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La Argentinita / Fajardo, Páramo y Cía

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La Bayadera / Compañia de Operetas Zarzuelas y Revistas Marina Ughetti

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Imagen de apoyo de  Concierto  / Dirección Nacional de Bellas Artes

Concierto / Dirección Nacional de Bellas Artes

Por: Teatro de Colón | Fecha: 25/11/1909

AÑO 1 REPUB L ICA DE COljO :M BIA SERHJ 1 . lJisemanariojoco-seri_Cl'itica SIMial.,. pollUca. Dir"tor-Red.actcl', E. M¡nT.E.VAR MOLINA-Carioaturista, LUl'iLROT Vale S 3 :So~. á, N ovieml,l'e 2 5 de 1909 Número 2.°' - -- --------- i Tú por el Conol! . Tras de Oolombia hecha ruinas Et Tío Sam hambriento está, Ya SI! engulló á fllilipina3, Yahora engulle á Panamá. • • • • • • • •••• ¡ Yo por el Conol! Mas la pluma de un diarista Agttda como un puñal, A Rqose:velt sigue la pista Para abrirle otro CAlIAL ..... Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. DON QUIJOTE DON QUIJOTE Palique sociol Con altivez y franqueza hemos empe­zado una lucha eo persecusión del trjun­fo de la verdall v de nuestros derecbos. No se nos oculta lo azarosa~ que se nos prescntan n uestre s tareas bAjO esa forma, en un país donde el cretinismo se produ. ce silvestre por tollas partes. Mas nna vez rebasado el círculo estrecho en don­de el fanal ismo nos tiene encerrados, ha­bremos ele seguir luchn.ndo con tezón y energía hasta llegar á la meta desead;". En esta tierra en donde tanto se prego­na la libertad, es muy justo ya, que ha­ciendo á uu !:Ldo l'ancios prejuicios reli· giosos, empecemos á marehar hacia los dominios donde ln Verdad no es nna quimera ni la I,ibertad un mito. En nuestro sentir es más meritorio y leal P:J­ner en claro de una vez nuestro modo de pensar, que ocultarse tras los dinteles de uno. sacristía, para sostener principios que la civilización ha empezado á hundir para siempre. Comenzada nuestra I>.bor bajo esa forma, no retrocederémos un ápice, ann cuando nos haya de costal' la pérdida dc la tranquilidad y aún el sacrificio de nuestras más risueñas esperanz'ls. Segui­rémos pues, trabajando en ese sentido, apartando la;; malezas de nuestro camino y marchando adelante, siempre ade­lante. L .. Dm,;ccróN Dios ante el sentido común Hay un vasto imperio gobernado por un monarca cuya conducta caprichosa es muy á propósito para confundir los espí­ritus de 5US vasallos. Quiere ser conocido, qnerido, respetado y obedecido, pero no se presenta jamás, y todo cODspira á embro­llar los corlotÚmientos que se podrían for­mar á "erca do él. Los pueblos sometidos á BU poder no tienen otras ideas sobre el carácter y leyes de su soberano invisible que las que le dan sus ministros; éstos convienen, ein embargo, en qU,e ellos mis­mos no tienen ninguna idea de su amo, que sus vfas son impenetrable. y ~us mi­ras y cualidp.des totalmente incomprensi­bles. Por otra parte, no están acordes en· tre sí, acerca de las órdenes que suponen dimanadas del soberano cuyos órganos se dicen, y cada cual las annneia de distin­to modo á cada provincia del imperio. Se desacreditan unos al otros, y se tratan d~ falsarios é impostores mutuamente. Los (edictos y ordenanzas que se en­cargan de promnlgp.r son obscuros y enigmáticos para ser entendidos ó adivi­nl! odos por los vasallos á cuya instrucción se destinan. Las leyes del monarca ooulto necesitan intérpretes; pero los que las explican están siempre en disputa sobre el medo verdadero de entenderlas, es más, no están 'de &cnerdo consigo mismos. 1'odo lo que cuentan de su ocnlto prín­cipe, no es Inás que un tejido de contra­dicciones; no dicen una sola palabra que inmediatamente no se halle desmentida. Le llaman soberanamente bueno, y sin embargo, no hay n&die que deje de 1&­mentarse de sus decretos. Le suponen infinit.amente sabio, y en su adminitra­cion todo parece ir en contra de la razón y del sentido común. Alaban su justicia, y los mejores de sus vasallos son gene-l'almente los meUOR fa\'orcc,idos. Aqegu­ran que 10 ve todo, y '" presencia liada remedia. El es, se dice, amigo del orden, y todo en sus dominios se halla en confusión y desorden. Lo hac0 todo por sí mismo, .1' los resultados corresponden 1'ar¡, ve? á sus proyectos. Lo p"eV­cientemente las ofensas, y por lo miRmo ponc á cada individuo en estado de que las haga. Se admiro, su sfLbid urÍl\ y la perfección de sus obraR, no obstante es­tán llenas de defectos, y "on do poca du­r: tción. Está continuamt'nte ocupado en hacer y deshacer, despn6s en l'eparar lo que ha hecho, sin tenor j"má, tiempo de estar "ontento de su obm. 1<;n todas sus empreslOs no se propone mlÍs que s!\ pro­pia gloria, y no logra ser glorificado. No trabaja sino por la fclicidall de sns Ta­salios, y estos en gencr,tI cal'ecen de lone­úesario. Aq uollos á quienos se supone que fo,vorece, son por lo común los menos sa­tisfechos de su suerte. Se les ve casi con­tinuamente alborotados contra un señor cuya grandez" no ceS"n de admirar, ni de alaba,' la sabidnrh, de adorar la bon­dad, temer la jllstic;a y reverenciar las órdones que no cumplen ja,más. Este imperio C8 cl mnndo; el monarca es Dios; sus minist.ros son los sacerdotes y sus vasallos los hombres. . JUÁ)f .MESLIER ( úmtinuará) LA RELI6ION y LA EDUCACIOM (l'RAGMEN'ro) "La religión y la enseñanza difieren en sns objetOR, se ap>1rtan pOl' lados opuestoR en sus p,'ocediruientos, y se ex­cluyen por rawnes de propia existencia. La primer.>a-pootende 1 ... posesron ún;-ca de la verdad inquirid" pOl' la fe, la se­gunua indaga, invesbiga, deseubre y con­sagra pOl' medio de la ciencia, que es la comprobación do las loyes de ¡,. natura­leza; la reli~i6n para los eredos de su inquisición filosófica ha e"btbl~cido cas­tas privilegiadas {,las que les concede ex el usi vas pl'errogati vas elc comnnicación con la divillidll.d; la educaci6n moderna ha nivelado á los hombres de cualquier color y pro"edencia con el rasero de la democracia, ha fortalecido al pobre para la lllcha, por la vida, ha vjgorj~ado al débil por el ejercicio de SUR múeculo. que dau qida y movimiellto IÍ la céluh cerebral, ha dignificado tí la especie hu­mana por la conciencia de su propio es­fuerzo, que no e'pel'a de arriba lo qae puede obtenerlo aqul en la tierra, pletó­rica de fuerzas, de riqueza~, do lecciones sabias é infinitas que permanecen o"ultas para el qllA no ejercita su ce"ebro, sn co­razón y sns manos en la faena diaria y tenaz. La religi6n y la educación son dos con­ceptos contradictorios, que se mantienen unidos sólo cuando los pueblos que los practican carecen de nociones de cultura é ignoran 108 progresos alcanzados en el mundo por qnienes separaron de la cosa pó.blicá'lo~ue es privativo del fondo de la conciencia. (De El Pr,paga,.di.·ta de Quito) "La Caravana"-Con este Dombre se ha empezado á publicar en est,. ciudad, un periódico de informnción gráfica, bajo la acertada dirección de los Sres. Manuel de J. Romero y Cario! AfaDp.dor B. Lo saludamos y con gusto le retornamos el canje. VALE $ 3 Nuestro grabado Siempre será tan'" 00¡,1" el estampar cada vez que la ocasión 80 prts .. nte una protesta enérgica coutm oIquelloll malos hijos que en hom .. daga, armncarou uu jirón levantn airosa en nuestro graball". A su sombra el Tio Sam oculta su felonfn y a;'aricia, y sei'iala BU presa codiciarla, "O tan to q ne Harrit, el bravo d~fHllBor de los débiles, con un puñal, sÍluholo del dHedlO en este caso, quiere herir y amedrautar al déspota Roosevclt, que se oculta tras la República que traicionó y robó, temhlando ante el derecho encarnado en el patriota 1If. Ha­rrit. IDIOSI Yo l'IO adoro fetiches seculares, á. cuyos pies se d,l'l";\stl'a. td vulgo necio, ni me embriaga. ~l arom~\. eu los altares de la. mirra servil que yo desprecio. Yo no me inclino ante ese Dios que ultrajan aquellos que bla.sf~man de tm nombre, yespecula.lI Con él y lo reba.jan á. la. mezquina condición del hombre. Yo me inclino ant.e el Di l~ á. quien abona. infinito el poder de 8U talento: por él sus pobres cá.nticos entona con plegarias de alnOl' el peuoiamiento. Yo adoro á Djos! al DilJ. que DO comprende el hombre en su ruindad de inteligencia. al Dio! etd-rno qUE:! en el alma enciende la. acusadora luz de la. conciencia. n. TAVERA AOOSTA LA CRIADÁ BOGOTANA Us6 primero frisa, después regencia, Chaqueta con hombl"el'aS y angosta manga; En el blanco pañuelo mnch~ KanangtL, Yen cara burlon~ poca. inocencia. ¡Al principio, un prodigio! ¡Qué diligencia: ¡Cómo 8R.ZODf\. y friega, cuál 8~ arremanga! Muy juiciosa, muy dócil; es un ganga Oon botines; ~l colmo da la. decencia. Transcurre un mes, al cabo rompe una- copa.; Se tarda por la cecina; O un hilo de su trenza deja en la aopa. Luégo, abur L .. Y se esca pa de la cocina. ¿A dónde iL'" la .pobl'e oin cama y ropa P ¿Quién lo ... be? El a¡¡ente que esté. en la. (esquina. EL POLICIAL En medio de la ca Ile oe paoea Grave, porque-su cargo así 10 exige; Oumplidor d, 1 .. ley, nnnca transige Con criada. 