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Imagen de apoyo de  Boletín Militar del Sur - N. 51

Boletín Militar del Sur - N. 51

Por: | Fecha: 17/12/1900

Se introduce una clase de funciones -semipreinvexas, que son algunas generalizaciones de las funciones semipreinvexas y las funciones -convexas. Se presentan ejemplos para mostrar sus relaciones entre las funciones -semipreinvexas, las funciones semipreinvexas y las funciones -convexas. También se obtienen algunas caracterizaciones de las funciones -semipreinvexas, y se presentan algunos resultados de optimalidad para una clase de funciones -semipreinvexas. Nuestros resultados mejoran y generalizan algunos resultados conocidos.
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A Class of -Semipreinvex Functions and Optimality

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Boletín Militar del Sur - N. 48

Por: | Fecha: 13/11/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. República de Colombia . Departamento del Cauca. Pasto, Noviembre 13 de 1900. NOMBRAMIENTOS M!LITARES. . DECRETO N:' 1 ~ ( OC'l'UI3RE 19. ) P.o1 el cual se lulce un nomhrami ento . El Prefecto de la Provincia, en nso de las facultad es qn e le ha con fe rido la J efat.mu Civil y Militat· del Depal'ta­mento en telegrauul N:' 91 1 de 4 de Jns co r rientes , OECBETA: Art.:' único. A propuesta. del fi Ciíor General, Cornamlant c Gen era l y .Je fe (l e Op eraciones, nómbntse al . (' iínr Elí:1 R i\. ViJ larr- eal Subteni ente de b 4~ Co Jll p::til ía d el B atallón 1 ~ de }( myurt Nlia . Sométase este Decreto á l:t ce nsnm de la J efatnra Ci, ·il y Mil itar, connmíc:¡1w· se al uornbrado y d~s c cuellta al señor Gc · JJOr'al J efe de Operaciones. Dado en Pa~to, á diez y oue1·e (l e Oc­tubre de mil novecientos. .ENJH (¡UJ~ SANTACRl' :t,. Por el Secrotario, el Escribi e nt e~ Juan ·cumaoo B ena vide.> . DECRETO :K~ 2: ( OCTT.TBRJ ~ 20.) . Por el cua l se hacen 1 arios nombra­mientos. El Pr· ef ec to de la Prov útá a, en uso de las facultades que le ha conferido la .Tefatut·a Ci\·i l y Militar del DE>partam en­to en telegrama N: 911 de 4 de Jo s co­rrientes1 y visto el oficio N~ 1%0 de Ja Comandancia General y J efatnra MiJit,..¡,r del Slll', DECRETA: Art: I: Nómbra:-;e al señn t· Plinio P eña, Capitán de la 1 ~ Compañía del Ba,. tallón 8~ de . Va n{!llaJ 'dia, en roe m plazo d el Capitán David Oa jiao que la comanda­b a anteriormente ; Art:' 2? Para llenar la vaennte del señor Peña, promnévese con el grado de Teniente a l Su bteoiente J esús Lnna de la · 4~ Compañía del mencionado Batallón. Art? 3:' Eu reemplaí::O del Subte­ni ente Luna, nómbrase con igual gmdo a] seño r Julio Del gado. Art? 4? Para llenar la vacante que existe en la 3 ~ Com pa'iií a del mea cionado Batallón 'del puesto de Subteni ente, nóm­brase con tal graJo al Sargento 1? Juan María .Mní1oí:: . Sométase. e l presente Deer eto á la aprobaci6u de la J efatura ~1ilitar del Cau ­ca, com uníquese á los nombrad os y désu cuenta al señor Gene ral, Comandante Ge ­neral. y J efe de Op eraciones. Dado en Pasto, á veinte de Octubre de mil UO\'ecientos - ' ENRIQUE SAN'l'ACRUZ. Por eJ Secretario, el Escribiente, Juan Clímaco B ena'vides . DECRETO N:' 3° , [OCTUBRE 24 .] 1 LITA o ORGAKO DE LA PREFECTURA PROVINCIAL. Números 4 8. EZ P,·~j'ecto de la P1·ovincia, en uso do ]as faénltad es de que está in ves­tillo por la Je!atnra ~.1ilitnr del Ca nea y visto el ofi cio N~ 197il del General J efe 1le Op c,·aci one··, de fe::lw. Je a-ye r', D}} QRBTA : ¡\ rt~ 1 ~ Por liccucia concec1 ic1a al prin e il'nJ ~ nómbrase al Seiíor Gnill ermo • \hn eida, 1 ('!' AynilaDte de h.L Ü'fic io a tele­. g r·áfir:t de eRt.a ci nd ad, c0n asimil acfón á :-lm -gent(l 'Jfa.yor pam l os rfect os fi Rcales. Sométase el presente De<'reto á la a­pro1, a cirín de ltt .Jefatura Iüil ita.1· del Canc:t, co niiiníqn e;:~e nl nomlmtdo y dése (menta. al Re ii or : SA:!\TA CRuz. Por el Secretarin, c.l Eser ihieutl'l, Juan (/Limaco B en(w~~Le.s . DECRETO :.í:= ±? (oCTUBRE 2.'í .) P or el c:Hnl "e lJace nn nomlmunieuto. Jü Pr~f'ecto de la Pro vincia. en nsn de las faculbL< let> ele c¡ue est:i in ves ­tido por lu. J ofatnm Ci d y Mili tat· del Can ea, y <~ ll ,·ista lld O.fieio d e la Secre:a. ría de In stru cción Ptí.h lica do 12 de este mes y de la' R e t~ olnc i ( ín dichda por el Se ­ííor Gen eral Comandante General· y .J e{ e de Operaciones cl0 ~ 3 del mismo : DECB'ET A: Art? J ~ Nómbmse n] seílor Fn1n· cisco Alh:íu, .T efe de las f uer%as llll e en­bren la. 1·ía de Barl> :tc oas , con el grado de T <:ni ent e Coronel, pcmL los efectos fis eale s. Sum étu::;e ecite Decr0to á la aprobación do la .J efatura Mili tar del C"a ut"a, comnnf­qu eqe nlHOillhl'll(lo y dése cu enta al seí1u1· Geue;·al .Jefe J e Op81':tcio.ues. Dad o en Pasto, fi ,· einticinco de Oc­tubre de ruil non; c i ento~. E NlHQ UF: SANTA CIWZ . Por el Secretario, el E ~; cribi o u te , Jzu t n f"~limaco B en aiJ ideo. UAj1PA:ÑA EN EL LITORAL D.EL F1\ CIFICO. Pa8to, 1 ~ de .:.\'oviem/;¡·e de '.7 900 . :Sefíor Prefe cto do h ProYin c i~v Presento. Co rrcsponcliendo con mucho gu to 1í. la atenta excitació11 queso sirvió Ud . ha­cerme, paso ~í: fo rmular nna bre,·e reseña de Jos últimos acontecimientos cumplidos en la, campa.ña del li toral del Pacífico. El lO de J nui o Jel presente afio ha ­bía llegado á ser in soste_nibl e la situnc i6n de las {uerí::as del Gob10mo acantonadas en el Morro; en todos ]os semb lantes se revelaba un a gra.u dept'e sión mo1'al oausa­d'a po r las enfermedades, el hamhre, la. mise ri a, las fatigas apenas soportables ya del servicio de campaiia, las num erosas defunciones, las diarias desercio nes de lu tropa y, sobre tl)do éso, la prolougada jn. comunicaci6n con el resto ele la Repú Hasta aqnella fecha, por ser ele las fijadas en el itinerario dc 'la Compañía in­glesa de navegar.ión para el arribo oe sus vapores á Tmuaco, se abrigó l a esperanza de qne ll egase alguno con auxilios del Go ­bieruo. Día Íué tle angustiosa esp e ctati n~. , y ro las últimas horas, u.nte la impla. cab ]o so led:ut de l mar, el ahatimi cnto Cl e los Et · nimos fué t.'l. n comp leto como la peuosrL ccrticlumhre de la desgra cia irrmui sible . En la, fecha signi eute iba á re solver­se en Concejo de Oficial es generales uu mo\·imieuto dr~sespe rad o que se meditaba sohrc l1)8 d e:tncamentos en emigos de los alrededores, para bnscar e] pa, o á Barba­eoas ó un deRenlace cualC). tÜe r~, qne no fu ese la rendición in cru enta ante el sober ­J, i o fi libu sterismo adueñado ae h costa : en medio de tanto ~•batimiento l'cp.¡gnaba meno s el inminente ri esgo do la mu erte, qu e la humillación de una entl'eg a pasiva en rnanol:l de los enem igos de la .Patria. A l:ts 10 de la noche se anunció en lo ., ca mpam entos con cJarnóre~ de júbilo la anibn,da rle nn bote despachado de la cañonera Boync<í con esp ionaje sobro el Mor ro. Una gran antorcha pn esta en el acto mi smo sobre la cumbre más ele vacl ·t ele la isla, iudicó á los J r.fes do á bordo la presencia de las hn estes L1ol Gobi ei'HO en ese Jugar ; y poco de ·p11és entró el bn(1ne al pu erto como mensaj ero de sal vación pum ::quollos tl e venturudos. L11. inopinada visita d0 la, CMíoue:·a; e] arribo clel Geneml Carl os A lh :tn, r1ui en 1lembn, el c~n :'i cter de .Jefe de O p(~mcio­ucs ; la noticia del t riunfo r ecien'·e u e las armas cotWCJTau or'.:ts en P.:don egro; los :mxilios ll egados, de tropas, medicamen­tos y eomestihles, y la espemuz:.t de una soluci6u pró xim a, fueron pa1 t e á olwar inmediata reacción en los espíri tus. Co­mo por eneanto cesaron de Rde ese pnnto las deserciones; lo que mnestm dammcn­te el va lor intrínseco qn o deb e asigua.r:; e las oclll'ridas hasta entnn ce~ . En tres ,-i.ajes qu~ hií::O posterionnen· te la Boyac~í trasportó d~ sdc Bn enavent n­ra los Batallones 24 de Santaurler, 1~ de Pabnira , el 1'1~sto del Urdan eta y parte del 16 de B1UIW1Jentttra; lo s cnítles no fn eron siuo reempl azos J.c los muchos in- 1 1 divid uos enfermos y moribundos que fue prec iso retirar a Jos hospitales y á los ce­menterios de Buena,rentura y de Cali en esos mismos viajes. La última \' ez, el 19 de Julio, llegó también al Mono el Gral. Alfredo V iís­quez Coho, Jefe de ~};tado :Mayor Gene­ral del Cuerpo Jel Ejército del Cau ca, con la. misión encarga!la a n te~ al General Al­b} ín , á quieu lo s L1 esignioe de la Providen­cia habían co ndu cid o ocasionalm ente á Pa­namá, para sa lvar h buena causa del de ­sastre que la amenaí::6 por ese Depart~­mento. Después de unn. conferencia privada que tnYieron lo s Generales Vásqu et Coho y 1\-f icolta, el Comandante de la Cañone­ra Coronel Aclolfo Cuevas y el Capitán de ]a misma Sr. EnJalio Márqnez, quedó dispuesto para la noche del ruismo 19 ei ataque sob re las islas Vi ciosa y de Tu.rmt· co; pero lu ego se transfirió á la del 20 , por no habet· al(:anzndo ~í prepararse todo en la fecha a ntes designadn. Por el cual-se hace un nombramiento . · bliea . A las 12 de la noche del ~O de Julio salió del Mo rro parte ele la exp edició n q no debía tomar por asalto las po sici ones de la isla Vicio sa, que qnetla hn.c i.a el la(lo . ¡ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. po.'t3r·íor de la de Tu maco ; esta operación e¡:;tab;t enco:11endnrla al Geneml Jvficolta.. ÜcHl'l'Ífí e! contrati ,mpo de qnc las cnuott@ d i ~po n i b](lS sólo p11l.lierou contuner BO homlll'es ; pe1·n fstm; fneron lo: bastante á las ~ do la lllañn.na del 21 cnyeroll sobre -la gllarnicióu de Ja \' iciosa, coostaute de 90 pl azas; y 1i la.· prin1cras descargas huyó precipitadnmente el ouemigo, dcjai:J llo en el sitio nn mm:rto, alguuo;:; prisioneros, nn magnífico cañón Crup con dotación de ho­tos lle 111etl'alln, rifles Koplachor, pertre ­chos y papüle · impor·tantcs. .L\ 1 mi::;mo tiempo el Genera.] V á. 1p1e7. Cobo co11 la Boyac;í atncaba vigorosamente b pobh­ción poi' ol freute, y desde el 1Jono se <1isparaha obr·e .la .Puntillrt de T ll! naco nuti'ido y certero fuego de cn Tí<)IJ y fu si­Jerín. Con el auxilio de Jos hottis de ]; Du­yacá y de las cano!:i que d<.:f:loe!Ipa.da:' rc­gres~ ÜlRll de la. . Vicio ·a, Re destacamu ü esta isla. costt do 300 llOm hre · uláf':. La OSCi1riclad et·a i11 tpcuotrahle; el tlesconcierto de los revolueionarios do T n­maco trascendía : sus fuegos dchi.illlcnte sostenidos aJ priuc ipio en esa polJb ció11 , • cesarou él e~' j)l t Gs totalmente. ¡\ b s -~- do .la wafíana, hma Oll que oemTía. Ja )¡;tja-­mar, dolJían lus asaltante:-; do la Y.tei\>sa eJttrar <Í Tumaeo, por un paso qne se de­cía yuedat· practicable á pie, á t r-ar és dd estero que di\·ide las dos isb s; poro cua; t­do todo estaba preparado para co1·onat' de ese modo Ja vietm·in, e] gn!n. con dnd or l'ü declaró desorientado por lar~ ~'iéu desde sus t ri nchcras del Cementerio y ]a J>ui1tilla. Se tt'ahó así 11Uent lncha COll Jas fu erzas o·ohiernistns Je Ja Viciosa y el J{orro, y ~ l!la.nt.nvo con encarnizamiento clurante todo· el '1 con si ~!· n i ero n escnnar ltn vunllo :i los hosqnes d ~ la costa \·ecÍua. " En la üu·riB del 2H h ¡·c ~·ol ncion ill­Yacliópodh Jassol itadas dichas sit uacinnes ~'i Ja 1ruwor brevedad posil>le, poi' ser esto dato de .su­ma .importancia. Jo ¡f; A. PL~To , " ~ ·.República de C'o~mobia. - Telégl'c~ f~JS J.\acwnales .- Ofi. J\r ~ 422.-Pref ectv1'Ct BoUvcM·, 2 de ~ilfoviemb1·e de 190Ó. GraL Lucio Vela.seo y Prefecto. Pasto. Honor trascribiros el sigui ente parte que acabo de reei bir: . ' 'Secretaría de Jn stmcción Pública.­Popay{! n, 24 de Octubre de J 900.- Pre­feeto ele Caldas.- Bolívar. Tengo ]a satisfacción de comuniear á Ud. que e] 20 ele los corrientes, de las 8 a. m. á ]at: ·2 p. m. uuestms fuerílas en número de 880 hombres á lns inmediatas 6rdenes ele los Sres. Grales. Miguel Medi-na y De1gaclo y Lnis J~ m·iq ue Bonilla co ­mo Jefe de Opcmciones y Comandante de la 7."' "Divisicín resped ivamente, com­batieron y der¡·oktt'On C'ompletamcute á JoR re\·ol!:cionarioR inmsores <.lel. Tolima qne en número de 2000 y al nianrlo Qt-l Ca.ieetlo, Bnstamante, :Liévano, Bnendía y otros cabecillas, y en actit,ud de fonni­dahle ameuaza llega ron Jwsta TI.iolJhH!CO y Calibío, dos leguas t1 istautes de esttt Ciudad, La. victoria alcanzada fué de lo más completa que p1-1octe darse: más de cien prisioneros tt·memos ha:;ta ahom y cerca de no o bajns mtís tn \'0 e] enellligo entre muertos y heridos. Se hnrecogido cerea do ~ 0 0 annas diverf'inR, mnehns cahnllería.s, rn o utma~'< , una c:trga de parque, co rtsidemh]e núme­ro de n:nmicioneR sueltaA y ll!Ht impl'í:mta qne servía á Jos invn.sol'es para publicar sns proclalllas y Boletines. Se tomaron iguc:.lmeute seis bando-ra ~:~ . ·Los dic; lwrsos fuei'O JJ perseguidoR has­ta Sih·i:t y tomaron lJOI' Ja cordillera .ha­cia el Toli llla. D ~ >i'. gnarde á Cd. - Jld efon so Día;¡; ele! CRsti lt'(.l, les, Bel'\'idor, Ancn:sro CoNR'I'AÍ.N A.uténti(;o, JI. ll Bencwúles. " J E. Jfo¡ ·. - r~fl . • Y: 4.10- lpia­: í de _\ (wir:mí" ·e de 1900. Gral . . Jefe ele Opem.cion eR.- Pasto. Gral. Q t t ~ií on e~; h ·efecto. - Tñque- .!TeR. .Anoche S l:ls J 1 deRpaclté . V uestl'o Sen id or .- l\hzucra.' ' Atonto SerYidor. G 1jS'l'AVO S. Gummrmo. Autént.ieo, Almeich" Es copia conforme. }<~j Ay udante Ura.l. Sri o., .. .Manml s.· Vélez.. '
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Strong Convergence of Hybrid Algorithm for Asymptotically Nonexpansive Mappings in Hilbert Spaces

