Saltar navegación e ir al contenido principal
Biblioteca digital de Bogotá
Logo BibloRed
Cargando contenido
¿Qué estás buscando?
  • Escribe palabras clave como el título de un contenido, un autor o un tema que te interese.

  • Búsqueda avanzada

Seleccionar

Contenidos y Experiencias Digitales

Filtrar

Formatos de Contenido
Tipo de colección
Género
Idioma
Derechos de uso

Selecciona contenidos según las condiciones legales para su uso y distribución.

Estás filtrando por

Cargando contenido

Se encontraron 1591 resultados en recursos

  • Exclusivo BibloRed
Imagen de apoyo de  Zodiac Starforce Volume 1: By the Power of Astra

Zodiac Starforce Volume 1: By the Power of Astra

Por: Paulina. Ganucheau | Fecha: 2019

They're an elite group of teenage girls with magical powers who have sworn to protect our planet against dark creatures . . . as long as they can get out of class! Known as the Zodiac Starforce, these high-school girls aren't just combating math tests. They're also battling monsters--not your typical afterschool activity! But when an evil force from another dimension infects team leader Emma, she must work with her team of magically powered friends to save herself--and the world--from the evil Diana and her mean-girl minions! From Kevin Panetta (Bravest Warriors) and Paulina Ganucheau (TMNT: New Animated Adventures, Bravest Warriors), this super-fun and heartfelt story of growing up and friendship--with plenty of magical-girl fighting action--delivers the most exciting new ensemble cast in comics! Collects Zodiac Starforce #1-#4
Fuente: Comics Plus Formatos de contenido: Otros
  • Temas:
  • Literatura
  • Otros
  • Vida estudiantil
  • Superhéroes

Compartir este contenido

Zodiac Starforce Volume 1: By the Power of Astra

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Compartir este contenido

Monster at School

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Compartir este contenido

Monster Boy's Field Trip

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

  • Exclusivo BibloRed
Imagen de apoyo de  Stranger Things Volume 8: Tales from Hawkins

Stranger Things Volume 8: Tales from Hawkins

Por: Jody. Houser | Fecha: 2024

An anthology of vibrant new stories woven into the larger tapestry of the hit Netflix series! Discover the hidden stories from Hawkins, Indiana. On the surface, Hawkins, Indiana seems like the kind of town where nothing too out of the ordinary ever happens, but in the fall of 83 two hunters head out into the woods with their rifles and a six-pack, and find themselves the prey of a nightmarish beast. When Barb Holland goes missing, Murray Bauman is on the case if only he can look past his own suspicious mind to solve the case. Robin Buckleys school film project gives her a chance to work with her secret crush, but does it only make it harder to come to terms with her feelings? And when pumpkins start inexplicably rotting, the feud between two farm families reaches a boiling point. Joining Houser on her visit to Hawkins are artist Caio Filipe (Stranger Things: Summer Special, Nightwing), Sunando C (End After End), Giorgia Gio Esposito (Lunar Room, Dr. Who) colorist Dan Jackson (The Strain, Hellboy: Weird Tales), and letterer Nate Piekos (The Umbrella Academy, Black Hammer). Collects Stranger Things: Tales from Hawkins issues #1#4.
Fuente: Comics Plus Formatos de contenido: Otros
  • Temas:
  • Otros
  • Literatura
  • Vida estudiantil

Compartir este contenido

Stranger Things Volume 8: Tales from Hawkins

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

  • Exclusivo BibloRed
Imagen de apoyo de  Helping Sophia

Helping Sophia

Por: Anastasia. Suen | Fecha: 2024

The students in Miss K's class experience situations that occur in schools everywhere. When Sophia's helper is absent, her fellow third-graders help out by learning how to push her wheelchair. Sophia's story teaches about caring, kindness, and children with disabilities with brilliant illustrations and humorous text. What Do You Think? questions, Miss K's Classroom rules, and a glossary aid teachers in classroom discussions about the character trait of caring featured in this stunning picture book. Special thanks to content consultant Vicki F. Panaccione Ph.D.
Fuente: Comics Plus Formatos de contenido: Otros
  • Temas:
  • Otros
  • Vida estudiantil

Compartir este contenido

Helping Sophia

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

  • Exclusivo BibloRed
Imagen de apoyo de  Shrugged Vol 3 #1

Shrugged Vol 3 #1

Por: Andre. Risso | Fecha: 2018

Volume three of Aspen's hit series' long-awaited return is finally here! Rejoin high school teenager Theodore Langstrom along with Ange and Dev, his internal allies guiding his conscience, as he attempts to adapt to life following the events of Shrugged Volumes One and Two! After saving the emotional spectrum realm of Perspecta and everyone he holds dear in the process, Theo discovers that the most fearsome moment of all still awaits him-High School Graduation! But, like all things in his life, adolescence is not the only challenge Theo will face along the way, as he has yet to still truly experience the horrors of several emotions, including entering adulthood!
Fuente: Comics Plus Formatos de contenido: Otros
  • Temas:
  • Literatura
  • Otros
  • Vida estudiantil