'forpe, desdeñosa 6 fea j Su mirada de enojo centellea Si un gaiián por la aceta se dirige; .'. y si ri~en dos chinol, 61 18 erige En 'árbitro y censor de la. pelea. .Arma un ébrio espantosa gritería, Saca el puñal,. al vulgo de.afía y en bélica postura se coloca, -Señor agente: alli tendremos muerto Si usted no acudeL •. _Sí, señor: ea. cierto j Pero á mí en eaaa cuadra. no me toca. JULLO DEFRANOISOO PELUQUERIA CHIC-.-En este ~Iegante Establecimient? en don.de el cliente qu.e.acuda á él saldrá satisfecho por la cultura 1 aseo que alli relDan. También se vend~ una. maravl)losa IO,Clón ~ara la CaIVIC!e y la caspa, la cual tiene ademi\s un perfume magnIfico. Calle H, num~ro 108. Frente a la Llbrer!a Amencana. Empresario, J. Jo • ./)(IU. Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. DON QUIJ01'j<} HUI.NCISCO fERRER lIé aquí como est" apóstol del Dere­cho, de la V·prdal hundimiento, porqne á su sombra viv~n y meuran . comunidades reli_ ,iosa~ que son la vergü6nu del mnndo ei Tilizado. Gomo una r~paraci6n ,¡ la ofensa inferi,l .. á la ci vilíza<:ión con .. 1 fusilamien­to de Fruncí"co F~rrer. "S l".cesarío que mañana 1,,9 n¡jijmas b.la" que cortaron tlln preciosa ~xi,t"",,¡u, tt\1'lllillen con los dla! de "S .. r"y ~/J"l" y sugestionable, qne ha,mArca,lu 1I0a p'(gioa oegra ell la historia con tar, inju~to y vi!lano proc8- der. Psnsamientos - IJ~' procesiones son farsas grotescu" .Y aún itlolátricas que el cristianismo pensador quiliera ver 8upri­midas, pur honor irector de este peri6dlco, en Facatativá, corresponsal de los princi­pales periódicos de esta capital, entabl6 una activa polémica con motivo dellla­mado suicidio del Sr. Sotero Acosta, su­cedido en ese entónces en aquella pobla­ción, con el fin de comprouar que lo que había pasado no era sino un vil y tene_ broso as~sinato. ApesBF de que se practi­caron algunas diligencias por 109 indicios que se presentaban, los cuale~ demostra­ban que 88 babía cometido un crimen ale­voso, 1301 autoridades poco y ningún caso hicieron, acabando por entre/mr al sueño de 101 justos, un asnnto qne conmovi6 hondamente al la honorable sociedad faca­tativeñB, llegando hasta el extremo de te­ner nosotros que abandonar esa ciudad, porque corrla in!Dinente peligro nuestra vida por las gestiones que·hicimos porque se pusiera en clafo tan espantoso crimen. La casualidad ha venido á favorecer el incansable celo que con tez6n y sin des­mayos el rllspetable caballero Lucinio Bernal, miembro allegado de la familia de la vlctima, ha desplegado por encontrar el presunto victimario, con el hallazgo d~l c!'dá¡ deJlna..ni - al pru:8ce de..A¡! quince años, que se eocont1·ó en el sitio en donde hoy se conltruye la Casa Oon­slstorial. El encuentro de ese cadáver tie­ne íntima afinidad con el crimen conocido con el célebre nombre del PUMte de La. AninJas, sucedido hace ya varios añol y el cual Be cree con razón que fue per­petrado por la misma persona que quitó miserablemente la vida al Sr. Acosta. R.",ún Daleoe. las autoridades de aquel V.ALE f$ 3 Grado-Felieitamos á la espiritual se­ñorita MiHI .. Josefa l\Iunévar, pr.r el bri. liante grado ;¡ue obtuvo ayer en la Es­cuela ::Sor.nal. La nueva institntora sos­tuvo el {IX amen eon una perfección admi­rable POI lo cual me':oci6 calurosas felici­taciones. Va tam hién nuestro aplauso para. las señoritas maestras. porque for­mando iDstitutoras de esa cat{lgoría, ·al· gún día saldrá avante la euseñanza nacio· nal, que es nueStra verdadera redención. Líneas negras-En Quipile falleci6 el martes pasado 1" Srita. D~ Mari" Ro­mero. La Parca que implacable se lleva á la regi6n de lo dosconocido los seres más queridos, no quiso detenerse en lo! umbrales del hogar en donue la prima­vera sonr.eía é implacaLlemente arrebat6 nna vida que estaba en el zenit de la ju_ ven tud. Para la honorable familia de la extinta yen especial para su hermano D. Manuel de J. Romero, dilecto ami¡¡o nués· tro, enviamos nuestro más sincero pésa­me. Sobre el sepulcro de la Srita. MarÚl, deshojamos un puñado de sipmprevivas.· Un periódico á quien uo quoremos haoerle el reclamB, ha levantallo cátedra en sus columnas para enseñar gramática y ortografía. Bien se ve que el 6rgano sa­cristanesco se cornpl""p I'n leernos y re­leernos para cogernos errores que se pasan eD la imprenta. Gracias por BU atenta lectura, colega, pues eso nos prneba que sí le gust,"nos! ... Mnting-Ayer en la tarde se reuni6 en el Parque de los Mártires un grupo respetable de j6venes con el objeto de ovasionar la mtlmoria del fundador ne las Escuelas Modernas en España, D. Fran­cisco Ferrer, villanamente fusilado por la influencia perniciosa del clericalismo. No se pretendía con esa manifestación levantar una zambra, sino rendir culto á aquel grande hombre que se sacriflcá en aral de la futura begemonía de la juven­tud pensante. Mas hé aquí que la Policía se pr"sentó y disolvi6 aquel grupo de jó­venes. Sin embargo, ya está puesta la primera pieJra y ~sa manifestaoión será sin duda la base en que se ha de apoJar el edificio en donde iremos á rendir culto á la Libertad y á la Verdad. Sesión solemne-El miércoles diez y siete tuvo lugar una hermosa fiesta en el .l1ufel eo".im:nlal para celebrar la fiesta que anualmente han acostumbra.­do verificar las honorables matronas D~ Ana Josefa Olarte de Uribe y la Srita. Alicia CollazoR, Directora y subdirec­tora. respectivamente, del aoreditado plantel denomiuado Santa Oecilia. La fiesta en meución por la alta categot'Ía de la personas que asistieron á ella, por la manera sobresaliente como se lucie­ron Iqs señoritas alumnas y el derro­che de luz, de lujo y hermosura que hubo esa noche, ha liejado un risue­ño recuerdo en todOil los que tuvimo el honor de asistir á ese hermoso torneo civilizador. N cestras más entnsiastas fe­licitaciones para. las rureotorM el e tan aristocrático y adelautado colegio, las que hacemos extensiva4 á las inteligente. Sritas. Paulina Valderrama, Rosita Mar­tlnez, Elisa Andrade (éAta última hi. jI' del Sr. :Ministro del Eouaior) por l. manera brillante como se lUCIeron en lo. difíciles números de recitaci6n, canto y • 1 - L __ '! _; ... .n~,."' .... Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. DON QUIJOTE ~~~~~~.~I ~ "B. .4. V A" ~ , TRES EMPERADORES I~' Estamos dando á la venta una nue. va cl3se de la afamada cerveza TRES EIPERA 'OR S elaborada con las más selectas materias primas por nuestro nuevo J efe cervecero Sr. 'VaJdemar Franck, cuya competencia ya ha sabido apreciar el público de buen gusto. El color de oro de esta cerveza y su aroma, semejante al nlejor vino espumo­so del Rhin, la hacen la bebida prediJec­ta de la alta sociedad, y principalmente del bello sexo. DOCENA A $ 200 Esta' nueva cerveza, además de la vistosa etiqueta de los tres Emperadores alemanes, lleva en el cuello de la botella una nueva etiqueta cOllla Placa de Oro y las Medallas obtenidas en las diferentes exposiciones. Deutsch-Columbianische Brauerei G. m. b. H. Bogotá, Octu bre de 1909. ~~ .... DGGGGGIIGIii~~tIl~~~II$OOO"'~ I Se necesitan 1 diez mil hombres .que quieran con~umil' el FAMOSO CAFE ESPECIAL I I En la A venida Colón, número 223 se I les venderá, I bUAno y bal'ato. I it\ooo.nOOnOSOOU"IIO'.~O$OOOOOOUOOII"*"IIUIt.UUtft:~ D aONDICIONj
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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Don Quijote - N. 2

