Por:
Adriana Miceli
|
Fecha:
05/09/1897
,
:JJ3isemanario ~oIíticot jLiterario ~ lRoticioso
AÑo l.-SERIE 1Il. } Bogot(t (REPÚBLI CA DE COLOMlllA), dOl11 ingo 5 de Septiembre de 1897. { N ÚMERO 54
DIHECTOH:
Ebuarbo "E spinosa lÓuzmán.
ADHI:-iISTRADOU :
~~l lla \:~l.l)" 10 a. m., y sale
los viernes á las 3 p. m.
ORIENTE (Urocué). - Llegan correos 8, 18 Y 28 de calla mes, y
salen el l O, 20 Y 30.
S¡:¡)ESTE (Melgar). Llega los jueves á Ins 4 p. m., y .. le los
viernes á las 2 p. m.
ATLÁNTlco. - L lega á Bogotá los días 5, J J, 23 Y 29 de cada mes,
y sale en los días Ig, 7, 13, 19 Y 25 de cada mes.
E! de Encomiendas llega el3 I 6 I? Y el 13. y sale el 6 y el 18.
NORTE.-Llega los j ueves de cada semana á las 10 a. m' J y sale
todos los viernes.
El de J<.ncom iendas llega el 9 6 10 Y el 28 Ó 29. y sale el 7 y 28.
NOROESTE.-Llega los vierne." á bs 9 3. m., y sale Jos sábados
á las 2 p. m.
~l de Encomiendas llega el I I!, y !;ale el 25 á las 6 a. m.
SUR.-Llega los lunes á b I 1'. m.. y sale los miércoles tí
las 2 p. m.
Los de EncomiendalO, son dos en el nles. T.It"g;.
elllplú;titos \" t'X¡I:·opint iolles.
]3og;ot:í, L'n rqu(' d(· . ·ll llta llder. aepra oriental,
ntÍllleros 41r, y 41h ... \partlldo Illítllcro 112.
Teléfono nlÍllH'l"O :;:,(). i ·¡t'(' c<:i61l tel('oTáfica :
LeoilqiÍm(',~. '] O- ;Í
C~ARTELES
En esta ill1ll1·l'Il:n '(' hatelJ de todas <:Jases \'
dil1len~iones. en p:lI'l"1 d(' ,·()!or('s ó ,Í yarias til~·taso
Precios I1lrídic tli.
EDI C T O
E 1 Juez 1.0 deL Circuito de Z ipaguirá.
Por el prese llt e cita. ll ama y emplaza t¡ todos los qu e
"e cresn con derecbo t¡ la s uoesión intestada de Ceferino
Castañeda, la oual se ha deo larado abier ta en este J ll zgado,
pOI" 6Uto de fecha tres del presente JUes de Agosto,
para qu e en el término de treinta días , contados desde
hoy, se presenten tÍ hacerlo vIIler. Si así lo h icieren. He les
" irá y administnmí la justioia que les as ista, y de no, les
parará en los per j uioios á q ue haya IlIgar según las leyes.
Para los efectus ex presados se fi j a el p resente edicto
p" un lllgar púb lico de la Secretaría, en Zipaq.uirú,.'¡ t ref
·· ne Agosto de mi l "cboci ~ntos noventa y SIete, a las 9
¡J •. 1;\ lllaña n a.
El Ju ez. JosÉ AGUS1·íN JlIAR·rÍNRZ.
1·:1 Secretnr io. ' saae GOll zlÍlez B .
1<.:8 "op i n .-l~ l Secretario,
Isaac González B.
SI·CES tÓ:;
La del señor Ceferillo U.stañed •• veci no que file de
Sall Cuyetano, ha sido dec¡'n .d. abierta en el Juzgado 1.°
de ~"te· Circuito. por anto de feoha tres de Agosto último.
1'on"o este hech" en conocimiento del público, como apoderado
que 80Y del seño l· Mig uel Cl\stañeda.
Zi "R'l uir á, primoro de Septiembre de mil ochooientos
novellta y siete.
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Fe : I I
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Cf)
cG
7TI..bre 5 de .189'7.
nistro, ej e rció el Poder Ej ec utivo durante cinco
días digamos, y ofreció cambiar el papel-moneda
en 48 horas, y el pueblo colombiano desea
ver real izado ese milagro, ¿no podrá acaso
hacer su voluntad y se privará á la N ación del
concurso de un hombre que saca oro de las
rocas como Moisés sacaba agua? Históricos
injustos! '
1 ndependencia del Poder Judicial es térmi
no muy lato para que no se preste á engaños,
y ya sabemos (y los radicales también) que los
históricos no son muy incl inados á cumplir lo
que ofrecen. Debió explicarse cómo van á ser
nombrados desde el Procurador general hasta
los Jueces de aldea.
