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La Reintegración

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“La Reintegración” fue una publicación liberal que circuló durante la Guerra de los Mil Días en Bogotá. De manera irregular, el periódico reprodujo boletines oficiales, partes de guerra e información concerniente con el desarrollo del conflicto. En sus páginas se reprodujeron noticias relacionadas con las acciones militares desarrolladas en Santander, Nariño y Boyacá. En lo que respecta al conflicto, también se da cuenta de la conformación de guerrillas en los llanos y se reproducen noticias de “El Tiempo” de Guayaquil sobre el movimiento de las tropas liberales en las provincias de Tumaco y Barbacoas . Además de lo mencionado, en algunas editoriales se resaltó la ruina en que se encontraba el partido conservador nacionalista y el gobierno nacional en medio del conflicto. Dentro de los documentos oficiales que reprodujo el título encontramos comunicaciones y discursos emitidos por Rafael Uribe Uribe.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa
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La Reintegración

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Imagen de apoyo de  La Reintegración - N. 26

La Reintegración - N. 26

Por: | Fecha: 05/04/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. La ReÍntegracion LOS ClnsTí A NOS A LAS FIfW AS ,( F.I Oj',!!'n Púhlico)i en Rll "únlflro I 04 in~:'rtl\ la t .,,,(,Juoión 1l()(1l'OIll qUtl tAnga el v ,Ior ti!! denunciar al paii! lo:! de!. o ... qne a 0 Il] D úmero 10;) 81:1 puhli- 011 UD d".pBCb() d~I . ,.t;.fíor O~rlo8 TancCl, j!lf(;¡ civil y militar de ItI ,pl&z' de Gil"r­' ,jot" dRudo euenta dtj que ha faBilado al seño' VlfilCO. ' «Lq mi'li,ia 61" muerte» s's el pr,ci.o dilema que implica aqu1l1h reso1uúi61.1 y la a.ngrH '¡p] p.doulo oon ~1I9 bárb!l;tl~ T!!presa 'ias tl" el lluevo 'ellin,'ento qoe el - Go.bltlruo troe fll ea", po cI'O 102 COUl bllteB ar:n~d08 cümo e~peraDZII para el pribioN neT". Si tBIl OBra no fuera pOTa loda fllm~ honrada ia >uerte de la P,'triq; fi una clJbarde u~ign"ci6D t,uviera O~ bida en lo~ cor8zon~~ J¡bfr .. le8'~ 8i en esta bOTa du:orollo el tem(' r de perder 'una vida que vtgets e 'l la ignomiriis' fu. fa mf;yor qu.~ ~I deber de bUevoR hijos para con Ji trl-, call'lillmoll 'y 'nue .. tra miei6n ~ qt1ed',;l'Ía reduolda á ~'eguiT bessndo la luan\) 4'le I'lZot,a y ab. fdtes el rostro de la Repti~Jiua yá e:xánim p, dl;83rgrada y en ag' Dí . Yero' loO! "no el j,renlOs ta l,) q'te, JuzgllrUI B ltj 1'""- 1.10 trub,jador y sl, f, i lo ']')H t I' " ildllll!' \J ­I,,, Y d".pi"(!hd",n~ntp ~" J." r.¡g"", be I'XpluLII y se 11, va a 13 llHl .. 'rtp. L~ n llimA. p~l"hr>l 11 " ,x: .' rrniniq y m:", ri~ Ir< h ... ~~d:¡t ,,1 "(},,tlÍHr'" : «'''''' ,,"~1.18rl(,I<', !>B .¡i -,r A',» B e n ".,á! 1"d O q' e nn (\Idd~ '1'9 C(}bit'IUO que C,)i, 1Il" !JI' tti ,,1 cireo y que ]OM CrJ~tillnOi' e" t(,do UD pOE'h'c. q 'U'l nn!,,! , que ,J, ¡M>e rilll:~tllr lu'4s>¡'á como lo~ glsoindofJ't,,,1' (,1 de.hon0T r.A una vida (!'ltl ha llt'gJwp!fier08 librao contra 111 tirar;ía: BO(l~cht(Ja, la WiS(1Jia, 81 08rllllM, C8a la tri"irol''; vietori!\ o muflrtp Il:( ' río~p, P.~IA lo ('oreDa que os (jtrpce la , Repnblica par!\ h8(\"r()~ inmort ~ l. Botao Vllestra sangre al rQ~1 ro de JOB li;ao-os,; no Jos dl'jeis gr«qr (n Vuestro milrti-río ' entrf'gando "up.¡;tra libertad 810 'hah"r bStbóllDteA un e~tuH­z) digno de Vlle~tf(J nombre y de Yu¡'S~ tr~ heroÍoa bi8Loril~ ! Las momentos ~(ln 801emne~ para III R'publiot, y todo h, UlUle hOLrado er1a Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ,---- =-====~~~-- - - --- ----- --------- en el h.l / ·j ·, r l,. t.>'~() el! r.rGIt da la libart&d y da 1& l''''J'i", 'j'.:«Oil IU1 tlQ¡eemCli 'In Dlulitra ti'''', r!.~ (x~: 1 de los señorea 'Emiio A. E.o b ~ rJ "x-Gol> rondor del T. 11m", ~II ~'l()ret8P'jo d ,· gobiHlJo M~l:i~ mill ~ {JO Nt'i'll; el !ol\ln '!eote ,l" la Pr{)~ vi nf'ia df:'t C~IILr(). Lisanclro F "" rn; Ell 1'1: ,T .... r rero (hl D ,. p'rr"m~ot(\, p ... dro L ,.Ón .!H II I'rc-y; D "niel ViUo, P,oY"edor " .1 Ejú(Jito. y h""t.a emp'e,dori d", I!\~ H. ,· <)' utl8.('innf'.~ v · t~RnrelÍ " ~ ne I(\~ MI.!. "lciIJi " , ,i\lfBnt~ 111 f'lOe8ta G~Jb~rt: a(ljéo o .. , MI ¡¡" r R ~ c(,bijr. Vj~llen (lon IBM mBJe­I,,~ y '.it rj ' 15 Il ' uas coo !I¡¡S riquPzl~ 88PJ· t8 ,j"ri " I( 'H ta.,hres liherale~ de ' To!imu y lO ~.,n",j" r z " ,1 ... I ,, ~ tigre8 y de lo~ InhflR ,, '" (>OI 'Brnin an n .. 8<& "¡ú O:.J a otiJizªr y hfi'r "Ji ,ja" la pre~tJ. hedlil <'o I(lM c" rnpcs <1"" vieron n~lwr!\ 1"" iomort~h·g é in~ 1 1I~\,II I~ d(,~ hijoq deJ T l~illJ". l'omn Ma­on ,, 1 Mnrilln. p _tr {Olli"ío C\lé q ~r, Fr ... n, cliSJO K Alva l ez y Jo"é M¡lrÍa Rojs8 G ni ' o. A 108 sllñoreslCscob .r y N~ira ~!;gÚIJ h .mos vilto ya pu blictldo, l"tI ha r.·(lihid·, b Corta I\on la j ll ve~tig¡¡.:i6n 0 .. 1 o1' g ' n q'\~ t - ng\ll 10M 40fl 000 í'~so~ qo u h ti PUto.lo ",, ' dt.;pó.itu f.!O filgUD{) clo I" s b \ rH:(O~ ,1 .. la ci od)}d, ~n:rH\ qUM rq)/·I'. ~ <'- nl, a los : holl'o~ y Il}m.' v.th,tnil'f)to~, ' pr •. v .. , i - ol"" ,-J" I ' ~ , x ¡J r"pi >)f ! ioo"~ y ~nl ',. é·l.ltr" J ." Cj\J" h", ,.¡ lo v¡~, tiO'lIl I(>~ hh" r,," >. p .. .:!' o L ~ f·.t' M nn n ,y b<¡ ~idn ('{lfJ¡P T·~~ r.'rn ti ... J D · p ~ rt ~ ) tp .. nt~· A! t-h­(' in i,,,.,~di~lc) dEl lo .. >eñ · t e_ E (JI }Hr y N ¡tirx .' n .. J r' b·, on gl'''I),J" ¡-'Uf' !" V-· l). ti 'acto, y H\ no~ R~egur" q'\H Il iobl) Hfi" r !J\ l. g" ·do (hrivH 0'" h .. m " ni(\hrA~ ti, -11 ,·mIJI"" nn" ~l:m,. qtl~ P " ~1l d" 200,00(; lle~()· _ L;'/lonro F ~ rr .. , <,f ' n"eirin .1"s' j<; hQoH mu;,hn tiempo pn III Te,lima p ~ r AU~ malON man, j I~ uon 111 Ih"iunolll I.úhlj~ f" luo premiadu por (,1 fx·Gob~rnll<1"'r E.· oohar C00 1'1 D() mbrRwiPOlO de IateL­d~ nte en la ,Pl'ovincill del ce[ltto ; y et't~ /lujeto \lO oom1nditll 0 0 0 lOA col .. otorPII i d~ Purifiof.lci')ll, E.pil1!ll, Chaparral. Ato, eto, y teoÍtmdo nomo ~ocio principal ",1 8~ñor J a~n de Dio~ Haerg", Prefno V "rg"~, .k.nrique Argá~1 .. CHloo< U~lder6n Rey~~ y demá8 Dli¡,m~ hrol prindp81~~ y g re n \e~ dI' la Ce>m. p' ñil\ q"e Ilrruin q y 8 quu 13 R ~ pf¡hli~ l~!I. E: t'x - Gr;b e ln ~ d, r Ii;'or,bar que ha ~ino resl mppte r'mJC vido ri" ~u ,·mr,¡<41' llbi como N rirlf, M UDn y, Ferro, V i 9 Y OlJO~ que h . n sitie. dtpu~"t(l~ por .. 1 no turAI G b r¡.srl( r ;F'cdorico Tobar, 111' Fe C!"1l que e~t!,,:! ' reOl(l eioll"!< "bP.h :' ~n tí ru' jor" ~n ,·1 8t par,; ph' en~r m;~y(lr,,~ vllnt.~j.~ f'n Al ellll.l1el' qlle nenp' , rl .. ha f'r d nomhrn,(Jit>"t.n dA su@ emple!loo. PD ptr­SOM. ' de la ffimi'ia. S"y de u~ted amigo ~fl, I'p1'Op6~it() de h pr'LfoDdida e!l l' genaoi6o del ,io() t::rritnrio dt'1 C/l" \ ¡Il~t.6 ; p!:TII al FP1j('r r10n Lfl"poldo ('11- jiao, "qllÍeo tflc6 F.1l0ar 8 luz el fIH'.U­lento negocit( , r.e S{' le h < ptrllli' iJo P'l-b'jrllr 111 fl' ,. '. (n ti, f€IJ1!3 de 108 inter('tlI'F. nl\cicnll!fI1. ~o r . ¡taró, sin t'mbarg', q'.i t' n PClT'!!_ "O duo todo el Villol' Úll "tite ditimulado monopolio. - F,I rorse¡o dA M¡lli~tl'o'! 1'~l'\r" t' ''t, fl aA pllrlr-~ C~I<1l'r611 Rey!1~, f'U~fVO M~r" q"fZ y J ·,,6 S '\rItf'~, h \ TIlP\lp.It,Q qlle d mnyor rlfl I(\~ rl.,!it, Il qn" fllJ1Hia n ~('mf." tpue Hl tipmpOR .-oml> 10R p".senl fM /lR.1 de dennlHli .. r lrij ¡¡t~DtadoA oflciQle~ flor .. t.l'" lo~ bi " np~ y ,'onlra el t~liIoro ¡Jt! la N,ción y eu (lnn~fCnPDOi,. b~ll rp~l1plto qne ee ca~tiglJe 000 pena de mUHtp, Ila. vadfl ti el> UO f'''r dlJpnFt< ci6n el e I( ti i1"­cll! p.doll fI 0lim88 mIlI'IH"ro~ (ioone .... re prirlemia de fiebft! amarilla á O ' ) a semfj,,[,te. 1>on Mignpl Antooio Cllrf', el enco­brid(, r, 11\ prÍmfT& etc. y eto. lie Colo01- hi~, "" b\ de ilustrar el ptlr16rlioo da Zlllett, oon nna «CaFtfl ~ bierta, ll jndi~ ~ !!t'l diRHtBoi6n d~ d6mine IIprop6sito dtl un visje soyo á T~n., fll ~l ' cnpl, por IQ meno~ pD c ~ mpo liberal, nsdill h1!. p9~ udo fU I1t€'nciól'. Hssta donoe i''' nOH aICflnze f . b,·jCIIll, );11E1/1 no OH""' lIt rl\ j¡;alO qne Sil "T,t~/,. ~~(lr ~'ivn lT~nq"ii", con holgsco 1" rveoir ~~f'g:'1o rn\ a c:~~abi~I,ca, l''''r<í di y'",.,..) tI,!'1 gIlLt:l'lJadui' '¡ui,"re ~,\,jlar ",l t..'!ll,;lIl1LnJP,,,,"p t'1I el di:-i !u¡..tn gl·,1.llIlp. -L,,, il \\ 'a"it)lIl' ~ I'or ,,1 :-'111' dpl , auca ~"r, ,:p ,-,,,,,hue iIJll'"rt:llJl'i%: I'a haLlare- 111:''' ,l,' l'lla< cllalJdo Jt \. R~~ y COl1záte7. "fUro Al' h;'ynn I'l'Ul lido. o _ El val"r"~o pueblo del Tolima ~i­¡:!' lIe d:\llno dial'iame'hte prul'bas de ~n '\-';.lor l' de su incornpal'ahle energía: los O'pIlH;;ll's lb~íi.c~, y ~,i.\i (:edo dHrotnron ~I 28 del mes pasado a 1301> fuerza~ dic­tatoriales en Ortega, tomándoles gran cantidad de elementos. - Bn Antioquia ha habido nuevos y riilmel'osos pronunciamientos. ~tallco, el de las energía!! crueles é inútiles, tiene órden ,de ,volar el parque en c~so de que., sea atacada la plaza de Cirái-dot. -El valiente Casabianca insiste en m renu'ncra, al frente del enemigo. Loor á los heroes de la Regeneraei6n ~ - Peña So]¡¡.no, _muerto de pánico, per­manece en B(lCaramanga y no acude á . la pelea por no abandonar la capital d~ , Santander, ReITün él., por otras causas según el decir de otros" -Se confirma la llegada de los bil­qnes liberales armác10s en guerra con­duciendo parques cllantiosísimos. -La derrota de Rosas que celebr6 el gobierno lo fue, pa¡'a l~s g?dos y muy grave: dígalo smó el sllenclO del pap~­lucho asalariado, respecto á los terri­bles detalles'. , ,~ < , -Los pronunciamientos últimos en el Gauca han sido simultáneos y nume· rosos. " . J¡ ~ Señor Presidente del Consejo de Mi­llistros : ,¡'Hasta dónde habría lleg,ado el olamoreo de los cbnsen'adores SI en 1876 y 77 el gobierno hubiese 'mall~ad(j para 130cachiva a los I',ed~cto)'es, dll'e~­tare" y cajil:itas de l'enódwoll clan,desti­no,,! lJecididamente u~tede6 ~on IDmu­tables: siempre dignos herederos de Juan S:lmano y Pascual EUl'Ile.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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La Reintegración - N. 26

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Imagen de apoyo de  La Reintegración - N. 24