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El Renacimiento - N. 20

Por: | Fecha: 28/02/1903

) f EL RE Año I-Serie I DIRECTOlt ;- i ¡ PEDRO JOSE GOMEZ C. ~ Dirección cablegráfica: RENACIMIEN. No hay suscripciones. Número suelto ................................... $ I ••. Número atrasado......... ........ ............. ..... 1 5- Para anuncios, arreglos particulares. Remitidos. columna ............................... S ... . No se devuelven ori::inales. La cOTTespondencia de be rotularse al Direct.r. Oficina: Pasaje Hernandez. piso alto. lIúmero 57. Contratado un a,'iso por determinado número de Yeces.:lie hará d~ctiYO el valor de ellas auaque se • rdene su suspensión. Canal de Panamá La resolución que el próxi­mo Congreso tome acerca del Tratado que el Sr. Herrán, En­cargado de ~ egocios de. 00- lombia, celebro con el GobIerno de los Estados U nidos pata la apertura del Canal interocéani­co, es de la mayor importancia en el aspecto económico actual, . en el del porvenir del país, por ser el Istmo posición geográfi­ca de primer orden, y en el de esa comarca en todos sentidos. La determinación que se to­me debe ser emanada de un es­tudio completo y sereno de los. elementos que han de entrar como base de cálculo para fijar la suma que convie.ne exigir por la concesión del pri vilegio y la aplicación de la zona; de mane­ra que las conclusiones no sean erróneas ni por exceso ni por defecto, pues tan perjudicial se­ría irn pedir la ej ecución de la obra por exceso de exigencia~, como no pedir las sumas á que con j usticia p~ede aspirar la República. . Inspirados en ese criterío, he­mos creído conveniente h:iCer un breve an'álisis de parte 'de dos artículps que ha publicado El C01'1'eo Nacional en sus nú­meros 2,641 y 2,644, respecti­vame) 1te, con el mismo título que llevan estas líneas. El colaborador de El 001'reo es, sin duda, escritor' de buena fe, y quiere que Oolombia o~­- tenga el mayor provecho POSI­ble en la negociación. Su pro­pósito es muy' plausible, pero nos parece que yerra en la apre­ciación de lo que Oolombia. da para la Empre¡sa. Ensayaremos una explicación. En el primer artículo, dice: ... __ ., Creemos que no po-drán excluírse quizás de] domi­nio de la zona las ciudades ele Panamá y Colón, porque no se comprende cómo podríamos nos­otros administrar dos poblacio­nes incrustadas en territorio ajeno. Esa administración sería fuente perma.nente de desacuer­dos con el Gobierno de los Es- - .•• -.. -_._-_ .. -._ ... •..• :::::::::::~::::::::::.-.---:::--:_-"':=---"::::::::;::::::::::;::::::::=:~._"' '''''---''--''--.--_._. Oficina, Pasaje Hernández, .piso alto, número 57 r República de Colombia-Bogotá, sábado z8 de Febrero de 1903 tados U nidos, en los cuales lle­varíamos nosotros la peor p~r­te." Si se admite la eventualidad de que las ciudades de Panamá y Colón entren en el dominio de la zona cuya administración se concede á los Estados U ni­dos, el p unto de partida es inad­misible, no tan solo en el aspec­to económico, el cual vendría á ser secundario, sino E'll el de la soberanía nacional, que en ese caso vendría á ser gravemente menoscabada, porque en el he­cho, si quedaran bajo la j uris­dicción de la Unión Americana, déjarían dA perhmec0r el Co10m­bia. Los puntos terminales del Canal no serán Oolón y Pana­má. No podrían serlo sino con la destrucción, ó poco menos, de esas ciudades. La parte que está const.ruida comienza á inmedia­ciones de la primera, en la bahía de Limón, y terminará, bas­tante al Sur de la segunda, en la' Rada de Panamá, según el plano panorámico adoptado en 1879 por el Congreso Universal del Oanal In terocéan ico, que ha servido para la dirección ge­neraol de los trabajos. No hay obstáculo serio en que Panamá y Colón con 1.in úen, después de exca,aclo el Canal, bajo la jurisdicción de Oolom­bia, como no lo ha habido en cerca de medio siglo que lleva de const.ruído, por nort.eameri­canos, el ferrocarril por medio del cuaJ se hace el tránsito en­tre los dos mares, el cual ha sido siempre de propiedad de extranjeros. Hemos dicho que si Colom­bia perdiera tales ciudades, el aspecto económico de 1;1 nego­c. ia ción v,~ ndría á ser secunda-rlO, y aSl es; pero no por eso dejaremos de obser\rar que si aq uello viniera {t ser simple resultado de la administración de la Empresa, serían cedidas á título gratuito ó t.omadas por la fue,rza,y ambas suposiciones son inaceptables. La renuncia, como dejación voluntaria por parte de Colom­bia, sería absurda; porque, apar­te de la pérdida de su dere­cho. de soberanía, implicaría la cesión de la propiedad de las dos ciudades, cuyo valor no es fácil estimar, pero que sin duda excede los diez millones de dóla­res que los Estados U nidos ofre­cen pagar de contado, sin com­prenderlas en la zona Que los Estados U nidos re­suelvan apoderarse por' la fuer­za de esas dos ciudades, para evitar colisiones de autoridad dentro de la zona, no es verosí­mil, porque se han situado en el campo de la negociación. Por otra parte, tanto en el Proyecto de Tratado presenta­do por el Ministro Sr, Dr. Car­los Mart{nez Silva, como en el presentado por el Sr DI', (lon­cha, hay send.as cláusulas en que Colombia concede al Go­bierno de los Estados U nidos el uso de un~ zona de terre~o á lo largo del Calla], de üinc0 ki­lómetros de ancho á cada lado de la vía, exceptua,ndo las ciu­dades de Panamá .y Colón. Suponemos que en ~¡ 'rrata­do suscrito por pI Sr. -Nerl'án, Trata.do que no conocemos, se haya estipulado de manera ine­quívoca, que las dichas ciudades quedan en todo caso excluidas de la zona, esto ftS, auncuando estén dentro de los cinco kiló­metros que se conceden para la construcción y el servicio de la obra. Si es así, la observación del colaborador de El Correo Nacional carece de fundamento. Próximamente nos ocupare­mos en otros puntü"s compren­didos en los importantes escri­tos del colaborador de El 00- 'rreo NáciolZal. ---..... --.......-. -- Reminiscencias Políticas Continúa Des/le que eJ principio conse'rva dor ciio al país, har.e, 11 añll~, nueva Constitución y nuevas práctic\H~ ,le go-bierno, Re le ha comhatido ahíllca­damente con el tesón y pujanza COII que se atacan las ooctri nas que ca tll · hian la faz oe Jas soeiedades: J'IIUí' ha h~ sido larga, temlz, reñida; la~ pe ripecias y los peligro¡:, !Sin cuellto: los modos de ataque. los máil variadoil y peregrinos; ni hall (altanó err(lrf~, caídas y desercione~ de sus afiliados; pero el Partido 110 está agrupado ell torno de hombres sino en torno de un principio, y el principio ha segui­do su camino arduo y difícil, pero glorioso siempre, en medio de rt~cios combates, cie azares y vAivenc-s de bajas a~echanzas. Al presentarse ep estos momentos la lucha electoral. se ha presentado con ella una nueva y rlesafi,rada para el principio cuya marcha hemos se­guido en este escrito. Tal es el carác­ter del actual comhate, y así debe considerársele, aun por honor del país y por decoro oe los parlidos; aquéllos que combaten por hombres. están llamados tÍ desaparecer con el Jefe, á seguir sus capricho:>, á variar de rumbo y de programa según la voluntad del caudillo; tales agrupa­ciones no pueden contrihuír Jamás á la marcha regular del país y al afian­, zamiento del orden. y anles, sí. pre~ paran y educan á las naciones para la dictadura. El triunfo de los candidatos' pre· sentados y sostenidos por el Particio Nacional lleva con él el triunfo del principiu Conservac!or; y si en la elec- Número 20 ción del Sr. Caro ' para Presidente en el próximo período cOllstituciollal hay continuismo rle persona, hay, in d uda­blemente también, . continuismo de. preponderancia para el principio con­servador, continuisrno del orden esta~ bleciclo; su elección representa el desarrollo natural y constante de la reacción com,ervadora iniciarla en 1885, significa una Hue-va derrota para el principio radical, entronizado en las instituciones á mediados del siglo y volcarlo de ellas en la Cons­titución que actualmente rige los ,1e8- tinos ele la República . No se trata, pues, de hombres: se trata de principios; no se trata de antipatías ó simpatías, ni de intereses personaJe!", q lTe deben borrarse 1 desaparecer ante los 'grandes . intere­ses nacionales: se trata de clefender­nos de desventuras y desórdenes que 'deberían levantar resistencias y ener­gía dondequiera que no se hAya per­dido la memoria ni el sentimiento de la Patria. Debería huscarse otro candidat() si la Constitución se opusiera á la elección del Sr. Caro, pero la permi­te, puesto que la ha previsto . . Si el Sr. Caro huhi ara ahdicado ó renega­do de los prin cipios á cuya defensa y difusión ha consagrado todo el calor de su corazón y la fuerza de su inte­ligencia, su existencia toda entera; en él. como en pocos colombiano~, la pasión oe la idea, la pasión de la verdad, la pastión oel Estado, ha do­m i nado toda otra aspiración y todo otro anhelo. El Sr. Caro es hoy el mi.smo que COII sus escritos y esfuer­zos contribuyó poderosamente al triunfo del principio conservador; el mismo homhre inmaculado, intacha· hle, que atrajo, hace cinco años. la mayoría de los votos del Partido Nacional; es el mismo hombre, esti. mado y respetado por cuantos han cOl1servado el criterio libre cie pasio­nes y ofuscamientos; j es el mismo, sí! Sólo que ha pasado por él... el Gobierno; es decir, furiosos huraca­nes políticos, dificultades enormes. problemas desesperantes, ambiniones contenida~, pasiones exasperadds. ape~ titos mal saciados, cóleras, ciespechos, injusticias, ingratitudes __ y por sobre todo, y como su complemento, el carr~anci(), el tedio, el aburrimiento de una misma cosa que domina á los colombianos y á (l~e no han podido acostumbrarse losholObresmás bene­méritos y bien íntencionado~, 10s má's emi nent.es estadistas, los más _háhiles gobernantes. TELEGRAMAS ) República de Colombz'a-Ministeno de Gobt'enzo-Dz'reccz'ón - general de Correos y Teltgra/os-Sección de Telégra/os-Número I I I3-' Bogotá, 26 de Febrero de 1903 Sr. Director de EL RKNACUUJt:!(TO : Me permito remitirle adjunta. con ésta la copia del -telegrama de fecha 25 del presente, de Lenguazaque, para que se sirva. ponerlo en su importante pe­riódico, si no tiene iÍlconve-­niente. , Dios guarde á usted. J os1J ANTONIO RIVAS '. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. .. I Rep2ZbHca de Co/cmbia-Telégmfos Nac1ona/cs-Lcnq1Ia2aq2lf, 25 de Feb1-e1o de I903 Sr. Director de Telégrafos Párroeo, A1calde este Muni­cipio en propio nombre y ha­bitantes representan, cum plen sagrado deber dar á usted,.y por • su digno conducto al GobIerno, cumplidos agradecimientos, por la honra é inmenso favor que se han dignado dispensarles, con instalación telégrafo en ésta. Con sent imientos de gratitud y alta consideración quedamos de us­ted atentos servidores, FRANClSOO DE J. CASTA~EDA ALE.JANDRO Rmz • Exterior A PROPÓSITO DE UN TRATADO RECIEN'IE Una intriga orleanista- La misión de la Princesa María-Intereses parti- , culaN:s del Siam. • La Nme Fnie P1'esse de Viena ha recihirlo rl~ Copenhague una curiosa ' correF ponelencia, que repro(luciinos en !'('guida úlítulo de curio8irlad, de­jaoelu al eliRrio vienés toda la rcspon­eahilielad: "Hace l'Ilgull os oías, la Princesa María) eSpOí'H dpl Príncipe Walde­mar y hermana elel difunto Príncipe Enri que de Orleans, se encuentra en Pa\k Se salle que la Princesa María eFtá encargada de llevar á cabo en Pad:,¡ una misi6n,política. GraciaF á EU parentesco tan cerca­DO con la CaFa de. Orlenns, tiene la mi­sión de influír sobre los pbrlamellta­rios monarquistaf:, .á fin de det~rmi­narlof:, ~ pCfar elesu opo¡;;ición al Gabi­nete Comhes, á ,'otar por la ratifica­ción (lel Tratado franeo-siamés, que acalla de ser firmado. La Princcsh tie­ne razones importantes pamocuparse con la mayor actividad en el éxito de su mibión; pues el Príncipe Walde­mar, su esposo, y la familia Real da­nesa toda, han empefiado capitales considerahles en el Asia Oriental y pRrt icularmente en el Banco de Ban­gkok. Como lo dijo un eliario francés, los deseos de una PrinceFa que perte­nece á la Casa Real de Frallcia, y fIue se }la consagrado con tanta frecuen­cia á la ,ce usa de ésta, no pueden ser desatendidos, y es preciso tenerlos en cuenta cuando, como acaba ella de hacerlo, aconseja al Gobierno francés, por medio de su Ministro en Copen­hague, que no se muestre demasiado exigente con el de Siam. • ** Matrimonio de la Srita. Roosevelt L-ittlerock ( A1'Cansas J, Noviem­IJ're 23-Nos comunican que la Srita. Alil'ia Roofuelt, hija del Presidente RooseTelt, se ha des/3osado con M. John Greenway, joven que se ha dis­tinguido en Jos sports en la Uni,ersi­dad de Halward, y que obtuvo el gra­do de Teniente en la caballería ligera de M. Roosevelt, durant~ 13 guerra his panoamerica na. ** * Se ha hecho el cálculo de lo que cuesta la huelga á los obreroF. En el Pas de Calais hay 62,000 obreros que ganan 5 francos por elía, ósea 310,000 francos mínimum. Es­to produce por quincena 4.650,000 francos. , y quitamo~ la ~egunrla quir.ct'IUl. En cuanto á la~ Ccmpafih'!', pif r­den 700,000 Ílllncc 8 p(lr dla, nt(, 0 , 11.250,000 frareo," ror quil ((r 11, i) EL RENACIMIENTO en h.nefieio de quién', j de los ale­manes y de los ingleae€! Hé aquí lo que cueitan al país 108 ooiosol pdlítiCM, que con la compli­cidao oel Gohie rno, han del'lencaoe­naoo lal hu e lga~ no en lista de una yentaja profe,ional, pue!'to que nada de e~te género ha ~iou furmulado an­tes de la cesación oel trabajo, sino para atizar el fuego reyolucionario en Francia! y efite es el principió. (ú Matin) ---...... _------ NOTICIAS FRESCAS ••• Cosa más difícil que escribir re­vistas ó crónicas bogotanas, creo que no haya sobre la tierra. ¡ Y há­bil que soy yo para tal 'cosa ! Se me figura la c"ara que pondrán mis lectores cada vez que , les llega un número de EL RENACiMIENTO, Y ven las dos palabras con que enca­bezo siempre mis revistas: Noticias ' frescas. i Con qué entusiasmo em. pezarán la lectura, juzgando encon­trar allí relaciones de quién sabe cuántos hechos terribles acaecidos últimamente ! i Y 'con qué desprecio botarán el número d la punta de U1~ cuerno cuando, terminada la lec­tura de la revista, encuentran que no he contado otra cosa que aquello que sabían quién sabe cuántos días antes! PQr' ejemplo. hoy nQ tengo otra cosa para referir sino ql\e por fin llovil). "i Ah 'lloticiótt mduser! iJ uz gará el repórter ése que no t enemos ojos para ver el agua, ni oídos para sentirla estrellarse en las losas del pavimentar' Así dirán las personas que lean estas noticias; pero yo les suplico me perdonen si no les refie­ro nada menos sabido, porque no lo hallo por más que lo busco, y que lo busco ~in cesar, es cosa que nadie negarme puede, pues ien qué lugar de Bogotá no se me ve con mi cuadernito de notas en la mano izquierda, y en la derecha el lápiz, listo para apuntar el primer incidente digno de mención que se presente? A tres cuadras de distancia veo un tumulto de gente, y se me figura que algo grave está pasando, i y es de ver entonces la carrera que em­prendo hacia tal sitio! Supongo que voy á encontrar quién sabe cuántos cadáveres en­sangrentados. Veo los espantados ojos, los cráneos rotos, los intestinos salidos, en fin, todos los horrores imaginables. Y í qué lamentos los que imagino escuchar! i Qué de plegarias entrecortadas! i Qué de gritos de los agent.!s encargados de guardar el orden. í Barbaridad! ¡Ho­rror! Llego, y í qué desengaño ! Toda la bulla depende de que un Sr. Agente lleva para la Central una mujer que, con bastante cantidad del amarillo licor entre pecho y es­palda, alza hasta el cielo sus lamen­taciones, salpicadas de groserías ja­más oídas. j Qué desconsuelo el mío! Correr tres cuadras como un loco, acabar de gastar los ya casi agota­dds tacones de mis botines, y todo ¡para qué? Para sufrir un cruel des­engaño, para presenciar un espec­táculo muy poco grato. iQué ganan, por ejemplo, mis lec­tores, con saber 10 que le pasó en la noche del jueves al director de cier­to periódico de esos de 110 llevar pan? Nacja ganan, pero se 10 referiré, por no haber otra cosa peor que ha­cer. Fue el caso que dicho señor llegó un poco tarde al teatro, y en lugar de entrar á ocupar su asiento 10 más silenciosamente posible, se detuvo en la puerta de entrada á luneta. Un Agente, á quien' no le pareció bien hecha tal cosa, le suplicó pri­mero, y luégo le ordenó, que entra­ra ó saliera, pero que de ningún mo­do le permitía permanecer allí. y al tal señor, que tiene en las venas la sangre más ardiente del mundo, se le subió el Sa1t Telmo d las gavias, de:tal suerte, que dio:mo­tivo para que el Agente cumpliera la amenaza que le había hecho antes de llevarlo á la Central, adonde se fue con calentura y todo, y donde permaneció un rato no · corto, per­diendo gran parte de la representa­ción. Yo lo siento muchísimo, por su­ptJesto, pero aconsejo al señor de mi cuento y á todos los de sangre tibia, que procuren hacer que se les en­fríe un poco, y. respeten más á los Agentes, que son autoridad, y mere­cen por ello respeto. **. Como se ve por el telegrama que se publica en este número, en la po­blación de Lenguazaque se inauguró la Oficina telegráfica. Felicitamos al Sr. Director del Telégrafo por este nuevo pro­greso, y á los habitantes de Lengua. zaque por el bien alcanzado. • ' .. TEATRO DE COLON-Jueves 26. Como anunciamos en nuestro número anterior, se verificó, á las 8 y 20 p. m., la función á beneficio del Maestro Véliz. Rompió los fu eg'os una de las Bandas nacionales, ejecutando un her.moso trozo bajo la dirección del beneficiado. La función habda salido muy bien, á no haberse presentado la cir­cunsülI1cia de sentirse enfermo Bal­doví, lo que originó cambios en los pa peles, y esto fue motivo para que hubiera en ella algunos defec­tos, sobre todo en el 4? acto. Corchísimos estaban los señores artistas, y no sentaban muy bien las risas de algunos de ellos para disi­mular el olvido de la letra. ,Entre el segundo y tercer acto ejecutaron los Sres. Murcia y Carri­llo una hermosísima sinfonía, que fue muy aplaudida. En general, la función fue buena. Felicitamos al Maestro V éliz. y ahora, en obsequio del simpá­tico artista Sr. Barbosa, cuyo bene­ficio se verificará mañana, reproduz­co los versos con que lo anunció: OIGA USTED Dicen que el último mono Es el que siempre se ha ahogado, y es el decir excusado, Que tal suerte no ambiciono . Por eso creo conveniente Que el domingo venidero, Aunque caiga el mundo entero, A! COLÓN' vaya la gente; Porque en ese día, una hermosa Función en su beneficio, Dará en el gran edificio Vuestro servidor BU.OSA Sí, Sr. Barbosa; que en esa fun­ción le vaya muy bien le desea E. BARCOS R. SECCIOH RELIGIOSA Nas MANUEL JOSE CA !ZEDO CoP l. 11f' .. .,¡. d., ~¡o8 y d. 1 .. 8 ... nt .. ~.de ~i'0 8tólie .. ARZOBISPO DE POPAYÁN AL v:r;NE~ABLE CLERO SECULAR Y REGULAR Y í. TODOS LOS FIELES DE NUESTRA ARQUIDIÓC:r;SIS COllll"m,ía 5!- La Igles)a libre en el Estado r ibre ; 6~ La lihertad de cultos; 7~ Lás lihertades ilimitarlas de pen­samiento" palahra, imprenta y ense­fianza; 8~ La in struc0ión laica y obliga­toria: ; 9~ El matrimonio civil. No es lícito, por lo tnnto, á ningún católico el profesar ninguna de estas doctrinas; abor!) hi en: el Partido Li­beral las profesa, luego no eR lícito á . un católico ser liberal. . Dejantlo á un lado innumerables pruehaR de qu~ el liberalismo colOlu­hiano i)rofesa estos errores, hasta ad u­cir comoi rrecusahle el Manifiesto­que la Udnvención elel Partioo Lihe­ral oir~gió ' á 1" Nación en Septiembre de 1897, en el·cual se Ipen, entre otras las frases, las siguip.ntes : " ___ . La Convención cree r¡ue la soluciólI científica del llamado proqle­ma religioso es la separadón de la f.r;lesia y del Estado ____ " , ..... Consagra (el liheralismo) la libertad de cultos en !iU más genefosa' amplitud." "Dominaoa (la Convención) por convi r,ciones profundas, lOantieof' ...• la libertad absoluta de la prensa .... " Esta~ pr()p (l ~ i c i()lIes fIue la Conven­ción del Partido Liheral cree y con- 8agru, y ¡;;ollre la¡;; fIue c~ (á el omimHia por conviccioll es profundas - flO se puede asegurar con 1ll¿IS fuerza-es­tán cond enadas como e.rrónflus por la Igl esia Salita; por lo tanto, en nues­tra patria los cató lico:; no puedfln ser liherales sin dejar de ser católicos ; porque para spr católico \ crd adero es indispensable aceptar humild emente todas las enseñallzas de la Igle!iia. La virtuo de, la fe se define aFí : creer lo fIue no vemo:ol, porque Dios lo ha revelado y la Iglesia nos lo en­seña, El Liberal ismo, al tio¡,tener los errores que profesa • .cqlltrurios. únos á la rcvelación divina, y ót.ros á las en­señanzas de la IgLesia infalible, eles­conoce y niega por compl eto la auto­rielad y la infinita Fabiduría ele Dios que revela y la autoridad de la Igle­sia que !lOS en~ eiia lo revelado por Dios j luego el qúe prufesa los erro­res del Liheralisl11o, peca contra la vir-tud ele la f~. . El error profesado puede ser, ó herético, porque se opone á un rlogma definido por la Iglesia, y el que lo pro. fesa d~ corazón y lo manifiesta exte­riormflnte, á sabiendas y con con tu­maéia, anemás del pecado, incurre en excomunión - por ejemplo, el que niega la infalibilidad oel Papa.- O bien el error que se profesa pueoe no ser herético, pero sí calificado por la Iglesia con nota inferior á la oe here~ jia, como falso, temerariQ, &c. EIl este caso, el que profesa UIlO de tales errores, peca también mediatamente contra la fe, porque niega el magi¡.;t.e­río oivino oe la Iglesia, que es infali­ble, y peca además grayemente contra la obediencia que elehe á la Iglesia. Con esta ooctrina Fe resuelve fácil­mente, en un caso daoo, si un liheral es h~reje Ó I1Ó, al profesar una doctri­na condenada por la Iglesia: será he­reje si el error prufesado es contrario á una verdao revelada por Dios y en­sefiaoa como fal por la Iglesia; si la doctrina profesada sólo ha sido con­denada por la Iglesia como falsa, errónea, temeraria, &c., no sf:rá he­reje el que la profese, pero sí pecará graveme1zte contra la oheoiencia de­bioa á la Iglesia, además de ser muy temerario y ne exponerse á caer en la herejía. A1H ra bien: si eR pecad,) profe!'ar el Lil eralisl1lo ó cualquiera de sus errore " ¡ será lícito pr:oft>:-arlo tan solo e teriormente, apareciendo ante la soc eoatl como liheral verdadero aun cuando interiormente no se·adlO.' 1- BRANDY, VINOS Y RON en barriles y botellas, y legítimo y único Ron MANZANARES. el~ALMACEN NUEVO • frente á La Concepci6n Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. tan tales er.rores! De ninguna mane­ra, porque esa simulación, lejos ele disminuir el pecado, en cierto mooo 10 agrava por la cobaroía y traici6n á la Iglesia, y por el escándalo que se da á los buenos fieles, los cuale~, guia­dos por ese sentido católico, oe que habla el Concilio Vaticano, y 'lue con­siste en una sobrenatural clisposiciólI, para discernir la verdao oel error, sienten repugnancia granne al nom­bre liberal, y les causa eRcánoalo ver que se llaman así los que se creen ca­tólicos. El que se manifiesta exteriormen-te como venia,clero liberal, peca COII ­tra la fe, como peca han contra ella y , eran tenidos por apóstatas los prime ­ros cristií.lnos que por· miedo á los tormentos, renegaban exteriormente de la fe, aunque interiormente sí creían en sus nogmas. Los que ocultan SUR creencia;; co ­meten pecado de oesobediencia con­tra la Iglesia, pues faltan á la '1ue se le debe, no sólo interior sino también exteriormente; y el que obra con tal cobardía por respetos humanos, está en peligro de perner la poca fe que aún tenga. Si el Liberalismo es malo, como lo es, se deduce que no es lícito filvore~ cerlo, apoyarlo, lIi prestarle ningún auxilio, porque suscribiénrlose á los perióclicos liherales, aplauoiendo á sus' caudillos, rlando dinero, recursos y prestándole servicios personales, se da vida {¡, ese Partido y aun 8e coo. pera al pecado. Cooperación en materia grave el! que incurre muy especialmente qnien da su voto á candidatos liherales, ó compromeLe á otros á ~arl.o, 6 forma parte de tSUS cümités Ó juntas electo­rale¡:;, porque contribuye así con su voto y con sus esfuerzos á llevar á puestos púhlicos persCHlas que han de trabajar ~n oar leyes contra la Iglesia. Los seguirto)'es de Lucifer, como llama León XIII á los liberales (1), están moralmente inhabilitados para rEgir á los pueblos que han sido da­dos en herencia á Jesucristo (2), pues . el jJ1'íncipe usurpador, cuya causa re­presentan (3), ya fue la1tzado filira (4) por el Soberano Dominador del Universo. (1) Enciel. Liberta!. (21 Joan., xn,3[, (3) Prueba de ello l~ gritos de muera Cristo, flue se .ian en los campamentos revolucionarios, sin que haya habido quien proteste entre IUS copilrtidarios. (4) Salmo Il. SECCIOR CIEHTIFICA Los estudios sobre la tuberculosis BerlÍ1'l, Octubre 26 - La última conferencia del Congreso Interna­cional sobre la tuberculosis, fue sen- . sacio~al, á causa de que el Profesor Koch mantuvo enérgicamente sus argumentos anteriores, según los cuales la tuberculosis bovina no pue­de ser transmisible al hombre. " El Profesor come~z6 por declarar que deseaba .hacer uso de la: palabra, puesto que así lo había. insi,nuado el Comité Central. . Sus aseveraciones versaron exclu­sivamente sobre la transmisión de la tuberculosis del ganado á la especie humana, por medio de heridas como : las que frecuentemente sufren los matanceros. El Profesor Koch admitió que se daban algunos casos tIe tuberculosis entre los carniceros y otras personas que estaban en contacto con la car­ne de los animales enfermos; pero aseguró que la proporción de pacien­tes de esta enfermedad era tan 'alta entre los obreros como en los que se dedicaban al comercio de ·Ia carne. Dijo que no podía comprender que una lesión que se produjer~ en un EL R E N A e 1 M 1 E N T o carnicero, atrajese la inf~cción de la tuberculosis. y que esta enfermedad causara la muerte. Berlín, Octubre 27-Los Delega­dos al Congreso Internacional ele la tuberculosi~. han sentido que los Estados U nidos no estén represen­tados de una manera más importan­te en esta reunión. Se ha deplorado, sobre todo, que nadie pueda dar cuenta de los expe­rimentos eft:ctuados el año pasado en los Estados Unidos, relativos á la transmisión de la tuberculosis al hombre por los animales. La última sesión elel Congreso se ha verificado hoy á las doce del día. El Dr. WiJliams, delegado inglés, ha pronunciado un discurso en el cual ha propuesto clasificar los en­fermos de los Sanatorios, según los adelantos de su curación. La próxima reunión se verificará el año entrante en París. ' La opinión devarics Delegados es que los principales resultados del Congreso de este año son el conoci­miento de los adelantos obtenidos en Alemania con 10:; Sanatorios y sus aplicaciones científicas. ••• El pretendido plagio de M. Rostand Las razones que han decidido al Juez Kohlsaa, de la Corte Federal de Chicilgo, á declarar que el Orano de Btrgerac era un plagio de llu Mercllanl Prina 01 Cortlv¡,/Ie, comedia escrila en 1896 por 11r Samuel Eberly Gross, autor dramático, fueron princip~lm«nte dos: la de que el Cyral1~ de M. R0stand tiene una nariz tan exagerada , como la del personaje principal del Mer­danl Pnitce, y la de que en ambas piezas hay una escena idéntica que se desarrolla en un balcón: la del amante infortunado que acepta hacer las veces de su rival, co~ el consentimiento y en presencia de éste, Estos cal'gos de plagio y otros más, están especificados en el informe del oficial del Tribunal de justicia (masll/'· of chaflCtlY) , an-te el cual se present6 la causa hace tres años; informe que, entre otras cosa ~ , dice: " Las similitudes é identidades entre am, has piezas, son una confirmación tan posi­tiva como las verdades de los Santos Evan­gelios, y ante las cuales· resulta poco dignq de consideración el hecho de que M. Ros­tand niegue tanto la semejanza como la apropiación." . (M. Rostand no ha sido, ni por sí ni p.,r apoderado, parte directa en este juicio). " La pieza titulada . C;yraflD de BergtrM - continúa el informe - se compone en gran parte, y es una piratería, de la pieza The ~Mwrchafll Prince of Conlv/llt, tanto por la trama como por la disposición general, por las situaciones, por los caracteres, por las ideas y por el lenguaje, y es una in­fracción al ,derecho de propiedad literaria del querellante." La sentencia del Juei Kohlsaa ha pro­vocado sorpresa y no poca hilaridad en los círculos literarios y teatrales de Francia Refutando los cargos de plagio que han sido precisados, M. Gustavo Roger, Secre. tario de la Sociedad de autores dramáti­cos, ha d\cho: " Cyrano es un personaje histórico que tení~ una nariz enorme. Desde tiempo in­memorial ha habido narices descomunales, como hay hoy también, y seria tan imposi-, ble personificar á Cyrano sin su nariz, co­mo á Luis XIV sin su célebre peluca. En cuanto á la eSCena del balcón, me parece pueril lo de que la hayan puesto en tela de juicio. Se conocen en el teatn;) moderno no menos de treinta situa;:iones semejantes." Lo cierto es' que, saho en el caso de que una nueva sentencia judicial ponga otra vez las cosas en lugar, en adelante Mr. Sa­muel EberIy Gross, de Chicago, será el úuico que tendrá derecho al producto de las representaCiones que se den del Ormlo di Bercerac, de M. Rostand, en .cualquier teatro de los Estados Unidos. ••• Salvavidas para los tranvías eléctricos La Rue Practique d'E/tclricil¿ da cuenta de los ensayos que acaban de realizarse, con decisivo éxit4?, en Praga (Austria), an­te los delegados· del Ministerio de Ferroca­rriles, aplicados á la línea de tracción eléc­trica Zizkovkoschiz, de un nuevo aparato destinado á evitar I()s accidentes de las per­sonas atropelladas por los tranvías en mar­cha. El aparato comprende dos partes: la primera, constitu;da por un bastidor para­choques, cuyos lados . los forma un tubo de gas, encorvado, de. per¡ueño diámetro y forrado en cuero; una red de mallas es trechas se une á este marco, que es móvil, pudiendo girar al rededor de un eje hori­zontal ; esta primera parte está en comuni­cación cort la segunda, que es el verdadero . salvavidas, por un alambre de pequeño gr"eso; el salvavidas no difiere en su as­pecto de los bastidores ordinariamente usa­dos hasta hoy; pero lleva un mecanismo especial, que ·permite imprimirle un movi­miento vertical de arriba abajo. Tan pronto como el bastidor delantero choca con un obstáculo, cede lentamente hacia atrás, y obrando sobre el alambre de comunicación, determina el desengan­che del bastidor de protección, que al caer recoge el obstáculo introducido en el apa­rato y le impide caer bajo las ruedas. Este bastidor va, ad~más, provisto en su parte inferior de un' juego de escobillas que, apretándose fuertemente contra el suelo, no deja el menor espacio libre entre la vla y el mecanismo. Este aparato es debido al Ingeniero Je­fe de la tracción eléctrica de Praga, en colaboración con varios técnicos de la ciu­dad Con este motivo, Mr. Buresch, también de Praga, a conseja . otro sistema, que con­sistIría en una combinación que permitiese interrumpir la corriente tan luego como el salvavidas chocase con cualquier obstácu­lo; el vehículo se enfrenaría así automáti-. camente, y. al propio tiempo un mecanismo especial empujaría fuera de la vía á la persona ú objeto que hubi ese determinado la detención del carruaje. • Sección Literaria CASTA y PURA A ELL.A .. .. .. 1 La majestuosa reina de la noche, con su innúmero séquito de siervos y esclavéls, clerrochaba, -derrochaba su luz triste y pálida que se filtraha al través de las enredaderas y sauces que orlahan la alameda oe arbustos floridos que conducían oel jaroín á la Quinta. Varios grupos (fe h e rmMln~ fbres humanas cuchi cheahan pas~ándose por el jaroín ila alameda. , En todos aquellos rostros estaba impresa la p;onri¡:;a de la rli cha; t')oas hablaban ne amores; tonas se confia­ban mutuamente sus placeres íntimos, presagiándose la rlicha más cómplefa para el baile de e¡:;a nocl1e. . Sólo tú, sentada ~n u n escaño, con los brazos cruzarlos y la miraoa al cielo, como implorando gracia, esta­ba~ retirada de tus amigas. U n clavel rojo, exhalanoo suavísi ­mo perfume, se balanceaba en tu boca, ,aprision~do por tus labios tle púr­pura .... . ¡ En dónoe estaba tu espíritu ~ ¡ Por qué regiones · vagaba fu pen­samiento' & El eco oe un amor, el murmullo de una voz amiga, de 'una palabra tier­na y amor:osa ó de un recueroo feliz, serían acaso lo que motivaban el ena· jenamiento de tu e¡:píritu, de aquel lugar, cofre de dicha¡:; é ilusiones 1 j Quién sabe ! ... i No lo sé! Lo único 'lile :,upe entonces fue que entre tus lah,,):,; \'agaba una son­risa t.ierna pero tri ste, la que sólo pa­recía comprenoer ei rojo clavel que aprisionabas entm tus labios de púr­pura .... 1I El confuso murmullo de los dan­zantes, el melodio~o compás del vals, el rítmico~cuchicheo rie las parejas de enamorados, y los suavísimos hálitos de perfume que dejaban tras sí 188 e. p~reja¡:; del baile en sus e-xcursiones continua~; habían cesaoo por un mo­mento. Los mismos grupos riel jardíll y de la alamcda e"taball reunidos en el cuartitu lila; una frente al espejo se arregla ba el pei nado; otra en el toca­dor agotaba los últimos tintes oe per­fume y de polvos; las otras, en medio de la pieza y junto á un confidente que so~tenía una lámpara ne bronce con pantalla roja, se contahan sus úl;¡ timas hazañas. Sólo tú, desgajarla sobre un .sofá esconclido en un ángulo oe la pieza, con los brazos caí,!os y ya 110 con la mirarla elevada al cielo, sino baja y exangüe, yacías en éxtasis profundo. De momento en momento e"hala­ba -tu pecho un suspiro que parec~a Ulla queja, y ele tu boca pa~ecían sahr palabras entrecortadas y tlel'na¡¡. ¡A qué ese horrible teoi01 . ¡Hacia quién volaban esas quejas! ,Quién eraelculpabledetu inmen-sa amargu ra , ,Esos suspiros profundos, esas que­jas inconexas, esas palabras elltrecor­tadas y tiernas, serían por ventura em­blema de un amor sincero y grande. grande como mi amargura' j Quién sabe ! ... j No lo sé! Tan solo sé que de tu hoca se es­fumaban palabras tiernas y ent.rf;cor­tadas, que parecían oe oicha, las que . desmentías con los suspiros que salían de tu pecho como quejas! III Los claros rayos de la IUlla se fil­traban por entre la vaporosa cortina crema de las vidrieras de tu alcoba. El mismo confidente cun la lámpa­ra de bronce oe pantalla roja alum­braba la estancia. Los mismoR grupos de amigas tu­yas, de la noche del baile, diseminadas e.n el cuarto y casi en oertedor á tu lecho de dolor, estaban pendientes de la expresión oe tu semblante, como queriendo adivinar el más allá! La tierna y melancólica mirada de tus ojos bellos, me recordaba la noche del baile ele la Quinta Ese clavel rojo que pendía enton­ces oe tus lahios, ya marchito, lo teJ nías sohre el pecho, entre tus manos· de azucena.- . , Aquellos tristes y prolollgaoos sus­pin? s de esa noche, que remedaban quejas, fnterrumpían el profundo si­lencio que reinaba en tu alcoba, tem­plo de pureza é ilusiones. Esas palabras entrecortaoas y tier­nas, tal ·vez las mismas que murmu­rabas en el cuarto lila, parecían refe­rir álgo ignoto, álgo de un más allá; tenían álgo comh el misterio de un arcano. i Qué quería decir la aglomeraci6n oe poemas que ostentaba tu rostro 1 ¡ Qué la mustia palidez de tu sem- • blante 1 ¡ Qué la sonrisa de placer infinito que dib.ujaban tus labios' ¡ Seda acaso este enajenamiento el que en la noche del baile te abstraía de los placeres mundanos para hacer­te gozar con el recuerdo de tu primer amor; en aquella primera declaraci6n que te hizo tu amante; en aquel cielo despejado y luminoso en cuyo dombo inmenso erraban millares de cintilan­tes astros; en ese horizonte poético que te piotaba entonces, y el cual tra­tabas de buscar ahora entre las claras brumas de un lejano infinito! j Quién sabe L .. j No lo sé! Apenas llego á comprender que es­píritu creado para 10 sublime y gran­oe, desprecia lo mezquino. adorando el amor como único blasón diyino y companero fiel d~l alma en la tierra. L. G. C. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. HISTORIA DE UN PALCO Despacho prz'vado del Minz'slro Al Sr. Director de la Academia Nacional de Música Sr. Director: El SI'. Ministro está un poco sorpren­dido de que no se haya señalado ningún paleo para el servicio del Ministerio, no obstante que deberla--convendréis en ello-­ser uno de los primeros en proveerse con tál objeto. Me encarga, pues, deciros que él os suplica [e destinéis, lo más prollto posible, un palco de primera para uno de 105 tres días de selecta concurrencia-lunes, miér­coles 6 viernes,-bien entendido que prefe­riría e[ lunes ó el viernes; pero, en úl­timo caso, él quedaría satisfecho si se [e designa el miércoles. Tened la bondad, Sr. Director, de acep­tar la seguridad de mi alta consideración. Por e[ Ministro y por su orden, el Jefe del Despacho, R. . Acad/mia Nacioual de Múszca-Di·,.ecri6n Sr. Ministro: Me habéis puesto en una grave dificul­tad. Ignoráis, sin duda, que todos los palcos están tomad os por abrmo, y que no puedo, por consiguiente, despojar á los titulares de su arrendamiento antes de la expiración. Si quisierais aceptar e[ sábado 6 bien el domingo para los conciertos, el aSllllto se­ría fácil. Mis antiguos balles os interesa­rían, pues son ejecutados por lo más selec­to tie mi cuerpo de baile, feliz de merecer los aplausos y el sufragio de un hombre de erudición y de gusto como el Sr. Ministro. Tengo el Ronor, Sr, Ministro, de ofre_ ceros. la seguridad d¡: mi respetuosa adhe_ sión. D!,fpa~lto dd Miuislro Sr. Director: P. G. El Sr Ministro me ha encarga.do de­ciros que os arn~gléis como podáis: esto le es completamente indiferente. Es una ordm admzitislraHva, ante la cual no hay sino incli­narse. Necesita un palco. El Jefe del Despacho, R. VOl! /ernOle-¡Holal ¡holal ¿Está usted allá, Sr. Georges B ... ? Voz suave é rim1l11anle-Siempre aqu ¡, Sr. Director. -Examinad en e[ registro cuál es el abono que se vence en menos tiempo. -Aguardad ...... El del señor Príncipe de H. - Mil rayos ... 1 Y se trata de una mujer encantadora, la perla del lune~l En fin, puesto que él lo neces ita . ,Venid á habla r­me. -¡Jesús, qué fastidiado estoy' -Sí, Sr. Director, acudo, Academia Nacional de Múszca-&a·daría. Al señor Príncipe de H. Señor: 20, calle Wáshington Por orden del Ministro, el Director de la Opera se ha v'i , to en la dura necesidad . de tener disponible un palco en el más breve término Hemos huscado en el registro de abonos. cuál era al que le faltaba menos tiempo para vencerse, y hemos visto que e[ arrendamiento de vuestro palco interco. lumnio expira el 16 de Febrero próximo. Tenemos, pues, señor, profundo senti. miento en anunciaros que vuestro abono por este palco no será renovado. El Sr. Director espera que comprendáis que cede á una fuerza mayor. Está disgustado por esta medida, no tanto por lo que disminuye los rendimientos, cuanto ptrque descontenta á uno de los más asiduos concurrentes á [a Opera, de padre á hijo, que lleva uno de esos grandes nombres de que pue.de enor­gullecerse muy en alto, una lista aris­tocrática. ~ceptad, señor, la seguridad de mi alta y respetuosa consideración. P.O.-El Secretario general, G. B. ! P. D. Es entendido 'que vuestro palco de platea al lado del Jockey, os queda Esto es un pequefío consuelo. Seilor Director de la OP.era. Mi querido Director: ¿Qué mala broma es ésta? • ¡Se' me quita el palco que mi padre OGU­paba hace '7 años, y se me deja mi puesto EL ' RENACIMIENTO de platea como consuelo! ¿Creéis que la Princesa va á contentarse con este peque­fío y negro agujero, donde uno tiene el aire de un decapitado parlante, donde no se distinguen los adornos y donde se oyen constantemente las carcajadas y las bufona- . das de Bertrand de W ... ? Soy buen muchacho, lo sabéis, pero si se me molesta, se verá con qué leña se calienta un antiguo Teniente de Coraceros, ex-oficial de órdenes de Galliffet. ¡Que no se olvide que soy Diputadol Haré-podéis decirlo -en las altas re­giones una algarabía de todos los diablos, y, como se decía en ellO. o del Ejército, habrá jarana. Cordialmente ~uéstro, PRíNCIPIt DE H. ( COl1jidendal) Sr. Ministro: Tengo el honor de enviaros la carta ad­junta, y serv{os excusarme que la deje pa­sar por su tono soldadesco; pero he pen­sado, antes de proceder, que quizá desea­ríais saber que el Príncipe de H.... titular del palco que deseáis, es miembro del Parlamento, punto de con~iderar sin duda por el espíritu del tiempo, en que una sola voz ruede desencadenar una crisis minis_ terial. Servíos, Sr. Ministro, contar con la se­guri6úd de mi alta c onsideración, con la cu,t! tengo el honor de ser vuestro muy réspetuoso y adicto servidor, P: G. Vo¿ únpaclÍmle-¡Hola! i hol a l ¿E~táis ahí, Sr Jefe del Despacho? -Siempre aquí, Sr. Ministro. -¡Bien! ¡La habéis hecho buena! ¡No podíais haberme dicho que el Príncipe de H. era Diputado! . Voz mohs/a-¿ Diputado por ql.é Dfrar - tamento, Sr. Ministro? --No sé. Consultad el anuario. Voz Itútnj'all/e-. . . Es un error.' No hay Diputado que lleve el nombre de Príncipe de H .. VIiZ alegl'e--¡No es Diputado! Se ha bur­lado de nosotros. ¡Ah bienl Vamos á reír­nos. Ahora, resueltamente, adelante, ade_ lante. Comprendéis, desde el momento que no es Diputado .... Voz resuella-Sí, Sr. Ministro, eso va á marchar, os lo prometo. Despacho del Mz'ms/ro Sr. Director; Me admirt> que hayáis cometido un erro tan completo afirman
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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El Renacimiento - N. 14