La base marcada con el número v, dice
así
" Declaración de que la Constitución pr ima
en todo caso sobre la ley, correspondiendo
á los Jueces y Magistrados decidir los casos
particula res de conflicto, cuando las personas
ocurran á ellos por creer lesionados sus derechos;
sin que la sentencia ó decisión judicial
signifique abrogación de la ley."
Este punto tan delicado y tan debatido de
derecho público, menos que ningún otro debió
ser puesto á la firma de los ignorantes.
La primacía de la Constitución sobre la
ley existe. y el Legislador está e¡1 la obligación
moral de hacer que la segunda esté subordinada
y conforme en todo caso ,¡ la primer:l.. 1\1as
como _ pueden ocurrir casos de aparente' cenflicto,
el Legislador quiso, en guarda de la autoridad
suprema del Congreso y de la soberania
de la N ación que ese Congreso representa,
que en receso de las Cámaras nadie pudiera
faltar al cumplimiento de la ley ni eludirlo so
pretexto de in constitucionalidad. El Congreso
es el único 'lue puede derogar una ley, y es él
quien tienc mils garantía de acierto acerca de
la interpretación de las disposiciones constitucionales.
Poner en mano de los funcio narios
públicos el derecho de decidir de la validez ó
nulidad de una ley, es elevarlos á la categoría
de Legisladores, humillar la autoridad del Parlamento
y anarquizar completamente la legislación,
dejando el cumplimiento de las leyes sometido
á criterio caprichoso y mudable. Sobrarían
las leyes, y fuera mejor que los Jueces
y Magistrados desarrollaran directamente los
principios abstractos y generales de la Constitución
para aplicarlos conforme á su criterio á
los casos particulares y concretos que se presenten
á su mesa.
Tal es la amenaza social que entraña esa
manera de proceder, que un ciudadano, que
hoyes liberal moderado y qne mal'íana con seguridad
será gólgota ó anarquista, cuando fue
Ministro del Tesoro y se presentó un caso de
aparente conflicto entre una ley y la Constitución
votó en el Consejo de Ministros por la
ante el cual ha l\ flaqueaclo por ta nto tiempo las fuerzas de
muchos hombres de talento. Dígase, en hora buena, "la
ignorancia es a trevida," y tracen las plumas cartageneras
mejores obras que las mías ; "que yo entretanto diré para
mi: ya comienzan á realizarse mis intcntos."
La primera escena de El Médico Pedante, comedia del
mismo Royo, comienza de esta manera:
DON :\[AU RO:
~ \ h ! es cosa dt: rc v e n t~l r
\' hasla de murdcr Lt lÍe n a ! ....
¿\'cr:-;c un homhre de mi rango,
Ln hachil1<:r (le mis prendas.
¡ lecho el juguete de Venus? __ _
Ay! amor .. _. maldito seas! ___ _
lJesdc el ventrículo il.quierdo
.\ la Huriculeral I ndaleciO Saavedra,. el valiente
\'ete rano que ll eva en honrosas r.lcatnces sn hoJU de servIcios,
modelo de patriotas y de h Jl11bres dc provecho, que
no ha economizado ni su sangre ni su dinero en bl cn de la
causa conse rvadora, no tiene utulos ni rep rescntación en el
partido ?
¿ Conque los sdiores . Cárdenas Piñ eros y,Fern ández,
que han desempeñad" delicarlíSllTIOs puestos publicas, que
han prestado á la caUSa co nse rv adora se rvICIos que todos
conocen y peleado por ella como buenos, no t ienen títulos
ni representación en el partido? .
Para terminar sólo añadiremos que b s mismas razones
que se emplearon para mover el ánimo de algunas personas
notables de Focatati vá se seguirán empleando en toda
la República. Ellas tendrán eco, mediante Dios, dondequiera
que la \'erclad y la justicia hagan prosélitos.
A. P.
Q;;t:.óUXCét
.. lLGO DE TEATROS
E l jueves dio en el Colón la Compañía Chaves la
primorosa zarzuela Jltgar con fllego, y su ejecución
dejó qué desear, aun cuando trabajaron en ella los mejores
actores de la tropa, interpretando papeles acordes
con sus voces y cualidades. Lo que es en el canto,
puede decirse que todos, salvo el señor Sotomayor,
que estaba acatarrado, y los coros, llenaron bien su
deber ; pero no puede decirse otro tanto en las recitaciones,
pues claro se vio que ninguno se sabía bien su
parte y que era obligada la fatigosa ayuda del consueta.
Dicho tenemos que con obse rvaciones como
ésta no queremos censurar en lo mínimo la Compañía
Chaves, pues es imposible pretender que haya quien
pueda aprenderse correctamente su parte en una zarzuela,
para dar función nueva cada tres días; pero insistimos
en hacerlas, para inducir al público á que acepte
y aplauda repeticiones que le p ermitan oír piezas
mejor aprendidas, y esto ahora es más que nunc(\ necesario,
una v ez que ya va á actuar la ópcra y que
esta clase de obras imponen las repeticiones de modo
aún más exigente que la zarZllela.