La Reintegración - N. 24

Por: | Fecha: 20/03/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. La Reintegracion. Bogotá, Marzo 20 d" :l900.-NunRo 24 - - - ,- -------- SEIS ~HLLONES E~ NIQUEL I Desde el 28 de Febrero pasado dic­' tó el Gobierno decrelo legislativo en que dispone pedir al Extranjero seis millones de jJe~05 en niquel en piezas de dOI; y medio. cinco y diez eentavos dfl valol' nomiual. El negocio. a no JlIlLil'lo. sera suculento para los 50- rios que lo [¡an ideado y panl sus agentes intermediarios que lo tendran ya rlllDSt.O un ejecllcion, Veamos có­mi) afectará a la Nacion. Calculando sobre ~a fiase de un cos­jo solo de diez pesos en oru por rada '~¡ell pesos,eH fliqlll~l. incluyendo co­m¡ sione~. telldriamos (l'Ie los seis llllllones Je moneJa eostal'ian seis­('¡ elllns mil pesos en Ol'O, o sea. al ·rambio do 1.200 por :100, que es el 'jllO la Compai1i:.l induslrial eotiza por ahora, ¡¡eis l1lillollell en papol-mone­da, los cuales lendriar.l que emilirse pHra el efeeto de la operar,ioÍl. 'lngre­sar~ n. plles, al acervo de la riqueza ' uacioIJal doee millones Je pesos en moneJa sin valor inlrínseco aprecia­ble , S¡';l~·\ MILLo:'ms 1:::'i-IlILLETES co>,\ INTE I\ ES Tambitlll se han mandado omitir, para entretener la voracidad ilimita­da Je la falange contratisl,l del Na­cionalislllo, seis miHones .do billetes de a quinioIllos posos. ga!HIIHlo un illleres de () ,,01' 100 anual v con\'cr tibi es por billeles de Cl11'50' forzoso, 110 mayores de '\'einti cinco p CS0 3 ; de que se hará ulla emision especial. Nuevo aumento de riqueza nacional con olros doce millones de pesos de moneda sin valor, que llevaran a los bolsillos de los socios de la Industrial gruesas sumas en oro, como recom­pensa para sus ingenios. E~WSIO;\,ES O¡tDINARIAS m¡ GUI<:RIlA Calculamos que nuestro nacional gobierno, desde que empezó la pre­sente guerra, viene emitiendo y de­n'ochando en gastos nominales y efectivos de ésta, de los cuales nada p(\sitivo quedará .para el porvenir. a ruzon de seis millones de moneda de palpel, lo que, eu un periodo de ocho mcses de situacion :ilflormal, acrecerá la riqueza nacional en moneda sin valór intrínseco ninguno. I')n cuaren· ta millones de pesos. sin e,ontar la liquidaciQn final subsiguiente, que montará a millolles que, hoy por hoy, no nos es dable calcular. EMISIO::\ES REGI<:NEHATIV AS Se conocen como emisiones oficill­lps de la Regeneracion, fup.ra Je las clandestinas. cuvo monlo no Re sabrá jamá,s, 60 millo~es en billetes y 10 en niquel, o sean 70'millones, base fun­damenlal de la riqueza nacional, re­presentada en moneda sin valor apre ciable, la cua 1 se compu la, 5egún los daLos precedentes, en 142 millones de pesos, que no es deuda nacional, 8ino : la moneda del porvenir, como (lf',cia el fllndador de la Hcgenera­clon. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. L \ REfNTEGRAClUN VERDADES Hemos creldo siempre que la modera. ción y la serenidad son elementos indi~. pensables para todo triunfo; hemos creí­do tam bién que el encono dp. las pasiones polfticas en nuestras guerras civiles lleva siempre á desaciertOó que han de pagarse muy caros; hemos 5ido enemigos de toda gU'_' ITa y de!)u indispensable cortejo de horrores y miserias, y estamos siempre preparados por nuestro habitual mndo de ser á. la tolerancia y la benevolencia con nuestros enemigos; pero permítasenos que lancemos hoy nuestl'Q grito de indig­nación ante la i'1icua actitud asumida por J. A. luJeta .como redactor del periódico semioficial "El Orden Puhlico." e¡-ee el señor luleta que los odios políticos van Ileyando al corazón de la sociedad esa rabia y ese furor malsano de que el e,tá pos::,ído y olvida que su inmundo papel va llevando también á alguno que Otro hogar consen-ador honrado el contagio de sangre que ~l predica. Conservadores inocentes de los actos del Gobierno y tal vez benevolos, deben sentir que todas las fibras de su alma vibran con furia y piden venganza. Pacíficos campesinos que igno­ran la política rasgan sus vestidos, se sueltan los cabellos, atraen en e~trt')cho abrazo de defensa á sus esposas y sus hi­jas, y piden al cielo castigo y exterminio para esa maldita raza liberal que Zuleta les pinta en un editorial de l. El Orden Pú­blico. " Si el objeto de tales calumnias es llevar la guerra a su más alto g,ado de cruel. dad y de encarnecimiento; si el propósi· to de luleta es saciar un odio de raza en libc:rales y conservadores, ya va consi­guiéndolo' pero no podemos menos de pe dir al Jefe del Gobierno, como asunto de humanidad yen nombre de los más trivia­les deberes de cristianos, que enfrene esa lengua de vlbora que va llevándonos á todos al abismo de la guerra á muerte. Dice Zuleta que "se confirma lo del inicuo atentado con las señoritas de Mira­flores" cuyo nombre él mismo ignora. i.Y quién lo confirma·) Oig-alo usted, seilCr Zul.eta, porque á usted se le ha dicho que es cobarde é infame, pero nosotros va­mos á decirle hoy que es embustero. No hay tal confirmación ni hay tales señori­tas de Miraflores, y de lo contrario diga usted quiénes, y parapétr"se con un nom· bre menos menguado que el ~uyo. D:ce usted, señor luleta, que por "declaracio­nes tomada.s" se sabe el atentado de un alcalde amarrado á la cola de un mul:;!to y despedazado por é~':e. Ha mentido us­ted, seriOr luleta, y ha mentido a sabien­daS, porque esa es una calumnia inventa da por usted. Publique usted esas decla­raciones y póngales nombres que alguien conozca. Dice usted, señor luleta, que el señor Jiménez fue asesinado por los libe­rales en el tren de Girardot, y de nuevo ha mentido usted. El señor Jimene¿ fue siempre liberal, viajaba. con frecuencia en el tren, y al ver ese puñado de bravos' que atacaban y rendían á 30~ si,;arios d~~ la tiranla, ebrio de entusia~mo gritl ': "¡ Vi· va el Partido Liberal! ¡Aba iO la Re~en". ración 1" Aún nO habían acaoaJ,) sus h­LiCls de proferir estas palabras cU3ndd cayó dentro del carro acribilti1do :i baia· zo~ por los cincupnta esbi ríOs de lü dic. tadura que iban con él. E-tJ se lo dice " usted, seiíor Zuleta, un' testigo presencial que jamás ha mentido y se lú dirá tam Lien el señor Rafael Jiménez, conserva dJr muy conocido en Cundinamarca,.y hermano de la víctima. No hay tal "avt~ negra," ni hay tal pariente del héroe de P~raloDso, lo que hay ó lo que pudo haber es un Oribe, un Rornán, un Garriazo, un RobertoRubio, un Jacinto Diaz, tedo,. hum bros que no se parecen á usted; todos en­riquecidos por el trabajo honrado, de po­sición social conocida, y i quienes u<;ted nI) puede perdonar ni su limpio liml ' ni el puesto que O(IUpan en el cariño y reS· • peto de sus conciudadanos. No queremos hacer recriminaciones, perú es impo,ible dejar de recordar aqui que el defensor de la muj~r, del hO;::'ar y dé la familia en el pasquin oficial, es el mismo que apoya con elltu:'¡a~:no el iJ~JJ imulto inferido á las señllritas ~rO!1r{)! px el delito d~ bordar U!1as di\':~.l', ia· Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA REINTEGRA<;JON sulto sufrido por 120,000 habitantes de Bogotá, que tascan el freno mientras llega la hora de la revancha; el mismo que no tiene una palabra de censura para el sa­queo de Purificación, incalificable atro­- pello de tod3.~ las leyes morales; el mis­mo que sabe el atroz fusilamiento de un infeliz recluta en la hacienda de Trujillo, jurisdicción de La Mesa, del cual son tes_ .igos lo,; alcaldes y prefectos de esa Pro­, vincia; el mismo, en fin, que se ríe con risll. de tigre ante el espectáculo del com­bate de San Luis, donde nO hubo prisio-' :neros porque no hubo cuartel. Cuánta vergüenza, cuánta ignominia ,'para tantos de nuestros adversarios que -ian al campo de batalla á morir en de­fensa de sus ideales j hombres que no se rébajan á insultar al enemigo que aún flui,ieran ennoblecer más, el estar acep­tanuo la mancomunidad de responsabili­dale~ con un aprendiz ele caballero, que en vez de exponerse á las balas del ene­mig- o lo ataca desde la altura del monO- ,poli,) de la prensa con el arma de la co­bardía: la calumnia. Zu!c~a, un recién llegado de la última _hora, un advenedIZO sin nombre, sin tr3.­' dición, sin precedentes, ocupado en avi­var la discordia, en encanallar la guerra, que se ha hecho siempre noblemente en nuestra patria; un mendigo de honores que rastrea los salones en busca de una limosna de posición-ese abofeteado por los pisaverdes- ese llama ladrones y asesinos á los Foción Soto, á los Vargas Santos, á los Uribe Uribe, á los Vengoe,­, chea, á los Guillermo Vila, á todo lo que hay en Colombia de más nohle y de m:13 lIonrado. Caiga sobre la cabeza de la infame Mé!gera la sangre de tánta víctima que va á llevar al matadero este envidiosll de toda grandeza. SUELTOS A pesar de "El Terror Liberal," que con tanta g-racia como oportunidad nos reproduce "El Orden Público " la Revo­lución cuenta hoy con TRE1!'{Ü ,Y. DOS )j[L SOLDADOS VOUXTARlOS, voluPtario" óyelo bien, boja de col, y si tuviera las armas necesarias, en 'teinticuatro boras tendría otros tantOs á su servic~o ; , !TIas Pilra ,al,lá vamos con las que le irán'tomando al ene­migo, como lo han ido haciendo nuestros anrigos en el Tolima. ' . Por lo demás, nadie ignora que los pa­tíbulos de la Huerta de Jaime, la des­amOl tización, la trucían, los destierros de mon;¡a~ y de frailes, etc., etc., fueron qbra exclusiva del Gral. Tomás C. de Mosque­ra, conservador; de Rafael Núñez, su Se cretario y fundador del Nacionalismo, y de unos cuantos draconianos que formaron y forman aún en la Plana MayGi" de la Compañía ludustrial, á cuyas artes y ma­nías de corrupción se ban amolelado man­samente la generalidad de los conserva· dores, Publiqu;, "El Orden Público" la lista: de las legiones de Jefes liherales que des­de los campamentos ó privados de su li­bertad lucban por la redención de Co­lombia y parangónelos, en su valor mo­ral especialmente, con los de su Compa­Ilía Industrial, y que diga el clero colom­bIano á quiénes da la preferencia, y quie­nes son los dignos de vivir en el seno de la Iglesia, con honra para ella, -Don Carlos Calderón, por venganza personal con Enrique Pérez LJ., ex' Direc­tor de "El Globo;" trabajó en Con>ejo ele Ministros porque se les impusiera á P{,rez, á Monroy y á. C:lcere~ la pena de reclusión en las bóvedas de Cartagena. Como la influencia de D. Carlos es deci­siva sobr.. sus colegas del Gobierno, el acuerdo fue firmado y la pena trata de llevarse á cabo, pues así se les jqa notifi­cado á las víctimas de los hidalgos rege­neradores, Que tengan fe en el triunfo de nue.tra causa las víctimas de D. Car­los CalderóIQ, que el tiempo llegará para enseñar que las cUl'stiones personales no se an-"glan por mano ajena. De este aten­tado debe tomarse nota, pues no es justo que se inculpe al Director de la Policía de todas Ia.s arbitrariedades que se ejecutan, sin que te' gan, quiene's .las autorizan, el valor de afnmtar la respon~abilidad. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. -A los U2 millones de moneda rrota, y para la Revpl ucion represen sin valor apreciaElle que la Nacion tara trascendental incruento triu!lfo, tilndra lij'ue redimir algún dia y que que lo hará llegar irresistible a Cun­para nosotros solo representa una dinamarca. mal flficubierta cinica expoliacion de la riqueza del pais, hay que agregar -El t2 del presente fue derrotada la que en efectivo, en forma dA ren- en Socha Ulla parte de la Division tas y contribuCIOnes nacionales, ha ql~e comanda Lesmes, y a Belén, en derrochado el Nacionalismo en los Royacá, ha llegado en desbandada lJuince años de su oprobiosa domina- Montoya, .Jefe de Estado Mayor del cion, y la cual apreciada en la módi- ejército. de¡¡ig-nado para reemplazar ca proporcion de t5 millones anuales, a Casabianca, para quien Ileyaba , bao representa un \lalor de 225 millones, jo fuerle custQdia, un gran convoy o sea un total de 367 millones, con de provisiones, que tuvo que dejar los cuales holgadamente ha podido en poder de las guerrillas liberales sostenerse una buena administracion en Garcia Rovira. de los intereses publicos V dotar con -EstorÍlIIIHlo el envio de refuerzo.> un ferrocarril a cada lIllO 'de los nue · y.dé recursos a Casabianca en el ~or· ve Departamentos, que Ilovan vida te, se encuelllran en poder de I~ re­precaria por falta de buenas vías de voJueion las siguientes poblacion es: comunicacion . Y en cambio de lanta La Capilla, Chita, Uvita, Soalá , Sá riqueza c!:)llsumida, que nos ha deja- tiva ~ol'te , Saboya, Sutamerchán y do la .regeneracion? llumillaciones Leiya. En esta ultima pohlllcion el en el exterior. y ruina, deshonra y Prefecto cay() prisionero. degradacion en el interior. -El gTande Ejército que la Revo- -En Rt¡r¡nira, Campo Elias (;lltie-lucíon ha organizado y equipado en nez se apoderó de t!O COIlVOj' del el Norte de Santander, ha emprendí enemigo qne wnducia dincro y'y.ró­de un movimiento de avance sobre la vi~iones. Son esas "Iae g'uaridas do Provincia de Soto, y una parle de 61 los revoltosos. »para atendo!" a las ~ se encuentra convenientemente esca- cuales pille Lesme5 alas para equipar lanado cntre Arboledas y Matanza, sus tropas. via Cachirí, y d resto cubre las fuer- -'lal que le p'ese al g'o~iet'lIú y no tes posiciones en el valle de Cúcuta, obstantc lo qlll' en contrat'lQ propalan contra las cuales no ha osado estre· los naciollalistas, la Revolucion cnen liarse la muchedumbre armada del · ta en el Sllr del Cauca cvn un cjérci · nacionalismo en Pamplona y sus cer- to nllmeroso v bien armado a ordenes cauias. Este movimiento hara que de Go¡¡zúlez narro, que solo I'spt'ra­Pefia Solano desocupe a 13ucaramall- ha (ll oc.upacioll de Tumaco para ex- . ga y pase a ocupar la Me53. de los pedicionn.r soLre el Valle, doncle lo ' ~antos, del otro lado del Sube, como esperan las ,( montoneras» de CasLi COII bllena prevision se lo ha ordella- 110, las clw]ns: por lo yisto. pOSMIl la do Casabianca. Este, a su vez, tendrá virtud del I'euix:: renaeer de sus pro­que emprender marcha de retrogra· pias ci'ni7":IS Se nos aseg'urll qll\;l pard , dllcion hacia Garcia Uovira.o hacia e~le efeclu, ra la cañonera Boyacu la mi¡
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La Reintegración - N. 24

