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NUMERO 65.
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· J;PjJ Jlt fP[IJ (/J[FJ.l(f}[lJJ.llJ-. [ cimiento compt·an a los que han rematado, pot· la
""'· regla de que las cosas anebatadas a los lejítimos
, , , dueños están viciadas hasta que vuelvan a ellos.))
AHQUTDlOCESIS DE SANTAFE DE BOGOTA-SECRETA.- •
l\ÍA DEL GOBIERNO ECLESIÁSTICO-NÚMERO 95_ • En consecucnc1a,aunque de los documentos ofi-
26 DE .AGOSTO DE 1864. Ciales aparece :
se~ior Cw·a de • • . • Que los Lejisladores de Rionegt·o, los de 18.64,
.., ~ , .. ··· los Sres. Tomas Mosquera, Andres Ceron, Ehseo
f.J s~no~ d~ctor Juan de \a C. V~•·gas ha duiJldO Payan, Serjio Camargo i demas funcionados del
a la Ytcana Jenem\ la notu que mserto: Goaiet·no jeneral i de los Estados han iniciado i
1 ce Se ha asegUJ·ado pot· la prensa que uno de los 1 continu do la espr·opiat'ion de los bienes de las
encargados de la Vicat·ía jeneral dió licencia en iglesias, comunidades i obras pías ;
1 · un caso especial para remataa· fincas de las desa- Que han sido rematado res de los bienes desa-
' moa·tizadas a la iglesia, comunidades u oba·as pfQs ; mortizados los señot·es:
i habiendo yo sido urio de los honrados por el Cenon Ortegn, Migurl Salga•·, Jesus María GuPrelado
con el espresado cargo de Viea.rio, me creo tiéa·rez, Justo Arosemena, Fernando Párraga, José
en el debet· de decla1·ar que no he concedido tal María Muüoz Lésmes, Apaa•icio Escovar, Nat·ciso
licencia, ni la podia concede¡·, siendo incontrovet·- Réyes, Evaristo Escovat· Grau, Juan B. Dardelin,
tibie que el acto de los remates de dichos bienes Francisco Soto Villamizaa·, Bernardo J unguito,
se opone a la lei natural, pues se compm con co- Beata·iz R. de Gómez, Rlfael Péa·ez, Flávio Pi11zon,
)lOCimiento de que el que pone los bienes en su- J lían Manuel Herrera, Juan de Dios Muñoz, Jgnario
basta- no es el dueño de ellos; así como hui la La torre, Eustacio LatoJTei Tomas Pardo .. Alejandro
misma oposicton en el acto de ejet·cer Ajencias de An·ubla, Fruto Castañeda, Andt·es i Antonio Toro,
manos muet·t3s, que tienen por objeto llevm· a cabo Leopoldo Billy, J. de D. Muñoz i A pal'icio Escovaa·,
las disposiciones sobre la espt·opiacion de dic~1os Pedm Pablo Calvo, José María Quintero, Pablo F.
bienes,- i así como la hai en el acto de denunc1aa·, Oramas, Camilo Carrizosa, Mat·iano Sánchez C,
contribuyendo con esto a la esprop~acion, en .todo Bemat·dú Espinosa, Hea·mójenes Saravia, Rafael
lo cua\ ni e\ Vicario, ni el lllmo. senor rzobaspo, Marra Barl'iga, Ramon Gómez, Ft·ancisco Antonio
ni la Santa Sede misma pueden dispensat·. Es Ul'ibe, Fa·an<.'isco Olaya, Concepcion Sánchez de
cierto queJa Silla Apostólica, en virtud de las su- Foret·o, José Camacho Roldan, Nicolas Pereira
pt·emas facultades de que está investida respecto a Gamba, Cundido Latorre, Estanislao- F ,jardo,
lo pe 1·teneciente a la lglesia, ha condonado a al- Miguel GutiéaTez Nieto i Nemecio ~olmeuares,
gunos Gobiemos los bienes que se han usurpado, Agustina Znbaleta, Meda a-do Rívas,Januario Salgar,
cuando, despues de dictat· disposiciones análogas Ignacio Olaya, Niéves Moreno, Fnmcisco Bt·iceño,
a las espedidas en este país, las circunstancias han Isaías Abadla,JoséRodrigoBorda,CruzBalltsteros,
hecho difícil i poco ménos que imposible volvet· Domitila L. de Gonzillez, Dolores G. de Pérez, Juan
las cosas al estado antel'ior, como se dispensa en de Dios Mlliloz, Lucio Davoren, Dolores Camacho,
artículo de muerte a la P!!rsona del deu.doa· que no Fa·ancisco Córdo\'a, Ramon Pedreros, Leon Echetiene
posibilidad de restituir; pero daspensas de verria, Het·mójenes Duran, Luis Haro, Cruz Sán·
esta clase, nunca inhiben a los pm·ticulares que chez, Bernardo Herrera, Miguel Ibáf.ez, Loreto
han tomado parte en las usurpaciones, del deber González, José María Gómez Castl'O, Alejandro
de restituir a sus· Jejítimos dueños; debet· que sub- Arango B, .Julían Herrera, Isidro Vürgas, Fran~
siste siempre que haya posibilidad de hace•· la res- cisco Soto .Villa miza¡·, Eusebio Convers, Riomalo i
titucion o hasta donde sea posible, i deber que, Compañía, M. Leonidas Scm·petta> Antonio Mada
como llevo dicho, nadie puede dispensar, poa• se1· Maldonado, Manuel Sampea·, Fernando Ponce,
de justicia i dea·echo natural. Eliodot·o Jara millo, Ricardo Bívas, Eustot·jio Sal-
«No podia,pues,el Vicario ~onceder tal dispensa, gat·, Hijinio Cualla, Tomas Cuenca, Na1·ciso Réyes,
i tanto ménos cuanto que está vijente lo resuelto María Ignacia Fernández de Amador, Rudecindo
poa· el Illmo. seilo1· Arzobispo en el particulat·: Monroi, Felipe Lozano, Francisco Soto V, por
«Todos los que hayan tomado paa·te directa o in- Uribe, Hea·manos i Co~pañía, Ascencion Vélez, '
directamente en la usur~acion de los bienes de la Miguel Berna!, Liboria M. de lbáñez, Ceferino
Iglesia, han incurrido en escomunion 1·eservada, Pinillos, Rafael Rívas, Ignacio O laya pai'U L. Lu-í
no pueden sea· absueltos ui aun en artículo de verde, Manuel Ruiz, Jenaro Santamarfn, Clotilde
muerte, si no dñn satisfaccion i restituyen, en Jo I .... iooms, R. Decena i Uribe Hermanos 1 Compaposible,
el mal causado.» ñía, Ramon Vál'gns, Adstides Rójas; Felisa P. de
«Ni qued Inocentes G,ómez, Benito Gaitan,
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
130 CATOLI~CO ..
Miguel Meto, Lnciano Laverde, Natnlía, Concepcion,.
Felisa i Antonia Montet·o, Luisa P. de Solano
Estanislno Vt>•·gara, Cleofe Escovar Moreno,
En'cai'Dacion Vá•·gas, Juan N. Mejía, Plácida Sánches,
Mlguel Abadía, José Gooding, Alejandro
Vezga, At·nulfo Guarin, Fuljencio Roa, DoloJ·es
E. de Murray, Rudecindo Cáceres, Pablo Federico
O·t·ámas, Domingo Peña, Isidora Gómez, A~1-
tonio María FOI'ero~ Heliodoro Ruiz, LucrecJO
Salcedo Emiliano Piedrahita, Mateo Contréras i
Severo Camacho, Faustino lbáñez, Manuel Suárez
Fortoul, Jenaro Baldenama, Andres Tor~, Ant~~
io Várgas Vega, Alejandro Vezga, Antomo Mana
FoJ·et·o,Beatl'iz Rivandeneira G. ; Bernat·do Het·t·era,
Camacho Roldan i Compañía, Dolor s Estrada
de M.,Domitila L. de Gonzálcz, Dolores J. de ~urray,
Estan islao Fajardo, Heliodoro Jaramiiio,
Eustorjio Salgat·, Francisco Vega, Felipe Lozano,
Federico Calvo, Francisco Olaya, Gavino GutiéJTez,
Silverio Mendoza, Luis Sánchez, Meliton
Escovat·, Ramon Mercado, Camilo González, Cát·los
Castillo, Gabriel Hernández, Timotea Cat•vajal,
Jesus Maria Gutiérrez, fsidro Plata, Ignacio l''oret
·o, Ignacio Latorre, Isidoro Gómez, Juan Bautista
Dardelin, .Jo é Joaquín Quintet·o, Jenat·o
Esguet·t·a, Julian Herrera, José Rodrigo Bo~da,
Januario Salgar en calidad de traspaso a la seuot·a
Encarnacion Vá•·gas, Justo Bl'iceño, Luis Raro,
Lucio Davo1·en, Manuel F01·ero, Narciso Cadena,
Plácida Sánchez, Rafael Pérez, Ramon Pizano,
Rudecindo Mont'I'oi, Ramon Vúrgas, Tomas Ut·i·
be Tomas Gómez, Tomns Pat·do, Wenceslao !bañe~,
Francisco Lámus, José de Réyes Rubio,
Santiago Izquierdo, Pablo Diago, Francisco Hut·ta
, Gabl'iela Sertllclw, Felisa i Zoila Velazc(},
Juan Sarria, l\1ajencio Quintero Jácome, Timotea
Carvajal de Oban<.lo, Peregl'ino Umaña, Dám~so
Gavil'ia, Jervacio Saunie1·, Manuel Leon de Sanchez,
Miguel ~oddguez S., Ignacio Roddguez
Moreno Rafael Uribe, Ignacio Cadena, Alejandt·o
Gómez 'Sántos, G.abriel Vá•·gas,. Jpaquin Marfa
Soto, Het·mójenes Waldiri, Juliana Galin?o, Rafael
López, Luis Bazzani, Emilia Otálora de Me.·caclo,
Heraclio Osuna, Rufina 01·tega de Soto,
Celsa GutiélTez de Convet·s, F1·ancisco J. Quesada,
Mio-uel Camacho Roldan, Agustín Nuñez, Meliton
Es~ovar, José Mada García, Cristina Álvarez
Caicedo, Faustino Rui1. TUI'co, _Eujenio Gaviria,
Antonio M. Echevérl'fa, Cleofe "Escovar Moreno,
Celedonio l\loráles, Acacio Cuévas, José Gavaló, Manuel
Gómez, Julian Aguirre, Jul!na Leal, Francisco
Caro, Antonio Noguera Afl'isano, Pedro
Salcedo, Rafael Salcedo, Manuel Conde, Domingo
Ocampo, Pedro José Toro, Leopoldo Delgado,
Gonzalo Tavera para el señor Joaquín Estt·ada,
Laurean Sanmartin, C. &ánchez de Forero.
Nota:=EI Ajente jenernl de manos muertas espresa
que la lista de rematadores es todavía mas
numerosa de lo que aparece en este cuadt·o ; pues
hai muchos que han quel'i~o guardar el incógnito
hasta en las escrituras de venta.
Que han sido encargados de las ajencias de
«manos muertas>) los Srs. Na1·ciso González, José
M.Cortez,Mariano Sánchez Caicedo,Asisclo Castro
Tomas Cuenca,Focion Soto, Anunci cion Vát•gas,
Salvador Camacho Roldan, Senen Benedeti, Joaquin
Maldonado,Dr. José Joaquín Várgas V, Paulino
Vega, Pt·oto García, Hipólito Machado, Mat·celino
Montaña, Lúcas Larrota, Nicolas Diaz,
Emiliano Escovar, Alejand1·o Gómez Sáutos, Anto-nio
Várgas Vega, EstanfsJno Vergara, Anto1~fo
Maldouado,Rmleciodo Cácet·es, Isidro Plata,lsaws
Abadía Joaquin Soto, Jgna·cio Forero Segura,
Cárlos Manrique, Roclolfo Muñoz, Aparicio CoiTedo•
· 'Venceslao Restrepo, Antonio Contrrras, ManueÍ
Mal'ia Coutret·as, Anselmo Leon, Pantnl~on
1
.
Gaitan, Rafael Muñoz, .losé Matiz, Ezt:~¡uiel DH,z, 1..
Valentin Villat·, Manuet Forero, Valenano Convers
Guillermo Pulido, Vicente Nogurt·a Maza,
Magdaleno Cbavarro, Nicol1'mo Pereit·a . Gamba, Eustaqmo MantiJI~,
Francisco Osma, Solon Lozano, Hafael Hoyos JIménez,
Zoilo M.. Escovar, Ferret• Pinzon, ~artin
Gómez José M. Dm·an Gómez, Rafael Santos,
Rafael 'ortiz, José M. Ortiz, Antonio CJavijo Duran
Ramon 'Vilches, Juan de Dios Ordus, Abdon
Gutlénez Ramon Sel'l'a no, Emeterio Ton·ado,
Nepomuc~no Cala, Zoi.lo Vilfar, .t\niceto Me~i?a,
Márcos Forero, Francisco B. Qmntero, Sctpwn
Duarte,Buenaventura La Rota, Hipóllto Machado,
Ánjel M. Villamil, Juan de Dios Garcí~! José M.
Valle Moya, Fidel Escovar, Hermen<'Jildo Car·
vallo, Bt·aulio Machado, Fernando Zca, J. de los
Sántos Izasa, Reyes Hoyos, J, Zo~o M: Escovat·,
Lorenzo Izaza.Pantalcon Escovar,F •·anCisco Montero
Janacio ürtiz, Martiniano Arenas, Fernando
N. N' iebt o, Pedro Villamizar Pen~ aran d a, F• ranci.s co
Gat·cía Mi:ttis (Panamá), Joaquin Mont~ro, Ma!luel
'Bot·bua Constantino Arosernena,Damtan Agmlar,
José R.'Mudana, José del Cármen Macías, :Flo- .
rencio Arosemena, Manuel L. Barzallo,José Mai'Ía
Aispuro, Lorenzo Legundo, Manuel Hijinio ~evallos
José 1\Jaría Herrera, Luis Alarcon, Miguel
Piñ~ela José Lazo de la Vega, Lino Nieto, Manuel
Fe;nández, Celedonio lsaza, Manuel Braulio
Henera Isaac Femández Feo, Eujenio Huertas,
Ceferin~ de Arce, José del Cát·men Peña, Manuel
Pinilla, Estévan Luque, Belisario Ramírez, Em~lio
Caballero Ut·riola, Juan Bautista Amador, Hllario
C01·rea Simon de Leon, Evaristo Henera,
Fe•·nando C~sio Nicanot· Montemayot·, Ll.tis de
Fáhrega, José M. Castm, Francisco Sunjul', José
Tomas Rosario, Eulojio D: Ca•,·anza, Manuel Ma-l
ría Arosemena, José Manuel Sáncbez, Daniel Chá-
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
EL CATOLICO.
nis, Antonio Madl'iñao,Nardso Mad•·iñan, Manuel
Anselmo Alvaa·ado, J. M. Cht\vcz, Nicolas Al varado,
1\laricmo Cadanedo Medina, José Manuel Castrellon,
Guillea·mo Pe•·eira,Ezequiel Hurtado,(Cauca)
Eladio Ferrea·, Nicolas H01·masa, Cárlos Bueno,
Anselmo Vicente Delgado, Joaquín González
1 Montoya, Vicente Micolta, Juan Gómez Múñoz,
1
Joaquin Pat·do Concha, Ramon Rosales, Lope
Restrepo, Rnfael Pérez, Manuel Antonio Vet·nnza,
1
, Alejandro Carvajal, Pedro José Nátes, Ánjel Rueda,
(del Magdalena) Francisco Montero, Joaquin
S. MuniYe, Fl'lmcisco Gaspat· Gonzá)ez, EmeteJ'io
Alrnendt·ales, José Sántos Fajardo, Solon Lozano,
Eliseo Rodríguez, Benito Moreno, Rafael Pimien·
ta, Rafael Iba•·ra, .J. J. López Jiron, Pablo E. de
]raza, .Juan P. Jnen, .rosé María Herre1·a, J. M.
Ayala, Santiago Cajat·, Narciso Posada,.José Isaza,
José M. Urrutia Aflino, Pedi'O Jilabea·, Manuel Velarde,
'G. Rtimos,José M. Sánchez,Juan C. Cananza,
Ventum Gallegos, Hermójenes Gaitan, Nicolas
Machado, Eval'isto Azuero, Eustoquio Mantilla,
Francisco Osma,Elías Corredor,Gregorio Estévan;
Que han sido denunciantes los señores Tomas
Cuenra, Valentin Fen·o, Paz Pl'iedrn!:ita, Amlstasio
Espinel, José de la O Vélez~ a nombre de sn
hermano Salvad01·, Misael Gaitan, Secretario de
Hacienda del Tesot·o en 1862, Urbano Pradilla,
como apoderado de Montoya, Saenz i Compañía,
Mal'iano Fernández, .José Prieto Solano, Pedro
Mmillo, Eulojio Forero, J. Agustin Ut·icoerhcw,
Ramon Galviz, doctot· Cayetano García de Fontibon,
Agustin Forero, Zenon Otálara, Wenceslao
Nieto, Cál'los Bm·da,Juan Pubon, Justo Arosemena,
Manuel Antonio López, Simon Quevedo;
Que han sido miembros de la .Junta Suprema di·
rectiva, JuJtian Trujillo, Manuel Ancízat·, Nazario
Lorenzana,Jorje Vé.lt·gas,Miguel Samper, Agustin
Uricoechea, José M. R.Garrido,Hipólito Pérez,
Agustín Cat'l'izosa, Rafael Pérez, Juan de Dios
Múñoz,Manuel Suárez }~ortoul, Camilo Carrizosa,
Jacobo Sánchez,Tomas Ospina, Froilan Largacha,
José Mada Caro, Diego Suárcz, Leon Hinestrosa,
Bemardo Espinosa, Manuel J. Pardo, Rafael Núñez,
Januario Salgat•, Salvador Camacho Roldan,
Sábas M. Ut·icoechea, Felipe Pérez,•Ignacio Ortiz,
Tomas Cuenca, Flavio Pinzon, Antonio del Real,
Eujeuio Castilla, José M. Grau, Manuel de Jesus
Quijano;
Que han p1·esidido Jos remates Jos seño1·es Nazario
Lo•·enzana, Nicolas Pereit·a Gamba, Cádos
Gómez Valdez, ·Luis María Cuet·vo, Manuel Abello,
Januario Salga a·, JoséMada Alvarez, Anselmo
Restrepo, Alejandt·o Borda, Bernardino Medina,
Flavio Pinzori, Miguel Salgar, Joaquin Ujueta,
Juan Obregon,Fernando Pán·aga,Jacobo Sánchéz,
Francisco A. U1·ibe, Narciso Réyes, Tomas Ospina,
Andres Sandino, Francisco Vát·gas, Joaquín
Tamayo, Félix Ricaut·te, Máxima L01·enzana,
Teodoro Valenzuela, Bemardo Herrera, Hea·mójenes
Gamyito, Bonifacio Espinosa, Francisco Valenzuela,
Pablo Fedel'i~o Oramas,Martin Castellanos,
Miguel 6 utiénez Nieto, Ignacio Ortiz, Raímundo
Santamaría,Jenm·o Santamada,José Asuncion
Silva, Zacal'ias Azuero, 1\fanuel Sampe1·,
Fer-nando Conde, Antonio J. Toro, Camilo Ánjel,
Cárlós Tamayo, Manuel Pomho, Gabriel Agudelo,
~mncisco J. Montoya, Aníbal Galiqdo, Aparicio
Escovm·, Leon Hinestl'Osa, Alberto Anjel, Antonio
M. Gar-deazábal. Juan N. Méjia, Ernesto del Villar,
Antonio M. Forero, Rafael M. Berrío, C.enon
Ortega, Antonio M. SiiYa, Pedro Pablo Cabo,
Agustin Angal'ita, Bel'llardo Junguito, lsidoi'O Ricaurte,
Juan Nepomuceno Salamauca,HermÓJene&
Várgas, Antonio Vélez, Enrique Umaña Ricaurte,
Juan B•·igard, José Marfa Pardo, José Antot:lio
Méjia, Manuel J. Pardo, Mat·co de Urbina, Cárlos
Zapata,J uan Manuel HetTet·a, Manuel L. Ramírez,
Luis CnpeJia Toledo, Manuel A. Núñez, José
María Guet'l'ero;
Que se han presentado solicitando la t·edcncion
de los censos que reconocian a favoa· de la Iglesia,
en el Tesoro nacional los ~e110res Heliodoro Jaramillo,
' 7il·jinia B ecquet autol'izada pot· su esposo,
Manuel González Brieva, Josefa María de Gómez,
Rafael Cortez, Modesto Barbosa, R. Vicente Díaz,
Valeriano Várgas, Bias García, Ramon González
Gaitan) Manuel Jiménez, Bartolomé Martínez T,
Elias Moreno, Pm·eit·a Gamba, Camacbo Roldan i
Compaüía a nombre del señor Joaquín Réyes,
Pablo HeJTel'a, apoderado del señor Joaquín Solano
Duran, José A. Soto, Antonio Nieto Mendoza
a nombre de Juan José Moji ca, Manuel Antonio
Cordovez i su esposa, Rafael Mendoza, Hermójenes
Valdil'i, Percy Bt·andon, Simon Piñet·os,
Manuel Castro N, Antonio María Silva, Nié.ves
Núñez, Pedro C. Núñez, Enrique Hoyos, Ejidio
Carrillo, José Antonio Soto, Elias Olat·te, Emigdio
Palau, Mm·celino Díaz, Cárlos Abondano, Valen-·
tina Vega, Manuela Jiménez de FieaTo, Luisa Pereim
de Solano, José Mal'Ía Espinosa, Ma1·co A.
del Basto, Gregorio Estrada, Magdaleno García,
Focion Soto, Arístides Villamizm·, José M. Leon,
Jesus María Gutiérrez, Junn Crisóstomo Villareal,
Ana Coustain, Federico Rt>strepo, Cái'Jos Cuéllar,
Símon de Ph1éa·ez, Petrona Sánchez, Sofia Nieto,
Juan A. de la Espl'iella, Juan Capella, José María
Henera, Samuel Sayer, Antonio Ceron, Ramon
Cortez, Ricardo Becert·a, apodea·ado de Benito i
Domingo A. Niño, Emma Benedeti, Joaquin M os·
quet·a, José Santos Marin,Andrea Pl'ieto, Ezequiel
E:.;priella, José Pl'ieto S, José M. Isaza, Luciano
Rest.repo, José Manuel Restrepo, I.orenzo Tejada,
Juan B. i Antonio Núñez, Agustín Vélez, Juan N,
Lariza, Manuel Réyes representante de los señores
Tomas,Bernardino i Encamacion Salcedo, Jervaclo
Col menat·es, Manuel V á1·gas,J osé Antonio Agudelo,
Fa·ancisco i Juan Mesa, Beliza Salcedo, Juan A.
Mejfa, Clemente Salazar, Manuel At·aujo, José M.
Pacheco, Fedel'ico Ca pella. Pedro Cot·tez Holguin,
Diego Suárez, .José Araujo,Nicolas Escovm· Cerda,
Wenceslao Martínez, Nicolas Pereira Gamba, Nicolas
Espinosa, Manl)el Samper, Fa·ancisco Puerta
Gutiérrez, Antonio Benedeti, Natividad Montejo,
Patl'icio Mar.tínezt Juan Sordo, Juan A. Gutiénez,
Benito Na vano, Ricardo Becerra por Ramon Castro,
Francisco C. Ruiz, Ezequiel Rójas, Isidoro Lavm
·det J.osé Manuel Lasp1·illa, Miguel Gutiénez
Nieto, Agustín Vélez, Leon Hinestrosa, Antonio
Jia·on, Luis Otero, Vicente A. Gálvis,Dolores Chirinos,
Amelia Femáudez, Fermin Velazco, Saturnino
Arias, Cármen Leon de Araujo, Eloi Pot·to,
Miguel Aranjo, Bruno GutiétTez, José Leor1 Tl'istancho,
Gabdel Vargas, Pantaleon Gaitan.
Aunque todo esto consta, repito, de documentos
oficiales, no prueba que la Vicada haya dado fa·
cultad ; pot· el cont•·al'io, están vijentes las resoluciones
dictadas por Su Señoi'Ía Ilustrísima en 21
de junio de 1862, que entt·e ot1·as cosas dicen :
« Los que hubieren sido denunciantes de las fincas
de « manos muertas >) o hubieren cooperado de
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
EL CATOLICO.
C!}alquiera mane1·a a la víoi.itcion de los monasterios
de relijiosas, a pl'ision de los relijiosos i al robo
de Jos bienes de unas i otros, han incurrido en
escomuníon resel'Vada a Nos, escepto en artícula
de mmwte, i estos mismos están obligados a resarch
· todo el mal que han hecho i dar satisfaccion
! del' escándalo que causaron.» En 23 de febrero
de 63 : « I. .. os que hayan tenido parte de cualquier
modo en la salida de las relijiosas de sus monaste-rios,
han incunido en escomunion mayor· •·eservada
a mí, i los que estén in articula morti . .,, para
ser absueltos,deben prime•·o da•· una publica satisfaccion.
>) Eu 26 de marzo de 63 : «No deben
pasarse listas de inventarios porqu~ esto seria il· a
entregar las cosas de la Iglesia incua·riendo por el
mismo hecho en la escqmunion del Concilio. No
olvidemos que San Loa·enzo quiso mm·h· asado en
una panilla mas bien que entt·egaa· los tesoi'Os de
la Iglesia que estaban a su cuidado. Habrá tal vell:
mas tt·op.elías, podrán cometet·se mayo1·es atentados
; pero tambien se pa·obará una vez mas, t¡-t1e
los encat·gados de defender los de&·echos s: 5.a '"f'odas estas
variaciones se 'harán al tiempo de asentar en
los respectivos libros parroquiales, las partidas
de defuncion, casamiento i bautismo."
P~ra cumplir con aquellas disposiciones, -el
. ' B ·~ñor Cura, en virtud de lo oraenado por el
Prelado,se servirá proceder a formar el padron
observando las reglas prescrita-s en el decreto,
efleabezaBdo e1 libro con la relacion de las obli-
, gaciones a q-ue se constituyen los que en él se
inscriben, haciéndoselas saber a los que se
presenten para ser inscritos, respecto de los
cuales es preciso inquirir si están censurados,
i tomando el señor Cura, con la formacion del
padr~n, conocimiento de los mi~mbros de la
comunion católica a quienes como a. talesr se
fes deben dispensar las gracias de la Iglesia.
.El señor Cura se servirá .con anticipncion
av1sar a los feligreses i prooeder luego a la
fo~macion del padr611 -el que procurará esté termmado
el l. o de enero próximo, i continuando
des pues de formado, cofl. lo que el artículo citado
prescribe. Oportunamente el señor Cura
dará aviso a este Despacho de haber cumplido
con lo aquí comunicado.
Su atento servidor, MIGUEL ARx.As
Por resolucion de la Vicaria jeneral han sido
encargados los señores doctores Manuel Fér·
nandez S:J.av~dra, M. M. Saiz, Rafael Plata,
Manuel José Ana ya, Cárlos Calvo, Pío Molano,
Juan Rójas, R. P. Frai Antonio Acero, R. P.
Frai Yictorino Rocha; R. P. Frai Anacleto
G6mez, en su defecto el R. P. J. M. Rueda,R.
P. Frai F&lipe Bernal, iR. P. Frai Basilio Rójas
respectivamente de las iglesias de el Cármen,
la Concepcion, Santa Inés Santa Clara,
Santa J ertrudts, el Sagrario, las Aguas, Santo
Domingo, la Candelaria, San Francisco, San
Agustin, i San Diego, de esta ciudad i los señores
doctor Juan N. Cifuéntes i RR. PP.
Frai Joaquin Paez, Frai José de la Cruz Ruiz'
Frai Ricardo Cancino, Frai Pedro Pineda i
Frai N orverto Bal vuena, de los de la Concepcion,
el Cármen, San Francisco, Santo Domingo,
Santa Clara i la Candelaria en el Estado
de Boyaoá,. designacion que ha sido necesaria.
para la .conscrvacion Je los templos, que quedaron
espuestos a profanaciones por consecuencia
de la suprecion de las comunidades relij ÍO·
·sas,verificada de hecho por el Poder civil i que
la Iglesia no reconoce en derecho.
Algunos de los espresados Sacerdotes han
recibido autorizacion de la Vicaría jeneral, facultada
por el Ilustrisimo señor Arzobispo, e_p.
virtud de resolucion espedida en Roma el 19
de febrero último, para recibir sumas del Tesoro
pt1 bl ico, con la condi.cíon impreseindible,
de espresar al pié del recibo, que tal recepcion
se hace como de los réditos o usufrutos de la~
propiedades de la Iglesja i que no por esto se
entienden aceptadas las disposiciones sobre
desamortizacion ( UT OMNINO ABSTINEANT A
Q.UOUIS .ACTU, Q.Uf LEGIS A G.UBERNIO IN HIS
LATAE, EJUSQ.UE EXEDUTIONIS A.PPROBAT!ONEM
·INDUCAT ) .con la condicion referida i
autorizacion especial del Prelado que califica. la
nece,aidad puede hacerse la recepcion ( HAc
AUTEM C.AUTIONE SERVATA,NON ESSE ILLlCI'"
T.UM ).
Esta. resolucion no autoriza a los que no tengan
licencia especial del P~elado para recibir,
·DÍ inhibe de las censuras a los que han tenidp
parte en las espoliaciones, ni a los que con desprecio
de las ór.denes de los mismos. Prelados,
que han declarado suspensos absolutamente
del ejercicio del ministerio a los que las infrinjan,
han 'l'ecibido cantidades del Tesoro público,
los que por otra parte se han hecho indignes
de obtener hoi el permiso aun con las
condidones que se exijen, siendo de notar que
despues d~ la esplicita nota contestacion dada
a los padl'es R. Cáseres i M. González, i que
se reJistra. en el número 52 de" El Católico "
en que se les hacen sabe las penas, haciendo
abstraccion de ella i atrayendo sobre si la_s
censuras, violaron las prescripciones del Prelado
Jos referidos relijiosos i los padres Frai
Calasans Núñez, Juan N. Rámos, Cárlos Torrente,
Rafael Almanza, Rafael Méndez, Pedro
Conde, Virjilio Rodríguez, Francisco Méndez,
Alberto Rosales, Ignacio Castillo,]~rai F.
Benjumea., Juan B. Barragan, Bonifacio Pinzon,
Luis Fl6rez, Roman Castro, José María
Vásquez, J ulian Espinosa, doctor A. Delgadillo,
Narciso Velazco, Camilo Granádos, Plácido
Bonilla, Cornelio Pereira1 J. N. Rámos i
Luis Suárez, segun aparece de los últimos números
del " Dia1·io Oficial. "
ARIAs, SecretHio~
ArquidiócesisdeSantafédeBogotá.--Barichara,
julio 24 de 1864. .
Señor Secretario del Gobierno eclesiástico.