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Imagen de apoyo de  El Alacrán - N. 1

El Alacrán - N. 1

Por: | Fecha: 28/01/1849

Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • • • Envuelta en n egro ropaje, Jeotil, voluptuosa i bella cual hurí. Como al tra,·e .. del follaje e n1ira luciente es tre lla yo te ' rl. En tu frente 1 ( bia inocencia, 1 en tus oj (JS habia fu ego qu e mador; "' Er tu al icn to la esencia Que Q hala al matinal riego tierna flor. Al travcs de tu n1i ·ad, Lampioa, azul, trasparcnte en ~1 crista 1, Jirar vi tu alma cncun1brada En un mundo dife rente di,linal. • i me pareciste hcrmo a, Si yo admire como hombre la mujer, Si amé tu voz melodiosa 1 si pronuncie tu nombre con placer; Si te amé, Con pasion .. • s1 yo te amo i con arclieote frcncil • • 1 • • • • • • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. , ' • • • ~¡ en tu nlifa la n1c infJ 1110 Si doblo hurni lJc u\ i freo te • ante lL Sí por ti mi pecho jin1c .... No es solo porque tao bella Fue Que te vi yo: el espilit r· sublitne tu ser tolo c.lestclla • que me hirio. JI. • • Soi joYen,--soi an1autc . de lo grande, 1~engo un aln1a s dicnta de eo1ociones, l\li pecho ~e halla abiet to á las pasiones • ans1oso por gozar; lie amado ya .... ¡ n1cn tira ... ! n1c cngniíaba Cuando pensaba amar a aquella hermosa ... , Pasion sensual aquella i voluptuo a, 1 aq nello no era a ruar! A mor de los sen ti dos en que 1 aln1a A toda fruicion quedaba ajena, Amor torpe i menguado que enyenena que mala al coraz.on; Amor que pasa sin dejar siquiera Un recuerdo halagi'tcño en la memoria, Ji~se ao1or n1arcarc\ n1i humilde historia, con inmundo borron. Pero el amor que agora siente el alma, Que el corazon rendido ~iente agora, El santo an1or que tu n1irar, se iíortt, en mi seno 11rcndio, • • • • • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ' ,., -\>- Purifica mi ser i n1c enaltece, l\lc exalta, me releva ante n1i mismo: Est~ amor como el agua del hn u ti. m o sobre mi sien cayo . • Al amarte me igualo a tu grandeza, Para an1arte preci o es con!pr endcrtc, Te amo i te comprendo :-yo soi fu e rte, • me si e oto igual á ti. El el rculo de luz. que te rodea, El espíritu excelso que te anima_, l\1e admiran; mas no harao que yo reprima mi loco freo e si. Como el aguila osada i altanera, Cuya vi ta la luz del sol no o fu -~,, Cuya mirada al sol altiva busca posandosc en el sol; 1\lis ojos en tus ojos tamhien 6jo, 1 los clavo en tu frente sin mancilla, 1 en tu fresca suavisin1a n1 ejiUa tinta e o puro arrebol, Yo te arno-te adoro con delirio , 1 puc nlC atrevo Carolina a amal'lC Seré digoo de ti,-i osaré hablarle de mi éirdh:nt e pn ion . 'fu sa br~'ts Carolina que hai un alzn " Qu é a ]el tn .. a feliz ama i comprcnarrcra Cu ando quiere mi loca voluntad , 1 yo d e t engo t u ve l oz ca r rl:ra , 1 d on1ino t u fi er a 1 ibertad. 9. L i bre quie r o d ej ar t e a t u a l bcdrio, LléYame d oncle q uieras, S ch:t l e l din , \ • S a l gamos de es t e suelo , corce l mio, . 1 lleguemos de l mundC' has t a e l confin . 10. Ya y ucl as c on f uror l as c i n1as a ltas Co mo Yiolento rueda e l huracan, I con osado at r cvin1iento saltas Las grandes , ·ali as q ue a l camino ~es t án . 1 ~1 . D e t ente . .. . n o t e para e l p rec"picio ? N o .,; es l a muct te con h or r o r en é l :> 1 O h ! busca un prado c1 u e u os sea p ropicio 1 all í cl escansa r ctuo , tn i corcél. 12. S é docil i obediente, ca l n1a un r a t o, I vu élvexnc pacifico a mi }Josar, O be d ece suo1iso mi Jnandato O ue c~ l oi an atlo i '1'ieto t c p o~ -.r. • • • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • • • 1 -7- 15. 1\Ii ra a tu izquierda cristalina f uen t e En dul 'C prat.l trécuula corr r, 1'us dos orcj(\s r cl<'lS ~cia e l frente Sella les son de q.ue qucr1 ,' s beber. 14. · Van1o al1lt, i nl pié de l tronco verde Y o m e re costaré, tú bchcra , ' La fr esca grama en l a ribera muerde, l un instante gocemos de so l az. . 15. Al fin 11 egatnos ya, d jartc q uiero Libre h ollar e te pra o, e te pensil, 1' u c o la cual lindi in1o plumero Date tus ancas, cothas i cuadril. 16. Ya en el cé ped estoi, i del bocado Antigo t e ] ibe1 to i del jaez ; Anda con l ibertad en este prado, 1 pac e , i goza que ll egó t u v z. 17. Al tronco t e dirij c .. an 1clante Para ra car tu cuello i tu ccr"Tiz , 1 con rudo oni lo 1 ctronantc pele l os aliento· tu nariz. 18. 1\lil gota de sudor bnña 1 tus ojos Qu e por l o poros a l c n de tu si n, S ñal e tu ar o r i tu arrojos S on t u puma s ~• ... J. Pcnsa te <.11., con loco d satino Que en mi patTÍa se alzo tirano vil? I que débiL el puchlo granadino Al duro yugo· uobl go servil 1 C)C) - JíJ. ¡Vano pensar! n1as i llegase un dia I)ara n1i patria tan fntal i atroz, La tuya con tni Srtngre corrcria Lucl1ando contra el dé pota feroz. 2:5. Si alguna vez la libertad fallece En este suelo (ptc nos ,,¡o nacer, 1 el dulce amor de libertad perece Pudiendo el despolismo prevaler: . 2~. Entonces si, 1 a libertad busquemos Del d si rto en la inmensa soledad, 1 I huyamo~) mi corcél, donde encontremos Nuestra d u lee i querida LIBERTAD. DOGOTA-1847. G. G. DE P • • ... • • • • • • • • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. - - • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Impreso en Gráficas CIMAZ. Avda. Jiménez No. 52 Este. Edición facsimilar numerada de mil ejemplares por suscripción y cincuenta ejemplares en , numeras romanos ' Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. JOAQUIN PABLO POSADA Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Hoy Sale "El Alacrán" Cuando el "tuerto" Arn1ero comenzó a echar espuma por la boca1 mientras pa­te3ba y destruía a pisotones una hojita de papel en la Plaza de Bol1var, los bogo­tanos comprendieron que los autores de "El Alacrán, no habían exagerado las perspectivas del nuevo semanario en su anuncio mural, uno de los más célebres reclanJos de nuestra historia publicitaria: 1 "Hoy sale ''El Alacrán", reptil rabioso ...que hiere sin pied~d, sin compasión, animal iracundo y venenoso que clava indiferente su aguijón. Estaba entre los tipos escondido, empozoñando su punzón fatal, n1ás ¡ay! que de la imprenta se ha salido y lo da Pacho Pardo por un real". "El Alacrán" sacudió a Bogotá con más vehemencia que el terremoto de 1785; pero en este remezón no pagaron los quines las clases pobres. Por una vez, el movimiento telúrico espiritual se enderezó exclusivamente a las clases ricas. "El Alacrán" era venenoso, y su piquete colocó a sus víctimas en las contibrüe­dades de la locura. Nada, pues, hubo de raro en que distinguidos miembros de la cachaquerz'a, y los patriarcas de la aristocracia económico social de Bogotá, con­vencieran al señor Pacho Pardo de que sus intereses estarían mejor protegidos si se abstenía de vender y distribuir en su acreditado establecimiento el periódico