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La Reintegración - N. 20

Por: | Fecha: 11/03/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. .., La eintegracion. Bogotá, Marzo 11 de i900.-NuMERO 20 ,CONTINUAN! Hetiramos nuestro editorial para .·dar cabida á la sig'uiente relacion que nos hace pérsona respetable y bien : informada: " Enril]ue Argáez, Intendente ge­neral, contrata 'con Jenaro N., repre- . 'Sentante d~l mismo Argaez, la provi­sion Je vestuario por valor de 420,000 pesos. A Jenaro N. le ofrece Argilez unos miles porque se preste a la far­sa. Argaez percibe el lIfEDIO MILLO" de . la Tesoreria, e'lt varias partidas; no ,da U:'í CK'lTAVO a .Tellaro N., ni entreg'a ¡i la Intendencia una sola pieza de vestuario! En el negocito lo acom­paña. el Mini s tro Marceliano Vargas." ,. Enrique Argaez, Intendente, so­ ·'.lici ta en compra en un almaoen una bicicleta; le piden 600 pesos por ella; ',ofrece pagarla con un contratico por provision de efectos para el ejr.rcito; el du.eño Jel almacén rechaza la in, fame y ratera pl'OpU esta; Argaez bus , ca un antiguo pohcial extorsionador e infame qw~ haga el negocito; le da a g'anar 2,400 pesos, haciendo un contrato por 3,000 pesus; el corchete le lleva la bicicleta al Intendente, y no suministra ni una cobija.» "N. N. tiene urgencia de que le pa­guen una orden por unos centenares de pasos; en la Pag'aduria no hay fon dos, según le dicen; N. N. busca un pariente o pa::-ienta del pagador para que se interese por él; el pariente o parienta exige al acreedor una hici-clota para su hijo en cambio del ser­vicio; el aoreedor lleva la bicicleta­la orden es pag'ada Íncontinenti.» , (l,El Ministro Marceliano Vargas, o Vandalo, como lo llaman algunos de sus correligionarios, ordena al Te­sorero pague ~ D. Pepe Sierra CIEN ?1m, PESOS por lIltereses de renta no­minal. El Tes?rero objeta la orden por estar pendIentes pagos preferen­tes. El Vándalo insiste y amenaza. El Tesorero obedece al fin por no perder su fecundo empleo; hace que le pongan un tren expreso el domlll­go 4; se va sigilQsamente á Tena á ponel' la queja; y vuelve el lunes temprano ......... » y EOIl estos explotadores los que .mandan al Panoptico á hombres hon­rados de la talla do Santiagl'l Bamper. Son estos cmtCOS los que se atreven <1 hablal: de go~iern~)usticiero. y de temer~l'la rebehon. SI Pentapohs fue dest.rUld~ por el fuego del cielo, el NaCIOnalIsmo será carbonizado por el fuego del cielo y por,el de la tierra. Todo hombre honrado tiene que abo­minar este regimen hochornoso yes­te porsonal de sa!teadol'l-Js. COMBATE DE PRADO Republica de Colombia.-Departa­mento del Tolima.-Alcaldia civil y militar.-Dolores, Febrero 27 de 1900. 51'. Gral. Teodoro Pedroza -S. M. Por posta lleg'ado a ésta, a las 5 p. , , Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA R~INTEGrRACION m. del campamento de la Primera Divi. sió~ del Ejército Revolucionario del To· lima, que acampa en el sitio de Pan de Azúcar, comunican el parte detallado del combate que tuvo lugar ayer entre esta Division y el Ejército del Gobierno, cuya copia á la letra dice así: " Sr. Gral. Aristóbulo lbáñez. Tengo el honor de daros parte antici­pado del combate librado hoy contra las fuerzas del Gobierno, comandadas Jlor el Coronel Francisco Leiva 13enítez. Al avi­so cierto de que el enemigo entraba á Prado, nuestras fuerzas ocuparon po~icio­nes en Pan de Azúcar. El Capitán San­tiago Bernate, Comandante ue! Escua­drón Uribe Uribe, compuesto de 30 hom. bres, avanzó hacia la poblacion para ob­sen ar al enemigo y provocarlo hasta traerlo á nuestras posiciones. A la 1 p. m. el enemigo rompió los fue­gos, pero el ímpetu de ~ernate y sus compañeros no les permitió cumphr lo ordenado y se lanza ron á la población: allí tomaron prisioneros á dos Oíiciales, y los fuegos ce5aron. Apenas había llegado al pueblo una pequeña avanzada. A las 3 y media p. m. entró en tres columnas por las afueras de la población el grueso del enemigo, y Bernato salio del pueblo, pero en vez de seguir dando fuego_en retirada organizó sus valientc's campaneros y em­peñó combate. En esta situacion, el Gral. en Jefe dispuso que una compañia del Caquetá fuera en apoyo de Bernate. Ya el Gral. Pulido con el batallón Santander habia avanzado por el camino de abajo. Empeñado el combate, se di¡;pu~o aban­donar las posiciones de Pan de Azúcar, y los batallones Ruiz y Caquetá avanzaron á pasitrote y :i toque de carga sobre el enemigo; el ímpetu de la carga, en la cual, sin exageración, nadie (pería que­darse atrás, fue tal, que no valieron al enel'l1igo sus posiciones ventajosas en una cerca de piedra, ni en la "zanja negra," de donde salie;on chorreando agua. Se cogieron más de cien prisioneros ,!ue C'ntregaron sus armas. La más completa derrota se det.::rminú con la heroica Célr· ga, y ya el enemigo no pensó en resis­tir ni en el poblado ni aun en el puente, adonde llegaron nuestros valientes á las 5 p. m. El empuje fue tan brusc? y el pasitrote tan rápido, que el enemigo no pudo hacer mayores .daños en, ~uestras fuerzas salvo la henda gravlslma del muy va'liente Oomandante del Uribe Uri­be, Santiago Bernate, y uno de sus com­pañeros, Celestino Barrero., . Hasta esta hora [7 p. m.] se Dan cogl' do 167 prisioneros con sus armas Y 9 car­gas de parque. Del enemigo se han re­coO" ido 10 heridos y dos muertos. Se re­cogieron muchas armas -más de:: 200 Grass- y se siguen encontrando. El ene­migo fue perseg~ido h.asta !a casa de Va lerío Vásquez, na PunficaciOn, donde los últimof ó mejor los primeros en la derTo ta hicieron fuerte resistencia, que tue vdncida y cegido el ~ficial Lo~ez, quien organizó su ultimo atnnchf'ramlcnto. Las fuerzas vencidas fueron los batallones Briceño de 261 plazas, quedando prisio­neros su segundo jefe y su Sargento M.a­yor Antonio Cristancho ; su Jefe Fr~ncls­ca Leiva huyó en tiempo, no se sabe de él; Y batallón Vencedores, compuesto de 200 hombres, comandado por el Mayor PieschacóD, y como primero el Co~oll~l Herrera. Menciono de lo~ presos pnncI­pales al Teniente Coronel J?sé L"Jis Pies chacón, Sargento Mayor Cns~anch?, :,a­pitanes Eduardo Dussan y EuseblO 10- rres Tenientes jacinto Guzman, Evaristo Orti~; José Vidal Burgos, Campo Elias Ruiz, Felipe Arteaga, Alférez abandera­do Manuel Pulgarln, Capitanps leopokl0 Saavedra y Luciano Lersundi, y Tenien. te Sixto Diaz, y 150 d€ tropa. Heridos: Alférez Gerardo Roguez, Enrique Sar­miento y Campo Ellas Ruiz. Soy amigo y compatriota, JaSE jOAQUlN CAICEDO R." Es copla.-EI Prefecto del Ejército, , TOMAS V}:L,\ C. MARCHA DE C1WIZ ! La Compañía' Industrial está de pláce­mes por haber llegado al desiderátum en .( . Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA. REINTEGRACION materia de robo y de especulacion. H~ce varios días que circulan unas pequenas tiras de papel verde, fabricadas en la lito· grafía de VilIaveces, en las que se lee: "La República de Colombia pagará al portador á la vista [sic] diez centavos. Bogotá, Enero de 1900. S. F. Koppel, Julio D. Mallarino, Juan de la C. Santa­maría:" Quien coja un papelito de éstos dirá que es un billete del célebre Banc? Nacional, pero no tiene nada más :le ~I· llete que e-l nombre de tal, y la paciencia del pueblo colombiano que lo tolera; p? dríamos decir con el inmortal Pérez: veis este papelucho que tengo en las mano~, pareCt1 un billete, verdad? Pues no es bi­llete. Para ser legalmente billete se neceo sita que tenO"a serie, fecha y estar nume­rauo, pues ~o se comprende cómo, quien firma un documento á plazo, DO le ponga feelJa. iCómo se averiguaría, llegado el caso, la cantidad de pesos emitidos por medio del nodsimo sistema económico.de los Sres. Maliarino, Koppel, Santamaría y el a provechado del Villaveces? D. Ju­lito contestaría en inglés, como hombre muy versado en el idioma de Byron: "Bus~ines is Bussines," y los otros, á ejem­pío de antiguos GRUESOS regenerador.es, no se podl':an explicM el fenómeno SinO diciendo que el dinero les "aparecía en los bolsillos." Las ideas de D. Julito Ma­] Jarino, hijo de un notable colombiano, son b.ien conocidas tratándose de estos asuntos: comulga los diez y nueves para tener grato á San Jos!>, mas cuando se trata de REVJS¡ÓN del Banco Nacional, sos tiene con S. S." .H. D. Carlitos Calderón R. (ó sin la R.) que el Banco es una en­tidad "autónoma," y que si el intruso de Roble~ quiere atravesar el dintel de sus olicinas será recibido en la punta de las bayonetas de la guardia pretoriana. Denunciamos ante el país este nuevo delito autorizado por Julio Mallarino, Sa­lomón F. Koppe! y Juan de la C. Santa­maría. En cualquier país sería esto razón sufi cie'lle para derrocar á un gobierno. Ma­ñana saldrá el Zuleta defendiendo en su pa~'qu ín á los malos hijos de Colombia. RICARDO SANCHEZ [Luis Trigueros.] Este otro vampiro del nacionalismo sa­le en "El Orden Público" del 1.0 de Marzo con la noticia de que el Ejército liberal está agonizando de hambre, con 7,000 hombres mal armados, y que el de nuestro paternal Gobierno, todos mofletu­dos y gorditos, en húmero de 15,000, has­ta hoy no han podido agarrar al picarón de Uribe Uribe, pero "en pocos meses, se me antoja aventurado" (sic) decir qu~ lo tendremos en nuestras gaaa\'ras. Imbéciles y cobardes 1 ¿ Por ql,lé si te­néis tan buen ejército baláis.<>l.e miedo, ca mo lo hicisteis en La Laja y Gramalote '1 ASESINATOS Se nOs comunica, por carta de Chiquin quirá, que en esta población han sido ase sinad03 en la prisionl dos importantes libe rales y heridos otros varios caballeros, los cuales eran presos políticos en este lugar. Tomaremos informes, y ay! de los res­pOllEables. del mas infame de los crímenes! BENJAMIN HERRERA, A LOS JEFES, OFICIALES Y SOLDADOS DEL EJERCITO LIBERAL DEL NORTE Aunque a~obiado por ímprobos traba­jos, aprovecho estos momentos de trans~­torio descanso, para dirigirme á vosotros, leales compañeros de armas. Cuando la causa d'e la Revolución ca­recía del concurso de gran parte del Par­tido; cuando de los más bravos corazones se apoderaba el desaliento, despues de terribles desastres, vosotros no dudasteis un momento en continuar rodeándome, resueltos á .seguirme á la victoria ó al sa­crificio. Hoy, que con vuestro esfuerzo y vuestra sangre habéis alcal'zado uno de los triunfos más completos que registra la Historia, y que, Con admirable abnega­ción, 0$ proponéis continuar hasta el ter­mino feliz de la campaña, merecéiS el bien de la Patria, la gratitud eterna del Libe­ralismo, y las alabanzas de la :posteridad.. J efes, Oficiales y ROldados del Ejército del Norte! En estos días de expansiones ge nerosas, cuando los Ej ' rcitos unidos se han dado un abrazo en la patria delJinmortal Da Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA REINTEGRACION · niel llernandez, y no se p;ensa sino en la lucha por la idea liberal y en la victoria que borrará 14 años de opro­bios, viene a llenar el colmo a nues­tro anhelo la presencia del General Gabriel Vargas Sal}tos. Vosotros sa­béis lo que este nombre significa ante la opinión nacional: él es una reli­' quia de los antiguos luchadores; un anciano envidiable por su :lustera vir-tud, por su probado patriotismo. Ya vosotros le habéis presentado las :11'­mas. Ahora os participo que cum­pliendo con mi deber le he ofrecido mi espada para defenderlo en los com bates, ó para morir con él. . Jefes, Oficiales y soldados del Ejer cito del Norte!-Mi mision como Ge neral en Jefe esta cumplida: la Direc cion de la guerra me encomendó la formacion de un Ejercito en el Norte de Santander, y, de mi c0nsagracion, vosotros sois el mejor, d mas elo­cuente tes timonio. He tenido er honor de conduciros a la victoria. Nada mas me restaba, sino delegar este mando, como desde ahora lo delegó, en uno de los mas dignos Generales de Co lombia. Ninguna recomeHdacion especial tengo que haceros. Conocedores de vuestro deber como ciudadanos arma dos en defensa de vuestros derechos, bien sé yo que seguiréis con el mis­mo tesen la obra emprendida de la reivindicacion de las libertades pa­trias; que os seguiréis disting'uiendo por vuestra abnegacion, por vuestro heroismo, por vuestra disciplina; y que, cuando las dianas liberales se hagan oir en el Capitolio nacional, vuestras banderas seran enseñas de orden, de libertad y de justicia. Para entonces, mi muvor () tisfac· cion estará fincada en hñberos acom puñado a alcanzar la victoria. SUELTOS El Director de « El Orden Público» gree que ha obtenido brillante triunfo haciendo circular por medio de su PERIODI':::O la noticia de que el Gral. Vélez ha entrado con armas y baga­jes al nacionalismo, y con ese fin saca a lucir un telegrama de un emplelldi· 110 de Santo Domingo (Antioquia) . Esto, además de ser falso, es calum­nioso, porque' le arrebata á este Jefe conservador lo mas Sil g-rado para él y para su partido: su dignidad. Al na­cionalismo no se puede entrar sino como se entra a un lupanar: cubrién­dose el rostro. Ademas, hemos visto dos cartas del Gral. V élez de 7 y 13 de Febrero respectivamente, y en am has dice: "No apoyare al na~ionalis­mo, -suceda lo que suceda; y SI Marro · qui)) llegare á encargarse del G~bier no, y conserva á Palacio, tampoco lo apoyare» etc. etc. . Zuleta ofrece publicar la carta del gFal. Jaime COl'doba; ojalá que·cum · pla lo ofrecido, porque así el publico conoceria la manera de pensar de ¡. otro conservador honrado. Srta. D. 11> S .... de" la Policia~­creta: Conque Ud. anda en pasos pa- • ra ponerse en la pista de nuestra ·im­prenta? Nosotros lo estamos ya en la de ciertas cosillas .... . ya vera Ud. Se nos informa que Juan Casis y Ga,brip,l Ponton tambien están reco­meDdados para lo mismo por el In consciente. Es decir, que de dos hom bre5 trabajadores han hecho dos mi­serables espiéis. Ojalá esto no sea ver d&d, para honra de los obreros tipo· gráficos. Malditas sean la obra y la memoria de Carlos Holguin , fundador (le tan infame y degradante instiLucion.
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La Reintegración - N. 20

