La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 187
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Política-Litel'atura-"\""oticias-Filosofía-Relijion-Artes i oficios-Instruccion pública- Bibliografía.
~Iec1icina-Yariedacles-Revista de la ciudad-Revista de los Estados-De Europa i mercantil.
e publicn. lo m,trtes, miércol('". viérnes i sábados,
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Los editores, NICOLAS PONTO N 1 C~
'l'RLME 'rRE IV. AÑO l.-Bogotá, 23 de noviembre de 1870. NUMERO 187.
Cundinamarca.
.Mui racional nos ha parecido la conducta
de la Convencion del Estado de Cundinamarc3,
aceptando la mui conveniente reforma nacional
de hacer de este Estado un centro jer,
eral ele la. Union.
Por nuestra parte, poco nos preocupan los
nombres propios de fórmulas mas o ménos
be l l a~. Para nosotros lo que importa es la
real idad del buen Gobierno i no otra cosa.
Lo demas, es imitar al perro de la fábula que
dejaba la realidad por la sombra.
Para nosotros no es bueno ni malo lo que
es central ni lo que es federal, si no lo que se
funda o no en el bien del pais; no en presencia
de un sistema o teoría A o B, sino en
c omparacion con nuestras necesidades, i sobre
todo, con nuestros meJios.
Nosotros creemos que la unificacion de
Cundinamarca con el Gobierno jenaral es
útil, es buena.. porque, como ya lo hemos
insinuado, producirá ventajas que saltan a
lo~ ojos; empezando por la paz jeneral i acabando
por la respetabilidad de la administracion
del Estado. 1 esto, amen de la eliminacion
de innumerables complicaciones peligrosas,
que pueden ir hasta comprometer
mui sériamente la existencia. del sistema federal
a fuerza de hacerlo impracticable.
Lo que les importa a los cundinamarque ~
ses no es llamar sobe7'ano al Estado, sino
tener una paz s6lida, fundada en positivas
garantías para todo el mundo. I esto no lo
da. el que quiere, sino el que puede darlo.
En efecto. ¿ qué vale que digamos enfáticamente,
Eswdo Sobe7'ano de Cundinamarca,
viviendo en eternas oscilaciones incapaces
de crear otra cosa que la inseguridad
de un alarma contínuo ? 1 por nuestra
parte, nada recriminamos a nadieJ porque tal
ta :-ea seria tan inconducente como absurda.
Los hechos nos bastan, dejando en olvido el
triste sonsonete de los nombres propios que
no hacen al caso.
La ocasion hace al lad7'on, dice el prover·
bio popular. El dia que Cun~inama"c~ tenga
un Gobierno iFl8ccesible a ciertas maOlobras,
los que en otra situacion pudieran tentar
esas maniobras, dirán camo la zorra: No
están maduras; i asunto c~ncluido.
Hai muchos hombres en este mundo, que
obran i pasan por honra1:l0s, porque no se leS
ha presentado una propicia, ocasion de exhibirse
corno unos grandes bribones.
1 ha i muchos pícaros calificados, que lo
,han sido o lo son, merced a la inmensa facilidad
de serlo impunemente.
Claro es que en tales calificacioneS' no
comprendemos, ñi seria dable c?mprender a
,los hombres de profundas conVICCIOnes moTales;
pero es necesario reconocer, que el
número de estos es mas escaso de lo que
se piensa. . .,
Por est() es que el arte ,de leJlslar. e.n ma-
teria de garantías, no estn en eSCribir una
cáfila de altisonantes promesas de faculta,des
personales en el artículo de una Constltucion,
sino en estrechar a los hombres el camino
del mal, obligándo~es a .s~ r honrados
aunque tengan la mayor dlsposlClOn para ser
-unos insignes bellacos. .
No es lo mismo salvar una tapia de un
,metro de altura, que un muro de cincuen¡.a.
En el primer caso, hasta los mas tímidos se
hacen audaces; i en el segundo, los mas audaces
se contienen.
En la fusion de Cundinamarca en el Gobierno
jeneral, la reforma se reduce a conservar
al poder seccional del territorio,
cuantas franquicias sean compatibles con el
carácter i objeto de la reforma misma.
Para esto, no estamos por el criterio de
lo 0entral ni de lo federal, sino del bien social
fundado en hechos asignables.
Decir que un hecho es bueno o malo porque
es federal o ¡;>orque es central, es mas
bien articular sonidos que espresar verdaderas
ideas. Porque no es cierto que algo sea
malo o bueno por central o por federal. Cuando
la esperiencia, madre de toda ciencia de
observacion, nos ha enseñado con demostraciones
inequívocas, que un hecho es absurdo
o perjudicial, salirnos con que es federal
o~entral, en vez de probarnos que es bueno,
conveniente, útil, en fin, con hechos bien de-finidos,
es presentar palabras vacías en vez
de pruebas dignas de tal nombre.
En los individuos,como en las sociedades,
los hechos no son buenos o malos segun lo
mas o ménos armónico de los nombres con
que se los acostumbre Jlamar. Eso seria estimar
bella a una tarasca porque le pusieron
Edelmira al bautizarla, i fantasma a
una Vénus porque la llamaron Serapia o Lorenza.
