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Radio y medios sociales

Por: | Fecha: 07/11/1863

'"'l· ~' 2.'~ r . . . JlOGOTA, . i DE NOVlEM RE DE ~865. , . ~!J: 2, .,. : Ro~ at-har fin a nu~stro segt{ndo .trimf!stre, ten~rom(,chado ~-de set. icn1bre ~róxi_mo p~do i boio 9! ~íiwero · q\'l~ de~irnoa. ~l¡rito del deuer nps hjzo haBla-r• la ~8, nomhrandOt.J.}e €:u~a m~1:ma do. ~a pn~-r~iu~ de J~:i necesidád nos •obliga a cmllar. Solos sin recursos sin N•évt>s da ~ogtllll,, por falleclllm·n.to del s~·f¡or C111a p~op1., · ... . ' d 1 doctor N&rCJBO R412! • . Yo .m.e halma e$cusni1o en atcnc10n f:· prest'3!~· elziUDOa los pnmeros la voz en defensa .e nue~· mis cireun~tandias; pero por n1ui O'fll.ves ·motivos qlle IJI8 tt·a. retJ)1on ~tutahnen~ at~cada, cuando el terro~ 1. el de· có.l::nJJrO\Qe~inn, he alleptado: ahora~ c9ufil}doen la amisiBc:t s:nherrto tematN'Ilildos 1 qttJetQs 1\ los mas fuertes 1 d1cstros que U. ha tenido la bondad dp profcsarme, le dirijo el ph'­éa e ... especie dé lu¡:~tf. M4~ tude, la angus.tia i la in. seuté oficio, por· el cual uoi a U. todas las facultades que ten­llitnacion , oducida.- pqr la lei ~e 23 de ab!il, hicieron go c?mo tal Cu,.,a interino1 ·para. que .me h~ga t•l f~tvor da oeaar el tfStopIl da las mas dl,Cstras pJum¡¡.s. está dada)~ órdt-n para qne sin thl~ll' a la prolubit:tOtl de l011 No.OtJOs .· abtta4llna®s· p~ ~o~ a~igo.S con cu yil coopera- PJ'Glnclo. sóhre qu6 no SH ~a que~ eki In Cit11a cnrLü, sa-.Ws ihlll­" ibrt htdHamoa ue.idQ · pt:~der contar, hemos conservado qttM_la !l't'ñora R.&sa . Pér(•z.ue Nnvn~rvte ~ u liuui~~ q?e.qs. t~eet' #1!-Wito.en la h1cha miét,~r•~t lo hemos creido nece- ~n m1m11~ d('~ fi.na~o sr.ñ?r Cura p•;ap1o, (J'lllflll _J11 .~t\ Rll.í ®Jl &-clrin JJt. cl"Jle de n:¡.~strn tare~. . donada, son pnt·a 1ní un Mm¡wornisa él·i'O uu ho)íor i gt~ati- , f..p 106 li4' nú..netos de'' El .vat<~il!o" que hnn visto la tud, n qntJ no ptH'ilu f'ultar. luz, pú.ldioo, cre~mtla h»!Jer es¡Hwato oon encrj íu i claridad, Soi de U. su ·sinCJCro nmig!J i afeetno~o Capcllan i ael'· las ra:wne cp1e el c]6ro-t;.lm& pare no so¡pc~crse a lns leyes 'vidor. l<'~t.. JuA Jctur Lucjano Díuz. · ~ of hll ~iliido ub ofiCio dbl Gol)it'Jn~ Edtsiá~ico, e- ... Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. .,EL CA. 'l"fJLlCft :' 1 11•nto enyú,hlico, i yo no hice n~vedad nlgu~a. · . cido en el Socarró una P1·opaganda de ·las·mismas ideae. Np,.deJare 1e hacer n:>tar a ,U;::,. ~¡~o~ e el se1~or doctor J,~cu•- Los . cinco sacerdotes declaran .obedecer ir-espetar al nQ DlnZ ua el nombre tle ll'l\lllhO l¡porqu~rJa n In Igles!l\ en ·Papa como Vicario de Jesucristo pero 'im¡u•uebán..1C\HD8 d.onüc &P. retinen to~aq 'h\s cln~es de la socledau a orar, • ~u e t incompatible con su mision la ~nt id· d ·'lem ara' Mhl> eon la fé qtte lu~re{)RI'On tle su~ pMlre<~., llaman Ca~a ue D lOS. ! : ' • • or a . . P . . ' · ~-- Por ln lectura de e•te info•·m,., i p&r 'la tlel oficio odjurtto, eJerce.-Se ~ompro~eten a 1" eEitca.r •el ~van,ebo 'P~· la 'tJS. verá IJ.Ue 1!1 tmdrv Luc,inno r>íaz M sA t>orta co~1o call;t- fac~ttad que los Gob1e~nos temJt&rai.es rtJene_n para; ·mt~r· q1ero1 i por su misma cor.ta se despeja tlel de'Va~o ran(}'o de vemr en ·las cosas relatiVas al culto este m..! 1 para dts¡loner " Gran Doctor., · , " de los bienes de la Iglesia. Se compt o Meten a .predicar Soi de US~ o~eliierrte súhdito 'Hiel servidor Q .. S. M. B. contra las ceRtmras impuestas a los sacerdetes que se ;Fa. JuAN NBrOMUCENO GARCIA. han sometido a los decretos de Tuicion i De!unortizacioR .Arquidil1cesls de S•ntafé de lJogotd.-Secretarta de1 Go­. · bierno Erlesidstico.-5 de no.viemÓ1'e de 1863.-N~ 1098. · .Señor CtLra escusador de San Vict)rí.no. Jlevt1rlvo a U. dt'.~paehalla favora~IP,mcnte la salieitu.d !le .dispen~u de pruelnmas para el matrimonio que esprosn. Aun!]ue U. '111\cc en cHa referencia'\ «i~rcehos que ne sa-tis­fllrán en P.Ste despacho, debo OU8erva'rle que desde f(Ue e) · ilhuo. sP.iior Arzobispo Mosqu~ra g•Juernaha esta iglesia, tan­to estai t1ispen~as como las ue impedimentos matrimoniales ·~e cenccftcn sifl 11ue se pague derecho de ninguna clase. h~uo taDJbicn hacHr l!ota¡• q~e lántes de ¡tre&et-.ei.au:.ual­' uier JUatriruonio, loe se1·virá. inquirir si los pretendieotes han wcurrido e:1 algltnfl peRa de lai!ld.eelaradas por la iglesia i qlll' · 110 encuentran oonsignado~ en la ~otn que dirijió el Illrno. se­iior A:rzouí11pB ~n ~1 ele j11nie de 1862, la Qlisma que remitida ni Norte, i c()phda en el uP.spacbo de la l~~sitlallc in de: Es­ ·tad¡HJc Boyaeá, sirvicj _dc hase p¡lra enjuicia 'Rte í reducirme · n prision en aquel nño i pn1'to de r.stc, i 1uc u yo juicio t.uvo conocimiento la Corte Suprema federal. · o que ' han jurado conforme a -la Jei de 2S tie abril;. i a enseñar a los pueblos que solo la {gle&ia es iDlalwle. · En fin, confiesan rotundameste que profesan les principios 1lel :t"adre Passaglia. · · • Aunque nb se nos OCll~ta ~a 1R..,tiUtad de ,aue~tr11s esfuerzos p11ra convencer a tos libera\ee &esa er~ores., aunque varias veces hemos rebati~ ~a estae mismas ideas, como vuelven a pTesentarse iiin haber case 'de Jo. que se ha escrito contra eH a~. 1110s vemos fm zados a iftfÍstir en combatirlas,cump\ieHd0 la f.I\•Íl!ÍOn que DOS M.mos ita puesto.. Todo lG qye l>()s sefíores RedaclG.res de ••La Opinipn" dicen, prueba, 11 no d~jar •dud&, que .