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La Reintegración - N. 14

Por: | Fecha: 14/02/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. La Reintegracion. Febrero i4 de i900.-NuMK.RO H ALA ~ACION , . Por aclamación del partido liberal dl'! Colombia y de los ejércitos qUA ,~p. hanlevantaJo contra el sistema pOIJ­tieo que nos rige y nos agobia, a~Jl­(~ u~ sin merecimient.os, de. modo In­declinable me hallo lflvesLldo del ca­rAcLer Je Jefe Je una causa V Direc­tor d:1 ulla .gueITa a las cua1es dan illspirar,ion e iml~lllso los ma? le:-¡~n­lados iJeales de ¡berLad y de JUSLICHl. En lit!! fuerzas de mi mando tienen r.epreseuLllcion muy conspicualos~as ~allos y re~púlabres elemenlos ~oeJa­les, a quienes mu~ve~t unos nll~mos seutinllenLos palnoLIeos y UllImall ¡"l1t!l mismas repul:lir,auas ideas. 1'0 ' ¡Jo ello, mas que mi si !:ceriJad y hO~I­l" adoz nunca do!\movtJdfll;, da a mis pl\lahras una importancia y una se­J'iedllu solomnes, que. eH cuanLo tell­ga cllrllCLer de promesas. no Lan to son el sllgradocompromiso de un partido. (·omo la volunLad V la decision de los gelluinos republicanos de Colombia. La reyolucion cuenta hoy con ole­me! lLo~ suficienLes para confiar fun tllldmnenLe e!l ,,1 triunfo. Domina ti .\orle de la lteplÍ~1]ica; se IC\'tlllLa im¡.waeuLe en todos lo.,; ambiLos del pais y con paso 11nno .v se¡;u ro a va:l ;::a. hora PUl' hora, terrellO que amplia ~u campo tic aeciun y cll!:;¡L!lcha su hase d¡~ .opemciolles. La ocupacion de llUCcll"all1Clllga y del 1'\ orlo de Sall­l. lllllel', {~lJlI¡¡ se q.11l era y en cuyo 1 per~ona rivali ZIl el valor con la g-ttnerosldad, la abneg-aoioll con l..l firmeza, y todo ello al servicio ~e u.n~ causa que abo gll por sanos prlDClplOS de derccho público y como org'ano de una revo­lllcion justa y poderosa, da derecho a la simpatía y consideracion de los pueblos ci viJizados y hasla al re~peto de ' los mismos regímenes dictlltc­riales. Los ejercitos liberales luchan pOI' establecer en esto país efectiva y de" finitivamente la República, y trabajan porq:ue preponderen Jos filas sagra­dos In toreses de la patria. El triunfo de sus arma,i no significa el cobro, ujo por ojo y diente por diente, de. las mlltilaciones que en la carne y el e~pjrilll del gaUanlo purtido liberal Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA. ~EIN'l.·EGKAllvl" h.y.n cometiilo repre€éDLalltes má. 6 menos 8uténtiool!l de quien os, con buena 6 milla f t', h'lD mirado 8 tal d , f "osor de la Iibertarl y el derfcho como su eterno adversario. L!ls represalias DO entran iD~ mot.ivada e inútilmente en la lInea de conducta de nllel!trs gloriosa CaUB!!, la cual mlincomunl 80S ideales y .U8 int.;.· relles con 10M de la civilizaci6n. Sin cóle­rIl oon verdsdero doler, l!O~tl! n e mOI lu­ch'a CODtrs 108 farzados del ejéroito ene.­migo, cont"ra 108 ilulos 6 engafiados, oontra el pueblo oon.cdpto, de ouy¡S quejalJ lion 10M libsulel f"rvorol08 adali­del! y cuy .• ;gnOfBnoia, cuando no el cau. dor, \lev" A tioatener la coyunds que lo oprimf', que lo humilla y qlle lo uplot~. Por ello mismo lo" ejércitos liberales d6~ ben de fegocijaftJe, con pstri6tioo antu .. Miasmo, de v ~ r "oampaf bsjo sus pwdo­nel} sin inquirir su proc~deDci8,!lo ou~n .. tOB 'p reooupe la m. jora en la ll11erte de la patriy, por el estímulo que 8e d.,je a to.da Ilctivid/;ld con la gU8Dtra efio~ z y el 1U~ vivlable lupeto de todos 108 derflchos. Por parte del Iibersliemo no ha Aido aliento en eet,s lueba el prop01lito d ~ r l!. pOO(-f inst ituciones y de inoidir en prac­tiOBe que no fe oonforman C(\·D el de!!~o 6 el IIsentimiento n ~ Qional. L'l revoluoi6n 8~pil''', eso ~i, oon todo ardor y oon la más firllle E' fttHI' Z ~ , a reu(.var en nuestra! pláctic," lidministrstiVlslas ya ol'fidadaí! tradicioDo,!~ d tl UUft seV' r8" h onrlld~a. Pn'. pende po rqu~ la Coostituci6n. polhio? IIQ conforme a la estruo! ora S00161. Q"11€re rohustecer, por cUll-ntos mediolllea dau\l', la uDidBd nscic.nal que ti f.ne on nO!'i!tro8 sot.ecedentes ;,iijt6ri(lo~ , "0 nUel1tro 8oelo y en naestro e~piritu raíces indestrootiN b!e o, paro trtl boj'\ porque lIe deje a Olida f-otiJ l1d politica la autonomía y 108 me~ dIOS UI'OIlPl/.rios pflf8 impolsar 8U prl'grt' - 1<0 y procurar su propio bieD. Lucha p~r ~ qlltl ssao 10R individuoe y !o~ pueblos los q 'le di ~ pong,.n de @u FuerLa y t n; gf.D 11\ f. .. cultad do d ers!.! la¡¡ 8l\ti¡; fac ('k u e~ que eatén en su querer. Respllt.a '1 g.r'llti&~, por lo miijmo. ül ilE\ntimionw religiOlo, naturalmento c at6lioo, del pueblo colom­biano, y otorga a los sacerdot.es toda la oOllBideraoión que ee meresen, en OU'oto no toroeo ISU augusta mi~i6n de pI! 80 bl¡)ullfte y propag!!uda de h g~l'rrll. nIAra 108 plS08 indillpenHablca, 000 firme. n ilJquebrsntsblt'. para rebabilitar nues­tro lIiitlllM monetario, de ml)do qua el ahorro tenga estímulo, 108 tun •• oOif\De. g.rautf. '1 feoundided el or'tlitil. Pro· ou,,, re.tableo~r la re~pons.bilidld de 101 wsndatariOl!l y la limitaoi6u de IIUtll fQ9~ OiOnl'l8 a I~ limpie milión de r_guardar el dereoho, de medo que la legurided le .. eftlotiva y la arbi'rariedad pro.ori'. '1 oll.ligad~. Clama por .. tableoer en ma~ taria de oootribuoionell 0.0." allstera .co­nomía y la aplioaoión m'. ttl\lllll, qlle ello, CQn la 88g11ridi\d inviolabll1 .tl' l.,. oÍlada­danos tU JOR límites que no hagan que. brlin1.sr le ja~Lioh., dará 11 tl8te d" •• ngra~ do país fU ~ I!"a paf. collvalf.cer t ,Iro.~ pern. Qlli"re aoabar cen el ~lti()llo y puioid .. diHLillgo, entre COmptlLrlO'a .. , de v~nc.(jor(l8 '/ venoido., haciendo del po. der Públic,o 110 el gllje Ó la prebenda d. II n09 l".oof¡l ~grllci"llo" lino la rxpre~i6D fiel do la vúluutad tia iOI Plloblo. par. aplioulo en el sentido qlle d..,termiue ,,1 a.recho. Par" qui8nea tieneD e.tu IIspirawoDee. que son 101 qae dominaD en flj6rci\Oa (>n los clllllila cada .oldlldo e. uu inda.­triu) uo pll\riota y un hombre indepeD. dieo~e y de idea" la guerra h •• ido an medio p6no~o y forzado de rehabllit.ar el deucho y reoonqoi:ltar la lib8r~.d: á ell. DO fe oourri6, y ellO por modo inltin­tivo y o:l~i deBe~perado, sino cUllndo in~ ­tilmwte se I\.gotaron loa reouran. pacifi­COR par" CO\l8f'gllir .quello. fiue-. El !.riunfo lo snhela el Iiberali8mo oomo m~ dio dI! implan~llr el bien, DO CIODJO titule.. p P.l' infligir fU eus OprelOl'1I9 10lmiamol! Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. .at611 de que ha .ido tan paoiente v{cti .. mi. En la lacha oúamB, O!IB causa gene .. l'08a baloa (ln la guerra la sanoi6o del derecho y por eso r8lltriDge cuanto ea dlble el U80 de la vi.olenc·.. Por ello mismo BUI procedsrel deben lIer y hao lido más noble~ y más 1981es que 101 del .De~igo que co ~ b !lo te. Difel'encia muy maroada ha debido estableoer el pueblo 880taodereano al j nzgar, eotrO! otros 011. lO'. por E'jemplo, de la conduota de nue~­troa adVOIrsario8 000 un meritorio Jibeul, honra y orgullo de este pueblo IIUHtlW, UOIl la que hemol observado con nu ,, ~tro8 l.rieioDtlrol! dI! glterra. L~ inja~~ioia el 1I0ll. • .,mi\lB imptlrecedllrs d. robelión, y Jlor .,110 pt(,(lura· al liberalismo, ~on IIU condU(lt~, qua le di"tlln 91 oorazón y la hiaLIOrip, haoer prÁoücAd SU8 generOIlBS é i,¡timas di~pL08ici(JDe~. n,"puó'ioanoll de OcllombiaJ LOR ej6r. oito. liber ~ IC811 ~on vue8tro d .,t"nsor: ell"s mir"n 8610 oomo enemigos ¡\ quieneM nni­quilan 1011 dereoholl del oiudadano, amen­gUIndo lI~f la dignidlld de lti patria. Am'g ... d el pend60 revoiuoion'lrio que el parll todo ciudadano promeli3 de vida, parJl naditl ,.mcn.¡;u de opre"i6u. Comp~fi('ro8 da armll8! VOlotros re .. prPlleDtái, 111 r ,· z6n de lar d. 101 bom brea libre,. V ueltl'a o .. ola pardofa, como que .' enoarna ide'lll rf'deotorll'. 1I:n el abDsga .. do Il'rvicio de 611ft mayor brillsn\ez dái. á vue~trolt propios mérit..a ssí sean en uno 101 del heroismo, en otros 108 del talento, eu todol 108 de ~ltf:Z ' de prop6. ~it.o. y : la hidalguía de ooodactll. Si ., triunfais, (omo es lIegaro y como e8ju8to, b.b;él' tenido en Colombia el bonor de ~er lo!! restauradores de 18 R"púb'ioa, y por ella de la liberLed. Si oontra toda le .. gfLima e~peral1z~ h emos de Inoumbir, con ..,1 slIcrifi. 'io de nueetras vidas, oomo bom .. hres digno!!, borrarémo8 Du ~~tros nom .. bre~ de los regi@tros de eaclllvoB en 00- l-ombift, y nuestro p.jemplo, expresión de uoa gloriosa idea, como ella .. r' lieJDttre inmortal. Eoero, 1900. GABRIEL VARGA! SANTOS. Tip. J'r[eroanttl de BlIOSramang8. IMPORTANTES oomnnic'lcione8, tomadas del (B()lelío Revolucionuio» de BllonamaDg •. Marnoaibo, Enero 2. de ltOQ. Sr. Gral. Banj~m{n Herren.-Donde esté. Moy e~timlldo amigo: Otra vell mil gracias por 8U gratíeima CII¡'LI.I del 21 del pa8~do que mil fue eo­tregada por E. Aroch. el t~bado "'imo. y .1 con teEtarla ~ea lo primero felioibr á u. ted oon todo mi corazón por el brL l1~ntf~imo triunlo qne el ej6roito del Nor. te dtl Santander en primer término: mano dado por unted, obt.uvo en ¡a. inolvida~ blC!l@ jornadllll dal 15 y 16 del pa8ado, sin. q1o\f! esto empetie en manara Alguna 108 m6rito8 de 108 Gralos. Uribe Uribe y Durñn y la aoci6n do diatinguido valor de aquel Je{~. Ahora, mi lIontido p6same por . 1,8 he­rida de ust ,d, que por 8uerte DO ha sido de muoha gravedad, por la del Gral. B. Hernández y por 181 muertell y hbridae de tanto patriota nliente 7 abnegado. EMpero qUQ u8ted .e baya repuesto s61Í­dament. e en P8mplona y queJos ouidadol de Maria Josafa baJan contribuido bil­tante á hn f,!Iiz resultado. Supongo que lo. gobierniat .. DO •• ha­yao parado oi en BUOar6l1lán¡a '1 que tomarÁn el «Sabe) como ~rinohera para detener á nltedel. La nueva ,.éria olm· pafia. será del Soco.rro 'de Soa" para arriba. Elltoy le guro de qua no Yolv.~n á cometer tocural 00"10 III de BQoar.­manga. S .. g6u me asegura Eduardo J tlmb16n el Sr. de Castro, el Grlll, Varga. B. del»s Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ._ -----_._------ ------ - ---- - -- .. _.. _-" - -- --------------- -.- estar ya incorporado a ustedes d 9sde el 25 del pasado. Me prometo que pueda irme pronto como de veras lo delleo, porque ya la cucstiDn esta claramenlo sentada v la indiferencia nos mataría. . A los Grales. Le(11 y Durim lIO les escriho hoy por falta de tiempo. Si recibiere ésta en Pamplona, un abrazo á Maria Josefa, y ambos reci­ban recuerdos de Rosa y el afeclo de su amigo afoctbimo. . I"irmado, FOCTO:'i SOTO. JIaracaibó, Euel'o 2 de 1900. Sr. Gral. Vargas Santos-Donde este. Muy esl.imado General y amigo: Ratón tenia yo en decirme 1ue si usted hubiera tomad,) parte en a ac­tual contiendadc Colombia, mc lo ha­bria participado inmediatamente y asi me lo demuest.ra su gratisima de 5 de 10<; proximos vasado's que no llegó a mis manos sillo antes de a\'or V por la c.ual veo, en cuanto a lo pri mero, que su salnd se conserva bien J retorno con la mayor sinceridad su saludo y retribuyo junto con RORa sus huenos deseos de que sea complota nuestra salud v añado que el año que ha comenzado "sea mas p1'opicio par,l nuestra suerte que los quince ¡¡ilte riores. El que me trujo la carta de usted lile informa clú que usted debia estar lInra el 2;) en Cltinacota después de llaoo1' obtenido UlI triunfo sobre fner­zas. del Gobierno que se propusiel'oll detenerlo en «El Uso." L/\ rc.pito (J1le IIluy pronto estaré CIl Cú('lILI. No tengo tiempo para mas yasi con mil memorias de Rosa quedo Sil afcctisimo compaI1ero y amigo, Firmado, FocJON SOTll. Estados Unidos de Colombia-Ejér­cito RestaUlador-Jefatura Civil y Militar del Norte de Sant9nder­Pamplona, Enero 7 de t 900. Sr. Directol' supremo de III Guerra, Gral. Gabriel Vargas S.-Donde S~ halle. :Se ha rocibido en este Despacho la atenta nota de usted de.oÍ de Jos co l'l'ientes. Hoy hemos cogido U l:llJ'gas d" parque mas, .que se encontl'aban eu­tenadas en un campo ctircauo. Un individuo llegado de «Arituqui­lit » dice que v ino de haqut!uno de unos eomisionados del Grul Rosas para llRted, y que dlChó g'ollern] debia lraber lIe!!,'udo a Anlllell del 20 al 2~ del pasado con un Luen ¡HU'que. Aseg'ul'Unme que en "Cruz eolom­d, l» y lit Salina fuerón rccha:tadaslaa fuet'zas !Id Gobierno; no se slILe por qué Jefes liborales, No omitid- esfuerzo ni S'asto ulgu­HO para mantenol' unu activa comuni­cación con lli'tted. espel'ando que us­ted hará lo mismo conmigo paru }Jo tler cstat' al corriente de todo, y poder cumplir opot'tunamellte sus {"rdeutls. EII espera de sus gTatus Ordelle,.;, tJueJo de usted utoulo Illlligo y co p;llti,lal'io. Firmado,
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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La Reintegración - N. 14