Por lo mismo, nosotros que no creemos
que las cosas son buenas o malas porque sean
centrales o federales, sino segun su naturaleza
jenerativa, no estamos ni estaremos jamas
¡tar continuar defendiendo un órden de
cosas reconocidamente absurdo o inmoral,
por cuanto ese descabellado despropósito
pertenece a. talo cual teoría o sistema. de
bondad preconstituida arbitraria o antipáticamente;
porque eso seria. hacer lo que
ciertos poetas de sonidos, que cubren .el papel
de sandeces i creen ser insignes porque
la cosa suena agradablemente. a los oidos
sin decir cosa. alguna al alma!ll al cor~zon:
Es necesario que en matenas tan senas .1
positivas como las que atañen a !a orgsOlzacion
i buena marcha de la SOCiedad, nos
dejemos de plajiar el criterio de los poetastros
palabreros.
En resúmen: que el próximo Congreso resuelva
la cuestion de la fusion de Cundinamarca
en el Gobierno jeneral, considerando
única i esclusivamente, no lo que se llame
central o federal, sino lo que el análisis demuestre
que hace el bien o ev!ta ~l mal a los
hombres. No tenemos otro cnteno para lejislar,
sea en el órden civil o el órden político
o económico de la sociedad.-M:. M. M.
•• • ••
Los cunas en Bogotá.
Despues de un largo i penoso viaje. anun:
ciado primero por los periódicos del. Cauca I
últimamente por la prensa de ~a capital, .h.an
llegado al fin, tres de los individuos comisIonados
por los cunas del Darien para lique."
Como segun el articulo anterior, no solo debe pagarse
por el uso de los caños sino por el de la Ciénaga
de esta ciudad, los empresarios quedan con el
derecho de cobrar el impuesto por las embarcaciones
mayores i menores i por los efectos que conduzcan,
no solo cuando transitan por los caños, sino
todos los dias, miéntra¡; las embarcaciones i los cfectos
permanezcan en la Ciénaga.
Es de tener en cuenta, señores l\fajistrados, que la
Ciénaga situada frente a esta ciudad, es el lugar a
que llegan i en que permanecen todas las embarcaciones
que de todo el Magdalena, traen sus artículos
de consumo a esta plaza; i que, en la misma Ciénaga
todos Jos vecinos pobres, vecinos de aquí, mantienen
sus pequeñas embarcaciones con que pezcan
para mantenerse.
Despues de todo esto, dispuesto esta tambien, que
concluida la canalizacion del "Trupi 110," I!.0 se
podrá entral' a esta ciudad ni salir de ella, 'no por
el mismo" 'l'rupillo," como se comprende. leyendo
el párrafo único,artículo 5':' de la lei de éste año
de que nos ocupamos i que esta redactado de est~
modo:
. "§'. Un.a vez princ;.ipiados los tra~ajos de limpia
1 canahzaClon del cano del "Truplllo," no será
obligatorio el tránsito de embarcaciones por sus
aguas, hasta tanto no se haya ofrecido al servicio
publico. "
Como ademas de los caños espresados, hai otros
para entrar a esta ciudad, los caños de" Arriba"
del" Tramposo" etc. etc, la A~amblea obstruye,
con un solo párrafo, todas estas vlas de comunicacion.
Su voluntad es una, la de agraciar a personas
determinadas con peljuicio del comercio en jeneral •
pues es por el caño de abajo o la "Tablaza," po:
donde pasan, para todos los puntos de la nacion todo
cuanto se introduce del estranjero por las Aduanas
de Santamarta i Sabanilla.
Agrégase a esto, los embarazos i vl'jaciones que
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[ CONTINUACION. ]
Isabel, animada por el deseo de obrar bien abordó
la cuestiono '
-Mi hermana, le dijo, no puede unirse con usted.
Ama a otro hombre, i nadie podrá en el mundo hacer
,ue le abandone. Su felicidad es adorarle. Se~ usted
Jeneroso, sacrifí.quese usted, por su bien, i pida a mi
madre que bendIga lo. union de Rosalia i de Gabriel.
-~sto mas, esclamó Valdivia, ¿ tambien usted
proteJe a ese hombre que ha abusado de la. confian;¡:a
de una familia a la que debe cuanto tiene?
-Pued~ haoer la felicidad de mi hermana.
---::¿ I qUién es? preguntó Diego sumamente irritado
¿ qUlén es, .para aspirar a la mano de Rosalla! . No e~
un p.obre plDtor, o. quien la caridlid de la marqu¿esa ha
serVido de amparo? ¿ Cuál es su fortuna? . Con qué
tUulos c~en~a para ser n:dmitido en la famili~? ¡ Cuá.l
es su oriJen. ¿ Nos ha dicho por ventura el nombre de
s~s padres? ¿ No es ';In cualquiera? No ...... no" de
nlDgun modo: yo sabrla sacri1}.carme si conociera que
el hombr~ a quien cediese la mano de BU hermana de
usted podla hacerla mas feliz que yo, pero a ese qui-dam
..... . nunca. Ademas yo deseo entrar en la familia
de la ~arquesa, debo muchos favores a su padre de
usted, 1 solo asi creo pagarle.
ISll.?el, adivinando por una de esas intuiciones incompre?
slbles, .c.uales eran los deseos de Valdivia, iba a
deCirle sacrIficando hasta su amor propio;
-¿ No le da a usted 1.0 mismo casarse oonmigo? Pero
en el momento en ~ue Iba a pronunciar la primera palabra,
entró un orlado anunciando a don Diego que un
caballero le buscaba.
Casi sin despedirse de Isabel, corrió al encuentro de
Manuel.
L~ jóven volvió al salon desesperanzado..
SIgamos. a Valdivi~, i escuchemos lo que hablaron
los dos amigos de la lDfancia.