Compartir este contenido

Shrugged Vol 3 #1

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Compartir este contenido

Where Does the Sun Go at Night?: An Earth Science Mystery

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

  • Exclusivo BibloRed
Imagen de apoyo de  Skateboard Breakdown

Skateboard Breakdown

Por: Eric. Fein | Fecha: 1892

.. . lIogotá., Enero de 1892. I OAOIÓ UA BOaOTA• EN 1841 "'-'reA'llclCh» ael libro r .. ca ... do. Ammc.., 4e JI. Alolde. D'O,bIP7, • pcR D ~ la GODúJU Be) ep ldea ogotá. En esta, eom8.J."Ca da iaj ero se creería, en Europa. ores tropicales se ca ian allí por una. temperatura fresca. y agra.da.ble. la, llanura. no está yá oubíe ta. de e azúca.r~ de oa.ca.ot&les ó de caf tales ~ en su lu se enouentran la cebáda y 1 trigo, a í como pastos y ricas dehesas. Aquí S8 Ye un labrador conduoien o u a.rado; a.llá un pa.stor guía. su reD -:o. Por el camino se oruz n grandes recuas de m la.s y de bueyes~ éstos cargados de granos. de carbón y de costales papas; aquélla.s conducen de los valles infenores Da nJu, p al­tanos y ma.ngos. Los indígcna.& ue circulan en la, planicie están cub con rua n so breros f brica.dos en el país. La sa.b a, de ogo ~ lt los o 30' de latitud norte, 7 ,370 toesas sobre 1 ni el d 1 ma,r~ tIene OC o e de exte uS e ., y 6 e E á o. ), en na, superficie en extremo p~ S 8 hf.. e oré ito á una, a.ntigua. tradición local, antes que 1 tribus mmscas se establecie en en estas te­rraa a.ltaa~ la. comarca había, sufrido un horrible catachsmo: e río ~tá~ no niendo salida. al valle, la había "nan do cultivos y poblaolones y 1 bitantes hubiero e en a montaiias; en ese tiempo pareci6 un ho o, Uamado Z é Ó Bochloa, qmen, golpeando 00 s b tón, abrid una áaJ.id. " el r# o, las que se precipitaron por el o tá expue á ninguno de 108 (1) ElIte ea error, es ~o estensión ea de N. ,. ~ 1 meaor de E. á O.-NlJta del Traduce.r. RE 1 A LITERARIA 36 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 55 REVISTA LITERARIA azotes que devast,an las comarcas oajas: mosquitos, caimanes ni ja~ares. De pués de pasar el río Bogotá por un herm080 puente de picdra, divisamos, á. cosa de tres leguas, la capital, situada al pio de una cadena de montaña. qne limita.n la pla.nicie por el Oriente: des e esa distancia e d ,cubren la flecha. de la Cate­dI' 1, Y los techos de los conv nt ij¡ de Gnadalupe y Monserrate, que on los puntos má culminf\ntes y má isibles. El f de Septiembre, por la tarde, llegamos á. la ciudad y DOS alojamos n u a d la nlejore posadas. Bogotá fue fundada el G de' A:.ao to de 1538, por Quesa.da, quien muri ' allí, al uno años después (l). Admirablemente si. tuada, creció co tal rapidez, que. dos años despué de su fonda­ción, 10. Corte le E paña. la elevó á. la categoría. de ci uda.d. Todo, en efecto, había ido previsto por 01 hábil Quesa.da: 'Para preca. ver u iudad de los violentos huracanes del E., 18. edificó al llie de dos montañas; calculando, además, qtle si llega.ba , ser una plaz militar, est.a posición formaría un recinto natural de fortificaciones, contr el cual los ataques del hombre serían est 'riles; y enfrente del Tolima, una. de laR cima.s de la cordi. llera el Quindío, con salidas á. una y á. otra vertiente de esta líe neo. de montañas. ¿ Qué. itu i6n mej r hubiera podido elegirse para una capital? 11 la actualidad. Bogotá. tiene 3,000 metro. de extensión de • á . Y 1 700 de E á O. ; contiene una pobla.­ción de 40,000 almas. Sus alleEl on e trechas y malas. Un an. ti no irr y decía; "Existen cuatro agente de policía. en Bo­gotá; los llinazos, la lluvia, los asnos y los cerdos." Estos cuatro agentes de policí continúan barriendo las inmundicia. de Bogotá; últimaluellte se les ha agregado un servicio de in. dios qu arrean los de pojos en carretillas. 1 clima de Bogotá exige que se tomen precauciones con­tra las brusc va,riaCÍones a.tmo. f 'ricas: ve tidos a.brigados ape as ba tan para g rantirse del frío en el in vierno. Durante sois mese poco lnás Ó menos, el cielo es nebuloso y el tiempo lln.vio o; tI' s meses 00 inciertos y variables y s01a.mente tres tienen días bello. y secos. No obstante la humedad, el clima no (i) El cuerpo de Quesada esti 8epultado en ]a iglesia Catedral de D o\á, pero el ConquIstador muri-6 en ciudad de Mariqui . Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. R t1O'I'Á l~.· 1 _ .~ l B mal ano. e puco d una. fiebre de nlgunoR días, resultado de una atmó fera enrarecida ó de un viaje prolon ado en las tierra c·1' das, el europeo e aclÍlllato. fácilmcnte en Bogotá. Las ca el Bog t' son aún, e11 u mayo pal't, lo que eran en los prim ros tiempo de la conquista de provist s do elegancia y de simetría' pero algunas con tru ciones D10dcl' ~ s Reo an una tendencia manifiesta ha ia. un pr gl'C o arq itc ·tó­nico. (1). Uno de lo monumento má h rmo~o de la iur} des 1 Catedral, edificio noto le p r lo.. pureza y armonía de la lí­neas de la. nave, á pesar de tener algunas incorrecciones en la. fachada. El palacio de gobierno . iguahnente un e lificio ele­gante y rico. Se ha. a.bandonado 1 antigua r iaencia de los vi­rreyes, edifici~ de techo. bajos y flanqu ado de . a. bajas y mezquin!ls. Bogotá posee. además, un teatr que ha sido edificado 01' un particular aficionado ' 1 s r prcscn aciones e cénicas: la. Bala, regular pero o cura, tiene varios ór enes de palcos, con baranda.s de bala.ú tres; el pa.tio e vasto pero de provi to de asientos, está di. puesto en talud y los espectadores e mantie­nen de pie. Las piezas que en '1 'e repre. en an, pert n e n á la, infancia. del a.rte dra.mático: los asnnt patri 'tico on los que &Coge de mejor grado el p{lblico; pero por una co, un brc D1Uy singular, la sa.tisfac ión pública e expre a en cl teatro d Bo­gotá, de la. misma manera que en Europa, e mn.nifi "a el 1S­gasto: el público silba las pieza.s cuando las halla buenas. Durante nne tra corta re idencia, ca i toda las e . tumbres de Bogotá. se exhibieron á Due tros oj s: pudimos a,pI' ciar to­dos los matices de las cla eSl, condiciones y rango. Por u na parte ee divisab n los mozos de cordel ] aduana con DCJendo far­dos por medio de correas ya sobre la cabeza 6 á la e pahla; n ee uida desfilaban mulas carg da.s de miel en odres de cuero, miel destinada. á la fabricación de la. chicha. fá 1 jo. e pre­senta. ban señoras con vestido de vi it,a ó de igl . ia: el tr je e etiqueta con iste en la 8aya, la. mantilla ó el omhrcro. La saya. es una. enagua. 6 zagal jo, un poco corto, de p ño, erminado, en la. mayor parte de los ca os, por franjas d ie y :medi e (1) Bsta es una obseryaci6nexactisima, que el transcurso del tiem­po h cOJllprobado de modo innegable.-.lVota d~t Edito/'. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. U,EVISTA LITE Rl~ Jongitud. La mantilla. cs un trozo de paño fino, azul, celeste 6 lapislásnli, cortada. en semicírculo, y que e dispone de suerte que oaiga desde Ja. cabeza hasta. las espaldas, á ma era dE! n largo capillo de monja. Esas señoras llevan, ademú, ombreroe de ti'eltlo y zapa.toe de raso ó de C'IJel'G. El calzado es lo que día. tinguo las mujeres de las clases elevadas· las hijas del pueblo llevan 108 pies descalzos. Cuando la belleza 6 algún capricho de la forliuna las eleva hasta la oIase que tiene el derecho de usar calzado, están obligadas á tener ciertos miramientos y , hacel'1l8 beatas; es decir, á tomar un raje en todo semejauM á los • las religiosas, negro ó castaño, traje que 1el permi" calzarse .. AlIado de estas mujeres beatas, 6 aimplemente sír:vientas, mar .. oban sacerdotes con capas negras y somb~ros de tei~; •• fHa. tinlPlen igualmente aldeano8 de loa contor.n.os y mel~~, .... ;F.N. U ~op. religiosa. O , desidia. Los objetos de procedencia, europea son raros y costol108 en ogota; pero, en cambio, los productos del país t a 8D8D prem._ azonables. El p n es bu DO, poro tiene poco COllSUmo. Se tres veces por día chocolat , acompañado con queso y dulces. La, alime taoi6n ordinaria se compone de oarnQ d vaca cocida, patatas, yuca., banatms, hue os fritos, 1entel l' carDe de bebida habitual es el agua; algunas veces se bebe chio a z Q. Todo el mundo usa vasos de plata. Después de la comida se lavan ias manos, mma.n y duermen. La costumbre de fumar es general &UD entre 1 muje , las que no abandonan casi nun el cigarro: sin embargo, pa­: re m para 11as una reforma. En la é~ de la IndependeD.C1 lun 1 I~n al país, muchos de los Cll&l81 e a.cnonaron tu in meniie: 'i u 8- inglesas no fuman, hé ahí por qué las &mamos," dijeron 108 bioa oficiales. estas s018.8 palabras bastaron para p,oner en ioho el cigarro en la socied&d de eñori • ¡Jatas, vi a y apasioD ,1Iaa, blancaa y bien form.adas, no tienen, ell ge-neral, ni costumbres veras ni e mclinan ' las cosas BU vida se desliza entre los placeres y las práctl Para. todo extranjero que 'VJ.Sita la capd;al colom una de rigor: la del alto de 'J. ... "1U~~~&. ~[.J3j Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. BO TÁ 559 n. a, situada. á cuatro 1 gtlas de la ciudad, está formada. por el -l"ío ogotá, que se precipita de la planicie al va.lle. Después de media hora. do marcha penosa se present' á nuestra, vista,: es un espectáculo "erdader mente magnífico: es un ancho río que 80 precipita desde una. altura do seiscientos metros (1), y que Be estrella contra las roca salientes de la montaña. El puente na.tural do Pandi es una maravilla no menos eu­íos : está formado por una piedra de veinte pios de anchura, que ha. reunido 9 nlontañas eparada por una garganta es· recha. uando se mira el fondo del abismo, de una. profutidi- : da.d de cua rocientos pies, se i tingue una. cOITiente de agua. que huye en el seno del precipicio; los ha itantes del pa.ís no se aventuran sino temblando en las profundidades del abismo; los animales miSJ110 parece quo huy n de sus inmediaciones, COlllo do una nlorada. maldita. as e rcanías de ogotá., en un radio de doce leguas, a.bun­da. n en villas y a.ldeas. Las regiones oriental y occidental de la planicie e tán le tina as á. la agricultura; poro el Norte, y so­bre todo la. Provincia d 1 ocorro, están pobla.d s por industria .. les; en las chozas más humilde, situada en el camino dA Tun .. j , teje 1 algoclón y f rican loza. Tunja, más rica y populo­sa., manufactura igu lment a lana .• iguiendo el camino haoia el ort, se encuentra á. P ita que po eo fuentes d~ agua sul-o fur08a., cuyo vapore 80 condensan duro.nto el tiempo ¡¡¡eco y !6 depo it n sobre el c6 pe formando sulfato de sod . Más leja • • e halla la laguna de Tota, situ&da sobro el pára.mo do Ra.mona, o laguna. encant.aua y maldita, eg(ln los in ígenas. Otro lago de osas comar &s es 1 do Gua avita, el cual ti ne un2\. reputación I meno terrible: en ese depósito, situado á. 9,000 piel sobre el ni­. 'vel del nlar, 1 ciquo del país, según la tradición, arrojaba inm neas riquezas todos los años, cOllsist ntes en oro y pe­drería.. Agr' g~ se que en el ti m po de 1 conquista, habiendo . sido per! guidos los naturales á. ca.u a, do sus tesoros, lo,. con .. o fiaron al lago, S\1 divinida tutelar. E timulados por estas tra­. dicione , los agentes del Capitán Carlos Cochrane, intentaron, no há muoho tiempo, su d sagüe, el que op rado en parte, pro­dujo á. 1 empr sarios, según se refiere, algunas estatuilla.s de t1) Este es c6mputo muyenado, pues la verdadera altura del Salto no pasa de 140 metl'08.- Vot({ del TJ'IJ.d'ft fnr. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. !itiú &EVI. . 'fA LrT~R.!Ra oro. Es é tao una fu.ente de ri uezo. menos fecnnda. y mucho e .. nos segura que 1 s mina de plomn , de sal y dts .obre gue se halJan en tod&L e ta. comarca montañosa. No abandoné á B gotá sin adquirir una. idea., aunque 60- Iner&, de la Con titución de ColOlnbia. Así tí á 108 debates de las dos Cámara : leí e e largo Códig de novcn a. '1 uDt:artícu­los, 9,.ue contiene el derecho público del país. Los poderes en Colombia on e tres especies: ] gisla.t·vo, j cüt'vo y. judicial. El primero se compone de un Senado y_61ft 1l1la Cámara. de Diputados; el concur. o de 18.