Saltar navegación e ir al contenido principal
Biblioteca digital de Bogotá
Logo BibloRed
Cargando contenido
¿Qué estás buscando?
  • Escribe palabras clave como el título de un contenido, un autor o un tema que te interese.

  • Búsqueda avanzada

Seleccionar

Contenidos y Experiencias Digitales

Filtrar

Formatos de Contenido
Tipo de colección
Género
Idioma
Derechos de uso

Selecciona contenidos según las condiciones legales para su uso y distribución.

Estás filtrando por

Cargando contenido

Se encontraron 21330 resultados en recursos

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 66

El Católico - N. 66

Por: | Fecha: 06/09/1864

® n>~lliil®DDIT@® DDrn~r~¿n:~r &liD® & ITaik\ DDI:~U::~)m~~~ LID~ ffil&. ffi~ITaiT.VIT®~., AÑO II. Bogota, 6 de agosto de 1864, NUMERO 66. REDACTOR, VENANCJO ORTIZ. El sei1or Secretario de la Curia dijo en una circular dirijida a los Cu1·as, que no era cierto que la. Vicaría hubiera permiti lo a ciertas per ona el remate e ienes de , . m , os muertas," pues aunque en documentos oficia· les se han publicado Jos nombres de todos los que han intervenido en esa cuestion, ninguno (le ellos, dice el scfior Secretario, podrá decir qne ha obrado con permiso de la Vicaría ; i copió las listas publicadas en el '' Bol~tin del CJ édito público." La n.paricion de esas listas en :'El Católico" ha producido un:t rara sensacion, por creers~ malamente que es una declaratoria de escomu­nion, cuamlo.no ~ni mas nada que la negativa ue que la autoridad eclesiástica haya dado permiso par~ ren;latar. A un que la notct de la Vicaría es un clocu· mento oficial, que figura en la parte oficia.l de "El Católico," firmada por el señor Secreta­rio del Gobierno eclesiástico, los que creen quo se habla de escomunion,reconvicnen unos,ame­nnznn otros al Redactor, com•> si fuera respon­sable de esa pnrte, i eso nace tnmbien de que ni aun e entien por la mayor parte lo que es uná. escomunion. Persona ha habido que, a t iempo que dice reirse de tal pena,se ha. mos­trado hondamente ofendida por ella. Esto nos obliga a hacer una lijera esplicacion. ~.a. escomunion no es mas que-la declaratoria que hace la Iglesia do que no admite en su se­no al individuo que ha violado sus leyes. "U. ya no es católico, le dice, i yo sé que no tengo que ausiliarlo con mis saetamcntos. " El que no es ca tó\ico realmente, serie de esa decla.rfl.­tor; o, pero el que lo es, procura dar las satis­facciones que se le exijan para volver a entrar en la comunion. En esto usa la Iglesia el mis· mo de1·echo que tiene todo individuo o Corpo­racion. Ahora, por ejemplo, dice a los que la. han despojado de sus bienes : " UU. no son mis miembros, puesto que me ultrajan i me roban." Está tan en su derecho como estaria un comerciante en echar de su a\macen al que le sustrajera sus mercancías o su dinero. Respecto de la pena de cscomunion a los que han intervenido en estos asuntos, hai tambien otra cosa. Las leyes de la Iglesia·, están escri­tas hace muchos años en los cánones de sus Concilios. Eso~ cánones la imponen a los que usurpan los bienes, a los que los rematan¡ a los que los denuncian, i a. los que sirven de Ajen~ca para la usurpacion, i entendemos que el señor Arzobispo lo ha dicho así en sus notas i Pastorales a este respecto. Pero los que for­zados han presenciado los remates, no han co­metido, en nuestro humilde concepto, falta que la Iglesia castigue. Esplicadas osí lr.s cosas, creemos que cesará el clamoreo, i que dejará de molestarse al en­cargado de la redaccion por lo que no es de su cargo ni debe aparejarle responsabilidad ; así como tampoco debe entenderse qne esta espli­cacion la da otro que el Redactor, no la auto­ridad eclesiástica. LLEGADA DEL SEÑOR ARZOBISPO. El dia 1. 0 del presente llegó a esta ciudad el Vener-able Metropolitano. En todo el .ca­mino ha r·~cibido las mas espléndidas i espon­táneas manifestaciones de respeto i simpatía. Desde Los Manzanos hasta la casa arzobispal el camino que debía recorrer se encontraba.· ¡·¡ cubierto de arcos, no porqud ciñan las sienes del Prelado los sangrientos laureles auc con- 1 quistan hasta los malvn.dos1 sino porq~e la co- 1 rona del martir envuelve sus canns, i en las 1 lides !ncruen.tas que sostiene la relif?n con sus enemigos, tnunfa el qne sufre, trJUnfu. mas, completamente el quo sucumbe. ¡ En Funza, donde pasó la noche del 31, con­firmó muchos niños ántes do las diez, en cuya hora partió para e~ta ciudad acompañ a do de muchos sabaneros acaballo, i de a.lgnn n s per­sonas de la ciudad. En Fontibon lo E'Speraban muchas otras a cuyas manifestaciones corres­pondió con las muestras del mas cerdial afecto; i en las casas que se encuentran a In. vera del camino estaban las familias esperando i se postraban al pasar el Prelado, para recibir su bendicion. A la una entró a esta ciudad con un numeroso acompaliamiento i entre las acla­maciones dE~ la inmcn 'a multitud que cubria de flores ol camino. Los b::~lcones de las casas en el largo t1 ayccto que corre desdo San .Diego hasta su palacio, estaban tambien henchidos de jente que le arrojaba una lluvia de flores. Antes de pe'nsar en su fumilin., pensó en los pobres : vió el Hospital de San Vicente de Paul que se encontraba en su camino i lo visi­tó. En la iglesia de las Niéves fué recibido por el ... virtuo~~ párroco i asistió a la Salve quo las senoras hiCieron cantar a la Vírjen Madre do Dios, en accion de gracias por su regreso. En la catedral fué recibido por el Clero, i despues de la funcion rclijiosa siguió para su ca¡::n, donde le esperaba una escena bien distinta. Durante su destierro la muerte hahia vi:itado su estima­ble familia; en vez de dos herm:mas que dejó al partir encontraba un:t, i la emocion indefini­ble que sintió al verla, le causó un vértigo, por fortuna de corta duracion. El pueblo cristiano ha vuelto a encontrar su Pastor, los desgraciados su amigo, los pobres e~ padre que partía coi~ ellos el pan ; pero los dias de prueba no han terminado : la guerra al Catolicismo sigue, j:).ero los católicos tenemos al frente nuestto ca:.rdilló, i el entusiasmo de la inmensa mnltitud que escoltó - ~u entrada, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ~--~~~~~~~ ~~~ debe convencer a nuesh·os adversarios de que los oye ! El aspecto mismo del dia. se prestó EL NEOFl'l'ISMo JACOBINO no es bastante fuer- admi1ablemente a la festividad: una opacidad te para quebrantar la fé de nuestro buen pue- suave cubri0 la ciudad durante todo el tiempo blo. Quiera el Cielo hacérselo comprender así, de la espectacion i de la uienvenida. i concedernos que nuestro buen Pastor goce El sefíor Arzobispo, despues de haber rccoji­largos días de paz en medio de nosotros, que do en su tránsito, desde las ardientes playas del los frutos de nuestra sabana lo sustenten i la Atlántico, la espresion del respeto i de la ale­tierra de nuestro cementerio cubra sus huesos. gría de las poblaciones entusiastas, inclinando su nevada cabeza b~jo innnme1·ables arcos le­vantados al triunfo bellísimo de la fé sobre la fuerza; llcg6 a la hermosa sabana de Bogotá, cuyas poblaciones electrizadas lo recibieron como a un Padre que habian llorado en la tumba ; i rodeado de varios miembros del alto Clero i de un numeroso concurso do dentro i fuera de Bogotá, penetró en la ciudad en me­dio de un jentío verdaderamente sorprendente, que lo devoraba con miradas del mas afectuoso interés. Entró, a su paso ácia la catedral. en varios templos, en donde fué recibido por el Clero con himnos d~ alabanza al Dios de los Ejércitos, por su anhE:\Iado regreso al seno de sus hijos espirituales ; i en cuya demostracion tomaron parte, muchas señoras de la capital. En su semblante benévolo, digno i tranquilo, se leía sinembargo algo de esa melancolia in­definible pero simpática, que se asoma a la fCtz bondadosa del verdadero cristiano, al recuerdo de ofensas sufridas sin debilidad i perdonadas con nobleza. UN GRAN DIA PAB.A EL CATOLICISMO. Gloria a Dios en las altnras; i en la tierra,' paz a los hombres de buena voluntad! El dia primero de set1embre ha sido un tlia. de gozo para la hermosa Bogotá, i lo será de imperecedera recordacion para sus piadosos hnbituntes. El Ilustrísimo señor Arzobispo Herran ha vuelto al seno de su amada grei! Bogotá se ha conmovido tiernamente a la pre­sencia de su venerable Pastor. Fresta apn.ci­ble, espontánea, solemne, en que todas las condiciones i todas las edades han tomado parte, con esa d~lcc emocion del alma que de­Ja en ella dulcísimos recuerdos. Desde la mañana del deseado dia, empezó a sentirse esa inquieta oscilacion de un ptteblo que se prepara para un momento de gozo. Las calles estaban adornaJas de numerosos arcos levantados MOTU PROPIO por el entusiasmo de los habitantes. Los balcones, las ventanas, las puertas de los poures, se co!maron de es­pectadorrs decorándose de cortinas i de coro­nas do flores simb6licas. A las doce las torres de los templos resonaron con alegres repiqnes, anunciando la ap:_Q.ximacion del ilustre Prela­do. Por todas partes se veia ir i venir el oleaje d~l pueblo, mezclándose la vírjcn con el an­Cl¡: mo, la matrona con el niño, los hombres de todas · as opiniones i de todos los rangos ....• A la una se presentó el venerable Prelado sobre un modesto carruaje gobernado por un ínclito adalid, mutilado en las aras del deber como el mas leal de los valientes. Contraste altamente e8presivo: la lealtad i el'valor del hombre, a los piés de la constancia, de la huma· nidad i de la fé divinas. Este bello contraste ·¡ hacia aquel modesto carruaje mas hermoso, mas suntuoso, mas imponente ~ nuestro& ojos, . que los pondet·ados carros trmnfales do los 1 antiguos guerreros, que entraban en la ciuda..d ¡ eterna, rodeados de 1·eyes cautiv9s i de los ma.s preciados despojos de las Naciones vencidas. l. :Fiesta do paz, enteramente espontánea; sin nparatos .tcníficos ; propia de las conquistas 1 del espíntu humano ; di.D'na de una Relijion 1 de amor, que hSL venido d~ lo alto para salv~r . al mundo por las vías de una verdadera i noble l civilizacíon! Todos los corazones se han espandido. El pueblo se ha mostrado tal cual es en sus afec­ciones i en sus creencias ; pero sin vanidad ni ostentacion : sin saber que se exhibia todo en tero. Manifcstucion de los corazones que aman, i que lo dicen sin pensar que alguno Llegado a su catedral, t:ll digno Prelado fué recibido con el debido decoro. Se cantó en el acto un solemne TE DEUM en accion de gracias por su bienvenida ; Su Seiiotía hizo nn breve discurso a los fieles i se reti1·ó ácia la habita­cían de sus idolatrados deuao~, que lo espera­ban con la mas viva impaciencia. Al lle()'ar a esa morada, la emocion oprim!Ó el espíri~ del V cnerable anciano, i tuvo una especie de sín­cope, que se disipó en breve afortunadamente. ¿Quién ignoró\ que la alegría mata como los pesares i' ¿Quién podrá comprender lo que pasó acaso en aquel instante en los misterios de su alma 1 El náufrago escapado de la bo­rrasca, merced a. los mas enérjicos esfuerzos, cae desmayado al tocar la playa sal va dora ..•. M. CONFERENCIAS DEL PADRE FELlX. CUARTA CONFERENCIA. El milag1'o i la critica moderna. Señores :-Despues de habe1· mostl'ado delante de la critica moderna, el hecho divino dei Cl'isto- 1¡ rci poseedot' del mundo, hemos mostr·ado en nues- ~ tra ultima Conferencia el hecho divino del Cristo Refm·mador de la humanidad. Considerando Ja ' obra reformadora de Jesucristo bajo sus gt·andes faces, hemos visto resplandece¡· en ella el si ano de la divinidad en estas tt·es cosas: la idea, 1~ reso­lucion i la ~jecucion. Jesucristo concibió como Dios esta p1·odijiosa trasfot·macion de nuestra hu­manida?, la quiso i la ejecut~ como Dios, Juego EL es Dws. S1 yo no me aluCino, estas considet·a­ciones llevadas hasta el fondo de yuestras almas? Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 1 . EL CATÓLICO. 139 · ~ han encontrado buena acojida, i doi gracias pot· ello a Dios i a vosotr·os, pues eso alienta mi debi­lidad. En mis dos últimos discursos, no he pues­to a Jpsucl'isto poseedoa·, a Jesucristo Refot·lna- 1 do1·, en Íi'ente de ciea·tas grandes figm·as de la l' historia que agmclcrl'ia ve1· acet·cm· a su incompa­. rabie figma, porque contemplando con amor i go-zo a mi Divino l\Iaestl·o en la gloria de su posesion i de su reforma sin igual, no he podido vet· al mismo tiempo salit• del fondo de los siglos i de mi memoria, la imajen de algunos reformadores cuya celebridad es histórica. He pasado sin notarlos, i ahora me digo. Puede se1· qu.e sobt·e algunos pun­tos haya ana\ojías de detal i relaciones de supedi­cie, pe1·o en el fondo, en la reunion de hechos, nuestro Cristo Reformado¡· no tiene comparacion posible. Vamos, sinembargo, ac onsiderar en nuestro Cl'isto Dios, un título que es, por excelencia, el signo ) Esta manera de trntat· la cuestion del milagro, viene a dech· lo siguiente : « No queremos que el milag1·o existn, porque él trastorna nuestms ideas i no concuet·da con nuestros sistemas. )) La razon no acepta semejante solucion, i vuesti'O buen sen­tido, mas ilustt·ado que todas las chmcias críticas del mundo,se obstina en sostenet· que precisamen­te se tt'ata de saber si bai milagt·os en efecto, i en particulm·, si Jesucristo bu hecho realmente mila­gros para atestat· su Divinida) gro de primero o de segundo órden. Un muerto Creo no habet· disminuido nada de la objecion r~sucita : este es milagi'O de pl'imer órden en de la crítica. La hé desembarazado npénas un po- cuanto a la sustancia, porque nada en la natu­co de Jas nieblas en que ella gusta envolver fre- raleza puede producir tal resultado. Un hombre cuentemente sus fórmulas. Delante de un audito- se rompe un miembro i se cura instantáneamente rio ávido de claridad, es decir: delante de un sin ningun socorro del arte: este milagro es de auditorio eminentemente frunces, esto no puede segundo órden en cuanto a su modo, porque, bieu · constituir un inconveniente. Como quiem que sea, que un miembro roto pueda curarse naturnlmente, la objecion se reduce, como lo veis, a ponet· el es de esperiencia universal i de certidumb! e físic:t milagro en contradiccion flagrante ron la esencia que la natmaleza, abnnclouada a sí mism«, no cu1 ·a de las cosas, con la naturaleza de Dios i con la ar- jamas de esta manera. monín de la creacion. Veamos, pues, lo que se Así definido ya el milagro, i distinguido clara-de be pensar. mente de cualquiera otro hecho que se pueda Pues que la cdtica lleva su 1·acionalismo hasta cumplit• en la nntm·aleza, la p1·imeJ·a cuestion que f l negar el concepto mismo del hecho milagroso, de- se presenta a la intelijencia, es esta : ¿El milagro 1 hemos restnb!ecer en su verdad elemental la nocion es posible? B.ousseau; que tenia con frecuencia misma del milag1·o. ¿ Qné es, pues, lo que signifi- lampos de buen sentido en medio de sus es trava- [, ca esta palab1·a famosa, monstrum ho1·renclwn de gancias filosóficas, se hizo esta pregunta ; c1 ¿Dios , ! la crítica a11ticristiana? Esta es la prirne1,a ct1estion puede l1acer tnilagros '? >> i bien sabeis córno la que debe resolverse. No han faltado hombres que respondió: te Esta cuestion, dijo, tratada sériamen· hablando mucho del milagro i esclamando caloro- te, seria impía si no fuese absurda. Castigm· n , snmente contm él,jamas se han preguntado si han quien la resolviese negativamente, seria hucerle comprendido algo de lo que es. demasiado honor: debet·ia encerrárse\e en una l.a palabra milagro, en su actprion mas jene- casa de locos.>) Ah, señol'es! el filósofo de Jine­ral, significa una cosa que sorprende por su gran- b.ra no sospechaba los progresos que la. locura ha­deza fenomenal, 0 por la rareza de su apal'icion. En na mas tarde en!re~ nosotros : e.l t•em~dJO que p. ro­el lenguaje vulga1·, todo Jo que presenta a la hu- pone es se.vero; 1 ~~ fue_:¡e prec1 s o t'JCCU~l11' h01 . lo manidad la apariencia de una gran fuerza, toma que él decm hace c1en anos, temo que sena preciso este nombt·e magnífico. Así se dice: los milacrros encerrm· a muchog hombres de t~lento. Tal es lt. d e l j é ~io, l]os ¡milagros de la industria, de la ~lo- Icloumesotruon~ ... t·ocgut·eessot.toqttllesr.e; ot•'tsa~l, eamqouseoRbohugsasde~'suamt~l·~ntalOI' cuencw o e e a poesía ; i se dice tambien : los . t• .' e • , u , " mi milagros de la naturaleza, de la jerminacion de constderaba absurda 1 hasta nclJ~cula. El celebr~ t la fecundidad, ) 1 Oh 1 vosotros podeis dccil· al Creador, mostrándole esta constitucion de la nntnruleza escrita con los ast¡·os, los soles i los mundos, no, vos no podeis deroginr su obra sin cambiar EL mismo; i aiíadís que por estas libres escepciones hechas por él a las leyes que rijen el universo, su pet·manencia se hace dudosa, i la certidumbre fí­sica perece con ella po¡· falta de continuidad, de constancia i de perpetuidad. 1 Qué, el milagt·o en contradiccion con la inmutabilidad de Dios! ¿Pero qué idea os formais, pues, de esa voluntad divina­mente infalible i divinamente inmutable ? ¿Es que la voluntad de Dios obrando fuera de ÉL en Ja obms por la unidad en su voluntad, siempre indi· \'isible e inmutable en sí misma ¿Es que la vo­luntad de Dios, como su pensamiento, no abraza en un solo acto lo que nosotros llamamos el pa­sado, el presente i el porvenir, lo universal i lo individual, lo jenet·el i lo particulat·? ¿La vol un- 1 tad divina que quiere en la naturaleza una lei permanente~ es otra que la voluntad divina que quiere para esta lei permanente una de1·ogacion transitoria? ¿ 1 encontmis deveras que el estipular una escepcion que deroga la regla, trae forzosa­mente un cambio en la voluntad que establece i determina la regla? ¿En qué, pregunta la razon, se encuentm compt·ometida la inmutabilidad de la voluntad creadora, po1· clet·ogaciones particulares de la lejislaeion jeneral que J'ije el imperio de la creaeion? Pero, no temiendo ya pm· la inmutabilidad de Dios, tcmeis todnvía que el milngro Yenga a des­tJ ·uit· la armonía de su obra i a tlll'bar la ciencia de la natumleza ; ¡ e.l milagro en contt·adiccion con . la armonía de la creacion i la ciencia de la natu- : raleza ! ¿ Deveras lo temeis ? ¿ pe1·o qué, se trata de multiplicar ·los milagros hasta lo infinito, de sustituit· por donde quiem la escepcion a la regla? ¿Porque un cojo ande, porque un ciego vea, por-que un sordo oiga, pot·que un do vuelva acia su fuente, pot·que un muerto salga de la tumba obe- ' • deriendo al mandato de Dio;;; el sol dejará de salir pot· la mañana i ponerse a la tar.de, los astros de 1 seguit· su curso, los l'ios de llevar 3us aguas al mat·, la medicina de ejercer el at·te de cut·at· i Jos hombres de seguir la lei soberana que los conduce a la muerte? Suponeis a Dios ocupado sin cesm· en desbaratar por una voluntad lo que ha hecho por otm, en poner la escepc!on en concurrencia 1 univet·sal con la regla, i el milagt·o en lucha per­pétua con las leyes de la creacion. Es de.cir que atribuís a la sabiduría infinita, una locura que no atl'il.>Uil'iais a la sabiduda vulgar. Haceis a Dios ridículo atribuyéndole en el Ól'den sob1 enatm·al unu accion incompatible con su accion en la natu­raleza, e imajinais milagt·os que no serian mas que una ironía: de las obras de Dios, hecha por Dios mismo. Así decfs: el milagm es imposible, es il·risorio. ¿ 1 hablais de filosofía i de metafísica? Lo que hai verdaderamente irrisol'io es esa filoso-fía estrecha que quiere adaptar a sus mims limita- , das, las mi1·as infinitas de la divina sabiduría; i 1 Jo que l1ai ''erdaderamente in1posible aquí, es el ! · Creador soñado por una metafísica gmsera que 1 enc~dena a ,Dios con las leyes oe la naturaleza, i lo t1ene estupidamente encerrado en esa red como u!l cautivo de la fatalidad. ¡Al Dios de la infi­mta sabiduría i de la infinita Jibet·tad ! Filosofía ordinaria que pretende detener a Dios en nombre de la lei hecha por Dios mismo ; filosofía vet·dade­ramente digna de una sociedad lejista i de un si-glo met·cantil. (Continuará), SEÑOR REDACTOH DE « EL CATÓLICO. '>) Espet'o que U. tenga la bondad de dar lugar en sus columnas, a la siguiente manifestacion. Hizo un año el 23 del próximo pasado junio que me sometí a la lei de «Policía en materia de cul- 1 creacion no es un acto pui'O, esencialmente uno, q~te dete1:mina a la ''ez la lei jeneral i la deroga­cwn partiCular 'l ¿No es, pues, el caráctet· propio del ser infinito realizar la multiplicidad en sus 1 tos,>) i dicho sometimiento lo hice, en primet· lu­gar sin pt·estar jul'amento ni tácito ni es preso, pues fué condicion que puse a la autoridad que me exi- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 1 142 EL CATOLICO .. \. ~n ~d .. o-"le~q"u_/"'e~y'""'o.........,...d..,.,e.._.,n..._1,.,.·n""g./"'t....,.l n'"'a""'-'""-"td...,.,.ce'""' 1 !n ...... Ao~l~'"'~ ...... ~d"e-"u'..,.np....,.~'"'~ ....... (,.....0U-"~..,.·0'"'~"'"~""eq..,.ut:""~i ...... J"~-"p1..,.i~'"'":'"'~~:g~efo~~ Jnanera jua·aba: en segunclo lugar, f~c.un some-timiento condicional, es presa la conrliCwn en la repugnaba su corazon. dilijcncia, como puedo aca·editarlo con la copia qu~ manteno·o en mi pode1· ; i en tercer lugm·, cre1 ménos ~al un sometimiento en esos términos, que abanclonat• Jas ovejas dejándolas en poder de los lobos t·apaces ·que quieren devorarlas. 1\~as, como primero está obedecer a Dios i a a Iglesia que a los hombres, habiendo hablado el Rep•·esentante do Jesucristo sob1·e la tiel'l'a, i condenado el some­timiento creo de mi deber pt·otesta•· contra el mio como al 'presente lo hago declarándolo írrito i de ningun val01·. Protesto igualmente delante de Dios i cleios hombt·es contm todas lns leyes espe­didas o que se espidan po1· los que, traspasando los límites que les están presct·itos, quieren injerirse en materias que no son de su incumbencia, i quie­ro permanecer siempre unido al Supremo Pust01· de la Jglesin, Nuestt·o Santísimo Padre Pío IX, jmando set· siempre fiel a la fé de N ucstr·o Señor Jesucristo mediante el ausilio de su gracia i gt·an misericot•dia, p.ues como Ministro, aunque indigno, de la Santa Iglesia Católica, Apostólica, Romana, sellaré mi fé con mi sangt·e si fuere necesario i tal gloria Dios me reservare. No me parece fuera de lugar, exho•·tat· aquí a mis hermanos Sacerdotes, a permanecet· firmes, i a sostenm· con la palabra i con el ejemplo la doctl'i­ua que hemos recibido de nuestw Divino Maestt·o: ahom es cuando mas conviene desplega•· toda Ja vijilancia i celo pastoral pa1·a no dejamos arreba­ta¡ · las ovejas; i a aquellos que desgraciadamente se hubiet'Nl sepa1·ado de la regla de conducta que estamos obligados a seguir, les pido po1· el amor de Dios, vuelvan sobre sus pasos. No hai que te­mer el podet· de las tinieblas que natut·almenté es débil, i cuando mas podrá quit3rnos la vida del 1 cuerpo, Ja cual debemos estat· prontos a perdet· 1 para ganat· la inmortal vida del alma. 1 ~ Los que teniendo en sus manos el Pode•·, se han c1ejado ccgat· pot• el et·ro.t·, d~ben vet· en la hist?l'ia 1 el triste fin que han temdo siempre los persegmdo­res de la Jglesia,deben ve•· que tales perseguidores 1 ., no bao conseguido sino _ hacerse exect·ables ante los contemporáneos i ante la posteridad, i esa 1 Jalesia S-iemore ha salido con mas brillo del crisol 1 d~ la persecÜcion, most1·ando a su Cristo con los 1 brazos abie1·tos pronto a recibit· en ellos al pecador arrepentido que se humilla pam ser exaltado. Los pueblos deben desperta1· ya de su profundo sueño, seguit· la voz de sus Pastores i no dejarse engañat· pot· los filósofos modemos que tienen miel en los labios i veneno en el corazon ; que con la májica palabra libeTtad quieren encubrit· el empe- , ilo de destruh· la Rélijion para poder C!espues pri­vat~ Ios de esa misma libm·tad, i hasta de los recm·­sos matel'iales que necesitan para vivh·. Observen a esos apóstoles del engaño, i los vet·án entrega­dos a desordf!nados apetitos. Boqufa, 23 de julio de 1864. JJJ. Parménides Velázco, Párroco. --El señot· Cura de Cajivio, Presbítero Manuel Mal'Ía Guzman,nos ha enviado tambien, impresa, una esposicion en que manifiesta : que apesat· de set· reputado liberal, i de babel' acompañado en sus campañas al eJét·cito colombiano, fué llamado a prestm· el jurnmento de la lei de 23 de abril, pe ro que no lo pt;estó, sino firmo simplemente la dilijencia i se salió aprovechando la distl·accion -----'~-•o-+-e..ftll:l---- Interesados vivamente en todo lo que atañe a la Iglesia ·católica de que nos glol'i~mo.s de ser n?i~m­bros, damos con gusto luga•· al stgmente remitido, así como continuaremos siendo severos en conde­nm ·lo que el Pad1·3 Cáceres l~~ga contradicie~do, s.u mision de Sacet·dote i de ¡·e!JJIOSO de la hmmldJSl­rna i penitente órden seráfica. UNA CALUMNIA MAS. En el número 50 de ce El Bogotano>) se halla un artfculo, que lleva por título ce Pl'ofanacio~"'l ina~­dita,>) en el cual se dice, con 1·especto a m1, lo SI· guiente: «El Padre Capellan F1·ai Ramon Cácct·es, fir- , mado, jurado i Tenegado mandó arrojar a~ mula­dm · los restos de muchos fieles que yactan se­pultados en el pantcon, i que flu>J •on ¡·ecojido: i , guardados por las cl'istianas dHijencias de la seuo­ra Silvest1·a Peña.,) Continúa refil'iendo la respuesta que die1·on los coristas Almanza i Torrente a la citada Peña, i lo \, que dicha señom les dijo. Toda esa relacion es un tejido de calumnias para i, l infamarme delante d el público, i creo que debo i rcspondet· manifestando cómo han pasado los ¡ hechos.--Al bacet· yarias reparaciones i mejoras r' importantes i costosas en la iglesia de San Fran- 1 cisco, hubo necesidad de traslad:-tl' los restos del ' panteon, pa1·a practic) ¡ lo dice 'espues de hab~r condenado con su autoridad la lei que lo prescnbe. No soi un renegado, pues creo i confieso rúbli­camente lo que nuestra Santa l\f::td1·e la Jglesia cree ¡ confiesn, ui he arrojado al muladal' los huesos de nuestros hermanos difuntos, los cuales reposan en lu~'ra¡· bendito mui decente, ent•·e las paredes del coon vento i cer' ca de la pieza llamada Et e ena,- 1 culo, donde hai ptro depósito de cadáveres. Pul' lo que hace al « lloaoTANo,» siento mucho que llene su pe1·iódico de falsedades, cual la que me atribuye ; i sepa i entienda, que no pot· res· ponderle s'ino po•· in~t•·uir al público, es que he 1 tomado In pluma, bien que con el designio de des­nmecrr la calumnia i la infamia que desacol·dada­mentc me ntdbuye.-Firman conmigo esta el'po­sion los coristas que juraron que es falso lo que dice la Peüa. Frai Ramon Cáceres, Cnpc11an--Almanza-­To7Tente. ~ SÉ~"OR REDACTOR DE «EL CATÓLICO.') Como en las listas que la Curia ha publicado en e] númE>ro 65 del periódico que U. redacta! figum el uomb1·e de un señor Rafael 01·tíz, i ese no puedo ser yo que ninguna injerencia, ni activa ni pa~iva, ni directa ni indirecta, he tenido en el negociO de las « m unos muertas, >) espero que U. se dignará pel'mi til'me manifestarlo así en su mismo pel'iódico, ¡ afwdir que en lo sucesivo me firmaré poniendo tambíen mi segundo..apellído. Soi de U. atento servidor, l-.'.afael Orttz Baraya. En la lista de las persouasr que han rematado ) se encuentra el nombre de Francisco Caro; i como ese es tambien mi nombre, declaro, para evitat· cualquiera equivoca­don, qne yo no he sido rematndor de esos bienes ; que mi seguudo apellido es Franco, i que he acos­tumbrudo firmarme Francisco 'J. Caro. Una munifestacion idéntica nos ha hecho la se-ñora Frnncisca Tovar de Rívas. - -Han venido .a esta ciudad los señores que componen la comision em•iaua de Mararnibo para conducir a\lá a las RR. MM. monjas de Santa Cla­ra de Tunja. Si los bárbaros que las arl'Ojaron de su convento de una manera salvaje, fuet·an sus­ceptibles de sentir pena pot· el mal que han hecho i por el descrédito que han acal'reado sobl'e el país queesplotan i tiranizan, estarian llenos de vergüen­za boi, al ve1· que de un país vecino se envía a re­cojer a las santas mujeres a quienes ellos han sacri­ficado en su furor anticristiano. Nosotros, como católicos, damos gracias a Jos señores que han venido i a los que los han envia­do, i rogamos al Cielo que haga llover sus bendi­ciones sobre un país que manifiesta respeto por lo que respeta todo pueblo culto. Sí, gloria a la hos­pitalaria República de Venezuela. LA NOVENA DE LA CANDELARIA. 11. ( CONTINUACION ). Pruebas necesarias de una fé vacilante, o condiciones ~rr~vocables del órden m~iversal, estos accidentes {jUe md1gnan vuestro orgullo 1 rompen vuestra constancia, deben tal vez concurrir., en el plan sublime de la crea­cion, al coujunto de su maravillosa armonía. Lo que es. es lo que debe ser, puesto que Dios lo ha permi­tido. No sabeis por qué lo ha permitido ni podeis saberlo; pero lo que vosotros no sabeis, Dios lo si.Jbe! l> El lenguaje de aquel Sacerdote venerable era nuevo para mí. Las medit.:tciones en que me babia sumerjido á'Lsorvieron de tal modo mis facultades, que solo me apercibí de mi soledad en medi~ de la iglesia, en el momento en quo vpagaban las ultimas luces del san· tunrio. Era la hora que me habia indicado el coronel la hora tan impacientemente ¡¡guardada, la hora ta~ lenta en llegar en que debía por fin ver a Cecilia! A Cecilia de quien po ·,,creerme amado, a esa Cecilia a quien adoraiJa! Yo la nombraba en alta voz, como ' si pudiera ya oirme, i todas mis ideas, todas las ines­plieables iuquietudes que me hnbian atormentado de~de la víspera, vinieron a perderse en el sentimiento de mi. dicha. JUe p~recia sa_ber tan bien que estába eonmtgo, que era m1a para stempre! La calle que recort'ia, i que hallia visto la vis pera ca­si vacía, estaba entónces llenad jente. Yo ntribu! al principio esta difer~ncia a la solem~idad del domingo~ pero no pude espllcarme por que aquella multitud que dehian llnmar en sentidos diferentes los pasa· tiempos de un di a de fiesta, permaneria por el contra­rio inmóvil, o se limitaba a formarse aquí i allá en grupos silenc~osos. Como tenia prisa de llegar, me abria paso rápidamente al traves de estos pequeños corrillos, i no percibia sino al acaso algunas palabras confusas, de las que la mayor parte -no formaban un sentido completo. ce Un aneurisma, decia un_o, nadie muere de aneu· risma en esa edad.-Cada uno muere cuando le ha llegado la hora, decía el interlocutm·.,> Un poco mas Jéjos era un jóven que parecía tenerme envidia. ce Quién estuviera en el lugar de este estranjero! decin., al ménos él no la ha conocido! " :Mas Jéjos nun, una niña pequeña adornada i velada, a quien una de sus compañeras escuchaba llorando: ''A las dos i media, saliendo del llaile ..... Bien babia dicho que nunca se easaria! ,, iUna horrible luz alumbró mi pensamiento. No estaba sino a veinte pasos de la casa; corrí. .... - ;Dios mio! tantos años trascurridos no han podido debilitar la impresion de aquel espantoso momento! J~a puerta estaba colgada de blanco, al frente un atahud forrado de blanco. Algunos hachones lo ro­deaban. -¿Quién ha muerto? ¿ quién ha muerto en esta rasa? esclamé asiendo violentamente ~or el brazo a un hombre que parecia velar sobre aquel aparato. -La señorita Cecilia Savernier. Yo caí al suelo sin conocimiento, i cuando volví en mi, por raros intérvalos, mi razon me babia abando· nado. No sé cuantos dias duré así. , Por fin se abrieron mis ojos enteramente a la Juz, pero quedé largo tiempo sin pensamiento, sin re· fleccion, sin recuerdos. Acababa de adquirir o de re· · cuperar el sentimiento de que era., pero sin saber aun lo que era : ojalá hubie1:a permanecido así ! Algun movimiento qu.e sentí cerca de mí, el ruido de un suspiro, de un sollozo téll vez, atrajo al fin mi atencion. De pié a mi lado reconocí al anciano Sacer- ¡ dote cuyas poderosas i severas palabras babia oído un día: me miraba con el aire impasible de un jue>z que . 110 aguardaba mas que una palabra de mi boca para 1 absolverme o condenarme. Mas léjos, l1áéia el pié de ~ mi lecho, otro anciano acababa de levantarse de . su 'j Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 144 EL CATOLICO. -r l. ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~---------·- 11 ~~~~ .. ,...., ___ ------------ 1 lugar i se precipitaba hácia mí, tendiéndome los bra- 1 zos tréq1ulos. -Padre mio, esclamé yo, buscando sus manos para llevarlas a mis ~abios, padre mio, ¿sois vos? -l\-Je ha reconocido, pues,,> dijo él! < Mis ideas comenzaban a aclararse, el oasado se des­pt ·endia lentamente de la noche de mis sueños. .1 -l\L Savernier, dije a mi padre, ¿l\1. SaYernier, dónde está? -Ila prtal como él mismo, rctardimdola 1 por algunos minutos fujitivos que no merecen contar- 1 se en la eternidad. Vuestra prometida os espera en el cielo. ~ 11 -1 qué! repliqué yo mirándolo fijamente ¿ creeis t que el ci elo no está cerrado a la ternura de los aman· l tes i de los esposos? ¿ Creeis que el amor tnmbien res u· , 1 citará paro un porvenir sin fin? ¿que dos almas sepcl­radas por In muet·te podt·án volar, la uua hácia la otra 1 delante de Dios que las ha formado, sin ofender su poder, i que volvere a encontrar a Cecilia? -Creo firmem ente, me respondió, que en la vida del hombre, la muerte no pone t é rmino smo a los errores i a las miserias: creo que en el alma estan la benevolencia, la caridnd, el amor: creo que todos los sentimientos tiernos i virtuosos que Dios había coloca· do en nue.;tros corazones participarán de nuestra inmortalidad, que compondrán su dicha inmutable i sin mezcla, i que se confundiran sin perderse, en el amor de Dios que los abraza todos. -Oh! el amor de Dios que me haceis comprender, ·1 dije mojándole las manos con mis lágrimas, es el mns natu r al de los sentimientos de la criatura, como el primero de sus deberes. ¿Pero por qué me ha quita­do a Cecilia? -¿Con qué derecho, jóven, escl!lm~ él, pedís cuen­ta a Dios de sus voluntades? ¿sabeJs s1 en el golpe c;on qu e os ha herido, no ha tenido en mira vuestra misma felicidad, i si su presciencia iufalible no ?S ha prepaya­do una dicha que no debe cesar, en cambiO de otra b1en pronto trascurrida? ¿ conor.eis todos los escollos que podían romp er vuestras esperanzas, todos los ac.onte­cimientos que podían aOojar o disolver vuestros lazos, si él no los hubiese puesto al abrigo de. los peligros de esta vida pasajera? A c~mtar desde. ~lOI ?ol~me1:te, te: neis adquirida la poseswn de CecJha sm mqmetud 1 sin tnrbacion, porque es Dios quien os la guarda 1 ¿Os atrevereis a censurarle el haber velado ,Por vues­tros intereses mas atentamente que vos, 1 haberse reservado vuestro porvenir todo entero, para \LOlvcroslo en cambio de una débil e incierta porci'on de ese po-r­venir infinito que os habria tal vez herho perder el resto? Cuando vuestro padre exijió de vos que tras­curriese un año entt·e el momento en que accedia a vuestros deseos, i el momento en que la mano de Cecilia parecía deber colmarlos ¿no os rendisteis sin esfuerzo a los consejos de su prudencia? i sinembargo, un año es un término largo en la vi!la del hombre, un plazo mas aterrador aun cuando -se le compara a la brevedad de la juventud, al curso rasi imposible de seguir, de esa edad que el tien.1po se lleva tan aprisa. Hé aqul ahora que otro padre,. que es el pad1·e ro·· m un de todos, os impone un plazo dé algunos años mas. de algunos meses, de alguna, días t:1l vez, por­que la medida de vuestra existencia no es conocida sino pot· éi, i no son años, no son meses ni dias los que premiarán este débil sacrificio~ mt.s pródigo ñcia vos porque es mas poderoso, os dá todos los tiempos que no nc<1barim. Si emplaza por uu instante vuestra dicha temporal, es para pe1·petuarla al tr·aves de esos millares de siglos que son apénas los minutos de ra eternidad. Tal es el pacto que arabais de firmar, sin saberlo, con la Providencia, i cuyo fruto debe haceroS' recojer un dia una piadosa sumision a sus decretos. Sufrid los juicios de Dios, hijo mio, i no le acuseis!... 1 -Sabré conformarme con su voluntad. respond} con una voz fi¡·me, f apresuraré su cumplimiento por 1 todos los medios que ha dejado en mi pt1del'l Sí, pa- t dt·e mio, quiero pens
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 66