L~ escena tuvo lugar en el recibimiento.
Diego, al saber que era 1\1anuel quien lo busoaba
preo.cupado . por el deseo de de'shacerse de Gabriel'
corrió a su encuentro diciendo entre si: '
-El cielo me lo envia.
Apénas vió a Manuel, no pudo ménos de eslraliar la
LA ILUSTRACION.
se le- es pe 118 al importador con la averiguacion i PIJgo
de cargas, i al pasajero con el equipaje.
1 como la concesion de un derecho implica necesariamente
la ftlcultad de poner l~s medIOS para hacerlo
effilctivo, es evidente que hasta el sE'rvicio del
correo /lacional de la Costa para el interior, se entorpecerá;
pues los buques portadores de la balijl.l,
tendrán, lo mismo que los demas, que sujetarse a las
reglas que dicten los privilejiados para no priva:-se
de sus derechos sobre cargas i equí p.ljes.
La lei no puede hacer a un individuo de mejor condicion
que a los demas. Cuando se decreta un privilejio
es preciso conceder a todos el derecho a optarlo,
para dárselo al que ofrezca mayoreM ventajas
al Gobierno. Lo contrario e!> establecer una desigualdad
injustificable, i ello es contrario al inciso 10,
artículo 15 de la Constitucion nacional, que dice:
" ) O. La igualdad; i en consecuencia, no es lícito
conceder privilejio o distinciones sociales, que cedan
en puro favor o beneficio de los agraciados: ni imponer
obli~aciones especiales que hagan a los imlividuos
a ellas sujetas de peal' oondicion que a los
demas. "
Es inconstitucional, i ademas de inconstitucional
absurdo, el § único del articulo 5.° en que se ordena
que despues de ofrecido al servicio público el canal
del "Trupiljo" no pueda pasarse sino por él, porque
en el inCISO 9.° del artículo 15 de la Constitucion,
se prohibe embaraza'r las vías de comunicacion.
Rai derecho para cobral' al que pasel por un
caño que uno canalice; pero no puede impedirsele
que naveguen por otro caño cualquiera.
Los Estados se comprometieron, segun el § 3,°
articulo 8.° de la Constitucion nacional, "a no restrinjir
con iOlpuesto~, ni "de otro modo, la navegacion
de los rios, ni demas aguas navegables, que
no hayan e:riiido canalizacion artificial. "
Adt:mas, por la lei nacional de 29 de agosto de
1867, no puede imponerse contribuciones, "sobre
los buques que naveguen en las agua" de los rios sujetos
a la jurisdiccion nacional, ni sobre los pasajeros
i mercancías." Las aguas de la 'l'ablaza o caño
Abajo son las mismas aguas del l\'lagdalena; i ademas,
ese caño es una via nacional respecto a esas
vias, como que son de jurisdiccion nacional, los Es_
tados, nada pueden disponer.
Boyacá.
Aunque los ac.tos lejislativos del presente año
están consignados en el periódico oficial del Es·
tado, en donde gracias a la disposicion que así lo
determina, van formando un interesante proce.so,
no han dejado de ocupar algunos de ellos, con
sobra de razon, a la prensa dc la capital, que poco
a poco esta descubriéndonos, por el fondo de sus
polémicas, las te n dencias de aquella incomparable
Asamblea. Entre las hojas sueltas que con
este motivo han circulado recientemente, leimos
con suma atencion las que tratan esa celebérrima
imposicion de censos, carro triunfal con que, de
seguro, habrá contado su autor para llegar hasta
la silla del Presidente.
j Qué cosas las que se ven! Por de contado, la
ciencia económica i administrativa está dando cn
-Diego ...... Diego ...•.. esclamó con angustioso. voz
el ex-dependiente.
-¿ Qué tienes que estas tan azorado ...... qué has
venido a buscar?
-Tu proteccion, aüadió Manuel en voz baja, i mirando
a todas partes para cerciorarse de que se hallaban
solos.
-¡ Mi proteccion!
-Si, amigo mio, la justicia me persigue, aquel ne-gocio
de que te hablé ha fracasado.
-Las letras ..... .
-Sí, por cierto, las hermanas de Júdas han descu-bierto
el orijen de su familia, i aunque logré mi objeto
con la primera, despues ha conocido e~ banquero la
falsificacion, i un comisario ha ido a prenderme. Al
pronto he conseguido escaparme de sus unas, pero me
han seguido la pista. Fui a tu casa .....•
-¿ A mi basa?
-Naturalmente, en las 9casiones es cuando se echa
mano de los amigos, pero allí me dijeron que hoi comias
aqu), i atravesando calles i callejuelas, he llegado corriendo.
Sinembargo, el maldito comisario, que por
81li he visto, tiene buen ojo i excelente nariz, no ha
dejado de perseguirme, i cuando he entrado en esta
casa, volvia la esquina tan a tiempo, que estoi seguro
de que sabe que me hallo aqul. Si no salgo pronto,
subirá., i me encuentro perdido. Es necesario, pues, que
emplees toda tu influencio. para salvarme.
Esta noticia disgust6 a Diego.
-¿ Qué contratiempo, dijo, ahora que te necesitaba?
-Por la misma razon me salvll.rás, ¿ no es verdad?
Si no, añadió oon tono amenazador, conozco tus secre-tos
..... .
-Cuenta conmigo para todo, pero es preoiso que me
dejes ...... Puede venir el comisario, i si se enteran la
marquesa i sus amigos, comenzaré a perder a sus ojos
el prestijio que hoi tengo. Presé ntate, confia en mí, i
despues, mui pronto harú.s lo que te mande.