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La Reintegración - N. 12

Por: | Fecha: 01/02/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ,, La Reintegraclon. Febrero 10 de 1900.-NuMEllO 12 Como ambrientos lebreles que sien­ten resonar el látigo del capataz que va a arrojarlos del lugar e n que sa­cian su illconmensurablp. apetito, los nacionalistas, olfateando que van a salir a vi va fuerz,l de la Tesoreria, se estan apode~ando de los últimos dAspojos del pueb lo colombiano y al efecto han lanzado fuera del Ministe­rio del Tesoro a todos los hombres que pudieran servirles de obstáculo en los postres del vérgonzoso festin regenerador. El señor' Gral. R.afael Ortiz, hom· bre probo en asuntos de manejo, que se resistió a cubrir las ordenes de pago provenientes de contratos hijos del latrocinio y ele! peculado, abando­no la Cartera del Tesoro por instiga­cinn dolos especuladores, y empuño .la tizona corno .fefe militar de AII tio­quia. Exteuña cORdu cta la del Gene· .ral Ortiz: marcha a defender con las armas lo que reprueba como funcio nario público; sosLiene en el campo de batalla lo que no se atreve a au­Lorizar con Sil firma do hombre hon­rado. El seilor Vargas Lezaca ha ren un­ciado a los gajes y gollerías de la Jefatura civil y militar Je Cundina­marca. por hacerse cargo del manejo de los bienc~ nacionales. Las máqui­nas litograficus fttllCionanín con ma­yor premura y los Grillldes conlrali~- las-salteadoros del Tesoro público­recibiraR ahora si, el fruto de sus nefastos crímenes. y Il no temblará la turba aduladora y baja de negociantes en vestuarios al solo anuncio de la entrada triun­fal del valeroso Uribe Uribe; cuan­tos desvergonzadamente especulan con las salinas pueden dormir tran. quilos, recibiran sus salarios antes del triunfo de la revolucion; aquellos que pretenden enajenar las minas de Muzo v el Istmo de Panamá son­rien tranquilos: Sil hazaña será re­compensada en tiempo oportuno. m!f-t,'Sorp,ro general y cuantos se resistan a la volu ntad del Ministro iran saliendo de sus respectivos des. linoe;: no se necesitan empleados, es forzoso rodearse de cómplices. El partido liberal cuya Eandera revoluci onaria es la honradez, será inflexible l;on los ladrones y especu­ladores del Erario, llamen se como se llamen. Las únicas represalías que ~6 efectuaran el dia de la viclo­ria serán contra aquellos que se han enriyuecido con ,los candaleo del pueblo y i ay! de los que hayan pre­tend- iJo ocultar su verguenza cu­hriéndóse con el honroso nombre de liberales; para esos será mas tre­mendo el castigo, mas terrible la pú-blica vindicla ! . ~uesLra graIl ransa no acepta cri. mi nales eH sus filas: cuantos contraten Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA REINTEGRI,CION co!'! 6\ lIctllld Gobierno eon nacionali.tllll pOI' f,lt P ofJedimi .. ntos y flomo teJes 108 jnzgi\ra el plutído liberal. Y cuenta que !\l dlloir Jo tnterior podemos ".egur:.:r que niogúu mi"wbro oODDotado de OlH'8trll g!oriosl1 oomunid!ld .e hll d~grlldado ha!­tll el puuto de eepeoular oon 108 dl'Tl'OM OhS.t,QI·OIl del Tetoro; nou rbferimo. úni. cunflnte a tre8 o oulitl'O .~qllerOBOI\ r"l'­tile .. qne tittoen "Ima de IlIotyos y que 110 dioen liber8.I(,s para ver de ulVl1r el proo duol" 1eo PDI Iatrocinio_, e.oll talEl', Jo rep\l.JID " cnntllmin~d08 da I"s plácti­Oll. naoioDalista., reoibirán ilevera IH~ci6t\ dol nUllvo Gobí!lruo y Her~u 8ntr!'gad08 a la lUU t!lrriblo de lal unoiouol 'O(J¡,,~ leil. Ya brilla pllrll Colombi, nUfva .nrl'r~; ya truilnu. en el Norttl 01 c:.ñon rl'~tBI1l'!!­dor que pundrá fin a Aa haoanal rf'g"Df'­radora. M"fi¡Ull yendr' el J ~fe liber81 con la espada tir ttl In la Bingre de JOI de, f'msores d., . peouladc; m~ñl\n!l ~e l"van­tará ElI velo que cubre In máll otult!lf, hUI má8 uquerousll3gal u~l actual opro. bioso r'gimen ! BATALLA.. DE PERALONSO Cuando el Gral. Uribe Uribe Jleg6 a CúoUti, de~DJlé8 dtl BU cé:ebre rtltirada de G,truia R~vír!l, Jo primero de que le C'cupó fue ell bll.oar una bUl\UIl púeici6n ~jlitsr aoede reii6tir si (,nemigo, oon que no podi,¡ h&oene MI unn pl8z~ ,!hiero t~ y cuí iudefHndiblf'. De~pué • .je prac .. tioBr en personn UDa iu~pecci6n qlJe dur6 (jO!! dhp, e.cC'gi6 el oerro de TIII~j~flI, ~I N,E. de la ciud~d y como 11 cuatro le .. gUi:.B de distaDoi., I\poy~do por el fhDCO izquierdo en el Táchira y 111 frOlltefll ';OTl VeDezullla y por el derecho en ..! fdrrocarril, Q.ledaba reducida la lin,'. de i' para provee)­nGb de ICB elementol de guerr~ que nOd h"cisn hita y en cuy,., blJ~o~ VlDleron " rcoonoentrllrce leN fu¡,rll>8 de e~t" region. Para aument,r l~p Vt'Utlj!l1l nllotllf"lplI se h posicíon, el Gral. Ulil..e m~nd6 construir fortifio.cioDj·' de ollmpfiÍl en 101 punto. ar1ecuad oM a fiu ne ce 8U p~h y como lihpT&1 por b.,h"r r .. ch •. z .. do COII iDOigU8('jÓIl f,.t,,.. t"nt~(iv)t d .. lltropel 'o de III Bvb.rAnh tn pH1vt'C!b,) 0" unir. c~u¡ja «ü.ioI.l8 t&l:to sIl, ud. (,,'m o aqul'lDdl! 1& fr(:nt.era. Dos rOZOD!;! deoi.ivl\M ohJig'rn', ~in emhI\Tgf', ti. t>v.ou~r It, po.ie;6u dI' T .... ,,­jura: primel'll, 1/'> e, ldQ 0'13 M .rft,,%íbo f'lI poder de los cOD"~rv"d(TE'. vpn' z ,lilDO" -nu.~tr()a ell!'mig' FI-- In etl2'1 dPj,bll .iu objeto nu",~tra pelmeuer:cia t-D \lb P"€lLO donde Dsd,. leui~mo~ que ~¡:!II"rdl\r, y Fe· goud&, 81 (\ft~i tot,d ogotnruiento d .. ¡lI!1 vitualllls p8ll\ el .o~tellÍmiento del Ejér. olto, :s"i (J¡,mo .. 1 df'urrol!o de r,é 'IUl't! c('Doicio!l~1 higié!Jic~~ en Due~tl'o~ cam­pamento~. UÜ3 eUJb"8tirl~ Btld:z sobrpol intf>rior, (>("n prob .. bilidadell de uoirnol! ¡¡,! Gral. V !lfg¡;~ S~nL, B y cog.! de. pr. v¡.nida " Pamplo1l8, ftle el Vau q ne ~e f()rm6, dH 111 «A.reno~.» qUI! conduce Oe 1,. fat"cióll de eSo" lJ' m bre, @obre el fIn e'''' ji, ~I p~' r~je de «El Vmou{'Ít, ,» HI el Z,,·i ; ps~6 e8te rio b pie por UD v '\lo hvsu .. do lllJlI 1>11- telaci6n y sigui6 remOU(iUUO por 1. oril ,a íZql1i~Tdli h~~ta la "":olc,Ct:dl;" de allí Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA. REINTEGRACION t rti6 h 'f t ~ (Ch8n r- » y .e encl1minó ~ ,Lr,_ Sd ~ Z !l r. Commz&b!l a baju dd '" bltur i ll cuando Ilt v ~ l'gll .. rdjllo, como )l I ~ t de trop l\S d61 GrDI. al'rrtlTll, tro' IJ ' z6 de milni'S B h "(J'I. con fn.¡ zas pn emi. ~ ~ q ll A t repahiln "n direoci6n con.nri ... .A c,)metirls8 con brio por la8 Tlne~tr R s fue r ,)o Il rri3 d,,~ c!lmino Bbsjo y Gb ' ig ~ d 8 . !l pllaar el rio Peralomo, bflu8nte del Zllli ~ , despoé3 de una fnerte r.si,tencia pn 111 c a~a y corralE'j&B de piedra que q nedBn junto a l pUbDte de la « L ft j 1.» Estbblecidoll DOiotrO! ~1Ii, en 1118 colinas J_Jf6ximas y en 1:11 oril !a del rio,.e proveyó además 1\1 peligro de ler fi4nqueL\008 h ~ci ~ :- rrioa por IOR puente. de (Sanlit ­g r, » y eol «Caimito,» 6 h'Cill ~b.jo por la ~(Aru ~ , i!I • .» P,¡rfi bllo ~e aituarún fuerzaM ~ r¡ e i 91to de «El Cacho,».l mando del G.- ~ I. t)" er Mar l lO ! :!:, y otru H( ,bre Is « A'IlUi lo." al m.udo tiel Gen{\r .. 1 .T alio tMrnez y el Coronel Guerr, ro, El centro ('o n~ titl}y6, lIio f'mbllrgo, do,oe el prioci' 1;'0, ,,1 PUl¡to de IDayor atención, El Pe. nlo I.t') ~!I al f un n0 correntoso é inva. d f'h b :~ por toda . u mngeo dereoha que ( n porler d "l f'olfllligo va 1\\ o~mino real d ll CÚ :utll l', S ·, I ~ z , r. A todo lo hrgo de e, ,, ogmino, en un .. >xten,i60 de 300 m .. ,t. r n ~ , h ,." ia llrribll y bacia ,.bajo del pu ~ n\e, 4:X"tf\ un cerco de t>pias en que el 9nemigo hizo Ít.oomel ablf'1j sgojer(,s p.rs colocllr su. tirsdoref. El po"nte ea U 8 S h " m,c~ cimbrante de 24 metros de ¡urgo oOIl!troí-io de al ambre lobr>i mll­c b~o t-8 de o~liu" nlo. At. ás y 1'0 el frente, oohOlaH moutañotlss; en !JI flaooo den­oho, formaodo a.ugulo IIgodo con Is Unea d .., l a ~ t ff pia-, onll 10m"" por ouyo fi lo 6 vértice corrre ona cerc~ de piedra. Así, pue" llO ohatautA lo rápido de 1", mar­ch! l qo~ hizo el Ejército libenl, el ene' ~¡ g() le ganó de mano porqoe 1.. di8t~ü­C11. que t.IJui ,.. que recorrer era máa oorta y pClr mfjor osmiol'. Nos tooaba forzsr el pJRO, r"troeeder o bllftcar otro o!!omillO plUS cruz .r 1'1 río m', arribs. Al enemi­go le o,yó en snerte una poeioi6n soñada, pr(jvi ~ t!! -de trioeh¡ r !§s ya. cODstr[j\.d~s y 0 0 0 un rio al frente, ell decir, para no~­otros el pn b 'ems más difíoil de resolver, y que d et!tle el Gráuico haita el Alm" "oLrfl S -b'Rtopnl, hll dado lugu , vioto­r¡' ~ in8ign~8 y oostOS!!! 6 a derrotaR vic­Ipnt! IF. En V ~ DO~" IUf,hó cont.r!! el ohst-iíC ll10 t(1(10 t!l nÍ!l ] 5, eo VI\DO IIq eontin n6 lit hl" 'g r. h . ~t llo el mAdio (lis dd 16. D , ~ de t<'fiIpnn o, 1' 0 é , lp, e l f'of'migo en nÚmp. ro o .. 1 50n, cruzó el rio por 1" «Am p.r i~ I s .l) 1 , 0tlié n dN~ (je nUI'~ tra h, odR, at!!« CAndo nlltlBtrB izqllierd!l y hs lliendo I' x e ~ t-iv . m.!otl! p eligro.. n[le~t'a .ituBción. M /l lUento~ hub,) en que 811 IIporler6 de un I'i ,, ~eho que domiulI psrfdct!lInente 18. « Azuli ta» y 1"8 ('orrslej~B oa la. ({'LRj . ,» y :. 110 h. b",r . ido prollt"meote oe8all'ja.dOIl, FU PTI'IIPl'oi l> en t 1l1 puoto y BUI disparos, h b ,¡ n d"termíll ~, do nn ~,ltra derrota. P. 'I" I>Trib ~ 1'1 Gnl. Soler en ~eri fl mt:nte ('" r g .. do por 800 hon, brl'1I al monGO del Gnl. C', III'1I,i"lwe. E ' probl t:ms contillull_ b 'l f-n ijU reroiocióo. Todo e.fuelzo . e es. trell hk , cootra t'1 obstáculo invencible del lío y de k" atriochersmhuto!i ~ n em igo~; Fólo UD f'C:O lig ~ ba Ics dn8 campo~, e! a"go' t '1 d",fil"ú¡;ro del PO€otl', y ouantas t. uht!vSft se hioif'ron por P?\urio cOF ta~ rl n la vida' qníeoet' lo imentAron. Efeo­tivam'lnte o!Jtr á. de 108 machones Oé la btllJda cl ~fPchli eijtab&n "po ~ ta ¡J o8 tirtldl)~ rl's f n l' mig (. ~; de I -~ t,lipia fr 0nter?\ zllm­b IloO:'1 nn continuo hUrllc'n rl e h , las :!. lo lfrgo oel "I ' go~LO pssadizo; y por bñ. di­duu , fUE'goa oblíCIl O ~ lo ba('Í'ID mi s p e! i ~ gro.u. Ll persptctiva del d e@enlsCI; lJO poc f., ~ er más trist,; el lIg o t~mipnto do 10>1 p~rtrp.-cbo, y el dt!ulieoto del Ejérci­to illlponían on plazo perentorio ds bo" ru, »1 fin de la j f. rn ' d1, Df' tod ?8 hl/l p o ~ieio [) €8 JlfgAba hl E,tado M~ y{)r una sola df'm6uds: r, fuor ZOB y c6psu lap, y ni uoa ni otra C08!> hh bfa de donde !!o~ miUl, trsr los. El núrnHo de herido8 y muertos era (Jonsider~b ' e desde el 15 Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ------------------------_._--- temprano el Gral. llenito IIernálJ~ ez nosotros como testig05 presencia!('s quedaha fuera {le combate por un {Jilo de la escena pudimos escuchar.) lazo en una pierna; el Curonel Men' «General: Yengo del «Picacho» de~­doza caia sin vida; el Coronel Carlos de donde acabo de observar al eneml­Ilernándes era retirado moribundo; 0-0 qne nos carg'a por la «Amarilla;» el 1.7 por la mañana era retirado el ~s en número considerable, y aunque eral. llerrera con el muslo destroza' los nuestros esperan en posiciones do por un proyectil, y numerosos je- ventajosas, acabarán por ceder forzo-. fes, oficia~es y soldados quedaban ten. samente. Del Cach-o avisan que al didos en el campo o atestaban en es' Gral. Soler lo atacan fuerzas supe· pectáculo horri~le ~as salas y corre. riores. Del «Cerro)) anüncian que dos . dores de la Azubta. fodo esto causa. batallones su1wron dei Zulia al alto ba impresion de profundo desalienlo de Alejandro, cayeron a Chane y vie­que se veía pintado en lodos los sem. nen por.la misma via que nosotros blantlls. llabia ya mas de 200 hombres trajimos. Estamos, pues, en inminen':" hacia la cordillera en calidad de de. le peligro de ser envueltos .. Nos que· rrotados; por las quebradas y rastro. da la salida hacia Gramalote, per.o jos habia gran numero de soldados como nos restan cápsulas para lO mi· ocultos_ El espectáculc en la Azulita nutos mas de comoate, v como la SQ· era desconsolador; una multitud de lidez de nuestra tropa nO' es tanta que mujeres y de ~ombres armados s.e permi tae.sperar una retira~aen orden, mantflnian delante de hogeras, r,Olltl lo que se nos' aguarda, SI nos .moyo· nuamente atizadas, devorando sin mos, es una. derrota pura y sl.mple, descanso,. cuan~o e.ncontr~ban a la por territorio poblado de enemIgos y mano. SI con lllf1rnlos es,uerzos .'le sobre todo sin saber a donde vamos lograba formar i 00 hombres para lle- . ni que hemos de seguir haciend? E::;- . varios al combate no se lle§)' ah a eon tamos toca.ndo con la mano la dlsolu- 20; de allí se ~etiraban los d~mas PO-cion y el fm de la .gllerra~ :A-hor:l s·i cv a poco fallgados,. !lamb~lenL~s O cuando lo tenga a b18n, me lIbrare de c?n prelexto ~f.l comlslOn.es Imag~na. toda culpa en el descalabro d~ Buca~ nas. E~ lo clOrto que SI se hublera ramanga, en esla vez lIO. qUIero JI] pretendido. pl'olnng~r el comhate el puedo rehuir la ~espoJJgabl]¡dad; y lo 17 no hafma amaneCld.o un solo.hon:· --que es In reputacI(')1l ~c general den:o­bre en s.u pn es tú. ~IaCla e! medIO cIJa tado y (le mal auguno, no estoy dlS' el enemIgo cor~l.Ul1lco a C~cula.la de,' puestos él soporlar]¡l. En consecuen­rrota del ej erello re\'oluClo~ano. ~:.l cia le aJluncio que v0y a pas~ll' el Gral. Uribe q~e en ambos dws ]¡~b¡a puenle a la cabeza .de los que qlllerm~ andado rccornendo el campo a p18 y acompañarme. ASI a lo menos, SI a caballo, coloc~ndo guerrillas de li- siempre ha de acabar esto mal.. la re­' radores v estudiando el terreno, para ,"olucíon caerá con hono,r v nadHlten­(~ l descoilOcido,y que acabó por darse drá derecho a mofarse delPartido Li· cllenta ~lel Gallcjon s!n salida en que beral por la repelicii'"lll ?cl P.apayo,de ni ejércllo estaba metIdo, fue a !:ll1na Chum[¡ilmuJ', O oe CapJlaI~e.lo. Le re­allecllo u,,] Gral. l1elT~ra y le I11Jo po- pito sin jactancia, antes bIClI co~ se' ('1) rmis o OlC'llOS lo sl¡;llleule: ! 1]Lle runidad: voy a pasar dlJUente.» COIl. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. vino en torIo e,;le razonamiento el Gl'al. Herrerntrpgó fU CJJftel'11 p' p, h~cerla 11, gu .. mlloo ~ de ~u t'U,i·,r., ~I morir, y ectvirt;éndoie que alií IUt\'1I ~ e~­tamentl' . El geoe-rnl Uribe ~e dirigió I'ntlJnc~~ " 111 t.ropa pn e~tol'l tCfmipCls «L,) que v,~ mos l'< h~c p r (1M lo ~igUI (' lIt,,; 106 q'h'"'' o~noelDo" a p .~ !'r dl·1 ot ro li'ldo m " t"r.-. mos B quiell~!l están deln\!I d e ¡c'. IU tlch,·~ ne8 y en llegando a 11\ tspi>\ d el pU'tlite metaremo~ nues¡,ros rtlVOIVerlj por "'tll" ¡',e Sb(!j . ét.S y tronerfl,!! y dl~P"f 'iJéru o~. De~pej fl do I>~i el pUllnte d., l prinGI[Jd Jle1igro todo el ruuudo I!a lanZ'll ~llá y Ele di@tnbuye jJlrrll I>nibll y per ll .. bsj " In ' ~ tielJdo MUB fu.i ' e g flor doua" lo~ lIflU tJ !1 J 08 €nemigo~. T"llll1d!\ de ebe Olodv 1", trincher.. tll triUi,f , " " tlUtl"tro''» E~t¡,,¡ prt: vi~i" ne8 ~e cUlllp ; i ~ l()n mst.,m"Llu ,.n meo te. El Gral. UliolJ ~ c, l t ó a. pie con tll yá C r, pitau Zu iet,11 el b 3rrfillC o q ue brruu . el UI.\IJ. jóu yu., c v ndooH ~l jlUo;¡ ,t ... , y ti todo Io bUa p tl eumt'llz6 ,. crvzark; por lió IlJ iLlld irir,ll QUI>IJr!o detfllt. ( Iu loe Vl »ellv" lIe tl y puede!> r ~CtbitllOIl UIH, (h~tJ ... , g " , de lb (' ud c () rrt:'~p (> [J(j i·' r{Jn cj"g b .. ,¡ , z '" 1;'1, Grll l· Vlibe, UUO qUI:l lo; OfUZÓ el b" .;liv ,Joi ~ II U ' ) ~obl' o; ~l corazón y el otro que lo hirió l. V,,) lU' 1; tI' en .,1 cl" etudo izq Ul." .. do. Sus dt' m~~ lJ",op~ ñe t 08B ·.: j eeg,md a. descarga. t.(J~ flVO,Vel'., f,Á:] ~ (·i " iJ"r,' 1I por las t>I,OJí> )I" ,' pag ' " d " ;0 .. f.H·g nQ ~n la p .• ne f "o r,kl iz " el " pU t! IJLli J " f.te>nct'8 (JI ,·j6rOlto el m"nzó a IJ "~ ' ,! lo a torret,tf'. Vna U¡¡rgfi f " rio". b " rlguié., 6m pi,,:l udo 1-"" " ... 11 " Il\~ ml. mos I,·· i'~r. ~ ,h o~ dd t:u&u,ig< ' . Kn e l " eLV u' m ~ I'Z¡¡r¡."1 a ('.I>I·'r en p,)" .. r lJu >: Hr u, plj~lonelv~ y I'¡"I qtt.·. De la IIJII IQ trr.,l:\v¡;rNd Hlluth(Jra~ d"·,, ,. ,· .• cf " miellLn. ... l '.lllO u u t el . gv H w l' ~ u f ,r .. ¡;I)¡,f e r tH:" stro~ ·lSo l d .HlOt:< y GU · l,(11) 1, ,, 1l,,[:6 d ingu ' o ae iLJS IciaD Utl (.lId!!A 10m>} ' 1l0n h~ tr- pi , ~, dondo el CB'llir.o queda Po) di'scobie tn, el p~tO h f\ci ~ adt!­lante l'Ie hizo impo.ib,e y 1& nocbe viDo a poner término al comh.tE>. Tomt!ro~o el Gral. Ul'ibe de ql1ll en 'a )'l ocba ~ l euemig" nf,'f¡¡¡'¡Me la )0(01' c, ti 2 o a,ooo h(Jmbre~, ctit!pnlo d,r en la m ~ drng'ld!l 110 b5dlto y envio un ,"'ou.,., oron y UD bita l10u h'cilL arrib~ por d oamino de S ' DlÍSgl'. Al IIm~nt!tltlr dal 17 mo~t6 ti o"b·,I:o y ¡.igui;> lI"brel~1> o·,s . ~ de 11.\ «!.m8ril"." con lo~ 50 Ijol,tado~ qUtl do;bl'1o ,hr el ¡j6l'1 !to, \JdfU l~ h,lIo o"sg ¡~rJ.lHcH~. S\lfJO qn~ la' t~"lhl~ q,itl P '.I r 8 ;'1 bllbhn cruz -do el rr", lo h"bhu oruz ;<:0 a priw" lIochr, s~rvJ) cotupl1ñiae ~uelt,,~ qlltl .... habíau quedado d~pera9~ "J?-lre 11\ fIl(¡lt N tl!ñ'l. Supo aotor,ces que el erlt;míg" f~' pt"rarÍIIllU 108 f,)rmí laÍJle. qeafi:a':¡" ll'. ,l ·' IILOII Uompadr,·." y siglli0 h:cir. r.lllÍ, pefO bll:ló libre el P/U( '; ­n\ J¿o~ á LTu"'qlle de que nfl "-.J l. ~ (JO'J<'~ ciera por d unif.1rn,e. Q,ince h ,mbrpl! deBlin6 ,,' O : ,,!. V .. be á gtlardn l'908 d~~poj '11 Y ¡¡.(, ~, n l,a pn­si onerOIíl ~'C ~~l z.d(>s en IR. ven llOl l' ueión y f'f< n 1011 35 I estIHl t\>~, pue8to~ »1 mando del G-d. Pedro Rodrfgulz no VJcil6 el: " t ~ c · r t;! gru~.o lÍe l .m " mig " OUUI, .• ,j·, en el paso dAI Z t lÍJ< por 1:'1 UiÍm ' O". E ~(i produj' , el má~ ".p lIItOA' ) d,'w(,ouciel'L", Seft",nLI1I cfljU de p",rtjue f,pru u tir.d~B 1>' )'io de donde má~ t4rde fualoo "AI'I I I>~; ln tropll qll~ ~ úo no lu h.tJí . ,'ft,Z "io, .,' ,ii,pel'fÓ eu puta y en p . tta se edil) ,,1 ~gUf, I.b()gátldo~tl gr.on u6 uer,; u',rg'¡¡ qUtl ,·.e 111 I'ib"r¡; '~er..'( h . e~t , b ,O) 1. ,;0· b r tl l.:.~ mU!l.!b fu ,fon !ib " n , l..n.~, I".; p~r'·, oon to,lo, d l"II(JID lg ') ~ ... d , Ipl~g . ) ~uur., 1. S fuerL¡¡~ UC·;illl:~ ad UriaJ:>.ur , y O·jn tUo! '- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. urgo 1 D08 cau~6 gr ' Vetl d oñOtl y lJOb im­pidIó p ~ ""r .,1 ZU.I •. E/Grol. UrilJodi"¡.)U~Oe Tl lOnoelUlI con JO á m i­rar á Cúouta d te~ ": e el Cefl'u de la Co­lumu ~ j tín t /l tQbDlB ooupo la pl a z ~. de- 8~tnp a f8d8 p"t .U!! ulgu", sus po." ... d uretl del oh ItDLerlúr y siguió en ,"u p """"e\l­uión IIJC!llh~b l tl, 'je t P "r ll"u l'!lt •• "tnO,. , 110 .,b. tllute ·' tlLhr [enclillo f'lJ f h. f .Llg , Y la pér<1i 111 d., tlOl 'gr ... L , ~ uuclui r.!! lA' qUII·h1". r'q í UU·lJ tirlll"U la· V:· " L~ .c •• ilenúaudll ÚI' b J:¡,.L .. ,¡ ~ . L \W f"JeJla~ 8eell olg llj que.l llu rtlct uci· d:.s /;1 Ibt::n' , ~ \:e 1/. 3: pr.nej y e~\ ' , ,!u· ­hr'U~ lI da pl't f""'IhIlUtlJlel'U" U w" r ,,i, y "u .u diecip liuI\. L , ~ d' ~t' uclun .., .. tmLI \l .u ~ j 1'",1 ti"lI~D tr.'Z.d <1" h .• b,:r1!U ll ucl!o)(¡­\ l ur~b i e8, pU " ~ t r .n .. u ' t::flo r etl '~I <1 ,~," ijtfl· . ::31t'lI [l.I"n,~ y e l '1\.111111" . L I ~.IH¡ U .. t rlu f ·l <1" 11> Ht.'t Ú "IU ·.I,,~ uubre ÍI LUú(, tl l:!U t!ll~ ;l[J; \J.i , " pll \:'gu' ~, y u .. altl "uda que a'í u!Ji ¡j u~, m.>rchaú~" flor etll~ p9~ de viotoria h:'8ta llegar fll Capit{¡li ~l . Oúcnts, Diciembre 20 de 1899. IMPARCIAL. (Rt iUlPl'tll!3 t;n la Tlpcg n. fia Meroan. til .) PROOLAMA ColonJ bi -J(I' ~ 1 E ,¡ los " bort'M de e~te aiglo nue' tro ~ p~ tirtlOl üfrendaron I!US vi­(}.~ ¡J()r ob tt ner 11 0 1< palri,\ Iibrt; Ir r", O O~ ... orllH y f",r.~ ou ~ strot! bljos. Pllro b"y ,d (I~u io ~,. ¡lo C(1lJLUrilJ, estH 8uel o quen~ d o, llll(J qui , L ~ 'tI "un t ~ nt l1 l!augrA y t - n ­L¡; g U fj" kgOll iz \ conde11aaú y pubru lJ¡:j ,. el yugo d,. UOIó pllrtirla de ~ xpjota. don- ~ d"l T ,,""fO y t,e tir:!lDü~ d .. l 'pu :,­b:, ,! F ., 1H Z , \l~ pUtl~, que lo~ verd~dero f\ P " ll'\(.~ ~. ) v .. ngan uno m!lDO~ p.)d~rOlia 8 .. d ,u'''u VId ., pUf la1varJ9. Fuerz ~ ,,~ qlJtl 10 8 gr.ILOIll :ibertnd(. ret! de 1810, LCllg i n PCo~ n., t'NI ~lJCi6D 1"0 1900, L 'h mnl flrm>l n,,;; cümpdieroEl de Bow llvH, titlrJ'vtaton tÍ los :ltgu .. rridoll ttrcio~ ellp ~ Íl,¡j f' S, v"no¡,don<1I de Nap ¡'~u, ))or­qu u t,"lI i an . i tl -u p . rte '/;1 rlll6n y 1.. j 18- tlt'ia. N f) 8(>tro~, q Ile 1111 tSD~mOM ~obr8- d~ ij y que peleamúil como librtos, "rIolla .. ftl UlOI 1 ~ ~ it'gioue:! f· )rmid$ble~ de ¡Dtd­J¡() t1R rilclutsH Iirftllnoadús con oriminal vi ul"nci¡¡ de s us hogues y de IU8 f.imi, I ,~" . Un pY.ñ~do de re~uEl i tus volunth\riol! v .lle ¡¡¡uoho m llll que una muohedumbrtl d i- . iervos b ~ rnhr \) ad08l S jltli.doi! l V o~otros '~(,i8 108 buenoll hij '6 d ~ la ' Repúblioa, y ella fiucllo ~u !,,~r vl'l!ir y 110 vidll en vueMtro v~lo" (L­o. mocido y en vueatro amor por la libilr­t .. ü y pOI' j I> g lori .• ~ Aosio80S de Tllr . dllutl ra ln,j¡,p~I)deUCla J.l!llphan 108 eo­thl!; m " .. CO!0Illbiauo8, y d" VOBotr()S, t6 .11 de vo~otruH la eaperlolJ. V limos, pues, '" lloLqui.tadi.\ sio lhornr "bfLlerz')I!, j llw g .udo ,,1 \OÚ '.J por el tudo y rtJ~u l, ltoB á úar por 4:1l!i un~ vid~, que ~io p ,tl'i:! Y Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. _._---- -------_ ._- - - _._ ------- .1 sin honor dehe ser odio:o.a para lOllo 'hombre digno! Liberales! jUl'érnos que la aurOl'a del siglo xx:, alumbrara a Colombia, \" la República lihro o nnestros hUO:;08 ~m los campos de hatalla para Ie{'rion y ejemplo do los futuros libertadores! CABtlit::L \' AIIG .\S SA~'I'OS. i\OTAS Enero 29 tle 0\ 900' POt' hov poderno:; com llllicar a nuesLro,; ¡tmitD,· os las :osu ig-uiollles 1I0!.;- cia~: Ell'jórcito OJ'ganizado en ~,ilhraIl­J: agr,illdc, a ordelJes de A " ~llllo Ho. Ras, Cornelio .Jiménez, Salnsliano Chaparro, et_c, etc., obra sobl'~~ Soga­moso v se muevo cOlltra la rl'lagllar
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La Reintegración - N. 11