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 56

El Católico - N. 56

Por: | Fecha: 28/06/1864

~OI.IOO. TRIM. I. AÑO II. Bogota, 28 de junio de 1864, Nt1MERO 66, SEÑOR P. V. J. Frai Benedicto Bonilla, Cura propio de la iglesia de Nuestra Señora de Chiquinquirá, con todo respeto espongo: que tan luego como leí la resolucion de 15 de novie re del nño pr6ximo pasado, en la cual l.a autori ,~a~ supe­rior eclesiástica me suspendtó de oficio 1 bene­ficio como Párroco de la espresada i.glesia, por haber ratificado el juramento que hah~a pres­tado con arreglo a la fórmula prescrita por S . I. el12 de agosto del mismo año, en contra­vencion a la pastoral del 8 de setiembre últi­mo, en su obedecimiento me consider~ suspen­so i me abstuve de todas las funciOnes del mini"terio parroquial, porque siempre he sabi· do i respetado la doctrina de San Gregorio el grande. 8ENTEN'l'IA PASTORIS JUSTA, VEL INJUS'l'A, TIMENDA ES'l'. Por lo que ocurrí a Ja autoridad piriiendc revocatoria. ~e l!l' reso­lucion : la que me fué negada. H01 msisto en que se me levante la suspens1on, para lo q~e el Sr. Vicario tendrá en cuenta: la pronta 1 fiel obediencia con la que me se>metí a la decision de su autoridad: que ea la iglesia de mi cargo no solamPnte se administran los santos ~acra­mento~ diariamente a los vecinos -eU , siiW a la multitud de peregrinos que o~urren de .d~­ferentcs partes ansiosos de los bienes espln­tuales : que se halla inmediato ~1 tiempo cuaresmal i se dificulta la presencia del Cu­ra escusador, nombrado que lo fué el mui Reverendo Padre Fr. Antonio Acero, el que se halla en San Martin imposibilitado para ir a Chiquinquirá; i en fin, que S. l. por r~sol~­cion do 30 de oetubre, faculta a su VIcario jencral para que absuelva de las censuras ~ los señores sacerdotes que hayan prestado el JUra­mento jeneral de obediencia a la lei de ~3 de abril i decretos de Tuicion i Desamortiv.acion, siempre que se llenen los requisitos allí pre­venidos. Como la causa de mi suspension fué únicamente la trasgresion de la Pastoral es­presada, pues jamas me he sujetado ni firma­do los enunciados decretos de Tuicion i Des­amortizacion . me retracto de la dicha tras- ' . . . gresion, en la cual no tuve 1nt.ene1on nt ~o- Juntad de desobedecer la autoridad superior de la Iglesia, manifestando, .como manifiesto, mi sincero arrepentimiento, i prometo que siempre he sido i seré con la gracia de D10s, coloso defensor del vínculo de unidad i de obe­diencia al Vicario de Jesucristo i a las sagra· das leyes de nuestra santa Iglesia Católica, Apostólica, Romana, i a todo el Episcopado católico. Ademas, lamento profundamente el estr:tvío de algun0s de mis hermanos sacerdotes del Estado de Santander que, por desgracia han 1 formado una sociedad o pr~paganda que tiene por título, te El Roma~ismo no es el Cris~ia­nismo," i en cuyos escr1tos se han reproduCido errores que la. lglesia ha condenado i que yo por lo mtsmo repruebo i _condeno, ofreciéndo~e mediante la divina grac1a, a trabaJar en umon de los venerables sacerdotes í con los relijio­sos de mi órden, para a traer a los estra vi a dos al ver adero sendero de la luz. pa t'a que todos obedezcamos al sucesor de San Pedro i a todo el Episc•)pado, para la conservacio~ de la ~ni· dad católica, fuera de la cual no ha1 salvacwn. Igualmente declaro: que en la conferencia que tuvo lugar_ el 31 de o~tub:~ de 61 en~r? el ciudadano Presidente prov1sor10, el Ilnstns1mo señor Arzobispo i l~s venerables Prela~os. de los conventos, lo úmco que pasó fné lo sigUien­te: El señor J eneral Mosquera dijo estas ter­minantes palabras al sefíor Arzobispo : "El de­recho de Tuicion se reduce a prestur mano fuerte al culto católico, hacer respetar a los sacerdotes que son los maes-tros de la moral ; la moral es el fundamento de la sociedad; la sociedad va a perecer por falta de moralidad.'' Yo como Provincial dominicano dije: "Aprue­bo la esplicacion del derecho de Tuicion que acaba de hJ.cer el ciutladano Presidente. iQué mejor que proteja el culto católico 1 Por lo mismo yo de mi parte le doi las gracias." i apr cion únicamente se diriJ16 a la anterior proposicion de promesa de pro­teccion, i nada mas. Así en lo que aparece en el discurso dirijido a la Convencion de Ri~negro a la pájina 43, sufrió el ciudadano Presidente una equivocacion no pequ12ña, contra la que protesto. . . . Espero del señor V1car1o que, habiendo so­portado con pronta i fiel obediencia la. suspe_n· sion que se me imp~so durante mes 1 m~d10, me conceda la gracia de levantarme la i.hcha suspension en obsequio de la justicia i clemen­cia, i en favor del culto divino i de las almas que se me han encargado. Bogotá, 13 de enero de 1864. FRAI BENEDicTo BoNILLA. VICARIA JRAL.-BOGOTA1 ENERO 14 DE 18t14. Vista la nueva i spmisa solicitud del M. R. P. M. frai Benedicto Bonilla, Cura propio de la santa jglesia de Chiquinquirá, sobre qu.e se !e ab:melva de la censura de suspension de oficio i beneficio que le fué impuesta por des­obediencia a Ja Pastoral de la Vicaría jeneral de 8 de setiembre del año próximo pasado; i considerando: que el sci'íor Cura de Chiquin­quirá obedeció con prontitud la suspen3ion que le fué notificada, i observando la doctrina de la Iglesia, se abstuvo del ejercicio del ministe­rio parroquial : que no solo estuvo suspenso ~ durante un mes i quince días, sino que hoi se retracta. i manifiesta su arrepentimiento por la l transgresion a la órden de la. autoridad cele- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. E CA-T OL IC O . ,. s iástica comunicada en la Pastoral, manifes~ tando con sinceridad que no tuvo intencion ni voluntad de desobedecer a la autortdad de la Iglesia: que ademas afir'Da que no se ha so­metido a los decretos de Tuicion i Desamorti· Zil.CÍon connenados por la Santtdad del Sobe­rano Pontifice nuc>etro Santísimo Padre Pio IX, i protestados por el Ilustrísimo Prelado 1\'letropolitano, prometiendo que ha. siño i será celoso defensor del vínculo ele unidad i de obe~ diencia al Vicario Je Nuestro Señc1r J e~ucris­to i a las sagradas leyes de la s8.nta Iglesia Católica, Apostólica, Romana , i a todo el E pi s ­copado católico: que corrobora sus sentimien­tos ortodojos, lamentando el estravío de los señores sacerdotes que en el Estado de San­tander han formado una sociedad titulada, ':El Romanismo no es el Cristianismo"; i reprue~ ha i condena los errores publicados por dichos señores s a qerdotes, prometiendo trabajar para atraer a los estrnviados al verda.\lero sendero de la. luz: que tambien declara que el ciudada­no Presidente de la U nion colombiana sufrit} una equivocacion no rnui pequeña en lo que dijo a la pá]ina 43 de su discurso dirijido a la Uonvenoion de Rioncgro, hablando del .M. R. P. Bonilla, como provmcial do la relljion do · minicana, i protesta contra tal equivocacion. Por estas razones, i teniendo presente que si S. S. l. por resolucion de 31 de octubre t e l año último ha delegado al Vicario jeneral l a. facul­tad concedida por la santa Sede para a bsolver de las censuras a los eclesiásticos que se sorne~ tieran con juramento a la lei de 23 de abril so· bre policía de cultos, i obedecieron los decretos de Tuicion i Desamortizncion, siempre que lle­nen los requisitos do dicha resolucion; con mayor razon debe sor absuelto el señor Cura de Chiquinquirá, pues su culpabilidad solo consiste en el desobedecimiento a lo prevenido en la Pastoral citada de 8 de setiembre. Por 1·> espuesto, en nombre i por autoridad de la santa Iglesia Católica: Apostólica, Ro~ mana, de la santa Sede apostólica, i del Ilmo. Sr. Arzobispo Metropolitano, absolvemos al M. R. P. lVI. frai Benedicto Bonilla, Cura propio do la Iglesia parroquial de la. ciudad de Ohi­quinquirá, de la censura de suspension de ofi~ cío i beneficio impuesta por resolucion de 15 de noviembre del año anterior, i lo declaramos habilitado respectivamente para el ejercicio de todas las funciones del ministerio parroquial. Esta resolucion será publicada en un di a fes­tivo en la misa parroqui~l de la iglesia de Chi­quinquirá, para conocímiento de los fieles. BoNIFACIO A. ToscANO-PEDRO ZAPATA. Notario. ' Otro sí. Dése aviso de la absolucion del se­ñor Cura de Chiquinquirá, al señor Vicario foráneo principal de San S1mon-ToscANO, · CIRCULAR. ARQ.UIDIOCESIS DE SANTAFE DE BOGOTA­SECRETARÍA DEL GOBIERNO ECLESIASTICO, 24 DE JUNIO DE 1864-NUMERO 8 T. Señor Cura de . . . 'rengo el honor de poner en conocimiento de 1 usted, que el Ilustrísimo señor Arzobispo ha ctc legado a b. Vicaría jeneral, por determinado tiempo, la facultad de dispensar impedimentos de primer grado de aÉ.niulld ilícita ocultos, -para contraer matrimonio. ;r.~n cuanto a dis - pensn. de proclamas ha quedado restablecida la clisposicion contenida en el inciso 11, art ículo R.o del decreto orgánico de Vicarías i Pa.rro ­quias, i en consecuencia insubsistente lo que sobre ésto se dispuso en la circular de 8 de octubre último, número 2,020, inserta en el número 20 de': El C3tólico." Para hacer ménos onerosas a los inter esa dos las solicitucles de dispens a s, principalmente cuando distan aquellos de la capital de la Ar­quidióce~ is, seria conveniente se dirijtéran ta­les solicitudes por el correo nacional, p oniendo el pli<'go, segun el punto, en una de las esta­fetas de C1paquirá, Chocontá, Tnrmequé, Tunja, S untarosa, Soatá, Cocui, Chita., Soga· moso, Labranza-grande, Moreno, Aran ca, Oiba, Ubaté, Chiqumquirá, Puente-nacional, Vélez, Socorro, SanjiJ, La Mesa, Tocaima, Piédras, !bagué, J irardot, Espinal, Gua m o, Purifica.cion, Villavieja, Ne1va, Facatativá, Vi­lleta, Guáduaf;, N are, San J u:1.n de Rioseco, Ambalema, Lérida, Chámeza, Muneque; pues regularmente basta. una estamp11ln. (un real) para dirijirla, i otra que se colocará dentro del pliego para remitir de este D ·spncho !a contestacion a vuelta de correo, l'euuciéndose con ésto el gasto a 20 centavos, o sean dos reales; operacion que puede hacerse cuando, como ahora, se ha arreglado .por el Gobierno nacional el ramo de correos, de tal modo que garantiza seguridad. E¡:;to podría hacerso a JUicio del señor Cura con otros pliegos. Su mui atento servidor, MIGUEL ARIAS, ARQ.UIDIOCESIS DE SANTAFE DE BOGOTA­SECRETARIA DEL GOBlERNO ECLESIASTICO, 25 DE .JUNIO DE 1864.-Múmero 88. 1 Señor Cura párroco de ... Mui pocos días han trascurrido desde que llamé la atenciou del señor Cur.a, a las usur­paciOnes que, mas allá de lo que les permite la lei civil, cometen ciertos funcionarios, i hoi se hace necesario repetirlo por hechos que tienen la ctrcunstancia. agravant(; de ser acept.tdos ' por a lgun miembro del Clero i contra. los cua­les es preciso protestar para que no se entienda que una aceptacion aislada i desautorizada sea la espresion de aqui~scencia. por parte de la Iglesia i se establezca. un precedente funesto e incompatible con la independencia con que el Dios de los Ejércitos, hecho hombre, la fundó. Me refiero a las notas cruzadas entre el señor Jefe departamental de Occidente del Estado de Boyacá, señor Nicolas Fajardo, i el señor Cura de Chiquinquirá, R. P. frai Bene­dicto Bonilla, que rejistra el número 135 do "El Semanario Oficial" de aquel Estado. Sin entrar en el exámen de la conducta irre­gular del empleado que, contra la garantía concedida por el artículo 15 de la. Const1tucion nacional, dicta órdenes restrinjiendo la espre­sion libre del pensamiento ; sin atencler a la Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL' CATÓLICO. 69 disposicion de la carta fundamental del Estado, que el señor Jefe departamental cita, i que no puede ser opuesta. a la ántes espresada sin va­¡ ·iar las b:1ses rlelréiimen federal i. últimamen­te, sin fijars e en el contraste que hacen aque­l las piezas " En el Semanario," a continua· cion de la nota circular de la Secretaría. del In­terior i Relaciones Esteriores, de 22 de abr1l, núme ro 4, 0 Seccion 2, ~ en que, participando el rest able cimiento de la paz jeneral, se reco­mienda 8 C hag an PRAC'riCAM EN'!' E efectivos los de r ec hos indivi cluales ; sin entrar en ese exá me'l, p orq u e aun en el caso J. e que tales disposi ciones estuvieran concebidas en sentido opuc~to, b Iglesia no las aceptaría, toda vez que menosca 1 en su libertad de accion, se hac/3 preciso m~mifestar que pretensiones semejan­tes son de todo punto inadmisibles. Quiere el señor Jefe departam<'.'ntal arrogar­se el derecho de juzgar i penar al Sacerdote que ejerce el ministerio de la predicacion, i des­pues de su juicio trae el ejemplo de "los Após­tol es i primeros discípulos de Jesucristo que pred icaron obediencia, paz i caridad. " En primer lug ar, no es competente el citado fun­cion; lri o p a ra t al juicio, i en segundo, no es esncta el ejemplo que cita, porque la obediencia que inculcaron los Apóstble5, no fué absolut:t sino rdativa, siendo el Prínci po de él los el primero en 0sceptuat· los casos en que contra­riaran los mandatos humanos a los dlVinos De otro modo no veneraríamos a los mártires en lo a!t.:-.res. · Si e s inacep table la conducta del señor J e­fe <1cpal tawcntal en su nota de 12 de mayo, • mucho m a s lo es la del señor Cura que sin bas- 1 tarlc el c o lmar de satisfacciones a la autoridad civil, t e.cm ina p o r prometer que serán cumpli­da s s us ó R DE NES, con lo que reconoce el su­puc , to d r rcdw de interrension i de encadenar aquello q e Jebe ser tan libre como lo quiso su Divino fundador : la palabra Divina, que a des pecho de l as potestades de la tierra se ha hecho rcsOI ; ar en las mas apa~·tadas rejiones del nuevo i del antiguo mundo. No re crea por esto que se obstruya todo recurso para cortar los abusos que acaso se puedan cometer en la cátedra santa. El dere­cho de REPRESENTAR, de ESCITAR (no de or­denar) a los respectivos Prelados para que, prévio exámen de los hechos i no por lo que por sí i anto sí falle el que representa, dicten resolucion, consilia el órden con la inde penden­cia de la Iglesia, Ja que por otra parte no acep­ta dentro de su seno la libertad de la palabra con la latitud ilimitada con que la consagra el Cód1go de la Nacion, estando en ésto como en los dcrnas actos del ministerio, el Sacerdote, bajo la inspeccion de sus lejítimos Pastores. Actos como el que queda relacionado, se es­tán repitiendo en aquella scccion de la. Repú­blica, en la cual las garantías constitucionales son holladas con frecuencia. Prueba de ello el hecho gravísimo que acaba de tener lugar en Chivatá, pueblo contiguo a la capital del Es­tado, en el cuaJ, con ultraje a la Majestad sa- (~ramentada que estaba espuesta, nn tal Jobo Alvarez, interrumpió al sacerdote que exhor­taba al pueblo católtco ~1 cumplimiento det precepto de la misa, contradijo su doctrina i lo amenazó dentro del templo con escándalo del pueblo fiel; i por una causa semejante se per­sigue actualmente al sefior Cura de Santa Bárbara de la ciudad de Tunja. . Es, pues, precJso que el s eñor Cura en tales casos rechace con firmeza apostólica todo lo que tienda a encadenar la Iglc:.-;ia i a estable· c e r práeticamentc una fiscalizacion humillante · de un poder est r uño a ella misma, i con éste objeto es que me dirijo con oportunidad al se· ñor Cura en virtud de las resoluciones del Pre· lado que ha protestado contra todo lo que ma­nosea hP 1os derechos de la Iglesia, a fin de que com ' ·a cerdote proteste contra tales procedí· m1entos, i como miembro de la N ucion reclame ante las autoridades civiles de órden sup-er10r, los derechos que le garantizan las in:--.titucio~ nes, a ejemplo de San Pablo, que hizo valer los fueros de ciudadano romano, en ocasiones análogas. .Del señor Cura atento servidor, MIGUEL ARIAS. .A.RQUIDIOCESIS DE SANTAFE DE BOGOTA­. TUNIO 15 DE 1t>64. Señot· Secretar o d el Gobierno eclesiástico. Tengo d honor de p o n e r en conocimi ento de uste1l, que a virtud del privilejio concedido por la santa Sede a los padrl's recoletos de ésta ciuclad, a cuya corporé•cion pertenezco, i del jubileo igualmente concedulo a nuestra iglesia por la esposicion del Santí -.1m o Sacramento en 40 horas, he tenido a b1cn colectar algunas limosnas p a ra celebrar la fi<'sta de Nuestra Señora del Campo, i el <'jerclcio de las 40 ho­ras en los di as 2, 3 i 4 de 1 entrante julio en nuestra iglesia. Dios guarde a usted-FR. B .-\SILIO RóJAS. REDACTOR, VENANCIO ORTIZ. Mu. GUIZOT 1 EL CATOLICISMO. EL PADll.E LACORDAIRE, RU}IBOLDT 1 EL POETA SHAKESPEABE. Se ha hablado en el núme~·o anterio1· de éste periódico, aunque mui someramente, de la nueva ob1·a que está publicando en éstos momentos el famoso escrito r Mr. Guizot, protestante por tra­diciones de familia i po1· educacion, pero respiran- ' do en todos sus escritos el espíritu católico, en funza de su 1·azon i de las elevadas inspiraciones de ~u alta intelijencia. Esta obra titulada ~Meditaciones relijiosas , es corno el complemento o continuacion de la que en 1861 i 62 publicó con el título de La Soeiedad i la Iglesia en el siglo XIX, i, segun se dijo ya, consta de cuatm pa1'tes que fot·man cuatro voh'l· menes, en que trata de la esencia de los dogmas cristianos, de su histot·ia, de su estado actual i de su pot·venir, i demuestra Ja necesidad i la existen­cia de un órden sobl'enatual de cosas que gobierna al mundo, i que está fuera del alcance del hombre Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 60 EL CATOLICO. así como la autenticidad de las profec(as i de los Evanjelios, i p1·ueba la divinidad de Jesucristo. Mr·. Guizot, e~e talento privilejiado, ese pensa­do• · profundo e h-resistil:>le en su lójica, ha qued­do eJ los últimos años de su vida, en que aun 1 : 1 •. conserva una cabeza de jóven, fresca i en la pleni· tud de sus facultades,consaga·at· sus profundas me­ditaciones al estudio de las ga·andes verdades reli­jiosa ·, como las mas importantes para el hombre 1 en todo tiempo, pei'O mas especialmente cuando ya ha reconido una sél'ie de vicisitudes, de peri-pecias, i concluido la carrer·a de Jos placeres, de los honores, de las glol'ias mundanas, i adqni!·ido, a fue1·za de a·etleccion i lectum un caudal de desen­gaños i espet iencia que le hace conocet· que la ciencia humana no puede jamas satisfacer ni el espíritu ni el cot·azon del hombre, i busca mas allá de su horizonte ott·os hol'izontes, no desconocidos pet·o sí velados po1· una mano misteriosa. En la primera obra de que hemos hablado Mt·. G izot, con su t·ecto buen sentido i con una tole­rancia ejempla1·, dit•emos mas, con la hidalguía del que defiende al que es injustamente atacado, pi'Ueba, no solo la necesidad de una absoluta Ji­bet ·tad pat·a el Catolicismo, sino la necesidad im· periosa de la existencia de la Iglesia Católica en toda su plenitud i vig01·, con todos sus dogmas, sus leyes, su disciplina, con su unidad indispensa­ble, en fin. Hé aquí lo que af1ade un periódico frunces de gt·an reputacion al hablat· de Mr. Guizot con éste motivo: " Un discurso pt·onunciado últimamente en la , : sesion anual de la " So ·iedad bíblica, ,, revela, ' por algunas frases dignas de atencion, las disposi­ciones enteramente cl'istiana,s con que Mt·. Guizot ha escrito su nuevo libi'O. El habla siempre como protestante; defiende lo que queda aun de Jos , pl'incipios,de la t1·adicion i de las t·eglas de lajerat·­quía en el seno t11rbado del protestantismo ; pero miéntras mas confianza i fia·meza manifiesta en ésta tm·ea, como lo hace justam~nte notat· la Gace­ta de Francia, mas se acea·ca i se adhiere a Jos principios del Catolicismo, se muestra mas impt·eg­nado de su espí1·itu, i solamente la letra lo separa de él. Sus palabt·as traicionan, sin quererlo, su , pensamiento, o mas bien sus sentimientos, hijos 1 de la fuet·za it·t·esistible de la verdad i de la luz que alumbra el interiot· de esa grande intelijencia. " Nuestros libt·os santos, dice Ma·. Guizot, son Jos tastigos divinos de las leyes del órden m01·al, re­veladas po1· la accion sobrenatural de Dios, pat·a se•· l:l 1 uz i ha~et• la salud de los hom bt·es. " ¿N o se sigue de aquí, decimos nosotros, que éstos libros son supel'iores al hombt·e, i no deben tli pueden ser abandonados a la caprichoza interpretacion de cada uno? Rec01·dando los presentes esfuerzos de 1 la incredulidad conta·a el Evanjelio, dice tambien 1 Mt·. Guizot: "Un libro humano no habría podido resistir tales ataques, i salit· siempre victorioso en todas las luchas. " ¿Del mismo modo, no podt·ia 1 recOt·dat·se a Mr. Guizot lo que ha dicho del Cris­tianismo en su Historia de la civilizacion, a sa­ber: que sin la autol'idad de la Iglesia, sin el Catolicismo, la Relijion cl'istiana hab&·ia pet·ecido mil veces, en medio de los desórdenes i de las ti­nieblas que han acompañado la caida del mundo antiguo? Hé aquí dos bellos pensamientos que se complementan el uno al otro." Lo que pasa hoi mismo en el seno del pt·otestan-tismo i a los ojos de Mr. Guizot, es una prueba ba·illante de la necesidad de ésta autoridad preser­vatriz que la Iglesia Católica es la úuica que puedJ revindicaa·. Grande ajitacion ha pi'Oducido entre los pt·otestantes de Francia la destitucion de un clérigo partidario de las doctrinas de Mr. Renan ( el blasfemo ) i con éste motivo se ha dia·.jido una pt·otesta al Consejo presbiterial contra ésta medí- 1 da del mismo Consejo: medida que ha recibido la plena ap1·obacion del Consistol'io. Un diat·io anun~ cia t·ecientemente que se hallan en Paris cerca de ciento cmu·enta Pastores de los divet·sos Consisto­rios depa1·tam cntales, que van a reunirse enAsam- ' blea en la Capital. El objeto de sus delibea·aciones será una declanltol'ia de los principios teolójicos ; i es indudable que las cuestiones que han ocasio­nado la destitucion del Pastot· recaJcitrante, se discutia·án en é3ta reunion. Es mas que probable que la mayoi'Ía, sino la totalidad, condenan\ a éste, pet·o es evidente que en cualquiera hipótesis, se pmducia·á en el protestantismo frunces una nueva disidencia, escandalosa, que aumentará la anar­quía i confusion. Miénta·as que el pl'Otestantismo continúa así desrnoa·onándose mas i mas i disol\'iéndose, el Catolicismo no cesa de estendet·se i de justificar cada día su hennoso i significativo uombre, ~tni­versalismo, que ésto quiere decit· Catolicismo. Nuevas iglesias se levantan po1· donde quiera, i corno pot• encanto, en todos Jos puntos del globo~ pat·a atestigua~· el podet· de una Relijion que no varia con los tiempos, que es la misma en todas las latitudes i cuyos hijos reconocen todos i vene .. ran al mismo Pastor. En éstos mismos momentos la ciudad de Northampton, en Inglaten·a, ·naugu-t• a con júbilo i entusiasmo una magnifica cntedt·al en presencia de Su Eminencia el Cardenal Wise­man i de un ga·an concurso de Obispos i Clero. Mucho inas léjos, en Australia, es decir, casi en nuestros antípodas, en un pais ántes salvnje i ya rico en poblacion i en hermosas ciudades, el Cato­licismo planta la cruz i eleva en los ait·es éste sig .. no de su infalible triunfo. 180)voo francos habiau 1 suministl'ado en pocos dias los católicos de Bl'is- l,. banc para la construccion de su catedral, i 20,000 mas habían sido depositados sobre la primea·a pie- ' dm de ésta basílica australiana. Si de la Occeanía nos ta·asladamos a China, se presenta a nuestra vista un espectáculo no ménos significativo i sorprendente : preparábase allí una cet·emonia que hará época en los anales t•elijiosos. Tratábase nada ménos que de la consagracion so­lemne de la iglesia católica de Cauton. El Cónsul de Francia ha conseguido que aceptase una invita­cien oficial para ésta fiesta el Vil·ey de los dos Kouango, i que concul'l'iesen a ella los dos Jenem­les tárta1·os, el Gobernador, el Superintendente i el Teso1·ero de la provincia. Se aguardaba con curiosidad, dice el Monitor, el espectáculo e~tra• iw de las autot·idades chinescas asistiendo oficial­mente, i yendo a rendil· homenaje a un culto cu­yos fieles hace poco tiempo eran condenados a muerte. Oigamos ahot·a algunas de las últimas palab1·as . que esc&·ibia el R. P. Lacordait·c, desde Oxford, Inglaterra, i que d::m a conocet· los pwgresos del Catolicismo en aquel país. El ilustre oradot· re­fie¡ ·e que acaba de \'et· e1 Colejio de Santa María deOscott, cet·ca deBirmingh(\m, que es un palacio mas bien que un Co\ejio, el convento de los Cis- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 1 'EL CATOLICO·. 61 . i ;;.~~s:~~~;,::.:;.;-;. ~~~,;:;;;;;,;-~:;~.:~~:,~ · \Vilfredo etc,¡ añade que espe1·a ir al día siguien- los mism·ables americanos, hacemos causa comun ; 1 te a visitar una casa de noviciado de su ó1·den. con los mlseral)tes i desocupados de otros pníses, En seguida dice~ .. _ que viven de las revoluciones política~ i relijiosas, "Dios tral>é!ja oo la restauracton de u,uestr·a para s-uplant~•· -nuestra sauta i. amable ~~!ijion, ó1·den en todos Jos países que he 'Visitado. Esta es la Relijion del pueblo, de la Nacwn, la Relqwu de . Ja primera \'ez que se funda en Inglaterra i en 'Bolíva1·, de Nat·iilo, de Sucre, de Santandea·, de 1 Holan-da an noviciado, i tambien en Irlanda. Se Resh·epo, ele Cáldas, de Mamique, de Lozano, de 1 : siel~te ya que comi<"nza -en éstos países el reinado Monseflo1· Mosquera i de todos nuestros ~randes 1 de la libertad relijiosa i que .produce sus efect<:>s. l10mbres, poa· los delirios det libre exámen i pot· ' Por todas partes se -edifica, se funda, se ca·ea, i se las necedades de los' charlatanes de ultl'ilmar que hacen se.t•vir las artes a la Iglesia. Puede uno se llaman a sí mismos ilustrados, i que- en el .andar r mostrarse con libertad., i está como en su fondo no tienen ct·eencia ni relijiun nlguna, porque .propia casa .. Bi•·mingham., .poblaci<:m de doscien- ninguna han estudiado ni conocen por principios, tas mil almas, tiene un Qbispo, una Catedral, una i cuyo único culto, si nsí puede llamarse, es el -casa del Oratorio, tm ~o-u vento de mujeres, el Co- sensualismo mas grosero, i por consiguiente los Iejio de -Oscott, una fál>a·ica admimble de oma- Yicio · mas degradantes. men.tos licacion, bajo la pena de escomunion mayor, ipso Jacto incut-renda. I mandamos que los Vicarios i Párrocos recojan los ejemplares que hayan circulado eu sus felig•·esías. ·El Sumo Pontífice en sus Encíclicas, habla a sus hijos como un Padre amoroso, aconsejündo­Jos i amonestándolos, para que si se han estravia­do, vuelvan a la senda de la verdad i de la justicia. Encargamos a los P(;ü·rocos, que hagan presen­te a sus feligreses, Ja obligacion que tienen de obedecer a la cabeza de la Iglesia católica, i de respetar i venerat• todos Jos actos emanados de la Silla Apostólica. La tendencia, que hai por pa1'te del Gobierno de Colombia i de los enemigos de la Iglesia, es de descatolizar el país ; i Jos hechos que se han con­sumado en la Nueva Granada lo dan mui bien a conocer. Habeis visto la persecucion sistemática que se hace al Clero, reduciéndolo a la mas hu­milbnte condicion; desteaTados i perseguidos los Obispos, arrebatadas las propiedades sagradas de las iglesias ; el culto divino reducido a las ~irnos­nas de los fieles ; estinguidas las comumdades relljiosas de uno i otro sexo; despojadas de sus bienes i rentas contra Ja prohibicion i censuras de Jos sag•·ados cánones. El Sumo Pontífic~ ha dado por írritas aquellas leyes, como contrarms a los derechos i doctl'ina de la Iglesia. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 62 EL CATÓLICO. --l ¡ - _ _,......_...,._~~- ·' ,-. ,-....----~ .,..........r--..r--.~ ~"'"'"'·~r-..r,.-..,...__,....··'"'~~._r....-..._"-~ '"'-'"'~~.r-...r-.../"'../"•-".r~~-...,...,... ~- t. Et venerable Clem de Popnyan ha replicado i contradicho en muí buen sentido la publ icacion del ciudadano Jeneral Mosquera i recomendamos a los fieles su lectm·a. Aunque ausentes de nuestros amados dio ·esa­nos, por mútivos graves, los tenemos presentes en nuestro c01·azon, i elevamos contiuuamPnte nues- 1 tl'Os mas fet·vientes votos al Dios Todopoderoso, para que permanezcais fi1·mes en la unidad de la fé, i en la. conse1·vacion de la Relij.ion CatóJi,ca, Apostólic,_ Romana, como herenc·ia que habeis re­cibido de vuestt·os mayores ; i al mismo tiempo os damos nuestra pastoral bendici0n. Dado, fit·mado de nuestra mano, sellado i re· frendado por nuestro Secretario e.) Quito, a 1. Q de abril de 1 8 6-t. J0SÉ ELHS, ÜDISPO DE PASTO. Jesus Troncoso" Pro-sec1·etar·io. NOS EL DR. JOSÉ MARÍA RIOFR lO, POR LA 6T\ACIA DE . DIOS I DE LA SANTA SEDE APOS­TÓLICA, ARZOTISPO DE QUITO, ETC. .Al Clero i,jieles de la Arquidiócesis, salud, paz i bendicion en et Se11or. Quanta malignatus est inimicus in santo! (PS. LXXIII, 3). Carísimos hermanos e hijos nuestros: Llenos de la santa indignneion i profundísimo pe arque siente un hijo amoro ·o al ve¡· insultado po1· el in·espeto i ofendido por la calurnnia clllom­bre sin mancilla de un P Hcll' , vetH'r·able, os diriji­mos hoi éstas palé bras pa.·a reprobar con toda ·la ene¡·jía de nuestm deber pastoral, el .·scandaloso i sacrílego manitlestt' del Jeneral 1\Tosqt era, ex­presidente de la vecina BPpública, dado en Popa­yan el 12 de febrero de éste afw en contP s t(lcion a la Eneiclica que cspiclió Nuestro Santi~imo Padre Pío X, el17 de setiernbre de 1 63, sobre las leyes anticatólicas i actos irrelijiosos i atentatorios del Gobiemo colombiano, contra las personas i pl'O­piedades del Clero" que os hice conocer en otra oca­sion. · Tal manifiesto, compendio de las tenebrosas doctrinas de Enrique Vlll i Lutero, Jansenio ¡ Richer, que parece dí<' ado por el espíritu infernal de Leon el Isáurico i _de Juliano el apóstata, no so­lo es un desahogo del ódio mas frenético COi.ltl'a la Sede Apostólica i sus Ministt·os, una p1·oclamu de rebelion i un conjunto de declamaciones infuncla­das i aun injul'ias grosems contra el Papa, sino tambien una it·reve¡·encia impía ácia la memoria del prec aro Pontífice, del inmortal Gregol'io VH, que ¡·ecibe en nuestros altares el culto de los santos. A la brnevolencia patemal, a la dulce temuru, a la solicitud esm erada i caridad ardorosa del Pon­tífice ilustt·e, que gobierna i custodia el rebaiio de Jesucristo, como vijilante guardian, contesta el Jeneral Mosquera, con la rábia del loho furioso que acomete el redil para devot·arlo, contt·a el Pasto1· que lo defiende ; a la verdad etema de la cátedra infalible del Catolicismo, i .a la doctt·ina vivificadom de la Iglesia, opone las est¡·avagan­cias de la mentira, las blasfemias de Ja bet·ejía, i la audacia de la impiedad. 1 Tan inauditas profanaciOJles, e itTeverentes in­sultos, iudignos de un hornbt·e público, dia·ijidos · ·contm el Obispo de los Ohispos, contnt el Sobet·a no mas respetable i el anciano mas digno po1· la corona de beatitud i la tiara del Supremo Sacea·- docio, que ciñe sus canas bendecidas, nos han lle- 1 nado por una pat·te, de SOl'pt·esa i dolor, indignan­do i entristeciendo nuest1·o corazon filial, i po1· otra de temor de que cunda el contajio pestilencia! en la g1·ei confiada a mwstra guat·da, i envenene· 1 las almas el influjo mort1fet'O de los abominables pl'indpios de la it-relijiou, arrastrándolas a la muer· te sempitema. Pot• ésto, aunque alPjados del mal · i libres, por la misericordia de Dios, de todo vín- 1 culo i relacion politL.:a con aquel Jeneral, no hemos querido dejar de ap1·e ·urarnos a dar el grito de alarma a nuestros hijos, i de alerta a nuestros coadjutores en el apo.sto\ado, pa1·a que no cesemos de pedi · n l Señor ros siga defendiendo de las ma­quinaciones de malignidad i de la multitud de los que practican iniquidades. ( Protexisttme. Deus · a conventu matignatium, a multitudine operan­tiwn iniquitatem) ( PS. I .. Xlll) i nos dé la for­tal(>: r,a necesaria para rechazar el contajio del eiTor con la oracion. la predicacion i la enseñanza. Bea­tus vir q~ti non abtit in consilio. impzon(,m. et in 1 vi a peccatorum non stetit, et in cathedra pesti­lent- im non sedit, sed in lege Domine 'l)oluntas ~jus ( I S. I-V. I i 2.) Prohibimos, por tanto,. la circulacion, ¡·etencion i lect\.Jt'a del mnnifiesto refe­rido, ordenamos a nuestros Vicarios i Párrocos em­pleen el mnyo1· celo i esquisito esmero en impedit· la propagacion de tan nefandas doctrinas, conmi­nando a los que retengan dicho documento conque les aplica1·emos las censuras cannido con enerjía los derechos de la Jglt:sia Ca­tólica replicando al ex-Presidente con moti ·o d(7 la dicha publicacion,i ofrecemos a los el'lesiústicos seculares i regulares, a l&ts relijiosas i a los Prela­dos de Colombia que sean víctimas d(• la persecu­cion · por su d~nodada conduda en la coofsioa i defensa de la fé, un asilo fratemal eu nuestra Dió­cesis, ( Cwn autem pe1'sequentur vos in civitate ista, fugite 1·n atiam) ( Math.-X. ". 23.) i la paz dt>l Señ.o1·, que a todos os envio, con la beu­dicion del Padre, i del Hij<> i del Espíritu Santo .. Dado en Loja, a 24 de abril de 1864. JosÉ MARÍA, AuzomsPo DE QmTo. Pedro José Bustamante, Pro-Secretar·io. MANIFESTACION A LOS CATÓLICOS. ''Lorenzo Saa vedra, Secretari-o del señ () J' Co- ·t·ejidot· de ésta Aldea, Fe ipe Mercado. ~ .... rtiflco· e Ól'dPn de (licl.o funcionario, i a petieiou del . eüot· Cura párroco de} Distrito, la autenticidad de la dilijPncia siguiente ~ " Fn Guzman a 30 de mayo-de 1863 , yo el in­frascrito Corn·Jidor de ésta Aldea, en cumplimien­to de lo dispuesto por el seño1· Goúel'nador de ésta , pt·ovincia, i que comunicó a éste despacho pot· ofi­cio fecha de ayer, número 11., le recibí juran~ento al señor Cura, Presbítero José Patt'icio Parédes, que hizo por Dios N u estro Señor, i una seiial de c1 1z, bajo el cual ofreció obeQ.ecet· la Constitucion, leyes i autoridades de la Republica i del Estado, i someterse i respetar la Soberanía de la Naeion, siempre que en nada afecten las disposiciones ca­nónicas, i eclesiásticas; i fhfna.-EI CotTejiclor, FeUpe Mercado. - El Párroco, José Patricio Pa­: rédes.-El Secretario, Lorenzo Saavedra. '' "' En cuyo testimonio doi fé que la di lijencia inserta, se halla rejistrada en el libro de juramen- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL CATÓLICO. 68 tos de la materia, a cuyo orijinal me remito, i pa- 1 '' El « Monitor de San Francisco >> nos anuncla ra qnr el interesado haga uso de ésta copia, la la llfgada a la Califomia del R.P. Vaughan ,oblato compulso en Guzman, a 31 de mayo de 1863.-El 1 de San Cárlos, enviado por el Cardenal Wisfman Secretario, LMen:::,o Sanvedra. " con el fin de re<'ojet· suscticiones para ayudat· a ti Como se vé, los términos de éste jmamento son la ereccion de un seminario de misiones estran-tnn sencillos, q,le no necesitan romentario. El jeras en Lóudres. Al pa~ar por Panamá el padre .. Diviuo Maestro mandó d¡,u· al César lo que es del ¡ Vaugha n , en donde se detuvo ocho crito rebusn•· el administrar los saet·amentos a una mul-obecle<'' eudo, se sometió al Go 1liet·no que rq..lrPsrn- titud de riudadanos de la B.epública de la Nueva . ta al t.ésat·, sin alterar en nada el segundo indso Gr¡:wnda que octfrriet·ou en trop·el en torno de é1, de 'ste prt>cfpto, como se lee terminantemente en al Hotel Aspinwal en donde estaba alojado. Hacia la e.!Pprion de la frase que dice: " Siempre qu.e mas de un año que bajo la miserable t.il'~mía de en nada afecten las disposiciones cawínicru:; i los pC'tlueflos dé ~potass ele ésta antiuun colonia eclesiásticas,'' en cuyo ejet·cicio he continuado espaiioln, los fitles estaban privados ele los ausilios i mperturbabl-emente mis funciones pastorales apa- espirituales, estando alli los clérigos sometidos al centando mis ovfjas; i sioemlJ¡ugo, e~timo de mi réjimen de la Francia en la époea del terror, o de 1 debet· publicar el acto de mi sometimiento, en hoja a Iglaterra l jo Isabel i sus sucesot·es. Las auto- ¡', sqelta, pot· no haber tenido lugat· su insercion en ridndes •·epublicanas de Panamá se indignat·on de Jas columnas de "El Cnucnno " i pt·ecisamente que s 1 autoridad hubiese sido qesconocida por el ·¡ cuandl) considero útil su trasc0ndencia. pueblo que encontraba a'Jsilios espil'itttales en un · JosÉ PnTRIClO PAnÉnEs. Sacerdote no juramentado, e intimat·on al misio- ~ -=o----------= ne1·o que compareciese ante éllas a responder de '1 Jlll}JllJJl~/ll!JrJ.JSJ~ semfjante infraccion de b lei. El padre Vaughan , por su parte reclamó el derecho que segun los Señor Jefe Municipal. tratados le dá su calidad de ciudadano ingles para Rafael Femández de Soto, Presbítet·o domicilla- ejercer su culto en su casa, ¡)l'otestan ' IO contm la rio de éste Obispado, a U. en debic a forma repre- CI'Ueldad inaudita de las autol'idades que Je im­sento, que en 13 de junio de 1863, se me llamó pedían administrar a los m'H'ibundos los e nsuelos pot· el Gobernador de la antigua pt'O\incia de de la Relijion que t·eclamaban de él. Buga, con el fin de que prestara el juramento de "El Cónsul inglrs i los americanos del Norte i que habla la lei de 23 de abl'il de 1863, sobt·e" po- los europeos residentes allí,protestat·on igualmente licia naeioum en materia de cultos," i habiendo contt·a la bat·bal'ie de los cléspotas <.le la Nueva , tenido mi~ esc1·úpulos para someterme a la forma- Granada. Finalmente el padre Vaughan tuvo que lidad, consulté con la autoridad eclesiástica en dar fiador de su regt·eso pat·a compal'ecer ante .el un ion del Presbítet·o Pedro Santiago Quintero, so- Prefecto del Distrito. El Cónsul ingles debe avi­b¡ ·e la conducta que debiera seguil· eu tan delicada sat'le el resultado de la caus.a. materia; ¡ como la resolurion del Supet·iot· me "Tal es aún en el siglo XIX como entienden autol'izaba pm·a presta1• tal juramento, lo prrsté, la libertad ciertos republicanos que escluyen la cspresando: que me sometia a ¡3 Constituci<>n i sola libertad indispensable a los hombres de bien. leyes de la Repúblk a, en todo lo que no fueran "Oh 1 miset·ables tiranos que hablais de libet·· contrarias al dogmn, a la libertad ¡ a la disciplina tad contm Dios, a quien con vucst1·o tonto ot·gullo jeneral de la Iglesia. El señot· Gobemador no puso quereis posponer si pudierais .. " en la dilijencia éstas resenas; i es por ésto, i por -Lacanwana que anualmente pilt'te de .M:m·se­dejm satisfecha mi conciencia, cumpliendo a la lla pat·a la Tie!Ta santa con el objeto de asistiL· a vez con las resoluciones de Su Santidad el Papa las solemnidades de Id semana mayor en .Terusa­Pío IX, que voluutariame·1te protesto ante U, len, ha sido éste aiw numet·osísima i la mayor. contra el juramento que presté1 declarando a la parte de los pasajeros eran personas de distincion. faz del rnunJo: t.o Que soi católico, apostólico, -Existen actualmente ·en los hospitales del romano: 2." Que estoi sometido de todo corazon ejét·cito austro-prusiano mas de cien relijiosas con­a !a Cabeza visible de la Iglesia, en quien reconoz- sagt·adas a cuidar de los heridos i enfermos. La co el Pt·imado de honor i jlll'isdiccion; i a.o Que mayor parte de ellas P-ertenecen a las ordenes de como ciudadano de los Estados Unidos de Colom~ las Hermanas grises, de las Het·manas de la cari­bia, me someto a las leyes que emanen de una dad, de las ft·anciscanas, i de las Hennanas del ót·~ fuente lejítima, en tanto que éllas no ataquen la den Teutónico; doce Het·manas de la Misericot·dia Relijion que profeso, porque es de mi deber obede- habían llegado igualmente de Coloniaal ejército,pa­cer pl'irnero a Dios que a l os hombres. ra consagrarse a los mismos piadosos deberes. No Sín·ase . aamitit·me ésta pt·otesta, i mandar habrá lector tan cándido que pregunte si éstas se­depositat · ésta tepresentac!on en su archivo, dispo- ñoras son pt·otestantes, pues nadie ignora que ésta niendo se me dé copia de élla i de la 1·esolucion ft·uta de la cal'idad no se.dá sino ian llegado po1· eso. Lns seis rclijiosas, pues, despues de pe~sa1· mil sustos, regresa•·on a las cuatl'O de la madru­gada a su casa de d-onde costó t•·abajo hacerlas salil· a la madrugada del din 2 -í, de la misma ma­ne• ·a. Tenían que camina•· tres horas para llt>~ar al punto convenido i esperm· a las clemas. En ésta yez fueron mas af01·tunadas, pues hnllnron listas las bestias, i las otras qne lo supieron no pasaron la angustia que babinn sufrido el 23 sin tener no­ticia de su~ hermanas. l<'uer·on, pues, yéndose así hasta que se reunieron todas. · En Patía sufrieron fuet·tes aguaccrost- du1·ante una noche que pasa1·on br~jo un toldo, catadas de agua hasta la ropa interio¡· i sin tene1· como mu­darse, porque todo se babia mojado. Lo mismo les sucedió en la orilla del Juanambú que p(.l.saron por tat·abita. En léis montañas óe Meneses i Berruécos, su­fl'iel'On muchos ponazos i una lluvia constante, por cuya razon una de ellns se enfermó i tuvie1·on qne llevarla en guando, pero en Pasto se habia mejor;1éfo. El día t.o de éste mes twn debido continuat· su marcha triunfal pa1·a (, uito. 1 decí­mos triunfal, porque en todas pnrtes han sido •·e­cibidas pot· las poblaCiones con un entusiasmo digno de las snntas YÍI'jenes que padecen pot· su fé. -En la parroquia de Sasaima se consagró al culto de la Vírjen María todo el mes de mayo. El Párroco, doetor Juan F. Rójas, ha difundido entre sus felf~reses i procut·ado mantene•· ésta devccion sublime a la Madre de Dios i de los hombres, i en éste año el pueblo se esmeró en sus obsequios a la dulce Past:o1·a de Ist'élel. Las flores i los perfu­mes, el canto i la oracion, sencillos discursos pronunciados por niños, todo hizo interesante i fructuosa ésta fiesta de un mes que te1·minó por ¡: una velacion al S.A.NTÍSIMO S.A.CRAMENTO, en la que ' 1 se pidió la paz pa1·a la Iglesia i pa-m la Patl'ia por la intercesion de la· Muje1· divhm que· sh·vió de ta­bernácul6 al Homb1·e Dios. -En Funza,et Párroco doctor GrE>gorio A1·dila, hizo el jubileo de Cuat·enta horas, i sus feligreses se mostraron durante ellas, l!enos de fervor como pam mostrar cuan inútilmente se t1·abaja en la inconcebible obra de Brranca•· el Catolicismo deH · c01·azon de un pueblo que Jo ama mas que todo. La fiesta fué cua~ nuncn suntuosa.· -Recomendamos la lectura de un folleto titu­lado: Apuntamientos para la biografía del Jlus­l'ris, imo Seilo'r Doctor Jo é Luis Nitio, digntsima C bispo de San Pedro de Pamphma, escrito en San Antonio del Táchira po1· un granadino, i pu­blicc do en San Ct·istobal. Contiene documentos curiosos e importantes para la historia política ii 1 eclesiástica de nuest1·o país. -Cuando J. Guttemberg ponía en practica su casi milngros(). descubrimiento, decía Heno de sorpresa i de espanto : << Soi i-nstrumento de Dios para sacudir el mundo.» Tenia razon. Mucho mal i mm·ho bien ha hecho a la humanidad la imprenta Pero entre 1 los bienes debernos <:ontar como el primero la rapi ... · dez con que mnrchan lns ensei1anzas de la historia, que es In maestra de los pueblos i de .J.os majistrados, de las escueias políticas i sociales. ¿Quién, sin la rapidez que la imprenta dá a las manifestaci~nes del pensamiento, podría comprender las causas por qué en Méjico se desacreditó el siste- 1 ~ ma republicano, i los hombres mas prominentes de . nquel rico i populoso país se echaron en brazos del imperio? u El Eco del Pacifico" diario de California, corres pondiente al f 3 de febrero último. nos dá la respuesta. <sion es­taban ohligndas a virir dentro de sus claustros, las eeharon a la calle ''endiéudoles sus conventos i apro­piando e sus bienes, que no eran otra cosa t]ue las dotes que para su subsistencia les habian dado sus padres o la piedad de sus bienheehores. )> 1 en el mismo diario, correspondiente al 16 del mismo mes, continúa dando la respuesta, i dice que han dictado leyes en qu e 1 stas lecciones son eloeueutcs. GARANTIAS.-1\lultiplicados son los atentados de todo jénero que se cometPn en el Estado de Boyacá, i frecuentes los actos de arbitrariednd en contra de la libertad relijiosa. De Tunja nos escriben refiriendo ! el heeho de haber sido azotados i apalet~dos en la 1: plaza pública por el mismo Presidente del Estado los sobrinos del señor Cura de Santa B.ubara, por habet·· éste predi<"ado en su iglesia, sobre la obligacion de dirijir In palabra divina a los pueblos, i se nos agrega: ct Esta es la libertad relijiosa que tenemos por acá. El primero que tuvo el ARROJO de dirijir la palabra de Dios al pueblo ha tenido que huir para no set· apa­leado. El templo se ha cerrado,)> IMPRENTA. CONSTITUClONAL.-POR N. PONTON. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 56