• o e~ m prenden el 1:atolicismo, qae lo descolt(tcen absoltit&me.te i tqu.e .. haR oividad.o h~ta los rudimente)S de re1ijion q«e Rpc-enl,i.ieron en el hoga'l' ll&terno. La mujer ·cristianit ~ue ~.los -dió a. luz. que les prodigó las primeras caricias, q1Se. J~ &hrigó en SU !!eno, los alimentÓ COn Sll pecho i airijio SUS . prjmeroll pas06 eo la senda de la vi·da., tes enseñó segufl\~te a pronuncíar ~~ nombre tr.es ~eces santo de Dios :· les,:dijo De U. mui atento !le.rvido.r. Mwu.E~ ARrAs , que ese orimirotentc Ser, se babia revelado a·los hombres, Arquídiúcesís de Santaf~ tie Bogotá.-Sec1·etatia .del Go- tes luabia mandado ~dorarlo i amarlo coó toda au a\ilia i bim·no EclesU.stieo .. -5 de llovieJ.nbre de 1863-N.200l. eon tedas sus fuerzas: les habia mandado someterse Señor Cu~ de Mnllguí~ · . absolutam~nte a su voluntad soberana, 1·ofreci~dole9 en Se acoba ~e f.eeiUir' u~a sGliciÍllld de las veei?os cutplicos de premK> de ese arnor., de esa abn~g.acion, . una eternidad de .e~ parroClR.!a Jsa,br~. ee81on de \\Un pnrt.e de.l d!flzm.o ~n uel~e- gloria. Sí, eso les euseí\lt en su iRt'ancia ' la mujer a quien j,:~o do esn I~l~st.a, 1 nu~que no .t~ngocGnacn.ni~nto (le 108• t-e¡·~ dieron el dulcísimo Mmbre de marlr t> que los p'er~abs . m m o:¡ en q11e lucu.>ra la utra ec1JJOA el Illmo. sonor Arzoh1spo, d t· · d b 1 · i '· ¡ ' · ' · ., b · · a cv'e ~llí se h1ce referencia, porqije los libros !ole iogresos, CYo amente antes e es:u ~s 1 e orm1r os_ en eu regaz,. • l ·e egt·~$' nuestros. El nos comumoacwn del Prclada1 no o'b3tnte esto, dt"'O, M pedn·a. . ' . ' ' .. . . , , , i)lforr'ne a la o6t:ioa o~unciada, para que cou e.1 del señor cl)- h_a dejad.o a_,cl.lO ql:le ell'}~e qtt~erl' 1r al . c1elo, debe renun-fl& n·igo t~orero que oxí:lte en esta.c.iudau~ doctor M. M. Sítiz, c1arse ~Sl 1'1.\UimG, toma~· su ctm 1 ~;egUlrlo. ¿ Pu~de hab~r JlUtlll el' Qtro w.ñ~r tesorero de c1uo trata .el decreto doctor M. mayor grado de abyecc10n ? Seguu nuestros filosqfq~, no. F.. Saavedrn, fué estrañndo, se pase al ser.íor Vicario Jencral Pero nosotros los católicos creemos qu.e esta es la verda· , t-'~Y~ r~soluci"? ~e .COJ!u,t~icara por el Secretario, ú~ic? íun- dera virtud; i como ~a ~irt\ld .ea lo qlle .e.naerta .la Igle&ia, . .c,1oo qu~ le C8tu. atrtbutda a este en este asu.nto, torun.ndosc pr Contador i en s~s ridad. respectivo~ hbros, ue. lo~ ctlalell, as1 com~ del estado de caJa El tibre aiGefiri'> no .5ufre menüSt:abl3 -'gQCD ecu'. la le tampoco t1ene conoc1m1ento el sec.retarw por DO ser esto d 0 . El . . 1 . 1 b .~__ . ..t1 1 de su incu~bcnc:a. . e lOS. • que qmere 1r.s.e a e1e o o e~e : t:.1 .~lte a · $¡ ~ento servidor MIGUEL Aaus mtien~o, se r,e~ela. El !iomhre p~.tede seg¡¡Jrel camtno ~ ' ·quiera. El Jn~la autoridad tero­parte de los prodpctos de la tiena que pagan los catolicos poral que ejerce, i ~in cuya m•toridad tcrr.poral, obtenida ~~ virtud dt ~& leyes de li1 Iglesia i de alli iiale la cóngrua por los medi{IS mas ju~tos, sería el juguete de los podero­' dilt cura, si ,eSE¡ cura enviara mucho dinero pr. r el ptoducto sos, carecería de la independcncta que le es tan necesaria. de esa contribucion,seria <;Jaro que tenia un curato produc- para existir como Jefe de la Iglesia; porque la Iglesia .. , tÍTo,i siendo•cod .icioso,no querría h·ocarlo. No ~o n muchos, com o dice el Ilmo. Sr. Obispo de Canarias, puede existir-a lo que ..entendemos, los cm·atos que producen una gran ·· !!in rentas, sin clero ilustrado, pero no puede existir sin ' cóngrua. i por eso los que ll egan a obtenerlos, snn los i ~ depcndencia. Por eso, Dios que Yela por su Jglesin, hizo .eclesiástico• que mas curatos han servido,que mas miserias al Jefe de ella Señor de un pequeño Principado,i y11 hemos han e1perimentado, que mas dolores han nliviada, que probado con las palabras de Mr. Guizot que pretender· mas esperiencia hun adquirido en In penosa tarea .Q.e dirijir quitar al Papa ese principado. es atacar la Iglesia. las alma!!. . Los bienes de la Iglesia, son bienes consagrados a DioS', Por tudo que sea un ~aeenlote, presta un ser,·icio grande i nadie sobre la tierra criada pot Dios, tiene derecho pa!.':. nomo párroco. Es preci!!O con id~ral'lo ligadu a uno de poner 1a mano en esos bienes. No es porque el Ser oupre­nuestros pequeños pweblos, -rodeado de Jentes ignorantes, m o Jos .necesite. ¿Para q-ué ? Pero 61 o~denó ;.11us criaturas malicioshs, suspicases . .Sin sociedact. Teniendo que mar- que se los consagraran .¡ los respetaran. co'mo üna ofrenda ~char a Cllalquiera hor-a, en cunlqniar .tiempo, por maJop ' a su divinidad. I ya que los r~~lpagandistas creen en la camino~. a administ.rar los ~ncramentos a morihundos as. infabilidad ·de la Iglesia, del!~o creer en la de los ConcHio~ querosos, a prodigar con~;uelos a :.eres de quienes tiene que son los representfl.r,~s de la Iglesia,i r.l de 't'rent~ ~n el trabajo en hacerse entender. En lu<:ha casi siempre con el cap. 11, de la SE'':.:un 22,fulruín6 escomunion conha el• que gamonal re11pectrvo. Sirviendo de centro a toda e~a multi- usurpa eso~ 1J~enes i contra los clérigos que ron~·ienen en tud de se:es di.vididos por op!niones, p~ .intereses: procu- esa u~ste prl')ód ico, u ir e ; "qno Jos men~iouados sacerdotes no las- VIrtudes porque aleja de Dio.s. ¡ Oh! Los hombres fnrran C:'trríñados por mandato alguno do! Gobir.rno,sil'IO que son mui ciegos : no quieren comprehender que solo el volunhu·inmento ~e impu~if'roñ su dt'~tierro, por H•t·vir· mns catúlicismo· civifiza con esa civilizacíon grande, he.rmo~a, birn n los h~~bres que al Lrjislndor Supremo del U~iverso., fecunda, que hace verdaderamente hermanos a los hom- Con l:l ctmsmo r¡ue oc? tumb1·an ~wm.rr~ los J~b?rnleH, bre!t, que destruye el egoísmo func~to del mercantili!mo i hnC'rn p¡;tns falsas nsc•vr.ractnnPs, rar~ eh uunmr el met·t.to q~a de la t 1' · h h ¡¡ 1 b. 1 , ¡ e~to.