Por: | Fecha: 27/01/1901

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. La Reintegracion. Enero 27 de i900.-NuMERO H LOS HEROES DE PERALONSO , La victoria ha coronado los esfuer. zos herQicos del ejército liberal. N uestros valientes soldados han hecho morder el polvo a mas de siete mil hombres de las fuerzas dictato­riales. El diez y seis de diciembre de mil ochocientos noventa y nueve será 11 na fecha inmortal en los anales del libel'aligmo militante. Ya era tiempo de ouela fortuna recompensara nues. tros' sacrificios y nuestra abnegacion. Los ensob~rbecidos. defensores de la mas <1onlltmos, Hoy el primer triunfo ha puesto en nueatro poder todo un De­partamento, y maú;¡na nOIl derrcmare .. mos con emIJlljq de alud SObrEl,los dernáp. N 08 diapoDÍIlruos á seguir combatiendo el 17 ouando h~lIamoil abandonad u las formid"bles posiciones del enemigo. En los horribles de~fil8derol! de Los Oompa. dres pudieron e'¡perllrnoi! y no lo hicis­ron. NOII di~putaron el p&~O del Zulia, paro 8 la primer¡>-- Ilrremetida n08 lo abandonaron, Dtepués por más apri~a que hemos aDd~do, llt.llC$ m¡:s hemos Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. LA. R~r N fEGR\CJON vuelto á verlos ni da lej 18 en las revueJh aaa del C:1mino. D3juon Iln nnel\tro po ; der la riea regi6n da Cú JUta; ni inten .. oi6n tuvieron de resistirno. en las enom­oij3, he del ú:lnfierno," «L'l Don Juana» y «Tompa," Pamplons, asiento de su predileoción en nue2tr~ 8 manol! la dej!lo rOD; y ni siquiera retrocedieron d ,!¿ote de la inmensa derrota moral de evaou llf á BuolOumaegn, oapital de su g llbieTDo y centro de!lu viotoria. NOTAS Enero 18 de 1900. N pulmonia oon que lo (lmeOIlZan 1M que tÍtloe n interes . en ais' Inrlo p:tm explots rJo. Los j ~ feR, ofioÍllles y Hold,ldo8 9ue vllm a oampaña lIaben qU6 allí pudf)[J encontrar la iuvalidéz ó la m Uül'ta y sin c;mbnrgo nllá van pero ese «,ij tlU debcl' y no tienlln dereoho a exigir­R'+' A !JI 8"orifi cio el que no tiene valor p;,rll d¡¡,rll!~ el ejemplo. P.-opullieroTl vniod fi l:mtrop08liberales el tls¡.,. blllciru iento " !lll ooat!!, sin grava' IUO!l para 0 1 Gobieruo, de varillS ambn. h'(¡" ¡"S, panA a~i8t l' noia de heridOIil yen' fl r lllú8 00 los difd reutes campamento., sin (1i~tjn" i6o de bandoll, inBtítuci6~ orie' tiaDa, adoptada p OI' todllo las Naoiones OU¡t~B on lo!! tiempos modernos y de la oual no !:le habían aoordado p~ra nada los 113.ojauati6tClB y fuo reohazada la propuee· t~. r.négo nos sulieron oon un deoreto ll~t"ble oio!ldo l!1s mismas ambu\aDcias Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. T A REI~TEGRA IO~ pero con sus respectivos Generales, Coroneles, Sargentos Mayores, etc. etc .. que costarán caro a la Nación, pero SOLO VAN PARA LOS HERIDOS de los ejércitos del Gobierno, cláusula que después han modificado haciendola extensiva a los del enemigo. Esta Cumpañía Industrial no tiene previ­sión 'sino cuando se tmtll de sus ne­gocios con el Tesoro. El Ministro de Goóierno, señor }ia­fael .M. Palacio, vino al fin a esta ca­pital, llamado con instancia por el uacionalismo y por algunos de lo's conservadores, como Ospina Cama­cho, .que desean incorJlOrarse al gre­mio. El objeto de su vIaje era refren­dar a nombre del Gobierno los pactos que se celebraran para lJ~var a cabo la uC;l)n de la «familia feliz;» pero se ha regresado para Anapoima}' aun no se han visto los resu ltados de Sil importante misión: parece qu,e la base del enredo era la separac.ión de San' clemente, el llamamiento de Marro­quín, la conservación de varios ' Mi­nisterios y alg'o sobre DesignaLura. Eso fue todo y no pudieron avenirse. Para los históricos no hubQ ni IIn re­cuerdo. Enero 20 de ! SOO. Cuenta hoy tres meses de ruda y cruenta labor el gran movimiento por la restauracion de la ' epúl:lica y de la honra nacional, iniciada por un grupo de valientes y abnegados libe­rales, de los cuales no pocvs duermen ya el sueño eterno inmortal de los mártires de la libertad. Su sangre generosa ha corrido en innúmeros combates, en todo el territorio de la 1iepública, en lucha muy desigual con las huest.es pacivas y mercenariils de SIlS enemigos y las aguas del !tlag' dalena y los campos gloriosos de Bu-caramanga y Peralonso pregonan su sin igual heroismo, el que con asom­bro comenta la ~ acion enlera y es augurio de mejores días para la Pa­tria en un porvenir ya no muy lejano. COIt gratitud y respeto les consagra' mos este primer recuerdo, a los unos en sus tumbas, a los demás en los campos de su actividad. Enero 22 de i 900. Contiuua el periodico, organo ofi. cial de la Compatria Iudustrial, en su ahsurda pretension de dar a la presen­te g'uerra, que es de simple reivindi' caClon de nuestras tradicionales prác­ticas republicanas y de estricta hon­radéz adminislrativa, un carácter oe guerra religiosa y con ese fin, en unú de sus ultimos números, publica uua carta auonima,confeccioll/loa COIl vu ¡. garidades que a nadie poorlÍ.1l engañélr y mucho menos a num\tro clero i¡u:-, trado, que sahe muy bien a (]ue dehe atenerse a este respecto y no caera en ]a trampa qne se le tiende pata que apoye con su autoridad y 811 prestig'ro este desbarajuste nacionalista que ca' tolicos y conservadores de la posicion de Quintero Calderon y Marceliano Vélez han repudiado con franca, jus' ta y aplaudida jndi~lJ.I('ioll. Pero el más ridículo de los expe. dientes de que esta echando mano el desacreditado nacionalismo para darle algun aliento á sus mercenarios es el de la publicacion de tri unfos, realos O supues~os, dol Mocho Hernández en Venezuela, via por donde ven entrar nuevas y nue'\las exppdiciones para' combatir su odiada domioacion; pero, a pesar de esos trlunfos y por sobre ellos la I evolucion sigue su eul'SO y ya en todo el terri torio de la epubli' ca se hace sentirpoderosa con las mis' mas armas qÍle 105 enemigos le aban' donan.
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La Reintegración - N. 10