Siendo Ministro del culto católico, tengo el im•
prescindible i sagrado deber de manifestat· a U, mi
profunda adhesion, respeto i obediencia a la Silla
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
.234 EL CATOLICO.
'
1
'
r
f
1
;
Apostólica i a mis Jejftimos Prelados,e igualmente
protestar a la faz del mundo católico, contra Jos
esct·itos vejatorios al Soberano Pontífice i Senado
de la Iglesia Romana, i todas las publicaciones que
han hecho pot· la prensa algunos Sacerdotes i pm·ticulat
·es,chocando de frente la libertad evanjélica
_de la Iglesia e. hil'iendo sus derechos.
Sírvase ponet·lo en conocimiento del señor Vicario
jenerai.-De U. su atento servidor,
J~ean Nepomuceno Franco. .
1 REDACTOR, VENANCIO ORTIZ.
~ El día 1. 0 del entrante meS de setiembre debe ; llegar a esta ciudad el Ilustrísimo señor Ar-zobispo,
no despojado de los honores del martirio
como ha dicho "La Opinion" número 77
en un artículo titulado " una nube mas, descargada,"
porque la aureola que rodea las
sienes del Prelado ha sido adquirida. con sus
padecimientos por La fé, i esa no podría per-
~ J derla sino por una imposible prev&-rioacion.
Hoi es una verdadera propiedad suya i de la
Iglesia de que nadie lo podrá despojar. "Viene,
dice el artículo citado, a apacentar su re- '
baño, VERDADERO REBAño: " tal sarcasmo es
inmerecido, porque si el pueblo a quien así se
insulta, ha orado llorando para inclinar en su
favor la balanza de la justicia divina, i obtener
misericordia del Sér Omnipotente que rije el
Universo, el dia que se resuelva a convertirse
de oteja en leon, hará temblar a lo8 que hoi se
mofan de su sincera fé.
El señor--Arzobisfo "se ha inclinado delante
del mandato lega en los términos que a la
autoridad satisfizo," porque como Prelado católico
no tenia que examinar la constitucionalidad
do la leí ni la lejitimidad de esa autoridad,
debia evitar conflictos i atender de preferencia
a la salud de las almas, debia manifestarse
i se-manifestó humilde como su Divinu
Maestro, sin dejar de decir como debía: "No
obedeceré en lo que a a contrario a la libertad
de la Iglesia o a 1 dogma soberano en que está
basada. ,, 1 esta escepcion puesta a los términos
de su juramento de sumision, no ha tenido
por objeto " ganar silencio de p:nte de no
pocas boquirrubias entre las beatas, " sino estar
en aptitud para continuar luchando como
tendrá que luchar con los que tanto desprecio
ostentan por la lei relijiosa, i tanto ódio mues·
tran al Clero ROMANIS'l'A.
Este está ya enterado de que la lu-cha con tinuará,
porque se le llama " aun, enemigo
implacable de la República a quien no puede
considerarse ni como desarmado ni como neutral,
h as ta que no sea derrotado definitivamente
en el campo que ha usurpado.''
..Estas p:1labras se han escrito mui a tiempo
para .quitar la venda a los que, con un candor
infantil, han creído terminada la lucha. i se han
mostrado satisfechos; con que Los nEÍEN ejer·
cer su ministerio, confiando en que los LIBERALES
respetarán alguna vez la conciencia
ajena i los derechos de los pueblos en que do-minan.
El Clero verá ahora claro, que no debe
esperar nunca justicia de parte de sus enemigos
que, despues de haberlo humillado i esplo- :
tado, no quieren aun ceder en su empeño de
destruirlo. Los Sacerdotes todos comprenderán
que deben procurar con sinceridad unirse en
vez- de ofenderse, i hacerse 'r de las sociedades secretas, a
tanto llegan sus esperanzas.
Pc,r eso, para establecer la desconfianza entre
el Pastor i los fieles, para inutilizar el paso
conciliador que acaba de dar el señor Arzobispo,
se han puesto en estos días en cireulacion
chismes indecentes,que no producirán otro resultado
que desacreditar a sus autores. El pueblo
espera ansioso la llegada de su Prelado
para darle muestras de su a~or i respeto, porque
a él está unido con los vínculos de la fé; de
esa fé que ha defendido, no como bandera política,
porque comprendo que la pasion mezquina
que se bautiza entre nosotros con tan sonoro
nombre, es una cosa indigna de acercarse a la
idea sublime q11e comprende el amor de Dios i
los destinos eternos de la humanidad. El pueblo
que ha defendido esa fé con sus lamentos,
con sus escritos, con su llanto, no ha visto personas
políticas en sus enemigos sino séres dignos
de compasion, i ha orado por ellos. I-Ia obser"
9"ado la conducta de todos los pueblos cristianos
cuando han visto perseguida su fé : se
ha cubierto de cilicio i de ceniza, i ha implorado
misericordia i perdon de Dios, resuelto a
d.ejarse sa~rificar .ántes que abjurar su creenCia,
creencia subhme que obliga a amar a los
que nos ~borrecen i a hacer bien a los que
nos pers1guen.
Los señores Redactores de " La Opinion ''
creen confiadamente que llegará pronto el dia
"en que la literatura épicamente plañidera i
quejumbrosa del Sacerdote católico, incitará a
la risa en medio de la monotonía de la mas
completa libertad. " N o podemos, en verdad,
formar otro juicio de los que tal cosa escriben, f
que el que pudieramos formar del que fuera a .
·~~~---=----~--~~~-=~~=-~~~~------~~~----=-~--~~= ----~-----~~~~~--~--~' Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
EL G A 't O L 1 C O. 135
una casa respetable a hablar con desprecio de
la madre de familia en presencia. de sus hijos.
• Esta LIBERTA.o grosera, que insulta. al buen
Süntido i alienta al crímen, es la. libertad porque
trabajan deveras nuestros pretendidos §16
sofos ; i como ella no podrá plantearse miéntrns
se profese por el pueblo granadino la
creencia católiCa que hace al hombre respetuo·
so por cuanto se debe respetar i funda así la
libertad verdadera , fuente de la verd.adera civilizacion,
se trabnja ahincadamente por destruir
esa creencia.
Vea, pues, nuestro Clero si la lucha. habrá
terminado. Los hombres que tienen la " conciencia
tranqmla i paciente como M. Renan,"
son los que están en el P<:>der, los que disponen
de la cosa pública, hacen esas cosas que
llaman leyes i las sostienen luego con las bayonetas
del ejército contra que tanto escribieron
ántes, calificándolo como debe calificarse hoi
aqui : de apoyo brutal de la mas ominosa ti-ranía.
El ultimo paquete nos ha tt·aido la dolorosa
1 nueva de la muerte pl·ematm·a del ilustre Poujoulat,
, acaecida en Aix.
El autor de la « Correspondencia de Oriente »
i de la «Historia de Jerusalen,)) no era Yiejo todavía,
todavía podia enriquecel' la litel'b.ttwa con muchas
pt·e.eiosas producciones. Et·a uno de los ada-lides
que peleaban en primera Jínea contra Ja
sofistería anticristiana; pidió siemp1·c su inspiraciou
al auto1· de toda belleza, i la luz del cielo
inundó su noble frente i la mano de un ánjel del
Seño1· dil'ijió su inimitable pluma.
Dios ha recibido su noble alma : en la tierra
quedan sus obt·as, i esas obt·as no serán olvidadas
miéntt·as haya amor pot· la elocuencia i entusiasmo
pot· la sublimidad.
-Treinta i tres Sacerdotes han tenido ejercicios
cspil'ituales en el convento de la Candelaria du.
rante los nueve dias que terminaron el miét·coles
24 del p1·esente. Estos eje•·cicios han sido dirijidos
pm· el presbítei'O Ignacio Buenaventura, quien
consiguió con su predicacion tan abundantes ftutos,
que esos treinta i tres Sacea·dotes sea·án en Jo
sucesivo, mediante la gt·acia de Dios, verdaderos
apóstoles capaces de oponet· un fuerte dique al tonente
que amenaza denibat· la casa del Señor.
Los ejercicios terminm·on el juéves 2S con una espléndida
velacion.
-Hemos tenido el gusto de leer ahora los tres
primeros números de «EL OBRERO.>) Este periódico,
escl'ito en lenguaje sencillo, pero cm·recto en
lo jenea·al, contiene conceptos i apreciaciones que
l'evelan en los m·tesanos que lo redactan, nociones
mui justas sobre el objeto de las sociedades humanas,
i sobre los pl'incipios que deben adol·nar a
un coa·azon vel'daderamente hom·ado i patriota.
Los versos que en él publica el aatesano, señor
1 González, ·no carecen de mél'ito poético a pesar de
su desaliño e inco1·reccion.
Nosott·os que formamos bajo el estandarte de
Jesucristo, artesano tambien, damos al «OBRERO»
la bienvenida i le deseamos fruto i duracion.
-Lo mismo decimos respecto del elegante
« GRANADINo,>) -cuya diccion pura, sanas ideas i
gusto csquisito en la elecclon de los asuntos de .
que se ocupa. dejan conocer que es un maestl'O en
el pel'iodismo i en el idioma el que lo redacta. El
partido Católico debiera sostener con eficacia esta
produccion que honra al país.
ACTO DE CONTRICION.
SONETO.
Omnipotente i sempiterno Dios,
Uno i b·ino a quien amo, en .quien espero,
Consuelo del cl'istiauo verdadero,
Que toda su confianza pone en Vos.
Y o que fuí en ofenderos tan precoz,
I de los pecadores el pt·imero,
Mas no de arrepentidos el posb•et•o
Perdon os pido de mi culpa atroz.
Sí mi Señot· i Rei i Padre amado,
Yo imploro ese pet·don que has nrometido
Al que confiesa i llora su pecado,
Lleno de contricion i arrepentido.
I tengo viva fé de set· salvado,
Pues fui con vuest1·a sangre redimido.
MARIANO Escov AR R1v As.
LA NOVENA DE LA CANDELARIA;
II.
( CONTlNUACION ).
-SI, si, esclamó con voz alterada, vuestro nombre
me es bieu conocido. Es caro para mi padt·e-i para
m) tambien - porque despierta en nosotros recuerdos
que no se borran 'jamas de un corazon honrado, los
del reconocimiento! ..... Es pues verdad, continuó
Cecilia hablando consigo misma, como si hubiese olvidado
súbitamente mi presencia, pero de manera que
no me dejó perder una de sus palabras. ¡No era una
ilusion! todo se ha cumplido hasta aquí; todo se cumplirá
sin duda. Que se haga la voluntad de Dios!
I cayó en un abatimiento sombrío, en que todas sus
ideas parecieron desvanecel'se.
Una de sus manos tocaba casi la mia. Yo me apoderé
de ella sin que Cecilia hiciera el menor esfuerzo
para retirarla. Solo me miró con un ojo mas atento .
-El es ! dijo.
-Oh ! mi vista no debe causaros alarmas, repliqué
yo estrechando su mano entre las mias. El sentimiento
que me ha conducido a vuestro lado es puro con1o
vuestro corazon, i tiene la aprobacion de un padre
cuyo único pensamiento es vuestra dicha. Sois libre,
Cecilia, i nuestro destino futuro no depende sino
de vos.
-Nuestro destino futuro no depende sino de Dio.s,
respondió ella bajando la cabeza con un suspiro profundo
. Pero habeis hablado de mi padre. Sin duda
lo ha beis visto ya. El sabe que a esta hora de Ja noche
sufro hace algun tiempo un mal inesplicable que me
ahoga, que me mata. ¡Deseo tan vivamente prevenir
su acceso! ¿Cómo es que mi padre no lJa venido?
Auuque el coronel me hubiet·a dicho algo de aquel
accidente queno inspiraba ningun temor, la espresion
de sufrimiento que acompañaba a estas palabras me
heló la sangre. El padre de Cecilia se babia detenido
delante de nosotros en el momento mismo en que ella
parecia buscarle por la sala con una mirada inquieta.
l\Ie admire de que no le hubiese visto.
-Estoi junto a tí, dijo él envolviéndola con un brazo
que la sostuvo, porque iba a desfallecer.
Ella se apoyó en su seno i pasó as! uno de esos ios.
tantes de angustia que son tan largos para el dolor.
Una de sus manos, que yo no había abandonado, se
habia crispado al principio bajo mis dedos, i despues
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--~-~
EL CATO LIC. O •.
s~ había relajadoi ~nfriad?- como si la muerte la hu- l. si no estoi. ~n comp~ñía de al9uno <¡ue .nie_ lll)le i. ~11e
bu:'se ganado. Yo d1 un gnto de terror~ · proteja ? Heme aqm! respoud¡. yo J!Of fin." 1 el rmdo·
Las amigas de Cecilia se habían agrupado al rede- de mi voz me despertó. El dia estaba mui· avanzado.
dor ; i, en los cuidados que le ptodig¡¡ban, le habían Aquell:l noc:he sin fiu se habia prokmg~do ~on todas ,
quitado la máscara. ¡Ay! todas mis dudas se habian las horas- de la mañana. Era- un dvmingo1 1 tocaban
disipado, pero una palidez espantosa cubría aquellas al-uttimo oficio en la capilla católica.
(acciones tan queridas a mi memoria. Yo sentía. la. Yo me babia ya reprochado vagamente algunas ve·
vida pronta a escapárseme tambien, cuando Cecilia ces.el no haber. rnanifestado con uu solo acto de pie- ·
respiró, levanté la frente i fijó sus miradas en las pér- dad mi. reconocimiento por el beneficio de mi div:ina ·
sonas que la rodeaban. protectora. i\Je apr~sU1·é a entrar en la- iglesia. i a
--¡ Ah ! dijo, mui bien: estoi mejo.r, vivo, no su~ mezclam1e en ·el pequeñ·o número de los fieles. Llegué
-fro ya. Os pido perdon a todos·, i o~ doi gracias. Esta en el momento en que el Sacerdote se dirijia al púl-crls'•
s jamas es larga, pero yo habr;a querido ahorra- pito. Era un hombre de cabellos blancos, cuya noble
ros el cuidado .que os ha causado. Era preciso no ve- figura llevaba impresa la huella de una pena profunda,
nir o partir mas pronto.-- 1 sin embargo, añadió vol- templada por \a \'esignacion i por la fé. Se detuvo un
viéndose un poco acia mí.-- sinembargo, sentiría no ha- momento delante de mí; i me miró 1ljamente, como
ber venido, o haberme ido demasiado pronto._ No se- si- hubiese sido s&prendi.do. por la. pr.~sencia de un 1·
guiré interrumpiendo vuestros placeres; el aire i la cristiano estraño a su auditorio ordinario, o com() sr
marcha van a completar mi corazon. hubiese estado preocupado, en el rnomento de verme,
Partimos poco tiempo despnes, i 1\f. Savernier, por alguna impresiou que yo viniese a hacer revivir l
tranquilo ya, me confió el brazo de su hija. Ella esta- en su alma. Suspiró, pasó, subí~ al pul pito, consagró 1:
ba cerca dfl;mí, cerca de mi cor•azon. Yo comunicaba algunos minutos a uu acto de adoraciou, al que me
libremente con su pensamientó.; respiraba su aliento; asocié yo con fervientes plegarias·;. se recojió i habló. i
poseía los diez minutos de vida plena i feliz que Dios Sn- discurso tenia por obJeto las vanas esperanzas de
me babia reservado sobre la tierra, i gozaba: de ella Jos .hombves q-ue han coloeado su Rorvenir en las. cosas
con d~licia, porque niogun cuidado alteraba su pureza. de la ti('rra, i que no han contado -para arregl_ar sn viCecilia
no.sufria ya ; lo había dicho ; ·¡o repetía a ca- da, con los decretos eternos de Ja Providencia. Véplooa
paso. Marchaba con un pié seguro i lijero ; se raba la ciega presuncion de la creatura, cuya débil inreía
hablando de aquel mal caprichoso, que no la ata- telijeucia no puede comprender ni las causas ni los f
caba sino para vterrarla con la incertidumbre i la bre-- moti-vos de los acontecimientos mas simples, que no j
vedad de nuestros placeres.Su padre,teniéndola rodea- ~a he nada de lo pasado, nada de lo futur(), nad~ de lo
da con el brazo, se felicitaba de. cucont_r~rla tan bien, que concierne a sus- únicos intereses verdaderos, a lo&
de poder atribuir el m~l pasajero que acab~ba d~ s_u- i.utereses de su alma inmortal ; i que s.e revela hasta 1 ·
frir a las fatigas del bmle, o a alguna emoCJon E';)!nta la desesperacion por miserables dt~sgracias de esta
cuyo misterio se e_seusaba alegremeu e de esc.udt·mar; vida fujitiva, ¡1orque e& incapaz de penet.:ar en las ,
El espacio que temamos que recorrer era mUI C?rto, 1 miras seeretas de Dios. '' 1 sinembargo., añadio ¿qué 1'
yo no sabia si debía deseat· que se prolongase sm fiu es esta vida que ocupa todos vuestros pensamientos, .
para eternizar la felicidad. pura que gustaba, .o. que para que deis la menor importancia a sus mas sé~ias
llegásemos aprisa para volver mas pronto a Cec1ha el ri ·ci udes? ¿qué t>s la pobreza? ¿qué es la de~grama?
1·eposo de que tema necesid~d. Habi~m?s Jle~ado ,; la ¿qué es la muerte? ¿ tué, sino i mpe•·ce.ptibles acciden-md
ano de Cecilia-se desph ~~ll~!a de.Ja
1
nua,y1 no set quhe mbe- tes de posicion i de or~a en la in m( ~sidad de, los j' .
ecia que aqueJJa noc e sena mm ar_ga.· o es rec .a a sig!os que os perten('cen. co:NCLUIR.A.1•
aquella máno que se me escapaba, 1 no me atrev1a a
llevada p mis labios ;. pero. Ja estre~l~é tal vez con ¡
mas amor;i r.reoque la mano deCec1ha me respon- A ÚLTIMA HORA.-Los l~jisladores de Rio-dió
.... La puerta se babia abierto. negl'o a que hace referencia la nota oficial publica-
-Hasta mañana, dijo el Coronel; hast~ mañana! da. en este nume1·o son los siguientes: 1
1\:añana será para todos eJ mas bello dia de nuestra Justo At·osemena, J ulian Tt·ujillo; José María
vi~a, si Inis esperanzas no son engañadas .... Pero _ Ja Rójas Garrido, Domingo Diaz Granádos, Mamea·to
mitad .de Ja noche ha pnsado ; esta hermosa mana- García, Antonio Mendoza, Camilo Antoni~Erhe-na,
debe va tocar a su segunda hora, i Cecilia necesita. N 1 F y 1 A
dDrmir la-rgo, porque su ·salud nos ha i!lq.uietado. ho~ vea·ri, hlan C. Soto, ico as • • i la; ntonio
un po-co. Hasta las cuatro de la tarde, contmuo. González Carazo, José A1·aujo, Bejamin Noguera,-
abrazándome, ¡ esta vez, si Dios quiere, estarémos Ramon Santodomingo Vila, Felipe S, Pnz, Eloi
todos tres a la mesa . .Muchas ocupaciones podrán · Porto,. Sántos Gutiéa·rez, Sántos Acosta, Antonio
abreviar para ti "el tiemp9 que nos falta para volver a -Ferro, Pedl'o Cortez- Holguin, Eusebio Otálora,
estar reunidos : el sueño, el tocador i la esperanza. José· de) Cármen Rodaíguez, Gabriel A. Sarmiento,
Ellos entraron.;. la puerta jiró lentamente sobre Santiago Izquierdo z. , Anibul Currea, Tomas C •.
sus goznes, i Cecilia me dirijió con una voi conmoví· de Mosquea·a, Andres Cea·on, Ezequiel Hurtado,
da un adios que o1go todavía. Peregl'ino Santacoloma, R·amon Mad& Arana, Ni ..
El sueño que. mi viejo amigo me habia prometido no comédes Conto, Antonio L. Guzman, Vicente G·.
me concedio sus dulzuras; i lo esperé inútilmente
hasta la al ida del sol en un insomnio inquieto i febril de Piñérez, Ramon Gómez, Francisco J. Zaldúa,
yas álarmas no me podia esplicar. N.() me sorpren. . Fi·ancisco de P. Matéus, luan A. Uricoechea, I.:od'
ó mas tarde: sino para hacerme cambia.li de suplicio: l'enzo Maria Lléras, Manuel Ancízar, Salvador CaYo
veia a Cecilia, es cierto; pero la veía ~omo se me macho Roldan, José María L. .Herrera, Luis Capebabia
apa cido por un momento, pálida, desfalle- lla Toledo, Manuel L. Herr-ea·a,. Juan M. Barr-era,
ciente, con la frente cubíerta por las sombras deJa Agustín Núñez, Buenaventul'a Correoso, Gabriel
muerte; o bien, inclinando ácia mi ol.do su cabeza Neira, Gufilermo Lynch, José Eocarnaeion ·aovel~
da por sus cabellos sueltos, i repitiendo aquel adios dao, Guillermo Fiaue¡·oa,. Focioo Soto, Aq iJeo
simestro que me babia dirijido algunas horas ántes. .....
Yo me volvia entónces de ~u lado para detenerla,¡ · Pana, Nar'Ciso Cadena, Alejandro Gó ez tos,
1
mis manos no asían sino un vano fantasma. Algunas Felipe Zapata, Marcelino Guti,t·rez A., G-abriel
ve.ces sentía como que una ave nocturna me rozaba Várgas Sántos; José Hilal'io López., Bernardo Hevolando
el rostro, i cuando me esforzaba por seguir rrera, Liborio Dut•an, José María Cuéllar Povedn,
con la mirada el objeto desconocido de mis temores, Manuel Antonio Villoria, Eustoriio Salgar, Wen
·~ per~i,oia todavla a Cecilia que huía con atas de fuego ceslao Ibáñez, Clímaco Gómez Valdez.
tn~·¡tandome a que la siguies.e. "¿No vendt•ás? me
.gnt~bu con un largo jemido. ¿Por (1ué me has dejado
J partll' la primera?¿ Qué será de mí en estos desiertos, IMPRENTA CONSTITUCIONAL--POR NICOLAS PONTON•
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente:
Biblioteca Virtual Banco de la República
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Prensa
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El Católico - N. 65
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El Católico - N. 60
f-----.
mL~ e
TRIM. I. AÑO II. Bogota, 26 de julio de 1864, NUMERO 60.
SEÑORES SUSCRITORES.
Con el presP-nte número termina el trimei!ltre
primero ucl segundo año.
CIRCULAR.
ARQurnrócEsrs DE SANTAFÉ DE BoaoTÁ.SEcRETA
H.Í.\ DEL GoBIERNO ECLESJASTIco.-
NUMERO ... 22 DE JULIO DE 1864.
Señor Cura de ..••
Pnra ue la Junta de los se11~re:s Tesoreros
creada por decreto de 1. 0 de mayo del flño anterior,
pu~da tener conocimiento perfecto del
cumphm1cnto qne hayan tenrr1o las disposiciones
sobre la materia, se hace ind!spensable que
el s~ñor .Cura, tomando los datos respectivos,
se s1rva. mformar ántes del 1. 0 de setiembre
sobro lo siguiente :
Si lo correspondiente a los años anteriores
ha simntn.dcr.
En adelante se publicará mensnalmente la
relacion de las parroquias de donde se haya
1 hecho la consignacion correspondiente en la
Caja decimal.
Del señor Cura, mni atento servidor,
MIGUEl.. AHTAS.
_ _.,;__-.. ... ~---
SEÑOR VICARIO JENERAL.
Permítame su Señoría, que distraiga la
atencion de sus mui graves e importantes ocu·
pnciones, para manife~t~r a US, al venerable
Clero que rije, i a todos los católicos de la Arquidiócesis,
que no es esacto lo que el señor
Vicario i respetable Clero dicen en la Ihanifestacion
que a sn Señ0rfa dirijo con fecha
1.0 de marzo, inserta en el número 50 de ':El
Católicó": '' ¡Qué escándalo i mal ejemplo
h::m dado al Clf>ro católico los Sacerdotes de
S<1ntander, desobedeciendo los preceptos del
Sumo Pontífice, Vicatio de Jesucristo en la
tierra! " Al leer tales palabras se resiente mi
ortodojía, pues aunque no me ha llegado el caso
de manifestar abiertamente mis sentimientos
relijiosos, no por cobardía," ni por algun interes
mundan0, boi que se dice eso en la citada l\1anifestacion,
sin escepcion alguna. de loH Sacerdotes
de Santander; yo que resido como Párroco
del Valle de J esus en dicho Estado, croo
me hnlJo igunlmente comprendiJo en el número
de los
aparece esc:tito, ~ narhe, en. ta~es casos, firma. lo
que no está escrito como dicto. . .
Que no m&.ndó a su Clero que JUrara smo
qu e aconsejó a dos Curas que lo híciera.n PARA
1 EVITAR CON UN MENOR MAL OTRO MAL MAYOR.
De manera que si el señor Obispo cree
conveniente _un asesinato para evitar males
mayor es, aconsejará comete_rlo no obstante que
la Icolesia enseña lo contrario.
Decir que no tenia el 14 dO" agosto último
1·egln. a qué atenerse respecto de los negocios
de l a Iglesia, es poco honro5o para Su Señoría
Ilustrísima, cuya retractacwn, contrasta con
los de los simples clérigos de su Diócesis.
Se vanagloría el señor Obispo de haber pro·
cedid o bien puesto que en sus actos condenados,
consultó la UTILIDAD PÚBLICA, i cita a
1 San Juan Crisóstomo en apoyo de éste principio
benthamista. Tambien ~1 Jeneral M?sque-.
ra ha elojiado al señor Ob1spo por sus Importantes
servicios a la reYolucion que triunfó
hace tres años. N o debió Q1vidarse de esto el
señor Tórres al hab )~r del princi io de utilidad.
Dice tamb~en que el acuerdo presuponía la.
apr.ohacion del Jefe de la Iglesia ; pero como
el artículo 12 dice claro que para ponerlo en
ejecucion basta que sea aprobado por el Presidente
de los Estados Unidos de Colombia, i
como el Aeñor Obispo principió a ejecutarlo
pidiendo hasta a las monjas su lista nominal
En fin, nos ha llamado mui especia 1m ent e In. ~ ~
atencion la siguirnte frase contcnJ ) porque "el plaji'o cie ltí- ·
fico sería mui notable ; pero dice : C\ la leyenda~>) ~
IJa actitud de la critica racionalista frente a siempre la leyenda. "ftsta palabra es todo su sec1·eto,
1 re1 te con el reinado histórico de J sucl'isto ])ios, todo su encanto, toda su sc<.luceion. Está orgullosa
no tiene el mérito de la franqueza ni de la digni- de poseerla; i la cl'itica estranjera, sentada rn ..._]
•
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
92 EL CATOLICO. --1
medio de nosotros, se adoi'Da con ésta linda pala·
bt·a, como las jóvenes con la ondean,t~ pluma que
gustan colocar sobt·e su ft·ente. La cntJCa moderna
embellecida .-on ésta especie de penacho nuevo,
obtiene éxitos de salon mas que de escuela ; pero
como pretende tt·astornat· la pos~sion. se~t~lar de
Jesucristo Dios pot· la demo:.tracwn ctentihca, es
preciso investigar tan sériamente como lo permit¿
1 un ataque tan ;·uin, cuales son las razo11cs graves
que o¡wne ul becl:w grundioso que acabamos de
manifestar.
Yo me- contento con seüalm· tres procederes
empl eados por ella para q ue bran tar el grande h echo
o al ménos para anulm· su estension demos.
trativa. Ésto:; tres procederes que reas ímcn bas-
1 tante bien toda su estratéjia, pueden espt·esarse
por éstas tres palabras : . negact'on,. duqa,. hip.rJte-
1 sis. Tal es en su reumon, la arttllerJa c1enttfica
que dil'ije contt·a la inespug nable fm·taleza en que
1 se defiende contt·a ella la Divinidad de nuestro
Cristo.
I desde luego, señot·es, al hecho inmenso que
os hemos recordado, la cl'Ítica modema opone la
negacion, implícita o esplícita, altiva o vergonzosa
segun la necesidad del caso. I aunque lleve su
elegante mano cubierta con un fino guante, dá
con ella a Cristo el golpe de la ncgacion. Niega,
nó la matel'ialidad del hecho considerado eu su
rca lirlacl histórica, sino su !Pjilimidnd i su estension
consideradas bajo su relacion doctt·inal i dogmc\
tica. Delante de la humanidad cri stiana que
afirma, hace ya cerca de dos mil años, la Divinidad
de Cristo, i canta de un cabo a ott·o del mundo
el himno de su adoracion, la cdtica moderna
dice: "Nó, Ct·isto no es Dios." ¿Qué vale ésta
ueo·acion delante ele nuestra afirmacion ? ¿Habrá
entt·e n nsotros quien se espante al ruido de las
negaciones contempor ele
negat·. Pet·o yo pregunto, , quién entre vosotl'os,
ante el pt·odijioso testimonio que acabo de invoco en Aténas i en Col'into, en Roma i Alejandría,
c1·ecis en Ja Divinidad de Jesncl'isto 1 ¡He aquí aun en la misma Jerusalen; i entre ellos, ¡cuántos
cómo se esplica por qué, dm·nute dos mil años, creyeron con el pueblo en la Divinidnd de Cl'isto!
cien pueblos. han estado i están aun de rodillas l 1 Cuántos, des pues de b aber marchabe. impresiona•· aquí esa leyeuda del Cristo Dios diYinizado por el enuo
es la facilidad de hacer aclmitit· tal dogma; tusiasmo, sino es un sueño de vucs t1·a febl'il imaes
la dificultad. Que la .Divinidad esté realmente jinacion, \ma quimera que miente a la vez a la
en un se1· que se me pt't:'Se nta en forma humana, razon, a la naturaleza i a la histolia? l
no es lo que la rnzon me inclina a admiti1· rlesde Así, la crítica dá vueltas en un ÍJ'Clllo en que '!
luego. La J'azon, antei'Íormente U'toda prueba de se ve reducida a embrollnrr,c en su propia conhecho,
no inclina ácia tal creenciCI ; al conta·al'io, tradiccion , i a darnos de un hec ho inmenso causaz !
· ' la rechaza. que no son causas i es p\icaci011es que nada es-
I por cierto, la p1·ueba })ien palpable de ésta plican.