~. ocho sncen.!ot!'S !Jan contraulo para con ]1\ 1glflW\ 1 me a IZacJOn_, que ace a ara P0 te un .ugar ~ ~~ntúlil':l do qne son dignos miui. tro", i para con e.!-ta ado del opulento 1 que persuade que no hemC\S .naCHlo ~n 1 o patrin l'Uya inmf'n, ;~ maynria, ama tnn cordialnwutc la 'reli­para comer, que no se goza solo con la poseswn de los jiou qae hn herrdnclo uc sn~ mayorrs. NMotrBs ntmos a btenes del mundo, que al que muere sobre un JnOnton de dt·tú la Yrrrlad rn poca. palabra~, para honra de. nt¡nellos paja lo aguard e~t:nno~: mfi•nnMI~s <'r_n toda P lace · ti ' · 1 d t ¡ · c~aotltltd ciH los hc•!'lioA. La aut.ondr1cl rlr Bn!.!a l!Jt·t·cula JIOl' re~ sm n, sm mezc. a e amargura que, n ve~, no •¡¡¡¡ Sr. Ospin11. r¡tti•o obl;g:ll' a eRtn~ •nr·pt·dc>tr~ n jnr11r r lw- . of~ece~a al segundo. As1 da al pobre valot· para sufnc sus tliPnc·ia a la iuictta )('i de 23 de abril. Los ~n<·t•rdole~ indic ·adns - pnvncJone~, i arranoa de su mauu t>l arma humicida que so nr·~ li'Pn n un ¡wtn tnn contrario a ~u df'lJPI' i ;u <"OlH'Ít'llc ia; en SU .desesperaCÍOn intentara hundir en el pecbo del que Pllt!'J:If'"~ pj M'ÍIOI' O•pÍnn lrs Ílltilll6 1'1 de (Ít'I'IO j)lll'!l fllt'IIL ostentando sus comodidades, pudiera er.eerse que insulta de l,t l;c·pt'thlien, d<·ntJ·o de e un t ro hura.. F.•toq SfH·Pr ­au mi~eria. ¿Puede alcanzar a tanto la lei civil?-Destruya- clotPfl [ll·'~·on persowdrnr>nto o su1dir•nt· ~" l<:s iliP~O t:n l~n.uiHo ee el árbol santo a cuya sombra reposaron nuestros padres, dr trr$ dJas pnrn ¡¡~·,·c·gl:11' ~'118 co·a~ uro~, 1 o1ros, lo:· .nJUl 1 u­IU pié del cual hemos ·u a do inocentemente en nuestra Lrr~, parn prop~n:wital'~e algun rc·r·~r~o P•lr~ 1111 I'IIIJú 1'01110 n·- , J g . el CJlW se les nhli¡Zaba a hacer. El r•no1· Osp1nn pnn•cc• r¡uP mez, hcchese a un lado la bar~a de Pe.dro qu,e navega Acc·c·uió o opa rentó t'cceclcr a tan jn ta dem~ucln; JH'J'oa prnns l!cgura. s~bre las ;0odas embraveCJdas:-qullese .a l pueblo su ~e hA.Linn srpnt'IHlo de su ~espat·ho , lo~ iguil•run unos creenc~a 1 se vera un cuos, la de~olac10n, la rmaa de todo rú fé, 1110 di:t, :\ntes de las do. de la ta1·cle, drbiau snlir dt• la porque, en nada podrá haberla; en nada habrá segnridad. ciud~~~ ¡Q_ué constt•rnt~cion la de n~uello~ pobl'es ~!lcer~lotP ! Los que fundan todo pro()'re~o en el desarrollo uc la ri. ¡Que a1hxton .la de todos los }¡aiJJtnnte de nquella ctud~od ! queza, ¡ solo en ese desar~ollo, ver~¡¡ cuant•l pobreza viene Oh! hrmos vt~to una (:art.n de Eugn que drspedazn ,el cornzon obre este uclo cuan a nargo es ent6nces el fruto del a.l J~r.r en ella}¡~ urt~cnpcton d~ aquella e~cena de Lar ha ro·.·· t b . , ' 1 , . • . Saltrrun; pues, 1 fneron a Cnh en clor.dr. ~l'gun cartlt r¡uo ra _aJO : _veran des a parecer los vmc\~los mas cm ?s, '. 1 e- }¡r•mo¡: tnm hicn l itlo, ~e c:lojaron c11 r:ns3 clr In ~~·íioftl M nriu duci:lle to~~ a cálculús d~ t, nto por ctcnto. i Que. nndts Fran ·i ca Lourido, para Úgt,¡r al ¡ltterto de Buennventu1 n. Jlara el esp1ntu! ¿ ( podra confonnarsc la raza latmn con Inuwtli~;.tnmente dt•!\pucs de ~u llrgada se JIII'C'srn to ('n ln ta·~ a esta manera de "cr? ¿No tenemos nosotros corazou? No, d alcj\ldc n intimarles que snlieran de la eiudnd inmrdinta­tto dstntyais todo, hombres del poder. Es tamo!! redPcic1os mente; i ul dia iguiento rlJ~tislJlo P;ntp!l'~uo les c.Jió ó.rd n 1\ ]a nada, dcjadnos siquiera nuestra creencia ' j 'IHiU I'ei~ p:tm.'c¡uo rr·g 1' 0;~0.S'm R. Duga; 1 por:t .tlltpP,dtr lc~ qur, puc)lGfE'II cometido un crimen m&oos habreis mostrado sic¡ uien\ que r:ontulllnr sn Vta,lt', nmrml?.ttl'Oil a lo~ pcone.- flUC Fe hal,¡_un 1! • 1 b 1 ' t· 1 hrcho e:1n;n dr lle\'ur lns rnrgM, r¡ue 81 srguJnn losrrclntaiJan OlS 10~1 'Tes,, que aun :ltc en vues .·os pcc lOS nn corazo.n rn II·';"~ ·¡ !os Í:lcoq·orariaH a HH r·norpo clo vdernno~. En-granadJUo. No, no _haga1s dcrranut~· mas s:~i1!I':e, no ~wgms tvnct·~· los aftijido ~:1cerdoi(•- ornlhmdo In vin qury iban a derramsr mas lágnma11.Tcned l(•Jtima de vosot:•JS !f.Ismo.s. seguir, ~r: ftt<•ron pnr los fn;gosísimor; cmnino11 t]e Vijc•s i el ----· puc·blo dl' Pnlm a m! ir¡¡ las Jt:nlns del Dugun i~:\sí püdieron AL PUEBLO CA'fOLTCO. salí t· a la BuciHtl'f'lltnr:t i de ¡¡Jii pnsaron a Guayaquil. Con fechn 9 de ag·o$tO últitno,fnlllamndo por el Sr. Jefe mu- Tal es ln lti~torin, ~f'gnn c~m·tn~ de ~u;ctos de todo crédito llicipal.Manuc) Suárcz l•'ortonl pot· un ofiC'Í'J pam que prrs- que hc>~1os vi5to, i eon todo los de ''El Ca.tX·nno" ascwran qno lat·sc el jurQHICnto de oboclieHcia al GoLit•rNo, ~uc nrababa estos succr:1ntr' $(' lttm ido f1tcru ele In 'RI¡111hlicn, porc¡nr. hnn de prestar el Seíior V1rario jcncral DoetOI' Antonio A111éz- qurrido. l1eci0:•n ttna vez wn. e~te mentís los sempiternos t¡uita, i ordenaba el Ilhno. Seíior Arzobi~po con fecha 1 i de :¡nu<•stra cordial enhorabuena ttquello:< julio. Con mucha repugnancia accc!uÍ a la rxi,jrnr:ia del Sor. minHro drl Srñor c¡u:•J1a11 ~:abi01' el C!SC'áncJa)o C[llP tfli t:ondncfa )a totalidad ele)(:,("]'<) t'Oll('UU0 1 1~'t0 ha rle"OCÍclO ~U mÍ. fOil «'n un Saeerc.Jote cercano ~1 sepu!cro ha cletlido produt:i1·. npc>~toJír·'l, que lJ1 abdir:¡vlo ~u J~.Jirsít:~~! div11n pHt'a rccibil'llt de Por tnnto, ma.nifit•sto dulantc do Dio~, J ucz tic los vi \'Os i de manos de lo:~ 1mt~ implnenl>les enPmigo~ t.!s In iglesia católica. Jos muerto.~, que estoi profundmentc a.rreprnthlo dr. !'~ta .Z:~ A ULTli\IA HORA. culpa i quiero cnmen
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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El Católico - N. 24