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 40

El Católico - N. 40

Por: | Fecha: 05/03/1864

OFICIAL. Cin LATI. Al'qaidiócesis de Saultt{e deBogota.-Secrctaria del Gobiemo cc/c$icistico.-20 de febrero do 1861¡.-Ntímcro 41. • Seiíor \icario princi¡>al de •••• Por la Pastoral de 10 de enero último, hizo notar IJ \>icaria jenetal que es ahora tanta mayor la olJii¡;acion de atender a las necesi­dades el!\ los hijos de la Iglesia, c_uanto.~lte Jos enemigos de nuc~tra l sacrosanta ReltjlOn no desmayan en sn tiU.tislma tarea de arran· cada de nuu:.lra l':'llri~, i qt~c con tan repro­babl e fin llcñan ;us periódicos" El Tiempo," ' ' U a Opinion" etc. de articulos i l'olletine~ impios e indignos de todo ~orn~on católico que ame In fe de su~ y adres 1 csllme en .algo el porH•nir de sus lujos. Sobte esto mtsmo ~e llamó la atcnciou en la nota eirc lar de 2G del 1nismo mes; i como en el primero de los pmiódicos cnuncindos, se ha comenzado n puLlicat· como f'ollctin la obt·a de Ildmundo ,\.hout, precedida de la de ~·. l'etraccelli, Jl(Oduccio?es dir.ijidas a . a.tacar a la Sant: Sede, hab1cndo stdo ¡wolHbJda desde que sa· lió a hu; la ¡u imera, en Francia, como la misma prcn~a antirelijiosa Jo confirsa en los párrafus de " La Dhcusiun" de l\ladri~ que in serta, i como el mismo autor en su prologo Jt¡ Jt'conocc cuando se espreso. nsi: 11 Pero el P;tpa, que tiene t>l braL~ l~rgo, hab.l'in po­d i tl ~' al camartlll: en Franela t me he t?o nu poco 1uas ! ~·jos \ a Un1sclas ~ f!UI.'II dcc1rlo fu.~ 'r. rdul~$; '' 1, COJJlO la St'gunda twnc (1(11' oh­¡ t:t o Ctllllplemfntat· la primc1a en el ~enlido Jr. tlnt· rienila suelta a la Laitn contra la Iglc­• ia citulica i 611 1·en crablc Jefe, al mismo !ie mpo que en la' dé mas producciones de los pt•rió:licos cnun('iados se secund~~ e~o' . ata­t¡ nes con el mismo r.mpeüo; la\ 1cana Jen~ .. 1 ti Ita creído llc"ado e1 caso de ¡eprodutJr para los católico~ la r••soluciun del ~luslrhim? ~ c iior Arwbhpo contra esta espeCIC ue I!SCil· tos qne han superado en proeat·idad al " Se· rrcto de Ro111Ct '' puhlicada en 1857. Dice nsi: •• ·f rquidioccsi~ de Sttnta{J ele Rogotci-Gobi~r· 71 o cclosin;;ticii-Sullla{il du JJogolti, 15 tw J" nio de 1857. Sc itOI' Cora de .•.• Acnba de rcimprimirsc en esl~ ciudad un folleto al.Jultado, c¡uc tiene pur título ''El ~ctl·clo de Iloma" i como el objeto de sa att• tor l propagadore~ (como el. de "La Cues· ticn flomana" i otros escntos de esta espe­cie) no es otro que el de calnmnim· a los Vi­cat ·ios de JBsucatsro que han gobernado la I "' lcsia, hasta el a~tual,uuestro Santo Padre el Papa Pio IX, rídiculitar sus actos, dcni· r>rar ~~~ conducta i la del cnerpo de cnrdcna· rt>s, Obispos i clero católico, para hacerlos despreciables a la vista de personas sencillas e ignorantes, a quienes pretenden sor~ren,dcr i engañar. Nos, encargado de ,·ciar 1 cvttar que se derramen en los pueblos qne se han confiado a nue~lro cuidado, las. malas doc­trinas, contenidas en este felleto (i en los escritos de esta especie) prevenimos a usted que el primer dia festivo despues de recibir l' ~ta carta, en la misa que se d:\ al pueblo, le manifie~te qnc ningnn co.tolico puede leer o conservar esta obra u OTRA9 SR~raunn en su podet·, sin incurrir en las penas rclesi~slicas o censuras fulminadas contra esta cla~t: ele escritos ; exhortara a sus feligreses a c¡ue bÍ alguno la ha adqui1ido se la entregue Inme­diatamente como sumiso i l'eidadero hijo de la Iglesia, i les manifestara el inmenso peli­gro a que esponen sus almns, de pcrdet·~e si no obedecen este mandato con el cual su Pastor quiere sltlvm•los de él. De m tcsul­tat. lo mted nos dnr:í oportunamente aviso. • Dios guarde a u;ted. Al\T01 ·w Arzobispo de Santafo de 1Jogotú." Cuya resolucion inserto por disposicion del sciior Vicario i para conocimiento de los sc­ñore' Cu1 ns i para que sra cumplido lo que el lluotdsimo I>relado ha ordenado. Su atento aer\'idor, Miguel .Arias. S'_c1lor Provilol' i f/icario jentral del , Jr- ::obtspadu. • Guillcn~o Rircro Cura p¡·opio de Ocamon· te en la V 1catia de San .\lateu, a Usía c ~ po · oc : que con bastante sorpresa ha visto en d " Rej.is.t.ro ~ficinl de lloyac:l número 35't," una ddtjencta de &ometimiento a In lci Je 23 de abril, en que aparece al pié de cJJ;¡ Cbtam ­póido in nou1bre i apellido, i corno cslt: hecho ':dunda en perj¡ticio del que habla, para de· lcnuer su honor i satisfacer ::t Usía i al pitLli­co, declara delante ue Dios i de lo& hombres ¡¡oni1•ndo. al primero por testigo, que no ha Jnrado, nt firmado, ni autoriLado a nadie pa· nt que lírruc Lt esprc nda dilijencia. • ,\1 &ciwr úcctor Mi,ucl Alias Secretario de U:._ía, le ~irijiu d pasa'i•orte e$pcdi,fo pm el scuot· Jelt: Departamental del Socorru ron­fin;\ ndolo al btado tle Boynea o de Cundina­marca, porque u o se quiso someter ~1 1 cc o­nocimicnto de los Uccn:tos de "Tuicinu i de clcsamorti7.acion," i pr llrió mas bien l'Spo­IICJ~ c a los azare~ del confinamiento, qne 1 cconocer aquello~ decretos. 1'ot· tanto, prote~ta con toda la enerjia de q~e es cap~~ contr~ la espreaada dilijencia, i p1de a U&la se strva declarar olicialmente IJ u e no esta suspc oso ; para des aneccr de esta manera el juicio enóneo que halirlln formado del esponente las personas catolicas que han leido la mencionada dilijcncia. Cite, enero 26 de 11364. Seiior Provisor i Yicario jencr~: . Guillermo Rivcro. ·on.-La Yicaría jeneral d~;clat'Ú con fecha 6 del corriente c¡uc no habiéndose sometido claciwr Presbítero Rivero a la lei de 23 de abril, no incurrio en censura alruno. El Secretario del Despacho, Miguol Ariar. Ar~uidioctsis tic Santaf6 de Bogotú.-Bogoltl, fcbl·ero 16 de 1864. Al señor Provisor Vicario jcnet·al del Ar· zobispado. Señor. Sé que en un periódico de la capi­h) se asegura fOr el~cñor Cura dcChiquinc¡ui· rá que durante el tiempo que htuve dcsem• peñando la Vicaría, habilite al seiior Preshí­tcro Ramon Olartc. Esto, scüQr Provisor se asegura sin ningun fundamento, pues yo no conocí a dicho Presbítero hasta el mes di! uo-.iemhre. qt~c ,·ino t1 ~ogot~, i en esta i:po· ca yo no eJ8fCJa las funciOnes de Pro,iso1•• ROMANA. Pot· tanto, si tal hahilitacion ha exi~tido. quu el interesado presente la comunie;.tci ot• olicia( que tal gt•acia )e CO)lcedn. Deseo que el seiior Vicario h::ga que C>l comunicacion se publique por la imprenta pa ra así desmentir la asevwacit>n del citad Cura d~J Cbiquinquira. Dios guanle a U S. Anlo11io ,lJaria .Amé.:quitu, UNlON CATOLlCA CLI!RO ot u VIC .\11IA PIII:'iCH'AL n SA~ .h DlS TAnto Seííol' Vicario jeueral. .Al fot·mar e:,b Uuion Calólica no fundamos en la doctrina 'te la l"'lesi: Uatülica, Apostúlica, Humana~ J•:t efecto San Agu:lin u os enseiía: '' Yc uo ct·eeria al l~\'nnjelio si la autori dad de In Iglesia Cat61ica uo m t~Hn· ict·a a ello . '' ( Eplstola conlt·< 1' on,lan, C:lp. 5. ~ ). San Ambrosio "Dnnde cgta Pedro, aquí éstá la J.rlc . " ( 1' o • o s!a. •,xposicton sol>re el salmo 11 ) s .an Pedro Crisólogo: u Pctlt·o ofrec la vet·dad a aquellos que la buscan.· (Carta a .Eutique ). San Cipriauo "_I,a Silla Uomana es la Iglesia prin ctpal, en cloudc la uuiclílcl saccnlota ha tomado su ol'ijen." (Carta l1. ~ ) Juan de Constantinopla: ''Ella e 1: . lett·ópoli de ),¡ pierlad, en la cttn queda siempre entét·a i perfecta 1, solidez de la llclijiou Ct·btiann. · (Carta sinodal al Papa Uormistla ' I.os Concilios jcncralcs han lnblarl en el mismo sentido. El Concilio dt Calcedonia, dice : "Pedro habla pm boca del PonUfice Romo no.'' (¡\el; 2: ~~·El Concilio de Éfcso: "PccJr< vtve s_ICmpr.e ~~~ sns sucesores, i eje re< el mtsmú JUicio." (Acta 3. r; ). E S.aulo Concilio ele Trciilo: "I.a Jglc sta Rolllana es la ~ladre i )lactilra clc t?~las !ns igle las. " ( ScsitHl 7. :-:: C:won 3. 0 ). Por estos fnndamento i otros que pudiet·an citarse, ileéla ramos de la manera mas solemne. 1. ° Creemos, confesamos i del'cn derémos hasta la muerte, la fé doc t~·ina i tli~ciplina de la Relljion Cató hca, como lo cree i confics<~ la Snnt Iglesia Romana. 2. 0 Reconocemos, a catámos ooedecemos la potestad tle ót·deu jUt·isdiccion, la cual reside 'en e Sobet·ano Pontifice Romano, Yicnri de Nucslt·o Señot· Jesucríste ccutrc de la unidad católica. ToJo l~que ct materia tlc fe, doctrina i disciplin, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. apruebe el Sumo Pon.tificc, lo apro· ha m os i seguimos, i t1ldo lo que ¡·e·· pruebe como heretico, cismático e impío, lo tenrhémos como tal. 3. o Reconocemos como una pro­\ idencia de Dios la sobe1·anía tempo· ral del Sumo Pontífice, pura quecon -plena libertad e inde.penclencia pueda gobernar la Jgle)ia de Dios: i ll 0 Reconocemos, i acatarémos i obcdccerémos en sus casos re~pecli­vos i lugares, la autoridad de nuest.·o lejitimo Prelado, desterrado, por cnyo pt·oulo l'r.greso no cesa1·émos de pedil' a Dios todos los dias, viviendo entre tanto sometidos a la antor¡dacl de sus Vical'ios lejitimamentc nombrados. En testimonio clcesta union,ll•·ma­mos en Sasaima a 15 de diciembre de 1863.-1 ~ Vical'Ía pa1·ticular ; . Patricio Plafi1, Vicario pat·lieulat· de la 1. C'.l, i Cma ¡ll'opio cleGuáduas. -Jr'ranciscn Anlon.io Cluíte z, euchrgado ele! Clll'alo (le Calamoifl\a.~Jl. Maria Pinilla,Cu a intci'ÍllO ele Cbagn'lni.­IJernarrlo JI. Gonzc'tlet r Cura de San Juan de Hioscco.-Jinadtl o Jllar:a CJ· az1 Cu1·a de Nuestra Se ñot·n de In Pmillcacion de Viani.-J>aslor S áal os, 'ma escmadot· de Viluim a.- 2. ~ ical'Ía particnlrtL' : Jaó11im o Bcna oi­l e~ , cut·a de Yilleta. - Joaquin /1 orM­'' Il&:., Cltl'a ele Quebrada ne g¡·a.­~ eliciano l'ega, sacrislan mayo!' de la Palma i Cura coadjuto1· de 1)a ·aima. Santos JI. Gam ro, cura c~cu ·adot· de Sau Juan de la Vcga.-J. Lomt:o Jeua rid,·s, Clll'a de San Fl·¡tnci sco cln Sales ele Glliuga. - Cwtorlio Del gado, Cura de Y cr·rrara.-José Manu cl llnch a­tlo, Cura de ~imaima.-r3 . r:: Vicnda larticulat· : Mode.1tn Fl'rnrindc; , Vica- ·io pal'liculnr i Clll'a de San José de a Pei'ta.-Ccc ilio E icot cU', <;ura de la Palma . EL CATOLICO. LA. fiELIJION 1 LA SOCIEDAD. ~~ Catolicismo esta basado en la Fe,la Esperanza i la Caridad: vi dueles lntimameLftc ligada entre si, porque e q·ue n cree, naaa puede espel'ar, ni pueue..amar con ese :uno1· sublime que hace vl'r eu cada hombre, aun­que sea el mas dcsgt•rrclc\do, un her­m~ no a quien se debe crvit· i alivia1·. Pot· eso el católico ve¡·dadero está pronto a renunciar a las ··iquezas, a los hoLaOI'es, a los placeres, a los de· leiles, para abrazarse de la éruz: pot• esv sacrifica su orgullo, su vanidad, su presnncion, i se hace obediente, sumiso i resignado; por eso es buen hijo, buen esposo, buen padre, buen amigo; por eso es buen ciudadano. Un católico, no roba los dineros del Te­soro público ni los ele los particulat·es, porque d:i a tas riquezas un valo1· se­cundario: no dtenta a la vida ni a la liue•'lad de otro auuque de ello pueda resullal'le una grat~dc utilidad, pot·­quc sabe que ese otro es su hem1ano, rociado como él é'on la saugre de Je· sucri,¡to: no con pi•·a contl·a las po· te stades lejitimas pon¡ne sabe que esa potestad v1enc tle J)io s que dijo: "po1· mi reinan los reyes ." Tiene COJlh'a el oq;ullo , el deber de c•· eet·lo que en. eiía una autoridad in­falible in stituirla po1· Je s ucl'i ~to, i co­mo cree c¡ne esta v~ ·la e¡ transilol'Ía , que de s pues de ella l1ai oh·n eterna, i qu e la ha ele gozat· o snf1·ir al fin con el lllismo cuerpo '!Lle hoi lo mar tiene pCt) :.\110 a la tic rrJ, proclll'a,por virtu­de$ positivns, mcrccct· e n yida ctct· · na de goces infinitos tJUC uo compren­de pero cptccrcc i e ·pera. ¡E la creen­cia ma gnifica , c¡ue tanto sublima al hombl'C, e~t ~t adhedrla a su alma, a la parte mas nohle de sn se•·, a la q nc ma s 1·e:peto debe in pira¡· i que es la que hoi mas se ult• ·nja! • Como el católico cree firmemente en la tli~iuidatl de Jesucri ·to, cree firmemente en cacla nua de sns pala­bt ·as. Como la palah1 ·a divina de Je: sucl'islo es el Evanjelio i en el cou-ta En nue~tro número aulel'im· proba- que Jesucristo instituyó Sil Jgle ia, uos de una mrqtera concluyente la dándole, üntes ele subirse a los Ciclos, uecesidad de la rclijion para organi· nn Jefe a qnien of1·eci6 Sil asistencia zar la soeicdatl. Examinamos cual de con lantc: como en el Evanjelio con s-as relijiones conocida nos conven- la qne prometió tambien la infalibi-ria, i, poniendo fuCL·a de duda que lidatl a su Iglesia; el catolico cree en Jesucristo es Dios, concluimos , anali- la infalibili chul de la Iglesia i en la in-ando el símbolo cl'Ístiano, que esta falibilidad docente del Papa . Obedc-s l.t única creenc·ia ·que· civi1ita 1 ha-" cc·i •'espeta· al Papa ·com·o a V icario de · ·e felices a los hombre.s, Jesucristo i po1· rso tiene a na sola eu- Hoi nos proponemos poner fuera señanza, una sola fe. le duda que niugu11a de las sectas Consta tambien e u el Evanjelio,fJUC li:.idcutes del cristianismo, es el cris- los ap6~toles recibieron el Espil'ilu iauismo verdadero; i que de consi- Santo, es clccit· : la dignidad de Pas- 'Hieute niuguna de ellas conviene ni tores ele la Iglesia, sin la intervcncion ue~e convenir a la República. 1 de otro poder qne el de Dios, i qne así Para patcntilíll' esta verdad, harc- mismo fueron enviados a administrar nos cuantos argumentos de hccllo los sac•·ameutos i a predicar la divi-odamos. . na palabra; por eso el católico ct·cc que la lihertad de la Igle in C3 ele ins titucion divina, i que nadie tiene de· recho para decir a un e tra: "Usted no puede ejercer· el ministerio c;ngra . do sin el pem i. o de la autoridad ci­vil," ni pncrle haber un Cura que se someta a eso. El calólicó cree que el mini tciro sagrado, como inslituillo por Dios mismo en persona, es tan respetable como heces rio para el bicu de b socieclacl, porque uarla puede habe1· mas útil ni ma~ g•·anrle que lo que pone en relacion inmediala e fu­tima a la criatura con el Cl'iaclor. La fé es esencial nl hombre, por­que sin ella no puede saber verrladc­ramente nada i con ella lo sabe todo . El mas igno1·ante, teniendo fé, .esta en la fuente de toda riencia~ i el mns sabio sin ella¡ scmiJJ·nd por d•JLHle quiera errores, i los errores son el mol. Esl a rclijion crea la vcrrlaclc•·a ft·a · tcrnidacl, una fratemidad santa ; tan dcsinte•·esacla como debe sedo pa•·a mc¡·eccr ese nombre i tau cntu¡;iasta que ha hecho a mnchos,cn clifc¡·entes épocas, desnudarse para cubrir al po ­bre. Crea osi vínculos estrechos cu­tre los homiH'es, sin el riesgo que tiene•! de onlinal'io la s rela cione s so­cial es. Produce una verdadera pa-1, fundada en hechos i en nociones su ­perioJ ·es a In nccion rlc las lt'JC s. I os­pira c ~ os sacrificios heroicos en fa\' ot· de la ltumanitlacl, qncsolo sc ven en - Ir lo católico· i pm· los en a les hall a el dcsgrociado onlt·c ellos si cmpl'C nn a fnmilia mas intcrc ntla por él qu e l,l que le dio la uaturalcw. ¿ Quién n o se cntu ias1 1a a 1 oi1· ¡•efel'it· los hech o, de las hcrm nna s de la cal'Íclad ? Si esto no es el progreso por :~yonctas al sentimiento nacional. El sentimiento nacional tl'iunfara i Dio no se dcjat·a echar de ac¡ui. EL SIL OBISPO DE PA~lPLONA. Dlll'ante la larga épocn, terrible i gloriosa pat·a el crislinni~mo, en c¡nc el trono de los Ccs:~res estaba ocupa­do pot• esos món'itl·uos calentlll'ientos r¡ne enviaban a los cl'islianos pot· cen­tcnat'C:' l nl circo, los fieles ocultos en las catacumbas, celcbt·ahan el marti­rio ele sus hel'llwnos con cánticos de alabanza a Dios por cuyo amot· ha­bían muerto, i colocaban sns huesos bendecidos bajo el ara santa en que se oft·ccia el snerificio diado de la hostia consagrada. A esos mitrtit·es, considerntlos ya como mediatlorescntt·c Dios i el hom · brc,dirijian sus súplicas ardientes co­mo hoi las dirijimos a los sn11tos co­locados en nu·~stros altat·es. Tnmbien ct·an icló!att·as, segun la csprcsion tan repelida pot· los enemigos del Cato-licismo. • I esa practica qnc viene desde los pl'imeros siglos de la Iglesia, ct·a acom­pnñaua por las oraciqncs de Jos Obis­pos que pt·esidiau las reuniones bnjo la conducta clel anciauo Poul ifice, a tluien todos veian como suersot· de Pelspo CJ~mplar, uo abandonó sn puesto ~nlélltras Dio~ le permilio gu:mlal'lo, 1 luchó como bueno con los cacanigos de la Relijioo. Por fin, despucs de t1·cs meses de horribles sufrimientos fisicos, sin dc­jat · de sufl'it· sus dolores mot·ales, en­tt ·egó su alma a Dios el día 13 de fc­brcr ·o ultimo en el mismo SÍlÍü Cll qnc su r•:cdccesOt·, proscl'ito tambicll pot• la rntsma causa, dejó rle existir. r Q'iolt·os debemo~ elevar aho•·a co­mo los a.ntiguo,3 cristianos, canlicos de alabanza a Dios. VARll~DAD~S. · -El 29 de fe!Jrcro úllimo, a lac; dos i media de 111 tat·de, cutró a esta ciudad el sciJo¡· Jencríll Mo..'>wwra, acomp'l!lnllo por unos pocos de sns ~deptos. Como la entra(la del invierno ha coinciclido con la del Pt·csitlcnte de los Estados Unidos de Colombia, re­cios truenos rivalizaban con las sal­va~ de artillería; i a tiempo que el seno•· Jeneral dcclat·aba qnc "1:enia 1·rsuelto a dcstl'uir eL f¡matis11!o relijio ... so r¡uc es el t'l'cador de fas rcúclioncs 110 el ~~.orimicnlo ele Antioquia, porqu~ (a 1'6ltJLOil esta en el cc¡·azon rle cada cweycn­tc t no necesita ni aliares !li hilbito.s 'mo­rados( las campanas do los templo~ cat?ltcos hcl'ian los aires con alegt·es ep•ques pa1·a celebra¡· Lambien la llegada del hombre que se propo• ne dcslt'ttir el catolic-ismo. . 1 Los Padres ft·anciscanos, ~obre to­do, como lJUC sou libcral~s i esti.lu ile cousiguiente, idcntiOcados. co1~ las ideas del seQ,ot· Jeneral J~fc del partido liberal, se hicierou un llcber le manifestar su entusiasmo salicodo los balcones de la torre, p:lra C[ne odos los vieran repicar. . Como esos Paches,conrarasescep­IOncs, redben la renta viajern, cele­ran cordialmente ClHtlqnier aconte­imiento p•·óspero P'H'a el pal'tido que es. paga esa renta i hacen servil· pa1·a bJetds tah profim'os' Ia'sc:nh¡)anasco-: ooadas en la torre del templo pará llamar con ellas a los fieles a la ora­' ion. -Un despacho del cónsul de Fran~ Ja en Suez', de 15 ele diciembre, dá a noticia siguiente :el canal de arrua .lulce ~sla tct·minado: el a~ua llega a .res lulomeh·os de distancia de Suez, ara estat• aqní el di a de la inaugu.ra· cion. El director deeslagrande obra ha recibido mil felicitaciones. Prot¡~ to,pues,estará elt comunicaci'on lfo in­tcl'l'umpida el M~diter·ráneo cotl él mar Rojo, 1 el viaje a las Indias !!et·á muifiícil. --Segnn el Anuario de la Oficina d~ lonjitttd1s, la poblacion de la ciudad rlc París cl'acn 186'2 de 1.696,1U ha. bitantcs. Hnbo en ese año 52.312 nacimient!Js, i murierOtt12,183 inlli­vicluos ·-diferencia en favor Mitad del producido de 1111 go11 o, a fnvor ' 1 de 1111:1 6eitora pobre.! 1 • 7 ¡· Clcnsilios i pérdida 1 " en monedds lisas. • 1 3Ú 319 05 ::::::== ~- .. -- P.,¡istcncia que qued 3 en b Te• 1 . soreaía : pesos de lci. , . • • 509 55 Aderuas, dejo de iuYertirse en la Seccion IÍospitalaria, • . . • ' 20 ld. id. id. Limo,nera. . ·¡ 1 ' 40 Suma, pesos de lei. : -~1!;: Santafc de Rogota, 3 de enero de 1864.­El 'l'csorcro, Eanv.u. Cus:ICA. EXTRACTO . Sc1iores del Consejó Directivo de /11. focicdtul de San T'ic~11lc de Ptwl. He examinado In cuent:t de la Tesorería jcneJ·al de la Sociedad, rendida por el socio Seiíor Estél'~n Guenca, con las cuentas anexas de .las Se~cionc¡ :Uo&pitalaria i Limosnera, todas c6nte!lida's cá tm librps de cargo i data, con sus c'e pecti,•os doctimentos (que devuelvb )', oompren~ivas de julio \1 diciem­bre del año prt'ximo pasad9 de t863 ; i las be hallado arregladas, sin objecion alg1ana t que laa{:erlc. I por tanto, cumpliendo de mni buena voluntad con la oomision que 5 dignó darme el Seiio¡• Presidente Direotot· d esta asociacion1 propongo a UU. el siguicnt pr~ccto de resolocion, que debe ser consi derado én 1 ti Cohscjo, i somctid,o luegb a 1 ¡tróxima asamblea dominicnlpJra su aproi.Ht cion útfinitivu 1 "Aprui;base la cuenta de la Tcsoa·el'ia je­neral de la Sociedad, rendida pot· el Sciwa· Estcvan Ct,~cnca, compa•ensiva ele los sci 111eses de julio a diciembre del nilo pasnuo uc 1.1163, r.n union de las de igual tiempo, que se han incoa·poa·ado a ella, de las Seccio-nes Hospitalaria i Limosnera." Bogotá, 1i de enero de 1864. JoAQUJ:I' UnlllTA, El Consejo Directivo, en su sesión de 14 dol presente, i la Sociedad et1 la de 24 del t• misruo, adoptaron reglamentariamente r.l anterior proyecto. Santafú de Bogohi 1 20 de enea·o de 1864. El Secretario, Jo~QUIN P Al\ DO V l!iGARA. Aunqqe en el número anterior rlc "El C:1tólico," ,se dió <;olocacion a un capitulq de carta, comunieanclo la tristísima i lamentable noticia del fallecilllienlo del valel'Oso proscl'ito e llnstdsimo sciíor doctot· LUIS NIÑO; no se ha recibido eu el Despacho del Gobierno cclcsia3lico pa1·te oficial alguno sobre tan in .. fausto acontecimiento, para comu­nicarlo en la forma que la mag~ ' nilllll de el, la eleva(!~ posicion i cn­ráclcr del vcnera!Jlc i dign isiuw Pre.lado, sns cllalidat)t•s pcr!'onalcs, sus sufrimientos i lwr(\ica constancia i la causa santa qu~ ,ha d·efcnrli(lo i a Cll)'OS iutercses esta consagt·ado este pei'Íút\ico, justisimamcntc deman­dan; po•· el contrario: el enc
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 40

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 39

El Católico - N. 39

Por: | Fecha: 27/02/1864

.L 1 . PERIODICO DESTINADO A LA DEFENSA DE LA RELTJION CATOLICA, APOSTOLICA, tiempo de cuarc~ma sea respetarlo por los católicos i destinado a implor:ll' Mqaicliócr.~i.~ de Santafé de Bogotá. 1 1 las misericordias del Señol' parn que • vle febrero de 1 S6ft.-Snntaría d~l Go- enjugnc ya las lág1·imas de e~tll lglc-bir: niO ccltsiitSlico.- :Ytimer·o 25. b d 1 sia atl'i nla a. Es por esto cpte el Scltlll ' 'icario p·1 incipal dr. San ~latih. Eu cluúmero 23 de la G(lccta del Tolima se ha publicaclo ulia nota del ~cñor· Secretario de c;obicrno al l'a­dre jul'amentado J.<'rai Autonib Olive­ro, marcado on el número 1 12, la t·e, existe en los-libros de los bt·amas, cu la relij ion ele los chinos, en la ct·ecncia tle los antiguo~ cjipcios. Los druidas tenia!\ sn Isis, Jos indios sus vestales. Es una creencia tan dulce, tan hem1osa, ct·callot·a de tantas vit·­tuLles i a que la mujer, como hemos dicho, debe 1at~to, que no comprQu­denlOs por qué pncda set· cpntrat·ia a la República. Que Jesucristo murió po1· ¡•cdimir­nos, es un hecho que espanta la inte­lijencia, pero qne hace tambien la apolojia de-l valot• que Dios dió al hombre. Dios se humanó i vino a oft·ecet·se en sacrificio pm· nosott·os despues de habernos cnseiiaclo el pre­cio de la vidud i el valor del sacrifi­cio. Este dogma inmot·tal, que eleva tanto a la especie humana, mal pue­de- set• contt·;H·io a la Hepública . Quien tal diga, hl~sfcma i dispat·ata. De que Di{)s, miéntt·as dejó su cuet·­po 1110l'tal en el sepulcro1 bajat·a a ponct· en libet·tad las almas de los justos a quienes l.a 1.~dencion abrió el cielo; de qnc ántes del cruento sa~ cl'ificio que nos rertímió, el ciclo es· tnvie1·a cerrado pat·a el homlll'e, nacla tpt~ede deílueihe éo oóntm de 'la Re• pttblica. Jcsucri~to t·esucító ni tercer día, como lo habia aunnci1Hlo. Esta YCt'· dad, qne e;; la decisiva a favo1· de la diviuid :HI de Jesucristo, e3t sac1·a ti'lenlos haciéndose qantizn1· i mandando bautizar a sm disclpulos, bcndicietHlH el pan i chi­r\ o en la. Santa cena i declarando qnc esas especiés quedaban cmwertidas en su cuerpo i en su sangre; asistionclo a las bodas de Canan; autorizando a sus apóstoles pura pct'donat· o retener lo~ pecados. I Er.. iustifqyó su Iglesia, elijiendo a Pe1lro .Tefe 1lc ella, i ha­cien( lo baja1· Sll Santo Es¡}ÍI'Ítn sobre los doce pl'imeros Obispos .. Asi esta­bleció 1~ jerarquía que existe. I esa Iglesia, nacicla en la ignominia del Calvario, conquistó el mundo, lo ci­vilizó, lo engt·andeció, presentando el magnilico espcclácnlo de una victo­t ·ia coJ)stante en comb:Hes repetido". ¿Dónde cst11o que haya conlt·at·io a la I\epública? En vano es qnc ti-abaje el infierno. Dios, Todopodewso, lo hnmiila siem­pre; i la histol'ia nos hace vct· rpH~ cuántas veces los pueblos han &s c. tnblecimien­lo~, 'luc ha rohncio los bienes do la Iglesia, i que, para ejecutar todos es• to; .atentados no tiene ot•·o modio de a ce ion que la violencia, está . prt>pa­raudo ella misma la sima en- que se ha de hundir. El p1,1eblo acostum­brado a vc1· qne la propiedad no se !'eSpeta : que la toma el qno mas puede; i qne para tomarla se usa de las armas ; p·rivado del ft·eno qne le impcme la Ilcltjíou católica, ae~poja­t• á mas tar¡le a los que hoi '!e están hacieutlo pt·opietarios. Asl como hoi no hai gnt·antía ningLtna p:nn la vida, p~at·a ·la lilH)t'tacl, ni pata la pro pi celad de los venci.dos : C'i deci•·, asl co,mo hoi u o ha i Gobiél•no, pncsto que el Gnbiet·no no tiene otro objeto 1flle rlar esas grt~-.~nt\as, mas tat·dc no exis­tirán pat·a nadie, i entónecs, sel'érnos vcrcla pot· sus Ílltere~e s ele parti­do, han conmovido la sociedad i tra­bujan ahincadamente po1· zapat· sus fundamentos. El!Qs no ven eL mal que se estan hacienclo. Valoran solo la s vcutnjns de hoi, i ni pieusan e~t el dia d.e nr'lñan.a, ni aman a sn Patda, ni temen a Dios. Po1· eso es 4-~1e tra­tan de quitar al pueblo hns!.a Ja uo­cion de La Rclijion saqta que es su Úl)ico bien i su (tuico frcuo. Cn.arHto abran los ojos r' o sed tiempo fle lm,ir del abismo a que se hau precipi,tado. Al describir en ol núnrel'o 52 de "La Opinio.n," el espantolio inceh­< lio .ocun·irlo. en la iglesi:J f~e lom.Je~;ui­ta- s f'n Santiago do Chile el rlia 8 del último diciembre, i qnc devoró a mas de dos mil personas, el escl'itot· dt:!ja tleslizar estas horro~:osas palaLu:as ·t¡uo pone o.n letr¡¡. bastardiHa. Los J esnitt~s, entret~hto, se habiao escapa, do por la puerta de la sacrisli¡¡, i cerrando detras de sí esta salida a las vícthnas, crnpe· zaron a salvar sus muebles, alfot1ll1ras i cah­delabros depositándolos en l?s casas i tiendas vecinas. Ni aun tratándose de una escena que hace . pm·ac los cabellos sobre la frente i e~tt·emece de espanto el cot·a­: r.on, olvillan estos señores sus ódios fnne·tos. Tal escoso de fria i egoisla cmeldad,dc codioia tanta, uo lo cree­ri'umos ni attu de los lib que son esos pobt·es fl·anceses ! -Vnl'ios temhlore!i de tietra, i al· .gunos de ellos mtti fuertes, se han sentido en Jos ullimos meses del año pasado en difer·enlrs puntos ele Fran· cia i de Inglaterra. -Escriben de Roma que el rci de Baviera, r¡ue había ido a hacer nnn visita al Santo l'arlrc, i a pormanecr1· algun tiempo rt) la ciutlad Elcmn, gt' habh despedido para su paJi;, des­pues ·de hace¡· demnstrnciones poco comuues de apt·ecio i adhasion cor~ dial a su Santidad. Todos los carde­nales hahian i1lo {1011 gra~~tlc aparato a visitar al Rei, quien lhs t·ceibió con lodo el ceremonial ck costumbre, en el paiacio que su S:~nlitlad le hnbia hecho-pt·eparat·. r-M tlühos oficia le& est¡·a;ljero~, es~ pecialmente suecos, lta11 obtenido penniso para ~eguit· al ejército fran· ces en su marcha al Africn i aun a 1\Jéjico, tal vez con el objeto tle hacer estudios pl'flclicos en sn profcsion. En la úllima scsion de la sociedad de estad¡'slica de París, se leyo nn traba­jo imp01tante de uno de sus miem­bros, del cual apnrccc que el efectivo de los ejércitos mauieuidos por los GQbiernos eut·opeosen los tres últimos año~, lw sido por tei'mi11o medio, de 3.813,847 hombres, del modo siguien­te: Alemania (sin contar Anstria ni Prusia) 178,576-:\.u~tria 167,2H­Héljica 40,415-Esp;lña 120,000- Eslarlos Uomanos 8,845- Francia 513,31!9- Gl'ecia 10,921- Uobnda 59,!¡31-Rcino de ltalia 31ú,285- Pt·nsia 211!,482-Inglaterrn 300,R'2:' Rn~ia 1.000,285-Dinnmarcn 50,000 -Suecia 67,867-Nt)l'liCga 18,157- Tmqn\aú29,000-Romania 20,000- Sen•ia 2,500-Suiza, nada. REMITIDOS. RETRA.CTACION. Los infrascri~os, miembl'l)s ele! Clero sccu­lnr de la 'Nueva <;ranada, manifestamo s: qnc In vimos la dehilidad de jurar la lci de !13 d1: al11·il de IJ.863, una 1'C7.1 prolestando por es­crito, qne la, obedcceriamos "m tc>do lo 'JI'( 110 se oponga a la flelijion (e~tolicn, A po.1lóli· ca, Roman o," i olrtl vc1., ~o\o de palabra. esceptnando "todo cuanto .1c opon¡;a al dogmu. doclrina,moral, i disciplina de fa Iglesia." ¡\pesar de esto, i de las ciJ ~C ~l.m. ta.ncins aprr­miauLcs en que ~e nos CXIJIO el Juramento, protestamos pot· el presente documento con· t.ra aquellos ~e los; pedimos perdon a la lgll:­sin uoiversal·i en su nomb1 11 a nuestro Sanlt· ~imo Padre el Papa Pío lX i a los Venerable,> ArzobispiJ i Obispos de la BcpúlJiica por el csc1mdalo que dimos, prom•:tJendo pen~a· nccct· en la Unidad catolica como hiJOS sumisos de la Iglesia. Popayi\n, 12 de enero de 1864. n. EDUARDO CAlCil DO.-J OSE J 0.\QUl:o! U ovos. lntJtl'f'Jlta Com•Htueiona~. Cnrrcr a de Occidr.ntc, calll' J,"' llúmcro t8. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 39