1 rcpulsion de la razon humana, es la oposicion qtJe Tal es, seiwres, la actitud jenera l que toma en
hacen hoi Jos racionnlistas, rn pleno Cristianismo, nuestros días la critica negativa ánte e] grande
n éste dogma fundamental de nuestra fé. E~ sor- hecho qul' acabamos de acreditéll'. Drlnnte del rei-
, prcudente, pot' no decir otra cosa, que los hombres nado prodijioso de Jesuc;·isto poseedot· de la huque,
despues de 18 siglos de creencia universal, manidad, ella se coloca <;!on sus tres cosas raciorechaz¡
m aun en nuestt·osdias el gt·an mistel'io con nalmente impotentes i científi r an1e nte nulas : una
una tan prodijiosa obstiuacion, sean precisamente n 'gncion que no tiene Jem ·ntos pa rn se 1• séria, i
los mismos qne suponen lu1bcrla admitido la hu· que desaparece como unn sombra tijera en la glo- \i
mnuidad entera con una tan prodijiosa facilidad. ria de nuestra universal afirmacion : una duda ¡,
¡ Qué ! Delante de la fé de los siglos i de la enferma que no purde nuda p ·ua quebrant, ,. el ~
nfirmacion de los pueblos; delnute de todas las hecho de una posesiou cierta; i una hipótesis qui- ,
})l'Uebas aducidas pot· )a apolojética cl'istiann; en 1 mérica que, ro.dca de no sé qué somht'US mitoló- ~ ~ ·
d
pt·esencia de esas demostraciones que hnn inclina- jicns nuestra cuna colocada n la plrnn luz de la !· ·
. o ante la Divinidad de Cristo la mnjcstad de la 1 publicidad, i qt e hace violencia a In naturaleza !.!
mtelijencia i la reyedn""~~
' ilust1'e que se haya visto nuuca, esta po.seslou vale DUEL
~ título ante la t•azon i ];1 ciencia. Ella supone uua "" 0 · l
. conspit·acion de juicios i un trabajo de intelijen... Los dolores intensos son mudos,
l. cias, tales que, J·amas posesion alguna, por leJ'ítima no se espresan mas que con la- .... grimas. - 'l'Asso .
. ,' que haya sido, ha sufrido en la twmanidnd. Con.. ·La muerte acahn de arl'ebatm· al señot· docto1• 1 tra ésta posesion intclectunl, pet·pétua en plena luz
1
de todas las civilizaciones; contra éste asentimien- JosÉ MARÍA JniÉNEZ, cuyas vil tudcs habrán sido
1 pt·emíadns en el cielo i cu.va memoria vivirá en -· to de tantos jénios interesa( os en uo engañarse;
~ : contra el veredicto de éste incomparablejw·y, tl'i- el cor·azon de los que sentimos i lamentamos su
! bunal anfictiónico de la misma humanidad que m- pérdida.
¡· tilican en cada pueblo i en cada siglo cristiano Digno i cumplido Sacet·dote, fué constanter
esta poscsion del Cristo-Dios. ¿Cuáles son, pre- mente modelo entt·e los suyos, i aunque re-guntamos,
Jos títulos ciertos de la crítica moderna 1 signaJo, no fué insensible a los haz~res porque
Contra ésta posesion que se apoya sob1·e el hecho tuvo que pasa,·, i contra los qu.e lnrha la Tgl.esia
1 santa de .Tesucl'isto. En las terribles pruebas que
(e su propia existencia i b¡·illa con su propia luz, suft·e lloi el sacerdocio católico entre nosotros, él ·
¿ dónde cstún vuestras razones evidentes, vuestros
'bl d estuvo siempt'e n la nltlll'a de Jos ve!'dade¡·os mi- ¡¡ Rrgumentos irrefutables, vuestras invenct -es e- ni!:;tros de Dios. Su alma noble habrá alcauzado ~
mostr·aciones? Las exijimos, i tenemos {lerecho ¡.
p~m ello, porque contra una posesion históric.1- el fruto de la fé cl'istiana en que rebozó i que lj mente incontestable, necesitamos nada ménos que tiene consoJadot·us recompens)
Esta no fué una decision dogmática sino la cGndenacion
de una p1·oposicion.
No fué dada pot· un Concilio jeneral, ni cont1·a
un Concilio jeneral ; i esa conclenacion no fué
contt·n el culto de las imí\jenes como lo enseila
Ja lglesin, sino contm la adoracion de latría que
atJ•ibuyel'On al Concilio de Nicea sobt·e un en·o•·
de hecho.
Con que no hai argumento ni contt·a la infalibilidad
de Jos Concilios, ni contra el culto de las
1 imájenes. El argumento consiste en la ignorancia
del que Jo pone, que ni conoce la bis!ol'ia de Jos
Concilios, ni la Constitucion de -la Iglesí •
_:_En Popayau, el dia de los Santos Apóstofes
.Pedt·o i Pablo, dió el señor José Usul'iaga un
espléndido banquete al señot· Obispo Riaño. A él
concut'l'ió todo lo mas notable de la riudad que
sigue manifestando admiracion i •·esp eto pot· éste
ilustt·e Prelado, hablando del cual, nos dicen que el
Presbítei'O Manuel t\'I. Orosco, babia descuidado
hasta la publicacion de su protesta contra el juramento,
por consagrat·se a servirle, i que tambien
le sirvió activa r desinteresadamente el Cura de ·
Guapi en la Costa del ~acífico, Presbítero Fran- l
cisco JavH:w Campiño. Estos nombres no pueden
se•· indiferentes para los CRtólicos, para los que
comprendemos el mérito de la caridad.
-:ta muerte continua amontonando víctimas
entt·e la clase notnble de la sociedad. Desde el
dia 15 del próximo pasado junio casi no ha dejado
de ve1·se rodm· el carro mortuorio "onduciendo el
cadávet· de alguna persona intere ·nnte, i C!Jya
pérdida cnbre de luto una lm·ga familia. Este
aumento de mot·tnlidnd, debe consistir en la ih·
quietud mot•a\ en que vivimos, siempt·e azorados,
temiendo algun trastomo del órden púbJico ; i en
el n-otable desaseo ele la ciudad que se ha convet·tldo
en un vasto nruladar.
Una de las mue1·tes que lamentamos es la dél
señot· PEDRO BEnNAL a q!Jien atTastJ'Ó a la tnmbu
una pulmonía causada por cierta diversi-on muí
digna de la época, i :1 que se entt·egan los niños
del bajo pueblo en las calles pl'incipales. Consiste
en atravesat· E'n todo el ancho de Ja calle una
cabuya cuyas puntas retienen los que quieren 1
' •
dive1·tirse haciendo dat• en tiel'l'a a Jos tr·anseuntes.
El seño1· Bemal sufrió un ponazo así, i como el'a
corpulento, el pulmon sufl'ió una gran conmocion.
El señor Bet·nal mul'ió, i sus matadoras contiuúan
en su diversion sin que la policía se meta con elfos.
-Con fecha 6 de éste mes escriben de Popayan
que el Clero está dispuesto a tenet· unos ejercicios
espirituales en el Seminario, luego que lo- de•
socupe~ las Monjas de la Encar-naciou que se mat·chan
tambien para el estranjeró a fines de éste
mes..- Los Sacerdotes quieren ~ene¡· un loca-l como·
el indfcadt> pam podet· administrar los sncr·amentos
a los fieles, sin <.leja•· su retiro, porque el puebl-o
rechaza tos ausilios de los clérigos colombianos.
-En carta rechada · el 25 de abl'il último en el
puerto de Sau Sebastian en España~ dice una pet··
sona respetable, lo siguiente:
« Se han ido de aquí muchos hermanos i her- 1
manas de San Vicente de Paul, a Francia, al luga1·
del nacimiento del Santo, pm·a inaugurar un nuevo
hospicio. Ayer, domingo 24, debe bahet· sido
el pl'ime¡• día de la funcion. Llevan desde el pueblo
al nuevo hospi<•io. la caja que contiene el cadável'
del Santo, en homb1·os de SacC'rdotes. Asisten
val'ios Cat·denales, A1·zobLpos i Obispos; el Jene · ~
ral de los Lazaristas i In Superiora de las hermanas
de la caridad. Die.en que de éstas asisten mas
de mil, muchos Canünigos i Cléorigos i todas las
autoridades civiles i militnt·es de rnuclws leguns a
la •·edonda. El l?ad1·e jeneral canta la mi a en la
capilla, i el Cardenal mas antiguo la cauta con
grande orquesta bajo el roh\e que daba sombra 1 al Santo cuando era pnstol' de ovejas. En fin, la
fiesta dura ocho días; se celebran misas de media ,
en media hora; se distt·ibuye In comunion en
cada una; todas las tat·dcs se dá la bendicion con
el SANTÍSIMO, i se gana indulj ncia plenal'ia i muchas
pnrciales concedidos pot· Pío IX. ¡Sola la
virtud hace gt·andes 1 Alejandt•o i Napoleon están i
olvidados, i si se les recuerda es pm·a maldecirlos;
i un tt·iste hijo del pueblo, un pastot·, es honrado.
ce Así se hom·a a aquel a quien el Rei quiere 1
'hom·ar.»
Libro de Ester, capitulo 6, verso 9.
UfPRENI.A. CONSTITUCWNAL-POR NICOLAS PONTO N •
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente:
Universidad Distrital Francisco José de Caldas
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El Católico - N. 59
=
ARQ.UtDl6cEsrs DE SANTAFE DE BoaoTÁ.
9 DE JULIO DE 1864.-SECR.ETARÍA DEL
GoBIERNO ECLES I A Trco.-NúMERO 472.
M. V. sci'íor Maestre-escuela, Dignidad de la
santa iglesia catedral de San Pedro A. de
Pamplona.
La situacion deplorable en que se encuentra
esa huérfana grei, eS!pecialmente desde que el
dignísimo i santo Obispo que la rejia, pasó a
Ja mansion de los justos, me hace tomar la libertad
de dirijirme 11 US. para que por lomé·
nos se tenga conocimiento, de que pot parte tlel
Gobierno de la Arquidi0ceis no se hu descuidado
ei dictar las medidas que tal situacion
demanda, i que con ésto, un rayo de esperanza
reani'lle un tanto esos corazones lacerados, algunos
de los cuales, a. juzgar por las notas recibidas,
tocan ya. en la desesparacion ..
Efectivamente: al mismo tiempo que se re·
cibi6la nota de US, fechada en marzo lÍltimo,
en que espresa que por falta de QUORUI\I no se
puede verificar la rcunion del Venerable Capítulo
para designar· el Vicario capitular, estando
en consecuencia, la Diócesis, en completa,
acefal ia; se recibió otra nota del Ilustrí.~ imo
señor Arzobispo, fechada el 27 de abril, en que
deplorando ''la desgraciada muerte del venerable
i virtuosísimo sefíor N Ifío ·" exijo datos
para como Metropolitano i por dele.gacion especial
, informar a 1~ Santa Sede i proveer a
las necesidades espirituales de esa iglesia sn·
fragánoa. La nota de US. llegó, pues, con la
mcjol' oportunidad i mui pronto se remediará
en lo posible la situacion escepcional, en que,
entra todas las Diócesis de la. República, azotaclas
por la revolucion i por la impiedad, se
ha encontrado la iglesia de Pamplona.
No terminaré sin poner en conocimiento de
US. la sertsacion profunda dQ dolor con que
fué recibida la noticia de la pérdida del defen·
sor de la fe e 11 us tri sí m o señor N rño, i que
así como en San Antonio del Táchíra, en los
dias 13, 14 i 15 de febrero, un pueblo cat6lico
i reconocedor del mérito, rindió los debidos
homenajes a la víctima; así como la ciudad de
:1\>Iéridn, el 2o de abril, a ~scitacion del digno
Dean i Cabildo c~e esa santa iglesia catedral,
tributó " los honores fúnebres debidos a la
, 1 memoria del INVICTO MARTra, dignísimo Obis-po
que honr6 la patria con sus her6ícos ejem.
plos i eminentes virtudes, " segun las palabras
do que usa en la escitacion el mismo Venerable
Capítulo; así, i con mayor razon, el señor
Vicario j en eral de la Arquidiócesis, dispuso se
ofrecieran sufrajios solemnes con igual fin, los
que tuvieron lngar del modo mas suntuoso i
digno del héroe, en la mayor parte de las parro·
qubs d~ la misma Arquidiócesis ; todo lo cual
habrá mitigado la pena que han debido esperi-
NUMERO 59.
mentar los católicos de la Diócesis al verse
privados ~asta del tri~ste . consuelo d~ espresar
ese dolor 1 elevar publicas p~egarias por el
MARTIR;, cuya alma, no h~1i duda, impetrará
clemen.Cla para sus victimarios i para toda
su gre1.
. Con ~ent1mientos . de disting uire _Renan_ al
perfeccionar la obra de Voltau·e, q mere q u1tar
los estorbos que aquel descuidó remover, para
hacer brillar con nueva luz la gran verdad, que
consiste en hacer al hombre pura i simplemen·
te un- anima\, hablándole sinembargo de lo
ideal sublimado hasta el último grado.
En Europa la controversia está empeñada
con calor, i la obra de Renan ha sido de trozada.
Aquí vá a recomenzar la lucha, i es preciso
que no nos quedem<:>s atras. Dios proteje su
causa indudablemente, porque es la causa. de
la verdad; pero si nos callamos, si dejamos q~e
los sectarios del error continúen su tarea s1n
ningun estorbo, puede ser que nos castig.ue
dándoles el triunfo i permitiendo que fructdi·
quen las doctrinas desoladoras que est-án sembrando
en el pueblo, i que convertirán aquí la
vida. en un verdadero infierno.
Cuando el hombre cristiano tiene la des·
gracia de perJer alguno de los séres a quienes
ama deposita un piadoso beso sobre la frente
helad-a. del que ya lo dejó, cae d~ rodill~s al
pié del Cru~ifijo, le dinje su oructo#n fernente
i se alza resignado. Una gota de balsamo precioso
cae en la honda herida de su corazon i lo
alivia: porque sabe- que el objeto por quie~ llora
NO HA MUERTO, SINO QUE DUERME, 1 ha
de despertar un dia radiante con los destellos
de la gloria.
Cuando pierde su fortuna por alguno de
tantos reveses que no está en manos del ho~bre
evitar, repite con Job: "Desnndo. nac1,
desnudo me hallo; pero sé que el que al1menta
a las aves del Cielo i viste a los lirios del cam
po con la magnificencia que no alcanz(4n los
Reyes, cuidará de mí."
No hai dolor, por acerbo que sea, de los que
nos rodean en ésta. vida toda de dolores, que
no tenga un consueto en nuestra creencia, n~
hai virtud que no esper~ su recompensa. ¿ ~ue
quieren darnos :n cambio n?est~os P!etend1dos
filósofos? i Su Incomprensible 1deallsmo? i El
culto de los placeres 1 Oh! los placeres sensuales
cansan pronto, hastían i conducen al
suicidio. Ni qué placer se podrá disfrutar
~mando no haya frenv que contenga el del!to
que la lei civil sola es impotente para COR·
tener!
Los que trabajan con tanto ahinco en difu~dir
el ateísmo, son los verdugos de la humamdad;
i son, no obstante) los que llaman FANATrco
a todo el que cree que "no solo de pan
vive el hombre.'' Si se las pregunta qué es fanatismo,
contestan con una algarabía Ít:comprensible,
porque ellos son los únicos yerd<:l.deros
fanáticos que quieren con el h1erro 1 el
fuego, i al grito de '' Viv_a la libe_:t~d,'' arr~ncar
de esta infortunada tterra la umca semilla
de bien: el Cristianismo católico:
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
r'l 83 . E:t CATOLICO.
t ...,......_,...,....__,......_,-.....,\._' ... ...........,...~---....---"""'-~J""',...r-..~~~~~'"""-~~,....,_~...-... ............. ~__,.,._,-....,..,......_,""'"'-~-.J
SEGUNDA CONFEUENCIA.
El reinado de Jesucristo Diosi lacdtica nwderna.
Seiio t·es :-Hemos emprendido éste aüo vengar
a Jesncristo i al Cl'istianismo de los ataques de la
falsa cien cia, i eh particulat· del fantasma científico
que se in itula m tre nosotros la critica ; hemos
empreudido sobre todo mostrat· cómo, pot la oposicion
que hace a la Divinidad de Jesucristo, se
condena a sí misma al deshonor de a contraclic~
cion. La fata!i ad del error como la de la iniquidad
1~ es mentit·sea si mismo. Mentita est iniquitas sibi.
1 La critica nueva se presenta como la mas alta
espi'esiOI de la ciencia i del Cristianismo ; noso
·¡ tros hemos reconocido en ella, a la luz de la evi-dencia,
lo<3 dos caractéres que la distinguen o mas
1 bien la deshonran : que es anticientífica i anticrisJ
tiana en sumo grado.
1 Es anticient(fica porque no verifica en sí ningu,1
na de las condiciones elementales de In ciencia :
una definicion clara, un objeto preciso, principios
ciertos, conclusiones rigurosas. Es anticristiana
¡ porque, al t ~·aves de sus admiraciones i sus 1·espetos
aparentes por el Cristianismo, deja traslucir por
· \ todas partes sus ódios anticl'istianos. Todo lo que
toca del Cri tianismo lleva la huella de sus golpes i
1 de sus desprecios ; tanto que si le cercenais todo
lo qne e1la ataca, no queda nllda de ese Cristianismo
que es el vuestl'O, nada, ni aun Jesucristo.
Ya conocemos esa nueva potencia que ataca a
Jesur.·isto cubierta con el doble presti ··o deJa cien"
cia i del Cristianismo, esas dos cosas etemamente
populares ; ya está juzgada, i desde ahom. sus
maniobras, cualquiera que pueda set· su habilidad,
no os engañarán mas. Pero no es bastante habet·os
hecho conocet· al adversario; es precis~ determinar,
siquiera bajo un aspecto jeneral, la posicion
rc!'pectiva de Jesucristo atacado pol' la crítica i de
la crítica que ataca a Jesucristo.
Parto de un principio admitido i reconocido
como incontestable en otro órden de cosas, i que
encuentra aquí su aplicacion lejitima Hélo aquí :
1 la posesion vale título, i debe suponet·se lejítima
1 basta b demostracion evidente de su ilejitirniclad.
R Desde tiempo inmemol'ial mi faJl?ilia está en po~eu¡
sion de éste campo, patl'imonio de mis abuelos;
1 vosotros venis a disputar nuestros derechos dicién-
1
do nos: '' vuestra posesion no es sino una usurpa·
cion, '' A vosotros os toca dat· vuestt·as pruebas, a
vosotros demostrar, con vuestros a•·gumentos en
1
la mana, que nuestra posesion no es lejítima. Si os
faltan las pruebas, la posesion nos vale título ; si
1
la demostracíon os falta, la propiedad nos queda.
_ A la luz de éste principio, podeis ver dibujarse
claramente la posiciou respectiva de Jesucristo en
1 posesion de su Divinidad,i de la crítica contemporáneé\
que viene a colocarse en guardia contra esa
Divinidad. Jesucristo delante de su advel'sario es
' un 11oseedo1· secular: diez i nueve siglos han pasado
po•· su posesion, i le han tt·aido la sancion de
todas las intelijencias que la han ratificado. La
cl'itica nueva encarada con Jesucristo, es una mala
litigante que, sin ningun titulo viene despues de
casi dos mil ai1os a disputm·le la lejitirnidad de su
. posesion. Nosotr9s tenernos derecho de decil'le
1 tatnbien: os toca dar vuesb·as pruebas. Jesucris'
to Dios está en posesion de las almas, o si quereis,
las almas están en posesion de la creencia en la '
Divinidad de Jesucristo. Vosot•·os decis que tantos
siglos han creído sin motivo, decís que Jesucristo
ha poseído sin razon ; a 'osotros corresponde
demo t•·at' que la posesion de Jesucristo es ilejítima
i que nuestro dogma no se sostiene.
No hai nadie, seúot·es, que no pueda entender
la sencillez de ésta demostnw.i on , i la firme1.a
gt·nnítirn del tm·reno en que no apoyamos. Dibujando
así frente a frente In drfensa i el ataque, no
hacemos una petirion de principio; no suponea1os
·la cuestion misma, es decir, la Divinidad de Jesup '
cristo ; admitimos o mas bien patentizamos un
hecho inmenso : el reinado uuiversal de Jesucristo
Dios en la humanidad. I uecimos que la crítica
contemporánea es absolutamente impotente .J3t'a
destruido. En efecto, Jesuc1 isto Dios tiene el títu-lo
de Dios i está en posesion de una monarquía 1
rnilagt·osa históricamente inconstestable, i en dere- l
eho ésta reyedad es cirntíficamente inatacable,i su -
dcstruccion racionalmente imposible. 1
l.
Señores :-Permitidme princi inr éste discurso
por las pl'ime1·as palabras que os ha dirijido éste
año nuestro' digno i venerable Pastor: "Jesucristo
llena PI mundo, i los siglos llevan su nombre. , To-das
las jcneraciones se inclinan ul pasar ante EL, i '
sus altares fundados en las conciencias, ro'deac os
de respetos i defendidos por el a mol', desafia.n las 1
injurias de los hombres i la mano de los tiempos."
Grandes i nobles palabras que reasumen admirablemente
el hecho incomparable que yo debo renovar
en vuestl·os recuerdos ~ el reinado de JesuCJ'isto
Dios eu la humanidad.
Lo pt·imero que debemos hacer efectivamente
ántes de entrar en el corazon del objeto, es poner
ante vuest•·os ojos tal ' 'ez distraídos, éste sorpren- 1
dente espectác-ulo : quiero decit·, el hecho históri~
coi palpitante de la rcyedad soberana de Jesucri '-
to Dios en las Naciones i en los siglos. Nada mas
grande ni mas decisivo puede ser aquí abajo, objeto
de vuestl'U relijiosa cont-€mplacion ; porque
no es solo en la plaza de San Pedt·o de Roma, smo
en todos los puntos del espacio i del tiempo i en
todas las profundidades de la humanidad, que la
bistol'ia ha esct·ito ésta palabra que aclama pol'
donde quiera i siempl'e la victoria de Jesucl'isto i
el triunfo de su Divinidad:-Christus vicit, Christus
1·egnat, Christus imperat. La crítica que
saca el cuerpo a la dlscucion de todo lo que tmstorna
sus ideas, deja a un lado éste hecho inmenso;
finje no percibirlo a fin de no apreciarlo, porque
siente todo el peso de un testimonio que la
agobia. azon decisiva para restablecerlo en sus
gt·andes propm·ciones, puesto que fot·ma un muro
invencible alrededot· del dogma fundvmental.
Cuando se considera en su vasta estP11Sion éste
reinado de Jesucristo, se presenta al pensamiento
del obse ·vador con tres caracléres que forman en
la historia un fenómeno sin igual. Si no se quiere
ver en él sino un hecho humano, queda uno estupefacto
al contemplar su lonjitud, su latitud i su
profundidad : su latitud en el espacio, su profm -
didad en la humanidad i su lonjitud en la dmacion.
La primera gloria de éste reinado de Jesucristo
Dios, es su estension en los espacios i su poder a
que no hai ott·o comparable, puesto que ha vencido
todos los obstáculos i fmnqueado toda$ las fronteras
que se oponían a la realizacion de su imperio
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
84 EL CATO L 1 C O.
sobt:e_la tiena. Y o pod ria detene1·me a m ostra t·os
el estandat·te de Jesucristo franqueando todas las
]Jarreras que la naturaleza material opone a los que
han tenido el insensato sueño de la dominacion
univet·sal. Vosotros veríais éste estandat·te mas
glol'ioso que todos, dnndo la vuelta al mundo i
flotando sobre todns lns altnras. Lo ve1·iais lle\'ado
po1· hombres sin poder, sin prestijio i sin nombre
al traves de los rios, de los mares i de las
montañas, plantarse en el seno de las Naciones i
en la cumhre de Jos imper·ios, sin pedir a la espada
que ]e abra el camino, sin que ninguna violencia le
l·aya dado la mano, regado solo con la sangt·e de
Jos mismos que lo· llevan. L(} vel'i ais volm· de un
polo al ot1·o del mando mas rnpido que las águilas
romanas i francesas, s-in que el vapot· Je haya dado
alas, sin que la indnstl'ia le ~wya allanado los
montes ni colmado los valles. Esta marcha triunfal
de Cristo a traves de los estorbos que ha encontrado
en la na tllt'aleza,. es un hecho tan no todo i
tan vulgar, que me bn-sta habéroslo hecho presente
1 i despertado su recuerdo. Pnt·a establecer su reina:¡
do la Divinidad de Cl'isto tenia ott:os obstáculos
l qu~ H'ncet·,. otras bat'l'el'as qne fmnquear. ¿ Cuáles,
me preguntais Y Lns ~e las idl'as, Jas d.e las
costumbt·es, de las instituciones,. de las nacionali-dades
i de las relijiones. ·
Bat·t·e¡·a de las ideas.-Quién no sabe Jos abismos
pt·ofundos que caba entre uno i otro pueblo
la separacion d.e las d'octrinas i el antagonismo de
las ideas?
Qué obst~ículo no encontraría en el borde d.e
éste abismo el dogma conquistador de la Divinidad
de Cl'isto ! Sitlembat·go, ha sal vado el abismo :
filosofías del norte, üiosofías del mediodía; Ja
idea oriental i la idea occidental, se han encontt
·ado de rodillas delante del Cl'isto Dios en uua
misma fé i en una misma adoracion ~
Barrera de las usa con ÉL, como EL i por EL, i todo pensa- puesto, ha sido reconocido, amado i ado1·ado como
miento cristiano es el reflejo de S\1 pensamiento. · Dios. Supt•imíd por un momento la éreencia en su
Todo lo que es confomle a su palabr·a, es vet·da· Divinidad i engrandeced luego tanto como vuestm
dero en la medida de ésta conformidad; i todo lo imajinacion de arti$ta pueda engt·andecet·la, su
que e opuesto a su palabra, es fa\so en la medida figura de hombt·e, de sábio i de lejislador, i nada
de ésta oposicion. As·í en la esfe1·a de las cosas se comprenderá ni de ésta dictadura interectual, ni
decisivas i sustanciales no hai mas que un pensa- j de ésta fecundidad moral, ni de ésta acéion social.
m.ier to.: ~1 de Cristo. I rada semejante a ésto se Si Cristo no hubiera reinado como Dios, la humaha
visto nunca, 4 ni aun l~abria podido imajinarse. nidad habria creído en su palab1·a poco mas o méEs
la supr·emacia mas podemsa ejercida sobr·e el nos que como cree en la de Sócrates,se habría ins-
' pensamiento - Es In dictadura de las intelijencias pirado con sus virtudes poco mas ó ménos que co-
Jibremente aceptada i divinamente ejercida. m o con las de Sócrates i habría respetado su auto-
En el órden moral ci reinado de Cristo no es rielad poco mas o ménos qua la a e Sócrates.rnénos
profundo; i si me puedo espr·esar asf, Citad una sola Nacion que haya pedido aSóapar
·ece mas p1·ofundo aun. Miéntt·as que la huma- crates o a otr·o sábio de una ilustracion igual, Ja
nielad cristiana lleva en su intelijencia trasfigurada, razon de la vet·vad en el órden intelectual, la razon
su Cristo verdad, lleva tambien en su corazon del bien en el órden moral, la razon del órden en
f tt·asformado, su Cristo santidad; i así como el el órden social. Citad un solo hombre que haya
Cl'isto verdad es para ella la regla de lo verdadero, llegado a ser bajo ésta triple relacion, en un solo
' el Cristo santidad es para ella t·egla de todo bien. pueblo siquiera, el resorte de toda la vida i laim-
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
rf 8~ EL C-ATÓLICO.
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El mas afortunado de ésos sábiós no ha pasado de signo. I cuando Mahoma mismo vino a negar la
los límites de una escuela i de las fl'Onteras de una Divinidad de Cristo, era demasiado tarde; Jesu- ' ·
secta, porque la humanidad no puede hacer mas cristo reinaba como Dios. La fé en su Divinidad
por un hombre. Nunca podrá dm· a al'gU>no ésta babia_ echado ya raices tan profundas pot· todas
tl'iple dictadura que se impone soberamente a las pades, que no habria sido posible sacmlirla, sin
doctrinas, a las costumbres i a las sociedades. conmovet· el mundo.
¿, I por qué i cómo ha podido hacer Jesucl'\sto en ¿Cuándo, pues~ Jesucristo, si no es mas que un
cien pueblos lo que ningnn hombre h'a podiclo ja- hombre, ba itTogado a la humanidad la injuria
mas hacer en uno solo siqniera ? La razon es bren de hace¡•Ja prosternar ante 'ÉL? ¿Cuándo fué que
simple.-Jesucristo es el únieo Sábio, el imico Le- esa humanidad lo tomó en sus manos para elejislaclor,
el único Bei en quien la humanidad ha varlo spb1·e el altar i decirle por la primera vez:
adrimero que dijo : Cl'isto es Dios?' ¿ Quién
para destmirla. lo hizo ct·ee¡· a todos cuando ninguno lo c1·era aún?
Avancemos aun mas ácia el odjen de nuestra Segummente no fuet·on ni San Agustin) ni San
fé. A qué h?t'a de su larga Yida tom6 poses ion Jerónimo, ni San A robrosio, ni San Gregorio, ni
Jesucristo de su Divinidad? ¿ Fué en los siglos de San Juan Cl'isóstomo, ni San Atanacio; i ménos 1
tmbajo i de nacímiento social que han p1·ecedido que todos éste, que se defiende bien por su guena
a la gt·ande edad cristiana 'l ¿ Entónces, cuando célebre contm Arrio, de la gloria de tal inveucion.
los pueblos se unian a los pueblos i la barbarie ¿Quién, pues, ha b01·dado el primero sobre el tese
confu dia con la civilizacion? N6. Entónces jiclo de la historia la sublime leyenda? ¿San Hi·
los pueblos bárbat·os adoraban la Ct·uz i al Ct·uci- lario? ¿ San Epifanio? ¿San Cipriano ~ ¿ San
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El. CATÓLICO. '87
)ustino? ¿Clemente de Alejandría? ¿Tertuliano?
i Arnobio? ¿ Atenágoras? ¿Quién por·fin~ ¿Tal
vez San BernabéT 'O San Pedro, o San Pablo, o
San Juan?~ Ah! ¡San l"uan! ¿no sería él el que
tuvo ésta estraña idea? La crítica lo sospecha,
i •••• es cierto que San Juan en su Evanjelio.,
afirma con mns insistencia i solemnidad, el dogma
1 soberano. Pero es que cuando él escribía su Evanjelio,
la negacion se levantaba ya delante de la
afirmacion. Ya vivia la negacion gnosrca de que
vemos aun de r- prres de diez i ocho siglos miserables
imitaciones. I ucedió lo que sucede siempte en
Ja gran lucha de la verdad con el et·rot· : se insistió
sobre la afit·macion al apal'ece•· Ja negacion.
Lo qtte nosotros hacemos hoi delante del gnosticismo
de éste tiempo., Jo hizo San Juan,a 'SU manera,
delante de la crítica del suyo. Entónces San Juan
habló como todos, i todos como San Juan ; todos
afirmaron el mismo dogma i pt·ofesat·on la misma
fé;todos dijeron: Cristo Salvador,Ct·isto Redentor,
Cl'isto Señot·, Cristo Rei, Cl'isto Dios.
En esa época, que toca al óríjen en que brilla a
1 toda Juz la cuna del Cdstianismo, dos cesas mari
cban en toda su plenitud, el amor a Jesucristo en
·¡ los corazones i la fé en su Divinidad en las intelijencias.