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El Católico - N. 25

Por: | Fecha: 14/11/1863

BL 1 1 •n PERIÓDICO DESTINADO A LA DEFENSA DE LA RELIJION CATÓLICA, APOSTÓLICA, ROMANA • . 11 TBUI. S. 0 -- 1' ADVERTENCIAS· Para complacer a las personas que nos han instado que continuemos la. redaccionde nuestro periódico, hemos procurado mejorarlo en su forma: ya. que la libertad de imprenta se ha salvado por prodijio en el terrible naufrajio qu~ han sufrido las garan· tlas constitucionales. Si las suscri­ciones fueren suficientes para cubrir los gastos, le daremos mayor esten­sion, pues no tenemos por objeto es­pecular, sino servir con la. decision que lo hemos hecho, a la Relijion que profesnmos, a la Iglesia. de que somos miembros. ~Se publica los sábados por la. tarde : se admiten suscriciones a 10 reales adelantados por trimestre, i so venden números sueltos a real, en la. tienda número 66, segunda. calle del comercio. 1 ~ EL CATOLICO. Por casualidad hemos visto un cna­leruo publicado en el Socorro pot· o- Jlrc~bitcros Félix Jil'on, Miguel Atuesta· i Juan S. Awero. En ese ¡t undct·r ~o dicen los Presbltcros mcu­ciouaclos 1¡nc hnn jurado confol'lne a ~ n leí de 23 de abril i han abierto sus igl esias i seguido ejerciendo su mi­u istcrio, con desprecio de las e en u ras rlc sm Prelados, porque esos l'rtlados 110 l1an podido impoucr tnles cen~u­' Mi a Jo s jmamcutados: pot·quc el sometimiento a las autoridades tcm­Jot ·alcs es de ol'apa obedecerán en contra ~ e sus convicciones a este respecto, porque ellos han visto que la relijion e ha querido desvirtuar, coovirtién­lola en bandera de tm partido deses­perad') pot· su vencimiento. Nosotros olo diremos por ahora pocas palabras ~ esos sci10res P resbi 1 eros, esa" pocas palabt·as sedn tan claras como nos [ISCa posible para que nos entienda el pueblo. E:; mui peligt·oso tocar el arca san­a, Solo el Gran Sacerdote puede en. Bo¡otá~ 14 •le uodembre de 1863. rwu.n. ~~. 1'. ,, . .. trar en el Sancta Sanclorum. Los que despedazan la túnica inconsulil del Salvador, proceden pcot· que los ju­díos deicidas. Los que quieren sacu­dil · ci JUgo de la autoridad santa, me· ten su hieno al cimiento de la Jglesia. Dios no puede reformarse, por(¡ue es, l1a sido, i será perfecto. Todo debe iuLordinarsc a Él, porque es ántes que todo, i todo existe por El. El que tiene verdadera féno vacila. La Igle­sia es independiente. El Poder tem­poral, por su propia utii:dad, debe protejer la relijion, no lt·atar de ava­sallarla. La Jei eie 23 de abril no la proteje, la ayasalla : la Cousti!\lcion la tlcstierra. Los sacerdotes no pue­den someleda por1¡ue no tienen tal poder¿ qu1é11 puede obedecer al que 1~ manda matar a la n1adre que le d1ó el ser? i quién tiene derecho de mandar la! impiedad? ¡el Poder tem­poral dió a los sacerdotes su carácter de talcr.? No, fué Dios. Dios fué quien l.os mandó predicat· i bautizar. Dios iué quien los facultó para pet·donar los pecados .i ~ara cousagt·at· el pan i el vliiO COllltrlténdolosen su carne di­viua, eu u preciosa snngrc. Pa1·a es­to no les dijo que pidic1·an permiso a las autoridades, sino que lo hicict·an apesat· de ellas: sin temor aunque los azotasen i los cmcificasen. J,a Iei manda que para poder hacet· estas co­sa. s, preste u un juramento préTio. La lc1 a taca la institucion de Dios. La lci pre\ ~ene en sn artículo 6. o quepa­ra baut1zar a nuestros hijos, para ca­sar a nucsh·ns l1ijas, pida cll\linistro d.e nne~tra relijiou permiso a la auto­ndad ctvil. Esa autoridad puede ue­sar la! permi o, porque si 110 pudiera negado, no habl'in para qué tocar con ella .. Esa autoridad es, pue , se­~ un la le1, superior a la Iglesia que no 10eonoce, que no puede reconocer cu estos actos, en estos sacramentos . ' mas supeuor que Dios que los esta-bleció. Los sacerdotes de 1~ propa­ganda soeonana 1 quieren una relijion puramcute espiritual. Dios pide a los hombres el culto esterno. El culto es.terno e~ debido por los hombres a Dtos. i S1n Dios qué seria el hombre :> Dios pus.o a Pedro por fundament~ de su Iglesia J le dió las llaves del reino de los cielos; le dijo que con­firmara a Slls hermanos en la fé i que ~paceJitara sus corderos i sus ovejas. lodos sabemos ya lo que esto signi-flca. El sucesor de Pedro es, pues infalible cuando define, cuando ense ña cosas de fé o de dogma. La ovej que se rebela no es del aprisco. L obediencia es necesaria, es esencia al católico. El que no es obediente u es católico. No es católico el que n cree en la infalibilidad del Papa i e la de la Iglesia. No es cdólico el qu no obedece a los Obispos puestos po Dios para rejir su Iglesia. Los sacer dotes que quieren someter la Jglesi al Gobiemo temporal: que se rebela contra el mandato de su Obispo: qu desconocen la autoridad je1·árquic de la Iglesia, serán todo lo que s quiera, ménos católicos. ¿Quién di derecho a esos sacerdotes para definir El Papa, la Jglesin pueden definí solo. Cuando ellos dicen en sumani fiesto Jo que obedecerat• i lo que n obedecerán, definen; i la Iglesi católica no tiene mas que un Jefe Por c:.o uo pueden obedecerse la. disposiciones de la autoridad !empora que u ·u .. pan las fncu!Lades de ese Je fe. l~se Jefe es Vicario de Dios, i Dio. es snpet'ior a toda autoridad tempora porque Dius es el único venladerc Soberano del Universo. Cuando e hombre se rebela contra ese Sobera u o, no t¡¡rda en caer porque q1.1eda et tinieblas. 1\osotros no queremos sine la lnz. Po1· eso luchamos. La relijior: sine de bandera a un partido, porqu el otro partido ataca la rclijion. De sistascdc tal ataque i un partido que da~tores, deben taro­bien admitirlo en aquello que clara­mente condena su~ ideas. El que dijo: mi reino no es de este mnndo, es El mismo que se llama Rci de cielos i tiet•ra ; es El mismo que, no en el cielo, sino para1lo sobre la tiena de­lante de los hombres 11ijo a sus Após­toles: "toda potestacl se me há dado en el cielo i en la tiena; a si como el Padre me envió, Yo os envio a voso­tros. Id pot· todo el mundo, pt·e, púhlica o pri va~a de e cualquiera reli)on, con tal qnc np se eJf!Cll· 1 ten hechos incump:¡.ti\>lrs con la solwr~uía 1 nacinn~l, o que tengan por objeto turba1· la •pa¡,piJblien.