-Seré tu esclavo, i voi a hacer lo que me dices, pero
ten entendido que hai otro oomplicado en el negocio,
el dibujante de quien te hablé; este dato puede servirte
de mucho para abogar en mi favor. Al entregarme al
comisario, le llevaré a su casa, i nos acompañará.
-Oh! ¡ qué idea! esclam6 de pronto Valdivia, dánd<¡
se una palmada en la frente, nos hemos salvado.
Escucha, Manuel, yo prometo ponerte en libert.ad ántes
de cuatro dias, pero es preciso que me prestes un inmenso
servicio.
No .puede ser, estoi seguro de que me espero. el
Boyacá pnSOIJ alarmantemente asombrosos. 1 no.
vamos a creer que es en asunto baladí, en cl que
nuestros lej,isladores han pedido i ha.llado campo
para plantear sus progresistas innovaciones, que
darán en tierra con la ciencia i sus maestros; no,
se trata nada ménos que de los recursos cou que
cuenta el Estado para la instru.<:cion pública; cs
la accion mas noble i fecunda do las que ejerce el
poder, la que sc quiere paralizar, amenazando la
vida intelectual de aquella scccion infortunada.
Esta es la cuestion ;
Los capitales de que hoí dispone el Estado
para la educacion pública, bien o 10:»1 manejados,
estaban bajo la seguridad hipotecaria de los bicnes
raices que los prod\Wen. Pallecia, efectivamente,
que no podia colooo.rseles con rnejorcR garantías,
puesto quc el Gobierno mismo los protejía
i en todo evento cebaban allí como rcsponsa.
bIes dichas propiedaGles; pero el señor J obé M.
Cortez, ducho en cuestiones de desam ol,tizacion,
progresista i consumado en toda clase de evoluciones,
segun casi nos lo d~ce él rnisme>, concibió
la inaudita ventaja de imponer esos capital('!' reconocidos
por los particulares, en el T esolo nacional
nada mas que al 30 por 100, quitándoles,
por FlUpuesto, sus seguridades efectivas, por uoa
seguridad mui contiojonte. Adviért.ase que no
hablamos del órden actual sino de la entidad joneral
llamada Goi>ierno.
Hasta aquí, no puede SCl" mas desventaj osa esta
operacion para nuestro Estado. Pero no es eso
todo. Si el Tesoro nacional estuviera boyante en
sus espeoulaciones, si contara siempre con excedentes
cuantiosos, si por lo ménos hubiese alguna
empresa en que poder ocupar los $ 115,000 que
le consigne Boyacá ,de modo que le produzoan
el 30 por 100 que para su utilidad exije la impoBlcion,
la oosa, aunque no del todo buena. seria
llevadera, porque hasta cierto punto el Gobicrno
nacional debe introducir en la esfera de sus propiol:
l intereses los intereses seccionales i pero si
ese Tesoro se halla exhausto i no hai empresa
ninguna que pueda llenar aquellas condiciones,
¿ cómo será posible que la grande idea dcl señor
José Maria Cortez, haga cuadruplicar las entradas
a los establecimientos de educacion que tenemos
i que reembolsen jj en cnatro aüos l! el
capital empleado en dichos censos?
El cómo no nos lo dice, tal vez por el temor
que abriga de que nuestra mezquina intelijencia
no alcance a comprender tan ultas, tan feoundas,
tan brillantes, tan productivas conccp c iones. Sinembargo,
es valiéndonos de la aritmética que debemos
tratar de descubrirlas, ya que él se desdeña
de entregar al públioo sus cálculos sobre tan de.
licados intereses públicos i para lo cual repi"odncimos
con gusto este argumento de números, 'lue
vimos en una hoja suelta fechada en Tunja ;
-Por lo mismo no puedes escaparte, pero ¿ tienes
un cómplice!
-No te lo he diQho, l,mjóven dibujante.> que prometo
acabar sus dias en un puesto mui alto.
-Dibujante o pintor lo mismo dá. Me estorba \1¡n
hombre, i necesito a cualquier precio desacerme de él.
-No te comprendo.
-Escucha ..... .
Diego habl6 algunas palabras al oido de Manuel, i
al terminar añadió:
-Este servicio valdrá. tu libertad.
-¿ I si descubren el engaño? pregunt6 Manuel.
-Confia en mL . .... Vamos, yo te acompañaré, i par,.
dar mas fuerza a tus palubras, responderé de tí. Mi
cuestion es triunfar ahora." •.. despues ya halltwé un
medio para salir del paso.
Los dos salieron al mismo tiempo que el comisario
iba a tirar del cordon de la campanilla, hablaron con
el ajente de la autoridad, Manuel quedó en pod er de
un salvaguardia, el comisario le hizo algunas preguntas,
i Valdivia volvió a entrar en la habitaci'lU o.on 250,000.
No deduciremos de esta suma el monto de los intereses
dA los establecimientos de beneficencia i caríd.
ad,. por9ue el pobre i desvalido acaso no tenga
~lgmficaclOn pant nuestros gobiernos, atendida la
lmport~ncil\ de la instrucc:ion pública en todas sus
gra~aclOries, que empiezan con la instruccion militar
1 concluyen en las escuelas de Bentham i de
TI·acy.
:,.Tendremos pues, que con $> 2.!$0,000 el Gobierno
nacIonal pagará $ 500,000 de intere~ de las establecimientos
de instruccion !