~ dos ám&r&. ea Jnecesa.rio para. dictar una 1 y, egún cierta formalida.de .y den­tro de lo términos pre critos. La Provin i s nombra.n na J!e­presentan te á raz' tl de un di putada por c. da. 30,000 alma. ; de suerte que le forma una. Cámara d ciento cincuenta miem­brol Los diputado d ben a r ditar la po. e ión de un alor de .$ 2,000, ó de. una renta de $ 5 '0 Y no pued n ser nombr. do. - sino por la. Pronncia en don e h bi tan: el perío o d u.ra. cua.tro - ños. La. Cámara de iputa o ti ne 1 el' cho de citar an.te 1 - Senado al Pre idente. al icepr ~ id ute y á 10 ftni ·tros de a. . República. E ,·te encillo m.ecanistno, vomo se ;ve, ha sido tom - do de la Constitución americe. na, que es. á su VAZ, una. modin­J. CaCión de la Carta. ingl • El Pl'e 'id .nte de Colombia, así como :el de la. Uni6n Americe na, convoca el Congr 80, asume el mau" do del ejército y conmnta la p na capital de a.cuerdo con 05 juecc . Los recur os del nuev Gobierno se componen de contribu­ciones semejante á. las nué tra : rentaR de adnanas, monopolio del ·tabaco y del aguardiente, correo .• pa el ella o imp to sobre finca lmíce : ta.1e on la prin ipa.les fuentes de, lAS r.en­taos públicas. La renta:s e eleva.n á cere de cinco mill0D.t6 de r ncos y ta lni m un a cienden los g" tos. Con esta. Qa.n. Ltidad. se mant,'cne un ej 'rcito de veinte á. treint il hom 8. Lo~ soldados itúiígen ~ son "\'alientes, f' ciles d di eiplina.r, p - tes, sob iOR y ro tI. to . Las renta proveen .igual &1 le una marin que con ta de einte huqlle.8 e Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. J/A IE~R DJ.:L A Bl 61 A TIERRA DE~" AMBI" En la travesía d pa.ñero de m esa y lo q e es eor un rolliso turi no q ne com í con rd era d . • CIO año e au en i á. S nt nder, tuve r eom-ún, or vecino de camarote, á o nn dese rado y roncaba ba en el comer • criatura elica y ner "o , que do- 1& mano derecha., y el p mit·o de sal s d la izquierda. Ve ía el ri ach aquel de ri uro a f n ,ía: chinel. ama­rill , p nt Ión azul á cuadro rojo. ch 1 ca de t rciopelo verde, sa o plúmbago con ra. nela.s bl nca . y un gorrita neg~ d piel de conejo, tan chiquirritica. q ne apena. le cubría. nna de 1 oreja. . La. ca.dena y el r loj, de oro macizo. eran tan enormes 7 pe dos, qne m" teri 1m nte de ni elaban el cha.leco; por lo que re pecta á la. caden , hubiera po ido cualquier muc o ha er gimna ia. n ella. sin temor do que e rom ie e. 1 8 ho de me. , nue. tro '1 jero em. implemente"8u· árrago • los 11 cía enudos pedacito~ eo e gullia á cuchara.das. _ .. Al "servirl ol' gua. lo colocaba. sobre un plato.,. 1lé. go .•.. crac! cf"ikr.. Cf"lU" á uchill a limpia los acometí , con sa -a tal. que Ro vece se oí ha t el pía,- de lo polluelos .•••.• Las hija le da an d co o. 1e pi aban lo juanete, pe o 1 ay I todo inútilmonte: el gourmlwd ultramar-ino egnía impertu b ble su tarea de culinria demolición"." _ •. It E un hom re gordo, luego es un hombre bueno H~ecí. no recuerdo qu-é c'l br autor. or e fuera de esos defecto. hijo de una. falta de educación, mi a.migo el a tuna.no tenía. lo q e e lla.ma "o. corazón e oro." n 1 su cripci6n que se abrió -á b rdo, t e 1 p jero, p ra. s cor el' á. nna familia esp o· la.. 1 e su cr1 i6 co tre 11 pe o , dando mil por cada. uaa de u hija Ya nos ha. íamo fa.milia.riza ~o con la.. originalida.des de ~all e celente touri tao cuan o al de enlbarc r en Sa.nta.nder, una n 3i ino á poner olmo á. un s ra o Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 562 TIEVl "lA LIT~l U:lA bien hubimos pisado los muelles, entre una. doblo fila de cara­bineros y curiosos, cuando vimos que una. aldeana do sayo. corta 1 azo.l y zapatos de palo, se precipitaba en los brazos e nues­tro asturlaJilo, gritándole entre sollozos y risas: -1 Hijo mío! Jacinto de mi alma I!! La. escena que siguió fue dranlática é indescriptible: trae d. la madre siguieron otros campesinos, hermano , ~íos y her­manas del recién llegado, ciñendo á. éste tantos brazos como á un tronco de 'rbollas lianas y yedras. Las hijas del rico, o tidas con todo lujo y nacidas en Cuba de madre cubana, veían Dludas, inmóviles y casi avergoDzadas aqu~l cuadro vivo y pa.lpitant , á 8sa parentela que chorreaba agua de mar y olía á sardina ..... . -Esto es odioso, Ernestina 1 oí que decía. una á la otra, n francés, e8trujando el pequeño guante que se resistía á entrar en la temblorosa ma.no ..... . Por cualquier calle que se transite en N ue a York, Chica­¡ ro 6 San Franci!lco, se escuchan los vocablos de money y doUar escapados, lo mismo de la dulce boca do una mujer, que de la. amarga y entabacada de un hombre. En esos diálogos metal úr­gicos, tan frecuentemente escuchados, bulle el alma. lnetalizada de un pueblo: l es el alma la metalizada. ó eIluetal Ip-ismo hecho el alma? Las pa.labras recogidas aquí y allá, en una ciudad, determi­Dan la índolo de la población, así como la plantas y las piedras, en una montaña, determinan su formación geológica. En la Habana, dentro de la. parte española, se oye de con-tinuo esta. pregunta: -, A c6mo está el cambio en la Península 1 y deniro de la. cubana, eRta otra: -Chico, ¿vas esta noche al baile? Desde luego se infiero que los uno piensan on divertirse y los otros en enriq uecarae; los peninsulares an ganar y los criollos en bailar. El elemento peninsular, que está on mayoría, se compone do catalanes, aragoneses, asturianos, gallegos y andal uces. El tipo celta, el ibero, 1 godo y nlori co, aparece en todas us mo· diñcaciones y alteraciones de ra.za: o ven ojos azules u druid~; ojos negros y ardientes dc ~arraCCllO. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. r, I Lb; ~A lJJo:l~ ~lA lDÍ 63 Cad pl'ovincia. en ía á Cuba 8U ontingento de penin ula­res; ada provincia tra.e consigo sus hábitos y costumbres, y 8\1 dialecto ú idioma pr pio, com lo cat lanes. Si e le pI' unt al uno la nacionalidad del otro, responde: hijo de furcia. Ja Penín nla. comprende la id a genérica de patria: á ésta. igne la de provin ia; , la pro incia la ciudad; á la, ciu ad el puebl , al n blo, 1 vill 1'río. R un patri ti mo que va de lo siro le á 1 e to d 1 indívi ual á 10 colectivo. ñol no s un < mopo] it : por don quiera qu 8., lleva 1 de BU in i. n o, Y sa irtud característica no le : conocí en ondr á arios emigrados esp ño­nte h er permanecido en Inglaterra algunos años, no ha laban ni qu rían h 1 r el idioma ingl . E to, no por un e phitu l' fr ct 1'io, sino m'. ien por un sen imiento de n 10n .... lid d, profun arraiga o en ello. Un penínRular, ya. vi va en 1 Polo N rt ó n la, Ti rr& del u go, tiene siem­pI' l alcance de la. mano estas dos cosas: un Don Quij ole y una, guitar!' El r 1 nciallo pu de h b 1 r m 1 del aragonés, 6 viceversa. ; 1 valen i n ni el a.ra on' s permitirán que se hable m 1 i paña 01 m nte lo galle o par cen má apegados al terruño: al de em rcar alguno gall go de lo do sexos en 1 aban, 1 pI' gun aba un celador de aduana u que cuántos era.n los h nlbr y cnántas las mujere que llegaban." A lo que ellosr p ndiel n: - i hombres, ni mujeres: J todos gallegos 1 La pobla.ción e pañol a de la abana puede di ridir e en es­ta t c. : tra aj ores de Ínfima clase, comercian­tes y bn.n uero ,y mplea . y autoridades. Componen la pri­mera g 11 gos y asc s, la egunda a turianos y cato 1 nes, y la úl -iroa ca llanos leJOS. POI'] misma índo de los trabajos, los vaRCOS y gallegos e t.ín má ex u sto á contraer el ,,6mito: brogando de 01 ' sol en la pe ca., 1 tráfico de los muelles y ca­rretoneR la morta.1idad entro ellos alca.nza á un 2S por 100 según reci ntes stadí ic s. Los e talan s y asturianos, que iven á. la ombra, y me­dran sin rieago, tienen tiempo suficiente para volver á la Penin 3 (bi~) Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LI [En RI, , , o morir en Cuba definí iva-mente e y nte. del "ern su­je e fí JVa. pobreza. fin UD 11 roí. o. ere lue la. vi no omán tiea omo 1 d \ eo mI ~ DO]. d , ap asa 1 e a i un. ' : d a di 'Z, rir: los ue no mueren, 1i ta . men ,obr 1 s f 1 monr, m L la. ni urall de hi os ia. a. 6 d mo-ue e po i ti v , p ro al (tica, un fo eon­iend or . Al entrar, ab iean ., ion d e or roer qu den tI rl ip 1 o forma otr Esta o: el Com reío J ue de 1 H b na h os en ese yunq u : ID ree lo \lO po n cid. o que Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. rIEl . DEI. ~IA lUí 565 El catalán, euando no es arti ta, es industrial; cuando no -eR índllstrial ni arti ta., e inventor: el catalán parece aber he­reda. do el genio práctico del ca.rtaginé . Th' ophile Gautier, en su vi je á España, refiere el ignicnte cnrioso episodio: " Pre entáronme-dice-con un joven e cultor catalán, ciego de nacimiento, y el que tenía la maravillosa facultad de modelar e. tatua por una especie de intuici6n, bastándole palpar el ob. jeto ó el uje repetida v ce '. 1 abléle de ese orprendento ta,­lento de revelaci6n, en vi ta de una copia de La oc@nte que tenía. n estudio. Entonce él insisti6 en ~ e yo le sir iera de mo-delo para hacer mi bnsto. ccedi.: en la primera sesi6n me pidió que le de cribiera mi fí ico; en la egunda, pal póme repetida~ veces, ya la frente, por donde se derrama.ba.n mis cabellos, ya la. nariz, oprimi 'ndoIa suavenlente entre el pulgar y el meñique; después, ME un lápiz, trazó vario si~nos cabalísticos sobre el papel. .... Una semana mas arde, mi busto te taba. concluído, ttan semejante (dir' id 'ntico á mí), que lnostrándoselo en París á lní regre o : Fra.ncia., á IIenri eine, me -respondió esoépti­camente: -Oh! iempre railler ! " No hay en el ca.tal' n nada de e pañol: hay en el catalá.n mucho del frano' s, in la frivalidad francesa.. Si el e pa,ñol ve á un ll.ombre que se e tá am.oga.ndo, se arro­ja. de cabeza y lo B lva. 1 catalán, en idéntio ca.so, vuelve la. espalda. y o aleja. En 3.71 J en ello: tom mos un carruaje y nos hicimos conducir a'! dicho pa.lacio. U na. vez que el vehículo paró, me apeé yo, toqué la cam. panilla.. y momentos después abría. la. paerta. un laca.yo de mo­desta librea, como todo lo que vi en las piezas y en la escalera de aquella mansión. -¿ 1.". Manning? pregunté. -E tá en casa, señor; sírvase usted entrar. Entonces hice que mi amigo ecleiiástico saliese del coche, y ambos ubimos á una antesala. Entregamos á otro laca.yo nues .. tra.s tarjetas, y después de breves minutos de es era, volvió el mismo doméstico y nos dijo: -El Cardenal saldrá al iustante. Con efecto, no tardó S11 Eminencia. en venir y hacernos pa ar á una sala. Mi compañero no hablaba inglés, lengua en qua yo me entendí con el Cardenal. pero sí hablaba francés y la.tín, idioma este últim.o en que e cruzaron las últimas frases entre él y el Arzobispo de Westmin ter, quien sin usar de grandes formalidades, sino &nte bien con mucha, humildad y sencillez, tomó el pa aporte eclesiástico que le fue presentado, y entró á. escribir él mismo la. licencia para. decir la misa. Hecho esto, se apresuró á tend rno la mano, como es cos .. tumbre entre personajes de esa calida.d, eclesiásticos ó civil~ en Europa, como pa.ra. decir: ".Está. usted despachado: puede usted retirar e.u Recuerdo con toda precisión una. observaci6n que hizo Su Eminencia. al sacerdote coloro biano: "Sin dnda, dijo, habrá estado usted en Roma. á ver á Su an tidad Ío IX. Notaría ns­ed que conserva BU vigor de cuerpo y alma y no les teme á sus enemig ." La. falta que cometí yo para. con el Cardenal, fue pregun­ta. r al la.cayo de 1& puerta. por Mi8ter lanning, y en las fr&868 que dirigí al venerable Arzobi o, no decirle Vuestra Em;nefl .. cia-como aca o lo habría llamado aun el más palurdo europeo que no fuera. de la Comuna.-aino u ar el familidir t,stt!d. A. ese olvido,-porque fue 01 vido,-me llevó el hábito de creer en cier. tas nivelaciones e igualda.des ociales estúpidas que uno, sin ex­periencia, acepta en las a.ulas de política., pero que en l& reali .. da.d, no han existido ni podrán existir. y sobre todo, nue tra representación es tan insignificante RBVISTA urERA R1 37 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. primer m 1l&Jl8i. RB 1 T LI·.l·.ILIjU1~~ 'DIgO que esos banquetes son muy concurrido , porque en efecto los ha.y de ochocientos cubiertos. A ellos es inTitado á m - nudo el CuerRo Di lomático. Ya. se comprende que DO ueden orregidor 1 es o, COUlO nele dectrse, smo en conservar CIerta.s prácticas tradicionales. El servicio mismo de los criados de la mesa es insuficiente. Acerca de CRto recuerdo una. con­versaci6n que tuve con el Doctor eH Zapa.ta, cuando él en. ~1 tro D tro uropa. y después de lUlO de los banqa.etea de que vengo tratando. El Doctor Za.p tenía y'á e erieuoia de lo escaso del ser- 'ricio ell esae comidas, compa.ra.do con el número do convidados. 