Entónces éstas dos palabras ·: arpo a Jesucristo,
adot·o a Jesucristo, se oían por todas par-
' tes como la voz verídica i el eco sincét·o de toda
alma crist"ana; i es preciso querer estar ciego
pata no vet· que entónces, i sobre todo entóuces, la
fé fil'me , absoluta .¡ ardiente en la Divinidad · de
Cristo, abunda i sobreabunda por donde quiera.
Así,pues, si no es un sueño de vuestt·a irna.jinacion,
sinó son simples uto.pias, descublidnos aquí uu
lugar pat·a vuestra leyenda i una cuna para vuestro
mihto.
' 1
No hai mítho nqui: no hai mas que un hecho;
el l1echo brillante ele la fé de todos los Cristianos
en la Divinidad de Ct·isto. No hai tal leyenda:
no hai sino historia ; la historia que se desarrolla
al brilio de su propia publicidad ; la historia que
se afirma i se escribe a m~dida que ocurre lo que
refiere, en monumentos que subsisten i en obras
que viven ; la historia que, desde hace cerca de
podrá salit· sino pm·a emba1·carsc en el pri.
1 ruer buque que zarpe de ésto puet'to.
Notífiquese en el día ésta resolucion.-Lope C.
.Nieto.-El Secretario, J. JUendez Zapata.
En el mismo día, rnes i al' o, el seiior Alcalde
asociado del infrascrito Secretado, se constituyó en
el palacio Episcopal del Ilustdsimo señor Arzobis-
1 po de Bogotá, doctot• Antonio Henan, con el objeto
de notifiearle la anterior t·esolucio.n. I pt·eseu.
te dicho seiwr Arzobispo, se le Leyó pot· el espre.
sado inft·ascrito Secretario, la resolnc·on en refe-rencia,
e ~m puesto de ella dijo: que reconoce al
1 señor Lope Nieto como Alcalde del Distrito de
Gqrtajena; pet·o que se deniega a fhmat· ésta dilijencia,
porque ,no lo reconoce como la autoridad
con'lpetente para dal' cumplimiento respecto de él a
l{l lei de 1.7 de mayo, sobre '' inspeccion de los
cultos; " porque el lugm· de su residenria no es
éste sino Bogotá, en donde está su Silla Epi~copal.
, , Con lo C\.llll se dió po1· terminada la pt·esente diliJencia
que firma el señot· Alcalde con Jos testicros
de quienes se ha acompaüado; los señores l\'Ielquiades
Mazeneti i Pedro l"élix,pot· ante mí el Se~
cretal'io, Lope C. Nieto.-JJ. 11/a::;enet.-Pedro
Félix.~EI Secretario, I . .nléncle::; Zapata.
J~s fiel copia de su orijinal a que me remito ¡
la cual compulso de ón1en del señor Alcalde del
Distrito i,para en~r~gat· a! lllmo. señor At·zobispo
de Bogota a su sohcttnd-El Secretario,/. JJiendez
Zapata.
Estados Unidos de Cotombia-Estaúo Soberano
de Bollvar-Alcaldla det Distrito--Núm. 258.
-Cm·tajena a 15 de junio de 1864.
Al !Ilmo. Sr. Dt·: Antonio HeiTnn, Ap?· de Bogotá.
En el memonal de US. Illma, de esta fecha se
ha resuelto lo siguiente: '
<{ Dése la copia que se solicita; i en cuanto a
la dt-elat·atol'ia {}Ue se pide de la resolucion de la
Alcaldía del dia de nye1·, pnra que se fije el té¡·mino
del estt·niwmiento decretado, ella entiende
que el ünico que puede fijm· ese término es el
·mismo lllmo. seüol', sometiéndose al mandato de
la lei, cuya negacion o prescindencia es lo que
motiva el pt·ocedimiento de la Alcnldía en estl'icta
o~servancia de la lei ; porque la di;posi<:ion
del art1culo 4 ..... se refiel'e a castigM Jos hechos
el'ijidos et~ delito e~1 el a1'tículo 3. 0 i su parágrafo,
que ~on 1nclepenchentes de la accion que castiga
el artículo s.o.-Comunfquese.
Tengo el honor de comunicado a US. lllma.
para su intelijencia.
Soi de US. Jllma. yuestro atento sel'vidot·
Lope Niet~.
A 1 seüo1· Alcalde del Distrito de Cartajena.
Carlojena .. t 5 de funio de 1864.
. En co~1te~taeion a la nota de U, fecha de hoi,
d1go lo s1gmente :
Increíble es que una autoridad qut~ se dice competente
para aplicm· uua pena como la de estmñamiento,
ignoro el tiempo que debe durm· él
cuando la lei de que se hace ejecutor ha seüalad~
el máximu'fn i el minimum. Ya i\ntes he dicho al
scñot· Alcalde a quien. me dirijo, las razones en que
me r.undo para negarle Ja c.ompetenria en éstas
c~t es twnes respecto de mí, i ahora le digo, que no
ti~uo derecho p:na darme consejos, porque como
Arzobi po·, bien 'Cono~e: _mis deberes i sé cumplir
con ellos. .
Qued.o de U. mui a-\ento sen,idor, ·
ANTOr ' IO ARZOBISPO de Santafé de Bogotá. 1
Al ciudadano Presidente del Estl:\dü S. de Bolívat·.
Cartajena, 16 dejunio de 1864, 1
Antonio HetTan, Arzobispo de Santafé d"e Bogotá,
a vos con el respeto i en la fot·ma debida 1
digo, que el dia 1 - ~ de éste mes el seüot· Alcalde
del Distl'ito, asociado de su Secretado i dos tes- 1
tigos, me notificó un auto en que dispone que
permanezca preso en la éasa que habito i que salga
estrañado de\ territ~l'io colombiano·, en el pl'imer
buque que parta de éste puerto. Y o manifesté
que aunque reconocía i acataba· su autol'idnd como
Alcalde de éste Distrito, no lo ct·eía comp~tente
para ejecutar respecto de mí la lei de 17 de mayo,
sobre inspeccion de cultos. Las razones ciudadano 1
Presidente en que me he fundado son las siguientes
: el artículo 7. 0 de la lei seilala a los Ministt
·os el lugnt• de su residencia, pm·a dar el aviso i
prestar el juramento, i como yo estoi aquí tr:msi·
toria i accidentalmente, no es <'ste ef lugat· de mi
residencia ql:le es el que designa Ja Iei ; i por consiguiente
no es el señor Alcalde de éste Distrito la
autol'idad competente para conocet· en éste negocio
respecto de mí. Ademns el m·tículo 8. 0 dice
así. " La pl'im.era autoridad local en el órden administnltivo,
que es la competente para oít· el aviso,
recibil· el juramento i dat· Ja copia certificada de
que trata el pnrágrafo 1. 0 del artículo 6,o es tam-
. bien !a competente pant ót·denat· el estrailamiento
prevenido en el &rtículo 7. 0 _ " Ahora bien, el señor
A!calcle no es la pdmera autoridad de Ja eiuclad
en el ónlen aclministmtivo .. i pot· lo mismo,no
creo qne sen el designado por la lei pam ponerla
en ejecucion. Uitimamente, estando en Bogotá la
Silla Arzobispal, es aJJí i no aqui en donde debo
decit· si doi o nó el aviso, si presto o nó el juramento.
Estos son ,ciudadano Pt·esidente,los fundamentos
que he tenido para no cono<'et· fa competencia del
señor Alcalde en éste negocio, i éstas mismas las
que tengo pm·a pediros que mandris cesat· todo
pro.cedimiento respecto de mí, i que se me deje en
libertad para volver a Bogotá. Mas, si no accedeis
a ésta mi peticion, os pido que proi'Ogueis el
tiempo angustiado que se me ha seiwlaclo pam saJit
· estmñado, hasta el pt·óximo mes de agosto, i
que mi salida sea para el punto que yo elija t>n
otro país i no en un buque que n1e condujera a
donde yo no debia estar.
Para resolvet· ésta peticiou atended, c-iudadano 1
Presidente, mis cil·cunstancias ; mi edad es avanzada,
mi salud está notablemente detel'iot·ada, lo
ardiente de éste clima me' ha dehilitt\do en estremo,
i no teniendo recursos pam trasladarme a
6-tt·o Jugar i subsistit· en él, necesito gcurrit· a Bogotá
para pt·oporciouármelos. No seria honroso a
Ja Union Colombkua que un Arzobispo, anciano i 1
achacoso, fuera a mendiga t· el pan en un pals estranjero.
Os prometo que si ántes del tiempo cuya
próroga os pido, yo pudiere salir fuera de la
República, así lo verificaré.
Jamas olvidaré,, ni podrá bon·arse de mi comzon
,el recuerdo de los favores de que os soi deudm·.
A vos ciudadano Presidente pido que resolvais
favorablemente éstas mis peticiones.
ANTONIO ARzon:spo de Santafé de Bogotá.
IMPRENTA CONSTITUClONAL.-POR N. PONTON.
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El Católico - N. 59
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El Católico - N. 36
PERIODICO DESTINADO A LA DEFENSA DE LA RELIJION CATOLICA, APOSTOLICA, ROMANA.
'l'Rilll, 3. 0
SRES. SUSCRITORES!!
Con elan•esentc n•í•net•o tei'·
nahaa el tct•eei' tl'itncstrc. i es
necesario reno,·a¡• ei abono.
PARTE OFICIAL.
CIRCULAR.
Jrquidiórcsis de Sauta(é de Bogo tel. -
.Scaeiar!a del Gobierno Eclesicistico, 26 ·
ele enero de 186'~.
Seiior VicJ~rioprincipal dr. ....
I.:ts últimas publicaciones de la
prcma anlicalúlica, de que tendrá conocimiento,
si no dircctamcutc, si por
Jos documentos de e!'lc despacito dirijidos
a alac:tl'las i en lns cuales se
ha inscrlado parle de rll:ls; las que
se anuncian en el follctiu tic •·El
Tiempo" correspondiente al 6 riel
col'l'ieu te, i va rías otras de su jénO'J,
habr:'tn pCl'511aclido al sclíor \'ical'io
de que la empresa de dcscntoliz;u· el
pais se Iom:~ ya con un ardor digno
de mejor causa. Una triste cspcl'iencín
nos Ita hecho conocer que los periórlicos
irrelijioso~ clistribnidos con
lli'Ol'nsion por todos lo ángulos de la
llcpúbli~:a, han conompido pat·Lc de
los pueblos, hacit'·ndolcs av:~uzar en
la cnncn1 del mal, aunque, pot· otra
parle, las doctrina" pcmiciosas, uo
!tan cal~rlo en la!) lllasas ~cncillus e
inocentes que forman la mayol'ia ele
nuc~lras poblaciones. En La! c· Lado
lu dif'nsiou de las publicacionc qne
sostcngnn la can'a clel catolici mo,
que descubran los sofismas empleados
por los acl\'ersarios, •q'uc refuten sus
doctrinas e impidan que In cla~e igJlot
·antc se alucine con los trabajos de
tri!'ltcs plajistas cngalatHnlos con el ropaje
de la verdad i de l:t norcdad, es
de la mayor importancia; i esto lo cottociú
el Ilustrísimo scí'íor Arzobispo
~losr¡~tct·a cnando Lomaua con cmpe·
í'ío la empt·csa de fnnclat· el periódico
t¡ue con el titulo ele "El Catolicismo"
sostmo la lid pot· mucho
tiempo.
Pero, pr< :ciso es confesado: entre
nosotros el egoísmo i la inclifcrcncia
tienen la cstncsion que contrista el
cspiritu del que lije seriamente susmiraclns
en el ponenit·. De nlll el (}llC
a paso que los enemigos de nuestras
cree ncias prodigan en lujosas i colo~
a lcs formas sus execrables pt·oclucioucs,
la causa esclusivamentc católica
no tiene en la prensa sino un órga-
Bogotá. G de feJtret•o ele 186.&. Nl1U. 38.
no (liminuto que apénas es com.ci•lo r
e insuficiente para las neccsi,larles rlc
RETfiACTACTON.
Sr. Provisor Vicario ji'(L{, del Ar:obispdo.
la época; i con se•· tan diminuto, no
se puede, aun, hacer frente a los gastos
qne demanda, por lo que el seitot·
Rcdactot· que por sostcne•· la fe ele
nuestros parh·es, se encargó de tan
ingt·ata ta¡·ea en ci¡·cunstancias dificilísimas,
tenchá que ahanclonarla
carecicn,lo de recursos pecunia•·ios,
pa1·a continuada. Mas como no es
posible que abandonemos el campo
i permitamos qnc po•· indolencia de
los uno~ i audacia de lo olt·os el
pueblo pierda sn relijion; lleno de
coufiama en el resultado me rlir·ijo
' al sci'1 ot· Vi ea río, a fin ele que se sit·-
va e:ilat· a lo~ scñot·es párrocos para
qne ton sus snscricioncs (nn fnerle
por trimestt·c) no solo :;ostcngan el
HCatólico" sino que :~umenladas es-l<~
s puede tlarse al periódico ma ·ores
rlimeneiones Cll algo correspondien-tes
a las cxijcncias actuales. ]~sto al
mismo tiempo facilitad. el despacho
de la Vicai'Ía de su cargo, p11es tC;niendo
''El Católico" una parte olici:
ll, scrJ. mejor medio ¡m·a ponct· a
los sciíot·es parrocos al corriente rlc la
morcha del gohict'tiO cele i<íslico i e\'
rtar los cmbm·azos 'lne de otro modo
se presentan.
Para facilitar el envio del pct·ió,lico
a los selíores cut·as que se wsrriban,(
creo que niugnno dcjat·a de hacerlo)
se dirijira por la secretaria a
la Vicaria principal, ele donde con
nH:nos dificultad puede scgnit· a su
de tino a en yo efe~Lo se ha procma-do
cdeeer. No teme pt·etender en voz
ta que se le pct·mita eonslituirsc
·bitro entre el bien i el mal, entre
EL C.tJ.TOLICO.
la venlad i el error; i tomar· po1· vit·tudcs
sus propias obras i por V!)rllndes
sns propios desvaríos. Nl orgnllo
no quiere obedecer sino a sí mismo,
ni creer sin compt·endct·.
"El o•·gullo no es solo la rebeldia
contra toda superioridad, es tambien
h impaciencia de toda igualdad: es
el golpe modal dado a la ft·atcrnidatl.
No hai mas que la humildad cl'istiana
que pueda cnjendrat· en bs almas nu
amot· sincero de la igualdad ft·atcl'llal:
i la razon es, que para querer sinceramente
iguales es pt·eciso aspit•at· a
desccr.der :-Ved a ese demagogo anticristiano
que va pot· el mundo predicando
la igualdad i la frateruiJarl:
vo~olros ct·ecreis La! vez que e.s un
hermano que busca iguales; de ninguna
manc1·a, es un sobct·ano que
b mea vasallos.
'
1En rcbeldia contra toda s perioridad,
impaciente de la igualdad, el
orgullo es mas que todo, opresor de la
infcriori fla.J. El ma yor contento del
orgullo es hacet· scnli1· al inferior el
pe so ele la 1lominacion: cnalquic1'a
diría que él se alcgt·a tanto ma~ de la
dich n de mandar cnanto mas snft·e
otro de la uc ccsidad de oucdeecde."
El mismo al\tOt' df ~c:
" El ot·gullo enj cn1lt·a to1h s l11 :; pa ~
ioncs enemi gas de la socied ,lll. La
in solen cia , la atnhi ciuu i el lu j o son
sn s ltijo s. Ab orr ec e toda antoridatl :
la del ¡wlrc, la del maji~ll·ado, la del
pontífic e, la de Oio s. Hace ele lo s
pu eblos hor·das in gubcm ablcs, del
de potismo una necc~i lln11 i de la soci
cdaclllll infi erno . Por liu, el orgullo
es el ver lngo del orgullo o i rl verdu
go de cuanto~ le rodt!an."
1 el vértigo tl el orgullo se ha apodl'radci
de une slt·a socicclarl; es ne cc s~
ll'ia la humildad para . alratln . El
ltot·t·o t· ele ol>cdcect·, he aqui el cat'áctct
· de las secta s IICO-CI'Í liana s.
En In situa c: ion en qnc uos hallamo s,
si Oios bnja ·e del cielo a gohcmat·la
ticrL"a, los homhrcs con . pit·arian contra
Dios. "Este Gobiel'llo de Dios,
dice el aulot· ya citr~do, el mas pcr·
fecto que pueda imajinarse, sel'ia
pat·a muchos hijos de este siglo el
mas insopol'tablc de los Gobiernos,
pot·quc seria la sabiduda, el ót·den i
la justicia en la mas elevada potencia.
\'e(! pot· qu ¿ el Gobiel'Oo que
.se pat:coe mas -al d(} Dios -sal>t·e -la· tie-·
l'l'a, porque es sn mas al la manifc:.ta-cion,
quier·o decir, el Gobiemo pontifical,
Lienc el privilejio incomunicable
de los odios satanicos. Satanas
está contra Dios, i los representantes
de Satanás esta u, por la fuerza de las
cosas, armados contra lo$ re¡lrcseutnntos
de Dif)S, Roma, el gran ccutt·o
de la autol'idall; Roma, la autoddncl
mas elevada, mas permanente i mas
universal, es el objeto de los odio s
mas pr·ofnndos, mas permanentc.:s i
n1as unhersnles."
En el mundo antiguo el homurc
había subido con Satanás lwsta disputar
a Dios las adoraciones que se
le deben, i habia caido con Satau;\ s
hasta los mas profundos abismos de
i~riquidarl. La humanidad se perrlia
queriendo dciflent·se; Dios ~e humanizó
para snr·varla. Los hombres decían,
inspÍI·ndos pot· la soberbia: snIJ:
unos, subamos sicmpl'c; el pequciio
qncria ser grande i el gr·aude Dio s.
Dios se abajó ha11ta ellos para enseñarlos
a humillarse, IH1seó a los pobres
i los peqneilos para encomctHiarlcs
la salvacion del mnnrlo, i para
hacerlos capaces de tan grande oLH'a,
les dijo entre otras coatimicnlo nnirct·salcs. Pot·quc la
misma razon que les hnce inclina,.
lwjo la autoridad, los hace inflexibles
delante de la uslll'pacion ; i cuando
el homb1·e aspira a tomnt· el lug:n de
Dios t•elnli\'ameute a su obediencia,
son ellos lo que gritan aunr1ue se les
amenace con la muet·te: Sabed qu e
concicnc obrdeccr a Dios ántes que a los
lwmbrrs. Cot·de1·os delante de la antoridacl,
son leones delaulc de la til'ania."
neasumamos: el prog•·eso es "la
libt·c gravitaciou de la humanidad
:icin Dios," es el perfeccionamiento
material, intelectual i moral. PerO'
los dos pt·imeros sin el tercero no son
mas que una apariencia rle progtcso
que ctl\tuclvc una decadencia •·cal.
Los pueblos corrompidoi, desde Dahilonia
ha~ta el Bajo Impet·io, Huuca
han despedido mas hl'illo que en la
YÍ~pera de su ruina. El verdadero
¡wogrcso ltnmauo es el adelanto en la
Yi1·tud, i cnatHio e_:;! a ha llegado hasta
el heroísmo, hasta la sanli!lacl, el pt·ogt
·eso ha llegado a su mas alto punto.
Pot• consiguiente el catolicismo, t'tnica
rclij ion e¡ u e prc cribe la sa oticlrul,
única que ha llcrado triunfalmente la
bandet·a de la Cruz sobt·e las •·uinas
riel egoísmo, ele la lujlll'ill, 1le la corlicin
i el Ot'gallo; única qnc Jta producido
santos i lo· pt·orluce todos los
días; es la únic1 capnz de llevat• a la
humanidad a la perfcccion por la sen.
cla del pt·ogl'c~o. Ella inaugmó la ci'
ilizacion moderna) ella asilo en sus
claustros las virtudes i las ciencias
cuando el mundo bárbaro las olvida.
ba, ella sola c¡;nHlujo a la sociedad
cl'istiana al brillante c·tado en ([lle se
encontraba cunndo Lutero Ja destruzó.
Es lltHt pt·eocupacion comun hoi
el jnzga1· cntet·amcnte bát•lxtt·os e os
siglo medio en c¡ue la inllnencia del
catolicismo et·a omnipotente; i sinembat
·go, nue lro siglo XIX, con todos
us adelantos, sn industl'ia i su
orgullo, apénas es bastante cnlto para
admirat· las ob1·as del jenio de esa
época, que en vano se esforzariá en
imitar.
EL CATOLICO.
Solo el Catolicismo ha perpetnado
en su pmeza la locura de la ct·uz, i
pot· medio de esos votos mon;ísticoc;
qnc hoi se consiuct·an antisociales, i
que obligan alr¡ue los hace a obser·
var en un g1·arlo lteróico la pmaza, la
ltumildatl, la pobreza, la car·iuad,
Ita combatirlo las socicrlatles ios vi·
cios mas antisociales; ha llevado a
todo · los t•iuconcs del mundo la luz
del Evajelio i con ella las ciencia~, las
artes i la armouia social; ha mejorJclo
inmensamente la suerte de la inmensa
mayoría de la humanidad
combatiendo el lujo, la codicia, el
Mgnllo, i la licencia ele los gt·andes,
i luch :utdo pat·a liht·at· a los petlueilo:
i del vicio, de la misel'ia, de la
i;,norancia, de la esclavitud.
I el Sacet·dotc? "Es, dice el jesui·
la tantas veces cilarlu en nuestro ar·t
ic11lo, la rcpt·escutaciou oficial rlc la
santidad de Dios entre lo'! hombres;
el cmhajarlot· del Dios tres veces santo,
que lleva sobt·e sl 1111 •·efiejo de la
sanlidari uiviníl, a (,l manera que \ln
embajador lleva sobre sí unt·e.flcjo de
la majestad real: es, al pié d
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El Católico - N. 36
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El Católico - N. 37
PERIODICO DESTINADO A LA DEFENSA DE LA RELIJION CATOLICA, APOSTOLICA, ROMANA.
-- - --- -------------
'I'IUJU. ;f. 0
~RES. §l'SCRITOBES.'
'ou l'Ste animero se elnpil'za
el euar~o trimestre.
PARTE OFICIAL.
· l'icarl~jcnerol.-Éncro 30 de 186á.
El presbltero sriíot· Itamon Olarle,
quien fne declarado <:ensurado, pot·
haber prestado el juramento jeneral,
prevenido en la lci de 23 ele abril del
aiío pró. imo pasado, como aparece de
In rcsolu~ion de O de setiembre, comunicada
por el seilot· Secretario de la
Vical'la jeueral, ocurrió a la aulol'i.
da(! eclcsiastica, C!lpouíendo razones
pnra comprobar que su juramento lo
prc·Ló cumpliendo con un deber de
:ncct·clote. Por luminosas i fundadas
c¡uc le pat·ezcan c:as r11zoucs, ellas
lwu qncdado no solo dc!;ft'llidas iuo
f;ollC!c~uacla~, dc~;ck ns,
<'on la de!1comcclida cat·ta ele 16 ele
noviembre ultimo, nadñ propia Cll tlll
•accrdotc, i que dice lo siguiente:
•· Dci.Jo manifc. tnrlc r¡ue en cstn
t·nr.stion no ,·eo ~iuo iutcrescs de pat·tido~
pcrscctJcion al partido i clero
libct·al. Tcugo tnis 1·azones i cllns me
Jwr:1n dcfendct· i \'indicarme de las
imputaciones i deshonra con ljllC Ita
querido mauicllarmc el gobiemoeclesiJs
Lico. Parece qnc csloi pcr uadido
que el seiíot· Proviso•· se quiere I.Jm··
l:u· de mi pcticion. Si así se quiere
herir mi dignidad, no .ser~,)'o el que
pase por e ta dcgradac10n.
Cuando el snccrdotc sciJOl' Olartc cscribia
estos irrespetos a la
<¡ne uo había sabido ni en Yclc1, ni
en Chirtuinqnit'á, que e tuviese Sll'>pcnso
o excomulgado, la coutradiccion
es mns que evideule.
La Vicaria jencral, para proced er
con mejo•· acictto, dio;pnso se oyera el
infot·mc del señor Vic11rfo de Snn iHaleo,
con respecto a la facultad de qu <'
habló dicho señor· Ql¡¡rte, i cou fecha
1 O de rliciembrc espnso qnc el sciíot
Yicnl'io de Sau ~laico no facultó a
11adie, ni resolvió, como aulo1·idad,
se prcstat·a el jmameuto. Que hizo
meucion del cliclámen del Vical'iü.
como un iueicleutc, i uo como cansa .
razo•1 ni argumento poderoso p:11·,;
apoyar los molivos de ~u juramento·
pero en su oflci_o de h de diciembre.
habln de "facultad" dnda por el \ i
cario ele San Mateo, i por esto la Vi
c¡¡rla re sol\ ió inchgar este hecho par.
resohct· meditada i concienzuuamcn
te t¡¡nto la olicitucl del seiíor Olart<
como la de Jos otros ~acerdotcs comprendidos
en l¡¡ nota citad:-.. Annc¡nr
el peticionario creería inopo1'luno e>
informe del :cñor \'icario de San ~la
1 e o, era de nccc · iclatl oírlo, i en 5 de
que ac~ba, dijo el ciíor Vical'io dt
San Maleo ';c¡ue no facultb a ning111
cclcsiásLico para que cometiera la in
famia dcjut·arobedccerlcJeS diamc
tralmcnte opucslas a la liberiad e in
clcpendcntia de la Iglesia," i ngrcg.
olt·as t·azones, i acompaiía t11~ a cnrl:
del ~eiior Cnl'a de Vélez, doctor llet·
nn1·do Olnl'le, para conoho¡·at• su in
f01·me de que no concedio la faculta<
de jurar. Todo e to conll·adice lo que
aseguró ante la autol'idad ecle¡:i¡'¡ ·tic,
el presbítero doctor namon Olarft
cuando dijo" que prestó el jurauwn-to
con consentimiento del licario
que a si 5\lCCdió. "
m acto de celebt·ar el santo :acrifi
cio de la misa en la iglesia de la lera
C1·uz de est¡¡ sindad tnvo lugar e3tau
do pendiente sn reclamo, i de . pue
del suceso desan'!'adable i escandalos<
"Al principio del mes corriente he
recibido, de nn moclo oficial, la circular
del 9 de sctiembt·c último, en la
que US. declara excomulgado al presbitero
Ramon O!arte, que se halla actualmente
en este lugar. Al siguiente
1lia de ltabcr Jleg¡¡do a cst~, me asegmó
que el señor doclot· Amezqnila,
como Vicario, lo había autorizado
para ejercer el sagrado miuislct·io. -
Que el {¡ ele ocl\1bre Ltwo lug¡¡r tlll:l
solemne procesion a Nuestra Señora
de Chiqninquirubliqtlese i frjesc c. tn res olncion
n la puct·ta tic la sauln iglesia Cntct
·al, en In iglesia de Cltiqniuqnirü i
case eutoclas las iglesia:; de la' ical'ia
e San Ualeo. Así se dcclnt ·a eu nomt•
e i por nutol'icln(l (le lo Sanla J~rleia
Católica , Apo slólica Uom :111a. ~
no . IF.l.CIO A. To sc.l , o.
El Sect etario, lliguct Jll'ia ·.
_ EL_i)ATOLICO. ~
"La Opi11ion " e.1 su núm e ro
9, insi te en la HCcesidacl de
e~tmir ac¡ui el Catolicismo i
unti~L e .te at re\·illo concepto on
·s s1gu1entes argum ento , :
. l. 0 P01·que la lgle~·ia Catú~
ca es una monm·qufa.qt¡e e.o;
rcciso aniquilar para establece,·
t Rcpúólica.-La familia es
na monarquía indudablemente
' orque el padre es un monai·ca
u ya voluntad es soberana. en la
a a, luego segun la lójica de
s Redactores de "La Opinion"
s preciso destl'llit· la sociedad
o.méstica para f~mdar la Repú·
hca. Las asociaciones de co·
1~r?i?, . l?s. ~~lejip.s,, .tod¡1s Jas .
ociedades ~011 una esp~cie ue
wnarquía que es preciso dcs
·uir para fundar la República
quien sabe qué especie de Re~
ública. Probablemente no se¡¡\
c¡uella en que el GoLicrno es
e todos i pé\ra todos, siuo la
ue se Jlama así entre nosotros ·
'
E.EJ CATOLICO. ,.
--------------- -----~----- ---·-
~ue consi~te en que los que se
dicen liberal~:s puednn despoti·
zar, oprimir i esquilmar a los
demas.
2. 0 Vm·iando los Papas cuya
vo:: e.'; oumipote1fte 11ara la conciencia
de los cátMicos, estos
depr>nden de lo.~ enores o de los
cap1'ic1Los de w1 lt,mbre que lwi
puede pensar lo contrm·io de lo
que su ptedece,~;m· penso ayer, i
de consiguiente no pueden tener
vi1·tltdes.
Eu la Republica ~ue se quie·
re establecer aquí, deLen ser
sPguramente los 1\lajistrados in·
mortales: no importa que la lei
no lo sea. 1 aunque la de los
c:itólicos este escrita sobre piedra
i sea dictada por el mismo
Dios, deu:eudo aplicarse por di·
fcr entes hombres, estos matan
las virtudes a de , pecho de la lPi,
es clecil', vuriau la moral i la fé;
pero en e "ta especie de Repu·
blica no sucede e. o, porque la
voluntad de un hombre es la
que impera i el círculo que lo
so . ti ene la hace mas infalible,
de lo que es el Pupa para los
católic os .
3. 0 La Relijion Catúlica no
deóc ser la relijion dellwmóre,
pm·que el/a fs antagoni•·ta de :m
espíritu., de su co1·azon i de sus
sentidos ). tiene todos los cm·acteres
del vicio.
Esto no consiste mas que en
el he<'ho ~encillísimo de que e
entienden las cosas al contrario:
se llnma. virtud al vicio i vicio
a l!l virtud. La Rclijion enfrena
las pasione i el corazou par.t
que no se desvíe el hllmbrc del
sendero gue conduce a Dios.
Levanta el espíritu hacitmdolo
superior n la carne: mata esta
.mora.lme.nte para levnnta1: aquol , .
i pone sobre este a Dio3. Pot· eso
corJdena. el robo, el orgullo, la
lascivia, la embriaguez &e, i
prescribe la humildad, la castidad,
la prbbidad, la caridad, en
fin.-Todas las leyes, aun las
civiles, condenan el de borde
de las pasiones. No se escriben
para premiar crímenes sino para
prohiLirlos i ca .tigarlü , i de
con~'iguiente so.1 antagoni ta ~
del espíritu, del cot·azou i de las
pasiones.
4. 0 Que el Catulidsmo varia
con lo.Y Papas i tiene 'l'::ualida. des
prestadrts al pagani~mw .
