del proyer.to i no se qui­so atender ror el Presidente, la pe tic ion del ciuda­dano Farias de que aquella fuese nominal. Antes de la votacion se habian salido del recinto de las sesiones todos o casi todos los Representantes ad­versos al proyecto, i la votlleion se verifico sin quo­rum de una manera inconstitucional; i sinembargo se dio el proyecto por aprobado i se Ip pa o en co­mision al ciudadano RestrApo, npe'ar de las recla­maciones opol'tunas del ciudadano Viana i de otros Hepresentantes para que se llenasen las fórmula'. Via 29.-'foda la sesion, que duró hasta cerca de las cuatro so empleó en la uiscu ion del acta, que fué combatida por el ciudadano Viana con razona­mientos incontestables en la parte en que se da por aprobado el )'royecto sobre te~t09. Dicho Re pre­sentante exhibió a la mayoría como violenta i apa­sionada que no habia re petado ni el reglamento, ni el de~ol o de la misma Cámara al prohibir a los cuatro Repre entanteR imultados por el ciudadano Rójas Garrido, el defenderse i hacer sus réplicas. La sesion estuvo ajitada i no faltó porsupuesto, la intervencion ilegal f' incivil de una parte de la barra, compuesta de estudiantes del Rosario, que como les dijo mui bien el ciudadano Quijano, exhibian los frulOS del apl'endizajll de Bentham. OOLABORADORES. Camino carretero al Magdalena. Señores miembros de la Junta. Tengo el honor de informar a la Junta de la visita que acubo de hacer a los trabajos del camino carre­tero, de conformidad con lo que ofrecí en la última sesion ordinaria. El 17 del presente ali ue e~ta ciudad, tomé el ca­mino nupvo en los Manzanos i fuí por él sin ime· rrupcion hasta el río ::\Iagdalena en el sitio de Cum­bao. Todo el camino cstá abierto con el banqueo qlle no haja de un metro ue ancho i cvn un declive variable que donde es lDay 01' no p~sa del 5 por 100 ; el piso está pt:rfectameutc :u'reglado para recorrt:rlo al ga­lope con la mIsma facil,dad con que se camina de Bogotá a Facatativá. Da manera que del Roble ni rio :i.\-lagdrJena se podrá ir en diez horas caminando constantpmente.con la misma velocidad. con que se va de Bogotá a Facatutivá en cuatro horas. Ete hecho, beñores, es de una gran significacion para el pl'ogreso de Cundinamarca i de toda la Re­pública, pue~, él revela completamente que con nuestros mjenieros i nUCstros propio~ recursos, PS fácil hacer el camino carretero de la sabana al rio l\1agdaleua; esta es la primera empresa del pais en el órdt:n de importancia. La distancia directa del Rohle al puerto de Cha­guani, es de ocho i media leguas i su diferencia de nivel t:S de 2,11-10 metros, i no obstante 1 .. interposi­cion de tres grandes cordilleras terciul'ias, el Trigjnndro Gonzále;¡; Vlí.que .. , Dámaso H.o.e!'do Glwi!'II\, Ll'o­poldo Flórez, Hamon 'l'avera, GI't'gori ... Gómez, A'E>jandl'u GonzlLiez '1', Rafael Duran, Sonting-o Ca. macbo, José l\Ial'Íl\ Sánto', José 'ro Osunn, José M. Véll'z i EuloJio Latorre. Los tl'llbll.jos ~stán mui bien organizados en el sentido de hacerlos con el mayor acierto i el m~nOl' co~to posible. La Junta debe estar, ]Iues. completa­mento ~Misrecha por haber emprendido la apertura de la vía Cflrretera, i haher CUID pi ido lo que ofreció al púhlico de exhibida pura el 20 do julio. Es sensible 'lUH los acontecimientos politicos ha­yan impedido al Pre~idclltu dtl la ~tepllblica, a los miembros del Gobierno de CundlllalOl\rcu, 11 los ministros e.tranjeros i demas personas invitadas a recorrer el camino, el concurrir en ese dia: ellos habrían Ancontrarlo concluidos los trabajos c1~1 c'a­mino de borradura, corno los encontré yo, que lle­gué a Cambao ellO pOI' la tardc'. El canlÍno se ha abic~rto por la llnea qua tuve el honor de proponer ('n ltlG5 al Gobierno de Cundi­namarca, corno la ma5 corta para el b"jo l\Iagda­Ipna ; pero con la modificacion que propuso a la Junta, sigUIendo 1'1 c:ontrafuel·te del Alto de la~ 'fablas, o ~ea (,1 camino ITJUS corto para caer al rio, aunque no al bnjo l\lagd"lena. A í, pue~, d .. 1 bo­queron de Chun;bamui desciende por la vortil'lJFH SUI' de dicho contrafuerte hasta IIe>gar a la loma d .. la Punta, pié del Hito del l\lirador, para i'1'g'lIi .. despues por la vertiente> norte de aicho contrafutlJ :C' basta el boqueron de Cllpira, de donde vuelve al .. vertiente sur, rodea el valle de Santa Rosa, atra­yendo las cañadas que forman la qU'.lbrada dA Cam­bao, i sale de este valle por el sur pllru volver clp~­pues al norte, bajando liiempre con (·1 5 por lOO ha~ta ponerse al pié del verdadero <:ontrafucrtP I seguil' 4,000 metros próximamc;nte horizontale, hasta el río Magdalena. El camino de hen'udura como está construido, exhibe perfectamente la nn~a i todavía se puede acortar cOll·iderablemelltc. Eu efecto, si de Capira se continua3e el trazado por la vertiente norte del contrafuerte, el can,ino se acor· taria 7,500 metros, pues se evitarian 10ti 4,000 me­tros de vega próximampnte boriz(¡ntales i lo" a,500 metros que hai para ir de la trocha al boqueroncito ue :i.\-Ioras, que se halla en el verdadero contrafu ~rtr'j o tambien, ~i del valle de Santa Rosa se Falr. por el boqueroncito occidental, se puede volvpr a tomar el contrafuerte cojiendo a la derecha, on cuyo cu';uscricion aluime .... ~ 1.0 d .. La 1/lIslracio ... Todos lot' numero, han "Ido elnIHdo~. Sr. doclor lJominJ cana de 18 del plisado I el valor d~ "u su>'cnClon a los Irl­mestres 10 o del lomo 2 o i l? del tomo 3? de El Hng''':_ R. P. Fr. Isaac Hója5, Sanla R osa de 7'úcaima. necl­bimos su cana de Hi del pasado i el valor de los II'Ime~lre" 2? i 3? de Lct Ilu~tmcl"n. . Sr. José T. Arria, .11érida. Por el prE'~enle correo reml' timos a u~led la elllrega di' la .• ::>emana lileraria" '1ue nos pide en su carla t1 cnrta d" lú de Jullo, en\"lo usted al doctor Joaquin F. Vélez. Sr. J. R. Trespalácio~, lIIorálts. Uablaremos con el .e­ñor García'J,ara el arreg-Io de la cuenta a que s .. rt'Í'ierl' su carta de 14 el pasado, i a él enlregaremos los libros qu~ usted nos mdie8. ANU~ CI06. José María de Mendoza, ha abierto l'U ."tu­dio de aboo'ndo en est¡\ ciudad, i hacEl cla~e~ dt : jurisprudenciaoi de procPllilllientos judiciales en IR casa de Sil habitacion, carrera de BllI'bacolIs, calle 1 '! nlíruero 5. 0 IMPRENTA DE NJCOLA5 PONTON 1 C.a Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.

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