Por: | Fecha: 13/02/1903

EL RE A I NI Año I-Serie 1 DUt.ECTOIt PEDRO JOSE GOMEZ C. Dirección cable:ráfica: Rltl'IACnUEIL No hay sucripciont"s. Número suelto...... .... ......... ... .. ..... .. ..... 1 .. . Número .. trasado ........ :.......................... 1 S. Pua anuncios, .rre:105 partic1l1ares. Remitidos, collAmna .............................. l •... No se dene1ven ori:inalts. La correspondencia debe rot.tarse.1 Directer. Oficina: Pasaje Hernáadez, piso alto, aú.ero 5'1. i:ontratado al. aTiso por determinado nÚlIlero de Teces, se hará efecti.,o el .,aler de ellas .uqlle se _Ileae IiÚ liuspensi6n. DELITOS POLITICOS Contintía Il'I ¡ Cuáles son los delitos políticos! i El} qué consisten sus diferencias con 'los delitos comunes! Punto es éste de Derecho Penal universal, que aún no ha sido esclarecido con toda la precisión que su importancia le merece. , "No habrá pena de muerte por delitos políticolI : la ley los definiJ;á," dice la Constitución; pero nuestro Código Penal, aunque define y cas­tiga algunos de los delitos que en general toman la denominación de delitos polítz'cos, no contiene dispo­siciones terminantes. que puedan dar una idea clara en el particular. - El Código Penal francés tampoco ha definido los delitos políticos, si bien han establecido las leyes que lo reforman una escala penal especial para esta clase de infracciones, de la cual se ha_n valido los expositores para establecer la clasificación, te­niendo en cuenta a-demás el carácter político ó no político del hecho pu. nible. • ... h La infracción puramente políti­ca, dice Garraud *, es aquella que por su carácter predominante y por su fin' exclusivo y único, tiende á destruir, modificar ó turbar el orden público en uno ó varios de sus ele­mentos, sea en cuanto al orden ex­terior, como la que ataca la inde­pendencia, la soberanía ó la integri­dad del territorio de la N ación, ó sus relaciones con otras potencias; sea en cuanto al orden interior, en -cuanto afecte la forma de Gobierno, la orga'nización de los Poderes pú­blicos, sus respectivas atribuciones, ó los derechos políticos de' los ciuda­danos." De aqui el que sea suma­mente difícil, cuando no imposible, presentar una enumO!ración completa de las infracciones políticas, pues SRm tantas cuantas puedan ser las combinaciones sociales que regulen el organismo del Estado, y cuantos puedan ser 'Ios medios criminales que lleguen á emplearse para des­truir ó modificar esas mismas com­binaciones. El hecho de mantener relaciones con el enemigo, el de llevar armas contra la patria; las conspiraci~nes para derrocar un Gobierno, la afilia­ción á sociedades secretas, los abu­sos de la prensa, el fraude en elec­ciones, &c., son otros tantos delitos puramente políticos, como que afec­tan sólo el derecho ó el interés polí­tico, y caen bajo una jurisdicción es- • GU.UVD. Dr,il trim;,.,1. - ••. .. -- -- . ... .. --- - -.- . ;::.:.:::; ::=-=~::: :: : ::::::::.-.-:::::.-:.-::.-::::: : : : ::: ::: : :::: ::: : :: ::: ::::.: :----.-- ..... 0 _____ •• _- - .. . Oficina, Pasaje Hernández, piso alto, número 57 República de Colombia-Bogotá, viernes 13 de Febrero de 1903 pecial, mereciendo también especia­les penas. Empero, cuando estas infracciones del orden legal van acompañadas de otras circunstancias que afectan el interés privado; cuando atacan á un mismo tiempo el orden público y el derecho común; cuando tienden á fin meramente político, pero que para llegar á él se han empleado medios lesivos de la vida. de la pro­piedad ó de la honra de los ciuda­dano,>, entonces el delito toma un carácter mixto ó conexo, agravándo­se en proporción á la naturaleza de esos medios, y lo que fue su esencia primitiva ya no viene á convertirse sino en un'mero accidente. Cierto que los móviles de un deli­to político, tomado aisladam~nte, pueden ser tan nobles y desintere' sados como se quiera; cierto que la guerra puede ser justa y regular, ~xcusable y aun benéfic'a, en señala­dísimos casos; pero de ahí á tolerar las infraccÍones políticas con todo su cortejo de crímenes nefando:,: y san­grientos, hay mucha diferencia. La impunidao de los delitos políticos , trae consigo la impunidad de los de­litos comunes que á su sombra se han perpetrado; y una sociedad que nO,hace respetar sus derechos y no castiga á los delincuentes, sustituye la fuerza bruta á los fueros de la justicia, y no tarda en llegar á la barbarie. La escuelá que proclama el santo dencho de insurrecCf,'ón, párte del errÓneo principio de que el grado de culpabilidad de un delincuente sólo puede ¡nedirse en atención á las cau­sas que lo hayan impulsado á ejecu­tar el hecho material, sin tener para nada en cuenta las consecuencias de este acto ni las circun~tancias, á las veces funestIsimas, que hayan obra­do en su desarrollo. Y así, c n el sofisma de que en todo delito polí­tico, cualesquiera que sean su alcan­ce y su naturaleza, se defiende una causa justa y se busca un fin no­ble y desinteresado,.apenas habrá un hecho criminoso, aun de los' más atro· ces, que no merezca premio y lison­ja, en vez de merecer todo el peso de l.a vindicta pública. Ni aun en los delitos de derecho común dejaría de haber excusa para el delincuente cuando sólo se aten­diera al elemento moral Ó subjetivo del mismo delito, haciendo caso omi­so del elemento objetivo ó material y del elemento legal que constitu · yen su esencia. Si el fin justifica los medios; si para llegar á un resulta­do práctico pueden ponerse en jue~ go todas las maquinaciones que al­cance á concebir el entendimiento humano; si para cambiar la faz de la administración pública y el orden de cosas existente, es lícito atrope­llar vidas y haciendas, talar los cam­pos, incendiar los poblados, tender celadas, arrebatar los caudales pú­blicos y privados, - entonces debe empezarse por abolir el Código Penal y cuantas leyes amparen el derecho y la justicia, que de nada sirven, sino de irrisión, en una .sociedad que pro­clama Ó. consiente tan absur das teo­rías. A la verdad que no es posible de­cidir si las legislaciones modernas han dado un paso liacia la ci viliza-ción, ó, por el contrario, han des­andado muchos en ese camino, al atenuar el rigor de las penas impues­tas á los delitos políticos. En las épo: cas primitivas, el pueblo tomaba ven­ganza de los atentados contra la re- . ligión ó contra la tribu, deportando ó decapitando al delincuente. La le_ gislación romana castigaba con la muerte ó con la privación del agua y' el fuego á todo el que incurriera en el delito de lesa ¡flajestarl. Pero á medida que avanzan los tiempos y se modifican los sistemas penales, va notándose cierta clase de tolerancia por esta clase de delitos, que sin duda no es la causa menoc; eficiente de las turbulentas agitaciones con que el socialismo y la anarquía con­mueven hoy al mundo enterQ, Comoquiera que sea, y dígase lo que se dijere respecto á móviles ele­vados y nobles de las infracciones políticas, queda siempre en pie la cuestión de saber cuándo una guerra civil tiene el carácter de regular y justa, cuándo ha sonado la hora de la reparación. y cuándo esa repara­ción, que no puede lograrse por me­dios legítimos, excusa y justifica la rebelión á manq armada, como últi. mo recurso contra una intolerable tiranía. Quizá lo que en un principio se tuvo como nefando delito de "in. surrección. se convierta después en título glorioso, en pedestal de la apo­teosis ele sus caudillos, cuando la victoria los ha favorecido, y se' han realizado sus ideales, más ó menos nobles, según se les considere; y quizá también, lo que en sus comien-' zos fue brote de patriotismo y ab · negación, degenere en crimen exe~ crable. Pero téngase entendido que ningún expositor, ninguna autoridad verdadera en estas materia') ha ex­cusado la guerra civil, sino cuanclo agotados TODOS, absolutamente todos los medios pacíficos, no queda otro para salvar á una sociedad que se derrumba bajo ' el peso de un usur­pador ó de un tirano. y aun en este caso, es decir, cuan­do la guerra se legitima por razones justificativas, están proscritos aque­llos actos de infame atrocidad, re. probados por la ley natural. y que en ningún caso pueden considerarse como ejecutados jure úelli; porque no todos los deberes ni todos los • vínculos de humanidad se rompen entre las dos entidades beligerantes. Pero si desaparece hasta la som­bra de la nobleza y desinterés de esos móviles, si jamás Jos ha habi. do. 6 si sólo han sido privilegio de unos pocos de los conspiradores, y si muchos de ellos, impelidos quizá por legítimos ideales, abandonan luégo sus filas y huyen de sus cam­pamentos, convencidos de que han sUfrido un engaño, y aterrados con los siniestros desmanes de sus com­pañeros" entonces para éstos, para los contumaces y depravados, no .debe haber conmiseración, no pue­de haber otra cosa que todo el ~igor de la justicia y toda la gravedad de la condenación penal. Hay indudablemente falta de ló­gica al legislar con excesiva ampli­tud en tan delicada materia. Y en esa falta hemos incurrido nosotros, querie'ndo aplicar un principio gene~ ralísimo ,que, si bien adoptado por Número 14 las legislac'iones modernas. no ha producido en la nuéstra sino fatales consecuencias. Esas legislaciones, propias de países que van á la van· guardia de la civilizacÍón, doncle I~s Á conmociones intestinas se han extin­guido por completo; donde el orden y la tranquilidad interior se guardan como la base de todo progreso; don­de las guerras, si las hay, no toman Ips atroces Caracteres de las nués~ tras; esas legislacion es modernísi­mas han teniclo que pasar por una gestación laboriosa en relación con - las etapas por que ha ielo pasando la ~ humanidad en sus distintos periodos, hasta llegar al mayor grado de cub tura que Plleda apetecerse. Pero nos­otros, que empezamos á yivir; no!'j~ otros que estamos en él período de la corrección y qne necesitamos po­derosas vallas para no desbordar en el instinto ciego de nuestra inexpe­riencia y de nuestras desattntadas ambiciones, no podemos con s a~rar un principio tan general y absoluto que ponga en peligro hasta nuestra propia existencia. Queremos Il.egar.-,{ per saltu71t á ese grado de cultura que nos fascina, y lo que hacemos es apartarnos más y más de él con nues­tros idealismos y nuestras exóticas imitaciones. • Si la guerra es el mayor mal que puede sobrevenir á Un:l Nación, si es la suma de todos los males y de ; todas las calamidaaes" imaginables, preciso es no ahorrar medios para evitarla; preciso es reprimirla á todo trance una vez iniciada, y preciso es castigarla con una pena proporcional á la gravedad del delito, es decir, con la pena más severa, con la más - rigurosa, y si toca á los extremos de la barbarie, castigarla con el ültimo suplicio. Nótase asimismo falta de lógica en nuestra legislación al imponer la pena de muerte para el asesinato, el incendio, la' piratería y el asalto en cuaclrílla de malhechores, y prohi", birla absolutamente para el conjunto de todos estos delitos execrables, que aquí se denomina simplemente rebelión. O es que tales hechos"no qüedan comprendidos, como no de­ben quedarlo, el) 'Ia denominaci6n de . delitos polfticos, y entonces lo que hay es deficiencia en nuestra legisla­ción, falta de desarrollo de nuestra Carta fundamental. y consecuencial predominio de un principio absoluto que, aplicado como exclusivo y sin lógicas restricciones, ha producido funestas consecuencias. Pero si es que á todo trance quie­re sostenerse ese canon constitucio_ nal como modelo de liberalidad re­publicana, entonces debe hacerse una saludable distinci6n : ó el delito es puramente político, de modo que ni en su desarrollo ni en su ejecu­ción hayan entrado hechf)s crimino­sos de otra naturaleza, y entonces cae bajo el dominio de una jurisdic­ción · determinada y se le atribuye un carácter especial; ó al delito po­lítico se agregan circunstancias de naturaleza diferente, que constituyen delitos comunes, y entonces debe quedar comprendido entre éstos, tanto para el efecto del juzgamiento~ como para el efecto de la pena. Esta dece aplicarse en el más alto grado, correspondiente al mayor de los de- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. h litos cometidos, siguiendo el sistema de la acumulación juríd:ca. Importa además restringir el de · recho de gracia á sus límites preci­sos, y cuando este derecho se ejerce por el Poder Ejecutivo en forma de indulto, limitarlo únicamente á la ejecución de la pena, en todo ó en parte, y sólo en lo que se ',re~era ~ las. turbaciones del orden publtco. SI mirada la cuestión por el aspecto meramente político, puede haber convenienci;¡ en dar al olvido cier­tos hechos atentatorios del orden social. renunciando el derecho á cas­tigarlos, ya ¡;lara buscar la paz por medios incrueptos y breves, ya para alejar toda so¡¡pecha de una odiosa re~Jresalia, ho median las mismas circunstancias con relación á los he· chos atentatorios del interés priva­do, cuyo carácter perjudicial reviste distintas proporciones, y cuyas con­secuencias merecen una expiación y Ion fuente de d~rechos adquiridos por los lesionados, que el Poder pú­blico no puede borrar con una plu· mada. Ya se otorgue la gracia en forma de amnistía ó de indulto, las infrac­ciones comunes deben perseguirse y castigarse con todo el rigor de la ley, y la acción civil y la acusación particular deben dejarse á salvo, para que esos derechos, que son la. base del organismo .social, no que­den á merce9. de los revoltosos y de los malhechores disfrazados de tri. »unos. J. J. G. ______ •• ~·~14 ___ ---- Reminiscencias Políticas La idea conservadora, después de la restauración de 1831, y de la re­acción que era de temerse, se va . acentuando gradualmente y toman­do vida y fuerza, al par que la idea radical va declinando. Al calor vivifican te de aquel prin. cipio, los gobiernos se van haciendo más serios, fuertes y respetables; la idea conservadora, como una nueva sangre, va calando en el cuerpo so­cial y preparando. el país pa ra un adelanto regular y constante. Los obstáculos inmensos para];:¡ organi­zación de una nacionalidad que ha­bía nacido al choque de las espadas y que había visto correr S1l infancia en el desorden del campamento, se van venciendo; las heridas se cica. trizan. Colombia va cumpliendo su destino. . Veamos rápidamente los signos del 'adelantamiento del principio con­servador, revelados en la formación de gobiernos y constituciones, La Constitución de 1832, no obs-, tante ser dict~da' por un Congreso en que formaban mayoría los con­vencionistas de Ocaña, no se aleja sustancialmente de las de 21 Y 30 j pero la influencia radical se deja sentir en 'ella, debilitando la acción del Gobierno. La i'dea conservadora estaba re­presentada, durante la vida del Li­bertador, y mientras duró la Gran Colombia, por el Partido que se lla­mó Boliviano ó Colombiano, una de cuyas bases fundamentales fue la conservación de la integridad nacio­nal. )VIuerto el fundador de la Gran República y disuelta aquélla, ese Partido quedó subyugado. El Parti­do llamado entonces Liberal ocupa­ba el Gobierno. Aquél estaba repre­sentado por el General Santander como Presidente de la Nueva Gra­nada, y, en la oposición á su Gobier­n'o se mantenía la idea conserva­dora. El Congreso de 1835 declaró electo Vicepresidente al Dr. Már­quez. en competencia con el Dr. EL RENACIMIENTO Azuero y el General Obando, que formaban en el Partido opuesto, lo que manifiesta el adelanto de la idea conservadora; y como más cla rOl señal de su marcha progresiva, vino luégo la candidatura del Dr. Márquez para Presidente de la Re­pública. Esa candidatura fue combatida rabiosamente por el ,Gobierno libe­ral de Santander; se habló, se es· cribió, se peroró, se amenazó con la guerra para impedir la posesión del Dr. Márquez, caso de que resultara electo: la principal razón que se le oponía era la de que, siendo Vice pre!'!idente, no podía ser elegido Pre. sidente, y para aprobar el punto.1 hacer inconstitucionál la elección de antemano, se torturaron leyes y constituciones, se sofisticó, se alega. ron tinterilladas y bachillerías, se invocaron melodramáticamente el sentimiento republicano y el sagrado nombre de la libertad, como siempre que se quiere oprimir y aterrar; se predijeron desgracias y desastres pavorosos. El Dr. Márquez fue ele­gido Presidente, y i pesar de los si­niestros pronósticos del Liberalismo, que pretendió imponer á Obando, la Administración del Dr. Márquez, según confesó más tarde el mismo General Santander, fue "época de orden, de tranq'uilidad y de dicha ge~era1." El principio conservador sIgue siempre ganando terreno: en el Congreso de 1 8 38 se pospusieron, como Presidentes de las Cámaras, los Sres. General Santander y Dr. Vicente Azuero, á los Sres. Rafael Mosquera y Mariano Ospina, perte. necientes ambos al Partido de Már­quez ó Ministerial, como entonces se decía. El General Santander murió en 1840, Y murió como cristiano, auxi­liado por el Ilmo. Sr. Mosquera. La Jefatura de la oposición revoluciona­ria pasó, por muerte del General Santander, á manos del General Obando. Vencida la funesta Revolu­ción de 1840, que Obando encabezó y llevó' á cabo, y con ella las doctri­nas que su Jefe representaba. el principio conservador tomó prepon­derancia decisiva, y dio á la Nación largos días de paz y bienandanza. A su sombra se expidió la Constitución de 1843, expresión genuina d~ las ideas conservadoras. Las Adminis- . traciones de los Generales Herrán y Mosquera. fueron un respim, un punto de reposo. que se concedió á la Nación, tan trabajada y llena de agitaciones y quebrantos durante épocas anteriores. La del General Mosquera, sobre todo, inaugurada en 1845, es de las más pacíficas, progresistas ' y brillantes que regis­tran los anales de la Historia ~olom­biana. . Si Colombia hubiera' seauido bajo ese régimen, estaría ho;' por su adelanto moral y material, á la ca~ beza de las Repúblicas hispanoame. ricanas. El orden y la paz, que em. pezaban á arraigar, se habrían ase~ gurado cap vínculos poderosos; la guerra y las convulsiones intestinas, que han venido á ser nuestro estado normal, serían extrañas entre oos­otros, como pueden serlo los fenó­menos polares; al ampam de las instituciones, los torrentes de inteli­gencia y brío, que se han desviado y dermchado lastimosamente, ha­brían ido á fecundar las ciencias, las industrias, á arrancar á la naturaleza sus tesoros, en lugar de derramarse de extremo á extremo, por todos los ámbitos de la República, como una lava ardiente, infecunda, asoladora. El sacudimiento de 1848 se pro .. dujo en Francia inopinadamente. De un incidente sin importancia, de la . prohibición para cele'brar un ban­quete, de un cambio de Ministerio, resultó una revolución completa: el cambio de forma de Gobierno y de la Constitución del país. Los que habían preparado la revolución no pensaron ir tan lejos; ellos mismos quedaron sorprendidos del resulta­do. Y es que las agitaciones políti­cas son más misteriosas y temibles que las del mar, porque éste tiene á lo menQs linderos que no traspasa nunca, mientras que las tempestades de la opinión no los tienen. C",lin4a Exterior Casamientos de militares en Alemania En el mes de Julio pr6ximo pasado el Em­perador de Alemanih firmó un Decreto en que' fija las condiciones que han de reunir los mi­litares que deseen contraer matrimonio. Los Captianes, que dbfrutan como sueldo 5,625 pesetas, han de justificar poseer una renta anual de 1,875 peseta~. Los primeros y se­gundos Tenientes, 3,125. Todos los oficiales, asimismo, declararán bajo su firma qu~ ni ellos ni su prometida han contraldo deudas. Están también obligados á facilitar datos precisos y minucios<.s acerca de la fortuna, antecedentes, profesilÍn, edad, &c., de la no­via y del futuro padre polltico. Estas minuciosas precauciones, para ga­rantizar la sittlación moral y material de las familias militares, contrastan con las de­dsiones adoptadas últimamente en Francia, donde, como es sabido, el Ministro de Gue­rra suprimió el año pasado las condiciones de forma que, con anterioridad, se exigían para los casamientos de los oficiales subal­ternos (renta de 1.200 pesetas anuales). Varios diputadcs opinan que aún esto no es suficiente, y persisten en su pretensión de que el oficial se case como y cuando le pa­rezca, sin estar forzado á solicitar la autori­laci6n. En todos los Ejércitos de Europa esta autorización es obligatoria, y no se concede si la novia ó su familia no reúnen tod.as las condiciones deseables de honradez y de for­tuna. En Alemania, de hoy en adelante, ningún sarg-ento podrá casarse sin justificar que dis-pone de una renta de 375 pesetas. . Los soldados mismos han de disfrutar una de 187 50 pesetas, Y de 300 si eligen por esposa tí una extranjera. • '* • Interesantes descubrimientos arqueológicos En las excavaciones que desde hace ·al­g- ún tiempo se vienen efectlJando en la ne­crópolis de Cumas, se han descubierto dos sepulcros de la época prehelénica, los cua­les encerraban gran cantidad de objetos en alto grado interesantes, objetos de adorno, trabajos arque.ológicos El hallazgo principal consiste en una es­pecie' de urna funeraria de plata maciza, con bajorrelieves y cierres del mismo metal. La urna contenía numerosas flbulas y bas­tantes cosas de adorno, trabo jada s artísti­camente en plata y oro. Estos descubrimientos son una prueba de que Climas fue habitada por un pueblo ya civilizado mucho tiempo antes de que empe. zara el período helénico. • • • El comercio de Exportación en la Argentina Hace notar la prensa inglesa 'lue la expor_ taciéÍn de ganados, carnes frescas yen con­serva á los mercados de Europ , aumenta en la Argentina de un modo considerable. El vier~es último zarpó de Buenosaires el vapor inglés havú'sham Grange, que con. ducía oí. hordo 80,000 carneros muertos y 5,000 vivos, más 15,000 cuarto~ de vaca, 1,000 mulas y 300 caballos. Forman parte del cargamento 3,500 quin_ tales de manteca y SOG toneladas de forraje para el ganado vivo. El cargamento ha sido as\!guradó en 300,000 libras esterlinas. ~. . .. Divorcio - BUer/csQI'res, Seplt"fmbre 6-La Cámara de Diputados ha rechazado el proyecto corr­cerniente al divorcio,por 50 votos contra 4.8. .. En memoria de Shakespeare Copenhague (Dinamarca ) .- Se ha for­mado un Comité para que se encargue de los trabajos de la erección de la estatua de Guillermo Shakespeare, en el espacio abier­to que queda frente á 111 llamada terraza de Hamlet, en el castillo dI! Kromberg, en Elú­more, 'donde Shakespeare describía la esce­na del encuentro de Hamlet con el espíri_ tu de su padre asesinado. .• '. < Adquisición de una valiosa biblioteca Roma-Por la cantidad de [00,000 pesos el Vaticano ha comprado la famosa biblia. teca de Barberrni, que comprende libros y manuscl itas que se remontan á la época de Urbano V, Pontífice. El Papa León XlII quiere establecer una biblioteca á la cual tenga libre acceso el púo blico. • • • El testamento de la Reina de Bélgica Bnmlal.-Abierto el testament~ de la difunta Reina María Enrí;lueta, la soberana declara que quiere ser inhumada al lado de su hijo, y pide que sus exequia5 sean fJura­mente privadas. Deja 12 caballos á 'su secretario particu­lar, el Barón Coffinet ( á quien e l Rey aca_ ba de discernir la Cruz de Comendador de la orden de Leopoldo, en recompensa de su adhesión á la Réina), . Sus otros legados son de un caráG1er en­t~ ramente particular. ••• La crisis de la industriarelojera en Alemania B(rlín.-La industria relojera alemana, cuyo capital representa cuando n.enos la su­ma de 8 . 750,000 pesos, está en vísperas de la ruina á causa de la comJ.letencia que le hace la American D¡amond Malc co Las fábricas de relojes de Manheim están obligadas hoy, p~ra continuar trabajando, á vender á un precIo mucho más bajo que an_ tes. • Seg-ún toda probabilidad, e~ta situación terminaría por la incorporación de las fábri_ cas alemanas en la gran Compañía america-na precítada. ~ Ya cuatro Ó cinco grandes manufacture_ ros alemanes han hecho ofertas acerca de • esto á dicha Compañia. NOTICIAS FRES.CAS ¡Ex'lletes! Hé aquí una palabra que todos aborrecen en Colombia. Decir billetes es tanto como decir pobreza, y á la pobreza nadie, nadie puede hacerle buena cara, pues como dice la copla: La pobreza Dios la amó Porque no sab(a lo que era; Mas cuando la conoció, Pegó tan fuerte carrera Que hasta el cielo no paró, Copla que tiene mucho de falso, pero también mucho de verdadero, pues es evidenté que la tal señora Pobre­za es más terrible que cualquier suegra, que es cuanto decirse puede. Hoy, que nadie piensa en Colom­bia en otra cosa que en enriquecer, nadie recibe tantas maldiciones co- . Jlw esa pobre Pobreza, y yo, franca­mente, soy uno de los que con más frecuencia ~ se las echa, péles ha ct-:2do en cogerme un cariño tan grande", que ya _ no quiere separarse de mí, ........ como novia celosa; en dondequiera tropiezo con ella, y me echa unas sonrisas capaces de matarme de miedo, pues revelan el profundísimo cariño que me tiene. Pero estó es lo que se llama per­der el Norte: iba á hablar de los bi­lletes, ó sea papel moneda, y vine á dar con la ¡Jobreza, hecha que de­muestra que 10 dicho anteriormente es evidente hasta lo sumo. i y vuelta con la pobreza! No, señor, ahora no la volveré. á nom­brar por nada del mundo. Iba á contar á mis lectores que muy en breve se suspenderá la emi- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. sión de papel. moneda. pues el Go· bierno, deseoso de mejorar nuestra situación, y convencido de que el mejor modo de hacerlo es tomar esa medida, está dando. pasos que á tal fin encaminan, y, según aseguran muchos, el mes entrante, si Dios quiere, se suspenderá el trabajo 'en la Litografía. Esto quiere decir que el horizonte se despeja. En ef~cto, su~pendida la emisión, la baja del (:amblO sQbre el Exterior, que ya ha principiadó, se acentuara, notableme'"n te, y ya po d re-mos conseguir, sin gran sacrificio, las mercancías que necesitemos. Enton­ces, es natural que los artículos del país bajen tambiénconsideTable~en­te, pues teniendo más valor el bIlle-te. es inevitable el hecho. . - Esté\. medida, pues, entraña un gran alivio para todos, y con otras análogas, la situación en breve será más llevadera. Cúmpleine felicitar por ello á mis compatriotas y á las personas encar­- gadas de regir los destinos del país, que tantas muestras han dado de lo mucho que desean el bien de la Nación y de los esfuerzos que ha­cen por lograrlo. Algunos de los, art~culos de,1 ,País han alcanzado un precIO elevadlslmo, sobre todo algunos víveres, oí causa d~la escasez, pues la guerra, entre tQ~Os StlS males,. traj.o el de inte­rrumpir los trabajos agrícolas. Con la paz vendrá de n~evo !~ abundan­cia, y esta penosa .51tuaclOn 110 dura­rá ya mucho. Pero es bueno que se ~pa que. á pesar d~ las c~usas mencionadas, los precIOs en dIchos artículos son exagerados, y que se ' sostienen gracias á la ilimitada am­~ idón y á la poca conciencia de los que con ellos trafican. A esos tales .. debernos- todos. abrirles una recia campaña, y como en. o.tr.a ocasión lo dije, la Prensa lo ha 1OICIado ya. Es necesario ayudarla, á 11n de que se logre cuanto antes el d~eado fin. Grande usura se notaba también en 103 precios de carruajes el: la ci~­dad y fuera de eHa, -y para ImpedIr eso, el Supremo Gobierno dictó ya un Decreto que reglamentará las ta-riías. Con la reuni6n del Congreso aca­'" barán de remedia:rse tantos males, y mucho será si al fin de este año no ha vuelto Colombia á ser la de otros días: rica y progresista. . Quiera el Cielo que tenga cumph.· miento mi vaticinio. .....-- "* * * Según una nQta publicada en El Nutvo Tiempo, la Sociedad Cons­tructora" de Bogotá y Chapinero ha fijado la su~a- de $. ~,ooo para pre­miar el mejor'trabajo escultural que se presente en la Exposición de Be­llas Artes, que se abrirá el 2\J de Julio. . . y según la misma nota, dIcha So-ciedad está dispuesta á fomentar el cultivo del arte por cu¡mtos rr.edios es~ á' SU alcance. Yo ... amigo del arte, no pue?,o me­nos de aplaudir tal resoluclOn. El arte ~n Colombia es mirado con mu­cho. desprecio por la mayoría de las gentes, y sus cultivadore? no hacen papel ninguno en esta tle~r~. ~s.to constituye una suprema lOjUStlcla, pues él es algo como la muestra de la cultura intelectual de un país. Por fortuna, no faltan aquí quienes se interesen por él, y la Sociedad mencionada ha dado una prueba. ... ¡Bravo por ella! ** " * Me vi obligado en días pasados á 1h~er uso de un carro de tranvía, eosa-que evito siem pre, pues se pa­san malísimos ratos en esos bendi­tos vehículos. EL R E N A e 1 M 1 E N T o Entre los viajeros había un joven­cito muy bien puesto. pues vestía con todas las reglas de la moderna pnda: charol ita muy lustroso, guan­tes color cereza perchudí,simos, cue­llo recto irreprochable, corbata de seda ídem, sostenida por ganchos de oro con extremos de perlas; bastón con empuñadura del mismo metal; pantalón cl.u-o de moderno corte, sacolevita negro envidiablel &c. _ Iba acompañado de un amigo tan bien puesto como él, y sostenían una conversación capaz. de hacerle salir los colores á la cara á la persona más desvergonzada del mundo. En el mismo carro iban algunas damas, quienes, no pudiendo resis­tir tal conversación. se vieron obli­gadas á abandonarlo. Casos como el que cuento se ven todos los días en Bogotá, y los tales vehículos, dentro de poco no serán ocupa:dos sino por la última clase de la sociedad. Los conductores debían impedir tales abusos, haciendo bajar de los.. carros á las personas cuyo manejo no sea perfectamente. corre.cto. Y nada más por hoy, mis queri­dos lectores. E. BARCOS R. SECCIOH RELIGIOSA Matrimonios mixtos ÓSEA ENTR!: GEN'US D& DIVERSA RELIGIÓN ConNmía Cuand.o á porfía me alababan los astros de la mañana, y se alegraban todos los hijos de Dios. Si el ~om?re t;stuviese solo, per­manecenan mactlvas sus más nobles tendencias. No podría ejercer su be nevolencia, ni com.padecerse del des­graciado, ni admirar 'Ia virtud: no h~bría he:oís~o, .ni sacrificios por el bIen comun, nt Virtud alguna social. El hombre, si hubiese quedado solo no podría ejercitar su largueza ó ge: nerosidad, por las cuales tanto se aproxima y asemeja á su Creador. Pero si el hombre había de tener c~mpañeros . que perfecc-ionaran sus Virtudes, ¡ de· dónde habian de ve­nir' Ind~dablemente' que Dios ha­bría podIdo creár inmediatamente otros millones de hombres. si así lo hubiera querido; pero su sabiduría encontró otro medio más convenien- . te, en el cual reinara la unidad en medio de la variedad, y así resulta­ran un orden y una belleza univér­sal. T,a} es el divino concepto de la famt1la. El hombre debía partICIpar de' la gl.oria de Dios Padre, "de qUIen se derIva toda. paternidad" (EpI., m, 19), Y Adán no había de t~ner sólo esta facultad de producir, S1l10" que por la más misteriosa seme­janzacon la SANTÍSIMA TRINIDAD, vie­ne á ser pr~mero origen de otro sér semejante á sí ~ismo, y luégo, por el lazo de amor, viene á unirse con su imagen tan estrechamente, que son dos en uno, con la fertilidad cle in ­agotables retoños. "Envió, pues, Dios, un pl"Ofundo sueño á Adán, y cuando éste se ha­lló perfectatnente dormido, le arran. có una de sus costillas, llenando el hueco de carne. Con esta costilla que el Señor había tomado de Adán formó una mujer, y la presentó á Adán. Y Adán dijo: este es hueso de mis huesos y carne de mi carne: será llamada Eva, porque fue forma~ da del hombre. Por 10 tanto, el hom­bre abandonará á su padre y á su madre, y se unirá á su esposa; y se, rán dos en una sola carne." (Gen., n, 21-2 4). Así, la primera familia fue la imagen creada de la increada Tri­nidad. La familia, por tanto, consicler~c1a en su onigen, es una institución sa­grada, sOlnta; la santidad debe, por consiguiente, ser su ornamento in, dispensable. Todas las cosas son santas en proporción á la relación que tienen con Dios; así, un lugar es santo cuando está dedicado á Dios, una acción es santa si nos con· duce á Dios, &c. El matrimonio, pues"debe tender á Dios; debe llevar á EL unidos 1(')$ corazones durante su vida temporal sobre la tierra, y disponerlos á m~s perfecta unión con Dios en el cielo. Ahora bien: si uno de los consor­tes futuros está' desviado de Dios. i cómo puede al unirse acercar á Dios al otro? Luego considerando sólo el matrimonio natural, la false~ dad en religión destr~ye su mayor belleza, y lo prIva de toda santidad. .... COAtinúa Sección Li teraria LA LOCURA DEL DESENCANTO Adolfo había sido un buen muchachoacos­tumbrado al trabajo: su padre le había en. señado que" quien trabaja no come paja," y con esta buena lecci6n leg61e una herencia regular para establecerse y vivir honrosa. mente Muerto su padre, qued6 Adolfo solo en el mundo, joven, rico y con buena figura, y ca. só con una hermosa chica de buenas pren­das morales y reluciente marco Si la suerte no se hubiera opuesto, con estos dos capitales hubiera podido llegar á ser millonario; pero esta pícara señora murmur6 al oído de Adolfo la frase embria­gadora : "Con el juego alcanzarás en una noche lo que no será posible logr.ar con el sudor de di-ez años." Aquel infeliz no pudo resistir la tentaci6n: puso su capital, y en seguida el de su espo. sa, en manos de aquella dama, que hizo de las suyas. Deseués de perder al juego todo el dinero que ericerraban las arcas de su patrimonio, arrojó sobre el tapete verde, adornado de cuadros é iniciales de oro, sus firtcas. y las de María Luisa; luégo hipotec6 haciendas, casas &c. ; por último, lo fue ven­diendo todo, hasta qlledar reducido á vivir en una inmunda m.azmorra del arrah.~1 más pobre de la ciudad, adonde--.o ~iguió su es. posa sin proferir 'una queja . sin _dirigir la menor protesta. **. El esposó de María Luisa vacil6 mucho aquella noche, antes de decidirse á entrar á la casa de jue~o: el combate entablado etl tre la fiebre de jugador y razón que le sal. taba á los ojos, fue rudo pero corto: tenía una esposa enferma á causa de las privacjo • nes de la miseria, y tres chicuelitos que no hacia n nocne y día otra cosa que bostezar, pidiendo pan, y llorar de frío: había que jugar el todo por el todo. ¿ Qué se potlta H.¡{cer con un miserable duró? -O comemos bien esta noche-se dijo, ó haré cuenta que fue una ilusi6n de ópti­ca producida por la distancia del foco; me empeñaré e_n creer que al agacharme no hallé nada. '. I Vamos 1 I va'lor 1. ,. I e_ntre­mos, que aquí está la vida con su oro, 6 la miseria con sU frío y su hamore sempiter­n<) s .... ¡Probemos! Llegó' á la puerta, iluminada por un fóco de luz incandesceiite, la que el portero, un viejucho pequeñito y soñoliento, cuya cabe­zi1 parecía ulla madeja de hilo enmaraAada por las ratas, abrió sin necesidad de qu~ se tomara el trabajo de llamar. I Lo conocía demasiado! Hada ocho años que no faltaba dos noches seguidas allí. Atraves6 un patio; subi6 I!na escalera ~Iumbrada por otro bombillo eléctrico; cru­zó loégo urr pasillo; penetró en una- sala pro. fusament~ iluminaua, en la cual encontr6 á un Viejo dormido en un sofá, con un cabo de cigarro convulsiva mente apretado entre los dedos... soñaba con la ganancia, y en su enajenamiento, aquel chicote se había con. vertido en ·oro .... I Peor para él, el desper­tar sería más duro, la realidad mayor!._. Un joven pálido, con las manos sudorosas entre los bolsillos del pantalón, el sombrero ecpado atrás, el cabello desg:reñado y los oj. Pensó no jugar más; ya había para cenar aquella noche y comer bien durante ocho días, pero lo agarr61a fie­bre del desquite. A las ocho de la noche te. nía frente de él cuatrocientos cincuenta mil pesos. Después de perder cuatro paradas de á mil pesos cada una, se encolerizó. con la suerte: I quería que esa noche no le hiciera más que caricias 1 -¿ Cuánto admite usted como mayor apunte?, preguntó al auefio de casa. -Cincuenta mil pesos, señor, respondió el otro, un viejo rechoncho de grandes pati. lIas,y ojos sanguinolentos por el seteno y el alcohol. Adolfo recontó su dinero, y dijo con voz resuelta: . -¡¡Juege !l -1 Tiro /, contest6 el tallador lacónica. mente, y agitando los dados entre la mano' ¡{ medio cerrar, los ech6 por la boca del chi­rimbolo. Los dados rodaron, A Adolfo le pasó por el roslro un velo con todos los colores d~1 iris: las pupilas se le difataron, abrió des­mesuradamente la boca, tambale6 .... Los pres~ntes creyeron que iba á caer sin sentido, estaban pendientes de aquel arriesgado jugador á quien mimaba la suer. te aquella noche. Adolfo, haciendo un esfuerzo sobrehuma- no, se tuvo en pI. e, y esper6 . .. ;. ~ Los dados rodaron por entre el chirimbo. lo, cayeron sobre el tapete, y dando dos ca­briolas, el Ulio pintó un tres y el otro marcó un cuatro. • Adolfo, lleno de emoción, quiso retirar su apu~te, pero el tallador,sin darle tiempo, re. cogI6 los dados y los volvió á arrojar sin voltearJos entre la mano. Los cuadros de marfil rodaron sobre la carpeta, y dando un brinco nervioso, el uno se volte6, dejando ver un cinco y el otro os. tent6 un seis_ Había ganado nuestro afortunado juga_ dor, llegando á ~er dueño de novecientos mil pems; recogió sus fichas, llam6 al cajero, y se hizo cambiar por dineroel puñado de tar­jetas que tenía. Salió resuelto á no volver á jugar más; habla recuperado una parte de lo perdido de su capital, y no volvería á arriesgar un sulo peso. Al pasar á la otra sala para salir de allí, se encontr6 con un caballero alto, gordo, de cabellos de plata cortados al rape, bigote blanco, la tez bron­ceada, y que iba correctamente vestido de levita y sombrero de copa: lo detuvo por un brazo, diciéndole: . -¿ Quiere 4sted comprarme este anillo? -Era un hertnoso solitario, montado ele. gantemente en una -ancha argolla d_e oro. -1 Su anillo es muy hermoso, pero no compro joyas, señor 1 . -¿ Quiere usted jugarlo contra quince mil pesos? . -1 No, señor, no juego 1 -Juegue usted, hay que aprovechar las sonrisas ,de la suerte, y esta noche, por lo visto, no esti con usted muy seria, que diga. mos. Observó mirando el mont6n de bílletes de bafi'co que Iievaba Adolfo, y tocándole amigablemente el . hOmbro. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. -Voy á dar gusto á u,ted, lo juego con­tra doce mil pesos. -ji Pago l! Se acercaron i una mesa redonda que había vacía en una pieza á la derecha del pa~i110, empezaron á rodar los dados y á ro­dearse la mesa de jugadores, que iban qui. tándose prmdedol'es y joyas de todas el ' ses, valores y tamaños, las que seguramente iban á parar á manos de Adolfo, el héroe de aquella noche. • A las doce y media t.enla entre dinero y joyas Igo más de un millón de pesos; aque. 110 era un derroche de fortuna, una ocasi,;n deslumhradora. Se levantó, recogió su dinero y sus joyaQ , y pasó á la cantina, donde compr6 rancho y vino en abundancia, guardó todo entre los e-rasiento$ bolsillos de su raído sobretodo. y salió llevando una opípara cena·á su mujer y su~ tres hijos, que lo esperaban tiritando de frío y desvelados por el hambre .... La cena aquella noche fue. digna. de re­sucitar muertos: carnes)" vinos desapare­cieron de sobre la tosca mesa en un cerrar ~~m. . Con el estómago lleno y el corazón gozo­se se rindieron de sueño los tres (Jequ~ñitos; entonces comenzaron los consejos de Maria Luisa á su esposo. -Ya que Dios nos ha devuelto lo que ha­bías perdido al juego, y que con e$tQ tene_ mos para establecer un trabajo honrildo para subvenir á las necesidades de nue~tros hijos y las nuéstras, olvídate de esa pil~ión fatal, haz cuenta que nuestra pasada mi­seria fue un mal sueño, y que hoy despier ' tas á La vida real con más fe en el trahajo, mayor horror al juego .. i Prométeme que no volverás á jugar en. la vida! . -Sí, guárdame esta noche esto; que yo tP. prometo no volveré á jugar jamás. -Mira: mañana temprano vé á casa del Sr. Miranda, quien nos compró nuestra an~ tigua casa, y cómprasela de nuevo; ofréce­le, si es menester, el ooble de 10 que te oio por ella, pues es lo único que he sentido de nuestra antigua comodidad, y esto por ha- . bérmela regalado mi madre. -Sí, mañana al despertar iremos juntos á comprar la. casa, y además un buen mo. biliario y trajes para ti y para nuestros hijos. Volveremos á tener amigos, porque é~tos llegan al olor dé las fiestas, y daremos un gran baile en que haya cuatrocientas pa~ rejas; nos abonamos al teatro, paseamos en coche, y, en fin, viviremos como un par de Príncipes. María Luisa guardó debajo de la al. mohada todo el dinero y las joyas ganadas aquella noche por su marido; no lenla ar­mario ni cosa parecida: la mano de la des. gracia lo había arrollado todo en aquel hogar desyenturado, La fuerza de esta frugal comida en U'l estómago débil, produjo á María Luisa un sueño pesado aquella noche. Adolfo, después del primer sueño, empe. zó á cavilar: , -La suerte está conm'igo esta noche . .. soy un tonto en haberme venido con tan po~a ganancia, yo que he perdido siempre ... es una locura no aprovechar la ocasión, que es calva . .. Una ho~a más de juego. me dará el doble de la suma que poseo .... 1 Nada, no hay que desperdiciar! 1 Vamos l Con gran cuidado se levantó, sacó la!> joyas y el dinero de. bajo la almohada de María Luisa, que acaso soñaba con las de­licias de una vida de regalo, y dn hacer ruido, salió encaminándose á la primer casa de juego que halló al paso. Dos horas más tarde regresaba con tres reales y medio entre un bolsillo del panta­lón. Dinero y joyas habían pasado á manos de otro capricho de la suerte, que quizás al día siguiente habría de ceder á otro más afortunado, y aquél á otro; esta es fa ley del jugador: botar mañana lo que hoy re~ coge La suerte le había volteado la espalda á Adolfo, escupiéndole al rostro su antigua miseria l ... .... A la mañana sigui"nte, María Luisa des. pertó radiante de alegrfa ; I Adolfo, levántate, vamos á casa del Sr Miranda; Íl:ste, medio incorporándose sobre un ca. do, respondió á su mujer con indiferencia: _¿ Qué quieres que vamos á hacer en casa de ese buen señor? , Hombre, ¿ no me ofreciste anoche comprar la casa que me regaló mi madre 1 ¿ Y con qué quieres que te compr~ la casa? ... ¿ Te has vuelto loca? . .. ¿ Igno­ras que la gente arruinada no puede darse el lujo de comprar casas? E'L RENACIMIENTO -1 Tú eres el loco, que has olvidado el dinero que trajiste anoche, y las joyas tan bellas! -rSi toda esa fálula rw la has inventado tú, ¿ quiéres decirme en dónde está todo ese dinero y tudas esas joyas! -Mí .... No pudo continuar, había levantado la cauecera de su lecho. y al encontrarlo va. cío, se le ahogó la palabra en la garganta. Mas creyendo que era una broma de Adol-fo, continuó: ' -Haz guardado todo en otra parte por darme un susto; pero voy á probarte que no son mentiras mías }o del 'dinero y las alhajas, mostrándote 105 re'tos de la cena que también trajiste anoche. Corrió por toda la cas>\, revolvió los po. cos tra&tos de ella en todas direcciones, buscando un mendrugo de pan, una lata, un casco de botella, y no halló nada. . Adolfo, al regresar aqu~lIa madrugada, después de haber perdido hasta el último ocha va, ideó h'1cerle creer á Milría Luisa que todo ¡labIa sido t¡n su eño. y había hecho desaparecer todg rastro de cena. Al convencerse María Luisa de que ha. bía soñado aquella noche.una ventura inal­canzablt>; al I ersuadirse de c¡ue 'enía que s~guir viviendo en aquel tugurio húmedo, vl. 'ndo eternamente bostezar, lIorall.do de hombre, á ~us tres pellueñitos, ~il1lió hielo en las venas, un lancetazo en el cora7.!Ín y un peso in~ofJortable en d cerebro . Dio un grito desgarrador, se mezó los cabellos, re­gados por la ceniza de los dolores, y soltó una carcajada hí,térica. que despertó á los tres chicuedtos. que dormían en un rincón d~ la pieza. sobre un jere-ón medio des. hecho. , 1 Se había vuelto loca I • •* Adolfo,enfermo, demacrado, con los ojos pegados al cerebro, las mano.s y las pier. flas temblorosas. y cubierto de un harapo informe: hecho un demente n :corre las ca. lIes de la ciudad, mencligando la cad dad pública pa"a aplacar el hambre. Sus tres hijos han ingresado al hospicio en calidad de huérfanos, y su esposa, perdi. da la razón por el resto de su vida, se en­cuentra en el manicomio. Puede ser que los hijos de esos desdi­chados nunca sepan la historia desgraciada de sus paclres,.y que si algún día hay quien se la refiera, ella les sirvél de norma para no errar el camino que conduce á la tran. quilidad y á la ventura: 1 EL TRABAJO! No hay pan más blando y blanéo que el amasado con el sudor de nuestras frentes. C. G. P. Anuncios S E NECESITAN cuarenta mil pesos ($ 40,000> á interés, con buenas fir­mas. En la Dirección de eite periódico se da razón. 6-1 "QTIO V ADIS ? " Gran surtido de Vinos, Lico­res, Rancho, Galletas, Cigarros, Cigarrillos, Esperma, Petróleo, Cerveza BA V ARIA, BebIdas f~escas, Ca~nes frías, Bizcochos, Dulces, &c. Dos esplé,n didos BILLARES (uno reservado). Carrera 7:, Número 733. Gl\L4\PAGO PADSEE O Se vende uno, un poco usa­do y con todos sus a peros. En la oll.Clina de este periódico se da razón . (0-1 ~E VENDE MUY BAnAT~ Un lujoso uniforme de parada para Co­ronel, con todos sus arreos perfectamente nuevos y de primera calidad. Puede verse en la Cigarrería de El Tolima, calle 13, frente á Pacho jiménez. p DE CUATRO ANCHOS es el finísimo lino inglés para sábanas. Se encuentra en la primera· Calle Real, número 243· Dibujo, Escul~~ra, G!1; Urnamentaclun \I~) '/ Dorado (0' JOAQUIN PAEZ M. Camellón de LAS NI EVES Junto á "Quo Vadis? " Número 736 ----------------- 10-[ ----- ---~-------'---~-~-_....:..._---_-.:~-- ~BRAN: DY~ , -- A ~A BODEGA COLOMBIANA ACABA ·DE LLEGA1/, el fallloso ,Cognac Bordel'ies & C.a., único rival de Hennessy, imp'ortado. directaluente por José María Caro Grau, 'Calle Nueva de Flol'ián números 487 y 489. ' 1O,r9 , ' LA L 'UNETA • Calle 10, números 136 y 138 (Ar1iba de la Plazuela de San 19nacic) Es de estilo tomárse un 'trago en este acreditado Bstablecimiento ~ e Licores 10-8 les tauran te d el @~me rcio -Antiguo local LA MAR-Desayunos, almuerzos J comidas. Servicio á la ,carta. Cenai hasta las noce de la nDche: Alimentación mensual, precios módicos. Comedores reservados Orquesta todos los días, durante los almuer­zos y comidas, compu{lsta de notables Profesores. Cantina bien provist.a de Vinos. Licores, Cremas y Rancho. Empre¡;ario, PASCUAL ISAZA 10-6 , ..........- _.-.'--_--;------;--;---;--------------------_.".... lle31auraDle BeDinoere Servicio hasta la una de la mañana. COMEDORES RESERVADOS Carl;era 9.~, número 191. ENRIQUE BENINCORE. El que quier~ COMER BIEN '\-- y OIR UNA ORQUESTA SIN RIVAL en donde aprovechará esas y otras gangas, pues los pre­cios son MA S BA RA 1"OS que en cualquiera otra par- ' te. El tren de ernpleados es nUlneroso y cOUlpetente'rD-S . Imprenta de Vapor. Calte (0, mílllero [68-Administrador y Corrector, Belisario Cuervo An&el Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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El Renacimiento - N. 14