El paganisnJO es la adoracion
de los sentirlos impul~ados pc,r
las pasiones ha ta el e ceso. El
Catolici~mo combate las pasio·
nes, luego &c.--Ahora bien: Et
Catolicismo no es la vm·dad,
po1·que la vm·dad es inmutable i
el Catolici~·mo va,.ia.-Suponiendo
que tamana falsedad pudiera
probar e, como todas las sectas
cristiauctS han variado a11 el es·
pacio de tres siglos mucho mas
que el Catolicismo en diez i
ocho, con e 11 a.s no está 1 a ver·
dad. La \'enlad predicada por
Crist0 no está entera ~en uingu •
ua parte i Cri sto e un imposto·r.
Consecuencia lóji ca t el último
argumento ele "La Opinio11,"
qu e prueba r¡ue sus R t~da c tore s
110 ti t•ncn niugnna relijion, o s1
tienc11 alguna {'S la pa gana.
VARlEOADE S.
- Por cxci:acinn rl cl Congr es o, ~r.
hizo cargo el 29 del pn arlo, de b mi ·
t::~d clcll>odct· Ejr.cnli\'O de IJ Lniuu ,
1 seiíot· Junn ,\gnstin l'icoccbca co ·
mo Proemadot• tutcional.
-El din 30 del próximo p::~ . nr! o
mudó en esta citula(l el scilot· ~Innn c l
Defrnnds co. Padte ele una Humcro sa
familia, reducido ala mi~cria por con sccneneia
de nuc .;ltos funesto !\ odio .;
de pat·l irlo, i ricthlo perseguida •l e
mncrlc la relijion r¡ue sct·ria de ba ~<'
a la etluencion de sus hijo;;, 110 pud o
hacet·se snpcriot· a esos dolor e. mora les,
i se tlcspidio de este mnndo. Fut'•
a buscat· en el otro la vct·dadcra libertad;
i sincero eatülico, estará ltoi al
lado ele! To lo-podet·oso pidiéndole la
. feli.eidad para . n pobt·e patria, t1 tranqnilidarl
parn su intet·esante i \irtuo~a
compaflCra i el bien para su hijo ~
inocentes. Murió en el SeftoJ-. i ha
cmpezatlo para él la Yerrladera virla .
~Por corta de Roma, fecha 20 . de
noviembre itltimo, sabemos que la
conducta del señot· Pedro Antonio
Tórrcs, Obispo de Popayan, ha sido
categóricnmente improbada por el
Santo radt·e, nsi como el concordalo
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JIIC cclc!J,·ó en '15 de agosto último
·on el Jcucr·al Mosqucra.
-El 30 de octubre último fué con·
ngrada solemnemente la bella cateIra!
edezco, en
lod:t parte i en todo lugar las decisio.
ucs, los mandatos i rletenninacioncs
tle mis Superiores i juro Yivit· i morir
bajo su obediencia; pues en conciencia
es preciso obedece¡· n los Snperio-res,
pot·que el que resista a su antoridad
resiste a las Ól'denes de Dios i
atrae su cotidenar.iou. (ltom. X Y. 2 .)
Deploro como uua dc~gracia la m as
fatal, la ceguedad de los Sacerdotes
qnc se han asociado con!l'a la aj el
que sorpt·cudió la tempestad .
En fe de lo euallirmo esta acta el e
uuion i de adhe sion en Chagnanl , a
1. 0 de enero de 186l¡ ,
JI. ~lAnlA P~::m, u .
ANUNCIOS .
EL CATOLlCO.
Este periouico se publica ca·
da ocho di as i estraordinariamen·
te siempre que la abundancia de
materiales así lo exija. La suscricion
de 12 numeros vale un
peso fuerte que se pagará adelantado
en la tienda del señot· Verjar.
cio bi·tiz; ca1le segÚtÚlil del
comercio, uúmero 66. Allí mismo
se venden numeros su el tos ·a
real.
Jna¡•renta Constitu~ioaal.
Cane¡·a de Occidente, calle f, ~" número 18
POR PONTON 1 BARRERA.
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Año Cero - 20/08/21
Dios es mi doctor. La ciencia descubre el poder curativo de la fe y la oración.
Las trampas de los dioses. Sacerdotes egipcios y sumerios empleaban trucos de ilusionismo.
Los brujos del comunismo. Espiritismo, magia y guerra paranormal en la URSS.
Grupos organizados desinforman sobre la investigación PSI. Guerra secreta contra lo paranormal.
Niños criados por animales.
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Año Cero - 20/08/21
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El Católico - N. 47
PERIÓDICO DESTINADO A LA DEFENSA DE LA RELIJION CATÓLICA, APOSTOLICA, ROMANA.~
'B.'IUltl • .a. 0
PARTE OFICIAL.
Al'quidioccsis ele Santaft: de Bogotc1.Sccl'claria
del Go!Jimw eclesiústico.-
14 de abril de 186!!.-Námcl'o 62.
Sciíorlicario principal de ........... .
El scflo1· cloclot· A3apito Castañeda
se ha dirijiclo a la Vicaria jeneral,
romo Cura ele Yogual'á, consultando
si puede t·ccibit· cantidades de Íos
fondos rle bienes dcsamot'tizados para
el sostenimiento del culro. El articu·
lo 7. o de la Pastoral de 7 de agosto
es csprc<;o: "La misma obligacion
a que se rcfiet·e el articulo anteriOJ'
(de ret1·actarse i OClttTit· al snperÍ<'
t') tencldtn lo eelesiitslicos que
reconocieron los decretos ele" 'fuicion
i Dcsamortizacion" de bienes de m a·
nos muertas, i los que hayan pasado
presupuestos al Tesot·o público i re•
cibido cantidades jo el, hls cuales,
cnll·e tanto que hagan talretractacion
pühlica i ocut·¡·an al supcriot·
ohtcnienclo su ¡·esolucion, no podrau
ejercer nin¡;una funci 1 del ministerio,
sino que csluran suspensos absolutamente,
a:;i como lo cstadn los
que en ndelantc pot· sl o por ínter·
puc~ ta persona pnscu tales presupnéstos
o reciban Lólles cantidadc:. "En
la cireulaJ' de 8 de oetubt·c in~crla
en clnümero 20 de" El Católico"
se dice: "est~íu ahsolutamentepdvados
clel ejcl'cicio del mini~lcl'io los
que bán posado presupuestos al TesoJ'O
público i recibido canti,lades ele
él, quienes no IJlledan libt·es de la
censma,sinocn cica o 'lnedeexhibon
el documento de la antoridad eclesiástica
c¡ne pet·mita la recepcion en
algnn caso especial, i el en que apat
·ezca que se ha hecho la pt·otesta espresa,
(al pie del recibo) confot·me a
lo dispueslo pot· el Ilustl'isimo seiíot·,
de que la rccepcion se hace por necesidad,
i qne no po1·esto sfl consiente
11 i acepta la n~nrpacion de los bienes
de la Iglesia, ni se reconoee el derecho
que haya habido pat·a dcspojat·la
dr. sus propiedades."
El Ilustrísimo scñot· Arzobispo con
fecha 22 de febrero tíltimo rcp1·otluce
estas dispo3iciones i despues de
relacion:1r los h·es a quienes Su Seiiol'ia
Illma. ha permititlo la reccpcion
de los réditos rle las fincas, como
cnsosccepeionoles, pero sin reronoccr,
de ninguna manera, clice, ftlle hnbiet'a
habido det•echo para quitarlas,
Bogotá, lll de abril ele t 86.&.
i espt·esan~o ( condiciou ímprcseindible)
en el recibo, que aquello es
en ftlern de la pi'Opiedad que la
Jglcsia tiene sobt·e las mismas liucus
i como el usuft'ucto de ellas, agt·cga
"ningnn ott·o tiene licenria para
recibir i los que reciben esl;Ín incu ..
rrieudo en las censut·as ....• Los
qne aseguren que tienen autoriza·
cion mia, dcbeu presentar el escrito
en que les haya dado tal autol'izacion."
Con fecha 7 de mat·zo repite
las mismas disposiciones i exijr. que
pat·a los caso.; especiales en qnc ha
dado autorizacion, se esprcse esta,
iudispensablemente al,pié del recibo,
i se esprese tambien que no pot· esto
se reconoce que haya habido det·ccho
para espropiar aquellas fincas. Ya
antes, en 12 de 110\iemhre iJltimo,
había dicho qne para los casos en
que había dado permiso, debía prorestarse
con tt·a las disposiciones ele
desamot·tizacion, en el recibo que se
diere. •
En consecuencia, i estando prohibida
la rcccpcioo bajo las penas ljUC
quedan relacionadas, el sciíor. Vica·
rio jencral ha resuelto: " Elé\'ese la
solicitud al Illmo. seiior An:obi po."
En \Írtud ele las di.;posiciones
enunciadas, todo Sacerdote qqe reciba
cantidades del Tesot·o publico,
como conbecuencia de las disposi·
cioncs sobre dcsamortizacion, sin habet
· presentado prévia;Hcnte a la Vicaria
jencral, la nota ol'ijinal del
Jllmo. Pt·elado Metropolitano que lo
autol'icc pnra ello, i los que pt·esentáudola
r.o lleven nl pié del ¡·ecibo
las condiciones exijidas pot· el mis·
mo Illmo. seii01·, incurren en h1s
ceusUI·as canónicas.
Lo repito al señor Vical'io para su
conocimiento i el de su clero.
Su mui atento servidor.
ll!igael Arias.
Arquicliocesis de Salli(l(é tle Bogotá.-
22 de abl'il de 1864.-Sccrctaria dtl
Gobierno Eclesiástico.- N umero 66.
Señor Vicario pt·incipal de ...
Pot· resolncion de 7 ele marzo, ha
facultado< 1 Illmo. sci10r Arzobispo a
la Vic::ll'ia jeneral, por el tét·mino de
seis mese~ contados desde el 19 del
mismo, pora dispensar impedimentos
de segundo gt·ado igual de consanguinidad
o afiuidad licita o illcita,
Í
gue atadnclülos f~triosamcntc.
El pueblo se ha MITompido po
efecto de la gucnn, cliccu los liberales,
¿pero se ocD pa 11 e u mora liza rlo :•
No. Buscar vüludes i garat1lias <'n u u
pueblo sin rclijion i sin gobierno, rs
buscar un prorlijia de que uo lrai
ejemplo en la historia. Quieren rcvindicat
· par·a el Catolicismo los l'u·
nestos frutos rle uuestt·as iuscusata ·
luchas, i sacrific:H' a momenlancos
intereses de partido la segllt'iclad de
sus vidas i el porvenir de sus familias.
Los mil cdmenes cuya!. viclima~
son infelices de esos cuyos IIOtUbrcs
nadie conoce, pasau clesapcrcihido;;
i <¡uedau si u ca~Ligo, pero si nlcauzan
a nn liberal notable se juzgan vcngauzqs
polilicas; i las cuadrillas ele
malhecltot·cs que pululan ya, se re·
pulan guerrillas conservaclorac; ínc;piradas
por· el fanal ismo i awzacla~
pot· el clero.
Todavia es tiempo de \Olvct· alt ·a:
en la scnfla del nbisnw, pero pnra
esto se necesita sacrillcat· a la s~lvacion
comun inlcrcscs momcntancos
i odios i utopins . Ma~ vale decir· con
David, "pcmri," IJHC pc¡·ccer como
~'at·aott. O se re titnyc a In relijion i
a la jmticia sus fue¡·os, comiderall!to
tan sngt·a,ln la \'ida de un lahl'iego
como la de 1 n jc¡•eral; o 1.1 misel'ia
i la corrupcion iran creeit:tHio ali mentadas
po1· :la incrcdnlidatl i la
annl'(¡uia; i cttatHlo:arordcnJU no se·
ró. ya uu lotT<'nlc 1levastadur· que nos
amenaza; sino •¡na calara la inmeu sa
c¡uesc precipita ~obt·e nuestra~ cabezas;
i los que hoi eautan ufauos sus tl'iuu·
fos sobre el fanatismo i las vicjn~ tradicioua~,
lo que pr·oclnmau en alta
voz Jos fueros ele! clelilo, percccr.in
con nosotros e11 la calástrofc c¡nc prC·
paran a la socicclatl.
VARIEDADES.
----- r----1'f -~
--El dia 20 de este mes a lns ciuco
i mcdin de !:l tnrde, tillO tic Jo., hijo;;
del seiío1· Plácido ~lorálcs, cncoutranclo
en la calle de Florín u al Jencral
Mosquera, intentó mnlarlo con
nna pistola que llevaba; pct·o con~~uido
pot· val'ios que notaron su acllLud
amenazndorn, salió el tiro en la
lucha, sin cnusat· dai'10 a n:~die .. Sin
embargo, era de ·,cr el cmpcito cou
que los enemigos del patlbulo pedían
la muet·te del agt·esor, i Ita. ta la de
todos los conservadores, up obslante
que no podia atribuirse a compiracion
el cstravio ( c¡u~ c ·tamos léjos
de j ustillcar ), de un jóven que quiso
vengor el asesinato ltot·r·ot·os~~ de su
padre con la s::mgt·e del ascstno.
··-Iloi cumple un año la funesta lei
que tantos males ha causado a la pa·
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
11 ia. l!ói hnce lln aiio q\lC ese aborto
nfernal de Jos ódios polit icos, e~tá
it·Yiendo de mat·til'io a lns coucienias
i ele escollo para el afianzamiento
de la pnz. ¿Se qnerrlt aun con:
en·nt· ese monSII'llO t (Se pt·etenrlen\
reemplazado cou otro peod Si los
actuales lejisladot·es tienen siq\1iera
impatias por su pais, si comprenden
los 'ct·dadct·os intereses naciounles:
si no están aun ciegos por los ódios
funestos que nos impiden ser lo (]Ue
dohcmos, i en fin, si quieren lejislar
para bien de todos, deben considerarse
satisfechos con los males sufridos
i dct·ogar esa di!~posicion absurda
i cruel.
-Escriben de Popaynu que habienllo
resuelto las moujas Ca1'111Ciitns de
aquella ciudad m¡u·chnr pnra Quito,
al emprender !óll viaje fuct'On detenidas
por el seiior Payan, tlnien les uo·
tificó que 110 las permitiría mat·chm·
por Palla, sino por el Dagna.
Las de ·' S la capital se separa ron e u
Pucl'lo· nico. Cinco hnbian llegado ·a
la Habana, i las olt·as habían continuado
w 'iaje para E palla a distribuirse
en varios n1onastel'ios de sn
órden. ¡ Pobt'cs vírjeucs! Marltriza·
das por la mas injustificable timnla,
andan de pueblo en pueblo mendigando
el asilo que les fué 1·obado en
u patria ! El católicismo, tan pcrse:•
uitlo como cncn igo del progre o,
JlliiiCa ha pt·oducitlo tales h::u bar idades
. Todo3 los establecimiento en
'lile In l111manidad t·ecihc nlivio, si
:on obra su p. !.o que hoi se llama
progreso, e~ un món ll·uo infernal
qnc . e complace e u vct· denamat· lá"
rimas i en nayegat· en lagos de san·
gro ¿ Cnilt11lo ha pt·escnlado nnc,;tra
pobre pal!Ía nn cuadro mas desgannclot
· que hoi? Pero nos llamamos Colombia¡
oh 1
-El número 23. lle "La Union ''
tlc Pop(lyau, mintiendo n la hislori:~,
'lflrma que la Iglesia católica siempre
}¡a pretendido usmpnt· la sobet·atda
del nnmdo, i del mes de marzo, en la santa l'iu·
dad de J crusalen, . iendo sacerdotes i sacrifi·
cadores del Dios, A nas i Cnil'as."
" Poncio Pilato, Gobernador de la Galilea
b~ja, sentado en la silla presidencial del prc·
torio:
1l Sentencia a Je¡ns de Nazarcth a modr en
una ct·uz entre dos ladrones, dicir.ntlo los
grandes i notorios testimonios del puthlo,
que:
~~ i. • J e sus es seduclot· :
"2.• Es sedicioso:
" 3.• Es enemigo de la lci:
11 4. • Se llamn falsamente Hijo rle llios:
"5.• Se llama falsam~nte Rci de l>rad; i
"6.• Entro en el Templo seguido de la
multitud lh:nndo palmas en la m,ano.
" Manda nt primer Cctul'ion Quirilur Cornelius
que le conduzcan al ~itio dd snplit:io.
" Prohibe a toda personn, ya pobre, p rica
el impedir la muerte de Jc~ns. ·
'• Los te!ligos que firman la sentencia con·
tra J esus, son:
"i.• Daniel Robani, fariseo.
" 2.• Joannas ZorolJatcl.
'' 3.• Hafncl Rohani. ·
'' /¡.• Capeto, hombre público.
" J C>US ~aldrá de la ciudad de J cru s . Icn
por la puerta Strucnt!."
" T~sla sentencia está gra,·ada en una pla•t ·
cha de cubre. En lo> lados colán íi"~v;u.l;os
!'olas ¡,~labra~: mtllf'lrtncha igual so'"' tmi.l·
do 11 cada tribu.
" Se ha cnt ootrauo e~ un va~o antiguo que se·
guian a los t~j,;rcitos frauccs<·&. l)r~pnc~ de
[,, espr.dicion de 1\ ápoleti e~tnha en la sncais ·
lía de lo~ Culujos, cerca de r-.ápolcs tnctrra·
da en una caja de ébano. El uso e~t•i en la
capilla de Coserte. "
. -Tnyo lugar en la iglesia de las
:Sieves la fnucion de CnatCuta lwras,
hallandosc el templo en todÓs lJ·cs
días lleno d(} fieles ~uc iban con ansia
a renrlil' enlto. a Dios, sin que ills
nneva& autoridades hayan molestado.
Signn esta conrlucta i la paz sera \lll
he cito.
-El clin 19 ele este mes se firmo
el recouocimicnto ele Antioquia i In
paz con ese importnntc Estado. No
sabemos siuo que fue¡·ou aceptadas
las bases propuestas por el seiior
1l01·1'io.
Tcuen1os a la y isla tma carta fecha
\1 26 de octub¡·c último en Geuznno,
cindad dista u le pocas mili as de nomo.
En ella se relicrcn los actos mas
conmovetlo••cs por el anHH' que ¡lÍI\.·
tnu del pneulo ácia el Sauto Padre.
Hai infelices que, al vet· la penuria a
que Jos reyolucionarios lo ha u reducido,
cct·cenan algo de n escaso alimento
JHII'a llevat· \111(1 moueda al
Tesoro Pontificio.
Un ingles con\'ertido, fné a la capital
del munuo Cl'Íslinno i solicitó
con instancins una audiencia de Sn
Snntidad.' IJabiéntlola obtenido, se
arrojó a sus piés i bal1ado en lágrimns
ic ofreció S\\ fort unn constan Le de
cuatro millones de rlollanls.
Ca~LaluJi.5l110 tiempo, llamaba jcneralmente
la atencion• en la all.a
Italia, un fenómeno 1 aro ocurrido e u
casa de llllO de los mas encarnizados
enemigos tlcl pobre anciano sucesor
óe San Pedl'o . .En u11a de.sns reuniones
r~voluciouarias se hal.iia csprcsado
en los términos mas acres conlt·a.
él, i nlcntado por los aplansos de
sns nmi¡;os, habia llegado a deeit·:
"Si yo estuviera en Roma, corlaria
la cnhrza nl Pnpa Pio IX, com'o a
eneo1i¡;o do la libcrlnrl italiana." Cinco
dias despuei', la cspo a del r¡nc
tal ucseo bahía tnauife lado, dio a
luz dos jeme los sin cabeza.
-El museo ele nohcmia acaba de
sct·cttt·ir¡ueci\lo con una carla colosal
rlclimpcl'iochiuo, com1nH~:.ta rlc ocho
grnndcs rollns tic pnpt.:l r¡nc, uuitlos,
present:w a la \'i~la aquel innlCII''l un oficio del
séñot· doctot· José Antonio Nátcs,
Gobci'Oadot· d~ Popayan, llamámlonlc
para que dentro de \Cinte i cuatr
horas, me presentase en su despacho
a prestar el jlll'amCtllO lli'C3Cl'ilo pot
el arHculo 1. 0 ele tl!cha lci, sin cuy
requisito 110 podía ejercer mi mini:~
tcrioJ i así : teniendo en considet·a
cion: '1. 0 Qnc torlos se habinn so.
metido n la lr.i : 2. o Que el 11
prestarlo, se atribuía ' a miras poli ti
cas, rlc rebeliou contra el Gobict·no,
idea que jamas ba ocupado mi ima
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
jinacion: 3. 0 Que la Iglesia ct·a
atacacla pot· la pt·ensa i jqzgué no era
prudente abaudooar al pueblo fiel
en tale5 circunstancias: 4. 0 Que el
cisma habia levantatlo su orgnllosá
cabeza en el Socono : 5. 0 Que ya
no admitiat~ escepeiones de ningutld
clase; a lncmado por estas razones
preste el jlll'amenlo cl17 de octubre:
mas, como dicho jut·amento repugnó
a mi conciencia i ha sido condenado
por In Encíclica de N. S. P. Pio IX
de 17 de setiembre de 1863, en In que
OJ•dena la rctt·nctacion a los que
hayan pt·cstaclo tal jlll'amcnto, yo me
retrncl'J del qne pt·esté ~1 17 de octubre
ante el Gobernn· .. c.'n d ?.rtículu 1. 0 tic la circulat que
le !JJ dlltjtdn rl señor ~icario del can ton de
llioaol.:., nu tiene inoopl¡·nientc en ltar.ct• co-ocer
~ U í la falta qne ha cot elido, fci¡>lina ¡ ~icndo a demas
su del1er, como Sa crdOtc católico, somrtcrsc!
a las dcci iunes d!! su l'relado, como
encargado de rcjir i gobcrnm la l ¡;lesia de Dios,
, Por tan ro, se 1·ctracto públienmente, i da
_por ningun 1·alot• el juramento que hiciera
ante la autoridad cil'il, al art.ículo 1. 0 de la
leí de. 2.'l de nbril sob,·c policía nacional en
matr.n~ de cultos; pues sienilo eclesiastico
ortodOJO, no puede mcnos ' que voh•e¡· al fedil
de la Iglesia de donde ~e babia estra¡iado, por
no haber tenido udiera ocasionarme persecuciones i sinsabores,
diré una palabra mas, i es : que cstoi
rcsi~nado al sacrificio.
P1tal, 1.3 de niarzo de 1.864.
El Prehendatlo.-Jll. Antrmio tfel Bnsto.
AL RESPETABLE PUBLICO.
Los inf1 ascritos eclcsi:bticos, para ~at· u
prneba incontestable de la sinceridad con q
hemos t·spr~sado muchas ''cces que en la p1 e
tacion dc1 JUramento que· se nos cxijió por
autoridad, en cnnplimiento de la lti ~e 23
abril, nos hallahamos siempre. dispue&tos
conl'ormarnos fielmente con la deci.ion d
Jefe de 1a I~lesia católica; ahora qué die
dcci~ipn ha llegado a nuestro conocimi~nt
hacemos s&bcr .qne ya nos hemos retracta
formalmente antu la autotidad, del menci
nado jUI'amento, en los mismos tcrminos e
que él 'Sánto Padre· nos amonc taque lo hag
m os, deClaran dolo nulo i de ningnn valor. 1
Gn de poner al publico al conicnte de la r
wluci¡,n pontificia, ínst'rlamos de la Encícli
<;a qnc se ha circulado, dirijicln a los seiiorr
Obispos, fechada en 17 ele~ Setiembre del cm
ricrite la monlcion que ~e ditijc a nosott·os
Dice asi:
• Amonestamos igualmente i cxhortam
con clmaJOf encarecimiento a t11dos los cele
siásticos que somctií:ndose al Gobierno s
apartaron !astimovamcnte de sn deber, a que
repasando íntrriorlllr':lte su ~anta vocacio
no larden en I'Ol l'er al camino de la justicia
de la verdad, i 'sigan el t·jempfo de los qu
aunque rcsbalar(Jn desg-raciadamente prestan
do el juramento, exijido por el Cobicrno, n4
obstan lo se han gloriado despue~ de retract
tal juramento, con profunda alegría nncstr
1 i de sus Prcl a dos. •
V case por esta nmoncstaciun tan pntcrn
i al'ectuosa, lo que ha motivado nnestra retr.
taciou, llUC Su Santidnil se halla mui ajeno u
increpar con acrimonía la accion que cjcctJ
tamo con la mas 'ann intencion, i que no 9
Iros no necesitamos de que se nos rcprcncl
sevenuncnte, ni se nos conmine con censt
us, p01 que nos basta i sobra que el Supt em
Pastor alce sn voz con dulzura i solnotenl
;uuuncstan~n, pa¡·,¡ r cuchntJr¡ ' c1n agrado
hacCI'docifmentclo~ICII cxijc. ca cigu
mente por sus c>ptUSIOnt:~ amables de~vaneci
dJ la pn·ocnpa~ion tic lo que nos- han juzgad
sin fnn~nmenln, incnrsos en cstotnunion
• 'os pn:ciáruos de ser Católicos Apostólico
TI o m finos, en nuc tra rrcencia i ~e aiiadir p
b bondad dt' Dio&-~ la obcdit•ncia humild
a l~s dt·lurminacitJn de nuestro l'~drc i 1'"
lur ci 'Sol.cTanu PontíGc•·, lus ~c·utimicnto
·de cnri1IJd c1 htiana de q,n~ el \nismo l'asto
nos d:1 el t>j('mplti.
Cali, 2.! de diciembre ll t8G3.
Fr. D11111Íaa Gon:úci:.-Fr. !.ron Súrtli.
Fr. T'ictor G'u:ma11. -ri·. ltltllllltl .11 • .1yrn
-Fr.. Ccirlo~ l!fanrcni. •
NOTA.-Esta pnhlicacion debió hahcr ta
nido Ju~ar el di a 22 do uicic•ntbre del afio pa
)ado, en cuya fecha. los infra critos hicimo
nnte el sr.i1or S ere i\lunici 1al nuestra rcltactll
ci<>n del juramento pre~tadn conl'omc a la 1.
de 23 de abril, tan lu go romo llegó a nuci
tra noticia la Encíclica del Santo Padre que
nos 11monesta la hagnmo , i aun ya se habi
• tirado el primer cjcmplm·, ruando fué ncccs~
río suspcndct· la ímptcsion porque bs CIQ
cunstancia políticas lo inrpidi!'ron ent?ncc
• A !tora r(!~tatlleeida tranquilidad, crc~mo
ser oporlnllo dar ' p tblic.i~ll4 a~. nt_to .e~ qn
¡¡, IH\rol)&nlleslro deber como htJOS t Mmt~tr~
de la Iglesia cat61ica.
Imprenta Constitucion3l.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente:
Biblioteca Virtual Banco de la República
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El Católico - N. 47
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El Católico - N. 48
f~on el presente número concluye
el 4.• trimestre i el pdmer año de
El Católico.•
En lo sucesivo, este periódico ten~
ra dobles dimen.iones de las que ha
nido ha ta ahora, i se imprimir len
uen papel i con mejores tipos; pero
l \'nlot· de la u ct icion set·a de un
:peso i veinte centavos por trimestre,
· el número suelto qn in ce centavos.
m individuo qne reciba el número
¡>r6 · iuw i no lo dcvuelv¡¡, se reputara
usct·ito al trimestre que principia.
I~ntJ·e los pocos amigo¡¡ que suelen
fa Yorccerraos con su corresponden ~ia,
IJai llllO que se distingue por la tt·a~
yesnt·a de su jénio i a quien ocurren
cosas particulares. En s n úllima carta
nos refiere la siguiente :
"En uua hermosa mañana ele vc•
·ano, vagaba yo por el centl·o de un
espeso bosque con cuyo rictl follaje
uguetcab~ el aire tibio, trayendo a
u paso, ya el penetrante aa·oma del
madroño, ya el melodioso canto del
urpial. lli pecho rebozaba de gozo
contemplando \lila nat\naleza rica,
engalanada con todos los pa·imot·es que
el Creador c¡aJiso sembrar con profu~
sion en nuestro hermoso snclo. Aquí,
decía yo, ha hecho con razon su asiento
ind~strnctible la libe1·tad.
"El ruido de un torrente que, desprendido
de una roca, caía como de;;grcitado
sobre UIHI gr·au taza de pied¡
·a de donde salia ful'ioso convertido
en copos de alba espnma, se me a~cmejt\
ba a la \'OZ de nuestros demagogos
que, ahot·a gl'itan descompasada~
tucnte contt·a una tia·ania 4''e no exi~te,
i luego contra todos los derechos
como contrarios a una libertad qne
solo ellos comprenden.
"Deseoso de tomar algnn alimento
de que sentía una gran necesidad,
busqué ·una choza que se me había
indicado existir por allí cerca; i en
efecto, f.n lo mas intrincado del hosquc,
vi un pedazll ele sabtlna cnbierta
ele verde yerba en cnyo cslrcmo se
levantaba la r.a ita sombreada por
uua platanera, t·odeada de chirimoyos
que cmbaL amaban el aire, i ele
copudos carboneros en cuyos ma•
uojo · de be Iludas flores se rcflrjaüa
gracio~amcntc la luz.
"Llamé repetidas \ 'eccs, i no obteniendo
respuesta, me dcci!li a cnla
·ar. Hnllé una salita pel'fectamcnte
blanr¡neada i eu la que todo indicaba
pobreza, pero aseo i la mayor posiüle
couveniencia. Unos tabmetes de madera
onlinaria forrados en cne1·o de
res al pelo, dos mesitas, orclinadas
tambien, sobre las cuales había unos
vasos de cristal, \liiOS plícgos rle pa~
pel, un primot·oso ramillete de flo¡·es
fresca colocarlo al pié de \lll bello
crucifijo de marfil i un bastidor de
bordar con una obrtl empezada, ea·an
todos los u1uebles que formaban el
ajuar.
" Cansado de esperar i no oyendo
ni bti1· un peno, ni cacarenr una gallina,
me clispouia a seguir mi marcha
cuando et·o como estaha
mui (lébil pudimos contenet·lo sin
esfuerzo ; i el jóven en cuya ft·nnca
fisonomia se veia pintada la indigna
·ion, cnlmó no obsta u le a su ntcn·atlo
huésped 1lieiéndole: u N·J tema U,
q Dios a quien ad01·amos i que lo
ha puesto a U. en nuestras mano·,
nos manda amat· a los (¡uc nos aboreccn,
i hacct· bien a Jos que nos pct··
iguen.
"Con una sorpresa (1ne no puedo
intar; vela aquella escena, i te-miendo
pot· la vida de mi cnfet·mo
ctue luchaba cutre el temor i la csICt
·anza, le cspliqné en breves prtlaJras
el estado en <(Ue se había hallado
i los cuidados que sus protecto-re~
lt! IHibiau dispensado. El hombre
Jaso cnlónces del terror a la sorprea.
No compt·endia como podía ser
aquello i csclnmaba a cada pa o:"
¡ ~s imposible! ¡Solo que sea para
eucr el gu to de VCl'll1e l'usilar!