Por: | Fecha: 19/01/1900

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • • • Picadq Enrique de aquella especie de reprension: "Es le prcgum6 cuál e-ra sú profesion. Seftot, contesf6 t((luel, · verdad, le dijo, pero nosotros los franceses, alojamos al yo ejerto la facultad de m·edicina . .:..Müi eflferma détie estar Ser Supren1o en nueetros corazones, no entre cuatro pare- mi universidad, dijo el rei, pues la veo en manos de facul-des como haceis vosotros los españoles, i aun cuando lo tativos. . estuviese en los- vtJestros, dudo mucho que hallase en su Pero entre los rasgos de bondad de Enrique IV, el si-a. lojamiento mas que piedras; en seguida añadió sonrién- guiente parece n1as digno de referirse. dose : Doq Pedro t no notais que la obra está por con- El viernes 26 de enero de 1607 asistieron el rei, su espo­cluír ~ Mi intencion no es dejar esta capilla en el estado sa i unos personajes de la corte a la representacien de una qu-e la veis." pieza nueva en el teatro de Bourgogne. El argumento se LuegoqueEnriqueiV,su esposa i toda la corte salieron reducía a una disputa entre un marido i su tnujer : esta de Fontainebleau para Paris, con objeto de pasar en la· reprendia a aquel de mala conducta i abandono,·quejándose ciudad -el resto del verano, el ministro espaiiol fué a vi- de que lo poco que ganaba no era suficiente para pagar el sitar al rei, el cual, despnes de haberlo recibido con bon - tributo i las alcabalas. El mar ido se defendia diciendo que dad, Je dijo ~ Mueho temo, señor don Pedro, que no se de nada servía estar trabajando todo el dia, si al cabo del os pueda recibir aquí del modo que tnereceis. Señor, le año todo el producto se lo llevaba el rei i la justicia, i no respondió el ministro, he sido tan bien recibido, que estoi solo se desanimaba por esta razon, sino que en adelante se pesaroso &e ver algunas desavenencias, Jas cuales podrán proponia poseerlo mejor, porque al fin él era el primero tal vez obligut·me a venir con UD ejército, i entónces es que debia gozar de su trabajo. En esta contienda estaban bien seguro quo no seré tan estim,do. Pardiez! esclamó cuando he ahí que llegan un ministro de justicia i dos al­el rei, veniA euanda vuestro amo gustare, que no dejareis guaciles a cobrar las alcabalas a aquellos infelices, i los de ser bien venido, por lo que respecta a vos; i en euan- advierten que si no pagan los ejecutarán al momento. La to al hecho de que hablais~ sabed que aunque vuestro mujer se aflije, eltnarido grita, los alguaciles apuran, hasta amQ. an a la cabeza de todas sus fuerzas, que al fin pregunta aquel a estos, quiénes son, i Je respon· no sOlo e a la frontet:a, sino tam.en el den: ministros de justicia. No puede ser, reflica el marido, que la vea. la justicia obra de otra manera, i en su ma dialecto le es- Habiendo ido un din don Ped1·o de Toledo a ver el pone Jos vicios i defectos de su administracion, modales Louvre: la conversacion rec~yó sobre edificios, i dijo al groseros, &. Pues aquí están los documentos que lo p1'ue­rtñ1 que BJll amo t§Jlia en España tnaterinles n1ucho mas ban i ademas el mandamiento de ejecutoria contra tí, dice rieos con que jioder hermosear sus palacios i obras púbJi.: el ministro, i en seguida manda a la n1ujer en notnbre del cas. Enrique IV, hacielidble aproximar ent()nces a lJna rei que se levante i deje rejislrar el arca sobre que está ile 1aa entanas i mostl'ándole la ciudad: No lo niego, · sentada; obedece la infeliz, abren aquella i salen tres dia­ls contestó, pero dígame U. t•tá..:rodeado el Escorial de blos que cargan con el minis~ro i los alguaciles, dando fin 11irab&les tan hermoso..s '1 con esto a aquella farsa que hizo reir mucho a los especta­Sqpo el rei q11e._ don Pedro se babia hallado presente dores, aunque no a los que la representaron pues inmedia- ·~-~900S eortesanos de Felipe III inforn1aron a lamente fueron llevados a la cárcel por órden de algunos emt ¡Wínetpe ~Enrique 'Se veía atacado de la gota con individuos de justiciq que se creyeron agraviados: mas fftteuen~ . aqoelto&t pa1a halagu a su ref, 'habian habiendo esto llegado a n
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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Biblioteca de Señoritas - Año I Suplememto N. 23