• Sincmbargo, la leí se iba cumpliendo, pu~· sando la &ituacion, i conciliando su cumph· miento con )a menor alarma posible, aunque me existiesen dudas sobre su constituciona· lidad. Pero vuestros hechos han acabado de con· firmar mi opinion, tales como vuestra resolu· cion de H de julio recaida a una representa· cioo del Presbíterc señor Anjel Sarmiento, en que el Poder Ejecutivo de la Union re, forma o por lo ménos interpreta el at·ticnlo de un~ lei, annqne el misn1o sostlenc ser lci; i el Acuerdo o Concordato l{llC con Yncstra an· torizacion ba celebrado el sci10r Secretario de Relaciones Esteriores con el Üevrrt~ndo ~e· iíOI ' Obispo de ropayan, i al qtH! h.theis im· partido \'nestra aprobacion, siut'mhargódc en· cont• arsc en contradiccioo con laConstitucion i la lei, por cuyo cumplimit·nto tan lo se ajita. Aho.-a, pnes, cncontr:lndome en pHfccto ~cuerdo con vos, me nOrmo en que In tri de 23 de abril ha caducado, supur.sto que ha beis introducido uoa novedad en ell~, i r¡ue la Cons· tilucion no es un impedimento para arreglar oficialmente los nc~ocios del Clero. En vue~tra esclarecida intelijencia habeis comprrndido, que en una ltepilt.lica no debe hahcr c111datlanos ni mas protejidos, ni mas perseguidos por las leyes; i que los mirmhrns de las Corporacionrs, cuando delinquen se hacen reos ellos, pero no ln Corporacion ; i que con la lei de 23 de al.u il se cometia ese escandalo, ese contrascutido republicano ajeno aun de los Gobiernos mon~rquicos cons· tilucionulcs. Mas aun :la Asomhlca lejislati1•a del Esta· do Soberano de Bolfloar, reprf~s!~nlanle lcJÍIÍ· mo de la voluntatl d•~l pnrblo, no solo no lm restrinjido las garanllas individuales en In Comtitncion que acaba de cspcdir, sino que lw sido la primera en emitir su voto de nuli· dad a la lci de 23 de abril, dando a entender con r.sto, que la lei es incon~titucional. El Poder Ejecutivo de: Bolívar ha marcha· dn a la sombra del poder lejislativo del Esta · do, con cuyas opiniones se ha idcnlilicado. I teniendo por pauta vuestra noble cond1.1cln, por qué no han de proceder de acuerdo con ella lu~ J pfes de los Estados para calmar la eft'I'VI"sencia i apaciguar les temores del pue­hlo, cuya suerte se les ha encomendado r­Bicn, ciudadano l'resiclente, si vos os haheia desentendido de aquella lei, i aun de la Cons· titucion en materia tle cultos, vuestro procc· dcr es rl testimonio mas flagrante de la ilejiti­midad de aquellos actos, supuesto que hnbeis reformado una, i os habcis deser.tendido de la otra, par·a obrar con provrcho de una parte de la comunídad, o de la comunidad toda, si se quiere. Por tanto, ocurro a vos proponiéndoos, que mient• ·as se reune el Congreso nacional, se deje al Clero de Bolívar'en la misma libertad que tenia antes para ejercer su ministerio, sin ninguna de esas restdcciones que alarman i sorprenden las conciencias de los timoratos; poniendo en vuestro conocimiento, que para recuperar la calma i tranquilizar las opioio· nes contrarias eu un tiempo en que todo debe sacrificarse para cimentar la paz i la union, he vuelto las cosas al estado en que se en con· traban basta vuestra resolucion. 1 ctl proce­der de este modo, no es porque haya obrado la consideracion de que sean Ministros del culto, sino porque he debido reputados como ciudadanos en el plonc. goce tle Jos derecho que a todos conceden la Constitucion i la leyes. El Clero de Bolívar no debe ser de pco COI\dicion que el de los otr(Js Estados, a quie nadie perturba porque no haya cumplido 1 lci, pues a mas de no habc•· sido hostil en ma11cra al~una a la causa de la federacion~ P.Or el contrario, es un Clero pacífico, i part de él adicto a ella. Si en OII'OS Estados se ha hecho el Cler culpable de comillicidad en los trastorno contra la causa de la rejeneracion, no se en cuent1a razon ni justicia r.n confundir con é al de Boliv~r, ni ca~tigarlo como a los que lt merecen por su censurable conducta, lo cua haría producir el descontento de una parte d los ciudadanos con una persecucion injnstiü cable, En esta cucstion rclijiosa, Ciudadano Prc sidente, se cru1.an dos opiniones: la de unos, porque se cumpla la leí de 23 de ahr•il, i 1 de ot1·os, porqllC no se cumpla. Pero ellas n son mas que opiniones, que se pueden califi car así: De los que de buena fe creen que deb cumplirse la Jci, porqull es una lei, annqu sea mala. De los pocos que hablan de su cumplimien to, porqne creen que con eso st! le hace upo sicion al Gohit>rno del Estado. De los que lem•~n, o esperan de vos, hocién doos la injuria do ctccr que los ntcnderei porque son de vuestro mismo parecer. -Cuan tos no hahrn de t•stos que c·sperau hacers por un pan, n 1 os birnes de la lglesia i de la comunidades relijiosas 1 Los primeros son jl'ntcs de buena ll'i. los otros, es a vos mbmo n quien toca ju1gar Pero ninguno de ellos tiene mision lega para obrat· a nonlbre dt•l pueblo ¡ i yo qn conozco la opinion, ¡wrc¡ne la consulto, pue do asegura1os, que de los 200,000 i mas ha bitante~ del E~tado, si se fuf'ra a ronsnl tar s Yoluntad sobre rl cnn1plimicnto de l11 malha dada leí de 23 de abril, no se encontraría doscirntM c¡nc npinnst•n po•· su cumplimien lo; porque los mas c1 ccn que el amor a 5 patria es inhrrrnte al amor de sn relijion. esto es un hecho, auuqne parezca una parado ja a los reformadnrt's, Yo he 1isitado algunos lugares de este Es tado, i es muí raro aquel en que se cncuentr un solo p:1rtidario de aquella lei. Pit·nsan po el contrario, que ella ~taca ~us cn•encias re lijiosas, aunque no sea asf en efecto, I no la opininn