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 45

El Católico - N. 45

Por: | Fecha: 09/04/1864

PERIÓDICO DESTINADO A LA DEFENSA DE LA RELiJION CATOLICA, APOSTOLICA, ROMANA. PARTE OFICIAL. Sciíor l'i:ario jrncl'ttl del t1 ,. :obi.~parlo. tos inft·a cl'itos sacer(lotcs de la V'lcaria de San Simoo, cumpliendo ,on llllO rle los pl'ÍtnCI'OS de lllleSti'OS leuel'cs de conciencia, os manifcsla­nos: Que hemos visto CClll tanta SOt'pt•e­¡ l como dolor, dos ' escritos feclta- 1os en el SocoLTo, i linnados pot· al­• uuos ele nnc~tros hct·mano · sacet·do­es, bajo los títulos de '·El Roma­tismo no es el cristianismo" i ''El Clct·o en . su dcuct·" En esos escritos :~;Inltcrando lo:. sngt·ados testos i c¡ue­r~ endo hacet· apal'eccr la Itelijion di­y~ na del ct·ucilicndo como lllH\ inven.­b~ n hnmana, se trata de probar, P.nmel'o : que puede set•:;e católico ~~~ obedecer al Pa(la : scglllHlo c¡ne los sacenlotcs podemos scpat'dt'nos ~le uuesh·os Ouispos sin scrcb'mat icos; atc,t·cc¡·o, «JUC el podct· tcnlporallicne derecho p••ra ava allat• la lglc~ia. • osott·o, r¡ue crccmo Lodo ¡0 con­tr< Hio, pl'olcslamos de la manct·a mas olcmne contra una propaganda tan c~?anualosa. l• ieles disci ¡mios del 1¡ne •liJo a_Pedl'o: '.'Tú ere· pierh·a, i solu·e esta ¡uedra e(lt6cttre mi Jglcsia.''-"He ?ga\lo n~ Padt·c pal'a qnc no falte tu •~. Conllt'lna tú en ella a tus hcl'lna­JlOs.-.\ pacicnta mi,; ovejas i mis cot·­ «leros," VÍ\'Ímos cslrcclwmcnt~ úni­dusal Vicario de Jc:~ucristo en la lic­rr ·a, como sucesor de Peth·o, lo t•cs­p. clamos como a n.Jestt·o .Jere c~p!ri­rtlual, CI'CelllO'i Ctl Sll in!iliihilit!at\ llocente i lo amarnos como a nuestro padt·(~. Ct·~emos en la infalibilidad ele la Jg~esta pOl'qnc Dios la pi'Omctio sn a.st.slencin, i la p~l:ibra de Dios snbsi~­Ltr~ aun ns Vicarios como rept·esental)lestle estos. Cncunubá 9 de enero de 186h. .m Y ic~1 io p1 incipal de SanSimo11, Josc Fcr· uwt Pa~t!la, cma propio de Su~a.-Frnnrisco ··~· Can·tllo, cut•a propio de Cucuuuh:~o--frmt· Cisco dr JI. Contn:ra.<, cura tle lloco.-lluctw· vc1tlura lloiscs p, :,.c;, cura pmpio de Tihiril .t. ~Frai Fernando 1 'alúunw, cura cscnsador de Sntatausa.-Fr.mrisco ele 1'. Cuwns.-EI cura Rector d< Chil¡uinquirá, Frni 1/rncdicto lloni 1111.-l. Antonio Foi'CI'tl, c;cusador d~: la :\lesa de C~rupa.-Frai .!uGé , fniOitio .1/olrmo. - las J '.11. 'lürt·cs.-,J¡;ustin Ilerrmr, cura d<: Simi· jJCa.-FraÍ O,rmrr.-a JJ ,¡f(,·.¡ll:/'0.<, WiCU~a~Ul' de Su$a.-riccnlc ,l[cdina ( acln:tl rnentc cura de TotaJ.. -Sall'udor Si/~·a, cnra de Fúqucnc.-· Mclccw ,llatallana, cura de Bm:o:.,·i la.-Fr. Man.ucl .lturillo (coadjutor de Chiquinrprit f·). JJnur;no llnplisla, cura propio de facopi.­Oraánno J•itjardo, cura propio de Cop.,r.­AbdrJn Lowlo110, cura de ;\lcrc '•lit!S de t:itluas. EL CATOLlCO. ------- - ----- -----~------ Slt OH. ~U UEL M UIULLO TOl\0. Elevado pOl' solo VllC5tl'O (>:trtido al primer puesto en el pais, uo poclcis descouocct· lo (lifícil tle vuesll·a posi­cion i el cnitlado rtnc deueis ponet· en hacet·os realmente el primet· majis­Lrarlo nacional. La nacion, sei'lor, Ita snl'1·ido todos los honores rle una lucha cruenta, i vos, que no los habcis preseltciarlo que no habeis visto torios los csccsus clel Odio iufcl'Oal que se ha ¡mesto en juego, quel'ientlo ahogar en sangt·e las illeas, tal vez no eslat·eis lUl\ ciego como vuestros amigos i qncrt·ei<; dar oitlo a la razon. Nosotros os vamo; a hablar con franqueza, porque deseamos con ar­dor que nuestros Mios ce. en i lJlle la patria respire ántcs de acabarse ae bat·barizar. La vcrdacl sola Lt·azad nuesti·a plu-ma, i si qnet·eis aletHict·nos, pue1le ser que os ahorremos algunos dolores, Nll'U •. u. aunqnr. el remeclio preventivo pueda pareceros amat·go. Yo>, con la cnbeza llena de ideas de libertad, decíais en un tie111po que todo lo que rlc alguna manel'a puniera enlt·ab,,rla, mataba la sociedad. Vais a ver si ese canon de vne.;tt·o partido se ha puesto en pdctica i ~i sou o no uaturales los gl'ito~ tic desc•sper,,ciou de los c¡nc fueron vcncitlos. No descouocei-; el ¡ll'incipio de la lncha. Ella nació en el Estado que os hahia con!iatlo su..; destinos. Alli cra11 vuestras itlcas las que se habían cone vert iclo en leyes; í vos, c¡ne hauiais el icho qnc los gobirt·nos eran los imi­cos rc~pous!lltlcs de los tt·aslorno':.; pot·;¡n~ los puebles nunca rechazan el uien, st~breis [>01' qné se rehdarOll etl Santander, Vos qne venís de nna lll.lpúl>licre la muerte con placer·, pon¡uc nada puede preseutarle el mundo en compensacion de lo que c~ l le promete. Ese principio es el t·elijioso; i ya 'cis, sciior, 4uc tcnieudo, como en ¡·calidad tietle tnnto poder·, es inútil lt·atar ele anonadarlo . Yos podcis no sentido; per·o sí cotnprenrlcr su ac­ciou i el peligr·o que se COI'I'C e11 ata­cado. No os nlucinei : la ma~ol'ir~, 1:1 gr·¡rn mnyol'ia de vuestros compa­trjotas siente sn inllucncia, la siente con el almn, con el cornzon, i ama su rclij ion como os acabo de decir·. Si quercis pt·acticar lealmente el '-istcma repnblicano, respetad esa opi· uiou jcucral. Crecrlla como os parcz· en. pero vedla. Oid a todos, i os pct·- twclirois itTOS i siu verdugos. l~L ULTJI\10 MENSAJE DEL Clll DADANO .JE!IEnAL MOSQUERA, En e te curioso documento que re­jistr ·a el número 328 Jc "El Tiempo" Cll sus columuas, pide el Jcncral M os· 411tTa al Congreso dos di~posiciones capilales. Es la primera, q11c hnga C'~­tensivo a todos los individuos, re~ i­deutr. s en el pa í , el jmamento que l1oi se cxijc solo a los cl(·rigos; i el . sq;undo, que declare que la libet·tad de espt·e5ar· el pcnsamicuto por la im­prenta o de palabra, no deLe seguirse entendiendo hasla permitir· que se <~taquen la Constitucion i le)'es. Se le olvido agregar· : " ' i la couductn ofi­cial de los majistrados."-Así seria ma lójico. Uc!'pecto ele Jo primero que solicita, hacemos votos porque se sauciouc.­E;\, ijicndo a torio!) ese jlH·anteirlo 'J\IC implica la ahjuraeion completa de uuestl'n creencia relijiosa, se couvieuc tacilamcute eu q\i e es 1mn injlli>licin la que se ha estado cometicudo, con cxijil'lo solo ele una pordou dr. inrli­liduos que est;ln de hecho so m el idos a l::rs lrycs, conformen las cuales pue­den set· castigados cuando delincau. Obligando a todos a pr·cst:u·lo se ,.e cndntos somos i cuantos quedamos. Por lo pronto s:~bcmos les.­Pat ·:t npreciarlns, unas veces se apela ni Código penal, aunque en la pílrle que sr mrnciona eslé derogado pot· el Código Hi(lnegrcro; i otras se npcla a e'c Corligo infeliz, al que se hace de­cit · lo que tiO dice, como sucede eu la cncslion rrlijiosa. La \'Ct·daet es qne, cuando \In (;o­hicrno 110 hasa sus procedimientos en J¡¡ juslieia i no tiene, por tanto, In san­cion ele su pt·opia coucieucio, marcha así, de 'absurdo en absmdo hasta lo inoniro: La moral es la única base positiva ele toda . aji~lacion, i como mal pue­tlcn comprcudrt· la moral los que la atacan pot· su fnndamenlo, que es la rclijiou, es imposiulc que puedan le­jislar, Es imposible uc asl pueda subsistir la sociedad. ua sociedad · donde los c¡ne mandan creen que la rclijion clcl puculo n quién manda11 ·e puccle atac:u ·, i aunque tenga 1111 ol'ijcn divino se puede reformar , alte­rar, correjir, <:te., uunca puede tener paz ni aspi1·ar a Jl:nnar!'le civilizada. toi vicios son el cnracter rlc la bar­barie ; i cnauclo ·e alienta el vicio, c¡uit:índo!e elt'lllico freno positivo que puede ponérsele, es natm·al que los IJomhrcs e hagan yiciosos. t Cual de lo s sci10rc ' e¡ue con tanto J! ti nro per siguen, ullrajan i calmn­nian la crecncia relijiosa de sus com­pnlr ió las, tolerada qne se insnltara a la mujer a Cjllien da el clulcisimo nom­hr e 1lc maclrc ?- Estamos se¡;UI'os que ningtli'O . l1 ucs hien: para 110 otros es 1:1 r<:l ij ion mas c:1ra ctne nue~r ra mad1 e, i l'~lo no pueden ignorarlo los lib~t" a· l e~ , !!i tienen algtw priuci¡Jio relijioso. H c~ peteu, pncs, slqn:cra las fol'llllllas l'omunc:- ele buena educacion, i pet·­~ nuclause ele c¡ac pa1·a mantcnc1· l'n ·~tn pobre ticn·a el 61·den, algtm bien­estar i la esperanza de llll pot·venÍI' mejcll', es preciso, es indispensable c¡ne clrjcu ele atacat· la 1·elijion . No crean ello~, enlto1·abucna, pllro 1}0- ,¡otros si ct·ecmos, i tenemos el mas perfecto dc1·echo pnm c1·eet·. Dejen­uo s, plles, nuestra creencia. Dispon­~ an de tocio, pc1·o uo toquen la reli­jion. Observen esa regla tan trivial de política. Depongan el ódio ciego qnc ~ientcn contra su¡¡ hermanos, i dejen seguir el país bnjo la cjida del ' atolicismo. Pronto \'Cran clesat'I'O­llarse po1· dondequiera i en todos sen­tidos el progi'CS'O en la unica acepcion t¡ue dan a esta palabt·a. Nnestra tie­l'!' a es rica, es fét·til 2 es hennosa: solo el riego de sang1·e Ja estcl'i!iza. ¿As­pil ·n n a gozat·?- pues dejen qne haya rclijion, ella pl'Oclucc virtudes, i las ·il'lucles lt·aerán la paz ¿Quieren li­ertnd?- pues dénuosla. ¡Quieren, o¡· el contt·al'io, que siga rijicndo un El.l C .. lTOLICO. podc1· absoluto?- pues sean francos, i diganlo: no pretendan engañar al mundo. EL C.\TOLICJSMO NO ES PAGANO La moral sin dogmas rclijiosos o u bl!J !a mas que tJOa justicia bin tri. bunales. y.;¡ dc1groa i la moral fncr~ n tan solo ahstracciones n no ser por los ritos, las ceremo­nias i las practicas que ll's daa un cuerpo i lt ~ s sin· en de apO) o. ''La Relijion, l'educida a lo pmn­mcutc espiritual, no ta1·daria cu quc­tlat · relegada a la rej ion de la luna. " "Los dog041s han desnparecido juuto con los • signos esteriores que los atestigua u." Estas palabras uo ~on nuestr:~s, son ele dos filosofos impíos. l~n nuestra Relijion hai tanta armo­nía, tanta cone pondcncia de lns partes con el todo, t¡ue nada c::;lá de sobra. No se pllCdc atacar nu punto del mnro que defiende la ciudad santa sin conníovcrlo todo. J,eon el Js;lnl'i· coi Constantino Copronino qubicrou purificar el cullo cristinno 'de lo que juzgaban idolatría, i para const~ guia·M lo se manifcst:11·on no mé1o1os hárb:Hos que ' eron i Domiciano, i con su !1 0- bcrbia pretension pusiet·ou la pl'ill JC- 1'3 piedra del ftHlc ·ro cisma qtw mns tarde trajo consigo la clcgl'adacion i la ruina del Bajo Impel'io . Siempre han encontrado mucltn <1uc censurn1· eu el culto cristiano los qnc codician los bieneg dcstinnclos a so ten ·l'lo. Cuando en ca a de Laln­ro la piadosa ~Iaria bañó en co stc,sos perfumes lo~ piés del Salr:11l ot, J tlut~s se indignó; ''ese perfume elijo, \Cil· elido, huhi<>•·a producido trescientos dcnnrios parn los pobrcíi .. , Cuauclo algm10s días dcspnes, por uua causa semejante, en casa de Simon el lep1·oso, el mal ejemplo de JU.clas hizo mut·mu•·at• a otros discl. pulos, JeS\Is les rrplieó: "En \'Cl·dad os digo que por dotHlequiera que se predique mi Eviglo X VIII, mién· tras l'idiculizaban el de los cristianos, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 1aeian hnnores ensi divinos a los •·es· os mortales del f'unc .;Lo Voltait·e, i no lebc olviclur.>e que la Diosa 'azon nvo Sacet·dotcs, a llares i fiestas.' Los rotestantcs, que bnn tlestel'l'aliO ~le ·ns tetllplo,; las im<íjenes de los San­os. los han llenado con las de los ábios i los heroes. ¿ Quet·ei~ conoce•· lt~ diferencia 'scnci¡¡l entre la ndoracion cristiana la at'iego qne se jw~lra nnlc una imajcu, a pedir al alma del Santo que esa imajen t·e­pt ·csenta, que le alcance de Dios los ienc~ CJllC necesita. Este al1nénos tie11e la fé sencilla qne nos prescribió el Salvador cuando IJeudijo a los nii10 s: "En vct·dacl os digo qnc el ctue uo se someta al Evanjclio con la sen· cillc¡; de un niño, no entrarü en el reino de ])ios. " Pensad en esto los l(tlC o~ alreveis a juzgar su doctrina i hal>cis dicho en vuestr·o orgnllu: '' 110 ca·ccr sin compt·cndCJ'. " Jo n. Contl'as te.~.-Rcfiere la Pall'ic que \In soltlauo j.ot·a informó de lo· do al Coronel del t·ejimiento, i al dia 5iguicntc el nombre ele! próhido jóvcn liw11·aba en h órdeu jereral, i él re­cibía las caponas ele alferez, qne era Sil uuica amhiciou. ContJ'83lCs! En otros paises los spldados piden limo~- na oficialmente. • -Dice la Gace(a rle Francia que el capelo úc C3rdcnal <[llC Sn Santidatl !iC hahh reservado impetto en el últi­mo Con~istorio, está destinado par ·a ~1ons6iot· Dupanloup, uno de los mien1l>t·os ma's distinguidos del epis­cop:+ do frances, i a quien siempre he­mos admit·aclo lo granadinos po1· sus cscl'ito~. - U u despacho de ltoma do 2 de enero último anuncia c¡ue (;n e e día ltauia rccibitlo el Papa una diputacion de sci~cicntos católicos tle lodos los pai es, que le ha presentado una pro­testa de tidclilo católi­co de Milan hicieron cctler a los at·­IJitr:> I'Íos gobet·nantes, i las guardia s (¡nc se habian puesto c11 la Basilica fueron retimdns. El mismo Santo, en olt·a ocasion, rechazó del Templo ni EmpcracloJ' Teodosio a quien esco­mul"' ó como asesino de los tc.,aloni­ccu . Ar¡ui unestros acerdotes,pw· ccclicllllo al contrat·io, burlándose d e Dios, presente en el Santlsimo Sa­cr~ nncnto, i profan~ndo de la mane ­ra mas impla el templo, tum ::ua por mouclo il J útlas i cutrcgau n Cristo en manos tlc sus encllligos , clando la llave dt:l sagr11l'io a hombres notoria­mente escomulrrado!l. --A proposito de San Ambrosio: lus restos tle esta ilnstre lumbl'<'ra de la Iglcsi.t, jnntamcute cou los tlc San Jc•·vaeio i San l't·otacio, acaban ele sct· hallados en la misma eiuda1l de 3lilan. Las ycnerablcs rcliqni.1s est a­han debajo del nllar nHt)Or tle la an­tigua igle~ia de San Ambrosi ~1, ctlill· cada por el mistno Arzobispo en el siglo 1 V, i sus trasas se habia11 perdi­do totalmente. Gt·arHie ha sido el regocijo de aquel cató\tco pueblo al hallat· de nuevo, de~pnes de catol'ce siglos, las reliquias milágrosas ele es-tos martires ilustres. -·Dice el correo de los Estados Uni­dos r¡nc se ha descubierto en el iutc­riot · de California nna catarata mas grande qne la del ~iagara i una pira­mide semejan le a las de Ejipto, aun­que mas pcqucila que cslas. ¿ Serán noticias yank.ees ? -m to1al de naut'rajio en hs cos­tas
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 45

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 41

El Católico - N. 41

Por: | Fecha: 12/03/1864

PERIÓDICO DESTINADO A LA DEFENSA l>E LA RELJJION CATOLICA, APOSTOLICA, ROMANA.' P.\ R"rE OFICIA L. .lrquiliJrc.lis de Santa(~ de Bo¡;tlti.-Sfinln­,.; a rtcl Gr>úiauo licl.siústiro, 9 de ,,w·=o de j 64.--,,IÍIIII:r'O, Al Seiior \ irario principal ile.,., Si fné gran1'1~ la ¡wn~ qnt· t•l ~l'itnr· Virarlo jerH·ral !'~¡wrrmt·nlil al lt•t·r la~ pnhlit-ai'Ítllll'~ IJllll al¡!uno~ Sart•r do•trs dd E~! a do ,¡,. S;onlan· rJcr hicierou <'Lillra la autoridad clt> la lg'~'· •i1 ¡ tamhif'll ha lt•llidn :.11ntt1 I'Oil>lldo p11r· la ~ctitud impont•ntt• clt·l Clt·ru dt· la Arq~tidió· ·~esh, ti que unido a 511& t·t·~lwctil't" \ irarin~, a pwtrsl~do t•onlru las crró:H·as duttriuas contt·nidas ''ll at¡nelhs pulrlil'at·iont•s i Ira rt· p<·titln sn atllu~~ion a ~~~~·~lru Sautbimo l'ad.e Pio 1 , n•prt:M'"Ianlr dt• • S. J. C. i Cahe­za l'bihle d, la \l'rdad!'ra l~l~·~ia, indt-pcn­dit• ntt i con polt•slJd i autnritbd ptopias. Al conl<•slar a las dift•rcnlcs notas 11'11li'>ÍI as 'de t.alt•s pr<,ft•sta~, muchas dt, las cualt·s !tan vi;to la luL p rldica, i CJiras s1~ puhlirari1n ~tr<'t'· ~ivam•·ntt•, tn<' es graltr manil't-star al ~ei1111' Vtrario qut•aunqnt•t·n t~lut'rmtrO 50 dt: "La piniull" ,¡> puhli!'Ó otr11 :ulíeulo 1 ajo el mis· mo mole dt·l priuu·rn "El Homani-rno no es el Cri!>tiani,nln," <'on t·l ps~ntJ,'¡niuw dt: lpo· ~~~~~~ ~n:1!-:rarna de /nrpuro, ll'lrnino tnni propio }>na ('] oloji'IO dt"l I'SCI il<•, i aun~pte allí •e dice que h propa~anrla ru<·r_¡ta con m:1S de 25 mit·mhro~, <:O a<¡tu•llu h:u nna nrnntfit·sta rqttii'Or adHn, ptte, nn wlo no tiene arJitl'l n•'liJtt•ro, sino q1u: de lo~ n!'ho ~act·rdol~s c1ne la componían, 111111 s~ Ir~ l't:lractado ptt· hli ca mcnte (t·l st~iwr Prc~bitr·ro J. Fantlilro) hjnranrlo sn~ ~Jrul'l''• rumo lo Htil d ~ci10r icJrio l'n t·l n Í111.rn• :al dt l '' 1~1 Católtro"; 1 tro d~ ,.]Jo, (PI l'iint t!nrtnr .J uau S. o\wtru) 1' Ir u dirijidu a la \ j¡·at ía jt rwr.rl, I'UII lh ha !ll 1le tnc; o so lit i !anclo l.r ah)o'uGiun i prutt·~· tnndu 'I'H' ohru ,¡n c¡•norimi'.'''.totle lils Jcso· luciunl' clcll'n·ladn, cnyu snlrctlud se cn<·ut·n· m p•ndit•nl!: i OliO (~1 L'. Fr. J~~IIS Gahiz) no solo pr0l1•sla, con b ·lra 8 de ldnero, qnc no ha jnr.adu somf'timieuto comn. lo a~egut an '1:11 lo Gacela de Sauland<:r nuuwro ill2, ~ino qtu~, cou~idt·t~.llclnsl· crinrinal por l:r.fil· mft qur. prt·~tn, ha J'" ftdll anlt: t· l s~11111' \ 1<'3· do dr. San ~J:rlt ·o ol t • dit~n!'ia a la Santa Sede 1 dcmas Prrlndus de la l¡;le~!a, n·tral'litnrlosc forllJalmcn: e de Sil anlt•r iur proccdiutiPnlo i otro (t•l ~ciinr doctor '1'1 iuo de la C. 'L~rtíncz) lta il!lpt'tratlo drrr.clamtntc la ahsoluctiiU del ~eiiOt ' Yit·al'io j~nt-ral rt~lr:.ctandn&r de sn so­metimiento¡ !tiro (d Sl'ñor ht•shitern Fran­cisco dt~ P. J imi·net) se ha dirijiuo por con· duct11 dt•l sriiot cura d!' Soro i pos1t·1 iollllt'nte de una manera directa, haciendo protestas de obr.dit•JH'Í:t a la anltH idad de la l~lc~ia, nfl73tHlo el hahf'r prestad1• jmamrnto algun(l, i sgmetitlndost! a juicio por los car~os qut· con· tra t'•l ri'sultrn, i los rf'stantt·s se han dirijitlo al señor Vicario princip;,] dt~ S. llaJtulome, M·~nn lo relaciona < on. fecha 26 de enero,. so­licitando sf' lts comnruquc lo que la nutonilnr Vicario jt>nt'ral a nClml>re de la Iglesia significa sil rrr.onocimionto por la la11· dable conrlucta del CI!'JO de ua \ iraría, en lws esplicittls manifestaciones que La lu;choJ i NU~I • .&t. ·----------·- - . - --- · - .-.- ....... ·-·------ ~·· pmmrll! quf) con la 'Ilisma t·rsu~urion se mault'ndrá firnw t•n ~~~' lt·twr los dt·rt•¡•lros 1fe 1' lgll'si '• su ind•·pt•u rlt·IIC'ia dt• tu do pt~dl'l' t'Sita,iu i 1· tlt')tt'ttdt·ncia dt• todos""~ micur· hnas a la ;dla d,· Pt•tl•o t·n la qu•· t·~la IÍttt'll· lada la nr.ulad, ('011111 ~igno int·umuuit'al le de loi I'CI t.!Jd c• tó ica i sn i nfali t, lc 111 arnlo. Del sei10r \'icario aten tu st •n·itlur 1 Migacl A•~as. ADYERTE!{CIA. En el acta ele L nion Catllrira, publirad~ rn t•lnitutt.:ro anlt•tior, st~ omiri :, por cr¡niiU· !''rritlll ~·1 nor~rl•tc tlt•l s•·~or 'ilari .• principal doctor J. Francisco Rója~, c·ura dt Sasaim:r. EL CATOLICO. LA flELIJIO~ 1 LA SOCIEO \D. U na V<'Z probado, a no dl'j:ll' duda, qnr. fS iudi.;pensa!Jic la 1\clrjiou p:rr·a que In socied,11l sub·i~ta: qtte el Ct·is­liaui .. mo es la tlllira Rf'li;iou \t'rda­dcra, sauta i lnunauitaria en toda la e~!ct"ion de -la palahra, i que lns st·c· las di•itlf'tlle~ dt• el. 110 ~on el \'t'l'll:.t­dct ·o Cristiaui•mo, se dí·~pn · ndc ltíji­caull'llte 'lttecl t utolil'i,uw es la t'llli· e<~ lttlijiou qnc cott\icue a este fHlis. No put>dc haht•t· otra. No <¡net·rmo~ lt rhlnr por ahora f]e la tri-te co11dit:ion a que los pobr·f!s, los de~gra!'iadus lfllt'daritll" ,oilljt:t•JS tlljllÍ, el din cu <¡nc e~a Helijio11 ~aula qued!! abolida ( supouicudo tjliCpnc­cla tluedal'lo ). P:tra h.H cr re. altot· esa ~itu:wion, ci! •' mi11i tc1·iu, está en abierta pugua eon el princi­pio relijioso que ello:i profesan i no puetlcn obedecerla pül'l(lle antes f(lH' todo es Dios. Esos Sacerdotes dependen, en :ill carácter de tales Sacerdotes, de SU'­respcctivos Ohi:;pos i e tos del Papa pon¡ue asi org.111izó Dios la Iglesia; i si Dios está. üntes qnc todo porque ántes de todo rlebe estat· Dios, uin· gun poder sobre la tiert'a puede so­breponct ·sc a sus mandatos. La lucha que nctualmente est.J. tra­bnda aqni, es la misma que desde los primeros siglos del Cristianismo ha SO!»tenido la Iglesia. Los Emperado · res romanos lambien cler.ian que Clil contral'io a su sooe•·ania que hubier<~ súbditos suyos que obedecieran ól'dc- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 1ttls de otra antol'idarl. En nue.tros tiempos don Juan ~lauucl ele l{n.;as, en la República A dentina i el cloclol' i''t'íHlCÍa en el Jla¡·aguai han dicho eso mismo. Entóuccs como ahora, allil co­mo actui, los cl'istiarws han preferido n Dios. 1 cosa notable¡ la fieplll>lica tic Chile dontle no ha cunditlo la perc· griua itlea, tle que la ohetliencia tle los Católicos a1 , Papa, es conlrar·ia a la souer·ania nacional, marcha a la van­guadia de las nacione.; Strr· Ameri­canas en la via dul vet·tladet·o pro­gtcso. Nosot•·os C'reemos que la sohcrania nacior.al con.;i,tc en el•·e~pelo que se leuga a la V'llllnlatl uJ ,IIlioc.;ta de la lllayoria de Jo, cillll.ulauo.;, En nn ~;obie,·no tnon;inpdco, la <;ohcJ'illlia reside en 1111 hornhrc a quien la ua­cion conr.e,le b autoridad. En uno aristor:r·atico reside esa sober·<~•lia ero la nobleza pero por J;¡ misma •·awn. Siempre es el querer de la mayo da el qne, en r'Jit imo análisis, viene a dcci­tli1 · tortas las cuc.;liones; i así de he .;e•· en el eslrulo no•·rnnl de lns sot:iedades. Pc1·o CIHIJillo la l'liPr·za se suhrcpo11e a la razon, cunudo la~ pa~ioucs s~.; :~popn en la fuct·za, c-.a subt:r·ania riel purhlo, esa soher·anra nacional des:lparccc. A.;i es cou1o se la ataca ise la dcslrujc. Aqni la Vflluntarl rle la mayor·ia ~e l¡,.'l manifcs hcl o de urra maucr·a es­plénclitla en f-tVOJ' del C:ltolicismo . Este no ataca pt•e.,l,t sol>c•·aui,t nt­ ·io nal. 1 .. '1 qu e ataca c•:t ~lll~t•ran t, lo que la dt•'l l'llyr, lo 'l''c 1.1 'ilipeudia, e, que la \Olllnla ll uc un hombre apoyatla en Lr fucl'ta, al100ue el grito le esa mayoría. Si pues se ponen tt·aha;aiClcr·oCa­ólico >ara el ejercicio de snmiui•;lcrio · asiscdt•lruyeel culto; !'i ~e ;•rsul­a al Papa a tluicnlo.; rattnnle de Oin~, •s indu:lable ita hle. Ya c:slarno~ vien lo Jo., efecto'! 1lc la careuda de lo-; :\ anarnt'nto.;, hc•·rnn­nadn con las leyes tolerantes lcs hor'l'orosos como aho­rn. l\o hace rnw :hos clia" <1ue un mnehacho l'ué ast• iuado pot· ~u pa­dr iu o, tle•pucs de habel'lo azot:ulo b.irhal'éllllellte varias ocasiones por­t¡ ne ~e lnhia hu¡·Jado un puiiado ele pap.H. El a-.c·~ioo IJ;¡ declarado a,tfe el .Juez respectivo, c¡uc lo hit.o pot'•IIIC ahol'a no hai pena de muerte pal'a esos ateutadn.;, La familia del señor Amhro.io Niño fué asaltadn cu sn ha­cienrla, hárhal'ilmcule apaleada i sa­qneada por una ¡nrtitla de allti-cato­licc¡.; ¡ i nadie se ha atrevido a denun­ciat · a lus ag•·esorc~, pot·Lem '"ele •ruc eo;tos, puestos en liucl'l;ltl a lo. p~~~'OS clias, consumen su oll1·a con el ase­sinatn. Lo; robos l'ateros son tan freencn­lc:", que ya no causan novedad uio­guna, i esto Licue t¡ue suceder fot·zo­samente cuando se ins11lta i cscarue­ce el fundamento de la moral c11 qnc rc•po~a el bicnesliH' de la snricclad ; por·r¡ue a nadie puccle ocult;hsele la ineficacia de la lei civil, cuando no está npoyada i ha~~da en la CI'Ce11cia relijiu'a del pueblo, Tocios los publi­cistas dan como una de las bases pa-ra la lejislaci-Jn tic un pnehlo, In lijion 'l'le en él se profe.;a; in<> sabe mu~ lllll'tlné ac¡ui, rlnutle tauro se Ita­hla de derechu..; del puebln, de sobe· t•anía tlel pueblo, ele hicn cstat· del pueblo, se alacan c~n soberanía, C(!O'I derechos i ese hieu e.;La•·, qucricn clo obligarlua c1ue ol>edrzca disposicio­ue.; •1ue le son ab·wlutamcntc anti· pálLa~, porq11e pugnan cun su con· ciencia. (O es t¡ne se entiende poi' tiberlnd, poi' .;obcr·an In, por felicidad, el derecho de: deliur1~1ir ? Así nun<"a se pudt·•i or·g:wizar la -ocietlatl, tlllll· ca pocld ha he•· paz. Tal \CZ esto sea lo que se t¡uit'J'e, po•·,lue solo a favot· de las revuelta.; plllll'fl teuer.;c siem­[ H'e a•·mndo nn ejérc·ito .,uOniente pa­t ·a poder oprimir i dcspoliz:ttl' a la n1a yo•·ía de lo~ citHiatl:ltw~. Se el ice que el clero l'omanista es d que fouwnla la~ t·eheliouc~, i 110 Su qnie1·e ver que lo •¡uc obliga a los ltornlu·cs a lanzarse en el tcr·rible es~ tremo de los comhnte~, es la tirt~n\a tfllt' sobre eJlo,; se cjc•r·ze : Coi el im~ pe•·iu de la fuerza qne ahoga to-ihle que la socic•d,, 1 se l'Oillcta pa,iv ;u nentc a tnl r·t\jimcrr, corno es imp11sihtc t¡ne el hornllre rnas paeilt ­t• o vea IJ'itrlt¡uilo in,•a dir ~u lw0ar p01 lo.; 1111e van a ullraj .11· a sn falllilia o a t•obarlc sns iuten:,c~. Por· lo pronto ecdcl'ii a l:t fm•¡·¿a, pero no se 1'011 l'ot· • mn i hace lo c¡nc pne,[e por· vengar su honor ull• ·:tjadu i pot• rec:oln·a¡• sus irtlcreses penli ro~. E>tu es tan llllu ­ral como n·spirar. 8íe'\ sahcmo!' i1· !~s illtimas pala()l',o; de uueslro-arti­culo de fouclo, recihimos el acuerdo i la ma~uifica representacion que tenemos el gu-to de l'eprotlucir. En estas pic1as la )lunicipalitlatl de Cali ~olicila del al'tual Congres.1 la ahro. gacion de la fun6ta !ti lilnciun Nncion al, AClF.IID \. . L• Elo'·vPse una ~nlil'itud al f:on~rt·~o Na · ownal, pitli•~ndn la d1TII"Uinrr.1 ·J., la lo·i de 23 de .abril dt!l ai10 p<• ado~bnhrr pulid<~ ru lila· tr:na de cultos. p111 qqc adc•n•a• de >1'1' iuu~tC· , aria, I'S inj1Hlil, put·s que hace· ~ un<~ el a••• de la Slll 'i1•1lad rlc p•·nr I'011d11'i11n qu~ a l.1s 1/lra<, l'inlandn a'í ,.¡ inci la~ rawncs en que ~re funda la pn·so·nlc. Dada rn la Sala de las sesiones de la 1\tnni­ci¡} alidatl de Cali, a !1 de en1ro de ti>G4. El L'reside·nlc, Enstaquio Palacios.-MIInlttl D. Ca111at.'ro.-J>rilllilit•o Orejutlo.-l'iccnlc Castillo.-Mclllucl Maria Ayala,-Nicolu .Ara- E.L C.,fTOLICO. ¡;nn n.-ll, !f./iCQita.-CoMtt F. /,ómrts.-1/ar­titt S llllnt•at~a.- El •ec•·•·tario, Evari.K~HIIrKS OK LA u~!IIN, r.a COI'tJOI'Jeion Municipal de Cali ha re• IIWitu petli1· la •lcrO"oilot·ia de la l1!i so'u·e po· licía de C1dtos, I!Sp~dirla el 23 rlll ahril ele 1863. Tór.a 11~ COIU'I Prcsir!t'nlc d~ c:.la c .• r. puraciun, i ptu· espre~'' ncucrdo de ella, rs­poner las 1'3Wncs qnc han pesado en Sil animo para hact:r tal sulicit•ld. Sabci>, Seiíon~s, que nn ha habido una leí ma~ impop11lar, i cuyo curnp'imiento >C haya vet·oficado eon mas •·cpu,:nJncea. Ot·btÍllti,!a del jJuleroso apoyo tlt: la upinion pi1hlica, •~n unc•s E,tad 1s ha sido 511>pt~ndi l la, 1:n otro. ha sitlu rv.11li IJ, en olo·os ha it!I'Vido de (ll'l~lr>lo para ClllliUtJcion~'i s•·rias, i en louo> se ha t·n­COt1ll ·ado h illltorit.!Ml pnco disptw~ta a ha· ceda c11mplir, i los cindadanu'i tud tvb m~nos a o1u·dcct•da. F.sa imp 1p11l.u·ida tl, C>t' d1·sa111· 1)olro en q•u! se ha vistu la mt·llci·lnad.t ll'i, lhmcs ~ pr•:oc•1pacion, error, o co1n11 >~' quic· ra, es sl•·llljii'C una rawn <¡tll' t'll tuth~ ¡~arte,, i •:n IJ> He:pitb'icao '"·"• cldle a.:.t ta r,,. pur l;¡s ene • r~11 lns :Id Poder pí1hliL'O, po,.c¡ut: las prc.11:up 1ciuncs i lo> t:t'l'un:'> ¡) ,. la uuyo . ÍJ Stlll cu.n 1Pnt•nle~ ind"p cusahlcs ele IJ "Pi­ninn, <1'11' 1111ttla a la so·,,!,·aní•, ,,, llam.1 111as p:·u piaiJI .• ntc el qtwra de /,z mrtyorw. l ~s •·sic q·t~:rl'r, r,,nola lu o infnnl.td•J a lo'l ojos de !u; 1\,~l'n~St!lllanles d1•l l'tn·IJitt 1 t•! que d ·be Clllhu!t.H'St! si1·111po·c, i p;n·a lo cual •·• que"' • han c .. tabii·Cido lo.; ~Í:.lPmas de ÜtJhicruu re· pr•·sPIIltlÍI'OS i ¡w 1nll:u·e,, e•n ¡,, e Ltl•·s 1'1 l'u• ·hlo •w n!Jo li ca >~1 soht~l',llli·•· >l11tl qne di jc qui Pn n•pro·scnlt~ ~~~ \·,,!nula 1, q11c i mlra•l.1 o pn~tll'llp.•da, •·s Sll'lllP'" su wlu11l.1d. llo~ s­lui. t, S .,·,nres, t:.ta cunsidcracioJil par<~ 1t TL1 '' de 1.1:. q•w ¡:¡sostiene· c:un •11 opini11n i CHII "1 braLn, 'i l'.la l't·.,i,lent·i:l no o•,lnvin.l l\mJ.1 la en rawn•~s q•11• me•·~ e•·n •·r alcllditl.ls. , Sahets, St!.llll'l'~. '1"'~ la inm ""' m.l,\'01'"1 d.,t l'u•· .Ju col .. m111an" ~s CJtn~iPa, i q111~ CtLIIIlti >t: U1~a rc>¡n~t:lo tlt• ol• O• t•ullu• i dt: 611> ~liuisliO>, ntl pas.o ,¡,. 1111.1 !Colla nwra- 1111~1111' e'fll't'lllatila,mii·nllas o~na inmÍ..!raciun t•.lranjt·fa comptll~> li\ dt! hnm:~r~·s 1!1• orr.1s Cl t~l'nci:•s, no l'l'll¡;'; t a pn·~Pnlar lllalnia wht e que ve·r.l'n pr:·lclic;un~nll~ ,.,.,, dispo.i· ciomr·s. IIahla, 'nlrl! nnsoii'U> tft• clin-r,i•laPtÍl In m',nw llllt' r~~lamcuta.·l.1 Adminislracion tlt· !os caminns dt~ hi1•1 m, i1n· te, de 1en1~r .iquicra vcro·das t• anoitablcs a pie. 1hi, pnPs, t•l jurauwnto t•lijitlo a los 1\1 ui:.lt os rlt: lodos lus cultos, ~al tic tres millonl's de habitanlt·s, t•n d c·cnlm dt: la culta l~uropa, le clit una im­ptnlancia, qnc au .. que de nalurale·za t• ·111p0· ral, all~ga mas r.espNO• ni carácter 1 l'lijiooo tle IJIII! t~SLt Ílll't•stido. Sahci;, Sdiurc~, qnc la conlinuarion d1•l pockr ll'mpural dd l'apa en una partl' ele• la lt.tlia, cst~ al abrigo t.le grande> polencias eu1 ope·as. Las considr.raciont•s que se drsprt•ndt•n tll! estos lu•cl•os, hacen del Calolicismo un ele mento poderoso, con indt·cliuab'o· iullncucia en la polilica de los Pueblos Caloliros. Pues bien, Srñores, es contra rse elemento poderoso, qut: ti••nt· tantos punto, tlt~ apovo como habitantes hai en la Nacion, mtnllb un:~ pct1ncüa parle qut~ apt~uas por t•l ¡u·nudismn rc~VI'la su cxisleuria, f'S, di!!'n, rontra PSI' elc­mcnlo que choca la IPi sobre polida de l'nl­tus. Califíqn~>se como bC qtticra el Calolicis· mo =.levántese el ,.r.Jo qnc cuhrc la imper· fccc10n del homl)lc para infama¡· In idea que la condPna: traí~anse a cnconta lo1 lwcho di! ot1 us tie•npu• que tuvil'l'on :.u 1 at.on de orr, j por t'SO rut•l'tdl; t:l Calo1ici!>lllCI t'S 1111 hrcho. nn cnmpoot:nle de la &ocietlad t'01oud,iana, i >n inllut:ncia, indt•c'inahle. La lit•rra n" Jehc jira1· al n·dedur del sol; ¡sine m bargo b~ llliii'Vd l't!ln, se• dir:i, ¿por qué ~1 jurame·nto cxiji­dn al Clt'1 o, i su incap<~cidall polític<~ ;•: npo nen al Catuli<·i>n•u? ¿ Q:wreis que• el CltlrO sea 1'11lt•l'3tllelllt! inmunt• 1 Í IIUI! SI' mt•tclc ell la dirccl'ion d•: !,1 pulític~1? Nada tic~ t·.tu st' prt'!cndc; prro a 1111 turno, bÍ'amt: pt•rmitido prcgnnt.or, ¿ pnt· qnt! no ••· cxijc jnran~t•nt" dt: o '• t·dil'nt·ia a todos los dt·mas hahitanl•·~ ~ ¿ l'or qné el >1'1' ~lini~tro de un cnhn n·c:t•no­cido ha de: p1 iva1• 1l1: la t•indadaPÍa que a na· die be ni•~Ra por p1o i'l'SJI' ('SI' mismo l' nlto ¿El que cn•n una Hdijion i t•l q11c la en"'il~, nn prrli'III'Ct'n ,\la misma COilllllliOII 1 cliiiu~a. 1'01 otrn Jloll'lt:, ¿por qué 1" ivar o la ~u••ic:d;~d el el c·t~ncurso de muchos M in i>ll <•• iln>lrmlo i 1irlunsns, ;olo purr¡ut: o•nsci1an una Ro·lijlot r11 que todos c·rt~tn? ¿ ( ómo ,,. t'lllit: n.le• t~& fa,tuusa prnclama1 ·io n di' la liht·otad de: cnltc.s ese rc;pcto a la conciencia, c~t· ,.tl.o o la llll'llidas inqni>ilorialt•s, cn11 la cle~:r :.dJcÍtn po!ílira de lus Minisl111> tlt• lns cnllo,, i Clll la imposic io n rlt: dt:lu·n•s l"'cu!; artt•nlanlr·, de· l'ucJ¡I •• lU t'tllllliliLCt'in••? e 1 Ó 111 11 SI' f•nllllCipa la l'tllll'il!ttt:Í.I para 1111 11' mos qnl' al Ciud~rlano i hat·t·rl" i~;11.d dt•hut d·: la lo·i, i ilw¡;-o >1! 'otnl'll! 1~ C'"·" ¡,.ut·i p.1ra hac.·r dP,io,:ua! :d q•~·· t:lt'l: i al r¡u•· l'lt ,,.¡,a ? ¿~o l't·i.,, S1·iín••·>, 11110 r·l pntll'ipiu 1•iola la Lt i¡;~ta ldad, qlll' , .• 1.1 gr tn lt·t dt· la >nt·it•d;uii'S lotude•rna,? l't•ru aun 1:11' 1' . .!1.1 pii'S~nlat' la tnt•slinn 1 o su l'o11. ••·li i 1 a }ü que lot lu ! t'IIIHid<·•·adn pu su l'at. po'ítira. 1:1 f'aln 111·isnw, i >~tr:nn~o qn1• lwb, 1.., do• mas rrlijiuu•·'· ••ru~onrc 1111 iíouil· ..¡11~ lo·., para do·l Gol ieJ uu l1'11tpt11 al. E' j:u ~t.wrt. oin l't·~rn.a, ;in cundk-iun, ti"!'d~·, o 1"' , 11H no~ :1:·1 ~,. ('ll'('• a 1 (ll'lcll"l 1' l llillt•, a ll'f'o nuc ·N 1111 so'o '"'"'181111 1 1111 lniÚl't;o l:~. ¡;,,.,¡ dn l.1s ii·H~ &uh,t• l'óll lollalo ll'lt,i:i lttn em. nadas ' ti•· t'IIIIII'IIÍ•·• l"'•l.lin,, l'..!t·l ra " t·nt11• ci.Jt·l'o· tl1· h l¡;le·,ia i ro., Ht'.\1'' tl t· b pail:•, h;riJi,•u lraz:l u tl~r.t ttl·nlt• , .• ,. iílallo• cljur.tull'nlo qnt• l'''''lal.an l11• l\1,ui,lto& l·o 1lt'ficiarics te ·nia ni jt:lo t·nn•tt ido 'llUII' e¡ n·c.u·r, 1•''' '1'"' d .ult·r~nu 11'11li•Ur:t.l t.~ , <.lt'rlaratln ) a lo> ÍIIIÍ,.os puul!to dt: >11 COIIIJ' trncia. !'cm ltaltio·n•lo d•·s~pa11·1'idu rsa líur•a t!i bl ri~ t'n t' t•,t.tdll "' tuai olt• rut·,tra l•·ji, ;u i• e•lju1 an11·n tu 1'> 1 a;:o, ah·oluto, i pu1·de ,.,, dt •r>t.' 1 1'1110 111' IÍ111'11 111, 1011111 1111 1 llllljll• MJ tlt• t·onc-ic•rat· ia~ 1 ou1n una uld:~'éH'uq; t• na, l1abln 1nlru·rar t·! duu.iniol sa¡:o:trlo , ,. com•it'l ri.1 rrl1jit•~a - llr· •"1' í, ,('iwo ,.,, ', ha bl'• 1 ido :1 uuo• 111~ t'au:.a, ;, olniS do· 1 lo para l't 'l"'i!llat e, .1"' ""'''nlo, 1'''; qu que• lo 111 tl1·na, e·l Uol•i• ·•uo r1n• lo o·Ao' han ti it'1111 loa,!;~ climdo· hl' t"lit•ncl,. 'u , riuu tlt·olll'tlt·ft'l', lcuantlu a'¡¡uu<" :\,i han r¡ul'tido fij:u·lintdt •' aljn1a••••·nto,' s.· lc•s La dicho i no lwi 1 e· e1 •:•, 110 L• tation! !la e .nt il·rria~'a!óli(',l sur.1eoal1~da, lt", dnrla, se inquil'la, i armada con ,.1 , , ,, , 1., q•W lt: rfit !Jiu~, t'H'Udada ('011 l.t Ct.ll•l Ílt •l t·l qut·lt• han lll'(·lwlo, loomlllt 'b, inlcttll!' ¿ , ~ la dontl•·~t•tilpl'nllilirlu t•ret•rr ¿lta>la, ,,. ,¡J , sera pt•rmititiu Clht·iiar? Ved aquí. Sciítlll''• latausa dt• c·~e 1r. •1•··•~1 que por lucia> p:a ,,.~ H' >it ntr. Tl'llt'n .t ·' ;, ht•llñd de t'!tncicut·ia, fH'nt no ,afwu1o, t·l\ dundt> t•mpirLa i 1:11 tlóuclt· aralw ~. t· ti, 11 •• cito: los \lini;hos el~ nut'blrn c·u1 to.rll!'~ 'n club, 1'111 ill'ciclw, ault• la &~•ri•·dad po1i:.t·;•., ~ l(ln at~dus a una <·adf•tt;t cuyo c·>tll'llotl u11 , 1. ak~nza a ver. El GQoicruo lo> hnjdu t'lln 1'&:1 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL C..4 'IOLICO. ~------------------------------------------------------------------------------~~- atadura, que S~ IJ~ma jnramentQ inctmdiciu­~ al, absoluto; loo condeua a 1~ nulidad poti­Ica, corno l\lac~t1 os de una rclijion autisocia 1, a ~uieueM es pn·cisu oujt"tul' por una pa 1 te, i l'll'at· por la utrll, ele toda influencia politica. 1 l'tl' Cota duble !Jo>tilid~cl, cualqníera tliria: e pll·na libertad dt• condcntia, ;e trata de f).li~uinar el Catulit- i> nlo: ha lntllo la lnqn i· :non, no c·on sus hognc·r:~;, qnc fu1 1Ual an el i>tt·ma peual tic! ul•o> lit!lliJlO>, 110 c·u n ~us IIIUH·ntns, que c·ran c·l si>tl' nla 1" cccdimcntal 1: ·•q1odla •'·poca, ,iuo Cll ll J., i1oc: paciolad po­Í'ica i e< n la cll•,i;.ruald.,d, que son la pc•ua i ·! lOilllcntu olr nue•lr ••• di a,, c•mple HIU> eo­uo lllco;ol> dr. ¡,,1,wnc•·una ,., cene a, o de per­cgui• · la q.u· t·Ai .lt·. \ .u io~ celo·s~~•'"'"S han p•·c•slado d jn•·a­• ·nr o lc-¡~al: l'llu!o han qul'l'idc •"'o no ali1a1' a IH II;'Ut~l a po:Íiil':H·u ,1 as t·t·,,it:os ca:icnlt•s cal­inan ludada nut·>trch pic·s. IL111 t"l """lu 111 t:l Congoc ·so do·•ogne l'~:t lt·i, C"uyus 111~ lo; ¡·f•·l'tos •e t·~l:on p;oll a,.a,iouado,, >C Lan rt•,hlido pn·starlu; P''' 11 la lo·i, aunt1uc hubit:ra >ido c·rwralwculc: 11l t··h·· ida, n11 puede w~t•·•:cr~t; lile d '1'1 ilounal d~ la 1 .llcll i ~s preci>o de­o;:" rla. \ cd, Se1ion•,, p~rtc de los funJamt·ntos 111c ha lt •niclu l.t ~lnuicipaliJaJ clt: C:oli, t~n ·u~o rwnd11e lc·n¡:ro c·l l:ouor de diriju·nte a o' u!><», p:ora P' rl1 os la dtTog:.tniÍa dt• la ¡,.¡ le polic-la dt· t•u 1lus, o P"l !u n¡C:no>, q11r. In f'fcuoH·i&,cli~po!IIC!:Hio rp!t ' el ¡tu an11 ·ntu dt·lus 1 ini&IIIIS "" los t.ulto> "'a limitado u h. que s ele Lo cunqwtt•ncia narura1 dtl , olu·rano, cjando a >ah u,.¡ du1uinio di' la tonciruria el n·ji111•11 d., lusrnltc.s. IIanis,StiiniC>, 111 hPn inc·.timablc a la , al'wn , c¡uc breudu '.otóli<'~, o~ haLr:\ ~in duda ce rido t :unbit 11 atv 1il'os, cuando ••s Ion IHitllbr que nl'c·e·r~n sn l'l<·t·ncia c·~r iln ~ourc el t .. pc·tt· de la dis- •mion.-Caii, 17 ele l't-bC<•ru de• 1864. t;u tl t¡u o 1~. lneios. m lllmo. Sl'llOI' Ohi~po rlc ram­lona lflH', ro1HO dijimo~ ru lllW"tJo llÍilH'ro uult•riPr, nua'randoHirnullca l t•uidado de su~ on·ps. dl'jr\ oi1· su ·ol. pa.-t .. ral li:r~ln rinC'n clias · •:w tr ·s le su lllllt:r le, i {'0!1 In ron\ it·cion J•IO• u tillo de 1111 ~a<:erdol e de J r. ltt'l islo 1ahlc'1 :1 ~tl CII'IO TC'l'PllH!IIdúuclole el nmplimie11to de ,u~; ~ngr;¡dos tlclH·­cs. He 3!Jl1Í su t'JIIillla pa~toa·:.d: ¡OS JO, 1\1. 1 11', ODCSrO DC SAN rBnHO AI'Ó510L Df. PHll't.O:\A, ~ut•sh•a ~~leima ;aalaJ•rn. Alt·cncr11Mc clero 1 fielrs de tlllcst/'(1 tlioN'Ii .• , alud i bcndicion en el .Sctitlr. Concluidos !11• ilhimos ~p· estos p:.la l~nzar ­og a las n·jiont~• di' una <'l<:rnidnel sin fin, ut11'1nos 1Je,dc t·llt·cllll moiluoJiu l1acrr a OSO ti OS 11111 '~11 O po~tl cr lq!:lfiO ; ~Í, q11t I'C· ws t¡ue nu<'stra (,(tima pai~IJ, a llr~ue ba~la ·osotrn&, como el m a> e·vidcnle le>timoniu rlel alf'l n ;,! amor q111: os 1 Prnns po ol\•sadu dt>~­t: que tm imo~ la dkha de •~r gua• dian i astur de \' ut·sl ras almas ; i al dtsct·ndn al r·¡>t •s co1r.to d l'n1 tunado h1 acl. DIIJI'Írl~mos Vf'rtirndo la ­rimas sulJ¡c• la túnica tlt•spc·cl;JZada de la lgle­ia de n li'S it o pah, i por vurst1 os sul'ritric·n­os, nnestros <~o~ scran o;cmccidos con \'ti'• adt·c a amac gtora. li·HUDLrs SAcunons: la mn ttf'dc nrcs­ro l~>jílimu Ohi J!O i l'u•lado >t·¡ ·io pa1a \'USO· ros una IIIH'\'3 1u·m·ba de lrah~d i flrmtza en 1 cumplirnic·nto ele· lo s.1grados dol :crCh qne stais enc:atgado de desrutpe~ar ; p rque no t•xi~til'nt.lo e 1 nurslla cliócl'si el<.:apítukl <.:a­lcdr .!, Pll ~nflcio•ute nitnwro i ha!Jilidad, pa­ta uoml11ar el \'icario que deba so.tituitoos e •• el G:.~l :icrno, es claro qu~: la act"i'alia de a ¡urlla 'glc..ia &el'a t•omplPta : acefalla qoe nu sabeuw> si dnraril por largu ticmJ,o, por­que CUI'I e~pondicndo al 'lctropolitanu la ¡:ro­vi; iun de la \'a cante·, conforme al cap. i6. Sc,ion 2/J de:! Concilio de Tt ruto; i en con· lr :\ nduus en una ~ito;ú:iun \'enladPI'alllenle :lllg-u,t:osa pa1 a el pront11 cJ,.,I'atho de lcos nc·got.:ius H:le;ia,tico~, •·• po,iult· ~e deniUI'C la jolllll>iuu ele vcw~lro lt·jlilll' Gol ,.,naclur; i ca 1 al hilc•a<'io ·n o~ t·ncun·rt•nws la uniti:HI t•n la f.: clt: J o' , lll' l i't" i c·l JH ul'noclo to·speto 1 a la,l o•je·s de la lgl~,;,J , porr¡ut! c·•la ,., l:t imi­t" a lahl:1 pero el M·guru a" o d" >alv:·cion, ,¡ en tittllf'". no' acojt·m•t> a ,·ll:o.- p .. ,. t ·Jntn, os enl'cHueutlamu, c·sla uuiclad, i qon· no os ha gais 1nd ;:nu> do: la c~•a dt; l.r;oel cun \ III'S· tc·a• c·C'b:u·dcs condo·>c:etlllt·nci~s. ' o o:vidt•is !u, ltrt u• i Jllranwnro~- qc11 : al pil· de: los alta- 1'1'> htd, tc·i> ele! hl'l' fit·lo·• a 1 ''' lt•Vt'' de L>ws \t.i·XIHO ~duR1 CCJIIIU >at'eldfllt:> i 111\lli,tiOl> de ou alt .... Ltos ele I' IJ>Otl o~, que J, ,,y:o is ca ido 1 en Id d•·sgra< ia dt · 1 iolur tult·~ jnrarnc nt .. s, 1 :qto rsn1 a u~ a lc·1 anta11os por la 1 Íil dt·l ''" t·pc:n­limit ·ntu ido· la te•{OI'IIIU rlt • e ·t~,llllllhrc·, por 1 qne de lo o'tl lllr.oriu, una cnnnoc· l<'l>Jlllll>:ohi­llllad go .11ita boln; 'O~Olll • >, i djniciodc 1 Uius se·¡~ VI'Hladc•ranwnlt· rig111osu i se' II.'IO al lumarub cuenta del sagwclo dc¡oóoito de , ¡,, l't:. \ l~EKARLFS SACHnoons qor hahrio St·gnit1o nnc~l•a luwlla lwsta c·l clc ·~ tit• tlll: una I"'Jiua mni bon1o~a lcnc·is ahiol'l:t cu c•l liiHu de \' llt'SII O> llltll'tÍII. it·utc", ¡ eklc·i~ e·>l:u >:ttÍ>· l't'el'"' dt•c·ll. ; pe• u no dt·.l'a!lc·. c~ i ~ e u el c:omit!l el,• IUI'>Ir.o l'l'lit'idad, 'l"t: ton tanto dc·nuedu hal f'i> o·u•¡ne·ndldl•; H·c·oodacl c¡ue l la po•¡ ~nerauC'ia t:n las lout·U:os c•lnr1~ c•s la única l,a"' s•·gou·,¡ dt• 1~ 1 c1 d.11lo•1 a 1 Íttud de•! l'li>IÍ,llii'l110. )o', e·it:IIU <]lit' ludo> Jc,> ('l'S31CS de· l'slc· 1.olle dt·l~¡¡run:o~ r· at n uhtc IIJ\0· 1 hus; i c¡ue c·n t•sle: mnnclu alc•11• i pa>ajtiO, S<'lt'l> flll~t·goiclos i calumui.odo~; ¡oc10 \ul-ll ·d l.t 1 i~la h~ci.o el C:ah :u ieo i allí cr cuntra­ll'is tomno·lo i I''JH'I.oll7:t> ljiH'OS lo:u,\n ohi­dar lodos los sul'cinou nfns de la udn. :\o alr ignt·i, jam~• c:l odio t·n vn1•stros < e•r':070· nt·~, i tonocr . ·unlto J>i,inu :\Lu ~lto, ~l'd pronto~ t•n Jl''' tloua1 a ¡,,, cp:t· l.oi 1 ~~ 1'11 tic· wwlros c:l c~c:uuio, la in isiuu i t 1 ol jeto de MI ent·ao nitaclu c·ntouc•, )HII que: : ai ¡ tic leos '1"'' llc·\ an la rt ·nganz a f'n t·l nu a1on. to-e os llllt'bllfl' dioc 1 ~r•llll!, ,.,Jonll&lllP~ a la 11ni dad Jc: la l't'· de J¡;~n cd,to, n la ¡'enilt·nc·in i a la con,tanlc• orac·i .. n, po••lut· IHJ hai' q11c dndado: In ju>ti,ia llhina t·s In qnc· !.oi lo­ma c·ne·nla de· lc.das nuc·sto:l> inic¡nid.odc , i aqnc·llas 'on la, ilnicn~ 01 mns e IJIHlllf' pode­meo~ a¡•lotar Me 1 i~or. 1-:n t11do d tit •n1po de nuc ·~t1 o fpbcopa<.!o lu·111o~ r<'t ihidCJ ¡•1 rndas mui se~was <.le la pit•d:od que· an·mo \ue·~llus a11lld> ; i no cloda1nos que M·~is m ni capae.·t s dt un~ H·l'ormn j"'"'' al de e·o~lumbrt•s ; i en mt:dio dc· lauta anictionc·s que dr\Oonn mi a'ma ~1 doro~ mi última de~pcdid~, oqnc•lla id .. a 11 anquiliza mucho lns ojilncionf's de nuc·~llo cornon. A rnalquirra de lO~toiJos, que lll1}31lHt& e:f'cudido C'n manrrrr nl¡.:una, "s ¡it·ditltos rn t':ll idad d p1·rdo~ conc~pondicn­te n cada !'alta. ¡\o ohida1cmC1s manirc~tar nue~lr·a innwrtsn gratitud par a con Vrne7ue·la; porque en ella lu ·mtt> E'Ol.'Ontraclo un n>ilo rn la d1 sv•ncia, amigos que han rnju!(ado nul'~1• a~ l~grimos e•n lus dio~ de tribulucioll i t:l poir~ qnc oeullnra nu siros testos a los ojo~ de los morlnle•t.. Dadn lll la calólica i hospitalaria Yilla d& Sun Antonio dd 'láchinr, (doncle nos rel'lf· JÍan,os, ) tndo dcs!t rraclos [1or In Yia de Car­lajf'na, pOr halif'r r• tc·slado los decl'(• lo~ ~o­IHe "Tuiciton" i "n~samorti7aeiun de ltirn~s de manos nnll•rtas," a los orho dios df'lmcs de febrero del (lñO del Snitlr mil oruocit:ntos >csrnta i cuatro, lirmacla por ,-os, sellada con e:l sello moyor de nut:stro D~'bpachu i refrrn­dada por· nnhflru Notario nra)lll' i de Go· bíerno.-JOSE f,UU1, OBI)f6 UE SAN PJiOilO AI'ÓSTOL DP. PHIPUJ:H, Por mandado de S.S. • lllrna. i Reverendhima Jos¡; .llari11 Cem11rr¡;o n, Notario :\laynr. i de Gt~bit·mu. - -+t- -- ·--~ V A tU t•:D.\ U 1·:~. -En la w.dll' del 7 d1· c~lc tne ·, fué oiN'tl'liaclo el Sciwr .Jcuer:d MO'i · yut:ra por Sll'i ::~migo.; con una e:lr·c­pitn.; a ~e1·erwta, i clmaulc ella fué vicloread•1 como "Empt'radut' de Colo1nhia." -En el "ensnjc que úllimamcute tlirijitl al Con¡.:rc-o clrnisuto .Jcnt'l'al. di(.;e que p¡¡r·a n-P~tu·nr In sohcrnula nncio11al i s¡¡c·:u· avante el paio; de las erilil';r.; t'ÍJ't·unslanc·ia .; t~ll que ~e eu­Cllcnlra, es i11dispc•,¡s;dllc que sr e. ija a lo'i ~acndolt'' Catoli('OS el jut•a· mPnlo rlc la lei dt• 23 dc~ ahl'il, ~in c'cepcion i sin rc,trit"r-Hrncs ;_que St~ l,rnce de la Ht•pr'd>lie:l al f{IIC se nie­gue a jur•a r asi; qne no ~-te admita uiugun funcionario cc Je,.i ·í· lieo que 1111 ~c.1 r·olornhiano, sin pe•·miso del Poder Ejecutivo; i que ~~· impougau pett:-ls st:,·eras a lo.; que rt ciha "· cir­cnlcn, n11npla11, o ha:;an cumplit· las rfi,.po"iciunes ch: lo I'H·Iacloo; e-tr·nu­jet ·os.- Qut': addantaron, pues, los S:lccrdote, q u c. pol' dc-;ria 1' clr• !!Í esto!4 go•lprG, 1 orrlcmpoi'Í:t. cs••nuclalo~tH contra (;¡i.,lo, eonll'a la Vir·jiuiclacl de la ~la­dre di\ioa rll'l Salvado1· del tntHHlo, coulra el t•nl lo de la:-. im irje ncs, con- . Ira la jctar·quia cdesiasliC'~ cte. Los Padres .Jt•stoilas hall ~en · ido rlc tema pnra pintn1· a 1.1 I¡.tle:-.ia <.:alolica co­mo una f.ompni1ia de Comrr·cio, í ha~tn el sei10r Samper que se Ita he­cho el rl('l'eu .. or rlc sns ' 'O li11Hltl'iot:-~ :. crt.n rclncion al dtr<~cl,o que tienen un profesar Ji!Jrcmcnl~ su rclijiou, su cullo, se ha co;pre.;ado del modo tnn11 acc1ho coutt·n esa Relijion.sin rc~peto por la crccucia de .-n'l compatl'iotas . Si nqui lmhicra, como se dirC', fana­tismo rclijioso, d pucLio hahria cas­tigado ya a los r¡nc asi blasfcman, .o ~e bahria hecho m .. tarpot· ca~tigarlos . Los ünicos fanaticol) que conocemo!, son los l iheralcs que todo lo ull raja11 , lo pisotean, lo e~cupen, i p~sau de ­satentados por encima de los dere­chos rn:1s rc!'pctahles, trastornando tocio i lh'j~tHlo maleada s11 ctuTcra con arrOJO" de o;angre, lruprt>nto Constitucional. Cat'fel''- dt Oc~ident~ calle~.~ número i8. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 41

