Buscar implica movimiento, deseo, persistencia, paciencia y hasta frustración. No solo está el anhelo del encuentro, sino la insistencia de quienes no se rinden. En el contexto de la memoria, buscar es también mantener viva una presencia ausente.

Basada en hechos reales, la historia de Julieta y sus seres queridos fue llevada al teatro por Miguel Torres en la obra “La Siempreviva”. Es el retrato de una familia, pero también de un país entero que aún pregunta: ¿Dónde están los desaparecidos del Palacio?. Torres convirtió una herida nacional en un relato íntimo.
Porque desaparecer no es solo un hecho físico; es también una fractura simbólica. Cuando alguien desaparece, el lenguaje se quiebra: ya no se puede decir “está” o “no está”, solo “alguien falta” y le esperamos.
Si quieres entender cómo la memoria de la ciudad aún habita en sus heridas, esta obra local es fundamental.
Ñapa: Si quieres conocer y/o recordar rápidamente los trágicos sucesos de hace cuarenta años en la capital, el especial “Toma y retoma del Palacio de Justicia” de Señal Memoria te ofrece una mirada íntima, reflexiva y crítica sobre aquellos días.