de unos pocos la que puede ser i térprcte tl1: la conciencia de un pueblo cnt ro, e intclijt~nte como el del Estado de B Jívar. No es estraí10 que en alguno aparezcan ciu dad anos que reclamen el cumplimiento d una lei, que en conciencia de ellos mismo no lo es; pero hai que hacct· sobre eso un esplicacion. No son 30 o mas individuos los que com ponen las poblaciones, i que esos 30 homurc que tratan de relajar hasta el amor a lapa tria en cambio de otros intereses i ventaja indi1•idualrs, se han figurado, los insensatos que ron aquella conducta hacen tambien 1 oposirion al Gobierno del Estado; i no falta quienes creyóndolu espantadizo, teman i au amenacen con un conflicto entre el i el d la Union a causa de una cueslion por sn na turaleza transijiblc; i a mas se avanzan, a q no cumplo la lei en toda su letra por contr riaros, cuando nos estamos encontrando e tan perfecto acuerdo sobre su verdadera in telijencia, Es por esto que el Poder Ejecutivo nacio nal debe continuar, como hasta aquí, con ca misma prudencia, pulsando la opinion, e i móvil contra los que tratan de bastardeada dando infurmes a tanta distancia, de aquell de que solo piensen sacar provecho, aupo Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. iendo halagarlo con informes tan desviados e la ver·dad. Yo, Ciudadano Presidente, a quien no ha bandonado la fe de todos tiempos, no abrí­o ningun temor· de los que me hacen la opo· · cion, porque con ella no hacen otra cosa, uc usar de las garantías constitucinnales, en ne yo mismo los ~rotejo ; i aunque se con­it'tiemn en !ejiones de diferent~s caractéres, o los sé esperar en mi puesto, a pié firme, omo siempre lo he hecho, apoyado de la pinion i del dereclru,-yo me haria entender on el pueblo de la maner·a como he acustum· rado en todos los conOictos de la causa pir· lica, porque alll en donde esta la voluntad el puehlo1 alli está la justicia.- Si la prime-me fallase, yo sé somr.te1 me sin vacilar a lla ¡ prm nunca a las exijencias de u u redu­ido número de r·est·ntidos aspiran tea que tic· en la insensata prrtension de imponer su uerer al Gobierno. Serríos, Ciudadano Presidente, prestar ue~tr:r ilustrada alencion a mi propuesta, ara que el pueblo de Bolívar os tribute mas en dicioue& que las que tan justamente os ha rihutado, cabiéndome la honra de ser su in· érprete a la vez que su conducto. Ni como hornbre, ni como 1\lajistrado, ja· as he fnltado n la verc1ad, ''irtud queebtimo asta en boca de rvis enemigos.-Esto os lo igo porque si fuese nrcesario convocar un lehiscito, oiríamos el voto du todo el pueblo oliviano, clarnnr po1 eso mibmO que solicito e \ns. De t¡uien soi con las mayores consideracio· es, compatriota, obsecuente servidor i ami· o personal. Cartajcna, setiembre 30 de 1803. JUAN JOSÉ NJETO. ADJC !O X-Cuando se estaba acabando e rscrihir· la antccr.drntc nota, ha venido a i dt•spacho una rrpre~entar.ion de varios ucblos, quepa ande 400 firmas, de la cual •ngo el honor· de acompai1ar•os copia, en co· oboracion de lo que os he manif~stado.­& c es un documento que os podril servir pa· iluminaros en algo, sobre el vrrdnclcro es· do dt· la opinion en el delicado asunto de ur. os hahlo.-. 11<:'1'0. * JJc.ROTESTA ue hacen las RR. MM. Monjas del con­vento do Nuestra Madre E anta Olara DE Ci\1\TAJENA, L SALIR DE LA NUEVA GRANADA. Hcnnichs en comunidad la s clue smcribi­os, rdijiosas prol'es~s dcll\lonastcrio de nues· a 1\ladrcSanta Clara, de esta ciudad, Lemos ordad o, nu~nimemcnte, protestar ante un otario público, contra los actos del Gobier-de la República, que juzgamos en buena i, opuestos a nuestros lejitimos dercrecbos i los dictados de la justicia. Semejante paso es de imprescindible nece­ad al alcjarno~, quien sabe~¡ para siempre, las playas del hogar querido, porque nucs· o decoro exije que justifiquemos a los ojos • la sociedad entera la c~trema resolucion e acabamos de tomar, abriendo lns puer- • cruc- espcrabamos nns ·a¡rortariarr dd m1rn-· para toda la vida, n fin· de trasladarnos a ro lon~strrio de nuestra 6rden, en la tia­lOa, donde nos prometemos encontrar el cojimicnto de espíritu i la tranquilidad que es posible ra tener en la tierra de nnes­os mayores. m decreto de 9 de sctiembrn de 1861, es pe­do por el Jencral Tomas C. de 1\Iosquera, rno Jefe provisorio de los Estados Unidos :Colombia, no solo nos arrebató las rentas ·~tinadas pot iudjviduos piadosos al sosteni­ie , ~n m1ct.lr« Igltsia, del culto que de- EL C.lTOL.ICO. hemOs tributar a Dios, sino las dotes que re­cibimos de nuestros antepasádos, i que ellos adquirieron trab~jándo honradamente, las cuales introdujimos en la comunidad para no serie gra\'Osas i atender cumplidr.mente a nuestra subsistencia. Desde aquella época se nos quiso dar una limosna, con el nombr·e de renta viajer·a; mas no&Otrasla rechazamos, porque no podíamos aceptar con ese carllc­ter una parte mui reducida de nuestra pro· piedad, ni sancionar con tal conducta el des­pojo que se nos hacia. Mas larde, el 5 de no1'Íémhre del año cita­do, se estinguicron, por elmibniO señ(lr Jc­neral 'Mosqucra, l~s cumunidádes r clijiosos de Bogota i del Estado de llopca; disposi­cion que ha hecho cblcnsiva a. todo el país la lei de 23 de abril último, " de poli da na­cional en materia de cultos. " Apénas <'S crcible, segun se nos ha informado jcncral­mcn te, que la ¡no videncia aludida haya sido adoptada por juzgarse la exibtencia úe OIJ<'S· Ira~ comunidades una rémora para la dili1siun de las luces de: la civilizaciou i el alianza· miento de las instituciones d'Cmocrálicas; nosotras, pobres e inoccntu mujeres, consa­~ radas a la conlcmplacion del Salvaracion, "dilidir nuestro pan cou los necesitados-admitir· gozosas en nuestro seno a las j61enes honestas que desean salvar su virtud de las borrasc:~s del siglo-labrar la tic· rra, hacer obr ·as de mano i cualquier· otro tra­bajo adecuado a nuestro sexo, en lo que lla­marernos nuestro ralo de 6cio. ¡ Que declare el J ucz mas seveto, pero imparcial, si en la ennmt:racion que antecede, d!