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 76

El Católico - N. 76

Por: | Fecha: 15/11/1864

AÑO II. Bogota, 15 de noviembre de 1864, NUMER076. 1 nidad: >) la anat·quía reinQ. como soberana ; tas -:--:-:--------~--~-------,-- 1 revoluciones se su~eden a lfts revoluciones, porque REDACTOR, VENANCIO ORTIZ. <) ta romana.>)-Cuba, la n1isma Cuba, la joya mus Este pel'iódico, que llena jene1·armente sus es- brillante del \)Ceano, nac}a adelanta porque la ti­tensas columnas con at·tículos pmcaces contra el ranfa espiritual la tiene abrumada, i e< Roma re- 1 1 Catolicismo, está hace dias calumnian 0 el pode¡· duce al caos la sGcicdad en que gobierna.)} de los Papas para hace1•\o apa1·e.ce 1• odioso al m un- Pot· el contnu·io, el Norte fecundado por el pl'in- 1 do. Bajo el título« El Romanisnw i ta libertad,», cipio pt•otestanté, muestra al rPundo sorprendido publica sendos desahogos para que los vean Jos una moral jigante, unri civilizacion hermosn,. una indi\'iduos a quienes los Jiberal<'s llaman pueblo, riqueza colosal i una paz octaviana. << ¡La inte-i se satmen de las ideas contenidas en etms pro- lijeneia, dice, no puede abarcar el porvcnil' de un ducciones. Como esos periódicos gozan de la pa·o- pueblo semejante 1 >) teccion del pode1· que hoi nos dom~oa, van con Luego da un salto hasta la Gran Bretaña, i segUI'idad hasta los últimos rincone de la Nueva viendo a la Il'landa, llora atl'ibuyendo tanta mi­Granada, donde son leidos po1· los que ejea·cen la seria al romanismo, a la influencia del Clero ca­autol'idad, i el infeliz habitante de los campos dice: tólico. <) Es, pues, pre- an VJVIuo 1 viven surnet'J.l as. en un auattmiento ciso trabaja¡· para que esos en·ores no puedan moral, en un abatimiento polítieo. tales, que Jos difundirse. Aunque nuestt·os escl'itos cit·cu!en mé- hombres de esas naciones están en su deg¡·adacion nos que los de nuestros contrarios, la razon fun- al nivel de los brutos, miéntras que Ho.tand.a1 ape­datla en la j~sticia 1.. se nbre paso a tm ves de todos saa· de la pét·dida de su con:iercio i sus colonias, se Jos obstáculos, i nuestra defensa de Ja ve1·dad algo mantiene altiva por el principio protestante que podre\ hacer·. la nnima. >) Los liberales, siguiendo el conse,io que Mazzini Ese principio encontró al mundo barbaa·liado, daba desde Puris a sus amigos ele Italia en t 846, esclavo e ignorante por la influencia- éatólica, i li­no cl'een oportuu'ls las discusiones doctas, hablan bertó a log pueblos dándoles ciencia, literatlll':l i alto p:ua foa·mm· la opinion con el nlido, por·que dignidad: ha dado a los hombres Yirtud i un . snben que el pueblo no entiende ¡ se apasiona de muodo, <) 1 multitud que qniel'€·n convertir en su instrumento, Tal es el cúmulo de inesactitudes histól'icas i de 1 solo le dejan ve¡· el pt·ime1· paso. Por eso usan insultos al simple buen sentido, con que el señor siempt·e de un lengunje hipócrita. Rcdacto1· de « El Tiempo» llena las columnas de 1 En uno de Jos artículos a que nos referimcs, su pc1·iódi~o. Vamos a co11testm· con la estension dice el escritor entre Jngrimas ¡ sollozos, que la que podamos, no porque esperemos convencer a Italia que e1·a la Señül'a del mundo, adot·nada con nuestro nntagonista, sino poi' cumplil· uno de l)ues­las obt·as del injenio, tenia a Miguel Anjel por su ta·os primeros deberes, la defensa de nuestra fé. ' arquitecto, a Rafael, el Ticiauo i Vinci por sus Los jénios que se nombran como glorias de Ita- 1 pintot·es, al Dante; el Pett·aca i Al'iosto po1· sus lia, i muchos mas que se le quedaron al articulista poetas; pero que ese país privilejiado ha caído en en el tintero,habl'ian muerto oscuros si los Papas, 1 un estado deplot·dble poa· el l'omanismo 4ue sirve esos Papas tan odiados, 110 les hubieran tendido de rémot·a al progreso. Que ) Que solo la revulucion di miento de Rubens, etc1 cuadros místicos son los. 1 contra el pode1· del Papa i la destruccion del Ca- que se citan de los mas bábiles pintores,que tenia u tolicismo, pueden devolvea· a la rtalia su antiguo en los Papas, Cm·denales i Obispos un seguro pa~ j , esplendor, porque la Relijion Católica no hace tt·ocinio. ¿Quién conoceria el nombre de nuestro sino esclavos como el pt·otestantismo hac~ bom- Vásquez,sin los frailes católicos que Jo protcjieron? ,1 l~t·es libl'es. Cita en c1po~~ de. esta ns~rcion, la di· . La ar9uitcctura cuenta entre las obras que han t 1 f~rente snc~·te de la Ame~·•cn mgl~sa 1 la española. 111mortahzpdo n los hombres, los templos católicos ,j En esta, diCe, todo se lww con las armas contra como la iglesia de San Pedro en Roma, la de Stln 1 hombt·es inermes; <~ tes~ros inauditos llen~ron los 1 Pablo en Lón) En la otra po¡· el del Sm·, los edificios mas notables son los terl)plo~ contrat:IO: hombres sm mas armfls que la Biblia i los conventos que el pt·oga·e~o liberal estt\ desti'U­descnaJaron los montes al son de Jos Salmos; e yendo. I esos edificios son una coJeccion de cien~ ·, ¡ hi~iea·on nace•· pobl~ciones activas, h\boriosas, cías i m·tes, porque en la arquitectum están com­P?. J.aLites, q~e crecen 1 se desarrollan con una pro- prendidas 1as matemáticas, la física, la mecánica, dljtosa raptdez. i en los templos hai pintmas., estátuas dorados i Segun el escl'itor liberal, en la América del Sur i hallan fomento e inspiracion la músic¿, la poe~ 11 110 se planteó po1· los Católicos ninguna civ-iliza- sía •••• ¡ oh 1 es im\til que se pt·etentla neo·ar el ~: ¡ cion) se destruyó la que hahia, i ce el estado mo- empuje que el progreso ha recibido i recibe del es­. ral es tal, que lo hace avergonzar po1· la huma- píl'itu católico: El Dante, Pett·arca, el Tasso, ('l .. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. !as ' afer<.'ioPlcs ; e to es lo que s llama boi por la es- 1 que l e s dió la Iglesia, con la p1·ot ccion 1e les 1 1 cuel a·eCormadot·a, momlid 1. . dispensaron los .Papas. Al tratm· de la Amél'ica,el articulista pt·ocedien- Lns Universidades de que han salido los mas 1 tlo con una mala fé que llega a la exajcrarion, in­gt ·rmdes hombt·es, allí donde se hnn cultivado las ; súlta r~l buen sentido- í miente a la hbtorfa-. Con­ciencias, donde se ha abierto rampe. a las intelijen- ftmde las épocas, no com;idera el diferente carácter das, han sido casi todas, siuó todas enteramente, 1 de las razas latina i nngfo-sajona, · pot• i1ltimo, ·f • fundadas por las Papas, pot· los fa·ailes, po1· la Igle- calumnia a aquella nrgánc.!ole el mérito de haber , 1. sia católica. ¿Cómo negaa· estos hechos si u daa· tnüdo a €ste suelo la t'e<.·unda civilizacion de -Gristo. un mentis a la histo-ria,. sin contradecía· capricho- Cu11oclt los Yf'lientes i codicioso t'afwle , i-samente a la hum~nidad agradecida? ¿ Cómo ue- 1 guiendo las huellas de Colon, vinieron a poner el , ga1· estos hechos que bt·illan en los monumentos pié sobre el pecho de la vírjen Arnét·ica pam arran­que Jos están exhibiendo? car1e con violeneia, no solamente sus t·icos adot·- Que Ron1a está :uruinada, se dice, pot·que <' S 1 nos sino la ' ' ida de sus desgraciados hijGs, los f la mansion del Papa. Eso es curioso ! Si el Papa l únicos homl)res que se atrevieron a condenar esa ·¡ no residiera en Roma, ¿ qué seda hoi esa g1·an crueldad i esa rodieia, fueron los S1 éporn, seufinturon a los otros n srguil· ta l i ¡.· la destruccion. ejemplo.>> l ese ejemplo fecundo sembró a d e spe- 1!: Pea·o si la miseria i la mugre de la ciudad asien • 1 cho de la codicia, la semilla de la justicia que es ~· to del Gfruiemo, son un argumento aceptable para ! t·l principio en que rcpos}l la wrdadcJ'll civilizacion. Í probar que este es Tirauo, enet"?igo del progreso, ¡ l l .. ~s ?atóli~os, pues, trnjeron al Sur la civilizacion r qnc debe atocat·se hasta destruu·ss , mui mal para- cnstmnn; 1 los tesoro ' que al'l'!\nNII'On del seno de ~ · do quP.da po1· cie1to, segun sus propios amigos, In tierra i de las chozas de los nboríjenes, no fue­r' el Gobierno de-la nueva Colombia. . ron a llenra la disputa. H Era una gnm felicidad hizo hui!· i obligó a sepultarse en los abismos con ' pam la humanidad, dice dt> Mnistre. que el Pode¡· 1 los dioses del jcntilismo. I.a Italia, i sobre todo 1 pontifical tuYirse aun bastante fuerza p11m obtener Venecia, librnda como el mundo de la gangrena de tan g¡·an consentimiento. >l T.a bula lnter cmtera, ese esplenclo1', brilló, no ya por el valot· de sus no fué dictada romo pnl'to de la pretrn ·ion de un b 1 ~ufl'iero~ esa ~n.isma suet·te sin esta1· sujetos a la pro\'isto de despachos otorgados por la Ueina Jsa­! nfluencm cat?hca. Llegados esos pueblos al npo- ¡ bel, a tomar posesion del terreno descuhie1·to por Jeo del podet· 1 de la gloria,empezat·on a descendE-r Amt~das i llnrlou, i a que se babia dado el nombr e Hlsta 9ue acaboron ; i la Italia ~ubsiste apesat· de de Virjinia, i Robcrtsou, historindot· protestnnte, los vmvenes a que ha estado SUJeta, merced a la 1 refiere así los hechos ue los jno·Jeses: e< El ardieli­influencia salvadora de la Relijlon que hoi se la 1 te deseo de etll'iqnccerse pronto que había dado p1·etende nrraQ-caa·. :Mazzini dijo 'a sus ndeptos en una falsa direcdon a la poli tira de ~spailil en st1s J 846 : « Para los que conocen la autoridad de In establccirniento-;, rstraviaba tambien a losino-le­Iglesia, ~a ruina del poder temporal no puede mé- ses, que po1· la mayo¡· parte buscaban solo 111h1as nos de envolve1· la totalperturbacion del espiri- de oro i pinta, i drscuidaron cullivnr d teneno tual. » I esto es lo que se quiere : se p1·etencle pal'a proveer a su subsistencia, lwbiéndose ncos­trastoi'Dar ~1 mundo n fuel·za de mentiras, para tumbrado a quitar lns pro\·isionrs a los uatmales pescar en .no re':uelto, porque el oro es el Dios de que, cansados ~le estas violencins , huyeron por fin ~a época, 1 se t{Uiet·e establece•· un mundo de ne- i los dejaron así eli riesgo de morir de hnt~nbre, c o ­gocwntes que vendan su conciencia, su honot·, sus mo habría sucedido, sin la IIPgndn de Francisco Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL CA!~~~~~~~:. ~~-~~"' ~ Ji Dmke. >) ce Como las colcuias inglesas en el Nue- 1 1 está exhibiendo la mo¡·alidad protestante con ras- 1 ; ,.o Mundo, se establecieron ron muchas desventa- l gos que hacen est1·emece1· el c0razon. La causa de l . jas, solo 11 ga1·on po1· gmdos. des pues de muchos esa guenn que es el empeño, por una parte, de dar ¡ esfuerzos i desastre& a este g.rndo de fuerza i de libert~d a los negl'os, i por otn1 de conset·varlos ¡J policía que les dá derecho a se1· tenidas hoi como en la esclavitud, dá idea, a primera vista, de un. ~ • Estados respet> Bnstn. tluencia perniciosa del Clero eatólico, sino la fria l;¡ Es, pues, una tlagr·ante mentira que los pt·otestan- c1·ueldad de Jos cot·azones protestantes que casti- j tes no trnjeran a A méyien otrn m· m a que la Biblia, gun a todo un pueblo porque no abjut·a su fé. ¡ i que al son de les salrnos descuajHon los bo'S- Deeir que el mundo estaba bal'lnu·izado e igno- ;,! t ques e hicieron nl\cer poblaciones ricas romo pn t·ante cuando vino la reforma, es el disparate ij ensalmo: miéntms los católicos se consumian en la histórico mas garrafal, porque como dice Augusto · innccion. Nicolas, '"Cuando el protestantismo apareció, to- j Aquello de que en nuestro continente no hai do cu.anto hai de inspii'Hclo, de d~scollante en el ~ mornl ninguna, no merece el hono1· de una rrfu- \ arte i en las profunuidades ublimes _del pensa- 1~ tarion; es nna c.dnmnia tnn g•·oset·n, tan indignn, miento, hnbia ya visto la luz i ha ta se halhba 1 que salta a los ojos todo lo contrario. Si las t'e\'O- en su npojco. El protestantisrno vino a sacrificado • lu.ciotV'S. o sucedt·den para asaltar el Poder: ese partido sh•m- Pero nada de rnt·o tiene que entiendan las :!· pre ha teuiclo tendencias antic:1tólieas, í es pt·cci · cosas de un modo tan pal'ticnlar, los que hacen sc.1mente por esb que no ha dejado ciment~u· consisth' en los triunfos ue la .Rusia, todas lns ¡ ningun ót·d r n desde que nos hicimos independi('1l- espenmzas para el n undo en lo futut·o. El déspo- ~ tes. Si nos fijamos solo en nnest1·o suelo, lo. ·emos ta. mas déspota es para ellos el terror del despo- ¡·.~ haciendo est~•llat• las primeras lue1 as desde los tismo, i allí donde la esclavitud :; mus bjrbara, pl'ime¡·os días de nuestrn gloriosn crmnlcipacion. donde el 'íguila clava sus garras de acet'Q . en el El gl'ito funesto de federacion sirvió pnra regnt· pecho de un pueblo l1cróico pam castigar--lo por ~ el suelo con la snngre de los patriotas i abl'it• las querer ser \ib1·e, se diee que están las esperanzas puHtas de la patl'ia al f<'roz pacificador; lo vemos de la libet•tad. Hé aquí Jos hombres, hé nquí Jos 1 1 ltwgo atara¡· al Libertadot· de Colombia en medio ¡)l'ineipios... l de la noche, i siguiéndolo en su carrera a tn1.ves ~· ~.' · del tiempo, llega¡• Tulstn la fecha, siempre por LOS LIBROS PROH~~IDOS. er tre chareads de snngt·e que ha hecho v~t'te1·. Al sentit· de la escuela libe1·a~ tnodenw, la pro- . ~ Lo que ice el articulista de la isla de Cuba, hibicion ele leer dertos Hbros, es UIW ma1·ca de 1 tarnpoco merece rcfutacion. Hai Pst:\ In isla nto es bien que es una impostura lo que con tanta 1.ma necesidad social de primer órden, i la Iglesia 1 att·evimiento dice el escrito•· p1·otestnnte. católica In ha éomhntido siempt·e, porque esa Igle- .l1 Que Jos Estados Unidos del Norte llegnt·an ,i.l sia es enemiga itTeconciliable de todo ndelauto i ·1 grado de prosperidad que tnvic1·on, no prueba que de toda .• erd•ulcra ciencia; po1· eso no ha bl'i-e1 pt·otestantismo sen mas ''entajoso a los pueblos llnclo ni brillará nmlca una chispa de jenio, Ull que el Catolicismo; lo que prue,bn es que la J'aza destello de luz qqe ella no se npresme a npagat'; anglo-süjoun es müs a rropósito para los estable i si es preciso con sa1wt·e, con snngt·e. 1 1 cimientos comerciales que In latinn, i que la P. escindamos de las calumniosas imputnciones situacion topográfica de los lugares decide lns mns qur. no pueden sostenet·se úelante (le la histol'ia ; 1 Yeces de 'su sue1·te en las cspeculncion 'S. Por eso dejemos u un lado e as fábulas vulg:ues e imper::- 1 1 es que Holanda ha- podido conservarse, no po1·que t.inentcs de sabios perseguidos! de ilescnbl'imientos sea pt·otestante. nhogados duranta siglos enteros po1· el Janatismo Nega¡· que la EspniHI. Portugal é Italia bnn elericnl, &! &. ; cerca de dos mil nilos con todos tenido sus grandes épocas, es rasgar \a hi storia. sus mc;mnmentos i todt>S sus granJes hornbrrs es· Tiempo hubo en que ((el sol no se ponia en los do- tt\n ah ( para desmentirlas. minios de ]~spaiia, >'> Pot·tugal era mui ¡·espetado Hoi sost~ncm~s ~wlo c¡ue la Tglt>sia cntó!ica está 11 1 1 1 1 asta cb1e 1 ~ .Itlglat~r 1m, e Itali 1 n ostenta 1 ba r,o•? orgu- 1 en su derecho<.~! prohibi1· 1 la lectura de l~sb 11ibros . o su e ISJ m o c1e o canta e o pot• os jen10s que qne atac:l n sus uogmas o ns costumbres pll icas ; han so1·prendido al mundo. No estcl el progreso i que nada hal mas mo·t·al, mas justo, mas. filo só- 11 . solo en el come1·cio, está mas hien en la virtud neo i mas p¡·ogresivo que esta prohibiriou. que le dá garantías. i el egoísmo fl'io de los meta- Desde luego consideramos dos c·_lases de libros lizados corazones ue los discípulos del inmoral mnlos, unos que atacan las costumbt·es públicas · Lutero, no es mui apropósito pam fomentar las pt·esentando desnudo el vicio i haciet)do sn apo!o- 1 vil'tudes que hacen pt·og¡·esm· a la humanidad. jín, i otros que atacai1 a fa Jglesin católica direc- .' El que lea los viajes de M. Arago, i vea Jo que los tamente. No hacemos a nuestt·os a(l\'e!'sarios el ~ cotonos protestantes hacen en la India i eula insulto de creer que deseen vm· en las manos de i Nueva Holanda, conoce lo que vHie ese p1·og•·eso sus hijas las novehts i ·Jos 1 omances que la Iglesia j at1·oz con que se quiere regalnt· a nuestras pob1·es ¡ pl'Ohibe po1· cuanto atTancnn el velo de la inocen- l mé\sas; i la gue1'1'a aotual de la República modelo, 1 cía de la frente de las vírjenes i c.orrompen el co- 1 ~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL CATO L l C O. mzon de los jóvenes. La lectura de estos libros (i 11 su opinion propia, se precipitan en la cal'l'e1·a del , Jos hai en gran número) ni ilustra ni mejora, en- l errot·: todos se presentan con el libro de las Es~ ferma la imajinacion i daña el alma, i al que no c1~ituras, pero en sus manos es este un signo de puede ya pervertirse, le hnce perder el tiempo, discordia ; uno vé en él el fatalisrr.o, ot1·o la abso­oeupando en bnjezas un pensamiento creado pa•·a Juta independencia del hombre de toda gracia di· elevarse hasta Dios. Hacet• la defensa de tales vina, este la presencia real, aquel la presencia libros en nombre de la libertad del pensamiento, :figurada. ¿ 1 quién podt·á trrminar sus disputas 1 puede ser propio de demagogos libertinos, pero los i querellas ? ¿Ha ni dejado a su Iglesia el Dios hombres que estiman C:'ll algo la mot·alidad de sus de verdad i de sabiduría sin un medio pode1·oso famílias, no inculpm·an a la Iglesia que destierre de iluminar i contene1· 1~ entendimientos? ¿De- 1 del mundo cl'istiano lo que ellos no toleral'ian en berá la sociedad que ha establecid(),no ofrecer sino su propia casa. Sin moralidad en las masas no la imájen del desórden i de las disenciones? » puede habet· felicidad social ui verdadero p1·ogre- Si los mas clar·os talentos han sido con t'recuen-so : un libro de la clase de los que vamos hablando, cía engañados pol' sus propias pasiones i por los · 1 hace en la sociedad el misfl)o oficio que esas m u- sofismas ajenos ¡,cómo podrán las masas iliter·a- 1 .fcres infames que especulan entl·egando vírtimas a tas pesca1· po1· decirlo así, la verdad en un oceaoo la licencia de los malvados. La policía debiera de errores? Tan cierto es que In verdad ne(!esita encat•garse de ) no los libran de verse desmascarados,de en-a esta libertad, co1·ta el vuelo al pensamiento i de- contrarse en presencia de la parte sábia del Cato­tiene la marcha prog1·esiva de la humanidad ácia licismo, frente a frente con sus_propias contradic­la dicha i la verdad!' Esto dice la escuela libe1·al ciones, con sus propias inconsecuencias, com·en­apoyacla no sabemos en qué; la razon apoyada en cid os de absurdo i de mentirn. I~a Jglesia teme las la esperiencia de todos los siglos nos dice otra cosa. malas doctt·inas porque pueden estraviar a la parte Para que de la libre discusion brotara la vet·dad ignorante de sus hijos : Voltaire i D, Alernbert 1 con todo el bl'illo de una evidencia il'l'esistible, quedaron vencidos des pues de habet· engañado dos seria preciso destenm· del mundo dos cosas, la ig- ¡ jeneracionesj i llna alma perdida pa1·a la ve1·dad nomncia i las pasiones. La humanidad buscó es una alma perdida para el progreso i para d inútilmente esa verdad durante dos mil ai10s, i cielo. Sócrates i Platon tuvieron bastante para su glol'ia En las ciencias físicas i ron temáticas, la espe­con habe¡·Ja alcanzado a vislumb•·ar pot· una estre.. riencia es el crisol en que se depuran lr.s teorías, i cha rendija. Los protestantes la buscan hoi con la las pasiones no tienen motivo para empaña¡· el Biblia en la mano, i ¿qué han ~ncontrado? ''En- brillo de la evidencia; pero en materias relijiosas tl'egados, dice ~'t·aissinous, sin t·egla i sin freno a i morales, solo directamente de Dios puede reci- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. birse 1~ verdad, solo E>n el seno de la fé puede en- ~ ajente principal de todos nuestros progresos en el contrarse la ce1·teza; i si la humanidad estraviada j porveni1·. '' Jesus, dice, ha fundado la Relijion en vuelve siemp1·e al buen camino, mas es po1· la ac- "el mundo, com() Sóc1·ates la filosofía i Aristóteles ciou sob¡·enfltu¡·al de la Providencia que po1·la ac- 1 ''la ciencia. Todo debe set· editlcado sobre el fun­cion natural del raciocinio humano. "damento que él ha puesto, i nada debe salirse Si, pues, en la lglcsia e.stá In verdad, sí en la 1 ''de la nocion esencial que ha cread.o. La funda­vet ·dad (.'Stá la salvacion de Jos hombres i de las u cion de la ve1·dadera Relijion i, por consecuen­sociedades, si esa verdad no puede ser desente- "cia, del vet·dad~ro progreso, es verdaderamente rrada de entre Jos errores que enjencha la libertad " su obra; despues de él, nadie puede sino desa­del pensamiento, p01·que la inteHjencin humana es "rrollat· i fecundar."-Así, siempre en el pensa- , falible i débil, Dios, al revelarnos la verdad reli-. miento de la crítica modema, la figura de Cristo 1 jiosa no ha podido encomeudaa· su conservflcion a debe coloca1·se delante de la humanidad para en­la libre discusion, porque esto set·ia tunto como cantarla, elevarla i atraeda mas i llli\S a las pea·s­encomendm · a las tempestades la conservacion de pectivas de un pa·ogreso continuo. Cómo el Ct·isto un frájil barco; seria pedil· la unidad al elemento del pasado i del presente ha desarrollado i desa­mas disolvente, la conservacion al principio mas n'olla aun su obra progre iva , lo sabem os porque destructor, i la certeza a la misma causa creadora la histOl'ia i la actualidad no· Jo ens fla n. Pero · del escepticismo. cómo el Cristo nuevo, el Cristo del arte, el Cristo I..uego In Jglesia católica, como depositaria i hpmbre, en fin, sel'á el moto · de nuestl'Os pmgt·e­conservadora de la verdad, está en su derecho, sos en el porvenir, es lo veladores nuevos, nadie hasta aquí babia cono­cido verdaderamente a Jesucristo. Se le miraba t al tr:wes de los siglos con su figura histórica com­puesta de todos los elementos esparcidos en las relnciones evaujélicas, i a nadie se le había ocur:.. a·ido la idea de que nos fuese preciso, para estar en la verdad, representarnos con el pensamiento 1 un Cristo totalmente diferente del que 11os pinta el Evanjelio i las jeneraciones cristianas saludan en la claridad de una inmutable t1·adicion ; i sil1- embargo, al decil·, de la crítica, todos nos hemos engaimdo. Todos nosotros que, durante casi dos ' mil años, le hemos mirado i vuelto a mirar desde todas las estremidactes del .mnndo, sobre su pe­destal histórico, estábamos en un ea·ror; en Jugar de contemplar en la verdad de su vida i en su irradiacion sincera, _una fisonomía armónica, no contemplábamos sino una figura disparatada e inarmónica, una especie de Cristo falsificado que aguardaba para revivh· en su belleza nativa i su carácter ol'ijinal, el trabujo de la cdtica i eJ soplo Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 222 del espíl'itu modemo. P;I'O ~~l;nd-;, ~ ~ ,1~Ím, de- t que el Ev<~~~jelio ¡·efiere de ltLr es poi' su divinidad cerca, se encu~ntra que el ,tenio modm-uo tiende J que debe juzgarse del sentido de sus p:-~labrns i esactamente a lo contrario de lo que anuncia, i que 1 del alcance de sus acciones. Una vez rero.nocida 1 nos rehace un Cl'isto incoherente dispat·atado, es· 1 en ÉL la diviniclad,ba.fa la lnz de&de sn. altura i hace travngante, i en quien el meno1· defecto que se l brilla¡· la armonía en la reunion de sn.s pa .lilbras i descubl·e desde luego, es carece!' absolutamente 1 de sus acciones ; las discordancias élparentes, i las ele esa m·monía tan alabada i tan buscada por l:l desigualdnclt1S de supedicic,desaparecen en rl rnyc,> crítica misma. 1 diyino, i esos tunos que parecian mat sommtes,. l l. Eu efecto,_ todo ese g1·an t1·abnjo restaUl'adOl' de no son sino un concicl'to, una armonín mns. la figma de Cl'isto, se ¡·educe a hace1· cae1· de 1 Es po•· habe1· desconocido una verd1d tan sim- J ~ ~~frente la diadema divina, para no dejar ver en pie, que la crítica moderna, en sus 1wetendidos EL sino el semblante del hombre ; ¿pero que trabajos restau1·adores del verdaéle1·o Cristo, se ba consigne con esto nuestm crítica artística ? t•om- descaniado de una manera tan prodijiosa, i en per la armonía de la fisonomía del Cristo, porque ! lugar de mostmrnos como nos p:·ornetin, una fiso­suprimiendo e11 elln lo divino, se le quita p•·e~isa. \ nomía armonio~a, nos .hn ensei1ad~ u.na mala ca­mente el punto centra' desde donde la armonm se ricntUI'a. El Cr1sto sflltdo ele sus ohcmns, nnda es espnrce por todo el wnjunto; i desde entónces en ménos queílrmonioso ; es desigual,. discoi'Clnnte, 1 esa figuw de Cl'isto hombre, nada se Émcuentt·a 1 iuconseeuente, escéntriev, estrnvagante en fin, i ya de acorde ni de armónico : todo es discorclan- nos cliee con solo mostrDrse que no es el Cristo te, todo disuena, todo ~ deseoncierta. 1 del Evanjelio, el Cristo de la historia i de la con- I he a¡uí la razon racli~al de estos trnstornos. ciencia cristiana. l· Hai en el EvanJelio yo no sé cunutas pulabms i No recordaré aquí, seüores, todos los v"dos de t ncciones que, jnzgad.as desde el punto de vista ot·· confo1 macion mo¡·al,todos los defectos personales, 1 dinnrio de la humanidad, parece que rompen la todos los rasgos mas o ménos afrentosos, que la armonía del cal'áctet· ele Jesucl"isio, i oscurecen al ei'Ítica artística ha 1·eunido a nue tra vista, para ¡)J'onto el bl'illo de so gr~ndeza morfi) ¿ Po1· qué? compone•· de esta •·ennion monstruosa, lo que no .Porque suprimiendo de esta figura el rayo divino, temió nomb~·a¡· lc~Jflsonomír.t annoniosa del Cn'sto se estingue la luz que puede alumbrarlo todo, i !tambre. Ya en otras circunstanc-ias us presenté· mostral'lo en su lwlleza divina i humana a no reunidas esas cosas, i no me iC'nto con valot· pa1·a t iempo que es lo que constituye su belleza Ol'ijinal. volve1· a principia!' u~1 trabajo tan dolorosamente 1 Las palabras que Pfll'l'Cel disonru tes, las acciones ingrnto. Pero reunid vosot&'O'> con el pensa- ' que parecen det·ogatol'ias, constituyen pst•·o Cdsto homb1•e, si es ver- ¡Ah ! Todo lo que hai de gt·ande i de noble en el ~ dade•·amente gt·ande, porque Jo es no ha podido fondo de vuestt·os corn-zones, os gritará: Si esta .decir las palahrns i ejecutélr las acciones ele que es la belleza ¿qué sera la fealdad? Si esta es la 1 venimos hablando, i estais en esta atterdativa m·monía ¿que será el desórden? Xó, rste Cl'isto r 1 . 1 inevitable: o teneis que snprimiJ· arbitrariamen- dispamtado no puede ati'HC't' a la humanidad .iene· ! te las palabt·as i las acciones incompatibles ccn su rosa i progl't.'siva: no es el Cr!sto del progreso, es ~ g1·andeza, o te neis qne supl'imit· la gt andcz::t in- el de la deeadt•ncia. f 1 coneiliuble co;1 esas palabras i esas acciones. Otm conti·ad!rcion de la crítica moderna deJan- ~ 1 Pot· el conh·ario ; admitiendo que Cristo es te de la fisonomía de Jesucristo, es la de colocarlu < : Dios i como tal Soberanv Seúo•·, todo cambia, como el ideal de lu humanidad i clesfiguJ·al'la al l' todo se compone i se armoniza .• Sus acciones es- mismo tiempo. Destle que el positi •ismo nos ha · i] capan al criterio vulgar de que os servis \}ara me- invadido por todos lagoismo: nunca se habla tanto ideal t g1a, entra en ella p nt· el lado de; su supedoridad, como bajo el reinado del positivismo. Así es que ' porque como señor absoluto, EL es la lei ; como nunca como en nuest&·os tiempos se ha hecho bri- l· Di.os está fuera de vuestras reglas, o mas bien, EL llat· t>ste prisma encantador que desvanece a l.ns }, rn1smo es la regla, es la medida que se debe acep- almas i que se llama lo ich•al. La cdtica moderna· ¡ tar i la sabiduría que se debe consultar; en lugat· sob1·c todo, se ha hecho ue esta palal)l'a una espe- J de sel' juzgado i medido en el punto de vista de cíe de talisman sublime de que se sir've para mecer 1 su supel'i01:idad moral, por el critel'io de vuestra en la vaguedad de sus teodas a las almas delit·an­razon, es EL el criterio absoluto i la regla infali- tes. Siempre es la eontemplacion de lo ideal, el f ble de toda grandeza humana i l' tal p_ala~ra o _pot· t~l ~ccion _1 ella ~o ideal es la ciencia, lo ~de~l es el _arte , es la _ i Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 1 EL CATO L 1 C O. 223 ' 'ia·tnd, es la Relijion, rs el Cristianismo, es en fin 1 pm· qué la humanidad entera ha id~ a buséar-en 1 el Cristo mismo ; lo idc::tl brilla en Cristo i Cris- 1 el seno de la nadon mas desacredit{lda en el mun­to pea·soniflca el ideal. En lug;u· de un Cl'isto Dios, ll do de aquel tiempo, al hijo de un obrero; a un t ~ e nos dá un C1·ísto ideal, i todos los amantes campecino de la Galilea, a un pobre judío en fin, ·~ apasionados de lo ideul, se hacen t{lmbien, con psa de los cl'istianos, los pel'fectos ado.. itnitat·. Decid me, cómo i pot• qué lo hizo, con qué ., ·t'adoJ·es de Cristo. T• 1 esJa manía relijiosa i lite- título JEsus, mas bien que cualquiet·a otro, ha l ral'ia de nuest1·os homb1·es del siglo del positivis- venido n sel' el ideal del Jéuero humano, si no fué J mo; tal es, p¡.u•tirularmente, la pa•etension místi- desde el principio adot·ado pot· la humanidad t co-artL ta de la ct·ítiea francesa : confundit· a Cris- como Dios. Despojado de lo divino, el Jesus que 1 l to con lo ideal i lo ideal con Cristo. ¡ nos pt·esentnís sob1·e su pedestal histórico i con la f Confesamos no enlendet· bien lo que es este capa de filüsofo, alcanza apénas la grandeza de l Ct·isto tnn aereo tan etereo que se nos mue:.tra Sócrates ; aunque hubiea·a escedido en toda l.n ('U• siempre como un retlt>jo al traves de una nubE', beza a esa ga·ande estátua pagana, que bl'ilh1lm ' corno un rspect.t•o vano, como una sombra fnjitiva, en su mas hermosa época i ba.]o el mas belto sol · l~,. como un funta s ma que se pierde en los lejanos de la Greria, ¿ habl'in sido esto bastante para ha- ' horizontes del pensnmiento abst•·acto. Esta mane- cedo de repente el tipo universal de la humanidad tH'NI de coi ideraa· n t!uestt·o Cristo, es mns que absorta en la contemplacion ue su rara figura? irónica i ela con una lijern gaza la frente honi- 1 Levantaa·se un poco mas alto que el mismo Só- , blc el 1 blasfemo : es en el &cntido mas tigua·oso 1 ca·átes, es decia·, mostt·arse un poco ménos impet·- j uua mala chansoneta, po1·que es una chansoncta fecto que el vulgo de los hombres, ¿ esj pues un 1 ; s ncdlrga. Pero si la crítica entiende poa· su C1·isto ' motivo bastante para alcanzar la glol'ia ¡·csea·vada :.J . il misrno ~~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 224 ----EL- CATO L I C O . c;¡~ae {tül~Cíe1~~1a~~did~~i · co~~~;cte 1 --¡AI~T~~~o~;s~ cu~nd~~;ba- est;di;(¡q · u~~ P'oc~ '. la humanidad toclos los jél'lnenes rle su gnmdcza 1 la JJatmaleza humaua i las realidades de lu historin, tYWJ'lll i de sus obtas heróicas, ¿qué set·á en e! 1 1 ndmitii' CfUC reconocido Cl'isto solo como hombre, - pot·venil·? Pensad lo. ¿ Podni inspil·m· la santa los Santos bubiet·nn sido lo que fueron, los Após­p. asion de sufrit· todos los sacl'ificios sfel suplicio toles hnbienu hecho lo que hjcieron, los Mrirtires del Gólgota no se refiet·e sino a un hompre conde- huoiernn m'Ierto como murieron, i la humanidad , nado pot· la justicia humana i pot· la lt>galidad so- entel'~ vista por todas BUS faces,se hubiera cngrau-:­c: iat ~ ¿Qué significará para las jeneraciones libe1~- decido i elevado como se ha ele\'ado i eogrundeci­tadas de la ilusion do Jo dh·ino, este gt·an dia dCI do en el trascursq de uiez i ocho siglas, seria en 1 viérnes santo que suscita en el corazmi de los vm·dad, no solamente insensnto, sino profunda­pueblos tantas emociones saludables, i hace correr mente ridículo. ¿Dónde están lO's grandes santos de sus ojus tantas lágrimas fecundas, si este ga·an:.. p1·oducidos por los recuet·dos de Sócrntes? ¿ Dón­de anivcrsal'io no tiene otro objeto que llamat• a la de Jos grandes apóstoles inspi1·ados po1· Platon ? tumba de un hombt·c que murió huce 18 siglos? ¿Dónde los mí.lrtires que aceptan con In muerte lü Ah! Señores, yo desearía saber lo que estos infamia como el mas grande honc•· po1· drfender 1 modemos reYeladores, que quieren hacer salir de la moral de Zenon o la metafísica d Al'istóteles? 1 · la supresion .de lo d1vino en el CL'isto, el progreso Es vt:rdad que el jénio tlc estos grandrs hombres,ha de la humanidad, esperimentanm en su alma la podido conquistat· nuestra admiracion a traves de noche de navidad, en la solemnidad de las Pascun.s la distancia, i emriarnos, aun en el Sl'no de la i el dia de viémes santo 1 Yo quetTia sabet· de claridad cristiana, algunas luces que no podemos ellos mismos qué emociones relijiosas conmueven ménos de apreciat·; pero sus ejemplos no han , en esos dins su coruzon filosófico i qué resolucio- conmovtdo ni elevado a nadie a las altas rejiones nes heróicas inspiran a su sabiduda esos lejanos de lo ideal i del heroísmo: la humanidad bajo la recuerdos de su Cristo humano l Ah ! Es 11ecesa- in piracion de su reruet·do, uo se ha elevado una rio decido, señot·es, esos dias paa·a e-llos, difiet·en línea. Ellos fueron Séthios, fueron holltbres·ilustres, 1 apénas ue los otros clias. En esos ellos no vienen pero nada mas que hombres. 1 a mezolm·se en nuestt·as solemnidades, i ll honraa· Desde luego yo me pregunto con una sorpresa J. a lo ménos como sábio al que nosot•·os adoramos dolorosa ¿qué es Jo que se pretende hacer por como Dios. Esos grandes aniversarios de la m u ea·- nuest•·o pa·ogl'í'SO, disputando p Cristo esa Divinj­te de Cristo, los encuentran tan indiferentes como uad cuya creencia ha hecho todas nuestras grande­lo est.arian en el anivet·sal'io de la muerte de Só- zas humané\$? ¡,Qué impulso . sublime se rspera <;rates. l esos días, pm·a nosott•os tan llenos de impl'imir a nuestt·a marc~1a pt·ogresiva,sustituyen­relijiosas aJegl'ias i de tristezas sagradas, los dejan do a nuestro Cl'isto Dios, un Cristo filósofo? ¿ Si : fl'ios i secos en el fondo de sus gabinetes, aun mé- está probado que ]a fé en Cl'isto Dios ha hecho nos conmovidos ante los recuerl culto de tal la decadencia pagana. (;Qué digo'! Nuestt·a caída CJ'isto, pam fecundat· las costumbres populares, seria tanto mas pmfnnda, cuanto mas alto nos ha ~ elevar a las masas i engrandccct· a la humanidad? colocado Cristo Dios. I yo afirmo que ese Cristia· Nada, absolutamente nada. La fuerza de las cosas nismo decapitado, bastardo, nos hal'ia descendet· i la natut·aleza del hombre, condenan de antemano a clepruvnciones que sorprenderían aun al paganis: 1 tal Cristo, a una esterilidad fatal. mo. ¡ Ah 1 Si este Cl'isto sin divinidad hubiera Efectivamente, ruando la naturaleza de las co- · de venit a ser un dia en nuestra viej Frnncia i en sas no lWS lo dijera bastante alt&, la histot·ia esta- nuestra \•ieja Europa, el pot·ta--estandarte del , ria nlli pam hac~do oú· bien récio. Si hai alguna progreso del porvenit·, yo esclamal'ia sin YariJnr ' cosa de publica certidumbre en los siglos cri tia- ¡ desgraciada Fruncía, i clcsga·aciada Em·opa ! Re­nos, es
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 76