''Dos clias dc~¡mes snr,c pot· él mi:;no
todo jo que 1lesenba sahe1·, i com ·
n·ctu.ll hasta dótHlc llegaba el hct·oisno
de aquella virluo~a pareja. He
quí lo que me dijo·
"E u el pueblo de mi rc,Hlencia
1abia una familb mu~ quel'ida pot•
1uc daba de comer a alguno~ bobos
11c c¡·eian recibir un favor de esos
jcos, porque ¡·ccojia en su casa a-los
nfet·mos i po1·que ayudaba al cura a
'aualizat· a los infelices haci~ndolos
erdet· el tiempo en p1·acticas idoláricas.
El padre de esa familia había
·usll·aido a la circulacion un capital
1ue invirtió en adot·nos de lujo para
l templo, i r,e había convertido en
uez de paz, mediando en todas las
isputa!l que se susr.itaban entre los
ecínos i haciendo iolltil mi indostl'ia
e tiutel'illo. lo, por estas razone3 le
bon·ecia, pero pensando un poco,
csolvi hacerme participe de su foruna
enamorando a una hija ele diez
ocho ai10s que tenia i que formaba
i encanto de la casa. l.a muchachl
lC desprecio porque era soberbia e
ipócrita, despues de haberme deja-do
comprendet· por el cariño con que
me tt·ataba, (llle no sc1·ia mal acojido.
Herido en mi amor propio, res()lvi
vengarme, i pat·a ello empecé pot·
al'l'uinat· al padre promoviéudolc pleitos.
Una vez que lo vi pobre, lo hice
r~pat·ece¡· como cómplice en un morímiento
polllico i conscgui que ludestel'l'at
·an. No pudiendo sufs·it· tantos
males s·cunidos, se mul'ió i su hija lo
siguió al sepulcro. Esv no fué culpa
mía.
"Sinemhat·go, el cura i al~uno:; ve·
ctnos, dic1·on en mirat·me mal por eso,
i consegi.lí ltncea· dcsterrat· al cura i
ponct· fuera de combate a.los que me
nbol'l'ccian. Yo cstaha ya l'ico; pero
queriendo anmeutar mi fortuna i ¡;ozar
al mismo tiempo, me hice jugador
i pc1·euemos, sí, aconsejarlo con nnestr
ejemplo para que se convenza de qu
hai un Dios que castiga el ct'Ímcn '
pl'cmia la virtud: para que vea que
a pesat· de estar en la situacion en que
nos ha dejado, somos menos dcsgra
ciados que él, porque tenemos el testimonio
fa~orable dr tnwstra conciencia
i la e-¡:iet·anza en el .fondo del corazon.
Nosotros ano podemos esperar
dias alegt·es. El vivirü lt·iHe pol'(¡ue
no cree, pot·qne los rcmot·dimicuto
lo acosarán i porque ya ha vi ·tn c¡ne
la i'ortuna mal-adiJOil'icla i peor cmplentla,
es n11a vcrdadem cot·ona u
punzantes espinas.
"El enfermo que, siempre llcsconliado,
se ponía a c~cur,har nuestras conversaciones,
oy<í esta, e impresionado
pot· ella, me snplicó le enseña e la relijion
que prescribía vit·tudcs tan he
róicas Hícclo así en cuanto me fué
posible; i un ilustrado i virtuoso sacerdote
que andaba huyendo como
ac¡uel hombre, por virtu.l de la lci de
2:~ de ahl'il, me ayudó eficazmente, i
completó mi obrr~.
"lloi el bandido, ellintcrillo, tel'l'or
de loo; hombres hoJll•aclos, comprenpclar. e l:t propicdnd
la liuertad, el honor i la vidn de lo~
. demas; cree en la virtud i trata de
hacer olvia entr·e ellas el
ven erab le Prelado doctor A· DRES ~hJILl
GAr.to~ que t•cemplazando alllu!J•
tl'i simo metropolitano, sufrio como
j fe de la Jgle ia, los tiros de sus
enemigos, h,lSia bajar a la tumba, al
rigor· tic las péuas ¡¡uc oprimicr·on sn
corawn. llabicudo teniclo cnll>nces
'Jlre;a hogarcn el silencio uucstro dolor,
creemos hui un debcr·r'atc~ inmortalizariw el
nombre de sus defensores, al mismo
tiempo que cubrirande infamia a sus
Ycrdugos. He aqul las linea~ a que
hemos aludido :
UNA PERDID! fL.UlENTABU:.
Los acontecimientos funesto con
que e:> rtflijida la humanidad, on tan=
to nias seusibles, cuanto se verifican,
en circunstancias anormales pa1·a la5
clases a quienes afecta u. Jl,sto sucede
precisamente al clero de la Aa·quidit\ccsis
llc Santafé de Bogotá en el golpe
m do i doloroso que ha sufr·ido, con
la muer-te del seiiot· Joctot·
AIWDRES lYI..lBI..l -..&LLO,
Provisor, Vicario jeneral, Gobernador
tlel A nobispado i A rccdea no de la
Jr;l cs ia Catedral metropolitana.
No solo h amistad sino la justicia
exijcn que se tribute al mérito del se·
iior· GALLO un recuerdo en honor de
la Iglesia i rlel Estado de Boyaca; a
quienes mui p:~r·ticulormente consagró
sus servicios i talentos.
Nacido el señor GuLo en la ciuclan
de Tnnja, el 4 ele febrero de 1792, teniendo
por padres a los señores Auclres
Maria Gallo i Juaua de Dios Velazco,
no ménos di:;linguillos por· S\1
ejemplar ",irtud que po1· su nacimien·
to, obtmo, siendo se~ lar·, empleo'i honol'il1cos
a llue lo haciun acreedor
sus luces i nol01·ia honradez, entre
ellos el de Mini~tr·o de la alta Corte de
justicia en el Estado federal de Tunja
i miembro riel Congr·cso en el mismo
Estado. Sirvió a la patl'ia en 1812
como Jefe militar·, defendiendo la
causa de la emancipar.iou politica del
país. Llamado mas tat·,le al sagr·aclo
ministerio tlcl sacerdocio, llenó con
caridad i celo apostólicos el snnto deber
· de dirijir· a su grei por· el recto camino
~le las virtudes, en los diferentes
bcnellcios que sucesivamente se le
encargaron. Entnsia ta por la civili·
zacion i por· la cdacacion de lajnven
tud, fue uno de los ¡)l'ime•·os apoyús
para la fundacion del Colejio académico
tielloyacvincia
dequefué miembro, son fieles
testigos de su laboriosidad, patriotis·
mo i amor por la justicia.
El mérito del sciíot· GALLO se patentizrt
con la elecci ou que hizo eu él
Nuestro Santísimo Pach-o l'io lX para
Obispo de CaJ·t11jena, la que tuvo
lugar en el Congreso de la Nueva
Granada para el Obispado de Pasto,
i la Jesignacion que hizo en él el señor
Delegado Apostólico para la silla
Episcopal de l'amplóha. La abocgacion,
la humildarl. sus \'Ü·tudes caraclcrl~
tlcas le hicieJ·on renunciar estas
mitras, i solamente por corresponder ·
a la amistad i la confianza con que lo
honró el Ilu~trisi m o señor Arzobispo,
doctor Antonio Herran, aceptó el penoso
encargo de soberuar la Arqui-
· Íli~cesis como ¡>¡·ovi~or Vic-ario · jeneral,
dcspues de ttuc había sido nect-suio
obligarlo por obediencia a ocupar
una silla tn el cor·o metl'opolitano
i la dignidad de Arcedeano i como
tal la de Presidente del Capitulo Catedral.
Una penosa enfermedad, ocasionacla,
segun la esposieion de los fncnllativo~,
por sus sufrimientos morales,
le condujo a la tumbn. Can esto
la Iglesia ha pcrrlido nn digno i disliuguirfo
sacerdote, i la patl'intul fiel
servidor· i un honrado cindarlano.
llogota, 15 de nbril ele 1863.
B. A. Toscano.-Migu.el Arias.
PROTESTA.
El iuft·aicr·itoComi.-ar·io de la Orden
Tercera de San Francisco, habiendo
visto por casualidad en el número l3
de «m BoGO'UNO. una retncion tomada
del Prcsllpuesto de gastos pre•
sentarlo al Congreso actu:d, en la
cual figura la Or·den espr·esacl:~. per·
cibicndo como renta viajern la suma
annal de 40 fuertes; decl at·o: t¡ne
nunca he percibido tal renta aunque
estoi fur.cionantlo clesde el mes de
no\'iembrc tic 1861. 1 como yo clcbia
;;cr· el que In pet·cibicrn, suponiendo
que puclier·a hnef'rlo, protesto solcmuemcnlc
t¡uc es falsa la partida del
l'resupueno.-fiogotá, 29 de ahl'il
de i86l1.-Francisco Tamnyo Iloyos,
Presbltew.
PROTESTA SOLEM~E
CO~TR.l U PROP.~GAND.l CISMATrCA 1 SUS
AUTORES.
Los infra crilos Sacerdotes de la
Vicai'Ía ele Santiago el menor. protes·
tamos enér~ica i &olcmnern<·ute con
Ira las perniciosas i escandHlosas pr·o·
clucciones puhliradas por la prenl'a,
titnlucl:~s: ''El Cle1·o en su dehel', ''
"El Romaui~mo uo es el Catulici~
mo," en que algunos clérigos ma
aconsejados, injul'ian gravemr.ute a
Illmo. seiio1· Arzobi~po i a sus sufra·
gáneos vcner·andos, con moti\'o d
Jos mandatos con que, en cnmpli
miento de su deber, han prohibido a
Clero pr·estar el juramento inicuo exi
jitlo por· la lei subrc policía naciona
en materia de cnllos, e invitan al cis
ma i a la rebelion contra la autorida
divina de l:'t Iglesia~ depositada en <'
Sumo l,ontífice i en los Obispos.
Nos adhel'imos de corazon a la San
la Sede Apostólica i nl Romano Pontl
fice, a quien se ba dado la suprema
clivina ¡>otestad de apacentar, rejir
gobernar· la Tgtesia Católica, i recha
zamos cnalc¡uier·a innovacion, cual
quiera falsa dortt·ina que tienda a
Cisma, a la he•·ejla, ~ la encn·acion
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
dcpt·esion o sometimiento de la auto·
ridad de la Iglesia a la. pote tades se·
Clll\ll'CS.
Uenovamos une !t·a promesa de of¡
ediencia i t·espeto que hicimos el dia
de unestt•a ordeuacion, a llllC~h·o pt·e·
lado i a sus lcj áLimos sucesores. Hecono
11110:) us mandatos como muí
acorflt:s con los preceptos divinos, estamos
di¡¡pu tos a acatar siempre sus
sabias disposiciones i a respetar sus
penas i censuras. ·
Santa Rosa de Vitet·bo, etlero 20 de
1864.
El Vicario principal tle Santingo el
menot·, Cayetano Brl!'rcto.-f'r. Rrt-
1non Cade!la.-Luis ·Rou1l({o RoMan,
Vicario p:u·ticnlat· de la 3. e:: de Santiago
clmenor.-El Gma interino de
Tibasosa, Cayeiano ~ltoreno.-El Cura
i Vicario de la 2. C\1 1le Sautiago el
mpuor, Juan P. Ularlr..-El Pánoco
de F.loresta, Francisco de P. Reye .El
Párroco ele Bctcitiv~, J. Viwtie
Rujas.-El Parroco do Tntasá, Ignacio
1:.. Abella.-El Penclicio de Tdsco,
R. lln cda.
L'~A RETHACT\CIO?i.
Siento una satisfaccion positi ·a al dar al pú·
liro la adjunta e~posic10n que bago al ~elio r
efe de este !\tu icipio, porque se me prcscna
hoi la mas brillante ocasion de manifcs ·
ar ante el mundo entero, cuan sum i& o i re ·
•erentc 6oi a los maQdatos del Padre comun
le los fieles. La eaposicion dice asi:
Señor hfc ~e este Municipio.
Cuando presté el juran)entu de someti~lien-
0, pre,·enido por la Jr.i de 23- de ab11Í del
rt;s~ntr. aiio, creí que con . aquel. nct~ no
omprometel'ia '.ui ~u~cít~cía ni IBllana a
os debl!l'cs de m1 mlnJsteno; pero •í lile prouse
dP-sdc entOnces agn~r¡lar lo que l11 Santa
ederf'solviese en el partic~lar, .para obrar en
onsonllncía con su determmac10n suprema.
a el Sumo Ponlffics por su Encidiea de i7
le setiembre u(tÍI1lOs ba condenado la .con·
ucta de los qqe he~os presta~o aquel Jlll'a·
nto; í yo, obedec;ren~o sum1samente la ~e,
crmioacion del l1carto de Nuestro !lenor
esucristo, me retracto dol modo mas solero·
e de aquel sometimiento, condenando' CO•
0 condeno el acto n¡encionado, i d~claran-scgun
la mente de S, S. que . al CJCcutar·
, me separé del camino ~" laju~ticia i ~e
verdad. Reciba pues, senor Jelc Mumipal
esta formal retrac!acion que. hago ane.
e, pidiéndole qu~~esuvap_reveDlr, que so
gregue esta espos1C10n al ltb~o en que se
sl'ntaron las dilijPil(:Ías del JUramento ya
encionadu, para que aquella obre lus cteecoosiguientes.
RETRACTACION.
Cu:mdo en el mes de tnayo del aiio pasado,
me exijió el Correjidor de la Aldea tle Candelaria
el juramento prevenido ni clero por la
lei de 23 de abril, sobre policla de enltos, no
fue mi :inimo sometc1·mc a las leyes protestadas
por la Igle&ia CatWca de que soi Ministro,
aunque indigno, sino sulamenlc pt·estar aquella
obediencia que se de~e al Gol!i~rno en lo
temporal; sincmbargo me cabe hoi la satisfa.c·
cion de cumplir lo qnc se nos ordena por
nuestro Smo. Padre Pio IX, en su Encíclica
de 1.7 de setiembre último, retractándome
en debida forma, pidiendo penlun a mis Prelados
i a la J glesia por el error en que ha ya
inrunido, siendo siempre fiel a la Unidad
Católica, como lo prometi desde el Bautismo
¡ al recibir la~ órdenes sagradas como biju
mui obediente al Primado i cabezo. de la Iglesia
de Nuestro Señor Jesucristo.
de ab.-il de ~ 864.
1 entonces el dolor que ora me abate,
Contc,nplare como el q_uc ayer surriera
Cuando bic;e, ui:cio, consistir mi dicha
En el amor, la gloria i la riqueza.
Ya no habra tiempo para mí: ya libre
Por entre bosques vagaré de estrellas,
1 amaré a Dios cual debe ser amadó
Viendo admirado la creacion .entern.
es tan dulce perdouar
Fcrnan Caballau.
Léjos ai! del sacro teclJo
Que su cuna vio rodar,
Tn padre proscrito arrastra
Su maseria i orfandad.
Reclinado en la alta popa
Del bajel que huye fugaz,
Tristemente de su patl'ia
Ve los m'>ntes qtte se va u,
1 a su~ crueles enemigos
M.tnda l.lll ósculo de paz.
}>erddnalos, Margarita,
Que ~s rnui dulce perdonar.
En apartadas rejioncs
Triste se levé vag .. r,
1 amasado con sus lagrimas
Come del dolor el pan.
Rn tanto sus enemigos
J,a yida en l>lando solaz
Di frutan, i del pro~crito
Escarnecen la lealtad.
Ptrddnalos, ftfargarita,
Que es muí clulcc pcrdon.a¡ ·.
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El Católico - N. 48
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El Católico - N. 51
E :t. CA ~OI.ICO.
TRIM. I. ANO n. Bogota, 24 de mayo de 1864, NUMERO 61.
CONVENTO DE FRANCiSCANOS.
A t setzo1· Secretario de la Curia Metropolitana.
Acabo de recibir la protesta del P. f¡·ai MMcelino
Bem:1l, i la incluyo p:ua satisfaccion de ese
su pcrior Tribuuttl. ·
Dios gunrde a U.-Fn. J. ANACLETO Gó~IEZ.
:r.II AUREPENTU.IIENTO I RESOLUCION.
El debe¡· mas sagrado es el que me impulsa a
dar esta manif'estacion a mis P1·elados i al público
ortodojo, que observando el estravío de que me
hice delincuente, me habrá condenado anatematizándorne
con el formidable poder de la justicia.
Pero, perdonact en el nombre del Huo de MARÍA
a éste fnfo1·tunado relijioso que con la venda mas
1 espesa sobt·e sus ojos no alcanzó a percibir el cáos
horroroso en que se precipitaba 1 La debilidad, la
coaccion i la poca fé, me al'l'astrat·on pot· la senda
terrible del mal; i héme allí · aprobando con mi
nombre la ~'obediencia" a los decretos de que se
valieron para esclaviza¡· la Iglesia i estraerle sus
sagradas fincas. Yo me horripilo en mi desventura,
i cada pensamiento que por mi frente resbala es
una lava de fuego que criada por el re.mm·dimiento,
posa en mi cm·azon, esterminando mi existencia.
¡Pero Dios Santo m~ has dado el bálsamo consolatorio
del arrf'pentimiento i éste jermínará en mi espú
·itu, cual en otro tiempo tu inspiracion a Pablo!
La penitencia pa1·a ante Vos borrará mis faltas, i
ante tus adoradores mi conducta futura las esterminará,
haciéndome con esto, bien pronto digno
de ellos. Empero: si necesidad hubiese del martirio
( para pt·oba¡·Jo que estampo en estas líneas)
estoi pronto a recibirlo, derramando mi sangre por
sostener los mandntos divinos i las leyes de la Iglesia.
Quizá ésta, aunque del mas indigno Sacet·dote,
aplacaría la justicia del Omnipotente, i haría que
renaciera et1 mi infortunada Patl'ia el Catolicismo
que con tanta viDlencia se le ha querido arrancat·.
Fn. MARCELINO BERNAL.
Popayan, t de ~bril de 1864.
Cuando el señor Mlll'illo nos babia hecho concebit'
la mui risueiia esperanza de que se abririan
de par en par las pum·tus del país a la paz, i quedada
enteiTacla para no resucitat· ya la época luctuosa
de Ja tiraníR, vemos de repente que esa
tiranía, cobijada impíamente con el manto de una
mentirosa lil>ertéld, empufta con mas fuerza su
matador puñal, para seml>rar de nuevo la discordia
en un suelo abonado con la sangre de sus hijos.
El seiior Mmillo, de quien esperábamos una
conducta mas leal al grito de la opinion, mas hu~
mana i conciliadora, ha puesto, el ejecútese a la
siguiente lei:
LEI SOBRE INSPECCTON DE CULTOS.
El Cong1·eso de los Estad(:)s Unidos de Colombia,
DECRETA:
Art. 1. 0 El derecho de suprema inspeccion sobre
los culto~, de que trata el artículo 23, en relacion con
el inciso 16, articulo 15 de la Constitucion, se ejerce
por el Gobierno Jeneral i los Gobiernos de los Estados,
en los términos de la presente lei.
Art. 2. 0 El derecho de suprema inspeccion sobre
losculfostiene por objeto sostener lasoberaníanacionada en nog:.t á ,~a 16 de mayo de 1864.
El Presidente del Senado de Plenipotenciarios,
• ANTONIO FERRO.
El Presidente de la Cámara de Representantes,
Jos:E M. SAMPER.
El Secretario del Senado de Plenipotenciarios,
C. Benedeti.
El Secretario de·la Cámara de Representantes,
Alejand?'o Có1·dova.
Bogotá, 17 ele máyo de 1864.
Publlquese i ejecutese.
(L. S.) M. 1\JURILLO.
El Secretario de Jo Interior i de Relaciones Esterio-res,
ÁNTON 10 l\I. PRADlLLA.
Como se vé, las disposiciones de ésta leí iníeua,
sobrepujan a la de 23 de abl'il de 1863.
El artículo 2. 0 declam que la práctica del Catolicisrno
(porque ésta es la unica Relijiou que hai
en el país) puede se¡· contnll·ia a la soberanía
nacional, es decil· : a los derechos del pueblo que
es católico en su gran mayoría. Sí, el pueblo soberano
es católico ; la práctica de su Relijion, de
lo mas ín imo que tiene el pueblo, de lo mas querido,
de Jo que forma la esencia de su ser moral,
es pues, el primero de sus derechos i nunca puede
l
' ese derecho sel' contmrio a su soberanía, porque
no comprendemos cómo pueda set· contrario el
1
principio constitutivo de la vida a la vida misma.
11
Hemos oído decir que es nuestra obediencia al Pupa
lo que perjudica a la soberanía nacional; pero si
esa obediencia -es esencial al católico, i todos aquí,
con raras escepciones, somos católicos, i esos to-
, dos somos el Soberano, resulta que la soberanía,
segun la entienden nuestros actuales mandatarios,
es patl'imonio de ellos solos, i que la sonora palabra
"República" es una palabra vacía de sen tido
; o quier~ deciL· que los ménos, cuan~do dispo-nen
de las m·mas i de los soldados, pueden
til:anizm· a mansalva a los mas, que están inennes.
El mismo articulo declat'a que las prácticas
relijiosas pueden set· causa de trastornos en el
órden público, como si la Relijion no fuerd, por
el contt'at·io, el primet· elementO" de órden.
1~1 artículo 3. 0 esplica como es que por la 1
Relijion se puede atentar c> como lo hacen los lejisladores de
' todos los pueblos civilizados, i que hoi nuest1·as
constituciones son ateas, i se olvidan con deploJ'able
orgullo del Omnipotente i Supremo Lejislador
del univel'so?
Nosotms, ántes cristianos que granadinos, siempt
·e adoraremos ese nombre tres veces santo, i sin
poder, ni pretender profundizar sus arcanos; lo
reverenciaremos con la frente en el polvo. ·
En el oficio del domingo de lu TmNIDAn,la Iglesia
canta himnos sublimes, llenos de entusiasmo
i de uncion, i en el evanjelio de este dia se refiere
la solemne mision dada a los Apóstoles. > ¡Qué mision tan
grande l Qué promesa tan consoladora ! Qué esperanzas
mejor fundadas que las nuestras!
San Estéyan; Obispo de Lieja, compuso desde
c1 a ii o de 920 un oficio en honor de la SANTÍsnu.
Tnrl\"IDAD, que ha sido adoptado por Ja Iglesia.
El Concilio de Arles ordenó en 1260 la celebracion
de una fiesta ; pero no fué sino en el siglo
XIV, bajo el pontificado del Papa Juan XXII que
se hizo jeneral ésta solemnidad en toda la cristiandad.
Fiesta del Cm·pus.
La fiesta del ConPus data del siglo XIII; hija
de los esfuerzos de una humilde relijiosa a quien
Dios se dignó revelat· su voluntad, nació en las
vísperas del dia nefasto que- vió a tantos pueblos
divorciat·se del Cristo, rompm· con su iglesia i
abolir el sacrificio santo de la lei de gt·acia. En
ese día todas las poblaciones cristianas se visten
de gala para saludar la marcha triunfal del Hijo
de Dios por las calles i plazas llenas de pueblo.
L as grandes oiudades se cubren de oro i seda, las
humildes ald·eas de flores i ramas vet·des, pero cada
uno of1·~ce las primicias de lo que tiene al Dios
que trajo a la tiel'ra la paz i la verdad:
En ese día los católicos podemvs mostrar con
oJ·gullo a los que nos acusan de no se1· c•·istinnos,
nuestras íntimas relaciones con nuestt·o Seño1·
Jesucristo. El dijo: ienes que se le ofr·ecen riquezas mal empleadas que
es preciso desestancar para que vayan a aumentar
las for·tunas pat·ticularcs, las personas que se le ·1 ¡
consagran, vagamundos que es preciso lanzar a la
calle i entregar a la miseria. Porque, segun esos 1
hijos del' Evanjelio, todas las fuerzas del alma i l
del cuerpo, todas las horas de la vida, todas las l
fue¡·zas de la naturaleza deben dedica1·se a la pro- ¡
clucc~on de objetos que si1·van pa1·a satisfacer ne-
1
'
1 cesidades físicas, pal'a alimentar Jos goces de la
codicia, del orgullo, de la voluptuosidad. ¿Son l
estas las iueas vet·dadet·amente cristianas que se
quiet·en difundil· i plantear nquí? ¿Es esto otra
cosa que matel'ializar, que embrutecer al hombre?
¡ Oh! Nosotros sentimos la chispa inmortal que
nos anima, anhelamos algo pa1·a mas nJiá del sepulcro
en que hemos de descansa!', i wmos que
este deseo de la inmol'talidad es el que enjendra ,
todos los hechos grandes que la historia de los
pueblos rejistra en sus pújina.;;. Por él hai en el
mundo lo que se llama gloria_, por él hui Yirtudes,
por él es que la célebre musa épica nació.
Supdmase la creencia en la inmortalidad, i el ,
hombre no es mas qpe balTO, nido de gusanos, de
fetidez, de horror. No, la humanidad no quiere
ser eso. Ella comprende que es inmortal, lo cree
i lo ha creido siempre, i eA vano los reformadores
quieren hacerla mu.dar de fé. Siente que tiene
alma, i aspira a la posesion de Dios.
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EL CATOLICO. 21
Nada mas gt·ande, nada mas sublime que esta
creencia p1·ofesada por las jeneraciones que han
poblado i pueblan hoi el mundo, i ante ella es
impotente la nbsurda uegacion que deifica el placer.
La fuet·za hará cesa1· el culto pero no la idea
de que el culto nace, i esa fuerza tiránica de los
Jibel'ales, no conseguirá mas que amontonat· desgracias,
hacerlos mas i mas odiosos, i apresura¡·
el momento de la reaccion relijiosa, porque el
pueblo no puede deja¡· de creer, porque el pueblo
es racional i no puede dejat· de sel'lo, porque el
pueblo no goza ni se civiliza sino creyendo en Dios.
Por el:.o la fiesta del CoRPus es una de las mas espléndidas
fiestas en los pueblos cristianos.
---~ JJ.lit [t_ 1}l !JJiJ. !p_ [!} ~ ~--- .
-En una carta que hemos recibido de Tunja,
hallamos el pát·t·afo siguiente: '(Mucha impresion
me ha hecho la noticia de que haya habido pot·
allá semana santa, i que las llaves de los sagt·m·ios
las hayan sacado ciertos personajes. Los que a
esto se prestaron deberían leer el Evanjelio de San
.Mateo cap. 7, 0 v. 6: 0 "no echeis las cosas santas
a Jos pel'l·os, ni atTojeis vuestras perlas a los
marranos, no sea que las pisoteen i se vuelvan
contra vosotros i os destruyan." Debel'ian reco¡·dar
que en otra época se dióla llave de un sagrario
a cierto personaje de alto g1·ado en la majistra·
tura i en la lójiu, i que des pues no pudo ab1·h·se el
sagrario, i fué necesal'io emplear la punta de una
bayoneta paraforzat· la cerradura. Yo estaba entónces
en Bogota.''
-En otra carta fecha en Soatá nos comunican que
el CUI':l de la Ubita ha sido condenado a un año de
destierro, por el delito de habe1· dicho misa i ausiliado
a un moribundo sin licencia de la autoridnd.
Dos Obispos ante el mundo.-El seiior Domingo
Antonio Riaflo, Obispo de Antioqnia, confinado
entre Jos indios salvajes de Tierm-adentro;
i el sei10r Pedro A. Tórres, Obispo de Popayan,
lleno de honores i comodidades.-EI 1. 0 mártir de
su fé: el.2. 0 ••• i es tan a pocas leguas uno de otro.
ESTADÍSTICA CONSOLATORIA.-La guerradesoladol'a
pel'O providencial que aflije a los Estados
, Unidos del No1·te, ocupa una gran pat·te de las co-
1 lumnas de los diarios europeos. Unos describen
)as batallas sangrientns, ott·os cucntnn el numero
, de muertos i heridos : nosotros sacaremos de esta
1 triste historia los datos que hacen a nuestro propósito
i que son de no pequeña importancia en la
1 actualidad.
Dice un diario frances que tenemos a la vista :
"Los ejércitos del Norte cuentan 14 Jenerales
católicos, i es probable que no sea esta la cifm
completa. Todos ellos, con escepcion de uno solo,
practican su relijion. Algunos han abjm,ado el
protestantismo 4espues que comenzó la gueJTa.
Se habla tambien de conversiones mpi notables
entre los Oficiales del ejército del Sur. El que esCI'ibe
estas noticias dice que puede dar como cierta
la del Jener::ll Braxton-Bt·agg, el antagonista de
Rosenc¡·anz en la campaña de Tennessée. El mismo
Rosencranz es católico. Es hermano de Monseñor
Rosencranz, Obispo ausilim· de · Cincinnati.
Tenia por a migo fntimo al Coronel Gausché, hermano
de un misionero católico. Antes de la guena
estos dos amigoll eran el centro de una reunion
de oficiales que se juntaban para podet· practicar
con mas fervor su santa reJijion, i su hermano
coadjutor de las misiones, antiguo empieado del
Observatol'io de Washington, dice que Roseucranz
era el que distt·ibuía n Jos otros los oficios del Sagrado
Corazon, i un Padre Paulista de Nueva
York, refiere que el solo ejemplo de Roseneranz lo
babia convet'tido del pt·otestantismo al Catolicismo
cuando aun era oficial. El Co1·one1 Gausché era
digno de tal corhpañeJ'O de armas, pues comulgaba
todas lns semanas, i no dejaba jamas, aunque estuviera
abrumado de ocupaciones, de lee¡· todos los
dias cuatro capítulos de la Jrnitacion de Cristo.
¿No son estos indicios interesantes i en .e-s-tre··
mo consoladores de los triunfos del Catolicismo en
medio de las deplorables calamidades que nflijen la
sociedad americana ? Las cartas de que acabamos
de hacer mencion, permiten creer que existen, se
organizan i desarrollan grandes elementos de bien
en aquella tierra tan repentinamente conmovida i
at01·mentada. La Iglesia católica e-stá allí noblemente
representada pbt' su Clet·o, pot· los misioneros,
por los hermanos de la Doctl'ina cristiana, por
las incomparables Hermanas de la Caridad, por los
recien convertidos i )o, niiios de todas las clases .
Es evidente que se ¡·ealizan pi'Ogresos inmensos, i
que se elaboran i preparan allí cambios magníficos 1
i sorprendentes. Así es como la Providencia deposita
en la sangt·e misma i en las ruir¡as, jérmenes lt
destinados a producir frutos abundantes, que serán ~~
un dia, no lo dudamos, la salvación de la América. ~
Nuevos consuelos.-Un diario de Lóndres, dice 1
el mismo periódico (El - Mensajero) pubHcaba !
hace poco una lista de las conversiones que han 1
1
¡.1
tenido lugar hace algunos nüos, i a las cuales dá
una importancia particular la posicion social de los
convertidos. Pero lo mas notnble es que una boja
anglican~•, e11UoJ·'lúng AdveTtise'r, ha reproducido
en parte ésta lista, que contiene, segun sus propias
espresiones, 867 nombres " de los mas nobles i
distinguidos de la tierra. " Se encuentran allí,
dice, los nombres de '' 213 eclesiásticos (clergymen)
i otros dignatarios de la iglesia pt·otestante." .:
1
El mismo diario cita las personas mas considerables
que pertenecen a la aristocracia i a la alta
bou1'geoisie, que han entrado en el seno de la
Iglesia católica, i entre ellas " Su Alteza Real la 1
Duquesa ele Kent, madre de Su Majestad la Reiná
de Inglaterra." Vienen en seguida los nombres
de Ne\Yman, de Manning, de 'Vílberforce, i de
muchos otros talentos que eran la flor i la nata
del protestantismo. Entre estos nobles convertidos
pondrían citarse algunos que han prestado ya 1
eminentes servicios a la Iglesia. Todos cooperan a ·
preparar el tl'iunfo de la verdad en todas las filas
de sus compatriotas, cumpliendo estas obras de
caridacl que solo la Relijion católica sabe inspirar.