deletéreo cuyo autor se guar!lecía en el anonimato. A tiempo que el papá de la divina Luisita Artnero le entablaba a "El Alacrán" un proceso penal, los señores A.T. Rendón, Ignacio Ospina, Salustiano Leiva, Diego Suárez Fortoul e Hipólito Pérez, llegaron armados de revólveres a la imprenta del señor Sánchez Caicedo y, en ausencia de éste, exigieron amablemente a su socio, el señor V. Lozada, que les revelara, en el acto, el nombre o los nombres del autor o los autores de "El Alacrán. El señor Lozada sabía que, salvo una órden judicial, no estaba obligado a suministrar dicha información, y no se intimidó. El matonesco proceder de los • Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. cachacos indignó a los )ditores e impresores de Bogotá, y, tanto en "La Prensa" como en "El Neogranadino", se condenó con energía la actitud antidemocrática de los señori los bogotanos. o turciú en :-,u b \r:; ·, por sus propias bocus, In id en tidud de los o u tores de "El Alucrun'': Jouquín Pablo Posudu y U ~nuun UuLu!rr •z de Panercs, un1bus oriundos de Cartagena, primos hern1anos; hijo, el prinu~ro, del venerable general y guerre­ro de la independencia, Joaquín }>osada Gu tiérrez, y de doi1a Concepción llravo. En cuanto a Gutiérrez de Pineres no hemos podi4_e reunir, desgraciadrunente, Jnayores datos biográficos. El cerebro de "El Alacrán" era Posada (nacido en 1825) aunque Gutiérrez (naci­do en 1816) le nevaba nueve años. La idea -"la maldita idea"- de fundar el vi­rulento semanario "con el propósito de tnoralizar el ambiente" se le ocurrió a Po .. sada, y el SO ojo de los artículos y de los poemas publicados salieron de su plu­ma. Sin embargo1 Gutiérrez de Piñeres se solidarizó con su compañero en todo lo dicho y afronto con él las muchas y desagradables consecuencias de su aven­tura periodística. En su excelente libro de "Reminiscencias", Juan Francisco Ortiz, uno de los bu e· nos runigos que tu,vo Posada, lo describe así: " ... Una barba negra conzo el azabache, unos ojos negros ta1nbién, rasgados e in­teligentes, una mano de seiiorzta, un pie aristocrático, un cuerpecillo bien pro-• porcionado, todo esto unido a su viveza y a su festivo humor, contribuye a que Posada se capte las ronsideraciones de la parte fenzenina. Canta co1no un anda­luz y se aco1npaña con la guitarra o con el piano, habla con propiedad y desent­barazo, en tiende el francés, el inglés, el italiano; en [zn, es un garrido 1nozo, que brilla en rodas partes. /la tenido unos cuan tos desa[z'os por qu{tame allás esas pajas; gasta su dinero con1o un lord, y ¡ay! del que le ofenda en lo 1nás 1nt'ninzo. l)ero tatnbién puede contar con su sincera an1istad aquel a quien Posada dzjere: soy a1nigo de usted. Por tales seiias se vendrá en conocirniento de que Posada es un joven a quien es preciso atnar por gent:roso, por entendido y por valiente". Este pergeiio, más o n1enos correcto, es incompleto. En otras "Reminiscencias", las del señor Cordovez !Vloure, y en un lamentable esbozo biográfico que le hizo el señor Jorge Bayona Posada, se exhibe una imágen completamente distorsiona­da, ex tra1ía a la realidad, de lo que histórica, literaria y humanan1ente representó la extraordinaria figura de Joaquín Pablo Posada. Cordovez Moure y Bayona Posada nos pintan el ~-etrato desdibujado de un hombre frívolo, que utilizaba su grande ing ~nio para hacer travesuras, difan1ar a las personas, cometer locura tras de lot:ura, y, sin ninb'Ún sentido de la responsabilidad, perderse en los laberintos de la bohen1ia y del juego, pecados por los cuales la sociedad lo rechazó y lo des­terró de su seno. Cordovez concluye, y Bayona Posada lo refrenda, que esa fué la merecida sanción aplicada a quien, abusando del talento que le confirió la na­turaleza, infringió las leyes divinas y humanas. Bayon& Posada dice que las audacias de "El Alacrán" alarmaron y aterrorizaron "a la pacata Bogotá de entonces". ¿Entendió por pacata el hecho de que la so­ciedad bogotana de 1849 era puritana, tímida, introspectiva, ingenua, pacífica, tranquila, n1oderada y modosa?. Pues el señor Bayo na Posada no supo de la misa la media, porque "la Boeotá de entonces" no poseía estos a tribu tos que perrnitiríau de1inirla con1o "Pacata". l'vlodernos historiadores, v: gr. Jaime Duar­te }.i"rench, han descorrido el velo con que la historia oficial, ella sí bastante paca­ta, trató de encubrir piadosamente e~e período turbulento. La lectura de "Las Ibañez, o del "t.,l oren tino González", por ejemplo, nos muestra una sociedad bien diferente de la "Pacata" que se imagina el idílico Bayona Posada. En los periódicos de la época encontramos una sociedad efervescente, agitada, impúdi- ' Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ca e hipócrita, donde las aventuras sexuales emulan con el refinado París , donde el lujo de la aristocracia es ostentoso y soberbio donde las casas de juego flore­cen gracias a la asiduidad de los clientes ricos. Una sociedad corrompida, inmo­ral, esclavista; una próspera burguesía de cotnerciantes, y una no menos prós pe­ra aristocracia de terralenien tes, cuando no van las dos de lantano, que pueden entregarse a la euforia 1nientras el grueso de la cotnunidad, los pobres, los obre­ros, los artesanos, los parias, trabajan para producir y se ahogan en la miseria. En este tipo de Sociedad, ''El Alacrán" no podía tier, ni lo era, simple travesura de dos jóvenes alocados, sino una en1presa de crt ti ca in1placable realizada por personas que habían ton1ado conciencia d la realidad y cuyo conocimiento les ~indicaba que el ca1n bio social se lograría única1nentc por una transforn1ación re­volucionaria. "El Alacrán" aparece el 28 de Enero de 184~, y ya en el núrnero tercero sus au­tores paraban en la cárcel. La l )y de in1preuta, empero, no prohibía que desde allí escribieran y continuaran editando el periódico, si tenían como hacerlo, y lo hicieron. En el nún1cro 5o., publican este soberbio editorial: "Lu repetitnos: nada debe ex traiiarse ele lo que se haga con los editores a e "El .rtlucrán ''. .S'i tuviéran1os que lzabérnu/as c o n las !!lasas populares, debiéramos te­tner quizá1 al pro l'Vcar su encono , u na l'e ngan:a f e roz, pero esa venganza ser{a pronta )' Jecisi va . Pero h e n1o s entrLdo en lid con la aristo c racia de es te paz ~s, con los ricos; y la ven­ganza tle !odas las arisrocractas e n todas lus ritnnpos J' tudas /os pa/ses deltnun­do, esa venganza cvnzo lo prueba la historia ha sido sienzpre larga y tenaz. 1 Los r1c.:osl - /Jan pen.