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La Reintegración - N. 5

Por: | Fecha: 20/12/1899

• 1 • ANo 1. Bogotá, 5 de junio de 1858. NUM. 23. Revista. Despues de la terrible sensacion causada en esta ciudad por e l artículo de E1niro l{astos intitulado los pe.pitos, que ha arrancado mas de un ()'rito de enojo a ci e rtas damiselas i provocado mil bamena­zas de parte de Jos agraviados, la vida bogotana se ~a arrastrado p e rezosame nte por calles i salones, ~~n mayor interes i casi sin incidentes de ningun Jenero. Se han c e l eb rado apénas aJgunos enlaces matrimoniales, i continúan poni é ndose en juego mil resortes ocultos para qu e aurnente la pesca con­yugal, que, segun el decir de los intelijentes, esca­Eea de una manera alarmante. Háblase :ya mucho de una socied"d anticelibata­ria organizada recientemente aquí por varias seño­ras con el fin de propagar el culto de Him e neo. He aquí la d istribucion de sus empleos: Presid e n­ta 30 años, Vicep r esidenta 25, i Secretaria 16; se­gun las esperanzas abrirá sus sesiones en e l próxi­mo julio. La parte que se conoce de su progran1a es la • • s1gu ten te: Aumento progresivo e improporcionaJ de cri· nolinas. Libertad de amar. Correspondencia inviolable. Eleccion directa. DisolubiliJad de corazones, &.•, & .• Esta sociedad de carácter nuevo e n el pais, no • • • • • en cuanto n pranct p1os, s1no en cuanto a organl-zacion, abriga grandes esperanzas para el porvenir, i se promete hacer grandes conq ui~tas en las próxi­mas .fie~tas de toros. tas corrientes a los fondistas i confiteros i quedareis .... tnas qu e escandalizados al ver la can'tidad de al­cohol que se consume en B ogotá diariamente. Esto por Jo que hace al Jado masculino de la cuestion. En el femenino la cosa anda peor i sá .. ben lo bien las modistas i tenderos de raso 'sedas • • • ......... J 1 m1r1naqu es. Pero se nos dirá que 1o mismo sucede en todos los paises del mundo donde h !li poblaciones tan nume rosas i civilizadas corno esta nu est ra ciudad andina. Pero a eso contestatnos nosotros que en esas ciudades hai otros recursos industrial es i mer­cantiles; que no puede compararse la inrnovilidad de Santafé con la ebullicion de Lima o la activi· dad de L e an o Marse lla; que aquí saJo abundan las papas, i eso .ninguna ~asecha, por rara que sea, pasa df: producir $?0 , ~11 p~sos al ~ño ; que. no hai 1ndustr1as creadas ni hab1tos 1ndustr1al es de n1nguna clase, pues ya ni doctores podemos hacer a nuestros hijos porqu~ están abolidos los tí tu los; i que, como consecuenc1a natural de todo eso, empiezan a desa· rrollarse las industrias de una man e ra alarmante porque entre la n ecesidad de gaEtar i no tener qu~ gnstar , es preciso probar fortuna por t odos los ca­minos imajinables. En vista de tanta i tanta calamidad, nosotros nos atreveríamos a aconsejar a nue .... tras damas, ya que son tan dóciles como b e lins, que, léj os de ponerse al frente de la moda i del luj o, los re chazaran como un azote de la sociedad, i fueran tan sencillas i eco nómicas en el v estir, como senciJJas son en s us • • • 1 • sentun1eutos 1 econo1n1cas en sus fa vares. Las linJas no n ecesi tan de adorn os, i las feas quedan horribles con eltos. Celebróse el Corpus como de costumbre, esto es, con altares, arcos i tapices en Jos balcones de la calle del Comercio. Hubo zambra, frutas acarame· ladas i vestidos nuevos para niños i criadas. Exhi­biéronse cuadros sagrados i profanos en las puertas de_ las tiendas; hubo procesion , de santos que ha­brian puesto a prueba el estomago artístico de Benvenuto Cellini i de Canova, i todo concluyó a hora de medio dia. 'l'u vimos tambie n funcion dramática, que fu e mui aplaudida, i que se repetirá e l domingo. F e li­citatnos a la señorita Rodrígu e z por e l exito que obtuvo e n la represe ntacion; el tiernpo i sudoclli­dad al fin le están preparando los grandes triunfos a que es acreedora por su consagrat;ion. I a propósito de esto, parécenos que tendremos dos fiestas: la~ de la plaza de Bolívar i las de la pla­zuela de San Victorino. Tendremos, pues, ocasion oportuna de desplegar toda la magnificencia de nuestro lujo bogotano. Ese lujo que todos vemos, pero que nadie se esplica porqué se pierde en Jos antros ose u ros del misterio, en los secretos de la duda, en Jas rejiones mismas del in1posible. Bue­no que arrastre tercio pelo la hija del ca pi tal ista, i ro1npa charol i arrugue guantes el nene que man­dan los Estados a educar a la capital ; todo eso al fin se comprende. Pero que Jo gaste Ja huérfana sin herencia, el cornabacete dependiente con $ 25 al tnes, el lechuguino sin oficio, i tanto príncipe de los Portales, sin mas gracia que la de consumir­se él misn1o i consumir a los demas de una mane­ra perman ente e improductiva, cosa es de pen-sar en brujas, i de decir como el famoso predicador Observaciones criticas. aquel: "Amados oyentes, ya os he dicho i ahora (ARTiCULO CUARTo.) os repito que no hai brujas; el Evanjelio i los sa- Creemos haber demostrado ya, aunque indirecta-grados testas nos prohiben creer en ellas; pero las mente, que el seYíor Villergas no tiene las dotes hai, porque yo las he visto!" que algunos pensaron encontrar en él para hacer el Recorred una a una todas nuestras pesebreras exámen de Jos poetas españoles contemporáneos; i de brutos de a cuatro piés, i hallareis mas de 600 ahora agregamos, que otro de sus muchos defectos caballo~ de a $ 300 pesos unos con otros, que cau· como crítico, es la ninguna fijeza en sus opiniones san un gasto a sus dueños de $7,200 mensuales literarias. en manutencion i herraduras; pedid sus libros de "El ENcUBIERTO DE VALENCIA, dice hablando crédito a los sa~tres, zapateros i peluqueros, i vereis de las obras de García Gutiérrez, es en mi concepto como el nctivo (pasivo dijéramos ntejor) de esas ? el p1·imero d~ /o$ dramas modernos despue$ del TRo· ofieinas monta a sumas enorme!! Pedid su~ cuen- ' v ADOR.. ,, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • • 18~ BIBLIOTECA DE SE~ORI1, AS. 1 e n otr a parte : "El dram a Lo s A1\IANTE S DE TERUEL no es la obra de un g r a n p oe tn ; p ero es el pri1nero de nues· tros rlra1nas ?noclernos despues de l 'l,ROVADOR ." N osotros no co n oce mos e l ENe · nrE RTO DE V AI.. EN· C IA; pero c r ee mos que con dificultad pueda igua la r a l o~ A1\IA~TES DE TERU EL, primero, por su esc oj ida ve rslficacion; segundo, p or e l pro di j i o qu e o bró H a rt ze nbu sc h h ac ie ndo d e un t e tna t a n popular i obligad o com o el de " L os amantes d e T e ruc l, , un dr am a q u e llegára a int e r esar tanto con1o ha intere· sad o este . M ucho pue d e c onoce r el idioma caste llano Gar­c ía G uti é rre z, i muchas tambi e n pu e de n ser sus c u a l idade s dramáti c as; p e ro apé nas prodrá produ· c ir r asgos como e l si g ui e nte : D. 1\ll .ARTIN. D o n P e dro S eg ura, seais bien venido. D. P EDRo. N obl e don 1\lartin Garces d e Marsilla, D. D. D. D. D. S a lud os d ese o : t omad es a silla, Qu e m e l1ab c is halJ a do d es ape rcibido. (Ci ñ ese la espad a : que es t a ba sobre la mesa.) D e vues tra d o le ncia nuevas he tenicio, MARTIN. P EDRO . l\1 ART I N . P EDRO. MAitT IN . i C ó mo e stáis~ D e l tod o r e pu esto N , o se •••• Domin g o C e lada •••• Fue rte h o mbre es a fe ! Puos si e n1pr c a la barra le gano e J par­t id o. D. PEDRo. A s í os quiero yo. Conmigo venid: Vamos a la orilla d e l Guadalaviar. D. MARTIN. D on Pedro, yo os tengo prim e ro de hablar. D. PEDRO. Hablemos sentados. Ea pues, decid. ( S ié ntanse. ) D. M ARTIN. Fué de nu es tro du e lo causa •••• D. PEDRO. P ermitid Que yo os la recuerde. Vuestro labio dijo Qu e por mi codicia llorábais un hijo. D e honor es la injuria, precisa la lid. D. MARTlN. i Me juzgais cobarde? D. PEDRO. Si cre yera tal, Don Pedro S egura, con vos no lidiara. D. MARTIN. Jamas al peligro he vuelto la cara. D. PEDRo. Si, nuestro combate puede ser igual. D. MARTIN. Será por lo n1isn1o •••• D. PEDRO. Sangriento, mortal. Ha de perecer uno de los dos. Es imposible manejar m ejor el diálogo, ni hacer­Jo mas ad ec uado a la época i a las circunstancias. Con e fec to, no se sabe qué admirar mas aquí, si el repos ado contin ente d e Jos dos adversarios, lo hidal­go d e sus palabras, o e l sabor antiguo i escojido de t oda la esce na. Escribir así e s conocer el teatro. Qu ~ dife re ncia entre este diálogo i el puesto por Zorrilla e n boca de don Pedro i don Fadrique ante la ti e nda de Mosen Beltran ! Aquel parece una p e nd e ncia entre dos verduleras. La escena 2. a de la jornada l. a del TROVADoR, citada siempre como una cosa acabada, no es en nuestro concepto superior a esta; i casi puede de­cirse que todo su secreto está en Ja famosa cuarteta aquella: Al campo, don Nuño, voi, · Donde probar os espero Que si vos sois caballero. • • • ~ Caballero tambien soi. < Tan 011ortunamente colocada en boca de Manrique. ~ P or este i otros puntos de bondad de los dramas e l1,ROVADO R i los Ar.rANTES DE TERUEL, ~e pu ed e ve nir e n la s uperi o ridad d e l segundo r e specto u e l E NcUB I ERTO DE VALENCIA; a pes ar de la opinion c ontradic toria del se ñ or Villc rg a s . P e r o t odavía se nota ma s la falta de fijeza de ide as d e este suj e to e n lo que respe c ta a las c ríti cas qu e h a ce a Martin e z de la Rosa, por lo insípido de s us v ersos i la n1 edianía de su prosa; i las que hace al duque d e Rívas i a O choa p o r su romanticismo. De donde deducimos noso tros qne aJ señor Viller· g as n o Je gustan ninguna de las dos escuelas, clási­ca i romántica; pu es to que censura Ja una en unos e scritor es, i la otra en otros. C ó rno negar que la poesía de 1\Iartínez de la Rosa e s una poes ía glac ial 1 Pero este no es un d efe cto peculiar de este cé le bre literato espafiol, sino e l carác ter, mas bien, d e la escuela literaria a qu e p erte n e ce, co sa en que no se ha fijado el señor Vill e rgas. Frios , mui fríos, son Jos versos de Martínez de la Rosa, como frios, mui fríos, son los de Lista i demas po etas ante riores al renacimiento de las letras en España; qu e en el liri s mo nunca quisi eron aban· do nar las faldas de H e li cona, hasta cie rto punto ernb ell ec id a s con los d es poj os d e l Olimpo; i en la e p ope ya i en e l dran1a aju staron sie1npre su p e nsa· mi e nt o a las reg las aristotélicas; sin que nunca, c on justicia, se pue da hacer r esponsable a u no solo d e e llos de los multiplicados de fectos del gusto lite· rario de aquel entó nc e s olvidado. Critica el señor VilJ e rgas la primera estrofa del fragmento é pico de Martínez de la Rosa, que dice: En el soberbio alcázar mahometano, D e l p é rfido Boabdil d ejado apé nas Cuando cayó del trono soberano Despeñado a las J íbicas arenas, Reposaba el caudillo castellano Dando treg ua de l mando a las faenas; 1 ya batiendo el sueño el ala grave Le rociaba con bálsamo suave • Tiene razon el señor ViJlergas cuando dice que no encuentra en e~ta octava toda la robustez que debiera tener, atendido a que es la primera de un po e ma, i de un poema a que ha consagrado l.Vfartín e z de la Rosa muchos de los años de su lar­ga i estudiosa existencia; sí, tiene razon, la trompa épica debió ser tocada con mas arranque i maestría al principio del canto primero, en el que, indudable· mente, todos Jos autores pugnan por captarse las simpatías del lector, para que los acompañe en los posteriores ; pero no Ja ti e ne en cuanto a hallar de­fectuoso el que se dé a el ala del sueño el calificati· vo de grave, esto es, pesada, porque él le cuadra perfecta mente. Por qué no citó el señor Villergas estas o seme-jantes eStrofas del mismo fragmento 'l , Temblaron los magníficos salones, De mármol, oro i nácar fabricados, Con versos i amorosas inscripciones Cual filigrana arábiga labrados; Crujieron los soberbios artesones En cien i cien columnas sustentados, Arrancándose al ímpetu violento Los mosáicos del rico pavimento. •••••••••••••••••••••••••• Mira a Colon, del vi~nto combatido, Con pocas naves, náufragas i solas, • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. BIBLIOTECA DE SEnORIT AS. 183 En no surcado nlar desconocido, Romper el seno a las hinchadas olas: El ''alladar de A lcídes destruido, Ensancharse las costas españolas; 1, cediendo a su esfuerzo s1n segundo, Crecer los mares i doblarse el mundo. Estas estrofas no están impregnadas de ncolojis­mos, pero nada tienen de censurables; i de estas i de otras mejores está Jleno el fragmento épico de Martínez de la Rosa, que tan bastardo i falto de sentido parece al señor Villergas, apoyado en la sinrazon en que sobreabunda siempre. Nosotros no lo negamos; las poesías de Martí· nez de la Rosa, como las de todos los clásicos espa­fíoles, están plagadas de prosaísmos; pero lo repe .. timos, este.no es un defecto peculiar de sem ejante autor. Para probarlo, vamos a abrir, al acaso, un tomo de versos de Lista, que tenemos a la mano. Lo hemos abierto en la pájina 122 Leemos: V en suspirado m a yo •••• Las Pléyades lluviosas •••• El ábrego invernal • ••• En la 316: Si quieres ver, Zaide amigo, Todo el cielo en una belJa, l competirse hermanadas Bondad, gracia i jentileza ; No faltarás esta tarde •••• En la285: Dulce esperanza, del prestijio amada, Pródiga siempre •••• En la 375: Como niño en sala oscura • ••• Pero basta: la escuela clásica no solo se permite estas licencias de mal gusto, sino que tiene el don de espresar, con las mismas palabras de la románti­ca, sus ideas de una manera tal, que les da a todas un jiro detestable, por lo que en la mayor parte de 8US composiciones en verso, no queda mas que el matraqueo de la rima i lo desagradable deJa forma. El señor Villergas no ha sabido decirnos esto 1 contentándose con achacar a Martínez de la Rosa lo que es propio de una época i de infinidad de es· critores. Pero si el señor Villergas no acepta el cla­sicismo por hallarlo insípido, que acepte el roman­ticismo, que lo encontrará jugoso i grato a su esqui .. sito paladar literario.. 1 ~i no Jo acepta tampoco, como parece no aceptarlo, entónces que funde la escuela a que se debe pertenecer, i no nos deje en el aire. Siendo Jo mejor de todo, que aprecie debi­damente los hechos i Jas circunstancias; que sea un poco 1nas imparcial, i no nos ponga en el caso de recordarle el dicho aquel de ''dejó Frai Jerundio los estudios de cachifa i metióse a predicador," que podriamos aplicarle con visos de oportunidad. Cerca de diez i ocho o veinte son los poetas que juzga el señor Villergas en sus artículos Poetas ~spañoles contemporáneos, i de estos solo cinco ( Ai­guals de lzco i Hartzenbusch,sus amigos, Lafuente, García Gutiérrez i Breton) salen bien librados; en cuanto a los demas, no solo es un crítico severo, sino que es un hombre indelicado. No faltaba mas, sino . . . ......... 41ue gastase un escritor veinte o tretnta anos en formarse, viajando i estudiando para alcanzar una buena reputacion, i que al cabo de la jornada vinie­se otro como el seí'ior Villergas con mas vanidad propia, gu sentimunto de justicia, i diera al traste eon eaa reputacion, solo con una plun¿ada i tot& una osad·ía tan grane/e co1no su ignorancia. Sí, no falta­ba mas: el talento i el mérito bajarían Ja frente ante la avilantez; i la república de las letras cual otra Roma prústituida, se veria tan solo ensefio;·eada por !os Calígu las i e rones, altivos con los víctores de los necios, i satisfechos con su obra. El mercader de Bassora, o el anillo májico. Hace muchos años que vivia en la ciudad de Bassora un menestral h onrado e industrioso llama­do Bonbec. 'l., enia un hiJO de nombre Conloffe, a quien habia educado con la mayor ternura hasta donde lo permitieron sus facultades. A 1n edida que crecia el jóven, sus progresos remuneraban los es­fuerzos de su padre, i su amable carácter mitigaba la ansiedad de este, quien habia juntado una suma suficiente para sostener su familia con decencia, i para ponerle en capacidad de dejar a su hijo los me­dios de adquirir riqueza i consideraciones. Conloffe, que se entregaba al retiro i a la r eflec­cion, n1editaba en sus momentos de soledad sobre las acciones de los hombres, al v e rlas manifestarse en el curso de sus ocupaciones diarias. Él veia que los mercaderes se defraudaban Jos unos a los otros. cuan­do podian hacerlo sin ser dese u biertos; que e.l Cadí no era inaccesible a la corrupcion, i que el Califa mtsmo, vice-jerente del Profeta, estaba rodeado de cortesanos falsos e interesados, c uyos informes cega­ban al monarca i le tapaban los oidos, i cuyas ma­quinaciones encenagaban Jas fuentes de la justicia. "Oh ! santo Mahoma!,, solía esclamar, ':si tu sie r­vo no tuvi e ra sino un átomo de tu poder i un rayo de tu intelijencia, cómo pondria al descubierto a estos creyentes hipócritas!, En esta época Jlegó una caravana a Bassora. Los que la componian habian estado dos años au­sentes de Ja ciudad, i durnnte este tiempo habian dado una estensa vuelta en su viaje a )a Meca i a su regreso de ella, i encontrado muchas otras com­pañías que viajaban por el desierto. Traían consi­go las perlas, Jos perfumes, i fas sedas de Arabia; los delicados tisús de Cachemira, i los tesoros bri­llantes de Ormus. Venian con eJ los muchos filó so .. fos que viajaban para observar el jénero humano, i enriquecer su pais con las observaciones que r eco­jian en las rejiones que visitaban. Conloffe se ocupó varios dias en comerciar con estos mercaderes, i en el curso de sus negocios, atra­jo frecuentemente su atencion u na cotnpañia de der­vises que habian llegado con la caravana, i conver­saban en el mercado sobre el estado de la ciudad, i otras rosas que habian visto. A Conloffe l e pa­reció que uno de ellos se fijaba particularmente en él: era un anciano Yenerable cuyos cabellos blan­cos manifestaban lo avanzado de su edad; pero cu­yas facciones no habian perdido su lozanía. 'Tenia los ojos pardos, i centetlantes de intelijencia, i apo· yándose en su báculo, miraba el tumulto bulli cioso al rededor suyo, con el aire de aquel que ha visto la humanidad en todos sus diferentes aspectos i ac• titudes. Sorprendieron un dia Jos dervises a Conloffe ade­lantándose ácia él, i el anciano, midiéndolo de piés a cabeza con una mirada fija, le mandó que le si­guiese. Conlotfe se inclinó i obedeció en silencio al dervis, que caminaba con paso firme i apresura­do por las calles i suburbios de la ciudad, i al fin • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • 184 BIBLIOTECA DE SE:&ORI'r AS . llegaron n una planicie a c uya estremidad bajaron a un va} le profundo _i_ll eno de verdura. Crecia nquí una solitaria palma Jiga ntesca, a cuyo pié murmu· raba un arroyuelo clarísimo. El dervis se sen tó allí, i dirijiéndose a su ansioso co mpañe ro, l e dijo: e: Un siglo hace que na cí yo en e te sitio, que está ahora corr1o estaba entónces, miéntras que las revolucio­nes han conmovido Jos imperios i arrasado las ciu­dades mas podero ~ as. De este valle yo no sal <.Iré yé.t mas, porque AzrneJ ha recibido su comision, i ya oigo el ruido de s u s alas. De to dos los descubri­mientos de una vida e mpl e ada e n c xarninar la na­tural za de los hombres, l os j é nios i los ánj e le s, i en investigar los miste rios de la creacion, esta sor­tija qu e ll e vo en el d e do, es el de mas valor i el mas peligroso. EJJa ti e n e Ja virtud de hacerlo a uno in· visible, voltPando e l diamante ácia la palma de la mano. La Provid e ncia, que os ha puesto e n mi sen­dero, os ha de s linado desde el principio d e l tie mpo a hereda r este Jegado n1 á jico, por cuyo medio pode is hacer mucho bien, o atraer la desgracia sobre vos i los de mas, segun que la prudencia os guíe, o que Jn t e tne ridad i la pasion os prec ipiten. Hallareis, oh hijo mi o! que t encis de eos que hasta aquí han es­ta do sepu l tados e n vuestro corazon: de la 1nisma ma­nera que estnba esta joya e n e l inflamado centro de la ti err a, ante de que yo bajase a la tr e menda ca­verna de la cual la saqué. Mi hora ha ll egado ya. Sed cauto i discreto, i r ec ibid est e legado; e nte rrad­m e a la sombra d e este paJm e ro dond e mi rnadre si ntió por mi ca u sa Jos dolores ele muj e r. Ahí, en su última 1nornda, ya sea que mi alma esté. desti· nada a reanimar otra masa, ya sea qu e pase al mun· do de l os cs píri tus i a la cotn u nion d e l Pro fe ta, ahí yacerá t odo lo qu e c ntónc e s qn e de de la sabiduría i Ja fama d e J d e rvis Atalmulc." El anciano s e recostó contra el palm e ro, cerró los párpados i no volvió a emitir sonido alg uno. Con­Joffe le puso la mano sobre e l corazon, p e ro esteba­bia d ejado de Jatir. Con respeto profundo cavó la ti e rra ul rededor del palmero, envolvió al dervis en su largo manto, le colocó en la tumba que él babia escojido, i, tapando el hoyo, marcó bien Ja situacion del valle i dirijió sus pasos ácia Ja ciudad. Lanzaba el sol sus últimos rayos dorados sobre la llanura, cuando Jos ojos de AtaJmulc se cerraron al sueño eterno ; i, al atravesar Conlotfe aquella, las son1 bras inciertas se espesaban en torno suyo. No obstante, él alcanzó a ver a la distancia dos hom· bres que se movian con pasos cautelosos, i que iban al parecer ~argados; determinando probar Ja virtud de su sort:ja, volvió el diamante para adentro i se ad e lantó ácia ellos. Su conducta le probó que uo Je habían visto, i continuó observando sus movimien­tos. N o tó luego que eran esc)a,ros, i que ll e vaban una caja con estremo cuidado. Cuando IJegaron al ceatro d e la llanura, miraron al rededor con gran­de ansiedad, i, no percibiendo cerca objeto aJguno, comenzaron a remover la arena hasta que hallaron una puerta de hierro, alzando la cual i encendien­do una luz, entraron por aquella ocultando esta. A Conloffe, que los siguió, no vió sino una pequefta escavacion cuadrada, en la que los dos esc)av()s de­positnron la caja, e inmediatamente abandonaron el Ju g nr, no sin haber vuelto a tapar la cueva. Con­l o ffe se apoderó de los materiales con que Jos escla· vos habiau encendido el cirio, i los observó hasta que se le perdieron en la oscuridad. Preparándose ] u ego para vol ver a exnrninar el lugar: •' La inocen· • cia," dijo, "no gust~ d ~ todo este mi s t e rio ; hai algo malo en este negoc1o, t Alá quiere que yo lo descu· bra." Haciendo estas refleccion es, volvió a entrar al subterráneo, r ompió Ja caja con m cho trabajo, i su vis ta se cleslutnbró con el espl endor de las jo­yns n1as g ranel es i mas brillantes que jamas había visto. Sus ojos chi peaban de alegria al ver este te .. soro delante de él. "Era," se decía, ''la dote desti­nada para la hija del :r ran Califa, o la de s u reina Zodiede.'' Pero él refrenó aJgun tanto su gozo, por­que Ja conciencia l e decía que no t enia nin gu n de­r echo a Jo que veía. Eran bien s de otro Jos que é l anhe laba apropiarse; i "sinembargo,'' esclamó, '' i porqu é tanta ansie dad si ha sido ganado honra­damente ? No; es probable que este sea e l precio d e l crímen; tal vez ha sido robado a algun corner­ciante desgraciado, o arrancado por los marchitos d e dos de la avaricia, o Ja garra de hi e rro de la tira­nía, a la miseria muribunda de hambre, o a la es­clavitud sin es pe ranza., Tornó lu ego a mirar el t eso ro, i, alzando la caja pre ciosa, saf i ó deJa cueva, cerró la entrada, i se e ncaminó a la ciudad. Cuan­do ya tocaba e l confin de la IJanura, la conciencia Je dijo otra v ez, que, c u alesquie r a que fuesen los m e­dios por l os cua les l as joyas habian sido adquiridas, é l no t en ia mas derech o a e llas qu e otro hombre cualquiera, i que se hac ia culpable de un críme n, tan grande, a lo m é nos, como e l de sus poseedores. En consec uencia, su primer impulso fuP, el de re­gresar; p e ro r e fi e ccionando que los ladrones esta­ban en atisba, i qu e, aunque él mismo e ra invisibl e, no p odia abrir la cueva sin ser observado; "Guar­daré," dijo, " este t eso ro como un depósito sagrado, hasta que se descubra a su du e ño l ejítimo. '' Aca­llando de esta man e ra la voz profunda que le ha­blaba interiormente, volvió a su casa sin ser nota­do, i aseg uró s u presa en un oculto apose nto, sa­liendo lu ego a vagar por Jas calles de la ciudad en busca de nuevas aventuras. Al pasar por las calles, atrajo su atencion una gran multitud apiñada en la puerta de la casa del Cadí. Escitóse su curiosidad al mirar tnl muche­dumbre en hora tan desusadtt; penetró por entre el populacho hasta el sa Ion donde se administraba la justicia, i alcanzó a ver a un hombre que se retor­cia las tnanos i arrancaba el cabello, con tal espre­sion de dolor que reusaba todo consuelo. " Hija mia ! hija rnia P' esclamaba, " el villano ha arrui­nado a mi hija i la dejará perecer., ~'Se ha busca­do empleando todos Jos medios posibles, señor," di­jo el Cadí, "maifana se renovarán nuestrns pesqui­sas, i entre tanto se doblará la guardia de las puer­tas de Ja ciudad.'' Despues de muchas imprecacio­nes vehementes i arranques de dolor, despidióse el mercader, dispersándose Ja turba. Conloffe siguió al estranjero hasta que estu­vieron libres de toda observacion, i dándosele a conocer, Je dijo: que él babia oido sus que­jas i que podria ser le de alguna utilidad. "Mi non1bre~, dijo el mercader, "es Mirgehan, soi de Darnasco, i siguiendo el curso de mis negocios comerciales, me preparaba a emprender un viaje a esta ciudad. Un pícaro viejo, a quien babia creído mi ami g o, se aprovechó del bullicio de mis asuntos, i me robó mi hija, orgullo i esperanza de mi vejez, juntatnente con todos mis tesoros, que ba­bia convertido yo en joyas para que fuese mas fá­cil trasportarlos. Juntóse luego con la caravana que ha llegado últimamente a:e!ta ciudad, tomó mi nom- • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. BIBLIOTECA DE SE~ORIT AS. 185 bre, i l1a representado n1i persona en un todo. Yo d~lluciente peinado; i la deslumbradora neglijen­Je seguí tan pronto como supe su negra traicion, i c1a con que se desplegaban ~us perfecciones en toda llegué a Bassora despues de murhos peligros en el su plenitud voluptuosa, vino a completar e l hechi­tránsito, i de haber sido atacado por unos ladrones zo que arroba ha al 1nu s ulman. "Esta, ,, dijo Cotras se l.e habian reventa~o; i que, en suma, fué b1en calculada para esclavizar al caballero, st Ja así que v1no a hacerse em1nente en el arte. musica ... hub1era podi.do triunfar ~e su. valor moral. . ~in el!l?ar~o, la figura i la ejecucion de Paga­~ n Ja opera de Prectosa, la rn~s hJera 1 la ~nas gra- ntni cast JUStJ~caban la credulidad que dió oríjcn c1osa tal vez de las produrc1on e s de Weber, no a e~tos rnaravlllosos cuentos. Su rostro atezado, · puede h~ber, ~~da mas agradabl.~ que. el soni~o el desgreño de su negra cabeJlera, sus largos de­marcado 1 enerJlCO de la danza Jltana, 1 el esttlo dos, sus estraños modales, todo en él tenía algo sor­español de In música, espresando el sonido del za- prendente i grotesco; i luego, cuando tocaba, pare­pateo de Jos piés. cía que estaba lidiando con algun animal feroz, es- U na de sus obras mas cientificas fué el Eu1·yan- forzándose, despedazando, i por último venciendo. to, su última ópera; pero los alemanes mismos son Los pr~fe~o~es de música qu~ le escu~haban, si mas especialmente entusiastas respecto de Ja mú- no era~ Vlollnist~s, daban gracu~s ?1 C1elo. de no si ca que puso W éber a las canciones de Korner, haber 1~te~1tado Jam~s el aprend1zaJe de t_al_Jnstru­su distinguido poeta. mento; 1, s1 1o eran, t~raban al su~ lo Jos vtol1nes en W éber fué hombre de carácter amable modesto completa desesper8cJon. 1 hab1éndosele roto, en reservado en sus modales i de costumbre~ domésti~ cierta oeasion, una de las cuerdas del -violin, hubo cas. ' entre Jos demas ejecutantes un ímpetu furioso para En cuanto a Rossini, habria sido difícil formar apoderarse _de ~lla, i !ll fin .la dividie_ro~ entre sí co­un juicio concienzudo de él, cuando sus obras es- mo u~a rel•qtna de lmposJ.ble aprectacto~. taban deleitando a la Europa; cuaNdo por sus pro· Es ~~~udabl.e q~e, en tlen1pos menos 1_lustrados, ducciones brillantes i deslumbradoras, no solamen- P~g.anJnl habrut s!d?. colocado entre Jos
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Biblioteca de Señoritas - Año I N. 23

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“El Tiempo” fue una publicación interdiaria que circuló los días miércoles, viernes y domingo en Cartagena durante 1901. En el contenido del periódico existen dos secciones que se publicaron de manera regular: la “Sección Oficial” y el “Boletín Científico-Industrial”. La primera, reproducía documentos oficiales del Gobernador de Antioquia, Joaquín F. Vélez y del Ministro de Guerra, José Vicente Concha, relacionados con la situación de orden público del país durante la Guerra de los Mil Días. En medio de dicho enfrentamiento, el periódico reprodujo una gran cantidad de noticias en que se adjudicaba el inicio del conflicto al partido liberal y a su líder Rafael Uribe Uribe, denominándolos “liberales traicioneros”. Además de lo mencionado, el periódico afirmaba que no era una publicación subvencionada por el Gobierno y que por tanto su edición se veía afectada por el devenir de la guerra.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa
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