"Estupendo milagro del calculista lejislador de
B uyacá !"
Esto tiene toda la fuerza de conviccion que llevan
consigo las matemáticas, i no dudamos que
penetrados de ello los lejisladores hubieran sepultado
diez varas bajo tierra aquel desgraciado
proyecto de imposiciones, si ménos impresionados
por la elocuencia doctrinaria del mensaje presi-
__ j El comisario, i o. estas horas! repitió la marquesa,
¿ qué podr{L ser ~
-Habrá ladrones, dijo Juanito.
---O estaremos ardiendo, murmuró lo. baronesa, rien-do
como tenia de costumbre.
El comisario entró." ... La marquesa salió a su encuentro.
Los convidados se agruparon con la mayor curiosida.
d, i al mismo tiempo Gabriel i RosaUa se juraron de
nuevO eterno amor, besando ella la sortija que aquella
misma noche la habia dado su amant·e.
_ ¿ puedo saber, preguntó la marquesa al cOnllsario,
a qué uebo, a estas horas, la visita de la autoridad?
-Señora, siento mucho, respondi6 el representante
tIe la lei, venir a turbar la calma i la alegría de esta
casa. con mi presencia, pero el deber me impone esta
¡)enosa visita, i yo espero que tanto asted, como SU\!
convidados, sabrán dispensarme la molestia que les
oCI~si ono. En su casa de usted, señora, se oculta. un
h<;mbre o. quien debo prender. Est~ acusado de falsificador
de unas letras de cambio.
-¿"En mi casa?
-Al ménos esas son mis noticias.
_¡ Tendrá usted la. bondad de decirnos su nombre!
-Bs mi deber. Se llama don Gabriel Garcia.
La esplosion que oa usaron las palabras del comisario,
no solo en el alma de Gabriel, de RosaHa i de su hertIu;.
na sino en la de todos los circunsta.ntes, Bolo puede
comp~rar&e a la que produce un edificio donde se infla.ll)
a '.lna. crecida cantidad de pólvora.
_j Gabriel! esclamaron todos.
_j Yo! dijo el jóven sin poder esplicarse lo que le
pasaba.
_ N o puede ser, se atrevi6 o. murmurar Rosalía, co-rriendo
cerca de Gabriel, porque en el momento del
peligro queria estar a su lad.o:. .
-Yo falsificador ...... ! repihó el J6ven ...... ¿ 1 qUIén
se atreve a calumniarme de ese modo? ¿ con qué dereoho
Be insulta a un hombre honrado? al'íadi6 con la
arrogancia de una conciencia pura.
-Su c6mplice de usted le ha delatado .. Yo no me
~treveré a decir que sea usted culpable; mi deber es
obedecer las órdenes superiores i la que esta noohe he
recibido me obliga a apoderarme do su persona. Usted
responderá a los cargos que se le hagan, i si es. inocente,
la. justicia se apresurará a devolverle la libertad.
-Pero es horrible lo que me pasa ..... Yo falsifico.dOT,
i criminal. ..... l ¿ Quién ha podido delatarme? Yo no
tengo enemigos, soi incapaz de una acoion semejante ...
Ustedes IJle conOQen, usted, mar'luesa .•..•• Usted, señor
LA ILUSTRAdION.
dencial i tal vez por algunas consideraciones particulares,
hubieran examinado mas detenidamente
tan importante negocio.
Siempre que ocupamOS nuestra pluma en la
revista de Boyacá, buscamos sinceramente algun
motivo para felicitar a ese pueblo trabajador i
honrado, algun indicio, cualquiera que sea. de
adelanto en su estado social, de mejoramiento,
de ilustracion i i pero qué podemos decir hoi,
cuando tenemos la obligaoion de anunciarle que
están comprometidos sus mas delicados intereses i
que puede llegar el día en que niegue a sus hijos
la educacion que forzosamente les debe? La
Asamblea de Boyacá ha procedido como un padre.
que teniendo asegurado en fincas raices administradas
por él, un capital destinado a la educacion
de su familia, lo entrega a persona irresponsable,
sin mas garantía que su palabra i las
continjencias de especulaciones que no conoce.
Seguramente scrá esto una combinacion mui
hábil, en las nuevas teorías i en las nuevas prácticas
victoriosamente establecidas por la escuela
que tanto deñende el Jefe de la Administracion
actual i mas no dejará de ser cierto, que los resultados
tanjibles de tales sistemas, han sido i
serán funestos a los pueblos.
Oauea.
Con los periódicos de nuestros canjes, nos ha
llegado la Revista de la casa de Valenc-t'a 2' Valencia.
En esta hoja, interesante para toda clase de personas,
nOB prometemos hallar continuas noticias
sobre crédito plÍblico, comeroio en jeneral, negocios
de foro, estadística, producciones, etc etc'
todo lo cual, juzgando por su nlÍmero p.rimero'
formará una rev ista digna de consultarse en tod¿
caso, i que prestará grandes servicios al Estado i
a Colombia.
-El dia 6 de noviembre fué sorprendido i atacado
alevosamente el señor Nicolas Balcázar G
por un asesino que le disparó dos tiros de pistola'
causándole, como ~s de suponerse, heridas morta~
les. El motivo de semejante atentado, segun dice
una hoja suelta, es la oposicion que dicho señor
ha hecho al Gobierno por medio de la imprenta
que posee i las señales de reprobacion que ha dado
a sus actos como jefe de la Escuela R epublicana
i Vicepresidente de la sociedad democrática.