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 53

El Católico - N. 53

Por: | Fecha: 07/06/1864

l 1P¿]l'h3JJ®DDlJ@® m>~~r:fll¿r~ &LID® & ITa& íiD~IrXªU:~t33& LIDJ21 ITa& 1R:L~r-c.Jil1Jil®JW" lf 1!!l' TRIM. I. AÑO II. Bogota., 7 de junio de 1864, NUF!IERO 53. 1 f A LOS SEÑORES AJEN1,ES t les suplicamos encarecidamente, se sirvan en­viarnos a vuelta de correo, todas 1 as co1cccio- !r nes de este perió_dico que no hayan podj~lo co­' locar.- Bn!!otá, 6 de .11mio. f Se dispuso que si el citado Presbítero no admitía la 11otificacion o se ocultaba para ha­cer ilusorios sus efectos, se fijase una copia de la providencia en b puerta de la cnsa de habitaci<>n del citado Presbítero, i se pusiera igual copia en la puerta de la iglesia (~ . San Üf11·los de donde es vecino, para que de ésta ma- 1 VIcARIA JENERAL. Bogotá, mayo 4 de 18f14. HaLiendo nombrado el Vicario jeneral para Cura escusador de la iglesia de Pasca,al Pres­bítero señor José Eusebio Zalamea, segun consta del oficio de la Secretaría, de 29 de mayo últir10, número 29n; rehusó el citado Presbítero recibir el oficio por lo que, habien-do encontrado en la calle al señor Zalamea, le manife~tó el Vicario, que el citado oficio tenia por objeto el nombramiento indicado; ~ena de suspension, sinó se prestaba a desempeñar el cargo de escusador. El oficio de nomora­miento de Unrá _llegó al fin a conocimiento del Presbítero Zalamea, puesto que lo publicó en el impreso titu1ado "Al Público;" impreso que 1 r~mitió a 4. Secretaría: i distribuyó él mismo a varias personas de 1:1 capital. Sin oko motivo qn~ el de haber proporcio­nado la autoridad Ecle, iá~tiea al Presbítero Zalamea ei modo de ejercer el ministerio sa­cerdotal en benE:>ficio de los vecinos de Pasea, i en provecho de él mismo, puesto que fué or­denado a .l.ítulo de obediencia, i con el fin de llenar· los deberes de Sacerdote católico en cualquier lugar a donde le ordenase el Superior, contestó por escrito, i luego d1ó a la prensa la inurbana, desobediente e jnjuriosa nota de 8 de abril, en la. cual no solo desconoce i desobe· doce a la autoridad del VIcario jeneral,sino que le acusa de cismático, ofreciendo contestar por la prensa como en efecto lo verificó ultrajando con arrojo cismático i con lenguaje burlrsco la alta dignidad del Illmo. Prelado .Metropo­litano, i desprecianclo no solamente al. V1cario jeneral, sino al señor Secretario de la Curia metropolt ta na. L1. autoridad eclesiástica que no debe per­mitir a ningun Sacerdote tantos atentados i una desobediencia tan escandalosa i reprensi­ble, ha formado el proceso canónico i de su actuac ·on resulta que: recibido en la Secretá­l'Ía el citado impreso, -se exijió juramento ' a 1 conductor i declaró : " que el Presbítero Z·:damea se valió de él, para que lo llevara i entregara en la Secretaría de la Curia'' : se dicto entónces la providencia de 14 de abril próximo pasado, amonestando por prim-era vez 1 al Presbítero rebelde, para que se retractara nera llegara a su conocimiento lo dispuesto jJOr ~~ ~: la autondad. So repitieron In segunda i tercera amone s~ a­cion en 19 i 23 de aLril; i bien léjos de volv::r l sobre sus pasos el estra vi a do Presbítero di- l rijió otra nota en 22 del m:smo mes insi&tie;ll-do en desobedecer i desconocer 1a autoridad ~ del Prelado 1\Ietrvpolitano i sa Vicario, bajo el protesto de que su inmerli3to Superior es su Santidad el Sumo Pontífice, negando i desco­nociendo la jerarqufa de jurisdiCcion de que trata el cánon 7. 0 cap. 4 . 0 secion 23 del Concilio de Trento, i los capítulos l. 0 i 7. o ~ ·. Dist. 89. part. l. ce tlecret: oído el selior Pro-motor Fiscal i citado el Presbítero Zalamea por medio de boleta, por no ser halladó en su casa deQhabita1 ciVOl~, s~ considcra 1 :. 1., 1. 0 u e e 1ca.no j enera twne el deber l de proveer de Párrocos lo.:> 1 enefieios i pel'fec. 1 to derecho para nombrar · a los Sacerdotes ~ sujetos. a su jurisdiccion : 1 2. 0 Que los eclesiásticos que se ordenan a título de obediencia tienen un deber mayor de obe1lecer a los VIcarios, i Obispos lJ;:¡jo las 'J penas señaladas en los decretos. Grrg libro l. 0 título 33 capítulo 2. 0 que comprende a los clérigos i legos diciendo: Siquis venerit '' _c?ntra .dec_retum Episco~i, ab eclesia abji- 1 '' Ciatur, m hbro regum leg1tur. Quí non obe- i '' dierit principi, morte moriatur. Et in conei- 1 '' lio Agaten, quod anattematizetur. '' 3. 0 Que el Presbítero J. Eusebio Z a lame a 1 ha confesado su falta de obediencia, no sola- ·~ monte en )as notas remitidas a la Vrcaría if jeneral, negándose a prestar los servicios de .!l su ministerio en el curato que se le desío-nó sino publicando . una de esas notas junto0co~ el oficio urbano que le pasó el Secretario. 4. 0 Que en ese imp-reso, verdadero libelo ¡'j infamatorio, acusa al Vicario j-eneral con el horrible cargo de Prelado cismático, calum­niándolo falsamente sin respetar las penas 1 que el derecho impone a los falsos ca1umnian­tes, autores de libelos infamatorios i desobe­dientes a los lejítimos Prelados. Deeret. 2 o part. cap. fi. 0 cuest. 1. " i 6. ~ lib. 3. e tit. l 2. 0 cap. 2. 0 decret. Greg, a cuyas disposicio­nes se refiere Ferrasis tomo 6. 0 art. 2. o DE j , PENIS DELlCTORUM. .. 1 ?·:=>que presc~ndi_endo de las pe-n1s contra ' de las calumnias e injurias que contiene su libelo infamatorio contra los Prelados de la Ar quidiócesis, pidiera perdon i prometiera obe­decer la órden que lo encargó del beneficio de Pasea. la Inh~uria, ca!udmn1a 1 1 li.be1o infamatorio, a que ¡, se 1zo acree or e Citado Presbítero, i que son la escomunion, la privacion de oficio i be- ~~-~ neficio, i el enoierro o prision, la sola desobe- _ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 34 EL CATOLICO. diencia. al Prelado que le hizo la honra, de ¡ de verificarlo, por ser uno de los tres sacerdo­nombrarlo Párroco de una iglesia, i el deseo- tes a quienes el lllmo. señor Arzobispo, por. nacimiento de la jerarquía eclesiástica respeto resolucion de 4 del próximo pasado, ha dccla­de la jurisdicion de su Obispo, i del Vicario rado suspensos de tal ejercicio, cuya resolucion jeneral, llevan consigo la pena de escomunion se comunicó particularmente a cada uno 1 conforme al Concilio de Trento i demas d1s- de ellos. posiciones ántes citadas-. Por todo lo espuesto De V. V. RR. muí atento i respetuoso i de conformidad con el concepto de nuestro ser\·idor. ~iiGUEL ARIAS. Promotor Fiscal, por autoridad de nuestra santa Iglesia católica, apostólica, romana, declaramos : ] • 0 El Presbítero señor: José Eusebio Zalr.,mea ha incurrido en escomunion mayor : 2. 0 Debe estar suspenso del ejercicio de las funciones del sacerdocio por el término de tres años : 3. 0 Debe tener en cada año tres meses de ejercicios espiritual es: 4. 0 N o puede ser absuelto de las censuras, sin que se ~aya retracta.do públic~~e?te,, da- 1 do satisfaccwn a la autoridad eclesiastwa 1 pe­dido perdon por el escándalo que hl-l. causado. N otifíq~ese, i si reh~sar e e.l s~ñor ~alame~ la notifica01on, el N ota.no le fiJara cop1a de esta resolucion en la puerta de la casa de habitacion. 1 Pásese copia autorizada al. señor Cura de la Catedral, para que la pnbhque a la hora de la misa parroquial en dos dias festivos. BONIFACIO A. ToscANo. -PEDRO ZAPATA, Notario. C IR O U LA R. ARQ.UIDIOCESIS DE SAN'.rAFE DE BOGOTA.-­SECRET ARIA DEL GoBIERNo ECLESIASTI­co.- 3 DE JUNIO DE 1864.-Número 81. Señor Cura de ...... . Como varios funcionarios han avansado en la vía de la usurpacion mas allá de lo que la lei civi 1 les pe emite, citándose entre otros ejemplos, el de el Alcalde dy Guavatá, Gabriel Ruiz, quien diciéndose fJ.cultado por el ayun­tamiento para apoderarse de la casa cura!, ha notificado últimamente al señor Párroco para que la desocupe dentro del segundo dia ; creo deber llamar la 1 atencion del señor Cura a lo dispuesto en el ineiso l. 0 articulo 2. 0 de la lei de 2 9 de mayo próximo pasado publica­da en el número 3() de el "Diario Oficial" en ' 1 que se esceptuan de la desamo~tizacion las ca­sas de los Párrocos, cementerios etc, a fin de que, sin que se entienda que se acepta tallei, se hagan valer los derechos que ella deja sin vulnerar, para que sean respetados por los referidos funcionarios. Del señor Cura atento servidor. MIGU_EL ARIAS. ARQUIDIOCEsrs DE SANTAFE DE BoGOTA.­SEcRETARIA DEL GoBIERNo EcLESIASTI­co.- 3 DE JUNIO DE 1864.-N Úmero 422. M. RR. M. M. superioras de las comunida-des de relijiosas de ésta ciudad. Teniéndose noticia de que el señor doctor Vicente Rerrer Bernal, ejerce el ministerio en las ca8as de asilo de las relijiosas; se hace necesario hacer notar, que en adelante no pue- _ Continuan suspensos absolutamente del mi­nisterio los señores Presbíteros Antonio Del­gadillo, Ca.yetano García residente en Fontibon, Felix J iron, Miguel A tuesta, Bias A. N ~ira, Sántos Sanz, Fr. Narciso Velazco, Fr. Cala· sancio Núñez, Fr. Pedro T0rres, i todos los domas que habiendo incurriao en las ceno;;uras por su som~timiento, no f'e han retractado ni llenado las otras condiciones exijidas por la sagrada. penitenciaría en su decreto ~echado en Roma a l. 0 de Julio do 1863, a los cuales se les amonesta de órden del Ilustrísimo scfíor Arzobispo para que se arrepientnn e impetren la absolucion llenando las condiciones espre­sadas, bien entendido que si a l:t 3. ~ moni­cion no lo verifican se les declarará fuera de la comunion católica. Al señor doctor Cayeta­no García se le ha notificado por nota especial que si continú ·L funcionando, quedará incur­so en la escomunion. Los señores doctor Manuel E . Diaz i Pres­bítero Samuel Aguas se han encargado respec­tivamente de la administracion de la parroquia del Rosario de Honda i de la Vice-parroquia del Cármen de la ·misma ciudad. ARIAS, Secretario. REOACTOR, VENANC!O ORTIZ. ----- ---- - ---- Uno de los mas acreditados papeles eur0peos (el Jurna.l du Loire) hace el elojio de la última ob1·a escrita po1· el iucausable i talentoso M. Ct·e- 1 tineau JoJy, titulada "LA IGLESIA ROMANA EN PRE­SENCT. A. DE LA UE\'OLUCION; " i al hacer ese eJoj io, 11 estmcta varios de los docum~ntos de que el anto1· 1 ; ha hecho uso. Como esos documentos revelan el objeto que tienen las Sociedades secretas quet 1 entre nosot¡·os se van haciendo comunes, hemos creido que no haremos mal en ponerlos a la vista de nuest1·os Jectot·es pat·a que comprendan que, si es cierto que la Eu1·opa tiene la temere.l'ia idea de cm1t¡uistm· estos países, los bárbaros que apel!i­dando libertad i progreso, matan el progreso i la 1 libertad,son Jos responsables de esas tentativas. El 1 mundo no puede vet· con indiferencia que se tl'ate con tanto ahinco de destl'Uil' las bases de la socie­dad humana,. i es uatmal que los que trabajan en ésta obra como ajentes del infiemo, tengan pot· enemigo al mundo culto. Aquí, en éste pob1·e país, es la lójia la que go­biema, i es por -eso que ta,n poro se atiende al gl'~­to de la opinion aun en las cuestiones mas debati­das. Poco importa a Jos que anhelan la destruc­cion del CatolicismG, que el pueblo sea católico: JG que les importa es aprovechar el tiempo que. DiGs quiera conset·varlos en el podm·: para destruu· lo que se han propuesto destruil·. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. EL e ATO L I e O. 35 ¡ ~ ~ I.os documentos que vamos a copia1·, empiezan l por las instrucciones dadas a IC)s Sociedades subal­temas pOI' EL GRA~DB ORIENTE de Francia, i al , leerlos, creemos que no habrá nadie que tache de injusto al señol' Joly cuando esclama: " ¡Nunca guerm mas ~ encamizada contra la Iglesia católica, n~ofitos de nuestt;os principios, pt·opagadores de nuest¡·as ideas. Este seria un sueño ridículo. I.o que debemos pedir, lo c(ue debemos buscar i aguar­dar, como los judíos esperan i nguardan el Mesfas, fué dil'ijida de una manem mas pérfida 1" lié aquí los documentos : "Tened el ojo siempre alerta sobre lo que pasa en Roma" " Despopulal'izad la clerigalla porto­, da esp" ie ele medios; haced en el centro de la Cutoliziuad lo que todos individualmente, o en 1 cuerpo, hacemos en las alas ¡ ajitad ! anojad calumnias en las calles, con motivo o sin él, poco importa ; pero njitacl: :En ésta magnífica pala­bra están encerrados todos los elementos del su­ceso. La conspiracion mejot· urdida es aquella que co 1mueve. mas i compromete mas jente ..• Haced de víctimas, nosotros siempre hallaremos personas que sabrán dar a ésto los colores ne­ce~ arios." Desd e el 4 de enet·o de 1818 .el Cardenal Con• 1 zlll i daba parte al Príncipe de Mettemich de las inqtuetudes que le causaban las sociedades sect·etas i pl'incipalmente el Carbonal'ismo, que en esa época, era poco conocido aun en la misma Roma. El Príncipe austriaco que sabia mucho ménos aun, estaba dispuesto a calificar éstos temores de exa­jerados. l)cro tres af10s despues de que la Silla ronwna babia señalado el escollo, el Carbonarismo \ este ndiu ya sus ramificaciones de Palermo a Ber­lin i reunia como en un haz millares de ad.eptos - , dispersos en toda la Italia, para destruir, seg un lo 1 espera, la Iglesia romana-el Pupado. Es allí sobre todo qnc mira el Carbonal'ismo con una pel'fectn intelijencia de las cosas. Comprende que 1?1 Pon.tifiratlo es una potencia que influye mu­cho sobre la suerte de la Italia, i no quiet·e ya Jos nse sinatos pm·ci<~les de los esbit'l'OS i t1·aido?· es. Const 3ntemeñte redacta circulares de que el sellot· Joly hu cojido algunas, i el articulista esti·acta la sigu iente : ' "Hoi no se tl·ata de reconstruir para nosotl'OS éste pode1· (el Pontifirndo) cuyo prestijio está mom ntúneamente, debilitado. Nuest1·o objeto flnnl es el de Voltaire i de la revolueion fmnce­sn, la destruccion para siempre del Cntolicismo i 1 de la idC'a cl'istinna. Pero para log,·at· de una manera mas segura éste objeto i no prep:Jrm·nos con el corazon aleg1·c, sueños que se aplazan indefinidamente i compt·ometen en los siglos el suceso de una buena causa, es pr<:>ciso no dat· ofdos a esos jactanciosos franceses, a esos nebu­losos alernanes, a esos tl'istes ingleses, que se imnjinan matar el Catolicismo, ya con una can­cion impura, ya con una educacion anti-lójica, ya con un grosero sarci.\smo, pasado de contra­bando, como los algodones en la Gran BretañJ. El Catolicismo tiene la vida mucho mas dura que todo eso. Impot·ta, pues, busca1· un reme­dio a é5ta sitmlcion ; el rrmedio está enconti·a­c. lo. EI.'Papa, éualquiera que s<:>a, jamas v~udrá a las sociedades secretas .; toca a las sociedades serretas dat· el primet· paso ácia la Iglesia con el objeto de vencer a los dos. El t1·abajo que 1 vamos a emprende1· no es la obra de un dia, ni de un mes, ni de un arw, puede durm· muchos aiios, un siglo tal vez; pe•·o en nut>stras filas, ! el soldado muet·e, i el combate contil1ua. " 1 "No pretendemos ganar a los Papas, hacedos es un Papa segun nn('stras necesidad<:>s. Alejandro VI con todos sus crímenes privados, no nos con­vendría, porque él jamas CITÓ ni se equivocó en matel'i::ls relijiosns. Un Clemente XIV, al contrá· rio, seria nuestra hechura de los pi és a la cabeza .• Ganganelli es, sin duda, para nosott·os el mas grande de l,os Papas, por lo misrno, que fué d~bil i tímido. Este se acercó un poco á las condiciones con que nosotros harinmos uno, si ésto fuera algu­na Yez posible. Con és to rna1-chat·iamos segut·o s , al asalto de la lglesia, mucho mejor que con los panfletos du nu(>stros hermnnos de Francia i ·mm de Inglaterra. ¿ Deseúis sabe1· la t'non ? Es que <:>sto solo ,basta ria para hacn· pedazos '' la Toca sobre que Dios edific ó s·u Iglesia, , , i no tendriu- 1 mos ya necesidad dl'l -vinagt·e annibaliem ni de la pólvot·a, ni aun de nncst1'o~ brazos. Teniendo el pequeño dedo del sucesot· de Snn Pedro compro­metido en el complot, éste peqn~ño dedo valdria por todas las cruzadas de Urbano II, de San Bet·­nardo i de toda la cristiandad." " Poca cosa hai que haret· con los Cardenn }(>S i con los Prelados cuyo cart\ctel·· e~ bien decidido; ; es preciso deiar a los incqrrejibles ele la escueln. de Conzalvi i agottw en nuesti'Os depósitos de 1 popularidad o impopularidad las armas que harün inutil o ridículo el poder entre sus manos. Una palabra puede a veces matar a un hombre. Si un Prelado ll (' ga de Roma, pnra ejerce¡· ·algu­na funcion pública en el centro de las pt·ovincins~ es preciso conocet· al punto su carácter, sus an- \ tececlcntes, sus cualidades, sus defectos sobre todo. ¿Es de antemnno un enemigo declarado? l un Albani, un P:1llotta, un Bernnet.ti, un Delia 1 Ganga, un Rivarola? . . . Envolvedle en todos ; los lazos que podais t e nder bajo sus piés; cread le una reputacion que asuste a los niilos i a las Yiejas ; pintadle cruel i sanguinario; refericl algunos actos de crueldad que puedan fácilmen­te gravarse en la memoria del pueblo i cuando 1 los diariCis estranjeros recojan pot• nuestm cuen­ta éstas relaciones, que sin duela alguna embe- 1 lecerán a su tumo po1· amo1· i respeto a la vct·­dad, rnostrad o mas bien haced mostrar po1· ulgun imbécil respetable éstos pnp<.>les donde estcln relatados los no m brrs i los escesos de los , altos personajes. Lo mismo que la Francia i la Inglaterra, la Italia no carecerá jamas de aque­llas plumas que saben ensuciarse con mentims útiles a la buena causa. " '' Aplastad al enemigo cualquiera que sea ; abrumadlo a fu e1·za de maledicencia i de calum­nias; pero sobre todo abrumad lo en su jé1·men. Es a la juventud que es preciso ganr11· ; es a ella a quien es preciso cleciclit· en nuestro favor; n ella a ,, quien d<:>bemos anastrar, ~in que se aperciba de , . ésto, bajo las banderas de las sociedades secretas. 1 Pam avanzat· mas seguros en ésta vía peligrosa, pero a pasos contados, el os cosas son de toda nece-sidad. De beis tener el aire senci·llo como palomas; pero se1· prudentes como la set·piente: vuestt·os padres, vuestros hijos i hasta vuestras mujeres, deben siempre ignorar el secreto que llevais en vuestro corazon ; i si os place, para mejo¡· enga­ñat · el ojo inquisitol'ial, podeis ir con ft•ecuencia a confesaros, pues estais en todo derecho autoriza-r~ l ._._.__.._._.__.._.__..__..__. __ _.~------------~~--------------------------~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 36 EL CATO' LICO. dos pat·a guardat· el mas pt·ofundo silencio sobt·e éstas cos·as ..•• Dejad a un lado la vejez i la edad madum, id a la juventud i si es posible has­ta la infanci&. Jamas tengais para con ella, una palabra impía o impm·a: maccima debatur¡JUera reverentia . Nunca~lvideis éstas palabras del poe­ta pot·que ellas os set·vil·án de salvaguardia contra fas licencias de que importa abstenerse, esencial­mente en el intet·es de nuest1·a causa. Para hacer fructificar nuestra doctrin a en el t·ecinto de cada familia, debeis pres entaros con todas las aparien­cias de hombt·es gt·aves i morales. Una vez esta­blecida vuestra reputacion en los colejios, en las universidades, en los guimnacios i sobre todo en los seminarios ; unn vez que hayais captado la 1 confianza de los profesores i de los alumnos, ha­ced que aquellos que se dicidan principalm~nte a la milicia clel'ical, amen buseat· los entreteni­mientos i vuestras ·convers{lciones. Oft·eced al p1·incipio, pet·o siempre en reservn) libros inofensi­vos, poesías resplandecientes de énfas is nacional; despnes poéo a poco llevareis vurstt·os discípulos al gt'<.Hlo de sazon requerido. Cuando sobre todos los puntos a la vez del estado eclesiástico éste tra­bajo de todos los días huya espa1:eit]o 'nuestras ideas como la luz, eutónces podeis apreciat· la sn­biduría del consejo de qne tomamos la iniciativa" Los maestros de ésta enseñanza infemal indican ademas a sus afiliados, medios ele procut·arse a po­ca costa una reputacion de buenos católicos i de patl'iotas puros i les prometen los mns espléndidos sucesos. "Tended vuestrns redes como Simon Barjone, les dicen, tencledlas en el interior de las ·sacristías, de los seminarios, de los conventos,mu- 1 cho mejot· que en el fondo de los mares, i si 1W os 1 precipitais, os prometemos una pesca mi.lagrosa. 1 Hab1·eis pescnclo una revolucion de ti<\ra i capa de coro'marchando con la cruz i el estandarte, una f revoÍucion que no tendní necesidad de set· aguijo­~ ~ neada para p~net· fuego a los cuatro angulos clf:•l mundo .... En fin, ellos terminan por estas exhortaciones : '' La vision de las soeiedades secretas se reali­zará indudablemente, po1· la mas simple de las razones. Es que ella está basada sobre las pasiones 1 del hombre. No nos desanimemos, pues, ni por un fracaso, ni po 1· un revez, ni pot· una derrota; ·1 pt·eparemos nuestras at·mas en el silencio de las i l ventas; (a) dil'ijarnos todas nuestras baterías; lisonjeemos todas las pasiones, las mas malas como las mas jenerosas, i este plan tendt·á un éxito 1 tan gt·ande que sobrepasat·á a todos nuestl'os cál­culos." Hé aquí el programa, confiado como un secreto de Estado, a los mas empt·endedo1·es en las socie- . dades sect·etas que minan toda la Italia. Todas las esperanzas que él contiene no se han realizado aun, mas klnto arte en la mentim, en la calumnia, no poc1ia quedarse sin fruto. Tal método empleado con pertinacia en los Estado~ Pontificios sobre sus t\·es millones de habitantes, lo mismo que en las i ott·as prqvincias de la Italia, no · podía dejat· de P.roclucil'1os efectos que estamos viendo. Los pro­fundos ~arbonm· ios habían calculado bien i habían predicho con precision. Para cumplimiento mas seguro de éste vasto proyecto i con la mira de dat· una podet·osa direc­cion al complot, se fo1·mó una Venta suprema, especie de academia del infierno, compuesta de 1 (a) Conveutículos de Jos Carbonarías. k=- 40 miembros, que ocultan sus nombt·es i sus títn­los de familia bajo seudónimos. Son estos los que gobieman la Eut·opa subtert·ánea i mandan la milicia de la mentira. Sus ó1·denes son mistel'io­samente tt·asmitidas de gmdo en grado hasta la Venta mas recóndit~, i gmcias a su accion latente i ~ontinua, el mundo se apet·cibirá un dia de que , el suelo está minado bajo sus piés. En 182 5, dos oscuros asociados convencidos de asesinato i de complot, subieron al cadalso en Roma, i uno de e11os gritó: ¡Pueblo, yo muero • inocente: fracmason, cm·bonat·io e impenitente ~ ·La pt'ensa revolucion:Hia gritó : « ¡ El mártit· ! >) negando e\ asesinato i el complot. Sinembargo, he aquí Jo que escribía el Jefe de la Alta venta a su cómplice Vindice: >) "He asistiuo con la ciudad entera n ]a ejecucion de Ta1·ghini i rfontm~a1·í ; pet·o quie.·o mucho me­JOr su muerte que su vida. A fm de dm que hacet• a Ja policfa· de Bernnetti, yo hago pon~r muchas 1 flores sobt·e la fosa donde el ve1·dugo ha ocultado ~ sus restos. Hemos adoptado en consecuencia nnes­tt ·as disposiciones ; tememos vet· a m:estros do­mésticos comprometidos ha~iendo esta obt·a, pe1·o se encuentran aquí ingleses i jóvenes antipapistas i es a ellos a quienes encMgamos ésta piadosa fun· cion. La idea me ha pat·eciclo mui feliz, lo mismo que los jóvenes rubios. Estas flo1·es arrojadas du· rante la nocb e a dos cadáHres pl'oscrítos, lwrán jerminm· el entusiasmo en a Europa revolu"iona­l'ia. Los muertos tendrán su panteon ; clespues iré dtll'ante el dia a llevar a l\Ionsei'lOL' Piatti mi cumplimiento de pésame. A éste pobre hornb1·e le van a hacer mucha falta éstas dos almas do Car­bonados. Él puso en obm pam confesados toda Ja tenacidad ele un Reverendo Padre i sinembargo fué det'I'Otado. Yo debo hnce1· creet· po1· respeto a ! mi posicion, a mi nombt·e i sobre todo n nuestro po¡·venh·, que deploro con todos los corazones católicos éste escftnc1alo inaudito en Roma;- i lo deploraré tan elocueutementt', que espero enter­necer al mismo señor Piatti. A propósito de las flores, hemos hecho pedit', po1· uno de ntlc tt·os mas i nocentrs afiliados ele la fracmnsoncría, al poeta frances Casimiro Delavignc Ul)a composi­cion sobre Tnrghini i Montanari. Este poeta a quien veo con frencuencia, es querido en el mun· do de ]as artes i en los snlones, es un buen hom­bre, él ha prometido tl'ibutar un homenaje a los mártires i fulminat· un anatema contra sus verdu­gos. Los vet·dugos serán siempre el Papa i sus clériaos. Esto sed una victoria. Los COJ'l'espou­sa les0 ingleses harán maravillas i yo conozco aquí a mas de uno que ya sopla en la tt·on1peta épica 1 su hono1· ele la cosn." "Es por lo tanto una rna\ísima obra hace1· así héroes i martit·es," continúa el .Jefe Carbonado i pinta en seguida, la im¡wesion producida sobre la multitud i sobre él mismo pOI' la muerte de Jos condenados impenitentes . Jtsta impresion, dice él , ha. conducido a reUeccioncs filosóficas, medicina­les i poco ct'istianas, que sed preciso utilizar un 1 día. Ved estas reOecciooes dignas del mismo Sa­tanas. " El gmn dia de nuestro triunfo, para etemizar nuestra dominacion, hai absoluta nece­sidad de vertet· algunas gotas ele sang1·e, es preci­so no concedet· a las víctimas designadas el dei'C­cho de morit· con dignidad i firmeza; semejantes , muertes no son buenas sino para m:mtenet· el espíl'itu de oposicion i dar nl pueblo mát·tires Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • 1 1 E I~ e A T Ó L 1 e O • 37 de quien siempre gusta vet· la sangt·e fri3. Est~ es un mal eJemplo de que nos aproveclmmos hoi, pero creo útil liacet· mis reservas para casos ulte­riores. Si Targhini i Montnnari por ·uno u otro medio (la química tiene tan marav'illosas recetas) suben al cadalso abatidos, tembloi"osos, jadean­tes -·¡ sin valor, e1 pueblo no h.abria tenido ni auu piedad de ellos."-" No he nacido cruel, ni yo tendr~ jamas la áspem glotonel'ia sanguinaria, 1 pem el que quiere el fin quiere tos medios. Luego yo digo, que en un caso dado no debem·os, no po­demos, pot· interes de la humanidad, dejados en­~ ~ riquecet· de má1·tires. Una droga bien prepaí-ada i mucho mejrq· administrad.a i que debilite u l pa­ciente h.asta la post1·acion, seria segun c1·eo~ de 1 mui saludable efecto."-Despues de relatar los tt·iunfos de los mártil·es cristianos en el circo, el .Tefe de la Alta venta continúa : "Si estos pobres Césares, hubiet·an tenido el honot' de hacet• pa1'te de la alta venta, yo les hubiet·a aconsejado sim­plemente, hacer tomar a los mas atrevidos de los neófitos una pocion segun ordenanza, i no se hu­bieran ya contado nuevas conversiones, porque no se habrian encontt·ado nuevos mártires. La 1 rcvolucion francesa que tuvo tanto de bueno, se · engañó sobt·e éste punto. Luis XVI, María An- 1 toñeta, i la mayot· parte de lns víctimas de Ja época, son sublimes heroísmos de resignacion i grandeza de alma. Se recordará siempre ( i mi vieja abuela, mas de una vez me ha hecho llorar refiriéndomelo ) que aquellos señores desfilaban delante de la Princesa Isabel al pié oe la guillotina i hacían la profunda •·everencia como en el cít·­culo de la Corte de Versalles. Esto es lo que nO·· sotros debemos evitar. En una circunstancia dada arreglérnonotipa•·a que uu Papa i dos o t1·es Cm·­<. lennles, mueran como unos viejos, co·n todos las t•·aso:ts de la agonía i los horrores de la mue1·te. Pma!izad nsí los arrebatos de la imitacion. Per­ffonad el c"ue1·po, pero matad el espíritu. Ésta es la mora l que importa seguit·." La Alta venta, cuyo .Tefe hablaba así, dejaba a las ·ventas secundarias i a las otms sociedades r secretas el cuidado de bati1· en brecha los tronos. En cuanto a ella, es contm la Iglesia i el Papado que dirije sus golpes. Se interesa vivamente en el acrecentamiento de Jas otras sociedades i se em­peña en la cl'eacion i fundacion de lójias masó· nicas, nunqu~ considero'\ a éstas de un modo poco lisonjero. Ved como se espt·esa con respecto a ellas un judío conocido bajo el seudónimo de Pie­colo Tig;·c en una circular dirijida a los ajentes de las ventas piamontesas con fecha 18 de enero det822. H Ésta vanidad del ciudadano i del caballero vulgu1· de inscribi,·se en la fL·acmasonel'Ía, tiene mucho de vunnl 1 de inútil, i me tiene siempre estupefacto de admiracion delante de la estúpida humanidad. M~ asombro de ver al mundo entero golpear a · la puerta de todos los Venerables i su­plica, · a éstos seüores el honor de ser uno de los l clejidos para trab;ljar como obt;eros en la recons­truccion del templo de Salomon. Las Jójias pue­den hoi d!a crear sus grandes glotónes,pero no en­jenclmránjamas un verdadero ciudadano. Se come ¡. demasiado en casa de T. C. i de T. R. F. i de todos los orientes; pero es un lugar.de depósito, una es- '¡ pecie de cl'iadet·o ; un centro por el que es preciso pasar ántes de llegar hasta nosott·os. I~as lójias no J¡ hacen mas que un mal relativo. Un mal atempem-do po1· uoa falsa filantropía i pm: candon·es mucho rl)as falsas aun, comoenFmnci-a. Esto esmui pas­tot ·al, mui gasti'Onómico; mas, todo €sto tiene un objeto, que es pi·eciso reanimar sin cesar. Enseñan­do a llevar él m· m a con la copa, la copa se apodera de la libettad del hombre, dispone de él, le dú vueltas, le estudia, le adivina sus pensamientos, sus afecciGnes, sus tendencias, i cuando está en sazon le dirije a las sociedades secret[ls de ,que la fracmasonerfa no puede ya se1· sino la ante-cámara mal iluminada." La Alta verda desea que, con un pretesto o con otro, se introduzca a las lójias el mayot· númel'O posible de Príncipes i de ricos·. Los Príncipes de las casas soberanas que no tienen la esperanza lejítirna de ser reyes por la gmcia de Dios ; quern1n serlo pot; la gracia de una t•e\'olucion. El Duque de Ül'­leans es fracmason ; el Pdncipe de Cat·ignan lo es tambien. No faltan en Italia i en otros lugares quienes aspiren al honor, bastante modesto, del mnndil i la llana simbólica. Lisonjead a todos los ambiciosos de populnl'idacl, agarradlos pa1·a la fracmasouería ; la Alta venta des pues verá, lo que podrá hacer de ellos útil a la causa del progt·e­so. Un Pdneipe que no tiene reino que espera!', es una buena fot·tuna para nosotros. Las lójias le conducirán al Car,bonarismo. Vendrá té)l vez un dia, en que la Alta venta se- dignar~ afilinrlos i ellos ~ervirán de guías i de liga a los imbéciles, a los intrigantes, a los ciudadanos, a los emhus.te1·os i a los jornaleros u obreros. Estos pobres Pdncipes hat·án nuestro negocio no cre~rendo trabajar sino en el suyo. Una vez que un homb1·e, un .Príncipe sobre todo, baya empezado a col·rotnperse, e ·tad 1 persuadidos que no se detendrü ya sobre la pen­diente. Es sobt·e las lójias que contam.os pa1·á du­plh~ ar nuestras filas, ellas forman nucsto novicin­do p1·eparativo. 1 mas adelante dice : " Es preciso, desratolizar el mundo. IAt revo­lucionen la Iglesia, es la revolucion pet·manente; es el volcamiento de los ti'Onos i de las_ dinastías. No conspiremos sino contt·a B.oma i pam ésto sir­vámonos de todos los incidentes, nproveehemos todas las eventualidades i desconfiemos,principal­mente, de las ex.ajeracio'nes del celo. Un buen ódio, bien frio, bien calculado, bien profundo, vale mucho mas que todos esos fuegos artificialrE i que todas aquellas declamaciones de tribuna. l~ u Pa­l'is no es posible que quieran compt·ender ésto; pet·o en Lóndres yo h_e visto hombt·es que satisfa­cen cumplidamente nuestro plan i que se asocian con gran fruto. Ofertas considerables me han sido hechas i arlemas, nosott·os tenemos en Malta una imprenta a nuestl'a disposicion ; podremos~ pues, con todfl impunidnd i a golpe segmo bajo el pa­bellon británico, esparcir de un cabo al otro de la Italia, los libros, cuadernos, etc. etc. que la Alta venta juzgue a propósito ponet· en circulacion." Otro judío, autor de varias instt·ucciones, reco­fl'ia todas las capitales de Europa, en interes del Carbonarismo i pasaba a Jos ojos de la policía, por un honrarlo mercadet· de plata i oro, mui ncti­vo en su comercio. Pero éste importante pet·sona­je de las sociedades secretas era el misterioso Nu­bitn~ col'l'ompido como un galeote, gt·an señot·, opulento i hombt·e de jénio. Llamado a Roma pa­ra dirijit·la venta supt·ema, Nubius escribió a Vol­pe el 3 de julio de 1824: ''Se ha cargado a mis espaldas un pesado far- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 38 EL CATÓLICO. do, mi nuerido Volpe •..• Debemos hacet· la educacio,n inmoral de la Iglesia i llegar pot· peque-. fws medios-bien graduados, aunque bastante mal difinidos, al triunfo de la idea revolucionada por \111 Papa. " "Yo paso algunas veces una hora de la maüa­na con el viejo Cardenal de Somaglia, Secretado de Estado; monto a caballo sea con el Duque de Lava!, sea con el Príncipe Carianti; voi despues de la misa a besar la mnuo a la bella Pl'incesa Do­ria, donde encuentro con bastante frecuencia al beHo Desnnetti i de allí COITO a casa del Cat·denal Pallotta o sea el Torquemuda moderno, que no hace mal hono1· a nuestw jénio de invencion ; en seguida visito en sus celdas, al Procurado¡· jenet·al de la Inquisicion, al dominicano Jabelot, al tea tino Ventura o al franciscano Orioli. Pot· la tat·de co­mienso po1· ott·as casas ésta vida de ociosidad tan bien ocupada a los ojos del mundo i de la corte ; al dia siguiente vuelvo a empezar ésta cadena eterna." Mazzini se atrevió en 1836 a asph·ar al hono•· de hacer parte de la Venta suprema ; i es preciso vet• con qué supremo desprecio .Nubius en una carta a Beppo, rechaza- la rnndidatma del que el llama '' conspir·: dor de melodramn, gt·an sacerdote del puúal, noble plebey~> i jentil hombre de las socie­dades seCl'etas.'' "Este pobre .fosé, dice, es rnui ri­dículo; pam ser un u bestia feroz completa no le fal­ta siempre sino mostrat· léls ganas." La Venta suprema mira como rnui inferiores a ella, los asesinos vulgares, como se lo escribía Vindice a Nubius. "¿De íJUé sirve un hombre muerto •••. ? le dccia, una pulwlada no significa nada. La teoría de los grandes Carbonarios es mucho mas pt·ofundn. No indiviuuafisemos, pues, el crimen a fin de elevarlo hasta lns proporcio­nes del patl'iotismo i del ódio contra la Io-lesia · de-· bemos mas bien jenemliz~u·Jo .•. El Catolicismo no tiene mas miedo al estilo acerado que la mo­narquía_; pero éstas dos basns del orden social, pueden despeüarsc con la cotTupcion ; jamas nos cansemos de corrompe¡·, Popularizad el vicio en la multituu; que ella lo respire por sus cinco srnti­dos; 1ne lo beba, que se sature en él. Haced co. rnzones cor1·ompidos i viciosos i no tendreis cató­licos: Yo no quiero, ni vos tampoco amigo Nubius ¿no es vet·dad? cousagrat· mi vida a las conspira·­ciones, para a¡·¡·astt·arme luego po1· ei viejo carril. Es la coiTupcion en gt·ancle la que hemos empren· elido, la corrupcion del pueblo pm· el Clero, i del Clero por nosotros; la col'l'upcion que debe un día 1 conducirnos a ponet· la Iglesia en el sepulct·o. El 1 mejor puñal pan\ golpear el corazon de Ja Jglesia es la cot•t•upcion. ¡ A la obra, puesJ hasta el fin! .. " Sinembargo, poco diestras algunas sociedades inferiores, contir.unban pt·acticando el asesinato. Un miembro Je la Alta Vf}nta, temió que éste pl'O­cedimiento compt·ometif'ra al fin su obra i propuso hasta hace¡· matar a aquellos, que infrinjian las ór­denes de la Venta sup1·tma. Esta proposicion escitó la discordia ligartin a llevar cat·tas ni a se¡·vit· de guía, ni le harán violeucia de ningun modo; porque el que ejerza sobre ellos ésta especie de tiranía, es un opresor, enemigo del 1\1e11sajero de Dios i rebelde a sus mandatos. Hé aquí las cosas que han sitl.l acordadé'ls entre Mahoma, rl Mensnjero de Dios, i los cristianos. Las coudici 1nes con que ello~ se obligan en con-icncin, r,on: Que ningun <•rbtiano mantendrá re­bcion con un soldado enemigo de los musulmanes, ni lo recibirá en su cns~ en público ni en privado, ni le dará asilo, ni pero.1itiril que hagn mansioo en su casa ni en su iglesiu; ni en sus conventos de relijiosos; que no suministl'ará ·al eampo enemi­go ni hon'lbres, ni armas, Hi caballos; que no entrará en correspondencia ni contraerá ningun empeño con él, ni por escrito ui sobre el Profeta nuestro. abogado. El 20 Rebiul-Eroroel del XV año de la Ejira .. El que lea éste escrito i obr·e en contrario de él, de lloi hasta el día del ultimo juicio, rompe la 1 Convencion de Dios i de su amado Profeta. IMPRENTA CONSTITUCIONAL. Calle. del Chorro del Fiscal, casa JlLtmero 14. POR NIGOLAS PONTON • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 53