P or lo demás, el p úblico apla udió con ent usiasmo
muchos t rozos de J ltgar confltcgo y 8un hizo rep etir
algún número de la simpática seño ra Chaves ; cree·
mas q ue de ig ua l modo aplaudiría e 5 de 1897,
Dieron el toque para la salida del segundo: El
Ratón, betrendo en negro, bien puesto, abanto por
falta de bravura. A la salida lo recortan los muchachos
con varios capotazos, y, cambiada la suerte, toman los
palos Madrileiío )' Aiiillo, colocando par y medio por
barba cada uno, y luégo lo volvieron al sitio de ordenanza.
Hubo aplausos.
Tocaron salida del tercero: El Regató1I, amarillo
playero, bravo como ninguno y de muchos pies. Pomares
lo espera indiferente, á la par que entusiasmado.
Lo preparan, le hace el cite, tirándole e! capote á especie
de guante; no esperó su adversario á ninguna otra
señal de des,:fio, y le arrancó encima; mas Pomares,
con destreza incomparable, le hizo un quiebro á brazos
cruzados, recogió luégo su capote y se fue á donde su
enemigo, volviendo á renacer la lucha, quedando vencida
la fiera, después de nueve verónicas de frente,
por detrás y un recorte, rematando en la misma cara
de su codicioso e nemigo. Ovación completa y bien
merecida. Cambiada lil suerte, adornaron Pipa y RaInOJlet,
con un par cada uno, volviendo á cambiar de
suerte para la hora suprema, 4allándose preparado
Pomares con su espada y muleta. Silencio sepulc ral siguió
para oír el brindis, el cual fue saludando la Presidencia
y los bogotanos. En medio de aplausos se dirige
á su contrario, que, preparándolo con tres pases naturales,
dos ayudado)' uno en redondo, enfilándose
por derecho, n~s ultó un pinchazo bueno; toma la querencia
El Regatóll, d efendiéndose en las tablas y acosándole
allí Pomares; arrancóle derecho, propinándole
en mete y saca contrario, por cuyo motivo vuelve á
arrancarse de nuevo, deshaciéndose de su valiente
enemigo con media contraria espléndida. Al ver la
concurrencia el arrojamiento de Pomares y las malas
condiciones de la fiera, e ntusiasmóse prodigando aplausos
á millares al simpático victorioso, y envíole los
míos, querido Troni. y los de mi pobre tío, quien si
mas se priva de puro placer. El tiro de bueyes se llevó
al vencido.
Ordenaron la salida del cuarto: El Valeroso, amarillo
de regulares condiciones. Los chicos cumplieron
bien su cometido, y nuestro estimado amarillo, por disposición
de la Presidencia, pasó a l corral de los inválidos.
Pitaron ill quinto, de Tilatá: negro, bien puesto, regular
de bravura. Trolli lo saluda con ocho verónicas
bien ceñidas, cambió la suerte y toma la silla, aunque
muy á disgusto de mi tío, pues él me llamaba la aten ción,
diciéndome que el toro no estaba en condiciones
para esa suerte. "Tío, déjelo, que cuando Troni lo hace
el sabrá porqué lo hace;" mas él me decía: "sobrino Gil ,
ese hombre se sienta al patíbulo." Resultó que le colocó
par y medio en silla con exposición del pellejo. Como
petrificados en un éxtasis celestial se veían los semblantes
de las damas, contemplando aquella escuadra
de valientes lidiadores; era un combate continuo, Ull
combate incansable. El uno dirigía, otro tiraba un capote,
el otro cogía la pica, el otro las armas, otro preparaba,
y va la suerte. Todo en conjunto era una belleza,
menos la que yo tenía á mi lado, que era mi pobre
tío, que estaba mirando ya bizco á Tro7ti; yen realida
-:1 tal vez tenía razón. Este g ran diestro cita, prepar;;.,
desafía, capea, recorta, recoge, ciñe, envuelve, gallea,
banderilla, juega, mata; todo científicamente, todo
á satisfacción del público.
Suena el clarín para 1;; salida del Remilgado. Aiiillo
y Mad1'l"lello les tocó castigar á ese infeliz, lo que hicieron
cual lo merecía, distinguiéndose con habilidad.
Fue luégo capeado con alegría, despidiéndolo Qastante
triste al corral de los infortunados. Surgieron últimos
y estrepi tosas a plausos.
Sobrino Gil, casi ú g rito entero me llamó la atención
mi tío: ¿ usted se "~Jerda cuando recortó Ramol/
el, quitándole la divisa á esa fieraza? Sí, tío, y 10 hizo
muy bien, muy bien.
Sobrino: ¿qué se haría aquel diestro tan audaz que
llaman Sa1ttico} No tan santico, tío, ése es Suarito.
GIL.
~c.c!XO.5 13 ~i.clxl1.5
.Juntas Electol"
Fuente:
Biblioteca Virtual Banco de la República
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Prensa