1 ma ordoJ;no había colocado á la, derecha. del del .. tro de 08 ta o el puesto del de Oolombia, quien, a.l sentarse, miro á su alrededor buscando con los ojos el criado que debía, • 10; notado 10 oual por BU colega, le dijo al punto: 11 o S8 reoo pe uste , qJl.f) yo tengo yá práctica de estas reuxúoD88 • · oriado: estaremos bien y oportD.Dam~te Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. · C. GUZ AN.-RECEPCIONE· Ol!'IUIAJ.E8 57. ñotts~) vivía yo. Raro como es en Bogotá-y mucho más raro que hoy, en la época en que yo salí para Europa,-el que las damas salgan á la calle á ~la. europea ó como suele decirse, en cuerpo, tomó IYo por tipo y patrón de 18, sociedad inglesa, á los dueños y á 109 huéspedes de las ca as de a.~istencia., porque las mujeres todas arrastraban y hacían crujir sodas y salían á. la calle con gorra. Cerca de do. años viví bajo la influencia de esta preocupación hast.a que la circunstancia apuntada del en­tusiasmo de mi posadera por la procesión dol Lord Corregidor, me hizo reflexionar sobre la clase social á que esas gentes per­tenecen, allí donde la eparación do las condi ·i ncs sociales es clara. y definida. Yo me sorprendía de las felicitaciones de quo era. objeto cua.ndo me llegaban esquelas de invitación á recibos oficia.les ó algún Secretario de Legación iDe deja.ba su tarjeta, ó aparecía mi nombre en el T,'mes como invitado que babía sido á. alguna fiesta del.Gobicrno. Ya apunté que en Londres no so convida á. 105 1 ecibos sino á los empleados en la diplomacia. gregaré pa.ra. terminar que siondo una sola la lista de los que forman el personal de la Em­bajada y Legación, los agentes del Times y de otros diarios de la. capital, ocurren al Foreign Offir.e tÍ. pedir la li. t,a. de los invi­tados, y al dar cuenta de In fiesta al día signicnte al en que tuvo lugar, ponen los nombres precedido do una introducci6n, más ó menos asi: "Ayer fdio una fie ta el Príncipe de Gales en tal jardín, por la ma.ñana.. Entre los concurrentes se hallaban L::rrd tal, el Embajador cual, ady H" etc. etc." Más de una vez vi mi nombre en el T,'me3 como concurren­te á. una de esas :funciones. Erft. cierto que me hal)Ían remitido esquela. de invitación á. la Legación. pero yo no había "I!l.sistido porquo estaba eu Parí, e, to es, en el Continente. Lo cual está. mostrando que e ::t invitaciones para rccep iones 6 fiestas oficiales r na.die sabe si uno concurnó ó dejó de concurrir, y en que no po­cas veces se presentan individuos no invitados, sirviéndose 'de las esquelas dirigidas á. otros,-pueden tenerse por algunos como un honor, pero que filosóficamente considerada son una cosa. d. poco momento ó cuando menos indi fcrente. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 514 REVISTA lIt KRA:RI CARTAS SOBRE MEDELLIN CARTA SEXTA. Estima do señor y compatriota. No se puede concebir la. existencia de una ciudad notable eÍn el acopio, en con iderable abundancia, del agua, elemento bienhechor. Recorra usted en su mente los grandes centros po­blados del globo que habitamos, y verá que los más populosos están situado á las márgcne de gt,'8ndes ríos, 6 provi t al menos, por medio del arte, de enormes dep6. itos de agua. traída. de la.rgas distancias. La ciudad de M~dcllín está reg da. por el río del mi mo Il.ombre, que corre de Sur á. orte; por el riachu lo Santa. Elena, que la atraviesa de Oriente á Occidente y que ae une con el an­terior en la. parte baja de la. ciuda ; por la quebrada Palencia, de curso de E te á orte un cuarto, tribu aria. del Santa. Elena; por la quebradita Loca. al Norte, y por el Zanjón ó quebradi'a de los Ejídos, que gira. en direcci6n Suroeste hasta entrar en el río, cerca del Santa Elena.. De est s corrientes de agua., las dos última.. Ion de poca importancia. y meramente deben con idera.r e como desagua.do­ros que recogen y arrastran la, inmnD . cia. ha ta eacarlas fue­ra. de lo poblado. Todas ellas tienen puentes para facilitar el tránsito de loa vecinos: en el Aburrá á. fedellín, el de Guaya.quil, !lobre la ca­rretera. que conduce á. Cald s; uno en construcción para. comu­nicar la. capital con .1 barrio de América ó la Granja., y otro, el más antigno, en la calle de Colombia, puente que lleTa. este mismo nombre y que sirve pa.ra. unir la. ciud d con el barrio de Robledo 6 Aná. Los dos primeros son de clásica. solidez; CODe­truído 01 uno de fábrica.; colgante el segundo; y el último, aun­que de rnadera., de cansa sobre fuerles estribos de mampostería. El riachuelo Santa Elel'la. tiene lo siguientes de Este á O.rita: el primero enfrente de la, calle de .A.ra.nzazn, sobre el Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ANUEL URIBE A.-c RTA OBl\E MEDELlIl 75 antiguo camino llamado de Rionegro; el segundo, de hierro '1 de nombre Miguel Gómez, para pas&t' del malecón izquierdo á la calle de la Lader ; el tercero, eolg nte, en la calle de Girardot, bautizado con ,al nombre; el de :Afejía pa.ra recordar a.l .... ale. roso prócer de nuestra guerra de Independencia, inmediato á la calle del Pato; el de J unín, en 1 cane de ese DOro br ; el de Pa.lacé, á pocos metros do la. plaza de Berrío; el de Arco, cona .. truído por el abio C Idas en el año de 14 y el primero que hubo en 1& ciudad; el de la calle de Carabobo, que comunica. la carretera. del Norte con el centro de la población; el de Cundi­namarca.; y en fin, el de la. calle Santa M ría., que se halla. en construcción. Sobre la Palencia hay un puente en la ca.ne de Ayacncbo Y otro sobre el malecón izquierdo del Santa. Elena., cerca.no á la. eonftuenci . Hay demás otros puntos en que este ria.chuelo está cubierto por ohra.s de mamposterí . La. quebrada Loca po ce también un puente par comuni­car la. Plaza. de Bolívar con 1 calle ea nombre, y otro sobre la de Carabobo. Hay, en fin, uno tercero sobro la calle de Zea. El manantial de lo" Ejido tiene igualmente uno sobre la calle de Bolívar y do obre 1 do Carabobo. Después de la fundación de 1 ciudad, los habita tes de la parte oriental y central se ervían para sus necesidades domés­ticas, de la.s guas de los riachuelo~ Santa. Elena. y Palenc·, y 108 de la parte b ja. ú occidental, de las del río Medellín, yc mo estas últimas can de excelente calidad, rcsultab que los veci. nos de esa. parte gozaba.n en general de buena. salud, mientras que los de la. parte a.lta. esta.ba.n sujetos á las dolencia que en­gendran agua impuras. En el pa.raje denominado Bocaná hay algunas fuentes ea.­ladc. s y. entre ellas una de bastante consider ción; pero es el caso que la. sal diaa.elta en es fuentes no se .. dapta al consumo del hombre y se emplea s610 para ro ntener en. buen estado la salud de los ganados. En otros término : es lo que por acá.lIa.­mamo BaZ amarga, cuyo amargor se debe á que no predomina. en ellas el cloruro de sodio en la cantidad precisa, y á que con­tienen sulfatos de potasa, cal, soda, magnesia y acaso algunos principios más, como yodo, bromo y. fIuoro. Disueltos esos elementos con el .gua de la quebrada, i '. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 76 REV[~TA Lll EHARTA cían acción dañina Hobre la o ~gani~aei6n de laR Cino, por ma­nera que hasta el año do 1 3 los ho 1bre es ban uj too á. padecer anemia y las mujeres cloro i ,d clond re nI :tba que en todo el lugar había per ona sumanlentc pálid, y a haco.:a , que con alguna frecuen ia termin ban s .-i tCl1CÜ por hü ra­pe ías, que en aquel tienlpo eran incurable. y qu en é te cIen no erlo. En el año de 1791 el obicrno spañol mand ' te' a tierra a.l ingeniero . Juan TI uti ta lanzón con el nc rgo a. t ble­cer en fe ellín una real fábrica (O aguar ien e . y como para ello tenía necesidad de un copio. o acu e uc o, manif . tó al muy ilu tre Ayuntamiento quc el aO"un, que peno ha, con n ir ' su fá­brica, totn da cn el rja huelo < n a Elena" pa "arÍa po . 01 cent.l'O de la plaza lnayor y que por tal moti \""0 p 11 78 UEVlSTA LITERARIA de Bocaná, es alimentado por el fluÍdo SlrCUO o más exquisito de la comarca" y que tanto ue '1 como de la Espadera se puede ha­cer llega.r á la. población cantidad de agn que supere en mucho la. copia. ue ella que tendrá. la. capital en el transcurso de medio siglo, aun suponiendo que ande á paso de gigante por el camino de los adelanto. Hay más todavía: el agua. del río, tomada en la parte alta de su curso, p ed ser distt1.h lída en la mayor xtensión dellu­gar, y si no se quiere tomsu-la desde muy arriba, 10. operación puede ser hecha en la parte bti.j con luaq ainaria idéntica á la que se ha empleado en el rí Schulchill en Fail't- Iount para. surtir á Filadelfia.; cOJno la del río Harlem para. proveer á Nueva York; como la. de 1farly en Fra.ncia; como la del Mag­dalena en Bacranquilla, 6 como muchas otras de que supongo tiene usted noticia., Aunque por 10 dicho S8 comprende qu Medellin no carece de agu potable y de agua. para el asco, yo me atrevo á decir, que á pesar tle la. buena reputaci6rl de ciudad limpia. que tiene, no le faltan máculas en ese a. pecto, que deben er borradae, y que or el lado de la higiene pública, aunque "'u calidad de sitio ludable s a indiscutible, de lo cual algo garante como médi­co, yo pienso que si bneno en a.lto grado, pudiera. ser muchísimo mejor. Los Ejidos al Suroeste d8 la ciud d, y los terrenos al No. roeste, son bajo y auegadizos, y como me parece lin.berlo indi. cado, cenago os en t.iempo de invierno. Esa eircunstancia, á mi entender, e cau a ue que en la" épocas de transici6n de verano á invierno. ó vice ersa, la nfcr edadeR infeccio as sean un tanto más comunes entre no otros; y para evitar los peligros que acarrean, he pl'OpU sto al Gobierno, hace algún tieulpo, la cana.­lizaoi6n del río l'I dellín, de de frente do ello hasta. el puente de Guay ui], procurando que o le dé al cauce 19nua ma.yor profundidad; pues ganand en el nivel de 1 corriente, de seis 'ocho metros, lo desaguadero de la cind d correran libre­mente, io c mpos quedal'án secos y cultivabl s y] salud pÚe blica asego.rada. El Gobierno, á pesar de algunas objeciones hechas en con· tra de mi proyecto, a cee haberlo ac ptado d buena. volunt d; pero la obra, un poco costosa, anda con lentitud. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. E. RESTREPO T .-u Nl~EZ EJn'RE LOS IlrotGBNAS 379 Para, concluir esta. carta, le diré, que atendido el de nivel de la.s corrientes que caen á ~Iedellín y sus alrededores, desde la. fa.lda de la montañ2. vecina, la. presión del líquido es tal, que los surtidores que á veces se construyen por lujo en las habita.­ciones centrales, en las afueras y en las caRas de recreo, alcan­zan á elevarse uno, dos~ tres y hasta ocho metros lIobre la super­ficie del suelo. Dejo á la. inte17Pretación de usted el adivinar la .orprendente belleza de juegos de agua que podrán ser creados en lo porvenir, si Medellín, vistos sus adela.ntos posteriores, llega á tener la. importancia. de Verss,1Jes, Fontenebleau, San Germá.n ú otros sitios que encantan hoy la brillaute imaginacion de los francescs. Cuando el Genitor sublime de lo. sere y de la cosa.s es~ ba. ocupado en formar el teatro que debía ser habitado por el hombre, la.nzó en la creación dos cuerpos imples para que va­gasen en la atmósfera. E.'os dos cuerpos, oxíO' no é hidrógeno, unidos en íntimo consorcio, fOl'lnaron 1 agua, y al formarle, la. misericordia de Dios hizo caer obre el labio 'edjento de us bijos el líquido refre ca.ntc que debía impedir f{Ue fue en cnlci­nado por el calor central, por el 1 i 01 Y por el de la fi re. Soy de usted afectísimo seguro servidor y com patriota, --~---~------- LA NIÑEZ ENTRE LOS fNDfGENAS Muy robustos y fuerte, ágile y de un tempel'alnellto de hielTO, tenían que er, como lo fueron, lo in lio .qu cupaban toda la exten iÓll de iert'as que h y forlllan la República de Colombia. El trat uliento que <.1. b II : 1 niño de de ne alía á luz ha.sta que llegaba ' la ~poca, n que podía elegir una ó má esposas y ser el núcleo de un n levo hogar, le fortalecía para. ~e­sistir á los trabajo ; daba. á n cu rpo un temple e. pecial que 10 ha.cía inacce ible á la fatiga.. y lo endurecía con 1'a 1~, nece­sidades y los rigore de la. na.turaleza. 