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La Política - N. 25

Por: | Fecha: 02/06/1881

1 f • Redactores: D. A. ARRIET A.--JU AN DE D. URIBE. SERIE III. Eogota:l j-ue-ves 2 de .ju..Irio de lSSl_ NU::M_ 25_ La antip-ua Colombia se orgauiz6 conforme a la Constitucion de Cúcnta, cspedida por el pt·imcr Congreso nacional en 1821. Diez ar.os después, las tres entidades que la fOJ'maroll se erijieron en unciones independientes, i el que fué Vireinl!lo tomó el nombre de Repúblicl! de/a Nueva O.·anada. El réjimen federal fué implantado definitivamente en 18o7, i sancionado por la Coustitncion del año siguiente, í la Rcp1íblica se lhnn6 entónces Oonfeieza de 5 francos. Sobre esta base, 1.s~· guictido el sistema decimal, se acuñan lns monedas de plata de talla menor, i las de oro, desde el peso o décimo e e condor, de peso .de un gl'amo 612 tn1.h­gmn\ os i valor de 10 décimos ele peso, hnstn la onza o doble conclor, de peso ele 32 gramos 258 milígrnmns i valor ele 20 pesos. E!l\iL adoptado, sin vnrta· t'ion, el sistemn métrico decimal frnncefl pnrn las pesas i mcdidns. ILCHES ' C~NO O~TO r~R~ rRt~IOtNTt 0( l~ RtrUBliCA * Nos retiramos desde elnúme- * * ro próximo por algunos dias de la re-daccion de "La 'olitica." :Más tarde daremos una esplicacion amplia, s1 acontecimientos que creemos prever se verifican. Avisaremos cm' u do nos compren­de de nuevo la ·esponsabilidad en la redaccion, o cuándo termh1a ésta definitivnmente. Ju.AN DE D. UmllE. EN EL / PERIODO sendo Prada, Tlrauli.o Anto1rio Ardila, Juan José Silva, Mm·iauo 1iuiloz, Lucia­no Arias, Remijio Silva, Mariano Gómez, J. Frm1ciseo Amaya, Ramon Leon Üitiz, Nepomuceno Gómez R., Rodolfo Rniz P., Juan de la C. Duarte, Jnlian Carva­jal, Rcmijio }fosquem Q., Rudecindo Olarte P., :Marcelino Ül'Ozco, Ezequiel Alnaya, Ignacio Blanco V., Lino Ramí­rcz C., Domingo Rueda, Rafael Antonio A.J·énas, Pablo A. Gómez, Faustino Nié­ves, José ltiaría Sal azar Q., Lorenzo Bau­tista, Salvador Cardoso, Gonzalo Gálvis, R>tÍacl Salazar. tonio Ramírez, Maximili:mo Gáll·is, Au­reliano Gonzálcz, Cerbelion Ayala, Luis David Castro, Francisco P. Belen, Daniel Ramírez, Pedro M. Mejía, Enrique Fer­nímclez, Rafael Vá1·gas 0., Rafael Ber­múdez, J. Antonio Colmenárez, Gregorio Prieto, Sántos Cáballero, Cárlos Delgado G., Francisco Silva, Desiderio Qnintero, Vicente Corso, José de la C1·uz Monroi, Cát·los González, Cárlos Mejía, Andres López, Ramon V aleucia, Lisandro J. Contréras, Antonio Silva, J\felecio Bri­ceño, Jacinto Ramírez, V alentin Díaz, José M. López, Pablo Méndez, Trinidad Mantilla, Juan Antonio Echeverría, Juan A. Soto, José del C. Clll!trcllon, Vicente 1.• ADLIESro~ DE LA CONCEPCJON. Dele'ado, Antonio Gamboa, Víctor Bue- L 'b' · ¡ no, 'Zacarías Liscano, Valentin Salcedo, os cplC suscrt unos, vecmos o Villami­zar, Juan de J esus Bautista, ~\colas Cá­<> eres, Manuel Vill:ttnizar, Rosalino Ran­jcl, Pompcyo R:mjel, Gorgonio Villami­zar, Juan Bautista Gómez P., Mercédes Oáceres, Clímaco Clll!tillo, Cruz Benites, A 1884. el deber de hacer a ustedes, dignos ,.o~c­ros de la opinion liberal en la capital de la República, la siguiente franca decla­ratoria.: ~EL J eneral Wilches 110 tiene ab­solutamente derecho alg¡.mo para ¡·etirar su nombre del debate electoral. Esto co­rresponde a la opínion q11e lo ha desig­nado como centro de la ltllion de los par­tidoS' liberales i como abanderado en el movimiento que ha de salvar las institu­ciones. La renuncia seria una ,!rla, ~f oráles. JJia!l A. J áimes, liberales del ESTADO DE SAN R. JU11rc"v"o.. -<..>,:, erra, J uan nv;r:;loC: etf l o, varws J.'t:l- 'uttcdarjl) tTeng;~1 ricolas Posada, Francisco Gómez Lisan­uro Prada, Damiñn Acero, r ano ITu­ran, Marcelino Bueno, Rnperto Gómcz, José de J esus Flórez, Tomas Bermúdez, José María Toro G., José Espíritu Santo Sierra, W enceslao Lámns, Ramon N•í."as, Venancio Ranjel, Eulojio lfarin, Cruz MediDa, Is:úns O jeda, iionorio J {ti mes, Poli carpo lfendoza, Leon Rnmírez, J oa­quin M'aldonado, Se"'undo Al varez, Luis Castelhí.nos, ManucY Gómcz, Jnan de Dios Lozano, Valois Solano, Rufino Du­ran, José de J esus Rniz, Manuel Bohór­quez, Daniel Meudoza, Leopoldo Mejía, Sebastian Arenáles, Emique Mnrtínez, Jesus Guarin, Mal'iano V alero, Domingo Al'ias, N e:pomuccno I3ohórquez, Dámaso Sierra, lliJiuio l-andíncz, Eujcnio Bohór­qu~ z, .Bartolomé J áimes, Felipe Pradn, Heliodoro Flórcz, Emeterio Sierra, I~­nacio Gómcz, Jesus Mm·ía Pefia, Serj10 Rodríguez, Oliverio Mejía, W encesTao 13arájas, FeHpe Dua1te, N epomuceno Mendoza, Secundino Mejía, José Presen­tacion Bohórqucz, Victoriano Vera, Ce­lestino J érez, Virjilio :Bueno C., Eufra­sio Calderon, J oaquin J áimcs, Diego Rójas, Príncipe Baron, Buenaventura Prada, Jil Flórcz, Eusebio Mendoza, Isidro Sierra, Celestino Jé1·ez, Emetei'Ío Sierra, David Figueroa, José Espíri­tu Santo SimTa, Rafael Santamaría, Li­borio (·hwrin, Enfrasio Cadena. . Nos permitimos, pues, siguificur a us­tedes i por ~ucto_¡]da~mll(lo DCJ"ió (lico que ustedes redactan, a todos los ciudadanos, que tales 111mores no tienen fundamento alguno, puesto que para nada entra la voluntad del c({Jldidato, ni puede cntmr, en la cscojencia que va a luteersc del futuro Presidente tle la Union. ciones fir'!']&~. de brnzo fuerte i ele: .-._":".;,~-.._- Yaclo carácter. ~- l. a DE SAN JOSÉ DE CÚCUT .A. La gloria en sus lejítim~s manifes~~­ciones : los reeuerdos de tl'mnfos herOI­cos que aun viven enl~ memorü1 lib~t·al : la viftud que predomma: los mé~ttoR, que enal1~ecen: todo lo hemos tehido en cuenta para lanzar resueltamente la can­didatura del benemé, 'to Jenet•al SOLO N V, 1LCHES para. Presidente de la rniou en el próxi­mo período. San José, marzo 1.0 • 1881. Salvador Luciani, J¡: • ·Bosch, Anto­nio Róbles Julio Afielo. 3egtmclo R. Paz, Luis David Casti'O, C'árlos D>hila H., José Trinidad Peralta, Emigdio Ruiz, Meliton Afiez, Domin;o E. González, Eduardo Sáenz Pedro ¿. Vega, Mam1el Carrefio V., T.:odoro L•'r.z, Juan de Jesus Sálas, Pedro Maria R, -er · lianncl V. Sánehez Pablo Antoni• M.alclonado, Do­mingo l'tamlrez, Luis M'guel Duarte, Roman Dávila, Trhoidad Rod1·íguez, Pedro Báez :Marcelo ZJrpa, Antonio Tórres And:.Cs A. Fernández, José Ro­sario Peralta, Simeon Parada, José An­tonio .Afiez B. Flaminio Fortoul, Rober­to Uribe At;nacio Puliilo, Ignacio Or­tega Ju~n de la Cn1z Moreno, Segundo F. González Eduru·do. Cammos, Lam­berto Camin'os Rafael bilva, Nicolas Acevedo Buen~ ventura Ag 1ilar, Miguel Arévalo 'Telésforo Castillo Pedro Coro­nado L~onardo DuéñM, Je. ns Delgado, Ped~ José Estrella, Vicen' Oarcía, Eloi Granádos Lázaro Gómez, an López, Enrique Materon N., Pedl'( J. Pico, Hi­lario Orduz Clemente Gonzále7 Y., Cár­los Pórrlll!, Avelino Pinto, Jeuaro Díaz,, Ne,Pomnceno Quiros, Juan Duarte, 1far­celmo Sarmiento V., J esus N á vas, s.~ntos Y alderrama Nicolas Pérez, A. 11. María Colmené.rez: Pedro Serpa, Fmnoisco Pé­rez, Francisco Rueda, Rafael C?lmená­rez, Valeriano :Mendoza, FloJ'etütno Gu­tiérrez Feliciano RodTíguez, Juan de J esUB Sállll! José AntOnio Colmenárez, Anselmo Franco, Roque Jacin~o ~uti~- · rt·ez, Juan Antonio Soto, Rafac ,ermu­dez, Miguel Colmenárez, N~ · }1m ceno Paz, Aurelio Colmenárez, . · de •la Rosa Castrellon, Miguel Clll!a Bo­ca: anda, Antonio Sih·a, Vicente .II. Al­varez. 2.• DE SAN JOS:É DE oúc~TA . Los infrucritos liberales, ír ·'mamen te convencidos de que la restanracion com­pleta del partido liberal es la pr~nera ne­cesidad del país, proclamamos 1 sostene­mos la candidatura del señor Jeneral SOLON WJLCHES para la Presidencia de la U nion en el pcc rloq.o constitucional de 1882 a 1884. San José, marzo 25 de 1881. Clodomiro Contrera.s, Juan Sála" N., Benedicto González, José M. Duran, Manuel :Mejía, Hipólito Granádos, An-na, Sotero Mantilla, Nicanor Carreño, Jesus Díaz, Alejandro Díaz, Hipólito Velandia, Pedro Sosa, Anselmo Jil, Pe­dro S. Jara, Trino Duran, Vidal Monta­ñez, luis Chona, Anacleto J.ópez, Oefe­rino M. Fábrigo, Luis Lara, lsmael Fo­rero, Eustaquio A riza, Julio Acosta, All­tonio Méndez, Félix Mal donado, Antonio Sanabria, Clemente Heruández, Manuel Leon, Eduardo Bu.stamante Contréras, Justiniano Gálvis, Celestino López, Evan­jelista Peralta, Manuel Sánchez P., Ju - tiniano García, Meliton García, José M. Garcia, Satmnino :Méndez, Ilipólito Bui­trago, J aeinto García, Emilio Sánchez, N epom11Ceno Díaz, Francisco Díaz, J a­cinto Ranjel, Miguel Barbosa, Buena­ventura Bermúdez, Jacinto N. Célis, Rafael E. Cárdenas, Pedro M. Quintero, Ismael Suárez L., JaCinto Me:jía, Fran­cisco Suárez, Gregorio Lara, Anselmo Pedraza A., Manuel A. Delgado, Flavio Rójas, J unquin Al varez 1L, Florentino García, José del Cármen T., José Anto­nio Díaz, :r epomuceno J á come, Satur­nino Mejía, Eduardo López }f., J. elipe P. Gá!vis, Laureano A breo, Diego Pine­da, Domingo Mancilla, Emilio Ranjel, Gregorio Oolmenárez, J esus S.ínchcz, P"edro Sandía, Juan de Jcsus Castillo, Tomas Dávila, Sebastian Sandía, Rafael Ramírez, Evanjclista Angarita, }Ianuel Valencia, :ricolas Mor:í.les, Jnan J.na, J aeobo Maldonado, Sebastian Gm·cía, Se­bastian Lara, Fmncisco A. LópeZ', Pedro Sandia, Sántos Becena, Francisco A. Pércz, Dí mas C+ál vis, Rosario Gala vis, :Manuel Forero, Salomon Rueda, Anjel 1L :!IIoráles. 1." AnlfllSWN DR SAN .JII.. En varios puntos de h Rcp(lblica ha sido lanzada a la consideracion pública la randidatnm del t>indadano J eneral SOLON WILCJTES ¡;ara Presidente ele la U nion en el perío­do constitucional que principia el 1.• de abril de 1882. J.os suscritos nos adherimos a la espre-· sada candid:J.tum, i por ella votaremos en las próximas elecciones, 1- >rque creemos que los conocidos servicios que el J eneral Wilches ha prestado al país en épocas distintas, i la manera patriótica i homadn como ha desempeñado varia i delicadas funciones públicru:, son nna garantía de t¡¡ne sabrá conesponder a las esperanzas G 1a N aeion en el alto ¡me to para el <"na 1 se le ha proclamado. San J"il, marzo de 1881. SOLO WILClJES, ofrccemQs nuestro voto por este ciudada­no pam Presidente de la U nion en la clcecion próxima. La Concepciou, 4 de marzo de 1881. Leocadio Calderon, J oaq tlin Oalderon, Juan B. Barájas, Abelardo CalderonJ Ma­teo Anque, José María 1furtínez, Dcme­trio~ Mnrtíuoz, Jacinto Ranjel, Femando Cáceres, Branlio E. C:íceres, J uau de la C. Calderon, Rafael Várgas, Agustín Mmtínez, Elijio Caldcron, Segundo Hcr­nández, Juan de Dios Santamaría, Dardi­le Calderou, M oiscs 1Iartínez, Fmncisco Réyes, José Mm·ia Gutiérrez, Matia& Caldcron, Alltonio Angarita, Apolinar Carvajal, Calisto Rincon. Domingo Fló­rez, MitrídatcR Raujel, Juan Audres . IIozos, Narciso Angal'ita, Maximino Qtti­ros, ltlatias Ortiz, Cé-sar Calderon R., Miguel Castelh~nos, José A be lardo Cas­tillo, Dionicio Castelláno , Cccilio Pinto, Bucnaventnra Rei. Ví ·tor Oácere~, J a­coLo Ramírez, Scjismnndo Ranjcl W., Andres Ramírcz, Scgnntlo Uem:~ndez Réyes, Roberto Ortiz, Epaminondas \Vil ches, J esus E. TI.incon, Luciano Ba~to, Pacífico Rincon, J esus M{>ndez, J11sti­niano Vill:uuizar, Fidel 1Inrillo, Se1·jio I3arája~, lianuel Cáceres, Enrique L. Pérez, José E píritn Santo Cárdenas, Cupcrtino Pinto, José María Pinto, Lo­retQ Martíuez, TI.aimundo Suárez, Do­mingo Suúrcz, Segnndo Mora, David Ortiz, Tiburcio Carvajal, Enrique J imé­nez, Alipio Basto1 Serjio Tarazona, Luis Jerez, Satumino Gonzálcz, Pedro Celes­tino Oviedo, A_guileo Gastel1ános, Fruc­tuoso Tórres, Pablo Fonscca, Antonio Návas, Cayctano Rincon, José María Fonseca, Julio Fernández T., P1·udencio llernández, Antonio Bar>1jru:, Ignacio Moreno, J esus Pedraza, José María Se­rrano, Inocencio Cáceres C. Ramou Ran­jcl W., BuennYentura Bohórqnez, li'ran­cisco Ardila, Piadoso Can·ajal, Juan de Dios Gúmez, lsaías Pedraza. 1.• ADli"-'STON DE 8A..'i' ANDRES. Los que suscribimos, Yecinos de este disttito, hemos cmwenido, de comnn acuerdo, en -proclamar i sostener la can­didatura del cmdadano J en eral SOLON WILCHES para la Presidencia de la República en el periodo constihlCional de 1882 a 1884-. Convencidos de que este distin<>uido ciudadano es mui compctente'para e~ des­empello de tal puesto; que defenderá los sagrados derechos del ¡meblo -por su acosh1mbrada relijiosidad i re peto a las leyes, i tam bien por sus precedentes ¡)olí­ticos, que le son demasiado honrosos como linjistrado de este Estado, ini­ciamos esta candidatura; persuadidos, ademas, de que la situacion de este abne­gado pueblo se despejará ele un modo m1li consolador. ADITR'ION DE SUUATÁ. Los que suscribimos, vecinos del dis­trito de Suratá, solemnemente nos com­prometemos a votar por el progrl'sista Jeneml SOLON WILCHES pttra Presidente de los Estados Unidos de Colombia en el próximo pm1odo cons­titucional. Suratá, 27 de febl·ero de 1881. J osó Encarnacion GaTcía, José del Ct~rmen García, Baldomero Tarazona, Evanjelista Mantilla, Felipe Acevedo, Vicente Suescun, Gorgonio Díaz, José López, Isidoro Serrano, José Anjel Mota, Eloi Anton,io 01tega, Cresencio Manti­lla, V alois Tarazo na, Rafael Acevcdo, Moises Tarazona. DECLARATORIA. Socorro, abril 3 de 1881. Señores Redactores de La. Políliw-Bogotli. • Algun periódico ministerial de esa ca­pital ba afirmado que la candidatura del señor J eneral Wilches para la Presiden­cia de la N acion, es obra esclusiva de la propia personal ambicion del candidato. En tal virtud, i lmbiéndose manifesta­do herido este respetable ciudadano por tan injuriosa como in:fundada a:finnacion, pm'Cce que alg¡.mos de los servidores de la candidatura oficial han hecho circula.r en esa cindad el rnmo1· de que el J en eral Wilchcs pensaba retirar su nombre del debate electoml por medio de una renun­cia de su candidatura. Gabriel S. Ruiz, Camilo Rincon G., Federico 1J{uñoz, IgJ1acio Rivcro, Anto­Jl. ÍO Banem F., C+rcgorio Mnñoz Otero, Domingo Silva, Pablo Ban~jas, Anselmo Mantill:l T., Laurcntino Cul'l'ea, Ruclc­ciudo Silva, José :María VárgM, Lino V e jarano, Antonio JI:Iar[a Solano E., Gre­gorio Rueda B., Antonio V{tSqne-z, Di mas .l\Iantilla, J nlio Zabala, Pantaleon Aré­ll! ts, Pantalcon Momoi, Uldarico Rójas R., Nicolas Gómez, Cupertino Camacho, Ciro S. Osorio, Crisanto Sarmiento, Ro- San And1·cs, marzo 6 de 1881. Clemente Bueno, Félix I3ermúdez, Justo J. Toro, Serjio Méndez, Isidoro Bcrmúon co­lombiana. Tal era el p ograma de L(( Ji'ede ram'on Como uno ele los Senadores de Bolívar (que aun est!L hoi en el Se nado) hubiese preguntado al ~eñor Núñez, en Cattajena, cuál polftlCn seria la suya como Presidente, pue~ ya estnba elej1do, (?) él sncó ele su bolsillo el nú~nero 1 ° ele La Peae­?' acion, i contestó mt pol\ttea sed la consignada en el programa do este periódico Meses despuo el se ñor NMiez vmo a Bogotá, cayó en la atmósfera de los aclul::tdores, 1 el pensamiento de union se conv1rhó en pensamiento ele ódios i ven­ganz'l . Por fin se instaló el Congreso de 1880, i nos tocó ocnpar una, cm ul e11 el Senado, oa 1 ep1 esen tacJOn de Cundinamarca Al tercero dia no mas, un Senador nuüiSta pregentó un proyecto de le1 cnyo olJjcto úm co era destitmr, como sucedió al fin, a los jueces de la Oficina jeneml de Cuentas No otros combntímo" ague lla iniquidad en nomlne do la unim1 liberal, puer; que el Tlibunal de Cuentas se compoma de 1 adicalos 1' independient s I en nuestro chscm so de entónces, publicado n el nú me1o 6 ° de La Fe,lel(trioll, ugre gárnos N o hai raz n para heJ•ÍJ• a h hemlc~ de todos los matices, no lw n1otivo pm a dcst1tuirlos, como no sea qnc cRtc p1 oye<·­to tenga la s1gmficacion de una 'engama personal. Este paso es incompatible con el carácte1 elevado i nngusto del Senado En cuanto al Senador González Linél os, autor del pwyecto, él debe vroceder así, pues que el programa de La Rfj'o,•uw tiende a hacer cada dia má• honda la d•­' ision entre los h hemJe~ Por último, en febrero de aste alío fundámos.·. La Polít~·ca, 1 todos nues· tras lectores saben que pedt' mos eles· ele el pnmer d1a la reconstih1e10H del partido inüepemliente, raso de 110 set tealiza"úle 1(( mn'on hberal, como saben tamb1en que en el cammo ele la union hemos llegado hru,ta herlws que prueban incontestablemente f¡llc pedimos con smcericlad la reconci­lincwn de los ba11clos liberales Nos era indispensable recordar h· ntceedu1 «,-pttnr"l)ftt ,u~ umonistas que hablamo~; on cansa propia. i que s1 esa aspiiacwn ha Sl· do el móvil único de. nueRtra con ducta política, así en ol pCJiodi!;mo como en los cuerpo eoleJ1ados, nuestras obsCl ''acwnes almodl/s opP 1·ani!?' ele los hombre del 24 de ahnl i a los resultados probablef\ 1 crHn Re· guros de ln nuion tal como He ha hecho, no son smo obserYacionf>s 111~ piradas por el mteres comun P01 otm pm te cF la uniou 110 ha s!Clo hecha snhre las bases de la doctrina S1 loH umom · tas se propusieron "_ncar lR políti ca ele la tutela de combmacioues desconocida dt>l pueblo," corrf>s­ponclía a él, 1 no a ellos, dos1gnar el candidato de los pmtJdos ltbcrale, unidos para la p, es1clenri.l de la Re pública En vez le unCitu· la nu vil é'l:'fl e latina, caudal que ennqucce dlati.uncn­te con el estudio 1 ~l e¡erl'iuio La e1mli cion en literatura, como en cnalqmCJ ra­mo de los conocimiento humanos. se ab1c paso, lllspita nlto ap1ccw 1 akanz,¡ pnesto de hono>. I 'lnn cuando cJI,t sea mui diYmsa del t.Llento, 1 m>b del ¡emo poético, suple en mucho a la 111~pn ac1on con la llqueza de sus tesoros, i alcanza comumnentc el homenaje 1 nomlnadítt que solo conesponden .l la.' e"l.ule1 a po­esía Caro es tipo de constancm en el estu­dio, 1 especialmente do pacicnc1a en el trabajoÍ pues ha tJaducido íntegtameJJte a Vlrji io en clásko 1 crso r.1stcllano Esl traduccion 1 evela m1:.1 la~ga i peno­sa labo1 lle' ad.t a remate )Ilcrccd de una constancia ine.msablc, pues ap:n te de las dimensiOnes umtcrialcs de J.¡ olna, ('.u o, versificador dmo en Jo JCnCJ al poco cs-­pont: íneo. debió hacer í 1ehnre• much.1s veces cada uno de los miles de' et .os 1 nil· llanos, tecolt:l'l, limm i pnl11, 1ela1 > t>a ba¡m mucho, pa1 a qi>C sn tJ adnc-eion oh­tuvJCse, como ha suced1do, los suf1 U]ios de personas cntcnd1das en la matet w El estudio, el trabajo, la consagiac1on pa­ciente, son cnalidndes altamente e-tin>a­blcs en los hombres de leh as, i 1 s eonqm,. tan en el ánimo púbhco nume1 o-as sim­patlas, que VlCliCll a ser otros t.ml hic1ern, nnd.1 ~mp1eron les nvisó que ya c1 nn het·hn.~, 1 qne hrtbla que aceptad ~ El J ent>J ,ti Santo Domingo Vil,t, e u ya im JO! tancia, en las filas lihe­rn I'S no se SUJ etm1t a c1i -cuslUn ; el J enc1 al Solon 'Ylches, que represen­ta 1m rC>spetable i numerosísnno gJu­po .de cmdrtdanos en In polít!Cn mt cwnnl, o, si se qmere, solamente la opmion ele uu -Estado, pmo que le­presenta clPmentos de c¡uo no ~e pue­de m se debe prescmdn st se asp1r,t a p1 oceclct con acim to, el J cne1 al Eh­sC> o Paynn, c,mdl(lato de una gmn ma­sa tlc l'olomlHanos pata la Pres1tlouota nacwnal, 1 cm nctenzado asf por ht alta pos1cton oficial que hot ocupa como por su:pos1cion poHtica, 1 tan· tos hbmalo. rlistmgn•dos CQ!UO pu· di!:~rnmos citar n este f>fecto, G no deblCron se¡ temclos en e u en ta? El m1smo seüm Núñez, que ha despednzado, arrastlado 1 humillado h1 bandota del pm tldo mdependten· te, poro que al fin i al cabo ln lleva, debió sf'r IIIvltado a esta reconciha­cwn ent1e los hberales I entónces Rf> 1-tn bría conseguido n na cosa con­vementl' 1 s~ hnlnía evllado otta, incom e mente ~e hnh1 fa consogm una Ye7. mas nl pals i de un 111orl<> 'a mcontestable que Remw que COit la idea M de~tl e/(( De "ende1 a Jcs w~. a la, un1)().~lu1a !Ja,ntl, t Mn, /JF(IJ'O oscm•o la figura Del Ilmnlne- Dwfl. Mltl'tlego nuxlel(l, o cn.\lldo aiirma que, despnes de la con fnsion de las lenguas, los hnmbJC• Bu~raudo un ceo tlzcwo f llffflttudO IIJW rd1fl an pm el 1 ~] >111"11 eoloni,tl, pot l.t autoridad de lo HeYcs, pm los bl.!soncs arlHtOCl.\tJcn', ]lOI el COnSOl'ClO del pode1 e• 1 ti < onl.J 110tcstad abso1 hent<' de la tgle­sJa, i p01 todos los elementos del anti­& no Í>1 den Rori.tl, 1 e;,nmidos <'11 la <>onori­(! a f•ll'llllll.t t!ltru i tmno A ese ,((mpo 1 ertcn<'r<' ('aJo As l. e uan­tlo (·1 .Jim>utna •le l?l r;rou ¡Ji'rrulo de l!lftt f'dad uhnrm Q11e dt t ubo d 11/lm i en.lllllo rant.t JY() lull r;;ncwdod ~<111 110tl0, flC!IWllo~ hom lwc,, 1 c"toR t1 L1 JCncnlCJO· ncs 1 iP¡as qnc alcanzaron a h<'sm· aquí la e1i)!e del l1E'J nne,(! o ~PiiOJ, apl.mclen nl vuntu la i nspiracion del poeta cortesano 1 tl.lll .1l,1s a su fama l eomo son, eu su • el peisonalismo nuñista no quiere mnon, i el pa.is habría hecho su de­ber, i se habria evitado lo que ha sucedido , es decir que el señor Núñez se ha entrado al caudal de la union liberal para volverla tablas Esplicaremos un poco mas J\ues­tro modo de ver las cosas n este res pecto. Supongamos que so hubiese mvi­tado al señor Núñez a la union. Él l1nbría aceptado, o nó En el primer caso habria contraído" un compromiso con el respetable núcleo imciador de la umon, 1 :tunque su polftica se ha caractelizado cabalmente por la falta de cumplimiento en los compromisos de honor político, esta­¡ ia doblemente obligado a ser since­ce1 ·o i len] en esta vez, o la union libe1al, engañada po1 él, poclia pe­clirle cuenta terrible, i contmía para ello con el apoyo de todos:los libe1a leg Ahora supongamos que él no hu· biCse aceptndo Qué habrín suced1 do? Pnes no h:ü siquiera que pre· gnntarlo Con este solo hecho, i previo acatamiento a la considera­cion política que ciertos hombres importantes, como los que arriba hemos mencionado, merecen, la ola unionista habría tomado tal fuerza, que el personalismo uuñista habría s1do dernbado al punto como nn muñeco, o hundo como una mmnn dteia Pero qué sucede hot? Pues una cosa mni singular Que el señor Nú­ñez ha el icho que la un ion no e sino la p10clamacwn de sn polftica, o no acepta otra cosn, i que los SenadoTes del señor Núñez dicen que si quio 1en union, pero sobre la, base de los principios contemdos en el discurso del ocho de abul. De aquí ¡·esulta incontestablemen­te que ln union se ha l1echo cont1 a el señor Núñez, i esto ya da lugar al exámen de una cuestion séria, tan séna, que ella está relacionada inti­ma, esenCJalmcnte, con la e:l'.'1stencia misma de la union liberal 1 con los resultados que esté de tinncla a al­canzm Es esta ¿puede la union liberal triunfw sob1 e el señor Nitñez hoi o mañana, vistas las cosas: como los:~·ni· ciadores del24 de a brillas han hecho '1 Veamos Siendo la un ion contra el señor Núñez, todos los elementos nuütStas estarán con él , i osos ele­mentos son los pm·ques nacionales, el presupuesto, el ejército, a:Jentes en toda partes, la mayoría del Con­greso, los gobiernos de los Estados de la Costa, el gobierno de Boyacá, el alclamsmo en Cunclmamarca, es decu, todos los elementos de un P1esident de la República, con mn los lementos oficiales de cinco Estn­dos por lo ménos .M:ás . como la union liberal, por el modus opm and~·, est:í. snJeia a sérias objecwnes, todo lo que no sea cou· currenci:t mmónica de opiniones i Yoluuiades cuando se trata de union, es ansenci:t de fuerza, i ausencia, de fue¡ za, en po lít tea como en todo, es debilidad ~f¡(s como la union hberal, s1 no tuvo en mim hacer a un lado a ciel­tos hombres i a ciertas candidaturas, nada ha hecho hasta ahora parn bo· rrar la m1presion que esta creencia pudo producir, tenemos por nhow un gran cúmulo de hombres i de ele­mentos políticos de toda clase con los cuales, por la razon apuntad te maii.ma para An­tíoquia, i como es lncn f.í••il que el señor José ~[ S.unpcr '"egue lo que yo puhli qué en Ln Política, i que usted me con ­tó, le 1 uego que me cm1teHte en ctmd,, S1 eso que allí eliJO tné SUHl,UlCJahnente lo que usted me e~plC>iÓ vm 1.1~ veces, pa•·• que de mi pm te hicie1 a de ello lo que .1 h1e11 tUYieru Oplá me relatara todo lo conccmtentc al as1\nto, pne" al mismo hcmpo que se le hace un seíi.Jlado selvletO al país, S, Jrtx m: D linrnE. A ·esta carta que ap1 esu1 adamen te cli1 i]imos al sefio1 O campo, se nos contestó la, ~1g\llente tau atenta co­mo espllc!ia Bogolá, 16 de >nn)o powp1c nstccl 1 yo cor1e1iamos pchgw, s1n eso de un,, <'Ollfuswn que pu-diera ser cquh oca Es' mtl.td que sn~tan­rialmente dl]C ,, usted lo qnc publicó e 1 La FoldiCa e mo chcho pm el seíi r Samper, Fal1 ecbd hecha de lo Jefe1ente ~1 Jeneral PaJ an, pues e"·' afirmacwu 'erua de o tu fuente 1 la cnl pabilidad del JCn<'­ral P.q anln dednci.t de los .wontecnmen­tos qu' CJ~ .\.llt~ttqm.¡ >C ,-edficm on el 31 ceria, 1 scflal:u:m .t la 1ep10bacion social personal i eolcrt11 o en J¡¡s csfe1as de la la audacia. del p• ofano que intenta pene- litmatnra tra1 en el templo I en .er,,po de Rns mte•·eses hteranos, Cómo l ! esclamarán , nosot10s somos JClijw~os i político•, se h,t creado aquí At eópago i P:trnaso a un t>empo mlsmo. nna t'o]l<'CJ<' de Olimpo, 1 desde allí fnl­Somos el tJtbHnal sup10mo enea1gado de mma sus 1ayos 1 auatemns cont..a la e,;­dilijil i JllZgal al pensado1 que medita i cuela liberal 1 dc1a rnc1· lns cmonas pa1a al poeta que canta •u comparen. liemos escalado la cima. somos los Ellos Jnzgan tlc sí 'f11e so u los d•spCll· augustos moradmcs de la g1an cumbre. S,ldOlC• dclm(•J ito i e triunfo en las Ll­El espÍt itn l1 bm ,tl, in vaso• t1 emendo, no lxn es de las lct1 as; 1 tic ~u fallo, que es, h.l osado llcgm aquí Si lo intentase, como de JUeces mf,Jllble•, mapelablc. desde est,t maccesible altnm, de consnno Pwnúnciaulo con gJa\ edad solemne des-­la t1 adJCIOn 1 la h1storia, la autm idad, la de sus altmas olí.mptca•, 1 1 a1 l del menCia 1 el :u-te, le amenaza1 an núedo que se .th c1·a a eontt o' 01 tnlo ese tfll Nosoüos guardamos en nuestras CJecn- será alnu111ado por el enoJO de los pÍiml es fA1CO) RICARDO BECERRA Cuallo dJUR desp 1cs presentó la Com1s1on su m forme el 116 Jugar a un debate mteresante por muchas rawnes en q te toa aton pat te los e uda danos Senn lores Castilla Remalcs Zamorano Ameta 1 Pme ra Gamba. Los dos pruueros 1 el Senador Gutlerrez Alvarez (de SnntandCJ) f teron los nnembros deJa ComlSion de elecctones Por hm 1 p~ra no hncer más larga esta reine on daremos las JlOtns del Jeneral Santo Dommgo el m forme d 1 Senador Alvarez •las tesoluc1ones del Senado relativas al asunto lasicuales constí tuyen la prueba mcoutestable de las ntlrmacwnes coute1 das en el anterwr d1scurso del Senador Arrtcta documentos publicados ya en el J>ia w del &n 1do En nuesllo n mero pr6x1mo publicaremos el 1 úor ue de 1 \ Comtston de eleecwnes los discur sos de los Se1 adores Castilla Zamorano ArrJC ta 1 Pcre1ra Onmbn la deciSlon del Senado 1 los demns me dcJlles del debate Publicaremos tam bte s nos fuere pos blc obtenerlo (1 haremos para ello todo h.na¡e de esfuerzos) el debate ínte gro sob1e el mprestlto que es de lo más 1mpor tan te qne ha lomdo lugar en las presentes seswnes 1 que el pnís debe conocer p 1es se trata nnda menos que de la desapanc on 1 espl e ble ele d'"'$555000 Van los doc 1mentos md cndos 99 ALVAREZ puesto EL PECADO mutua cm tesia 6 qmén dudana Loqueagudidáb~a.rmlios~~cl~e~l~os~~c~lfél;~h~I~cfJ~ér~:tn~~Io~s~~v1~d~a~cl~e~s:ai~l~to~s~?