\ado que ser/a cosa fácil y hacedera acallarnos, y para ello han desencadenado contra nosotros todos los nledJos de acción, es decir, han puesto en juego el gran re Jorte ele/ siglo: el dinero. ¿Lv han cons~guido ? -No. ¿Lo cvns~gutrdn ? -No. /llientras tcngalllos la 1nente libre y una plu1na; n1ientra~ veanzos a los Calvos, 1 1ontoyas, Ur1be;:,, SanturnarúJs, t ·scvbares, Silvas y tantos otros, que gastan en una noche de org(a, en el traje de una nzujer, o en una nzesa de ju¿go, tantu y nzcis de lo que bustarúJ para satisfacer las necesidades dti cincuenta fanzilias ul d/a siguiente; n1ientras cenlJanJos ocasióll de contetHplar esos horribles inicuos con­trastes de la superabunuancuJ de lus UllO~ y la suprenza tniseriu d fuz' uno de los editores de "El Alacrán". La publica­ción de ''El Alacrcjn "~fue una locura de un joven de 23 años, pobre y en deses­peración; fue un grito de reconvención lanzado contra una sociedad que me abandonaba, que se negaba a darn1e pan ·y abrigo en cambio del trabajo que yo' la ofrecz'a. /!ay momentos en la vida de un Izo m bre -en la vida del joven ql.J.§ se ve solo y desvalido, del joven orgulloso que no quiere mendigar,- momentos de angustia imponderable, de dolor supremo, de profundo desaliento, de a1nargura infinita, en que perdiendo toda esperanza de dicha en este mundo, se aborrece a sz· mismo, reniega de la sociedad y odia y maldice la existencia. E.. n uno de esos momentos vistió el hábito de. monje Fray Luis de León; en uno de esos rnomrn­to. r se suicidó Larra; en uno de esos momentos vino a mi tnonte la maldita idea de escribir "El Alacrán" . .. Seis meses de prisión, seis meses de inicuas cobardes persecuciones, casti~aron bastante la imprudencia que hab(a cometido. Poco importa lo qu~ ahora diga el señor Caro: "El Alacrán" está juzgado ya. Las personas más ofendidas en él. han olvidado los agravios que se les hicieran; de muchas he recibido pruebas de inte­rés; a muchas debo servicios: todas, aún las que más severas fueron al principio en su juicio, hoy me disculpan; porque mi conducta posterior ha pr()bado que conocz' mi error, y que me arrepentz' sinccratnente de haherlo con1etido ··. .. Hac;ta donde es falso el "sincero arrepentimiento" de Joaquín Pablo Posada, lo veremos adelante. En ese momento debía estar arrepentido por necesidad, since- Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ra1nente, , para no exponerse , bajo ningún pretexto, al gnrrote, duro e inclemen­te, de sus adversarios. Sigamos con la respuesta al señor Caro: ''Cuando yo publiqué 4 •h"l Alacránu, cuando insulté a aiK"''a persona anres, en­tonces .Y después, siempre nze ere ( ohli~ado a res/)ondrr dr tn is pala !Jras de toclns modos. ¿Qu1én ha pedido alguna vez una satisfacción cahallfrosa que ha 1a .Hdn desairado? Sietnpre he profesado el principio de que todo hotnbre de honor que insulta a otro por la prensa, sea cual fuere la condición de este, está desde ese 1n0n1ento obligado a satisfacerle, si él lo exige., con1o hn111bre y caballero. 1! 1 hombre que desprecia a otro no debe ocuparse de él ni para insultarle. El insulto público presupone la igualdad, presupone la intención de sostener con la espada en la mano y frente a frente. lo que se dijo con la pluma escondido en el fondo de una alcoba ... Cobarde es el que, como el sefior Caro, insulta [uriosa1nente a un caballero, y cuando, ese caballero le cobra satisfacción se rehusa a dársela, con especiosos, rid¡'culos pretextos; cobarde es el que, como el seFior Caro, insulta la memoria de los muertos, tratando de echar lodo a la cara de una infeliz vzuda, a unú . indefensas, desdichadas huérfanas, a la v1uda y a las hijas del señor Ulprano G oru:ález . .. De • ho . .v más, puede usted in su/ tar1ne cuanto qu il'ra; su insondable bajeza, su cobardza confesada por usted rnis1no. le autorizan a usted parn ser arrogante. Y no piense usted, seiior Coro, que nadie le crerrá que usted se relutsa a batirse porque me desprecie, porque nadie puede creer que un hon1 bre que confiesa pú hlica1nen te, por la prensa y bajo su [irn1a, que se honra. se df'cora y enaltece con es trcchar Pn tre su mano la. 1nano de un asf'sino, nadie le creer a a us­ted que usted desprecia a nadie. Setlor Caro, usted no se bate, porque usted es un cobarde. De hOJ' 1nás puede usted insultarme cuanto quiera ... " En "La Civilización" el señor Caro contestó que no contestaba, y acusó a P sa­da de ser un duelista que "reta a los escritores de la oposición" para ~sesinarlos. Posada le dá una respuesta contundente en el "Neo-Granadino" de Mayo 17, y aquí tertnina la polémica. El señor Caro resuelve la si tu ación por el mrdio mas expedito: irse del pRÍs. Así elude dos contrariedades: el duelo con Posada y un juicio por calumnia que le había instaurado José l\faría Samper. "De modo concluye Posada su segunda respuesta- que todo el que sea ofendi­do por el señor Caro tiene que resolverse a conformarse con acusarle ante un jurado; porque el señor Caro es co1no el juego de sable que enJeñaban los Colo­nes. todo evasión; o co1no los pastusos en su 1nodo de guerrear, que hacen su tiro, se esconden o huven ". Vistas las cosac; a la di~tancia del tiPmpo, no pensamos que don José Eusebio Caro fuese un cobarde. Antes bien, admiramos el valor y Ja inteli_f!encia conque defendió sus ideas y combatió a sus en~migos políticos. De nin{.,ll.ln modo com­partimos su pensamiento, pero no creemos que nadie estr obligarlo a pelear en tR.rrenos en los cuales no tenga por lo menos, una probabilidad de salir bien li­brado; y frente a Posada, en un duelo, o a Samper, en una acción judicial, las posibilidades de Caro eran nulas. Su decisión de abandonar el país fue la decisión ·de un hombre maduro que no se deja provocar innecesariamente a actos de tPme­ridad. Duart.e French anota en "Las Ibañez" que Jos apartes de la réplica a Caro donde Posada s(' (}rrc¡Jirnte de sus locur:1s rn "El Alncr:\n" y canta l:t palinodia ''son , una cnn1pun¡;ida confesiún de culpa, con cvntrtción de cora .. on )' ¡JrOfUÍ'\itn dr erunienda . .. J>ero -añade- esta lu.onildad no es sillo aparen te,)' solo de cOill'l,_ niencia, porque con ella busca co11~raciarse con las personas a quienes otrora hi-zo v(c tin1as de su dicacidad hnplacable, de su procacidad, dijo Caro". Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. Duarte French tiene razón y Caro no la iene. El arr p ntin1iento de Posada Ps de dientes para afuera, y sus escritos en "El Alacrán" son dicaces no proc:tces. En Jos siete números de "El Alacrán'' no se podrá encontrar ni e1 ~ás nimio aso­mo de procacidad o de vulgaridad. Toda la mordacidad, todo el ingenio, todo el humor, a veces picaresco, que condimentan los escritos, por otra parte analíticos de "El Alacian", ofenden porque son verdaderos. I..Jas afirmaciones que, entr~ chiste y chanza, entre verso y prosa, se asientan en 'erncho N e ira en su Re. pub ticano que no hn querido ajusta r­se n )a costurnbre virja i racionnl cle dar en el priaucr número do todo perió· llicÓ un prospecto, un programa dt' las opiniones de los Editores, i del c~mino que piensan seguir. Ellos bien pueden escusnrse d~ semejante fórnlulü, potqne a lu verdad no necesitan, hqccr profe­sion de fe política, dejundo corno dejan conocer desde lns prirueraa líncna, lo que son i lo quo ~et~ún. (~uien el Icor por P.jemplo los dos pritncros renglones del ftcpublict\no ''La administracion d e l Jen l· ral 1\losquera se u ce re a a su ti n Jej t~aJo pr,Jfu nd as hu e· Jlos U l~ ~u funetito paso," quien decin1os no ha do cono c er u 1 anomento que el P r' rucho Neirn Acevcdo, Editor respon­sable. es u ' tra·fretJético (ibero!) i de )os misn1os .Acevcdos que A 1fouso? tI quién con rnles premisas uo deducirá la lójica consecuencia de que lo que escribe será un o len nce al " 1-Jibertad i Orden ,, en leugu uje mns do~templado e insultante, aunque ménos caatizn i eapafiol? J>ero n osotros sí quereJJlOs mnnifes· tor n nuestros an1ado~ lectores, cuáles son lo s f111o~ i lus tendencias del pPrio­dil] uillo que nos proponemos redactar, parn que su8critore1, compradores, go · t·rietas i , •emns, sepan do nntem"no lo que deben ct~perar o ten1or de uosotros. Así pue~ : 1. 0 No pertenecemos " .. ninguno do Jos p~rtidoa políticos existente .. , ni nues­tro~ tiros serán lanzados indistiotamen· te contra todo lo que crearnos merezca ser criticAdo. ~. • Como nueatro objeto principal es divertirnos i divertir, no despre eiare­mos ocnsion ningun11 para el efecto, i a trueque do orrancar unn cnrcajHda a un corrí) Jo de ama blt s ca<: hncos, &in escrú­pu o harén1os morder los labios a nues­tro · mejor amigo, i aun a nuestros caroa parientes. 8. o• Como conocemos o cree moa e o· nocer, no diremos el espíritu de la Gpoca, sino el espiritu de nuestra sociedad; co· n1o conocemos el gusto i los instintos da esa encantadora frnccion que se llama cachaqueria,por uno solo de cuyos aplau· sos nos arrojarinmos, sin vncdar, al 'fe­queridama ; como conocemos que las jc­nera1idades no son de su ogrado, que las cuestiones de un carácter profundo i tras· ocndental como lns c¡ue quiere trat Jr el ab8truso i malhadado ' J óven ,, son mi· rudas adversa mento por esa jo vio 1 i mal intencionada juventud que bulle duran­te el dia en la calle de) comercio, i se J e u - Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. ~> - ET.J ALAC1~AN. ne por )a noche en la Rosa Blanca, o tn· berna de Fran~ois, como la alama el Je­neral b1osqu~rM; como conocemos todo esto i muchas otrns e o sil las que deja m os on el tintero, nuestras columnas se lle· narán con articu los sat~nicos, picantes, cáusticos, endinb~ados; mojaremos nuí's· trB pluma en el infierno, diremos ) ne ver· undes maa amargos senalaudo personas, nombrándolas ouando las sellas no bas. ten, aunque hayan1os de ceponPrnos, co­mo Vergctrita a que se descarguen sobre nuestras mórbidas costillas los a levosos golpes de cualquier jental caballero, por cuyas venas corra la sangre mas noble i azul de Castilla la vieja, o de cualquier otra provincia de España. 4, • No se crea que no tiene fin alguno moral esta publicacion. El temor que cada cual tendrá de que vea la. luz públi· ca sus acciones malas no dejará de con­tener a muchos. As\ pues la reforma de Jus costumbres es uno de los objetos que llevamos en mira Somos cntera1nente noveles en )a carrera ue escritores; pero a falta de otr~ts muchas dotes, una !Í teoclrá nuestro papel, una cosa sí hallarán en óllos lec· tore~: )a verdad dcsnudu, manifestada por hombres parapetados con P.l anónimo, pero que si llegan a ser descubiertos~ sos­tendrán sus dichos sin temor. --o-- Ojeada e lnvltaclon. Los escritores públicos de la Nuevo Granada son una partida de nécios yue no saben lo que se dicen ni lo que se hacen.-Bajo este respecto merecen sin duda alguna el perdon de Dios.-I lo gracioso es que cada uno de ellos se cree un portento, cada uno do ellos piensa que sus luminosos escritos van a vencer, a arras~ra r todas las intclijenoiaa.- Fal· ta poco nlas ce un mes solamente para -· la eleccion del presidente que r~jirá los destinos de la patria en el 5, 0 período constitucional, i Yemas todos los papeles ocupándose con ou)or do In cuestion elecoionarim, tratando todavía de cnn .. vencer a los contrarios de que están equivocados en sus opiniones.-¿ No .~s é~ta la muyor sandez del mundo ?-Vivo Dios!-¿ l)uede nudie creer do buena fó, que los votos qne ha consegnido la od­ministrarion actual para su candidato Cuervo, podrán ser nrraneados, ni quo ~1 diputado flUe se ha dejado e ornprar con promesas o realúlaJlCS., cambiará no diremos de opiniones, sino de intt!Dc;o .. nes por una que otra acalorada reAunta del ·' A viso " o el " l~epu blicnnc ).J 1 al contrario.-¿ Cómo ~s posible imsjinar que las pusio Ot•S agriadas i CSCanuecidas de los vencidos de 1840 por una pnrte, i por la otra,las entusiastas crecnciJs de la entusiasta juventud franca, leaJ, va­l icntc Í decidida CO In uiarÓ. tan SO O con leer algun nrticulon del Santo Doctor Os pi na, o algu n i nd .jesto trozo del J>ro­grcao, redactado BPgun dic{·n por el mo· nigotillo 'forres, 1nignon del Arzobispo 1 -Claro cst~ qce no ;-CJ .. ro e~tá que todo eso C.i trubajo perdido. En punto de e lecciones por nhora, ya no hai pues, nada que hacer. Hagamos silencio hasta el l .0 de xnarzo, porquo de nada sirve en estos tnomentos el uL borúto.-Aguardemos unos pocos días. El 1.0 de marzo veremos a punto fijo nna de dos cosas- o la administracion actual ha encontrado Jos medios que le da la constitucion de 1843 poDiendo a su disposicion todos los empleos1 para burlarse de la voluntad maaifostada a los pueblos, i entónces sube a ocurar Ja · presidencia el Dr. Cuervo, habiéndole servido de escalones viles artimafias, rastreros manejos : O por un mila~ro el candidato del partido liberal· obtlene 1~ eleccion. En el primer .caso, somos prrdidos .. - Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. J1~L ALACI{AN. :s - ... ... -· ... . . - . - • .... - - • 1 no nos queJa mas que una tabla de &éilvacion. l~n el segundo caso todo ~e hará a medida de nuostro de~oo. Aguardemos.pues,hasta e 1 l. 0 d~ m ~tr­IO pJra obr 17, i hasta entóaces ~iknci'J. E~íORAMAS. A un j6ven v~nezolano Ayer tarJe pregunté t l)or qué se hu venido uslé De su tierra 1 1 dijo: hermano 1 ~on gu~t o se lo diré, \"o me vine para acá, 1' orquo lo~ pardos de ullá Son perverso!~ mul hechores. -Hizo mal, pues son peores Los Pardos de Bogotá. Iha uon Simon Herrera De paseo ~on su mu;er, I viencTo que iba a llover So echó a undur a la currcro, ~nber 6migo qui~iera Por que corre don Si'mon Le daJe yo a Saloman: I ól contestó: cluro está, Porque con l1 l~egta vá, l ten1u una inwttl~ cion. De don Isidoro un hiJo Sobre un castai'lo bnoso Iba paseando or~ulloso : Le vió Carolina 1 dijo En su balcon a Teresa Con airdcillo picante : ¡ Qué potro tan arrogante Es de ra:a cordev110,, Los M I STER.I o s DE SANTA BARBARA. Fanta1ia. PllóLOOO. El movimiento rapidísimo con que jira sobre su eje de diamante la rueda de la civil izacion , no puede contenerse­Ai J del que quisiera intentarlo porque seria despachurrad o . Las necesidad e s e spir ituales de.l jéne­ro humano deb e n sati~facerse . El si glo XIX es una e ep c cio vorájine insacia.