¿El hecho solo de su conversion no ·es por otra
parte una elocuente atestacion de la fuerza de la
verdad en ellos, cuando se consideran Jos su~rificios
de posiciones lucratiHIS i de pacífico i brillante
porvenit· que han debido hacm· ántes de abjurat· la J
herejía en que se habían criado? En fin, la deter- j
minacion de los convertidos ingleses parecel'á -Lié_,.~
meritoria aun, si se piensa en las preocupaciones,
los 6dios i rencores que han tenido que afrontar
de parte de una sociedad, to1ernnte con resp('cto a
una multitud de sectas, pero imbuida en las mas
1
injustas prevenciones contra lo que ella afecta ·
liamm·clpapismo, i masimpt·opiamenteromanismo ,1
-Los católicos de Suiza han enviado al Santo
1
P:tdre, entre varios regalos curiosos, una enorm~;
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
~ 22 EL e A T O L 1 e O.
!1 ;;.:;;;~;.:q~~~=;::;:::;oin:::;::;::: ' coloraClo, i se le calculuu cerca de cien años de edad, arrojadas de nuestra propia casa, privadas aun de· 1
i el retrato del mismoSantoPache hecho en vidrio. muchas cosas necesarias, i obligadas a vivir en
Todo esto iba acompañado con una buena suma en una casa_, en la que no podíamos encontl'ar la dísmetálico,
para contribuir al dinero de San Pedro. posicion material, tan necesaria para vivir confoL'- 1
Ya no hai Pi1·z"neos.-Esto dijo Luis XIV, me a nuestra regla, i aun en ésta misma casa,
cuando por consecuencia del testamento de Cárlos ¿ podiamos tener seguridad de que otra leí uo nos
II, el Duque de .AnJOU, su nieto, fué llamado a sacara de ella, i nos sepa.ram las unas de las
ocupar el trono de España. La industria hn conse- otras i acabara la órden relijiosa para nosotras?
guido, mejoL' todavía que la politica, realizar ésta Qué hombre del mundo uo busca i quie•·e tanqnifrase
célebre. En el mes de febt·ero último un lidad para sus últimos dias de vida ? Nosotras
despacho telegt·áfico anunció a toda la Europa el creemos i así lo confesamos, i Dios me<.liante así lo ,
perfm·amiento completo de los Pirineos para el es- cumpliremos, que los ' ' otos que hicimos, ningun
tablecimiento del camino de hierro de París aMa- Gobierno, ninguna lei puede relaja1·Ios, ni anulat·ddcl.
Ésta obra jigantescn, dice el JJfensajero de Jos, i que en donde quiera que estemos somos monBayona
es vet·daderamente admirable ; el trayec- jas obligadas a c~mplirlos. Aceptar, pues, la esto
perforado es inmenso, i la esactitml con que se claustracion, vivir sin poder cumplir las prescripha
emprendido ele uno i ott·o lado ha hecho que se ciones de nuestra Relijion, convenil· en no tener 1
encuentt·en los dos trabajos en el punto pt·eciso noviciado, cuando tan gt·aves males podemos evi- 1 .convenido. Madl'id, pues, quedará reunido a Pa- tarlos, dejando la patria, como ya fuimos obligaris
mui pronto por una vía férrea no interrumpi~ das a dejat· el convento, ese asilo querido de nuesda,
i entónces no habrá realmente Pirineos, cosa tros mas tiernos i relijiosos afectos, seria apostatar
1 que no pudo preveer Luis XIV. Allá,eu esos países i ser infieles al Señor Dios Nuestro, i olvidm· la
donde no se conoce el progt·eso colombiano, se vida etema, preferible a toda razon humana. Pot·
ponen a hacer esas cosas en vez de matar godos i esto decimos adios a nuestra morada de tantos
¡ 1 destruir el Catolicismo. años; a nuestra iglesi1'l en la que tantos consuelos
Las M•njas Carmelitas de Popayan, cansadas
de esperar inútilmente la resolucion que debió dic-
1 tarse a virtud de la representacion que publicamos
en nuestro número anteriot·, tuvieron que burlnr
la vijilancia del Gobernador del Estado que se ha bia
cosstituido su carcelero, i fugarse de dos en dos i
de tres en tres, en las noches de los dias 27 i 28 de
abril próximo pasado i en la madrugada del 29,
yendo las mas anciabas llevadas del diestro hasta
Timbío uonde fuet•oil espléndidamente recibida S
por los pobres. Sabida su fuga po¡· el señot· Payan,
les mandó decir que se alegraba d. e que se hu bieran
ido, i con este recado pudieron ya disponer
1 con descanso su marcha de una manera mas con ve·
ni ente.
Antes de emprenderla, depositaron en la Notarfa
la siguiente
PROTESTA I DESPEDIDA.,
ct Al dejar el país natal, la patria nuestra ; i el
convento en el que hemos vivido tantos aiios de
1 vida relijiosa i tranquila ; i la iglesia .en la cual
hicimos los votos que nos ligaron a Dws, i a la
cual ibamos diariamente a derramar nuestt·as almas
en la presencia del Señor, natural es cree¡· que
nos han decidido a hacerlo, motivos bien gL·aves,
superiores a todos los motivos humanos, porque
las tímidas esposas del Señor, ¿ qué bienes temporales
podemos it· a buscar a país estranjero, en
l
las casas de nuestras hermanas en las que set·emos
Udmitidas por caridad ? Qué hai en el mundo que
pudiera damos valot· pm·a emprender un viaje largo,
penoso, lleno de peligros, a nosotras ancianas
r.~1 e Jchas, i todas sin la esperiencia del mundo, i
solamente acostumbradas a la vida ele retiro i so-l
Jedad ? Solo quien no conoce el corazon humano,
podrá atribuirnos otro . motivo, que el de conservar
ileso el voto que hicimos, cuando dejamos
hogar i familia, para vivir como monjas del monastel'io
de Nuestm Señora del Cármen.
" La lei de 23 de abril sobre " Policía en matel'ia
de cultos,'' disolvió las comunidades relijio-nos
concedió el Seilor, cuando alabábamos i ensalzábamos
su santo nombre, i el de su Santísima
Madre bajo la invocaeion de Nuestm Señora del
Cármen; i a nuesh·a patria, en la cual quedan
nuestros padt·es, nuestros hermanos, nuestra~ familias,
nuestros compatriotas ; i a nuestro Ilustl'Í- ,
si m o Prelado el señor doctor Pedro Antonio Tónes,
que en todos tiempos i en particular en estos de
afliccion, i prueba, nos ha hecho tanto bien; i a
todo el Clero de Ja ciudad, i a tantas personas
bondadosas i caritativas que han mitigado la amargma
de nuestra ailiccion. Sí, en presencia de Dios
cledaramos : que hemos ' ' ivido alejadas de todo 1 negocio humano; que no hemos tenido participa-
1 cion en ninguno ; que hemos sido estraúas a todas
las cuestiones que han dividido el país ; i que en 1.
nuestro viaje solo buscamos lo que yn no se nos
concede ni permite en nuestra patria : Ja libertad
de ' 1iVi1· i moril· cumpliendo con los votos que lücimos
por nuestt·a libre i espontánea voluntad.
"Antes de darse la lei mencionada, la de manos
muertns, declaró, que todos nuestros bienes, provenientes
de Jas dotes que llevamos al convento
cuando profesamos i los que adquirimos ¡Jor dona-ciones
o legados que nos fueron hechos válida- 1 •
mente, pertenecían al Gobiemo, i que sedamos 1
indemnizadas con una pension ·vitalicia, pagade¡·a
del Tesoro público ; i cuando éste desde muchos
años att·as viene en notable déficit; cu:lndo los 1
empleados públicos no reciben sus sueldos ; ¿ podemos
confiar, que a nosotras tenidas como séres
inútiles por los hombres del mundo, se nos hubiera 1
pagado esa renta? Pet·o bien pudiera haberse 1
hecho el pago puntual, nuestro Santísimo Pndre
el Papa Pio IXJ i el Ilustrísimo Seiior Metropolitano
han declarado, que no debemos recibit· esa
renta viajera, i nosotras que como cristianas,
sumisas a la yoz del Vicario de Nuestro Seüot• JesucristoJ
solo nos toca obedeceJ•, no podiamos hacer
otra cosa, que sorneternos a esa decisíon. Pat·a
los que se crean superiores a este motivo podemos
decirles tambien : aceptada, era convenir en el
despojo de nuestm lejlüma propiedad, de esa propiedad
inviolable gat·antizada por la Constitucion
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EL e A T Ó L 1 e O. 23
de la Republica; i es ele notarse que cuando se dió
el decreto sobre Desamortizacion, la Iglesia estaba
independiente del Estado, i ant~ la lei, nosotras
solamente éramos granadinas, tan lejítimas propietarias,
como cualquier ott·o gl'anadino. Fué.1
pues, un despojo el que Sf\ hizo de nuest1·os bienes
i este despojo se han apl'esurado a repararlo los
• Gobiernos_, que lo han hecho en días calamitosos,
, tan luego como la sociedad ha vuelto a su estado
normal, i la justicia al consejo de los que gobierllan.
La misma repat'acion se nos hará, i no podemos
nosotras debilitar este det·echo perfecto,
1 admitiendo una vension, real o imajinaria, reprobnda
por la lglesia i desag•·adable a nuestm conciencia.
1\Iui al contrario protestamos contra el
despojo de nuestras propiedades, i reservamos el
derecho de reclamadas cuando podamos hacernos
1 oit· en justicia.
" De las consideraciones que anteceden se desprenden
dos con el usion es lójicas : La lei de 2 3 de
abril solo nos dejó una alternativa: apostatar,
faltm: a nuest•·os votos i pcrde1· nuestras almas_, o
d<'jat' éste pais pam buscar la libertad de conciencia_,
bien supremo de que senos pl'iva. La lei sobre
desamortizacion nos ha dejado sin rentas, ni hiel
es, i en la alternativa de morir de miseria, o de
buscar la caridad de nuestras hermanas en un país
mas feliz que el nuestro. Has.ta hoi pa1·a vivir hemos
necesit~do vender las alhajas de que podiamos
disponer. Esta doble alternativa la resolvemos
dejando ésta patria ; en ella quedan los huesos de
nuestras hermanas como un monurnento de lo que
fué la piedad de nuestros padres, i la dUI'eza de los
tiempos que hemos alcanz3clo. Nosotras llevamos
la esperanza de reunirnos a e11ns el día de la rcsune9cion
jeneral. Nuestra confianza está en Dio,s.
A EL le pedimos fortaleza en los trabajos, i de EL
espernmos poder cantar sus alabanzas en su santo
templo, si vivimos, o verle en la gloria, si morimos.
"1 para dat· a esta protesta la autenticidad legal,
firmamos dos ejemplares las Preladas, Clavarías
i dernas rclijíosas ante nuestm Secretat'Ül, i entrcgnmos
el uno al señor Notari.o público de esta
ciudad i el otro al Notario eclesiástico de este
obispado, pa1·a que Jos archiven en sus respectivas
oficinas i conste en todo tiempo, suplicándoles que
nsí lo ce•·tifiquen en seguida.
"Popayan, 1. 0 de abril de 1864.
"J.a Pl'iora, Cármen de Santa Ana.-La Subpriora
i ClavariD, JlaT[a Rosa de San Joaquin.Ana
JJJaria de San Ag ·ustin~ Clavaria.-Cdrmen
del Co ·razon de Jes us .-Rosalta del Cm·a::;on de
liJaría,
l{ELIJIOSAS :-Cármen de San Eliseo.-lliarta
JJlanuela de la Santísima Trinidad.-Sebastiana
de San Elias.-Ana Rosa de San José.-Ana
JJ!arfa d~ la Encarnacion.-JJJércedes de San
Juan de la Cruz.-JUarta Jesus de los Dolotes.
Carlota del Esph·itu Santo.-J~tana liJarta de
San Rafael.-Feli::;a de Jes~ts i San JYliguel.-Mada
Ascension de San Luis Gon::;aga.-Gregotia
del Santlshno Sac1·amento,Ciavaria i Secretaria."
EL Cll\JENTEHIO.
Al pié de la cruz que adorna
Verde hiedra,
Sobre esta musgosa l)iedra
Ven, Amira, a descansar.
Del sol el oblicuo rayo
La movible sombra aumenta ;
1 su luz amarillenta
Nos convida a meditar
Aquí la risueña hrisa
Vagarosa,
Se entristece, i silenciosa
Mece el arbusto i la flor;
1 hace temhlar de los sauces
La flotante cabellera ;
1 la agostada ,pradera
Barre con blando rumor.
Aquí nunca los festivos
Ruiseüores,
Sabrosos cantos de amores
Se atreven a preludiar ;
1 las avt>s todas lanzan
Triste pío
Entre el ramaje sombrío
Que escojen para anidar.·
El narciso, la violeta
Pudorosa,
La trinitaria, la rosa,
El encendido clavel,
Cubren con opaco velo
Su hermosura;
I acrecientan la tristura
De este lúgubre verjel.
Repara el sol, tierna Amira:
Por dem;o vapor velado
Derrama un tinte encarnado
Sobre el mimnol de la cruz; lj
Su abrasado disco flota
Sobre nubes de zafiro, !1
I fijamente Jo miro,
1
Sin que me ofenda su luz.
1·
Así de tus negros ojos 1
Miro, al traves de ese llanto,
Crecer el amable encanto,
1 amortiguars~:~ el fulgor 1
I aunque mi inquieta mirada
Fijo en tu pupila ardiente,
1
,
1\Ii helado pecho no siente
Ni una centella de amor.
Aqul el ánjel de la muerte 1
Hace sentir a las flores, 1
Al aura, a Jos ruiseñores i
Su tenible maj!•stad; ~ ~·
Apaga el son de la lira,
Estingue el amor profano,
1 suena un eco lejano
Que repite: Eternidad! D. R. i CAP.o.
!J! r:J)lliJ [1} rJ1 !P [l J!l ~
LA NOVENA DE LA CANDELARIA:
l.
( Continuacion.)
-Aquí está la cuestion, pensé yo para mí, i que- 1 ~
rria de buena gaua saberla, pero si l\lariana lo sabe lo ~
dirá.
1
'1 . -Comprendereis que yo no lo creo, continuó ella,i
s1 lo c.reyera no me daría por eso mas cuidado. ¿Qué
1
me importa a mí saber el marido que tendré, siempre
que sea hombre de bien, anstócrata i rico? 1\Iis padres
1io me han de dar otro. Por otra parte, sea hermoso
o feo, jóven o viejo, amable o áspero, no podra
cscusarse de llevarme a las sociedades, a los bailes, a
los espectáculos, ni de proveer, segun mi fortuna, il
los gastos de mi tocador. 1<:1 matrimonio es solo esto
¿no es as! ? 1 ademas, yo no me inquieto por lo ( ue
está tan léjos.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
24 EL CATÓLICO.
-Ni yo tampoco, dijo Teresa acercando su silla a lfl
de Mariana. ¿Pero el medio? -
La impaciencia llegaba a su colmo, i la de Mariana
no era menor que la nuestra, porque tenia mas placer
en hablar segui :lo i por la.rgo rato, del que nadie ! en el mundo ha tenidoJ·amas en escuchar. Paseó, pues,
1 !
1
• por ese auditorio solícito una mirada de satisfacciou
que procuraba hacer modesta, i volvió a tomar la pa-
1
labra en estos términos :
! - Sabeis, d!jo, tJUe no hai devoci'on mas agrada~)le
1.
1
a la Vírjen Santísima que la novena de la Candelarta,
1 i es por'estoquese ha crcido que recompensa~a con . lt
1
un favor especial a las perst){las que le r.endtan es;
te ho menaje En cuanto a 1111, no lo creo m lo creer e
.inmas; pero Clara lo cree .firmemente, porque ella
k' cree todo lo que se le qUiere hacer c~em:- .i Es ta,n
8, buena! Solo que hai muchas ceremo~tas 1 formah-
1
1 dades en esta esperiencia, i yo tengo mtedo de eml>rollarme
si Emilia no me ayuda un poco. Ella estaba
con uosotras·el dia que Cla_!a me habló d~ ~so.
1 -Yo? respondió. desdenosam~nte Etmlta. Yo no
r me mezclo en vuestras conversaciOnes,
r - No digo que te mezcles, continu.ó M,ariana, pero
las escuchas.-Es preciso pues, contmuo despues de
1
haber roido un poco sus lmdos dedos, comenzar la
t novena esta tarde a la oracion de las ocho,en la capilla
de la Sant'sim~ VirJen . .Es preciso luego oír en ella
todos los dias la primera misa, i volver a las prcees todas
las tardes hasta el primero de febrero, con . una
piedad que no decaiga, con una fé que ~o v.ac~le. I
des pues, el primero de febrero, es r.osa !flUl d1stmta.
Es preciso oír todas las misas de la captlla, desde la
primera hasta }a ú !tima; es preciso o ir todas. las pre-
1 ces i todas las instrucciones de la tarde, sm faltar a
una sola. Atended atended! iba a olvidar ·que es
preciso tambien haberse confes?d.o ese dia, i ~1ue si,
pot· desgracia, no se hubiese rec.1l>1do la absolucwn, t?·
·do lo de mas seria trabaJO peed1do; porque la .con_dtrion
eseneial al buen exito, es entrar en su.. habttaClon
en estado de gracia ..... Eutónces .... :
-Entónces se encuentra en ella un mando! esclamó
Teresa .'
-Tienes mucha prisa, repli~ó friamen!e Maria~a.
No estoi aun en la mitad de m1s mstrucetones. - Eutónces
se vuelve a comenzar a orar. se encierra una
para cumplir todas las condiciones de un retiro severo
· ayuna, i sinembargo lo dispone todo para un banqu~
te, pero para un banquete, a (lecir verdad, .en que
la golosina no tiene parte alguna. La mesa debe estar
aderezada para dos personas, i. cubierta de dos s~rvi ·
cios completos, salvo los cuch11los, que deben evt.tarse
con gran cuidado . . ~st? merece la mayor_atenclOn,
porque hai eJemplos horrtbles de la& desgract.as a qu~
una se espone olvidando esta regla. Os las contare
ahora, si quereis. No necesito deciros que este ~ubierto
exije un mantel perfectamente blanco, tan _!nn~
pio, tan fino, tan nuevo como se pueda consegUir, 1
que el buen órden i buen gusto del pequeño departamento,
nunca serán drmasiados para el buen éxito del
festin ; porque son cosas que se observan por costum-
1 bre cuando se recibe a una persona de consideracíon.
-Nos hablas de banquetes i festines, intec.rumpió
una de las muchachas, pero yo no he visto todavía ti
menor preparativo de cocina. ·
-No puedo decirlo todo a la vez, replico Mariana,
Os he prevenido que la comida seria mui sencilla. Se
compone de dos pedazos de pan bendito, que se han
llevado del último oficio, i de dos dedos de vino puro
repartidos entre los dos cubiertos: que ocupan como
es natmal, los dos costados de la mesa. Solo que el
medio del servicio está adornado con un plato de porcelana
o de plata, si es posible.
---;Hemos llegado al fin! dijo una de las mucbar.has.
-1 que encierra, continuó Mariana, dos ramitas,
cuidadosamente benditas, de mirto, de romero, o de
cualquiera otra planta verde, escepto el box, colocadas
1<~ una ni lado de la otra, i no en cruz. Este es otro
punto que es mui esencial observar.
-llue.go? diJO Teresa.
1 et círculo entero repitió la pregunta como un eco.
-En seguida, respondió Mariana, se vuelve a abrir
la puerta para dar paso al convidado esperado, toma
una lugar en la mesa,se encomienda mui devotamente
a ~a Santlsi1~1a V.írjen? i se duerme aguardando los ~fec·
tos de su Jrrtser~eonlta, que nunca deJaD d·e manifestarse,
segun la persona que Jos implora. Entónces comienzan
estrañas i admirables visio~es. Aquellas para
quienes el Sei1or h:~ preparDdo en In tierra una simpatía
desconocida, ven aparecer al hombre que las ha
de amar, si las encuentra; que las habrin amado al menos,
si las hubiese encontrado ; el marido que una tend
ría, si circunstancias favorables, se lo acercasen, i fe.
!ices las que lo encuentran ~ Lo que hai de consolador
es que un privileJio particular· de la novena, es procurar
la misma vision al jóven que es objeto de ella, e
inspirarle la misma impaciencia de unirse a esa mitad
de sl mismo que un sueño le ha hecho conocer.Este es
el lado bello de la esperiencia. Pero desgraciadas las
jóvenes curiosas de quienes el cielo no se haya ocupado
en la distribucion de los maridos, porque son
atormentadas con pronósticos espantosos. Una<;, destinadas
al convento, ven, segun se dice, una larga prosecion
de relijiosas, cantando los himnos de la Iglesia;
otras, a quienes la muerte debe herir ántes de
tiempo, i esto hiela la sangre en las venas, asisten vivas
a sus propios funerales. Se despiertan sobr~salta·
das a la cJaridad de las antorchas funebres i al rumor
de los sollozos de su madre i de sus amigas, que lloran
al rededor de un ataud forrado de blanco.
-Tomo a Dios por testigo, dijo Teresa, de que no
me es pondré jamas a semejantes terrores, tiembla una
con solo pensarlo.
-Tú podrías sineml>argo esponerte sin temor, replicó
Emilia. Te respondo de que dormirias hasta por la
mañana con un sueño tranquilo, i que seria preciso
despertarte como de ordinario, para tomarte la leccion
de italiano.
-Esta es mi opinion, replicó Mariana, i me admiraría
que no fuera tambien la de Máximo, que parece
abismado 'm sus reflexiones, como s1 tratase de ésplicar
un pasaje dificil de algun autor griego o latino.
- ·Yo no sé, respondí volviendo en mí, i me permitireis
no fallar tan pronto sobre una creencia apoyada
en el testimonio del pueblo, que se funda casi siempre
en la esperiencia. La cuestion vale bien en mi opinion,
Ja prna de ser estudiada.: pero perdona, quer ida Mariana,
continué diriJiendole la palabra, si los detalles
que acabas de darnos con tu gracia acostumbrada,
han dPjado algo que desear a mi esplritu. No has
puesto en escena, en tu relacíon, sino uua niña inquieta
por conocer su porvenir ; i convendras sin trabaJo
en que la misma duda· puede atormentar la imaJinar.
ion de un JÓven. ¿Piensas que la novena de la Candelaria
no produce su efecto sino para las mujeres, i
que la VírJen no concede las mismas gracias a los ruegos
de los mozos?
. (Col!tinuará).
ADVERTENCIAS.
c:El Católico" se publica todos los márt~s.
Se reciben suscriciones, a qoce reales por trimestre
i se venden números sueltos a real i medio
en el Despacho de la Curia, en la tienda,
del señor V cnancio Ortíz i en esta imprenta. 1
Las disposiciones dictadas por la actual Administracion
nos garantizan de que el periódico
irá con regularidad !'Orlos correos i de que no
tendremos que hacer reclamo alguno en tal sentido.
Los suscritores, puP.S: 'lo recibirán con rigurosa
puntualidad,.
IMPRENTA CONSTITUCIClNAL.-POR NICOLAS PONTON.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente:
Biblioteca Virtual Banco de la República
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El Católico - N. 51
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El Católico - N. 57
t.;ICO.
AÑO 11. Bogota, 5 de julio de 18.64, NUMERO 57, 1
ARQUIDIÓCESis DE SANTAFE DE BoGO'I'A.
1\liNJSTERIO ECLESii\Sl'ICO.-'fENZA, 25
DI•: :MAYO DE 186!.
.A 1 seüor Provisor i Vicario jcnernl.
En virtud de 1a nota de S. S. fecha 13 de
1 abril, marcada con el número 342, en que ruc
enc~uga dirija al selior Presbítero Francisco
de Pauh Jiménez en los ~jercicio~ que le pres-
1 cr1bió US, me e~ altamente satisñtctorio comumcarlc
que, por espacio de un mes ha practicado
dtchos ejercicios, i ha mostrado en ellos una
· contlucta ejemplar portándose con humil,lad,
recojimiento i un espíritu verdaderamente compunj•
do, que anuncm su arrepentimiento i su
provecho.
En tal virtull, i en uso de la facultad que me
confirió US. por su nota de 14 de mayo, marcada
con el nlÍmcro 40-!, par::t absolverlo publicamente
de la escomunion. procetlí en presencia
de los seüores Presbíteros Jocto.r Vicente
Ü 1ivos i Ánjel :María Urrea a dnrle la absolucion
del cuso, exijiéndole áutes juramento de
1
• fi1lelidad a la Santa Sede,. obediencia al Sumo
Pontífice, a los Prelados. i leyes ue la Iglesia
como lo exije S. S. Creo que queda curuplido
así el objeto de las citadas notas.
En vr:--ta de la conducta_ ejemplar q_uc ha
observado el Presbítero J iménez. en todo el
mes que ha esta.jercicio de su ministerio; lo cual
hé hecho en los mismos t6rminos en que lo es-taba
á:ntes ele ser censurad0. .
El señor doctor Francisco de Paula Jiménez
no necesita de mi recornendacion, pues él, sin
duda, se gr<~njeará la confianza i cstimarion de
sus Super:iores i de los _ ca~ólicos, siguienclo la
coBtlucta ejemplar que há come-nzado i que no
dudo coutrnun.1á.
TcJlza, 25 do mnyo de 18G4.
JuAN n . LA C. VARGAS.
NoTA.-La facultad de habilitar fué deJe~ada, a
virtud de aparecer que el señot· Presbítero J'méuez,
aunque aseguró que haiJia prestado jurameut{}, ni lo
prestó ni firmó dilijencia alguna. -------- -- ARQ.tHDIÓCESIS DE SANTAFE DE BoGO'LLHo.
"DA, MAYo 2H UE 1864:.
S12fíor Secretario del Gobierno eclesiástico ..
En el número 50 de " El Católico" he visto
una manifestacion de sumision i respeto a la
autoridad lejítimtt de la. Iglesia, de que me
glorí·o ser :Ministro. :firmada por algunos Párro·
cos de ésta Vicaría de San Matías ; i como
quiera quo ella. e~tá conforme a los· dictaLlos
de mi conciencia, espero que U. se digne tenerme
como comprendido en aquella promesa, que
juro sostener i defender, aun con el sacrificio
de mi exi-stencia..
De U.atento servidor. SAMUEL AGUAS.
RECLAMACION
IIECHA A LA CURIA ~.CLESIASTICA DE ESTE
ARZOBISP·ADO.
Seiíor Vicario.
Con el objeto do que los Curas no pongan obs·
táculo alguno al ejercicio de su ministerio, le
hé da TASECRETARIA
DEI, GOBIF:RNO ECLESIA TI- ¡
CO, 30 DE- JUNIO DE 1864-NUMEH.O 469.
Señor doctor Antonio De!gadillo.
Se ha recibido en éste despacho su nota de
13 del que espira i en contestacion a ella manifiesto
a U. lo si~uiente :
Aun en el supuesto de que el punto sobrP
que versa la notifica.cion que de órden del I l u~trísimo
seño1· Arzobtspo, se ha hacho en el numero
53 (no el o3) do ''El Católico," .no ~uhiera
sido decidido por la autorida.• l ecl es tá sti_?a,
i aun dado el caso do que fuera ésta cuest10n
contenciosa, que se ventilara juclicialmente; el
pretender que los Prelados inmed iatos quc-.lun
p:--ivados de jurisdJCcion, en ca so_s con:o el presente.
cu:.1ndo se ap~la al Supe:10r, sm_ haber
se llenado las fórmulas respecttvns, serta, estab
lecer el medio mejor calculado p'~ra anarquiz.
n la Iglesia i para ~a par por su base la. autoridad,
dejar sin funciones a los ~rel~d.os 1 para
que los contraventores a las d1spost?1ones .d\!
los mis,:nos, i de las leyes de b lgl.esla, eludieran
las penas i gozaran de impunulad, so pretesto
de una apela.cion de solucion in~lefin1da.
El funesto efecto de semejante práctica, aun
en los tribunales civiles,cuyo recurso en última
instancia, i despues de f>rcceder. los trámites
prescritos, no es dispendioso de ttempo por las
distancias, se ha conocido, por lo cual las leyes
no conceden en muchos casos la apelacion sin(.>
en el efecto deyolutivo, surtienrlo, entre tanto,
sus efectos, la rcsolucion de la autoridad de
quien se apela.
Tanto ménos puede U. disputar el dere?ho
que ~l Ilustrísimo s~ñor Arzobispo o su Vwa~
río tienen en el particular, cuanto. que. no . Sv
trata de ju1cio sino d.e una re_s#ol~cwn eJecut1va
o sea de administracwn eclesJastiCa,por la cual,
dcspues de publicada la ~ilij~ncia de s.u ~01ne#
tim1ento a la lei en térmmos JCnerales 1 sm escepcion
U. se ha colocado en eld1lema de protestar
contra la falsedad de tal dilijencia si es uno
de tantos casos en que cínicamente se. han supuesto
sometimientos, o retractarse e Impetrar
la absolucion de las censuras en que IJ:>SO FACTO
incurrió; i la futilidad de sus razonam•cntos
se acaba de patentizar cuan1lo los aduce
des pues que N u estro. San~ísimo P~~d~e el Soberano
Pontífice ha sido bten esphctto en su
Encíclica de 17 de setiembre, condenando el
procedimiento de los que, como U, han ab?ica:
do s· , crificando los de'rechos de la lgles1a, 1
prestando obedi~ncia: a disposicion~s c~ndenadas
por aquella 1l!fah#b~e autondad 1 ptotest~das
por nuer;;tro dignislmo Prelad? Me~ropohtaro.
Espediclas aquellas resolucwnes 1 la de
la sagrada congregacíon d~ 1~ ~enitenciaría.
dictada en Roma el 1, 0 de JUlio ulttmo, no se
comprende cuál sea la resolucion que agu~rda
U. para cumplir con su deber, retractarse 1 rechazar
esa pen¡5ion humillante_ que sin protesta,
encierra. la implícita aproba.~wn de la usurpacion
de los bienes de la Igles1a hecha por el
Gobie1·no.