~~~~~~~~~;;~~~~~~;;~~~~~ro~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~!*"~~~~·~~~~~~~&~~~ ngos dell!:sta O ne aUCll. ya ntlS as CM tasque de algunas po la ~~~,;.,;; VIno LaPohtwahasidoescomulg::tda Clones del Canea hemos Jec1b1do so en vanos cmatos 1 sob1 e sus lecto1 es b1 e el asunto son b1en esplícltas se ha lanzado el más Iotundo tnrtte 1 entie ellas lo son dem,as1aclo las ma Todos los hLemles tienen que de Cah Allí un cma Bouero echó convemr pOI ahota en que navegflr pestes con ti a el penódico 1 contm m os con fm tuna. 1 algo p1 e1ma -ver los 1 edrtetOJ es Todo cabe en los da.deramente un, esfuerzo JUSto es sm labiOs de los numstros del altar 1 dudrt la ~lert del enem1go el actel Todas las mfanua..c; se han hecho to hberal se 1mde po1 lll. Iabm cato pma los &'l.Ce!dotes 1 los sacerdotes hca para todas las mfam1as d1ce Dupny El Canea tiene una gran sombJ a I esto que es verdrtd nos pone rt cu en su mmenso J magnifico cuailio blerto ele los golpes de la lgles1a El fanatiSmo es alh donde más ha La Poht~ca saluda a los leve penetrado clonde más fe1oz se p1e lendos senta 1 donde pm desgrac1a1 se acata Jeneralmente El sentnmento de lrt conserva.cwn p10p1a tiene echp ses larguisrmos en el partido hbeial caucano Depende de esto que las Ievolucwnes con ervadmas se pre paren nazcan 1 se desanollen pume 10 alli que en cualqmeta oha pmte de la Repubhca Solo cuando el pe hg¡ o es nmnente los OJOS se a b1 en 1 entónces lo que se ha penhdo por el descmdo se gana po1 el valm 1 l::t decJSJOn Los que rtntes doblaban lrt Como VlJtlantes etemos pase a los profanos Parapetados t1 as la fo na el á 1r 1 1 el vocablo puro el tJ adwwn :thsmo en la~ Acadmmas el latm 1 la mm al cle11Cal ]¡acen fuego sobie el hbmah•n 1 en la h tei atm a 1 la poesm U na mfcl1z med1ama que naCJ pm a vJvJr en la somb1a acepta 1 def1e11de ese p1ograma auo¡a denuestos sobte el bb1e axámen la hte1atma qne rompe las tra has de los preceptlSta• la musa 1 e' olu cwnaua de la Filosofía 1 la doetuna hbe 1 al 1 al punto t1osfoi1nado en poeta h teJ'llto académico 1 grande Lm amsta sale Ceñ da de laurel ln docta f e• te a I embn los lo01 es de la admuwwn pn bhca Pm o una Jenm a.cwn h bm al Heno al escena u o 1 no rem bu á oh a m s on que aplaaclii, descubwJta 1 1 e' m ente, a esos maestJ os mexo1 ables 1 modelos aca hados, a1mqne esa ¡enei aCJon t1 atga el 'e1 bo mara' Illoso de la elocum c1a en los lab1os 1 la llama chvma de la mspnamon en la mente La escuela catolico-htemna de este país es por esa conducta 1 eo de una su prema lll)UStlcm msnlta la 'm dad 1 fa! sdica la lustoua En sm v1mo de los contemp01 moos 1 la posteudad, de las let~as colon hnn s 1 de Ia verdad h1st01 ca hm que deseru1Jasca IaJla 1 exlubnla en su \ eidadeia talla en su espirJtu 1 en sus tendenmas Ha1 que poner en ev1denma sns muas egmstas, su mezqu no c1 tteno sus gasta dos núse1 os ¡deafes, la pobi eza de sus ms pnacwnes, su mtoleJ'llllCia I su sobe b1a Ha1 que dennncuu a l ~ mo1 ü somal ese si tema ve1 gonzoso de aplausos mú tuos 10 onstantes, a vu tnd del cual han ex t¡mado escaud 1losa nente las cHladc 1 as p1 opo1 ClOne~ del mé11to mlo.o 'eces 1 hecho en ottls ¡JustJeo pet'SonaJCS de oo cm as e m fecunda mechamas Pm este flanco hm que empe a1 hm h lucha A ella 11 \'ltrunos al~ JUventud hbmaJ que actualmente se educa El e h10uo de h01 aunque Impotente no se 1 á estéul 1 mariana vendrá una Jelleia e on entm a que cen ru á con entuswsmo I alcanza1á el tuunfo Ent1 e tanto du emos con Spence1 s1 se ve11fiea el camb10 desea do b1en ~~ no Fe 'enfica 1enos b en **':Comenzamos a pubhcrn h01 la traduccwn que de Los Jemos ele VICtor Rugo h::t hecho nuestJo m tchJente arrugo el seno1 Davtd Ló pez Penha J¡ I que tan buena aco Jida ha temdo en est.a capltal INTRODUCCION VICTOR HUGO Acometemos la tru ea harto dlf1cll po1 CJeJ to de tl aducn uno de los hb10s m ~s notables en que está diVldJda la g1andc oh1a de Vwt'OR Huoo titulada Wr LLI U.! SILAKESI EARE BaJO el punto de VIsta de la LJteJ atllla 1 del Al te esta ptocluccwn delm~Igue Poeta es sn obra maesti a en p1 osa Sabemos que no nos se1 ~ dado m te1 prota1 fiel 1 corJectmnente los sublimes pCllsamJentos de Vrc-roR IIuoo 1 mucho ménos ICfiCJUl la Íom a Oll)l ul e 1 acte 1 Jstwa en que él los esp1 esa Mucho habi án de pm dm sus Jlgantes cas concepciOnes al ser traduCidas 1 tm d1tc1clas poi nosotJ os de la belleza I en canto• m11mtables que enc!e11an 1 que constltnyen el sello ~ohm ano de aquel J emo 1 lt m do le 1 la esenca mJSma ele su faml espontánea e m agotable Inspnac10u Reco]cd 1 concenttad s1 podms todas las JUatilacw 1es con que el sol os deslmn lJ a Apenls logiartaJs conden•a1las f1actáudolas escasamente Empe1 o b1en que desconfiando del 6nto ele este hab IJO nos arrastra a em pwndello la necesHlad de da1 espansJOn al entusiasmo con que hemos devomdo esas páJmas 1 tamb1en nos ha mumado a ello el estimulo que hemos 1eC1lndo de p n te del seno1 doctot EnuAtmo SALA ZAI< CU) a eJUd!ClOU es S1elllp!C pal'll no­SOtiOS el meJOI hbto de 1eferenma Co nocemo porque lo tenemos e peumeu tado el empello con que nuest:J o docto 1 1 espetado mmgo eVIta swmp1 e poner de ma111fiesto sus gmndes méntos 1 esteusos conocim1e11tos roas supuesto que nunca se escusa de ut1lizm los en beneficiO de ~s demás I que a nosot1os espemalmente nos pi opoi mona de continuo ocaswnes pa1 a ap1 0' echau1o, de ellos JUSto es que tamb1m las apJO>ec!Jemos todas pa1a tu bu talle el testunomo de nnest1 a gt ahtnd 1 adbes10n Sn mESPEAR.E comentado poi V rc-roR lluGo 1 Este encuentJ o de do~ J emos Igualmente pm tentosos p1oduce en el es1m 1tu de todo~ a1Jénas ab101 to el lib1 o en que aquel se veufica una í tscm lCJOJJ 1ne JStJble es 1m deslumb1anllento en pleno Ideal F1guráos los dos piCos m11s ele' a dos del Hnr.H.n A nm ~udose de hito en 1 tto 1 de ellos el m !S sobresahente p1 egona.do las <>louas del otro J V'1c-roR Huoo al hablar de SnAKESPEA RE se 1dent1fica con el ¡e m o de este desfilar en maJestuosa J?IOCCSJon uno en pos del otro todos los ¡emos emmentes as1 antiguos como mode nos Homero Job Esqmlo Isa!as Ezeqmel Lucremo Juvenal 'l'áCito San Juan San Pablo el Dante R11bela1s Cm váutes Shakcspea1 e 1 Hé aqm la se11e que comp1ende el h b10 cuya t¡ aduccwn m tentamos , ser1e que a más del mÓJtto mtrmseco que tiC uen po1 St solos los nombres glonosos que la forman 1eunc este otro ménto estJam dmru 10 espemal mmenso I es que qmen la establece no es 1m cutlco más o ménos elllcb to 1 autonzado smo el m1smo :p1 e msamente a qmen las Musas predestma ron para contmuru esa seue en nuestJo siglo colmándolo para tan alto destmo con todos 1 cada uno de los dones que d1stmgmeron a aquellos-el mcompam ble VíCTOR Huoo el PoETA pm exce len m a En pt esenctft de estas snblumdades, dtce el auto! a qmen t1 aducnnos refiuén - dose al g111po de g1 andes J emos que pasa en 1 ev1sta -el lecto1 expmnncnta el efec to de una msolacwn La esp1eswn es exacta Lo que VíCTOR IIuoo llama as! lo hace sentn a sus lec tmes Define bwn el efecto que pJOdnce Nmguno de los Jemos que él clcsm be posee en mayor gmdo ese podm sobera no m lo c¡e1 ce con tan absoluto pt edo lU!lllO Su 1111aJmac1on semc¡ante al sol de nuest10s tropiCo , cspaJCe a 1 audales los I 1yos de su luz, mas no cual nuestlo sol en en cuuscntos houzontes smo que de uno a ot1 o hem1sfeuo, con foco nunca velado por cela¡e alguno se proyectan lu mmosos centellantes los de tcllo• <'~ da vez más pm os de su mspu ac1on 0 Que mucho, pues SI ba¡o el cfef't mmcdmto de tan deslum b1 antes 1 esplu dm es, que I eqme1 en mn a das de ngu ll pai a set de cm ca contemplados un osen 10 baducto1 en su afan ele wfle] u los haya espenmentado f1 ecnentes ofusca. mones mcmuendo en otros tantos cu 01 es La pregunta enmeua en SI m1sma sn wspuesta, 1 meemos tenm dm echo a la mdnlJencm que reclamamos 1 mn pm a que, en cuanto el p1mc1p o pueda aph cáJ~nos se adopte p:ua ¡uzg:n nuesha osadía este pe11BaJme1Jto q1\e el 1lto1 emite b1en que ptestándole un 1lcancc mas elevado N o dru as1deJ o a la cen Ull es una perfecc10n negativa Hm méuto a vcres en ser atacable ( Cnn/ m m ) _ ._.. ,__ __ EN EL ALBUM DE 1 ~ •EllORA DETIIS \DE DE ARRIETA ~B eu 1 a) a tu belleza encantadora ue en b en la penn en b en el mnl co w e1 te 1 compañero q e se umó a t s 1erte Su cadena bend ce srn cesm B10n ha) a tu vntud co ella e nl oln• Los dolorosos golpes del destino 1 r egns h enhecl ora s 1 cann o Con flores de perfume cclest al Con los acentos de tu voz d v1 Con t 1s muadns de ternura llenas H lCCS las horas plactdas setenn~ Del esposo tan cm o nl corazon r os da de su brazo car ñosa V as entonando el himno de Ir. VIda A ve fel z q 10 el árbol n mcn olv•lln E que ha f ormndo elmdo de • 1 • o Cuando del mt ndo el raudo lo bcllu o Las Jlus10nes seca una por uun Cuando se toma adversa In fortm n 1 nublo se contempla el porveu Th !7 •m• • Pe~et ' Oa11lit ( C'oncl• mi) INSERCIONES. I'UNDADAS ESPERANZAS 1 \R \ TA RE \LJZ H ION D:EL FERROCARRTI OE ROrO AL M \GD UENA El Crobwtno de Santande1 mtCIO esta emp10sa desde 1879 1 ho1 con mas firme za que nnnca se p1 OIJone lle, a!la a cabo po1 mas qne l set '1do p01 vtr¡)()l , Hmranu(ntas pa1a cqlli]JRJ 'iOO ope1 a llOS, polea bombas, & n Scllor doctor Torcunto Caneño -Presente Utiles psm. establecm los talleres 1l1' Mm estllllado se!'lor 1 amtgo carpmtclla, heu 011 t 1 m 'tqmnas , R e f erente a su mtcresantecattade aJOI 1 Ba!l'as de l11euo de lo1mas 1 tamaño- 1 en obseqmo de la vetda.d, satisfactorio ( tversos pa1a los usos que ocmrnn, , omu me es dar a usted la presente tespuesta concx1on ele ptezas de puentes, VJidncto• drr!Jléndome sepamdamente 3 cada tlll¿ & :,~ 1 accH pata re:¡:mrat hcU'fumentas,, de Jos puntos que en ella usted claramen u ti les paro la oficma de tt ah qos t{cm te especifica cos 1 la de oontab1 hdad 1 if,'f, S1 a m;tcd ( altnfwsc11t0 ) le consta De lo anteuor hcue que cunchut'SC que que el Gob1emo de aquel Estado (de los trabaJOS 1 las opemcwnes c¡ccntada- S:¡.nt:mder) haya hecho ya 1 esté hamen son J a de bastante 1mpo1 tanrta ::>e tienen do gastos de-a]mma cons1dmamon en dt todos los elE~mentos neccsauo pa1 a 3 , ! eh a obra (la del feu ocarrtl)" leguas de feu ocm 111 , ahora se ¡nocedel't • Me consta que desde el 1 o de setlem a eJecutal el banqneo o suhest111chu t de bre ultimo comenzo el Gobtmno de San la >in, lo cual tcndtá ln~a1 desde ~muo tander a hacer erogacwnes pata la obta proxnno, pue. en cm ta ael sci1o1 I 1c 1 del ferrocan!l,e¡ que desde entonces ha aente de s.mtandm, fechada el 1 o de mvertído 1 comp1omctido las sunuentes !~Loa.}o en el Socon o, mc 1 dtcc lo stgmentc cantidades, del modo qltC paso :fmdJcar s pumc1o matcua e de heummcn detalladmnentc tas, ncle & ' sahc1 on do Jo. ]<'stadm; ( (t) Esplomcwn de las v1as de So<>a Umdos el 2 de abul ultimo, de maneJa moso 1 Lebuyt 1 elecmon de la mas cgn que) a deben estat en Bm1anqmlla, 1 eo vemonte para el fen'Ocau 1], plano topo- mo los duimJcntes tamb1m1 c~tiín ascgu ~ráfico del r1o M~dalena entre Bocas de rados, nada falta para que lt cmp1 esa to ¡:;ogamoso 1 el Dtque de Patnrw ( 7 le me toda h seued td del caso ' Tcumnuda los cálculos ptcccdcntcs se hac11111 en se tJCmbJc últtmo csder11, hace ocho meses, ' que dc•de ('ntunces el Goh11 1110 h,t comptomcttdo pata la ob1a, <>mno atJ ás Jo e pccdiqué U2,000 P01 otla patte, en fcbtCIO ultimo cuando el cmdadano I'1e•tdentc se ttaslado a Cap1 t,me¡o a H'Ct bu, ¡unto con el scfío1 P1csJdente ele Dopcá, el puente de lneu o, hablando con el •efiol See~ctm1o de Ilacwnda del sefio1 Jcue1al IV ¡Jche~, ob1 e los Jecm'Sos pant el fcllocmul, me m~m fcsto que cxtsban ) a, en mu1 hucnas ohltg te 1one on dcb tmo , la Plll[ll e•a 00,000 guas), pl mo topográfico del ca mm o de la; espl01 ~cton en chmembrc, en los mese Bucat a manga u. puerto de Bo~t¡.:1~,;la ;;s~(Íl1m1:ñllciírlrt~1~a~sc~t~ll~l ~~d:;o~s~l:' ~·-~ta:Wl~to~J~l"io-:s~t~Ja ::b+'a,J.,o,s ~sc'-!-h""l~nf-t ~ g~~ ~~~~~~~ ratuna de " Puerto Pa1 édes" a" Sántos Gnbóu ez " ( 8 leguas ) , elecc10n del puerto sob1e el Magdalena.! trazo p1chmt nar de la prtmeta secc1on entle aquel uo ' el lago de Patuna ( 25 kilómetros qne en el h azo final se red.uc~rán a 15 ) ( prox1 mamente) $ 4 000 ~b) Trabajos en el ' puerto desde dimem b1 e hasta h fecha de ho1, comnstentes en desmonte 1 lim pta para el estableCI mwnto de casas de habltac10n 1 almace nes de depósito 1 constmcc10n de es tos locales 1 pago de un ~mb1ado de ca cao que fné p1 ec1so esproptar ( ap1 ox1 mamon ' 3,300 $ 7,300 Ademas, el Go b1e1 no tiene celebra dos lo¡¡ s1gmentes contru.tos de melu thble cumpllimento (o) Con los sefío- 1 es Quin 1 Cote, co mcrcwntes do Jeco-llO<' i!l. onora 1 hí-~:;;;;::;;.::=.:, _;.,;...:.. ,]ad en Cuenta, Oca i'ia 1 Buca1amanga, pata. strmm1str:u, con destmo al fe¡ ro carnh en el lugar de su empleo, 150 to nela.das de r1eles V1 gnole de 30 hb1 as p01 ym da 1 sus acce sor1os, 1ma locomo tora t:mquc de S to neladas sobre las 1 ue tia. matnces, 6 ca 11 os de plataforma 1 ele vuelco, heu a m1entas pa1-a cqm par 500 opera nos, td pa1a establecer lo talle¡ es de carpmte na, herrel'la. 1 má qumas, 1 ut1les pa1 :t las oficlCmas de t1 a baJOS técmcos 1 de con tu bthdad ( u.p10 xunac10n ) 15,000 (d) Con el sc!'IOI G R Qmn para el snmtmstl'Ode 24,000 durmientes de las me¡ores maderas .{la 1 a res1stn a la m tempeue, a ~ 0-80 Ci cada uno 19,200 (e) Con el llllsmo sen01 por una má <{Ullla de aseu at, de stcn-a mreula1 de 42 pulgadas de d1ámc tlo, con su motor de vapor de 2 caballos de fuerza ( aprox1 lll:lClOn) 2,500 Pasan 36,700 7,300 ce ooo 2;) 000 100 0(1(1 ::;¡ cuo 28 800 277 400 I se tcnd1 án, po1 chfetenma8 2-!9,Güo o sean 8 250,000 en numc1os 1edomlo,, qne e la am¡altdacl n ecesaua como UIJC ántes ConVIene obsen a1 en este luga1, que 1 ' 1 el Bdetm ohcnlnum 10 -!, t1tnlado "Fe 11 ocru ni de Soto al Ma~dalcna,' eones 1 ponrltcnte al 2± dP cltcJcmb~e de 18 O, 1~1 como lllO fmtor:nt tl La obra cuenta pnc~ ron fue1 tes 1 se gm os ele m nto,, e to e , erm las nqneza~ tic Santandm, con un g1an ¡nest!JIO mo 1 tl, con una dcuston mqucbi'llntable de pu1 te del GobiCI no del Estado, 1 con un }JI opooito d1gno 1 elendo de patte del m dn tilOSo pueblo s:mtaudeieano, de apo yat 1 segtm 1 su Gobielllo, en el eammo dellJI Ogieso 1 de la ~eHiadma grantlczrt m01al Bogot,t, ma; o 13 de 1 81 ToRCUAro CARRERo--J ES liS llo1: os O -Vrcm>1E REYEs-CmsANTO DcAJ~ 1E-ITIOENIE ITILL~llZAU -FEUNANDO SAN~not EI-N El'O:M CENo BAR os (Ho¡a volante) ---- LA GRAN BANDERA El pnrt•do hbeJal se encuentm profundamente dt,rld1do La m;'ION que ya empezaba aJenltznt se ba¡o los auspiCIOs de la mtis cbmpleta lealtad 1 buena fe acaba de sufr1r un golpe mesperado 1 ) "la esperanzas que habla conceb1do el pntr1o t>Smo se ausentan fnJ•hvas del escennno pohtJco Ln mnl conterudns ambJctoncs ele los jefes de los círculos la falta de VISlOn 1 de v~rtudes repu bltcanas son en prnncr t6rmmo las causas je nerndorns de h pwseute SltUACJon de desconcterlo 1 de amuqmn Ho•nb1es a quJCnes elevó la fot tunan puestos mm snperwrcs a sns cltmmutas facultades m te lec tuales son Jos que ho1 ncgoctnn en Bogo t.- sobre la futura suei te de los c¡rculos radical e mdepen dtentc haCiendo piOpta de estos circulos In causa de sus • escntmuentos personales 1 de su despecho La umon del partido liberal que eqmvocnda mente so ha mictndo eu una plau• pubhcn cutre gr1los 1 vocc de venganza 1 de cstermm10 cstn smnchda a uno seue de potnóhcos ptocedinucn tos mm dtshntos en verdad del rmdo' de In ;uunbrn que forman los trnficnutes en las plozns de mercado GEn vntud de que nutonzacwncs 1 con que;, pe> sonerl.(l, proceden en Bogo tú unos pocos seflo •es n 1esolver cuestiOnes polittcns que contrnnnn los tu baJOS antes cmprendtdos J>OI el buen senil do de los pueblos 1 lns volunta es ya mamfestu das de un modo urevocalJle en el senttdo de que lleve In pulabta 1 la voz de rnl\ndo un 1@tre pn \liCIO tan sereno en la paz como en la guerra 1 que se cncucntr> a la cabeza de uno de los mns fnettes Estados de la Un10n colombtnna? Santander que bnbut. tomado In vangtlnl d1n ele lt 1dea 1 levantado la por todos olVIdada bande¡:\ de los pt mc1piOs 1 In Jet con el entustnsmo que stempre lo ha clistmgmdo en todas sWJ nobles 1 pntllól!cns mamfestnc10nes Santnndet dccta mos habr!Í VISto con sorpresa que un gmpo de llomilrcs exaltados por ln pastou 1 dommados po1 nuues deseos de venganza snhcndo de lns cncru CIJadns del canuno anebata la glonosa bandera de In umon que conducnt. con lcnltnd el pr1me1 Jefe de aquel pueblo 1 que locos desatentado cm ren a lmnullnlla a los p1es del candidato oftctal del señor Nuñcz 1 su círculo El ummo queda en suspenso ni cousJdcmt t-on cnonnc dcsatmo 1 no se nlcnl17.a a dtStmgmr SI en el fondo de la ultuna cvolnc10n que S.e•mgo couw11 • 1 Imse de proscrtpclOn 1 de estermm1o resonaron estmendosru¡ contra los conservadores, al p1e de la estatua del Ltbcttador El pm ttdo consm vadm se 01 gnmr.n d.ccmn 1 va'' "bool berse 11 Hepubhca en mm pocas serna nas los momentos son de pchgros, no perdamos un mstantc 1 corramos a poner la bandera de la umon en manos del doctor FmnctSco J Zaldun por sei el umco liberal que puede salvarnog de lu falanJC goda que, armas al hombro I p1So de vencedores se encamma ni Capltolto I bten 1 cutiJltn mconsecuencta' 1 cuanta f tlta de mcmorm• ¡Oh velctdad de los hombres Oh falt\ de fe I de ClVISmo' 6 Qwcn smo el se!lor doctor ZaldU\ fue el que Impuso nl Cl\ldadnno Prestdcnte de ln Hepu bhca la pohtica que ha obsctvado respecto ele! pnrt1clo conscn ndorY Llegnbl el senor Nuñez n la cnpltal pruncncnr garsc de In Pres1dcncw. de la Umon 1 cntw otros pl'Oycctos tra1a el de dar pnrtlCIJ>nmon en el GobiCruo a los radiCales Llegó esto a conoct nuente del seilor doctor Znldun e IDmediatamen te convoco una reumon en sn casa. a la cual nsts llcron 'm tos mtcmbros caractcr¡znclos del pnrt1do mdepcndtcntc como el senor doctor &rloodol Ca mrtclto Rolp01tantes de los cuide ill8 garantms tndwiduale• es nl Gobterno E¡ecutn o fedcJRl a qmen COll'CSpondc garanhznrlos? I rr gt ovednd de este hecho ecedido los actos de Jos oclto seflores que encabezaron el metinf! de Bdgotn no se hub1e I hn Jl!nMdo nl esti'Cmo de querer ~""' ni pnrl!do ltbcl!!lsm ilas p>'Ofj>at>U< polft!CO que los pasaJeros iltteicses de una cnnd¡¡latura que pugua con mn chos cnconttndo mtcreses i que npcsnr de todo el p1e liJtO ofietnl con que apnrec16 desde un prmc1p10 fue nurada con ln. mnyo1 mcltfm cncu\ pot los pueblos 1 por los m1•mos que la p1 o clnm.. , •u on Lo cuerdo lo ace1 tado st con lealtad quena procederse en proclamar In umon del pnhdo solamente 1 de¡ru a 1~ esco¡cnma de la op1ruon nnc•onal el hombre que debtese llevar la bandera 1 Que evoluc10n tan trascendental es esa que no h \. ltlcanr..ado a tnovcr el entusulsmo de oadic? ,Donde cstan o pueden cstm los resnltndos be néfico de esa cvolucwn ? E u p1m1er lugar Jos "pr oclamado• es de la can dulnt u1 a Znldna ln presentnu como 1m elemento du 1 csmtencaa. 1 de amenaza contra el Gob1crno nnc•onal p1 occdmuento que llnClú sobre ellll todos los elementos con¡urndoa del Presidente Nuñez 1 la compactaczon rielas filas wdependwn tr~ s1 se ms1ste en sostenerla Ji u segundo tcrmmo el seflor Zaldun cuando aoznua de In tin¡tda proteco10n ofictal del señor :N'uiiez fnc lloc1 tnBI>Jttnento de ?Nmganza contm el Estado de Snntauder que no ha comelldo otTO Cttmen que el de habe1se opuesto con enlereza..a los abusos del Poder federal Es pues m!ís que cvtdcnte que la nchtud de aquel Estado que en las p1esentes cncunstanmas es un poder deCISIVO en lAS cuestiOnes nac10nnles habrn do ser contra na n esta causa. sm bande1 a 1 Jo. cnnclidaturn Zal clua volvem con todos sus proclamndores ni silencioso oh tdo de los que tcposan en un cemcn ten o 1 en 'ano sera J a cvocat eu adehmtc lo fa.ntasmas de la noche La un,¡on del pnrltdo hberol ha vcwdo pues n colocarse en un terreno qmmenco poi hita de VlSIOn en los que qmSJeron an ebata1 b bnndcra uu1omsta de las tm1cas manos qne podían dtll vtda 1 fmma estable al pensam1ento 1 hacer res petar los fallos de In op1nton contra los asaltos del Gobwrno jcneral Pero aun no es tarde para una evolncton snlva doro aun no se ha pe1 dido todo Estos desgramados sucesos han vemdo a dar olm faz a las cuestwnes políttcas I nos llllndnn OCfiSIOD pnm depurar nl partido de los elementos 1>ermmosos I corruptores que como las cmdndes malditas de la leyenda JUdm deben ll' a desean snr en los senos p10ftmdos de un mar muerto InsiStiendo pues en los nobles 1 levantados propósitos uruorustas 1 rcnsunuendo la dueccwn de los acontecimientos ba¡o la forma que trn>a la nueva sttuac1on pohllca la s1gu1ente declara c10n de prmctp1os es el u meo J.>rogramll que hoi puede so tenerse con digu1d td 1 feliz cx1to 1 • L¡, UD IOn del partidO libe! al se SOS\tellC en los tcrmmos p10clamndos por el beuemerliO J e ncml Solon '\Vilches 2 • Los homb1es que por escandalosos Iltentn dos de cualqmcr JCncro 1 cuulqmera que sen el en culo a que pertenezcan se haynn hecho odiO sos qucdnn fuera det moVlmtcnto umonastil 3 ° L.."l. UD IOn se CÍCCtURUÍ HUICR 1 CSChtSlVntUeU te con Jos elementos sanos del partido hbet al pnra founar 11n todo comp teto cnpll1. de llevar a efec to In verdadera ICJCDClfiCIOn de In Hcpubhca"por la depurac10n de los prmclplOS el estnblcmm~ento de l¡onrad!lS pr tcl!cns nones hbcrnlcs, pnrn que concurnendo a la compacta CIOD de las filas efectucu el ''iJU11t'11ecttlllento del pnitido ltbcral 1 se prolongue ns1 su dommnr10n en Colomo1a 6 • Stendo pehgtoso pm a la Republtca el con SOl e• o de los ¡efes de los Circulos SJll otra tlBpl 1 ac10n m otro programa que sus personales am IJiCIOnes es de neccsHlnd 1m penosa que el mo vtm1cnto muomsta sm¡a espontáneamente de la voluntad 1 el buen sent1do de los liberales Sllt mus mteliJenc1a 1 lrnto que el deseo comun del btcn soctnl 1 el santo nmor de la pntrlll. 7 • Siendo una verdad para todos reconoCida que en el seno del liberalismo ha1 elementos pe1 mcwsos elementos .de dejenerac10n da!indos 1 funestos en obsequio de la buena nnnomn 1 de Jo lealtad que debe extslir entre los mtembros de la grnn fanuha libcml se rcllra a esos elementos toor la esco¡enc1n de un cmdn dnno que por su carácter po1 su ftrme•.a de conviCCiones • por sus evidentes serviCIOS a 1::t pntrtn pueda ser una garantia de moralidad 1 cte l~t chgmdad de la Hepubhcn VARIA. * ' ' Dt:Rus m LAS nos semanas ultimas, en qne L(t P ol1twa no ha '1sto la lnz, han Cllculado en la rapttal los stgmenteH pe ltOdlCOS Lrt Oruon, 1 edactada pot los seilOI es SantMgo Pé1ez, S Oamacho Roldan, Pablo A1 osemena 1 Fehpe Zapata, 1 des tmada, como o, g(tnO de la com~S'lon cen tretl de la Onzon liberetl, tl sostemmiCnto de las 1dcas que cletm mma1 on los sucesos del 2-! de abnl, Et Relat(YJ, elegante 1 valiente adal1d, Cjile ha tcapu emclo, dccla1ando que h01, despues de dos aiios 1 algunos meses de silencio, es el mismo que ántes, en sn }JI O"'taJna 1 en sus tendenc as, Ea P atrw, qne hu J'Ca}Ja.I ectdo tam 1Hen, ) a con el cmáct01 de Rev1sta lite 'a1 ta l1b1J1 al, (pa1 a 'al m nos de sns p1 o p1as palab11s), ' Et Bolwa1 anse, IN ga11o d1~ lct SOI!IP darl" Ht.]OS de Boln a1 ," 1 cuyo l'IDgt a ma 'i'epl odncnnos Saluaamo a todos estos ti tbajudol e• do lt }Jlensa 1 les des!'amo• vm¡c fehz L~ EOUNn> HOJA que contiene adlt<' stoncs de lo. pueblos á la candtdatm a W tlcltc•, hu llegado a Bogotá Es de enom•cs dtmen 10nes, y ICgisba un teJe grama 1 clat" o al estado de la op1ruon en }¡t Costa, hacm el cual llammnos la aten c1on pub he' El teleg• ama va en scgmda, 1 la fi¡ m a que lle' a al p1é 1 espondet ll, 1 tamb1en nowtl o , ele la \m dad de lo afn m a do Honda 7 <1• ma>~o rle 1811 l:kñOies F•nnc•sco J\Iuíioz Timoteo Ilnitndo Aníbnl Cm va¡ al Juho Añcz 1 Ben¡nmlll T i\lai tmez -Socotro Cnnchdntma Wilches en la Co tn popular 1 se hnce cou grande entustasmo ICcolecc10n de ad1:ws10nes promellendo sostcnetla en el ten en o en que sea chsputnda Encnrccemos nmtgos en' 1cn nut.yot nume10 de Bamlerr' Federrd Con{;'rntulc monos po1 el hmnfo mornl qne p1111CtptnmQ!=I a alcnnuu Fumndo PEDTIO Fro UEHO \ R E~ :lttt~n11co Jlfttnmo lle1 nanc1ez X < * LoRENZO PAREJA -A nucst1a mesa de 1cd tCCIOn lta llegado la noticia de su nme1 te, tcacctd,t en San Juan N cpomu ceno, dtsh tto de la p1 O\ 1 nma del Cibmcn en el Estado de Boln a1 E1 rt el seiiOI Pruc] t un mudad ano de mclolc paedlca 1 hAbttos de ttaba¡o, 1 se conqmsto el ap!ecto de la poblac10n en que luzo su fo1 ttma, como tambtcn el ele todos los 9.ue de cmca lo hahuon Vauos de sus hiJOS ltal1 hecho, 1 ot1o• hacen nctuabnente,sus cstnd tos en esta ca¡ntal, pues él qm o t1 abaJm p~1 a deJalles un po1 ven u vmcu lado en dos de los pumews elementos de la felimdad oCia! la c1enc1a ¡]a uqucza Su famtlta está enlazada a la de uno de los Redact01cs de La Pol1t~ca Lamentamos su fa1lecnmento EL ~ r rnro COl! eo rle116dico a 1' como su mJ tnbucwn en Bogotá,' está csclusnramcute a cmgo lle los mfla citloA, a qn10ncs debem din JllSC todo 1cclamo que no tenga re 1ncwn con astmtos de pm a te daCClOll Suphc~mo t los nJentes"t suscu tm es que no luynn cub1elto l valm de las ClJCS l "' 1 2 "' que lo ven fi 1ucn, pues la emp1 es-1. necesita atcndc1 a los ct cctclos gastos que de mandan las llUf'Va~ dnnensJOJtes del pen6d~eo Con 1'1 p1esente nummo (25) co mtcnzn 1.\ scuc 3 ~ Este penóéhco se canJea con todos los nacwnalcs 1 est1 anJeros AclH~tttmo que todo 1etmt1do debe llm ar al pw un nomlHe res ponsable, sm lo cual no setá pu bhcaclo La AJencJn ¡en m nl se abst1ene de suspcndm el cm ío ele La Poltltca a los A¡enles en los E taclos que no h,\) an rcnd1do sus cuentas, pmque H< J" Olli t~; '< ,•[n ]JlitllU tk t lv 5U ccsrvo De lo que 1 cea u den les co 11esponde ellO por 100 Dmnos las g 1 nma.s a los que han temd(') ln fineza de con e pondm atentamente a nuestt o encargo AjeJU'Irr ¡ene' al en Bogotá, calle l a al Noitc, númelo63, a crugo de Qui~l'INI r Oo"P\~IA Loral de Rerlaccwn, en el cual se cncontJ ~1á, en los chas no f('J trtdos, de de la sc1s de In m tiiana hasta las 7 de la noche a alguno de los RedactO! es, la pm te alta de la AJen cm de Qumtana A ULTIMA HORA. De nnestJ a cou cspondenc1a de la semana, 'cm da de dtstmtos puntos de Cunclmamm ca, dcduc1mo~ el an hclo de los pueblos por conoce1 las opm10nes rlc 1 La Umon" 1cspecto a In clcstgnaCJon ele cancl1d to pata, la, G obemacwn de Cundmnmru ca Realmente, la umon hbcral no puc ele 1 efen1 ~~ umcamcnte a la candt datma pata la P1 es1deneia nacwual 81 el cancltclato ele 1 La. Umon" es el J enl'l al Alelan a, dcbeua dec1rlo, pues los pueblos e¡ mm en 011entatse Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
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A Differential Game of Ecological Compensation Criterion for Transboundary Pollution Abatement under Learning by Doing