­blc .- Un monstruo de mil i tanta a cabezas que suerbe sin piedad cuanto est á al al­cance de sus antropófagas mandibulas. La verd "d evanjélica depurada, res· plandecc ahora con un brillo qne nunca hn tenido. Ya pasó el tiem¡ o de los con­cilios -La relijion cristiana, e sta relijion civilizadora i hum~nitaria mírase ya des­nuda de los inmundos harapos con que la oubria n aquellos frailes beodos de los siglos colijinosos. La literatura ha . debido por oonsi· guiente desnudarsetambien de Jas absur­das vestiduras que la encapotaban. El mundo con1o el hombre con la edad cambia de jénio i do ide~JS. lle aqui una muestra. CAPITULO 1. 0 EL SENO. Hubo un hombre jenovés de nacion llamado Cristóforo Colombo, que des­cubrió un mundo : La América. Ilubo otro hombre tres siglos despuefl, Bolívar, que dió libertad a la mita i de ese mundo, i creó una gran nacioo : Colombia.. Veinte aiios apénas contaba ele exis .. tencia esa jóven naoion, cuando fué cruelmente fr,accionada.-Una de estas fracciones se llamó Nueva Granada. Ilni en la N u e va Granada una ciud'ad, que es su capital, llamada en otros tiem· pos Santafé, i hoi llamada sin saberse Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. • • . --- -.-- ------- ----- • por qué Bogotá. 1 q nctarnoute nn1 ueb l ud o, o os jó voncs I ! cosu rara! hai en fiogotü un barrio s eoor~tas, e nt ada la una a un lado de que apelridan Santa Bárbara! la ?tra, s~bre un Plegante sofá, platican I ¡ co¡a aun mas rara !-Hai en el aull...,tosa 1 cordilllmaute entrt! lüzadas bnrrao de Santa Bárbara una casa de las u1anos. Son I .. uisita i -una au1iga aspecto anejo, habitada por un padre buya tan lind·' corno eHa. faq_j una hija lind"a. . En~morado f di j o esta Oltima, ena- Lioda, sl,. una i niit veces linda es l •norado de ti tu padre, Lui :i ta- ... inlpo· Lui.iita. 1 sab le. l)ero sobn! todo ¡qué seno ! -Enarnorado ! Carolion, enamorado CAPITULO ~ . o con1o uu l oco . A toda hora tnu hubla de LA VlSl'f A. 1 ese 1nf,,n1o amor, i ya no só yo qué ha· cerme.- Oan1e un consejo. Era una noche, Ja uoc~e del 12 da 1 Ahórcale rcpu~o Carolina con una va-enero de 1849. La oscuridad 7°~ sus hen1onci,1 lacónica quo huhiora. hecho al~ls aepu lora les en~a ~otab~ la caudad- honor 11 In n1 ujar do Lconidns. ~111 . nuLos negras 1 atlenc1o~us entenc- 1 fu sepururon. breoaan aun mas, la ya medrosa lolJre-guez de aquella. noche fatídica. 1 CAPI1'ULO 4. o En la sala principal de la casa de que 1 hemos hecho nu~ncion, está en una s1llu. 1 ENHNtx .. Hl 1'\::Nl'O.-VoAll'flYO tioutado un hombre como uu ciucuentu. l Ahora es necesario que nos acoznpa ­araos de odad, con aire meditübundo i\o otra vez el ilustre lector o quier ple­i un si es no es a11ijido .-Es el padre de bevo coano dice 0(\rvantl s, a la casorque nombró el Presidente St:cr~to.rio a Don Ramon, Como si · en esta ocasion Solamente visto hubiera A un bur r o como c ualquiera Ser secretario o binmbt) . ¡ Pobre Do n I ... ino de l)otnbo j Que nte ha venido a la idl~ a 1 Se ~stá p011itAndo qne fcd ~Ji Sá Manuelit • ~Jaza ; • ¡>,,rece una calabaza El jóren ~lanucl IlerrercJ; Dizque ya no t:.~ o ·duvcru .J e r u aun ( ; u ti é r n;a s l) i i1 é res, _¿Qu é habrán di t: ho iai muj e res 0~1 aannto de Clarita ~ Si vcud .era .\largurita 1r O C n lll p r 4l r a tJ } 1 n Í S lll O p 1 a~ O· Chepu l~ard . 1 i l~nfacl JJazo Dizqu~ ~stáu 1nag netizndos, Dicen qu(! Jos Cuiorados Son todo~ yernos de Espina. p" re e·~ q u u e aro 1 i na Ro hii puesto u u d it-~ut ·' p o~Liz.o Lo cual nflade un hechizo A a us otra M pcrfoccioncs · Auu dur .• n l's convulciones • De 1\laría c..le Jcsus (iu~rra. l~s cosa en verdad qu~ aterra J .. a nuriz del J)r. ~lulo. Sigue sorL, cotno un palo I~ · · jc.util I~uisit., Annero d . . ,, Que está por ecJr ''te qu1cro La pobre, con calentura. J or•l u e el feto ed tan e u u a 11 u (~ue va a tlo\ ·urla ul hosp.icio. t Cuá.ndu hará algun beneficio ~~ tacaño de 'l'eodoro 1 Sigue hab'anclo como loro D~ toJo el Dr. 13urayH. Ya Stl ha pasnJo do raya Lr¡ fatuidad drl Urdan~ta, Es un farol de r¿treta El jóven Patricio Pardo, 1 se ·dice que Bernardc) Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. \/a a entrarse d~ comediante; ¡Cuan s•tírico i pioante Está el Ch srivori T&nco! ]Ja' ec~ qu~ flStá potra neo Está ya de falsa rienda ¿ En 4ué parará la tienda J)e las Párrngas hermanos? U no de los dos l'iza nos Re ha marohlhlO para Oró(Ago. 'J'it!ne cara du uattropófugo JJuis hlao Orla.n el sumario ¡Que aire tan P.strufalario .El del Dr. Can u val f Viera yo en la Cntcdral A 1 A r1obi spo tendido. Por fin encoc.tr0 marido lJoi'ia Silv~ri . , EspinE>s" ; La escena serio. chistosa ! Sabe ust6 <~u~ el tuerto Annero Qucria n1onr ! majadero 1 Porque est ... ba enamorado do Luisita ..•• Condenado! Que no. se lo lleve un cólico ! Que abdómP.n tan hipcrbólio El del chato Salomon 1 'fione ltangua de ....••• I.Jil senor., Montt~negr•l. Mandado haoer para Suegro Es Don Joaquín Escovar, No tendrá que trabajar l~estrepo si lo consigue, I ¡ oosa estral'Lt! persigue A J ason In misma idea. N os pareo~ que r.hochea Dona Mariano ~fontoytt. V o lJiÓ a poner tienda 1\1oya Que no es ningun majadero; Se ha metido a rezandero El joven Antonio Plata, ~taa no ha ~marrado la gata Que soltó a Jacinta Ayala, Gc;sta lnjo, tono i gal~ El antioqu~iio Lalinde, I Y" no habrá quien des!inde La riqu eza de Don Pacho. De contino está oorracho • El celebérrimo tuno Que en sus ti<:, .. Jpos cual ninguno llizo conquistns dt amor. Que furibundo hablador Se ha vuelto Cnn1ilo el tuerto, Es mentira no se ha muerto El albano Carlos Lo les; De todo tres caracoles Sn lo dHn M l•'lorcntino; Ha renunciado ol destino El comunist ,, Jo:,quin . • A?esta como u "l vas in LC\ Jluriz de Carbonel. Que titlícu)o pupel llac~ el jcucral Uuitrngo. 