1~ o. bárbaro., ya que no todos podían dictar 'u voluntad á una nacióu, dirigir un cjél'­oitQ, 6 g bcrnar un ·U. erío,:e contentahan cou Hcr el '. potas en :J'¡ (bi .. ) Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 580 REVISTÁ LIT~R~RIA BU propia. casa.; ya. que obedecÍa.n ciegamente y dobla.ba.n hu­mildes la. cerviz ante los mandatos de un superior, al llegar , sus cercados, también querían tener á. quién imponer sus capri­chos y hacérselos ejecutar, por las vías de hecho si fuere preciso. A la esposa y al hijo los con ideraban como dos esclavos. S610 el amo t~nía derecho pa.ra mandar y ordenar; á ellos loe miraba como máquinas que se movían á su impulso. En parte a.lguna. se vio un desapego ig.ual, un manejo semejante, diré más, un instinto de cariño menos marcado del padre hacia 8US hijos. En varias tribus los mataban cuando no necesitaban de más brazos ó por no tener un sér más á. quien alimentar. Lós Pozos y otros tenían hij os en eus esclavas para. engordar1os en ja.ulas y regalarse con la carne de sus propias criaturas, para hartar e en us diabólicos fe tines con la si&ongre do su sangre; otros mataban ' la niñas reservando unas pocas para la, con­servación de la e pecie. Los conqui tadores y más tarde los viajeros se admirabaD do que entre lo h bitan s de nuestro 8uelo no se veía. un solo jorobado, ni per ona contrahecha. A la vida á la intemperie, al aire puro de la cordillera, á la contemplaci6n permanente de la naturalez ,toda ella t n perfecta, atribl1ían este fenóm _ no. !\-fa no era así La de n turalizadas madres, tal vez perse­guida por las uper ticio as idea que el demonio les sugería por boca de los mohanes, e encargaban de conservar la raza. en tod su belleza. uando nacía el niño, fruto de su amor y en­gen ro de su sér, si tenía alguna imperfección, lo condenaban á muerte. Lo enterr ban vivo n un hoyo bastante capaz, acosta­do en la misma hamaca que habían tejido antes de su naci­miento para. cuidar sus días. Encima. de la. fosa ponían un enta­blado y el todo lo cubrí n con tierra. La totuma. de chicha co· locada á su lado para la. oh'a vida, de na a le serví en ésta.. La infeliz criatura apenas bría por n momeuto 108 ojos á la luz para morir de hambre y de esperación en un hoyo oscuro. Hacía oco había re pirado por primera vez, saliendo lleno de vida del seno de u m re, y yá lo condenaban á expirar en las entrañas de la ti rra. Y todo e to para purgar el crimen de no haber nacido perfecto . .A. í los hijos pa~aban frecuentemente 1811 eul pas d sus padre . Después do ht con nista., los misioDeros tuvieron que Iu- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. B. RESTREPO ~.::-LJ. Nl~ EZ·BNTRE LOS INDíGENAS ~l e ar grandemente contra. esta infame co tumbre. En el Darién conocimos varias mujeres que habían enterrado vivos á. sus hi­" os, por ser éstos de graciados 6 por tener en su angre mezcla. de blanco 6 de neg o. Record mas la amenaza hecha á una. de éstas, ya en cinta, que con mucha naturalidad nos decía que al na.cer el niño 10 enterraría, porque habiéndola abandonado su esposo, no sabía c6mo mantenerlo (1). La misma. suerte coITÍan 18s hijas de los Betoyes. s propia madres para. evitarles las duras tareas, patrimonio de su sexo, las enterraban vivas (2). La futura. madre poco se cuidaba. aun en los últimos días que }lreeed'Ían al parto, ya fuera. que -aguardara ese momento con estoicismo é ignorara. las ma,las consecuencias que podía. tener el seguir en su duras faenas, ya que su e poso la obligara. ~ el e, 6 ya cn fin, que en e to no llevara más reglas que las de la. na.turaleza, observando á. los demás animales. Sca lo que fuere, la infeliz ha.sta última hora molía el ma.íz y cargaba con las proví iones del ma.rido cuando éste iba á la ca-za y á la gue­rra.. Daba á luz, y unas veces sola, otras apoyada en el br zo de t:LD8. compañera, iba á baña.rso y á la var á la criatura. Del río volvía. á sus queha.ceres. En las ribus nóma.des del Llano la mujer que, durante una larga excursi6n, entía que llegaba el I&nce de que tratamos, e retiraba. de la tropa ambulante, daba. .¡ luz, oorrín. ~ la. fuente más cercana á. bañarse con el niño, y votvíaá ineorporarse 'á, los suyo. Otras más previsiv ,cuando sentían 10B primeros d-olores, se retiraban á orillas de loa ríos. Al niño, i era. aceptado en el número de los vivos, le pin­ta. ban el cuerpo con el jugo negro de la. fruta llamada jagua. Creemos que esto tendría por objeto pre ervar la piel de los ra.yos del sol; conservar BU delicadeza y su color al cutis. Los Ameos y los Jirara.s, cuando venía a.l mundo una niña, le rapa.- an as pestañas y en reemplazo le pintaban con jagua. dos grandes semicírculos. . Envolvía.n 8.1 niño en una manta de algad6n y 10 colocaban en su hamacat 6 bien lo metían en la a.bertara que para este efecto hacían ~n el tronco de un árbol. Las mujeres de la.s tri- (1) Lo mÍJlmo haciau los Coyaimas, loe Pijaos y 108 Panohed, 6e~ ere Piedrahita. (2) Padre Juan Rivero, pig. 345. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ~8i bus n6madelll cargaba.n con la criatura. desnuda como acostllm­bran 10 cuadrnmanos. Los Ohibcbas eran má en· dadoso de ns hijo. Los el1vol. nan en fino esparto, mezclándole un poco de algodón moj do con leepe de la madre. En cst esta.do 10 lIev b n á orillas del más pr6ximo río en compa.ñfa. de seis bueno nadadore , lo arro­jaban al agua, y tras de él zabullían de cabeza los ei acompa.­ñantes. Al volve á. 1 superficie observaban al niño; si había. s· do volcado por el oleaje, su porvenir sería. muy desgraciado; haberse nlaD tenido con la cara. hacia arriba., 10 miraban como síntoma de felicidad fatura.. Despu' de e ta bautizo por inmer­sión volvían á dar el va ¡eínio á lo pa re reunidos en el cer· ca.do con lo a.migos. Ca.da individ o te, e cortaba. un mechoncito de pelo con un cuchillo de piedra ó de caña hasta raparle la cabeza. . .Bañábanlo do nuevo 1. la concurrencia se en· tregaba á. la bebezón. Los Ss,lib s hacía.n á. los niños, á. los ocho días de nacidos, una JI sa.ngx:ienta. tra.nsfixiÓn" d re ultas de la. cual morían muchos (1). No sólo la mujer no guardaba dieta. después del parto. Bino que en muchos puntos, su poso S6 costa.ba. 10. ' go que n cía. un niño y se hacía. cuidar por e pacio de ~a -io días. El indio, be­toye t quejumbroso y e riafli ido. se 4.en ía. en hamac y la mujer lo cuidab con esmero, cual si hubi ra s lido de una gra­ve enferm da.d. Y así diz que lo b cían, porque i caminaba pi­sa. ba la cabeza. de la criatura; si rajab leña ó fl chaba los ani­ma. les en el monte, le rajaba la ca.beza ó atra csaba al niño (2). En nna. tribu de los Llanos, el e poso .coloc b8t á. 13, mujer en un hoyo de su tamaño, y, '1 permanecía. por tres días, sin comer, acostado obre uno do los cOBtadoR encima de una, barba.coa. Natara.lmente que termina.da la, dieta invita.ba. á sus parientes y amigos á una borrachera (3). Los Ohoeoes y ]a. mayor parto de las tribu de 1& costa ate lántica. Y.. de los Llanos a.partaban de la cabecera. de la cria.tu~ 108 ma.los espíritus, para. que no la. estorba en en BU desarrollo, ni empañasen eu porvenir. El mohán ee dirigía. á casa. del nma, (J) Gumilla. (9) Padre J11aD Rivera, pig. 84.'7. (3) Fra'l Pedro IIJll6a, t. JI, p'c. 41'. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. E. RE3TREPO T.-LA .~I.."EZ B 'r tE LOS 1 ·UíGEN .... ' 58.3 cubierto con una piel el tambor ~o oro. rraba 1 s pucrt e píri n el .. , De nime nI mo án. Era. e to Íntom e qn bían al jado. obre 1 at ro or 'ce' a. aCOlll a - ndo Los oy im s los Pijaos ( ), los Fa. ches (2), los La.- che (3), lo. otilone (.b), lo a ·iba., te., 'Poní n la cabe del niño esde el nacimiento e o, ne liz pa.to. 3. l'ib entr dos t blilla que am r' b 'lid mente, e figurando así, con el au curso d 1 ti ID o, 1 f rma. del cráneo, " De t 1 suerte que ha.ce la cabez& tra esado lomo por lo alto; o po . n~ tura:l za, más 01' rt.e, blá ola d s e quo on tiernas ta q e se endurecen de esta. forma.!' (5) Autores huy qne nieg n el hecho, diciendo que de sta..ma­nera. no odía de a.rroll· r e 1 in . iduo, y que de de su ~aei­miento le condena. a á morir nte de He l" á la ed, d viril. No disentü' mas del pUl to cienti c mente, pero nos inclinamos anto la re li a . e11 no , C' eza de León, Oviedo, .1fray Pe­dro Simón, a gUI D haber visto no algunos indi iduos, ino ribu enteras en que]o hombre.. tenían artifi i 1 ente chtt.~ tado la. frente lo' parietale . Piedrahita, eIrer, Acosta, y mucho más, r ficren o mi !Tl0. Uricoechea reproduce en su obra obre. n igüe e ne O'r nadinas, cr' neos deform dos p'or el procedimien o descrito. An 'zar hab a. de cráneos hallados por él C( con 1 frente comprimida y plana, Iterados por me­dios mecánicos, ue la suturas lat r les e veían alteradas en partes." .... osotros visto hemo xaminado de cerca., no (1~ Fray, F dr im6n, t 111, pig. 414 .. (2 Piedr,ahita. (8) Fray Pedro Sim6n, t. 11, ág. 224. (") Anofzar. ~) OutelJal1os. Hi,úrif.l del NtUf10 .R6ino d. Granada. T. 1, O. 11_ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. re VISTA LIT R1RI auo, SillO muchos de éstos, procedentes la. mayor parte de los terTcnos que ocupaba.n los Pan che • Los partida.rios de la. frenología dirán acaso que por e.te procedimiento se suprimían loa órganos de las ciencias, dando en cambio mayor ensa.nche á las pasiones fí icas, á la industria y al orgullo. Esto lo ignoramos. Sólo abemos que toda.s aque­llas tribus que conserva.ban esta costumbre llevaban en su seno á 108 seres más estúpidos. más incapaces de buenos sentimien­tos, más tercos y más sanguinarios; valientes, upersticioso y nada. afables. Esto no lo deducimos del análi is del cráneo sino del eatudio de las crónicas. ¿ Qllé objeto se proponían 108 indios en dosfigurarse de esta Dl&nera. ? Ta.l vez lo hacían simplemente como ornato, quizá para apa.recer más aterradores á los ojo. de su enemigos. El adorno, se dirá, no podían buscarlo deformando la n turaleza. En las islas de la Ocea.nía y en la República Argentina, á orillas del Amazona.s y en el centro del Africa, ha habido multitud de tIi­bus cuya principa.l belleza consistía en tener los labios ó las orejas desmesuradamente largos, y flstO lo conseguían artificial. mente introduciendo, en incisiones hech s en los órganos indi­cados, madoras esponjosas que, dilatándose con la humedad, los agranda.ban de una manera. extraordin ria. Entre las tribus co­lombianas también se engalanaba.n embijándose el cuerpo y sus­pendiendo á. las narices gruesa argollas que les afeaban el rostro. ¿ Por qué no ha.bían de considerar ellos como ornato alargarse la. cabeza? Mientras el niño no podía valerse de sus miembros perma­llecía en la hamaca durante el tiempo que BU madre consagraba &1 trabajo. 1 Cuántas hambres no aguantarían aquellos infelices, si tenomos en cuenta que la que les daba su sustento, e8clava. del esposo, tenía que salir á. grandes distancias, al volver éste de la caza, á traer la presa q'lO en elleja.no monte había. deja.do t y cuando 108 dos c6nyuges se entregaban por días entero á 8118 borracheras ¿ qué tiempo quedaba á. la. solicitud ma.terna. para amamantar á. su hijo? Ya. alioran á. trabajar en las sementeras, ya siguieran á. su esposo á la guerra, ya fuera la tribu en caravana para cambiar de sitio, siempre la mujer cargaba. con el niño, unas veces en BU misma hamaca, atando los extremos sobre la. frente, otras en U5 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. E. RE TREPO T.