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A Differential Game of Ecological Compensation Criterion for Transboundary Pollution Abatement under Learning by Doing

Por: Hindawi | Fecha: 2020

Este artículo estudia un juego diferencial estocástico de abatimiento de la contaminación transfronteriza entre dos tipos de compensación ecológica y la política de abatimiento, en el cual se tiene en cuenta el aprendizaje mediante la práctica. La emisión y el abatimiento de la contaminación entre la región aguas arriba y la región aguas abajo en la misma cuenca es un juego de Stackelberg, y las regiones aguas abajo proporcionan compensación económica por el abatimiento de la contaminación en la región aguas arriba. Se discuten las estrategias de equilibrio de Nash con retroalimentación de compensación proporcional y compensación de inversión, y se encuentra que una proporción adecuada de compensación ecológica puede mejorar el nivel de inversión en el abatimiento de la contaminación en las dos regiones mediante la acumulación de experiencia en el proceso de aprendizaje mediante la práctica. A largo plazo, el mecanismo de compensación de inversión es una medida efectiva de abatimiento de la contaminación transfron
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El Renacimiento - N. 7

Por: | Fecha: 28/01/1903

EL Año 1 -Serie 1 DIRECTOR PEDRO JOSE GOMEZ C. Dirección cablegráfica: RENACIMIEK. No hay suscripciones. Número suelto ................................... $ 1 ••• Número atrasado...... . .......................... 1 50 Para anuncios, arreglos particulares. Remitidos, columna ............................... 80 .•. No se devuelven originalES. La correspondencia debe rotularse al Director. Oficina : Pasaje Hernández, piso alto, número 57. Monumento á ~tfurillo II Observa en algulla parte Macaulay que "los hombres extraordinarios que han realizaclo CORas extraf)relinaria:'l, tienen derecho á una indulgencia ex­traorelinariíl;" tra¡;:e que recuerrla un crítico francés para ped i rle á Ed­mundo Biré que modifique ó á lo menos atenúe un tanto sus censuras contra Víctor Hugo; pues si en el político huho errores é inconsecuen­ciaf:, en el poeta oe La Leyenda de los Siglos reí'\plílnrlece siempre UNa inspiración y se ostenta una grancleza que cuhren en parte las mallchas con que salpicara la túnica del vate el Io­do de las contienrlas civiles. Desde luego estamos oi~puestos á emplear esa "extraorrlinuria indulgencia" al juzgar la obra del Dr. Murillo; pero encont.ramO$ &.los pri,reroR pa~o.~ r!a nuestro estudio alguna diferencia en­tre el caso oel poeta de nomhrarHa universal, que se hacía perelonar por su auréola de gloria, llenando COIl la maje~tad rle su retórica laí' plazas y las acarlemias, y el caso rle nuestro político neogranadino, que ., no se elistinguió por una intensa cultura in­telectual," y que sólo influía "en el alma rle un pueblo de rudimentaria y escasísima ellucación." Aquí no hay vate, no hay artista, no hay acarlémi­co, no hay aquel mágico de la pala­bra, de que hahla Valera. La colec­ción de El Tiempo no son L(IS O,.ien­tah's; en los illfi.JI'lnes al Oongreso oe 1856 no alienta el soplo inmortal de Los Cuatro Vientos del Espíritu. El año de 1856 pasó en el Con· greso el proyecto de ley sohre aboli­ción de la pena de muerte, y subió luégo á la consio eración elel Poder Ejecutivo. El Dr. l\fallarino, en quien se ha reconociclo siempre una grande tolerancia, una verdadera serenidarl, reoactó algunas ohjeciones, y en dl' fe rencia 'con su l\1ini&tro el Sr. Pin­zón, nombró en su reemplazo al Dr. L uciano Jarnmillo, quien firmó con el Presidente las ohservacioneil cien­tí ficas y razonarlas en que el Magis­trano se apoyaba para pedir la recon­sideración del proyecto. En esas ob­jeciones no hay una palabra mal so· nante, no se encuentra ni una sola expresión que re vele al h.·:nbíC:'le bando, naela que puerla heri r la sus · ceptibiliclacl del adversario. El Men. saje habla en nomhre ele la concien­cia del linaje humano, invoca el testi­monio de la historia, el fallo y las costumbres rle las naciones civiliza­das. Es el Jefe de la Nación quien, desde la alta región del pensamiento, les habla á sus conciudadanos el len­guaje de la film,ofía. Dice el Sr. Mallarinu en 14 de Febrero: "Respetuoso siempre a lENTO _ - •• 0 • • • • • ••••• • • •• • •• _-::.-:.- .:.-::.-:..:.-:::• • , .:::.:: ::".:':: ". : ::::':: : :':'_._::. _ . _:.""::'-::._:::::. "::._::::::::;: ___ . _ • • • _ •• _. _ ___ •••• _. Oficina, Pasaje Hernández, piso alto número 57 República de Colombia-Bogotá, miércoles 28 de Enero de 1903 querer ele la Repúbl ica, expresado por el órgano ele sus Representan­tes, 'me habría apresurado á elar la sanción ejecutiva al proyecto, si aele­más de creerlo inconstitucional, no tuviese la profunda convicción ele los inconvenientes que sus disposi~iones van á producir. Si estoy equivocaclo, los Legisladores y la Nación lo deci­dirán; mas, entre tanto, el oeber, tal cual yo lo conciho, me obliga á ha­cer uso del derecho que me conceele la Oonstitución. En materia de tan tra~cendentaleí'\ consecuencias, no es excesiva la oiscusión ni perclioo el tiempo que se empleeen examinarla." Observa que las leyes penales á la sazón vigentes determinaban inser­tar precisamente en la ley ó en el acto reformatorio las oisposiciones que hubieran de quedar subsistentes cuanoo no tooas fueran ahrogadas; y agrega: '1 Acatanoo debidamente esta dis­posición, sin entrar en el examen ele los gravísimos in convenientes que producf', el proy ecto que examino debe contener cuanto ql.lede vigente oe las leyes penalefl, 6 hi en declarar· se que quedan abrogada5:, y que el máximum ele pella señalada en el ar­tículo 2? debe apli ca rse, sea cual fue­re el oelito (Iue 8 ~ haya cOll1etid()". Bien sé que tal no ha sido ni ha po­dido ser la voluntao de los Legisla­rtores; pero á tal inteligencia es for­zoso oc~ rrir para salvar la disposi­ción constitucional, que rlebe sertan sagracla para los Representantes rlel pueblo, como para el puehlo mismo. 1, Mas, aun suponiendo vencido el obstáculo constitucional, q ueclan otros de grave consirleración. Fija el pro­yecto el máximum del presidio que puede imponerse, en diez afios conti­nuos y comunes, sea cual fuere el delito materia del juicio. Y por lo miamo, el asesino, el incendiario, el pirata, arrastrarán por eliez años el grillo del presidiario, al lado del mo­neclero falso, del que robó una insig­nificante calltidacl! r Hay proporció.n alguna entre los ci elito;; y las penas ~ ,Qué te mor detp. noría al criminal para no recorrer tücla la graclación oe los crímenes? Si al que roba se le impone la mi sma pena qlle si hubi era asesinaoo ~amb ié l1 para quitar el testi · go que purl ie ra acusarlo, y aunq ue hu ­biera incendiado paraasegurar el fruto de su crimen, i qué temor, qué sen­ti miento pocl rá detenerle 1 N o el de la ley, por.que la mulLiplicidarl de los delitos no le causará un día más de sufrimientos. i Acaso la humanirlad, el honor? No; que el villano que espía el sueño rlel inocente para des­pojarle del fruto de su trabajo, y tal vez de la vida, ignora lo que signifi­can las palabras humanidad y honor. Las fibras más nobles elel corazón edán pa rH li;r,a da ~ 'en el IH>oho rle aqu ellos seres degradarlos que todo lo posponen al ' cruel placer rle dar sati sfacción á sus instintos de sangre y á ~us brutales pMione~. Y mien­tras que la ley mit:ma parece que in­cita al delincuente á que busque en nuevos delitos la impunidarl, i cuál es la segurielarl que la sOclerlarl ofre­ce al ciurladano inocp.nte y pacífico 1 , Oómo cumple el Poder público su augusta y santa misión de dar pro­tección y í'eguridad? Las leyes que castigan rlehirlamente al delincuente son la salvaguardia, la garantía de la inocencia; son las que protegen la propiedad, la vioa, el honor de lo~ ciudarlanos. ., Huho un legislador que castigó con la muerte todos los delitos. Fu~ nesto error, conrlenaclo por la hu ma­nirlad y por la razón: todos los oeli­tos dehían ser at.roces, porque todos se llivelahan ante el hacha elel ver­dugo. La ley misma les daba un ca­rácter l'angriento. La voz unánime del género humano ha hecho caer la maloición (le veinti~éis siglos sobre el nom hre elel sanguinario legi~larlor! " Desgraciaelamente se Jluede lle­gar al mi¡;:mo resultaclo por el camino opueí'\to. La excesiva severidacl no conoce culpa~ leves: la indulgencia lIevaoa al extremo no admite elelitoil execrables, y, por tanto, ni los pre­viene ni los casliga. En uno y otro caso, la socieelad, m i nada por su base, vacilél, se desquicia, y sin se­guridad y sin garantía;::, en guarela siempre contra la;; aseehanzaR oel crimen, converge su furrza hacia RU propia defensfl, y olvida Ó descuiela cuanto poclda empujarla por la senda de la civilización y del progreso. Si estos pri nci pios pu.! ieren pOllerse en rlucia, bastaría citar la hi~t.oria de los primeros siglos de la éra cristiana para disiparla. En todos los siglos y en todas las naciones cau~l~s idénti ­cas han prod licido iclén t.icos resu lta­do~." " Mas, si a pesar de todo, la ley eleclara inviolable la vida del asesino, porque 'la vida es sagracla,' nehe también, con mucho mayor razón, hacer inviolable la ele las víctimaí'. Pero aquí lucha impo~ente contra las asechanzas, contra las maquinaciones de los malvarlos. Y entonces la so­ciedarl tiene el indisputable elerecho de peoir á la ley que evite el crimen ya que no le c!?sLiga. i Qué hombre>:, qué nacionefl, qué Poder podrá evi­tarle' ,. .. __ ,. Doloroso es, sin durla, presen­tarse como el rlefensor de la pena de muerte, é inmenso el sacrificio que exige el deber severQ é inlleltihle. Lo he cumplido con desconfianza y con temor; pero ninguna considera­ción huinana me habría hecho cal lar cuando creía, como creo, comprome­tirlos los más sagrarIos dere~ho s de la soci erlarl." Veamos cómo arguye . El Tiempo sobre tan interesante materia, que elebió el iscnti I se COII v81'dadem se1·e· nidad, por ser asunlo de oerecho pe­nal, yen manera alguna canon de par-tido: . "Esta cuestión ha llegado, rlice. á donde (sic) el Vicepresid ente de In Re­pública, quien acaba de rechazar el modo como ha sirlo resuc:,!ta; y quien, necesitando por prev '!l1ción cnllsLi­tucional un cómplice ( i !) que sus­criba las objeciones al proyecto oe ley que le ha pasarlo el Oongreso, ha tenido que buscarlo en el seno de éste mismo ... Realmente, el Sr. J!\ramillo ha subido al Ministerio agarrándose del patíbulo." Si hubiere lectores que al hallar ciertas palabras, como aquello ele cóm­plice, participen de la extrañeza que á la primera lectura ha (le ocasionar ese "botafu~go," elarta la confianza en CII' Número 7 nocirlaR proteiltaR rlel periórlico, tene­mos que pasar por la pena de hacerles apurar ele una vez el rlesengañQ. Le taC'hó la palahra mal empleada un cootendor: .. Cómpliee, le dijo El Porvenir, según pI Dicciona­rio, es compafier,) en el delito. ¡ Qué podrá d6eirse del que califica de delincuentes al Jefe del Gobier· no y á un Secretario de Estado, porque hncen uso de un derecho cons­tituciona l para objet.ar un proyecto'" A lo cual replicó El Tiempo: "Si í'e not'i atribuye haher hablado de delincuencia, nosotros no retrocede· mOR ... Hubo oelito conforme á la filo­sofía, porqu'e con ella los poderes pú. hlicos no matan sino corrigen ... Hubo delito cOllforme á la civilización ..• Hubo delit,o, ell fin, conforme á la República." Y termina: .. Sea enho­rahuena; levánteseles un monumento, aunque sea rle cadáveres." Este era f'1 mo(~(} como El Tiem­po trataba á un Magistrarlo tan puro y tan correcto corno el Sr. Mallarino, que quiso reul!ir ell torno suyo á los hombreil hiPII reputarlos de los parti­dos; ésta la "imparcialidad " y la "moderacióll" que prometió El Tiem­po en sus auroras; éste ~u carác­ter festivo. E ra a~í como cu mplía las promesa,;; púhl icas y sl,lemnes de la iniciación .. le su carrera. Y para ma: yor ahundamiellttl, se obserya que cuanclo hr.h!aba del ",lelito" rlel Sr. Malhrintl, creía El Tiempo em­plear Ul1 len guaje digno elel asunto y no discutir" sino á una altura mayor que la d~1 más alto perso­naje." Pasemos ahora á ver algullos ren­glones ell que, COII un "imperativo categórico," y en sólo dos frases, se echa á pasear la Historia de la huma­nid~ o y la legislación penal de las naClOnes: " l Por d6n le se sabe cuál ha sido la conciencia del género humano' i Pur la historia' La historia no lo es de la huml\ninacl, lo es ele sus 'verdu­gos. ~ Por los Oódig()s~ Lól humani. da,1 110 los ha h.ccho, si no que los ha sobrelleva,lo." Hé aquí una manera breve ele ta­jar las cu est ione>:, un muelo rápirlo d€} cortar el Iludo gordiano, un medio soberano de resolver los problemas filosóficOfl. En verdad, estas frases no hallarían hospitalirlad en una aca­oemia ele ciencias políticas; pero des­lumbrahan el eRpíritu de "un pueblo de rudimentaria y escasísima eouca­ción;" y los Recuaces, sin reflexionar, sin discutir, caíall de rodillas, con su­misión oriellt.al, al ver cómo resplan'. rlecía en el aire el ~Ifanje del Pro .. feta. Oontinuemos oyéndole: ,. La Nueva Gran-a,,{a ha (Iesaten­dido eRa falsa conciencia, y ohrando en ~onsonancia con la suya verdadera, ha adoptaclo el principio oe la huma­nidad, que la humanidad entera habría adoptarlo al haher siclo libre rlesde que lo hubiera sido." En ninguna parte explica el autor este intríngu­lis; pero habla con formal serenidad de " el fu ror demoníaco de los católi­cos ele especulación, que si Jesucristo volviese hoy al mundo, lo llevarían al patíbulo." Y para retocar su alegat~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. abolicionista tiene por ahí los siguien­tes tintes, que no simulan placideces oel alba: j, Cada uno está en su t.erreno, obe­deee á sus instintos, llena su nestino. Crear, luchar, esa es la viela del Par­t. ino Liheral; ceder cuando se encuen­tra débil, deshacer cuando ha recogi­oó fuerzas y resistir siempre, psa es la ,iel Conservaelor. Apenas es conce­bihle el ,igor retroacti,o de este Par­tido, que no tiene ímpetus ni arran­ques sino cuando obra oe para "atrás." Hahla todavía El Tiempo: "La mayoría conservadora de la Cámara ha respondido ... con el NO de su sistema, fundándose en la s~ 'de ilangre de los tartu fos, y dem(lstrá,ado­lo con el júbilo triunfal de los pon!ren­taj i stas." y añade estos rasgos: "Esta cuesti6n ha caracterizado á la Hctual Aominis­trnción ... El (Secretario) que 10 ha reelllplazado, hacienoo pie. en el ca­oal ::. o para saltar al Gohlerno, ha conquista,lo la impopularidao ele la pellú de muerte, y ha llevado esa im­popularidad á la Administración." Ya vemos c6mo trata al Sr. Malla­rino, y c6mo es calificada su Adminis­tración; vemos asimismo c6mo habla sohre el Partido Conservaelor (sobre ese Partido que hoy elehe honrm·se llevando una piedra al monumento). Veamos c6mo se trataba á los perio­distas de aquella época, cualldo se permitían nQ compartir el parecer ne ~u adversario: "j, Qué convicción, en efeefo, 1me­nen producir las lamentaciones de la prensa conservaoora, que parece creer que no tendría en qué empapar sus tipos ¡;;i consintiera en que no se de­rramase sangre ...... ; Jos ef'pantos de alo-unos capitalistas, que para asegu­ra~ caoa real suyo inmo]
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El Renacimiento - N. 7