1 la he eh o e ! t i fo g ,. u n d _, es t ro g ~las no le dió al viejo Calvo. Ila s,dido sano i saivo V crgnra de su paliza. Se ardió la Ct1SB pajiza De don Miguol Saturnino, I nor poco pierc!e el tino El pobre Bartolomé, 1 el ladron por fin quián fué del reló do EHutt Delgado De que tanto hun murmurl\do 1 l\1 u eh o la frente se a n u o 1" De ~Ianuel Anto'lio Arrubla Pensando en el capitolio. Po fin mamó porta-fo&io El insigne Cerbeleon. Demos nquí conolusion· I seguirá este re'ato En el númerc iumediato. ~IC!.5i COMUNISMO, El eco de la gran pal .. bra comunismo lanzada en Europa por labios filantrópi· cos, ha llf'gado hcasta nosotros, haciendo palpit~r de esper-.nzn i ~ntusiasmo ma• de un corazon de jóven, haciendo pa • p1tar do temor i de a~aricia mas de un corazon de vifjo. V Rnafi esperanzas i vanos temorea. El comunismo no es ni puede ser en estos- til!mpos p()r desgracia do\ jénero ' Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. humnno, maa qu'e un h t rmoso pensa· miento que nunca, nunca será una rea­lidad. Esto Biglo diet j nueve rs el t iglo de la civilizRcion; J lo~ fel •ces ,, e la c1viliza· cion tienen una felicidud mas firme que • las otras felicidade:', i nttda, nAda tienen q u e te m e r. E 1 de s p oj o cl e J os r i ' ~o s : 1 n lci agroriu, ,. bolaciuu d11 deudus &c . son medidas d~ otros tiempos qt~c hacian t~mblar a los tir-4n,s, a los ricos, a Jos propietarios . Hoi, tu t stoi ttempos en que tanto ea decantR i cacareo. l.a cien­cia, la vorcJ'id ,.vanJélico, ltt luz, la li· bertad, hoi dnman enRmigo de la socie· dad, enemigo de 1 jenero hu n1ano, al que se h• a:rcvido a decir'' ninguno tiene dererho a lo supéfluo r:iéutras hayel quien carezca de lo necesorio.'' Ah 1 tu u oca llcg .. rá el dta on C}UC' imitando o 81roes. Hei de P~rsia. se di· 1 g' a los grand~s i a los ricos de! '" tiern\, a Jos olignrcas i a los monopolisttJs ''No hni pan, no hai aJiruento ... pnru vosotros, hienua con iisonoan(,, humuna, ttgrcs de dos piernas, Hlimentoos con ChC oro pcr ~1 cunl i con el tual h.-beig por tanto tiempo asolado el rnundo i afliji ·o a. Ja humanidad." No, no llegará ese tiempo. • 7 ¡ --- -- popular vi o 1 en t o e o m o u n a te 1 n pes t t-< 1 no tif'ne sino ~u ciuracion. La ruuhituct no e~tando organizada no puede formur ni seguir un plan. l sus gritos de nada le eervirán, i ántes al contrario e en e) lo! no hará mas que dispe1t~r alarmas í remachar sus ca u e na R. . Ba.1 emos un poco el estilo. El pensar • • en comutu~ano Ps s c. ñar, es cns1 t.rncr pesadilla. l'or fo1 tunn entre · nosotros nadie se muere de han1hrc; i a nosotros, ménos qu~ a otros pueblos, nos h ·irá fal· tB el tal comunismo. Allá van esus ver­sitos : Por consiguiente don Pacnv Abandoncsd todo susto . V o 1 ved a con1er e on gusto Que siempre s · reís ricacho; ' 1 aunque escuthtlis o un n1uchacho Como Rovira o Neiritu Qu<; bufa, se tuerce ; grita cu .. l si tuvicrli calambre, No temai~, porque esa es hambre Con1o )a de Vrrg.trita. S~guic.J g-ozaucJo ftiH.:hatncnte Del em1 , réstito clP. nntai"io De t~s factorías de ogai'io De que t a n t o ha b l a J,1 j e n te. Seg4id t-ncarido prudent«! Los frutos u e! "j iotisn10 Sin temor o.l comuuisrno, Sin aogu~tia i sin afan, f'omo vive el alacran Para quien todo es lo mismo. Lo quA existe, ni Dios miamo lo pue­de vnriar sino haciendo de nuevo c.:l universo. Nada tcneis ql!~-te~c;= opre: eores del jénero hun.-uv. ·· Los pueblos . están en vuestras _ f!/rras, s~guid despe­dazándolos, seguifVchupando 8U"8ongre. 1 vosotros Nietos, Calvos; UribeA, Es· •covttres, Santamnrias &•, sanguijuela& ED vuestras rnM noes está In fuerza i no dejareis de aprovecharos de t!88 vcntajrl. Vuestro ódio, vu,·stra avaricia, vuestra iniquidad, todo en vosotros es tdstemá. tioo porque vosotros te neis lugar pa rn peosnr, par" combinar: vuestros tiros son seguros. Lo~ pueblos,los infelices pueblos npé· nas tienon tiempo JHu·a buscar nn escn· · so ,olin1euto enapapac.Jo en lágrimas i su· dpres. En vano de vez en cunnc1o gri­t~ fá.~ furiu:;os ¡pan! en vano¡ el furor monstruos, sanguijuelas cocodrilos Scgu id, seguid la se_nda :En que morchais guiados ]>or la fütal codiciu, Qu'"' os lleva de )a mano; Seguid, seguid Ja sangre DeJ projimo chupando : , • Vosotros que no pode i! conviliar el aue· no., en vuestras ricas, i mullida" cama-. el dia que no hubeis hecho a'gun mal, Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia. S i que cntón 'fS hacei ... La nHlS horrihlo purod ia de la céleurc f't'J>rP ion de1 piu ­doso 'l'•to diciendo : ' II oi h•'rncs pcrdi· do el dia." ( C(J1Z linuarú) --o-- CA l{1',~\ Pl~L\1 ER ,\ DP. JERONIMO J U Al\H;O . l!o~ota Et,rr o 29 de 1849 . '""" ~urriJo Juunico. 1,c quejas de que no te ~ser ibo i tif'. u es raz on a fé, pero di spc n~n n1P h o mbre, estoi tan oc u padn . lf t.~ S de saber que nhora atle1nAs del tier11po quf' n1o (¡uit,. ostn n1uloita carrera que sf' htL c1npeiin· rlo ani t i o en CJUO he de s~·guir K Jcst-Jr.cho cl e 1 s i g 1 o, d P. 1 u m " d a , i 1 o q u e es n1 as de n:i .vu .untad que se resist~ fuPrtPnl~nte n ello : sobre todo esto dig r) tt · u~o sobrt' ani toJa .'t tna nngustia~ que me di toi dc~~raciuda posiciun. )'"o no sé de qué mPdios va),•rmc para har.crle entender a mi tio que se· ria mucho n1ejor i mas convenientc 1ro~rt'so; fJCro que diablos hon1· bre, tnejor escrito está aquel discurso o res unta q u~ e o m p u ~n don ~J r ri • 1 no p n r n t ·1 ex á 111 e n de e ri eh i fa en que se lució tu primo. Los d •• ~ prirnoros tnm­bien redactan un Avis, en qufl no • • • a vas~ n Jn&~ s1 aao que son u nos •gno-rnntes unos ncci(,S . 1 uts bien en el Pruga e~o i PI j\ \'iso cncucntrn .. Ji vid id~ nuestra po lítica, con quo ns1 yn. Ytts que si a tu pregunta '' q'te /un· de }Ju/llica17 te respondiese ''nada,'' re . pondcriu aun que con lacnnismo :n pur 1s in1a vPrciad. ~in etn bargo a 'r crga rit :\ i a Conde pareca que no les ''a IU, 1 COU clncgocitO, pues o un GUP. el A viso ~t. vnlJc por 111tciio 1·eol, cón1pralo n1ucho la glla<'hcr­na H quiP.n hun hcch n tríhutari~t de un nH·~tlio tlonlinicul i otro dl, entro sotnu· na . • A.. todo t:sto SP. ngrt'gB el que Ctlnde c..lesplirgu una habilidad n1aravillosn en el e~ pe n di o 1 e o n su t no de 1 ~\ vis o, e u y o periódico de tro n1odo no podria lcerst~ sino de gorra.-( Coutiuuurtí. . ) ---------·---- --- # AJENCIAS DE KSfl-~ PEHIODlCO. En Dogotn don J>acho- Pardo 2 .a calle de conltrcio. l>aris l\1. de Lnmnrtine. Londres, Luis Felipe de Orlcnns, en su oficina central esquina de Concepoiooes Vien:1, Jenerul ltadcscki. Madrid, id. N arvaPz. Guaduas, Coronel Jo si· M11ria Acostn . No hemos tenido tiempo para esta· hlecer otras njcncins pero esta dificultad serd. mui pronto aallttnudn, pues et;pera­• nns noticias de nue~troe corrcsponaules en E u ropa i An1érica que deben llegar­nos tuui p1onto. MHs tardo npnreoecán n n u nciudus nuestras· ojencias en .e\ sin i A frica. ltll})resu por \T. Losada. \ Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Fuente: Biblioteca Virtual Banco de la República Formatos de contenido: Prensa

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El Alacrán - N. 1

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Concurso de música de cámara

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Recital de canto Obras de Roberto Schumann

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El Alacrán - N. 4

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El Alacrán - N. 6

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Goethe, la ley de su vida / Profesor Masur

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Recital Schumann / Ministerio de Educación Nacional, Dirección Nacional de Bellas Artes

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