Imprueba U. que se publiquen resoluciones
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
EL CATOLICO. . G1
de ésta especie i agrega que tales mandatos so
compran. Las resoluéiones se comunican por
el órgano de los señores Vicarios foráneos con
arreglo al decreto tle la materia i a. los cu:•les
se les envía '" El Católico" para que ellas
surtan sus efectos; i en lo demas seria tan
fundada la observacion sobre compra, como la
que ~e hiciera al Gobierno civil porque no se
distribuye gratis el ~' Di:1rio Oficial" a todos
lo:) ciudadanos. N o es U. de los que se pueden
cont~r como que carecen de recursos para
comprar un periódico, cuando ni las prohibiciones
sobre admision de cantidades del Tesoro
público, como consecuencia de las disposiciones
sobre desamortizacion, las ha respetado. Por
otra pute, la notificacion se hizo a U. particular
i prí vadamente desde noviembre último.
Dice U . que con esto se denigra su conducta
i se falta a la caridatl. No se trata aquf
, de un hecho privndo,s·no públiCo i relacionatlo
con Jos intereses espirituales de los fieles. La
prensa ha publicado su sometimiento, i el sefior
Socretario de Hacienda en su Presupuesto al
{)ongreso de éste año ha manifestado que U.
es uno de los que reciben sumas del Tesoro, i
hasta se ha comprometido el buen nombre de
las relijiosas de Santa J ertrudis, quienes~ como
las de las otras comunidades, han dado un
heróico ejemplo digno de la causa que defien-
1 den. Si a ésto se agrega que, conforme a la
doctrina de San Francisco ue Sales, es caridad
señalar al rebaño el peligro, prmcipalmente
cuando hai Sace dotes, como el doctor CayeMno
García de Fontibon, que estando suspensos
tienen el arrojo de ejcrcer ·i administrar
Jos sacrarr en tos, quedará U. persuadido que
seria una cartdad ma.l entendtda el guardar silencio
i dejat· a los fieles sumidos en un laberinto
de du1las.
Por tanto, cumpliendo con lo prevenido por
el I !ustrísimo P1elado, se le notifica i requtere
una vez mas para que se retracte, impetre humildemente
ll absolucion i cumpla con lo prevct.
ido por la sagrada Penitcnciarb; bien entendido
que si así no lo verificare,incurrirá,se·
gun lo resuelto por el mismo Ilustrísimo señor.
en la pena de excomunion, sin que para. ésto
obsten ap-::laciones inusitadas.
Dios guarde a usted-lVhauEL ARIAS.
REDACTOR 1 VENANCIO ORTIZ.
-- ------~-
Al leet· la histol'ia del espantoso cataclismo que
cuba·fó a Francia de l'tliuas i cadávea·es en los últimos
año:; del pasado siglo, se vé una: i) De manera que así
confesó aquel hombre en quien estaba encarnada
la t•evolucion, que el Catolicismo es un elemento
podet·oso de Ól'den i de paz. Sus amigos lo comprendían
así i habinn chulo principio a sus diabólicos
trabajos, digf¡·azúndolos con el brillante
ropaje de la Econonúa polltica, que conforme al
sistema de Turgot, condenaba todo lo que no producia
de una manera bien cln1·a una renta neta a
favot• del Tesoro nacional. Confoa·me a éste sis-tema
se censuraba la existencia de las comunidades
relijiosas como imp•·oductivas, i como improductivo
tambien el tiempo consagrado a las
prácticas de la Relijion. No contentos con ésto
Jos que deseaban la revuelta, escribían artículos 1
que dirijian a los Sacerdotes de ménos alcances,
poderándoles las riquezas i el despotismo de los
Obispos i calificando de indigna de la dignidad de 1
hombres su obediencia a ellos.
Bul'llindose de las pt·ácticas mas santas i ridi- J
culizándolas, ya en sus escritos, ya en pinturas,
fueron preparando los ánimos para el golpe que l
se meditaba, i de que no dejó duda ya, la pt·oposicion
heehn el 11 de fel:>ret·o de 1790 pot· el Di- 1
putado Treillard pat·a que se suprimiesen todas
las órdenes relijiosas i se aboliesen los votos monásticos.
Como ésta proposicion causó escándalo 1
por el ¡wonto. la Asamblea declat·ó : ) ; pero pocos dias
despues decretó como articulo constitucional la
supl'esion de toda ót·den o congt·egacion relijiosa,
i la pt·ohibicion de establecer otras nuevas en lo
su·cesivo. En tal virtud echat·on a la calle a frailes
i a monjas i se adueftat·on de los bienes de la Igle-sia
declarándolos nacionales. « 1 ero apesar de
ésto, dice el autor citado, todavía se podía decir
que subsistía en Francia la Relijion Católica,
Apo . tólica, Romana, pues aunque sus ObispJs i
I>astorrfi jemian oyendo blasfemias, i aunque estaba
pt·ivada la Iglesia del ausilio que podían darla
los relijiosos cuyo celo ayudaba al de Jos Pastot·es, 1
su.bsJstian éstos ; i aunque no tenian ya los fieles
aquellos asilos destinados a la perfeccion de los
consejos evanjélicos, podían santifioat·se en el seno ,
de sus familias, conset·vat· en ellas la pureza de la ¡
fé ¡. recibh· Jecciones i soconos pot· el ministel'io . 1
de lejítimos Páa•t•ocos. n .
No era ésto lo que querían los revolucionm·ios;
pet·o no att·eviéndose a chocar de frente con fa
creencia del pueblo, pt·ocuraban engañado e h·
ganando terreno con la desmoralizacion que difundian.
« Dejémosles por ahora su misa,» decía
Camus, i miéntras tanto, en los periódicos, en los
s habían estendido hasta invadil· la
autoridad civil. l'O eorno en ese eonjunto de dogmas i
leyes divinas, hni algunos cuya coneccion con las
Jeyes i vel'd udes primordiales 1w percibe el pueblo,
los que quedan engaiwdo para descatoiJzarJ,, i
hacerlo instrumento de sus rnnquinaciones, e:>plo-
1 t~ban admirablemente ésta Gircun:;taucia. >)
El Clm·o ilustrado t1 ab'ljaba. con ahinco en ]a
defensa de la fé i daba. u lu.t. escl'itos luminosos,
' rebutiendo los e!'l'ores que se tnltaba de difuudit·.
Negaba a la. A.san'll>ka t'l derecho para lejislar en
ese se.ntido, i decía ul pueblo que la suprema potestad
de In J•rl .. sia resitlin e11 el cuet·pu de los Obispos
unidos at'sumó Pontífice: que solo a ellos era
dado gobernarla i mndificar la uiscipllllu;i que Dios
babia dicho, que el que t·csistiera u la voz lle sus
Ptt'!;tores, debeda SPI' t enillo como jentil i publica-
'· no. "Vosotros, ailadia hablando a los lejbtadot·es,
1 no os dignais siquiera hacer una ~ct· pcion a favor
· ¡ del Papa, cuando prohil>ís esprtsameute reconocer
1
1
1
. la jnrisdiccion de Obi 'PO alguno 4ue resida fuera
de F•·a neia." Pero los jacobinos les contestaban :
"¿Qué pocleis temer contra vuestra B.elijion?
¿No veis que la Asnn.blea os .deja vuestras iglesias,
vuestt·a mtsn, vuestras vísperas i vuestro símbolo ? 1
No es, pues, ül amor a vuestra B.elijion, sino el
ódio a la t·evolncion lo que os hace resistii'OS al
juramento que se os ha maudado prestar."
Esejuramento ern análogo al que se exijia aquí
. po1· la llamada lci de 23 de abril, i como allá era
el pueblo católico como aquí, algunos empleados
, de distl'ito, po1· no quedm·se sin el Pát·¡·oco, se con'
fo1·mnron con m juramento en que los Sacerdotes
¡ consignaban todas las restl'icciones que juzgaban
11 necesarias para salvar su fé, i haciao publicar en
Jos rejístros respectivos esas dilijenrias. Muchos
Sacet·dotes jurm·on así, i ot1·os no coovinim·on en
hacel'lo ni de e·sa manera, i esos fueron mas respetados
por el pUC'blo que los bnscaba de p1·efe~
rencia para que le administraran los sacramentos,
, porque los juzgaban mus creyeut~. I sucedía ésto
porque, en lo jeneral, los mas virtuosos fue1·ou los
, quP. rebusm·ou toda transaccion con los enemigos
de .Dios, i prefirierou esponerse a la muerte.
El cum tle Kernfuntin, M1·. Valeto, fué uno de
éstos. La comision depar·tamental envió entónce~
, un Sace1·ilote juramentado pam reempl;uarlo, i
fum•za armada para que sostuviera a ést€ inti'Uso.
Entónces Mt·. Valete subió al pulpito i dijo: "En
la violencia que se me hace no opondré la. fue1·za
a las órdenes del Depal'tamento 7 i así, os exhorto
a sufdt• con paciencia ,.el insulto hecho a vuesti'O
Pastor ; pero creo que podré decil· misa en otl·a
1
pa1·te. Quédense enhoa·abueua Jos que quier-an oír
la de su nuevo Párroco; yo voi a decit· la mía pm·a
los d(.)mas."-Bajó i salió, i todos saliei'On tms él,
quedando el templo solo con los soldados.
No obstante la f1·ecuente repeticion de ac·tos como
éste, los jacobinos ponian en sus l'l'jistros oficiales
como jurnmentados a los Sacerdotes que ron
mas eucrjía se hnbian denegado al ju1·nmento, llegando
a publica¡· una larga lista para eng-IJ'¡a¡·
i aJTastrai· 3 otros a la apostasía, p1·esentt:índoles
el ejemplo de los Sacerdotes mejor ¡·pputados. Ésta '
superchería fué deseubierta pronto por las protestas
de aquellos, cuyo uomb1·e habían hecho figurar.
Todo ésto se haria corno se ha hecho nquí,
a pesar de que a\lá como aquí, la Constitucion nacional
ga1·antizaba la libertad de cultos.
El Sumo Pontííiee condenó, como ha condenado
ahora, el juJ'a mento sin restrkciones, i excitó
al Obispo de Autum, como ha excitado ahora al de
Popayan, a retracta¡· el que habia prestndo. Entónces
allú, romo ahora aquí, se trató de poner en
t•idículo la decision pontificia, i, como dice el auto1·
ya citado, "se manifestó coutra el Vicario de
Cristo un furo•· que superó al de los mayores he- 1
resíarcas." Pero no se atJ·Pviet·oo nún a mui g¡-andes
violencias porque temieron hact'l' mártires,
i no f<~ ltó quien hiciera not:H' entónces que " una 1
l'elijion abiertamente pcrsrguida gana prosélitos
en vez de aniquilarse"; cou cuyo motivo hace
notnt· un escl'ito1· eéleb1·e que esto solo se verifica
pot· milagt·o en la Relijion católica, po1·que Ja historia
hnce ve1· claramente qu . ninguna otra resbte
largo tiempo al pode1· de lu pet•secucion.
No obstante, en algunos departamentos si hicieron
sufl'i1· a los Sacerdotes i aun a los fieles de un
modo cruel, po1· cuyo motivo Talleit·and pl·onunció
en la Asamblea un discmso mui semejante a
los de nuesti'O actual Presidente; i (>ll que se ha ce n
singularmente 1 otables pnm nosotros las siguientes
pdl' bras :-'' E:s mene ~ t0r llUe t.•llos (los católicos)
« puedan decit· sin temo•· que nosotros somos <'iscc
n1 üticos, si les con' iene así; i por consiguiente
ce es meuester tumbien que el culto que qui ren
« C€lebrar nparte, difiern o no dt•l nuestt o, St>a
« tau libre como cunlquirra otro. De otra ~uerte
« la lihet;tad de relijion es un nombre vano, la
« Nacion viene a se1· intolcmntc i se justifiran todas
e< las persecuciones.>)
A penas fueron conocidos los breves del Pnpn,
cuando cm pezaron a retractarse todos Jos que
habian jurmlo,no siendo suficientes los dit\l'ios para
contene1· esas rctt·actaeiones entre las que babia
muchas de los que habinn jurado con re~triccionr ...
" Los Obispos, dice el nbnte Barrurl, no tenían
necesidad de éstos retractaciones~ porque aunque
hubo muchos a quienes sus diocesanos, nnciosos 1
de conservurlos, propusieron que jurasen con 1
cuantas l'('Strie:ciones juzgasen neee adas, éstos
Prelados, i entre ellos Monseñor de Argentré~
Obispo de Seez, temieron mucho el escéindalo que
ninguna l'estl'iccion hubiera podido impedil·, i
hallándose obligados a d::u· u u <'jemplo absoluto
de valor i firmezn, lo dieron sin la mas mluima
coudescf'ndencia con el etTOJ'."
Solo los de Lidda i Autum se dejaron ganat· con
pensiones como nuestro Obispo Tórres, i sacrifi- 1
caron como él ta fé a sus comodidades.
Los que deseaban difundi1· el utcismo i pt·oscri·
bh· hasta el nomb1·e de Dios pnt·a adorm· solo u
una prostituta, repetían a voz en cuello que lo que
quedan era restablece~· las costumbres i la piedad 1
de los pt•ime.t·os siglos del Cl'istianismo, pm•c¡ue se
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
E 1:. e ATÓ L I e O.
~mbinn introducido en In Relijion mucho& abusos
~ dogmn ·que la de:sflgumban.
A ésto coutestitban los católicos! '' que no conoeian
en la creencia distincion de dogmas mas
o ménos <'Seenciales: que si había nlgnno cuyo
~ conocirniento di ' tinto i noticia espresn no fuera
necesal'io pat·u la salvnrion, no babia uno siquiera
en que fue m permitido rontr.adecir al juicio de la
lgh·sia cua11duella lo tenia reconocido,'\
"Es preciso, les rcplirllhlln, obedecer· a las leyes
o set· declarados rebeldes.'> "Nosotr·os, respondi<
m los clérigos, nos sometemos en todo lo civi 1,
pero os negamos la potestad de dat· le yés en cosas
espírituales." A ésta t'espuesta victoriosa uo se
opouían ya sino las 1njlll'ins. "Vos0t1·~s, lf's de~
cil'u, •·esistis a la Constitucion, únit•ameute porque
os despoja de los diezmos, bienes i privilejios.''
"En prueba de que no es así, contestaban,
hemos abandonad las peusiones que nos sE>ñaluis
i las promesas que t'los haceis si juramos. lJemlis
protestado ~as disposiciones en que nos despojnis
de nuestros bienes porque nuestt·os títulos de pi'Opiedad
están hechos a favot· de la Iglesia, i la
Nacion nada ba ganado · con nuestro despojo.
Aun cuando esos bienes la pet·tenecie sen, debcrff.t
en justicia cumplit· los cat·gos e intenahHws de los
donantes: mantene1· el sacerdocio i el culto i dat•
lo wbrnntc a los pobres. P~ro vosott"'S l· abeis
hecho una co sa mui diferente i por e: o, despues
de habet·os monehado con el nías solemne lutrocit
i o , como Nadou sois hoi la mus pobre de las
aciones.''
Sinembargo, el t1·abajo nnticatólico continuaba,
la Tglesiil iba desapareciendo i Camus esclnmaba:
"lUe admit·a éste buen pueblo que se Ita dejado
quitar stt ReUjion sin advertirlo." tenia razon.
Los Pastores nten·ados clamaban po1· la libet·tad
i la paz de la Igl esia, i se les hacían pt·omesas
para despues con el objeto de calmguidOI'('S cansado~
ni parccc1' do la persecucion, descansaban, los
Snce1·dotec; babian Y u el to a presentarse con sus
hábitos, los templos se habían vuelto a abrir,
babia culto aunque sin fansto i solia oírse la predica
c io n aunq•le eon s trellida po1· el tC>rnot·. Pet·o cn
los departamentos no sucedí:\ e ·o: allí se azotaba
i apaleaba aun n los simples fieles, solo por
serlo, i continuaba persiguíéudose de muerte ni
Clero, éomo sucede hoi aqui, pot· ejemplo en
Bóyacá.
Pero llegó el año de 1792 i la lucha volvió a
empeñarse con mas encarnizamiento en todo el
reino. Volvióse a oh· llamnr por todas partes fanático
al que crefn en Dios. i aunque el juramento
se habia reducido a ta siguiepte fót·mula : " J Ul'o
mantenet· la libertad i la igualdad, i morit· pot· dcfendedas,
'' los saéerdotes que no se atrevían a
mentit' a Dios haciéndolo testigo de uua promesa
vaga, incierta i capciosa, se entregaban mas
bien a la rnuerte. Ellos sabían que lo que se enteudia
por libertad era el desenfreno, por· igualdad
ei desconocimiento de la autoridad del Papa i de
todo Prelado relijioso, i hasta la proscripcion d
mismo Dios. No se fijaban en lás palabras del ju·
rumento, sino en el espíl'itu del que lo exijia, i fieles
a su fé. no q.uisie¡·on negat· a su Maestt·o i marcharon
a morir. En los días 2 i a de setiembre
fueron asesinados todos los que estaban detenidos
en los Carmelitas, en ~au Fermiu, en la Fuerza,
etc, en todas las cát·celes de Pat·is, Mas de tt·es-cientos
S< cet·d otes i algunos laicos sufl'irron el
martil'io en e ~ns dos dias, i siguió el trrrot·. .
Cuando todos los enemigos de la Iglesia habián
suft·ido el castigo de Dios, cuando todos habían
caido bHjo el hacha de que se habiau armndo mutuament<•.,
vino Napoleon a cojer· a.l populacho feroz
que lwbi1\ d-ado sus brazos p¡u·a esas matanzas
impías, i lo ('ol1virüó en " came de <'Hi'lon." El
p1·im~· Cónsul restableció los altar<>s drl Catolicismo
eu Frauria para Yolvet· a esa Nacion diezmada
pot· sus propios hijos, todo t·l vigor con que necesituba
verla d conqnist :1dot· audaz. Prro se hnbia
conseguido po1· los sofl s tns~ creadores de esa revolueion
mónstruo, difundir de tal modo lns ideas
anticatólieas, que todRvía PI 18 jef•minnl, afw X
se dictó una !Pi mui semejante a In que aquí cono ..
cemos con la ft-cha de 17 de mayo i con el titulo
de: SOBRE INS PECCIO, DE CULTOS. El Cnrdeual
Cnprarn romo LPgado de la Santa Sede) dil·ijió al
Ministro de negocios est rnnJeros, una nota reclamando
('Outr'a la citada lci, i de ella copiamos Jos
pátTítfos que hacen a nuestro propósito. Son Jos
sigt1ientrs:
" El artkulo 1. 0 manila que ninguna bula_,. breve,
rescripto, etc. procedente de la Santa Sede,
pucdn pouerse en ejecucion, ui aun publicarse sin
la autorizaeiou del Gobierno.
· " l~sta disposieion ¿no lastima evidrntcmente
la libe.rtad de la euseíwnza eclesiásti<:a? ¿No somete
J., publicacion de las verdades ct·istla nas a
formali<.lndes humillantes? ¿No coloca. lns desiciones
con cemieutes a la fé i a la disciplina .bajo la
d epen c\e nci H a bsoluta del podPr tempo1:al? l. No
conc<>de a la potestad que intentase abusa¡· de ésta
disposicion Jos derechos i facilidades de repl'imi1·,
de sorprende1· i ann de sufoca1· <'1 Ien;runje de la
verdncl, qu e un l'ontíHce fiel a sus deberes quisiera
dirijír a los ¡,meblos confiados a su solicitud '?
"Nunea ha sido tal la dependencia de la Iglesia,
mm en los primeros siglos del Cristianismo.
Ninguna potestad exijió ent.ónees la compt·obacion
de sus decretos •.• i hoi debe gozar de la misma
ju1·isdiccion de que gozaba bajo los Empet·adores
paganos. Jamas es permitido t•estrinjil· su autol'idnd,
porque :a ha recibido de Jesucristo.
'' El sucesor de San Pedro debe confirmar a sus
het·manos en la fé, segun las espt·esiones de la Escritura,
¿ i cómo pod1·á verifieal'lo si sobt·e cada
a1·tícnlo que ensenase puede se¡· a cada instunte detenido
pot· la negativa del pase pot· par'te del Gobiemo
temporal'? ¿No se infiet·e evidentemente de
tales disposiciones que la Iglesia no pourá saber i
creet· mas que Jo que og1·ade nl Gobierno ?
" Éste ~ll'tículo lastima la delicadeza i secreto '
observados constantemente en Roma en los nego- 1
cios ae la Penitenciaría. Todo pmticnlnt· puede
dirijirse a ella con confi:mza, i sin temot· de ve&' 1,
descubiertas sus debilidades. Como éste articulo
nada eseeptúa, Jos breves ele la Penitenciarín de- 1
ben ~e·· comprobados, i es, pot' consectwnéia, ne~ ¡
c.esano que los ecretos de las familias i la canse- '
~ueneia bien triste de las debilidades humanas se
ha-gan públicas·, para alcazar el permiso de usar de 1
éstos breves. , . .
H Decl~ni el segundo artí ·u.lo que ningnn Legado,
uncw o Delegado de Su Santidad podt•á ejercer
sus facuttodes en Frur.cia &in Ja misma autori- 1
Ajentes. ¿Los Apóstoles i los primeros Obispos
zacion. El prhne¡· artículo hiere la libe ·tad de en- :,',; 1
señanza en su oríj'en, i éste la rentrinje en sus
~---- --- --·----
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
10 EL CATÓLICO.
de la Iglesia naciente hubieran podido predicar el
Evanjelio si los Gobiemos hubieran ejercido sobre
ellos semE>jante det·echo ?
" ELtet·cer artículn estiende ésta medida a los
cánones de los ConciHos. Se dice que se los quiere
exmninar; pero la vía de extimen en mntfrin de
reli,iion, est<:1 proscrita en el seno de la Iglesia Católica
; solo la admiten los prot~stantes.
'' Bien sé que nuestra obediencia debe soe· razonable;
pero no obedece1· sino (•on motivos suficientes
para ello, es att·ibuir-nos no solo el derecho de
examinar, sino tambien el de desecha.· at•bitral'ia-
. 1. mente todo lo que nos desagt·nda.
" Dios no ha prometido la infalibilidad mas que
a su Iglesia; las sociedades humanas pueden en"
gañat·se. ¿ Po•· qué, pues, las desiciones de una
autot·idad i?"refragable se hnn de sometet· a una
autol'idad que puede en·n•· ?
" El at·ticulo 6 declara que se podrá recut·t·it· al
Consejo de Estado en todos los casós de abuso:
mns, ¿cuáles son éstos? eL artículo no los especifica.
" Se dice que uno de ellos es la usm·p:1cion.
Mas~ en matel'ia dejul'isdiccion espiritual la lo-le5ia
es el único Juez competente. o
"Otro de los casos de abuso es la contravenc'on
a. l~s leyes o r~glamentos de la República; mas,
SI estas leyes, SI éstos reglamentos est> se ha
preguntado ¿si el Provisor ha autor·izado a alguna
persona para rematar bienes de manos muertas?
La respuesta de pa•·te del inf•·ascrito, es nega- 1
tiva ; pues miéntras funcionó de Vicario jenerar
no autol'izó a ninguna pet·sonn' para denun ciar,
redimit·, ni t·ematm· bienes de manos muerta · . A
todos los ( ue le consultat·on sobre ésta materia~
les dió pot· t·espuesta la resolucion del Jllmo. seño¡·
At·zobispo, publicada en la cil·cufat· de 22 c'e abril
último, numero 47 de ((EL CATÓLICO,» que ct erlam
censm·ados a los remntadot·es de bienes d e la Iglesia.
Por consiguiente In persona que aseve•·ó, que
el Proviso•· la autorizó para rematat·, redimir o
denunciar los bienes espresados, ha asegurado una
falsedad.
_ Bogotá, JUlio t.o de 1864.-:B. A. ToscANO.
" El artículo 17 parece es tab lece•· al Gobiemo Al~ PÚBl..lCO.
Juez de 1~ fé, de las co stumbrrs i de la capacidad Señor Redactor de " El Católico.''
de los Obtspos nombt·ados. Sin('mbm·go, solo l'1
Sobet•ano Pontífice tirne el derecho de hacet· éste Tenga la bondad de dnr· lugat· en sus columnas
exámen." a la protesta siguiente :-El que suscribe, oriundo
No ~opiaremos m.as: agreg3 r·emos solo, para del Obispado de Popayan i Sact>rdote domiciliado
conclull', una t•efleccwn que será corno la inscrip- en ésta ~apital des?~ el año de 1857, _pa_ra satisf~cion
de éste cuadt·o. Es ésta : cet· a D10s, reconcthat·me con la Iglesia 1 tt·anqm-
El hombre nada puede crea•· nunca, porque no lizm· mi conciencia,
puede tenet· idea sino de Jo que existe. El Cristia- ~ DECLARO :
néisl~ob fué una ct·eaciou p01·qne ninguna idea de fi Qtéle poté• flnquezn, debilidad i misel'i a human<~, i.
1 1a ia en el mundo cuando Jesucristo habló. 11·m , jur i me sometí n los decretos de tuicion, !'
Solo Dios puede ct·ear·, luego .lesucristo es Dios ¡ · coperando (sin advertirlo) a la desamortizaeion :1
es una_ locura luchat· con ÉL. No hai hombre ~¡ de los bienes de la Iglesia ; mas, habiendo cono- '
sect~, ni Nadon bastante fuerte pam tal luc'ha. ~ido el e~1orm~ i hol'l'endo pecado que come~tí,
Deststan, pues, nuestros noveles 'reformadores de 1 el tenrble 1 espantoso anatema en que m- 1
su manía imitutiva sino quieren dar coces contra cm·t·í, el cual aflije i lacet·a mi almn, lo Jlm·o, '
el aguijon. me dudo i anepiento~ pido a Dios perdon, a la
Ag•·adecemos cordialmente a nuestro cof•·ade
1 «EL SÍMBOLO,l> el rasgo de esquisita galanteda
que ha usado con nosott·os, recomendando a sus
lectot·es uno de nuest1·os artícnlos. A uuestm vez
i.s?Jo guiados por un sentimiento de estricta jus:
tJcta, r~comendamos l.a lectm·a del a1·tículo que
con el tttulo de se rejistt·a en
el número s.o de ce EL SíMn,>LO.»
-~n carta fecha 15 del p1·óximo pasado junio.
nos diCen de Popayan que el dia anteriot· había
llegado el señor Obispo Riaño, i añaden :-ito ésta manifestacion como
nueva pi'Ueba de mi arrepentimiento.
Bogotá, 3 de Julio de 1864.
PLÁCIDO ANTONIO AuAÚJo. 1 -= =- -===-==="~=="==== =========
LA NOVENA DE LA CANDELARIA.
l.
( Continuacion.)
-No hablaré de la belleza de aquella jóven ; no se
hacen retratos con palabras, i he dudfl.do algunas ve-
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
EL CATÓLICO.
ces que pudieran hacerse con pinceladas i colores. Hai 1 Decídme siquiera si podré estrechar una vez aún esa
en la r eunion de las forma~ de un sér animado no sé mano tjUe cubro de lágrimas, si podré •,·eros una vez
qué fuego de rasion Í de Yiddad v.ieneu del amor, yo las he conocido como tú.
Hoi reo bastante de léjo& las que atormentaron mi
JUvenlud, ¡:ara no pensar en eBas sino con desden,
pero sé que pueden ser mortn!cs. Así n.o habri.a vaci-l
lado t'n nnticiparnw a tus deseos, si hubiet1an po.dido
cumplirse. Te felicito por hnbet· tomado tu partido
contra mta desgracia ine · itable que el porvenir no
1
tardar ejemplo. me llabia sujer.ido aquella idea.
- Fn verdad. continué yo desf)ues de un momento
de refiex.ion •. habeis tenido razon en suponer que yo
p;:eferia a Clnra entce· todas tas otras. Amo spuPsta ha.engañndo m1s conjeturas.
¿~o es, pues, el m~trirnon1o de Clara el que te ha
reducido a ese estado de mel~u:colla a 1 que te he visto
pró,·imo a sucuml)jr i que me ha cost<1do tantas horri-bles
congojas?. . r
-: ¿Clara se cnsa? rPptiqué yo levantandome en mi
lrcho ...... ¡Clara se easa l de~is .. : . . . . ¡ Oh !
tranquilizí}os, amigo mio! no os he eugañado Este
trasporte no es si'no de alegría! pueda ese matrimo·
nio ser eonfnrme a ·1ns intenciones del cielo i colmarla
de una "di.cha, co1n.pleta! .....
-Yo lo deseo, repiicó mi p!Jclr~. quiero esperarlo,
.aunque hai una cosa n)ui estraordiñart~. Clara habia
rehús::tdo é. te añtl tres partidos nnli ventaJosos, i su
madre l;• e rf'la dispuesta a abraz.ar l:J vida relijiosa
euyas p· , tiras se-guia con singut·ar ardor, cuando un
,ió\'en desep1wcido i lleg:1do casi la vís¡H.'l'D, ha obteni- '
do su <·onsentimieuto desde- la primera entrevista.
Los ~nfot·m~s ·han sido favorobles, i las dos familias
$e haf\ puesto pronto de acHerdo. Ciara se ene 1entra
feliz con ést:t union, que la Yirjen S<.lllftsima le prepa~
ra, segun ella dice. desde el dia de la C· ndelat·ia. Tü
reeonoe~rá , aquf, esa imnjinacion mística i rotnones<-
n a la vez, que- me había hecb~ e e r que e. istia
alguna sim¡Hlthl entrevo ott·es.:
-Os protesto, am.jgo mio, qtte comprendo rnui
bien el nwtt·imonio de Clara, i que no pieu o que
hubiera podido contraer nunca otro mejor.
-En buena hora, replicó élt·on una esplosion de
risa ; ésto d ·epeude de la manera de ver de eutrámiJos.
¿ Péro no htablamos <.WI tuyo !l •
- ¿ Pensais que se;~ ~·a tiempo de ocuparoos de eso?
¡Yo no tengo aun \ejnte nños!
· Entre nosotros, e e f'S un negocio que te concierne; '
¿pero porque no? Yo me <'n prudentemente de es- 1
plicar. 'fu matrimonio ha ''enido a ser pues,el objeto
pl'incipal de mis pensnmie1 toE, de mis e, peranzas, i te
diré francamente que me he ocupado mucho de el des-de
la Candelaria ultima. ( Coutinuani ).
POR
~ULTl
tiA
•
VEZ
anunciamos a todos los individuos {jUe no que hayan
cubierto los trimestres t . 0 2. 0 j 3. 0 de "E.l CouserYador
" los 'mismos de ''El Bogotano.'' i cualesquiera
otra c~enta que tengan con este I~stablecimie11t . , cw.e
si dentt·o de1tereet'O dia no han pagado, se pul o~caran
sus nombres. Este anm1cio se entiende con o dos los
deudores SIN ESGE.PC Oi. de ninguna clase.
B0gotá, ~dejulio de 1864.
±= -~ ~ - . .,.=-=-- --,.;:=:::;:::=:=====
IMPRENTA CONSTitUCIONAL.
Calle del Chorro del Fiscal, casa nume1:o 14.
POR NI COLAS PONTON.
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente:
Biblioteca Virtual Banco de la República
Formatos de contenido:
Prensa
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El Católico - N. 57
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