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Boletín Militar del Sur - N. 22

Por: | Fecha: 29/03/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. r · tepfi b1ic& ·Número 22 B o -: ~ ~-_¡_ ·. T·· l 'NT .J ,.. 1 '· ~ . . ~ • .• · ;l, ~ _-.;.;...- - -A.. DE l~ R E DACOI Ó :r , á c.argo del J ef,. de la Sección d e la I ntendencia. Ü0LAJ30H : n o rR.E , .. - ~·-Los d efcn;:,D r es del G obiern o. PER M Ar . . NT -K ~ te pe ri ódico senüd de ór ~a no d e infc ·mac i ' n .¿ e todo lo re Ja ivo á la pre en te am paña , y e pub! i · ca. rá u t ambié n 1· s noti ia. s v~ nidus de otra Rcpú Liica que se rel a cion e n cq n ,¡ esta.d o de auer ra. .---· --- - ----.- ~ --- - -~ ---..-- Bol etín ~ l ~ · 1 ~ 1111tar ae ,· {1 ·, -. - - ----- ---. -. -"'---·-·- -- --- - - ·- - T eie ra- .a s . ci:d . T ·nn'ir:c,) b th,. Ma t·zo dP. HO .- PrPfec-i. o •• •• •• . Bug., 12 de ~h r zo Je "1.9 0 0 . .....-G ral. Velase ·.- l pi a l s.,.-P re!'ectos . . . . . . Tr : . ~ ·ri b ,· 1 ~t i ·n ·. , tel gr, 1a : ·' ~ o l edacl, 11 de .h. zo de 190 0. -~1lini s 1 ro Gue · r ru 1 Jefe C. y M .-.. AJ:t, oq u ia, ~i' nlima y Cauca.,.--Gral. M· rce l in o A rango.-..M an izáles . ~ ·! ~ e :~ n¡ u y b n 1·o ·e -y ":::1. t1 ,·f l... tor io · ~ · u : .1(,1.P. f u · z R ~ de mi mand o hov, n '"' l P 'H l t ') J1 aroa ~ o La " '~ )k to ·t r¡ n ..~!o ·obr,. e l en en i- .J facur a r.·vil v M. !li a r .----. Oñcia l N. 0 4. 7 .. A· . .....­Bl r-. . 13 de !Y arz, eh l~JOC . ,..-0 !··. ! . V ~ ! a· .,..- ( '6 - ¡;¡ u er: t ~ ·.---l t· .fr ct(::: d el D p Rri'HlJü J.t.') • • • . • . . .. ¡¡ Conp la. i o +r · ·el'l b l es i.l·ui lnte te il l eg ra m e.: ' ' Medellí n, 12 de •1a l' zo de l !:iOO .--J e C. y lVL '"" Bu g". Ta .·t a l ~ de 1 J, c:o 1Ti nicó 3 irec ta u ~nrte 1 GraL Di , ~o ro e n e l Gt'a l. · · o · : ··· ~ ,, ·· ·l ·i · ··· >:.t r - Tl' "f'" r • 1, t • ... • t • • " . \ ,. · .. ' ~ 1 ' ~ •• ' • rJ • ;o ' ~ ' • ·· i on~ ri ~:~. ·o rn ~l. u d a <·~ ;1 :: pol' . l bj.ll"t< ' h .n,uv 1 .l1n d1·) \"e :··¡, "./ ~,v .. n· , V uezo lan o ·; :·e to ­! l! nwron do.' cañoo e , · b uudRo · ' p arq11 e y !1: 1 ' · 0'1 1-t L . L ri Q·ar. t ?L :¡ ,D¡ l 1 , LU ~· r e j t~. ~·ci 0 ~. <) 1· 1 n e · d el . 1 ·¡ Gral. J e.- ú:· :&L i-\. ri a .. , bat.16 ·o t leta,m n · t e á los r e v 1ur; ÍOi1 ftrio . del .No rte el 'fo· 1 ' : ]1 a, eu L· F lor id a, d pu é de diez hor a~ ·i el ·ombate. N o t e n e rnos aún ci ~kdl e . , . !1 De S . :S . a tento P-en idor.- Po1· l J e. 1 • :fe O. M. el Sr1o. de Gbno .- .. A.lqj an-l ·e R e.·tr ·epo 1{-AuttcrJ ., t . Uampu~ano . ' i 1 ~1 A ' GE L~- . ~""A NCLJ~~ "'rE N TE. - - Att co . ,"B e .. ¡¡' n a id es. I r J efatu t'a C . y M.-Oficial, N . o 4796 .----. B uga;15 1 de Ma!·~o de 190 0 . ...--Srio . de I. P.-. Po payán .----. Pre· fec to s . ... . .. Gr al. V. lasco .----, 'l' úq ue rres. 1 1¡ ::Vle co 1 ~ pl ázco e u t r a. cri hir]e s ig u iente telegrama: :¡ !, '' C ar tago , 15 de ·wa,·zo rl e 1900 . ...--G l'a. l. J efe C. M . ...-B · ~ ga . ' lYl · -~ . gn t <, (~o m u n i .. ~ 1'0 '' 1· 11 ... el Co - 11 rn:·\n <1·n .te C·· ,·t.r () o c u 6 .Junt - d e 'fama. · !1 n ú., ·l e: ) U~ ~ le lü~ero e m . nte; f. u ei'Gn he · :¡ 1·i :lo..: do s de lo ' ¡) n e~t.r·o~ . d .,_ ,l dad0 l.VIa· ¡ JH!e l T) . · rro :~ · ; n ¡ dA ~_ p nict- i co $ Ch-0· 1 e o ~ ooE-·, y · i e~~ de lo .~ t n e wi g o~ . S e to ma· ! n)n h )s 10· uien te , e}env ... ntos : r ren l a ciu da d de Nó v ita . A .l M ayor Pal omin o le . h e exi9id o q 1e ap re­sure s u mar ·ha bá '1a Tado. ~' ) tado. ·-A u t ·e< ., B enav id e · . Prefectu ra Provin ci. ~LL ~ P ctsto,.Vt n 2: u e ~J UO. P á sen e al ·cfiúr Al calde Hun icip stud 1Hut e :Estu ardo .t'::u·e les. . JVLun. EL M. 8 ANOLE!ViEN'n ~ . .. A uttco., l\11 . H . Bena \ ·id (~ · . Ma) oría Ba tall ón H ese rva. ---... O fl cia l, N. e 8 ~ . -­Co manda nt e f: 1 ral.. J de E. M .- Túquen . Pa to . llonor dar a. l"t e ·in n ov- dad d e ] a :fu e r :r.::~ . Hasta. h oy Qábese q u e r e o]u cio ­nari os . no lum v uelto oeupm· B~l'baeo 1 y que é~tos , u f ri er o n di ~ y ·ei l aj .~ ~~ ~ ~ m u e r to~ y dí ez b e~id J! nat nra,l de - ~ ar1o. ·~-t. w,. · ct'l<-11 rt~ ·t,1 te vec i·~ 1'¡ no de }.' u l ·;;H1 y ? "l · tü:t d 0 l v _on ul c o­: lorn bia1. o rlc: se hi o·a r v ; . . A. . R . j P 1·eg·n1ta/ o 0 ll telaeión á l os m ovi- 1 mi ~nt os oeu i T~ iv¿ an ' ~h~ ~ n '1\d?án y pase de lo~ .. a, J}h.do . ..;OIOinb i nn os a e ·t e 11 t erri to ri o, cxr uso :-~1e <; onsta qtH~ ano­!¡ ·h e con1o á !i:l · s iet e empt' ~ · ··on to )o io s 1 : emigra los { r unü·se en l ~ plaz uel a de 1 'l'ul cáL,en d nde st 1 0 yo vi ' Hdo ·¡o q ue 11 oc1 rría. .t\llí apcu ·ccie:·ou ·on1o 20 lf i~t - 11 ]e - os r?~Htdos 1e rn~nhll . ...,:her con ~ull o 1¡ Vela, q t n en .. estaba a " -l ba llo, l o .h 1..,n1 a 11 q ue t r aj eron por In cal 1'"' de a 1·ás d? ·a­l jo ~1e de 1n rinicio es á la~ •(..: · lda. de-d ~s ;· s o ldado. . Ig 1ahneLt0 1 -nt1·e , o eml- 11 g r ad o s muchos soldados dA la ·guur nieió n il ecuator ia11a ·e e ' a p l · za ; y d spuéH ~le h abm·s e r e•Úlido m á. de cien !:; )lda -tO. · s e j¡ d ividieron do i hu p lazuela n dos ¡¡ p a rti d · , Pna -que . toÍn ó : par a la ca.lie 1. ·,~ de a trás , jrecció n á l a J o ya, y 1 o ­tra qr!e dirigióse para. 'l'aya. Todo esto ' úl tin1o s u ceaió á l a diez de 1a n oche más l.¡ ó m enos, y b oy se dice l_jUb li camentc en Tulcá.H ue tale¿, e mi g r ad os se e ncuentl'a n 11 y a en ·o! mb' a.. Lo expue ~o dijo ~~~· l,a v e r i ·~d, -H l > q t l , Be afnno y I'aLolfie .), :l ni' .an.Jo e...,ta d U d ~ cli. ,, r·ión eon ~1 S r. .: (h . .1 . .Y .A.y u J<:lD e que untori za. ~~ 't;,'T.A , . • ' . -' ·n..:·IUF:lW . ..- \ . ~)' !1 sl: ín f f¡!) \Yt . -"""" ·: Elié ce-r f) ayán y C. !. ./ :tdnn '·e . "r i ) :·
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El Tío Juan - N. 4