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 61

El Católico - N. 61

Por: | Fecha: 02/08/1864

TRIM. II. AÑO ll. Bogota, 2 ~e agosto de 1864, NUMERO 61. SEÑORES SUSCRITORES. Con el presente número principia el segundo tl'imestre del segundo año de este periódico. SR. PROViSOR VICARIO JENERAL. El Cloro de la Vicaría de San Felipe ha. visto con profundo dolor las producciones de algunos eclesiásticos residentes en el Estado de Santander, que trt1tan de formar una Socie­dad de propaganda, cuya acta bajo el rubro de ' ' El Romanismo no es el Cristianismo," · vió la luz pública en uno de los periódicos de la ca­pital; i tambien ha llegado a nuestra·s manos un cuaderno publicado en el Socorro el 24 de octubre último, cuyo título es "El Clero en su deber," que ha circulado con profusion : imruesto en su contenido, el Clero ha creído de su deber protestar ante US. contra P.l i contra su objeto. N o se oculta a la penetracion del Clero de San Felipe que auaquc los eclesiásticos que en m a In. hora suscribieron aquellas proposiciones reprobadas por la Iglesia aparenten vindicarse de haber continuado ejerciendo el ministerio, publicada. la pnstoral de 3 de junio último; sin e mbar~o, el fondo de aquellos escritos es1 a no dejar eluda., el primor grito de protestantis­mo que en este país digno de mejor suerte ha sido lanzado desde el fondo del Santuario. En merlio de los terriLles combates que la Iglesia Católrca ha suÍrillo en nuestra desgra­ciada patrla, abrigamos el noble orgullo de que el Cuerpo sacerdotal compacto i firme en la fé legarin uoa pájina de inmort.ll gloria a los ana les del Catolicismo. ¡ Respondan delante de Dios i la amamos mas que a todo cuanto puede ser caro a nuestro corazon. Que nuestras eRposas, nuestros hijos, nuestra pa­tria, nuestros bienes, nuestra vida, son cosas de poco momento, en comparacion con nuestra creencia i que todo lo sacrificaremos ántes que ella, porque ella vale mas que todo. Consiste esto, en que nosotros creemos en la vida futura i en la salvacion por los méritos de Jesucristo. Creemos que este mundo pasa i q1,1e nuestra a 1ma sobrevive. Creemos que un di a hemos de resucitar de entre los muerto~, para vivir eter­namente felices en Dios por haber observado su lei, o desgraciados por babel'la infrinjido. Esta creencia es mui íntima, muí espiritual; 1 i está mui adherida a nuestra alma para que pueda desaparecer. El señor Murillo puede hacer bs esperien cias que juzgue oportunas para persuadirse dc . esta verdad. Puede llegar n. representar hasta el horrible papel de los Emperadores de Roma, i verá lo mismo que ellos vieron. De consiguiente, la verdad está en nuestra fé, porque solo la verdad inspira esa decision; i la verdad no puede combatirse con ventnjas para la sociedad. UN LIBERAL EN EL SIGLO XIJI. Tomns, vástago de 1 s Condes de Aquino, es el ' nombre mas ilu::,tre de la escuela .. i uno de los mas insignes en filosofía; sobrino segundo de Federico 1 Barba roja, primo de Enrique VI i de Fede1·ico JI descendiente por su madre de los prfncipes nor_: mandos, abandonó las delicias i las esperanzas que le brindaba ::iU condir.ion, para -eut•·a•· en la órden de los Domínicos, co1lt1'a la voluntad de sus padres. De complexion endeble;tliciturno, absorto en sus meditaciones, era objeto de bul'las entre sus compañeros po1· su ademan sencillo, sus ojos espantados, su boca siempre cel'l'ada, i como en venganza de los brillantes títulos que debia a su cuna, le llamaban el huei mudo de Sicilia. Pero Albel'to el Grande, cuyas lecciones seguía, obtuvo de sus labios l'espuestas tan sagaces i encadenadas sobre cuest.iones espinosas, que esclamó: llama­mos a Tomas el buei mudo ; pero os anuncio que algun dia los mujidos de su doctrina se oirán en todo el m1.tndo. Dotado de una verdadera intelijencia filosófi"ca, de una vastisima emdicion, i de esa pasion al es­tudio que condure a g•·andes t·esultados, se propu­so a los cua¡·enta i un años •·euuir todos los mate­riales sueltos •·elativos a la teolojía; pe1·o sus tra­bajos, en vez de una compilarion, dieron po1· re­sultado una obra mat>st1·a, de f:lma popula1·, cual lo es la Surnma teologim prime•· ensayo de un sistema teolójico completo que comprende tambien la moral jt>net·al ¡. pm·ticuhu·, i cuantos conoci­mientos existían a la sazon ent1·e los cristianos i los ¿irabes. Se cita allí a Maimonides i Avenoes, . a Platon i Aristóteles, tan a menudo como a los Santos Padres; enciclopedia portentosa · donde la ciencia, la fé, toda la erudicion de su tiempo se hallan desenvueltas bnjo la fo1·ma del silejismo ; síntesis mnjt>stuosa, que propende a reproducir el órden absoluto de las cosas, Dios uno, la Tl'inidad, Jn creacion, las leyes del mundo i el homlH·e. Escluyendo de la fHosofía lo falso, creó.Ja psico­Jojía, la ontoloJía, la mo•·al, la política segun la fé; nplicóse a 01·denar mas dignamente el idealismo, i 1 a consolidar la teoría del pensamiento, espuesta pot· A1·istóteles, mezclando como elemento mode­radot ·, las ideas platónicas, i desarrollando al mis­mo tiempo las nociones de la matel'ia i de la for­ma, como pa1·tes constitutivas de la indiv ualidad, Seria absurdo pretende•· que hubiese tratado de dcncias que en su época no existian, o que em­please una lengua que no le suministraba su siglo; pero es fuerza admirarle por su chu·idad, su esac .. titud, su concision vigorosa, su investigacion fnm- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. tOO EL CATÓLICO. ca deJa vel'dad, que hllce consistir, segun una de­finicion bella i pt·ofunda, en una ecnacion entre la afirmacion i su objeto •.••••..• . •••••..• Tocante al fondo, sostiene que la ciencia proce­de de Dios i a Dios se refiet·e, en atencion a que el filósofo, buscando constantemente el pt·imet· sét• paz i pmpaga1· la vit·tnd entre los hombres, son justas cuando mh·an al bien jeneral, no e ceden . el pod<'l' del lejisladot· i di:stribuyen p•·oporcionalmen­te i con equidnd las cm·gas que cada uno debe sostener en beneficio de todos. Son inju::,tas siem­pre que se oponen al bien relatho del hombre, o al bien absoluto que es Dios. En el primer caso, pecan po1· el fin; pOl' el autor o po1· la fot·ma: pot· el fin si el Príncipe ha ntendiras inferiores. Pri­mero eucuentr·a e1 muucl{)de las intelijenci<-1s puras, el cual, en cuanto lo permitru los lnnitrs de la cteatura, refleja In vida i las ped'fWCioues de Dios. En el fon.lo vé los cuerpos, regulados pot· leyes materiales. Entre estos i [lquellos está la humaui­dad que participa de los unos i los otr·os. Los tres mundos se hallan unidos plll' infinitos vínculos de los cuales resultan el órden natural i el sobrenatu­ral ; i en el seno de la obra mnyores mates que la misma tiranía. En el sentido estricto de la palabra, el Tirano merece la caliOcacion ele sedicioso, pues que alimenta las disendouC's entre el pueblo para abusat· mas fácilmente del podet·. Si el tirano se mantiene dentro de ciertos límites, conviene to­lerarlo, pnt·a evitar el peligt·o de empeorar el es­tado de las cosas ; si tt·aspasa toda barrera puede ser depuesto, i hasta juz.gado por uu poder cons­tituido legalmente; pero el atentar cont1·a su per- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. _:::z: - E"L CATÓLICO. 101 sona pot· fanatismo o pot· venganza pet·sonal, es ¡ un delito iuescusable. 1 De estos principios latos emanaba un sistema I libeml, f)r·ofesado por la escuela i llevado, a veces, 1! 1 mas léjos. Santo Tomas asentó las bases del ver- {Jndero det·echo de jentes, que habia indicado Al­- ber·to el Gt·ande, i que distinguen ese clel'echo, -segun está admitido entr·e los mode:·nos, del mor·- tífer\> que rejía en las sociedades antiguas. A lgu­nas doctrinas que se celebran como la consuma-cion de los pt•ogr·esos rnodemos, como el fruto de un nuf'vo c1·istianismo que ha de rompet· las ba- 1. l'l'e1·as Ll~l antiguo, se encuent•·an espresadas ya con clariclad en los Escolásticos; Santo Tomas deeia: " Muchos eometen el et'l'Or de ct·eet·se no­bles porque son de noble estirpe ; i este et·ror puede rebatit·se de vados modos. En pl'imer lugtt•· 1 -si se conside1·a la causa creador·a, t·esultará que Dios, en el mero hecho de formar la raza humana, la ennobleció a toda ; si la cau ·a segunrla es rrea­da, tendremos que Jos primeros padt·es, de quienes descendemos, son unos mb11 ,, para todos, ha­biendo todos recibido de el! iuual rwblt>Zit i w - tUI'a!ez~. La misma espiga ~a J· flor· de hat·in ~ i 1 ha sido reducida la Santa Relijion, Católica, Após- 1 tólica, Romana, que profesamos, que he1·eclamos de uuest1·os pnd!'es, <.ple es el pl'ime1·o entre todos los bieaes, i el mayor de nuestros consuelos du­rante la vida, i pl'incipalmente a la hora de la mue1·te. Ahora •·egreso a mi Di·óccsis Jlevado del debet· que pesa sobre mí, i del ferviente deseo que tengo de ir a cnidat· espiritualmente de las almas que Dios ha puesto a mi cuidado; i al •·egresa1·, llevo mi corazou 11cno de gratitud ácia vosotros. l .Tnmas ohidaré lns Dtencilines que he recibido en 1 1 . esta ciudad, ni t>l alto re~ peto qt e en ella se ha tenido por la ilignidc.Hl de que estoi •·evestido, sin 1 teuer ningun mérito personal. De tod os, sin es­cepcion, estoi profundamente agradecido; prro me 1 permito hnce1· una espeeial menrion de vuestr·o digno P1·esidente el señol' Jener·al Juan .T. Nieto, a quit>n debo favores pnrtieularcs. El ngt·ndeci­miento es unn vit·tud natu .. al en el hombre, i nin­guno debe estwñar· que yo mP espTesc así. Me despido, pues, de vosotms, i me de spido lleno de sentimiento, porque no me puede se:· in- 1 1 diferente mi separacion de est~ Estado, por· mas que senn podei'Osos los m_pti vos de esta separn­cion. Me despido de vosotros, i al despedí rme, tengo que deciros, que jamas os olvidaré i q•w en mis votos i or·aciones al Todopoderoso, vosoti'Os tend1cis siempre parte. Oraré por vosotros todos los habitantes de esta ciudad, 01·aré pot· vuestros padt·Ps, pot' vuestras espos:1s i por vuestros hijos. Le prdiré a Dws que reine entre vosotros la pnz, 1 el salvado ; este se ecba a los cen.los, miéntms que 1 la otra ocupa la mesa de los reyes; así, del mismo tronco, p drán nacer dos hombres, el uno vil i el ott·o uoble. Si lo que proYiene de un noble het·e­dase su nobleza, los insectos de su cabeza i las supedluidades naturales enjendntdas en él, !'e en­uoblecerian igualmente. Bueno es no desvia1·se e los .ejemplos tt·asmitidos po · los nobles antepasa-dos, pero es t as digno de alabanza haber ilust rado 1 un nacímie•Jto humilde con gl"andcs accione,. Re­pito, pues, con San Jerónimo, que en esa p•·eten­dida nobl,za heredital'ia, lo único digno Je envidia es el e tut· los noble:; obligados a la virtud por vergüenza de dejenerat· de sus mayot·es. La vet·- 1 dndera noblela es solo la del alma." ese bien inestimable de cuya falta nacE-n tantos males, le pediré que os haga felices en esta vida i que despues os dé Ja gloria etema. Todo esto Ie pedir·é; pero ~omo vuest1·o amigo, vuestr·o com­patl'iota, vuestro Metropolitano, me creo con bas· tantq, derecho para recomendaros que os ronser­veis siempr·e fieles al Catolicismo, a esa Relijiou Sauta, Católica, Apostólica, Romana, la única ver­dadera, la que os dejm·on vuestros padt·es, la que hace !as delicias de la vida i nos asegura la biena­ventmanza que no tien~ fin. Conservaos siempt·e unidos al Vical'io de Jesucristo, el Soberano Pon­tífice. Amadle, respetadle i obedecedJe. Si no Jo hiciérais así, dejaríais de ser católicos, romperiais la union que debe haber ent1'e la cabeza i los miem­bt ·os. Obedeced tambien al Pastor que teneis pot· 1 la gt·acia de Dios i de la S:.tnta Sede _\.postólica, Jo mismo que al Vical'io en quien reside hoi la potes · tad eclesiástica pot· ausencia del Ilustrísimo señor Obispo doctot• Bet·nardino Medina. Resp.etad i obedeced a las autol'idades, en lo que sea de su competencia; dándole al Césat· !o que es del César, pet·o sin quitarle a Dios lo que es de Dios. No os dejeis seduch· de las máximns co¡·¡·uptoras del siglo en que vi •irnos, ni os contnjieis del indife­rentismo t·elijioso que, apegando el cot·azon en los ' Este gmnde homb1·e se mantuvo siempl'e e igual­mente humilde, negándose a admitir· en su Mden toda otm dignidad, fuera de la de definidor· ; i jamas :1bandonó su contemplacion pt·ofunda. Una 1 vez, mientr·as navegaba, no advirtó la terrible tem­pestad que se bubia decla_rado ; ott·a no sintió la llama de una bnjía que le estaba quemando la mano. Cierto dia que e Hnia con el rei de Francia, dió de npente un golpe en la mesa, esclamando: Este es un a'rgumento invencible contra los mani­queos. Cuando se trató de canonizarlo a poco de habet· muerto, los opositores obset·varon que no había hecho milagl'Os; entónces el Papa Juan XXII escJamó : Hi::;o tantos, como articulos ha escrito; i siguió Jiciendo: Tomas ha ilust1·ado a la Iglesia mas que todos los doctores juntos ; i se s aca mas provecho de estudia1' 'Un mio sus esc1·itos, que de leer los de los demas toda la vida. (Tomado de la Histol'ia Universal, poi' CésarCantú.) bienes de la tierra, Jo apal'ta tle Dios i Jo mate­l'ializa enteramente. Que no se apaguen en voso­tros las preciosas virtudes ele la fé, la esperanza i EL ARZOBISPO DE SANTAFÉ DE BOGOTÁ la cal'idad que recibisteis en el bautismo. La fé, SE DESPIDE DE LOS HABITANTES DE LA. CIUDAD que tan combatida es en los desgt•aciados tiempos DE C.ARTAJENA. que atravesamos; la espernnza, que no puede estat· Las cil·cunstancias nacidas de la guena, que donde no hai fé; i la cnridad, qlle es el lazo que por la•·go tiempo ha tenido envuelta a nuestt·a pn- une al hombt·c con Dios i a todos los hombres 1 tl'ia, me arrancaron violentamente del seno de mi entre sí. ¡· amadísima gr·ei;i me Wajeron a esta ciudad, en Estos consejos que os doi, son nacidos del amor , donde he cncontt·ado una hospitalidad cristiana, i que os profeso, i del ardiente deseo que tengo de ¡1 algun alivio en el dolor de mi cor·azon, honda- que seais etema i temporalmente felices. Son Jos mente lastimado con la situacion ~ ~lE)~ qte p.:~~!lc9A un padre que ama tiemamente .a sus ·-w" ... -.. SIBDOIECA ttJt,~lóiGQ ....;;¡,_.. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ~ ~ 1:2~~ ~~~~ ~ ~-~~~ ~~~~~ ~~~~~ ~ ~ hijos, i que os Jos-·dá al despedirse de vosotros Seño1· Jefe Municipal ;-Sí1·vase U. mandar que ~ impartiencloos su bendicion. su Secretado a continuacion me dé copia certifica- ANTONIO, ARZOBISPO DE SANTAFÉ DE BOGOTÁ. da i en manera que baga fé,del acta en que consta Cartajena, 12 de julio de 1864. mi sometimiento al Gol>iemo, si1·viéndose devol­.... RETRACTACION. En la manifestacion qne hicimos a los católicos bajo el epígmfe "Nuestro Juramento," i que se publicó en esta ciudad el 16 de mayo último, es­presamos que teníamos dos objetos prin~ipalcs : t.o Declat·m nuestra iiTeYocable resolucion de sometemos humildemente al fallo de la Santa Sede, i 2 .o manifestat· a los fieles que nuestra vet·dadet·a felicidad estaba en permanecer· estrictamente uni­dos como miem1J1·os de la ve•·dadera Iglesia, a nue~tl'O Pastot· Universal, el Pontífice Romano; 1 i de esta manifestncion dimos cuenta al que es Jefe i cabeza de la Arquidiócesis, el llusti'Ísimo señot• A1·zol>ispo de Santafé de Bogotá. Sn Señoría, haciendo justicia a la declaratoria que p1·ecedió a , nuestro juramento, ha conside1·ado, sinemhat·go, que en la dilijencia del jUt·amento que se publicó no aparece protesta alguna, sino que juramos lisa "i llanamente, sin hacer salvedad ninguna, pot· lo cual los fieles de todas partes Jo han c•·eido así, i han rec!bido escándalo. Pm·a remediado, declam­mos: que desde que se publicó la lei de 23 de abl'il sobre " policía en matel'ia de cultos, " la consideramos cont•·aria a los de1·echos inmanentes de la Iglesia Católrea, Apostólica, Romana: que el juramento que prestamos no fué de someternos a ella: que •·et1·actan os la fórmula simple i iemo, i pt·edic.ará a sus feligrcsrs esta misma obediencia, en tanto que el. Gobierno i sus leyes dejen ilesa su ct·cencia i no lo pongan en el contli.cto de obedece•· primero a los homhres que a Dios i a la Jrrlesia Católica de que tiene la gloria de set· hijo, pgrque llegado este caso seguirá, con­tando con la divinn gracia, el ejemplo de los Após­toles, i de todos lo confesores de la fé. Mas, como : el que protesta solemne obediencia al Gobiemo tiene íntima pe•·suacion de que el Gobierno dé los 1! Estados Unidos de Colombia, respetará siempre, i lf' acatará las c1·eencias, i mucho mas la católica, apóstolica, romana, que es la dominante en el país, se presta gustoso a da•· el juramento que la lei p•·eviene, haciéndolo ante el seiwr Gobernador de la pl'O'' incin pot· hallarse el mencionado Pt· sbítero en esta capital practicant o dilijencias propias, i en efecto, jura obedecer la Cot\stitucion, lryes i auto· t•idades de la Republka i del Estado, i sometel'se i t•espet:\1' In sobe•·anía de la Nacion. fil'ma ('On el srrwr Gobernador,pm· ante mí.--Benedicto Arce. Cosme Gregario Aldana.- -Francisco Bueno Ra­mírez.-- En certificacion de lo cual espido la pre· sen te en Tuluá, a seis de mayo de mil ochocientos sesenta i cuatro.--Anselmo Soto Arana. Hé aquí la fórmula de mi sometimiento. Sinem· bargo: obediente i sumiso a la voz del Romano Ponttfice, que como es notorio ha condenronto. Debes concebir que te convendría mal presen- quien Jo habia ordenado? Yo me sentí ajitado por una tarte al acto mas solemne de la vida sin llevar a él en emocion deliciosa e imposible de desct·ibir, pensando dote un título honroso i serio. No te alarmen, por lo que una felicidad senwjante me esta ha promrtidn. dema s , los ri gores de una separa cion cuyo término 1\!ien tras que las fiestns del matrimor¡io de Clara nleJO un poco, i que hará tu felicidad mas perfeC'ta, me retenían ~n el hosc¡ue de Arcey un poro mas tiem. porque la mayor sto por rara<'tPr a recibir fácilmente las impre!;ion<'S de lo mararilloso, me abandone sin resistencia a aquella. Los corazo­nes que se pare. can al mio no tendrán trabnJo en co1nprenderme. Yo Dbrazaba por In p¡·imera n;z el pensamiento oe uoa dieha cuya serf'oidnd nada parecía turbar; volaba áda Ceeilia con toda la coufianz<, con torlo el ;Iban­dono de mi cor·azon, i. por uua coincidenein, que me parecía heeha espresanwnte para mi, el fin de aquel dulce inderno habia tomado de repente las gra<'ias i ha ta el adomo de la primavera. Las tsrnrthn, no hal>ri¡1 nlcanzndo a , pe- d rac·ion: un rllyo que hu!Jíera cnido sohrr n1i eabezn, 1· no me hahria herido con un golpe ma ettwl. Era el ~ retrato de uoa mujer encantadora, cuyn fisonomía J. tenia alguna relacion con la de mi Cecilia imajinaria. ~ ¡ No era e lla ! '1 1\Jis rodillas se dohlaban, cuando l\L Savf'rnicr, j pnsando el brazo a 1 rededor de mi cuerpo, me sos- ~ tuvo :. ¡A i! me dijo enjugando u un lágr11na ¡ a esa ·) yn no la verás t ¡ es l.id~', mi bella i dulcr Lidy! P la 1! madre de nuestl'a Cecilin! ¡ Plegue a Dios qu e no su­fras nu11cn, eomo yo, el horrible dol0r de sobreriYir a lo qur, amas! . • • • . . (Contiuuar<:í). Se desea tornar· E>n arr·iendo una casa pe tneiia, de vaJo¡· de 8 a 12 pesos sencillos pot· mes. I.a persona que la tenga puede ocurrir a esta im¡wentn. IMPRENTA Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 61

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Imagen de apoyo de  El Católico - N. 68