-LA NIÑEZ 5 T~lIl LOS INDi li: .. J.S á85 brazos, sobre el cuadril 6 sobre la espalda, protegido por una manta cuadrada, cuyas cuatro puntas an udaba sobre el pecho. Desde que el niño principiaba á gatear, lo dejaban 8010 6 al cuida.do de sus hermanitos. Al principiar á caminar, ayudaba á su madre, en cuanto podía, en sus ocupaciones. Si el enemigo se acercaba á un caserío, las mujeres se reti. raban con sus hijos y las alhajas de oro para volver después del combate i eran vencedores los BUyOS, para huír de las persecu ciones si eran vencidos. En las tribus n6mades era de admirar el valor precoz de los niños para seguir las caravanas. Los Jira. ras y Chiricoas "apenas aben caminar cuando, como si fueran perdigones 6 codornices recién salido del cascarón, siguen, sin cansarse, á sus padre y p rientes, por esas sabanas y pajonalee, atra ve ando cí ' naga , pi ando pan ta nos entre arca bucos y male­zas, snfriendo los rigores del sol y las inclemencias del tiempo como los má robu te (1). Los Laches da,ban á sus hijos, de cinco año de edad, nombres de árboles, plantas, piedras 6 ani. males. En las demás tribus s610 les daban nombre más tarde, generalmente el de algún animal que tnvlera las cualidades pre­dominantes del individuo. A los hijos de los Jeques y de los Mohanes, y á los sobri. nos de los Caciquo y Capitanes lo educaban, como yá hemOt!l visto, para ser á la muerte de sus padres 6 tíos, su digu08 su .. cesores. ltfencionaremos de paso una co tumbre infame, de lo más degradante que nos presenta. la hi toria de la. naciones bárba.­ras. Cuando una mujer panche había dado á luz cinco varones seguidos, habilitaban al último de mujer. Los llamaban cusmOB y desde que cumplían doce lunas los educaban como niñas, con tánto esmero, que llegando á la. edad viril poco se diferencia.ban de aquélla. Los casaban como táles y era u mano más apete­cida y codiciada. que las de las mismas mujeres. Má 6 menos, á la edad de diez 6 doce años, el indio aban. donaba la tu tela de la madre para ¡acompañar al padre en sus correrías. Recibía el arco y las flechas y aprendía á ma.nejar las piraguas. En e tos ejercicios diarios adquiría una. práctica. asom. brosa., y desde temprana edad era hábil tira.dor, robusto y es- (1) Padre Juan Rivero. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. RE" 1 -'fA. LITERARt forza.do, ágil en la carrera y apto para toc1C's los ejerc·cios del cuerpo. La vida cn IU di 1 las h'r,~, u,' 'auuo al lado df\ su palre el alimento p ra la f:. ilia y defen i ~l1do. e de ]0;" carní. voros, e a1'1' llal a n lto gl'; do la p r icncia el valor. Para. bu. cal' un rastro y seg i -ln,}l r( de~encuc ar la enza y a.segura.rla, tenía ojo de águila y olfa o de < D. Aprendía. mil mañas para sorprender la. pre ' , y nlÍls tarde, cua.ndo ~ -:1 podía. tom:.a.r arm s para defen el' su vida y su llogar. la a.stu i m­pIea. a contra. los animales le ugcría ingeniosos planes pal el ataque. A la. edad tIa d ce año., lo intli e los a~uentes del ~'\pure (CuHoto, Uru, e c.), embOll' ch. al {",u infantes para que no sint,ieran la pun afila la 1 1 in~trulnento con que le: hacÍ:tn ¡nei iones angrienta en el cnerpo y en 1 ::; brazos (1); era e t conlO a izo. L ~ Ualn:i y O omaco u b n e cruel­dad mucho mayor n e. to n11 'lUO. ca. o . us juegos e taban en l.'clación con su cone ción: la. ca­rrera, el pugilato, las apue ta. al tiro con flech, s ó con arpón, era.n u c.li ver. iones pI' ilcctas. Con excepción de una pocas tribus, no les era permitido a.sistir ' 1 s borracl ra. Cuan o ib n con . u. 1 adrc. á la caza, lIe -aban el ca.rcaj y la n. ija dc chicha. Nunca. 1 \Ti la1'erno la gr ta impresión que recibimos en el Da ién la ll'im 1'a z que vimos á un indio en cacería con su hijo. av g' os l' el río Tuira, aguas arriba, luch ndo contra la. fuer e orrien e de su. recida. agua • Un grito a1- vaje r per.u ,id p r el eco llegó ha to.. no o ros y ante de que comp1' ndiéra,mos u irrnifica o, el indio que 110. acompañaba en la p ·ragu., ·ont. ' e n o ro 'em janto. Au'i ába.lnoR en e te momentO á u ren a,n o del río, . 'c u mar en el ~ech . Al la, lo opues o se de urrol1ab 1n bo que e pe. o, de orpulentos árboles. Allí se a reeió, abl'iéudo o bru 'cam. 'n camino por entre la cspe 3., rama. un in io fOlnido, y ti'. lc'l. u hijo. mbo an 1 ban de nuclo y con le C bezo.. l cubi Ita. El mu­cha~ ho ten ría. unos doce • ño~; bieu proporciono do, de cutis casi bl ca.. aunque un poco to t d por el sol; bien 11. ntn.tlo, dele­cho, cabello negro, grlleso y abundante, y ojo vi \~O é Íl ligente. (1) Gumilla. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. E. B.ESTREP T.-LA NIÑE:l E.·TRE LOS T~DíGENA~ 587 Tra.ía un calabazo con chicha. y las provisiones para la caza.. Su mirada escrutadora. se clavaba en la de su padre, al menor mo­vimiento que é te hacía, como para adivinar su oluntad. No se leía en sus ojos el cariño ino el temor. -Era como una ma uína que se movía á la menor indicaci6n, á. un gesto, á una contrac­ción de la cara. de su padre ...••• Más tarde fuimos testigo, en Pa.ya, de la obediencia. pasiva. de los hijos y dol modo de mandar imperativo y sin réplica de los padres. La. desobediencia y las travesuras eran severa. y bruta.lmen­te castigada . El pie y la mano bast=tban en la mayor parte de 108 casos. En otro artículo vimo c6mo los Guanes tenían la crueldad do echarles en los ojo jugo de ají. Los Payas tenían una. curiosa costumbre que no hemos podido explicarnos. Daban á 108 niño, en 8US accesos de rabia, chicha COI:. un poco de rapa­dura. del dintel de la puerta. El brebaje podía calmarles la ira, mas no vemos qué papel desempeñaban la partículas de madera en esta. super tici6n. El niño, que en la sociedades civilizadas e considerado como mensa.jel'o de paz y de alegría, á quien las familias cría­tia. nas miran como el ángel del hogar, no era para 10 indios, aun pa.ra. los ma humanos de entre ello, ino un e clavo más en el cercado, un sér q e había que aceptar porque más tarde podía ser útil. E ta criatura delicada en la cual vemos nuestra propia sangre, el heredero de nue tra yirtudes, el que ha de transmitir nuestro nombre de generaci6n eu generaci6n, elob­jeto de nue tro desvelo y cuidado, ra tra ada por los indi08 como cosa. extraña, como un ér inferior, nacido únicamente para servir á su pa.dres y pr~ tal' obediencia pa iva á us desp6ticos deseos. No comprendemos c' mo odian exi tu' e as sociedades que desconocía.n el cul to á la infancia. y el amor á su propia. sangre • . RE ISlA Lll · Af-t:. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. v8 · J. N. APARIOION Mi lámpara nor.t,urna. ostá. apagada. ; Bolo estoy en silencio y en tinieblas; Ningún reloj~ ningún l'umor se escuclia Por la ciudad que inmensa me rodea. Oh noch ! entre tus sombras lo presente, El porvenir, el mundo, la materiat, Ayer, mañana, la. am bici6n, la ca.rne, El curso de la vida que nos lleva, El sudor por el pan de cada. día, La envidia. cuyo diente nos acecha, De los fal oa amigos la perfidia, Del triunfante enemigo la. insolencia": Todo de aparee : sordo, ciego, M ert , el hombre entre 01 hombre se ooncentra; y en gloria y soledad a.nte sí mismA. Súbito el alma humana. Be presenta. Sí 1 glorYosa y solitaria el a.lma, La posesi6n sintiendo de sus fuerza.s, Lánza. e libre al invisible mundo Que us noble instin tos le revela! En vano ensancho más y más los OjOfl, En vano los oídos tengo alerta; 8610 cucho I zu bido del silencio, 8610 miro espezar e la tinieblas. Del fOl do, empero, de silencio y sombras Siento venirme claridad incierta, y las voces volver de 10 pa ado, y la feliz edad de la inocencia. Vllclv n mi olvidada ilu iones, Mis r cuerdos de infancia, mis reendas; Vuelvo á soñar lo que jamáR he halla.do, 1;0 CJue en Tan 1 u qué sobr la, t,ier 'a! Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. CTAVE US N.-!.' ... PPA1ITII)~ 58 l'APPARITION tI D. MI IUEL A. CARO) A bord du MClrClCGibo, en mer, 11 Octobre, 1891. Lasse de m" claírer, ma. lampe 'est éteinte ; Je sems autour de oí le silenee et la nuit; De la Cité qui dort se tait la 'n. te eneeinte, NuBe horloge n' sonne 8,U vol rhoure qui fnit. Oh nuit qui nons 'trein. ! ton aile agile emporte Le Passé, l' Avenir, le Présent, l'U ni ver ! Ambition d'hier, de dero in que t'im Ol'te 1 Tont s engloutit: la vie et ses a pects divers.; La. Bueur qui du front de l'ouvrier raí selle, Le pain de chaque jour g~gné p ~niblemcnt. Et l'EnVÍe á l' il eave GU la f1amme étincelle, L'ami faux, l'ennemí sans foi ni sentiment. Tout 8e tait; nalle voix na p.ent ~ tre entendue ; L'homme aveugle mourant, se recuei11e et s'ahstrait. Mais de la sombre nuit sur lui-meme ' tendue L'ame hum&ine, soa ain, dans 1 Gloire apparait. Oui, rAme solitaire et de gloize baign e DeVinant de son vol quel peut e , l°e l'effort, Déserte pr.. r inst&nt la terre dédaiO'n' e, 'Vers l'Infini bondit et, libre, en Dieu s'endort. ctest en vain que je pI8te une oreille attentive, Que je regarde; en vain I Je ne pui lien aisir Que du seín do. silence une plainte furtive ! Je sens autour de moi les ombr b'épaissir 1 Et pourtant, de ce fonds et d'ombre et de silence, 11 me semble entravoir UDe vague clarté. D'un cher passé la voix, faibl0 encor, 'élanc8; Je revois, triste héla ! mon jeune age emporté t Cheres inUBiona trop tot évanouies, Bel a.nge de la Foi sur mon be11ceau penché! Oui, ouí, je vous revois, déliccs inouie8, bonheUl" q1l8, OQ 'QlJrs maL e v. in j ai cherch ' Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. .J. E. CAR .-APARICJ6.· Vuelvo á ver lo que a.mé, cual lo veía. Cuando el amor sentí por vez prim ra Con los colores mágicos que huyeron Ante la odiosa luz de la experiencia. Oh ami tad! oh virtud t oh dulces nombres! Vuestra noción la mente lleva impresa. Desde el nacer; y el coraz6n ansioso Por convertirla en rea.lidad se esfuerza.. Vuelv'o mi padre á ver: su faz o.ugusta, A un tiempo mi mo afectüosa y seria, A presentar e torna ante mis ojos 1ta.di&nte de virtud é inteligencia. Ay r al mirarla aSÍ, prorrumpo en llanto, Que es de mi vida la incurable pona. El no poder vivificar la tumba, y conseguir que lo q ne fue no sea t Sangre debo llorar, llorar mis ojos, A! pensar de mi padre en la. existencia., En aquella existencia tormento a Que no halló más descanso que en la huesa.. Para la Dicha y la Amistad nacido. Vivió do desengaños y dolencias; y murió pobre, atribulado y ciego, Del cuerpo y de la edad aun en la fuerza. Hoy pudiera vivir cual otros viven; Hoy, después de tres lustros, rsi viviera, Sobre su vasta frente empezarían Sus negros rizos á argentarse apenas . • To f El. Ir.BJO O.Uto. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. CTA: E 591 Je vois ce que j'aimai, tel que le voit, 1 adore Un creur pur de vi o all q i 'ntr'ouvre au pla.iair Quand un prisma enchanteur de gais reflets noua dore Ce que le Temp , cruel, se charge de noircir. Amonr, tendre amiti', 'ertu, donce chimeres, Vous futet:J, en nai . ant, dan notre ame imprimés. Pourquoi done, all' geant nos épreuves ameres, N'habiteriez-vons pas en nos ccenrs opprimés? J e vois mon pere, alor. on augn te visa~e Est grave, affectueu. ; m is n'est point abattu. 11 se pré ente a. moi tel qn'il vécnt, en sage, Le front irradié de génie et verme Hélas 1 8. son aspect je sens jaillir mes larmes. Que ne puis-je arra her ju qu'an dernier flambeau D'nn pasaé douloureux, témoin de tant d alarmes Et rallumer la vie au fond de ce tombea.u 1 Qu'avec mes plenr , le sang conIe de ma paupiere t De l' Anteur de mes jour si tri te fut le sort, Ta.nt de fiel abreu'va son ex.i tence entiere Qu'il ne connut de paix que celle de la mort t Luí, né pour le bonheur, a l'amiti' sensible, Il vécut de dégouts, de dé . poirs cuí ants; Mournt presque étr nger a. ce mox:de visible, Avengle, vigoureux et dans 1 fleur des ans. 11 pourrait vivre encor, d'un sort enfin prospere; Troi lustres 8. se jour, a pIu, s'ajoutera.ient ; Et sur le va te front d ce vénér' ere QneIqnes filets d'argan a pein se ·erraient. 1A"~ DUSSON. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ¡j92 , LA REDENCION 1 Cual fruto carcomido Por el gusano hambriento, Marchita. su frescura, Sin jugo y sin olor; Leproso del espíritu. Que ahoga. su Jamentá, Sin ma.no que le cure, Sin fe en el corazón; Tal vi6so nuestra especie Enferma y enerva.da y en piélagos de sangre Busca.ba la. salud; El Dios de la. conquista, Que al débil anonada., Veló con sus pendones El firmamento ~ul; Las águilas de Roma., Cruzando por los mares, Dominan con sus &.1a.s Del mundo la. ancha. faz; Son dioses 108 deleites, LOR temp]of:l, lupa.nares, La. fuerza es el derecho, y el bien, la. utilida.d. Pla.cer de 108 sentido , Ha.la.gos del deseo, Festín de liviandades, De lujo y embriaguez; Espíritus en ruina. i Oh Cristo:en quien yo reo t Fne el cuadro tenebroso QI -¡st t,ú al na r. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. E. 'V. ~ER ÁNDEZ.-C.A In. l ENCl '" )i 593 Te dieron las montañas us vírgenes olores, Su arrullo,!los torrent 8, Las aves, su canción ... El hombro, imagen tuya, y amor de tus amores, Ni qui o ver tu cuna. Ni quiso oír tu voz: Cerró de sns hogares La puerta. á tu gemido, N o viendo en niño pobre Generación de Dios; y túnica d e loco Te dio como vestido, De burlas y de espinas Ta.mbién te coronó. Tú das la vida. al mundo y el mundo te da muerte, Tú bajas de los cielos A renovar la luz; Mas los ojos del alma. El hombre cierra al verte y busca las tinieblas, Temiendo á la. virtud ..• Camino del Cah .. &rio, Jadeante y macilento y entre iracunda plebe Te arra.stran 1 oh J estía f El pueblo, de tu sangre Divina. está. sediento, La túnica te l'ompen, Te encla.va.n á la cruz ••• Hay lúgubre tristeza, Solemne espectativa. En cuanto el cielo abarca, En cuanto alumbra. el 801, IJuzbel siente una 8ombr& Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Sobre su frente altiva. Se agita en los sepulcros Incógnito rumor; La tielTa estremecida. ~Iue tra su seno abierto y la. asombrada muerte Alza la fría sien ....• Allá sobre un peñasco Jesús descuella. muerto ... y en noche de vergüenza Se oculta tod s 'r • .. . ...... ... . . . ... .. . .. . . . . 11 1 Oh vate i s ira dos. Tañed uestros laúdes, Ca.ntad lo inmorta.les Poemas de la Cruz: La humanidad es libre, Renacen las virtudes, Los hombres son hermanos: 1 Resucit ' Jesús t a. ci encia se a vi gora., El arte re plandece, Dilata al ensamiento La salvadora fe ; y en el herido seno Del corazón florece La. vívida esperanza, N uestro seguro bien. Los ídolos pa ' nicos Ante Cri to que ube Del fon o del sep lcl' COIl triunfadora faz, Se des van cen rotos, Como la densa nube Q e se desha e ~ 1 lanlpo I l'L U l. ·lal'id. 1. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. E. T . FERNÁ DEZ.-LA H~DEN'Cl'Ó~ .59~ f I Oh·pueblo, tristo esc1avo De omnímodos señores, Juguete de los grandes y escala i sn:am bici6n ; J" esús rompió Lu yu:g(), Olvida tus rencores, Respeta al mandatario, Ama la Religió ! Antes que tus derechos, Aprende tus deberes, Tú no eres . oberano, Es soberano Dios; Has del trabajo diurno Fuente de tus placeres, y busca en 1 santuario L paz del corazón; No escuches al tribuno Que bu ca muchedumbre y enciende sus instintos y ad nla su ca.ndor i Antes que á BUS palabras Atiende á sus co tum brea, Es dulce su lenguaje y amarg& su intención. En págjnas sencillas Te ofrece el Cristianismo La uz del pensamiento, Del corazón el pa.n ; Ed uca. tu potencias y véncete á ti mismo y oprime tus pasiones: .Esa. es la li hertad. Bogo á. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 59 n'.n TA r,l 'I'. ' J l,l:\ CRONICA PARISIENSE Nueva pla.nta. -Arseue H0l1ssaye.-1Iujer polftica..-Mujer caritativa. ~na. in eresante expo. icí'n a. rae nUl eroso y 'electo pú­blico á la, 1'u_ rrenelle. rrr': ta. d 1 concur. o abierto por la so­ciedad d JI( r icul lIra., le ua.I 'C ha pr t c. to le tronar á las orquídea qn ha ta aquí 11 vaban 1 tándola. con lo e.' pl 'ndido' y aria no. torna. ola.do , gnn otros· ns itllyen n c njun o ene.; utador, haciendo de la. flor cn i aball lonc d hast a.l re la no dad b·í unfanto del día. La. e ·hibicit)1l de . taño dmnue tra un notabl adelanto en el rte de la. j: r in ería, aun 011 e. fe paí no tan maravillosas flores cu1 i ya . días una m . lla d CUl"l a, y q u aye, 11a recibido estos o, on ir 'uns .. n ia ba tanta p. 1abl e • la11 'baae t,ranquila.- uand rio 11 g~ l' basta '1 á una sidida por una hermo a. rme l' lno da flor s, le de­In . n to 1 aq 1 l epartamento le por un .. nirnidad pI' . id D honorario eniendo la. honl~ fr cerIo 1 diplonl y la 1 dalla di illtiva de 1& honor, quiso de la bio de victoria. o, aun­ando entre tia iamen te una. premio p1 un cor zón re er] n aqu lli nlcdall , Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. i tinti"t'o luá. (¡n uiugún otro glorioso, puesto tl'lC dcmuestr& el haber cxpu to su ·i n. por salvar la de un C1Dtljan1.e. Por su parte, el in, igne e rifor,:í lnicll toda a uella in­genua na.rración ha1 1: 'onmoyido hondmu nte, ha prom .tido regal r á .. lIle. lJu pr(. n trajo de boda, ,e y, 1 ro igui6 el poeta, en recuenlo d 1 día ~n q HO P l' pl'i lnera vez o : vi, añadiré otro ,~estiao color posa de un opulcnt banqnero de Londres, y candidata qu.A ne tí. la prc, ideucia de 10' E, tados Unidos. Las doctrinas que en ll. iUllulIlerables onferellcias ha sostenido son en 'iosísima , .. 11 vnl'ia o 'asiones le han propor­cionado el corrcctiyo do Ul)O.' cualltos días de úrcel; pero la infatigabl oradora, 'uyo i,alent o y elocuclleia. 01) incliSClltibles, prosigue Yalielltellcn e 1.1 ol)1'¡ de, t lyación, l'l'oponi 'nd e re· generar el mun o por tl.lH,' ley',' lllteya , ' gÚll las uales las per onas el J01111 c.' tl e cuerpo ó d· e.' r íl'i tu, tn. 1 es omo los bo­rrac] los, eriminale., ·te., n 'el'í~ Tl clc.1mitido. :í contraer lo sa­grados ,'¡ncuIos del lnatl'irnonio, 111CjOl'c. lltlO de an yi8ible modo la esp 'cie hunla.nae en us parte fí 'jea . .r 11101'aJ. erelnos cómo encuentran e. a,~ teor.Ía!'1 l la 1ni tl'es:'i lo condenado por ella á eterno e 1i bato. Hae algunos día par' ía ('n yarlO periódicos de esta ca.­} Jital Ull ununcio n 1 qu ' la ,'cíiol'i a Lnl",u, de Be, ulieu solici­taba de los conl 'reían e,' la 'mpl "a.'en n repartir pro pcctos grati en la vía pública, alcan~alldo por 110 un 1110 lesto jornal. IJa hi tOl'i de esta s 'ñoritn e,' por denI:Ís illt :>1'e 'ante y el aban· d n en que, por 1 art el • u patria, s la iene, con, t·ituiría. ciorta.mente un aldón para !l paLo 11lcno: civiliz3.uo, En 1 70 la ~eñorit u. de Beau licll, 1 rt eneeien te á Doble y nconlodada f~tnlÍlla. contaba 11nos ir juta años dc edad, y su en­tnsiaRDl patri6tieo la hi7.o a,lj ·talse COlllO eantill 1 a en la legión llauladu. de ] ;: \mi os de ] raneia, n, i ' ieudo á och batallas 11 la, q ne, y l'aadera J1 l'mUlla de Ja 'uridad, reeogía y cura­ba á 10. ]1 m'idos entre un dihl\'io de b¡ la'. ¡" u abl1egnción, su. 11 an r. distillgnida todo u porte, huhi 1'011 de llalnar In aten­ción de los 'olda o lrn-nces '. quienes 11) pudiendo cOlllprendcr Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ;:!"., . HA'IS'L 1.1 '1l-:l'.A.1HJi que una señorita do tan. el ada po ició:n ejerciese voluntaria­m. ente tan peligro os y heroicos oficios, se ob tinaron en v~r en ella UDa repngnante espía pru iana. Celebróse en el acto un con ejo de guerra, y la animosa jo­ven fue condenada á ser pa ada por la armas. Todo se preparó inmediatamente para 1 t rrible ejecución; atósela á un po te ; pero. al intentar vendar sus ojo ,rechazó dignamente tal humi­llación,. pidiendo como postrer favor se le concediese dar tila. misma la señal de fu ,go. Una circun tancia providencial salvó la. vida do aquella. desdichada: en el nIomento mi mo en que su :In DO se a,lzab para ordenar lo disparo&, un arrojado oficial de los móviles, que había reconocido á la ñorita, se interpuso entre aquellos fanáticos:. respondiendo con su pecho del inmaculado honor de la. dama. A.lgunos días má tard ' ta recibía. explosiones de entlJl­siasmo, la cruz de-bronce d . tina.da á. pl'emiar los socorros dis'­pensados á los 11 rr o de mar y tierra. Intrépida y a.lentada por ]88 desdicha de su nació'n., la ñorita de Beaulieu se halló en casi todas las acciones de 1 angrienta guerra franco-prusiana, y en uno de aquellos mCln rabIe. combates, el de- Champigny, una bala enemiga vino á arrebatarle su brazo derecho. Ta.n ho­rrible desgrncia. nE> a tió un mom nto el valor de la. heroína: apenas repuesta de . us herid s vol vi'. la á ver en los ca.mpos de batalla. curando á. los oIdnd s, tr, . porta.ndo á los moribun­dos eon el único brazo qUe el acaso quiso conservarle. Su cari­Ga. d sin igual suplía la. el ficiencia 'e' s fuerz físicas, y en má de una. oca ión e In. admirab colocando los Tendajes con BU única mano y atándolo. ayudada por sus dientes. A la terminación de la guerra volvióse enferma, inutiliza­da, transida de d010r, á su hogar. ~ u prolonga.da au encia, el total abandono de su hacienda, hallaron á ' ta tan mermada, que la. valerosa. señorita, contando apenas con lo necesario para la. J.u.b . tenci9l, y luchando en años posteriore3 con toda. clase­de desgracias, v' se hoy reducida á. implorar la caridad pública en un paí por el que tan heroicame te sacrificara. su vida y so ortuna. ¿No e de esper~ r que la noble nación francesa. recom­pensará, aunque ü rd'alnellt 1 tánta ahuegación, tan sllblime nd \l('t~ ? Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. NOTAS EDITORIALE Hemo 'bido ue el eñ r ... fini tl' 10 Instrucción Pú­blica. ha re n lt iD ertar Ínte ro, en periódico oficial del ramo, el trabajo que y oimo pn blicando de nuestro muy distin­guido colaborador . i rIle to R tr po Ti ·ado. T m ién helno vi. to, con placer. le in erción que va.rios periódicos e tral j ro han hecho de articulos y composiciones u blica a por a. 1 B TI lA. En un bello tomito d 77 página, impl'e o con mucho es­mero y bu n O'u. to por Ja muy acreditda a a editorial de 108 señore ethencourt hij ,1 ur z o, hemos tenido el placer de recibir llvi da por lo E itore ,una colección de Soneto., traducido y refundido por ignel A. Caro. La p e í int, l'preta l a con levantado e ro poético. con elegancia y orl'ección u " I r el T"' te bogotano, on treinta y tre ,d la. cua! " oí eompo iciono eltane en á hake peare, UD al P tI'arca, un. á IJulO'i an r, una al Ta o, otra á. Zap­pi, otra á O\'idio, una:í .Judovico, dos á Carducci, cinco á 8ully Prudhomme, una á Góng 1'3., una á Va1l1ero, dos á Vida, una á Longfell w, un á. J. l. el' din, o. á ' neca, una á Sa.n AO'u tín, un á. :tn la y 01'., UI á Prati, una á Faber, y, por último, do á R bolledo. Conviene. quizá, para. 111 jor inteliO" -ncia del lect-or, copiar algun lío a de 1 ayer cllci, tIue precede la. edición: oneto qu c. ( lllode ta. colección contiene, son tl'8. ccione de otro on to. En algunos casos e han va­ciado en e ta tUl'que a nI' tricn. p n .mi uta xpr. os antes, bien en otra forma po ica, ó n pro. o d j ará cierta­mente de c u al' 'oq re a. ver un soneto traducido de an Agus-Ín . . ro. pl'OV nir 1 e UI \~ cióI' extr' ñ za, e ha creído conveniente e t.amp r el texto ( r i inal e 1 frente de lo sonetos: así el lE::c 01' verá por u propio ojo la fuentes, y si gusta, po­drá. hacer minuci . o co jo, aun cuall.do la traducción, especie de aclim tacíón difí il en ta forlna, y mucho más cuando en igualllúnlero de ver. o se r. 'lada el contenido de líneas nlás nutridas por r lllá. nnIpli. h" meJida <' las \~oces más c: da~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. que las corre. pondientes en, tel1u.na~ ó por n..nlba.' cau. aS (nle. j . • drinos f '.allccses), no llaya el re 'l1Itar fa.,'orecitla. ti. e ha int l'pC lado tre,' l' fundi 'ion " sólo .OU10 curioso. muestra ... hl refunde no retoca. 1 origiu 1; nca de ~l una cop-ia ó itnitación libro bajo n re.'pollsabilidad. La refundi i6n es un luodo de trauucir d 'utro de Ulla lni. ·llla 1 ngua, y para. poet.a novele-', un e_ cclcllte ejel' i 'io de '" l'.'ificaclón." ]!, 'tamos cgUl'OS del ~~-ito qn a1cu,llzul';t I1 el público iln - trado e te nuevo interesante t'l,:tbajo 1i cl'al'i de la pluma el 1 señor Caro yen el número pró. itu insel'tareluo:s, lHl.l'n, ~oJaz de los lectorei:l, una le la.s excelente. ver 'iolles 1 1 libro á que nos referirJ.lOs . ••• El Doctor Alberto tesh'cpo R., nno de los jóvenes do In. nueva generación cielltíH~n. que ,' .. pres uta, con 1 ujo 'o' títu­los y aptitu es speci les e11 ,'u ll'ofe. ión, y qui n, a.1 propio tiClupO, no de. deña cultiv .. r h\. belln. literatu!' ,hu. tenido la. bondad de sumini. trarno.' un lluey é p ~lllli e á la, Ji"ta. de 'Viajeros ex ranjeros n olOln ia, dato
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