Sea. de ello lo que fuere, el hecho ha sido bastante
escandaloso i es seguro que a esta hora las autoridades
de Popayan habrán cumplido su deber.
~Otro. eS~áud alo nos r efiere El Puebl~, que no
dejará de llldlgnar 11 los que tengan conciencia de
su dignidad de hombres i respeto por la lei. El
señor José Antonio Nátes recibió una nota oficial
en el correspondiente papel timbrado de la SeCl'etarÍa
jeneral i con la firma del señor Secretario,
E:n el cual se le comunicaba su nombramiento
don Diego...... respondan ustedes por mí,. digan ustedes
a ese hombre que no soi yo el que bUBca.
Su exa1tacion era cruel, aquel golpe despues del que
habia recibido momentos ántes le habia trastornado, i
corria de un lado a otro, implorando proteccion, él que
era inocente, que podin. alzar sus ojos a la vista de lodo
el mundo. Sinembargo, todos le abandonaban en aquel
lrance cruel.
-Yo no le conozco a usted para nada, dijo don Diego,
i cuando el señor comisario le busca ..... .
La marquesa no fué ménos terrible con las palabras
que pronunci6, pero tenia que jtlstificarse ante sus amigos,
i aunque no creia malo a Gabriel:
-Nunca esperé, le dijo, que por su causa se daria
este escándalo .... .. Nada tengo que ver con usted; que
la justicia cumpla su deber.
-Rosalia ...... babel. ..... añadió el desolado jóven,
buscando 11. las dos hermanas.
Las dos estrecharon su mano con efusion pero no
pudieron decirle nada porque el sentimiento embargaba
su voz.
El cuadro que ofrecian: Gabriel anodadado por la
vergüenza i el dolor, las dos j6venes llorosas i..angustiadas,
don Diego Hvido i temeroso de que una coincidencia
cualquiera descubriese la verdad, la. marquesa
pesarosa por el escándalo, i contenta porque aquella
casualidad destruia el único obstáculo que impedia a su
hija aceptar el titulo de esposo. de don Diego, el comisario
en medio, serio, impertérrito, i los amigos de la
marquesa aterra.dos; el cuadro que afrecia.n, repetimos,
era conmovedor i terrible o. la vez.
-Me han abandonado usledes al verme víctima de
la calumnia, esclam6 Gabriel con voz solemne, dirijiéndose
o. todos.. .... Ah 1 ustedes me enseñarian que la
Providencia era injusta. si no creyese primero en la
justicia de Dios, i despues en la de los bombres ...... Yo
destruiré lo. vil calumnia, i cuando ustedes tengan que
arrepenLirse del desprecio con que me tratan, yo, a mi
vez, los despreciaré o. ustedes .. ... Vamos, señor comisario
...... la verdad no tardará en esclo.recerse ..... Adios,
RosaI1a ..... Adios, Isabel.. .... Vamos ...... vamos.
Gabriel i el comif.'ario desapllrecieron, i nI llegar o.
la puerta, se detuvieron un instante porque pasaba el
viáL.ico.
Despues oontinuaron f.'U camino bácia la casa de don
Pedro, porque Gllbriel suplic6 al comisario que le permitiese
despedirse de su familia.
La marquesa pidi6 a sus convidados mil peruones por
el mal rato qüe les habia hecho pasar, i les rog6 que
elltrasen al salan para tomar el té.
747
de Jefe municipal de Palmira; pero habiéndose
presentado en la Jefetura a tomar posesion de
dicho destino, se descubrió que dicha nota fu é.
falsificada, que el Gobierno no habia hecho tal
nombramiento, i que solo para obligar a dicho
señor a que trabajara por la candidatura del doctor
Conto, se babia inventado aquella hurla tan
infame como criminal.
Tolíma.
Señor Redactor de La Ilustracion.
Guamo, noviembre 18 de 1870.
La atenoioo de los tolimenses está fija en los.
trabajos de la Asamblea, pero estos por de~graci a
no satisfacen los deseos del pueblo.
En la semana anterior nada dije a usted, porquo
aquella Corporacion contajiada ya de la enfermedad
que está sufriendo la Asamblea de ese Estado,
la pasó en flÍtiles discusiones. Mezquinas pre.
tensiones i ruines aspiraciones hacen que se pasen
los dias sin ver algo importante. Los diputados
mas honorables se empeñan en dictar disposiciones
que, armónicas con la idea del Poder Ejecutivo
procuren la mejora i el progreso del Estado; pero
encuentran la mas cruda oposicion, i sostienen
UIla especie de pujilato con los defensores del yo.
El egoismo tOIDa parte en todo. .
Ninguna nueva lei se ha espedido, a no ser la.
que manda liquidar i pagar algunas sumas a Ambalema
i otros distritos; pero esta fué objetada
por el Poder Ejecutivo porque no dice oómo d ebe
hacerse el pago, si con dinero que no hai o con
vales flotantes - que no recibirán con gusto los
acreedores. Hai oscuridad en el acto de la Asam-
. b1ea, pero su mayoría no quiere la claridad. Las
objeciones se han declarado infundadas.
J~a Constitucion está en segundo debate a los
33 dias de sesiones i lo están igualmente los proyectos
de lei orgánica del sistema rentístico, r éji men
político i municipal, &c. &c.
·..No oJ>stante, señor Redactor, tengo fe en el
porvenir i esperanza en la i1ustracion de los diputados
del pueblo tolirnense; i por esto aguardo
uoa mui buena Constitucion i magníficas leyes
que, siendo fruto de largas m"=lditaciones i de razonadas
discusiones afiancen la paz i produzcan
el bienestar de los pueblos.