El Católico - N. 68

Por: | Fecha: 20/09/1864

AÑO II. Bogota, 20 de setie:nbre de 1864, NUMERO 68. ==================~======= CIRCULA. R. ARQUIDIÓCESIS DE SANTAFÉ DE BOGO']',\­SECRETARIA DE~ GOBIEHNO ECLESIASTI-En h misma fecha puso en conoc-ilni"Cnt~-d;l señor doctor Ignacio Buen1ventura el unte· r;or dec.ccto i firma conmig1), . l.aNACW BuENAVE.~TURA- Luco. Pr-'SC· crct ~n io. ' C0-13 DE S2T1El\1BH.E J>E 186-J.. , . . Sefíor Cura de . . . En el m1smo dta puse en conocimiento del Ei 12 del corriente ha t erm'ina1lo l as funcio- doctor Mi.gue\ Ari 'lS el anterior decrdo, nes de Vicario jenet·al el seil r)r doctor EJnif,1_ 1 quedando tmpuesto en él, firma conmigo. c~o A. Tosc:ano. i el infruscr1to las tlc Secreta- 1 ~IwuEL A RIA:3 -LuGo, Prosecrcta.rio. no de la VICaría, entregándose del Gobicl!no . . ecles ;ástico el Ilustrísimo señor Arzobispo. Ilul.néndose prescnbdo en la sala de nucs· Al anunci:u·lo al sci1or Cura, el iLfra5crito, tro ~espacho los señJr~s, presuítcn~o do.Jto.r lg­como encargad~ a .:tualmente del despa~ho, t ie· nac10 Buen:wcnt\lra ~1 d~..:ctor M.tguel Arias, n~ la grata sat1sfaccion de poner en su conoci- prc.staron. por ante mi, el mfrJscrlto Prosecre­miento que el eclesiástico designado por S. S. I tuno, el JUramento de que habla el anterior para la SccretarLL arzolJispal, como ap.ncce d:creto, que P?r .órden de S. S. I. se publica­del decreto adjunto: es el scñ)r doctor Ignacio ra ~aya conaclmicnt? ?..e. to~o el Clero i de los Duenuvcntura, Sacertlote cjemp!ar, qu·~ por su catoltcos ue la ArqutdlOCCSlS· ascendracla virtud i dern:1s cuuli Jades promete LuGo, Prosecl'etario. ' ópimos result:1uos en bien de la Igles'ia. Esta oportuni(la.d me prc.scnt:t la de muni· festar al eñor Cur.1 qu3 en (•1 nuevo cncarcro con que he sido honradJ i que he aceptaclo pa~a corr es ponder a la confi.Lmza de S. S. 1, conti­nuJré p restando mi débil continjcnte de esfuer zo en serv· el o de la I ,;Lsia, a cuyo seno me honro en pertenecer. Del Selbr Cura atento servidor, l\1IGUEL ARIAS. NOS AN1'0~I0 IlERR.\.N, POR LA GRACIA DE DIOS l DE LA SANTA SEDE, ARZ'JBISPO DE S ,\NTAF.C: DE BOG)TA, Deseando arreglar el despacho de las ofici· nas ~e n~cs~ra ~ccrctaría arzou!spal, i de 1u, Cur1u cc!csiástrca. encargada a nuestro dis· creto seiior Provisor, decretamos lo sigu!ontc: . Art 1.0 N ombramos de nuestro Secreta­no al presbítero doctor l!J'nacio Buenan'ntu ·u q.uien inmediatamente to~urá posesion del des' , .tmo. L:.t Se~ret .u b, por ahora, tendrá dos oficia­les: :l pnmero encargad~ de! r.1mo de dispen­sas, 1 el otro de los negocaos Jeneralcs. Art. 2.0 Habrá en b Curia o despacho del seílor ~rovi.sor .un N ota~b mayor encarga­do del archlVo, 1 qn~en autouzará todos los au­t':) s i decretos del mismo Provisor i ademas un oficial bajo las inmcdia tas ó~denes del Notario. Art. 3. 0 Nombramos de .1.\ot:.trio ·al doctor Miguel Arias, quien inmediatamente tambien se enc~rgará del destino, prest:lndo prévia­. mcnte Juramento de dcst>mpefi.lrlo fiel i esacta· mente lo mismo que el Secretario. - . Dado en la sala do nu~stro despaclio arzo­blspal, firmado por Nos 1 nuestro Prosecreta­rio en Santafé de Bogotá1 a 12 de setiembre de 1864. ANTONIO, ARZOBISPO DE SANTAFE DE BOG')TA -RAFASL T. Luao, Prosecretario. AI\Q.UfDIÓCESIS DE S.\NTAFE DE BOGOTA­SECRETARIA DEL G O:RlEHNO ECLES!AS'l'!CO. :-~ ~9 DE SETIEMBR :~ D2 1864 -NUMERO 603. 1 Sc1ur Cura de ... H ·.,bicndo variado las circunstancias La;o l~s cuales se ~spidieron a1~unas· de las dispo~i- \• clones contcmc.las en la -circular de 8 de octu· i uro último, publicada en el número 20 de e: El ~~ qató!ico," el Ilustrísimo eüor Arzobispo ha 1 d1spuc-sto que los s_ñores Sacerdotes a quienes ,1 se les hayan t erminado las licencias para con- ! fesar, celcurar, etc, que especialmente se les ¡¡· con.ccdteron, i que conti.nuuon en uso ele ellas a VIrtud. de aq_uella resolucion je1:eral sobre próroga lmlcfimda, solo tengan tal prórogii. por un m0s mas . Petra obtener nuevas licencias o próroga. de las anteriores, deberán presentarse personalmente en el despacho de S. S. I. Qued~l. t~lllbicn revoc. .a do l? que sobre cuen­tas de fa?nca, .Mayordomos 1 claveros dispone la enuncmda circular. En consecuencia se rr­mitirán las últimas cuentas i las anterio:es q~e no ha!l sido fenecidas en este despacho, par-!- los efectos del decreto de la materia. ' Su atento scrvid~r, ~1:IGUEL ARIAs. · ~ r __.. _,. ._-o---- FELICITACIONES, 1 t·ustrisimo señor :-En estos momentos tan ~olemnes, el silencio sin duda seria mas elocuente que la espresion, tal e¡ la fuerte sensacion que el co~·azon esperimenta al.ver al respetable, i querido objeto que por tanto tiempo babia pet·manecido a.u~ente de ~osotros. La mano atreYida de la injus .. t!Cta os vot~ a las ardientes playas del océano, en donde habe1s agotado con la mas beróica resiO'na­cion ~~ cál!z del sufrimiento i del dolor, pe1~ la Provtdencta que siempre vela pot· el justo i pot· el que padece pOJ' la defensa de los iuter~ses de DicsJ os ha conser\'ado vuestra importante vida i os hn seflalado este ventm·oso dia para que entrels, como en ott·o tiempo el invencible Atanacio a la capital .1 del imperio, en meuio de los aplausos -i aclamacio- 1 . _j Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. o;o:::au 4 154 nes dr.l pu blo fiel, q,ue ama a S\ Pastor, i mTebn­tado de t: n indecible contento, mi1·a i co tE> pln, Jos.freseosinurrlesqne reposan sobre snsvrnel'ables cienes, los que reco.jió, no. diré, en el penoso, sino, en el glol'ioso campo del ostmcismo. Entntd, pues, ilustre Pastot• al seno de vuestra grei, pRl'il enjngat· 1 ron mnno pronta i cal'itativa las )¡)grimas de vues- 1 tros hijos, i continuad con yuestro celo apostólico , defendiendo la gloria i el honor de Dios, los inte­. reses i la libertad de ''uestra queridn esposa, i la felicidad espiritual de vuestra grei, en medio de la cual tt·emola aun todtwía el infernal pendon de la incredulidad; pet·o no importa porque vuestro celo es infatigable, vuestra constancia in\'eneible, i vuestra fé incontrastable como la del justo. Vos, Ilustrísimo señor, habeis sabido concilim In pru­denrin, con el carácter i el celo de un verdadero suceso¡· de los Apóstoles, i con un acie1·to <.'1 mas sábio como laudable os habeis mantenido con ad- 1 mi rabie firmeza, en dnr a Dios lo que es dr Dios i al Césat· lo que es del Césat·. Habeis respetado la autol'idad del Soberano temporal, pero sin mengua ni ' ' ilipendiu de Ja glot'ia i del hono1· que le es de­bido ni Sobcnmo de los Sohct·anos, al Señm· de los que dominan i de Aquel que es la fuente i el oríjen de donde parten todo poder i autoridad. Fi­nalmente, Ilustrísimo seuor, nosotros os considera­mos como un piloto el mas diestro e intelijentr, 1 que con calma i serenidad ha sabido dirijit·la na,· e~ 1 pam que no fracasase, en ]a espantosa tormenta que se levnnta de improviso, cuando el cielo estaba en completa calma, paz i serenidad ; nada teue­' mos, pues, que temer de] poder del infierno i sus - ¡· aliado~, inútiles serán sus diabólicas muquinacio-ues, porque el fiel atalaya de la casa de lsrael está siempre pronto para dar la voz de alerta al invr.n­cible soldado que milita bajo el estandm·te de la ct·uz. Convencidos, pues, práctir.ameute de esta verdad, os felicitamos en este dia por vuestra pro­videncial llegada al lugat· de vuestra S.illa,i al Dios de los pastores le pedimos se digne en bendicio de su santa Iglesia conservar '\'ttestra l'xistencin, lle­nar ''uesti'O nombre de bendiciones, i Jegarlo a las jencraciones veniderns pam que recuc1·den el valo1· i la adminlble constancia del hét·oe que tl'iun­fó en las campañas de la impiedad en e1 siglo XIX. Camppiias abiertas i temerari'ameutc sostenidas pot· los mismos cristianos, de esta parte feliz del mundo de Colon,la República .grnnadina. Recibid, .PUes, Ilustrísimo seftot•, el sincero nfecto de mi cornzon, i el de los fieles de esta paa·roquia a cuyo nombre os felicito en este dia, por medio de La ptuma, ya que mis achaques me privaron de tene1· la gloria de veros i felicitaros Yet·balmente el dia de vuest1·o venturoso arribo. Setiembre 1 ,o de 1864. El Cura deBojacá.-Fn. JnnvActo GAUCÍA. 1 nfsmo, de cu. e regreso n , ¡uelln cnpital, despues de u destf('l'I'O, i en medio ~i alborozo de los ale . jdmlrinos fieles, se ha valido nwstt·a Ben1·encia . para establecct' un símil con mi vuel.ta a esta ciu-dad metl'opoHtana, rlespues de mi confinnmiento, acojido por el nmo1· i f'l entusiasmo de una pol>la- 1 eion eminentemente ortodojn. Pero, -por la gracia de Dios, me anima el mismo espíritu que n\ inrr.or­tal Atanncio : quiero decir, que los intereses que en el siglo IV movirron al itimortal Patrinrca,esos prop!os me hnn moyido a mf en el siglo _, L po~- que los intereses de la Rclijion son unos mismos i ¡'1 solidarios en todo tirmpo i en todo lugM, i me aliE'nta, entre otras consideracione..; , aquella rnáxi­ma del gran Pnrlrc de vuestra Reverr:•ncia, i mio taml>ien, el profundo San Agustin. ce Cuando los ¡ pequeños se dedican a cosas grandes, l'llas les ha­cen se1· grandes. >> El f'Srlnrrcido Atanflcio contó c- on Snrrrdotes fieles i crlosos que lo ncompañaron en la dl'ft:nsa del altísimo i sncratísimo dogma de la CON SU STAN- ¡' : , CIALIDAD del Verbo, i yo tamhirn he contado con cooperarios celosos i fielE's que me l'Hls-iliarün rn la de In Jibe1·tnd i los dcrerhos imprescriptiblrs de la Jglcsin: \'ue.;t¡·a Reverencia hn sido uno de esos cooperarios, i así me complazco en declararlo. ·¡ Desde luego cuento con Ja misma coopc1·acion para lots,cornl>ntes que aun nos ;.gudard 1 an, ¡)orque '¡ f conccp uo que no estamos en el Jll\ e a campaila sino ru tregun. Vuestra Rev<'rrnl.'ia sabrá continuar 1 animado éon los sentimientos de su g1·nn Pndt·e, 1 no ménos rsclareeido que el grnnde Atanacio, i 1 estos noml>1·es, los inmortales recuerdos que a ta- [ les n'Omb1·rs ''nn uuidos, i la santa e imperecedera causa en que ('Stamos afiliados, nos darán, con la ayuda del Ciclo, fuet·zas i l>dos r~spectivamrnte a vuestra Re,·crE'ncht i a m(. Rrciba vuestrn Reve1·encia mis agradecin1ientos i ct·eame su siempre afectísimo, ANTONIO, Anzon1sPo DE SANTAFÉ DF. BoGOTÁ. ------~·~~ ,~· ~~---- Jlustrisinw se11or docto1· Antonio Jlerran, digni- ' simo Ar:;obispo da Santofé de Rogotá.--Gua­tavita, setirmtbte 3 de 1864. Mi muí amado i ref'petado Prelado :--Despues de los penosos sufrimientos en cerca de tres ai10s de destierro, léjos de su amada grei, en playa~ de­letél ·eas, proporciona Usía Ilustdsima a las ovejas de su cargo el place1·, la inesp1icable dicha de pt·e­sentarse en medio ife ellns., tl'htada, juzgad lo vosotros mismos; no podetnos ejecutar apoyada i sostenida por los enemigos comunes de lo que nos mandais. )) Actas ap'Ostólicas, cap.ítulo la Iglesia, cuya d€strucci0n 1:1nhelan; del dogma 4, o versí~ulos 19 i 20. Nuestt·os ruet·pos i nuestros católico cuya negacion apetecen ; de su uiseiplina, intereses, sob1·e los euales teneis potestad, están a de su libertad, de su independencia que atacan i vuestra disposicion; uuest1·a alma i nuestra con­pel'siguen con un contje i una pe1·sevet·ancia capaz ciencia 1 elijiosa son LIURES. Dios mismo no nos de rspuntm· i aterrar, aun a los hombres de mayot· fuerza a hace&· aquello que no queremos, mucho ' 'nlot·. ménos lo que no debemos contt·a las leyes natura- Los enemigos de la I~lesia i los que no rlebie~·an les i divinas. lnfiérese de aquí rectélmente, que al sel'lo, censumn malignamente In conducta sa lrjitimi· 1 adjuntas a e ·a prom r sa i a ese jlll'amento, hechas dad, PEB!IITIÓ al Clero de la ArquiLlióce-sis que por Usía Ilustrísima queda1·on incólumes el dogma, p1·estara uno igual, declarando que por él no se in­la libertad, la independencia i disciplina de la Igle- cun'il'ia en censum; i pot· una conducta sábin, sía. Prometió Usfa Ilustrísima en el juramento de p1·udente i p1·evisot·a, que sin tortQJ'at· el sentimien· 21 de juuio, ohedccet· al Gobier-no de su patria, to individual, facilitaba el medio de prestm· obe­lJ I ICAMENTE, en Lo zJ erteneciente al órden diencia a los hombres, sin comprometer los sngra­temporal, pero de ninguna manera, en ningun dos intereses de la Relijion i de la Iglesia, dejó a caso, en todo lo q1ee se oponga a la lei de Dios, al la conciencia de cada uno el someterse o nó. Mas, dogma, a la libertad, independencia i disciplina no sucedió ot1·o tanto respecto de uno de Jos señores de la Iglesia. Vicarios jenerales, que no dejando llbet•tad de clec- Pero, como la obediencia i sometimiento a las cion entre prestar o nó prestat· el juramento 1HAN- 1 potestades i gobiernos de la tierm en lo pumm,ente nó nutol'itativamente el sometimiento; mandato tempor al, en los negocios de su, incumb~ncia, no que desagradando altamente a la mayoi'Ía del i es un simple consejo del Sut>remo tejisladot· Jesu- Cle¡·o,seguramente no habria t nido cumplimiento, crfsto i sus discípulos, sino un mandato espreso, aun cunndo no lo hubiesen estorbado las resolucio· imprescindible, que oú!iga en conciencia, quien nes del Gobiemo jeneral i del de el Estado de Cun- 1 ~ quiera que pt·omete cumplh· ese mandato i en efec- dinamat·ea, de 6 i 1 o de agosto <1~1 año pt·óximo to lo cumple, llena un debet·, obedece la lei divina, pasado, al p1·op;o tiempo que se babia espedido la 1 sin tener en cuenta las que es pidan los hombres. cit·cular del Gobierno eclesiástico de 9 del ·mismo Yo rejist1·o el Evanjelio i leo en San Mateo, capf- mes. Rrpito que no habl'ia tenido cumplimiento tul o 22, versículo 2 t. « Dad al Césat· lo que es ese mandato, porque ni .Dios mismo nos fuerza a del Césnt· i a Dios lo que es de Dios.)) Yo rejistro hacet· lo que no queremos, mucho ménos lo que no las cat·tus de los Apóstoles, i encuentt·o que San debemos, cuando la conciencia lo repugna. Así Pablo 1\IANDA, e< que toda alma esté sometida a las es que, el sometimiento de algunos eclesiásticos, Potestades superiores. » Ad ¡·o manos capftulo 13, no fué el resultado· de ese mandato, sin!J la obt·a Vt t•sfculo t.o: que, e< estén · 1jetos los cl'istianos espontánea de su eleccion, des pues de que confOL'- a los Príncipes i a las Potestades; que las oiJedez- me al permiso de Usía Ilustrísima, cot.Jstlltaron los can.>> Ad Timoteo, capítulo a.o versículo 1 :O El dictados de su conciencia. 1 J>rfneipe de los Apóstoles, San Pedro, no enca1·ga Usía Ilustrísiml'l tendrá la bondad d·e disimulat· -¡ ni ruega, sino que, con la plenitud de potestad que la libertad que me he tomado en una carta con- 1 le confil'ió su Divino Maesti'O, dispone impel'iosa- gr·atulatol'ia pot· su regt·eso al S€no de su grei, i de · menté i pt·eeeptúa a los rnismos ct•istinnos,en estos protesta de obediencia a su autoridad, esprcs-át1do­tét ·min.os: e< Somet~os a toda humana cl'iattll'a, i me como lo hago acerca del juramento prestado por esto pot· Dios.)) t.~ PedJ'o, capítulo 2,o versículo Su Señoda Ilustrísima, porque he c¡·eitfo opol'tunn 13. Pet·o si fuet•a de esta obediencia ~~, lo pura- la ocasion de manifestarle mis sentimientos rn la mente temporal, en lo.s negocios de szt incumben- materia, que Eon los mismos -en que, con raras 1 cia, tt·aspas~mdo los Gobiernos los límites de su escepciones, abunda el C~ei·o i los fieles de la_ Ar­autoridad, d~mandasen un sometimieuto ABSOLU· quidiócesis, que aman, como verdaderos católicos, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. S ------ EI .. CATOLICO. - -.- ..... ~ ... ~-.-...-....~·. - --·- .--."""--... ......_.. la tmidad, sin la cual desnparece nquellu Iglesia, 1 Sí, mi estimado doctor nema! : "Ningu 10 des­de quien dijo su Divino Fundador, que se compoue 1 truirá 1~ que Jesucristo ha edificado ; ni .edifica ni de un solo Pastor i de un solo aprisco: 'ltnum ovi- lo que EL ha drstruido." Esto que en el s1glo 4. 0 !e et unus Pastor. Joan cap. 1 o. v. 16. E!'a u ni- decía el gran Cdsóstomo, lo hemos visto confir­dad reprcsentnda en la timica inconsútil de Nuc~- mndo nowtros po1· qu~ncc siglos mns, i lo hrn.10s tro Señor Jesucristo, que ni los bárbaros soldados visto confirmado especwlmente e_n nuestra Pnt_n~ ! se atrevirt·on a 1~omper. Los que hubieran deseado ¿Ha podido echarse rn eJin por tterrn el Cntoii<.'JS­que Usía Ilustrísima hubiese ma1·chndo al destie- mo ... ? Hasta nhora no. ¿Se conseguirá ntrrrnrlo 1 rr , ántes que prestar un juramPnto condicionado, en lo venidero ... '? ¡ Ah! Pidamos a Dios que no que en nada afecta los interesrs de la Relijion i ncontezca tal en cnstigo d~ nuestras iniq~idndc~, de la Iglesia, no han meditado s<'guramentt>, sobre puesto que no si€ndo espec1nl p:wa una rPJton, SI-el triste lamentable i horroroso rstado a que ha- no jener¡¡J parn .todn la tie.rra, In promesa de la bria qu~dado 1·educins tnn cmine~1temrnte cnto\tras. Santísimo Padre el Romano Pontífice, Cabeza de Reeiba U. lns gr;~cias mas <'ordinles por su carta la fglesia, i a Usía Ilustrísima, como a nuestro i creame su nfrctísimo Prelado, que Yrrdallcra· lejftimo Pasto1·; i de quien soi, Ilustrísimo señot·, mente lo nmn. mui atento, mui obediente servidor i menot· cape- ANTONIO AnzomsPO DE sA ,. TA FÉ D E noGOTÁ. Han, Q. B. S. 1\1.-FÉux A. BEnNAL. ' Santajé de Bogotá, 12 de S(Jtiembre de 1864.- Arquirliécesis de San.tafd d e Bogotá .-Parroquia Señor f>t·esbítero doctor Félix A. Bernal, Pá- de Hotoviejo, setiembre 5 de 18G4. rroco de Guatavita. ILusndsn.ro SEÑOR AnzomsPo. Muí estimado doctor Bernal : mi regreso a es- El regreso de Usía Ilustrísima a la capital de ta ciudad, pm· el cual me felicita U. en su npreci) prolongue hn ta que se halle pPrfecrionnda la di·- fíril runnto impo1·tante labor de sn alto ministe· Ilustrísimo señ-or :-...... Tengo -el hono1· de dirijf- ~ 1 io, i que entónres, con edificneion i proveeho de t·os la palab\'a a nombre de « La Sociedad de la 1 1: su uumrrosa gn:>i, pueda U~ía Ilnsti'Ísima repeth· Caridad, >) cnyo Presidente soi, i ~omienzo pOL' In::-. palabras del Apóstol : (( Bonwn -certamen felicitaros pm· vuest1·a bienvenida. . r', t < ee1·tavi, cursum consumavi, jlrlem se1·vcwi.>) La necesidad, Ilustrísimo señoa·,·de una autori- 1. 1 Tales son los -' otos i fet·voa·osos deseos de su ín- dad que íll'monice bnjo un solo pensamiento la uni­timo apreciadol', súbdito fiel, compatriata ¡ amigo. dad de la Iglesia Católica en este país, se siei1te Jos1t PASCUAL AFANADOR. poderosamente; por eso vuestra llegada a esta 1 Santa(é. da Bogotá, 10 de setiembre de 1864. ciudad como el pl'imet• Ministro de la Iglesia gm- 1 1 ... 111 Sciior Presbltero doctor José Pascual Afanador, naclinn, se mira como un birn infinito, po1· el cual Párroco venerable de llatoviejo. damos gmrias al Todopoderoso. Vuestro papel ñli mui estimado señor doctor Afnnadoa· : entre Ilustrísimo señ01·, en las actuales circunstancias, .l, los muchos testimonios ele adhesion relijiosa ¡ de es tan delicado i de tal impoa·tancia social i reli-r nfc•cto ron que he sido favorecido i honrado poa· jiosn, que os considero lleno de esa zozobta que l mi rrgi'<.'SO a esta ciudacl, asirnto de mi Sede m·- naturalmente sobrecoje al hombre ·de bien, siem- 1 1 quiepiscopnl, debo confesm· n U. que uno de los pre que· se yé colocado cual Usía, al frente de una mas satisfactorios pnra mi ha siJo la apreciable tarea tan d•fícil ; difícil digo, porque en el actual 1 rnrta gratul~torin de U. de 5 del que cmsn, porque estado de cosas son necesadas la fil'lneza de un rsa carta t's In del nmigo qcc se complace con el Atnnacio tmido a la abnegacion _do un Sócrates . amip: o , In del Sacerdote que di~e a su Obispo: para ' 'oh·er el equilibrio -.'1 la Iglesia granadina, !_ ) amenazada de una manem alal'lnant<:'. t Acor 'lc me encuentro con U. en punto a que la Yo no sé, Ilustrísimo seüo1·, basta donde tendré · .f lu<.'hn relijiosa pros<>guini. miént1·as que, como U. razon en mi modo de pensrillantez. inclllyo, eon justicia .• :l U, que <'S uno de los mas DISCURSO DEL SE.l' OR VICENTE F. P.Útz, SECRETARIO 11 distinguidos coopE'rarios con quienes cuento, pam DE LA «SociEDAD DE CARIDAD.>) que me ayuden eficazmente. a eontinum· sostenien- Jlust1'ísinw seiio1·. ) do In lucha, alentados po1· nuestra palabra de com- Hace, Venet·able Sacel'dote, el espacio de tl'es 1 1 bntc-« Da1· al Cé~at·, lo qne es del Césal'; pero nilos qu~ este pueblo, -esencialmente católico, os 1 l sobre todo a Dios, lo que es de Dios,>) puesto que, vió con dolo1· marchm· a un lejano destiel'm, ) niño escandaliza, i ulta·aja al venea·able Sace1·dote.>) 1; Doi n U. las gracias mas espresivas por los té1·· El nii"lo a la verdad se escandaliza con las escer-tas minos de su cm·ta estimable, i a mi vez, deseando de esterminio que la guerra le presenta ante su a U. salud i verdadera felicidad, me es mui satis- inocente vista, i al VE:nerable Sacerdote se ultraja fue torio asegurarle que soi igualmente despojándole de todos sus derechos i sepultándolo 1 Su np1'eciad01·, su compat1·iota, su amigo. en las ho1·ribles pat·edes de una espantosa pl'ision. ANTONIO, A¡w;oBISPO DE SANTAFÉ DE BoGOT . .\.. Estos han sido los frutos que ba cosechado el áa·bol del mili. ACLARACION 1 PROTESTA. La falta del Pastor de la Iglesia no em- un mal Pam los que no conozcan al señor docto1· E lías que pesªba sobt·e el Clm·o granadino solamente, Olal'te, Párroco •Gle Pachavita, se hace necesal'io sino que tambien mantuvo al pueblo en su mayo1· ' 1. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. 1 a ~ / ~ .. ~.......,....._,'-"'-'~~~ ...... _,..._,.,. ~ .. confticto, poa·que faltando 6f venerable anciano que f pueblo gNfnatfino·, i ~sta es una gti1ta S:ttisfa<'ción ¡ lije los destinos de tá J.glesio, faltá'bale tambien a·l t pas·n nosotl-os, p01·q.uc el puelllo b'l'anadino siem- ¡ pueblo el gozo 0n su corazon. p-re fiel a las doctri'nas de nuestros mayoa·es,no de- l · 'Si lágrimas de doiOl' vertiea·on los- fieJ.es hiJos testará un momento de su f-é, amm·á i •·espetará a ' de la Iglesia e.uando el inexot·able deca-eto • drl sus Pa·elados i bajani a la tumba confesando la ! Sobea·ano de la tiea·ra os m·rebató de nuestro seno, Relijion, sellada con la sanga·e del Crucificado. ¡ tambitm el pueblo las ha dertnmado de gozo en Bogotá>,. 8 de setiembre 1864. 1 vuestro feliz regreso i ~ ba aclamado segundo máa·th· de la iglE'sia gt·anadina. /D('I) ti! n mf'l"\ rD n l""fif7'\ ~ ~-~~ Dumnte el amlu·go· tiempo que las mua•allas de ~- '-""-"~~ ""-'~<.1.1"-liííi'\G#~"'I~~ 1 Cal'tojena gua-s·daa~on la l"espetable pel'sona d·e nue5· "LA OPlNION" 1 LAS ESCUMUNIONES 1 1 · ta·o Pastor,. los hijos de Bogotá, como los pueMos Los liberales son mui graciosos en esto de que la ro~ean, han permanecido melancólicos i las escomumones. Para. ellos no valen nada, 1 pt ivados de vuestt·os beneficios. Los párvul'(}S han 1 sido partícipes dd azote, poa·que han cal'ecido del nada. significan i sinembargo se les indijesta ¡ segundo de los sacaramentos .... Bogotá, durante mi ucho hel q~o se~dpubliquJeln loDs nom.breds die j, vuestl'Q ca·uel destiea•a·o no os olvidó un solo fns- os que an mcurr1 o en e as. P.spucs e a. tante. Los fieÍes presencimnos escenas funestas: lista de remn-tadores de b-i-enes de H manos los templos permaneciea•on cerrados por muchos muertas ' 7 publicada en EL CATÓLICO, publi­dias, el alegt·e tañido de las campanas enmudeció., can los Editores de '"'La Opinion" en su nú.mc· rl pneblo caa·eció de la administa·ácion de los sa- ro 81, otra de la misma clase, en que a parecen et·r.melltos i el culto que le debemos tribu-tat• a la algunos conservadores, i tienen la desvcro-uen­majestad de nucstt·o Dios,. quedó su¡wimido. Lns za de decir que se pueden ver sus nombres i ágl'imas, la paciencia i la oracion a su tum.o e1·an sus firmns en la oficina correspondiente, siendo eJ únk"O remedio, la unica ofrenda que podia pre- así que en la mayor parte, los inscritos en esa. sentáa·gele en holocausto u nuestl'o Dios pa-ra apla- lista n.o han tenido,. ni po1· pensamiento, nada eat· el azote con que quería castiga•· los pecados que ver con la desamortizacion, como se está de su pueblo. Nuestros clamores fueron oídos, comprobando con las protestas que contra porque gt·lmde i miset'kordioso es tarn.bien el Pateis a sufril', por el escándalo que haya causado-. Por eso p-ol·que escrito está: ce Bienavent·wrados los que decía San Pablo al escomulgar nl insestuoso padecen persecucionPs por la j-usticia, porqtte de de Corintio "sea el tal entregado a Satauást ellos es el reino de los cielos.>) Sí, bienaventu- para mortificacion de la carne, i que su alma rado quel'ido Pastoa·, que por el cumplimiento dé sea salva en el dia de Nuestro Seño1· Jesu­vuesta ·os deberes pastorales ha beis sido perseguido cristo." (l. a Con. V -5 ). . pot• la injusticia. i Entendeis ya. la doctrina de las escomu- tf Todos los miembros de la « Soci€aaa de la Ca- nioues? Sí la entcndeis; lo que hai es que- os ¡ ttidad,>) a la cual tengo la bom·a de pel·teneces·, conviene ton'lar el rábano por las h0jas para. i somos hijos -yerdadea"'s de la lglesia Católica, to- atribuir a !a Iglesia. doctrinas irrac~onales. • dos os reconocemos i amamos como a n uesta·o · 1 d d · d t lejítimo Past-ol'. i en nombre de la Sociedad os- sa- HacelS burla de po . er e atar 1 esa t:n· que t ludo te"erente i doi gt·acias al Dmnipotente p.-ot·que Jesucristo ha dejado a su Iglesia. Haced ¡ n-os restituyó tan inapreciable tesoa·o. cuanta. quisiereis, que e~o no prueba mas que t La « Sociedad de Ja Caridad » no dejará un vuestra crasa ignora.nc.i.a. o vuestra profunda t momellto de pedit· al Séi· Supremo os conset·'V.e la corrupcion. 1 yida i os dé aliento de defeodet· i sostene1• la d;ts- Cíon ese poder es que se escorrrulgu, i con l ~iplina de la Iglesia. Nosotros hacemos parte del ese ¡:.oder es que se absuelve. Se absuelve ~ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ~z::::sz: EL CATÓLICO .. . fl'¡ ;J;;s~~~·~:I"'g_,...~_,...d...,.os~"'q"'u.re,...,...__,o..__b,.....e_....d_,..i._,.e.....,n'"'to--..s,..._,...a_,..'-/la......,..__le,.....i.r-.~. ~~~ IJ de la IgiQsia, se arrepienten ; i en artículo de ellos, de que la \rerdad relij.iosa. se hallaba en · muerte, mostrando esas di"posicione~ puede el Catolicismo. ¡Tal era su buena fé!" absolverlos cualquier Sacerdote. Lo que ha1 En Espafin. tambien ha habido algo dé es.to. es que, los que atenidos a la miserico.rdia de ¿Por qué no nos alegarán mas ejemplos los do Dios, la echan de incrédulos filósofos, con ''La Opinkm"? ánimo, como dicen, de jugárseln. al diablo a lo i Pero qué arguyen estos hechos? Que el l ü 1 ti m o vol viéndose a Dios, suelen llevar cha">9co Papa en uso de · sus facultades lo puede hacer f p orque Dios no se deja burlar así; porque l:'SÍ cuando crea que así se- debe hacer. Ma.s F ese pccndo lo castiga mas frecuentemt>nte con no que esto se baya de tener por regla jene- !:! 11, privar nc los ausilios i buenas disposiciones ral, ni que a esto se hayan de atener los que en la ú ! tima hora, a los que así abusan de su quieran usurpar los lliencs eclesiásticos; ni misericordia. ménos que por ello se hallen libres de esco- 1: 1\fni estraña cosa es para vosQtrns la es- munion los que se los usurpan, miéntras el ~¡ comunion, i comprendeis pelfecta.mente que Papa no convenga en que se queden con lo do cual quiera asociacion se puede separar a usurpado i !os n bsuelva del delito; i esas ga~ un miembro, privándole de s~s benefieios bolas se sacan cclebranrlo Concordatos con la sj no cumple i _observa sus leyes. Vosotros Santa Sede. i Aquí se ha celebrado, o so trata. 1 : Jos masones tambicn teneis censuras i i os de celebrar alguno? Nada de eso: ántes por 1 parecen cstrañas las de la Iglesia? Decia- el contrario, a los de '' J..~a Opinion" no se les 1 ra1H su 1pensos i entredicho$ a. los que in- puede hablar de Concorrluto; esto es degra- 1 curren en ciertos pecados eorpo consta de d.ante para ellos, i es el pecado del Ecuador, ~~.· la lista rle la lójia Union n(Imel'Q 9 de Car- como tantas veces lo han dicho. n tujena1 impresa en 1861, donde se encuentran Pero ya que en materia de quedarse con lo con <'Stas censuras los hermanos José Vicente aj • .mo, sí están por Jos Concordatos, i nos ale- 1 Lópcz i Alejo J. Moreno, árobos del grado 32, gnn el celebrado entre el señor Pio VII i Na­. i borrado por apóstata, (que es como decir poleon en 1801, tambien deberán estar por cscomulgado vitando) el Jcnernl Cárlos Sou- el artículo 15 del mismo, qu.e dice así: "Le hlettc, del grado 33.. 1 Honor para la lójia que gouvernement prendra egalement des mesures 1 tiene tales apóstatas! pour que les catholiques francais puessent, Despues de su pregunta acerca de la conde- s'ils le veulent, faire, en faveur des eglises,des nacion de los e-comulgado~ de manos muertas, fondations..'' " El Gobierno tomará igualmente dicen los do "La Opinion" : '·V éamos lo que medidas para que los católtcos puedan, si lo ha pasado en casos semejantes. Despuea de la tienen a bien, hacer fundaciones e favor de última revolucion francesa, (1) Pio VIl hizo la.s iglesias." i Aquí se permite ·a lo~ católicos con aquellos mismos republicanos que- habian colombianQ~ hacer nuevas fundaciones a fa.·vo1· degollado a mll ciento treinta i cinco Sacerdo- de las iglesias? Que responda el artículo 7. 0 tes i a trescientas cincuenta relijiosas (libera- de ln Constitucion. les habian de ser), un arreglo cuyo artículo 13 Este mismo Napoleon con quien el señor decía: Su Santidad por el bien de la Iglesia Pío VII celebró el Concordato de 1801, fué ( PonR LE BIEN DE LE PAix, se lee en el el que arrancó al mismo Papa el Concordato or1jinnl ), i por el feliz restablecimiento de la de Fontainebleau en 1813, en cuyo artículo 6 Relijion católica, declara que ni él ni sus sohre los bienes eclesiásticos se dice lo sig_uien­sucesores turbarán en manera alguna a los te: "Los bienes actualmente existentes se- 1 compradores de bienes nacionales ( eclesiásti- rán restituidos, i por lo que hace a los vendi- 1 ques, dice el orijinul) vendidos, en la propio- dos se tomarán las medidas convenient.es." dad i goce de los mismos, i que en consccuen- Se reconoció, pues, que eran Il).al habidos t ·Cia dicha propiedad, sus rentas i derechos puesto que, por este Concordato se mr.ndaron quedarán p:ua siempre en mnnos- de sus 1·efe- devolver los que no se habian ven.dido. I las 1 ridos compradores o sus herederos." medidas con respecto a los vendidos, no podian 1 J3uena diferencia hai entre decir por la paz ser otras que las de restitucion de Sl,lS valo~·es de la Iglesia como dice el Concordato de 1801, como mal habiqoa. a decir por el hien de la Iglesia, como dice En otro número reeorda.remos algo sob.re "La Opinion." De este último modo querria 1~ histor~a. de (latos concordatos, i de las penas decir que la Iglesia reportaba una ventaja, qne se hicieron sufrir a aquel Papa para. obli­quc salia ganando con la desamortizacion; pero gario a. dar pasos de que despues él mismo del primer modo Jo que se dice ·es: "porque se arrepintió, i protestó deola1·ando nulos me deje U. en paz i le dejaré lo que me ha todos esos actos como arrancados por la robado, no le cobraré nunca." · fu.er2a. Lo mismo se vió p¡:ecisado a. h~c~--él Papa ====~==~=~===.r¡.=:::;:::;lfD=_:;::¡:;::;::¡:rJ.· m==q>.=::;:~=~=. === raulo IIl con lo.s lJldrones de la refo.rma. ~"'*·""-'~ o(d"<.t~.<~J~'-:1~ .. anglicana, que se habían nprop.ia.do .todos los bienes i rentas eclesiásticos, cuando en tiempo d.e la Reina María no pJisieroD mas condicion para volver al seno de la Iglesia Católica, que el que se les dejara. en qmeta. i pacifica pose- ( 1) La ultima revolucion francesa no fué la de 1789, sino la de 1848. UNA ACLARACION. En el numero 8.1 de ) de la Iglesin, sino a un establecimiento civil. Por lo tanto, no se ha ob1·ado con lealtad poniendo mi nombre en una lista de rtldenciones de censos de la Iglesia; mucho ménos cuando se sabe que las cantidades que imponia el Hospital eran a plazos cort•JS, con hipoteca i con intcres USUI'ai'Ío. Bogotá, 18 de setiembre de 1864. SilvestrfJ' 1 biñez. Señor Redactor de "El Católico." Sa n qtte en la lista publicada en el núme1·o 81 de ''La Opinion;'' llpru '7co como deuuflcia· dorn de "bienes de manos m Icl·tas," suplico a U. d~ lugar en su pel'iócliro a este remitido, que tiene po1· objeta p-rotestar, como pt·otesto con toda Ja fuel'za de mi filma, contra tal calificativo. Yo 1 no he hecho mas que responder a una pregunt~ que se me hizo po1· unos señores que fueron a m1 casa, porque las diS})OSiciones vijentes me obliga­ban eon fuertísimos apremios a ¡·espondc¡· a esta pre­gunta. De ot1·a manern nacla se habl'ia sabido por mí 9-.ue detesto la delacion como una \'ileza: Bogotá, ect. Doi\HTILA L. DE GoNZA.LEZ. Señor Redactor de '' El Católico." Como al publicar su lista de denunciantes los señores Redactores de "La Opinion," dijei'On con mucha fot·malidad que se mostt·al'ian los compro~ bantes del denuncio a la pet·sona que quisiera il· a verlos en la Ajencia de'' bienes desamortizados, '' al ·ver mi nombre en esta lista, yo que nada había denunciado ni pensado en denunciar, envié a mi hijo Ignacio a que ' ' iera esa dilijencia, i se le mos­tró po1· el señor Ajen te jet1ea·aJ, una tira de papel con la dilijencia del denuncio,' pero sin ninguna autorizacion ni fil-ma, diciéodosele que eso er::\ lo snfici{.'nte porque e m Jo que a su oficina habia pa · sado Ja autoridad judicial. Tal superchel'ia de los enemigos de la Relijion, puedo habers~ emple:~do con ot~os que como yo sean bien conocidos como católicos, i .muestt·a la · buena fé de los Redactores de "La Opinion." Espcl'O que U. se si1·va dat· lu~ar en sus colum­nas a ésta manifestacion, soi de U. atento sen idor. MARIAl'lO ÜRTEGA. Como en la lista de denunciantes de " bienes ANSEM10 LEO • El señor José Eusebio Ricaurte nos ha suplica­do tambien manifestémos, que él se presentó en la Ajencia de "manos muet·tas" ·a P?gaa· ~1 ré~i~o 1 de un principal que grava su casa, 1 ~~·m? la dl.h­jencia respectiva, porque ya en la AJe~m~ teman conocimiento de la existt:nda de ese prmc1p •.. Los señores Juan Malo i Eujenio He1·a·nn hm- . bien han protestado contra su incot•poracion en ra li~ta de los despojadores de la Iglesia, en que ha quel'ido incluirlos "La Opinion " nitmt>a·o 81:, ''El Símbolo" número 19 rejistra los remitidos 1 1 en que estos caballeros manifiestan que los .reco ... nocimientos porque eHos tu\'ieron que ocunu· a In 1, Ajencia de '' bienes desamo~rtizados. '' son de es­tablecimientos civiles, uo eclesiásticos. Selwr R~dactor tle ((El Católico.» En el núm I'O Sl (e o L~ Opiuion· » he visto mi nombre en una lista de pel·souas acusadas d~ haber denunciado bienes eclesiásticos. Como u!­gunos de los que lee 1 c~e periódico pueden <.'t~ee•: que yo tambieu despreciO las leyes de la lgles1a· 1 he ctmtribuido e::;pontánea i malicios ~nne nte a su despojo, espero que U. me h :Jga el fa,ot"dc inser- ll tar la siguiente espllcacion : ~~ Dos de mis pmpiedades cstnban gravadas con recono<:imientos. Como en el decreto de desnmot'­tizacion se exijia a los que reconocieran censos sobre sus finctts que los denunciaran, sciwlan dp para ello un plazo fatal i conminnndo con la pér~ elida de sus fincas a Jos q•Je LlO Jo lticit·J'I.lll; cuan- ~ do e..,e plazo espiraba, advertida por 'ari~~ perso­nas del riesgo que con·ia i de la preHneton que :,_ babia contm los que hubieran matlifcstado simpa­tías por el partido vencido, i estando ~n.ferma i en imposibilidad de sali1· a la calle, comJSIOIH.< n un indh•icluo de mi familia para que cousult~nt el caso con algunos eclesiásticos instruidos i ortodo- , jo s , ordenándole que procediera de acuerdo .con el dictámen que ellos le dieran ; pue.s SI la fuerza de las circunstancias no fuera mot1vo su­ficiente pára escusm· el d.e~uncio, .Yo P!'efe~·ia pm·derlo todo a hacer traicion a mi conciencia. Los eclesiásticos consultados juzgaron que la necesidad me absoh'ia de todo reato; i en virtud de esto mi apoderado dió ayiso de la exist 'néia de los censos al empleado respectivo. ~ Creo, pues, que procuré evitar un acto al que ¡. me veia compelida i que hice lo posible para nse­guml' mi conciencia. Del se.üor Redactor, etc. etc. Dolores Ruiz de Oruego:::.o. de manos muertas " que ha publicado ''La Üpi- IMPRENTA CO.'STIIUCIONAL~POR NICOLAS PO"NTON Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

Compartir este contenido

El Católico - N. 68

Copia el enlace o compártelo en redes sociales

Selecciona las Colecciones en las que vas a añadir el contenido

Para consultar los contenidos añadidos busca la opción Tus colecciones en el menú principal o en Mi perfil.

Mis colecciones

Cargando colecciones

¿Deseas limpiar los términos de la búsqueda avanzada?

Vas a limpiar los términos que has aplicado hasta el momento para poder rehacer tu búsqueda.

Selecciona las Colecciones en las que vas a añadir el contenido

Para consultar los contenidos añadidos busca la opción Tus colecciones en el menú principal o en Mi perfil.

Mis colecciones

Cargando colecciones