> nuestras habi­tuales tareas, hai algo que choque con cual­quiera f'urma de Gobierno 1 o se oponga al mejoramiento social! A Yirtnd de la leí precitada nucstr·as her­manas del resto de la N'acion han sido arran· cadas violentamente del pie de los altares i espucbtas a todos los con Ira tiempos del inl'or· tuuio, despnrb de haberles hecho apurar, lta~ta la~ heces, el caliz de la amargura. A nowtras tambien ~e nos ha intimado, por varins ocasio­nts que abandoncmc,~ la casa del Stñor; mas, por un favor particulnr e&os nperciblmientos uus lus ha htcho en pers ona el Ciudadano l'r e· &iÚt'nle del E~tndl', sci10r Jencral Juan José l\ieto, que se ha comportado con nusl•trns con una mcsurai dclic:,dt•ra quelobaceu acree· dor a todo nuestro reconocimiento. :Esto, sin cm bargo, no puede satibl':Jccr nos en la acllwl situacion del pais: el mi~mo señor 1\'icto, que hoi se resiste a m:mcillnr su alma con una lropeHa bilrhara e injustificable, ma· fiona puede l'ei'Se forzado a mudar ele conduc­ta, en cnyo cnnto nos espondriamos a ser dispersadas, con peligro de que la comunidad quedase diwelta al menos por algun ticmpc. Apa1te de t r.l especie h<'mos tenido en cuenta para adoptar nue~tra detcrminacion: que no poseemos absolutamente recursos para. sub· sislir, por·quc de dos años ncá hemos vendi· do cuanto poseíamos: qu1: la leí de 23 de abril, tarde quo temprano, nos privara de los lcjí· timos superiores que nos restan i de Ministros competentes, que dirijan nuestras concien• cias, porque· diclia · Jeí es dé fal . 1ñañera · opuesta al do!(ma i a la disciplina de la Igle­sia que no admite transaccion de ningun jé· nero: que a la sazon disponemos de medios para salir de la Hepühliea, que es seguro nos faltnr :In mas tarde; i que sin libertad para vi' ir en comun, no podemos corresponder· al objeto de nuestro instituto. Reflexiones han •ido estas qlle, añadidas a otras muchas que seria Jargo emitir, determinaron al Prelado diocesano, en prevision de cuanto esta pa· sando, autorizarnos para que en cierta o por· tnnidad tsn,ladarnos a un ~lonastorio de nuestra orden en la Habana, para cscusar asf 'el ser lanzadas violentamente del e:! austro; i esa oportunidad e& la miseria, amenalnS ice· sacion del culto que estamos tocando: poco& dias hace que dur·ante una quincena se sus· pendieron los oficios divinos i la administra• cion úe los sacramentos, por mandato de la autoridad. ' No faltara quienes crean, que abandonamos cobardemente nuestro puesto, i que el pre· sen te documento no es mas que u na nhdica· cion i la demostracion pnlmaria de nuestra impotencia. Pero no; rompemos la clausura antes de que el' hacha del sacrílego de&pcdace );¡s puertas que guardan la pureza de las vír jenes, dedicadas al ser-vicio dt:l Señor, por· que el Superior nos autoriza para ello, sin duda porque opina que Ja vrudencia es lo m as nátural cuando se trata de una institucion relijio~a cuya mi~ion no es combatir con loa enemigos de la fe, sino rogar· por tocios los pecadores; i esta formal prote~ta que haoe " mos contra las disposiciones apuntada~ i que será asentada con cuantas ritualidades legales se demandan, re1 el a nuestras esf1er anzas en el pon•enir. En él descubrimos e cugrandc .. cimiento en nuestra cara Patria de larelijion del Cnrci ficado, i a la jnstil'ia i al derecho abricndose paso por en medio de todas las pasiones de los hombres. Entónces nos pre· sentaremo1 bajo la proteccion de las leyes, i reclamaremos, con. o 'erdadcras desposeí· das, contra los que mantcng2n nuestros bic· nes, a guiza de propiclftl"ios, i rrclamaremoa a ellos c.uantu& frutos hayan obteuido i los daños i perjuicios causados. Preciso es que antes de concluir manifes· ternos, que perdonados estiht ya, en lo mas íntimo de nuestros corazones, los enemigos de nuestra sacrosanta rclijion, que han lleva­do su empecinamiento hasta violar Pl sagrado de los monastrrios; lo que 11adie, ni el l'ana · lismo relijioso i politico aliados, había osa­do intentar. Al abandonar la celda, en que ht·mos sido tan felices en nuestro aislnn1ien· to, repetiremos con la nnerable superiora dd l\lunastcrio de Santa Inés de Bogoli1: "Debamos una parte del amargo cali1. que Jc&ucristo b.t!bi6 por nowtras; i pid;irnosle que ende a nur.stros enemigos tantas gracias como !~grimas dcll'amamos al abandonar este asilo." Cartajcna, en el Mona~terio de Santa Clara 1 a 1. • de octubre de :1.8G3. 11/m·la Candelaria do Smrla Tti'CIII, Abnde· sa.-Frmrcisca de Santa Clara, Vicaria del Convcnto.-.Josc(a de la Purifi cacinn, Difini­dllra.- Anlonia de San .fosé, Difinidora. ­FrmJcisca del Corccznn de J(su.~, Diflnidora.­Josrfa de la Encal'llarioll.-BrljidadcSauFrtm• ciscv.-Airjm,dl'll del Sacramcnlo.-ÁIItl do Smtla hJC$.-Tiburcia ele San Migt !ci.-Scra­fina de la Concepclatl, Difinidora i Secretaria del Convento. A ULTal llORA. • Roma , 28 de setiembre de 1.863. " En una encíclica diriJida a los Obispos de la l\uera Granada, el Papa deplora la cruel pc~secncion dirijida por el Gobierno de aquel país, c1Jntra las doctrinas, la autoridad i los derechos de la l!(bia. " m condena las lrycs promnlgadas contra . el. C!erp i.la.s r.ropicdad es rclesi~sticas. Ccn· sura la libc!lad de cultos i la conduela de los eclesi;bticos que obedecen a estas leyes iní­cuas. " Alaba la llrmeza de los Obispos presos i c~ita a los miembros del Clero que han per­manecido fieles i a las poblaciones a pcrbcve­rar en su fé i a rogar a Dios que haga cesar la persecucion. " AYENCB II A\' AS·-llULLrEB. (De la "Independencia Belga). Imprenta Constitucional. Carrera de occidente, calla :1.. ~» número it5, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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El Católico - N. 25