Carta del Reí de :Italia
A su SANTIDAD PIO IX.
Santísimo Padre:
Con el afecto de un hijo, con la. fe de un católico,
con la lealtad de un Rei, con el sentimiento
de un italiano, me dirijo una vez mas, como lo he
hecho ántes. al corazon de vuestra Santidad. Una
tempestad llena de peligros amenaza la Europa.
Valdivia comenzó a padecer una ajita.cion febril; su,
conciencia le atormentaba.
Como todos los malvados, era cobarde, le parecia que
le perseguian, i quedándose en el gabinete donde habia
pasado la anterior escena, con Rosalia i su madre:
-Dispénsenme ustedes, les dijo, si me marcho, pero
me ha altert\do el suceso que todos lamentamos, me
siento mal, i voi en seguida a meterme en cama.
~¿Quiere usted tomar algo? le pregunt6 la mar-quesa
..... .
-No ... , .. no ...... me voi, adios ... , .. adios, Rosalía.
Al despedirse de lajóven, notó que habia en su mano
un anillo, le acerc6 a. sus ojos, i como herido por un
rayo ......
-Este anillo ...... esclamó ...... este anillo .... .. yo le
reoonozco, ¿ c6mo ha llegado a. su poder de usted t
_j Un anillo! dijo la marquesa mirlÍ.ndolo a su vez ..•
tú no lo tenias ...... ¿ Quién te lo ha dado?
-Gabriel. ..... Gabriel que es inocente, contestó Ro-salla,
Gabriel, que me ama mas que a su vida, i de
quien seré la esposa o. no impedirmelo la muerte. El,
que eS'mas noble que todos los sé res de la. tierra, él
que se ha sacrificado por su pobre madre, seducida por
un infam-e que lo. Bacó del valle de Bazlan para. deshonrarla
i abandonarla cuando Gabriel bullía en SUB
entrañas, él que con su talento ha alcanzado un nQmbre
ilustre que le neg6 su desnaturalizado padre, 61 que ha
conseguido para. la. autora de sus dias el perdon de su
familia ...... El me ha. dado este anillo que el seductor
de la pobre Lucia, a quien yo vl morir, le entreg6 el
mismo dia en que manch6 su honra, él me ha dado este
anillo, jurándome amor eterno, amor que pagaré con
toda mi alma, aunque mi madre me maldiga. i me arroje
de su seno, aunque todo el mundo combata. contra mí,
i me desprecie i me abandone.
-¿ EL ...• él, el hijo de Lucia ..... ? preg~tó don
Diego presa de un vórtigo terrible ...... él IDl •.•••• no
puede ser ...... 1 sinembargo una voz secreta ....... lo. YOZ
de mi conciencia me asegura que aL ..... este a01llo. ....
Lucía ...... el valle de Bazta.n ...... Ah! aiiadi6 de pron-to
corriendo como loco hácio. la puerta ...... ~ -o, que no
se lo lleven ...... quiero verle .... .. ! es mi hijo ...... ! es mi
hijo ...... ! Yo soi el seductor infame de sn madre ..... .
yo soi su ...... j es inocente! j es inocente ...... !
Estos gritos sobresaltaron! no so!o a la marqu:~a,
sino a sus amigos, que acudieron a Informnrse 11" l
causn. que los producia.
El espectáculo fué mas horrible aun que el d", 1&
escena precedente.
( Continuar';.)
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
748
Favorecido por la guerra que está desolando el
centro del Oontinente, el partido de la revolucion
cosmopolita, aumenta en v.alor i en audacia, i está
preparándose para dar, especialmente en Italia i
en las provincias gobernadas por vos, el último
golpe de gracia a la monnrquia i al papado, Yo
mui bien sé, Santísimo Padre, que la grandeza de
vuestra alma. no cederá jamas ante la. magnitlld
de los acontecimientos; pero en cuanto a mi, como
Rei de Italia i Rci católico que soi, i como guardian
i garante, por la dispensacion de la divina.
Providencia i por la. voluntad del pueblo, de los
destinos de todos los italianos, me creo en el de·
b er de tomar a mi cargo, en presencia de la Eu·
ropa i del mundo católico, la. resp0:lsabilidad de
mantener el órden en la península. i la. seguridad
de la Santa Sede.
En estos momentos, Santísimo Padre, el estado
del espíritu de las poblaciones gobernadas por
vuestra Santidad, i la presencia cntre ellas de tro·
pas estranjeras, que vienen de distintos lugares,
con distintas intenciones, son una fuente de ajita.
cion i peligro evidente para. todos. La casualidad
o la efervescencia de las pasiones, pueden condu·
cir a la violencia i a la efusion de sangre que es
-de mi deber i del vuestro, Santísimo fadre, evitar
i prevenir. Yo veo la imperiosa necesidad por
la tranquilidad de Italia i de la Santa. Sede, que
mis tropas que guardan las fronteras, avancen i
ocupen la.> posiciones que sean indispensables por
la seguridad del papado i el sostenimiento del órden.