Por: | Fecha: 16/09/1896

AÑO I-SERIE La COLOJ::v1::S:C~ NUMERO 4.° - CONDICIONES: Este peri6dicó se pubHca los lu ­! les, miércoles y viernes de cada se~ mana. Pi:: " ' " '''irse desde cualquier núméfb;---¡.>... ---::..2 más series d~ 40 ejemplares cada ·'lma. • Se canjea con toda publicaciÓn peri6dica. uaa Contratada la. puh1icaci6n, no se devolverá el valor, aun cuando se retire 6 se suspenda. TODO rAGO ANTICIPADO. ADMINISTRACION GENERAl: • PRECIOS Suscripción por serie .••• $ 2 •• Número suelto . . . ..... -... 05 Comunicados, columna~_ 10 .: Anuncit>s, un centavo la palabra. Permanentes, precio convenciona1. Cuando se aparten de la forma or­dinaria, 15 centavos el centímetro de columna. Reclamos á dos ceno tavos la palabra . . , .;,' I PERIODICO INDUSTRIAL,LITERARIO y DZ}V ARIEDADE~ , Director, .rULlAN l?AEZ M. - Administrador, V ALENTIN ALDAN A Y M. Bogotá~ miérooles 16 de Septiernpre d.e ~896. Carrera 6.a, número 14:4 .... .-..-............... - Aparta.do de~s.r:e0$ ~ÚIl~er0432 . R l rS9;'J~~tteJegdñca , r JUPA~" .. _l~do 10 relativo á suscripciones, anuncios, comunicados, etc., está exclusivamente á cargo del Admi. nistrador, á quien debe dirigirse la correspondencia dd periódico. No se devuelven originales. THAT IS THE QUESTION EI.paupe~ismo no da tregu~ y el BA.~A.R .DEL ROSA.EIO no cesa de ve1).der sus mercaderías á más ' . , baJo precIO que el que ocaSIOnan pnnc~pal y costos. Fúndase esta inmensa ventaja para los consumidores en que el BAZAlt DEL ROSARIO tiene convenios espeClalf.S con las casas producto-ras, de Europa y.las compañías aseguradoras, que le permiten ofrecer sus artículos á precios excepcionalmente baratos. . Las novedades que diariamente tiene el Bazar á la venta, se deben á la escogencia que de ellas hace en Europa un socio de la casa conocedor' del buen gusto del sinnúmero de clientes que se ha granjeado este establ~cimientp comercial por las ventajas indisputables, eB-calidad y precio, de sus mercaderías. P-4 LIBÍlERIA COLO MB IAN A Crau1ord, Russell, l'ol!ock, A1-cher, Alma Tadema, NOnlla1l, lVotris.-Cuento3 en el mar. 1 tomo, rústica, -$ J-40. BOGOTÁ, OALLE 12, NÚMERO 178 Doyle (A. Canan).-La Guardia Blanca. No­vela histórica. 1 tomo, rüsticn, 'S 1-40. Vades ca""ms, c;gn"lll .. , .. , billere,., y los!oremB, I PARA LAg MERCEDE~ Papelería' de Sampel' Matiz, 2: Calle ReaL--Bogotá. I ' El U de los corrientes se 1'e_ Los pedidos que vengan acom­pañados de su valor y 10 por lOO para gastos, serán despachados á vuelta de correo. Si el valor del pedido 1)0 llega á $ 2 deben re­mitirse $ 0 - 20 para franqueo, etc. F,. Esta. ohra es una de las más notables pro­ducciones (le la literatura amena de los O,\.RRERA 6.", NÚMERO 320 'l'ALLER DE GRABA DO, m~ LAPIDAS y PLACAS .Estados Unidos. 1 tomo, rúslica, $ 1-4°· E tá ., 1 d ífi· PI 1 Hugo (Víctor).-Los Miserables. Magnífica -"S COfllISlOIHt( O para ven el' UI! luagn CO plano eye, edición american). 5 lomos, pasta, $ 22. P 3 Irilt1'fe (Tomás).-Fábulas literarias, coteja-das con el borrador original, con adición de :ieis -fábulas originales que faltan en las demás ediciones, y otras catorce de Fedro, traducidas por el mismo autor. 1 tomo, holandesa, $ 0-80. La Snge (A. R.)-Ristoria de ' Gil Elas de Santillana. Traducción del Padre Isla. l. DELICIAS AL PIE Las hallará completas si compra ell'enoll1brado calzado de los almacenes de AGUALA.RGA y Er, MONO. • Tan suav~, que es el exorcismo más efic!1z JOYAS FiNAS Allí míS;)lO se vende UlJa má'.. quina fotográfica y un rnicl'os­cópio. Aprovechad ja ocasión! 2-2 ~------------.-------------~ ENs;~CKR~ACION de Ricardo Ro , ,am H)B de l~ Concepción, nú- _ mero 235· . P-3 1 e el. A 1 & tomo, lela, $ 4· Libros de la asa e ppedon Mllyne Reid (El Capitán). - La casa en el de- C. ° de iVueva York, de la cual ~o- sierto. Aventuras de una familia perdida , . e 1 b' en las soledades de ra América del Norle. callos. ~~ PARA USO EN LAS FAMILIAS Tan fino, que es solicitado no sólo~" laS damas de buen Cepillo~ finísimos para los dientes y para mas LlOlCOS agentes en o om la: . Traducción de Simón Camacho y Anto. LA CIENCIA '1 nio Rernández, 'con doce lám inas. 1 tome, tono, sino pOl' las elegante3 ' d~ ult1:It~,.,,:. . las manos, a nuestra marca. PUESTA AL ALCANCE D~ LOS NIÑOS lela, $ 3-60 ; rústica, $ 1-4°· Tan fuerte, qúe un solo par(l",~.otal"í\2..,p~l'a dar una vuelta al la ~!~~~ra([entíti.'iCO. Limpia y conserva /lfulock (Señorita).-EI Caballero D. Juan CtirtiUas científicas. Pasta holandesa. '). I H.al·ifaX'. Traducción de F. Ramí.,"z. 1 jll.undo. ""- o>. Polvos dentífricos patricios. T" " • , <'> ma novedad Inglesa. . \... ~::....~_~..;;. ...... ;:..:.~_ . tQ!;l]o r-\stica. Ji I-AO. Agrie;l!";:;; ciei,tí!i;~~-Principios .' ,e;,ta- Mzeñoz y Castro (Mannel)~nosa1. re-les, por N. T. 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Despacho escrupulosb y rápido de fórmulas á precios sumamente módicos, Establecimiento. Se envían las fórmulas y demás pedidos á domicilio si así lo exige el interesado. Horas de despacho: desde las seis de la mañana hasta las diez de la noche, inclusive los días feriados. .--{ garnntiz3UO pOI' el dueño ~ 01 6-4 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 14 EL TIO JUAN EL TIO JUAN de tanto movimiento militar, es de aquella nota melancólica de la OM1. mismo que publicar en un perilÍdi. l\'lielltnls palos van y vienen. LA WUACION Deploramos el que, una que otra vez, estemos obligados á ---------'. dejar la fiesta y broma que 'de- ----- ~éai1i~.~an peculiaridad d~ la Índole de~TÍ-..o......, JUA.N.. , para ojo rnarnos serios y-C~J!Juntos, ! omo la situación del pai§- lo demanda. Hoy, por ejemplo, . s día de sermón; pero para ' .0 echar á perder nuestra apa­. 'bilidad, dejamos hablar, res· , ecto de las necesidades de " ..' . , nuestra tIerra, a otros peno- [icos. Dice El Pl'017Z0t01' de Ba­/ ranquilla, refiriéndose á nues'::" ¡¡ro Congreso: sospecharse que la guerra princ,i- za cubana, que llega al alma, 'con co, que no es ele política, y cuyo oh. piará sus ' estragos de uno á .otro su ritmo triste como el ¡ay! de las jeto es amenizar algo la vida inte. momento. Pero, ¿ el enemigo dónde palmeras de la Isla, y con sus estro. lectnal, UI10S retratos instantáneos está? No lo vemos, y como no te- fas de senóllo corte, pero impreg. t.rabajarlos por un colaborador q!le nemos prensa imparcial que lo de- nadas de amargura y como bañadas ha de estar de continuo aY'ldando en nuncie, vivimos" en el Limbo y de lágrimas. Las fibras más sensibles este movimiento perpetuo de la re. mientras tanto somos presa de la del coraz,ín se estr..emecen entonces, dacción de un periódico. En las Ca?'. miseria que yá toca a, nuestras y vi·ene á la memoria la clamorosa ta8 figuró mi yo polítiuo; hoy tra. endecha de Gutiérrez Nájera : baja mi yo social. Tercero: no acoso puertas. I . I ¿ Qué Uen8it esas notas t ¿pOI' qné llomnf tumbro evadir responsabilidades, sé Los agricu tores y Joma eros por P '1' 1 . responder (le ITII'S actos en t.odo cam. bl . al'ecen • "s>ones q"e se a eJan . ... casualidad salen á las po aClOnes, SUIY/íos a1nantes q"e piedad implol'an po; de modo que soy responsable y cüando llegan á la ciudad es con Y -como ni110s h1térfanos se q1tejan. por la publicación de las Siluetas. susto y procurando despacharse li- Luégo Terpsícore volvió á ~er la Pero, para que veas CÓmO entiendo gero antes de ir á visitar la cárcel ó reina; un cortejo de danzantes la la tarea de la prensa en nuestro el cuartel. Los artefactos que pro- siguió y la alegre musa derramó á I país, te digo: escriba alguno el re . duce la gente de los campos es granel la animación y In. alegría. Y verso de la medalla, es decir, el otro muy 'en pequeño, y, en cambio, son después de bailar nlia gran cuadri. lado de la silueta de Carlos Oalde. muy pocos y casi ningunos los ar- lla adornada de artísticas fioritu1'as; rón ó de cualql1iern, otra persona, y tículos de que se provee. Cada cual una danza revolucionaria y varias con gusto la pnblico, siempre que compra poco menos de lo necesario tandas de vabes, hubo un oportuno cumpla estas condiciones: brevedad, para atender á su subsistencia, y intermezzo bucólico para tomar el gracia, cultura, benevolencia corte. los que tienen algunas facilidades espléndido lunch, que se sirvió ¡¡ sana y tono alegre y bromista, es para el sustento, han rebajado sus pleno sol, y, como final, . se puso el decir, que Sil halle de acuerdo con Los asuntos relacionados con la compras de provisiones á la mitad; tres, aquel animado juego lleno de la índole de EL Tío JUAN ... . .. Quie. dacienda pública, como son 103 por consiguiente, los comerciantes simholismo que parece decir iÍ hom. res así? puestos y las rentas nacionales, de menor cuantía no tienen casi ex- bres y mujeres: á buscar compañe. -Pues, homhre: yá q11e !JO pue. Llgunos de éstos monopolizados pendio, y resulta que los de mayor rO,!lO os qlleJéi~ de tr'es en el juego dé borrarse lo publicado, del mal el ,;omo recurso fiscal, demandan sin cuantía son los que sufren las con- de la existencia! . meuos: convengo en lo que propo. tuda la preferencia ele legisladores secuencias de esta tremenda crisis-, En fin, día clásico y feliz! Ama. nes. interesados en la buena marcha de porque no tienen facilidades para la tal' el tiempo! se dijeron unos y otros. y se dcspidí6. Hoy damos aviso 'a administración. realización de sus mercancías. La dicha ,e encargó de dar mnerte de esta conversaci6n á uuestros lec. El sistema de calcular los gastos El comercio, hoy, es una de las á ese caballero siempre viejo y siem. ·tores. VenO'a pronto In contra.silueta. :>ntes que las rentas para luégo . pre joven; y cuando todos, cegados " 'C mayores aventuras: es mejor ser 1 I ' b ' 1 . ouscar á todo trance de dónde sa- " por a a egna, a rImos os oJos, nos Fiesta celeste. concertado para ganar un suelOO , 1 h ~ar lo necesario para sufragar di· encontramos con .a noc e que ve. Así podría llamarse la (Ine tuvo Y no contraer compromisos como , , " 'd d chos gastos, es un sistema absurdo. ma a pRSOS glgan.escoR, segm a e lnoaar el día 8 de los corrientes en el Una Nación no debe gastar más comerciante. su COl' te'Jo "o e sQm b ras. L as h oras d e Oolegio de la Presentación. Cincuen. d d d La competencia, como es natural, placer habían muerto, pero deJ'aban . 'd bl de lo que pue e, a. os sus recur- ha surgido, y cada día toma mayo- en no~otrOR la valiosa herencia de ta mñas que con sus vestl os an" sos, porque de otro m, odo arrlll'n,a res proporciones en toda la l'm ea, un Ilrato recuerdo. cos y sus cirios encendidos eran , 1 . d d t I l'queza "' como ciucuenta áUoo'eles, se acercaron Bogot6 es 1111 bosque; palos y ho. jaR, nada lIlás se ve en la ciudad. De las hojas '111blámoR .e;;,,:~_"P:!tro primer número; hoy '-.,-,,,,,-"'''':i de los palos. Los tener.'lOS para el telé. grafo, para el teléfonn, para los fa. roleR de gas, para J:. 1 uz eléctrica, para los andamios. Puede decirse que Bogotá es un andamio grande. Va uno por la calle, distraído, abo s,orto, en el pensamiento constante oe como hace para pagar serenos y alumbrado, y ...... tas ! se apachurró las narices contra el palo que sostie. ne el faro eléctrico; va ubo en tran. vía, y asoma la cabeza para atisbar si la calle está libre de acreedores, y ...... tum ! se estrelló la figura con. tra el palo de un andamio. Esto, aparte de las ventanas arrodilladas, que son una bendita comodidad! Y lo peor del cuento es que la mayor parte de estos palos, cuesta a I Teso. ro público diez pesos, por lo menos, y ha ~ielo motivo de un pequeño coutrato. i Por qué, siquiera en el centro de la ciudad, donde llts calles son tan estrechas y vamos con tállta incomo. didad, )' donde y{¡ existen edificios altos y durables, no se enclava en el muro un sostén de hierro, que pue. dE' ser hasta en la forma de un bra. zo, para que se vea artístico, con sus respectivos soportes y aisladores para alambres ele telégrafos y telé. fonos y para faroles de gas y focos el~ct~icos1 S~ponen;t0s. que esto ven· dna a ser mas eCODomICO, más dura. dero, más elegante, y, sobre todo, pa. a os CIU a anos yago a a r 'siendo muy pocos los que de ella Momentos más tarde los coches, ría mayor espacio á nuestras calles. - 'bl' por primera vez á la santa mesa. pu Ica. derívan provecho. semeJ'antes á Jos neO'"ros anillos de l' D' d t S· h t 'd Parecía que allí se asistía á os In· Igno e con arse • . l..ne ay para en el' mas e un ft\ntástica serpiente, desfilaban con I ~.V.U.1.1.l.S t ro en E u ropa, como en an- os rapidez unos tras otros" sobre las visibles desposorios da aquella~ ba . Aunque no es extraño en quien anten.o res, supn'ma1nse o s que no SUELTOS arenas tristes" del cami no. Poco á mas inocentes, puras como las nu es lo hizo, ni escasea entre nosotros, sean a b so I utamente t1ecesan.o s. N o Paseo poco se iban desvaneciendo las á"O'ui. de incienso, con el Eterno Esposo creemos di!~! no de contarse al públi. es J. usto que Ia s escue1 a s pu'b l'l cas . • las, los torreones, los sátiroR y las de Qlas' sagraId Cas' vI írgenes. . co este episodio: toc6 al J'oven Julio e te, n cuas!. a b an d onad as y se ten- esfin"O'eR que dibuJ'aban en el ocaso lIl.e ra e le od queI sifie mpre que Ribón, en uno de eRtos días, condu. .O'an legiones de Enviados en e l C'X- las nubes teñidas de oro; cayó el eds as mI Lña's recL ueI r ,en. a e1s ta pasa. cir el tren de la Sabana, no como a, a "aJar a O llltlmo (e sus co. que sea conductor fijo, sino ocasio. tranjero qu.e-~O-Ó . [.Ún prove- sombrío manto de la nocbe y á poco razones, Tos encuentren tan sencillos nalmente, no sabemos por qué cir. cho dejan al país. La algl'lcUfbu fur mil confusos rumores y las luces y tan puros, como al recibir por pri. cunstancias. Al terminar el viaje carcce por su parte de os razo eléctricas qu.e,brillahan en lo obsc.u. mera ve? la .oanta. hostl·a. I 1 y de los dineros que a b sorb e e I .. ro co~)uc1ernagas, nos anull.ela. . . ~ o, ballló en uno '(e os carr ORo un1 '1g·1u aro .,. D b ¡:l' d o.SlQJllera...se 'b 1 J . nie bastante reph1to "e .,1 et,,~ eJercito.. e. edmcI)sGPebr.fu"l U'I' IJ 7.1>.; 1)'" , ' • ¡ ~ ,1)1 q118 eBti, ,UIlOH (¡ aH pW'J'tas e! lR'G8, .Ie "ICl·C'.do ".', l/lO . ; 1 OS d' ',n) <'o' llU' que la CienCia e o l'" C."')'J~ 1;" ,.~ l. '" rtl1' .,lev ' Boo·o!.{¡ la vetus ·1' capit.o~" en do.u.! .;' < I ~. , e ,'(~':' 1 n.. l~ '_. el'" . . u , ,. ¡, " .. ' . . _1" , "" e"~ '. ~ I· I ,lO J' ' l. . 1 '. d" .J Mu\ 1)t¡n1ll'bw nos p"l'Be~ la .Hlp,a IIJuh,·m e d¡rl[. '1~''1.1\l." etc. lIlrjJ(,C 1, Of'J1.cm ;¡lm.(i!. e en saL ... , .<., "¡. J 1 ... .', ).\ I (,t .. es e a ' l~ to V 6 ('1'1.]1, " '. 1..('1J.., 'I . l ' el d ' • ti' 1 '" 1 11 .. < • 1 ,. t;" " .. ' ,. ,. .¡ . I ¡ ..... 6...' I t1e lIt ~, lllllCJlia¡(lf,., b .. 'l·.Cer j q\j".: S~ ', \ü!H, tan Q 1 superfh . . " ;'0; " ' ; l . l. t.n..10 d e. r¡ lI.~it(lr, .",1(' ~s" puein;as que tie ltag::.n, sera prefen. I á qUIen penell eGÍa tal Iortuna, y hiciera lln-,l'~fñcular, con sac:l,ficl~ arrojábamos "á las tinieblas ,exte: Cuestión gríngola. da no sólo la que represente menor quien, á su vell, se manejó con la e~. de su credlto, por ostentaclOn o riores," el pesar, la melanco]¡a, el gasto para el - · ... 'esoro, sino también pléndida generosidad de un caballeo complacencia. recuerdo amargo y la atormentado. Al diablo con la llamarada que la que dé O'arantías de que se haga ro. ReferimoR IlstO, por estar en Disminuyendo los gastos podrán ra idea del porvenir, esas flores en. han levantado las Siluetas Pa?'la. más pront.~ y de que verdaderamen. tiempo de l,illete' ...... f,\lsificados. rebajarse ó suprimirse aJgunas con· fermas del alma. menta?,ias! ...... i Pues no ba llegado te se haga; no v!.ya {¡ suceder que, tribuciones. La carestía de los ar- La corte en el campo. POI' lámpa. 1rI su!furación hasta el punto de una vez empezada, nos qnedemos "tículos de primera necesidad se está ras, los rayos del sol; por alfombras, amenazar al infeliz Tío JUAN con sin la. una y sin la oLra. h¡;ciendo sentir en todo el país. La la grama verde; por plafond, el la supresión elel subsidio de sus ami. prensd. d"Bogotá ha clamado y horizol;te; por cartillas,. las ramas gos naturales? clama por el aire, precio de la car- de los a~boles, por aba meas I~s ~las --Pero homhre, i qué tienen las ne, y de otros puntos de la Repú- de la br;sa, y por general obJetIVO, Siluetas? decíamos á un amigo de blica hemos visto quejas parccidas. la ~I~gna. El contento en todos los todo nuestro cariño, en cuya since. No hay, pues, exageración en ele- e~plrltuR, el amor en las alll:a~ ar- ridad confi::l.tnoR, y que !Jos regai'íó cir que se camina hacia la miseria ~I;elltes, y ~os corazones, de VICJOS y duro y parejo. detrás de la miseria está el cri- Jovenes latiendo al. Ulllsono por el -Pue~ han hecho mala Impre. ym eno placer; en fin, la vlda. sión en tus amigos personales J~ . po. El día en que nuestro úníco ar- Hé aquí el problema que el apre. líticos, dos de ellas: las de Holguín ciable caballero D. Julio J. Dupuy y Calderón. . tículo de exportación de algún va- resolvió aque I dl' a. Quisieron éI y - P ero Ia d e H o1 g uín qué dice no 10r, el café, caiga como han caído "d . (, 1 su distmgm a Reñora obseqlllar ,1 aceptab e1 que es un cachaco deci. otros artículos, ese día nos encon-, . 1 I I buen numero de sus allngos, en a dor, sabroso y a egre, hasta en as tra~emos en presencia de graves hermosa y pintoresca posesilÍn de Cámaras, qne es elegante y simpáti. dificultades, no fáciles de remediar. Sant.a Ana, con una fiesta origirial, ca, qne tiene suavidad en su porte y Se comprende que nuestros es- elegante y marcada cou ese se1]o sal en la dicción, y que hace conc\l. tadistas se preocupen poco de esas proverbial de cultura, refinamiento nir estas dotes á sus juegos políti. pequeñeccs, engolfados como se les y galanterín. que ellos saben impri. cos ..... . ve en resolver la cuadratura de una mir á todo aquello en que toman --Que pase la de Holguín! me política descosida como la que hace parte. dijo el amigo, después de reflexionar algunos años hilvanan; pero no se A eso del medio día, después de unos instantes, y con el aire de reso. debe olvidar lo que el doctor R. bailar un vibrante y arrebatador pa. lucitill que d-ebi6 de tener César N úñez decía en El POI'VC1tt"1' de silla, ejecutado á maravilla por la cualldo dijo su .Alea jactce cst! ...... Cartagena, poco antes de morir, orquesta Morales Pino, esa deliciosa Pero la de Calderón no la acepta. eSto es: que "la Regeneración ocu- Estudiantina colombiana, la concu. mOR, y ])1\1('ho menos á t.i ..... . pada únicamente en la labor pasi- rrencia, fest.iva y llena de entllsias. --Y por (jllé esa especialidad para va de prevenir revueltas, quedará mo, se encaminIÍ al lugar qn8 con mí? reducida á la categoría de ilustre gusto de verdaderos ~rtistas habían ·-Porque tlí escribiste las CaTt(~S momia política, si no demuestra escogido los anfitrioües para servir Políticas, y en ellas baces de Carlos que además de la estabilidad es el de comedor. Allí, bajo protector9,s Oalder,ín una silueta muy diferente progreso." toldas blancas, que fingían las alas de la que publica EL 'l'ío JUAN. abiertas de inmensa paloma, se sir. --Yá que IllQ llamas á lo serio, y dice El Motor de Honda: vió el más suculento oe los almuel" tono que quiero evitar cuanto me Desde hace algún tiempo el Co­mercio de esta plaza viene resintién­dose notablemente. El malestar es . - te: estamos en plena guerra é p~p.~;.¡,ll, sin tener otro enemigo ' ... J: el fantas(Da revolucionario. Es­t~ fantasma tiene origen en la acti­tud que el Gobierno ha tomado con ~ enorme cantidad de elementos de p'uérra que diariamente introduce, con el reclutamiento de gentes la­l- 'egas y con el constante movi- 1 'n\p de tropas. 'Todos vivimos sobrecogidos, y como no nos explicamos la causa zas. Entonces, entre copa y copa de sea posible f1.1 periódico, pues de ha. vino, se pudieron oír los brindi~ re. blar en serio me lo hubieran sus. bosantes de frangneza y espirituali. pendido yá las tres veces (lue ha sa·. dad de los señores Urihe Uribe, Du. lido, te diré: Primero: las Sil1wtas puy, Silva Gandolphi, Bar6n de la ParlarnentaTias no 'son mías, son Barre y otros. Cruzábanse las mira. ele uno ele los principales colabora. das de amistad y de amor, jugaban dores de EL Tío JUAN, cuyos escri. en todos los labios las sonrisas, se tos acepto por tener índole seme. escuchaball el cuarteto alegrfl, la jante á la de los míos y á la que quintilla doliente, la agudeza sin quiero dar al peri6dico ..... . 1Jam que hiel, la carcajada, el galanteo, el re. no se ase8ine al Con[J1'eso, como dijo proche amoroso, la declaración que D. Mariano Ospina. Segundo: en se murmura sotio voce, y alegrándo. las Ca?'tas Polítioas escribí yo, 6 lo todo, y asordando todos los ru. procuré hacerlo, la Historia del mores, el chispeante bambuco na. País en sus tiempos de Regenera. cional, el cleciclor pasillo, y luégo ción; y escribir Historia 110 es lo Soria. El martes últÍlLIO Epaminondas, que no sahe cómo distraer á su clien. tela, hizo de modo qne el célebre prestidigitador Soria, que actual. mente se halla en esta ciudad, eje. cutara algunas ele sus suertes en pre. sencia de las perRonas que estaban en el establecimieuto. Entre éstas tuvimos el gusto de encontrarnos y nos es muy~ placen. tero manifestar que quedamos muy complacidos de lo que allí vimos, pues el señor Soria trabaja con tal limpieza, que él podría ser un auxi. liar de gran valía en un día de elec. ciones para Gobiernos que no se hallaran bien seguros de la UNIFOR. MIDAD de la opinión. Dos fueron las suertes que ejecu. tó el prestidigit.ador: en la primera se pasó entero un huevo que fue examinado por los asistentes y luégo se sac,) de la boca cuatro q He fueron partidos y estaban perfectamente buenos; después se comi6 una pipa de fumar, encendida, y tras de ha. berle examinado la boca y haber too m11<10 agua, arrojaba humo y cbis. paso Digau, á ver: i Por fin qué quieren hacer, Qué quieren hacer por fin : Corral, potrero ó jardín, Del Parque de Santander? Si jardín, faltan las flores, y los pastos, Ri potrero; Si corral, sobra un letrero, Un letrero, sí, señores ...... Oonsejo á los electores Parece ser, pues prohíbe Quien ese letrero escribe, " El entra?' con ctnimales." En cuántos otros corrales Faltan tales probibiciones! En las urnas de eleociones Cómo fueran de cabales 1 Excusa. El doctor .Anihal Galindo,. por consideracióu {, sn (juebrantada sa. lud, se excmt) de aceptar el cargo de lI'Iagist rado de la Corte Suprema, puesto para que fue nombrado por muerte dei Magistrado doctor Ca. rrales. Un solo suelto. COT?'espondemos COIl agradecimien. to al galante sall1do que nos han di­rigido El CO?'?'co, El Telegmma, La M~¿jM', Los 7'ierr.pos, La Sanción y La Asociaoión, nnestro;; hermanos de Bogotá. Para ellos, como para Los Heohos y demás peri6dicos de la capital, ha ido nuestro canje. Bienvenida.-La enviamos muy at.enta al señor D. Juan Gtirnez Daza, recién llegado de Ri01acha, y á los señores D. Hernando Holguín y D. Antonio Gómez Restrepo, yá de re. greso de Europa. D~funoiones.-Presentamos nues. tro pésame á las familias de los se. ñores Manuel Salgado, Severo Gon. zález, Cleónico Benltez y Eduardo Zerdr., Administrador del cemen.te. rio, y á la de la señora EncarnaCIón Torres, de Chiquinquir6, muertos en 10s últimos días. Saludamos á IlUestro querido y buen amigo D. Eusebio Roa Galin. do recientemeute venido de Oriente de'BoY11cá. Tenga feliz permanencia en Bogotá . . Telegmma. - Honda, 12 de Septiembre de 1896. Vapor Ambalem(~ subió Salto hoy felizmente. Atracó Arrancapll1mas á la una. Agencia.-En Honda han esta. blecido una de comisiones los seño. res Francisco OIarte Camacho y Jorge N. Soto. Novena.-La de Nuestra Señora de las Mercedes principió hoy, y las I coosiauientes fiestas de iglesia tienen lugar" en la. Catedral, en la Capilla <. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. d~l Rosario y templo de San Fran. CISCO. Contrabando. En Santamarta acaba de ser des. cubierto y aprehendido un conside. rabie contrabando de cigarrillos, Ile. vado á aquella ciudad en la goleta Eulalia, procedente de Rioh¡;lcha. Vapor salvado. Al fin los esfuerzos del remolca. dor Menil venido ele los Estados Unidos, no han sido inútiles: el va. por Mar7comannicG se ha salvado, y se halla en Puerto Colombia con su salvador. Se nos informa que el Mar. 7comannia ba sufrido poco; con ex. cepcióp del timón que lo tiene da. ñado, el casco y sus aparejos se ha. llan en estado de servicio. Hechas las reparaciones más indispensables, el vapor dicho emprenderá su viaje de retorno. Felicitamos á los activos Agentes de la Compañía á que pero tenece el vapor salvado, señores Flohr & Price y á los que han efec, tuado el salvamento. Un jornalero se pasa Jiez horas cavando tierra y sólo gana 1)0 ceno tavos. Eso es trahajo. U l\ periodista gasta diariamente la salud de su cuerpo y las energías de su espíritu, y solo gana ...... una becíl en la Central. Esto se llama ... centralismo. Cámaras. EL TIO JUAN lOS AHORROS DE. MI MUJER -N o saben aritmética, jamás po­drán entenderla; el número no se ha hech~ para hallarse bien entre esas hermosas cabecitas que chis­pon'otean como una hornaza. Esto me decía Ricardo, amigo mío, recién casado con una de las más célebres mujeres de Bogotá, Día 10.-En el Senado: es ley siempre que se quejaba de la nin­de Colombia la que organiza los guna economía que había en su trabajos de mejora del Alto Mag. hogar, queja única, eso sí, que él dalena y destina para ello una can. tenía contra su matrimonio. tidad. Ingresó como Senador su. Yo contradecía, por sistema y p~enzte brort Panamá, el señor Anto. muy levemente, aquella afirmación mo u le a. . b' lE n 1a Ca' mara: m. greso' 1e sen~ o r de, q. ue las ImUjedres no' sa en, ar'I1t - Juan B. Carreña, como Represen .. mettca, ? ~?ntra eCla aSI, so o tante suplente por Santander. Se por la conVlCClon ,q~e tengo ?e q~e nofnbró una comisión, de 9 miem. en quer~llas domesticas. el SIlencIO bros, para estudiar la tarifa de es el mejor de lo: conseJo.s. . Aduanas, y proponer S\l reforma. -Pues, .no s.enor, , repltcaba . RI­Esta comisión, nombrada por el Pre. cardo: mi mUJer, ya lo has VI~~O, sidente de la Cámara, Re formó así: es buena como una santa, su caflno por Antioquia, Ferrer (Julio); Bo. hacia mí tiene arrullos tan tiernos, lívar, Jim~nez; Boyacú, Ayala; y, sobre todo, es tan amable, tan es­Cauea, Martínez; Cundinamarca, piri1:ual. ... Otro incendj.o. Cuervo Márquez (Rufillo); Magda. -Es cierto, Ricardo: debes es­lena, Noguera; Prwamá, Sarria; tar orgulloso de tu mujer, satisfecho Hemos averiguado lo que baya SantaulIeY, González ; y 'rolima, Oro de la elección que has hecho, eres de cierto en la not.icia que dimos, tiz Durán. Pasaron en tercer debate un hombre feliz .... referente al incendio de la fábrica y al Senado, lo~ proyec~os de ley -Pero aquel gé1star, aquel gas. del General D. Florentino Manja. que auxilian á las víctImas de l'OB tar continuo y sin cálculo! insistía rrés, y ha sido, por desgracia, confir. incendio:~ J~ Plll:i~caci6n ($ 50,000), Ricardo. Figúrate que compra todQ mada; sólo que el siniestro ocurrió y de CblqulllqUlr.,:'t ($ 25,000) .. Lle. por mayor, porque, según ella, todo en Sitionuevo y no en Remolino. góse la hora senalada para dlsc? sale más barato. Si necesita una Los detalles que bemos podido oh. tir e!l segundo ~ debat~,. y con aSIS. vara de cinta, conlpra una 'Caja; tener de persona que presenció los ten0la del senor MIl1lstro de Ha. para um! sombrilla compr:!. una hechos, son los sigu,ientes : cienda, e~ proye?to de ley" so~r~ docena', el mercad~ no cabe en la El domingo 16, como á las 7 ele derogatol'l!l del Impuesto del cafe, d t a hoy un la noche, se declaró el fllego, debido sustituído por la minoría de la Co. lespe~sa, y nNues ra ca.s d es b 'a en al descuido de uno de los empleados .mI.S.IO , U que 1o es t u d'Ió e' I.I I f armo' so- a macen.. . .. unca pil e 'red aJ de la fábrica, y en pocas boras devo. bre él, con el de ley "por la cual los precIOS, porque o consl era ró totalmente el edificio donde esta. se autorizit al Poder Ejecutivo para desdo~oso, y desea comprar todo ban montados los aparatos de desti. e cuando lo Crea conveniente ó lo bOl1lto que ve en los almacenes laci6n. Los demás edificios nuevos, ~u ~olicite el Consejo de Estado, de Bogotá ... : Billetes de Loterí~ techados de teja, pertenecientes al. pueda suprimir ó disminuír tal im. compra para todos los de la casa. novia, fundado en esas comodida­des y ese lujo .... Por mi parte, tú lo sabes, no me llevé clavo, porque jamás pensé en las riquezas de mi mujer. -Es verdad, Ricardo, es ver­dad ... . -Pero, si por ese lado no llevé clavo, sí he tropezado con el incon­veniente de que mi mujer, acos­tumbrada como estaba á las como­didades, atendida, consentida, mi­mada en su casa, sin haber com­prado jamás un alfiler sino en com­pañía de su' madre que le daba gusto en sus menores caprichos, hija de un notable comerciante, que, naturalmente, hacía todos sus negocios por mayor, ha quedado con el resabio de Creer que es rica, que puede seguir gastando como en su casa, y nadie la convencerá de que hoy no es dueña de los $ 80 ó $ roo,ooo de su señor pa­dre, sino de modestos $ ro,ooo, que apenas alcanzan hoy para lle­var vida económica y sencilla .... Ay del que le vaya con que debe­mos gastar menos! .... Yo, menos que nadie, puedo tocar el asunto .. , Prefiero seguir trabajando como hasta hoy .. , . El día en que haya acabado el capital de mi mujer, seré yó el dueño de lo que tenga­mos, y entonces podré hablar de ahorros, de economías .... - Entonces será yá tarde, Ricar­do .... Entonces, lo que hoyes ca­pricho pasajero, será costumbre in­veterada, difícil de desarraigar; se 'habrán contraído hábitos de te es, de reuniones, de boato, y tal vez ni tú mismo pod rás acomodarte yá á que no haya todas esas cosas ... . Es mejor desde ahora destruír el mal con tino, con perspicacia, con cariñoso talento, con ese prestigio que un hombre inteligente como tú adquiere sobre la mujer que lo ama, puedes sugerir á tu esposa la prác­tica del ahorro .... Sabes que me viene una idea? , -Cuál? -Inspírale á tu mujer la idea de comprar alguna finca, un campo, una casita, una quinta ..... . 15 ---..:Cómo ! no vamos al té ? -Nó, querido, me dijo. Esta n?- che ...... esta noche ...... no va-mos. _____ Deseo hablarte: que· rrás oírme? -De mil amores, mujercita mía, exclamé. Estoy á tus órdenes! -No tienes qué hacer, v -Nada, hija, nada ___ .. _ : -----'-. -Entonces, ven acá! y me lle-vó cerca de la cuna del. niño. Ha­llábase como azorada, su voz era trémula, no sabía cómo empezar la conversación. Al fin, haciendo un esfuerzo, y abruptamente, me dijo: -Perdona que te hable de co­sas que no entiendo: cuánto es lo que recibiste de mi padre, como dote mío? Yo saqué los libros y le señalé la partida: -Ntleve mil trescientos cuaren­ta y cinco pesos, leyó. -¿ y has llevado la cuenta de lo que me has dado? -Sí: aquí está la lista de tus gastos, y aquí los de la casa. . -En unaño._ .. _. Jesús! ex­clamó al"ver las partidas. Tres mil doscientos cincuenta y tres pesos, setentacentavos •• ,"" He sido una loca .• _ • • Perdóname! Me corre­giré! me dijo con resolución. Como única respuesta, besé aque-lla cabeza adorable. • -Quiero, agregó después de al­gunos momentos de silencio, quier~ ahorrar algo de mis gastos, para mi hijo. He visto ,unos anu~cios de venta de unos lotes de tierra en Chapinero, pagables por mensuali­dades, en cuotas pequeñas, y deseo comprar uno ó dos para ese ange­lito, pero ha de ser de ~horros que habré de hacer en cIerto gasto mío ..... _ Ahorros míos, única­mente míos, lo oyes? -Si soy todo oídos, mujercita adorable! le dije estrechándola en mis brazos. Magnífica . idea! yo también me pondré á ahorrar para el chiquitín .. .. General Manjarrés, lo' mismo que la puesto." los esposos, el niñ.o, .la ama, el mu­fábrica recién construída de: señor Día H.-En el Senado: eu t.er. chacha y las sirvientas .... Yo, Dolcey Rosales, que también es de cer debate se aprobaron y son leyes hombre de trabajo toda mi vida, tejado y contigua al edificio incen. las siO'uientes: la que sustituyeel entregado á mis libros, á mi oficina, diado, no snfrieron nada. Se calcula artícl~lo 205 de la Constituci6n; la á mis quehaceres, ando á diario que la pérdida es de poco máN de de bonores al sabio Caldas, que oro ahora en tees y en reuniones case­seis mil pesos, y no ha habido des- dena erigirle estatua en Popayán; ras, que, si modestas, inocentes y gracia alguna que laii1entar. El Ad. la que auxilia con $ 15,000 la ca. agradables, no por · €SO dejan de ministradol' contratista para la di. nalización del caño de Barra-nquilla; quitarme mu'cho tiempo y ocasio­rección del Establecimiento det Qe. y la del crédito de $ 10,000 á favor nar e muchos gastos ..• ' l:..;. ..._ ....::.....;;. _. ....,;;¡¡. .n: :.;e;or;.a~l,. .e ~s;...;;.e;l"..;c:.o;.n;:.;o.;c:;i;.d;;.;o;;.,.".y¡,.,..;a;. f.a: :;;l. n.~ a"d"~o,...I:.i:".;..~~·, ...._'~ Le~IOl¡¡S Ei>ta ~ " - Ricard: llorámos. . .. Desde entonces mi mujer ahorra, y yo he vuelto con formalidad á mis trabajos. Con sus ahorros ha pagado cinco mensua­lidades de un lote de los que ven-o de el señor Murat Romero, Bazar Veracruz, número 25, de las I2 m. á las 4 p. m. y de propiedad del señor Antonio Izquierdo en Chapinero, y en él se está constru­yendo una quinta muy graciosa y muy cuca, de que es dueño el niño. Cuando él tenga seis años, yá po­drá ir á pasear su propiedad .... - Que deberá á tu talento1'y á la ternura maternal, le dije. -y á ti, me replicó, á ti, que supiste darme un consejo. . -Pues vaya! me alegro .... SI­quiera me tocó algo en la fiesta! J. P. M. COJ>I.CUN:ICADOS GRATITUD En nuestra prisión fuimos visitados por los siguientes caballeros: , Carlos Pardo, DanIel Anas Argaez, - - Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 16 EL 1'10 JUAN ¿E'los Umaña, Julio Araújo, Jaime Patiño, Adolfo León Gómez, Luis So- Con delirio la amr. c1urill1te un año, . :órdoba, Santiago Samper, José María rella, Aristides Feinández, Igna<;io de Pero i uégo el engaño Samper Bn{sh, 'Agustín Posada, Anto- la Torre, Guillermo Posada, Alejandro Vino sus ilusio'nes á segar. nio María Posada, Gnstavo Durán, Pérez, Emilio Sáiz, Francisco Gonzá Guillermo Durán, Wenceslao Pizano,- lez, César C. Guzmán, Eugenio Gar­Antonio E. Vélez, Felipe Fernández cía, Carlos Rodríguez, Enrique Barre- Luis Uribe A., GllÍllermo,DlIrana, to, Ceciiio Cárdenas, Tomás Rueda ~te Olártc Camacho, José María Vargas, Pablo Pizano, Diego Mendo­. U., Rufino Gutiérrez, Bernardo za, José Maria S'Íenz Pinzón, Enrique ~ar,'Manuel Adonio Angel, Abe! Silva Silva, Lisandro Espinosa, Anto­Camacho, Custodio Laverde Guzmán, nio J. Cada vid, Lino de Pombo, Ale­' Bernardo Vega, José A11tonio de la janclro .Barriga, José Joaquín Gooding, ;rorr,e; Luis Pariño Orrantia, Celso Eladio C. Gutiérrez, Daniel Rodr!- odríguez O., Rafael Uribe Uribe, glleh, Eduardo Rodríguez Piñeres, Juan Gabriel Díaz Guerra, Emiljo Fergus- David Herrera, José Ignacio Escobar, ,!ion, José María Plata Uribe, Juan Ig- Manuel C. lsaza, José Manuel Res­¡ nacio Gálvez, Antonio Angel D., Juan trepo S., Carlos Soto Hoyos, Sixto E. Manrique, Lorenzo Manrique, Jesús Durál1, José T. Gaibrois, Alejandro María ·Gutié¡:rez, . Julio . Chaves P., Lince, Cenón . Aguirre, Luis Felipe Joaquín M. Uribe B., Daniel Valen- Fernández, Manuel L Archila, Rafael zuela, José M. Quijano Wállis, Carlos Pombo, Eduardo Arias J., Pedro Fer­ROílha, Heliodoro Ruiz Ramos, Ge- nández, Ricardo Boada, Julio Añez, rardo Pulecio, Alvaro Carrizosa, Gon.- Antonio María Londoño, Antonio zalo' Santamaría, Gustavo Restrepo, Vergara T., Antonio Reyes¡ Martín Hermógenes Vargas, Nazario Loren- H. Cruz, Melecio Sánchez, Eliseo To· zana, Francisco A. Gutiérrez, Francis- [res S., Julio Flórez, Antonio Vargas ca de P. Campuzano, Daniel Patijio Vega, Cruz Sánchez, Abelardo Barri· O., Heraclio Padilla O., Joaquín Ca· ga, Telésforo Jiménez, Cayetano Ca­macho, Eustacio Mendo~a, Bernardo macho, José María Lombana B., M. Pizano, Sabino Vergara, Di-ego Uribe, de J. Barreto, José E. Ucr6s Durán, Rafael Pardo !.l ., Ricardo Soto O., -Alejandro Ucrós D., Joaquín E. Ta· :.Eustacio Ramos, Carlos Camacho, mayo, Luis Francisco Sánchez, Luis Luis Buendía, LUiS Soto L., Celiano María Villarreal, Vicente Restrepo, Matiz, Evaristo Rivas Groot, Pablo Juan de Dios Carrasquilla, Barón de Pamba, Benjamín Gara)', Jorge Vé- la Barre, Rafael Murillo, Adolfo Du· \ez, Eud@ro Pedroza, José Camaclio que, Luis Patiño J aramillo,. Isidoro J., Plinio Gómez, Antonio Samper Laverde Amaya, Camilo Villegas, Brush Joaquín Samper, César Sán· Francisco García Rico, Carlos Zapp, chez ~., Jesús Vega, Antonio J. Uri- Rafael M. Merchán, Simón Restrepo; t' e, Daniel Vi'lla, Federico Pinz6n, J. Narciso Garay, Juan Clímaco Manri­¡ ge~D. Uribe R. Alvarez, Ricardo Uri- que, Baldomero Sanín Cano, Luis be M., Luis A. Robles, Carlos Martí· Vargas, Rubén J. Mosquera, Carlos nez Silva, Carlos Eduardo Coronado, Balén, Lázaro María Pérez, Bernardi­osé de Jesús Hernández, RuclecÍ(]('!o no Medina, Manuel Antonio CuéJlar, Triste es la historia de este amor primero Que cual bello lucero Yo vi alumbrar mi porvenir oscuro: Creí como se cree que amor es cierto, y sOllaba despierto Como se sueña si el amor es puro. Mas ella, infame, siempre me engañ6. 1\'1i dicha destruyó. Con su mentido y disfrazado amor; y hoy confundido vago por el mundo, Con. un pesar profundo, Sin encontrar remedio á mi dolor. NATAEL VILLARRAGA. GRATIFICACIÓN La recibi rá buena la persona que enti'egue en la Agencif> de EL Tío JUAN nna rnaripos'1 así: cuerpo de peTla lI egrit, alas y cabeza de dia. mante~ y rubíes. Se perdió en el trayecto de la Calle ele Zas cunitas al Circo de toros el domingo próxi-mo pa,ado. 2--1 CASA NÚMERO 59 DF, LA CALLE 14. Acaba de l1e2'ar á eRtealmacén un lindíRimo surti~lo de 11USELINAS DE SEDA, pa8arnane?'ílls, CRESPONES de fantasía, última 1I0vedad. Magnífi­cas telas de Heda, adornos para sa_ yas y muchos otros .artículos de gURtO. 2-1 Ospimf, Braulio S0to, Juan Bautista Liborio Ucrós D., Eduarl0 Sáiz Oso- EL DOCTOR BARBERI Pamba, Pablo Rocha, Jorge Roa, Ra- rio, Alfredo Rubiano, Arcadi~ Céspe­fael Ortiz, Rafael Tamayo, Eduardo , des, Andrés Márquez, Antonio Rocirí· Restre.po Santamaría, Nicolás f<2sgue· guez, Marco A. Lasprilla, Santiago Z. rra", Francisco Fonseca Plazas, Julio Calderón, BIas M. Gaviria, Nicolás E. Pértz, Guillermo Uribe, Jacinto M. Campuzano, José Miguel de Paz, In- • Ruiz, Pantaleón Arbeláez, Carlos Artu- dalecio Camacho B-., José Antonio '0 Torres, Zoilo Maldonado, Eduardo Campuzano, Manuel Ricaurte, Leoni· Restrepo Sáenz, Antonio Portocarrero, 'das E. Torres, Manuel H. Campillo, Marcelino P?sada, Carlos Tavera Na- Hipólito Montaña, Leopoldo Corredor vas, Jllan Antonio Riaño, Pablo Va- Montaña, Laureano Garda Ortiz, Ne· lenzuela, Alberto Portocarrero, Agns- mesio Torres, Carlos E. Putuam, tin A. Jiméne", Luis M. Vélez, José Francisco J. TOTO, Antonio Samper María Durana, Carlos Bonitto H ., To- Uribe, Daniel J. Reyes, Aníbal Ga· más Brigard, José Miguel Resh'epo, lindo, Luis Montoya S1mtamaría, Gui· Carlos José Espinosa, Jorge Espinosa, llermo Saravia, Indalecio Liévano D., " ' . ' A.=n o,· Ricardo Buendía, Leopoldo Boshell, Leopoldo Mont.ejo, 'n, Samuel Durán, Ra- Jesús Antonio U ribe, Carlos Liévano " Santiago D. Camar- D., Fernando Cortés, Temístocles Ba­per, Jorge Carrizosa, rriga M., Rafael Saravia M. A ustín eRpecifllist.a en laH enfel'lnedadeR de los niño~, hfl - trasb.dado HU hahita­ción á la segunda calle de Flol'üín, fr .. nte al correo. Conmltas: de las II á la 1 p. 111. Teléfono 11úlflero 292. 6-1 ¡SEGUNDO REPIOUE! 'Pongo en cOllocimientQ (!ti' las per­sonas deudoras :l mi Establecimien. to', que si dentro del término de 30 días no han cancelado RUS cnentas pasaré por la_ p.e!La de cobrarles po; la prensa, .: 0__ ,, ' , . el origen é amonestac ' PIDO M PALABRA! :Vestidos de pafio para niños. ,t'},jllares y capotes. Catres de cobre y cUllas. Camisas, cuellos y puño lUedias de todas clases. Calzonarias y corsets. Calzoncillos y franelas_ 1.'i.jera.s finas para las uñas. Piqué blanco superior. Géneros para muebles. . Arnlarios de nogal con espejo. Ag'ujas de crochet. Bordados blancos F.nísimos. Nuevo surtido de vistas para estere o.· co~ios, Vida de Jesucristo, Evangelio ilu$· traelo, Diabledas, Escenas inrantiles. .' Actrices y ciudades. Gran varieda ~ "na ~rnuieL yer hermosa, ,,-' .. , , - e .:1 • "IN Il I ~ -. ta sobre prensa. (Contin'1{,aoión) Art. 3. 0 La repl'H~ión de las pu­b1i,;>\ ciones ofensivas y el castigo de SUR autores eorrespoLde, como el juz~:amiento de cualesquúm.l delitos com unes, al Poder Judicial. (Continwrá) . ANUNCJ:OS A $ 20. U:MANA DE DU'l(c0.:J\( É HIJOS CALLE 12, NUMERO S 166 y 168 (Antiguo looal del" Oafé de Madrid.") P-4 U N A HACIENDA. Situada á dos horas del Puente del COmún y á una de Zi · DE ANTONIO' DI \Z C paquirá . está la mngnífica hacienda '! .¡;.f • que se vende. Perfectamente cercada de tao 'OARRI;~RA 6~ NUMEROS 108 y 110 pi as, can casa ele habitación cómoda y mo. derna~ se puede ir en coche hasta ella, pues A b d '] 1/ l'd t'l d 1 / fi e~tá Ctren ,dada por dos ~at'('eteras. Se vende ~"l.Ca a e 1 egar un espl,ene 1 o sur le O e o mas lIO y con 6 sin el hato ele bue"a calidad que tiene. completo el' materia de pan.::;;U-n{j:~~~ es una verdadera nove~ ~ecíbese en parte de pago una casa en Bogo. d d P . . . -0_ "'. ta hform" "~r"~,,,. "-an-era.7", núme- a. recIO t,l~ competen~Ja. "1'~~r' • .9~~ 6-2 ~ ~. ~/ .. ' .l., .. j I~ -',r \/t; ]t • ." 1 1 "'; .,~ e , - """""-,--- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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