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Cómo hacer un plan estratégico de comunicación Vol. I

Por: Kathy Matilla | Fecha: 2018

En estos tiempos en que los índices de lectura cotizan claramente a la baja, la Colección Dircom ha decidido realizar una apuesta a la contra y publicar un título nada más y nada menos que en cuatro volúmenes. En esta obra se realizan aportaciones para que los profesionales de la comunicación se documenten y puedan aplicar en su quehacer diario lo que aparece impreso en estas páginas, cuando hay que hacer frente al diseño de un plan estratégico de comunicación. Porque precisamente ese es el propósito de esta obra: mostrar, paso a paso, cómo elaborar un plan estratégico de comunicación, desde la...
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Cómo hacer un plan estratégico de comunicación Vol. I

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Cómo hacer un plan estratégico de comunicación Vol. II

Por: Andréa Oliveira | Fecha: 2018

En el volumen II de este cuádruple libro, titulado «Públicos y stakeholders», la doctora Andréa Oliveira aborda en profundidad lo que, sin ningún género de dudas, no es tema baladí cuando se trata de gestionar la comunicación: describir a los receptores, es decir, los públicos, auténticos protagonistas del proceso. Partiendo de una exhaustiva revisión bibliográfica para introducir diversos aspectos conceptuales, la autora brasileña describe las diversas tipologías de segmentación de los públicos, según varios criterios, que se sitúan mucho más allá de la clasificación clásica de públicos internos y...
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Cómo hacer un plan estratégico de comunicación Vol. II

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El camino de la crónica

Por: Javier Franco | Fecha: 2017

Esta obra tiene como propósito delimitar el ámbito de la crónica, relacionar los elementos que han hecho posible la evolución de este género periodístico en América Latina y, sobre todo, reunir en un solo volumen sus diferentes dimensiones. Con ello se busca poner a disposición de estudiantes de pregrado, especialistas y lectores en general, información pertinente acerca de una de las formas del periodismo que de mejor forma puede dibujar una realidad o un hecho noticioso.
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Creatividad publicitaria, ¿cómo juzgarla?

Por: Nuria Barahona Navarro | Fecha: 2016

La Revolución Creativa, impulsada por Bill Bernbarch en EE. UU. en la década de 1950, ligó íntimamente la palabra «creatividad» al sector de la publicidad. La creatividad como praxis publicitaria consiste en la elaboración y codificación del mensaje publicitario que se realiza a travésde la ideación. Pero, ¿cómo se mide el grado de creatividad de las ideas en publicidad? Los festivales son la única herramienta. Esta obra revisa el concepto de creatividad aplicado a la publicidad y ahonda en el conocimiento de los festivales publicitarios como herramienta para medirla, radiografiand una realidad de la que todos son conscientes pero que no se ha expuesto desde una perspectiva teórica.
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Periodistas y políticos en España

Por: Andreu Casero-Ripollés | Fecha: 2016

Periodistas y políticos son dos caras de la misma moneda. Dos polos que se atraen y se repelen en una dinámica sin fin de negociación constante que genera relevantesconsecuencias para las democracias actuales. El objetivo de este libro es analizar estas relaciones en España actualmente. Desde una óptica novedosa, se estudian el papel de la afinidad personal o de los gabinetes de prensa, la influeia de periodistas y políticos sobre la agenda y el encuadre de las noticias, la creciente fusión entre información y entretenimiento, los fenómenos de control y las consecuencias democráticas y profesionales de la información política.
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Periodistas y políticos en España

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¿Cómo vender y producir una idea publicitaria?

Por: Eduard Farran Teixidó | Fecha: 2016

El modelo H2PAC resuelve propuestas clave a partir de ACTIVIDADES. Esta forma de aprendizaje parte de un RETO: la actividad que deberás resolver. Para ello te facilitamos un contenido teórico, EL CONOCIMIENTO IMPRESCINDIBLE, que te ayudará a entender los conceptos esenciales para poder afrontar el desafío planteado inicialmente. Además del contenido teórico, el modelo también te facilita LAS SOLUCIONES, una propuesta de resolución del reto expuesto. Una idea no es nada hasta que alguien la hace realidad. Y en publicidad eso significa tener una idea, diseñarla y, sobre todo, venderla y producirla. En este libro aprenderás estos dos últimos conceptos. Todo ello a través de los pasos y métodos utilizados por profesionales tanto del mundo offline como online.
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¿Cómo vender y producir una idea publicitaria?

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¿Cómo dar forma a las ideas publicitarias según el medio de difusión?

Por: Eduard Farran Teixidó | Fecha: 2016

El modelo H2PAC resuelve propuestas clave a partir de ACTIVIDADES. Esta forma de aprendizaje parte de un RETO: la actividad que deberás resolver. Para ello te facilitamos un contenido teórico, EL CONOCIMIENTO IMPRESCINDIBLE, que te ayudará a entender los conceptos esenciales para poder afrontar el desafío planteado inicialmente. Además del contenido teórico, el modelo también te facilita LAS SOLUCIONES, una propuesta de resolución del reto expuesto. Dependiendo de dónde estamos, al hablar y comunicarnos usamos uno u otro código. Con las ideas publicitarias pasa lo mismo. Deben adaptarse al medio y construirse por y para él. En este libro aprenderás cómo, cuándo y por qué los anuncios son como son en cada medio. Todo ello a través de los pasos y métodos utilizados por profesionales.
Fuente: Digitalia Formatos de contenido: Libros
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Temporalidades digitales

Por: Carles Sora Domenjó | Fecha: 2016

El uso y la comprensión del tiempo ha sido un tema capital para el estudio de las sociedades, el arte, la ciencia o la filosofía. Y lo es hoy también para la creación audiovisual en la era de los new media e Internet. Temporalidades Digitales analiza las nuevas configuraciones temporales del audiovisual interactivo desde dos perspectivas: por un lado, la de la estructuración narrativa digital, sus usos, componentes y mecanismos de tratamiento temporal; y por el otro, la de su vivencia y percepción subjetiva. El resultado es una aproximación interdisciplinar que cubre ámbitos de estudio tan diversos...
Fuente: Digitalia Formatos de contenido: Libros
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