Revista Literaria: publicación mensual - N. 21

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

  • Exclusivo BibloRed
Imagen de apoyo de  Wild Pitch

Wild Pitch

Por: Eric. Fein | Fecha: 2020

In last year's state championship game, Ryan Rogan beaned Kyle Walker with a red-hot fastball. The pitch injured Kyle, forcing him to leave the game. His team lost, and Ryan got to celebrate the win while Kyle headed to the hospital. It took several months for Kyle's injury to heal, and he couldn't shake the suspicion that Ryan had intentionally threw at him. But Kyle has put all that out of his mind, because he's excited for a fresh start this year -- until he discovers that Ryan will be joining his team . . .
Fuente: Comics Plus Formatos de contenido: Otros
  • Temas:
  • Otros
  • Vida estudiantil
  • Deporte

Compartir este contenido

Wild Pitch

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Compartir este contenido

Vampires and Light

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Selecciona las Colecciones en las que vas a añadir el contenido

Para consultar los contenidos añadidos busca la opción Tus colecciones en el menú principal o en Mi perfil.

Mis colecciones

Cargando colecciones

¿Deseas limpiar los términos de la búsqueda avanzada?

Vas a limpiar los términos que has aplicado hasta el momento para poder rehacer tu búsqueda.

Selecciona las Colecciones en las que vas a añadir el contenido

Para consultar los contenidos añadidos busca la opción Tus colecciones en el menú principal o en Mi perfil.

Mis colecciones

Cargando colecciones