Vuestra Santidad no debe ver un ncto has ,
til en esta. medida de precaucion. l\ii gobierno i
mi ejército se contraerán a una accion esc!usiva·
mente conservadora i tutelar de los derechos fá·
cilmente conciliables de las poblaciones romanas,
con la inviolabilidad del Soberano Pontífice i de
su autoridad espiritual i con la independencia de
la Santa Sede. Si vuestra Santidad, como no lo
dudo, i como vuestro sagrado carácter i la volun·
tad de vuestra alma. me da derecho a esperarlo,
está animado de un deseo igual al mio de evitar
todo conflicto i de sustraerse al peligro de las vías
de hecho, debereis tomar,de acuerdo con el conde
Panza de San Martina quien os presentará esta
carta, i está ámpliamente autorizado i con las neo
cesarias instrucciones de mi Gobierno, aquellas
medidas que mejor conduzcan al fin deseado.
¿ Querrá vuestra Santidad permitirme esperar toda·
ía, que en las actuales circunstancias tan solem·
nes para la Italia COlDO para la Iglesia i el Pa.
pado, usareis de aquel espíritu de benevolencia
-que nunca se ha estinguido en vuestro COl'azon
hácia. esta patria, que es tambien la Vllestra, i de
aquellos sentimientos de cO!lciliacion que con in fatigable
perseverancia habeis tratado siempre de
most,rar en vuestros actos, a fin de que, al paso
que satisfagais las aspiraciones nacionales, rodea·
do de la adhesion de las poblaciones italianas,
podais conservar sobre las orillas s como en los
fríos. Bajo la. influencia del calor solar esta c¡¡ílca,
arr~ja una espeCie de resina o aceite que hace que
sus hojas se peguen entre sí. En los climas frias la
planta tiene un color blanquecino, medio pálido, i
en los climes cálidos su color es casi morado, cuando
tlstt'l lIiche, como comunmente se dice.
Para preservarse de la epidemia, o para evitar
despues de adquirida la enfermedad, ei cáncer conocido
l\on ill nombre de alfombrilla, se toman las hojas
de la planta mencionada, se machacan para estraerles
el .zUDlO, este se claritica despues al fuego,
para quitarles una esppcic de cachoza que contiene.
Este zumo asl preparado se da a los enfermos tres
veces al dia, p()r la manona, al medio dia i por la
tarde; las tomas se darán en un pocillo, con una
pequena cantidad de agua, i disolviendo en cada
toma un pedaZú de azúcar equivalente a un castellano
en el peso. .
El deseo de bacer algun bien a mis semejantes es
el Cínico móvil que me impulsa a publicar esta rpcetao
Puedo a~egurar formalmente que ella es eficaz
en alto grado, que sus re ultados on provechos\: imas,
i que no ha; el menor peligro de que produzca
o agr~ye otra cIase de enfermedades.
Todos pued!'n usarla sin desconfianza i in remor,
bajo la garantía <.le mi conciencia de c~istiano, i de
mi te de hombre honrado.
MIGUEL P ERPOMO 'EIlU.
ANUNCIOS.
TEATRO.
La compañia acróbata·chileno-colombiana
~jecntará su primera gran funcion
MllllffiJallillQ ~~~we;~ ~41)
EN EL TEATRO DE ESTA CIUDAD.
El programa se reparte en la ajencia del mismo
Teatro.
SE VID DE un terrCD(} inmediato a la antigüa
ciudad pe l\1uzo, con regularlls plantaciones <.le
cacao café cnña <.le azúcar i otras cementeras; re-gular'
casa' trapiche herramientas ('te. El terreno contiene b, uenos mo,n tes, abuuel anc'IR d e aguas .l. se
han hallado muestras de minns de e meraldas I de
oro i se produce buen añil; su precio será cómodo.
La persona que quiera compr~r pue(~e entender .• e
con Francisco Toledo G. en ChlqulDqulrá, con MiIcitldes
Túledo en }:[uzo. 3-3
" permanente"-Sr. doctor Fructuoso ,CabreraGarzon-
Como usted no ha querIdo pagar
a mi recomendado los $ 500 que me debe. hace treS
afias, me veo obligado a cobrarle por In Imprenta.
Recuerde u ted que me debe esa suma ?e. unas
cargas de cacao que dejé en Garzon en d~pos)to en
cnsa de usted i por esto es IlDa deuda ml\l sagrada.
Usted 08 bastante rico para pagar e ~ suma. E-te
aviso durarÁ. hasta que usted cubra mi deuda.
Bucaralllanga, agosto 18 de 1870.
r EPOMUOENO TOSCANO.
Una g a n g-a .-Se vende una casita cuya constr~c.
cion ha costado mil uo~cientos pesos, por la Insignificante
suma de 700 pesos, pero al contado. E ti
tá libre de todo gl'avámen. 6-
l\.elacion
de la retreta que Looarán l(\s Bandas reunidas el ju6-
ves 24 del pl'escn te.
1" Terceto final de Ce Hernani.', ••••. •. 2" Valses: "Los Jitanos." ...•.. . •.• •
3~ Polka: ,Los divinos ojos." •.. • • •.
Verdi.
LaMe/'.
S,«Írez.
Bogotá, 23 de noviembre de 1870.
El ,Director de las Bandas, CayetanQ Pe/'eira.
----------------------_ ... --_ ... ------_ ......... -_ ........................ -_ ......... ---
(XrRENTA DE NlcoL¿a PONTON 1 o~
Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, Colombia.
Citación recomendada (normas APA)
"La Ilustración: política, literatura, noticias, filosofía, relijión, artes i oficios, instrucción pública, bibliografía, medicina, variedades, revista de la ciudad, revista de los estados, de Europa i mercantil - N. 187", -:-, 1870. Consultado en línea en la Biblioteca Digital de Bogotá (https://www.bibliotecadigitaldebogota.gov.co/resources/3687423/), el día 2025-06-20.